Está en la página 1de 8

MALNUTRICIÓN Y HAMBRUNA EN COLOMBIA

La Fao, (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la


Agricultura), dentro de su concepto de seguridad alimentaria, considera que los
alimentos deben ser suficientes para alimentar el planeta, independientemente del
lugar donde estos se generen (Robledo, 2001), de cual se infiere que “la seguridad
alimentaria” está concebida bajo una problemática mundial, pero es de considerar
que cada país debe preocuparse por producir su dieta básica desde la soberanía y
desde el marco de las capacidades humanas.

Desde mediados del siglo XVIII hasta hoy, la economía ha pretendido conservar
cierto estatus para explicar la manera en que la sociedad podría alcanzar un
estado ideal. La idea de felicidad como placer y la máxima utilitarista del “mayor
placer para el mayor número”, se convirtieron en el soporte de los principios
teóricos rectores de gran parte de la tradición en el pensamiento económico.
(Quintero, 2005). En tanto a nivel Colombia se refiere, los procesos de apertura
económica y globalización han ido afectando y transformando los sectores
productivos, especialmente el agrícola, esto desde 1990, lo cual ha generado
efectos tanto positivos como negativos en la seguridad alimentaria de los países
en desarrollo como este. El gobierno colombiano, para atacar los problemas de
malnutrición y hambruna se ha enfocado en el crecimiento económico, el
incremento de la productividad agrícola con semillas modificadas genéticamente y
la disponibilidad de alimentos apoyada en la integración al mercado mundial, de
manera que las importaciones compensan el impacto de las apuestas de
monocultivos para producción de biocombustibles, ((Ramírez Vanegas & Chávez,
2018).

Desde esta perspectiva, los problemas alimentarios en Colombia son


consecuencia, principalmente, de la pérdida de poder económico y de las
restricciones en el ejercicio de los derechos y libertades, ya que todo ser humano
es capaz de producir su bien común, pero la limitación de esto yace de los
derechos y libertades del individuo, no sólo los de tipo político y social también los
económicos, por ejemplo, el problema de la agricultura esta ligado a que el
productor no sabe si produce o importa alimentos necesarios para su dieta básica,
reflejo de esto son las diferentes posiciones acerca de los beneficios y
vulnerabilidades que acarrea el comercio exterior sobre la producción de alimentos
agrícolas dentro del marco de la seguridad alimentaria de cualquier país.

La preocupación por los problemas de hambre y desnutrición sigue siendo un


asunto por tratar, para el caso de Colombia es un tema que aún no se ha podido
erradicar en su totalidad. Por tanto, en la actualidad la problemática sigue
tratándose a mayor escala generando la discusión entre dos grandes relatos: la
seguridad y la soberanía alimentaria puesto que esta última ha ganado cabida por
el progresivo activismo político de los grupos subalternos la implementación de la
política de seguridad alimentaria como estrategia de erradicación de estas
problemáticas suscitando profundas controversias que, de fondo, ponen en
cuestión el modelo de desarrollo económico.(Fonseca C et al., 2013)

Colombia, hace más de tres décadas comenzó a diseñar y aplicar estrategias de


alimentación y nutrición, con un enfoque de subsidios y ayuda humanitaria
otorgados a través de diferentes instancias, con el propósito de favorecer a las
familias más pobres. Sin embargo, no existían responsables en el tema de
seguridad alimentaria y nutricional, ni tampoco lineamientos que permitieran
desarrollar acciones específicas, para disminuir la inseguridad alimentaria y
nutricional en la población colombiana.

Bajo este concepto el gobierno colombiano ha creado estrategias como el PNSAN,


(plan nacional de seguridad alimentaria y nutricional), siendo este el conjunto de
objetivos, metas, estrategias y acciones propuestos por el estado, en un marco de
corresponsabilidad con la sociedad civil, teniendo como objeto proteger a la
población de las contingencias que conllevan a situaciones indeseables y
socialmente inadmisibles como el hambre y la alimentación inadecuada.
(Ministerio de Salud y Protección Social & FAO, 2016).

Dentro de una evaluación de impacto del PNSAN en materia de seguridad


alimentaria, que además de servir de instrumento para cumplir con los objetivos de
la política, pretende servir de guía para la construcción e implementación de los
planes territoriales, se observa la importancia de mejorar y fortalecer los procesos
de gestión bajo la implementación de este sistema establecimiento el desarrollo de
la cultura a favor de la disponibilidad permanente de información acerca del
avance de los compromisos sociales, planes, programas y proyectos de Seguridad
Alimentaria y Nutricional.

En Colombia la situación alimentaria y nutricional se maneja bajo el enfoque de


determinantes sociales, centrado en el abastecimiento alimentario, bajo políticas
como el documento Conpes Social 113 de marzo de 2008 que establece la
Política Nacional de Seguridad Alimentaria, la define como: “la disponibilidad
suficiente y estable de alimentos, el acceso y el consumo oportuno y permanente
de los mismos en cantidad, calidad e inocuidad por parte de todas las personas,
bajo condiciones que permitan su adecuada utilización biológica, para llevar una
vida saludable y activa” (Conpes 113., 2008), además, plantea como su objetivo
“Garantizar que la población colombiana disponga, acceda y consuma alimentos
de manera permanente y oportuna, en suficiente cantidad, variedad, calidad e
inocuidad” (Conpes 113., 2008) y establece diferentes estrategias para procurar
que se aborde este objetivo de manera multidimensional.

Adicionalmente, y dada la necesidad de plantear un enfoque desde varios


sectores mediante un trabajo articulado, se constituye, a través del Conpes, la
Comisión Intersectorial de Seguridad Alimentaria y Nutricional, (CISAN), (Decreto-
2055-2009, por el cual se crea la Comisión Intersectorial de Seguridad Alimentaria
y Nutricional, CISAN., 2009) Sus funciones incluyen la dirección, coordinación y
seguimiento interinstitucional de la articulación de políticas y programas y del
seguimiento a los compromisos de cada uno de los actores de la Seguridad
Alimentaria y Nutricional del país, con el fin de generar condiciones en el país que
conlleven a la mejora de la situación en SAN para el beneficio de la población;
todo lo anterior bajo el liderazgo del MSPS, entidad que ejerce la secretaría
técnica y desde allí ha promovido importantes avances en torno a la auto
formulación y desarrollo de políticas. (Moya et al., 2014). En este contexto, el
concepto de la Seguridad Alimentaria y Nutricional (SAN) es multidimensional y
está relacionado con una serie

compleja de determinantes sociales, económicos, demográficos y culturales que


hacen necesario su análisis desde ámbitos distintos que van desde el mundial,
pasan por el nacional, local y familiar hasta llegar al individual.(Gordillo Motato
et al., 2010)

La seguridad alimentaria y nutricional depende en gran medida de la capacidad


que tiene el país para autoabastecerse de alimentos que satisfagan las
necesidades propias de la población colombiana, por lo cual conocer el
comportamiento de los niveles de siembras, cosechas y producción agropecuaria
en el territorio nacional es un indicador básico en el camino hacia la comprensión
de la situación desde la disponibilidad. Este aspecto se desarrolla dentro de un
marco nacional y departamental influenciado por la decisión de los productores
agropecuarios de cultivar y llevar adelante sistemas productivos; sin embargo, hoy
en día las condiciones productivas del país dependen indirectamente de las
estrategias de gobierno, de las cambiantes condiciones climáticas, del estado de
las vías, de las oportunidades de mercado, de los costos de los insumos y de otros
tantos factores que influyen en las variaciones de producción. (Moya et al., 2014).

Bajo este contexto y un análisis proporcionado por el boletín N° 001/2014 ((Moya


et al., 2014), sobre la disponibilidad de alimentos prioritarios establecidos en el
Plan Nacional de Seguridad Alimentaria y Nutricional (PNSAN), “14 productos
transitorios, 13 productos permanentes y 6 productos pecuarios”, (Ministerio de
Salud y Protección Social & FAO, 2016), se observo que para el 2013, el área
cultivada de los productos prioritarios para la SAN llegó a 3,5 millones de
hectáreas (4,1% más que en 2012), con una mayor participación de los cultivos
permanentes (54% del total transitorios más permanentes); este crecimiento se
concentró en su mayoría en la zona central de país, dado que es allí donde el uso
del suelo es más intensivo, por otro lado, la producción de alimentos prioritarios
para la SAN del país aumentó ligeramente su nivel respecto al 2012 al pasar de
22,8 a 23,0 millones de toneladas, de los cuales los productos permanentes
representaron el 50,5%, los productos transitorios el 32,7% y los pecuarios el
16,8%, siendo estos ÚLTIMOS los que están creciendo a una mayor tasa anual
(3,7%). Es de anotar que la producción pecuaria continúa concentrándose
especialmente en los departamentos de Cundinamarca, Santander, Antioquia y
Cauca.

Así también según la gráfica 1 en cuanto al comercio exterior, en el 2013 el país


acumuló a noviembre/2013 2,7 millones de toneladas de alimentos prioritarios,
frente a la cifra alcanzada en el año 2012 cuando se lograron concretar 3,4
millones de toneladas, de las cuales 56,3% correspondieron a frutas y hortalizas,
el 25,5% correspondió a azucares y el restante a carnes, oleaginosas,
leguminosas tubérculos y cereales. Por otro lado, las importaciones alcanzaron los
7,1 millones de toneladas, de las cuales 68,3% correspondieron a cereales,
seguidos por oleaginosas (11,5%), frutas y hortalizas (8,1%) y otros. Cabe
resaltar, entonces, que el país presenta una balanza comercial deficitaria en
alimentos prioritarios. Este déficit se da por la gran cantidad de cereales que se
están importando y que son fundamentales en la alimentación del país. Una forma
de asociar los niveles de producción frente a las dinámicas de comercio exterior es
por medio del coeficiente de autosuficiencia. Este indicador muestra la capacidad
real del país de abastecer los requerimientos de alimentación de la población.
Entre 2002 y el 2005, el país presentó un coeficiente de autosuficiencia mayor al
90%, sin embargo, a partir del 2006 el indicador presenta una tendencia a
disminuir por un mayor nivel de dependencia de las importaciones y disminuciones
de la producción agropecuaria; especialmente en el 2010 en que la producción
cayó por el fenómeno climático de “el niño”. A 2013, el país depende en un 10%
de las importaciones para garantizar su autosuficiencia alimentaria.

Grafica 1: Disponibilidad y coeficiente de alimentos prioritarios en Colombia.


2002 - 2013
Fuente: (Moya et al., 2014)

En cuanto a el acceso económico en el país, existe un mejoramiento en ciertas


condiciones económicas importantes para que el país presente un mayor acceso a
los alimentos. Sin embargo, esta mejora es desigual en las diferentes regiones del
país con un fuerte contraste entre lo rural y lo urbano. Ya que según la gráfica 2,
en primer lugar, se ha evidenciado una desaceleración del crecimiento anual de
los precios de los alimentos (% de variación anual del IPC) entre 2000 y el 2013.
En el año 2000 la variación anual de los precios de los alimentos fue del 8,31%
mientras para el año 2013 es del 0,86%17.

CONCLUSIONES

Colombia en su proceso de transición epidemiológica refleja una coexistencia


tanto de problemas de malnutrición por déficit como por exceso, ya que, en una
misma región, hogar o incluso persona el alto consumo de azucares, grasas y la
introducción progresiva de alimentos procesados en la dieta.

Colombia afronta problemas estructurales crecientes que afectan su desarrollo y


son motivo de inestabilidad económica, social y política, entre los que se cuenta la
inequidad y una de sus principales manifestaciones, la pobreza, asociados a
fenómenos como el desempleo, el hambre, la malnutrición, el desplazamiento
forzado, la acción de grupos alzados en armas y el narcotráfico, entre otros

Es necesario fortalecer, reorientar y formular acciones específicas, mejor


enfocadas y sobre todo integrales sostenibles en el tiempo, que contribuyan a la
solución del problema de la malnutrición y hambruna en el país.
El comercio internacional en el país supone mayores beneficios para los
consumidores en términos de acceso a una mayor cantidad de productos y
menores precios para los alimentos agrícolas importados. Sin embargo, la
progresiva desregulación arancelaria por parte de la nación ha conducido a una
menor producción nacional, una dependencia riesgosa de las importaciones y
vulnerabilidades en términos de seguridad alimentaria para los colombianos;
fundamentalmente, para aquellos que tienen dificultades para acceder a la
canasta básica de alimentos en las zonas urbanas y rurales del país.

BIBLIOGRAFÍA

Conpes 113. (2008). POLÍTICA NACIONAL DE SEGURIDAD ALIMENTARIA Y

NUTRICIONAL (PSAN). 48.

Fonseca C, Z. Y., Patiño B, G. A., & Herrán F, O. F. (2013). Malnutrición y

seguridad alimentaria: Un estudio multinivel. Revista chilena de nutrición,

40(3), 206-215. https://doi.org/10.4067/S0717-75182013000300001

Gordillo Motato, Á. M., González Moya, N. C., & Vásquez Vergara, G. (2010).

OBSERVATORIO DE SEGURIDAD ALIMENTARIA Y NUTRICIONAL.

OBSAN-UN5 años de trayectoria Reflexiones 2005-2010.

http://obssan.unal.edu.co/wordpress/wp-content/uploads/2017/07/Libro-

OBSAN-UN-5-A%C3%B1os-de-Trayectoria.-Reflexiones-2005-2010.pdf

Decreto-2055-2009, por el cual se crea la Comisión Intersectorial de Seguridad

Alimentaria y Nutricional, CISAN., (2009) (testimony of ministerio de

Agricultura y Desarrollo Rural).

http://www.desarrolloeconomico.gov.co/sites/default/files/marco-

legal/Decreto-2055-2009.pdf
Ministerio de Salud y Protección Social, & FAO. (2016). SISTEMA DE

SEGUIMIENTO Y EVALUACIÓN DEL PLAN NACIONAL DE SEGURIDAD

ALIMENTARIA Y NUTRICIONAL (SSyE del PNSAN 2012-2019). ISBN 978-

92-5-308980-. https://www.icbf.gov.co/sites/default/files/pnsan.pdf

Moya, L. J. U., Centeno, Z. F., Fisco, H. A. L., & Obando, D. A. (2014).

SITUACIÓN NUTRICIONAL EN COLOMBIA Y ALGUNOS DE SUS

DETERMINANTES. 13.

Quintero, J. C. A. (2005). DESIGUALDAD Y EXCLUSIÓN EN COLOMBIA (1990-

2000). 2005, 148.

Ramírez Vanegas, Y., & Chávez, M. R. (2018). Análisis narrativo de política

pública: Seguridad y soberanía alimentaria en Colombia (1991-2016).

Economía. https://ciencia.lasalle.edu.co/economia/541

También podría gustarte