Podemos inferir que de acuerdo a diferentes escenas la familia de Germain
formaría parte de una familia con vínculos desorganizados o desorientados (vínculo de la madre con Germain y el vínculo de la madre con el padre de Germain, madre de Germain y padre del mismo). En su infancia el niño ha sufrido el rechazo consciente o inconsciente de parte de sus padres, no estableciendo, en particular con su madre, relaciones armoniosas, y como consecuencia respuestas indebidas, o con baja tolerancia a la espera. Pueden observarse también dificultades en el apego materno, una madre desencantada, “enojada”, triste, no se emociona frente a los logros del hijo. Tiene reacciones excesivas ante respuestas no esperadas, en consecuencia la relación no se alimenta como debería de manera sana, a través de un vínculo seguro, contenedor, siendo este vínculo necesario en todo infante, para su crecimiento, e identidad. El hecho de haber nacido con exceso de peso, Germain fue puesto en el lugar de “idiota” por parte de la madre ya que consideraba que ese exceso de peso con el que había nacido y el uso de fórceps “lo hacía torpe”. Lo antes descripto es lo que Blanca Núñez considera crisis accidentales en la cual tiene un carácter imprevisto, inesperado enfrentar estas crisis, lo que para la madre del protagonista representó como peligro de trastorno o desviaciones a nivel vincular. Dentro de la caracterización de los tipos de vínculos este sería el caso de hijo deudor- padres acreedores, el niño suele sentir que ha defraudado a sus padres, a los que vive como insatisfechos y desilusionados con él en la medida que está lejos de ser el deseado a causa de su “discapacidad”, se siente culpable por ello. Esto se vincula con una actitud consciente o inconsciente de cargarlo con la culpa de su fracaso. Lo antes expuesto puede verse plasmado en varias escenas tal como en la escena de la despensa donde al caer y romperse la botella de leche la madre responde de manera violenta e impulsiva humillando a Germain delante de todos (“el resultado es es” haciendo referencia a “sufrí como una bestia porque era gordo”, “comer, gastar, lo arruina todo, esas son las satisfacciones que me da), podemos también destacar la escena en que Germain siendo ya un hombre adulto, le dice a su amigo que aunque se vaya a vivir al fin del mundo o del otro lado del mundo la distancia está en la cabeza, es “simbólica”, además siente que para la madre él no existe, fue un error. No sólo el vínculo con la madre sumió a Germain en situaciones difíciles de resolver ante el encuentro con “otro”. Durante su etapa escolar era sometido a la burla y humillaciones, por quien tendría que haber ejercido entre otras cosas como agente favorecedor, su maestro. Germain no era aceptado tal como era, su maestro lo maltrataba remarcando sus limitaciones y errores, actitud, que más allá de no reconocer al niño como sujeto deseante, le impide cumplir su rol y que el niño se reconozca como sujeto activo no sólo de su proceso de aprendizaje y logre descubrir sus posibilidades, sino también de la construcción de su proceso histórico. El vínculo docente- alumno no representaba un vínculo favorecedor frente a la posibilidad de conocer, la escuela lo enfrentaba con sus limitaciones y no con sus potencialidades. Contextualizando la época en que Germain atravesó por la escuela debemos tener en cuenta los cambios en las diferentes áreas: salud, educación, salud, del modelo iusfundamental. Esto lo podemos relacionar con el concepto de necesidades especiales, definido en la década de los 80, donde se explicita que un niño con necesidades educativas especiales, va a necesitar de un currículum complementario al del resto de los estudiantes, Koaf y Bine, en 1989, refieren que el término de necesidades era tomado de manera errónea, ya que para legitimar el currículum especial, el niño debe ser declarado deficiente. Lo antes mencionado deja al descubierto de que la escuela no estaba preparada para la inclusión de los niños con diferentes necesidades, sino que por el contrario, el hecho tener un aprendizaje diferente al de los demás, como en el caso de Germain, provocaba en su docente el sentimiento de rechazo y de burla, creemos por no reconocer sus limitaciones, o simplemente porque en esa época las personas como Germain, con un tipo de aprendizaje diferente al de la mayoría de los niños era interpretado como una enfermedad, contra la que no se podía hacer nada. Además, debemos tener en cuenta que en la época en que transcurre la película, aún no existían los profesores especiales, quienes se consideran tiene mayor preparación para guiar la educación escolar de los alumnos que lo requieren. Mucho menos el marco normativo actual. El objetivo del adulto nos va a decir Philippe Meirieu es aflojar la presión entre la pulsión y el acto, para que se instale y se desarrolle el pensamiento. Hará foco en la desaceleración de la inmediatez, para que el docente en su rol permita la reflexión y que el niño (quien aprende) esté orgulloso de haber transformado su opinión en reflexión. Lograr transformar la satisfacción inmediata (prometida por la digitalización) en una convicción argumentada. Ser capaces de detenernos e interpelar todo aquello que damos por supuesto. Provocar, permitir, motivar situaciones para correr riesgos y aprender, claro que como bien lo expresa Philippe Meirieu en espacios “fuera de amenazas”, donde equivocarse no sea blanco de humillaciones y exclusión. Es pertinente como psicopedagogas concebir la Educación como un Aprendizaje Permanente que se desarrolla a lo largo de la vida. Debemos tener en cuenta los diferentes aportes teóricos, en pos de los aprendizajes de NNA y Personas mayores, sean cuales sean sus potencialidades. Reflexionar sobre los modelos obsoletos de enseñanza que sólo permitían trayectorias escolares lineales, nos va a permitir pensar sobre las diferentes trayectorias educativas. Varios personajes acompañaron a Germain en distintas etapas de su vida, sus amigos, familia, su novia y el encuentro con Margueritte. Con respecto al grupo de amigo cada uno tenía un rol fijo, el de Germain era el lugar del “tonto”, el “sentimental y bruto en ocasiones cuando podía comprender el modo de acercarse a los demás. Cuando Germain comenzó a cambiar y correrse de ese lugar la crisis en el grupo se hizo evidente, a través de diferentes comentarios, él ya no era el mismo, no se quedaba largas horas en el bar y sus intereses eran otros. Intereses impensados para su grupo (lectura, contemplación), reservados todos para el amigo que se dedicaba a hacer palabras cruzadas y tenía título. En cuanto a la relación de Germain con Margueritte, podemos interpretar que la mirada interesada sobre qué era lo que le interesaba leer, y el estimularlo para que se familiarice con la lectura, hicieron que despertara en Germain, la curiosidad. La escena en que Margueritte le refiere a Germain que se puede leer escuchando, visibiliza como de esa manera, permitió con ese comentario incentivar el deseo de él hacia la lectura. En el estilo de enseñanza de lectura Margueritte se distinguen aspectos de la teoría sociocultural de Vigotsky, ella estimula a Germain (en su lectura empobrecida) impulsando su zona de desarrollo próximo basándose en su zona de desarrollo real. Margueritte y su novia toman sus conocimientos previos y no lo censuran, según Philippe Meirieu estarían creando situaciones seguras, espacios “fuera (libre) de amenazas”, donde correr riesgos, pero sin peligro de ser excluidos/as y humillados/as. Dicho Modelo basado en el diálogo, concuerda con la teoría del aprendizaje según Ausubel del aprendizaje por recepción significativa (1968). El aprendizaje en la edad adulta tiene una relación muy fuerte con la motivación que la persona mayor tenga para iniciar una tarea, desarrollar un proyecto o profundizar en un tema. La psicogerontóloga Olga Sanz, sostiene que en la etapa adulta de la vida, la capacidad de aprendizaje continúa siendo realmente amplia, sobre todo si también se mantienen amplios los factores motivacionales de que cada uno dispone. Es posible, sin ninguna duda, aprender la misma clase de conocimientos y habilidades a los sesenta y cinco años que a los dieciocho. Hay factores, no obstante, que pueden influir en que se dé un detrimento en el rendimiento de la persona mayor, como por ejemplo la disminución de la agudeza sensorial (hipoacusia, déficit de visión), mayor fatigabilidad, etc.; pero ninguno de estos factores están directamente relacionados con la disminución en la capacidad de aprendizaje. Es decir, existen por supuesto ciertas facultades mentales que sufren el paso del tiempo, como la memoria, la capacidad de concentración y la agilidad mental, pero son facultades que pueden compensarse, por ejemplo, con una alta motivación y un gran interés hacia la tarea. ¿Qué es la motivación y por qué es tan importante?: La motivación es el deseo constante de superación. La motivación es intrínseca cuando la persona fija su interés en el hecho de realizar una actividad por el placer y la satisfacción que experimenta mientras aprende, explora o trata de entender algo nuevo. Germain pudo reconocer en Margueritte un sujeto de derecho, cuando fue a buscarla, lo hizo teniendo en cuenta los cuatro pilares básicos del envejecimiento activo: Participación, Salud, Seguridad y Aprendizaje Permanente. No se posicionó en el antiguo paradigma de interpretar a la vejez como un estado de pasividad y no productividad. Con respecto al Derecho Fundamental a la Calidad de Vida de los Ancianos Isern y Fernández (2011) sostienen: En coherencia con nuestra perspectiva de teoría general, este derecho se manifiesta de una forma tridimensional. Por lo que en su análisis desvelamos su faz sociológica, valorativa y normativa. Y no podría ser de otra manera, ya que el desentendimiento de la dimensión social y valorativa de la ancianidad, es decir, el poner a un lado los avatares de la vida misma del viejo y sus significaciones axiológicas, implicaría enceguecer voluntariamente la mirada (p.5). Tanto Margueritte, Germain y su novia lograron ver en el otro el potencial y no la falta, de esta manera la autoestima se ve favorecida y en consecuencia la Resiliencia es una posibilidad. Del único modo que no hay posibilidad es con la ausencia de deseo. ¿Es posible para una persona con discapacidad el empleo real? ¿Aprendemos en todas las etapas de la vida y bajo cualquier circunstancia? ¿Es importante la mirada del “otro”? ¿Estamos enseñando para reconocer al otro en su diferencia, en su potencialidad, o desde los prejuicios personales y profesionales continuamos marcando la división? ¿Llegará el momento en que la clasificación de vulnerables, deje de ser casi exclusiva de las personas privadas de sus derechos? Como profesionales lejos de romantizar la vejez y la discapacidad decidimos cerrar este análisis abrazando dos escenas a modo de reflexión: Germain: ¿Y si hubiese sido al revés? Margueritte: ¿Al revés? Germain: ¿Y si su madre no lo hubiese querido, qué habría pasado? Margueritte: No lo sé. Si alguien no recibe suficiente amor en su infancia aún le queda todo por descubrir.
La otra escena refiere al diálogo de Germain con su pareja sobre la posibilidad de tener un hijo: Germain: ¿Qué le ofrecería yo? Mujer: Amor.