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> LA JUSTICIA EN LOS SOFISTAS Y PLATON > FELIPE SCHWEMBER AUGIER al asunto la orientacién correcta (sobre todo si constataba personalmente la enorme y muchas veces perniciosa influencia de la retérica en la vida piblica ateniense), presentaré su dialéctica como el adecuado sustituto de la ret6rica y, en base a las exigencias de ésta, procederd a reformarla®, Asi, diré Plat6n en el Fedro: a)el orador debe tener un conocimiento profundo, radical de la verdad, pues sin este conocimiento de la verdad, la retérica no llega a ser un arte propiamente tal. Este conocimiento de la verdad se logra por la dialéctica; b) la retérica debe conocer aquello a lo cual se dirige, sobre lo cual actiia que es el alma, por lo tanto, el buen orador debe conocer la naturaleza del alma, y 0) el orador debe conocer la naturaleza de aquello sobre Jo que versa su discurso, Sin esta exigencia, la retérica para Platén no es més que un pseudo-saber, un pseudo-arte gue se nutre aélo de fa opinién y no de la verdad. Y en este sentido, para Platén la retérica que no cumple con los requisitos de la dialéctica, guarda con la justicia la misma relacién que la cosmética con la gimnasia, la cocina con la medicina 0 la sofistica con la legislacién: un mero sustituto que se nutre de la adulacién y que produce una apariencia de bondad sin llegar a serio realmente®. Slo una vez que la, ret6rica cumple todos estos requerimientos, se podré hablar de la retérica como un arte, al servicio de la justicia. Esta critiea de Platén debe haber sido mis que agraviante para los sofistas, especialmente teniendo en cuenta que aspiraban a desempefiar el pape! de ‘sta sus timas consecuonsas;y eso fue lo que hicieron, luego os seguidores de los primeros safistas, Robinson es de la misma idea: “..posiblemente el sofsta no fuera un dsputador, peo ensesa a su disefpulo a que lo sea”, Ob. cit. pig. 134 5. retirica seformada por la diléctica es lo que se ha dado en lamar la “retriea idea", A la retrica propuesta por Platon se le eitica el subsumir fo anula, pricticamente, la retérica a la dialéctica por haceria depender Inrrinsicamente de la ciencia 0 epsteme Ce. Gorgias A6tb-465e. La cosmetica enmascaray disimula ol mal estado det 2 edueadores en a sociedad ateniense y que Gorgias la consideraba la medicina del alma, Pero, para Platén, cuyo afin educativo no era menor que el de los sofistas y que no pasaba por alto las posibilidades que a este respecto ofrecia la ret6rica, era imposible dejar pasar los excesos a que Iegaba en manos de Jos sofistas sin intentar su reorientacién seria, en especial considerando el gran efecto que tenia en la convulsionada y efervescente vida politica ateniense. Platén, por tanto, se lanzaré al rescate de la retorica de las manos de los sofistas para hacer de ella un “arte” que contribuya a la vida de la polis, 13. LA ANTITESIS PHYSIS - NOMOS Uno de los temas mds recurrentes en el discurso sofista y en el debate intelectual del siglo V, es la distincién entre piyisis y ndmos. Originalmente, physis y ndmos no eran entendidos como términos antitéticos; mas, como dice Ghutrie, es dificil determinar qué o quién fue el responsable de Ja distincién entre ambos conceptos y desde cuando ésta se populariz6 o difundié en el pensamiento griego. Némos puede traducirse de tres formas. Primero puede ser entendida como a) opinién o creencia, como algo en lo que se cree, practica y se da por bueno. Eso si, némos no dice relacién con una opinién cualquiera sino que es opinién que tiene un cardeter colectivo y estable. No se refiere, por tanto, a opiniones personales cuerpo mientras que la cocina busea complacer el apetito con independence de la comida sea ono saludable. La sofsticay laretérica, dice Pain, apaciguan al puebio al mismo tiempo quese dejan manejar por él, peso tienen un verdadero onocimicnto del alma, ni dela realidad, ete, La sfistia es, en el pensemiento de Platén, ala cosmetic lo que la cocina ala retsrica la stuacidn del l6sof0 3 parecda a la del médico que debe persuadir a una asamblen de nifos (los ciudadanes) de que se beban una amanga medicina mientras un cocinero (el sofsta) le ofrece dulees y pasteles, LAJUSTICIA EN LOS SOFISTAS Y PLATON u opiniones circunstanciales y pasajeras. De ahi que se entienda, también, como b) costumbre 0 usos sociales, por cuanto la costumbre denota un comportamiento colectivo y estable en el tiempo basado en alguna opinion aunque sea s6lo una opinién implicita. Aqui se desliza la idea de normatividad. Y némos significa c) ley®, el conjunto de leyes por las que se rige una comunidad. Puede entenderse, incluso, como convencién, pero como la convencién que tiene fuerza vinculante. El némos siempre tiene fuerza imperativa y es normative. Por eso, Kerferd, aclarando los sentidos de némos, dice que “némos ‘como ley es la norma prescrita legalmente y ndmos como convencién es la norma prescrita por convencién’® (la cursiva es nuestra). El ndmos, pot tanto, lo constituyen las leyes, legalmente sancionadas que codifican y regulan la vida de la polis. Ndmos, en consecuencia, debe ser entendido como costumbre y ley, pues pata los griegos no existia una distincién nitida entre ambas acepciones, e incluso como convencién en el sentido sefialado por Kerferd. Physis, por su parte, puede ser entendida como naturaleza 0 realidad cuando aparece juntamente al término némos**. R.G.Collingwood® sostiene que physis es entendido por los fil6sofos jonios de dos maneras; una responde a la pregunta “ide qué estn hechas las cosas?”, segtin lo cual, la physis seria el conjunto de cosas de que estii hecho algo (“agregado de cosas naturales”); la otra manera de entender physis es como “principium 0 arjée o fuente”. Entonces, la physis es aquello en virtud de lo cual una cosa se comporta de la manera en que lo hace, algo insimo, inherente a una © Galati citando « MP. Nilsson, sefala que la palabra “ley” es una mala traduceidn y que tal vee “convencin” expresara mejor su significado, aunque tiene el inconveniente de que a0 sugiere con la misma fuerza que la palabra “tay” Ia idea de obligatoriedad, constricién o mandaio que tiene la palabra némos. Cf. ab. ct, pg. 29. S'Che GiB. Kerferd, ob. cit, pig. 112: "So némos as law i legally preseribed norm, and ndmes as convention is norm prescribed by convention”. Guibie, ob. cit. Vol, pi. 64, © Galati 9 cit. pg. 31 44 FELIPE SCHWEMBER AUGIER cosa, que podrfamos entender como la indole de algo. “Decimos que dejaremos a los perros que se diviertan aullando y mordiendo porque tal es su naturaleza; decimos que la naturaleza del fresno es ser flexible y la del roble la de ser duro™*. Cuando algo o alguien no se comporta de acuerdo a su physis, su comportamiento no es natural sino compulsivo, De esta manera, y a medida en que phy'sis y ndmos comenzaron a ser entendidos de forma antitética, se articul6 una formula disyuntiva para analizar los problemas: de la mis diversa indole: “necesidad natural — obra del hombre”, lo uno 0 Io otro: lo que era por physis no lo era por ndmos y viceversa, lo que era requerido por la ley (némos) éxa contrario a lo requerido por la naturaleza (phrysis), pues ambos eran entendidos como conceptos contrapuesios y mutuamente excluyentes. En esta formula, ya sugerida por los fisicos®, encontré el espfritu general de la sofistica una herramienta valiosisima para el desarrollo de sus propias tesis, a la vez que un dtil “instrumento de refiexién critica” que aplicaron 1 los mas diversos Ambitos y, sobre todo, al problema del origen y el valor del derecho y la moral, llevando a cabo, en consecuencia, una “critica generalizada de la cultura, si entendemos por cultura todo aquello que en el hombre no es producto de la naturaleza’™ Asi, en el debate’ religioso la pregunta era si los dioses existian por physis - en la realidad- © por némos; en el politico, si los Estados existian por necesidad natural (physis) 0 por némos; Si la esclavitud y, en general la dominacién de un hombre 0 un estado sobre otro, es algo natural - es decir, por physis- 0 es producto solamente de Ibid, pag 31 © Zeller, op. cit, pig. 76. ‘GE Calo, Be fos Sars a Plan police» pemaniono, p78, Masa © Guthrie, ob cit, Vol I, pig 67. LA JUSTICIA EN LOS SOFISTAS ¥ PLATON una convencién (némos)®; en lo moral, si lo justo o lo bueno, existe meramente en la creencia 0 en la convenciGn y son inventos humanos o existen por una necesidad natural Por estos derroteros, el orden moral y juridico fueron concibiéndose progresivamente como una creacién humana ‘mas que como parte del orden divino, concepeién a la que contribuyé el desplazamiento de Dios por el azar 0 por fenémenos puramente fisicos como causa del mundo natural y las dudas aparejadas al orden y permanencia del mundo fisico”. Esta nueva concepcién del orden moral y juridico, bajo laimprontade laantitesis, ibaa redundar inevitablemente en el paulatino debilitamiento de los preceptos juridicos 0 morales”, Si éstos no eran por physis, por fuerza tenfan que ser por ndmos, lo que valfa tanto como decir antinaturales © arbitrarios. Asi, las leyes de todo orden comenzaron.a ser consideradas como “preceptos arbitrarios”, ya de los débiles para contener a Jos fuertes, ya de los fuertes para aprovecharse del débil. Si, en cambio, eran por phyisis, eran contrarios al némos, a la ley positiva, asociada a la igualdad xy los derechos civicos, con lo que no pocas veces se llegaba ala conclusién de que el derecho segiin la naturaleza era el derecho del mas fuerte. Esta nueva manera de abordar las cosas desembocd en una profunda crisis que aleanzaba précticamente 7%, en esta Gpoca se habia extendido ms y mas una concepeiin mecanicisa de la natualeza tl como la proponia Demderito- la naturalezs regida por la necesidad ciegs y carente de Snes - 1o que impedia concebir el némas como resultado 0 coronscion de un plan de la naturaleza, seneillamente porque la haturalezacarece de planes e intenciones”, Cf, Calvo, ob. cit. pi 78. 7 Como sefiala Zeller, d la pugna entre ambos términos n0 se sigue siempre ‘nconicionalmente que a moral ola ley no se funden en la natualeza. Puede que, de hecho, la ley postiva quede “ala zaga de las ms severas exigensias de fa ley natural” Pero, l problema, como el mismo autor sefala, esque una ‘ver planteadas asi las cosas, el ataquea la ley positiva dificilmente se detendrt en ls casos en que asi sea sn aleanzar, luego, a aquellos en que no lo son. Cf Zeller, ob. cit, Pag. 77. ® Zeller, Ibid. pig, 78. 46 FELIPE SCHWEMBER AUGIER todos los aspectos de la vida”: la moral, lo juridico y las creencias religiosas, todas fueron perdiendo su fuerza que otrora arraigaba en el mismo espfritu de los ciudadanos. La nueva concepcién de la ley y la moral, consideradas como meros acuerdos 0 costumbres sin ningtin tipo de relacién con la naturaleza o en pugna con ella, fue dando paso al escepticismo respecto de la posibilidad de la justicia, al descrédito de la ley y dé las instituciones, al cuestionamiento del sistema politico y, por dltimo, a la negacién de toda norma, imposicisn o deber. Se lleg6 a considerar, finalmente, yen consonancia con el nuevo espfritu, prejuicio la creencia en Ia inviolabilidad de la ley 0 de los preceptos morales “y ‘mientras no se presentara una nueva fundamentacién de la vida moral, se permanecfa en el resultado negativo de que toda ley moral o juridica constituye una limitacién injusta y antinatural de la libertad humana.” En resumen, “Jos sofistas -todos- sostuvieron el cardcter no natural del ndmos entendido como el conjunto de normas establecidas por la costumbre o la ley"”8, Lo que implica, Por otra parte, que para la sofistica “la ley no sigue a la naturaleza, ni tiene analogia alguna con ella, sino que és el hombre el que la impone ala naturaleza’”®, quees en si misma el desorden, al contrario de la ley que sigue cabalmente este principio. Sin embargo, aunque todos admitieran el carécter ‘no natural del némos, cada uno lo hace desde una perspectiva distinta. Como se ha visto, algunos consideraron a ley y la moral como un instrumento de dominacién del més fuerte, otros como un acuerdo que pone limites ala libertad de cada individuo, etc. La ley y ln tradcion habian sido hasta entonces la nica autor moral; si yano se aceptaba la validez de esa autoridad, se ponia en entredicho la totalad de los deberes morales", Cif. Zeller, Ibi, Pég. 77 ™ Zeller, bid, Pai. 77 * Calvo, ob. cit. pe, 76. " Jaeger, Alabanca... Pg, 35 5 a7 LAJUSTICIA EN LOS SOFISTAS Y PLATON En este contexto, con la negacién de que exista, 0 pueda legar a existir, siquiera, alguna premisa de cardcter absoluto de la ley y la moral, “se ha preparado la escena para una controversia entre los dos puntos de vista..."”. A riesgo de simplificar, podemos afirmar™ que se distinguen tres posturas en esta controversia: la que esta por la superioridad del némos por sobre la pirysis, las que estén por la physis en detrimento del ndmos y una tercera de realismo prictico. 1.3.1, Los defensores del némos El pensamiento cientifico habia elaborado una explicacién racional del mundo, explicacién que va dejando progresivamente fuera del nuevo esquema el concurso de la divinidad. La causalidad ya no se atribuye tanto _a los designios de los dioses como a agentes fisicos o puramente naturales. Las inundaciones y terremotos ya no son consecuencia de la ira de Poseidén sino que de fenémenos climiticos, geolégicos, etc. Las teorias fisicas sobre el origen de la vida a partir de Ja materia inanimada son el antecedente inmediato de las teorias del progreso de la humanidad” Se abandona, por tanto, la vieja concepeién de la caida de la humanidad desde un estado original perfecto, en que no existian enfermedades y en el que “la bondad del hombre cortia pareja con la favorable abundancia de la Naturaleza”™, para dar paso a una nueva concepeién, concepcién que arranea del corazén del humanismo de los nuevos tiempos. En el concepto de estas nuevas teorias, el hombre_ha experimentado una penosa evolucién 0 progreso desde un estado original de salvajismo a un estado civilizado. 7 Guttie, ab. cit Vol. I, pig. 69 1 Bn esta clasiicacii seguimos a Guthrie, Cf. Ibid, pig. 69 y sigs. > thi. pig. 69. Thi. pig. TH 8 ) FELIPE SCHWEMBER AUGIER En un principio, se dice, los hombres vivian dispersos, sin vestidos ni casas y morfan en grandes cantidades presa de las fieras, del frio, de hambre, las enfermedades 0 de una mala alimentacién. Las penurias y dificultades les hicieron comprender que debfan agruparse para sobrevivir. El hecho mismo de asociarse los Ilevé a desarrollar el lenguaje y la comunicaci6n, la distribucién de las tareas, la domesticacién de animales, el cultivo de cereales y la agricultura en general; el descubrimiento del fuego hizo posible el trabajo de los metales, se construyeron casas y edificios, se adquirieron destrezas técnicas, se inventaron los medios de transporte que hicieron posible el comercio y la navegaci6n y la medicina hizo retroceder las enfermedades. Asimismo, el nuevo estado civilizado Hev6, necesariamente, al reconocimiento de los derechos y a élaborar leyes que mantuvieran el orden, En un comienzo, los impulsores de Jas nuevas idens atribufan el progreso experimentado por el hombre a algin dios, ya fuese éste desconocido como en Euripides, o Prometeo en Esquilo, que dota. los hombres de inteligencia 0 Jes ensefia destrezas técnicas. Pero fa salvadora intervencién de la divinidad va cediendo en favor de la Necesidad, del mero paso del tiempo y del propio esfuerzo y de la experiencia adquirida por los humanos como se advierte ya en S6foctes. En Demecrito, Esquilo, S6focles, Hipécrates y Protdgoras, encontramos los principales representantes de las nuevas ideas, y un elogio del progreso conquistado por el hombre gracias a su ingenio y al dominio de la técnica. Asi, en el Prometeo Encadenado, de Esquilo, Prometeo dice: “Pero escuchad los sufrimientos pasados de los mortales, cémo a ellos, que en otros tiempos desprovistos de entendimiento, yo los doté de él y los hice duerios de sus mentes... Elios (los mortales), a lo primero, o 50 LAJUSTICIA EN LOS SOFISTAS ¥ PLATON viendo, veian en vano; oyendo, no ofan. Semejantes a los fantasmas de los suefios, al cabo de siglos atin no habla cosa que por ventura no confundiesen. Ni sabtan de labrar con el ladrillo y la madera casas halagadas al sol. Debajo de la tierra habitaban a modo de dgiles hormigas en lo mas escondido de los antros donde jamds lega ta luz. No habia para ellos signo cierto, ni del invierno, ni de la florida primavera, ni del verano abundoso en frutos. Todo lo hactan sin tino, hasta tanto que no les ensefé yo las intrincadas salidas y puestas de los astros. Por ellos inventé los mimeros, ciencia entre todas eminente, y a composicién de las letras y la memoria, madre de las ‘musas, universal hacedora. Yo fui el primero que unciéalyugolas bestias jferas, que ahora doblan la cerviz a la cabezada, para que sustituyesen con sus cuerpos a los mortales en las més recias fatigas... Escucha lo que resta y mds admirards aiin; qué industrias y salidas ideé. Y sobre, esto: ;caian enfermos?, pues no habia remedio ninguno, manjar, ni pocién, ni bélsamo, sino que se consumianconlafaltademedicinas, antes de que yo les ensefiase las saludables preparaciones con que ahora se defienden de todas las enfermedades. Yo institut ademds FELIPE SCHWEMBER AUGIER los varios modos de adivinacién... Por Prometeo tienen los hombres todas estas artes”. Para esta concepci6n, el ndmos es una de las grandes conquistas de la humanidad. La ley y el orden son propias del nuevo estado civilizado, en contraposicién al antiguo en el que imperaba la ley del mas fuerte que es, a fin de cuentas, la “ley” de la Naturaleza, que el hombre debe dejar atras lo més pronto posible para su propio bien. El progreso y Ja ley comienzan, por tanto, desde el momento mismo en que el hombre se separa de la naturaleza, separacién que se glorifica como uno de los grandes triunfos de la humanidad, pues en ella no puede encontrar nada realmente bueno. Por tanto, una yuelta a la naturaleza es lo tiltimo que se quiere. Los partidarios de estas concepciones consideraban impensable y mas aun, absurdo concebir el ndmos como algo innato 0 como resultado de un mandato divino. Sien un. principio se atribuia el progreso y la superacién del estado de brutalidad original en el hombre gracias a la intervencién de un dios benefactor, a medida que se va avanzando en el desarrollo de estas teorias, el papel jugado por los dioses es cada vez menor hasta llegar a desaparecer para dar paso a la simple accidn dei tiempo y la propia experiencia del hombre. El némos es, precisamente, lo que lleva al hombre a superar ef estado de brutalidad originario y a remontarse or encima del nivel de las bestias. Por tanto, el hombre debe adherirse al ndmos y la orden que éste trae consigo, Una vuelta “atras”, a la naturaleza es lo ultimo que se desea pues implicaria renunciar a todo aquello que el hombre tan duramente ha conquistado. En el Protdgoras, Platén pone en boca de este sofista un discurso acerca de la justicia y de Ia superacién del § Esquilo, ragedias, Prometeo Encadenado, Editorial Losada, 1964, pig, 91- 22. 31 LA.JUSTICIA EN LOS SOFISTAS Y PLATON. estado natural del hombre. Protigoras es el mayor defer puede ser 0 no enseiiada. Sécrates duda que pucd ilsefiada, porque no puede decirse que’la politica es tina cuestién técnica, como la arquitectura o la armaduria que son cuestiones técnicas y pueden ser ensefiadas. En caso de discutirse este tipo de asuntos, se pregunta al arquitecto 0 al armero; en cambio, en las discusiones que tratan sobre Jos asuntos que conciernen al interés general de la ciudad, se pregunta y se acepta la opinién de cualguier_persona, de lo que se desprende que no es una cuestion técnica. que pueda ensefiarse. Ademis, dificilmente puede trasmitirse su conocimiento si los politicos mas prominentes no pueden inculear a sus hijos sus habilidades politicas. Como sefala Guthrie, Protégoras se halla agui en una gran dificultad, pues debe por una parte demostrar que la virtud puede enseffarse sin admitir que sea un don natural pues en es¢_ caso, su propio oficio no tendria objeto. Al mismo tiempo, se ha comprometido a defender “el principio subyacente a la democracia ateniense, de que las cuestiones de politica general no son en absoluto técnicas, de tal forma que el consejo de un herzero 0 un zapatero puede scr tan bueno como el de cualquier otro, io que pareceria implicar que las virtudes necesarias son innatas en todo hombre y no trasmitidas por la ensefianza™™. Protigoras offece dar una explicacién ya sea en forma de un mito, yaen forma de una explicacién razonada, a gusto de los oyentes. Se acuerda que dé su explicacion relatando un mito, en el que Protégoras conciliara habilmente ambas posiciones. En un principio, dice Protégoras, Hlegado el tiempo sefialado por el Destino para que nacieran los linajes mortales, fueron creados los hombres y los animales por los dioses en las entrafias de la tierra. “En el momento de sacarlos a la luz”, los dioses encomendaron a Epimeteo y Guthrie, ob cit pig. 74 92 FELIPE SCHWEMBER AUGIER Prometeo distribuir convenientemente las cualidades que habrian de poseer. Epimeteo le pidid a Prometeo el realizar i la tarea permitiéndole después dejar que la examinara. De esta forma, Epimeteo dio a unos la fuerza sin velocidad, a los més débiles la velocidad para huir de los ataques de otros animales mas fuertes, a otros, en fin les proveyé de medios de defensa o de pieles gruesas para guarecerlos del frio. Una vez concluida la tarea, Epimeteo advirtié que habia olvidado dotar de cualidades al hombre y que éste se hallaba desnudo y desprovisto de medios defensivos que aseguraran su sobrevivencia. En esto volvié Prometeo para inspeccionar la obra y dandose cuenta de la precaria situacion en que habia quedado el hombre y en vista del poco tiempo con que contaba, decidié robar la Sabiduria artistica de Hefesto y Atenea y se la dio al hombre. De esta manera, el hombre pudo sobrevivir gracias a su habilidad artistica construyendo casas, procurdndose vestides y ademés, por sei el dutivu anisnal inteligente se dedicé a construir altares y desarrollo el lenguaje. Sin embargo, continiia Protégoras, los hombres no vivian unos con otros sino que dispersos pues Prometeo no habfa tenido tiempo de entrar en la residencia de Zeus para robar la virtud politica. De esta manera, cada vez que los hombres se reunian se mataban unos a otros y Juego se dispersaban nuevamente con lo que los hombres comenzaban a desaparecer a causa de los ataques de los animales, el frio, las enfermedades, etc. Para evitar su extincién, Zeus ordené a Hermes que trajera a los hombres “el pudor y la justicia para que en la ciudad hubiera armonia y lazos creadores de amistad.” Hermes entonces pregunt6 a Zeus: “zHe de distribuirlas como las demas artes? Estas se hallan distribuidas dé la siguiente forma: un solo médico es suficienie para muchos profanos, y lo mismo ocurre con los demds artesanos :Es esta LA JUSTICIA EN LOS SOFISTAS Y PLATON Ia manera en que he de implantar la justicia y el pudor entre los humanos 0 he de distribuirlas entre todos?” “Entre todos -dijo Zeus- » que cada uno tenga su parte en estas virtudes; ya que si solamente las tuvieran algunos, las ciudades no podrian subsistir, pues aqui no ocurre como en las demds artes; ademds establecerds en mi nombre esta ley, a saber: que todo hombre incapaz de tener parte en la justicia y el pudor debe ser condenado a muerte, como una plaga de la ciudad”® Debemos suponer que el mito que Platén pone en boca de Protigoras refleja el propio pensamiento del sofista que, por lo demas, habia escrito un tratado sobre el Estado Original del Hombre, leit motiv de los defensores del némos. ‘A través de este relato, Protigoras sostiene que “en el mundo civilizado las virtudes politicas son poseldas or todés en algiin grado pero sin que esto signifique que ‘sean innatas en el hombre desde un prineipio™. Por esto, tratindose de cuestiones técnicas, como la arquitectura, se le pide opinién a los expertos (en este caso al arquitecto) y no 2 cualquier hombre. En cambio, en las cuestiones politicas, cualquiera puede opinar pues en la ciudad todos deben tener parte en la justicia y el pudor, pues de lo contrario la vida cfvica seria impensable. Asi, que alguien no tenga aptitudes artisticas, como talento para tocar la lira, no provoca la indignacién de los demas, més aiin, es frecuente que pocas personas tengan este talento; pero no es posible que alguien no tenga ninguna cualidad moral ni participe en ninguna medida de Ia justicia, pues en este caso estariamos frente a un individio que practicamente no forma parte de la humanidad, que no es humano, lo que es inaudito. © Proxigoras, 3226-4 Guthrie, ob. cit, vol Il, pig. 75 5a FELIPE SCHWEMBER AUGIER Para demostrar que ia virtud no es meramente un don natural o fruto del azar sino que es mds bien producto de! exfuerzo y la educacién, Protagoras dice que nadie podria, reprochar a una persona débil y pequefia su complexién fisiea, pues ésta es producto del azar; en cambio, prosigue, las faltas en la conducta referidas a virtudes 0 cualidades que si pueden ser ensefiadas y aprendidas, suscitan indignacién Y provocan castigos: “si faltan estas en un hombre y se ven sustituidas en I por los defectos contrarios, entonces si nacen la célera, los castigos y las exhortaciones. Y en esie orden de cosas se encuentran la injusticia, la impiedad y en general, todo lo que se opone a la virtud politica” El hecho de que se castigue este tipo de faltas revela la creencia general de que pueden ser aprendidas, pues el fin de la pena no es otro que el de corregir las conductas futuras y, en definitiva, de educar. “Nadie — dice -, en efeciv, ul castigar a un culpable tiene ante los ojos ni empiea como mévil el hecho mismo de la falta cometida = @ no ser que se entregue como un animal salvaje a una venganza irracional -; el que tiene el cuidado de castigar inteligentemente no lo hace a causa del pasado -porque Jo hecho esté ya hecho -, sino para prevenir el fituro, en orden a que nni el culpable ni los iestigos de su castigo caigan en la tentacién de volver a comenzar. Ahora bien: pensar asi es creer que la virtud se puede enseftar, al ser verdad que el castigo tiene como finalidad la intimidaci6n’®. Protigorai, 324 a « “No debe verse el concurs de los doses en el mito mis que como un recurso estiistico para amenizar el relato. Protagoras ara agndstico y como advices Guthrie en Ia expicacién razonada del mito, la aceién de ia dvinided esta sausente. La intervencién de los dioses representa mis bien el paso del tiempo, cl Destino o la Nevesidad. Cf, Guthrie ob. et. Vol. ll pig. 73. as LA JUSTICIA EN LOS SOFISTAS ¥ PLATON Para Protégoras, la virtud politica no es innata en el hombre, como ciertas destiézas téenicas. No podria decirse con Protégoras que la justicia y la ley estan indeleblemente inscritas en el alma del hombre. El hombre, mas biet acuerdo a Protigoras, descubre la necesidad de Ia just s6lo luego de grandes penalidades, descubtimiento este iiltimo que en ei mito esta simbolizado por los edictos dé Zeus". Y aunque el sentido de justicia no sea innato, para el sofista la justicia és, de alguna manera, accesible a todos los hombres a través de la educacién y no un don concedido-a uno pocos como sostenfa la tradicién aristocratica ateniense. De esta manera, Protagoras quiere decir que la naturaleza del hombre contiene la posibilidad det progreso a través del aprendizaje y el ejercicio de la justicia.. Solo as{ cobra verdaderamente sentido para Protagoras la labor educativa del sofista, una de las mas nobles por cuanto esta llamada, junto con otras instituciones, a inculear la areté y amantener la continuidad de 1a civilidad, tan duramente conquistada. EI sofista es para Protagoras, en buenas cuentas, agente y pilar de la civilizacién. 1.3.2. Los defensores de la physis Paralelamente a la concepcién de la ley como resultado de una convencién o acuerdo, se desarrollé la conviccién de que el derecho arranca de la piysis, esto es, “haturaleza, dondé encuentra su fundamento iiltimo y la faz6n de su fuerza obligatoria, La ley, en verdad, se encuentra en el orden de la naturaleza, del que el hombre participa. Sin embargo, en el marco de la controversia de si las cosas eran por physis 0 por némos, esta postura no podia ver en las leyes de ia polis el verdadero derecho. Para los defensores de la piysis, las prescripciones de la naturaleza 8 ical y totalmente distintas de las leyes hechas por Jos hombres y, més alin, se contraponen, de tal suerte que 0 se obedecen las leyes, el ndmas, o se siguen los dictados de la naturaleza y esto, en definitiva, se traduce en la concepcién de que “el hombre que obra naturalmente tiene s6lo una norma para sus obras, a saber, lo que encuentra 56 FELIPE SCHWEMBER AUGIER agradable 0 desagradable, productor de placer o dolor”. Antifonte, que ve en la ley un instrumento de dominacién de los gobernantes sobre los individuos, en su obra Sobre Ja Verdad ya hacia referencia al problema de la relacién entre physis - némos inclindndose definitivamente por la primera: es conveniente -diré- respetar la ley cuando haya testigos presentes y si no, seguir los preceptos de la naturaleza, puesto que quebrantar las leyes no conlleva dafio mientras ue ir en contra de los dictados de la naturaleza es siempre pernicioso, independientemente de que uno sea descubierto © no, puesto que el datio, si se va contra los dictados de la naturaleza, es real y no aparente como en el caso de la contravencién de la ley, que es artificial y esti en su mayor Parte en conflicto con la naturaleza, Pero la cinica posicién de Antifonte es ampliamente superada por la radical e incendiaria opinién de Calicles, el ‘mas ardoroso detensor de la phyisis en contra del nomos. Ninguna defensa de la phy'sis contra el ndmos es tan yirulenta y enconada como la que encarna la posicién de Calicles"* en el didlogo de Platén, el Gorgias. Y posiblemente, en la azarosa politica ateniense de la época, la posicidn de 7 Taege, La Telagia dels Primers Fsofes Gregs, Fondo de Calta Ezondmico, Mico 1998, pg 183 "Respectol problema des Caltesfe-ono un persons hitch ives seri 1) Que es cio y Paton fo ete para representa opiniones omens en época evade, po sport, al extemo. 2) Que e paronajee Sta, pero cncube a algin personae sontemporino ce Plato smo Slates 6 Citas. 3) Que ex ofestivament, une figura hstrica,armacion que se bas eas dtalsassleencis gus base Plt de los siecdenes de Calis, Come por

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