Está en la página 1de 5

…y Jesús se Transfiguro

II Domingo de Cuaresma
Misa de posesión del nuevo párroco
RITOS INICIALES.
Monición inicial:
Hermanos, sean todos bienvenidos a la celebración de la Eucaristía en este tiempo
santo de cuaresma.
La ruta de Jesús nos lleva hoy a la montaña. Y nos ofrece la oportunidad de mirar a
Jesús transfigurado y de mirar a los hermanos con ojos más limpios y de mirarnos a
nosotros a la luz de Cristo que nos invita a estar con Él y a escucharle.
Celebremos con alegría esta fiesta y dejémonos guiar por el Espíritu en este viaje
cuaresmal, en el cual nuestro hermano Richard Paul Cortes López, recibe de parte de
Monseñor Rubén Darío Jaramillo, Obispo de Buenaventura quien preside nuestra
celebración, el encargo de la animación pastoral de esta comunidad cristiana, para
hacer de sus fieles familia en la fe, confirmada por el culto y apremiada por la caridad.
Entonemos juntos el canto de entrada.
Saludo del Obispo Diocesano.
Acto Penitencial.
LECTURA DEL NOMBRAMIENTO DE NUEVO PÁRROCO.
monición:
Como para Cristo, también para el presbítero, la obediencia expresa la disponibilidad
total y dichosa de cumplir la voluntad de Dios. Por esto el sacerdote reconoce que
dicha voluntad se manifiesta también a través de las indicaciones de sus legítimos
superiores.
En estos momentos se leerá el Nombramiento de Párroco para esta comunidad
parroquial de San Francisco de Asís, decretado por Monseñor Rubén Darío Jaramillo,
Obispo de la Diócesis de Buenaventura.
Después de leído el decreto, el presidente de la celebración hace entrega de las
llaves del Templo parroquial.
OBISPO: Recibe las llaves del Templo, como signo del inicio de tu ministerio en esta
parroquia y como custodio de este lugar santo.
Párroco: Yo las recibo y me comprometo a cuidar de este sagrado lugar. Y pido a
Dios que me conceda ser llave que abra los corazones, para que el Reino de Dios
nazca y crezca en los hijos de esta comunidad de parroquial de …. que me ha sido
encomendada.
Oración Colecta.

LITURGIA DE LA PALABRA
Monición:
Abramos nuestro corazón para que al igual que Abraham sepamos escuchar y acoger
la Palabra que Dios nos dirige con el propósito de establecer una Alianza sellada con
la entrega de su Hijo amado, a quien debemos escuchar. Que esta Palabra nos llene de
fe y Esperanza.
Homilía.

RENOVACIÓN DE LAS PROMESAS DE LA ORDENACIÓN


Después de la homilía, el nuevo párroco realiza la renovación de las promesas
sacerdotales.

OBISPO: Querido hijo, delante del pueblo que se entrega a tu cuidado pastoral,
renueva las promesas que hiciste en tu ordenación.
¿Estás dispuesto a desempeñar siempre el ministerio sacerdotal como buen
colaborador del orden episcopal, apacentando el rebaño del Señor y dejándote guiar
por el Espíritu Santo?
El párroco: Sí, estoy dispuesto.
OBISPO: ¿Estás dispuesto a presidir fielmente la celebración, de los misterios de
Cristo, para alabanza de Dios y santificación del pueblo cristiano, según la
Tradición de la Iglesia?
El párroco: Sí, estoy dispuesto.
OBISPO: ¿Realizarás el Ministerio de la Palabra preparando la predicación del
Evangelio y la exposición de la fe católica con dedicación y sabiduría?
El párroco: Sí, lo haré.
OBISPO: ¿Quieres unirte cada día más a Cristo, sumo Sacerdote que, por nosotros,
se ofreció al Padre como víctima santa y con Él consagrarte para la salvación de los
hombres?
El párroco: Sí quiero hacerlo, con la ayuda de Dios.
OBISPO: ¿Prometes obediencia y respeto a mí y a mis sucesores?
El párroco: Prometo.
OBISPO: Dios, que comenzó en ti la obra buena, Él mismo la lleve a término.

ENTREGA DE LOS LUGARES DE LA CELEBRACIÓN


Monición:
Monseñor Rubén Darío Jaramillo, ahora se dirige hacia algunos que, en el interior del
Templo, expresan el ministerio que desempeñará el nuevo párroco a favor de su
comunidad.
Comentador: Entrega del Bautisterio que alberga la fuente bautismal donde nacen
los hijos de Dios. Misión fundamental del Párroco será bautizar y educar en la fe a los
nuevos hijos de Dios para que vivan según la voluntad divina.
OBISPO: Esta es la fuente de vida que mana del costado de Cristo y limpia los
pecados del mundo. Este es el seno materno de la Santa Madre Iglesia que engendra
hijos para la eternidad. En esta fuente bautismal harás renacer, por el agua y el
Espíritu Santo, tanto los niños que te presenten los padres cristianos, como los adultos
que se conviertan a la fe».
Si las circunstancias lo permiten el párroco puede incensar este lugar.
Comentador: En el Sagrario la Iglesia reserva la Eucaristía, recordándonos la
presencia sacramental del Señor que nos invita a su encuentro en la oración y a
unirnos más plenamente como hermanos en su amor. El nuevo párroco adora la
Reserva Eucarística, manifestando, además, su servicio de cercanía y consuelo para
con los enfermos de esta comunidad, al distribuirles la sagrada comunión.
OBISPO: Recibe la llave del Sagrario. Conserva con todo cuidado el Pan Eucarístico,
para llevarlo a los enfermos y moribundos, a los ancianos y a cuantos no pueden
tomar parte en la Eucaristía. Procura también que tus fieles se dediquen a la adoración
eucarística y cuida de que esta luz permanezca siempre ardiendo para señalar la
presencia del Señor.
Si las circunstancias lo permiten, el Obispo puede invitar al párroco a que abra la
puerta del sagrario e inciense el Santísimo Sacramento.

Comentador: La Sede presidencial recuerda a la asamblea que su Cabeza es Cristo.


Desde la Sede los ministros presiden a la comunidad, la guían y la sirven. Desde ella
dirigirá el pastor su oración y cuidará de su pueblo en la celebración de los divinos
misterios.
OBISPO: Jesús, el Buen Pastor, es quien, por medio de nosotros, sus ministros,
continúa anunciando el Evangelio y presidiendo la oración de los fieles. Tú, también,
como cooperador de tu Obispo, ocupando esta Sede, serás la imagen de Jesucristo,
predicarás su evangelio y presidirás la oración de la Iglesia que se reúne en esta
Parroquia.
Si las circunstancias lo permiten el Obispo invita al párroco a sentarse por un
instante en la sede principal.

Comentador: Finalmente, el Señor Obispo invita al nuevo párroco hacia el Altar.


OBISPO: Esta es la mesa del Señor. Alrededor de la misma congregarás a los hijos
de la Iglesia y, en nombre de Jesucristo, presidirás la Eucaristía para que tus fieles
puedan unirse al sacrificio de Cristo y participen así de la Cena del Señor.
Comentador: De esta manera el Fray Richard Paúl Cortes López, queda jurídica y
litúrgicamente constituido párroco de esta comunidad parroquial; le brindamos un
fuerte aplauso y deseamos que la gracia del Espíritu le ayude cada día.
Profesión de fe
Oración de los fieles
OBISPO: Elevemos nuestras oraciones a Dios, nuestro Padre, que transfiguró a su
Hijo Jesucristo, que nos mira con bondad y nos ayuda siempre. Le dirigimos nuestra
oración diciendo: ESCÚCHANOS, SEÑOR.
1.- Para que la Iglesia, con la fuerza del Espíritu, se mantenga siempre fiel a
Jesucristo, denuncie la injusticia social que hunde a las personas en el abandono y la
soledad. OREMOS.
2.- Para que todos los cristianos y cristianas, sintiéndonos empujados y empujadas por
Cristo, vivamos llenos y llenas de alegría y sepamos compartirla con cuantos y
cuantas no encuentran ánimo para hacer frente a sus problemas. OREMOS.
3.- Por Fray Richard Paúl Cortes López……, quien da inicio a una nueva etapa de su
vida sacerdotal en esta comunidad: para que sea incansable en el anuncio de la
Palabra y en el servicio de esta porción del pueblo santo de Dios, roguemos al Señor.
4.- Por los sacerdotes que han regido en esta parroquia: para que el Señor les dé el
premio merecido por su servicio generoso y fiel, roguemos al Señor.
5.- Por todos nosotros, que queremos vivir el espíritu de la Cuaresma, para que,
oyendo al Hijo predilecto del Padre, nos ayude a renovar nuestro compromiso, de
modo que, viviendo con gozo y con alegría, transformemos la sociedad que nos ha
tocado en suerte. OREMOS.
6.- Para que nuestra Comunidad Parroquial no se deslumbre con grandezas humanas,
sino que en todo siga la sencillez, la cercanía y la acogida de Jesús. OREMOS.

OBISPO: Padre Santo, que has querido servirte del ministerio de los presbíteros para
hacer a tu pueblo partícipe de la salvación, acoge nuestras súplicas y oraciones y haz
que aumente el número de los que responden a tu llamada con disponibilidad
generosa y fiel. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Continua la celebración como es costumbre….

También podría gustarte