Actualmente –y hasta que no se produzca la reglamentación en cuestión–,
el documento equivalente POS tiene plena validez para solicitar costos y deducciones en el impuesto sobre la renta y complementario, al igual que para aplicar impuestos descontables en la declaración del IVA.
En el mismo sentido, es válido precisar que la obligación de facturar electrónicamente
no impedirá que los contribuyentes expidan documentos equivalentes cuando el giro de su negocio lo requiera. Los siguientes son los documentos equivalentes aceptados legalmente:
No obstante, el contribuyente deberá contar con la infraestructura tecnológica
necesaria para que, en caso de que uno de sus usuarios le solicite la factura electrónica, esté en capacidad de suministrársela.
Sanciones
aquellos que no cumplan con la obligación de facturar electrónicamente o no cuenten
con los sistemas de facturación electrónica requeridos podrán ser objeto de las siguientes sanciones:
Cierre del establecimiento: para quienes, estando obligados a facturar, no
acaten las especificaciones de la Dian y no expidan factura electrónica (ver artículo 652-1 y numeral 1 del artículo 657 del ET). Expedición de facturas sin requisitos: la multa equivale al 1 % del valor de las operaciones facturadas, sin exceder un máximo de 950 UVT ($32.557.000; ver artículo 652 del ET). Por no enviar información o enviarla con errores: se podría aplicar una multa que no supere las 15.000 UVT, cuyo valor se determinaría de acuerdo con los siguientes criterios:
1. Si es por no suministrar datos, el monto sería del 5 %sobre las sumas
respecto a la información no entregada.
2. En caso de que la información sea errónea, correspondería al 4 %de las
sumas respecto de las cuales se suministró de manera errónea; y
3. El 3 % de las sumas suministradas de forma extemporánea (ver artículo 651 del