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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA

DE MÉXICO
FACULTAD DE ESTUDIOS
SUPERIORES- CUAUTITLAN

DEPTO. DE CIENCIA BÁSICA


LABORATORIO DE METODOLOGÍA
EXPERIMENTAL II

DETERMINACIÓN EXPERIMENTAL DE
LA ACIDEZ TOTAL EN PRODUCTOS
COMERCIALES O NATURALES.

EQUIPO 7:
LOPEZ VALDEZ ARELI
PATIÑO GODÍNEZ ANDREA
REYES SOLANO ABRAHAM

GRUPO. 2202
QUÍMICA INDUSTRIAL

PERÍODO ESCOLAR 2020-2


FECHA DE ENTREGA:
12/06/2020
OBETIVO GENERAL.
Aplicar una técnica analítica volumétrica para determinar el componente mayoritario ácido o base
de un producto comercial.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS.
a) Preparar la muestra del producto comercial dependiendo de sus características.
b) Realizar la valoración correspondiente, empleando el reactivo valorante estandarizado.
c) Realizar los cálculos estequiometricos correspondientes y expresar el resultado en las
unidades pertinentes.

MARCO TEÓRICO.
La valoración o titulación es un método de análisis químico cuantitativo en el laboratorio que se
utiliza para determinar la concentración desconocida de un reactivo a partir de un reactivo con
concentración conocida. Debido a que las medidas de volumen desempeñan un papel
fundamental en las titulaciones, se le conoce también como análisis volumétrico.
Un reactivo llamado “valorante” o “titulador”, de volumen y concentración conocida (una solución
estándar o solución patrón) se utiliza para que reaccione con una solución del analito, de
concentración desconocida. Utilizando una bureta calibrada para añadir el valorante es posible
determinar la cantidad exacta que se ha consumido cuando se alcanza el punto final. El punto
final es el punto en el que finaliza la valoración, y se determina mediante el uso de un  indicador.
Idealmente es el mismo volumen que en el punto de equivalencia—el número de moles de
valorante añadido es igual al número de moles de analito, algún múltiplo del mismo (como en
los ácidos polipróticos). En la valoración clásica ácido fuerte-base fuerte, el punto final de la
valoración es el punto en el que el pH del reactante es exactamente 7, y a menudo la solución
cambia en este momento de color de forma permanente debido a un indicador. Pueden usarse
muchos métodos para indicar el punto final de una reacción: a menudo se usan indicadores
visuales (cambian de color). No todas las titulaciones requieren un indicador. En algunos casos,
o bien los reactivos o los productos son fuertemente coloreados y pueden servir como
"indicador".
Debido a la naturaleza logarítmica de la curva de pH, las transiciones en el punto final son muy
rápidas; y entonces, una simple gota puede cambiar el pH de modo muy significativo y provocar
un cambio de color en el indicador. Hay una ligera diferencia entre el cambio de color del
indicador y el punto de equivalencia de la titulación o valoración. Este error se denomina error del
indicador. Por este motivo es aconsejable efectuar determinaciones en blanco con el indicador y
restarle el resultado al volumen gastado en la valoración.
La palabra "titulación" viene del vocablo latino titulus, que significa inscripción o título. La palabra
francesa titre, del mismo origen, significa rango o grado. La titulación es el procedimiento
utilizado para determinar el volumen de una solución que es necesario para reaccionar con una
cierta cantidad de otra sustancia. Las relaciones establecidas son equilibrio homogéneo o de
neutralización entre iones que se producen al estar en contacto con un ácido o con una base
para posteriormente obtener una sal. Una valoración ácido-base (también llamada volumetría
ácido-base, titulación ácido-base o valoración de neutralización) es una técnica o procedimiento
de análisis cuantitativo muy usada, que permite conocer la concentración desconocida de una
disolución de una sustancia que pueda actuar como ácido o base, neutralizándolo con una base
o ácido de concentración conocida. Una titulación o valoración es, por definición, la
determinación del grado o concentración de una disolución con respecto a agua con pH 7 (que
es el pH del H2O pura en condiciones estándar).
En una titulación o valoración, tanto la sustancia patrón como el analito deben estar en fase
líquida (o en disolución). Si la muestra no es un líquido o una disolución, debe ser disuelta. Si el
analito está muy concentrado en la muestra a analizar, suele diluirse. Aunque la amplia mayoría
de las titulaciones se llevan a cabo en disolución acuosa, pueden usarse otros disolventes
como ácido acético o etanol con igual finalidad, para determinados análisis. Una cantidad
medida de muestra se coloca en un frasco donde se disuelve y se diluye si es necesario. El
resultado matemático de la valoración puede calcularse directamente mediante la cantidad de
valorante medida. Cuando la muestra ha sido disuelta o diluida previamente a la valoración, la
cantidad de disolvente utilizado para disolver o diluir debe ser bien conocida (generalmente es
un coeficiente entero) para poder considerarlo en el resultado matemático de la valoración de la
muestra original. Muchas valoraciones requieren un cierto control del pH de la reacción. Para
ello, se usan disoluciones amortiguadoras añadidas en el frasco de la disolución a analizar para
mantener el pH de la solución. En otros casos se debe enmascarar un cierto ion: esto es
necesario cuando hay dos reactivos en la muestra que pueden reaccionar con la sustancia
patrón y solo queremos valorar uno de ellos, o bien cuando la reacción puede ser inhibida o
alterada por la presencia de ese ion. Se procede añadiendo otra disolución a la muestra para
enmascarar o secuestrar el ion no deseado, mediante la formación de un enlace débil con él o
incluso formando una sustancia insoluble.

Las valoraciones se representan mediante curvas de valoración, en las que suele representarse
como variable independiente el volumen añadido de disolución estándar, titulante o patrón,
mientras la variable dependiente es la concentración del analito en la etapa correspondiente de
valoración (en una valoración ácido-base es generalmente el pH de la disolución, que cambia
según la composición de las dos disoluciones). En el caso de las valoraciones ácido-base, las
curvas de valoración reflejan la fuerza del ácido y de la base correspondiente. Por ejemplo, en
una valoración de ácido fuerte con una base débil, la curva de valoración será relativamente lisa,
aunque muy escarpado para puntos cerca el punto de equivalencia de la valoración. En este
caso, pequeños cambios en el volumen del valorante producen cambios grandes del pH cerca
del punto de equivalencia. En este caso, una amplia gama de indicadores sería apropiada (por
ejemplo el tornasol, la fenolftaleína o el azul de bromo timol). Por otro lado, si uno de los
componentes de una valoración ácido-base es un ácido débil o una base débil, y el otro es un
ácido fuerte o una base fuerte, la curva de valoración es claramente irregular cerca del punto de
equivalencia (y el pH no cambia "tanto" con la adición de pequeños volúmenes de valorante). La
curva de valoración correspondiente a una valoración de una base débil con un ácido fuerte se
comporta de modo análogo, obteniéndose una disolución ácida en el punto de equivalencia. En
este caso, indicadores como el naranja de metilo o el azul de bromotimol se utilizan
habitualmente. Por otro lado, las valoraciones ácido-base en las que los componentes son una
base y un ácido débil, son de naturaleza bastante irregular. Debido a la naturaleza de tales
valoraciones, no hay ningún indicador químico apropiado, y por ello a menudo se utiliza el pH
metro.

Las valoraciones se clasifican por el tipo de objeto a analizar:


 Valoraciones ácido-base: basadas en la reacción de neutralización entre el analito y una
disolución de ácido o base que sirve de referencia. Para determinar el punto final, usan
un indicador de pH, un pH-metro, o un medidor de conductancia.
 Valoraciones redox: basadas en la reacción de oxidación-reducción o reacción
redox entre el analito y una disolución de oxidante o reductor que sirve de referencia.
Para determinar el punto final, usan un potenciómetro o un indicador redox aunque a
veces o bien la sustancia a analizar o la disolución estándar de referencia tienen un color
suficientemente intenso para que no sea necesario un indicador adicional.
 Valoraciones de formación de complejos o complexometrías: basadas en la reacción de
formación de un complejo entre el analito y la sustancia valorante. El agente
quelante EDTA es muy usado para titular iones metálicos en disolución. Estas
valoraciones generalmente requieren indicadores especializados que forman complejos
más débiles con el analito. Un ejemplo es Negro de eriocromo T para valoración de
iones calcio, magnesio o cobre (II).
 Valoraciones de precipitación: Son aquellas basadas en la precipitación. Uno de los tipos
más habituales son las Argentometrías: precipitación de aniones como
los halógenos ( F-, Cl-, Br-, I-) y el tiocianato (SCN-) con el ion plata. Ag+. Esta titulación
está limitada por la falta de indicadores apropiados.
NaX(ac) + AgNO3(ac) → AgX(s) + NaNO3(ac) donde X = F-, Cl-, Br-, I-, SCN-

Hay diferentes métodos para determinar el punto final o punto de equivalencia:


 Indicadores: Son sustancias que cambian de color en respuesta a un cambio químico.
 Indicador de pH o indicador ácido-base: un indicador ácido-base (como
la fenolftaleína) cambia de color dependiendo del pH del medio.
 Indicador Redox: una gota de disolución de indicador es añadida al principio de la
titulación o valoración; cuando el color cambia, se ha alcanzado el punto final.
 Potenciómetro. Son instrumentos que miden el potencial de electrodo de la disolución. Se
usan para valoraciones redox; el potencial del electrodo de trabajo cambiará bruscamente en
el punto final.
 Medidor de pH o pH-metros. Son potenciómetros que usan un electrodo cuyo potencial
depende de la cantidad de ion H+ presente en la disolución. Es un ejemplo de un electrodo
de ion selectivo que permite medir el pH de la disolución a lo largo de la valoración. En el
punto final, cambiará bruscamente el pH medido. Puede ser un método más preciso que el
uso de indicadores, y es fácil de automatizar.
 Cambio de color. En algunas reacciones, la disolución cambia de color sin presencia de
indicador. Es frecuente en valoraciones redox, por ejemplo, cuando los diferentes estados de
oxidación de productos y reactivos poseen diferentes colores.
 Precipitación: Si se forma un sólido en la reacción, y luego precipita. Un ejemplo es la
reacción entre Ag+ y Cl- que forma una sal muy insoluble, AgCl. Esto dificulta determinar con
precisión el punto final. Por ello, a veces se prefiere hacer una titulación inversa.

La acidez de una sustancia es el grado en el que es ácida. El concepto complementario es la


basicidad.
La escala más común para cuantificar la acidez o la basicidad es el pH, que sólo es aplicado
para disolución acuosa. Sin embargo, fuera de disoluciones acuosas también es posible
determinar y cuantificar la acidez de diferentes sustancias.

En alimentos, el grado de acidez indica el contenido en ácidos libres. Se determina mediante una
valoración, volumetría o titulación, con un reactivo básico. El resultado se expresa, en aceites por
el % en ácido oleico, en el zumo de frutas es el % en ácido cítrico, en leche o productos
derivamos del mismo es el % en ácido láctico.
Desde un punto de vista fisicoquímico, la leche es una mezcla homogénea de un gran número
de sustancias. La leche que se utiliza principalmente en la elaboración de productos lácteos es la
leche de vaca, y se compone en un 87% de agua, siendo el resto grasas, proteínas, lactosa,
sales minerales, vitaminas, enzimas y minerales. La composición de la leche varía en función de
la raza, la edad, la alimentación, el método de ordeño y le estado de salud del animal. La leche
se puede descomponer fácilmente por los microorganismos que contiene en su forma natural,
pero la tecnología y la bacteriología la han hecho mucho más estable e inocua.

La leche presenta, normalmente, un pH comprendido entre 6,5 y 6,8, siendo la acidez total
debida a una suma de tres fuentes fundamentales y a una cuarta de carácter eventual que son:
o Acidez proveniente de la caseína.
o Acidez debida a las sustancias minerales y a la presencia de ácidos orgánicos.
o Acidez proveniente de reacciones secundarias debidas a los fosfatos.
o Acidez debida, principalmente, al ácido láctico y a otros ácidos procedentes de la
degradación microbiana e la lactosa en las leches en proceso de alteración.

A nivel industrial, se consideran dos tipos de acidez. Se tiene la acidez natural y la acidez
desarrollada. La acidez natural se debe a la composición natural del alimento o sustancia. La
acidez desarrollada se debe a la acidificación de la sustancia ya sea por procesos térmicos,
enzimáticos o microbiológicos.
Las tres primeras determinan la acidez natural de la leche, mientras que la última determina la
acidez desarrollada de la leche, y la suma de ambas compone la acidez total de la leche.
En general, la medida de la acidez de la leche es una medida indirecta de su calidad sanitaria.
Se define la acidez en las leches naturales, certificadas, higienizadas y esterilizadas, como el
contenido aparente en ácidos expresado en g de ácido láctico contenidos en100 mL de leche.

g de Ácido láctico
% A= x 100 Ácido láctico →C 3 H 6 O 3
100 mL de leche

La determinación de la acidez sigue un procedimiento correspondiente al descrito en la norma


UNE 34-100 del instituto de racionalización del trabajo. La acidez permitida en la leche es de 0.2
% en ácido láctico.
Cuando un ácido y una base reaccionan, se produce una reacción; reacción que se puede
observar con un colorante. Un ejemplo de colorante, y el más común, es la fenolftaleína
(C20H14O4), que cambia de color a rosa cuando se encuentra presente una reacción ácido-base.
El agente titulante es una base (NaOH), y el agente titulado es el ácido láctico o la sustancia que
lo contiene (en nuestro caso el Yakult).

SELECCIÓN DE VARIABLES.
 Variable independiente: volumen añadido de disolución estándar (mL).
 Variable dependiente: concentración del analito (pH).

HIPÓTESIS.
Al valorarse una muestra comercial (Yakult) con una disolución estandarizada (NaOH), se
conocerá la concentración real de la misma (C3H6O3).
METODOLOGÍA
Materiales:
•2 Vasos de precipitados
•1 Propipeta
•1 Bureta 25 mL
•1 Soporte universal
•1 Matraces Erlenmeyer 250 mL
•1 Pipetas volumétricas 10 mL
•1 Pinzas dobles para bureta

Reactivos:
• Hidróxido de sodio (NaOH) previamente preparado y estandarizado con KC 8H5O4
• Indicador ácido base: Fenolftaleína (C 21H16O4)

Desarrollo experimental:
Valoración de la solución de C3H6O3:
a) Succionar con ayuda de una propipeta y medir con una pipeta volumétrica una alícuota
de 10 mL de la muestra (Yakult), depositarla en un matraz Erlenmeyer de 250 mL.
b) Agregar 2 gotas de indicador fenolftaleína.
c) Llenar una bureta de 25 mL con la solución, previamente preparada y estandarizada con
KC8H5O4, de NaOH dejando que resbale a través de las paredes de la misma para evitar
la formación de burbujas (“amielando”); o bien, colocar un vaso debajo de la punta de la
bureta y abrir la llave para dejar correr la solución y así dejar que salga el aire contenido
en las burbujas que se lleguen a formar en la bureta (“purgar”).
d) Colocar las pinzas dobles para bureta en un soporte universal, en un lado de ellas
sostener la bureta y debajo de esta colocar un fondo blanco (tela, hoja, azulejo, etc.).
e) Realizar la valoración a mano cruzada (la mano izquierda controla el flujo de salida al
manipular la llave de paso de la bureta y la mano derecha toma el cuello del matraz
Erlenmeyer para agitarlo moviéndolo circularmente en contra de las manecillas del reloj
y así homogeneizar la valoración, el uso de las manos puede ser al revés si la persona
es surda).
f) Dejar caer, gota a gota, la solución de NaOH al matraz que contiene la muestra de
Yakult que se desea valorar, hasta que el indicador vire de incoloro a un ligero color rosa
pero sin llegar al magenta. En este punto de ha llegado al final de la titulación.
g) Realizar la valoración por triplicado.
h) Anotar, en la tabla de resultados, el volumen gastado de NaOH de cada una de las 3
titulaciones.
i) Hacer los cálculos correspondientes para conocer la concentración real de C 3H6O3
presente en la muestra (Yakult).
RESULTADOS.

Volumen (gasto) del valorante al punto de


equivalencia/vire (NaOH).
1.-
2.-
3.-
Promedio.

Concentración Volumen Volumen C2= C1V1/V2 Concentración del


del valorador (promedio del (alícuota) valorando
(NaOH). gasto) del del (C3H6O3).
valorador al valorando
punto de (C3H6O3).
equivalencia/
vire (NaOH).

C1 V2 V2 C2
Valoración
de C3H6O3
con NaOH.

X mol C3 H 6 O 3 90.08 g C 3 H 6 O3
0.01 L alícuota ( Yakult ) | 1 Ldisol . | 1 mol
=X g C 3 H 6 O 3

X g C 3 H 6 O3
x 100=%A
100 mLde muestra (Yakult )

BIBLIOGRAFÍA.
1) Vega, A. E., Verde, C. R. (2003). La teoría y la práctica en el Laboratorio de Química Analítica.
Universidad Autónoma Metropolitana (Unidad Iztapalapa), México.
2) Skoog, D. A. West, D.M., Holler, F.J. (1995). Química Analítica. Mc Graw Hill, México.
3) Morrison, R. T. (1986). Química Orgánica, Fondo Educativo Interamericano, México.
ANEXOS.
La reacción de valoración para el ácido láctico es la siguiente:
C 3 H 6 O 3+ NaOH → C3 H 5 O 3 Na+ H 2 O ( neutralización )
+¿(ionización) ¿

C 3 H 5 O3 Na→ C 3 H 5 O−¿+Na ¿
3
−¿( hidrólisis)¿
O → C H O +OH
C 3 H 5 O−¿+H
2 3 6 3 ¿
3

Hojas de seguridad:

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