Está en la página 1de 36

Introducción a las ciencias (ISCR)

introducción a las ciencias

La actividad científica comporta un modo de aproximarse a la naturaleza, una manera de


cuestionar al universo. Como hay realidades diversas, también hay preguntas distintas dentro
de la gran pregunta sobre la verdad de lo que hay. En esta asignatura se ofrece una visión de
conjunto de las principales aproximaciones a la realidad multiforme: las ciencias más
significativas, con sus cuestiones, límites y desafíos.

Departamento: Filosofía
Semestre: Primero
Número de créditos ECTS: 2
Profesor: D. Javier Sánchez Cañizares, Javier Novo, Javier Bernácer e Ignacio Sols
Idioma en que se imparte: Castellano

Programa

CAPÍTULO 1. INTRODUCCIÓN GENERAL A LAS CIENCIAS (JAVIER SC)

1. EL PROCESO DE DIFERENCIACIÓN DE LAS CIENCIAS

2. CIENCIA, FILOSOFÍA Y RELIGIÓN

3. LOS RETOS DE LA CIENCIA ACTUAL

4. ORGANIZACIÓN DE LA ASIGNATURA

CAPÍTULO 2. INTRODUCCIÓN A LAS MATEMÁTICAS (IGNACIO SOLS)

1. LA MATEMÁTICA ANTIGUA

2. MATEMÁTICA EN EL ISLAM Y EN OCCIDENTE HASTA EL SIGLO XVIII

3. LA MATEMÁTICA DEL SIGLO XIX

4. LA MATEMÁTICA DEL SIGLO XX

5. LAS MATEMÁTICAS EN LA ACTUALIDAD

CAPÍTULO 3. INTRODUCCIÓN A LA FÍSICA (JAVIER SC)

1. LA FÍSICA COMO ESTUDIO DE LA NATURALEZA

2. LA FÍSICA EN LA EDAD MEDIA

3. DE LA ASTRONOMÍA MATEMÁTICA A LA ASTRONOMÍA FÍSICA

4. LAS LEYES DE NEWTON Y LA GRAVITACIÓN UNIVERSAL

5. LA TERMODINÁMICA
6. EL PROBLEMA DE LA UNIFICACIÓN CON LAS ONDAS, LA ELECTRICIDAD Y EL MAGNETISMO
EN EL SIGLO XIX

7. LA TEORÍA DE LA RELATIVIDAD

8. LA MECÁNICA CUÁNTICA

9. EL PROBLEMA DE LA MEDIDA

10. ¿HACIA DÓNDE SE DIRIGE LA FÍSICA?

CAPÍTULO 4. INTRODUCCIÓN A LA BIOLOGÍA (JAVIER NOVO)

1. LAS CARACTERÍSTICAS PECULIARES DE LO VIVO

1.1. Los seres vivos muestran un alto grado de organización.

1.2. Metabolismo y uso de energía

1.3. Crecimiento y desarrollo

1.4. Reproducción y transmisión de la información

1.5. Movimiento

1.6. Homeostasis y regulación

1.7. Evolucionabilidad

2. LOS SERES VIVOS SE AGRUPAN EN DISTINTOS NIVELES DE ORGANIZACIÓN

2.1. La célula constituye el nivel elemental de organización de los seres vivos

2.2. Muchos seres vivos son organismos formados por varias células

2.3. Los organismos forman parte de poblaciones y ecosistemas

3. LOS SERES VIVOS MUESTRAN UNA GRAN DIVERSIDAD

3.1. La historia evolutiva de la biosfera ha generado una enorme biodiversidad

3.2. Los seres vivos pueden agruparse según sus características

3.3. El estudio de la Biología incluye distintas ramas

CAPÍTULO 5. INTRODUCCIÓN A LAS NEUROCIENCIAS (JAVIER BERNÁCER)

1. INTRODUCCIÓN

2. PRINCIPALES TÉCNICAS EMPLEADAS EN LA INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA

2.1. Técnicas para estudiar la morfología del sistema nervioso


2.2. Técnicas para estudiar la función del sistema nervioso

3. TÉCNICAS DE RECIENTE DESARROLLO PARA EL ESTUDIO DEL CEREBRO

4. LOS GRANDES RETOS DE LA NEUROCIENCIA EN EL SIGLO XXI

Metafísica (ISCR)

metafísica

La filosofía primera o metafísica es, desde los primeros pensadores griegos, la cumbre del
saber que le es posible al hombre adquirir, y, como la actividad más alta que el hombre puede
realizar se cifra precisamente en el conocimiento, es también aquello que constituye el
ejercicio supremo de la vida humana.

La metafísica es el saber de la totalidad de lo real por sus causas últimas y los primeros
principios. Hacia ella se encaminan todos los conocimientos que podemos alcanzar, desde el
conocimiento sensible y el sentido común hasta las más laboriosas teorías científicas. Y en ella
se descubre su sentido y el valor propio de cada uno de ellos. Por eso en el ejercicio concreto
de abrir los ojos y abrirse a la totalidad de la realidad comparecen a la vez lo más alto y nuestra
mejor posibilidad: se alcanza a vivir según la sabiduría.

Esta asignatura presenta al alumno un esquema suficientemente rico y completo de los temas
que la filosofía occidental ha desarrollado a lo largo de los siglos y de su articulación interna. El
estudio y la valoración de cada uno de los temas, tiene como objetivo proporcionar al alumno
la íntima familiaridad con las cuestiones, problemas y soluciones que la sabiduría, tal como ha
sido ejercida por la concreta vida intelectual de los grandes maestros de la historia, puede
proporcionar. A la vez se intentará que cada alumno obtenga una experiencia personal en la
búsqueda de la verdad y en la alegría por su descubrimiento, mientras adquiere los conceptos
fundamentales con los que los hombres han pensado los principios, las causas y los sentidos de
la realidad en su totalidad, en la que se incluyen tanto el ser humano como Dios.

Descripción: Asignatura que se imparte en el Bachillerato de Ciencias Religiosas


Departamento: Filosofía
Curso: 1º
Semestre: Primero
Número de créditos ECTS: 4
Profesor: Enrique Moros
Idioma en que se imparte: Castellano

Programa

TEMA I: ¿QUÉ ES LA METAFÍSICA?

1. Los nombres de la metafísica. 2. Definición real. 3. El hombre y el saber. 3.1. El saber natural.
3.2. El concepto de teoría. 3.3. La metafísica como ciencia. 3.4. Las ciencias y la metafísica. 4.
¿Quién es sabio? 4.1 La metafísica como sabiduría. 4.2. La utilidad de la metafísica. 4.3. La
metafísica como ciencia de los hombres libres. 5. La metafísica como teología.
TEMA 2: EL ENTE, PUNTO DE PARTIDA DE LA METAFÍSICA.

1. El inicio de la metafísica. 1.1. El descubrimiento de Parménides. 1.2. El progreso de la


metafísica. 1.3. La metafísica de Platón. 2. La metafísica de Aristóteles. 2.1. El conocimiento
intelectual. 2.2. La realidad de las ideas y el concepto de acto. 2.3. La distinción entre el acto
intelectual y el acto real. 2.4. El ente se dice de muchas maneras. 3. El concepto de ente. 3.1.
Analogía de la noción de ente. 3.2. La esencia, modo de ser de los entes. 3.3. El ser como acto
del ente. 3.4. El ser, acto intensivo. 3.5. Características del concepto de ente

TEMA 3: LOS PRIMEROS PRINCIPIOS.

1. El principio de no-contradicción. 1.1. Características del principio de no-contradicción. 1.2. El


primer principio acerca del ente. 1.3. Evidencia de este principio y su defensa «ad hominem».
1.4. Formulaciones del principio de no-contradicción. 1.5. El primer principio como ser. 2.
Otros principios primeros. 2.1. El principio de identidad. 2.2. El principio de causalidad. 2.3. El
principio de tercero excluido. 2.4. El principio de razón suficiente

TEMA 4: LOS TRANSCENDENTALES

1. La metafísica como filosofía de los transcendentales. 1.1. El concepto de transcendental. 1.2.


El ser y los transcendentales. 1.3. Los transcendentales como explicitación y despliegue del ser.
1.4. Los transcendentales son coextensivos con el ser. 1.5. La convertibilidad de los
transcendentales. 2. Los transcendentales absolutos. 2.1. «Cosa» o «res». 2.2. Uno. 2.3. Algo o
«aliquid». 2.4. Acto de ser, ser. 3. Realidad y transcendentales. 3.1. ¿Qué es real? ¿Qué es
ente? 3.2. El alma humana es lo real por excelencia. 3.3. El despertar a la realidad. 3.4. La
inteligencia y el ente. 3.5. La necesidad de la consideración metafísica del ser material. 3.6. Las
razones de la metafísica de los transcendentales. 3.7. La consideración transcendental de la
realidad. 4. Los transcendentales relativos. 3.1. La verdad. 3.1.1. La razón de lo verdadero: la
referencia a una inteligencia. 3.1.2. El ser como fundamento y causa de la verdad. 3.1.3. La
definición de verdad. 3.1.4.La convertibilidad de ser y verdad. 3.1.5. La verdad en el intelecto
teórico y en el práctico. 3.1.6. La inteligencia divina y la verdad de las cosas. 3.1.7. La realidad
está situada entre dos entendimientos. 3.2. El bien. 3.2.1. La convertibilidad entre ser y bien:
posturas contrarias. 3.2.2. La razón del bien. 3.2.3. Bien y fin: la estructura del deseo. 3.2.4. El
argumento para la convertibilidad. 3.2.5. Argumentos para la no convertibilidad entre ser y
bien. 3.2.6. La diferencia entre las razones propias del ser y del bien. 3.2.7. El bien
transcendental y el bien moral. 3.2.8. El bien como origen y el bien como fin. 4. La belleza. 5. El
orden de los trascendentales. 6. Dios y los transcendentales. 6.1. Dios como causa del ente.
6.2. Los transcendentales como nombres divinos. 6.3. Dios como «Ipsum esse subsistens». 6.4.
Dios es la Verdad. 6.5. Dios es el Bien. 6.6. Dios como causa. 6.7. Los transcendentales se dicen
primariamente de Dios. 6.8. La relación entre el ser común y Dios.

TEMA 5: SUSTANCIA Y ACCIDENTES.

1. Las categorías. 1.1. Análisis del movimiento. 1.2. El lenguaje y la realidad. 1.3. La experiencia
de uno mismo. 1.4. El principio de contradicción y las categorías. 2. Naturaleza de la sustancia
y los accidentes. 2.1. La sustancia. 2.2. Los accidentes. 3. El ser, acto propio de la sustancia. 3.1.
El compuesto de sustancia y accidentes. 3.2. El conocimiento de la sustancia y los accidentes.

TEMA 6: LOS PREDICAMENTOS.

1. Noción de predicamento. 2. Los nueve géneros de accidentes. 2.1. El orden entre los
accidentes. 2.2. La cualidad. 2.3. La relación. 2.3.1. Elementos de la relación real. 2.3.2.
Importancia de las relaciones. 2.3.3. Tipos de relaciones reales. 2.3.4. Las relaciones de razón.
3. El ser sustancial. 3.1. Noción de sujeto subsistente. 3.2. Propiedades del sujeto subsistente.
3.3. Elementos que componen el supuesto. 3.4. Nombres que designan al sujeto subsistente.
3.5. La distinción naturaleza-sujeto. 3.6. El ser constitutivo del supuesto.

TEMA 7: LA ESTRUCTURA DE ACTO Y POTENCIA EN EL ENTE.

1. Nociones de acto y potencia. 2. Clases de acto y potencia. 2.1. La prioridad del acto. 2.2.
Acto y potencia en cuanto principios constitutivos. 3. Potencia y posibilidad.

TEMA 8: LA CAUSALIDAD

1. La metafísica de la causa. 2. El concepto de causa. 2.1. La idea de subordinación. 2.2. La


interpretación empirista de la causalidad. 2.3. La demostración del principio de causalidad. 3.
“Causa per accidens”. 4. Los diferentes tipos de causalidad. 4.1. Las causas material y formal.
4.2. Causa eficiente. 4.2.1. Ampliación del concepto de causa eficiente. 4.2.2. El ocasionalismo.
4.3. Nuestra experiencia de la causalidad. 4.4. El concepto de causa instrumental. 4.5. Causa
final. 4.5.1. El orden de la intención y el orden de la ejecución. 4.5.2. La diferencia entre
eficiencia y finalidad. 4.5.3. Tendencia y finalidad: la realidad del deseo. 4.5.4. Todo ente actúa
por un fin. 4.5.5. El concepto de azar. 4.6.Causar y producir.

Teología natural (ISCR)

teología natural

La teología natural en el contexto de los saberes filosóficos y de la vida humana. La necesidad


de la demostración de la existencia de Dios. La posibilidad de la demostración frente al
agnosticismo y el ateísmo. Análisis de las demostraciones de la existencia de Dios: argumento
ontológico, las cinco vías y los argumentos morales. Análisis de nuestro lenguaje sobre Dios:
teología positiva y teología negativa. La esencia divina. Demostración de los atributos
entitativos divinos. Análisis del obrar divino. Dios y el mal.

Descripción: Asignatura que se imparte en el Bachillerato de Ciencias Religiosas


Departamento: Sagrada Escritura
Curso: 1º
Semestre: Primero
Profesor: D. Enrique Moros
Idioma en que se imparte: Castellano

Programa

Tema 1: La teología natural en el universo del saber

1. Metafísica y teología natural

2. Dios y la vida humana

3. La fe y la razón

4. La plenitud humana consiste en la búsqueda de Dios


5. Los nombres de esta ciencia

6. Conocimiento espontáneo de la existencia de Dios

7. La necesidad de la articulación teórica de nuestro conocimiento de Dios

8. La filosofía y la teología

Tema 2: La demostración de la existencia de Dios

1. El ontologismo.

2. Agnosticismo:

3. Ateísmo

4. Demostraciones de la existencia de Dios

1. Argumento a simultaneo:

2. Argumentos a posteriori:

3.. Argumentos morales:

Tema 3: Los nombres divinos

Tema 4: Los atributos divinos

1. Predicados entitativos divinos

1.1. La simplicidad divina

1.2. Perfección

1.3. Infinito

1.4. Unidad

1.5. Inmenso y ubicuo

1.6. Inmóvil

1.7. Omnipresente

1.8. Bondad suprema

1.9. Belleza

1.10. Eterno

1.11. Trascendencia divina:


2. Los atributos operativos divinos

2.1. La potencia activa infinita

2.2. Omnipotencia

2.3. Inteligencia

2.4. Voluntad

2.5. Creación y providencia

2.6. El problema del mal

Antropología filosófica (ISCR)

pensador

La antropología, iniciada como ciencia a principios del s. XX, ha estado de moda sobre todo a
fines de ese siglo, y lo sigue estando a inicios del s. XXI, hasta el punto de que ha pasado a ser
la disciplina reina de la filosofía. Y eso es muy pertinente, porque en verdad lo debe ser. No
obstante, los enfoques antropológicos más usuales están ceñidos en exceso, o bien al cuerpo
humano (antropología física, cuando no naturalismos, biologismos, etc.), o sobre lo cultural
que el hombre produce o puede producir (antropología cultural), o al alma y sus potencias
(antropología racional o filosófica), pero no a la persona (a esta antropología se le puede
llamar trascendental). En esta Asignatura repasamos los diversos aspectos corpóreos de la
naturaleza humana, las inmateriales, las diversas manifestaciones éticas y artísticas humanas y
se termina con un acceso a la intimidad personal y a su destino personal.

'Persona' y 'espíritu' son sinónimos. En cambio, 'persona' y 'hombre' no lo son. La persona


humana no se reduce a la naturaleza humana, es decir, la persona no equivale a ser hombre o
mujer, sino que tener una naturaleza masculina o femenina es de la persona, pero no es la
persona. Ser persona no es ser hombre, porque existen personas que no lo son (ej. las
personas divinas y las angélicas). Ser persona humana es más que ser hombre. El hombre es un
compuesto de alma y cuerpo. La persona no es un compuesto de alma y cuerpo, aunque
disponga de alma y cuerpo.

Esta antropología es búsqueda, porque el futuro histórico y metahistórico que uno espera
depende del saber personal que uno alcanza. La persona es la cumbre de la realidad, y aunque
esa realidad es íntima a cada quién, nos es desconocida en gran medida. A distinción de otras
ciencias, en la investigación de tal antropología se pone enteramente en juego el propio
investigador y, en consecuencia, también la propia felicidad y destino personales. Quien no
arriesga así en la antropología que realiza, en rigor, no hace una antropología personal (hará
tal vez una antropología cultural, racional, etc., pero, en cualquier caso, impersonal). Buscar
saber acerca de la persona humana es, a la par, no sólo intentar saber la persona que se es,
sino también y principalmente la que se será, es decir, alcanzar a saber qué persona se está
llamada a ser, porque mientras vivimos no acabamos de ser la persona que seremos, si
libremente aceptamos llegar a serla. Desde luego que ni serlo y ni llegar a saberlo son un
asunto necesario, pero es obvio que lo libre es superior a lo necesario. Dado que la persona es
la realidad más alta, y debido a que la antropología accede a Dios de un modo más alto que los
demás saberes, pues llega personalmente al Dios personal, se puede adelantar la tesis de que
la antropología es la parte más alta de la filosofía.

Para alcanzar el saber personal no es suficiente con acudir a la historia de la génesis del ser
humano, es decir, a lo que se suele denominar antropología evolutiva. Tampoco basta con
atender a la historia de las ideas en torno al hombre, esto es, a la historia de la filosofía. Ni es
suficiente aún con analizar las diversas facultades y funciones de la naturaleza humana, a
saber, las corporales (los sentidos, apetitos, sentimientos sensibles, etc.) -aún descubriendo lo
distintivo de ellas respecto de las animales-, enfoque que se va venido a llamar de antropología
física. Tampoco resaltando las peculiaridades de las potencias humanas que no son sensibles,
(la inteligencia y la voluntad), a lo cual se ha ceñido en mayor medida la tradicionalmente
llamada filosofía del hombre o antropología filosófica. Ni siquiera es apropiado reunir de modo
sistémico las diversas facetas de lo manifestativo humano (ética, trabajo, lenguaje, sociedad,
cultura, técnica, economía, política, etc.) coordinándolas y compatibilizándolas entre sí,
subordinando las inferiores a las superiores (asunto omitido de ordinario), a lo que se llama
usualmente antropología cultural.

Para alcanzar el ser personal que se es, es menester notar, en primer lugar, que cada persona
es distinta, por superior, a lo común de la naturaleza humana que tiene a su disposición. Ese
notar que se es persona se alcanza con un conocer personal, es decir, con nada inferior a la
propia persona, como pueden ser los sentidos, la razón, etc., sino con un conocer solidario a la
propia persona como ser personal cognoscente. En segundo lugar, es menester notar que una
persona es novedosa e irreductible a las demás. Todo hombre es persona y sabe que lo es,
aunque lamentablemente no todo hombre se encamina a la búsqueda de su propio sentido
personal. De manera que el ser personal es una realidad superior a la que describe la expresión
de animal racional. Si la persona es un ser abierto personalmente, y no tiene el sentido
completo de su ser en su mano, para alcanzarlo no debe buscarlo en las realidades
impersonales o en la nada, sino en las personas. No obstante, tampoco las demás personas
creadas tienen el sentido de tal persona en su mano, sencillamente porque ni siquiera tienen
el suyo propio. Sólo Dios, el Creador de cada persona humana, puede revelar el sentido
personal al hombre a cada hombre si tal hombre lo busca (con su conocer personal), lo acepta
(con su amar personal) libremente (con su libertad personal) en Dios (en co-existencia
personal con él). Por ello, la intimidad de la persona humana está abierta a Dios, o sea, que el
que se da cuenta de que es persona no puede admitir un Dios extraño a su vida. Con-
secuentemente, el que abdica de Dios, prescinde de la búsqueda de su sentido personal.

Quien se alcanza con ese saber es la propia persona, y se conoce a ésta como abierta
personalmente a una persona distinta que pueda dar entero sentido de su ser personal. Esa es
la auténtica sabiduría humana. A nivel de intimidad humana uno es coexistente, y también
pura apertura, libertad; coexistente con Dios, y desde él con las demás personas creadas y
libre respecto o para ellas. Esa co-existencia y esa radical libertad es, además, personalmente
cognoscitiva y amante. No es que la persona tenga esas facetas, sino que las es. En efecto,
cada persona es co-existencia, libertad, conocer y amar personales. Esos radicales íntimos
conforman el ser personal. Cada uno de ellos se convierte con los demás hasta el punto de que
uno no puede darse sin los otros. Es decir, ninguno puede faltarle a una persona para ser
persona. Pero la conversión entre ellos no es completa, porque esos radicales se distinguen
realmente entre sí, y, como es sabido, toda distinción real es jerárquica.

Con todo, cada quién es una co-existencia distinta de las demás, una libertad distinta, un
conocer personal distinto, un amar personal distinto. Además, el acto de ser personal humano
se distingue realmente de la esencia humana (se trata de la distinción real essentia-actus
essendi en antropología). Una persona humana también se distingue realmente de su
naturaleza, de sus actos, de sus manifestaciones, etc., del universo. Es también distinto de
Dios, pero es en la intimidad personal donde hay que buscar la imagen de cada persona creada
con Dios; y no sólo con un Dios personal, sino con un Dios pluripersonal (la noción de persona
única, ya sea creada o increada, es absurda). No obstante, no existen dos imágenes iguales de
Dios, porque no existen dos personas humanas iguales. La igualdad es exclusivamente mental,
nunca real, porque no es intencional respecto de lo real; por eso la igualdad se debe aplicar
únicamente a objetos pensados. A pesar de las distinciones entre las personas humanas, la
realidad de Dios que se alcanza a través de los trascendentales personales humanos que cada
quién puede notar en su intimidad, es la realidad pluripersonal de Dios. No es esto teología
sobrenatural ni un intento gnóstico de racionalizar el misterio trinitario. Por eso, es pertinente
explicitar un poco más este punto.

Una persona sola no sólo es absurda, triste o aburrida, sino sencillamente imposible, porque
cada persona es apertura personal. Una apertura personal requiere, al menos, de otra persona
que pueda aceptar el ofrecimiento personal de la apertura personal que uno es. Una persona
no se limita a ser, sino que es-con. La persona es un añadido de ser; añade al ser el
acompañamiento personal. Si uno es imagen de Dios, Dios también será apertura personal.
Ahora bien, es claro que una apertura personal se abre a una persona distinta. En
consecuencia, es absolutamente imposible que en Dios exista una única persona, pues sería la
tragedia pura. De modo que la antropología personal no alcanza sólo a conocer la persona que
uno es, sino que se abre al Dios pluripersonal. Si esa antropología personal es secundada y
desarrollada desde la teología sobrenatural, desde la fe cristiana, que es un nuevo modo de
conocer de mayor alcance, las realidades personales divinas descubiertas, antes
insospechadas, son, no sólo las más altas que puede alcanzar la persona humana si libremente
quiere, sino también las realidades existentes más altas sin más. Por eso, esta antropología es
coherente con la doctrina cristiana acerca de Dios y del hombre, y no sólo en los temas
culminares, sino también en el planteamiento de las dualidades humanas (acto de ser-esencia,
esencia-naturaleza, hábitos innatos-adquiridos, hábitos-actos, actos-objetos, etc.), que
concurren de arriba a abajo en el hombre.

Programa

Programa

Tema 1: Vida, muerte, inmortalidad y eternidad.


Tema 2: La historia de la antropología.
Tema 3. El lugar de la antropología entre las disciplinas filosóficas.
Tema 4. El cuerpo humano.
Tema 5. Las funciones y facultades sensibles humanas.
Tema 6. La inteligencia, la voluntad y el yo.
Tema 7. La coexistencia y la libertad.
Tema 8. El conocer y amar personales. Y el destino de la persona humana.

Filosofía del conocimiento (ISCR)


Filosofía del conocimiento

La asignatura de Gnoseología (del griego gnosis, que significa conocimiento) o Filosofía del
conocimiento pretende investigar con radicalidad y rigor qué significa conocer, y cuál es el
alcance y la validez del conocimiento humano. Desde los mismos orígenes del pensamiento
filosófico, los filósofos se han planteado de manera implícita el problema del valor de sus
concepciones de la realidad y de la relación entre el conocimiento y las cosas. Desde muy
pronto, de modo progresivo, la indagación filosófica ha puesto de manifiesto que no era
posible desligar el estudio de la realidad del estudio del método con que se accede a ella: Es
ésta precisamente una de las características que hacen de la filosofía una empresa científica.

Con el nacimiento de la filosofía moderna, el interés por el conocimiento se vuelve en una


empresa prioritaria. Es la respuesta a algunos planteamientos que habían visto la luz ya en la
Baja Edad Media, como el nominalismo, que despertaban serias dudas sobre su alcance, en
particular, en el campo de la metafísica. Puede decirse que el pensamiento moderno no es sino
un intento continuo por superarlo.

El temario de la asignatura se distribuye en tres bloques temáticos o unidades didácticas. En


ellos se van entrelazando la explicación del conocimiento y las cuestiones críticas. En la
introducción se expone qué es la Filosofía del conocimiento y cuál es el método más
apropiado para abordarla. Además se hace un repaso muy rápido a la historia de esta parte de
la filosofía, que sirve como preámbulo para comprender sus principales problemas y las
orientaciones de fondo que, a lo largo de los siglos, se han dado para resolverlos.

El primer bloque se dedica a estudiar la naturaleza del conocimiento. La exposición comienza


con la consideración del conocimiento como acto perfecto y de la intencionalidad -en su
momento se explicarán ambos conceptos-. Sobre estas dos ideas se fundamenta todo lo que
se dirá a continuación, porque constituyen las doctrinas en las que se asienta la concepción
realista del conocimiento. Después se estudian los distintos temas del conocimiento y el modo
de acceder a ellos: la realidad sensible; luego, pasando ya a la inteligencia, la realidad material
y el conocimiento de uno mismo y de las demás personas.

En el segundo bloque se estudian las aportaciones y los límites de algunas concepciones del
conocimiento, importantes para entender los problemas que se plantea el pensamiento
contemporáneo.

En el tercer bloque se trata la cuestión de la verdad y de su relación con el ser y con el sujeto
que conoce. Qué es, cuáles son sus sentidos, qué dimensiones tiene, así como cuál es su
fundamento, son los puntos fundamentales que hacen posible, luego, analizar cómo se llega a
ella y cómo se transmite. Lo más característico del conocimiento humano es que puede ser
verdadero. Por tanto, habrá que investigar qué significa la verdad, cuál es su fundamento,
cuándo se da y cuáles son los criterios del conocimiento de la verdad. Este estudio contribuirá
a resolver adecuadamente la tesis escéptica según la cual no se puede alcanzar la verdad.

Dentro de este último bloque se intenta también deslindar la verdad de otros conceptos afines
con los que en ocasiones se confunde, a saber: la certeza, la opinión, etc. Para eso habrá que
distinguir entre la verdad y los estados subjetivos del espíritu humano que capta la verdad al
conocer. De este modo nos introduciremos en los conceptos de evidencia, certeza, duda,
opinión y fe. Para terminar se realizarán algunas consideraciones sobre el conocimiento en el
conjunto de la vida humana, es decir se profundizará en la libertad propia del conocimiento y
en la dimensión ética de la actividad cognoscitiva en la vida humana.

Introducción. Presentación

Parte 1

Los Niveles del Conocer Humano

Tema 1. Exordio, Panorámica del Conocimiento Humano

Tema 2. El Conocimiento Sensible: El Acceso a los Accidentes del Universo

Tema 3. El Conocimiento Racional: El Acceso a la Esencia del Universo

Tema 4. El Conocimiento Intelectual de los Hábitos Innatos. El Acceso a la Esencia Humana, a


los Actos de Ser No Personales y al Acto de Ser Personal Humano

Tema 5. El Intelecto Personal: El Acceso al Acto de Ser Personal Divino

Parte 2

Verdad, Error y Principales Propuestas Noéticas

Tema 6. La Verdad Conocida y del Conocer. Examen de los Errores más frecuentes

Tema 7. Los Errores Noéticos más relevantes

Tema 8. Las tres propuestas Noéticas fundamentales de la Historia de la Filosofía

Tema 9. Epílogo. Los niveles Noéticos de las Ciencias, de la Filosofía y de la Teología

Ética (ISCR)

Aunque no lo parezca, la filosofía importa mucho a cada uno de nosotros. Pues es el tipo de
conocimiento que nos permite vivir humanamente, esto es, de modo consciente y libre, lúcido
y responsable. Además, para el creyente es la condición de la plena y personal acogida de la
Revelación: la fe ha der ser pensada y, hasta donde se pueda, vista con la propia razón. La
alternativa es vivir de prestado; vivir anónimamente de lo que se piensa, se dice o se hace en
un determinado ambiente. Hoy, como siempre y aunque se pregone lo contrario, casi todo
empuja poderosamente a vivir de esta segunda manera. No es difícil descubrirlo. Y tampoco es
verdad que se pueda vivir así mucho tiempo.

Así pues, quien quiera avanzar hoy en el difícil camino del pensar –y del lúcido creer– debe
hacer un valiente esfuerzo, debe tomar partido por la verdad oponiéndose a la fuerza de la
ciega costumbre o del dominio ajeno: en definitiva, debe adoptar una decidida postura moral.
Es una decisión moral porque es libre, pues pensar filosóficamente solo se hace queriendo con
todas las fuerzas; y porque es responsable, pues solo pensar filosóficamente las verdades de
las que vivimos da sentido a las acciones que realizamos.

La ética es la reflexión filosófica sobre el conjunto de verdades o evidencias necesarias para


vivir moralmente, de modo humanamente digno. Verdades que, por cierto, ya poseemos de
un modo latente. De esta suerte, la ética se esfuerza por alumbrar –iluminar y a la vez dar a
luz–esas verdades por sí mismas, estimulando originariamente el estudio de la entera filosofía
y la apertura a cualquier Revelación.

Programa

El programa de la asignatura de Ética consta de 12 temas:

TEMA 1. El ámbito y naturaleza de la ética filosófica


TEMA 2. La ética como filosofía
TEMA 3. La ética y otras formas de saber
TEMA 4. El actuar humano
TEMA 5. La felicidad y la moralidad
TEMA 6. La vida moral lograda; lo éticamente bueno y debido
TEMA 7. Las virtudes
TEMA 8. Las virtudes éticas
TEMA 9. Las distintas virtudes éticas
TEMA 10. La corrección moral como ley
TEMA 11. La conciencia como guía subjetiva personal
TEMA 12. Valoración moral de las acciones concretas

Filosofía y fenomenología de la religión (ISCR)

Filosofía y fenomenología de las religiones

La asignatura estudia de la religión desde una perspectiva integradora de los aspectos


particulares considerados por las ciencias de la religión. Partiendo de un análisis
fenomenológico de la experiencia religiosa, se aborda la pregunta filosófica por la religión.
Después se realiza un examen crítico de las visiones reduccionistas de la religión y se concluye
con el estudio filosófico de la diversidad de religiones.

Descripción: Asignatura que se imparte en el Bachillerato de Ciencias Religiosas

Departamento: Filosofía

Curso: 1º

Semestre: Segundo

Número de créditos ECTS: 3

Profesor: D. Francisco Gallardo

Idioma en que se imparte: Castellano


Programa

- Introducción. El hombre, un ser religioso

- Tema 1. La reflexión filosófica de la religión

- Tema 2. Las diversas ciencias que se ocupan de la religión

- Tema 3. Análisis y estructura del hecho religioso

- Tema 4. La experiencia religiosa y sus manifestaciones

- Tema 5. La religión en sus diversas expresiones a lo largo de la historia

- Tema 6. La religión frente a diversas interpretaciones de la realidad

- Tema 7. Hacia una definición de religión

- Tema 8. La crítica filosófica de la religión

- Tema 9. La fundamentación de la religión

- Tema 10. El problema filosófico de la diversidad de religiones

Filosofía de la ciencia (ISCR)

Filosofía de la ciencia

La filosofía de la ciencia reflexiona sobre la actividad científica. Intenta explicar por qué
funciona la ciencia, qué significa descubrir o experimentar, qué tipo de verdad proporciona el
conocimiento científico, cuáles son las implicaciones éticas y los valores que promueve la
actividad científica. Con este curso se pretende dar una primera respuesta a esas preguntas.

Descripción: Asignatura que se imparte en el Bachillerato de Ciencias Religiosas


Departamento: Filosofía
Semestre: Segundo
Número de créditos ECTS: 2
Profesor: D. Rubén Herce
Idioma en que se imparte: Castellano

Programa

PROGRAMA

Introducción General
Tema 1. Ciencia y Filosofía de la ciencia.
Tema 2. Origen y desarrollo histórico de la ciencia.
Tema 3. La reflexión filosófica sobre la ciencia.
Tema 4. Principales corrientes actuales en la Filosofía de la Ciencia.
Tema 5. Naturaleza de la ciencia experimental.
Tema 6. El método científico.
Tema 7. Las construcciones científicas.
Tema 8. La verdad científica.
Tema 9, Ciencia, Razón, Fe… y Ética.

Cuestiones de ciencia, razón y fe (ISCR)

ciencia,razón y fe

Descripción: Hoy tienen mucha relevancia social y cultural las cuestiones en las que confluyen
la teología, la filosofía y las ciencias empíricas. Estas cuestiones sobre "ciencia, razón y fe",
como son llamadas de ordinario, abarcan campos de reflexión y estudio como los siguientes:
origen del universo, origen y evolución de la vida, origen del ser humano, la relación entre
naturaleza y persona, la complejidad y finalidad en el mundo natural, o el modo en el que se
puede afirmar que la ciencia y la religión tienen que ver con la verdad.

Descripción: Asignatura que se imparte en el Diplona de Filosofía, Ciencia y Religión


Semestre: Segundo
Número de créditos ECTS: 3
Profesores:
Prof. D. Javier Bernacer María
Prof. D. Santiago Collado González (Profesor responsable de la asignatura)
Prof. D. Rafael Martínez Romeo
Prof. D. Javier Sánchez Cañizares
Idioma en que se imparte: Castellano

Programa

Primera unidad: Relaciones entre ciencia y religión


Profesor: Rafael Martínez (Universitá Pontificia della Santa Croce)
Introducción: Ciencia y religión hoy.
La relación entre ciencia y religión en la historia.
El estudio actual de la relación ciencia–religión.
Bases epistemológicas de la interacción entre ciencia y religión.

Segunda unidad: Origen del Universo

Profesor: Javier Sánchez Cañizares (Facultad Eclesiástica de Filosofía)

Historia de las teorías sobre el origen del universo. La teoría del Big Bang.
El respaldo experimental a la teoría del Big Bang.
Algunos problemas sin resolver dentro del modelo cosmológico estándar.
Discusión y valoración de algunas hipótesis científicas alternativas al Big Bang.
La perspectiva filosófico-teológica. El concepto de creación.
El diálogo entre la perspectiva filosófico-teológica y las teorías científicas sobre el origen del
universo.
Tercera unidad: Origen y evolución de la vida
Profesor: Santiago Collado (Facultad Eclesiástica de Filosofía)

Perspectivas históricas de la organización vital.


Teoría de la evolución. Gestación y formulación de la teoría.
Teoría sintética de la evolución.
Origen de la vida: ciencia y filosofía.
Evolución y cristianismo.
Creacionismo. El supuesto desafío al Darwinismo del Diseño Inteligente.
El catolicismo frente a la teoría de la evolución.
Creación y evolución.
El origen del ser humano.
Cuarta unidad: Origen y especificidad del hombre (6 horas)
Profesor: Javier Bernácer (ICS)

Cuerpo y corporalidad. Especificidad biológica del ser humano.


Mente y cerebro. Autoconciencia humana.

Teología fundamental (ISCR)

teologia fundamental
En torno al año 64 ó 67 d. C. bajo el gobierno de Nerón, tuvo lugar el martirio de San Pedro en
Roma. Poco tiempo antes, desde su cautividad romana, el príncipe de los apóstoles había
escrito dos cartas a sus hermanos cristianos del Asia Menor, muchos de ellos conversos del
paganismo. En la primera de ellas, Pedro les exhortaba a imitar a Cristo, sufriendo con
paciencia y alegría las tribulaciones que pudieran padecer a causa de su vida de fe y de su
conducta cristiana. En un determinado momento, el gran apóstol les invitaba a dar testimonio
de su fe en Jesucristo: “(Estad) siempre dispuestos a dar respuesta a todo el que os pida razón
de vuestra esperanza” (1 Pe 3, 15). Según la intención de Pedro, por tanto, los cristianos no
solamente eran invitados a mantenerse fieles en las adversidades, sino también a profundizar
en la propia fe para así ser capaces de dar razón de ella.
Este “dar respuesta a todo el que os pida razón de vuestra esperanza” constituye también hoy,
y lo será siempre, una tarea de todos los cristianos. Esta tarea se conforma ahora como el
núcleo mismo, la Carta magna, de la materia de estudio que nos ocupa.
La tarea evangelizadora de la Iglesia, tan urgente en el tiempo actual, no sólo está dirigida a los
hombres y mujeres que recorren sus vidas en un clima de increencia o indiferencia ante la
revelación cristiana. También se orienta hacia el propio creyente, que necesita penetrar en las
razones de su fe, para hacer de ella una experiencia que ilumine su existencia y le haga capaz
de responder a todo el que le pida razón de su esperanza

Descripción: Asignatura que se imparte en el Bachillerato de Ciencias Religiosas

Departamento: Teología Sistemática

Curso: 1º

Semestre: Segundo

Número de créditos ECTS: 4 (es decir, 100 horas de trabajo por parte del alumno)

Profesor: Juan Alonso

Idioma en que se imparte: Castellano


Programa

Tema 1. Revelación y fe, nociones fundamentales del cristianismo

Tema 2. La revelación de Dios en Jesucristo

Tema 3. La transmisión de la revelación

Tema 4. Revelación cristiana y religiones

Tema 5. La fe, respuesta del hombre a Dios

Tema 6. La fe, don de Dios y compromiso del hombre

Tema 7. La increencia

Tema 8. Razones para creer: la credibilidad de la revelación

Tema 9. Cristo, signo primordial de credibilidad

Tema 10. La credibilidad de la Iglesia de Cristo

Cristología (ISCR)

Detalle frontal de Altar. Santuario de Torreciudad (Huesca, España)

La Cristología, como su propio nombre indica, trata de la Persona de Cristo y de su obra


redentora. Es un estudio en el que la razón, iluminada por la fe, intenta profundizar en el
conocimiento del misterio de Jesucristo y en su obra de salvación. Ambas cuestiones se suelen
tratar unidas. En efecto, en Cristo, ser y misión son inseparables: Él se ha hecho hombre por
nuestra salvación y, a su vez, esta salvación depende de que Él es al mismo tiempo Dios y
hombre. A lo largo de esta asignatura nos haremos dos preguntas fundamentales ¿Quién es
Cristo? ¿Cómo ha conseguido la salvación para los hombres?

Esta asignatura trata sobre la figura y la obra de Jesucristo, que es el centro de la predicación
de la Iglesia y, en consecuencia, el centro de la catequesis. Cristo constituye el mensaje central
del Nuevo Testamento y el núcleo de la predicación apostólica que es, de hecho, un testimonio
palpitante sobre Jesús de Nazaret, constituido en Señor y Cristo. Conocer a Cristo es, pues,
tarea fundamental de todo aquél que quiera transmitir la fe cristiana.

La cristología tiene en primer plano la fe de la Iglesia en Jesús de Nazaret, que se testimonia,


en primer lugar, en las Escrituras, que, con especial asistencia divina, han brotado en su seno.
Se testimonia en la liturgia y en los escritos de los Padres. Se testimonia también -y en forma
especialmente intensa- en aquellos momentos en los que la Iglesia ha visto malinterpretada su
fe en Cristo y se ha sentido urgida a salir en defensa de su propia identidad. Esto tuvo lugar en
forma especialmente dramática y fecunda en los Concilios de los siete primeros siglos. No es
posible adentrarse en el conocimiento vivo de Cristo sin adentrase también en el conocimiento
de estos dos mil años de fidelidad en la fe y en la transmisión del núcleo central de la fe
cristiana.

Facultad: Instituto Superior de Ciencias Religiosas (Facultad de Teología)


Duración: Semestral (1er semestre)
Curso: 2º Bachiller en Ciencias Religiosas
Tipo de asignatura: Obligatoria
Número de créditos: 6 ECTS (aprox. 150 h. de trabajo por parte del alumno)
Profesor: Miguel Brugarolas

Programa

Tema 1. Cuestiones Introductorias

Tema 2. El testimonio bíblico sobre Jesús

Tema 3. El testimonio de la fe de la Iglesia en los primeros siglos

Tema 4. La persona de Jesucristo

Tema 5. Cristo, plenitud de gracia y verdad

Tema 6. Cristo, mediador entre Dios y los hombres

Tema 7. Los misterios de la vida en Cristo

Tema 8. El valor redentor de la pasión y muerte de Cristo

Tema 9. La exaltación de Cristo

Eclesiología (ISCR)

eclesiología

Esta asignatura trata de la comprensión de la fe de la Iglesia sobre sí misma, reflexión que no


es separable de la fe en Dios Trinitario. La Eclesiología es Teología; es decir, supone la
aceptación creyente de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, y del designio salvífico del Padre
realizado por las misiones del Hijo y del Espíritu Santo en la historia, la "oeconomia salutis". La
Trinidad permanece siempre como origen, contenido y meta de la Iglesia. La Eclesiología trata,
por tanto, de establecer el lugar de la Iglesia en relación con el fundamento de la fe cristiana
-la profesión de fe en el Dios uno y trino- según el orden o jerarquía de verdades en la doctrina
católica (cfr. Decr. Unitatis redintegratio, n. 11).

El estudio de la Iglesia supone, de otra parte, acercarse a una realidad cercana y familiar.
Somos cristianos en la Iglesia y por la Iglesia. La Iglesia tiene un carácter "maternal": hemos
nacido a la vida en Cristo en su seno, y de ella hemos recibido la fe. En ella hemos oído hablar
de Cristo, en ella lo buscamos, con ella oramos y llevamos adelante la misión… hay una
experiencia cotidiana de la Iglesia que todos poseemos de un modo u otro.

Descripción: Asignatura que se imparte en el Bachillerato de Ciencias Religiosas


Departamento: Teología Sistemática
Curso: 3º
Semestre: Primero
Número de créditos ECTS: 4 (es decir, 100 horas de trabajo por parte del alumno)
Profesor: Ramiro Pellitero
Idioma en que se imparte: Castellano

Programa

(nota: Aunque el manual no está dividido en Unidades Didácticas, mantenemos aquí esa
división)

Introducción

UNIDAD DIDÁCTICA 1: INTRODUCCIÓN AL ESTUDIO DE LA ECLESIOLOGÍA

Tema 1. La Eclesiología, teología sobre el misterio de la Iglesia

UNIDAD DIDÁCTICA 2: BREVE HISTORIA DE LA ECLESIOLOGÍA

Tema 2. La Iglesia en el Nuevo Testamento y en el Símbolo de los Apóstoles

Tema 3. La Edad Patrística de la Eclesiología

Tema 4. Desde la Edad media hasta la época contemporánea

UNIDAD DIDÁCTICA 3: EL ORIGEN DE LA IGLESIA

Tema 5. La preparación de la Iglesia en la Historia de la Salvación

Tema 6. La Iglesia en cuanto que tiene su origen en Cristo

Tema 7. La Iglesia en cuanto que tiene su origen en la Trinidad

UNIDAD DIDÁCTICA 4: EL MISTERIO DE LA IGLESIA

Tema 8. La Iglesia, nuevo Pueblo de Dios y Familia de Dios Padre

Tema 9. La Iglesia, Cuerpo Místico de Cristo

Tema 10. La Iglesia, Templo del Espíritu Santo

Tema 11. Reflexión teológica sobre el misterio de la Iglesia

Tema 12. Los “estados” de la Iglesia en el tiempo. María y la Iglesia

UNIDAD DIDÁCTICA 5: LA IGLESIA PEREGRINA: ESTRUCTURA Y MISIÓN

Tema 13. Las propiedades o “notas” de la Iglesia

Tema 14. La Iglesia, “sacramento de salvación”


Tema 15. La Iglesia, comunidad sacerdotal orgánicamente estructurada

Tema 16. La dimensión jerárquica de la Iglesia, al servicio de la comunión y de la misión

Liturgia I: la Economía sacramental

«¿Qué es realmente la liturgia? ¿Qué ocurre en ella? ¿Con qué tipo de realidad nos
encontramos?» (J. Ratzinger, El espíritu de la liturgia, p. 33). Tales preguntas –nada retóricas,
pese a cuanto en un primer momento pueda parecer– han marcado una buena parte de los
esfuerzos teológicos emprendidos durante el siglo XX. Entre afirmaciones como «la liturgia
significa la parte sensible, ceremonial y decorativa del culto católico» (J. Navatel, “Etudes”
1913, p. 452), y la actual conciencia eclesial: «es el misterio de Cristo lo que la Iglesia anuncia y
celebra en su liturgia» (Catecismo de la Iglesia Católica, 1068), media una centuria de
aproximaciones, intentos y desarrollos, encaminados hacia una comprensión más profunda del
ser y acontecer del hecho litúrgico. Años que han visto surgir una disciplina nueva en el
conjunto de los saberes teológicos: la ciencia litúrgica.

Como recientemente ha escrito Juan Pablo II, los últimos desarrollos magisteriales –y, en
particular, el Concilio Vaticano II– han contemplado la liturgia «en el horizonte de la historia de
la salvación, cuyo fin es la redención humana y la perfecta glorificación de Dios. La redención
tiene su preludio en las admirables gestas divinas del Antiguo Testamento, y ha sido llevada a
término por Cristo, nuestro Señor, especialmente por medio del misterio pascual de su
bienaventurada pasión, resurrección de la muerte y gloriosa ascensión. Esta, sin embargo,
debe ser no sólo anunciada sino actuada, y ello sucede “por medio del sacrificio y de los
sacramentos, sobre los cuales gira toda la vida de la Iglesia”. Cristo se hace presente, de un
modo especialísimo, en las acciones litúrgicas, asociando a sí a la Iglesia [...] De aquí que “la
liturgia sea la cumbre a la que tiende toda la vida de la Iglesia y, al mismo tiempo, la fuente de
la que mana toda su fuerza”» (Juan Pablo II, carta apostólica en el XL aniversario de la
constitución Sacrosanctum Concilium, 2)

Con tales presupuestos doctrinales, desde el fenómeno –el rito– hasta su realidad última –la
presencia y comunicación del misterio salvífico de Cristo–, la teología litúrgica ha estructurado
un estatuto científico propio. Consciente de la naturaleza del hecho litúrgico como
acontecimiento de encuentro salvífico entre Dios y el hombre en la mediación del rito, la
ciencia litúrgica estudia el dinamismo de tal relación dialógica. En su horizonte epistemológico
convergen, pues, teología –misterio del Dios que se revela– y ciencias del hombre –rito–,
otorgándole un método peculiar y propio, de carácter interdisciplinar (cfr. Concilio Vaticano II,
Sacrosanctum Concilium 16).
La guía que presentamos pretende ofrecer una aproximación sistemática al hecho litúrgico que
ayude a responder a las preguntas inicialmente enunciadas. Al hilo de las últimas afirmaciones
magisteriales, misterio y celebración se mostrarán como los elementos claves para la
comprensión del ser de la liturgia y ejes sobre los que se articule el programa de estudio. En
este sentido, la liturgia será interpretada como la celebración del misterio de Cristo para la
vida de la Iglesia (cfr. Catecismo de la Iglesia Católica, 1068). Por ello, el hecho de la presencia,
manifestación ycomunicación del misterio de Cristo en la mediación del rito estará siempre
subyacente, de un modo más o menos explícito, en el trasfondo del programa.

Una advertencia previa: el programa de estudio abarca tan sólo aquellos aspectos que forman
parte de la noción misma de liturgia. Cada una de las celebraciones litúrgicas en particular será
tratada en la disciplina que se ocupa de los sacramentos. Por motivos de estructuración de las
disciplinas teológicas sí se han incluido aquellas realidades litúrgicas que no son estudiadas por
la teología sacramentaria: el año litúrgico y la liturgia de las horas.

Programa y Bibliografía

PROGRAMA

Unidad Didáctica 1: La ciencia litúrgica

Tema 1. La ciencia litúrgica. Historia de la ciencia litúrgica. Objeto y método. Formación


litúrgica.

Unidad Didáctica 2: Las tradiciones litúrgicas

Tema 2. Historia de la liturgia romana. Orígenes. Primeros desarrollos: liturgia romana clásica.
Periodo medieval: extensión por el mundo franco-germánico. Uniformidad litúrgica de la
reforma tridentina. El movimiento litúrgico. Reforma litúrgica del Concilio Vaticano II.

Tema 3. Ritos y familias litúrgicas. Noción de rito. Familias litúrgicas orientales: liturgia siro-
oriental (caldeos, malabares), ritos siro-occidentales (liturgia antioquena, maronita, bizantina,
armenia) liturgia alejandrina (ritos copto y etíope). Liturgias occidentales latinas (rito
ambrosiano e hispano-mozárabe, liturgias africana y galicanas).

Unidad Didáctica 3: El misterio de la liturgia

Tema 4. La liturgia en la economía de la salvación. La liturgia, obra del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. La economía salvífica: anuncio, cumplimiento y permanencia del misetrio de
salvación en la historia. La liturgia, momento síntesis de la historia de la salvación: del misterio
pascual de Cristo a la liturgia de la Iglesia.

Tema 5. Culto y liturgia. Noción de culto: del culto natural al culto revelado. El concepto de
liturgia: origen etimológico, intentos de definición, noción conciliar. Celebraciones litúrgicas y
ejercicios piadosos.

Unidad Didáctica 4: La celebración del misterio


Tema 6. La celebración litúrgica. Aproximaciones al concepto de celebración: etimología,
aproximaciones antropológica y teológica. Misterio y celebración: la liturgia, presencia,
manifestación y comunicación del misterio de Cristo. La Iglesia, sujeto de la celebración.
Asamblea litúrgica y ministerios litúrgicos.

Tema 7. El fenómeno litúrgico. Signo y símbolos litúrgicos. Noción de rito. El lenguaje litúrgico.
La plegaria litúrgica. Lugar de la celebración. Arte y liturgia.

Unidad Didáctica 5: La vida que nace de la celebración

Tema 8. Espiritualidad litúrgica. Liturgia y espiritualidad. La participación litúrgica. La liturgia,


escuela de oración. Ejercicios piadosos.

Tema 9. Pastoral litúrgica. La liturgia en la acción pastoral de la Iglesia. Características de la


pastoral litúrgica. Ambito de la pastoral litúrgica. El derecho litúrgico.

Unidad Didáctica 6: La santificación del tiempo

Tema 10. El año litúrgico. Noción de año litúrgico. El domingo. El ciclo pascual: cuaresma,
triduo pascual, tiempo de pascua. El ciclo de la manifestación: adviento y navidad. El tiempo
ordinario y las fiestas del Señor. Las fiestas de María y de los santos.

Tema 11. La liturgia de las horas. Historia de la liturgia de las horas. Teología y espiritualidad.
Las horas del oficio: laudes y vísperas. Estructura de la liturgia de las horas: el salterio.

BIBLIOGRAFÍA

► Texto base

J. López Martín, La liturgia de la Iglesia. Teología, historia, espiritualidad, pastoral, “Sapientia


Fidei” 6, BAC, Madrid 1994. Localízalo en la Biblioteca

Para facilitar el estudio, el programa de la asignatura sigue la estructura del manual. En los
Contenidos de esta asignatura está disponible la correspondencia entre el Programa y los
capítulos de este Texto base.

► Fuentes magisteriales

Pío XII, Carta encíclica Mediator Dei (20-XI-1947) [AAS 39 (1947) 521-600], en “Mediator Dei”.
Encíclica sobre la liturgia: “Cuadernos Phase” 122, Barcelona 2002. Localízalo en la Biblioteca

Concilio Vaticano II, constitución Sacrosanctum Concilium (en Concilio Vaticano II.
Constituciones. Decretos. Declaraciones, BAC, Madrid 1966. Localízalo en la Biblioteca

Catecismo de la Iglesia Católica, Segunda Parte, La celebración del misterio cristiano, primera
sección: 1066-1209.

► Bibliografía complementaria

J.A. Abad Ibáñez, La celebración del Misterio cristiano, 2ª ed., Eunsa, Pamplona 2000.
Localízalo en la Biblioteca
► Lectura recomendada

J. Ratzinger, El espíritu de la liturgia. Una introducción, Ediciones Cristiandad, Madrid 2001.


Localízalo en la Biblioteca

Liturgia II: celebraciones sacramentales (ISCR)

Ser cristianos significa creer en el Dios de Jesucristo y tratar de vivir la esperanza que su amor
ofrece a nuestro corazón inquieto.
La historia de ese amor es sencilla y grandiosa: el Hijo eterno penetra en las vicisitudes
humanas y, a través de su humanidad, revela el rostro del Padre y concede a quien lo recibe la
vida nueva en el Espíritu. Cristo es el icono del Padre, el sacramento de Dios, el signo vivo con
el que el Eterno se comunica a los hombres. Para que ese signo pueda ser accesible a los
hombres de todo tiempo y lugar, el Señor se hace presente en la Iglesia, la cual es, a su vez,
sacramento de Cristo. Ella es el lugar elegido por su Esposo donde puede ser objetivamente
encontrado por nosotros en el Espíritu.
Ello explica que la Iglesia celebre el encuentro entre el Kyrios y los hombres por medio de
ciertos ritos. Estos ritos son acciones, es decir, gestos y palabras, realizados en obediencia a la
voluntad de Jesús, a través de los cuales el don divino llega al corazón de la persona y al de la
historia. Son los sacramentos.
Si Cristo es el sacramento de Dios y la Iglesia es el sacramento de Cristo, los sacramentos son
las realizaciones más intensas del encuentro con Dios en la Iglesia. De aquí la importancia de
los sacramentos no sólo para quien busca a Dios, sino también para quien, habiéndolo
encontrado, desea conocerle y amarle siempre más.
Pero cabe todavía otra aproximación a los sacramentos que permite captarlos como realidades
salvíficas, como acontecimientos de comunión con Dios, puntos de inserción en el misterio de
Cristo.
La lámina que se ha situado a la cabecera del Catecismo de la Iglesia Católica, cuando
comienza a tratar de los sacramentos, reproduce un fresco de principios del siglo IV tal y como
puede apreciarse en unas catacumbas romanas. La escena representa el encuentro de Jesús
con la hemorroísa. Esta mujer, experta de años en el sufrimiento, quedó curada al tocar el
extremo del manto de Jesús gracias a la “fuerza que había salido de él”. Y cabe preguntarnos:
hoy, al cabo de veinte siglos, ¿es posible entrar en contacto con la fuerza sanante que sale
Cristo? En la Iglesia, la respuesta es afirmativa: hoy, los hombres podemos ser curados de las
heridas del pecado y acoger la vida nueva del Resucitado por medio de los sacramentos,
acciones por las que Cristo, en synergia con su Esposa, comunica la salvación que brota del
misterio pascual. Con toda propiedad, por tanto, se ha elegido ese fresco romano para iniciar
la sección litúrgico-sacramental del Catecismo, en cuento figura que simboliza el poder
salvífico del Kyrios que salva al hombre entero, cuerpo y alma, a través de la economía
sacramental.
Hay que poner de relieve, desde el inicio, la íntima conexión que existe entre nuestro estudio y
la liturgia. Desde un punto de vista fenomenológico, los sacramentos sólo son, en cuanto se
celebran. Así pues el objeto material del tratado sobre los sacramentos es sustancialmente
común al de la asignatura de liturgia. El objeto formal, sin embargo, es distinto. La asignatura
de liturgia los contempla sobre todo desde la perspectiva de la celebración, mientras que la
asignatura de los Sacramentos lo hace desde la vertiente dogmática. Ambas, ciertamente, se
presuponen y complementan, y vienen a ser como planos interiores unos a otros.
De modo que el cambio de nombre de esta asignatura –ahora Liturgia II, las Celebraciones
Sacramentales– no afecta ni al contenido ni a la perspectiva de años anteriores: tan sólo
requieren un conocimiento de los principios fundamentales de la asignatura Liturgia I, la
Economía Sacramental. A efectos prácticos, solamente se ha añadido otro manual como Texto
base, el de A. Miralles, Los Sacramentos Cristianos para complementar algunos apartados, tal
como se indica en el Temario más adelante.

Si la teología sacramentaria ha progresado en algún campo, éste ha sido en el conocimiento


histórico de las fuentes litúrgicas y en la comprensión de las categorías teológicas que las han
impulsado. Hoy conocemos con cierta exactitud el modo según el cual la Iglesia ha ido
celebrando cada uno de los sacramentos a lo largo de la historia, así como los presupuestos
teológicos con que ha contado en cada ocasión, cuando ha tenido que variar los signos
sacramentales. A pesar de tales variantes, la Iglesia ha tenido conciencia de ser siempre fiel a
la mente del Señor, que los instituyó. De este modo, quizá en este campo más que en otros, el
recurso a la historia aparece como una fase ineludible para quien desee comprender los
sacramentos con más hondura teológica.
De otra parte, siendo la historia cauce necesario para conocer las diversas manifestaciones
sacramentales, tal realidad no se llega a comprender suficientemente a través de una mera
verificación de los datos históricos; en realidad, se precisa la fe en la palabra de Dios porque
los sacramentos son, en su núcleo más intimo, acontecimiento salvíficos, realidades
sobrenaturales. La historia permite comprobar el comportamiento de la Iglesia a lo largo de los
siglos; pero la comprensión acabada de este comportamiento no lo da la historia, sino la fe. Fe
e historia no se excluyen, sino que se complementan en la metodología sacramental.
Antes de referirnos a los contenidos de esta materia, convendrá añadir una última
observación: si hasta ahora el estudio teológico del Símbolo de la fe nos ha llevado a un
conocimiento estático del depósito de la revelación, ahora, con los sacramentos, el análisis nos
introduce en el momento dinámico del misterio cristiano: la celebración sacramental de la
Iglesia es la pista de aterrizaje donde la Trinidad se posa sobre la historia.
Los contenidos del programa ―de por sí extenso― se estructuran en dos grandes bloques, que
responden a una partición ya clásica en la tradición manualística. El primer bloque agrupa las
cuestiones comunes a todos los sacramentos: actos de Cristo y de la Iglesia para el hombre, el
signo sacramental, la eficacia, el ministro y el sujeto. Es lo que los manuales clásicos llamaban
el tratado de sacramentis in genere. Este primer bloque amplio será en nuestro caso la Primera
Parte del programa, desarrollada en una única Unidad Didáctica.
El segundo bloque trata ya de cada sacramento en particular. Lo dividimos en tres Partes: los
sacramentos de la iniciación cristiana (Bautismo, Confirmación y Eucaristía), los dos
sacramentos de sanación (Penitencia y Unción) y los dos sacramentos al servicio no sólo de la
comunidad, sino, más a fondo, de la comunión (Orden y Matrimonio). A cada cacramento
dedicaremos una Unidad Didáctica, añadiendo una de contenidos generales al comenzar la
Segunda Parte, la de los sacramentos de iniciación.
El alumno se encuentra, pues, ante un tratado sugestivo, cuyo estudio le ayudará a resolver
cuestiones que afloran con frecuencia, aquí y allá, en torno a puntos neurálgicos de la fe: por
qué bautizar a los niños, por qué confesar los pecados a un presbítero, por qué participar en la
celebración eucarística los domingos, ungir con aceite a un enfermo... Al estudio ―esto es
importante― debe acompañar la plegaria personal, si no se quiere que esta corriente de
sangre y agua, que brota del costado traspasado del nuevo Adán dormido en la cruz, se pierda
en la arena de un falso teologizar meramente erudito.

Programa

PARTE 1: LOS SACRAMENTOS EN GENERAL


Unidad Didáctica 1: Los sacramentos, visión de conjunto
Tema 1. El acontecimiento salvífico-sacramental. Mysterion y sacramentum en la Escritura y en
la Tradición. Significado de mysteriony significado de sacramentum en la tradición y en el
magisterio.
Tema 2. El gesto sacramental. La fundación cristológica del gesto sacramental. La Iglesia como
misterio de Cristo y sacramento universal de salvación. El signo. El signo sacramental significa y
realiza. El número septenario de los sacramentos.
Tema 3. La celebración sacramental. Los sacramentos, en cuanto realidades litúrgicas. La
asamblea. Gestos y palabras. Los Ordinesprovenientes de la reforma litúrgica.
Tema 4. Sujeto y ministro de los sacramentos. Cristo, ministro de los sacramentos. La Iglesia
instrumento de Cristo. Intención del ministro.
Tema 5. Eficacia y efectos. La eficacia de los sacramentos en la tradición y en el magisterio.
Modos de concebir la causalidad sacramental. El efecto primario e inmediato de los
sacramentos. El carácter sacramental. La gracia sacramental.
PARTE 2: LOS SACRAMENTOS DE INICIACIÓN
Unidad Didáctica 2: La iniciación cristiana
Tema 6. La iniciación cristiana en la experiencia histórica de la Iglesia. La iniciación cristiana en
la Iglesia antigua. El catecumenado. Las catequesis mistagógicas de los Padres.
Unidad Didáctica 3: El sacramento del Bautismo
Tema 7. La institución del bautismo. El misterio del bautismo de Cristo en el Jordán. La
institución por parte de Jesucristo. Tradición y magisterio. El bautismo en el medievo y en la
época moderna.
Tema 8. El signo bautismal. El gesto. El ministro. El Sujeto. El Ordo baptismi parvulorum:
prenotandos y ritos.
Tema 9. Los efectos del Bautismo. La gracia bautismal: regeneración, remisión, inhabitación,
nueva criatura. El carácter bautismal: el sacerdocio bautismal.
Tema 10. Necesidad y modalidades del Bautismo. La necesidad del bautismo. Bautismo de
sangre, de deseo, de niños.
Unidad Didáctica 4: El sacramento de la Confirmación
Tema 11. La Confirmación: dimensión histórico - salvífica. Noción teológica de unción. La
unción de Cristo: en la encarnación y en le Jordán. La unción: figura, evento y sacramento.
Tema 12. Institución de la confirmación. En el nuevo testamento. Bautismo y confirmación.
Tema 13. Signo y efectos de la confirmación. El gesto sacramental. El Ordo confirmationis:
prenotandos y ritos. El ministro. El sujeto. El carácter crismal. La gracia sacramental.
Unidad Didáctica 5: El sacramento de la Eucaristía
Tema 14. La Eucaristía en el Antiguo Testamento. El memorial de la Pascua. La alianza. El
sacrificio del “siervo de Yavé”. El Yom Kippur. El maná y el banquete de la sabiduría. El
“sacrificio agradable de la era mesiánica”.
Tema 15. La Eucaristía en el Nuevo Testamento. Las comidas de Jesús. La última Cena. La doble
tradición de los relatos institucionales. La Eucaristía en los Hechos, el corpus paulinum y
escritos joánicos.
Tema 16. La Eucaristía, sacramento del sacrificio de Cristo. El sacrificio eucarístico en los
Padres y en el medievo. La doctrina tridentina y el magisterio actual.
Tema 17. La Eucaristía, memorial de la Pascua del Señor. La acción de Cristo resucitado en el
Espíritu Santo. Liturgia de la palabra y liturgia eucarística: un único acto de culto. Epíclesis y
anámnesis. El gesto sacramental. Los Leccionarios y el Missale Romanum: prenotandos y ritos.
Tema 18. La Eucaristía, banquete. Efecto cristológico. Efecto eclesiológico. Efecto escatológico.
Tema 19. La presencia real de Cristo en la Eucaristía. La presencia de Cristo en la celebración
eucarística: presencial reales y presencia sustancial. La presencial eucarística fuera de la
celebración: estudio histórico. Transustanciación. Culto eucarístico: De sacra communione et
de cultu mysterii eucharistici extra Missam.
Tema 20. Eucaristía y ecumenismo. Los acuerdos ecuménicos: contenido y valoración. la
Eucaristía en las iglesias orientales. La cuestión de la intercomunión.
PARTE 3: LOS SACRAMENTOS DE SANACIÓN
Unidad Didáctica 6: El sacramento de la Reconciliación
Tema 21. Hombre y mujer ante la llamada divina a la conversión. Un sacramento para la
curación / sanación / restauración del hombre y la mujer cristianos.
Tema 22. Reconciliación y penitencia en la Biblia. El pecado en las culturas y religiones
primitivas. El pecado en el antiguo testamento. el pecado en el nuevo testamento: sinópticos,
Juan, corpus paulinum.
Tema 23. El desarrollo histórico de la doctrina y disciplina penitenciales. institución del
sacramento de la penitencia. La disciplina penitencial en la iglesia antigua. La penitencia en la
edad media. Doctrina del concilio de Trento. El sacramento en el Concilio Vaticano II.
Tema 24. La penitencia celebrada. Reflexión litúrgica sobre la celebración de la reconciliación.
El Ordo pœnitentiæ: prenotandos y ritos.
Tema 25. Comprensión teológica del sacramento. carácter judicial del sacramento de la
penitencia. estructura del signo sacramental de la penitencia. análisis de los actos del
penitente: la contrición, la confesión, la satisfacción. la absolución sacramental. efectos del
sacramento de la penitencia.
Tema 26. Sujeto y ministro de la penitencia. Obispos y presbíteros, únicos ministros del
sacramento. Normas canónicas acerca de la facultad de absolver. Obligaciones del confesor. El
penitente.
Unidad Didáctica 7: El sacramento de la Unción de los enfermos
Tema 27. El cristiano ante la enfermedad grave. Reflexión antroplógica: la salud y la
enfermedad.
Tema 28. Estudio histórico-litúrgico. Desde el siglo I hasta el siglo VIII. Ritualización y primeras
reflexiones teológicas. Desde el siglo XIII hasta el Concilio Vaticano II. Desde el Concilio
Vaticano II. La unción celebrada: reflexión litúrgica. El Ordo unctionis infirmorum eorumque
pastoralis curæ: prenotandos y ritos.
Tema 29. Comprensión teológica del sacramento. La sacramentalidad de la unción. La Escritura
(St 5, 14-15). Estructura del signo sacramental. Ministro y sujeto. Efectos.
PARTE 4: SACRAMENTOS AL SERVICIO DE LA COMUNIÓN
Unidad Didáctica 8: El sacramento del Orden Sacerdotal
Tema 30. Origen y transmisión del sacerdocio cristiano. Las dimensiones trinitaria, cristológica
y eclesial del sacerdocio. La transmisión del sacerdocio ministerial a los Apóstoles. La sucesión
apostólica y los tres grados del sacramento. El desarrollo de los ministerios sagrados en la
Iglesia primitiva.
Tema 31. Naturaleza del sacerdocio ministerial. La identidad teológica del sacerdote. La
naturaleza sacramental del Orden. La configuración del ministerio sagrado.
Tema 32. Elementos del sacramento del Orden. El signo sacramental. El De ordinatione
episcopi, presbyterorum et diaconorum:prenotandos y ritos. Los efectos del Orden. El
ministro. El sujeto.
Tema 33. El ejercicio del ministerio sagrado. La participación de los ministros en el triplex
munus. La santificación en el ejercicio del ministerio. La dinámica de la interrelación entre
sacerdocio bautismal y ministerial.
Unidad Didáctica 9: El sacramento del Matrimonio
Tema 34. El designio de la Trinidad sobre la unión conyugal. El hombre y la mujer en el
designio salvífico divino. La unión conyugal en el designio salvífico de Cristo. Exégesis de Ef 5,
21-33.
Tema 35. El matrimonio en la tradición y en el magisterio. Alusiones a la historia del
sacramento. El pensamiento de los Reformadores y el concilio de Trento. El Concilio Vaticano II
y la Familiaris consortio.
Tema 35. Comprensión teológica del sacramento. La cuestión de la institución. El gesto
sacramental. El Ordo celebrandi matrimonium: prenotandos y ritos. Los ministros. El
significado unitivo y procreador del consentimiento matrimonial. El vínculo matrimonial. Sus
propiedades. La gracia sacramental. La familia.

entaciones generales para la asignatura

El lector que ha considerado el programa de la asignatura advierte que esta materia resulta
más extensa que otras debido a la amplísima temática que abarca. Pero, al mismo tiempo, el
tratado de los sacramentos presenta un atractivo especial ya que nos sitúa ante realidades que
no nos resultan extrañas o indiferentes y sobre las que ya tenemos alguna experiencia. Somos
muchos, en efecto, los cristianos que hemos tenido nuestra primera relación objetiva con Dios
mediante los sacramentos; casi siempre a través de la participación en la Eucaristía dominical o
en el bautismo o primera comunión de algún hermano o amigo. De otra parte, hemos oído
decir que la participación frecuente en las celebraciones litúrgicas es un indicio de la fe de un
bautizado. Siendo esto así, podemos haber constatado, sin embargo, que muchos cristianos,
cuando participan en la eucaristía dominical, o en la celebración del matrimonio de un amigo,
lo hacen como si fuesen mudos espectadores o meros invitados. Ignoran, de hecho, el
significado de esos ritos. En otras palabras: podemos tener la sensación de que los
sacramentos son unas prácticas buenas, pero de las que se podría prescindir sin quedar
particularmente afectados; que son ritos que poco o nada influyen la vida de cada día.

Tal coyuntura podría responder a una catequesis sobre los sacramentos que ha sido, en
ocasiones, deficiente. Es verdad que la reforma litúrgica promovida por el Concilio Vaticano II
ha contribuido a que los fieles comprendan mejor lo que celebran en los sacramentos, y que la
catequesis sobre la Eucaristía, el Bautismo y la Confirmación ha experimentado una notable
mejoría. Pero muchos fieles continúan sin captar el sentido profundo de los sacramentos y lo
que éstos implican respecto a la vida de santidad, propia de la Iglesia. Esta asignatura
proporciona los elementos necesarios para colmar este déficit. Estamos, por tanto, ante un
tratado interesante. Es cierto que no todo se resuelve con ideas más o menos claras, pero sin
ellas poco o nada se puede hacer. Baste pensar, por ejemplo, en las experiencias que, al
apartarse de la doctrina o disciplina sacramentaria de la Iglesia, han contribuido a aumentar la
confusión y el despego de los fieles de los sacramentos; o a convertir los sacramentos en
prácticas sentimentales, en vez de medios eficaces para divinizarnos.

El alumno se va a encontrar, no obstante, con un tratado que le exigirá un no pequeño


esfuerzo de comprensión y reflexión. Se le puede presentar una tentación de superficialidad
cuando aborde cuestiones que ya conoce en parte, como ocurre con los sacramentos del
Bautismo, Confirmación, Eucaristía y Penitencia. Y se le puede presentar la tentación del
abandono en el momento en que lleguen las cuestiones difíciles, de las que el tratado no está
exento. Al concluir el estudio de la asignatura ―que comporta no sólo la comprensión de las
cuestiones sino también su derivación práctica a la vida personal y comunitaria― el alumno
podrá dar cumplida respuesta al modo elegido por Dios para la dispensación de su designio
salvífico en la Iglesia.

El diseño del programa permite apreciar el andamiaje de la asignatura integrado por dos
segmentos homogéneos pero desiguales. El primero corresponde a la Primera Parte y el
segundo a las tres restantes. El primer bloque representa para la asignatura lo que los
cimientos para un edificio: no se ven, pero sobre ellos se construye con solidez o sin
fundamento. Aborda, en efecto, las cuestiones básicas y comunes a todos los sacramentos,
ofreciendo una visión sintética global. El segundo bloque responde la necesidad de dar cuenta
de cada uno de los sacramentos en particular. Éstos se agrupan, a su vez, en tres secciones, a
las que corresponden respectivamente nuestras tres Partes: sacramentos de la Iniciación
cristiana (Bautismo, Confirmación y Eucaristía), sacramentos de sanación (Penitencia y Unción)
y sacramentos al servicio de la comunión (Orden y Matrimonio).

Orientaciones para la Parte 1ª

Objetivo y principales contenidos

Esta zona inicial aborda las cuestiones fundamentales y comunes a todos los sacramentos, las
cuales estarán informando, de un modo u otro, el estudio subsiguiente de toda la teología de
cada sacramento.

Una compresión adecuada de los sacramentos requiere captar previamente la noción de


historia de la salvación, de modo que las celebraciones sacramentales siempre sean
contempladas como momentos-síntesis de esa misma historia, prosecución en el tiempo de la
Iglesia de las magnalia Dei. Por eso, el estudio se inicia con el análisis de los conceptos
mysterion y sacramentum, de tanta carga teológica en nuestra asignatura.

De otra parte, conviene mucho entender siempre los sacramentos como lo que son: actos de
Cristo, en un doble sentido: en cuanto que son acciones instituidas por Él y en cuanto que Él
obra en ellos. Jesucristo ha entregado los sacramentos a la Iglesia, a la que ha dado una cierta
potestad sobre los mismos. Será preciso aclarar bien los perfiles de esta potestad, lo cual —
esto es importante— será determinado a partir, sobre todo, de lo que la praxis de la Iglesia ha
venido haciendo a lo largo de los siglos.

Los sacramentos, además, aparecen como eventos en cuyo seno acontece nuestro encuentro
con el Resucitado a través de los cuales nos difunde su vida divina. Esta perspectiva caracteriza
la vida cristiana como una realidad eminentemente sacramental.

Desde el punto de vista antropológico, los sacramentos no son para los ángeles, sino para los
hombres. Divinizan nuestra vida, reclaman la fe subjetiva, forman parte integrante de la fe
objetiva y, desde el punto de vista pedagógico, son elementos valiosísimos para la
evangelización.

En conclusión: a la pregunta ¿qué es un sacramento? se responde técnicamente partiendo de


los datos revelados, tal y como los entiende el Magisterio y la teología católica. Esa respuesta
exige conocer el proceso de reflexión y la historia de cómo se ha elaborado este tratado en la
Iglesia. Una vez delineada la naturaleza de los sacramentos, los veremos desde su momento
celebrativo, es decir, como realidad litúrgicas de glorificación de Dios y santificación del
hombre. Esta acciones litúrgicas son eficaces, es decir, poseen la virtud de causar lo que
significan, a saber: la gracia. La eficacia de los sacramentos es uno de los focos centrales de
esta materia. Todos los sacramentos causan la gracia; algunos, además, tienen otro efecto: el
carácter, impreso a modo de sello dinámico o como un proyecto divino de vida que distingue
al sujeto de los demás y le capacita para desempeñar importantes funciones públicas en la
Iglesia y para la Iglesia. Esta primera Unidad Didáctica concluye con algunas cuestiones teórico-
prácticas relativas a los ministros y a los sujetos de los sacramentos en general.

Bibliografía específica

- Ambrosio de Milán, Los sacramentos y los misterios, Apostolado mariano 1991.

- Catecismo de la Iglesia Católica, nn.1213-1134.


- Conferencia Episcopal Española, La iniciación cristiana. Reflexiones y orientaciones, Edice
1999.

- G.-A. Martimort, La Iglesia en oración, Herder 1992.

- N. Cabasilas, La vida en Cristo, Patmos4 1999.

- R. Arnau, Tratado general de los Sacramentos, BAC (Serie de Manuales de Teología), Madrid
1994.

- Ritual del Bautismo de Adultos y Ritual del Bautismo de Niños. Prenotandos.

- S. Marsili, Los signos del Misterio de Cristo, EGA 1993.

- Tomás de Aquino, Summa Theologiae, qq. 60-65.

Programa

INTRODUCCIÓN

El tratado dogmático "de Ecclesia".


1. El método en la teología eclesiológica.
2. Función de la fe, por la que se accede al misterio de la Iglesia, en la elaboración científica de
la eclesiología dogmática.
3. Posición del tratado de Ecclesia en el conjunto de la Teología Dogmática.
4. Relaciones de la eclesiología con la Teología Pastoral y el Derecho Canónico.

I. BREVE HISTORIA DE LA ECLESIOLOGÍA


1. La Iglesia en el Nuevo Testamento. Rasgos fundamentales.
2. El artículo eclesiológico del Símbolo de los Apóstoles.
3. La Edad patrística. Los Padres de los tres primeros siglos. La edad de oro de la Patrística
griega. Tradición oriental y tradición latina en eclesiología. La doctrina eclesiológica de S.
Agustín y su influencia en la teología católica posterior.
4. Edades medieval y moderna. La teología escolástica, en especial Santo Tomás. Relevancia
eclesiológica del alejamiento de la Cristiandad oriental. Magisterio del Concilio de Florencia. La
reforma protestante y sus problemas eclesiológicos. El Magisterio del Concilio de Trento en
cuestiones de Ecclesia. La teología postridentina.
5. Teología y Magisterio en la eclesiología contemporánea. El Concilio Vaticano I y el
Magisterio posterior. La teología de Ecclesia en el siglo XX. El Concilio Vaticano II y su
importancia eclesiológica.
6. Trascendencia de la espiritualidad y la teología del laicado en eclesiología. Su significado en
la renovación eclesiológica que lleva al Vaticano II y en la panorámica actual de la eclesiología.

II. EL ORIGEN DE LA IGLESIA


A. LA PREPARACIÓN DE LA IGLESIA EN LA HISTORIA DE LA SALVACIÓN
7. La Alianza de Dios con los hombres (I). Relación de la humanidad con Dios después del
pecado de Adán: la expectación del Redentor. Las alianzas de Dios con los hombres, como
figuras y anticipos de la Iglesia: la noción de "alianza"; la triple alianza de Dios con Noé,
Abraham y Moisés.
8. La Alianza de Dios con los hombres (II). El pueblo de Israel, en cuanto es figura de la Iglesia,
nuevo pueblo de Dios: terminología; el pueblo nacido de la antigua alianza. La nueva alianza
prometida para el tiempo mesiánico: el Mesías y el "resto de Israel"; el pueblo que habría de
nacer de la nueva alianza; el Israel según el Espíritu.

B. LA IGLESIA EN CUANTO QUE TIENE SU ORIGEN EN CRISTO


9. Iglesia y Reino de Dios:
a) El concepto de Iglesia en el Nuevo Testamento: terminología; la realidad de la Iglesia;
b) El Evangelio del Reino: el Reino de Dios y su expectación en el Antiguo Testamento; el Reino
predicado por Jesús en su vida terrestre, naturaleza de este Reino;
c) Relación entre Reino e Iglesia: estado de la cuestión y doctrina del Magisterio; la Iglesia y la
dimensión espiritual del Reino.

10. Los actos de Cristo en orden a la fundación y nacimiento de la Iglesia:


a) Doctrina del Magisterio eclesiástico acerca del origen cristológico de la Iglesia;
b) Presupuestos hermenéuticos para el examen de la cuestión del origen de la Iglesia;
c) La actividad de Cristo en orden al nacimiento de la Iglesia:
aa) los actos de Cristo que preparan la Iglesia: la constitución de la comunidad de los
discípulos; elección y misión de los "Doce"; la vocación y la misión de Pedro;
bb) la Ultima Cena del Señor en cuanto anticipa el misterio de la Iglesia;
cc) los actos de Cristo resucitado por los que se confiere a Pedro y a los Doce la potestad en la
Iglesia;
d) La misión del Espíritu Santo y su significación en la originación de la Iglesia.

11. Cristo, fundador y fundamento de la Iglesia.


a) La Encarnación redentora como fundamento de la Iglesia.
b) Significación de los "acta et passa Christi in carne" para la fundamentación de la Iglesia:
valor eclesiológico de los "misteria vitae Christi".
b) El misterio pascual (muerte y resurección de Jesús), fundamento inmediato de la Iglesia; el
tema patrístico de la Iglesia nacida "de latere Christi".

C. LA IGLESIA EN CUANTO QUE TIENE SU ORIGEN EN LA TRINIDAD


12. Trinidad e Iglesia. El origen de la Iglesia en el amor fontal del Padre. La Iglesia como fruto
de la doble misión del Hijo y del Espíritu. La impronta permanente de las Personas trinitarias
en el ser y en la misión de la Iglesia. Trinidad, Eucaristía e Iglesia. La Trinidad Santísima, modelo
y fin de la Iglesia. Diferencia radical entre la Iglesia y todas las demás instituciones humanas: el
carácter sobrenatural de la Iglesia.

III. EL MISTERIO DE LA IGLESIA


13. Introducción: cuestiones metodológicas; el tema en la Const. Dogm. Lumen gentium.

A. Revelación del misterio de la Iglesia en la Sagrada Escritura


14. La Iglesia, nuevo Pueblo de Dios:
a) las imágenes simbólicas con las que se ilustra el misterio de la Iglesia en la Sagrada Escritura;
b) La Iglesia, nuevo Pueblo de Dios:
aa) terminología;
bb) la realidad del nuevo Pueblo de Dios en los testimonios del Nuevo Testamento: textos
principales; consideración de conjunto del nuevo Pueblo de Dios en el Nuevo Testamento;
cc) la doctrina de la Const. dogm. Lumen gentium.

15. La Iglesia, Cuerpo Místico de Cristo:


a) Introducción al tema;
b) Doctrina de S. Pablo en 1 Corintios y Romanos: 1 Cor 6, 12-19; 1 Cor 10, 14-22; 1 Cor 12 y
Rom 12; síntesis;
c) Doctrina de las cartas a los Efesios y a los Colosenses: Cristo, Cabeza de la Iglesia; la Iglesia,
Cuerpo de Cristo;
d) La Iglesia, Esposa de Cristo; e) La doctrina de la Const. dogm. Lumen gentium.

16. La Iglesia, Templo del Espíritu Santo.


a) La misión del Espíritu Santo a los discípulos en el evangelio de S. Juan.
b) El Espíritu Santo en la comunidad cristiana según los Hechos de los Apóstoles y el Corpus
paulinum.
c) El Espíritu Santo y la unidad de la Iglesia.
d) La pneumatología en las imágenes "Pueblo de Dios" y "Cuerpo de Cristo";
e) la doctrina en la Const. dogm. Lumen gentium.

B. Reflexión teológica sobre el misterio de la Iglesia


17. La coherencia entre las diversas nociones eclesiológicas. Modo en que la noción de Cuerpo
de Cristo ayuda a la profundización en el misterio de la Iglesia; modo en que la noción de
Pueblo de Dios sirve al mismo fin; la fórmula eclesiológica en la que se unen ambas nociones.
Modo en que la noción Templo del Espíritu ayuda a la profundización en el misterio de la
Iglesia revelado en las otras dos nociones.

18. La Iglesia, misterio de comunión.


a) Determinación ulterior de la esencia de la Iglesia;
b) La esencia íntima y última de la Iglesia: el misterio de la comunión de los hombres con Dios y
entre sí: con el Padre por el Hijo en el Espíritu Santo;
c) Exposición sistemática de esa esencia íntima: comunión de los hombres con Dios y entre sí;
la comunión con el Padre ("principium sine principium"); la comunión por el Hijo (la función de
Cristo en esa comunión); la comunión en el Espíritu Santo (el Espíritu Santo como don del
Padre y del Hijo y principio de la unidad de la Iglesia).

C. La Iglesia universal en el tiempo: el despliegue histórico-salvífico de la Iglesia


19. Los "estados de la Iglesia".
a) La Iglesia en el Antiguo y en el Nuevo Testamento;
b) Los tres "estados" en que se da ahora el misterio de la Iglesia: doctrina de la Const. Lumen
Gentium cap. VII;
c) consideración dinámica del binomio "Ecclesia in terris"- "Ecclesia in patria"; estatuto
teológico de la "Ecclesia in patria" o Iglesia consumada; estatuto teológico de la "Ecclesia in
terris" o Iglesia que camina en la historia (peregrinante, militante); la Iglesia que se purifica;
d) "Communio sanctorum": qué significa aquí "communio"; qué debe entenderse aquí por la
palabra "sanctorum"; las relaciones que se dan en el seno de esta comunión.

D. La Santísima Virgen María, Madre de Dios, en el misterio de Cristo y de la Iglesia.


20. La Virgen María, "tipo" de la Iglesia. La Virgen María, Madre de la Iglesia. Estudio del cap.
VIII de la Const. Lumen Gentium.

IV. LA ESTRUCTURA DE LA IGLESIA PEREGRINA


El “signo” visible del “mysterium communionis”
1. La Sacramentalidad de la Iglesia
2. La necesidad de la Iglesia para la salvación
3. La incorporación a la Iglesia
4. La forma histórica del “mysterium communionis”
5. La Estructura Fundamental de la Iglesia
A. Communio fidelium
1. Fieles y Sagrado ministerio
2. Los carismas en la Iglesia
B. Communio hierarchica
1. El ministerio apostólico y su sucesión
2. El Primado papal
3. El Colegio Episcopal y su Cabeza
4. El «Ordo presbyterorum» y el Diaconado
C. Communio Ecclesiarum
1. La comunión universal de Iglesias
2. La Iglesia particular
3. Las agrupaciones de iglesias particulares

Descripción

En la liturgia, la Iglesia celebra el misterio de Cristo. El culto litúrgico es, por ello, la acción
eclesial que celebra la obra de nuestra redención en Cristo. La asignatura ofrece una primera
aproximación teológica al misterio de la liturgia, según las claves enunciadas en el Concilio
Vaticano II. A lo largo del programa se expone cómo durante el tiempo de la Iglesia, Cristo vive
y actúa por los sacramentos. En otras palabras, el presente curso estudia detenidamente
aquello que la tradición común de Oriente y Occidente llama "la economía sacramental": la
comunicación del misterio pascual de nuestra salvación en Cristo.
PROGRAMA

Introducción: Cristo, único camino al Padre

Prefacio del Sagrado Corazón.

Una lámina del Catecismo.

Opus nostrae redemptionis exercetur.

Consideraciones metodológicas y orden de la exposición.

Lectura tipológica.
Perspectiva: desde el fin de la celebración.
El título de nuestro curso.

Tema 1: El misterio anunciado y realizado

1.1.- Historia de la salvación y alianza.

1.2.- El misterio anunciado: el mysterion en el AT y en el NT.

1.3.- La Pascua y el culto de Israel.


1.4.- El misterio realizado: la plenitud de los tiempos y el misterio pascual.

1.5.- El memorial y la institución de los sacramentos. Objeto y agente del memorial. La


epíclesis (I).

1.6.- La vida de la comunidad apostólica: vida y liturgia.

Conclusión: Cristo, el cordero de Dios y el sumo Sacerdote (Ap y Hb): la insuficiencia del
sacrificio en el AT y en el NT. Los títulos cristológicos y el culto de Cristo.

Tema 2: El misterio celebrado

2.1.- Liturgia y celebración.

2.1.1.- Etimología. Uso en el latín cristiano.

2.1.2.- Aproximación desde la antropología y la teología. Rito y encuentro.

2.1.3.- Aproximación teológica a la celebración. Signo y causa. Los siete sacramentos y el signo
sacramental.

2.1.4.- Qué se celebra: el misterio del culto cristiano.

2.2.- Los sujetos de la celebración.

2.2.1.- Liturgia celeste y terrestre: el Cristo total.

2.2.2.- El ministro y la asamblea, signos de la mediación de Cristo y de la Iglesia.

a.- El Espíritu y su acción: epíclesis (II). Res et sacramentum.

b.- Ministros, ministerios litúrgicos y de facto.

c.- La validez y la licitud: el papel de la Iglesia.

2.3.- Las palabras y las acciones en la celebración.

2.3.1.- Cómo se celebra:

a.- La dimensión teológica de las rúbricas. Los libros litúrgicos.

b.- La belleza y el decoro de la celebración.

c.- Palabra, eucología y canto.

d.- Los símbolos litúrgicos.

2.3.2.- Cuándo y dónde se celebra.


2.3.3.- Participación litúrgica y el arte de celebrar y de presidir.

2.3.4.- La sacramentalidad gradual de las celebraciones litúrgicas.

Conclusión: “Celebrar para la gloria de Dios Padre y la vida del mundo”.

Tema 3: La vida cristiana, conformada por la celebración

3.1.- La iniciación cristiana: bautismo, confirmación y eucaristía.

3.2.- El nuevo culto de los cristianos (Jn 4, Rm 12, 1Pe 2).

3.3.- Gracia y fructuosidad.

3.4.- Liturgia y oración. La espiritualidad litúrgica.

3.5.- El envío misionero.

Conclusión: “La progresiva transfiguración del cristiano en adorador del Padre en Espíritu y en
Verdad”.

Apéndice: Desde la historia de la liturgia.

Ritos y familias rituales de Oriente y Occidente.

La historia del rito romano.

Las reformas de la liturgia.

La inculturación.

Vocabulario | Bibliografía

Programa

16. La "psicología" de Cristo. Planteamiento. Ciencia y conciencia de Jesús. Momentos


fundamentales de la reflexión teológica sobre la conciencia de Cristo. Planteamiento en el
modernismo. Explicaciones teológicas: teorías sobre el "yo humano de Jesús; la teoría de
K.Rahner; los manuales. La "fe" de Jesús. Creación, Encarnación, Misión como claves para
interpretar la conciencia de Jesús.
17. La santidad de Jesús. Voluntad y libertad de Jesús. La impecabilidad de Jesús. La santidad
de Jesús. La triple gracia de Cristo: de unión, singular, capital. Las tentaciones de Jesús.

SEGUNDA PARTE

Cristo, Mediador y Salvador

I. Salvación y mediación

1. La soteriología: teología del Salvador y de la salvación. La palabra y el concepto de salvación


en la Escritura. «Por nosotros», «por nuestros pecados», «por nuestra salvación». El
testimonio dogmático. Los reformadores del siglo XVI: la cólera de Dios se abate sobre Cristo.
Teología católica

2. La mediación de Cristo. La mediación de Cristo en la Sagrada Escritura. Mediación de Cristo y


recapitulación en san Ireneo. La experiencia de la mediación de Cristo en san Agustín. De Cristo
mediador a Cristo sacramento. Mediación y soteriología en la Edad Media. La mediación en la
teología moderna y contemporánea. Mediación descendente y mediación ascendente.

II. Mediación descendente

3. Cristo revelador. Revelación y salvación

4. Cristo, Redentor. Noción de redención; el precio de la redención; objeto de la redención del


hombre; la cuestión del "rescate".

5.Cristo liberador. La salvación como liberación. Teología y teologías de la liberación.

6.Cristo divinizador. Filiación divina. Divinización y plenitud humana.

7.Cristo, justicia de Dios. La justicia de Dios en la Biblia. Pelagio y Agustín. La “sola gratia” y
“sola fides” de Lutero. Trento: Decreto sobre la justificación.
III. Mediación ascendente

8. El sacrificio de Cristo. Jesús y el sacrificio. La muerte de Cristo en la Cruz como sacrificio

9. Expiación y propiciación. Antiguo Testamento. Nuevo Testamento. Carta a los Hebreos

10. Satisfacción. La “satisfacción vicaria”. El principio de solidaridad.

11. Reconciliación. Sacerdocio de Cristo.

IV.“Acta et passa Christi”

12.Infancia de Jesús. Vida oculta.

13.Vida pública. Bautismo. Tentaciones. Signos y milagros.

14. Pasión. Sacrificio de la Cruz.

15. Muerte

16. “Descendió a los infiernos”

17. Resurrección. Valor soteriológico. El estado de la humanidad resucitada de Cristo.

18. Ascensión. Pentecostés

19. La venida del Hijo del hombre “en carne” y “en gloria”
https://aula-virtual.unav.edu/webapps/blackboard/content/listContent.jsp?
course_id=_20548_1&content_id=_1003318_1&mode=reset
https://aula-virtual.unav.edu/webapps/blackboard/content/listContent.jsp?
course_id=_20565_1&content_id=_1004753_1&mode=reset
https://aula-virtual.unav.edu/webapps/blackboard/execute/content/blankPage?
cmd=view&content_id=_1002269_1&course_id=_20537_1&mode=reset

También podría gustarte