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de Marcelo Bertuccio
1. Porque el paraguas
Estrenada en marzo de 1999 en el Centro Cultural Ricardo Rojas. La del Paraguas: Claudia Lapacó. La Amiga: Iris
Pedrazzoli. Escenografía y vestuario: Diego Siliano. Asistencia de dirección: Rodrigo Peiretti. Dirección: Rita
Cosentino y Marcelo Bertuccio.
Dos mujeres sentadas. Muy angustiadas. Gritan desaforadamente.
La Amiga.¡Te dije que no trajeras el paragua! ¡Porque dijeron por la radio que hoy no llovía!
La del Paraguas. ¡Vos me dijiste que me callara delante de ella! ¡Y a mí nadie me hace callar delante de ella!
La del Paraguas. ¡Si yo me tengo que callar me mato! ¡¿Me entendiste?! ¡Porque si yo no puedo decir que me llevo
el paragua me pego un tiro en la cabeza!
La del Paraguas. ¡¿Y a mí qué me importa que no llueva?! ¡Si yo quiero llevar el paragua llevo el paragua!
La Amiga. ¡Pero vos me tenías que haber escuchado cuando te dije que no iba a llover!
La del Paraguas. ¡Terminala con que me dijiste! ¡Yo creía que iba a llover y quería llevar el paragua!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 2
La del Paraguas. ¡Yo no te grito! ¡Yo me voy a matar! ¡Porque ella me miraba y vos me decías que no me llevara el
paragua!
La del Paraguas. ¡Ella no me dijo nada! ¡Ella no me tiene que decir nada! ¡Me voy a morir! ¡A morir!
La del Paraguas. ¡Vos no me dijiste! ¡Porque si vos me hubieras dicho a lo mejor yo no lo traía el paragua!
La del Paraguas. ¡¿Y si ahora llueve?! ¡¿Y si llueve y yo no tengo el paragua?! ¡¿Vos me das un paragua si llueve?!
La Amiga. ¡No! ¡No te doy un paragua! ¡Porque te saliste con la tuya y lo trajiste!
La del Paraguas. ¡Claro que lo traje! ¡Claro que lo traje! ¡Me voy a matar! ¡¿Por qué no me podés entender?! ¡Lo
traje porque me pareció que iba a llover!
La del Paraguas. ¡No me importa si no va a llover! ¡Vos no me tenés que decir delante de ella que no va a llover!
La Amiga. ¡Yo te puedo decir que no va a llover! ¡Porque escuché por la radio que no va a llover!
La del Paraguas. ¡¿Y por qué no me voy a llevar el paragua?! ¡¿Si yo me quería llevar el paragua?!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 3
La Amiga. ¡No grites más! ¡Porque la gente va a pensar que estamos locas!
La del Paraguas. ¡Yo no estoy loca! ¡No me digas loca! ¡Yo quiero llorar! ¡Porque ella no quiere que me lleve el
paragua!
La Amiga. ¡Vos podés llorar todo lo que quieras! ¡Pero si no llueve no tenés por qué llevarte el paragua!
La del Paraguas. ¡Y yo digo que va a llover! ¡¿Porque me da una cama?! ¡¿Y yo para qué quiero una cama si no me
puedo llevar el paragua cuando va a llover?!
La Amiga. ¡Sos una estúpida! ¡El paragua no te lo tenés que llevar cuando no llueve!
La del Paraguas. ¡No me digas que soy una estúpida! ¡Si vos me decís que soy una estúpida yo me voy a matar!
La del Paraguas. ¡No tenés que decirme que soy una estúpida! ¡¿No me podés entender eso?!
La Amiga. ¡Sí, sos una estúpida! ¡Porque estás gritando y toda la gente nos mira!
La del Paraguas. ¡Sí, la gente nos mira! ¡Pero a la gente no le importa! ¡La gente nos mira porque no tiene nada que
hacer! ¡Pero yo quiero el paragua!
La del Paraguas. ¡Porque yo tengo dignidad! ¡Y me lo llevé igual! ¡Pero si hubiera sido por ella yo ahora no tenía el
paragua! ¡Y por vos tampoco!
La del Paraguas. ¡Sí, estoy contenta! ¡¿No me podés entender?! ¡Pero ella no quería que yo me llevara el paragua!
La Amiga. ¡Yo no estoy contenta! ¡Yo te dije que no iba a llover! ¡Y no me escuchaste! ¡¿No me vas a escuchar
cuando te digo que no va a llover?!
La del Paraguas. ¡A mí nadie me dice nada! ¡Porque ella se cree que porque me da una cama yo me voy a ir a mojar
a la calle cuando llueve!
La del Paraguas. ¡¿Y si yo quiero tener el paragua aunque no llueva?! ¡¿Ella me va a prohibir?!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 4
La Amiga. ¡Ella no te va a prohibir nada! ¡Ella también escuchó la radio! ¡Y no te dijo nada!
La del Paraguas. ¡Porque si me llegaba a decir algo yo me clavaba el paragua en el estómago! ¡Porque yo soy una
persona! ¡Yo no soy un trapo para que ella me diga algo!
La del Paraguas. ¡Sí me ibas a dejar! ¡Porque yo te lo iba a clavar a vos también!
La del Paraguas. ¡Sí, me iba a clavar el paragua a mí y te lo iba a clavar a vos también! ¡Porque si vos me querés a
mí no tenés que ponerte con ella en contra mía!
La Amiga. ¡Ella no se pone en contra tuya! ¡Vos te ponés en contra mía porque me decís que me vas a clavar el
paragua!
La del Paraguas. ¡Yo te voy a clavar el paragua a vos y a ella le voy a regalar la cama!
La del Paraguas. ¡Yo se la voy a regalar igual! ¡¿Para qué quiero la cama si cuando va a llover no me puedo llevar el
paragua?!
La del Paraguas. ¡Sos una idiota vos! ¡Una idiota sos! ¡Me voy a matar! ¡Porque yo duermo en la cama que ella me
da, pero también le caliento el té, y entonces ella me puede dar el paragua!
La Amiga. ¡Ella te puede dar el paragua! ¡Pero escuchame bien lo que te voy a decir! ¡Ella te puede dar el paragua si
quiere! ¡¿Me escuchaste?! ¡Si quiere! ¡Y si no quiere no te da el paragua!
La del Paraguas. ¡Si no quiere yo lo agarro y me lo llevo te estoy diciendo! ¡Porque yo le caliento el té! ¡Y ya te dije
que sos una idiota! ¡Y ya te dije que me voy a matar!
La Amiga. ¡¿Vos no entendés las cosas que te dicen?! ¡Hablá más bajo, tarada, te dije!
La del Paraguas. ¡Vos sos una tarada! ¡Porque vos no tenés dignidad! ¡Porque yo para vivir así me quedo acá y no
vuelvo más allá si no me puedo llevar el paragua cuando va a llover!
La del Paraguas. ¡Pero me lo llevé porque yo quise! ¡No porque ella me lo dio!
La del Paraguas. ¡Yo no le pregunté si iba a llover! ¡Yo agarré el paragua y vos me lo quitaste y ella te vio y no dijo
nada y me miró como diciéndome qué suerte que vos lo habías agarrado!
La Amiga. ¡Yo no te lo quité! ¡Yo te dije que en la radio dijeron que no iba a llover!
La del Paraguas. ¡No me grites más, estúpida! ¡Porque me voy a poner a llorar! ¡Porque estoy desesperada!
La Amiga. ¡Yo no te entiendo a vos! ¡Tendrías que estar contenta! ¡Porque te querías llevar el paragua! ¡Y te llevaste
el paragua!
La del Paraguas. ¡Yo estoy contenta! ¡Porque me llevé el paragua! ¡Pero vos me odiás a mí! ¡Y ella también! ¡Y yo
así no puedo vivir más!
La Amiga. ¡Vos sos una idiota! ¡Porque yo no te odio! ¡Porque yo te quiero! ¡Y no quiero que parezcas una loca que
se lleva el paragua cuando no va a llover!
La Amiga. ¡Nadie te va a matar! ¡Vos te vas a matar! ¡Porque no entendés nada! ¡Porque ella también te quiere! ¡Y
por eso te da la cama para que duermas! ¡Y vos no entendés porque tenés tanto veneno en tu cabeza que no entendés
nada!
La Amiga. ¡Me importa una mierda! ¡Una mierda! ¡Callate la boca y no grites!
La del Paraguas. ¡Callate vos, hija de puta, que todo el mundo nos mira!
La Amiga. ¡Vos no sos mi amiga! ¡Vos sos una loca hija de puta!
La del Paraguas. ¡Me voy a clavar el estómago! ¡Por tu culpa! ¡Y no voy a volver más!
La Amiga. Sí.
La Amiga. ¡Es que te dije que no trajeras el paragua porque no iba a llover!
La Amiga. ¡Te dije que no trajeras el paragua! ¡Porque dijeron por la radio que hoy no llovía!
La del Paraguas. ¡Vos me dijiste que me callara delante de ella! ¡Y a mí nadie me hace callar delante de ella!
La del Paraguas. ¡Si yo me tengo que callar me mato! ¡¿Me entendiste?! ¡Porque si yo no puedo decir que me llevo
el paragua me pego un tiro en la cabeza! ¡¿Me entendiste?!
2. Como el paraguas
Exactamente igual a 1. Porque el paraguas, hasta pág. 6: La Amiga. ¡Te voy a matar, hija de mil puta!
Primera pausa.
Larga.
La Amiga. Pero hay que irse, yo no me voy a quedar acá todo el día.
Pausa.
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que no me digas loca! ¡Me voy a matar si me decís loca!
La del Paraguas. ¡¿A dónde me vas a llevar vos?! ¡Si yo no quiero no me dejo llevar a ningún lado!
La del Paraguas. ¡Yo no me dejo llevar a ningún lado, te estoy diciendo! ¡¿Vos te dejás llevar a ningún lado?!
La Amiga. ¡Yo no me dejo llevar a ningún lado, pero vos sí le dejarías a alguien que me llevara a algún lado!
La del Paraguas. ¡Yo no dejaría que te llevara alguien a ningún lado! ¡Porque yo te quiero!
La Amiga. ¡Yo también te quiero, idiota, pero vos me dejarías que me llevaran!
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que me pone triste que me insultes!
La Amiga. ¡Yo no te estoy insultando! ¡Cuando yo te digo la verdad te ponés a hablar de otra cosa, pero a mí no me
vas a agarrar con ésas, porque yo te conozco a vos, porque yo soy tu amiga!
La Amiga. ¡Sí que te digo la verdad, porque todos esos de la iglesia te mienten, y yo te digo la verdad!
La Amiga. ¡La verdad que vos me dejarías que me lleve alguien a algún lado!
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que yo no me dejaría llevar a ningún lado!
Pausa.
La Amiga. Ajá.
Pausa.
La del Paraguas. ¡La señora de la iglesia no es desconocido, la señora de la iglesia me da plata para comprarme
desodorante!
La del Paraguas. ¡Sí, desodorante, porque yo me lavo todos los días y me pongo desodorante!
La del Paraguas. ¡¿Y para qué sirve el desodorante?! ¡Para ponerse! ¡Para lavarse sirve el jabón! ¡¿No me podés
entender?!
La del Paraguas. ¡La señora de la iglesia no me da desodorante, me da plata, tarada! ¡El desodorante me lo compro
yo, te estoy diciendo!
La del Paraguas. ¡Vos me comprás porque me compro yo, porque la plata me la dan a mí!
La Amiga. ¡Yo te compro porque vos estás todo el santo día poniéndote desodorante por todas partes!
La del Paraguas. ¡Yo no me pongo por todas partes! ¡Yo me pongo donde transpiro! ¡¿Vos no me entendés cuando
te hablan?!
La Amiga. ¡Vos te ponés por todas partes, y yo te compro porque vos no te movés! ¡Vos no te movés nada! ¡Porque
vos sos una maleducada que no te movés nada! ¡Y yo sí me muevo! ¡Yo voy de acá para allá por tu culpa tuya,
porque vos no te movés!
La del Paraguas. ¡¿Querés ver cómo me muevo?! ¡Mirá cómo me muevo, mirá cómo me muevo! ¡Mejor que vos me
muevo!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 10
La Amiga. ¡No, vos no te movés! ¡Porque una vez no te moviste nada! ¡Sos una tarada que no te movés cuando te
sacan las cosas!
La Amiga. ¡¿Qué te pasa ahora?! ¡¿Te vas a morir ahora?! ¡¿Otra vez te vas a morir?!
La del Paraguas. ¡¿No ves que me molesta el sol, estúpida?! ¡¿No te das cuenta de nada vos?!
La Amiga. ¡A mí también me molesta el sol! ¡Y no estoy gritando en el medio de la calle porque me molesta el sol!
¡Lo que pasa es que vos sos una maricona que no te movés!
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que yo me muevo, ¿no me podés entender?!
La Amiga. ¡No, vos no te movés! ¡Y yo no se lo conté a nadie porque soy tu amiga! ¡Pero yo sé cómo es!
Pausa.
La Amiga. ¡Yo soy tu amiga! ¡Porque yo soy la única que te conoce toda la verdad!
La del Paraguas. ¡Vos sos mi hermana! ¡Porque si no fueras mi hermana no me estarías insultando con que no tenía
que traer el paragua y con que no me muevo y con que te molesta el sol a vos también! ¡Yo no soy un trapo de piso
para que venga mi hermana a decirme lo que tengo que hacer! ¡Yo sé lo que tengo que hacer! ¡Y si yo sé lo que tengo
que hacer, hago lo que tengo ganas! ¡Porque si sos mi amiga no sos mi hermana! ¡¿No me podés entender?!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 11
La Amiga. ¡Yo soy tu amiga, por eso te puedo conocer, y porque soy tu amiga te puedo decir que no tenés que traer
el paragua cuando no va a llover!
La del Paraguas. ¡Vos no me podés decir que yo no traiga el paragua si yo quiero traer el paragua! ¡Me voy a matar!
¡¿Ya te dije que me voy a matar?!
La Amiga. ¡Sí me dijiste que te vas a matar! ¡Pero yo te dije que vos sos una loca que no te movés cuando te sacan
las cosas y que si viene alguien y me quiere llevar a alguna parte que no sabemos dónde queda vos no te vas a mover,
y yo no soy tu hermana, porque yo no te pego, no te pego yo, y soy tu amiga, porque yo te quiero, y no te voy a
pegar, pero si me seguís diciendo que soy tu hermana te voy a pegar, y te voy a hacer callar de cómo te voy a pegar,
porque vos estás todo el día poniéndote desodorante y pidiéndole plata a la señora de la iglesia, y yo te tengo que
sacar la plata porque si no vos te la gastás toda en desodorante, porque sos una loca que se lleva el paragua cuando no
va a llover! ¡Y cuando me mandás a comprar desodorante te voy a comprar desodorante, porque si no te compraría
jabón, pero claro, jabón no te comprás, porque el jabón lo tenés ahí en la pieza, y no te importa que lo compro yo el
jabón, porque si fuera por vos, te comprarías nada más que desodorante, y si yo no compro el jabón, vos no lo
comprás, porque vos no te movés, y si yo no voy a comprar no sé qué comerías vos!
La del Paraguas. ¡Yo como lo que tengo ganas! ¡Porque si yo quiero comer una cosa me la como!
La del Paraguas. ¡Vos no me comprás desodorante, porque la plata es mía, y me la da la señora de la iglesia! ¡A mí
me da plata la señora de la iglesia, y vos te la gastás en desodorante!
La Amiga. ¡Te estoy diciendo que yo te compro el desodorante porque vos me pedís que te compre desodorante,
porque si no yo no te compraría!
La del Paraguas. ¡Vos me comprás desodorante porque yo quiero desodorante porque yo me quiero oler bien y yo
tengo la plata, te dije!
La Amiga. ¡Vos tenés la plata gracias a mí, a mí tenés la plata! ¡Porque si yo no te cuidara a vos también te llevarían,
pero como estoy yo que no soy una maricona y que te cuido, porque te quiero, porque soy tu amiga, y no soy tu
hermana porque no te pego, porque si no no te pondrías desodorante, porque te sacaría el desodorante de un
castañazo, y no te pondrías!
Pausa.
La del Paraguas. ¿Vos conocés los dólares? ¡Te estoy diciendo si conocés los dólares!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 12
La Amiga. ¡Y claro que conozco los dólares, cómo no voy a conocer los dólares!
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que yo tengo plata! ¡Plata tengo!
La Amiga. ¡Sí, plata tenés, pero no tenés dólares! ¡Tenés plata porque yo te la cuido y te compro comida y te compro
desodorante y te compro jabón!
La Amiga. ¡Claro que te compro jabón! ¡¿Quién te creés que te compra jabón?! ¡¿Ella?!
La Amiga. ¡No te aguanto más! ¡Un día de éstos te voy a dejar sola como una loca, una loca estúpida que se lleva el
paragua cuando no va a llover!
Pausa.
La del Paraguas. ¡De los pesos argentinos te estoy hablando! ¡¿De qué pesos te voy a estar hablando, tarada?!
La Amiga. ¡Y claro que conozco los pesos argentinos! ¡¿Cómo no voy a conocer los pesos argentinos?!
La del Paraguas. ¡Pero no las moneditas que me da cualquier infeliz, eh! ¡Los pesos de papel! ¡¿Los conocés?!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 13
La Amiga. ¡Y claro que los conozco! ¡Si no conozco los pesos, ¿cómo hago las compras?! ¡¿No te digo que sos una
estúpida?!
La del Paraguas. ¡No me digas que soy una estúpida, porque si vos me decís que soy una estúpida yo me voy a
matar!
La del Paraguas. ¡Sí, yo te voy a dejar tranquila, porque vos sos mi hermana y te tengo que dejar tranquilita, pero si
vos conocés los pesos de papel, no los vas a conocer más, porque si yo te dejo tranquilita, a vos la señora de la iglesia
no te va dar los pesos que me da a mí! ¡Porque a mí me los da la señora de la iglesia! ¡No a vos!
La del Paraguas. ¡¿Vos vas a trabajar?! ¡¿Vos vas a trabajar?! ¡Si vos no sabés trabajar!
La del Paraguas. ¡Vos limpiás la pieza porque querés, porque yo no te digo si tenés que limpiar la pieza o no tenés
que limpiar la pieza! ¡Pero vos me decís que yo no me lleve el paragua!
La Amiga. ¡Yo te digo que no te lleves el paragua porque no va a llover! ¡¿Vos no entendés las cosas que te dicen?!
¡¿Vos no entendés cuando yo te digo que yo limpio la pieza cuando se ensucia, y que yo voy a ir a trabajar y me voy
a ganar mi plata y me voy a comprar mis cosas?!
La del Paraguas. ¡¿Y vos no me entendés cuando yo te digo que vos no sabés trabajar?!
La Amiga. ¡Te estoy diciendo que yo puedo limpiar la pieza! ¡Y entonces yo puedo limpiar una pieza donde vive
otra y me paga!
La Amiga. ¡Sí, estúpida, eso es trabajar! ¡Y yo voy a trabajar y te voy a dejar sola como una estúpida que sos! ¡Como
una estúpida loca que se lleva el paragua cuando no va a llover!
La del Paraguas. ¡Porque yo tengo dignidad! ¡Y me lo llevé igual! ¡Pero si hubiera sido por ella yo ahora no tenía el
paragua! ¡Y por vos tampoco!
La del Paraguas. ¡Sí, estoy contenta! ¡¿No me podés entender?! ¡Pero ella no quería que yo me llevara el paragua!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 14
La Amiga. ¡Yo no estoy contenta! ¡Yo te dije que no iba a llover! ¡Y no me escuchaste! ¡¿No me vas a escuchar
cuando te digo que no va a llover?!
La del Paraguas. ¡A mí nadie me dice nada! ¡Porque ella se cree que porque me da una cama yo me voy a ir a mojar
a la calle cuando llueve!
La del Paraguas. ¡¿Y si yo quiero tener el paragua aunque no llueva?! ¡¿Ella me va a prohibir?!
La Amiga. ¡Ella no te va a prohibir nada! ¡Ella también escuchó la radio! ¡Y no te dijo nada!
La del Paraguas. ¡Porque si me llegaba a decir algo yo me clavaba el paragua en el estómago! ¡Porque yo soy una
persona! ¡Yo no soy un trapo para que ella me diga algo!
La del Paraguas. ¡Sí me ibas a dejar! ¡Porque yo te lo iba a clavar a vos también!
La del Paraguas. ¡Sí, me iba a clavar el paragua a mí y te lo iba a clavar a vos también! ¡Porque si vos me querés a
mí no te tenés que poner con ella en contra mía!
La Amiga. ¡Ella no se pone en contra tuya! ¡Vos te ponés en contra mía porque me decís que me vas a clavar el
paragua!
La del Paraguas. ¡Yo te voy a clavar el paragua a vos y a ella le voy a regalar la cama!
La del Paraguas. ¡Yo se la voy a regalar igual! ¡¿Para qué quiero la cama si cuando va a llover no me puedo llevar el
paragua?!
La del Paraguas. ¡Sos una idiota vos! ¡Una idiota sos! ¡Me voy a matar! ¡Porque yo duermo en la cama que ella me
da, pero también le caliento el té, y entonces ella me puede dar el paragua!
La Amiga. ¡Ella te puede dar el paragua! ¡Pero escuchame bien lo que te voy a decir! ¡Ella te puede dar el paragua si
quiere! ¡¿Me escuchaste?! ¡Si quiere! ¡Y si no quiere no te da el paragua!
La del Paraguas. ¡Si no quiere yo lo agarro y me lo llevo te estoy diciendo! ¡Porque yo le caliento el té! ¡¿Y ya te
dije que sos una idiota?! ¡¿Y ya te dije que me voy a matar?!
La Amiga. ¡¿Vos no entendés las cosas que te dicen?! ¡Hablá más bajo, tarada, te dije!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 15
La del Paraguas. ¡Vos sos una tarada, te dije! ¡Porque vos no tenés dignidad! ¡Porque yo para vivir así me quedo acá
y no vuelvo más allá si no me puedo llevar el paragua cuando va a llover!
La del Paraguas. ¡Pero me lo llevé porque yo quise! ¡No porque ella me lo dio!
La del Paraguas. ¡Yo no le pregunté si iba a llover! ¡Yo agarré el paragua y vos me lo quitaste y ella te vio y no dijo
nada y me miró como diciéndome qué suerte que vos lo habías agarrado!
La Amiga. ¡Yo no te lo quité! ¡Yo te dije que en la radio dijeron que no iba a llover!
La del Paraguas. ¡No me grites más, estúpida! ¡Porque me voy a poner a llorar! ¡Porque estoy desesperada!
La Amiga. ¡Yo no te entiendo a vos! ¡Tendrías que estar contenta! ¡Porque te querías llevar el paragua! ¡Y te llevaste
el paragua!
La del Paraguas. ¡Yo estoy contenta! ¡Porque me llevé el paragua! ¡Pero vos me odiás a mí! ¡Y ella también! ¡Y yo
así no puedo vivir más!
La Amiga. ¡Vos sos una idiota! ¡Porque yo no te odio! ¡Porque yo te quiero! ¡Y no quiero que parezcas una loca que
se lleva el paragua cuando no va a llover!
La Amiga. ¡Nadie te va a matar! ¡Vos te vas a matar! ¡Porque no entendés nada! ¡Porque ella también te quiere! ¡Y
por eso te da la cama para que duermas! ¡Y vos no entendés nada porque tenés tanto veneno en tu cabeza que no
entendés nada!
La Amiga. ¡Me importa una mierda! ¡Una mierda! ¡Callate la boca y no grites!
La del Paraguas. ¡Callate vos, hija de puta, que todo el mundo nos mira!
La Amiga. ¡Vos no sos mi amiga! ¡Vos sos una loca hija de puta!
La del Paraguas. ¡Me voy a clavar el estómago! ¡Por tu culpa! ¡Y no voy a volver más!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 16
Larga pausa.
La Amiga. Sí.
Larga pausa.
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 17
La Amiga. ¡Es que te dije que no trajeras el paragua porque no iba a llover!
La Amiga. ¡Te dije que no trajeras el paragua! ¡Porque dijeron por la radio que hoy no llovía!
La del Paraguas. ¡Vos me dijiste que me callara delante de ella! ¡Y a mí nadie me hace callar delante de ella!
La del Paraguas. ¡Si yo me tengo que callar me mato! ¡¿Me entendiste?! ¡Porque si yo no puedo decir que me llevo
el paragua me pego un tiro en la cabeza! ¡¿Me entendiste?!
Pausa.
La del Paraguas. ¡No está muerto un paragua! ¡Yo quiero llevar el paragua!
La Amiga. ¡Vos sos una idiota! ¡¿No ves que ahora no te importa el paragua?!
La del Paraguas. ¡A mí me importa el paragua cuando yo quiero! ¡¿Me entendiste?! ¡Cuando yo quiero!
La Amiga. ¡¿Ves que sos una maricona que te vas a dejar llevar el paragua?!
La Amiga. ¡Claro, a vos no te importa que vengan los desconocidos y te saquen lo que es tuyo!
Pausa.
La del Paraguas. ¡Claro que estoy segura, hija de puta, la única que me sacó algo fue mi hermana, pero vos no sos
mi hermana, porque si vos fueras mi hermana yo te clavaría el paragua en el estómago!
La Amiga. ¡Che, che, che, vos no me vas a clavar nada a mí, porque yo no soy tu hermana!
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que te voy a clavar el paragua a vos, y se lo voy a clavar a ella que te mira para
que yo no me lleve el paragua, y se lo voy a clavar a la señora de la iglesia que me da la plata porque me importa una
mierda la plata de la señora de la iglesia, y se lo voy a clavar a mi hermana para que no me pegue más y para que no
me saque lo que es mío! ¡Y primero me lo voy a clavar a mí el paragua en el estómago! ¡Porque yo para vivir así me
quedo acá y no vuelvo más allá, si me van a sacar el paragua y se lo van a llevar y yo no lo voy a ver más! ¡Y yo
quiero llorar, porque si va a llover yo quiero tener mi paragua!
La del Paraguas. ¡No, no lo agarro, porque ése no es mi paragua! ¡Yo quiero mi paragua! ¡Yo quiero que mi
hermana me devuelva el paragua!
La Amiga. ¡Claro que no soy tu hermana, idiota! ¡Te estoy diciendo que yo no soy tu hermana, y yo no sé dónde está
tu hermana! ¡Preguntale a ella dónde está tu hermana , si querés saber!
La del Paraguas. ¡Yo a ella no le hablo, porque ella se cree que porque me da una cama, yo no me voy a llevar el
paragua cuando va a llover!
La del Paraguas. ¡Y yo te estoy diciendo que yo quiero llorar, porque quiero me quiero llevar el paragua si quiero!
¡Yo quería el paragua! ¡Y quiero que venga mi hermana y me traiga mi paragua!
La Amiga. ¡Decile a la señora de la iglesia que te traiga el paragua que se llevó tu hermana!
La del Paraguas. ¡¿Y si vos no sos mi hermana por qué no me das mi paragua?!
La del Paraguas. ¡Y bueno, dámelo entonces si lo tengo ahí! ¡Porque todos me sacan el paragua y después no me lo
dan! ¡Vos me lo sacaste, vos me lo das!
La Amiga. ¡Claro, porque yo soy tu sirvienta! ¡Si te sacan el paragua lo tenés que ir a buscar, maricona!
La Amiga. ¡No, no te doy nada! ¡Yo no te doy nada! ¡Me tenés cansada con que te tengo que dar el paragua! ¡Y me
voy! ¡Y te dejo sola como una estúpida loca con tu paragua!
La Amiga. ¡¿Y desde cuándo vos tenés un paragua tuyo?! ¡Vos tenías un paragua, me entendés, tenías un paragua, y
ahora no lo tenés más, me entendés lo que te digo, no lo tenés más, porque te lo dejaste sacar, porque no te movés, y
como vos no te movés, yo me voy a ir, y te voy a dejar sola, y no te vas a poder poner más desodorante, y cuando
vayas a la pieza ella no te va a dejar entrar, porque ahora yo le voy a hablar y le voy a decir que no te deje entrar más,
y por mí podés ir a contarle todo a la señora de la iglesia, porque yo me cago en la señora de la iglesia, ¿me
escuchaste bien?, me cago en la señora de la iglesia, y me cago en tu hermana, y me cago en tu paragua!
La Amiga. ¡Vos me vas a matar! ¡Pero a mí no me vas a matar! ¡A mí nadie me va a matar! ¡Porque si vos dejás que
me maten, yo no te lo voy a permitir! ¡A mí no me vas a dejar que me maten! ¡¿Me entendiste bien?! ¡A mí no me
vas a dejar! ¡A mí no me vas a dejar que me maten! ¡Porque yo no soy un paragua!
La del Paraguas. ¡Y claro que no sos un paragua! ¡Sos una hija de mil puta vos, eso sos! ¡Y como sos una hija de mil
puta yo me voy a ir a matarme por ahí! ¡Y vos no vas a tener los pesos , pesos ¿eh?, que me da la señora de la iglesia,
porque yo me voy a ir a matarme al tren!
La Amiga. ¡¿Y no ves que no te llevás el paragua?! ¡¿No te das cuenta que no te importa tu paragua?!
La del Paraguas. ¡Yo quiero mi paragua! ¡No ese paragua de mierda que es de ella, y que no me deja que me lo
lleve!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 20
La Amiga. ¡¿Cómo que no te deja que te lo lleves?! ¡¿No lo tenés ahí el paragua?!
La del Paraguas. ¡No, no lo tengo, te dije! ¡¿Y vos no sos mi hermana?! ¡Porque si sos mi hermana me tenés que dar
el paragua! ¡Y si no sos mi hermana yo no te conozco y me voy!
La Amiga. Sí.
Pausa.
La del Paraguas. Sí, porque somos amigas. Y si a vos te duele, a mí también me duele.
Pausa.
Pausa.
Pausa.
La del Paraguas. ¡¿De quién es este paragua?! ¡Si no es mi paragua no lo quiero, te aviso, lo tiro a la basura!
La Amiga. No sé... Pero el tuyo se lo llevó alguien... Un día... Pero no me acuerdo mucho...
La del Paraguas. ¡¿Y a mí qué me importa?! ¡¿Sabés las veces que me escupieron a mí?!
La Amiga. ¡Yo te digo que no lo tires a la basura el paragua, porque el tuyo quién sabe dónde andará!
Pausa.
La del Paraguas. ¡Yo me acuerdo! ¡Yo agarré el paragua y vos me lo quitaste y ella te vio y no dijo nada y me miró
como diciéndome qué suerte que vos lo habías agarrado!
La Amiga. ¡Yo no te lo quité! ¡Yo te dije que en la radio dijeron que no iba a llover! ¡Quién es el mal parido que está
escupiendo!
La del Paraguas. ¡No me grites más, estúpida! ¡Porque me voy a poner a llorar! ¡Porque estoy desesperada! ¡Uy, otra
gotita!
La Amiga. ¡Yo no te entiendo a vos! ¡Tendrías que estar contenta! ¡Porque te querías llevar el paragua! ¡Y te llevaste
el paragua!
La del Paraguas. ¡Yo estoy contenta! ¡Porque me llevé el paragua! ¡Pará de escupir, hijo de mil puta! ¡Pero vos me
odiás a mí! ¡Y ella también! ¡Y yo así no puedo vivir más!
Pausa.
La del Paraguas. ¡Cómo va a estar lloviendo si en la radio dijeron que no iba a llover!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 23
La del Paraguas. ¡Yo me estoy mojando porque hay un hijo de puta que nos están escupiendo! ¡Pero para eso no se
usa el paragua! ¡Cagona! ¡¿Nunca te escupieron a vos?!
La del Paraguas. ¡Una mierda te doy! ¡Una mierda! ¡En la radio dijeron que no va a llover y no va a llover! ¡Y el
que está escupiendo, que la termine porque me voy a enojar y le voy a clavar el paragua en el estómago!
La Amiga. ¡Vamos, tarada! ¡Si no querés abrir el paragua no lo abras, pero vamos a la pieza, que llueve, te estoy
diciendo!
La del Paraguas. ¡Y yo te estoy diciendo que me voy a quedar acá porque en la radio dijeron que no iba a llover! ¡Y
yo me tengo que quedar para encontrar al hijo de puta que me está escupiendo!
La del Paraguas. ¡Yo no me voy a enfermar! ¡Vos te vas a enfermar! ¡Yo estoy sana! ¡¿Me entendiste?! ¡Sana! ¡Y
yo no soy una cagona para escaparme corriendo como una cagona si vienen unos desconocidos y se me ponen a
escupirme!
La del Paraguas. ¡No, yo no vuelvo más allá! ¡Yo me voy a quedar acá hasta que venga la señora de la iglesia para
que me ayude a encontrar a los que están escupiendo!
La Amiga. ¡Mirá, tarada, yo me voy! ¡No te quiero ver nunca más! ¡Para mí ya estás muerta! ¡Y cuando vuelvas a la
pieza no me vengas a joder con que estás resfriada! ¡Y si tenés que ir al hospital vas a ir sola! ¡Porque yo tengo que
limpiar la pieza!
La del Paraguas. ¡Andá! ¡Andá a limpiar, sirvienta! ¡Pero yo me tengo que quedar! ¡¿Me entendiste?! ¡Porque yo
tengo dignidad! ¡¿Me entendiste?! ¡Y a mí no me van a escupir y yo no voy a decir nada! ¡¿Me entendiste?!
La Amiga. ¡Para mí se acabó todo, eh! ¡Te lo digo de veras! ¡Todo! ¡Y no me vas a ver el pelo nunca más! ¡Porque
vos no sos mi amiga! ¡Vos sos una loca hija de puta! ¡Y a mí no me vas a ver en toda tu vida entera! ¡Nunca más!
¡¿Me entendiste?! ¡Nunca más!
Llueve torrencialmente.
3. Cuando el paraguas
Exactamente igual a 2. Como el paraguas, hasta pág. 9: La del Paraguas. ¡¿Y quién te va a querer llevar a vos?! /
La Amiga. ¡No sé, alguien!
Silencio.
La Amiga. ¡Te dije que no me hagas hablar! ¡Vos siempre querés saber todo! ¡No tenés derecho a saber todo! ¡Una
sabe lo que sabe y se terminó! ¿Me entendiste? ¡Y se terminó!
La del Paraguas. ¡Y cuando yo sé que me tengo que llevar mi paragua, ¿no se terminó?! ¡No, ahí no se terminó,
porque yo no me puedo llevar mi paragua, y yo también sé lo que sé!
La Amiga. ¡Vos no sabés nada! ¡Porque si por la radio dicen que no va a llover, y yo te digo que no va a llover, y ella
te dice que no va a llover, vos no sabés nada!
La del Paraguas. ¡Basta de decirme que yo no sé nada! ¡Ese paragua es mío, porque yo me lo encontré, pero no me
lo encontré en la casa de ella, me lo encontré...!
Silencio.
La Amiga. ¿Dónde te lo encontraste, a ver? ¿Dónde? ¿No ves que sos una tarada que no sabés ni lo que es tuyo?
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 25
La Amiga. ¡Callate!
La Amiga. ¡Callate la boca, che, que la gente va a creer que estamos locas!
La del Paraguas. ¡Vos estás loca! ¡Vos estás loca y sos una puta! ¡Porque vos tampoco sabés dónde me encontré el
paragua! ¡Porque a mí me lo dieron el paragua! ¡Me lo dieron! ¡Yo lo vi al lado de un banquito, un banquito como
éste era, pero el banquito tenía un árbol grandote al lado, y yo me lo agarré, porque me confundí, porque mi hermana
se había llevado mi paragua, y yo creía que...!
Silencio.
Silencio.
La Amiga. No hace falta andar diciendo lo que una sabe. Callate la boca.
La del Paraguas. ¡Y la señora de la iglesia me dijo que... y entonces yo me lo agarré... y la señora de la iglesia me
dijo que...!
Silencio.
¿Qué hacía ahí la señora de la iglesia?
Silencio.
¡¿Qué hacía ahí la señora de la iglesia, te estoy diciendo?!
Silencio.
La Amiga no quiere seguir hablando, pendiente del entorno.
La del Paraguas hace esfuerzos enormes con todo su cuerpo para recordar.
¡La señora de la iglesia me dijo que mi hermana iba a venir un día y me iba a traer mi paragua, pero también me dijo
que el paragua que estaba en el banquito al lado del árbol grandote era como si...!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 26
La Amiga. ¡Terminala con el paragua y con la señora de la iglesia y con toda tu mierda! ¿Qué te importa qué hacía la
señora de la iglesia? ¡Ya pasó! ¡Ya pasó, y vos te llevaste el paragua de ella! ¿No estás contenta que te llevaste el
paragua? ¡Si no estás contenta, mirá lo que hago con tu paragua!
La del Paraguas. ¡Dame ese paragua, hija de una gran puta! ¡Dame ese paragua porque te mato, te clavo el paragua
en el estómago y te mato!
La del Paraguas. ¡A mí no me vas a sacar el paragua, ¿me entendiste?! ¡A mí nadie me saca nada!
La del Paraguas. ¡No pasó! ¡Ja ja ja! ¡En seguidita me lo devolviste, eh! ¡Cagona!
La del Paraguas. Ah, cuidado que está la gente, cuidado que está la gente... ¿Y a la gente qué le importa?
La Amiga. No, no, no le importa. Pero dejame salir, dejame sentar... Dejame...
La del Paraguas. ¡No, no te dejo, te dije! ¡Me quedo así para que la gente vea quién sos vos y quién soy yo! ¡Para
que vea quién está en el piso, y quién está arriba1 ¡Y quién tiene el paragua y quién no tiene nada!
La del Paraguas. ¿Quién va a venir? ¿Quién va a venir? ¡Vos sos una puta, pero a veces me hacés reír! ¡Cómo me
hacés reír vos! ¡Le tenés miedo a la policía! ¡Sos una cagona, vos! ¡Me hacés reír vos!
La del Paraguas. ¿Quién? ¡Contame, graciosa...! ¿Quién le tiene miedo? ¡Haceme reír más! ¡Ay, qué lindo es reírse
más!
La del Paraguas. ¡Dale, contame! ¿Cómo se llama? ¡Decime cómo se llama, así me hacés reír!
La del Paraguas responde al impulso inconsciente de comenzar una carcajada, pero se da cuenta de que no le causa
gracia.
La del Paraguas. ¡La señora de la iglesia no le tiene miedo a la policía, la señora de la iglesia me da plata para
comprarme desodorante!
La del Paraguas. ¡Sí, desodorante, porque yo me lavo todos los días y me pongo desodorante!
La del Paraguas. ¡¿Y para qué sirve el desodorante?! ¡Para ponerse! ¡Para lavarse sirve el jabón! ¡¿No me podés
entender?!
La del Paraguas. ¡La señora de la iglesia no me da desodorante, me da plata, tarada! ¡El desodorante me lo compro
yo, te estoy diciendo!
La del Paraguas. ¡Vos me comprás porque me compro yo, porque la plata me la dan a mí!
La Amiga. ¡Yo te compro porque vos estás todo el santo día poniéndote desodorante por todas partes!
La del Paraguas. ¡Yo no me pongo por todas partes! ¡Yo me pongo donde transpiro! ¡¿Vos no me entendés cuando
te hablan?!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 28
La Amiga. ¡Vos te ponés por todas partes, y yo te compro porque vos no te movés! ¡Vos no te movés nada! ¡Porque
vos sos una maleducada que no te movés nada! ¡Y yo sí me muevo! ¡Yo voy de acá para allá por culpa tuya, porque
vos no te movés!
La del Paraguas. ¡¿Querés ver cómo me muevo?! ¡Mirá cómo me muevo, mirá cómo me muevo! ¡Mejor que vos me
muevo!
La Amiga. ¡No, vos no te movés! ¡Porque cuando te agarraron una vez no te moviste nada! ¡Sos una tarada que no te
movés!
La Amiga. ¡¿Qué te pasa ahora?! ¡¿Te vas a morir ahora?! ¡¿Otra vez te vas a morir?!
La del Paraguas. ¡Ay, ay! ¡Esa luz! ¡Sacame esa luz de la cara! ¡Sacame!
La Amiga. ¡¿No ves que te molesta el sol, estúpida?! ¡¿No te das cuenta de nada vos?!
La del Paraguas. ¡Eso no es el sol! ¡El sol es bueno! ¡Y vos no sos mi amiga! ¡Y esa luz no me molesta! ¡Me quema!
La Amiga. ¡Te molesta el sol! ¡Y a mí también me molesta el sol! ¡Y no estoy gritando en el medio de la calle
porque me molesta el sol!
Silencio.
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 29
La Amiga. ¡Lo que pasa es que vos sos una maricona que no te movés!
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que yo me muevo, ¿no me podés entender?!
La Amiga. ¡No, vos no te movés! ¡Y yo no se lo conté a nadie porque soy tu amiga! ¡Pero yo sé cómo es!
La Amiga. ¡Yo soy tu amiga! ¡Porque yo soy la única que te conoce toda la verdad!
La del Paraguas. ¡Vos sos mi hermana! ¡Porque si no fueras mi hermana no me estarías insultando con que no tenía
que traer el paraguas y con que no me muevo y con que te molesta el sol a vos también! ¡Yo no soy un trapo de piso
para que venga mi hermana a decirme lo que tengo que hacer! ¡Yo sé lo que tengo que hacer! ¡Y si yo sé lo que tengo
que hacer, hago lo que tengo ganas! ¡Porque si sos mi amiga no sos mi hermana! ¡¿No me podés entender?!
La Amiga. ¡Yo soy tu amiga, por eso te puedo conocer, y porque soy tu amiga te puedo decir que no tenés que traer
el paragua cuando no va a llover!
La del Paraguas. ¡Vos no me podés decir que yo no traiga el paragua si yo quiero traer el paragua! ¡Me voy a matar!
¡¿Ya te dije que me voy a matar?!
La Amiga. ¡Sí me dijiste que te vas a matar! ¡Pero yo te dije que vos sos una loca que no te movés cuando te sacan
las cosas y que si viene alguien y me quiere llevar a alguna parte que no sabemos dónde queda vos no te vas a mover,
y yo no soy tu hermana, porque yo no te pego, no te pego yo, y soy tu amiga, porque yo te quiero, y no te voy a
pegar, pero si me seguís diciendo que soy tu hermana te voy a pegar, y te voy a hacer callar de cómo te voy a pegar,
porque vos estás todo el día poniéndote desodorante y pidiéndole plata a la señora de la iglesia, y yo te tengo que
sacar la plata porque si no vos te la gastás toda en desodorante, porque sos una loca que se lleva el paragua cuando no
va a llover! ¡Y cuando me mandás a comprar desodorante te voy a comprar desodorante, porque si no te compraría
jabón, pero claro, jabón no te comprás, porque el jabón lo tenés ahí en la pieza, y no te importa que lo compro yo el
jabón, porque si fuera por vos, te comprarías nada más que desodorante, y si yo no compro el jabón, vos no lo
comprás, porque vos no te movés, y si yo no voy a comprar no sé qué comerías vos!
La del Paraguas. ¡Yo como lo que tengo ganas! ¡Porque si yo quiero comer una cosa me la como!
La del Paraguas. ¡Vos no me comprás desodorante, porque la plata es mía, y me la da la señora de la iglesia! ¡A mí
me da plata la señora de la iglesia, y vos te la gastás en desodorante!
La Amiga. ¡Te estoy diciendo que yo te compro el desodorante porque vos me pedís que te compre desodorante,
porque si no yo no te compraría desodorante!
La del Paraguas. ¡Vos me comprás desodorante porque yo quiero desodorante, porque yo me quiero oler bien, y yo
tengo la plata, te dije!
La Amiga. ¡Vos tenés la plata gracias a mí, a mí tenés la plata! ¡Porque si yo no te cuidara a vos también te llevarían,
pero como estoy yo que no soy una maricona y que te cuido, porque te quiero, porque soy tu amiga, y no soy tu
hermana porque no te pego, porque si no no te pondrías desodorante, porque te sacaría el desodorante de un
castañazo, y no te pondrías desodorante!
La Amiga. ¿Perfume?
La Amiga. ¡¿Qué?!
Pausa.
La Amiga. ¡Y claro que conozco los dólares, cómo no voy a conocer los dólares!
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que yo tengo plata! ¡Plata tengo!
La Amiga. ¡Sí, plata tenés, pero no tenés dólares! ¡Tenés plata porque yo te la cuido y te compro comida y te compro
desodorante y te compro jabón!
La Amiga. ¡Claro que te compro jabón! ¡¿Quién te creés que te compra jabón?! ¡¿Ella?!
La Amiga. ¡No te aguanto más! ¡Un día de éstos te voy a dejar sola como una loca, una loca estúpida que se lleva el
paragua cuando no va a llover!
Pausa.
La del Paraguas. ¡De los pesos argentinos te estoy hablando! ¡¿De qué pesos te voy a estar hablando, tarada?!
La Amiga. ¡Y claro que conozco los pesos argentinos! ¡¿Cómo no voy a conocer los pesos argentinos?!
La del Paraguas. ¡Pero no las moneditas que me da cualquier infeliz, eh! ¡Los de papel! ¡Los billetes de papel! ¡¿Los
conocés?!
La Amiga. ¡Y claro que los conozco! ¡Si no conozco los pesos, ¿cómo hago las compras?! ¡¿No te digo que sos una
estúpida?!
La del Paraguas. ¡No me digas que soy una estúpida, porque si vos me decís que soy una estúpida yo me voy a
matar!
La del Paraguas. ¡Sí, yo te voy a dejar tranquila, porque vos sos mi hermana y te tengo que dejar tranquila, pero si
vos conocés los billetes de papel, no los vas a conocer más, porque si yo te dejo tranquila, a vos la señora de la iglesia
no te va dar los pesos que me da a mí! ¡Porque la señora de la iglesia me los da a mí! ¡No a vos!
La del Paraguas. ¡¿Vos vas a trabajar?! ¡¿Vos vas a trabajar?! ¡Si vos no sabés trabajar!
La del Paraguas. ¡Vos limpiás la pieza porque querés, porque yo no te digo si tenés que limpiar la pieza o no tenés
que limpiar la pieza! ¡Pero vos me decís que yo no me lleve el paragua!
La Amiga. ¡Yo te digo que no te lleves el paragua porque no va a llover! ¡¿Vos no entendés las cosas que te dicen?!
¡¿Vos no entendés cuando yo te digo que yo limpio la pieza cuando se ensucia, y que yo voy a ir a trabajar y me voy
a ganar mi plata y me voy a comprar mis cosas?!
La del Paraguas. ¡¿Y vos no me entendés cuando yo te digo que vos no sabés trabajar?!
La Amiga. ¡Te estoy diciendo que yo puedo limpiar la pieza! ¡Y entonces yo puedo limpiar una pieza donde vive
otra y me paga!
La Amiga. ¡Sí, estúpida, eso es trabajar! ¡Y yo voy a trabajar y te voy a dejar sola como una estúpida que sos! ¡Como
una estúpida loca que se lleva el paragua cuando no va a llover!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 33
La del Paraguas. ¿Querés ver cómo me acuerdo? ¿Querés ver cómo me acuerdo?
Breve silencio.
La del Paraguas. ¡No seas estúpida! ¡Los autores! ¡Los autores de los libros! ¡Los autores de los libros se ponen!
Silencio.
La Amiga. ¡¿No me vas a entender cuando te digo que vos no te acordás de nada?!
Silencio.
La Amiga. ¡Siempre lo mismo vos! ¡Todo tiene que ser cuando vos tenés ganas! ¡Así no es la cosa!
La Amiga. ¡Porque sos una maniática vos! ¡Una malcriada! ¡Ya le decía yo el otro día a...!
La Amiga. ¡No, nena, a nadie te estoy diciendo! ¡Una habla! ¡Y no tiene por qué saber lo que habla!
La Amiga. ¡Y yo no!
La del Paraguas. ¡Y también sé a quién le hablo! ¡Ahora te hablo a vos! ¡Y sé a quién le estoy hablando!
La del Paraguas. ¡Vos no podés hacer lo que quieras! ¡Porque vos estás en el mundo conmigo! ¡Conmigo, ¿me
escuchaste?! ¡Y si vos estás en el mundo conmigo no podés hacer lo que vos, vos sola, quieras! ¡También tenés que
hacer lo que yo quiera!
Silencio.
Silencio.
Silencio.
La del Paraguas. ¡Pero si vos no hacés lo que querés! ¡Si vos sos una cagona que no hacés lo que querés! ¡Y nunca
me dijiste que yo quiero caprichos! ¡Ella me dijo que yo quiero caprichos!
La Amiga. ¡Ella te dijo que no te llevaras el paragua porque por la radio dijeron que no iba a llover!
La del Paraguas. ¡Terminala con ella, te digo! ¿Qué me hablás de ella? ¡Yo no soy estúpida! ¡Yo no quiero que me
digan lo que tengo que hacer pero no soy estúpida, me entendiste! ¡Mi hermana, mi hermana me dijo que yo quiero
caprichos!
La del Paraguas. ¡Yo no sé lo que hizo mi hermana, pero sé lo que dijo, y dijo que yo quiero caprichos!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 35
La del Paraguas. ¡Sí hablaste con mi hermana! Yo estaba en el banquito con mi paragua, y vos estabas con mi
hermana, y hablabas y hablabas y hablabas.
La Amiga. ¡Vos estabas en el banquito pero no tenías el paragua! ¡Eso! ¡Eso y nada más!
La Amiga. ¡No, segura no estoy! ¡Me parece, me parece ¿entendés?, que vos no tenías el paragua!
La del Paraguas. ¡¿Y si no estás segura para qué hablás?! ¡¿Vos no estabas segura cuando hablaste con mi hermana
y te dijo que yo quiero caprichos?!
La Amiga. ¡Yo no hablé con nadie, che! ¿No me entendés las cosas que te digo?
Silencio.
La del Paraguas. ¿Qué manera de decir? ¿Qué manera de decir? ¿Por qué no te entiendo nada lo que me decís?
La Amiga. ¡Que digo que se fue lejos, a Misiones, a San Juan, a Europa, qué sé yo!
Silencio.
La del Paraguas. ¡A Europa no fue mi hermana! Cuando yo cumplí los quince mi hermana tenía como...
Y papá...
Silencio.
¿Lejos se fue? ¿Y cómo se fue mi hermana, si se había muerto...? ¿Quién se había muerto?
La Amiga. ¡Claro que inventabas! ¡Como ahora inventaste que el paragua de ella es tuyo! ¡¿No te das cuenta de que
te la pasás inventando vos?!
La Amiga. ¡Claro!
La Amiga. ¡Claro que ella te dijo que no te lo llevaras porque no iba a llover! ¡Y vos, dale con que iba a llover, dale
con que iba a llover! ¡¿Y no ves ahora que no llueve?! ¡¿No lo ves?! ¡¿Para qué querés el paragua ahora, me querés
decir?!
Silencio.
La del Paraguas. ¡Sos una idiota vos! ¡Una idiota sos! ¡Me voy a matar! ¡Porque yo duermo en la cama que ella me
da, pero también le caliento el té, y entonces ella me puede dar el paragua!
La Amiga. ¡Ella te puede dar el paragua! ¡Pero escuchame bien lo que te voy a decir! ¡Ella te puede dar el paragua si
quiere! ¡¿Me escuchaste?! ¡Si quiere! ¡Y si no quiere no te da el paragua!
La del Paraguas. ¡Si no quiere yo lo agarro y me lo llevo te estoy diciendo! ¡Porque yo le caliento el té! ¡¿Y ya te
dije que sos una idiota?! ¡¿Y ya te dije que me voy a matar?!
La Amiga. ¡¿Vos no entendés las cosas que te dicen?! ¡Hablá más bajo, tarada, te dije!
La del Paraguas. ¡Vos sos una tarada, te dije! ¡Porque vos no tenés dignidad! ¡Porque yo para vivir así me quedo acá
y no vuelvo más allá si no me puedo llevar el paragua cuando va a llover!
La del Paraguas. ¡Pero me lo llevé porque yo quise! ¡No porque ella me lo dio!
La del Paraguas. ¡Yo no le pregunté si iba a llover! ¡Yo agarré el paragua y vos me lo quitaste y ella te vio y no dijo
nada y me miró como diciéndome qué suerte que vos lo habías agarrado!
La Amiga. ¡Yo no te lo quité! ¡Yo te dije que en la radio dijeron que no iba a llover!
La del Paraguas. ¡No me grites más, estúpida! ¡Porque me voy a poner a llorar! ¡Porque estoy desesperada!
La Amiga. ¡Yo no te entiendo a vos! ¡Tendrías que estar contenta! ¡Porque te querías llevar el paragua! ¡Y te llevaste
el paragua!
La del Paraguas. ¡Yo estoy contenta! ¡Porque me llevé el paragua! ¡Pero vos me odiás a mí! ¡Y ella también! ¡Y yo
así no puedo vivir más!
La Amiga. ¡Vos sos una idiota! ¡Porque yo no te odio! ¡Porque yo te quiero! ¡Y no quiero que parezcas una loca que
se lleva el paragua cuando no va a llover!
La Amiga. ¡Nadie te va a matar! ¡Vos te vas a matar! ¡Porque no entendés nada! ¡Porque ella también te quiere! ¡Y
por eso te da la cama para que duermas! ¡Y vos no entendés nada porque tenés tanto veneno en tu cabeza que no
entendés nada!
La Amiga. ¡Me importa una mierda! ¡Una mierda! ¡Callate la boca y no grites!
La del Paraguas. ¡Callate vos, hija de puta, que todo el mundo nos mira!
La Amiga. ¡Vos no sos mi amiga! ¡Vos sos una loca hija de puta!
La del Paraguas. ¡Me voy a clavar el estómago! ¡Por tu culpa! ¡Y no voy a volver más!
La Amiga. Sí.
Larga pausa.
La Amiga. ¡Es que te dije que no trajeras el paragua porque no iba a llover!
La Amiga. ¡Te dije que no trajeras el paragua! ¡Porque dijeron por la radio que hoy no llovía!
La del Paraguas. ¡Vos me dijiste que me callara delante de ella! ¡Y a mí nadie me hace callar delante de ella!
La del Paraguas. ¡Si yo me tengo que callar me mato! ¡¿Me entendiste?! ¡Porque si yo no puedo decir que me llevo
el paragua me pego un tiro en la cabeza! ¡¿Me entendiste?!
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 39
Pausa.
La Amiga. ¡Vos sos una idiota! ¡¿No ves que ahora no te importa el paragua?!
La del Paraguas. ¡A mí me importa el paragua cuando yo quiero! ¡¿Me entendiste?! ¡Cuando yo quiero!
La Amiga. ¡¿Ves que sos una maricona que te vas a dejar llevar el paragua?!
La Amiga. ¡Claro, ya sé que a vos no te importa que vengan los desconocidos y te saquen las cosas!
Pausa.
La del Paraguas. ¡Claro que estoy segura, hija de puta, la única que me sacó fue mi hermana, pero vos no sos mi
hermana, porque si vos fueras mi hermana yo te clavaría el paragua en el estómago!
La Amiga. ¡Che, che, che, vos no me vas a clavar nada a mí, porque yo no soy tu hermana!
La del Paraguas. ¡Te estoy diciendo que te voy a clavar el paragua a vos, y se lo voy a clavar a mi hermana para que
no me pegue más y para que no me saque lo que es mío, y se lo voy a clavar a la señora de la iglesia que me da la
plata porque me importa una mierda la plata de la señora de la iglesia, y se lo voy a clavar a ella que te mira para que
yo no me lleve el paragua! ¡Y primero me lo voy a clavar a mí el paragua en el estómago! ¡Porque yo quiero llorar,
porque si va a llover yo quiero tener mi paragua!
La del Paraguas. ¡No, no lo agarro, porque ése no es mi paragua! ¡Yo quiero mi paragua! ¡Yo quiero que venga mi
hermana!
La Amiga. ¡Claro que no soy tu hermana, idiota! ¡Te estoy diciendo que yo no soy tu hermana, y yo no sé dónde está
tu hermana! ¡Preguntale a ella dónde está tu hermana , si querés saber!
La del Paraguas. ¡Yo a ella no le hablo, porque ella se cree que porque me da una cama, yo no me voy a llevar el
paragua cuando va a llover!
La del Paraguas. Vos te podías haber muerto. Pero no, vos no eras.
La del Paraguas. ¡Yo no te deseo la muerte! ¡Porque yo te quiero! ¡Yo te digo que vos te podías haber muerto!
¡Todos se podían haber muerto! ¡Yo me podía haber muerto, ¿no me entendés cuando te hablo?! ¡Todos se podían
haber muerto, pero se había muerto... alguien! ¿Vos sabés quién se había muerto?
La Amiga. ¡Mirá! ¡Yo sé que me llamaron por teléfono, y me dijeron que fuera urgente para allá porque vos...
estabas..., yo salí corriendo, como siempre, como siempre salgo corriendo cuando a vos te pasa algo, porque yo soy tu
amiga y te quiero, y yo me fui para allá toda despeinada, y me dijeron que vos estabas muy..., que te había dado por
buscar, y que te había dado por pegarle a todo el mundo porque querías que te devolvieran algo, pero cuando yo
llegué no le pegabas a nadie, y no te habían sacado nada, yo no sé quién me llamó que me mintió, porque yo no te vi
nunca pegarle a nadie, y no te escuché pedir nada, y cuando llegué me encontré con la señora de la iglesia, y como la
señora de la iglesia no me saluda -vos sabrás cómo le habrás llenado la cabeza- me fui a hablar con tu hermana!
La del Paraguas. ¿Ves que hablaste con mi hermana? ¿Y qué te dijo? ¿Que yo quiero caprichos?
La Amiga. ¡Yo no hablé nada con tu hermana! ¡Hablé del tiempo, de la comida, de la plata, de qué barbaridad este
calor, de eso hablaba!
La del Paraguas. ¿Y la señora de la iglesia, cuándo me dio el paragua que estaba en el árbol?
La Amiga. ¡No te dijeron nada! ¡Estuviste un ratito y volviste al banco! ¡Y ahí la señora de la iglesia te regaló el
paragua que estaba en el árbol!
Silencio.
La del Paraguas. ¡Si la señora de la iglesia me dio el paragua, seguro que va a llover!
Breve silencio.
La del Paraguas. ¡Y yo te estoy diciendo que yo quiero llorar, porque me quiero llevar el paragua si quiero! ¡Yo
quería el paragua! ¡Y quiero que venga mi hermana y me traiga mi paragua!
La Amiga. ¡Decíle a la señora de la iglesia que te traiga el paragua que se llevó tu hermana!
La del Paraguas. ¡¿Y si vos no sos mi hermana por qué no me das mi paragua?!
La del Paraguas. ¡Y bueno, dámelo entonces si lo tengo ahí! ¡Porque todos me sacan el paragua y después no me lo
dan! ¡Vos me lo sacaste, vos me lo das!
La Amiga. ¡Claro, porque yo soy tu sirvienta! ¡Si te sacan el paragua lo tenés que ir a buscar, maricona!
La Amiga. ¡No, no te doy nada! ¡Yo no te doy nada! ¡Me tenés cansada con que te tengo que dar el paragua! ¡Y me
voy! ¡Y te dejo sola como una estúpida loca con tu paragua!
La Amiga. ¡¿Y desde cuándo vos tenés un paragua tuyo?! ¡Vos tenías un paragua, me entendés, tenías un paragua, y
ahora no lo tenés más, me entendés lo que te digo, no lo tenés más, porque no te movés, y como vos no te movés, yo
me voy a ir, y te voy a dejar sola, y no te vas a poder poner más desodorante, y cuando vayas a la pieza ella no te va a
dejar entrar, porque ahora yo le voy a hablar y le voy a decir que no te deje entrar más, y por mí podés ir a contarle
todo a la señora de la iglesia, porque yo me cago en la señora de la iglesia, ¿me escuchaste bien?, me cago en la
señora de la iglesia, y me cago en tu hermana, y me cago en tu paragua!
La Amiga. ¡Vos me vas a matar! ¡Pero a mí no me vas a matar! ¡A mí nadie me va a matar! ¡Porque si vos dejás que
me maten, yo no te lo voy a permitir! ¡A mí no me vas a dejar que me maten! ¡¿Me entendiste bien?! ¡A mí no me
vas a dejar! ¡A mí no me vas a dejar que me maten! ¡Porque yo no soy un paragua!
La del Paraguas. ¡Y claro que no sos un paragua! ¡Sos una hija de mil puta vos, eso sos! ¡Y como sos una hija de mil
puta yo me voy a ir a matarme por ahí! ¡Y vos no vas a tener los billetes de papel que me da la señora de la iglesia,
porque yo me voy a ir a matarme al tren!
La Amiga. ¡¿Y no ves que no te llevás el paragua?! ¡¿No te das cuenta que no te importa tu paragua?!
La del Paraguas. ¡Yo quiero mi paragua! ¡No ese paragua de mierda que es de ella, y que no me deja que me lo
lleve!
La Amiga. ¡¿Cómo que no te deja que te lo lleves?! ¡¿No lo tenés ahí el paragua?!
Silencio.
La Amiga. ¡No hay más luz, nena! ¿No ves que está todo negro? ¿Qué se va a venir una...?
Silencio.
La del Paraguas. ¡¿Y vos no sos mi hermana?! ¡Porque si sos mi hermana me tenés que dar el paragua! ¡Y si no sos
mi hermana yo no te conozco y me voy a casa!
La del Paraguas. ¡A casa me voy, te estoy diciendo! ¡Me tomo un taxi y me voy a casa!
¡Y me voy a cocinar unos...!
Silencio.
Silencio.
La del Paraguas se va.
Larga pausa.
La Amiga se levanta, toma el paraguas, se sienta, y lo deja en el banco, a su lado.
Pausa.
La Amiga toma el paraguas, se levanta, lo coloca en el piso, donde había caído, y se sienta.
Pausa.
La Amiga vuelve a buscar el paraguas, se sienta, y lo deja en el banco, a su lado.
Pausa.
La Amiga mira fijamente el paraguas y lloriquea distraídamente.
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 44
Pausa.
Vuelve lentamente La del Paraguas.
La del Paraguas se sienta.
Larga pausa.
La Amiga. Sí.
Pausa.
La del Paraguas. Sí, porque somos amigas. Y si a vos te duele, a mí también me duele.
Pausa.
Pausa.
La del Paraguas. Busca el paraguas donde había caído. ¡¿Dónde te llevaste mi paragua, ladrona?!
Pausa.
La del Paraguas. ¡Si no es mi paragua no lo quiero, te aviso, lo tiro a la basura! ¡¿De quién es este paragua?!
Pausa.
Tres miradas sobre un paraguas - Marcelo Bertuccio 46
Pausa.
La del Paraguas. ¡Me acuerdo de que yo me quería llevar...! ¿Qué me quería llevar?
La del Paraguas. ¡Terminala con el paragua! ¡Me vas a matar con el paragua!
¿Qué me quería llevar yo, te estoy diciendo?
La Amiga. ¡Yo no sé qué te pasa a vos hoy, che! ¡Estás como loca!
La del Paraguas. La interrumpe. ¡Ni loca, ni estúpida, ni tarada, ni gorda, ni vieja, ni puta, ni apurate, ni no sé, ni
quedate tranquila, ni no puede ser, ni es de ella, ni...!
La Amiga. ¿Qué?
La Amiga. Vamos.
La Amiga. ¡Vamos!
La Amiga. De pie. ¡¿Yo qué?! ¡Yo no hice otra cosa que lo que me dijo tu hermana! ¡Vos estabas con tus cosas raras!
¡Yo la acompañé! ¡Estaba muy mal! ¡Vos estabas con la señora de la iglesia! ¡Ella estaba sola y yo la acompañé!
¡Gritaba! ¡No! ¡Tu hermana no gritaba! ¡Él gritaba! ¡Y yo estaba ahí! ¡Yo no sabía qué hacer! ¡No! ¡Él tampoco
gritaba! ¡Vos decías cosas muy raras! ¡Tu hermana estaba preocupada! ¡Me dijo que la acompañara! ¡Vos hubieras
hecho lo mismo en mi lugar!
Silencio.
La del Paraguas continúa con la mirada perdida.
¡Sos una desagradecida! ¡En mi lugar hubieras hecho lo mismo! ¡No sos quién para acusarme de nada! ¡Hice lo que
pude! ¡Y ahora mismo te venís conmigo, que se va a largar en cualquier momento! ¡¿Me oís?! ¡Hice lo que pude! ¡Tu
hermana no sé! ¡No sé si es buena persona, pero yo hice lo que pude! ¡¿Me escuchás?! ¡¿Me escuchás?!
Llueve torrencialmente.