Planteamiento del problema

El covid-19
La enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19) es una enfermedad infecciosa
reportada inicialmente en China y actualmente dispersa en todo el mundo causada
por un nuevo coronavirus (SARS-CoV-2 o 2019-nCoV) la cual causa el síndrome
respiratorio agudo, y esta relacionado por afectar a personas con hipertensión
arterial. (1) Dado que el aumento en las tasas de incidencia, mortalidad y letalidad
se analiza con varias respuestas a nivel internacional.

Los países más afectados es Estados Unidos, con más de

9,6 millones de contagios y más de 235.000 fallecimientos, seguido de India, que
supera ya los 8,4 millones de casos y las 124.000 muertes, y de Brasil, que
rebasa los 5,6 millones de casos y acumula más de 161.000 decesos. (2)

La probabilidad de detectar casos positivos de COVID-19 en Ecuador fue mayor

que en Islandia y Corea del Sur, debido a que las pruebas diagnósticas fueron
dirigidas a pacientes sintomáticos, sin identificar asintomáticos o sintomáticos
leves, quienes juegan un papel importante en la transmisión de la enfermedad.
Además, se examinaron muchos pacientes sintomáticos, pero permanecerán sin
diagnosticar debido a la falta de disponibilidad de pruebas y la baja calidad de
muchas de ellas. (3)

Hasta la fecha, COVID-19 ha infectado a más de 3.000.000 de personas en todo

el mundo y ha matado a más de 200.000 personas. La prevalencia son los grupos
de edad pueden infectarse con el virus, pero los síntomas más graves que
posiblemente pueden resultar en la muerte se observan en las personas mayores
y en las personas con afecciones médicas subyacentes, como enfermedades
cardiovasculares y pulmonares. Los nuevos datos informan síntomas más graves
e incluso un pronóstico negativo para los pacientes obesos. (4)

Un creciente cuerpo de evidencia conecta la obesidad con COVID-19 y está

implicado una serie de mecanismos que van desde la atenuación de la actividad
del sistema inmunológico hasta la inflamación crónica. La peroxidación lipídica
crea aldehídos lipídicos reactivos que en un paciente con trastorno metabólico y
COVID-19 afectarán su pronóstico. Por último, es necesario seguir estudiando la
obesidad asociada al embarazo en relación con el COVID-19, ya que esta
infección podría representar un alto riesgo tanto para las mujeres embarazadas
como para el feto. (4)

BIBLIOGRAFIA

1. Oliveira BA, Oliveira LC de, Sabino EC, Okay TS, Oliveira BA, Oliveira LC de,
et al. SARS-CoV-2 and the COVID-19 disease: a mini review on diagnostic
methods. Rev Inst Med Trop São Paulo [Internet]. 2020 [citado 7 de noviembre
de 2020];62. Disponible en: http://www.scielo.br/scielo.php?
script=sci_abstract&pid=S0036-
46652020000100403&lng=en&nrm=iso&tlng=en

2. Medeiros de Figueiredo A, Daponte A, Moreira Marculino de Figueiredo DC,

Gil-García E, Kalache A. [Case fatality rate of COVID-19: absence of
epidemiological pattern]. Gac Sanit. 4 de abril de 2020;

3. Cañizares Fuentes R, Aroca R, Blasco Carlos M. Evaluation of COVID-19

Surveillance Strategy in Ecuador. Disaster Med Public Health Prep. 9 de
septiembre de 2020;1-4.

4. D P, D M, K T, F T, M S, D N, et al. Obesity - a risk factor for increased

COVID-19 prevalence, severity and lethality (Review). Mol Med Rep. 5 de
mayo de 2020;22(1):9-19.