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Introducción
Hace miles de años atrás los humanos descubrimos el fuego, y sus varios usos: el

de brindar luz en la oscuridad, brindar calor cuando hace frio y, quizá mas importante, el

de cocinar la comida. Cocinar un ingrediente hace que sea más digestible y a sus calorías

y nutrientes de mas fácil absorción. De esta forma, los humanos primitivos pudieron

nutrirse mejor y aprovechar fuentes diferentes de comida que antes no usaban.

Tipos de cocción
A continuación vamos a discutir las formas más populares de cocción en “seco”, es

decir que no se valen de envolver el alimento en un fluido como el agua o aceite para

cocinar el alimento. Ejemplos de cocción son: Parrilla, Asado, Horneado, Saetee.

Parrilla
La cocción a la parrilla es una de las más difíciles de dominar, pues consiste en

cocinar la comida con el calor radiante de carbón que queda cuando una llama esta por

morir. En este estado, cunando el carbón brilla de color rojo, es cuando emite la mayor

cantidad de calor, y hace que la cocción más rápida. Esta intensidad y rapidez son la que

hacen que este método sea más difícil de dominar, pues no se tiene control directo de la

llama.
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Asar vs. Hornear

Asar es una de las formas de cocción más antiguas que se conoce. Y esto es

porque es una de las más “simples”. El asar un alimento consiste en cocinarlo con calor

radiante lentamente. Es casi como cocinar algo a la parrilla, pero con la diferencia que se

aleja el alimento de la fuente de calor para que intensidad del calor sea menor