EL REENCUENTRO CON LA LLUVIA

Cae la lluvia en el océano sin percatarse que entre ellas, había una gota que no era igual a sus
compañeras, esta había tenido un origen diferente y un recorrido doloroso cuya expresión de
dicho recorrido se manifestaba en esa gota, la cual por medio de una tormenta logró parar con el
resto, la carga y el dolor que llevaba la hacía sentirse completamente diferente al resto de sus
compañeras, el significado de su creación y destierro. Años de intentos para lograr ser libre pero
siempre fueron sofocados e interrumpidos por una gran fuerza de voluntad con una pisca de
orgullo, hasta el día de hoy que en medio de los llamados de bóreas y el abrazo de Neptuno logró
encontrar su libertad pero era una de esas victorias amargas ya que el dolor y sufrimiento que
significo su partida dio para que brotara un sentimiento de culpa, desesperación, inseguridad. Un
caos total que lo presenciaba en esta tormenta, la luz representada con esos destellos azules cuya
colisión con la tierra generaban esos ruidos tan temibles, intimidadores y potentes. Esos son los
imponentes relámpagos que acompañados del rayo y el trueno han generado admiración, respeto
y temor en aquellos que los han presenciado, ese sentimiento de fuerza, motivación, esa
sensación de llegar a ser tan implacable como estas maravillas. La oscuridad que sentía fue
claramente representada en las nubes negras que impedían que el sol diera su cálido apoyo, tan
oscuro y hermético que no daba la sensación de un mañana prometedor pero que también
cultivaba ese sentimiento de que la calma vendrá y sin olvidar el poder caótico, desolación e
inseguridad que pregonaban los discípulos de bóreas, los fuertes vientos, en los cuales se
manifestaba el sentimiento puro del caos y la confusión que dicha gota porta en este momento
tan crucial donde