David Vargas Cediel

201618127
El capital informacional, desde el estado-nación me ha construido significativamente. El
aporte cultural impuesto desde la escuela, desde una edad muy temprana me ha ayudado a
reconocerme como ciudadano colombiano, entender y aceptar la identidad colombiana.
Desde los primeros años escolares se estudia la historia colombiana y es que se hace con un
propósito, el cual es sembrar en cada estudiante la unificación de los pensamientos sociales,
burocráticos y de derecho para consolidar la sociedad del país. La identidad colombiana es
una mezcla de varias costumbres resultado del proceso de mestizaje en época de la colonia,
adicionalmente estas variaciones en costumbres fueron aumentando a lo largo de los años y
consolidarse las regiones. Puede que, en primer lugar, la formación de regiones y el
fortalecimiento de estas, distorsionen la noción de la identidad colombiana, pero por el
contrario pueden enriquecerla. Desde pequeños se nos enseña que los colombianos son
personas perseverantes, colaboradoras, alegres y resilientes; esto queda tatuado en la mente
de cada niño que puede acceder a la escuela y a medida que pasan los años escolares se va
fortaleciendo mirando analíticamente la historia colombiana. El capital informacional
ayuda que los colombianos se sientan orgullosos de su nación, que aporten a la
construcción y fortalecimiento del estado-nación desde cada uno de los mecanismos
disponibles, aunque es cierto que aun falta mucho por fortalecer, las nuevas generaciones
están empezando a generar cambios y ayudar a que el estado colombiano se fortalezca.