Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La expresión cuello de botella se refiere a, de manera literal, al cuello de una botella que restringe el flujo de salida del líquido que se encuentra en ella; de la
misma forma el cuello de botella en una empresa, reduce el flujo de salida de los productos/servicios en sus procesos.
Al respecto, Heizer y Render (2014) indican que en un proceso, la expresión cuello de botella se refiere a la actividad que tiene la capacidad efectiva de
operación más baja de todo el sistema y por lo tanto limita la producción.
La capacidad efectiva del cuello de botella representa la capacidad efectiva de todo el proceso.
Para entender la expresión de Heizer y Render vamos a explicar dos conceptos sobre capacidad:
Capacidad de Diseño:
Es la máxima producción que puede tener, en teoría, una empresa funcionando en condiciones ideales.
Capacidad Efectiva:
La capacidad efectiva hace referencia al nivel máximo de producción que espera alcanzar una empresa dadas las restricciones operativas que tiene.
A continuación presentamos un ejemplo sobre estas definiciones:
Una panadería cuenta con un horno industrial que según las especificaciones del fabricante puede producir hasta 10000 panes por día de trabajo; sin embargo,
debido a que su proveedor de harina no puede suministrar la suficiente harina para producir esa cantidad; su personal es nuevo y no tiene destreza en el manejo
del horno y se presentan tiempos muertos para preparar el horno; la panadería sólo puede producir como máximo 7500 panes por día de trabajo.
Según lo planteado tendríamos:
La capacidad de diseño de la panadería sería: 10000 panes por día de trabajo.
La capacidad efectiva de la panadería sería: 7500 panes por día de trabajo.
El conocer estos conceptos es sumamente importante para solucionar problemas de cuello de botella en Producción.
Los pasos para identificar los cuellos de botella en los procesos de una empresa son:
1. Determinar cada una de las etapas/actividades del proceso.
2. Establecer el tiempo estándar de cada actividad.
3. Determinar la capacidad efectiva de cada actividad (dependerá de cómo se desarrollan los procesos).
4. La actividad con menor capacidad efectiva será el cuello de botella.
A continuación veremos ejemplos de identificación del cuello de botella de diferentes tipos de procesos:
Artículos Relacionados Fix it Right (FIR), una filosofía de Toyota para mejorar la eficiencia de sus operaciones
En procesos que tienen un sólo flujo, la actividad más lenta representa el cuello de botella, que a su vez es la actividad de menor capacidad efectiva. Veamos el
siguiente ejercicio resuelto:
La panadería «Jurassic Pan» cuenta con un proceso de 3 etapas para producir lotes de 100 unidades de pan:
Y pensabas que no existía…
Solución:
En este caso el cuello de botella viene representado por el tiempo de procesamiento más largo; que es el proceso de horneado con 1 hora.
Si realizamos el análisis de acuerdo a la capacidad efectiva (en Lotes/hora) tendríamos que realizar lo siguiente:
Preparación de Masa. Si producimos 1 Lote cada 50 minutos. ¿Cuántos lotes podemos producir en 1 hora?
En este caso calcularemos las capacidades efectivas por tipo de actividad de la misma forma que en el caso anterior; sin embargo en las actividades que cuenten
con líneas paralelas, se multiplicará el resultado obtenido por el número de líneas paralelas que tiene, para calcular su capacidad efectiva. Se presenta el
siguiente ejemplo:
Definiremos el proceso de una tienda de sándwiches de la siguiente forma:
Cliente realiza un pedido (Inicio).
Se envía la orden del cliente a una de las dos líneas de montaje (30 seg/sándwich).
Cada línea cuenta con dos trabajadores y realizan las siguientes actividades:
El primer trabajador recoge y corta el pan (15 seg/sándwich).
El segundo trabajador añade los ingredientes y lo coloca en la cinta transportadora tostadora (20 seg/sándwich).
La tostadora lo calienta durante 20 seg/sándwich.
Finalmente un trabajador envuelve y empaqueta el sándwich que sale de la tostadora y entrega al cliente (37.5 seg/sándwich).
Solución:
Realizamos los cálculos de la capacidad específica para cada actividad:
Enviar Orden:
Sin embargo en este proceso, contamos con 2 líneas de trabajo paralelas (2 trabajadores); por lo que finalmente la capacidad del proceso de cortado de pan se
duplica:
Preparar Sándwich:
De la misma forma que el caso anterior, la capacidad final del proceso se duplica, debido a que tenemos 2 líneas de trabajo:
Tostar:
Envolver y Entregar:
De acuerdo a los resultados, el cuello de botella sería la actividad de envolver y entregar con la menor capacidad efectiva.
Nos referimos a actividades simultáneas cuando el flujo del proceso se divide en 2 caminos que se unen posteriormente. Para determinar el cuello de botella, se
evalúa cada actividad como si estuvieran en un sólo flujo; realizando los cálculos de la capacidad especifica. A continuación tenemos un ejercicio resuelto:
El consultorio odontológico de Johnny cuenta con el siguiente proceso de limpieza dental:
El cliente se registra (2 min).
Un técnico de laboratorio realiza y desarrolla 4 radiografías (6 min).
El dentista evalúa las radiografías (5 min).
Al mismo tiempo otro técnico realiza la limpieza de los dientes al paciente (24 min).
El dentista se reúne con el paciente para explicarle los resultados y darle algunas recomendaciones (8 min).
Finalmente el cliente realiza el pago y programa su próxima visita (6 min).
Solución:
Se realiza los cálculos de capacidad específica considerando unidades por hora:
El cuello de botella del proceso viene a ser la actividad de realizar la limpieza.
La diferencia en este caso con los vistos en los ejemplos de cuello de botella previos está en el tiempo que pasa un producto en el sistema. Para los ejemplos
previos, basta con sumar los tiempos de cada actividad. Para el procesamiento simultáneo, no se suman directamente los tiempos de operación, debido a que
algunas actividades se producen en forma simultánea. En vez de eso, sólo se suma el tiempo más largo de las actividades que se realizan simultáneamente.
Así tenemos:
Tiempo que pasa un paciente en el sistema: 2+6+máx(24,8)+8+6=46 minutos.
Para realizar este análisis, evaluaremos la capacidad específica de nuestros recursos. Veamos el siguiente ejercicio:
Se tiene un proceso de elaboración de pizza con los siguientes datos:
Solución:
El chef trabaja 5 minutos por cada pedido (3+2); por lo tanto su capacidad es:
El horno requiere 24 minutos para procesar 4 pedidos; por lo tanto su capacidad es:
Para este caso el cuello de botella vendría a ser el horno con la capacidad efectiva más baja. La capacidad total del sistema sería de 10 pizzas por hora.
Recordemos que todo lo que generamos en nuestra empresa tiene como objetivo final, ser adquirido por nuestros clientes; en consecuencia, las ventas
representan un proceso más en nuestra compañía. Cuando nuestra capacidad de producción supera a la demanda de los clientes, la demanda se convierte en
nuestro cuello de botella; por lo que la empresa deberá implementar acciones de marketing para aumentar la venta de productos.
Analicemos el caso del consultorio. Ubicamos el cuello de botella en el proceso de hacer limpieza con una capacidad de 2.5 pacientes por día; si consideramos un
día de trabajo de 8 horas diarias, la capacidad por día del proceso de atención sería de 20 pacientes/día. Si sólo recibimos 15 pacientes por día, significa que la
capacidad de nuestra «planta» se esta desperdiciando; por lo que debemos tomar acciones para aumentar el flujo de pacientes.
Reflexión Final
Aprender a identificar un cuello de botella en una empresa es sumamente importante; debido a que nos ayudará a poner nuestros esfuerzos en las actividades
relevantes y donde las mejoras tendrán un mayor impacto. En un próximo post continuaremos tratando este tema para conocer qué podemos hacer para enfrentar
estos cuellos de botella.
Te invitamos a dejarnos tus comentarios o consultas respecto al tema y cuéntanos tus experiencias con los cuellos de botella en una empresa. No te olvides que
puedes compartir el post en tus redes sociales usando las botoneras en la parte superior e inferior del texto.
Bueno, tanto hablar de botellas, me provocó una cerveza bien helada. Hasta la próxima.
Empecemos el embotellamiento…
Referencias:
Heizer, J., & Render, B. (2014). Principios de Administración de Operaciones (Novena ed.). Mexico, D.F.: Pearson Educación.
Disponible en: Casa del Libro y Amazon
Shroeder, R., Meyer, S., & Rungtusanatham, J. (2011). Administración de operaciones, Conceptos y casos contemporáneos (Quinta
ed.). Mexico, D.F.: McGraw-Hill.