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Mateo García Fuentes

9ºA #13 10/05/18

Disertación LEYES

Haciendo Menos, Por Hacer Más

Los alimentos transgénicos, son aquellos producidos a partir de la ingeniería genética a


los cuales se les ha incorporado genes de otro organismo para producir las
características deseadas. En los últimos años, este tema ha sido producto de fuertes
debates, pues a pesar de solucionar ciertos problemas, la implementación de estos,
deja efectos secundarios, los cuales ocasionan y crean otros grandes problemas.
Después de realizar una amplia investigación en el tema, he llegado a la decisión de
que no debería permitirse aplicar la alteración genética en los alimentos.

A pesar de que muchos apoyen la idea de que debe permitirse la producción de más
alimentos transgénicos debido a las ventajas que deja esta, está claro que, al querer
dar una solución, terminan desatando más y causando muchos más problemas. En el
año 2000, en Estados Unidos, una gran cantidad de habitantes padecieron de severas
alergias, producto del consumo de alimentos transgénicos, pues estos contienen
nuevos alérgenos y toxinas de impacto negativo en el cuerpo humano. Otro problema,
es el que crea en la economía mundial, pues unas pocas empresas en cuestión de
tiempo acabarán apoderándose del mercado de las semillas de todo el mundo y,
obviamente, de la producción de los alimentos. Por último, los cultivos transgénicos
suponen aumentar el uso de productos tóxicos en la agricultura. Este tipo de
productos no sólo pueden afectar al producto transgénico, sino que también afectan
gravemente a la biodiversidad, provocando una pérdida irreversible para ésta.

Como toda idea en la vida, estas tienen un propósito y motivo para hacerse. La
producción de alimentos transgénicos, trata de resolver ciertos problemas que se
presentan en la sociedad, cómo el del hambre en el mundo, la muerte de cultivos
debido a plagas o la utilización de pesticidas en las plantas (lo que abarata mucho el
cultivo). Si bien se solucionan gracias a la producción de transgénicos, por querer hacer
más, se termina haciendo menos, donde lo único que crece más son los problemas,
ocasionando daños en la biodiversidad, enfermedades y alergias en los seres humanos,
aumento del nivel de residuos tóxicos en los alimentos y perjuicios en la economía
mundial, puntos mencionados anteriormente.

En conclusión, apoyo nuevamente mi idea de prohibir la producción de alimentos


transgénicos. Si esta quiere ser admitida y permitida, deben reestructurar todo,
investigar de nuevo y sacar un nuevo resultado y finalmente hacer el nuevo proyecto
realidad. A pesar de que la implementación de los transgénicos son una muy buena
idea, deben ser resueltas ciertas fallas, que crea en varios ámbitos, cosa que no puede
suceder si se quiere implementar de lleno los productos alterados genéticamente.

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