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METODO PARA GUITARRA Fernando Sor Traduccién al castellano por Eduardo Baranzano y Ricardo Barcelo PRESENTACION Fernando Sor Montadas, también conocido por su nombre catalin Ferran Sor, © por su nombre de bautismo Joseph Fernando Macario Sor, nacié, posibiemente, Poco tiempo después de morir su padre, ingresé en donde, durante cerca de seis afios, estuvo integrado .toniendo la oportunidad de profundizar sus conocimient de estar en contacto |. Sin embargo, fue ef mayor composi de misiea para el instrumento que hoy conocemos camo guitarra roméntica 0 cldsioe-roméntica. Hablar de Sor es hablar de uno de los puntos mas altos de la tradicion guiteristica universal y sus obras son tocadas, tun inmenso aimero de guitacrstas de tode el mundo, a para piano, miisica de camara, compesiciones han sido perdidas, lamentablemente. resentamos, sin ccultar nuestro orgullo, la primera versién editada sn Paris ea el alo 1830. ELMétodo s tarde, en inglés y alemén, pero, ,€¢ necesario analizar brevemente la. fa y Europa en aquel momento. 1 , co pti au Beethoven, no cau tenemos acualmentey vein ‘Napolea, igual que muctos pensadores iusados, como el salvador de Ewopay nocomoa mn dsp conga Dor tm pre, Pus nn ercolmentla aia 1% ccuropeos vieron en Igs invasiones napolednicas Ia posibilidad del progreso cultural -y social de paises como Espafa, ‘Cuando los fianceses fueron derrotados, las fuerzas erante por toda Europa y Rusia. Es ficil ‘malginar lo que sucedié también con las obras de Sor en Espada, pero no debemos responsabilizar solamente al pafs ibérico de desdeftar el valioso trabajo del a diddictica que twvo amplia difusiéa - donde mbién ‘compuestos por Coste -, pero bastante modificada ida, lo que colabor6 para crear una imagen muy distorsionada de las aspectos vigente, dela literatura tedrica guitaristca, ya que apenas ha sido traducido Por algunos estudiosos para su uso personal, o para un reducido nimero de personas Es interesante destacar que lamayor parte de las abras para guitarra originales dde Sor tienen indicaciones minimas relativas a la digitacidn y es en sx Método ‘para Guitarra donde estén todas las pautas para realizar una digitactin adecuada a respetando sus puntos de vista y su pensamieato musical. Bs de suma importancia, pore quien desee realizar una iotespretacion seria de las composicfones de Sor, conocer este trabajo, especialmente si consideramos que su misica es ejecutada hhabitualmente en guitarras modemnas, con diferentes caracteristias fisicas y sonoras aque las guitarras de la épaca. alizar una versién en castellano, debido WSenioo y también @ algunos jente, creemes que hemos alizada com un lenguaje bastante lectores, alos cunles queremos hacerles llegar este trabajo, que Reconocemos que no ha sido fi originales de Sor, sustituyéadolas por los signos y nombres utilizados y aceptados ‘ctualmente por la mayoria de Tos guitarisas. Por ejemplo: x (pulgar derecho) por medio y analar de la mano dezecha) por: i, my a, y, en vez 3,4, Sy 6 para indicar fas cuerdas, hemos usado Tos mismos originales han sido tomados de la versién inglesa y los musicales han sido copiados respetando el original francés. Euuardo Baranzano / Ricardo Barceld Semandn Sor Beano Bald INDICE Introduccién.. Primera parte El instrument0...c0.0 Posicién del instrumento.. La mano derecha. ‘La mano izquierda ‘Manera de atacar la cuerda ... Calidad del sonido..... Segunda parte Conocimiento del mast en Digitacion sobre la longitud de la cuerda . Empleo de los dedios de la mano derecha Digitacién de ambas manos ... El code... 46 50 iv 58 ee écoto rsGi - ergo Satara Bacelé Moo nC armada Sor areas / Bare ‘Tercera parte INTRODUCCION Las terceras, su naturaleza y digitacién. Al eseribir un método, solamente pretendo hablar del sistema que uso para Pnasnecetne @ tocar, el cual he establecido basdndome en mis reflexiones y mi experi Aquellos que consideren que algunos preceptos se encuentran en con ' or el uso adopiado hasta aqui por guitaristas, Aplicacién de la teoria de las terceras y las sextas B : a cusete Digitacién de la mano izquierda en relacién a la melodia ido nada por auteridad y tampoco camino que personaimente he resultados que me han valido las felicitaciones de las personas de contentar en materia de misica: los arroonistas. No Digitacién de la mano detecha.......rnnmrinnnnnnn 95 Los sonidos arménicos..... 298 siferentes que los Acompafiamientos... creyendo casi impo tultados, tienen la cortes Aniilisis del acompaiiamiento de un fragmento del La miisica, el razonami sobre la ostentaci6n de Ta Oratorio de Haydn, “La Creacign” osseous sc BL La digitacién del anuter. 141 Conclusion 143 3 todas las facultades de la mano izquicrda tar despues grandes dificultades cvando se éste no se encuentra en las cuerdas al aire!; yor si ademés hay que ailadi todavia una o d inde este caso no es més que una dk ba transformado en ley; aiadamos a esto el in ef menor sostén para la guitarra, puesto que, al estar obligados a poner toda fa mano sobre las no pueden de ninguna manera dejer Ja raitad de ‘impide, sino que la rar cued a tk el pain psie em potas, ova nym ieee as gare Cet ae aparta de ellos, se me honre con el titulo de extraordinario. Hay personas que ie que toque todo lo que versiones, com la manera de pasar Ja melodia al bajo o a alguna de las partes intermedias, de aumentar el nimero ds as de una o dos partes, mientras que las demés conservan su marcha sms lenta. He exigido al instrumento cosas de este género, y he encontrado que se presta mejor a esto que a la sucesién continue de semicorcheas y fuses en scales diaténicas 0 cromiticas ‘No tomé al principio este instrumento més que como instrumento de ‘acompatiamiento, pero desde Ia edad de diecistis alos siempre he oido comentar alos que decian tener poca talento: "Yo no toca més que para acompafiar”. Sabia que un bues' acompafiamiento supone primeramente un buen bajo, acordes gue le sean propios y movimientos que se asemejen, ‘anto como sea posible, a los de una partitura de orquesta 0 a los del mayor prueba de dominar el instrumento, més que todas esas sonatas, i a menos que éste se del instrumento era precisamente lo que impedta dominarlo! ‘A fuerza de bacer avompaiamientos, me encontré con un amptio caudal de posiciones. Como sabia qué acorde o qué inversién realizar, en qué parte se encontraba el bajo fundamental y cual debia ser la marcha de cada voz para la on o transicién que tba a hacer, me encontré en condiciones de esiablecer in sistema completo de armonia para este instrumento, Bste sistema era, por asi decir, telegriico, porque cada posicién de mis custro dedos representaba un acarde y, viendo un bajo cifrado, era capaz de indicar la totalidad de ta mareha arménica, sin necesidad de tomar la guitarra. Al acompatiar ai lianas, me encontré a menudo pequefias repeticionescantabileen algin instrumento; wa deberia ser casi enteramente acompatié completamente @ mis deseos y , muy poco reflexionados en verdad, pero que me Woo a Guitar arene Sur Buanzao Buco han preparado el camino que las circunstancias me ban obligado a seguir de tal ‘manera que, para rectificar mi manera de escribir desde que soy profesor, sélo he tenido que examinarios con mayor severidad. Varios de estos fragmentos 12 sido nunca expuestos al pilblico si se me hubiera consultado; pero persones que tenian copias (Ja mayoria incorrectas) mantavieron conversaciones uel, haciendo demasiado honar a mi talento, se aduefio con _gusto de todo Io que llevaba mi nombre. Sin embargo, ya que estén publicados, eben servir para probar cuintas reflexiones itiles he hecho desde entonces, si se les compara con mis veinticuatro estudios; son estas mismas reflexiones las (que voy a exponer al lector. Al exam: podrs juzgar si son tan atiles como yo creo 0, por el contrario, si me he cegado con mis convicciones. Lejos de pretender aparentar ua modestis que podria parecer sospechosa, confesaré que le experiencia acabé por probarme que quien me dijera que hay cosas, que por {justas que puedan parecer en teoria, no fo son en absoluto cuundo se trata de fa efecucidn, encontraria que esta observacién ha sido destruida por la sefiorita Weinenwright, joven inglesa cuyo razonamiento justo, perspicacis de espiritu, conviecidn de que mis preceptos eran los tinicos que podrian hacerle obtener de Ja guitarra lo que ella deseaba, y Ia poca aplicacién que sus demas estadios y 10s Geberes de la sociedad le permitian, produjeron un resultado tan balagador para {que en veinticinco leeciones ella tocaba tan bien las seis pequefias piezas que le dediqui!, y lefa mis veinticuatro lecciones* al punto de no nevesitar ya de és fenerpo y sus manos se han 8 cierto que a ella le gusta Se podria decir, sin duda, que para poder comprender las razones que hhe dado para establecer Ios preceptos que he ereido que debia imponerme, es ngeesario tener otros conoc , aparte de Iz milsica, y que esta obra no es la que conviene a un aficionado, cuya meta no sea la de profundizaren cl est dde-un instrumento cue, segin la opinién general, exige mucho tiempo y trabajo. Baia observacién puede parecer correcta en principio; pero si se reflexiona en ella, se destruira por sf misma. Un aficionado cs aquel que toma el estudio de ste instrumento como un descanso de las serias ocupaciones de su estado 0 de su carrera; entonces, ha aprendido atras cosas, ha debido razonar; su edveacion le bu io on Jos elementos de las ciencias cuyo conocimiento Ie ha side indispensable; debe comprenderme mejor que aquel que haya empleado todo su Pn renee Bea Mena oa us tiempo en el estudio de la miisica. En or to a los profesores, yo no pretendo Enciclopédico a ‘odo eso, mi obra puede merecer la ea ql ntresard prota ‘y de la cual sacara un beneficio real para el futuro. " a 16 ton prs Gotara. FersadeSot- Barge Bac PRIMERA PARTE EL INSTRUMENTO De Ja misma manera que nunca diria al lector: Esto es lo que hay que hhacer, sino esto es lo que he necesliado hacer, tampoco dirt como debe sor hecha una guitarra, sino cémo debe ser hecha para mi y por qué motivos. Para que a la tapa arménica se le haga osciJar sufciente por el impulse que ln cuerda le comunica al ser atacada, es preciso que sea delgada y de una madera muy ligera; pero si fuera tan delgada como seria necesario para la prolongacion del sonido, la tensién fuerte y continua del puente la obligaria a ceder al cabo cde muy poco tiempo y se bundiria, Para impedir que se doble, los constructores han tenido la idea de colocar barras interiores; si estas barras son lo bastante fuertes como para soportar Ia fuerza del puente (igual a ta suma reunida de las tensiones de todas las cuerdas, mis el impulso recibido por los dedos de la mano cha) deben una gran parte de las 1a tapa; y si son lo suficient ‘mismas no impediria on sbsoluto que Ia tapa ceda un poco mis poder demostrar suficientemente que un puente construido de una sola piezs de Ja forms indicada en la fig. 1, y una cua inferior construida de tal manera que, Rpt Fig. vista de perfil cortado perpendicularmente, sea como el representado en Ia fig. 2, cumplen el fin que deseo. La experiencia se ha probado en Londres, donde el Sx. J. Panormo ha consteuido algunas guitarras bajo mi direccién, asi como en ‘San Petersburgo el Sr. Schroeder, Pero estos hechos no pueden dispensarme en absoluto de la demostracién, Si sobre la tapa arménica, cuyo perfil esti representado por Ja linea AB (ig. 3), se fja al puente DOEF, Ia tensién de la cuerda CD hari que el punto D haya una presidn fuerte y continua hacia el punto G; éste hacia el punto lar Mes un ui Fzand or Basins el == == 'M, que, a su ver, tendré la misma hacia N, y asi sucesivamente; aceién constante del clavijero radica en atraer avia €f todo lo obstéculo para aproximarse al exiremo de Ja cuerda, Para res suma de tensioues solo se dispone del pequesio braza de pal que mientras e] puente no se despegue, se puede considerar D como punto de apoyo. Es muy fécil ver que la. poten respectivos brazos de palanca, y que el punto D esti mucho més C que hacia F. Aquel que no estuviera de acuerdo con esta cone ‘Nunea he visto econ Ia fuerza de la tensién de las cuerdes al punto de romperlas todas, sin embargo, he visto ‘8 menudo que las cuerdas han forzado al puente a despegarse; sucese del que puedo hablar por experiencia, pues mi mano dereeha ha suftido durante varios Glas las consecuencias de semejante acvidente, Pero suponiendo incluso que eso zo llegara a suceder nunca, y que as dos potencias estuvieran en rezSa inversa ‘a sus brazos de palanca, no es menos cierto que en el éagulo obtuso CDE, el ‘punto D, que es arrastrado por dos agentes muy poderosos hacia el punto O, se ‘apoyarin sobre él con la sume-de las fuerzas CD + DF, y que estas dos Lineas, Que tienden e ser solamente una, CE, con una fuerza y una tenacidad con que la que la caja no puede resistir mucho tiempo, deben ceder sobre el punta O. Como el punto E se encuentra més elevado, o se despega, o bien tendicnda a Jevantar ia parte EB, termina por hacerla salta. La prolongacién del puente DEF (fig), coincidiendo con ta de la culla Fema or Bersin Bal CBGO, compone una linea de spoyo EB mucho més large que la distancig Oy (fig. 3) de manera que ee puede considerar la linea DB como la dieceign go Ja resistencia: el dngulo MDB, al ser més obtuso, debe hacer Menes Dresisn para formar una linea recta, que es a la que més se aproxima: el punto pg, estar mas alejado del punto E, s pesar de que encierra mds espacio pegayy, zo puede hacer elevar la parte de Ia caja FB, que se encuentra identigicags a parte superior de la culia CB; y la parte NE, ai ng gue oponer, puede ser tan delgada como convengs 9 ig, El punto mis esencial para mi ha sido siempre la forma, dittceign y cién del mastil. He preferido itarra con poco Sonido y g) jacado tal y como yo lo nec 2.€on MUCHO SOM y=) rstil colocado de wna manera diferente; porque en el primer caso Ded sacar sonido tanto como la guitarra pueda darme, y en el segundo no exter ms gue Ja mitad, exceptuando las cucrdas al aire. La cuerda AC (fig. 5) ¢s incontestablemente més flexible sobre el punts B ae inferior, deben disminnir progresivamente, con este medio, eXCUENt Siempre Ja misma facifidad para pulsar; pero como las cuerdas entorchadas, & medida, {que su sonido ae torna mis grave, se emplean mas raramente en tragmenios ge ‘ran rapidez, es preciso que la lines de puente sobre Ia qUe S© &DOYEN no seq ‘completamente paralela al plano de In caja arménica, sino um poco ma8 cloyady por el lado de la sexta cuerda, Esta elevacién ao supone wna diferensis yyy ‘grande para la mano izquierda pero es muy ventajosa para la mano detects, darme [a facilidad de producir Ios bajos mis fuertes y prolongados, segin jay necesidades que tenga en cada momento. Bi puente demasiado bajo me jy atacar bien ia cuerda, como diré cuando me encuenire en ese capitalo. Fy pee Cir -Furande So Barz Bsc Gemasiado alto, a1 alejar demasiado la cuerda de fa direccién paralele ala caja, hace que su redonde2, que la cuerda esté demasiado ea ON sea dividida en dos: BN, BA, y que desde el punto B tome una direccién hacia el punto X. Ademés de que esta sesviacién me facilita mucho el trabajo de la mano izquierda, tiene también luna influencia bastante grande sobre el sonido del instrumento, Las prucbas de mis afirmaciones darien la impresién de que quiero instruir a los constructores = y se me dirfa, justamente, que esto es apartarme de la meta de esta obra — ios. ssuales, ya deben saber en qué consiste la cantidad y Ia calidad del sonido de ‘un instrumento y de qué manera contribuyen a él las partes que la componen. Es preciso que la curva que forma Ja convexidad dei mésiil no sea mi cl arco de 18°, y que tenga sobre Jog extremes la forma de una medi agulo de mis de 26%, ni menos que de 24°, Del resto, como no tiene ninguna relacién con mi tema, no bablaré, teniendo en cuenta ademas que construir el cuerpo del instruento esté muy bien tratado en casi todas partes, ¥ que la mayoria de las guitarras napolitanas, alemanas y franceses tienen en ste aspecto poco que envidiar& las guitarras espaBolas. La calidad del enexpo «de las guitaras napolitanas en general ba sido superior durante mucho tiempo, segin mi opinién, a las de Francia y Alemania; pero esto no importa hoy; y si ‘uviera necesidad de un instrumento, querria tenerio del Sr. José Martinez de ‘Malaga, o del Sr. Lacéte, constructor francés, el nico que, ademés de su talento se ha demastrado que posee Ia cualidad de no enfrentarse en absoluto contra l razonamiento, Este habil artista se ve obligada muy a menudo a contentar 4 los que contemplan el instrumento de una mancra diferente a la mia y hace guitarra sobre las que e imposible tocar mi misica: pero si ge le pide un buen instrumeato, dejéndole en total libertad; entonces hers tino como para mi P lo encontrara defectuoso, debe atribuitlo tinicamente a su ‘manera de servirse de dl ‘Las guiterras a les que yo he dado siempre preferencia som las de Alonzo en Madcid, las de Pagés y Benediz en Cédiz, las de José y Manuel Martinez en Malaga, o las de Rada sucesor y alumao del iltimo, y las del seiior del Lacéte en Paris. No digo de ninguna manera que no existan otros; pero como no be tratado munca con ellos, no puedo promunciarme sobre lo que 30 tengo rhingin conocimiento. Debo decir de nuevo que los defectos que he encontrado 20| ——— ioscan Gait unde Sor Baramee Buela cen varias guitarras no los he atribuide siempre a la ignorancia o a la terquediad re, porgve eves defecas son exiidos my 4 menido por ues nin manera en que atacan la iar, oe cals en ge eda Ces ssa mer ol: se ure Ges Somode sr fora de oo, tanga de sete quioes se coed 452 ee cuando yo oia trastear una cuerda, examinaba primero si Cause oroveal des mala canfonasin dl insrosont ode gore Sls,» en ezundo Tor sla causa eal fas desing poaia a res. Mu} Pasi edie hacia ws, proximando demi la oera alos seses Muy ‘a menudo encontraba que era une de esas causas, ¢ intentaba corregir lo que para mi era urrdetecto, POSICION DEL INSTRUMENTO Al no tener ningiin maestro, me ha sido preciso razonar antes de erigit luna maxima en principio fijo; veia que todos los profesores de piano estaban de acuerdo en que hay que sentarse enfrente del punto cue determina la mitad el teclado, es decir, en mitad de la linea horizontal que las dos manos deben recorrer. Encontraba ese precepto muy justo, ya que ningin movimiento debia ser incémodo al dejar los dos brazos igualmente separados o cercanos det cuerpo; de abé saqué Ie conclusién de que Ta mitad de Ja distancia de Ie cuerda (el traste NP 12) deberia situarse enfrente de mi cuerpo, Encontré apoyada esa opinién por la forma det cuerpo de ta guitarra, el cual, describiendo 1a curva BCDAF (fig. 6), indica el punto A coma el que debe ser apoyado sobre la rodilla derechs. Pero en este caso el instrumento se encontraria dewasiado bajo como seria preciso y en lugar de exigira los constructores que hicieran alguna innov strumento, busqué un apoyo para mi pie derecho, el cual ~ al mat a més elevada ~ colocatia la guitarra 8 une altura més couveniente para ‘mano izquierda, Sin embargo, a medida que he exigido més de este instrument he ido necesitando que su posicién fuera més fija, os decir, que no pu cambiar més que a mi voluntad. Para ello, no encontrado nada mejor que poner Welante de mi una mesa, In cual, al presentar enftente del duodécimo traste ‘unos de sus ingulos, me perm! el punto B de! instrumento sobr derecha un poco separada, y sobre el éagulo D: mediante este recurso, encontriadome colocada en la. posi que designa Is fig. 7, estoy en con de recorrer ficilmente el mast obligeda a mantener el instrem¢ 10 solamente esti sastenido por y la mesa, sino que ademas est sujetado Por el peso del brazo derecho, que hago descansar sobre el punto E. Hiceaiinotrareflexién sobre aposi de Ia guitarra. Observé que generalme fanceses y los italianos la sostenian d manera representada co Ia fig. 8 que AF era siempre paral ja pera la mano, Los tendones, que se movian continuamente para mantener el brazo en tas dolores, uy ecuentements Me de primeramente que esta posicgn no pote da sentara en ol extremo- no pod ser compas mis qo ln dew pata qe Sent : "i rculacién de la sangre deberia sufrir una diferencia en Ss paves nae de ronco el ei azn ger leva sho teats ine CD a or ei, se tan DE coma dtc ara daeano Seren conser, mice tere ca oon per ante eared a rl ro colada cords Enables! pr ino qos que solamente [a mano izquierda debia estar en la Lince AB (fi que la derecha deberia avanzar con ta mitad del antebrazo : podfa ser nunca paralela ala linea CD, si queria impedir el desplazamicnto de smi hombro derecho, y que la paralela no podia ser mas que NB. Asi colocado, Fig. Mito prs Guitar Fonds So - Barca / Bas encootré que al dejer colgar naturalmente 1a mano derecha F se encontraba exactamente enfrente dela cuerdas —que, segiin su forms y la difereate longitu de Tos dedes, podia sacar partido de sus dimensiones naturales en lugar de ‘modificarlas para acomodarlas a las distancias convent punto X, mitad del antebraz gue hacer us movimiento cor sentido opuesto a la S~ ¥ que enel al servieme de punto de apoyo, no tenia més el codo pars mover el brazo de palenca XM en reccitn que queria dar al otro brazo de palanca XF. My todo pa Geir Fenda Sr Bnesen (Buel LA MANO DERECHA La linea sobre ta cual se apoven Jas cuerdas en el borde del puente es ama linea recta, asi como de la caja; por consigniente todas las c superficie de wn mismo plano. © punteadas por pus, como que deben hacer vibrar; y cuando se hicieran mover varios a la vez, conservari paralela al pleno de las cuer causas de la igualdad en la cantidad y la ealidad del sonido. De esa verdad, deduje que es necesario que las pumas de los dedos de esta mano se coloquen de ‘manera que formen una linea recta frente a les cuerdas, paralelamente al plano que forman éstas. Observé para examinar si mis dedos se colocaban asi naturalmente y pude ver que sélo tres de mis dedos me permitian aplicar una linea recta, fiy.10 AB, y que si queria poner el cuart, seria siempre a cosia de los dos que, al estar obligados a curvarse para no sobrepasar fa linea EA (inientras los demés estuviesen extendidos), deberia coloear mi mano en ‘una posicién muy inedmoda por la dficultad que siempre he experimentado en curvar un solo dedo {exceptuando el pulgas) si los demas no tienen un punto de apoyo, como le sucede a la mano i2quierds. La att posicion del pulgar, hacen que su ataque se zealice en wi te més que los tres dedos tocados por la linea AB, y emplearit el ‘arto Gnicamente para tocar un acorde @ cuatro voces dejando en la parte més cercasia al bajo una cuerda intermedia, como en el ejemplo 1 a ese ; ited pa Gui Ferand Sr Saran Bere Los dedos en las cuerdas no deben estar ‘nunca mas curyados que los representados por la fig. 11; el acto de atacar la cuerda no debe ser més que el acto de cermar la mano, sungue no enteramente; el pulgar no debe nunca dirigitse hacia el hueco de Ia mano, sino moverse con el dedo inmediato como si fuera a forraar con é-una cruz; y, por iltimo, para conservar Ja linea AB paralela al plano de Jas cuerdas, seria necesario ¢levar un poco la mano por el Indo del dedo mefique. Me impuse muchos otros preceptos en relacién con Ia mano derecha, pero como s6lo se trata aqui de su pposicidn, ya hablaré de ello cuando aborde el tema de la calidad del sonido y de la manera de atacar la cuerda. 261 Médoc Guinem Farsnde Sor Brae) Baral LA MANO IZQUIERDA sta mano me ha obligado a hacer muchas més relfexiones q ‘Observé que ls mayor parte de los guitarrstas no tenian delante del mastil mis que In mitad de Ta mano, puesto que sujciabs. yu wane ste con la pare superior del éngulo formado por el pulgat y el dedo 1 (B12). Bn esia posicién se era necesario dar al dedo 1 una contraceiéa excesivamente violenta para presionar Ta prima F en el primer traste, ademas, enia que realizar muchos més esfuerzos al no caer la punta de mis dedos perpendicularmente sobre las cuerdas’, Ea A consecuencia, era casi inevitable tocar la cuerda inmediata y apagar wn sonido que bien podia ecestar; cuando tenia que hacer una nota un semitono mas alto que la not gus queda naturalmente bajo el dedo 4, estaba obligado a desplazar toda la mane, Jo ‘que no podia hacer mis que desptazando tambié azo, No podia tener Ja perfecta seguridad de poder volver nuevamente al punto conveniente cuando ine alejase de él, haciendo participar a todo mi srazo de la aeci6a, pues si debo aster seguro de marcar exactamente las dstancias AB, BC, ete. (Bg. 13), munca tendria la seguridad necesaria sirviéndome de la barra EA, sino empleando #1 ‘compés menor DA: le longitad de ia barra citada y la falta de punto de apoyo, hacen que su extremo sea ms susceptible de variacién aque el del compas citado. ‘Todos estos. inconvenientes. fueron pera mi razones bastante fueres para no colocar mi mano de aq ninguna razén para que el un papel tan grande en la mano derecha, i excepei6n de iss ocasiones en que debe haverio de una manera muy diferente a su conformacién, ya que la naturaleza no le hs dado las dimensiones convenientes ni le forma adscuada para este empleo. Comencé, pues, por suponer como principio esiabiecido, que siendo més conto que los dems dedos y pudiendo sctuar Ficilmente en sentido opnesto al de los restantes dedos, pods enftentarse Tia cen pee ca ee el irs slam B,D eae la into de apoyo. #5. |, cuyo perfil cortado esta representado 7 por el segmento A (fig. 14). Para que éste no cediera por la presidn de # ins sot gobs ee, event use cl gu te perendilaraate sobre cle psa da dds \ Fr date con decimal eng 1 plgae “a €l deta inca pd, i weve ica, seareat } el punto B; colocando el extreme del pulgar M, sobre el punto N, podia colocar el dedo I sobre C sin estar obligado @ contraer las falanges de una manera tan v 1 punto 0. Finalmente, forte como un gje sobre “primero, porque no baris marchar nunca el bajo y al resto de las voces por octava directas; segundo, porque yo no ferminaria una cadencia perfecta con tuna inversién, y tercero, porque no sabria presionar una cuerda con el pulgar sin contraer mi hombro, sin pasar mi mano detrés del mésti (y por consiguiente snulag une gran parte de la accién de los dems dedos, reducidos asi ala mitad), ¥ sin poner la muiicca en una posicién incémoda, para que los tendones que chen mover las falanges tuvieran le direccién y el espacio necesatio para la libertad de sus movimientos”. as Pepe “se Fre No me respondié mas que ala tercara raza, y alia de una manera en la que ‘yo no podia en absoluto rectificar mis ideas, en coror. “Esto es completamente indiferente”, me dijo; “cada cual tiene su forma; ¥ysi 3¢ toca bien, no importa la manera en que se haya hecho”, “Me parece, sin embargo", repuse yo, “que si tomo la guitarra de la mejor mansra, esto debe caso de que estuviera en un 28 | westigo de buens fe las obj ‘yo solo doy lecciones 4 mis alumnos. Sus conocimicntos de la parte -a de la misiea le hacen desdesar el sometimniento a los preceptos de un ‘maestro de guitarra; por otra parte, usted no es mas que un aficionado y todo lo ‘que hace usted puede ser encontrado encantador en la sociedad y exquisito entre los artistas; pero si usted quisiera convertirse en profesor, deberia conseguirse ‘on maestro: y si yo tuviera el honor de ser elegido, le pondria a hacer escalas rogindole que no me hiciera absolutamente ninguns observacién sobre las reglas cstablecidas por hombres que sabian sobre estos temas mucho mis que nosotzos, tanto por sus largos estudios como por su experiencia, apoyando muy fuerte 1a ‘hima palabra, Comprobé, con éstima, que mis dos primeras razones habien exaltado su inquietud mucho més que si las hubiese comprendido, y que no podia perdoaar que a mis dieciséis aos spo de ocuparme de algo queai go @ los cvarenta. Aftadt sido de que e508 sefiores de los que ‘mejor manera de ren me dijo: “No se puede t tun nig”, Unas personas que se encontraban presentes censuraron st Inego apreeié los comentarios que le hicieron, apoyando lo que yo babia le probaron que estaba en un errory me tendié la mano. Lloré de alegria. Cuando regresé a casa, intenté corregir la frase que él habia tocado y enc: medio de hacerlo sin e] recurso del pnigar, de la manera indicada en el ejemplo 3. idades y enconiré que habia pasajes que no se podian 10 el pulgar, como las de los ejemplos 4¥ 5, y que jomenaje era demostrar sus excelencias. No pudo mas y tod a Gata «Fran or Suton Bes Esta experiencia me bizo establecer como principio cotocar siempre el pulgar en la mitgd de la anchura de! mastil, enftente del dedo 2; no desplazindolo ‘més que para poner una ceja, la que se puede llevar a cabo ficilmente, sion lugar de hacer grandes esfverzos para que todas las partes del dedo todos los puntos de I wehura del ex presionarlas contra cl mi ef puigar bac! con una fuerza capaz de jorde A (Big. 16), dando al Fig. 16. para avanzar por el obsticulo que el pulgar pres pulgar no busque al mastil, sino que sea el mis 30 | Mend pare Cut - ered Sor Burmzne/ Sar6 MANERA DE ATACAR LA CUERDA ‘Ya he dicho, al hablar de la mano izqvierda, que cuando una cuerda trasteaba, antes de atribuir la causa a un defecto del cexaminaba si la culpa era mia, Comencé por establecer un principio con el cual nadie sabria disentir: que una cuerda extendida, desde que un agente cualquiera le hace abandonar la Linea recta en la cual esté sujeta poderosamente por su tensién, rogresa otra vez al mismo punto cuando este agente cesa de actuar sobre ella, pero con tuna impetuosidad tal que le hace continuar su recorrido hasta el Jado (puesto; este alejamiento produce a su vez el mismo efecto y esta altemancis se prolonga en razén de la diferencia entre Ia fuerza del impulso recibide y sv tendencia al reposo. Debia pues considerar a mi dedo como un agente que separa a la cuceda de su posicién natural, v que la direccién hacia la cual mi dedo la condujera definirfa la direecién de su resccién. Al dar a mi dedo la forme cde un gancho (fig. 17), el acto de stacar Ia cuerda seria ol de dirigirse hacia al punto B: la levarla necesariamente hacia cl punto C, 1a haria encontrar el mi nto, ademas de ser Cesagradable, #5 un obsticule = iad de les vibraciones y también haria isminuir el simero de las mismas, lo cual me hizo establecer como principio, del que no deberia nunca apartarme, mantener los dedos tan poco curvados ‘como me fuera posibie, por le razén siguiente: suponiendo A fa magnitud de 1a cuerda (fig.18), cl indice, sl atacarla, le comunica el impulso bacia el punto B. La reaesin debe tener lugar hacia el punto C! y, una vez establecida 1a Fig az. Fe. 18, Sy as fe SITET Ta Roi © se ene en wine pio de bs cd Ae pnd ee ie alternancia, las 0 jones deben hacerse en direceion parslela al plano de la caja y Ia equigistancia ser conservada siempre: 4s cierto que la redondez ce la punta del dedo que va a pulsar, haciendo que la cuerda que se offece como obstéculo ceda a su impulso, Ja obligue por la curva DE a tomar al mismo tiempo la direccién hacia F lo que produciri la reaccién FG; pero el espacio 16s 66 mucho menor, y al no encontrar in obsideulo al principio, el sonido seri tan puro y prolongado como la \d de Ja cuerda y del permitan. 22 ino pars Gua feuds Sor Basie Buel CALIDAD DEL SONIDO. Para juzgar la calidad de su sonido, no basta que un instrumento esté bien construido; es preciso ademas que las cuerdas tengan el gr0sor que exige y que estéfinada en el tono que corresponde asu tamafi'. Cuando se le encargaba una tara al constructor Manuel Martinez de Malaga ~ después de heber tomado nota de las dimensiones deseadas ~ preguniabs siempre: “zPone usted cuerdas finns o fuertes? ;Le gusta el sonido argentino o aterciopelado?” y procedia luego

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