Parcial domiciliario

segundo

UN ANÁ LISIS
cuatrimestre

HISTÓ RICO Y UN
DIALOGO ENTRE
AUTORES
Historia Mundial Siglo XIX
1 Un análisis histórico y un dialogo entre autores

Propuesta 1:
“La Revolución Francesa hizo del proceso de construcción de símbolos una tarea
particularmente abrupta, porque los revolucionarios se encontraron en medio de la Revolución
antes de tener oportunidad de tomar conciencia de esta situación. Los franceses no tenían un
partido organizado o un movimiento coherente: carecían de insignias y sólo contaban con unos
pocos y simples eslóganes”
(Hunt, 2008: 104)

La revolución francesa en varios contextos, se transformó en un momento histórico.

Peter McPhee, citando a Hunt, describe a los franceses sin un partido organizado y
con una construcción abrupta.
McPhee a tal idea de construcción abrupta la toma desde la aplicación del terror
como principal objetivo de las medidas draconianas como solución a las crisis

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militares.
Mc PHEE presenta en cuanto a la revolución una serie de explicaciones que podrían
ser precisas para comprender el sentido de una construcción de símbolos de manera
abrupta según Hunt.
La creación de un sistema de educación republicano y escuelas, un programa nacional
de bienestar social.
El diseño educativo orientado al patrimonio y las virtudes republicanas. Recopilación
de actos heroicos y cívicos, un sistema de medidas, distancia y pesos. El hacer
hincapié en los artistas para los nuevos diseños, ante la ilustración y las nuevas ideas
liberales.
El derecho a herencia para aquellos niños nacido extra matrimonial, una revolución
cultural, el uso espontaneó de festividad, juegos, canciones, periódicos de gran
formato, decoraciones, vestimentas y ocio, son entre tantas otras maneras de asimilar
un proceso de construcción de símbolos particularmente abrupta, porque los
revolucionarios se encontraron en medio de la Revolución antes de tener oportunidad
de tomar conciencia de esta situación.
Mc PHEE, aporta un dato fundamental, la destrucción física de la imaginaria religiosa
junto a las pinturas y todo rastro del antiguo régimen.
Ante lo propuesto por Hunt refiriéndose a la carencia de eslogan y de partidos
organizados, que para Mc PHEE lo abordaría desde la preocupación adoptada por los
Jacobinos por el vandalismo generalizado, debiendo recurrir a antiguas leyes para
frenar tal desbande colectivo.
En otros términos RUDÉ, entre el cap. 1 y 7 recorrerá los levantamientos de los
campesinos, conocidos como las revueltas del hambre. RUDÉ insiste en que a pesar

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2 Un análisis histórico y un dialogo entre autores

de unas cuantas soluciones parciales para frenar dichos levantamientos populares,

aun así los campesinos quedaron insatisfechos.
La aplicación de ciertos impuesto reales, que siguieron a pesar de la revolución
iniciada, como “la gabela y la talla” (impuestos a la tierra), fueron seguidamente
aplicados a los renuentes campesinos, aun así los feudos señoriales continuaron
exigiendo prestaciones, menos que antes pero activas al fin de cuentas.
RUDÉ, asegura que unos de los grandes problemas de la revolución francesa fue la
provisión de alimentos baratos y abundantes, eso genero quizás en el apogeo de la
revolución dichas cuestiones a las que Hunt denomina como tarea particularmente
abrupta para logran una construcción homogénea de un nuevo sistema de libertades.
En ciertos momentos de las revueltas hubo una especie de ordenamiento para

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organizarse y marchar de mercado en mercado,…” marchaban en ordenada posición
con banderas flamantes y a tambor batiente”… (RUDÉ, G. 1988- pag.115.)
Pero quizás carecían de un ordenamiento político y de dichos simbolismo que hace de
un estado un orden social, eran incitadores a la anarquía y a la guerra civil según
RUDÉ, pero esa organización surgía de modo espontaneo, no era previamente
pautado o surgido desde la misma revolución.
Se contraponía aun las leyes del antiguo régimen con la avanzada revolución, y esa
falta de códigos y ordenamientos y simbolismo se fue transformando en vandalismo,
desde ya la apelación de las revueltas del hambre fueron de carácter conservador, un
recurso tradicional, con un significado más a retraso que a adelanto.
Las sucesivas marchas, las destrucciones de cuadros, de capillas, de estatuas
llevaron a una retórica visita al pasado pre revolucionario.
Vovelle habla de tres revoluciones que se dieron simultáneamente. “Una revolución
institucional o parlamentaria, en la cumbre, una revolución urbana o municipal y una
revolución campesina.Éstas, sin embargo, estaban unidas inexorablemente.
La crisis agraria, el aumento de precios y las dificultades generales fueron los factores
definitivos que llevaron al pueblo a armarse en julio de 1789.
Este movimiento se expresó en sus términos más definitivos el 18 del mismo mes con
la toma de la Bastilla. Es entonces que la conexión entre las sendas de la revolución,
fue mejor apreciable, sólo “gracias a la intervención popular que a la misma revolución
parlamentaria matizando sus éxitos.
Desde la perspectiva de HUNT, se denota la falta de organización política, en ámbitos
generales, la revolución fue para unos pocos, que los otros muchos se sumaron
iniciado el proceso sin darse cuenta aun del poder que tenían colectivamente. De
seguro en términos generales durante este periodo, una masa de campesinos
organizados de haberse percatado inicialmente de tal poder social de empuje

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colectivo, la construcción de símbolos no hubiera sido de manera abrupta (Hunt, 2008:

104).
Los ideales revolucionarios estaban enmarcados por el periodo conocido como el Gran
Miedo, en este sentido, McPhee a tal fase lo denomina la aplicación del terror como
principal objetivo de las medidas draconianas como solución a las crisis militares.
Un pánico general que inflamó las ansias del pueblo de sangre al avistar enemigos y
traidores por dondequiera.
El Gran Miedo finalmente “provoca la sublevación agraria y se prolonga en el hurto de
los castillos y la quema de derechos señoriales símbolos resabiados del antiguo
régimen. Finalmente, sin embargo, la Asamblea General “elimina el sistema feudal en
su conjunto” el 4 de agosto, noche que ve establecerse las bases de un nuevo

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derecho civil basado en la igualdad.
Este estado, sin embargo, no nace encuadrado por la armonía. Después de las
sublevaciones, las asambleas se dividen muy claramente en tendencias: los
aristócratas en la derecha, los monárquicos en el centro y los patriotas en la izquierda.
De este modo lo propuesto por HUNT claramente es acertado, probablemente tuvieron
que surgir varias marchas que para RUDÉ eran de modo organizado, con banderas
flameantes y al ruido de tambores, varias revueltas del hambre, lo que después de
varios años, finalmente sentaron las bases para lograr un sustento social e igualitario,
conformando una nación sin resabios del antiguo régimen.

Propuesta 2:
“La Revolución Francesa es el momento histórico del descubrimiento, por parte de la
civilización occidental, de que las mujeres pueden ocupar un lugar en la ciudad (...) Descubrir
que las mujeres pueden tener un lugar no significa dárselos”

(Sledziewski, 2000: 42)

Puesta en marcha la revolución Francesa, y el surgimiento de las revueltas del

hambres nuevamente, después de varios meses de disturbios en París, las mujeres
toman un protagonismo fundamental para propiciar los hechos sucedidos, el género
femenino fue fundamental para tal avanzada ante el problema de los

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alimentos,desempeño un crucial papel para legitimar las movilizaciones,

posteriormente la toma de la bastilla.
RUDÉ relata un hecho denominado las revueltas del pan en las panaderías y en el
hotel de Ville, generado por la movilización de las mujeres que se dirigían a Versalles,
claramente toda la sociedad se unía ante un mismo problema, las mujeres dejaban
atrás su invisibilidad, eran agitadoras sociales también.
Más adelante un 20 de enero nos dice el autor que en el distrito de Beaubourg
comenzaros focos de desorden por revueltas de mujeres, ante el escás del azúcar.
Rude detalla lo sucedido en la asamblea del 23 de febrero, donde dice que ese
encuentran dos grupos de mujeres en el dialogo, pero las que toman iniciativa y
reclaman son el grupo encabezado por las lavanderas, quienes se quejaban del alto

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precio del jabón, no conformes al día siguientes se transforman en alborotadoras
sociales comenzando ellas las revueltas, invadiendo los almacenes de forma masiva,
como resultado logrando momentáneamente la reducción del precio en los jabones.
Si bien desmenuzando parte de lo citado por Sledziewski donde dice que Descubrir
que las mujeres pueden tener un lugar no significa dárselos”, si bien es real por un
lado, pero incierto en otro casos, ya que durante varias revueltas del hambre las
mujeres desempeñaron un papel preponderante, si bien, pasarían varios años hasta
que el género femenino lograse imponerse o posicionarse, en plena revolución fueron
las precursoras para la creación de las leyes de derechos de las mujeres.
Retomando las prosas de HUNT, en su apartado la Libertad debía parecerse a una
mujer común no a un icono que alimente la superstición.
Podemos ver a la mujer como forma simbólica ocupando un lugar, como así, las
diferentes imágenes femeninas de los carnavales. Las vírgenes negras representaban
lo que la revolución debía vencer.
Durante la revolución periodo 1792 y 1793, hubo varios movimientos sociales, extra
gubernamentales, que ocuparon parcialmente el movimiento político.
Un caso particular, fueron los clubes de mujeres, quienes se encomendaron al
consagramiento y mejoramiento de la causa republicana.
Si bien inicialmente la mujer no era visible más que en situaciones simbólicas, si
tenían una puerta abierta que les daría la entrada a la visibilidad social,…”es como si
esa irrupción del sexo débil en lugares y en papeles impropios resumiera la promoción
de todos los débiles”… SLEDZIEWSKI, Elisabeth (2000) pág. 42.
La declaración de 1789, reconoce a todo individuo el derecho de la libertad, de la
propiedad, e la seguridad y la resistencia a la opresión, por lo tanto en consecuencia la
mujer al igual que todo hombre es libre en su opinión.

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5 Un análisis histórico y un dialogo entre autores

La mujer ya no se veía como inferior, el solo hecho de la creación de clubes

femeninos, grupos de mujeres que ostentaran contra un sistema, que generaran
cambios, hiso de la misma un ser en igualdad social como todo hombre.
En un equivalente propósito surgieron desde el género femenino las mujeres
conservadoras quienes aseguraban tener la razón, la revolución trajo consigo la
descentralización del matrimonio, y el orden doméstico, la revolución en sí mismo
abrió la caja de pandora,…”quien puede elegir su marido y divorciarse, puede
pretender sin dudas, en la multitud, elegir su gobernante”… SLEDZIEWSKI, Elisabeth
(2000) pág. 45.
Sin lugar a otros planteos aquella figura antes invisible, tras la revolución y de ella las
libertades y derechos civiles, juntamente con la declaración de los derechos humanos

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de la mujer, nace una nueva idea, quedaba atrás las posturas religiosas, la mujer
idónea para el hombre, quien debería acompañar a su marido en todo, poseía voz y
poder de decisión.
SLEDZIEWSKI, Elisabeth recorre una serie de documentos, y teorías de diferentes
especialistas, dando a cuentas que a pesar de ciertas ventajas, y conjuntamente con
la declaración de los derechos de las mujeres, no sería nada sencillo dejar de lado la
posición de ser etiquetada como el sexo débil …” ¡Oh mujeres! Mujeres, ¿Cuándo
dejasteis de estar ciegas? ¿Qué ventajas habéis recibido de la revolución?
De este modo, las mujeres revolucionarías protagonizaron una ruptura política y
construyeron un nuevo orden de discurso.
Y la Revolución francesa es un claro ejemplo de cómo una ruptura institucional,
política, social, económica e ideológica repercute en el papel y la representación de sí
mismo que cada sexo tiene, o desea tener, en la sociedad.
Durante la revolución no es asombroso encontrar a la cabeza de ciertas
insurrecciones parisinas a las “agitadoras”. El 5 de octubre de 1789 son ellas las
primeras en agruparse y en marchar sobre Versalles, seguidas, en las primeras horas
de la tarde, por la guardia nacional. Antes del estallido de la insurrección de mayo-
junio de 1793, las mujerescomenzarán el movimiento. En el corazón de la acción, las
mujeres asumen siempre el papel de “agitadoras”, son las mujeres las principales
agitadoras, las cuales, contagiando su frenesí al espíritu de los hombres, los inflaman
con sus opiniones sediciosas y provocan en ellos una violencia sin límites, ciudadanas
sin ciudadanía.
Pero la mujer parisina se resiste a quedar al margen de lo público, de lo político, y
asiste a las Asambleas revolucionarias.

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6 Un análisis histórico y un dialogo entre autores

Y al tomar sitio en una tribuna pública, se quiere significar que se pertenece al

Soberano, que se ejerce una parte de la soberanía, incluso cuando no se posean los
atributos de la misma.
La fundación del club de las ciudadanas revolucionarias en 1793 es la reacción y
respuestas al discurso de Guyomar del 29 de abril.

Cabrera E, E, Gaston

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