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JURISPRUDENCIA TC permite que persona con DNI caduco pueda abordar avión
RELEVANTE en salvaguarda de la libertad de tránsito
COMENTADA
STC Exp. N° 02310-2013-PA/TC 245
TENDENCIAS DE
JURISPRUDENCIA La propiedad 328
CIVIL
ÍNDICE DE SUMILLAS
* Constitucionalista.
Es digno de resaltar tras la histórica edición afecto y de adhesión a los postulados y fines
del número 100 de Gaceta Constitucional, adscritos al texto supra de la República.
que ella brinda un doble aporte al sistema ju-
dicial y a la democracia; así de un lado apare- En efecto, toda Constitución, como cual-
ce la correcta y pronta información que ofrece quier obra humana, es en sí misma incom-
sobre la jurisprudencia en materia constitu- pleta, máxime cuando es la consecuencia
cional, y del otro, su significativa contribu- de un compromiso político asumido por las
ción al robustecimiento del sentimiento de fuerzas sociales y los grupos partidarios que
* Constitucionalista.
16
EDICIÓN ESPECIAL
Gaceta Constitucional:
Una revista multidisciplinaria
de análisis crítico
Por motivo del Tomo 100 de Gaceta Cons- ello, la labor de sistematización y comenta-
titucional aprovecho para recalcar la impor- rio a cargo de Gaceta Constitucional demo-
tante labor que cumple este medio. En pri- cratiza el acceso a la información respecto
mer lugar, contribuye a a los principales criterios
que los abogados litigan- La labor de sistematización del Supremo Intérprete de
tes estén informados de
los criterios establecidos
y comentario a cargo de la Constitución.
por el Tribunal Constitu- Gaceta Constitucional de- En segundo lugar, la re-
cional. Como una publi- mocratiza el acceso a la vista cumple un rol fun-
cación útil y versátil para información. damental incentivando el
los litigantes, en su forma- ejercicio del derecho con
to actual la revista facilita el que cuenta la ciudada-
el acceso al conocimien- nía en general de formular
to de la jurisprudencia y los precedentes del críticas a las resoluciones judiciales. De esta
Colegiado. No todos los abogados pueden manera, el análisis de las principales resolu-
revisar diariamente la página web del TC ciones del TC que nos brinda Gaceta Cons-
para conocer las resoluciones dictadas y, por titucional por parte de diversos especialistas,
* Constitucionalista.
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EDICIÓN ESPECIAL
nos permite contar con opiniones informadas en todas las áreas del ordenamiento jurídico.
efectuadas desde diversos ángulos que enri- Suele decirse que “el Derecho se está consti-
quecen la lectura de las sentencias. tucionalizando y la Constitución se está judi-
Finalmente, y como corolario de lo anterior, cializando”. Resulta fundamental que se exa-
la revista brinda un valioso enfoque multidis- minen las sentencias del TC desde las distintas
ciplinario para el estudio de las sentencias del especialidades del Derecho. Ello nos brinda
Tribunal Constitucional. En la actualidad se re- un verdadero enfoque multidisciplinario que
conoce que el Derecho Constitucional influye no se suele apreciar en otras publicaciones.
RESUMEN
del despedido en desmedro del pago de una indemnización. Asimismo, tiene a bien desa-
rrollar los alcances del amparo laboral, a partir del análisis del precedente vinculante re-
caído en el Exp. N° 00206-2005-PA/TC (caso Baylón Flores), en donde el Colegiado se
pronunció respecto a las vías procedimentales igualmente satisfactorias al amparo en ma-
teria laboral.
1 Al respecto pueden verse, entre otros, CORTÉS CARCELÉN, Juan Carlos. “Flexibilidad en la terminación de la
relación de trabajo por decisión unilateral del empleador”. En: Estudios sobre la flexibilidad en el Perú. Ob. cit.,
p. 161 y ss.; y VINATEA RECOBA, Luis. “El derecho de estabilidad laboral en la nueva Constitución”. En: Aseso-
ría Laboral. Lima, enero de 1994, p. 19.
2 NEVES MUJICA, Javier. “La estabilidad laboral en la Constitución de 1993”. En: La Constitución de 1993. Aná-
lisis y comentarios II. Lecturas sobre temas constitucionales. N° 11. Comisión Andina de Juristas. Lima, 1995,
p. 48.
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EDICIÓN ESPECIAL
3 En caso exista una suspensión de labores, hay que atender a las remuneraciones reales que se han percibido en el se-
mestre anterior, como señala la sentencia de Casación N° 1393-98 de la Sala de Derecho Constitucional y Social:
“La recurrente sostiene que (...) para obtener el promedio de estas remuneraciones debe tomarse estrictamente las
percibidas durante los últimos seis meses anteriores al despido, hayan sido laborados o no, (...) sin embargo, debe
interpretarse que la norma en cuestión pone énfasis en los ingresos percibidos en el tramo final de la relación labo-
ral y no el periodo calendario que precede al despido, por cuanto la base para determinar el promedio de una canti-
dad es el total de las sumas efectivamente recibidas y no los vacíos que no reflejan cifra alguna, por lo que no pue-
den ser computables los periodos no laborados por razón de una suspensión perfecta del contrato de trabajo (...) en
caso contrario, de aceptarse la interpretación propuesta por la recurrente, se tendría que admitir que un trabajador
con remuneración fija, no percibiría ninguna indemnización si el mes anterior al despido hubiera estado suspendido,
o también si este mismo trabajador con remuneración variable, hubiera estado suspendido durante los últimos seis
meses, lo cual resulta incongruente”.
4 Como se recordará, fue la sentencia del TC correspondiente al Expediente N° 01124-2001-AA/TC del 11 de julio
de 2002, la misma que fue materia de una resolución aclaratoria del 16 de setiembre de 2002, la que marcó el inicio
del nuevo criterio jurisprudencial en materia de estabilidad laboral que importó la inaplicación de las normas lega-
les que disponían el pago de la indemnización ante despidos incausados. Como se sabe, en este caso, ante la alega-
ción de una amenaza de despidos arbitrarios, las organizaciones sindicales de Telefónica interpusieron una acción
de amparo por transgresión al derecho al trabajo, libertad sindical, igualdad ante la ley, debido proceso, legítima de-
fensa y tutela jurisdiccional efectiva. Esta acción de amparo, en última instancia, fue declarada fundada por el TC
que ordenó la reposición de los trabajadores sindicalizados despedidos en forma incausada, así como la abstención
de la empresa de incurrir en posteriores despidos. En realidad, las acciones de amparo que se resolvieron con ante-
rioridad a la sentencia comentada no declararon la inconstitucionalidad de las normas legales que prevén el pago de
la indemnización como mecanismo de protección ante un despido, y cuando el TC declaró fundada una demanda y
ordenó la reposición, lo hizo sobre la base de otros derechos constitucionales vulnerados (debido proceso, derecho
de defensa, presunción de inocencia, etc.) conjuntamente con el derecho al trabajo. Hemos registrado un solo caso
donde se declaró fundada la demanda de amparo sobre la exclusiva lesión al derecho del trabajo (sentencia recaída
en el Expediente N° 111-96-AA/TC) pero luego, por una extraña fe de erratas, fue modificada en su parte resolutiva
al establecerse que se declaraba fundada la acción pero no se ordenaba la reposición del trabajador.
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EDICIÓN ESPECIAL
precedente que pueden tener sus resolucio- En materia laboral, resulta emblemático el
nes o, cuando menos, el llamado por Casas tratamiento de los amparos que cuestionan
Baamonde, “efecto contagioso” de las reso- los despidos. Sobre este tema, desde la sen-
luciones que emite tanto la jurisdicción cons- tencia que ordenó la reposición de trabaja-
titucional como la ordinaria. Posteriormente, dores despedidos recaída en el Expediente
brindaremos algunos alcances sobre el dere- N° 01124-2001-AA/TC –aclarada posterior-
cho de estabilidad laboral y el derecho al tra- mente mediante una resolución de fecha 16
bajo. En este punto, trataremos de establecer de setiembre de 2002– que luego fue conva-
las implicancias del artículo 27 de la Consti- lidada por la sentencia que fijó los criterios
tución así como el desarrollo normativo que centrales del TC en materia de despidos (Ex-
ha tenido este precepto constitucional. pediente N° 00976-2001-A/TC), y finalmente
la sentencia que estableció los parámetros pro-
En los últimos años, el TC ha modificado ra-
cesales de procedencia de las acciones de am-
dicalmente el sistema de protección de dere-
paro (Expediente N° 00206-2005-AA/TC).
chos laborales, habiendo emitido una serie de
Para el TC, la Constitución reconoce como
resoluciones que han incidido enormemen-
derechos fundamentales laborales, la pro-
te en las relaciones laborales, tales como es-
tección contra los despidos incausado, frau-
tabilidad laboral, jornada de trabajo atípica,
dulento y nulo, dentro de un marco donde el
pensiones, edad de jubilación, control sobre
artículo 27 de la Constitución indica expresa-
el uso del correo electrónico laboral, faculta-
mente que la forma de protección constitucio-
des del empleador, etc. El tema laboral más
nal contra el despido arbitrario lo determina y
representativo ha sido, qué duda cabe, el cri-
fija el legislador. Esta será la temática central
terio del TC sobre la estabilidad laboral, que
que abordaremos.
ha generado la ampliación de los supuestos de
reposición al centro de trabajo, especialmente IV. EL CRITERIO DE RESIDUALIDAD DE
de los despidos sin expresión de causa (llama- LA ACCIÓN DE AMPARO
dos, generalmente, despidos improcedentes).
Ante la avalancha de procesos de amparo –el
Teniendo en cuenta que el TC es el órgano de cual se denominó como “amparización” de lo
control de la Constitución y que, precisamen- laboral– así como el marco jurídico brinda-
te, las acciones de amparo se interponen con- do por el Código Procesal Constitucional, el
tra la transgresión de derechos constituciona- TC delimitó las acciones de amparo en ma-
les, las decisiones que emite revisten enorme teria laboral. En primer término, tenemos la
importancia y trascendencia en nuestro orde- instauración del criterio de “residualidad” de
namiento jurídico. De las materias recurren- los procesos constitucionales. En efecto, el
tes que se ventilan ante el TC, una de ellas es numeral 2 del artículo 5 del Código Procesal
la laboral y, de esta, el derecho frecuentemen- Constitucional prevé, como causales de im-
te invocado por los accionantes –además del procedencia de los procesos constitucionales
derecho previsional– se refiere a la estabili- –entre los cuales está la acción de amparo–,
dad laboral. Los criterios que ha empleado el lo siguiente:
TC para resolver las acciones de amparo han “No proceden los procesos constitucio-
sido variables y contradictorios dentro del es-
nales cuando: (...) existan vías procedi-
pacio temporal –no se aprecia un criterio uní-
mentales específicas, igualmente satis-
voco en el tiempo aunque ha tendido hacia la
factorias, para la protección del derecho
unificación y el establecimiento de sentencias
constitucional amenazado o vulnerado”.
vinculantes–, ha utilizado en ciertos casos ar-
gumentos de carácter constitucional y otros Entonces, estamos ante una acción de amparo
de nivel primario –legal–, etc. residual. Ahora resulta aplicable la conocida
5 SAGÜÉS, Néstor. Derecho Procesal Constitucional. Acción de amparo. Editorial Astrea. Buenos Aires, 1988, p. 16.
6 ABAD, Samuel. “La acción de amparo y vías paralelas”. En: Lecturas sobre temas constitucionales N° 4. Comisión
Andina de Juristas. Lima, 1990, p. 144. Además, puede leerse LAZZARINI, José. El juicio de amparo. Editorial La
Ley. Buenos Aires, 1967, p. 123.
7 SAGÜÉS, Néstor. Ob. cit., pp. 169-170.
8 GARCÍA BELAUNDE, Domingo. “La jurisdicción constitucional en el Perú”. En: AA.VV. La jurisdicción consti-
tucional en Iberoamérica. Madrid, 1996, p. 848.
9 En este punto, no queremos dejar de mencionar que, cuando menos en una oportunidad, la Tercera Sala Laboral de
Lima se ha pronunciado sobre las relaciones de las acciones de amparo y las laborales, ante un despido arbitrario. Al
respecto, la ejecutoria recaída en el Expediente N° 4694-97-BS-S del 7 de octubre de 1997, indica que la acción de
amparo es una vía excepcional, “a la cual se debe acudir ante la inoperancia de las demás vías procesales”.
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EDICIÓN ESPECIAL
calificado como de confianza. De esta mane- la vía idónea y eficaz para restablecer el
ra, por la posición que ocupan, el personal de ejercicio de su derecho constitucional vul-
confianza no tiene acceso a la acción de am- nerado, y no el proceso judicial ordinario
paro que importa una reposición al centro de de que se trate”.
trabajo sino al reclamo de una indemnización
(vía ordinaria)11. Al respecto, consideramos Y, concretamente sobre los procesos de am-
que, en rigor, el TC debería referirse, en el ré- paro laborales, el TC precisó en el Expedien-
gimen laboral privado, al personal de direc- te N° 00206-2005-AA/TC:
ción pues este ocupa cargos directivos, pues “(...) los criterios jurisprudenciales esta-
el personal de confianza no necesariamente blecidos en el caso Eusebio Llanos Huas-
ocupa puestos de alta dirección y compren- co, Expediente N° 00976-2004-AA/TC,
de a todos aquellos que manejan informa- para los casos de despidos incausados (en
ción reservada, emiten informes relevantes, los cuales no exista imputación de causa
etc. (puede incluirse a la secretaria del geren- alguna), fraudulentos y nulos, se manten-
te general)12. drán en esencia. En efecto, si tal como he-
Ahora bien, tras la dación del Código Pro- mos señalado, el contenido del derecho
cesal Constitucional así como la propia evo- constitucional a una protección adecuada
lución del TC, este último ha ido limitando contra el despido arbitrario supone la in-
los alcances de la acción de amparo. En ma- demnización o la reposición según corres-
teria laboral, la emblemática sentencia recaí- ponda, a elección del trabajador, entonces,
da en el Expediente N° 206-2005-AA/TC, en caso de que en la vía judicial ordinaria
que tiene carácter de precedente vinculante no sea posible obtener la reposición o la
de acuerdo con el artículo VII del Título Pre- restitución del derecho vulnerado, el am-
liminar del Código Procesal Constitucional, paro será la vía idónea para obtener la pro-
destacó lo siguiente: tección adecuada de los trabajadores del
“Consecuentemente, solo en los casos en régimen laboral privado, incluida la repo-
que tales vías ordinarias no sean idóneas, sición cuando el despido se funde en los
satisfactorias o eficaces para la cautela del supuestos mencionados”.
derecho, o por la necesidad de protección La sentencia del TC intenta delinear los su-
urgente, o en situaciones especiales que puestos en los cuales resulta posible una ac-
han de ser analizadas, caso por caso, por ción de amparo en materia laboral, y este es-
los jueces, será posible acudir a la vía ex- fuerzo es acertado para detener el proceso de
traordinaria del amparo, correspondiendo “amparización laboral”. Tras esta sentencia,
al demandante la carga de la prueba para ya casi no sería posible la interposición de
demostrar que el proceso de amparo es acciones de amparo laborales.
11 El TC ha indicado: “En buena cuenta, los trabajadores de confianza tienen un mayor grado de responsabilidad en
atención a las funciones que desempeñan, ya que se relacionan en forma inmediata y directa con la vida misma de
las empresas, sus intereses, la realización de sus fines y con su dirección, administración, entre otras actividades”
(Expediente N° 01651-2005-AA/TC).
12 Un alcance mayor sobre las diferencias entre el personal de dirección y confianza pueden verse en DEL RÍO, Da-
lia. “Personal de dirección y confianza en el régimen laboral de la actividad privada en el Perú”. En: IX Jornadas de
Derecho de la Empresa. Temas actuales de Derecho de la Empresa (coordinadora Lorena Ramírez). Universidad de
Piura. Palestra, Lima, 2006, p. 121 y ss.; y TOYAMA, Jorge. “Tiempo de trabajo. Hacia una limitación de las facul-
tades del empleador”. En: Actualidad Jurídica N° 150. Gaceta Jurídica. Lima, 2006, p. 13 y ss.
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EDICIÓN ESPECIAL
13 Hemos registrado un solo caso donde se declaró fundada la demanda de amparo sobre la exclusiva lesión al derecho
del trabajo (sentencia recaída en el Expediente N° 111-96-AA/TC) pero luego, por una extraña fe de erratas, fue mo-
dificada en su parte resolutiva al establecerse que se declaraba fundada la acción pero no se ordenaba la reposición
del trabajador.
brindar una tutela vía acción de amparo14, o Correspondiendo un mayor o menor de-
cuando se trata de hechos controvertidos que sarrollo legislativo, en función de la op-
se cuestionan en sede laboral o existen dudas ción legislativa de desarrollar los dere-
sobre tales hechos o requieren de una etapa chos fundamentales establecidos por el
probatoria. constituyente”.
Ahora bien, a nuestro juicio, la Constitu- De este modo, tenemos dos posibilidades:
ción15 concedió al legislador la posibilidad i) si se trata de delimitar los alcances de la
de regular la forma de protección al tra- protección adecuada ante un despido, las
bajador ante un despido arbitrario. El pro- normas internacionales –como han sido uti-
pio TC describe lo siguiente (Expediente lizadas por el TC en más muchos procesos
N° 01417-2005-AA/TC): laborales– son las que deben servir como pa-
“Un derecho tiene sustento constitucio- rámetro de interpretación, y estas prevén la
nal directo, cuando la Constitución ha re- posibilidad de una indemnización; o, ii) si el
conocido, explícita o implícitamente, un artículo 27 de la Constitución no comprende a
marco de referencia que delimita nomi- la reposición como una forma de protección,
nalmente el bien jurídico susceptible de es válido que el legislador haya optado por la
protección. Es decir, existe un baremo de indemnización.
delimitación de ese marco garantista, que Inclusive, mediante sentencia recaída en el
transita desde la delimitación más abierta Expediente N° 03965-2007-PA/TC, el TC ha
a la más precisa. reconocido la indemnización como adecuada
14 En el Expediente N° 00206-2005-AA/TC, se describieron las siguientes vías laborales donde el asunto controverti-
do no podía ser abordado en un proceso de amparo:
“17. Por otro lado, la Ley Procesal del Trabajo, N° 26636, prevé en su artículo 4 la competencia por razón de la ma-
teria de las salas laborales y juzgados de trabajo. Al respecto, el artículo 4.2 de la misma ley establece que los Juz-
gados de trabajo conocen, entre las materias más relevantes de las pretensiones individuales por conflictos jurídicos,
las siguientes:
Impugnación de despido (sin reposición).
Cese de actos de hostilidad del empleador, incluidos los actos de hostigamiento sexual, conforme a la ley sobre la
materia.
Incumplimiento de disposiciones y normas laborales cualquiera fuera su naturaleza.
a) Pago de remuneraciones y beneficios económicos.
18. A su turno, el artículo 30 del Decreto Supremo N° 003-97-TR, TUO del Decreto Legislativo N° 728, Ley de Pro-
ductividad y Competitividad Laboral, considera que constituyen actos de hostilidad:
a. La falta de pago de la remuneración en la oportunidad correspondiente, salvo razones de fuerza mayor o caso for-
tuito debidamente comprobados por el empleador.
b. La reducción inmotivada de la remuneración o de la categoría.
c. El traslado del trabajador a lugar distinto de aquel en el que preste habitualmente servicios, con el propósito de
ocasionarle perjuicio.
d. La inobservancia de medidas de higiene y seguridad que pueda afectar o poner en riesgo la vida y la salud del tra-
bajador.
e. El acto de violencia o el faltamiento grave de palabra en agravio del trabajador o de su familia.
f. Los actos de discriminación por razón de sexo, raza, religión, opinión o idioma.
g. Los actos contra la moral y todos aquellos que afecten la dignidad del trabajador.
Consecuentemente, los amparos que se refieran a la materias descritas (fundamentos 17 y18), que por mandato de la
ley son competencia de los jueces de trabajo, serán declaradas improcedentes en la vía del amparo”.
15 El artículo 27 de la Constitución indica: “La ley otorga al trabajador adecuada protección contra el despido arbitrario”.
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EDICIÓN ESPECIAL
protección frente al despido arbitrario cuan- misma de la Constitución y los tratados sobre
do el trabajador opta por ella, dejando de lado derechos humanos que forman parte de nues-
la reposición en su puesto de trabajo cuando tro sistema jurídico.
esta corresponda. El TC indicó que la indem-
Consideramos que la controversia sobre un
nización por despido arbitrario es una forma
despido incausado no debería ser materia de
de protección que está prevista en el artículo
una acción de amparo pues no existe un de-
34 de la LPCL, lo cual es compatible con el
recho constitucional a la reposición, y más
inciso d) del artículo 7 del Protocolo de San
bien la Constitución delega a la ley la forma
Salvador; por lo tanto, la indemnización no es
de protección, de tal manera que resulta cons-
inconstitucional.
titucional –y acorde con el Derecho Com-
En esta línea, consideramos que la tesis del parado y disposiciones de la OIT–, prote-
TC que el artículo 22 de la Constitución im- ger al trabajador con una indemnización ante
porta que todo despido sin expresión de cau- un despido arbitrario. Como se ha dicho, la
sa sea inconstitucional, no se adecua a nues- LPCL solamente ha establecido una forma de
tro esquema constitucional. Se ha dejado de protección ante el despido en cumplimiento
tener en cuenta lo expuesto en el artículo 27 de lo previsto en el artículo 27 de la Consti-
de la Constitución que delega a la ley la for- tución, y cuando “el legislador establece que
ma de protección ante un despido arbitrario, la adecuada protección contra el despido arbi-
además de que se obvia la aplicación del Pro- trario es la indemnización, esta pasa a formar
tocolo Adicional a la Convención Americana. parte del contenido constitucionalmente pro-
tegido del derecho a la adecuada protección
Para nosotros, en virtud de lo establecido en
contra el despido”16.
los artículos 22 y 27 de la Constitución, no
cabría una acción de amparo contra un des- Ojalá que el TC cambie de criterio dado que
pido sin expresión de causa, en tanto que la no existe un mandato constitucional a favor
Constitución no recoge expresamente el de- de la reposición laboral como regla. Una lec-
recho a la reposición ante un despido incau- tura integral de la Constitución de 1993 y de
sado. En nuestra opinión, no es un derecho los tratados internacionales, permite concluir
constitucionalmente protegido la reposición que cada legislación debe definir los alcances
ante un despido, pues son las normas de ni- de la reposición laboral y que la indemniza-
vel primario las que determinan los alcances ción es una forma adecuada y constitucional
y ámbitos de protección, por interpretación de tutela ante un despido.
16 CASTILLO, Luis. “Algunas críticas al criterio del Tribunal Constitucional sobre la procedencia del amparo en
defensa del derecho al trabajo”. En: Diálogo con la Jurisprudencia. N° 89. Gaceta Jurídica. Lima, 2005, p. 46.
Precedentes constitucionales
en materia de seguridad social
RESUMEN
(caso De La Cruz Curasma) relativo a las reglas de procedencia del amparo en caso de
pensiones, devengados e intereses; c) el Exp. N° 05189-2005-PA/TC (caso Gabriel Angu-
lo) acerca de la pensión mínima prevista en la Ley N° 23908; d) el Exp. N° 04762-2007-
PA/TC (caso Tarazona Valverde) sobre el amparo y reconocimiento de aportaciones no
consideradas por la ONP; y, e) el Exp. N° 07281-2006-PA/TC (caso Terrones Cubas) rela-
tivo a la causal de desafiliación a las AFP por información inexistente o defectuosa.
* Profesor de “Instituciones de la Seguridad Social” en la Maestría de Derecho del Trabajo de la PUCP. Miembro de
la Sociedad Peruana de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social.
1 Recién en 1993, al entrar en vigencia el Código Procesal Civil, se establecen los precedentes de carácter obligatorio
derivados de los plenos casatorios (artículo 400). En sentido similar, en 1995 la Primera Disposición General de la
Ley N° 26435 (Ley Orgánica del Tribunal Constitucional) dispuso que los Jueces y Tribunales interpretarían y apli-
carían las normas de acuerdo a los criterios por dictados por el supremo intérprete de la Constitución, criterio reco-
gido también por el Artículo VII del Título Preliminar de la Ley N° 28237 (Código Procesal Constitucional).
2 A partir del fallo recaído en la STC N° 00007-96-I/TC (acumulados), proceso de inconstitucionalidad seguido con-
tra el Decreto Ley N° 25967, publicado en El Peruano el 26/04/1997.
3 Por ejemplo, la Ley N° 27561, que dispuso una revisión administrativa de oficio a todos los casos en los cuales se
hubiera aplicado indebidamente el Decreto Ley N° 25967, según las pautas fijadas en la citada STC Exp. N° 00007-
96-I/TC, y la Ley N° 28407, que habilitó la revisión de los casos en los que se hubiera declarado la pérdida de validez
34
EDICIÓN ESPECIAL
de las aportaciones al SNP, por la aplicación de las Leyes N° 8433 y N° 13640; asimismo, el Decreto Supremo
N° 150-2008-EF, que ordenó el allanamiento en los reclamos de la Ley N° 23908, bajo los criterios fijados por la
STC Exp. N° 05189-2005-PA/TC.
4 Como ejemplo, tomemos el fallo recaído en la STC Exp. N° 00703-2002-ACTC, relativo a la aplicación de la cita-
da Ley N° 23908, publicado el 20/01/2003 en El Peruano, que originó la incoación de casi 70,000 demandas nuevas
en un lapso de apenas cuatro años.
5 FAJARDO CRIBILLERO, Martín. Teoría General de la Seguridad Social. Ediciones Luis Alfredo, Lima, 1991,
p. 21.
6 Conformado por el régimen militar policial (Decreto Ley N° 19846, modificado por Decreto Legislativo N° 1133
del 10/12/2012), el de los servidores públicos (Decreto Ley N° 20530, cerrado a partir del 18/11/2004 por la Ley
N° 28389), el Sistema Nacional de Pensiones (Decreto Ley N° 19990), y el de los servidores diplomáticos (reesta-
blecido por el Decreto Supremo N° 065-2009-RE).
7 Publicada en El Peruano el 12/06/2005.
8 Para profundizar sobre el análisis de dicha sentencia recomendamos revisar: GARCÍA, Fernando y GONZÁLES,
César. “Seguridad Social, Derechos Fundamentales y Contenido Esencial del Derecho a la Pensión. Anotaciones a
la sentencia del Tribunal Constitucional del 3 de Junio de 2005”. En: Diálogo con la Jurisprudencia. N° 82, Gaceta
Jurídica S.A., Lima, julio 2005, pp. 19-29.
9 Proceso de amparo seguido por Manuel Anicama Hernández contra la Oficina de Normalización Previsional (ONP).
Sentencia publicada en El Peruano el 12/07/2005.
36
EDICIÓN ESPECIAL
10 Núcleo duro del derecho que no puede ser restringido o limitado por el legislador. De acuerdo al fundamento 107,
serían los siguientes: (i) El derecho de acceder a una pensión; (ii) el derecho a no ser privado arbitrariamente de la
pensión, y; (iii) el derecho a una pensión mínima.
11 Elementos complementarios de dicha prestación, como el reajuste y la pensión máxima (tope).
12 Conformado por los derechos previsionales de los beneficiarios a pensión de sobreviventes: viudez, orfandad y as-
cendientes. Pueden ser fijados libremente por el legislador.
13 Sobre este tema recomendamos revisar: MARTÍNEZ PUJALTE, Antonio. La garantía del contenido esencial de los
derechos fundamentales. Tabla XIII Editores, Lima, 2005,
14 Sobre este tema recomendamos revisar: GAVARA DE CARA, Juan. Derechos Fundamentales y desarrollo legisla-
tivo. La garantía del contenido esencial en la Ley Fundamental de Bonn. Centro de Estudios Constitucionales, Ma-
drid, 1994.
15 ABANTO REVILLA, César. “El contenido esencial y el contenido constitucionalmente protegido del derecho fun-
damental a la pensión”. En: Laborem. N° 6, Revista de la SPDTSS, Lima, 2006, pp. 405-440.
inciso 1) del artículo 5 de la Ley N° 28237 pensión, cuando esté comprometido el de-
estableció que solo podría interponerse una recho al mínimo vital17.
demanda en sede constitucional cuando es-
tuviera acreditada la afectación del conteni- d) Los supuestos en los que se deniegue
do constitucionalmente protegido del derecho a una persona el reconocimiento de una
invocado. Para ello, era necesario que prime- pensión de sobrevivencia (viudez, orfan-
ro sea determinado –por el Tribunal Consti- dad o ascendiente)18, pese a haber cumpli-
tucional– el contenido esencial del derecho, do los requisitos legales para obtenerla.
lo que en materia de pensiones ocurrió al ser e) Los supuestos en que se afecte el dere-
emitida la STC Exp. N° 00050-2004-AI/TC.
cho a la igualdad, cuando ante la ausen-
Es en dicho escenario, que el fundamento 37 cia de bases razonables, proporcionales y
de la STC Exp. N° 01417-2005-PA/TC esta- objetivas, se brinde un tratamiento disí-
blece los reclamos pensionarios que podrán mil –en el libre acceso a prestaciones pen-
ser planteados a través del proceso de amparo: sionarias– a personas que se encuentren
a) Los supuestos en que, habiendo la perso- en situación idéntica o sustancialmente
na cumplido los requisitos legales para análoga.
iniciar el periodo de aporte al Sistema Na- Los reclamos pensionarios que no es-
cional de Pensiones (SNP)16, se deniegue tén relacionados con dichos supuestos ten-
el acceso a la seguridad social. drán que ser formulados en la vía judicial
b) Los supuestos en los que se deniegue ordinaria, que de acuerdo al fundamen-
a una persona el reconocimiento de una to 51 del fallo comentado, es el proceso
pensión de cesantía, jubilación o invali- contencioso-administrativo.
dez, pese a haber cumplido los requisi- Este fallo redujo la cantidad de demandas en
tos legales para obtenerla (edad, años de materia pensionaria interpuestas en la vía del
aportación o servicios, etc.). amparo pero no los reclamos judiciales en sí,
c) Los supuestos en que la pretensión esté que ahora son formulados masivamente ante
relacionada con el monto específico de la los juzgados contencioso-administrativos.
16 Este supuesto aludió inicialmente solo al SNP, pues el fundamento 140 de la STC Exp. N° 00050-2004-AI/TC pre-
cisó que el Sistema Privado de Pensiones (SPP) no formaba parte de la seguridad social, sin embargo, en un fallo
posterior (STC Exp. N° 01776-2004-AA/TC, fundamentos 6, 20 y 21), el Tribunal amplió dicho criterio e incluyó al
SPP dentro del ámbito de la seguridad social, para habilitar así su cambio de postura sobre el tema de la desafiliación
de las AFP.
17 Tomando como referente objetivo el monto más alto de la pensión mínima (S/. 415.00 Nuevos Soles), fijado por la
Ley N° 27617, podrán acudir a la vía judicial del amparo constitucional aquellas personas cuya pensión sea menor
a dicho monto. Quienes perciban un monto igual o mayor deberán recurrir a la vía judicial ordinaria, a menos que,
por las objetivas circunstancias del caso, resulte urgente su solución en vía constitucional para evitar consecuencias
irreparables, por ejemplo: los supuestos acreditados de graves estados de salud. En esta excepción se incluyó poste-
riormente a las personas de edad avanzada: 80 o más años de edad.
18 De acuerdo al propio Tribunal, las pensiones de sobrevivencia no formarían parte del contenido esencial del dere-
cho a la pensión, sino de su contenido adicional, por tanto, no deberían ser parte del listado de reclamos incluidos en
su contenido constitucionalmente protegido. Creemos que el acceso a la tutela en la sede constitucional del amparo
obedece a la necesidad de brindarles una protección urgente a los derechohabientes, en la presunción que la presta-
ción del causante sería posiblemente el principal –sino el único– ingreso familiar.
38
EDICIÓN ESPECIAL
19 Proceso de amparo seguido por Francisca Lilia Vásquez Romero contra Luis Acevedo Mena y otros. Sentencia pu-
blicada en El Peruano el 29/08/2014.
20 Proceso de amparo seguido por Alfredo De La Cruz Curasma contra la ONP. Sentencia publicada en El Peruano el
04/11/2008.
21 En la sentencia recaída en el proceso de amparo seguido por Florencio Huamaní Gerónimo contra ONP, fallo publi-
cado en El Peruano el 24/08/1999, se estableció que “los devengados constituyen una consecuencia lógica del pedi-
do de otorgamiento o reajuste de una pensión”.
22 Proceso de amparo seguido por Álvarez Príncipe De La Cruz contra ONP, fallo publicado en su página web el
21/04/2003. El Tribunal señaló que la petición de pago de intereses legales debería ser amparada, según lo expuesto
por los artículos 1242 y siguientes del Código Civil.
las obligaciones de origen previsional, en las interponer la demanda, sin embargo, nos pa-
cuales prima el beneficio colectivo respecto rece excesivo ampliar dicho beneficio tam-
al individual. bién a los intereses legales.
El Tribunal dispuso, sin mayor precisión, que Hasta el año pasado la discusión judicial en
debía aplicarse el Código Civil, pero dicha torno al pago de los intereses legales estaba
norma comprende –por su finalidad– intere- centrada en la determinación de la tasa apli-
ses compensatorios23 o moratorios24, y –por su cable, si sería la efectiva (capitalizable) o la
origen– convencionales25 o legales. En materia laboral (Decreto Ley N° 25920), sin embar-
pensionaria, solo podía referirse al interés mo- go, ello ha sido zanjado por la sentencia re-
ratorio legal, pues no existe entre las entidades caída en la Cas. N° 5128-2013 Lima26, de la
previsionales y los beneficiarios una contrapres- Segunda Sala de Derecho Constitucional y
tación (a compensar) o un convenio privado. Social Transitoria de la Corte Suprema, y la
En dicho escenario, la STC Exp. N° 05430- STC Exp. N° 02214-2014-PA/TC27, fallos en
2006-PA/TC ordena que los jueces otorguen los cuales se estableció que los intereses pre-
ambos conceptos (devengados más intereses visionales deben ser calculados sin capitaliza-
legales) de oficio, incluso en los supuestos ción, por la prohibición establecida por el ar-
que no hubieran sido demandados, contravi- tículo 1249 del Código Civil28.
niendo así la prohibición del fallo extra peti-
ta, prevista en el artículo VII del Título Preli- IV. TERCER PRECEDENTE: STC EXP.
minar del Código Procesal Civil, por la cual N° 05189-2005-PA/TC29
el juzgador no puede ir más allá de las preten- El texto original del Decreto Ley N° 19990
siones formuladas por las partes. no hacía mención alguna al concepto pensión
mínima. Es recién con la Ley N° 23908, pu-
Entendemos que la decisión del Tribunal obe-
blicada el 07/09/1984, que se introdujo dicha
dece al hecho que al haberse reconocido un
figura en el SNP, precisándose que sería el
derecho pensionario la consecuencia lógica
equivalente a tres Sueldos Mínimos Vitales -
es el pago de los devengados o el reajuste,
SMV (artículo 1)30.
por tanto, sería innecesario –y una carga, tan-
to para el accionante como para el Estado– En 1984, la Remuneración Mínima –RMV,
tener que tramitar una nueva demanda solo como la conocemos ahora– se conforma-
para reclamar dicho concepto –accesorio por ba por tres elementos remunerativos31, uno
naturaleza– por la omisión del abogado al de los cuales era el SMV (Decreto Supremo
40
EDICIÓN ESPECIAL
32 Por todos, la STC N° 00398-99-AA/TC, proceso de amparo seguido por José Moya Aldana contra ONP, fallo publi-
cado en El Peruano el 19/05/2000.
33 Proceso de cumplimiento seguido por Asociación Nacional de Obreros Municipales Pensionistas contra ONP, fallo
publicado en El Peruano el 20/01/2003.
34 STC Exp. N° 01816-2002-AA/TC, proceso de amparo seguido por Rómulo Castillo Sotomayor contra ONP, publi-
cado en El Peruano el 11/03/2004.
35 STC Exp. N° 00198-2003-AC/TC, proceso de cumplimiento seguido por Carlos Briones Vigo contra ONP, publica-
do en su página web el 22/11/2004.
36 PORTAL GALDÓS, Alfredo. “La pensión mínima en los fallos del TC”. En: El Peruano, edición del 07/09/2005, p. 20.
37 Proceso de amparo seguido por Alejandro Tarazona Valverde contra la ONP. Sentencia publicada en El Peruano el
12/04/2009.
38 Desde el 01/01/1997 la tasa de aporte en el SNP es de 13 % mensual, asumida totalmente por el asegurado. En el pa-
sado, era pagada entre el empleador (2/3) y el trabajador (1/3).
39 Pues el goce de tal prestación dependerá del hecho que el asegurado tuviera derecho a pensión.
42
EDICIÓN ESPECIAL
• Los informes de verificación de apor- (y aún es) acreditar documentalmente las la-
taciones emitidos por la ONP dentro bores realizadas.
del proceso otorgamiento de pensión. Como consecuencia de la informalidad que
• La declaración jurada del asegu- caracteriza al mercado laboral peruano des-
rado, de acuerdo con las condicio- de hace varias décadas, un número conside-
nes previstas en el Decreto Supremo rable de empleadores realiza sus actividades
N° 082-2001-EF. sin un manejo adecuado de su información
y documentación, que unido a una falta de
• Los documentos probatorios de control y fiscalización por las autoridades
aportaciones emitidos por el IPSS o administrativas, ha originado que los traba-
EsSalud. jadores no cuenten con el respaldo tangible
c) Para aportaciones efectuadas a partir de que corrobore todos los años de labores que
abril de 2007, la información obtenida del realizaron.
Sistema de Cuenta Individual de la Sunat Es decir, que cuando un asegurado del SNP
o registros complementarios que estable- se apersona a la ONP para solicitar pensión al
cerá la ONP. Solo se considerará aquellos haber trabajado –y aportado– cumpliendo el
periodos con aportes efectivos al SNP, es periodo fijado por ley para acceder a una pen-
decir, que hubieran sido cancelados en su sión, a veces se encuentra con que resulta ma-
totalidad. terialmente imposible la comprobación de su
declaración, pues su empleador ya no existe,
La documentación supletoria mencionada o nunca llevó el registro documental de las la-
debía presentarse en original, y de verificar- bores de sus trabajadores, por tanto, si el ase-
se que era falsa, adulterada o contenía datos gurado no ha tenido la diligencia de conser-
inexactos, se atribuía responsabilidad penal y var –si le entregaron– sus boletas de pago de
administrativa al solicitante y quienes corres- remuneración, certificado de trabajo, liquida-
ponda, quedando facultada la ONP a revisar ción de beneficios sociales, etc., es probable
–en virtud del principio administrativo de que su pedido de otorgamiento de una presta-
control posterior (Ley N° 27444)– los dere- ción pensionaria le sea denegado.
chos pensionarios otorgados, suspendiéndo-
los de constatarse indicios de irregularidad44. Durante muchos años, la tendencia juris-
prudencial –en el Poder Judicial y el Tribu-
Si bien en materia de reconocimiento de apor- nal Constitucional– se inclinaba por rechazar
tes existían otros reclamos, como la pérdida las demandas formuladas a través del proce-
de validez de las cotizaciones del obrero, el so de amparo45, al ser una vía carente de es-
inicio de cómputo del aporte del empleado y tación probatoria, por tanto, el reclamo debía
la doble condición de asegurado y empleador, ser formulado en la sede contencioso-admi-
el principal escollo para acceder a pensión era nistrativa, que –como es de conocimiento
44 En la STC Exp. N° 05985-2008-PA/TC, proceso de amparo seguido por Alfredo Peña Calderón contra ONP, publi-
cado en su página web el 14/04/2010, que dicha medida será válida en tanto la resolución administrativa por la cual
se anula o suspende el derecho pensionario esté debidamente motivada.
45 Por todos, STC Exp. N° 00030-2002-AA/TC, proceso de amparo seguido por Yolanda Landa Soto contra ONP, fallo
publicado en su página web el 07/03/2003.
44
EDICIÓN ESPECIAL
46 Informe Defensorial N° 121, “Propuestas para una reforma de la Justicia Contencioso-Administrativa desde la pers-
pectiva del acceso a la justicia”, aprobado por Resolución Defensorial N° 024-2007/DP, publicada en El Peruano el
30/05/2007.
47 Publicada en la página web del Tribunal Constitucional el 16/10/2008.
48 Publicada en El Peruano el 18/06/2011.
49 Publicado en El Peruano el 16/06/2012.
50 De acuerdo al numeral 5 de la Resolución Aclaratoria, el juez constatar de los documentos que ha presentado el ac-
cionante indicios razonables de falsedad, deberá aplicar el artículo 3 del Código de Procedimientos Penales, remi-
tiendo copia de los actuados al Ministerio Público.
caso contrario, la demanda será declarada que el nuevo sistema se creaba para reempla-
infundada. zar al SNP, que supuestamente estaba quebra-
do, miles de asegurados del antiguo régimen
VI. QUINTO PRECEDENTE: STC EXP. se pasaron al SPP, a pesar de que, atendien-
N° 07281-2006-PA/TC51 do a su edad (cercana a la jubilación) o el mí-
Las deficiencias que la administración de los nimo monto de sus ingresos regulares, no les
regímenes pensionarios por parte del Estado convenía trasladarse a un sistema en el cual es
se fueron manifestando a nivel mundial, su- fundamental un aporte continuo y prolongado
madas a la incidencia del factor demográfi- en la cuenta individual de capitalización: de
co (aumento o descenso de la tasa de natali- su error se dieron cuenta recién algunos años
dad) y económico (morosidad del pago de los después.
aportes, falencia financiera, etc.), originó que En efecto, si bien el Decreto Ley N° 25897
a mediados de la década de los setenta se pro- en su artículo 5 reguló hasta el 03/06/199655
duzca una reforma del sistema de reparto ha- la figura de la reversión o reversibilidad, que
cia la capitalización individual, a efectos que permitía a los afiliados mayores de 50 o 55
las empresas privadas (AFP) administren los años, según fueran mujeres u hombres, retor-
fondos de pensiones. Esta reforma se materia- nar al SNP cuando la afiliación hubiera sido
lizó por primera vez en Chile, con el Decreto la creencia errónea de tener derecho al bono
Ley 3,500 de 198052. de reconocimiento, pocos utilizaron dicho be-
En el Perú se copió (en parte) dicho modelo, a neficio, quedando cerrado el régimen a partir
través del Decreto Ley N° 2589753, por el cual de esa fecha.
se adoptó un mecanismo paralelo –vigente Fue recién con la Resolución N° 080-98-EF56
hasta hoy– en el cual el trabajador deberá ele- que se aprobó un mecanismo de nulidad de la
gir, al iniciar su relación laboral, si decide afi- afiliación al SPP sujetos a causales específi-
liarse (y aportar) para el SNP o el SPP. cas para casos concretos, que en el tiempo re-
sultó insuficiente para atender los miles de re-
En la medida en que al momento de su imple-
clamos de desafilación.
mentación (a mediados de 1993) se produjo
una afiliación masiva, producto de la inten- Para calmar los reclamos sociales se dicta-
sa campaña publicitaria de las ocho AFP en- ron algunas normas57 que incorporaron al
tonces en el mercado54 y la idea generalizada SPP beneficios similares al SNP, que también
51 Proceso de amparo seguido por Santiago Terrones Cubas contra AFP Profuturo. Sentencia publicada en El Peruano
el 15/05/2007.
52 En relación al proceso de reforma chileno recomendamos revisar: PIÑERA, José. El cascabel al gato: La batalla
por la Reforma Previsional. Editorial Zig-Zag, Santiago, 1992.
53 Publicado en El Peruano el 06/12/1992. El antecedente de esta norma fue el Decreto Legislativo N° 724, que creó
un SPP previo sujeto a los parámetros establecidos por el artículo 14 de la Carta Magna de 1979, razón por la cual
no fue implementado.
54 El Roble, Horizonte, Integra, Megafondo, Nueva Vida, Profuturo, Providencia y Unión.
55 Por mandato de la Cuarta Disposición Transitoria y Complementaria de la Ley N° 26323.
56 Publicada en El Peruano el 05/03/1998.
57 Por ejemplo, la Ley N° 27252 (2000), que implementó la jubilación adelantada para trabajadores de actividades ries-
gosas (minería y construcción civil) y la Ley N° 27617 (2002), que reguló la pensión mínima y creo las modalida-
des de pensión adelantada 19990 y para desempleados.
46
EDICIÓN ESPECIAL
58 STC Exp. N° 02156-2003-AA/TC, recaída en el proceso de amparo seguido por Américo Del Castillo Bravo contra
AFP Horizonte, publicada en su página web el 13/06/2006.
59 Proceso de amparo seguido por Víctor Morales Medina contra la SBS y AFP Unión Vida, publicada en El Peruano
el 20/02/2007.
60 Se presenta cuando al momento de afiliarse al SPP el asegurado ya contaba con los requisitos (edad y años de apor-
tación) para jubilarse en el SNP.
61 El Tribunal considera que los trabajadores mineros y de construcción civil tendrán una mayor y mejor protección en
el SNP, bajo la Ley N° 25009 y el Decreto Supremo N° 018-82-TR.
62 Se presenta cuando la afiliación a la AFP fue producto de falta de información veraz y completa con relación a las
diferencias y ventajas de los regímenes público (SNP) y privado.
63 Para ampliar sobre este tema recomendamos: VV.AA. Crisis financiera mundial y sus efectos en el Sistema Privado
de Pensiones. Congreso de la República, Lima, 2009.
48
ANÁLISIS Y CRÍTICA
El filtro de constitucionalidad
en materia tributaria
RESUMEN
paro contra reglamentos tributarios inconstitucionales); y el tercero recaído en el Exp.
N° 04227-2005-AA/TC (sobre Ley Tributaria inconstitucional y amparo). El autor anali-
za el accionar del Colegiado en dichos pronunciamientos, haciendo especial énfasis en los
temas de ratificación de ordenanzas y los principios de no confiscatoriedad e irretroacti-
vidad en materia tributaria.
Sea cual sea la rama del Derecho en la que optaremos por enfocarnos en un tema especí-
nos enfoquemos, la presencia del ámbito fico. Para ello, hemos elegido elementos indi-
constitucional siempre existirá. viduales de las pretensiones de las demandas
La razón es muy simple. Las bases que rigen materia de cada sentencia que dan lugar a la
nuestro sistema jurídico mantienen su esen- aplicación de un filtro constitucional manifes-
cia en cada uno de los campos del Derecho. tado en los principios del Derecho Tributario.
Esta presencia de índole constitucional se ca- Bajo este razonamiento, revisaremos los si-
racteriza por ser un “filtro” que determina la guientes precedentes:
constitucionalidad de las normas, permitien-
do que ingresen y formen parte de un siste- I. EXP. N° 00053-2004-PI/TC
ma jurídico. Se trata de una demanda de inconstitucionali-
En esta oportunidad revisaremos tres sen- dad interpuesta por la Defensoría del Pueblo
tencias del Tribunal Constitucional en las contra las ordenanzas que establecen los arbi-
que apreciaremos la aplicación de este filtro trios de la municipalidad de Miraflores.
constitucional.
El caso plantea el cuestionamiento de la rati-
Con fines académicos, no revisaremos ficación como requisito en el análisis de cons-
cada sentencia individualmente, sino que titucionalidad. Esto es, que las ordenanzas
50
EDICIÓN ESPECIAL
Ahora, recordemos también que los gobier- que constituya el parámetro de constituciona-
nos locales son conformados por las muni- lidad para el correcto ejercicio de la potestad
cipalidades distritales y las municipalidades tributaria municipal.
provinciales. De este modo, la mayor jerar-
Y ¿qué parámetro es establecido por estas le-
quía en el plano local la ostenta la municipa-
yes? La ratificación.
lidad provincial. Así, cuando una municipa-
lidad distrital emite una ordenanza que crea Ahora bien, volviendo a nuestra pregunta
un arbitrio, esta aún no ha pasado por una ¿por qué ratificar? Podemos responder esta
aprobación de todo el gobierno local que, interrogante afirmando que la ratificación es
en conjunto, sí tiene una potestad tributaria necesaria para evitar el ejercicio de una potes-
originaria. tad tributaria arbitraria, es decir, para estable-
cer un control. Bajo ese mismo razonamien-
Para obtener esta aprobación, esta ordenanza
to, el Tribunal Constitucional concluye que la
debe pasar por el filtro de la municipalidad
ratificación es un mecanismo idóneo para ga-
provincial; y el mecanismo regulado es el de
rantizar la correcta distribución del costo del
la ratificación.
servicio.
Pero, tal como lo afirma la demandada (la
Y ¿por qué es tan importante esta división de
municipalidad de Surco), la norma que otor-
costos? Los arbitrios son una subespecie de
ga la potestad tributaria local no contempla la
las tasas, y estas, a diferencia de los impues-
ratificación. Es cierto que dentro del texto del
tos, no tienen como hecho generador una ma-
artículo 74 de la Constitución no encontra-
nifestación de capacidad contributiva, sino
remos mención alguna de este procedimien-
una actuación del Estado que se concreta en
to, pero pretender que todas las disposiciones
un servicio público individualizado.
sean contempladas en la Constitución resulta
imposible ya que la norma constitucional es Bajo esta idea, los arbitrios se constituyen
la base que establece los contenidos mínimos como tributos a pagarse como resultado de
y generales, mientras que para las disposicio- los servicios públicos brindados por el Es-
nes específicas contamos con la jerarquía de tado. Al respecto, es preciso aclarar que no
normas que se interpretan en conjunto con la se trata de una relación recíproca por la que
Constitución. pago por un servicio como si contratase un
servicio de internet o cable.
En ese sentido, concordamos con lo argu-
mentado por el Tribunal Constitucional en Se trata más bien de una relación inicialmen-
un caso similar (Exp. N° 0041-2004-AI/TC) te unilateral que parte de la potestad tributaria
al afirmar que las municipalidades no pue- estatal concedida por fines prácticos a la en-
den ejercer su potestad tributaria de mane- tidad local (potestad tributaria local) que es-
ra arbitraria, sino que dicho reconocimien- tablece la obligación de pago de arbitrios y
to constitucional estará legitimado siempre que este pago se realiza por recibir un servi-
que se encuentre dentro del marco legal que cio público individualizado que es brindado
la Constitución consagra. Será entonces, me- a todos los ciudadanos de una misma juris-
diante la ley de la materia como se regule el dicción local. Así, el arbitrio que debe pagar
instrumento idóneo para ejercer la potestad cada vecino es la cuota que le corresponde
tributaria, así como el procedimiento para su como resultado de la división del costo glo-
validez y vigencia. bal del servicio público brindado a toda la ju-
risdicción local.
De este modo, la ley de la materia será la Ley
Orgánica de Municipalidades y la Ley de Tri- El cálculo no resulta así de simple, pero con
butación Municipal, en lo que sea pertinente, fines prácticos veámoslo desde esta óptica: Si
52
EDICIÓN ESPECIAL
impuesto puede, por un lado, resultar con- que declaran la inconstitucionalidad de nor-
fiscatorio respecto a un contribuyente; y mas tributarias.
por otro, resultar justificado respecto a otro
¿Por qué es un tema sensible? Porque los
contribuyente.
efectos de la aplicación de la declaración de
La decisión final dependerá de la carga inconstitucionalidad de una norma tributaria
probatoria, es decir, se determinará que un puede suponer una excepción a la regla del
impuesto, o en este caso, una suma de im- principio de irretroactividad.
puestos, es confiscatorio si el contribuyen-
Usualmente, la regla es que una sentencia,
te prueba que afecta su patrimonio, conclu-
por ejemplo, que declare la inconstituciona-
yéndose que se trataría de una carga tributaria
lidad de una norma, entre en vigencia el día
mayor a la que podría soportar.
siguiente de su publicación. Pero, en mate-
En el caso, el tema probatorio no fue demos- ria tributaria, la situación puede ser distinta,
trado por el demandante por lo que se declara existe la posibilidad de modificar el momen-
infundada la demanda en este extremo. Pero, to de la entrada en vigencia de la sentencia
tengamos claro que incluso la suma de tribu- que declara la inconstitucionalidad de una
tos sobre una misma actividad debe superar el norma tributaria por vulnerar el artículo 74 de
filtro de constitucionalidad, entendida como la Constitución. Así, el artículo 81 del Códi-
el análisis de confiscatoriedad que compare go Procesal Constitucional señala que cuan-
la carga tributaria frente a la afectación del do se declare la inconstitucionalidad de nor-
patrimonio. mas tributarias por violación del artículo 74
de la Constitución, el Tribunal debe deter-
Por último, en el tercer caso encontramos el fil-
minar de manera expresa en la sentencia los
tro constitucional representado por la interpre-
efectos de su decisión en el tiempo. Asimis-
tación sistemática de la norma constitucional.
mo, resuelve lo pertinente respecto de las si-
Retomando el tercer caso, mencionamos que tuaciones jurídicas producidas mientras estu-
la pretensión principal en este caso es que se vo en vigencia.
declare inaplicable el artículo 17 de la Ley
Esta flexibilidad del sistema permite al Tri-
N° 27796 (Ley que modifica artículos de la
bunal Constitucional conceder seguridad ju-
Ley N° 27153) que sustituye el artículo 38
rídica respecto al periodo en el que estuvo vi-
de la Ley N° 27153 (Ley que regula la ex-
gente la norma declarada inconstitucional. En
plotación de los juegos de casino y máquinas
efecto, no se trata de asumir que si una norma
tragamonedas).
establece una alícuota y es declarada incons-
La particularidad de este artículo 17 radica en titucional, esto resulta en la exoneración del
los efectos de su vigencia puesto que dispone pago del tributo.
que la alícuota del impuesto tenga efectos a la
Es lógico que se presente una corrección so-
fecha a la entrada en vigencia de la Ley que
bre este aspecto de la obligación tributaria y,
modifica, esto es, que sus efectos alcancen un
en efecto, así sucedió en este caso mediante el
momento anterior a la fecha de la ley que dis-
artículo 17 de la Ley N° 27996 que por dispo-
pone la modificación de la tasa del impuesto.
sición del Tribunal Constitucional, se atribu-
Obviamente el primer argumento en contra yó los efectos a partir de la entrada en vigen-
por parte del demandante es el principio de cia de la norma que dio origen al impuesto, es
no retroactividad. Sin embargo, es preciso no- decir, como si el impuesto se haya creado con
tar que no nos encontramos frente a un caso la base imponible correcta. Así, los montos
tipo, sino que se trata de un tema particular: por impuestos pagados o declarados con an-
los efectos en el tiempo de la de las sentencias terioridad a la modificación se sujetarán a un
cálculo que les permita regularizar los montos La conclusión final es simple. Todo análi-
de acuerdo a la nueva tasa. Una vez más, el sis de un caso específico debe acordarse a
filtro constitucional representado por el prin- los principios base del Derecho. En los ca-
cipio de irretroactividad permite dilucidar la sos descritos las pretensiones de la parte de-
controversia, y en este caso, gracias a una ex- mandante se resuelven de acuerdo al filtro de
cepción del principio. constitucionalidad.
54
ANÁLISIS Y CRÍTICA
RESUMEN
De esta forma, aborda el objeto sobre el que procederá el amparo contra amparo, la pre-
tensión en el amparo contra amparo, los sujetos legitimados para interponer la demanda,
el juez competente, entre otros criterios para su procedencia.
* Magíster en Derecho con mención en Derecho Constitucional de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP).
Profesor de la Maestría en Derecho Constitucional y Derecho Procesal de la PUCP. Socio del Estudio Monroy Abo-
gados.
1 Código Procesal Constitucional
“Artículo 5.- Causales de improcedencia
No proceden los procesos constitucionales cuando
(…).
6. Se cuestione una resolución firme recaída en otro proceso constitucional o haya litispendencia;
(…)”.
2 Código Procesal Constitucional
“Artículo 6.- Cosa Juzgada
En los procesos constitucionales solo adquiere la autoridad de cosa juzgada la decisión final que se pronuncie sobre
el fondo”.
3 TOBO RODRÍGUEZ, Javier. La Corte Constitucional y el control de constitucionalidad. Bogotá, 2004, pp. 283-284.
4 HENAO HIDRÓN, Javier. Derecho Procesal Constitucional. Protección de los derechos constitucionales. Editorial
Temis, Bogotá, p. 8.
5 Ibídem, p. 10.
56
EDICIÓN ESPECIAL
6 El Tribunal Constitucional ha establecido un supuesto excepcional: el Recurso de Agravio a favor del ordenamiento
constitucional contra sentencias estimatorias (STC Exp. N° 02663-2009-HC/TC).
Pero ¿qué sucede con las sentencias deses- tipo de proceso, el artículo 4 del Código Pro-
timatorias de amparo, de segundo grado? cesal Constitucional7 prescribe que el amparo
Ocurre que estas pueden ser impugnadas me- contra resoluciones judiciales sirve para pro-
diante un Recurso de Agravio Constitucional teger el derecho a la tutela procesal efecti-
que será resuelto por el Tribunal Constitucio- va, que comprende el acceso a la justicia y el
nal. Por lo tanto, la parte afectada por esta debido proceso. Esta norma precisa, además,
sentencia desestimatoria carecerá de interés que se entiende por tutela procesal efectiva a
procesal para interponer un amparo contra aquella situación jurídica de una persona en
amparo contra esta sentencia. la que se respetan, de modo enunciativo, sus
derechos de libre acceso al órgano jurisdic-
El Tribunal Constitucional puede declarar cional, a probar, de defensa, al contradicto-
infundado este recurso y así dar firmeza a esta rio e igualdad sustancial en el proceso, a no
sentencia desestimatoria. ¿En este caso se po- ser desviado de la jurisdicción predetermina-
drá interponer un amparo contra amparo con- da por la ley, a la obtención de una resolución
tra la sentencia desestimatoria ejecutoriada fundada en derecho, a acceder a los medios
adoptada por el Tribunal Constitucional? La impugnatorios regulados, a la imposibilidad
respuesta parece ser negativa, porque otro cri- de revivir procesos fenecidos, a la actuación
terio establecido en la STC Exp. N° 04853- adecuada y temporalmente oportuna de las
2004-AA/TC, modificada parcialmente por resoluciones judiciales y a la observancia del
el fundamento 8 de la STC N° 03907-2007- principio de legalidad penal. En consecuen-
PA/TC, indica que el amparo no procede con- cia, según esta norma, el amparo contra am-
tra las decisiones emanadas del Tribunal paro solo debe servir para la protección de es-
Constitucional. tos derechos procesales.
IV. CUARTO CRITERIO: SU HABILITA- Sin embargo, el Tribunal Constitucional ha
CIÓN SE CONDICIONA A LA VUL- establecido que la procedencia del amparo
NERACIÓN DE UNO O MÁS DE- contra amparo se condiciona a la vulneración
RECHOS CONSTITUCIONALES de uno o más derechos constitucionales, inde-
INDEPENDIENTEMENTE DE LA NA- pendientemente de la naturaleza de los mis-
TURALEZA DE LOS MISMOS mos. Es decir, ha inaplicado –sin afirmar su
El amparo contra amparo es una expresión es- inconstitucionalidad– el artículo 4 del Códi-
pecífica del amparo contra resoluciones judi- go Procesal Constitucional. En una anterior
ciales. Respecto del ámbito objetivo, de este sentencia (STC Exp. N° 03179-2004-TC), el
58
EDICIÓN ESPECIAL
8 ABAD YUPANQUI, Samuel. El proceso constitucional de amparo. 2ª edición actualizada, Gaceta Jurídica, Lima,
2008, p. 389.
Sin embargo, no resulta claro cuáles son las VI. SEXTO CRITERIO: PROCEDE EN
circunstancias en las cuales un sujeto pro- DEFENSA DE LA DOCTRINA VINCU-
cesal que participó en un proceso de ampa- LANTE ESTABLECIDA POR EL TRI-
ro no puede, por razones extraordinarias, ac- BUNAL CONSTITUCIONAL Y DE
ceder al Recurso de Agravio Constitucional LOS PRECEDENTES VINCULANTES
ESTABLECIDOS POR EL MISMO
contra la sentencia de segundo grado expe-
TRIBUNAL
dida en ese amparo. En la misma STC Exp.
N° 04853-2004-PA/TC se afirma que este su- El amparo es un proceso cuya finalidad es
puesto se presenta en el caso “de quien, habien- la protección de los derechos de la perso-
do sido parte en el proceso, no ha podido inter- nas. Por lo tanto, una condición de proce-
poner el recurso de agravio en su oportunidad, dencia de este proceso en cualquiera de sus
sea por no habérsele notificado oportunamente expresiones (incluido el amparo contra am-
la sentencia desestimatoria o porque, pese a ha- paro) consiste en que su petitorio se susten-
ber sido notificado, no ha podido conocer de su te en la violación o amenaza de uno o más
contenido por alguna imposibilidad material de- derechos constitucionales del demandante.
bidamente acreditada”. Sin embargo, en nuestra En consecuencia, consideramos que el am-
opinión, estos supuestos no deberían habilitar a paro contra amparo sustentado en la denun-
un amparo contra amparo por lo siguiente: cia de la violación de la doctrina jurispru-
dencial del Tribunal Constitucional o de los
i) En el caso que el sujeto que participó en precedentes vinculantes del mismo Tribu-
el amparo no haya sido notificado opor- nal solo será procedente si, como fundamen-
tunamente con la sentencia desestimato- to de la demanda, se afirma que dicha vio-
ria, esta no surte efectos respecto de él9. lación ha dado lugar al agravio o amenaza
Por consiguiente, para oponerle sus efec-
de uno o más derechos constitucionales del
tos deberá previamente notificársele dicha
demandante.
sentencia y, en ese momento, recién se ha-
bilitará el plazo para que interponga no un VII. SÉPTIMO CRITERIO: NO PROCEDE
amparo contra amparo, sino un Recurso CONTRA LAS DECISIONES EMANA-
de Agravio Constitucional. DAS DEL TRIBUNAL CONSTITU-
CIONAL
ii) En el caso que el sujeto procesal haya sido
notificado pero, a pesar de ello, no ha po- Teniendo en cuenta que el Tribunal Cons-
dido conocer la sentencia desetimatoria titucional es el órgano de cierre de la justi-
por alguna imposibilidad material debi- cia constitucional en el Perú, consideramos
damente acreditada, pero no imputable a que este criterio es plausible. Sin embargo,
su propia conducta, lo que corresponde- no debe ser aplicado cuando quien interpone
rá será notificarle nuevamente con dicha la demanda de amparo contra una sentencia
sentencia, y recién en ese momento se ha- de amparo del Tribunal Constitucional no ha
bilitará el plazo para que interponga no un sido notificado válidamente con las resolu-
amparo contra amparo, sino un Recurso ciones correspondientes al proceso en que se
de Agravio Constitucional. expidió esta sentencia.
60
ANÁLISIS Y CRÍTICA
El autor desarrolla los precedentes vinculantes sobre acusación constitucional, juicio po-
lítico, inhabilitación política y la función investigadora del Parlamento. De esta forma,
RESUMEN
nos presenta la diferencia que realiza el Colegiado entre antejuicio y juicio político, la in-
compatibilidad de la sanción de inhabilitación política con la Convención Americana y las
“reglas integradas” dadas por los casos Tineo Cabrera y Toledo Manrique sobre el rol y
acciones de las comisiones investigadoras del Congreso.
* Magíster en Derecho con Mención en Política Jurisdiccional de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP).
Profesor de las Maestrías en Derecho Procesal y Política Jurisdiccional de la PUCP.
1 VALADÉS, Diego. El control del poder. Universidad Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Jurídicas,
México, 1998, p. 150.
62
EDICIÓN ESPECIAL
alcanza a los altos funcionarios que seña- El artículo 184 agrega que corresponde al
le la ley, por infracción de la Constitución Senado declarar si ha o no lugar a forma-
y por todo delito que cometan en el ejerci- ción de causa como consecuencia de las
cio de sus funciones, aunque hayan cesa- acusaciones hechas por la Cámara de Di-
do en estas. putados. En el primer caso, queda el acu-
sado en suspenso en el ejercicio de sus
En este artículo cabe destacar algunos
funciones, y sujeto a juicio según la ley.
puntos:
Como hemos visto, en otras partes se
1) El número de funcionarios pasibles
acompaña a esta decisión la inhabilita-
de acusación constitucional, es inde-
ción, estimada fundamentalmente como
finido. Lo señala la ley, que puede au-
una sanción política, como es el caso de
mentarlos y luego reducirlos a su an-
los Estados Unidos y México”.
tojo. Esta es, sin lugar a dudas una
opción válida, pero no muy consis- La Constitución de 1993 –que prevé un Con-
tente. El antejuicio, acusación consti- greso unicameral– regula el juicio político
tucional o juicio político, es un privi- en los artículos 99 y 100. Y nuestro Tribunal
legio procesal que rompe el principio Constitucional –siguiendo determinados pos-
del juez natural y de la igualdad ante tulados de nuestra doctrina nacional– distin-
la ley, por razones muy atendibles. Y gue el denominado antejuicio del juicio polí-
si es un privilegio, debe ser restringi- tico, al interpretar el contenido de los aludidos
do, y en eso ha acertado la Constitu- dispositivos constitucionales, como así fluye
ción de 1993. de lo establecido en los fundamentos 42, 47
2) El privilegio es indefinido. Acompa- y 48 de la STC Exp. N° 00013-2009-PI/TC4:
ñaba al funcionario de por vida, aun “42. (…) el antejuicio político ha sido
cuando hubiesen pasado muchos años concebido como una prerrogativa funcio-
desde que cesó en el cargo. La Cons- nal cuyo objeto principal es la proscrip-
titución de 1993 precisa que el plazo ción del inicio de un proceso penal contra
es de 5 años. Se trata de una opción un alto funcionario si es que previamente
tan válida una como la otra. En otras no ha sido sometido a un proceso inves-
partes, cuando cesa el funcionario en tigatorio y acusatorio en sede parlamen-
el cargo, cesa el privilegio, pues pre- taria. No cabe, pues, formular denuncia
cisamente el objetivo principal ya se ni abrir instrucción penal si no se cum-
cumplió: O sea, removerlo del cargo. ple con este requisito sine qua non; mu-
3) La referencia a las infracciones a la cho menos en virtud de lo establecido por
Constitución es de antigua data, y se nuestra propia ley fundamental en su ar-
mantiene en la Constitución de 1993. tículo 159, que a la letra dice “correspon-
Sin embargo, a diferencia de épocas de al Ministerio Público: 1. promover de
pasadas, no existe una ley que tipi- oficio, o a petición de parte, la acción judi-
fique la infracción constitucional, ni cial en defensa de la legalidad y de los in-
tampoco una penalidad taxativa. tereses públicos tutelados por el derecho”.
4 Cfr. <http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2010/00013-2009-AI.html>.
“47. Por otra parte, el Tribunal Constitu- de la función pública. En otras palabras,
cional ha considerado que la función con- en el juicio político el funcionario es acu-
gresal sancionadora, prevista en el primer sado, procesado y, de ser el caso, sancio-
párrafo del artículo 100 de la Constitu- nados por el propio Congreso, por faltas a
ción, no se limita a aquellos casos en los la Constitución única y estrictamente po-
que exista una sentencia condenatoria líticas. Claro está la sanción y, en su caso,
emanada del Poder Judicial, por los deli- la inhabilitación, deberá estar enmarcada
tos funcionales en que incurran los fun- dentro de los cánones constitucionales de
cionarios previstos en su artículo 99, sino proporcionalidad y razonabilidad”.
que se extiende a los casos en que, a jui- No obstante, concuerdo con García Belaunde
cio del Pleno del Congreso, se configuren en que las aludidas distinciones entre jui-
responsabilidades eminentemente políti- cio político y antejuicio son simplemente
cas, aun cuando no exista la comisión de terminológicas5.
un delito de por medio. Y es que si bien la
función punitivo-jurisdiccional es privati- Pues bien, en el año 2003 se dictó la impor-
va del Poder Judicial (aquella que puede tante STC Exp. N° 00006-2003-AI/TC don-
sancionar sobre la base de la “razón jurí- de el Tribunal Constitucional estableció cri-
dica”), la función político-punitiva (aque- terios sobre el control político parlamentario
lla que puede sancionar sobre la base de representado en la acusación constitucional,
la “razón política”) no lo es. Y no podría el juicio político y el antejuicio. Tales crite-
serlo, pues justamente el principio de se- rios sirvieron de base para el dictado de los
paración de poderes es el que garantiza la dos fallos: SSTC Exps. N°s 02791-2005-AA/
ausencia de toda valoración política en las TC y 03760-2004-AA/TC. Y esta última sen-
decisiones del Poder Judicial. tencia recoge y desarrolla los postulados con-
tenidos en la primera de las sentencias men-
48. Así, en la Carta Fundamental se en- cionadas con especial énfasis en el contenido,
cuentra constituido el juicio político por el alcances y efectos de la sanción de inhabilita-
que se permite iniciar un procedimiento a ción política impuesta como resultado del jui-
los funcionarios enumerados en su artículo cio político.
99, en razón de las infracciones constitu-
cionales de carácter político cometidas en 1. La inhabilitación política
el ejercicio de sus funciones, y de encon- En el fundamento 3 de la STC Exp. N° 02791-
trarse responsabilidad se autoriza al pro- 2005-AA/TC el Tribunal Constitucional dijo
pio Congreso de la República a sancionar- que la inhabilitación política es consecuen-
lo e incluso inhabilitarlos para el ejercicio cia de un juicio político y que es diferente
5 Dice García Belaunde (Ibídem, pp. 17-18.): “8. ¿Es juicio político lo que existe en la Constitución de 1993? Pues
claro que sí. Que no haya seguido el modelo histórico, y más aún que haya aislado la facultad de la inhabilitación,
abriendo la puerta a eventuales excesos, no nos autoriza a cambiarle de nombre, que es el de siempre. Pretender de-
cir que uno es el antejuicio y otro es el juicio político, es un ingenioso juego de palabras que no se compadece con
la naturaleza de la institución, ni con su desarrollo histórico. El impeachment se tradujo siempre así, no obstante que
existen varios modelos de juicio político. Y no existe ninguna razón valedera para distinguir donde ni la doctrina,
ni la legislación, ni la historia, han distinguido. Si el modelo nos parece arbitrario, llamémoslo así; un juicio políti-
co autoritario, antidemocrático o como queramos llamarlo. Pero no le cambiemos de nombre, porque en derecho no
es saludable jugar con las palabras ni darles un sentido distinto a lo que siempre fueron. Por lo menos, mientras no
cambie la situación actual de aceptación generalizada en el Derecho comparado”.
64
EDICIÓN ESPECIAL
6 Sobre la infracción constitucional, el Tribunal Constitucional ha dicho en el fundamento 20 de la STC Exp. N° 00006-
2003-AI/TC lo siguiente (negritas y subrayados agregados): “Esa es la manera como se debe interpretar la previsión
constitucional según la cual está permitido acusar a los referidos funcionarios públicos por ‘infracción de la Cons-
titución’. Toda falta política en que incurran los funcionarios que componen la estructura orgánica prevista en la
Carta Política, compromete peligrosamente el adecuado desenvolvimiento del aparato estatal. En estos casos, la ra-
zón del despojo del cargo no tiene origen en la comisión de un delito, sino en la comisión de faltas que aminoran, en
grado sumo, la confianza depositada en el funcionario, la que debe ir indefectiblemente ligada al cargo que ostenta”
(resaltado agregado). Cfr. <http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2003/00006-2003-AI.html>.
7 Caso Leopoldo López Mendoza vs Venezuela. Sentencia del 1 de setiembre de 2011. Véase en <http://corteidh.or.cr/
docs/casos/articulos/seriec_233_esp.pdf>. Consulta: 5 de marzo de 2016.
8 Caso Gustavo Petro Urrego vs. Colombia. Resolución N° 5/2014, Medida Cautelar 374-2013, de fecha 18 de marzo de
2014. Véase en: <https://www.oas.org/es/cidh/decisiones/pdf/2014/MC374-13-ES.pdf>. Consulta: 5 de marzo de 2016.
66
EDICIÓN ESPECIAL
9 LÓPEZ FLORES, Luciano. “El debido proceso en las investigaciones parlamentarias. Las reglas ‘integradas’ de los
fallos Tineo Cabrera y Toledo Manrique”; En: Gaceta Constitucional & Procesal Constitucional. N° 96, Gaceta Ju-
rídica, Lima, diciembre 2015, pp. 21-38.
10 En un ensayo anterior he referido varias de las diversas opiniones y trabajos críticos sobre el Caso Tineo Cabre-
ra. Cfr. LÓPEZ FLORES, Luciano: “¿Es ahora el Congreso el Máximo Intérprete de la Constitución?”. En: Gaceta
Constitucional & Procesal Constitucional. Tomo 88, Gaceta Jurídica, Lima, abril 2015, pp. 206-207.
68
TEMA RATIO DECIDENDI STC TINEO CABRERA RATIO DECIDENDI STC TOLEDO MANRIQUE
1. Supuestos de procedencia F. j. 22. El HC procede para amparar el derecho a que “se obser- F. j. 7. Confirma criterio del FJ 22 de la STC Tineo Cabrera. Pro-
de HC contra investigaciones ve el trámite correspondiente” en el procedimiento de detención de cede el HC “atendiendo a las particularidades de cada causa”,
parlamentarias. las personas. “No cualquier trámite, sino aquel que tiene lugar con sobre todo en casos donde la “protección del debido proceso
las reglas del debido proceso”. apareje la tutela de la libertad individual”. Por eso, agrega el TC,
en el caso Tineo Cabrera estableció la procedencia del HC dado
que se trataba de una serie de hechos “que tenían su origen en
una investigación parlamentaria, un juez había dictado una orden
de captura contra [Tineo Cabrera], cosa que, ciertamente, no ha
tenido lugar en el marco de los sucesos que dan mérito a la de-
manda de autos”.
2. Conversión de HC en Am- F. j. 10 y ss. El caso del expresidente Toledo Manrique, cumple con
paro. Procedencia de Am- todas las reglas de conversión de procesos establecidas en la ju-
---
paro contra investigaciones risprudencia constitucional.
parlamentarias.
F. j. 15. Los actos parlamentarios son susceptibles de control ju-
risdiccional constitucional, en la medida que violen derechos fun-
damentales. La vía procesal es el amparo. En el caso concreto,
procede la conversión en Amparo, además, por el interés públi-
co que supone la investigación respecto de un expresidente de la
República.
3. Control constitucional del “in- F. j. 21. “Los asuntos relacionados con el resguardo de la debida
69
70
4. Derecho a la comunicación F. j. 23. Este derecho supone, por un lado, que las comisiones in- F. j. 55. (último párrafo) Dice el TC que “el deber de dar a conocer
previa y detallada de la acu- vestigadoras deben dar a conocer con claridad bajo qué cargos y los “cargos” respectivos dependerá del ámbito y del estado en que
sación en sede parlamentaria. por qué circunstancias se cita a una persona a declarar. Y, por otro, se encuentre la respectiva investigación, no siendo una obligación
impone al Congreso la obligación de legislar con claridad los distin- que pueda imponerse con prescindencia del análisis de cada caso
tos procedimientos sancionatorios, especialmente para garantizar en particular”. Y es que, por ejemplo, como dice el TC que aconte-
los derechos que le asisten a quienes son investigados y citados. ció en el caso Toledo, la comunicación se produjo en la “etapa em-
brionaria” de la investigación.
F. j. 25. El TC reitera su exhortación al Congreso (STC N° 006- F. j. 55. El TC, refiriéndose a lo que señaló en el F. j. 23 de la STC
2003-AI/TC) para que cumpla con establecer en su Reglamento Tineo Cabrera, dice que “no se refiere a los procedimientos de co-
“un procedimiento (…) para los que tienen lugar en las comisio- misiones de investigación del Parlamento, por el sencillo motivo de
nes investigadoras”. que estos no son “procedimientos sancionatorios”. Sin embargo,
nótese que resulta contradictorio con lo que muy explícitamente
dice el TC en el F. j. 25 de la STC Tineo Cabrera.
5. Derecho a la concesión del F. j. 28. El TC advierte que en el Reglamento del Congreso no se F. j. 62. Lo dicho en el FJ 28 de la STC Tineo Cabrera “se trata
tiempo y los medios adecua- ha establecido un plazo para ofrecer descargos frente a acusacio- nuevamente de una recomendación o exhortación de este Tribu-
dos para preparar la defensa. nes formales que pueden entablar las comisiones investigadoras y nal en aras de reducir el riesgo de afectación al debido proceso.
de fiscalización, lo que pone en riesgo el derecho de defensa. Sería No puede ser entendida como la verificación de una inconstitu-
recomendable que el Congreso “adecue sus procedimientos a los cionalidad por omisión cuya no cobertura desencadena por sí
estándares mínimos del debido proceso”. misma el actuar inconstitucional de las comisiones de investiga-
ción del Congreso”.
F. j. 63. “Así, más allá de que aún no se proceda a la previsión de di-
cho plazo [para formular descargos], la violación del derecho fun-
L OS PRECEDENTES VINCULANTES POR MATERIAS
71
72
Para que esto suceda previamente debe conformarse la Comisión y Comisión, mas no la comunicación al investigado de los hechos
comunicársele al alto funcionario los hechos por los cuales va a ser por los cuales se va a investigar”.
investigado, es decir, debe respetarse el derecho a la comunicación
previa y detallada de la acusación; y, b) La solicitud de la Comisión
investigadora debe motivar por qué es necesario, indispensable y
pertinente el levantamiento del secreto bancario, en qué medida va
a contribuir con el esclarecimiento del caso investigado y que in-
dicios o medios probatorios justifican el levantamiento del secreto
bancario. La solicitud no puede ser inmotivada.
10. Derecho fundamental a la de- F. j. 42. El contenido de una pregunta, su manera de formulación o
fensa técnica y a la asisten- su contexto puede denotar, eventualmente, la afectación de otros
cia letrada. derechos fundamentales, tales como el derecho a no ser obligado
a declarar contra uno mismo o el derecho a ser juzgado por un juez
---
independiente e imparcial, pero no per se el derecho de defensa.
De hecho, antes bien, que se haya permitido plantear las objecio-
nes evidencia que el derecho a la asistencia técnica ha sido efec-
tivamente ejercido.
11. Derecho a no ser compelido a F. j. 45. El contenido constitucionalmente protegido de este dere-
declarar o reconocer culpabi- cho se cumple garantizando a la persona el conocimiento cierto de
lidad contra sí mismo. que le asiste el derecho a guardar silencio; además de permitírsele
al investigado ser asistido técnicamente por un abogado defensor.
L OS PRECEDENTES VINCULANTES POR MATERIAS
13. Derecho de intervenir, en F. j. 67. “Corresponde recordar que, a diferencia de otros proce-
igualdad de condiciones, en dimientos que pueden activarse en sede parlamentaria, el de las
la actividad probatoria. comisiones de investigación no es un procedimiento acusatorio,
ni tampoco sancionatorio; sus conclusiones no siempre culminan
---
en una recomendación de acusación; y aunque así fuere, ellas no
vinculan a ningún poder público. No es, pues, un ámbito en el que,
a criterio de este Tribunal, opere el derecho fundamental a interro-
gar testigos como parte del derecho fundamental a la defensa”.
EDICIÓN ESPECIAL
73
NUEVAS INSTITUCIONES
PROCESALES
ENTREVISTA
RESUMEN
de este número de aniversario y con la intención de entender uno de los aspectos más
importantes del TC: su autonomía procesal. De esta forma, el doctor Landa, nos detalla
los alcances y límites de este atributo que permite al Colegiado Constitucional tener una
faceta normativa. La presente entrevista sirve como introducción a esta sección donde se
desarrollan las principales instituciones procesales creadas a partir de la mentada auto-
nomía procesal.
* Profesor de Derecho Constitucional y Procesal Constitucional de la Pontificia Universidad Católica del Perú y la
Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Expresidente del TC.
En ese reglamento, desde el punto de vista presidencia, de la sucesión, los votos; así
no administrativo sino jurisdiccional, se de- como también algunas reglas vinculadas al
sarrolla la incorporación de la amicus curiae. proceso, porque finalmente esto es un proceso
A veces recibíamos pedido de la Defensoría público hacia afuera. Pero también hay un
u otros organismos, y claro uno podía recha- proceso interno: ¿Cómo deliberamos? ¿Quién
zarlo porque no es parte del proceso; sin em- es el ponente? ¿Cuándo es que hay una sen-
bargo, la lógica procesal constitucional, los tencia, cuándo se publica en la página web o
principios de inmediatez y de socialización cuándo sale en El Peruano? Las decisiones
del proceso, son muy importantes porque el que se tomen ante estas interrogantes inci-
juez cuanto más información tenga, mejor re- den en el proceso directamente, pero en un
suelve, al punto que el Código no obliga a au- aspecto interno que debe ser desarrollado en
diencias públicas para los procesos de hábeas el reglamento del TC, el cual es uno solo, que
corpus, amparo o hábeas data; sino solo para ve tanto aspectos administrativos como mate-
acciones de inconstitucionalidad y procesos riales. Así, por ejemplo, se han incorporado
de competencia, pero, a pesar de ello, en la algunas reglas del proceso como son los ami-
práctica el Tribunal ha realizado audiencias cus curiae.
para todos los procesos. Hay, entonces, esa
actitud de saber escuchar. La autonomía procesal es impor-
tada de Alemania donde existe una
Además, en el Tribunal desarrollamos hasta delegación tácita al Tribunal Cons-
el 2008 las audiencias descentralizadas, ir a titucional Federal para que este
los lugares y principios de donde vienen la pueda regular temas procesales.
causas; con la intención de acercar la justicia ¿Ocurre lo mismo en nuestro país?
al ciudadano y no verla tan alejada. Por otro
lado, en las audiencias públicas incorpora- El principio es que exista una ley, un regla-
mos informes de hecho, sustentados por las mento en general, pero también hay excep-
propias partes, y no solamente el brindado ciones porque los derechos fundamentales
por los abogados (informes de derecho), con no se reglamentan, ya que podrían ser des-
quienes podíamos dialogar muy bien. Pero virtuados. Desde esa perspectiva, el Tribu-
nosotros queríamos escuchar también qué nal debe cumplir con el principio de legali-
dicen las partes, cómo se expresan. Incluso dad y el principio de autotutela; es decir, una
en los procesos de inconstitucionalidad que vez dada la ley se organiza como institución
son puro derecho abstracto. Hay casos en
y dicta las normas (medidas necesarias para
los cuales ha sido tan importante cruzar los
implementar dicha ley). Entonces, el Tribu-
hechos expresados por los intereses particu-
nal como órgano del Estado, regula o auto-
lares que representan, que nos ha permitido
rregula en lo normativo o administrativo y
tener mayor conocimiento y poder deliberar
lo correspondiente a la administración juris-
con mayor seguridad lo que a veces no está
diccional. Claro, sería propio que lo que se
en el expediente.
refiere directamente a lo justiciable esté en
¿La autonomía procesal posibilita la ley, pero a veces hay normas que son de
al Tribunal Constitucional a emitir complemento o desarrollo. El Código Pro-
su propio reglamento? cesal Constitucional señala la naturaleza del
principio de autotutela y la Constitución. En
La Ley Orgánica del Tribunal Constitucio- su artículo 201, dice que el Tribunal es inde-
nal dispone que habrá un reglamento, y en pendiente y autónomo, es decir, tiene auto-
este hay aspectos de carácter administrativo, nomía para una regulación con base en la
de los magistrados, de las audiencias, de la ley.
78
ENTREVISTA A CÉSAR LANDA ARROYO
1 Corte Suprema de Justicia de la Nación. Fallo 239:459, caso Siri, emitido el 27 de diciembre de 1957. Desarrollo ju-
risprudencial del amparo contra actos del Estado.
2 Corte Suprema de Justicia de la Nación. Fallo 241:291, caso Kot, emitido el 5 de setiembre de 1958. Desarrollo ju-
risprudencial del amparo contra particulares.
3 Ley N° 16.986, Ley de acción de amparo.
¿Cuáles serían los efectos nega- como sucedió en la STC Exp. N° 04853-
tivos que podría tener esa capa- 2004-AA/TC. Creo que el Código Proce-
cidad normativa del Colegiado? sal Constitucional está bastante horadado,
El Tribunal ha ido construyendo institucio- perforado. Tiene que haber alguna modifi-
nes procesales que podrían desdibujar el cación, pero con otros ojos, no con los ojos
Código Procesal. Por ejemplo, el amparo simplemente del legislador, sino obser-
contra amparo, o el recurso de agravio cons- vando lo que a través de la jurisprudencia
titucional contra resolución denegatoria se ha ido avanzando.
80
ANÁLISIS Y CRÍTICA
RESUMEN
mericana, que fue ideada con la intención de dar una mayor protección a los derechos
constitucionales. La jurisprudencia emitida por el Tribunal Constitucional peruano deter-
mina que el estado de cosas inconstitucional tiene como objeto ampliar los efectos de la
sentencia emitida en un proceso de tutela de derechos fundamentales con la finalidad de
que los derechos violentados de los ciudadanos bajo los mismos hechos, no interpongan
sendas demandas con la finalidad de lograr lo mismo.
* Doctor en Derecho (Universidad de Navarra), Profesor de Derecho Constitucional (Universidad de Piura), Titular de
la Cátedra Jean Monnet en Derecho Comunitario Europeo (Comisión Europea).
1 LANDA, César. Tribunal Constitucional y Estado Democrático. Pontifica Universidad Católica del Perú. Lima,
1999, pp. 367-377.
su posición puede quedar circunscrita a los primer lugar, debemos recordar que desde
ordenamientos que cuentan, o no, con un tri- fines de la Edad Moderna el Parlamento de
bunal especializado, como también aquellos Westminster es supremo, incluso al propio
sistemas que albergan ambos modelos, como derecho constitucional inglés, por eso los jue-
sería el caso peruano. La producción juris- ces no pueden ejercer la revisión judicial de
prudencial en materia constitucional en Ibe- la constitucionalidad de las leyes2. El juez
roamérica ha sido abundante, al punto que los en el Reino Unido también goza de ciertas
tribunales o cortes constitucionales recogen y peculiaridades, a saber, son judicialistas, no
aplican instituciones que, a pesar de tener raíz interfieren en la política guardando un per-
anglosajona o germana, han sido fruto de una fil más bien bajo, mantienen las buenas for-
especie de transculturación al momento de mas con los legisladores caracterizándose por
incorporarlas al derecho nacional; una de esas un menor activismo judicial si los compara-
instituciones es el llamado estado de cosas mos con el modelo norteamericano. No se
inconstitucional, una técnica surgida y apli- discute que los jueces británicos han tenido
cada con ese nombre por la Corte Constitu- un destacable papel constitucional, pero en
cional colombiana que ha sido recogida por menor medida que los estadounidenses, al
nuestro máximo intérprete. respecto podemos resaltar las resoluciones
A continuación, para poder mencionar los del siglo XVII que defendieron el Common
casos en que esta institución ha sido apli- Law frente a la teoría absolutista; también
cada para administrar justicia constitucional, debemos resaltar las soluciones que han brin-
primero haremos un repaso a los principa- dado en materia constitucional en temas tan
les rasgos de la posición constitucional de los variados como la prerrogativa regia, los tri-
jueces para comprender su función en la crea- butos, derechos humanos, la ley marcial hasta
ción de derecho constitucional en sus resolu- la responsabilidad de la Corona3. Los jueces
ciones, para luego centrarnos la institución ingleses se declaran sometidos a la ley del
del llamado estado de cosas inconstitucional Parlamento y los precedentes judiciales, pero,
que ha incorporado el Tribunal Constitucio- en la práctica, son los verdaderos creadores
nal peruano. de derecho. Se trata de jueces que argumen-
tan y opinan basándose en el sentido común
II. LA POSICIÓN CONSTITUCIONAL DE y la justicia natural4. Una vez nombrados, los
LOS JUECES EN EL REINO UNIDO jueces británicos conservan su cargo hasta los
La función constitucional que ejercen los jue- setenta y cinco años mientras se comporten
ces en el Reino Unido no ha sido la esperada bien (quamdiu se bene gesserint); su inamo-
en el país que dio nacimiento al constitucio- vilidad es una conquista de la Ley de Estable-
nalismo, las razones no se hacen esperar. En cimiento (Act of Settlement de 1700)5.
2 “El Parlamento es soberanos, estando (en teoría) por encima de la propia Constitución y, por descontado, de los jue-
ces: Parliamentum omnia potest. No fue así hasta el siglo XVIII. Anteriormente se entendía que sus leyes no estaban
por encima del Common Law. Pero este fue el fruto de la recepción de la teoría de la soberanía, aun adaptada al uso
británico y no estatista que la redujo a supremacía de un órgano sobre los demás en vez de soberanía estatal en su
sentido pleno. Por ello, la revisión judicial de la constitucionalidad de las leyes no es posible”; cfr. PEREIRA ME-
NAUT, Antonio Carlos. Lecciones de Teoría Constitucional, Colex, segunda edición, Madrid, 2006, p. 253.
3 Ídem.
4 Véase, PEREIRA MENAUT, Antonio-Carlos. El ejemplo constitucional de Inglaterra. Universidad Complutense de
Madrid. Madrid, 1992, p. 240.
5 Véase PEREIRA MENAUT: El ejemplo constitucional de Inglaterra. Ob. cit., p. 246.
82
EDICIÓN ESPECIAL
6 “El Federalista es, ante todo, un comentario de la Constitución de los Estados Unidos de América. Se trata de un co-
mentario contemporáneo, que si no llega a ser una exposición de motivos oficial o una interpretación auténtica, en
cambio, deriva una gran autoridad del hecho de que dos de los autores habían participado en la convención, tercian-
do en los debates y escuchado las objeciones presentadas contra cada artículo, y que habían salido de ella con notas
y memorias repletas precisamente de la clase de información necesaria para la tarea que emprendieron”; cfr. HA-
MILTON, A; MADISON, J, JAY, J. El Federalista. Fondo de Cultura Económica, México, 2001, p. 10.
7 Cfr. HAMILTON, A; MADISON, J, JAY, J. El Federalista. Ob. cit., pp. 330-331.
8 Ibídem, p. 331.
judiciales inferiores (stare decisis). Y en ter- materia legal) y, finalmente, que no haya sido
cer lugar nos encontramos ante un texto codi- conocida por los tribunales inferiores.
ficado y rígido, a diferencia del modelo britá-
Con relación al contenido de la demanda,
nico que es más bien no codificado y flexible.
Abraham recuerda algunas pautas para te-
Debemos recordar que la revisión judicial de
ner en cuenta, por ejemplo, que la parte agra-
la constitucionalidad de las leyes no se incor-
viada debe argumentar que la norma les oca-
poró al texto de la Constitución norteame-
siona un grave perjuicio a sus derechos, por
ricana sino que fue producto de la interpre-
tanto, no deberá invocar o probarse durante
tación de los jueces; sin embargo, debemos
el proceso que la misma norma lo ha bene-
destacar que sí fue considerada durante los
ficiado o que fueron consentidos por el mis-
debates de la Convención y su planteamiento
mo demandante. El mismo autor destaca que
y justificación también se encuentra recogida
la Corte Suprema norteamericana no se afe-
en el Federalista9.
rra a sus precedentes, es decir, los conserva
La revisión judicial de la constitucionali- pero en ocasiones puede apartarse de ellos
dad de las normas fue de origen norteame- según las especiales circunstancias10; tampo-
ricano (Marbury versus Madison 1803), la co se pronuncia sobre cuestiones políticas11,
cual no se encuentra exenta de ciertas reglas tiene la actitud de presumir la constituciona-
que deberían tomarse en cuenta por los ope- lidad de las normas cuestionadas, no imputa
radores judiciales en cualquier ordenamiento motivos ilegales a los legisladores; además,
constitucional; podemos citar algunas de ellas si considera que debe mantener una ley apa-
que consideramos de especial importancia. rentemente inconstitucional, tratará de res-
Para comenzar, la Corte Suprema nortea- tringir el ámbito inconstitucional de dicha
mericana no admitirá ninguna reclamación ley. Finalmente, Abraham considera que la
sobre la presunta inconstitucionalidad de una Corte Suprema Norteamericana “no ha sido
norma mientras no considere que tiene los creada para servir de control a legisladores
fundamentos necesarios para ser considerada ineptos, poco cultos, emotivos y no repre-
como un caso o controversia judicial, que sentativos, pues la incompetencia de los le-
además tenga la debida legitimación procesal, gisladores en temas políticos no es asunto de
que verse sobre temas jurídicos y no solo de la Corte; se trata más bien de un problema
hechos (pues la revisión judicial versará sobre del electorado”12. Una característica de los
9 Las opiniones de HAMILTON en el Federalista sobre la Judicatura y su posición constitucional son dignas de resaltar
cuando sostiene que “[u]na Constitución es de hecho una ley fundamental y así debe ser considerada por los jueces. A
ellos pertenece, por lo tanto, determinar su significado, así como el de cualquier ley que provenga del cuerpo legisla-
tivo. Y si ocurriere que entre las dos hay una discrepancia, debe preferirse, como es natural, aquella que posee fuerza
obligatoria y validez superiores; en otras palabras, debe preferirse la Constitución a la ley ordinaria, la intención del
pueblo a la intención de sus mandatarios”; cfr. HAMILTON, MADISON Y JAY: El Federalista. Ob. cit., p. 332.
10 Si la Corte Suprema tuviera que acatar siempre sus resoluciones anteriores tendría poca flexibilidad. Por eso, al per-
mitirse de manera excepcional la posibilidad de contradecir una resolución anterior o no tener en cuenta un prece-
dente, la Corte establece conserva un espacio de seguridad en el cual puede refugiarse si fuese necesario. En ese sen-
tido, cuando la prudencia aconseja que la Corte cambie de dirección o, por lo menos, que mantenga una mentalidad
abierta, este principio colabora con esa finalidad.
11 A diferencia de los poderes legislativo y ejecutivo la judicatura no fue pensada por los fundadores como un instru-
mento que manifieste la voluntad popular, por lo tanto, carece de un carácter político.
12 Véase ABRAHAM, Henry J. The judicial process. Séptima edición. Oxford University Press. New York, 1998,
pp. 386-410. Nuestro agradecimiento al profesor Domingo García Belaunde por facilitarnos esta importante cita e
información bibliográfica.
84
EDICIÓN ESPECIAL
13 Por ejemplo, el Juez Lord Dening en su biografía nos dice que “en la medida que hice lo que pensaba que era justo,
estaba contento, podía dormir por la noche. Pero si hacía lo que era injusto, me quedaba despierto con la preocupa-
ción”; véase la cita en SAMPSON, Anthony. The Changing Anatomy of Britain. Londres, 1982, reimpreso en 1989;
citado por PEREIRA MENAUT: El ejemplo constitucional de Inglaterra. Ob. cit., p. 240.
14 En ese mismo sentido, el Profesor Carbonell nos dice que “[s]on muy conocidas las biografías de los jueces más
renombrados de su historia, como John Marshall, Oliver Wendell Holmes, Hugo Black, William O. Douglas, Earl
Warren, Felix Frankfurter, William Brenan, Harry Blackmun o Sandra Day O´Connor. No existe nada parecido a
eso en los países latinos. No lo hay en Italia, ni Francia, Alemania, España o en América Latina”; cfr. CARBO-
NELL, Miguel. “Gustavo Zagrebelsky, juez constitucional”. En: Cuestiones Constitucionales. Año 6, Nº 2, 2008,
pp. 561-565.
15 En el caso Brown vs. Junta Escolar, en el que el Tribunal Supremo de Estados Unidos dictaminó que las escuelas pú-
blicas racialmente segregadas eran inconstitucionales.
16 Véase la Sentencia de la Corte Constitucional Colombiana T-1030 del 2003, M.P. Clara Vargas, p. 17.
y Pitts vs Cherry; sendas resoluciones judi- satisfacción de los derechos que fueron afec-
ciales que impulsaron los clásicos mecanis- tados; todo ello con la finalidad de evitar que
mos procesales para luego sumarse otros otros ciudadanos también tengan que inter-
mediante los cuales ha dado un mayor pro- poner sucesivas demandas que terminen pro-
tagonismo a los jueces respecto de la defensa duciendo una mayor congestión de la carga
de los derechos fundamentales. procesal.
IV. EL LLAMADO ESTADO DE COSAS En resumen, la técnica del estado de cosas
INCONSTITUCIONAL inconstitucional es una institución que per-
La aparición del concepto de estado de cosas mite ampliar los efectos de una sentencia
inconstitucional en territorio iberoameri- recaída en un proceso constitucional de tutela
cano fue gracias a la Corte Constitucional de derechos fundamentales; para lograrlo, el
Colombiana (SU 559 de 1997), la cual resol- demandante debe declarar la existencia de un
vió el problema de afectación del derecho a conjunto de situaciones que resultan incom-
la salud de varios docentes de los municipios patibles con la finalidad de la Constitución,
de María la Baja y Zambrano (Bolívar) por su que espera sean corregidas por medio de una
no afiliación al Fondo Nacional Prestaciones resolución judicial que lo ampare en un plazo
Sociales del Magisterio, en dicha sentencia razonable y establecido en una sentencia17.
se establece el origen y primera definición de
esta institución constitucional. V. UNA APROXIMACIÓN AL CONCEP-
TO Y APLICACIÓN POR EL TRIBU-
El llamado estado de cosas inconstitucional NAL CONSTITUCIONAL PERUANO
es la declaración que hace la Corte Consti- El Tribunal Constitucional peruano ha reco-
tucional, como su máximo intérprete, para gido y aplicado la técnica del estado de cosas
reconocer un conjunto de hechos referidos a inconstitucional reconociendo que se trata
un proceso donde se observa una violación de una institución que implica no solamente
masiva, constante y generalizada de derechos
el análisis constitucional de un único acto
fundamentales constitucionalmente reconoci-
sino un conjunto de actos que se encuen-
dos, los cuales afectan un número de perso-
tran interrelacionados unos con otros18. Para
nas y que puede extenderse incluso aquéllas
el máximo intérprete de la Constitución, el
que estén en la misma situación pero que no
estado de cosas inconstitucional también
hayan iniciado una acción de garantía. Una
puede declararse como producto de una omi-
violación de derechos ejercida por organis-
sión, señalando que los efectos de la reso-
mos del estado por incumplimiento de sus
lución se podrán extender a todos aquellos
obligaciones como garantes de derechos, ya
casos en los que de la realización de un acto u
sea por su omisión, impertinencia o ineficacia
omisión se hubiese derivado o generado una
de políticas públicas para atender a la ciuda-
violación de derechos fundamentales de dis-
danía afectada. De esta manera, el estado de
tintas personas19.
cosas inconstitucional no hace referencia a un
solo caso o a una norma específica, permi- A continuación, repasemos las veces que el
tiendo allanar el camino para la búsqueda y Tribunal Constitucional ha decido aplicar la
86
EDICIÓN ESPECIAL
20 Véase RAMÍREZ HUAROTO, Beatriz Mayling: El estado de cosas inconstitucional y sus posibilidades como he-
rramienta para el litigio estratégico de derecho público. Una mirada a la jurisprudencia colombiana y peruana. Te-
sis para optar el grado de magister en Derecho Constitucional por la Pontificia Universidad Católica del Perú, Lima,
2013, pp. 59-72. <http://tesis.pucp.edu.pe/repositorio/bitstream/handle/123456789/4952/RAMIREZ_HUAROTO_
BEATRIZ_DERECHO_PUBLICO.pdf?sequence=1>.
21 Véase el Exp. N° 2579-2003-HD/TC (Fundamento jurídico 22).
22 Una modulación de los efectos de las sentencias dictadas en el seno de estos procesos constitucionales de la libertad
se justifica, como lo ha expresado la Corte Constitucional colombiana, “(...) en el deber de colaborar armónicamen-
te con los restantes órganos del Estado para la realización de sus fines. Del mismo modo que debe comunicarse a la
autoridad competente la noticia relativa a la comisión de un delito [artículo 11 de la Ley N° 23506], no se ve por qué
deba omitirse la notificación de que un determinado estado de cosas resulta violatorio de la Constitución Política”;
cfr. Exp. N° 2579-2003-HD/TC (Fundamento jurídico 20).
88
EDICIÓN ESPECIAL
de Economía y Finanzas, entre otros, y que en el rubro V Lineamientos Estratégicos: Salud Penitenciaria, señala que
es prioridad para el INPE: “Desarrollar y/o fortalecer los vínculos con el Ministerio de Salud en los respectivos ni-
veles regional y local, así como la asistencia y traslado de internos psiquiátricos a Hospitales de Salud Mental”. cfr.
Exp. N° 03426-2008-PHC/TC (Fundamento jurídico 30).
32 Exp. N° 03426-2008-PHC/TC (Véase el segundo apartado de la resolución).
33 Véase la Sentencia de la Corte Constitucional Colombiana T-1030 del 2003, M.P. Clara Vargas, p. 18.
90
ANÁLISIS Y CRÍTICA
En el siguiente artículo, la autora desarrolla una de las instituciones adoptadas por el Tri-
bunal Constitucional a través de su controvertida autonomía procesal. En este caso, las
RESUMEN
siguientes líneas tienen como finalidad realizar un análisis sobre la reconversión de los
procesos constitucionales, institución creada con la intención de tutelar de forma más idó-
nea los derechos fundamentales de las personas. El desarrollo jurisprudencial del Tribu-
nal respecto a la conversión nos hace observar que esta figura no se da de forma arbitra-
ria sino que se deben tener en cuenta ciertos requisitos o límites, que son de observancia
obligatoria del juez constitucional que pretende utilizar la reconversión.
* Abogada por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, con estudios de Maestría en Derecho Constitucional y
Derechos Humanos por la misma casa de estudios.
1 Sentencia emitida con fecha 26 de abril de 2007 y publicada en la página web el 26 de octubre de 2007.
2 LANDA ARROYO, César. Aspectos del Derecho Procesal Constitucional. Idemsa, abril, 2009, pp. 243 y 244.
3 LEÓN VÁSQUEZ, Jorge. “El Tribunal Constitucional y la configuración de su Derecho Procesal”. En: Justicia
Constitucional. Revista de Jurisprudencia y Doctrina. Año II, N° 04, julio-diciembre, Lima, 2006.
4 FIGUERA GUTARRA, Edwin. “La reconvención de procesos constitucionales”. En: Jurídica. Suplemento de Aná-
lisis Legal de El Peruano 8 de julio de 2008, Lima.
92
EDICIÓN ESPECIAL
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EDICIÓN ESPECIAL
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EDICIÓN ESPECIAL
98
ANÁLISIS Y CRÍTICA
RESUMEN
lagunas en el Derecho Procesal Constitucional. Por otro lado, la doctrina en contra de “la
autoproclamada autonomía procesal del TC” precisa que no existe un sustento legal para
ello. En el siguiente artículo se desarrollará la represión de actos lesivos homogéneos,
institución procesal ampliada por la tan cuestionada autonomía procesal. En las siguien-
tes líneas se dará una crítica a la autonomía procesal y el desarrollo jurisprudencial del
recurso de agravio verificador de la homogeneidad del acto lesivo.
* Docente. Máster de Argumentación Juridica de la Universidad De Alicante-España. Con estudios en Derecho Proce-
sal en la Universidad Nacional de Rosario Argentina.
100
EDICIÓN ESPECIAL
se expresó que “el carácter homogéneo del sido declarado lesivo se repitan en el futuro2.
nuevo acto lesivo debe ser manifiesto, es Como es de verse, no existe mayor controver-
decir, no deben existir dudas sobre las esen- sia respecto a su definición.
ciales iguales características entre el acto
anterior y el nuevo. Y que para la determi- IV. FUNDAMENTOS DE LA INSTITUCIÓN
nación de esta identidad en cada caso con- El Tribunal Constitucional ha precisado en
creto, el juez constitucional deberá recurrir a las sentencias referidas, la razón de ser de
un juicio de comparación entre los términos la represión de actos lesivos homogéneos y
comprendidos”, es menester también referir que a continuación se indican: Evitar el desa-
que igualmente se reiteraron los conceptos ya rrollo de nuevos procesos constitucionales y
establecidos en la STC Exp. N° 04878-2008- garantizar la obligatoriedad de las sentencias
PA/TC. Sin embargo, como si no estuviese ejecutoriadas.
clara la cosa, se volvieron a reiterar los con-
ceptos ya definidos en la STC recaída en el V. PRESUPUESTOS PROCESALES
N° 01495-2012-PA/TC. OBLIGATORIOS
1 ETO CRUZ, Gerardo. Tratado del Proceso Constitucional de Amparo. Tomo 2, Gaceta Jurídica, Lima, 2013, pp. 376
y 378.
2 MESIA, Carlos. Exégesis del Código Procesal Constitucional. Gaceta Jurídica, Lima, 2004, p. 378.
102
EDICIÓN ESPECIAL
3 LANDA ARROYO, César. “La Autonomía Procesal del Tribunal Constitucional”. En: Gaceta Constitucional. Tomo
13, Lima, enero, 2009, p. 20.
4 Ídem.
5 Ídem.
desprende porque “en los casos de la jurisdic- Jürgen Habermas reconoce que un Tribu-
ción constitucional de la libertad, el juzgador nal Constitucional no tiene más remedio que
tan pronto obtenga la verdad deberá tomar proceder a interpretaciones constructivas,
una decisión, sacrificando aspectos formales pero agrega que una concepción procedi-
típicos del proceso privado; y definir la tutela mental del Derecho obligaría a este órgano a
judicial efectiva; con ello, en puridad se ade- un papel más bien restrictivo8 y va más allá
cuan ciertas exigencias formales relativizadas al asumir que la consideración de los dere-
por el juez, ante el fin principio que persigue chos fundamentales como bienes o valores
todo proceso constitucional”6. que han de ser ponderados en el caso con-
La pregunta natural entonces es si es conve- creto convierte al Tribunal en un negocia-
niente este sacrificio de las normas procesa- dor de valores, en una “instancia autoritaria”
les al que aludía calificada doctrina nacional, que invade las competencias del legislador y
en desmedro de lo realizado por el legislador que aumenta el peligro de juicios irraciona-
ordinario y por tanto el respeto de la separa- les porque con ello cobran primacía los argu-
ción de poderes. Creemos modestamente que mentos funcionalistas a costa de los argu-
el Tribunal Constitucional solo puede inter- mentos normativos9.
pretar las normas procesales en defensa de La vulneración de derechos constituciona-
derechos fundamentales, pero no modificar les debe ser tutelada en el mismo proceso y
las mismas, tampoco soslayar lo predetermi- por medio de los medios ordinarios, normal-
nado por ley a cualquier precio, por lo mismo, mente los recursos10, esto es, los creados por
el Tribunal Constitucional procede de manera el legislador ordinario, no los que impone el
cautelosa, se remite a principios generales del TC como parte de su autoproclamada autono-
Derecho Procesal, etc. Esto responde al carác- mía procesal. Ya se experimentó en ocasio-
ter fragmentario de las normas procesales; y nes anteriores con resultados nefastos como
también cabe felicitar el derecho comparado, el recurso de agravio constitucional a favor
si le aporta a los estatutos del Tribunal Cons- del precedente, por ello la desconfianza surge
titucional el bagaje de experiencia del lla-
naturalmente ante experimentos que atacan al
mado “Derecho Procesal General”, siempre y
Derecho Procesal General que tanto camino
cuando se resguarden los fundamentos espe-
ha transitado y con tanto esfuerzo de la doc-
cíficos del derecho fundamental de los esta-
trina, para consagrar sus efectos en pos de
tutos del Tribunal Constitucional. El Dere-
conseguir igualdad procesal jurídica entre las
cho Procesal Constitucional “a medida” de la
partes.
Ley Fundamental, y de la teoría constitucio-
nal que se puede desprender “a partir de ese Lo preocupante de estas decisiones es la ile-
derecho”, no excluye “préstamos” cautelosos gal invasión de competencias del Tribunal
del resto del Derecho Procesal7. Constitucional para modificar lo normado por
6 ETO CRUZ, Gerardo. “El rol de los principios procesales en la actuación del juez constitucional”. En Gaceta Cons-
titucional. Tomo 13, Lima, enero, 2009, p. 27.
7 HÄBERLE, Peter. “El derecho procesal constitucional como derecho constitucional concreto frente a la judicatura
del Tribunal Constitucional”. En: Pensamiento Constitucional. Año VIII, N° 8, Pontificia Universidad Católica del
Perú, Lima, 2002, p. 31.
8 HABERMAS, Jürgen. Facticidad y Validez. Traducción de Manuel Jiménez Redondo. Trotta, Madrid, 1998, p. 525
9 Ibídem, p. 332.
10 MONTERO AROCA, Juan. Amparo Constitucional y Proceso Civil. Tirant lo Blanch, Valencia, 2005, p. 24.
104
EDICIÓN ESPECIAL
11 HÄBERLE, Peter. La libertad fundamental en el Estado Constitucional. Fondo Editorial de la Pontifica Universidad
Católica del Perú. Lima, 1997, p. 292.
12 FERRAJOLI, Luigi. Los fundamentos de los derechos fundamentales. Trotta, Madrid, 2001, p. 19.
13 ALEXY, Robert. Teoría de los derechos fundamentales. Centro de Estudios Constitucionales, Madrid, 1993, p. 47.
106
ANÁLISIS Y CRÍTICA
RESUMEN
cus curiae, son instituciones que dotan de una mayor legitimidad a las decisiones toma-
das por el Tribunal Constitucional. El autor desarrollará brevemente la autonomía del
Máximo Intérprete de la Constitución, como fundamento de la creación de las institucio-
nes ya señaladas. A continuación, empezará a explicarnos la importancia de cada una de
estas instituciones y sistematizará la jurisprudencia donde se ha desarrollado cada insti-
tución procesal.
* Magíster en Derecho con Mención en Política Jurisdiccional por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Más-
ter en Derecho Constitucional por la Universidad de Castilla-La Mancha.
1 ZAGREBELSKY, Gustavo. “¿Derecho procesal constitucional?” En: Revista Peruana de Derecho Procesal.
N° IV, Estudio Monroy, Lima, 2001, diciembre, p. 402.
2 MENDOZA ESCALANTE, Mijail. “La autonomía procesal constitucional”. En: Justicia Constitucional. Revista de
Jurisprudencia y Doctrina. Año II, N° 4, Palestra, Lima, 2006, julio-diciembre, p. 97.
3 LANDA ARROYO, César. “Autonomía procesal del Tribunal Constitucional. La experiencia del Perú”. En: Justicia
Constitucional. Revista de Jurisprudencia y Doctrina. Año II, N° 4, Palestra, Lima, 2006, julio-diciembre, p. 64.
4 Resolución del Tribunal Constitucional recaída en el Expediente N° 0020-2005-PI/TC, f. j. 3.
108
EDICIÓN ESPECIAL
110
EDICIÓN ESPECIAL
La finalidad de este proceso era decla- Del mismo modo, esta institución engloba a
rar la inconstitucionalidad de diversas un tercero ajeno a un proceso que de manera
disposiciones de la Ley de la Carrera voluntaria ofrece su opinión técnica y obje-
Judicial. tiva frente a asunto de relevancia jurídica u
otro asunto en alguna materia especializada,
Esta demanda fue interpuesta por la Fis- para colaborar con el órgano jurisdiccional en
cal de la Nación, no obstante, el Presi- la solución del proceso.
dente del Consejo Nacional de la Magis-
tratura solicitó su incorporación como En nuestro país, la figura del amicus curiae
partícipe en este proceso, la misma que no se encontraba regulada por la legislación
fue aceptada por el Pleno del Tribunal nacional, habiendo sido objeto de la juris-
Constitucional. prudencia del Tribunal Constitucional, a tra-
vés de su denominada autonomía procesal;
• Resolución recaída en el Exp. N° 0001- no obstante, no se abordaba la institución del
2012-PI/TC: amicus curiae, hasta que mediante la Reso-
lución Administrativa N° 034-2005-P/TC,
La finalidad de este proceso era declarar publicada el 23 de abril de 2005 en el dia-
la inconstitucionalidad de la Ordenanza rio oficial El Peruano, se incorporó al Regla-
Regional N° 036-2011-GR.CAJ-CR, del mento Normativo el artículo 13-A que pres-
Gobierno Regional Cajamarca, la misma cribe que: “El Pleno o las Salas pueden
que declaró inviable el Proyecto Minero solicitar los informes que estimen necesarios
Conga. a los órganos de Gobierno y de la Adminis-
En este caso la solicitud fue presentada tración y requerir respuesta oportuna de ellos,
por el Fiscal de la Nación para integrar de acuerdo al artículo 119 del Código Proce-
al proceso en calidad de partícipes al sal Constitucional; así como solicitar infor-
Poder Ejecutivo así como a los Ministe- mación del (los) amicus curiae (amici curia-
rios de Energía y Minas, del Ambiente y rum), si fuera el caso, que permita esclarecer
Agricultura. aspectos especializados que puedan surgir del
estudio de los actuados”.
Al respecto el Tribunal Constitucio-
nal declaró improcedente la solicitud de Del mismo modo, se incorporó en el ar-
incorporación como partícipe al Poder tículo 34 del mencionado Reglamento Nor-
Ejecutivo dado que este per se es un sujeto mativo, el mismo que regula el desarrollo de
legitimado para accionar en un proceso de las audiencias, señalando que cuando corres-
inconstitucionalidad, por medio del Pre- ponda, se recibirá la participación del amicus
sidente de la República; no obstante, se curiae, bajo los siguientes términos: “Luego
incorporó a la Presidencia del Consejo de instalada la audiencia, el Presidente dis-
de Ministros como partícipe en el citado pone que el Relator dé cuenta, en forma suce-
caso. siva, de las causas programadas, precisando
el número de expediente, las partes que inter- acogió los informes de los siguientes
vienen y la naturaleza de la pretensión. El amici curiarum:
Presidente concede el uso de la palabra, hasta
- La Defensoría del Pueblo.
por cinco minutos al demandante y por igual
tiempo al demandado, quienes se ubicarán - Asociación Acción de Lucha
a izquierda y la derecha, respectivamente, Anticorrupción “Sin componenda”.
frente a los magistrados. A continuación, el
- La Organización Mundial de la Salud
Presidente concede el uso de la palabra a los
(OMS) y la Organización Panameri-
abogados del demandante y del demandado,
cana de la Salud (OPS).
por el mismo tiempo, los cuales se ubicarán
en igual forma que sus defendidos. Está per- - Fondo de Población de las Naciones
mitida la réplica y duplica a los abogados por Unidas (UNFPA).
el tiempo que determine el Presidente. Por
- Sociedad Peruana de Obstetricia y
último, cuando corresponda, se recibirá la
Ginecología.
participación del amicus curiae”.
• Caso sobre la Salud Mental (Exp.
Por lo tanto, se observa que esta institución
N° 03081-2007-PA/TC)
jurídica no cuenta con reglas procesales claras
respecto a su procedencia. Recién en el año La señora R.J.S.A. Vda. de R. interpuso
2005, el Tribunal Constitucional positivizó una demanda de amparo, a nombre propio
en su Reglamento Normativo dicha figura y en su calidad de curadora representante
procesal; no obstante, en los últimos años –y de su hija G. R. S., solicitando que se deje
como lo demuestra la jurisprudencia del Tri- sin efecto la orden de alta de su hija, la
bunal– la no recepción de informes en calidad misma que padece de esquizofrenia para-
de amicus curiae no ha tenido una respuesta noide; alega que dicha orden se sustenta
uniforme. En ciertas ocasiones el Tribunal no en el informe médico de alta otorgado
ha aplicado lo establecido en el mencionado por el doctor Jorge E. de la Vega Rázuri,
reglamento, lo que podría llegar a distorsio- médico psiquiatra del Centro de Reha-
nar su uso y eficacia en determinados casos bilitación Integral para Pacientes Cróni-
dentro de los procesos constitucionales. cos (CRIPC) Hospital 1 Huariaca-EsSa-
lud - Pasco.
A manera de reseña, identificaremos algunos
casos en los cuales el Tribunal Constitucional En este caso, el Colegiado constitucio-
ha acogido los informes de amicus curiae en nal consideró imprescindible para su dilu-
distintos procesos constitucionales: cidación la opinión de personas con un
amplio conocimiento sobre la salud men-
• Caso sobre el Anticonceptivo Oral de
tal, tanto desde el punto de vista médico,
Emergencia (Exp. N° 07435-2006-PC/TC)
como desde la perspectiva de la ejecución
En el presente caso, un grupo de muje- de las políticas públicas; en ese sentido,
res interpusieron una demanda de cumpli- solicitó la participación del Director de
miento, con la finalidad de que el Minis- Salud Mental, doctor Hugo Lozada Roca,
terio de Salud cumpla con garantizar la en calidad de amicus curiae. Asimismo,
provisión e información sobre el anti- creyó conveniente solicitar la participa-
conceptivo oral de emergencia (AOE) en ción del reconocido psiquiatra Enrique
todos los establecimientos de salud bajo Galli, el mismo que expresó que el insti-
su cargo. Parte de la controversia se basó tucionalismo crónico produce daño y sín-
en determinar si esta píldora tenía efectos tomas. Y que si bien es verdad que en los
abortivos, por dicho motivo el Tribunal países desarrollados hace tiempo que ha
112
EDICIÓN ESPECIAL
5 PICHÓN DE LA CRUZ, Junior. El interés Público como criterio de procedencia del Amicus Curiae en los Procesos
Constitucionales.Tesis para optar el grado académico de Magíster en Derecho con mención en Política Jurisdiccio-
nal por la Pontificia Universidad Católica del Perú.
114
CONTRADICCIONES
EN LA JURISPRUDENCIA DEL TC
ANÁLISIS Y CRÍTICA
RESUMEN
en materia del derecho a la consulta previa y llega a la conclusión de que, si bien este re-
conoce y desarrolla el contenido constitucionalmente protegido de este derecho fundamen-
tal, ninguna demanda por omisión de consulta ha sido admitida. Por ello, afirma que aun
cuando el Colegiado ha desarrollado un conjunto de reglas sobre el derecho a la consulta,
en los hechos este se encuentra desprotegido.
* Esta es una versión desarrollada del pronunciamiento elaborado por el autor y que publicada en el portal de Justicia
Viva, disponible en: <http://www.justiciaviva.org.pe/notihome/notihome01.php?noti=415>.
** Miembro del Instituto de Defensa Legal (IDL).
1 Ver: <http://www.justiciaviva.org.pe/userfiles/retrocesoTC.pdf>.
2 Ver: <http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2010/06316-2008-AA%20Aclaracion.html>.
118
EDICIÓN ESPECIAL
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EDICIÓN ESPECIAL
3 Ver: <http://www.justiciaviva.org.pe/notihome/notihome01.php?noti=507>.
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4 CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. Pueblo Saramaka vs. Surinam. Excepciones prelimi-
nares, fondo, reparaciones y costas, sentencia del 28 de noviembre de 2007, Serie C, N° 172, párr. 126 y 128.
5 Ídem.
6 Ver: <http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2011/01939-2011-AA.html>.
el Convenio N° 169 de la OIT, al no haberse de las partes en otra vía la viabilidad del Pro-
coordinado con los habitantes de la provincia yecto Majes Siguas II. Contra dicha resolu-
de Espinar, el derecho a gozar de un ambien- ción, el Procurador Público del Estado a car-
te equilibrado por cuanto se dejara sin agua go de los Asuntos judiciales de la Presidencia
a la Región de Cusco, así como el derecho a del Consejo de Ministros presenta un recur-
la salud. so de agravio constitucional (RAC), pues sos-
tiene que la sentencia de la Sala Única de Va-
En primera instancia, el Juzgado Mixto de Es-
caciones modifica la sentencia expedida por
pinar de la Corte Superior de Justicia de Cus-
la Sala Mixta de Canchis, afectando inconsti-
co declaró fundada la demanda dejando sin
tucionalmente la garantía de la cosa juzgada.
efecto la declaración de viabilidad del Pro-
yecto Majes Siguas II. A continuación dispo- 2. ¿Qué dijo el TC?
ne la realización de un nuevo Estudio Técnico
de Balance Hídrico Integral de la cuenca del El TC declara fundado el RAC basando su de-
río Apurímac. En segunda instancia, la Sala cisión en que se ha violado el derecho a la
Mixta de Canchis, de la misma Corte, con- cosa juzgada y a la motivación de las decisio-
firma la sentencia de primera instancia, cuan- nes. En consecuencia, declara nula la senten-
do disponen un nuevo estudio de balance hí- cia de la Sala Única de Vacaciones. A conti-
drico, ordenando además la realización de un nuación, ordena la realización de un nuevo y
nuevo estudio de impacto ambiental. Asimis- definitivo estudio técnico de balance hídrico
mo, revoca la sentencia de primera instancia integral. Luego precisa que este será realiza-
cuando deja sin efecto la declaración de via- do por la Autoridad Nacional del Agua. Aña-
bilidad del Proyecto Majes Siguas II. de que la determinación final corresponderá
al despacho de la Presidencia del Consejo de
En fase de ejecución de sentencia el Juzga- Ministros, si hubiese discrepancias en el de-
do Mixto de Espinar resuelve, primero, desa- sarrollo del estudio. Más adelante, convali-
probar el estudio de confrontación de la ofer- da el EIA de la represa de Angostura y el es-
ta y demanda de la cuenca del río Apurímac al tudio de gestión ambiental a nivel definitivo.
río Salado y el estudio de impacto ambiental Concluye exhortando a las partes intervinien-
(EIA) de la represa Angostura y el estudio de tes a acatar la sentencias y a “evitar la gene-
gestión ambiental a nivel definitivo; segundo, ración de cualquier tipo de conflicto”. Final-
suspender el proyecto hasta que concluya el mente, anuncia que oficiará a la OCMA y al
proceso; tercero, dejar abierta la posibilidad CNM pues habría indicios de responsabilidad
que una institución internacional certificada y disciplinaria.
acreditada en el Perú realice los estudios dis-
puestos en la sentencia; en cuarto lugar, dis- 3. ¿Críticas a la sentencia del TC?
poner se abstenga de realizar cualquier acto
Se trata de una sentencia que intenta ser pa-
de iniciación del Proyecto Majes Siguas II,
cificadora (f. j. 42). Si bien el TC ordena
pues consideró que los estudios ordenados
la realización de un nuevo estudio técni-
están mal hechos, lo que supone que se está
co de balance hídrico, esta sentencia solo
vulnerando el derecho a un medio ambiente
genera dudas y cuestionamientos, toda vez
equilibrado.
que desprotege los derechos de los pueblos
Esta decisión sube a la Sala Única de Vaca- indígenas. Además, se va por las ramas y
ciones de la Corte Superior de Cusco, a través resulta complaciente y concesivo con el
de una apelación. Esta revocó la sentencia an- Estado. Estamos, en realidad, ante una sen-
terior y dispuso la suspensión indefinida del tencia que tiene argumentos políticos más
referido proyecto, dejando a salvo el derecho que jurídicos.
126
EDICIÓN ESPECIAL
7 Un buen ejemplo de lo que debe ser una ponderación por el TC se encuentra en la STC Exp. N° 00007-2006-PI/TC.
8 CANALES CAMA, Carolina. “Eficacia de las sentencias del Tribunal Constitucional”. En: Gaceta del Tribunal
Constitucional. N° 6, Tribunal Constitucional del Perú, Lima, abril-junio de 2007.
9 RUIZ MOLLEDA, Juan Carlos. “Cuestionable sentencia en el caso Javier Ríos Castillo: Cuando el TC cambia el
criterio jurisdiccional de la Suprema en un amparo contra sentencias”. Disponible en: <http://www.justiciaviva.org.
pe/notihome/notihome01.php?noti=73>.
128
EDICIÓN ESPECIAL
dice nada sobre eso10. Ni siquiera exhorta al que formulan diversos sectores y grupos so-
Gobierno a tener más celo en el respeto a las ciales, generalmente de bajos o nulos recur-
normas y procedimientos. Eso no es viola- sos económicos que se ven excluidos de la
ción del Estado de Derecho, tampoco la vio- sociedad”. Añade que “la respuesta que vie-
lación del Convenio N° 169 de la OIT afecta ne dando el Estado a la creciente demanda y
el Estado de Derecho11. El Gobierno acusa de protesta social es la judicialización o crimi-
violentistas a los espinarenses por reclamar el nalización de la misma, persiguiendo a los
cumplimiento de los derechos y de las nor- activistas sociales, en vez de dar solución
mas que regulan materia ambiental y el cum- a los reclamos planteados, involucrando al
plimiento de una sentencia del Poder Judicial, Poder Judicial en asuntos que no le compe-
y el TC guarda silencio12. te resolver toda vez que se trata de conflic-
tos sociales”13.
Obviamente, hay que condenar todo tipo de
violencia en las protestas sociales, pero el TC IV. RTC EXP. N° 01939-2011-PA/TC
mete en un mismo saco, de una forma injusta, (ACLARACIÓN): TC CONVALIDA
a los que violentistas que aprovechan las pro- VIOLACIÓN DEL DERECHO A LA
testas para cometer desmanes y saqueos (ac- CONSULTA DEL CASO MAJES SI-
tos que condenamos y repudiamos) y a quie- GUAS II14
nes toman carreteras, cansados de pedir al Se trata de una demanda presentada por el
Estado la protección de sus derechos, porque Gobierno Regional de Cusco y la Municipali-
no encuentran otra manera de llamar la aten- dad Provincial de Espinar contra el proyecto
ción respecto a la violación de sus derechos. Majes Siguas, pues este intentaba hacer llevar
Todo ello ante la pasividad e indiferencia, si agua de Cusco a Arequipa, sin antes garan-
es que no indolencia, del Estado para actuar tizarse el acceso al agua de la población de
prontamente. Espinar, Cusco15. En esta oportunidad, por la
Bien haría el TC en revisar el caso Andoas. violación del derecho a la consulta de las co-
En un fallo de la Segunda Sala Penal de Jus- munidades campesinas de Espinar por par-
ticia de Loreto (sentencia que luego fue con- te de Proinversión, como consecuencia de la
firmada por la Corte Suprema), se precisó omisión de consulta del mencionado proyec-
que la criminalización de la protesta social to, a pesar que se afecta en forma directa a
es debido a “la falta de capacidad del Estado las comunidades campesinas de la provincia
para dar solución satisfactoria a los reclamos de Espinar.
10 RUIZ MOLLEDA, Juan Carlos. “¿Quiénes son los violentistas en los sucesos en las protestas de Espinar? El incum-
plimiento estatal de resoluciones judiciales en el caso de Majes Siguas II”. Disponible en: <http://www.justiciaviva.
org.pe/notihome/notihome01.php?noti=378>.
11 RUIZ MOLLEDA, Juan Carlos. “Ejecutivo reconoce que entrega concesiones sin consulta previa, mientras el Poder
Judicial emite fallo que protege derecho a la consulta”. Disponible en: <http://www.justiciaviva.org.pe/notihome/
notihome01.php?noti=421>.
12 “Sentencia del Poder Judicial ordena suspender la ejecución del Proyecto Majes Siguas II”. Disponible en: <http://
www.justiciaviva.org.pe/notihome/notihome01.php?noti=482>.
13 RUIZ MOLLEDA, Juan Carlos. “¿Es delito la toma de carreteras? A propósito de la criminalización de la protesta, PJ
vs. Ministerio del interior”. Disponible en: <http://www.justiciaviva.org.pe/notihome/notihome01.php?noti=653>.
14 Ver la resolución aclaratoria, disponible en: <http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2012/01939-2011-AA%20Acla-
racion.html>. La sentencia puede ser encontrada en: <http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2011/01939-2011-AA.
html>.
15 Ver nuestra nota anterior: <http://www.justiciaviva.org.pe/notihome/notihome01.php?noti=697>.
130
EDICIÓN ESPECIAL
que debe hacerse la consulta, y en la segunda, que, a criterio de los demandantes, afectando
que no debe hacerse. recursos naturales de una provincia, beneficia
a otra provincia”.
1. Lo que dice la Resolución del
Tribunal Constitucional En segundo lugar, el TC se equivoca pues los
demandantes no querían cuestionar la consti-
Señala el Tribunal Constitucional en los fun- tucionalidad de normas en abstracto, sino la
damentos 6 y 7 que desestima la demanda de violación de derechos en concreto. En otras
amparo, que los demandantes equivocamos palabras, estamos ante un proceso de control
el tipo de proceso constitucional. Según este, concreto: la omisión de consulta a las comu-
en la medida en que cuestionábamos los de- nidades campesinas del proyecto Majes Si-
cretos de urgencia y decretos supremos, de- guas II.
bimos recurrir al proceso de inconstituciona-
lidad y al proceso de acción popular y que, En tercer lugar, es evidente que estamos ante
en consecuencia, correspondería declarar la un amparo no solo contra actos administra-
improcedencia. tivos, sino contra la aplicación de normas,
facultad de los demandantes contenida en el
2. El error del Tribunal Constitucio- artículo 3 del Código Procesal Constitucio-
nal: Lo que dice la demanda nal, por no haber sido consultadas. En otras
Sin embargo, el Tribunal Constitucional se palabras, lo que los demandantes están so-
equivoca en su resolución, pues la demanda licitando, no es la declaratoria de inconsti-
cuestiona decisiones del Estado que se tradu- tucionalidad de normas y su expulsión del
cen en actos administrativos, que autorizan la ordenamiento como ocurre en un proceso
realización y la ejecución del Proyecto Ma- de inconstitucionalidad y de acción popular,
jes Siguas II. Estos no puede ser objeto de sino que el TC realice un control difuso, y
control constitucional a través de procesos de que no se apliquen normas que no han sido
control abstracto. consultadas.
Es más, el propio Tribunal Constitucional re- En el caso del cuestionamiento de la aplica-
conoce en el fundamento 1 de su resolución ción de actos normativos a través del amparo,
que se están cuestionando “actos vincula- supuestamente fuera del plazo para interpo-
dos a la vulneración alegada, la aprobación ner demanda de inconstitucionalidad y acción
del SNIP (sic) del Estudio de Factibilidad In- popular, debemos señalar con claridad que
forme Técnico N° 001-2008-AG-OGPA-OI; este requerimiento sí tiene cobertura normati-
la aprobación de la viabilidad del proyecto va. Tal como lo hemos sostenido en diferentes
Informe Técnico N° 001-2008-EF/68.01; la escritos a lo largo de todo el proceso, se aplica
prórroga de la reserva de agua mediante D.S. en este caso el plazo establecido en el artículo
015-2008-AG; la ratificación de la viabilidad 44.5 del Código Procesal Constitucional, que
mediante Informe No 148-2009-EF/68.01 establece que en casos donde la violación a
(…), la circular N° 30-2009 del Proyecto Ma- un derecho constitucional ocurre por omisión
jes Siguas II”. administrativa, no se aplica el plazo general
de 60 días hábiles luego de la ocurrencia del
Más adelante, la propia resolución vuelve a
hecho lesivo, regla general reconocida en el
reconocer que lo que se pretende cuestionar
primer párrafo del artículo 44 del menciona-
no son actos normativos sino actos adminis-
do Código.
trativos, cuando precisa en el fundamento 3
que “fluye de la demanda de autos que se pre- El cuarto error del Tribunal está en el funda-
tende cuestionar la aprobación por parte del mento 4, cuando señala que el tema solicita-
Estado de un proyecto de desarrollo regional do ya fue objeto de pronunciamiento en una
132
EDICIÓN ESPECIAL
sentencia anterior, en el STC Exp. N° 01939- con el fundamento de voto del magistrado
2011-PA/TC. No hay violación de la cosa Álvarez Miranda, que se agrega”. Esto signi-
juzgada. Dicho proceso se presenta contra la fica que es parte de la sentencia18.
violación del derecho a vivir en un medio am-
Y si se revisa el voto singular de la resolu-
biente equilibrado y adecuado a la vida, y no
ción aclaratoria del exmagistrado Álvarez
por violación a la consulta, y fue presentado
Miranda, se advertirá que está referido a la
por el Gobierno Regional de Cusco y el Mu-
obligación de realizarse el proceso de consul-
nicipio Provincial de Espinar. Al ser las au-
ta. En efecto, este exmagistrado señala que,
toridades órganos de gobierno, mal podrían
pese a que en las dos primeras instancias en
haber exigido la realización del proceso de
el proceso de amparo no se invocó el dere-
consulta previa. A diferencia de ese proceso
cho a la consulta, “[n]o obstante, considero
(STC Exp. N° 01939-2011-PA/TC), en este
que ello no implica que se deje de lado toda
proceso (STC Exp. N° 06314-2013-PA/TC),
mención a las obligaciones constitucionales
son las comunidades campesinas, las que en
y legales que el Estado tiene respecto al de-
su condición de pueblos indígenas están exi-
recho de consulta. Al margen de lo resuelto
giendo la realización de un proceso de con-
(o no resuelto) en las instancias precedentes,
sulta previa del proyecto Majes Siguas II.
es evidente la obligación del Estado de cum-
Mal puede señalarse que ya hay un pronun-
plir con la normativa internacional y domesti-
ciamiento y que habría violación a la cosa
ca vigente. Por ello debe tomarse en conside-
juzgada.
ración las obligaciones del Convenio 169 de
3. El propio TC se contradice, pues la OIT y Ley del Derecho a la Consulta Pre-
ya ha reconocido la necesidad que via a los Pueblos Indígenas u Originarios, Re-
el proyecto Majes Siguas II sea conocido en el Convenio N° 169 de la Orga-
consultado nización Internacional del Trabajo [sic] (Ley
Como sabemos, el proceso de amparo con- N° 29785)” (f. j. 2).
tra el Proyecto Majes Siguas II, recaído en Luego agrega, en el fundamento 5 de la mis-
el Exp. N° 01939-2011-PA/TC, era contra ma sentencia, que “[e]n tal sentido, si la
la violación al derecho al medio ambiente. administración omitiera esta etapa de iden-
En cambio, en el proceso recaído en el Exp. tificación es evidente que los pueblos indí-
N° 06314-2013-PA/TC, son las comunidades genas pasibles de ser afectados directamente
campesinas las que, en su condición de pue- tendrían el derecho de acudir ante las instan-
blos indígenas, están exigiendo la realización cias pertinentes y solicitar que se respete su
de un proceso de consulta previa del proyecto derecho a la consulta. En tal sentido, la legi-
Majes Siguas II. timidad para interponer la demanda es de los
Si se mira con detenimiento la RTC Exp. pueblos indígenas que puedan verse directa-
N° 01939-2011-PA/TC (aclaración), que or- mente afectados y no de personas no legiti-
denó al Estado realizar el Balance Hídrico en madas para ello”.
el primer proceso de amparo contra el proyec-
4. El error material viola el principio
to Majes Siguas II, presentado por el Gobier-
de congruencia
no Regional de Cusco y el Municipio Provin-
cial de Espinar, se podrá advertir que en la Los demandantes presentamos una deman-
parte final se señala literalmente: “Resuelve, da de amparo contra la decisión del Estado
18 Ver: <http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2012/01939-2011-AA20Aclaracion.html>.
19 Ver: <http://www.justiciaviva.org.pe/notihome/notihome01.php?noti=637>.
134
EDICIÓN ESPECIAL
Gonzalo Tuanama y otros Contra la Ley N° 29338, Ley de Re- Infundada porque se considera que
00025-2009-PI/TC
(etnia Awajun) cursos Hídricos. no afecta directamente a los PI.
Llama la atención la heterogeneidad en las los pueblos indígenas, tal como lo ordena el
sentencias del TC peruano, algunas (SSTC artículo 6 del Convenio N° 169 de la OIT.
Exps. N°s 00022-2009-PI/TC y 05427-2009-
Otro punto cuestionable es el hecho de blin-
PC/TC) muy bien fundamentadas, innovando
dar los actos administrativos posteriores a
y recibiendo lo mejor de la doctrina y de la ju-
la entrada en vigencia del Convenio N° 169
risprudencia comparada de la Corte Interame-
ricana de Derechos Humanos, y otras mal ar- de la OIT en el año 1995 que no fueron con-
gumentadas y desdibujando y dando marchas sultados, invocando la afectación de la bue-
atrás en los pronunciamientos iniciales. En na fe y de la seguridad jurídica. Esta acti-
realidad, este desarrollo jurisprudencial ha tud resulta incoherente luego que el propio
sido retórico y no se ha traducido en una efec- TC señaló que eran inconstitucionales las
tiva protección de los derechos de los pueblos normas y los actos administrativos no con-
indígenas, pues solo una sentencia fue decla- sultados. Esta actitud contrasta con la Cor-
rada fundada y en el caso de procesos contra te Constitucional de Colombia, la cual sí
medidas legislativas, en un solo caso se optó ha suspendido actos administrativos in-
por una sentencia interpretativa, es decir, no consultos, ordenando la inmediata consulta
aplicable a los pueblos indígenas. Esto con- con las comunidades indígenas. Asimismo,
trasta con las sentencias de la Corte Consti- pese a que el TC precisa que se recurrirá
tucional de Colombia, la cual sí ha brindado a la ponderación para solucionar los con-
una efectiva protección. flictos entre los pueblos indígenas y las in-
dustrias extractivas, en la realidad nunca
En el caso de los actos legislativos inconsul- pondera. Esto resulta grave pues al no mo-
tos, que constituyen la materia de la mayoría tivarse adecuadamente compromete la legi-
de las decisiones adoptadas por el TC, resul- timidad de una decisión.
ta lamentable la concepción restrictiva de lo
que debe entenderse por afectación directa de La conclusión resulta evidente. Nuestro
los pueblos indígenas en el caso de medidas TC no ha brindado una protección efectiva
legislativas generales. No tiene sentido que, sino una protección retórica, desperdician-
de un lado, se consulte el proyecto de Ley Fo- do oportunidades valiosas para desarrollar
restal y, de otro lado, no se consulte ni la Ley su jurisprudencia. En nuestra opinión, lue-
de Recursos Hídricos, por ejemplo, ni un con- go de algunos pronunciamientos iniciales,
junto de decretos legislativos que, a pesar de el TC ha sido incoherente con sus iniciales
ser generales, sí tenían un impacto directo en pronunciamientos.
136
ANÁLISIS Y CRÍTICA
El autor repasa la problemática que inicialmente surgió con la aplicación del artículo 5,
inciso 7, del Código Procesal Constitucional y nos recuerda que admitir la procedencia
RESUMEN
de una demanda de amparo contra las decisiones del Consejo Nacional de la Magistratura
no supone atentar contra las competencias que la Constitución le ha otorgado, sino que
los jueces constitucionales ejerzan las propias. Recuerda que determinar si una resolución
está debidamente motivada y si ha sido expedida con previa audiencia del interesado es un
análisis de fondo (y no de forma), es incorrecto emplear uno de estos argumentos, o am-
bos, para declarar improcedente una demanda.
1 Cfr. Artículo 154.3 de la Constitución: Son funciones del Consejo Nacional de la Magistratura: Aplicar la sanción de
destitución a los Vocales de la Corte Suprema y Fiscales Supremos y, a solicitud de la Corte Suprema o de la Junta
de Fiscales Supremos, respectivamente, a los jueces y fiscales de todas las instancias. La resolución final, motivada
y con previa audiencia del interesado, es inimpugnable” (énfasis agregado).
2 Cfr. Artículo 142 de la Constitución: “No son revisables en sede judicial las resoluciones del Jurado Nacional de
Elecciones en materia electoral, ni las del Consejo Nacional de la Magistratura en materia de evaluación y ratifica-
ción de jueces” (énfasis agregado).
3 Cfr. Artículo 5.7 del Código Procesal Constitucional: Causales de improcedencia: No proceden los procesos consti-
tucionales cuando: “Se cuestionen las resoluciones definitivas del Consejo Nacional de la Magistratura en materia
de destitución y ratificación de jueces y fiscales, siempre que dichas resoluciones hayan sido motivadas y dictadas
con previa audiencia al interesado” (énfasis agregado).
138
EDICIÓN ESPECIAL
4 Cfr. Artículo 139.3 de la Constitución: “Son principios y derechos de la función jurisdiccional: La observancia del
debido proceso y la tutela jurisdiccional. Ninguna persona puede ser desviada de la jurisdicción predeterminada por
la ley, ni sometida a procedimiento distinto de los previamente establecidos, ni juzgada por órganos jurisdiccionales
de excepción ni por comisiones especiales creadas al efecto, cualquiera sea su denominación”.
5 Cfr. Artículo 51 de la Constitución: “La Constitución prevalece sobre toda norma legal; la ley, sobre las normas de
inferior jerarquía, y así sucesivamente. La publicidad es esencial para la vigencia de toda norma del Estado”.
6 Cfr. Artículo 201 de la Constitución: “El Tribunal Constitucional es el órgano de control de la Constitución (…)”.
7 Cfr. Artículo 150 de la Constitución: “El Consejo Nacional de la Magistratura se encarga de la selección y el nom-
bramiento de los jueces y fiscales, salvo cuando estos provengan de elección popular. El Consejo Nacional de la Ma-
gistratura es independiente y se rige por su Ley Orgánica”.
8 Cfr. Artículo 200.2 de la Constitución: “Son garantías constitucionales: La Acción de Amparo, que procede contra
el hecho u omisión, por parte de cualquier autoridad, funcionario o persona, que vulnera o amenaza los demás dere-
chos reconocidos por la Constitución, con excepción de los señalados en el inciso siguiente. No procede contra nor-
mas legales ni contra Resoluciones Judiciales emanadas de procedimiento regular”.
9 Cfr. Artículo 8 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: “Toda persona tiene derecho a un recurso
efectivo, ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamen-
tales reconocidos por la constitución o por la ley”. Artículo 25 de la Convención Americana de Derechos Humanos:
“Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier otro recurso efectivo ante los jueces o tri-
bunales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la Consti-
tución, la ley o la presente Convención, aun cuando tal violación sea cometida por personas que actúen en ejercicio
de sus funciones oficiales”.
140
EDICIÓN ESPECIAL
10 Cfr. Cuarta Disposición Final Transitoria de la Constitución: “Las normas relativas a los derechos y a las libertades
que la Constitución reconoce se interpretan de conformidad con la Declaración Universal de Derechos Humanos y
con los tratados y acuerdos internacionales sobre las mismas materias ratificados por el Perú”.
11 Cfr. Artículo V del Título Preliminar del Código Procesal Constitucional: “El contenido y alcances de los derechos
constitucionales protegidos por los procesos regulados en el presente Código deben interpretarse de conformidad
con la Declaración Universal de Derechos Humanos, los tratados sobre derechos humanos, así como de las decisio-
nes adoptadas por los tribunales internacionales sobre derechos humanos constituidos según tratados de los que el
Perú es parte”.
12 Cfr. Sentencia recaída en el Expediente N° 8333-2006-PA/TC, caso Miguel Ángel Tomayconza Fernández Baca,
f. j. 3.
13 Cfr. Sentencia recaída en el Expediente N° 02409-2002-AA/TC, f. j. 2.
142
EDICIÓN ESPECIAL
16 Cfr. A modo de ejemplo puede revisarse la resolución recaída en el Expediente N° 00485-2012-PA/TC que grafica
esta situación, en la que los magistrados Urviola Hani y Álvarez Miranda emitieron votos singulares pronuncián-
dose sobre el fondo de la controversia a pesar del rechazo liminar; mientras que los demás magistrados del anterior
Pleno del Tribunal votaron por la revocatoria de las decisiones de primera y segunda instancia y la orden de remitir
los actuados para que se admita a trámite la demanda.
144
EDICIÓN ESPECIAL
ver cómo resuelve cuando la demanda llega de la misma Norma Fundamental ha institui-
a su conocimiento previo rechazo in limine do el proceso de amparo orientado a la defen-
(STC Exp. N° 00866-2012-PA/TC, del 20 de sa de los derechos fundamentales, cuyo co-
agosto de 2014). nocimiento, en última y definitiva instancia
corresponde al Tribunal Constitucional, se-
CONCLUSIONES gún lo manda el numeral 202.2, y a la que,
Los artículos 150 y 154 de la Constitución por imperio de la Constitución, no puede
instituyen al Consejo Nacional de la Magis- renunciar.
tratura como el órgano constitucional encar- Ello no supone atentar contra las competen-
gado de la selección, nombramiento, ratifi- cias que la Constitución, en el artículo 154, le
cación y destitución de los jueces y fiscales. ha otorgado al Consejo Nacional de la Magis-
En efecto, de conformidad con los mismos, tratura, sino tan solo ejercer las competencias
el Consejo Nacional de la Magistratura cons- que la Constitución otorga a dicho Tribunal
tituye el único órgano competente para nom- en materia constitucional. No se trata pues de
brar, previo concurso público de méritos y una superposición de funciones, sino de deli-
evaluación personal, a los jueces y fiscales de mitar clara y correctamente las competencias
todos los niveles; ratificar, cada siete años, a que la Constitución ha conferido a cada uno
los jueces y fiscales de todos los niveles; apli- de los órganos constitucionales (principio de
car la sanción de destitución a los Vocales de corrección funcional).
la Corte Suprema y Fiscales Supremos y, a
solicitud de la Corte Suprema o de la Junta Creemos que, aun a pesar de lo establecido
de Fiscales Supremos, respectivamente, a los por el código, debe desterrarse una aplicación
jueces y fiscales de todas las instancias; y, ex- mecánica de la causal de improcedencia es-
tender a los jueces y fiscales el título oficial tablecida en el artículo 5.7 del Código Pro-
que los acredita como tales, sin perjuicio de cesal Constitucional, pues la determinación
las demás atribuciones que su Ley Orgánica de si una resolución se encuentra debidamen-
le reconoce. te motivada y si ha sido expedida con previa
audiencia del interesado debe realizarse en
Por su parte, el Tribunal Constitucional es el estadio procesal correspondiente, mas no
un órgano constituido sometido a la Consti- a través del rechazo liminar, pues constituye
tución y a su ley orgánica. En su función de una cuestión de fondo y no de forma.
máximo intérprete constitucional (artículos
201 de la Constitución y 1 de su Ley Orgá- Ello permitirá, con el traslado de la demanda
nica), tiene el deber de integrar todas las nor- y la posición del Consejo Nacional de la Ma-
mas constitucionales, y otorgar así seguridad gistratura, realizar una correcta y objetiva va-
jurídica y unidad normativa al Derecho Cons- loración de las cosas, que impida tomar deci-
titucional, garantizando el respeto a los de- siones apresuradas, además de evitar soterrar
rechos fundamentales y la primacía norma- el principio de limitación.
tiva de la Constitución, conforme al artículo Esperamos que el Tribunal Constitucional
II del Título Preliminar del Código Procesal afiance y consolide la línea jurisprudencial en
Constitucional. materia de control de las decisiones del Con-
Ante la eventual afectación de los derechos sejo Nacional de la Magistratura, pero sobre
fundamentales de la persona, cuya defensa todo, que sea coherente con esta pues, como
constituye el fin supremo de la sociedad y del quedó anotado, anteriormente se han genera-
Estado, de acuerdo a lo dispuesto por el ar- do pronunciamientos contradictorios al inte-
tículo 1 de la Constitución, el artículo 200.2 rior del propio Tribunal.
146
ANÁLISIS Y CRÍTICA
En este trabajo, el autor se encarga de repasar los pronunciamientos expedidos por el Tri-
RESUMEN
bunal Constitucional en relación con el derecho al plazo razonable, advirtiéndonos de las
contradicciones en que ha incurrido este Colegiado en su jurisprudencia. Enfoca sus es-
fuerzos en analizar qué debería ocurrir para restituir la vulneración de este derecho fun-
damental, más aún considerando el cambio injustificado de criterio que ocurrió al interior
del Supremo Intérprete de la Constitución.
* Abogado y magíster. Exrepresentante del Colegio de Abogados Penal Internacional sede Perú. Miembro del Instituto
de Ciencia Procesal Penal. Docente universitario y articulista en revistas nacionales y extranjeras.
1 “[T]ratándose de un proceso penal la cobertura constitucional alcanza no solo al procesado, sino también a la víc-
tima o la parte civil. Por ello, es posible que, cada vez que se determine la violación del derecho al plazo razonable
del procesado, se afecte también el derecho a obtener satisfacción jurídica en un tiempo razonable de la víctima o la
parte civil” (STC Exp. N° 05350-2009-PHC/TC, caso Salazar Monroe, f. j. 5, voto singular de César Landa).
2 STC Exp. N° 03360-2011-PA/TC, del 29/10/2013, caso Víctor Taype Zúñiga. Se ordenó la reposición del trabajador
minero por cuanto se transgredió el plazo razonable en que debe determinarse una causa en la vía judicial.
3 Sobre el origen anglosajón del plazo razonable, le dediqué un artículo denominado: “El plazo razonable: del sistema
romano-germánico al sistema anglosajón”. En: Gaceta Constitucional & Procesal Constitucional. Tomo 92, Gaceta
Jurídica, Lima, agosto de 2015, p. 48.
Por otro lado puede verse el siguiente comentario de otro autor: “La doctrina anglosajona ha dicho que, el derecho
a ser juzgado sin dilaciones contribuye al debido proceso, previniendo una opresión indebida sobre personas que
se presumen inocentes”. ZORZOLI, Óscar Armando. “Plazo razonable: Una garantía integradora”. Disponible en:
<http://www.academiadederecho.org/upload/biblio/contenidos/ZORZOLI.pdf>.
Otra versión la tenemos en que “[s]e debe esto a que su regulación es muy flexible, estando basada en los conceptos
anglosajones de ‘plazos razonables’, ‘conducta previsible’, ‘prohibición de ir contra los propios actos’, en vez de sobre
los principios de plazos fijos y requisitos formales tan caros a nuestro ordenamiento”. DÍEZ ESTELLA, Fernando. “La
compra venta internacional”. Disponible en: <http://www.fernandodiezestella.com/derecho_mercantil/tema_04.pdf>.
El artículo 8 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos consagra el plazo razonable. Al respecto, es im-
portante señalar que el plazo razonable está ubicado dentro del debido proceso o proceso justo de origen anglosajón:
Bustamante Alarcón, “deslinda debido proceso de derecho a la tutela jurisdiccional efectiva: la “identificación re-
sulta inadecuada, no solo porque se trata de dos derechos que tienen un origen diferente (el proceso justo de origen
anglosajón y la tutela jurisdiccional efectiva de la Europa continental), sino también porque extienden su fuerza nor-
mativa a ámbitos de aplicación también diferentes. Así, mientras la tutela jurisdiccional efectiva está circunscrita a
los procesos jurisdiccionales -valga la redundancia-, el proceso justo o debido proceso rige además los procedimien-
tos administrativos, arbitrales, militares, políticos y particulares (…)”. Medina Quiroga señala que el artículo 8 de la
Convención Americana, “que consagra, según su titulación, las ‘garantías judiciales’, establece lo que se conoce en
el derecho internacional de los derechos humanos como el derecho al ‘debido proceso’”. Nota tomada de GARCÍA
RAMÍREZ, Sergio. “El debido proceso en la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos”. Dis-
ponible en: <http://aulavirtual.ijf.cjf.gob.mx/pluginfile.php/13795/mod_resource/content/1/procesoSGR.pdf>.
4 CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. Ricardo Canese vs. Paraguay. Sentencia sobre el fon-
do del 31 de agosto de 2004, párr. 142.
148
EDICIÓN ESPECIAL
no opta por precisar un plazo determinado en Europea de Derechos Humanos: “(...) el pla-
días calendarios o naturales como el máximo zo razonable (...) no puede traducirse en un
de duración aplicable a un proceso sino que número fijo de días, semanas, meses o años, o
brinda unos criterios a ser evaluados por la en varios periodos dependiendo de la grave-
judicatura, según las características de cada dad del delito”7.
caso.
3. El Tribunal Constitucional, en una
En el mismo sentido, el Tribunal Constitucio- sentencia, creyó que afectar el
nal considera que “es evidente la imposibilidad plazo legal es afectar, a la vez, el
de que en abstracto se establezca un único pla- plazo razonable
zo a partir del cual la tramitación de un proceso El Tribunal Constitucional, sin advertir ori-
pueda reputarse como irrazonable. Ello impli-
gen anglosajón que mencionamos, en la STC
caría asignar a los procesos penales una unifor-
Exp. N° 03771-2004-HC/TC, emite la resolu-
midad objetiva e incontrovertida, supuesto que
ción siguiente:
es precisamente ajeno a la grave y delicada ta-
rea que conlleva merituar la eventual respon- “Exhorta al Congreso de la República a
sabilidad penal de cada uno de los individuos que, dentro de un plazo razonable, dicte
acusados de la comisión de un ilícito”5. la legislación correspondiente a fin de pe-
nalizar la conducta de los magistrados del
César Landa, siendo miembro del Tribunal
Ministerio Público y del Poder Judicial
Constitucional, en un voto singular, fue en
que incumplan con dictaminar o senten-
el mismo sentido: “El plazo para el pronun-
ciar en los plazos previstos por la ley de la
ciamiento definitivo sobre el fondo del asun-
materia”8.
to no debe ser fijado una vez y para siempre
de modo que sea aplicable en todos los casos, El Tribunal Constitucional considera que, al
sino que este debe ser fijado de manera ob- vencerse los plazos legales, inmediatamente se
jetiva y razonable por el juez constitucional configura la vulneración del plazo razonable y
en cada caso concreto, esto es, que debe ser entonces automáticamente son pasibles de res-
establecido en atención a las circunstancias ponsabilidad. De ser cierta esta afirmación ve-
concretas de cada caso, sobre todo teniendo ríamos a todos los jueces por los pasillos del
en cuenta el estado actual del proceso, lo que Palacio de Justicia, no impartiendo justicia
no ocurre en el presente caso, por cuanto la fi- sino defendiéndose, en todos los casos que ad-
jación del mismo puede resultar un imposible ministran, de la vulneración del plazo razona-
en algunos casos y/o puede constituir un ex- ble y creo que ni siquiera el Tribunal Constitu-
ceso en otros”6. cional se salvaría de la casa del jabonero.
Este criterio del Tribunal Constitucio- Aquellos que no creen en el liderazgo de los
nal igualmente es compartido por la Corte jueces, coincidirían con Pastor9, para quien
5 STC Exp. N° 05492-2004-HC/TC, caso Manuel Rubén Moura García, del 21 de enero de 2005.
6 STC Exp. N° 05350-2009-PHC/TC, caso sobre la causa presentado por el Julio Salazar Monroe, f. j. 7 del voto sin-
gular del magistrado César Landa.
7 Caso Stogmuller. Sentencia del 10 de noviembre de 1969, párr. 4. Tomado de la STC Exp. N° 00549-2004-HC/TC,
caso Manuel Rubén Moura García, del 21 de enero de 2005.
8 STC Exp. N° 03771-2004-HC/TC, caso Miguel Cornelio Sánchez Calderón, del 29 de diciembre de 2004.
9 PASTOR, Daniel R. “Acerca del derecho fundamental al plazo razonable de duración del proceso penal”. En: Revista de
estudios de la justicia. N° 4, Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, Santiago de Chile, 2004. Disponible en:
<http://www.derecho.uchile.cl/cej/recej/recej4/archivos/Articulo%20sobre%20plazo%20razonable%20Pastor_10_.pdf>.
la ley es la única fuente del régimen proce- Sergio Salas Ramírez, exmiembro de la Cor-
sal penal, el plazo razonable debe ser fija- te Interamericana de Derechos Humanos, nos
do por la ley y no por los tribunales, ya que relata la jurisprudencia de la Corte, que tiene
para el orden jurídico-político de un Estado el mismo espíritu de protección super refor-
constitucional de Derecho resulta inaceptable zada: “La duración de la detención, desde la
el derecho judicial. Es decir a Pastor le pa- óptica del plazo razonable, pierde relevancia
rece un exceso que el Poder Judicial fije el cuando se trata de detención ilegal o arbitra-
plazo razonable, de seguro que está pensando ria; si esto ocurre existe violación, y el Tribu-
en la herencia intelectual de Montesquieu por nal no considera necesario entrar a considerar
la preponderancia del Poder Legislativo y el si el tiempo transcurrido entre (la) detención
principio de legalidad. y (la) liberación sobrepasó los límites de lo
razonable”11.
Ya en otros artículos hemos desarrollado que
no es lo mismo plazo razonable que plazo La libertad es un derecho fundamental de la
legal, de lo contrario, sería muy sencilla la mayor importancia que debe merecer una
identificación del derecho fundamental basta- atención urgente y distinguirse de quién está
ría contabilizar el transcurso del plazo legal e siendo juzgado en libertad. Debe evaluar-
identificar su vulneración. se el grado de celeridad con el que se tramita
el proceso, sin perder de vista en ningún mo-
II. ÚNICO CASO DONDE EL PLAZO RA- mento el especial celo que es exigible a todo
ZONABLE NO PUEDE TRASPASAR juez encargado de dilucidar una causa en la
LOS PLAZOS LEGALES: PRIVACIÓN
que se encuentra un individuo privado de su
DE LA LIBERTAD
libertad 12.
1. Plazo razonable y plazo legal en la Pero es necesario decir que el Tribunal
privación de la libertad
Constitucional se ha perdido una gran opor-
El único caso donde el plazo razonable no tunidad en señalar qué aspectos relevantes
debe de traspasar el plazo legal se presenta debe tomar en cuenta el juez cuando la per-
en la privación de la libertad por cuanto su sona se encuentra detenida y aún no se emi-
afectación inmediatamente lo convierte en ar- tió sentencia o una resolución que sustente
bitrario cualquier orden judicial. El Tribunal la detención.
Constitucional ha precisado que la medida
cautelar de detención no debe durar más del 2. Efectos que produce traspasar los
tiempo que sea necesario para el logro de los plazos razonable y legal en la pri-
fines de la investigación. Con estos argumen- vación de libertad
tos, el Tribunal ha decretado la excarcelación Resulta evidente que si se traspasa el pla-
de varias personas que se encontraban con or- zo razonable no hay duda que el investiga-
den de detención debido a las investigaciones do debe salir en libertad y afrontar el juicio
realizadas por las autoridades judiciales en el en ese estado lo contrario sería hacerla in-
marco de procesos10. sostenible, convirtiendo la restricción de la
10 Ver: COMISIÓN ANDINA DE JURISTAS. “El debido proceso en las decisiones de los órganos de control constitu-
cional de Colombia, Perú y Bolivia”. Disponible en: <http://www.cajpe.org.pe/rij/>.
11 GARCÍA RAMÍREZ, Sergio. “El debido proceso en la jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos Hu-
manos”. Disponible en: <http://aulavirtual.ijf.cjf.gob.mx/pluginfile.php/13795/mod_resource/content/1/procesoS-
GR.pdf>.
12 STC Exp. N° 04959-2008-PHC/TC, 1 de setiembre de 2009, caso Jiménez Bacca, f. j. 18.
150
EDICIÓN ESPECIAL
y en algunos pronunciamientos el Tribunal de las razones por las que el Tribunal Consti-
Constitucional se ha descarrillado del cauce tucional declara fundada la demanda es por la
llevando a creer que puede archivar definiti- vulneración del derecho a ser juzgado dentro
vamente un proceso. de un plazo razonable. Señala que el proce-
Según Domingo García Rada, un proceso pe- so penal que se le sigue por la presunta comi-
nal puede terminar por sentencia o resolución sión del delito de enriquecimiento ilícito fue
absolutoria o condenatoria; adicionalmente abierto en el año 2001, siendo que a la fecha
por prescripción, amnistía y en las causas pri- de interposición del presente proceso consti-
vadas, la renuncia del agraviado y la retracta- tucional lleva casi 8 años en tramitación, sin
ción del ofensor y finalmente por muerte del que ni siquiera se haya emitido resolución en
imputado17. Como se aprecia, no se encuentra primera instancia, con lo que se habría vul-
como medio de la extinción del proceso pe- nerado toda razonabilidad en el plazo de su
nal, la vulneración del plazo razonable. tramitación. Por ello la justicia constitucional
ordena a la justicia penal en calidad de repa-
2. Orden de archivar investigaciones ración la exclusión de proceso, lo que en buen
fiscales y procesos judiciales romance significa la extinción del proceso pe-
En este aspecto hubo mucha contradicción de nal a su favor.
parte del Tribunal Constitucional, cuando en
la STC Exp. N° 06079-2008-PHC/TC la ma- 3. La vulneración del plazo razonable
yoría consideró que “cuando la investigación no puede excluir al investigado o
lograr el archivo definitivo de una
preliminar del delito a cargo del Ministerio
causa judicial
Público exceda el plazo razonable correspon-
de estimar la demanda por vulneración del La sentencia del TC que excluía del proceso
principio de interdicción de la arbitrariedad, al General Chacón fue emitida por una Sala
pues resulta irrazonable el hecho que una per- de tres miembros vulnerando una sentencia
sona esté sometida a un estado permanente de anterior de un plenario que decía que nunca
investigación fiscal o judicial”18. Una de las la afectación del plazo razonable debe tener
repercusiones de este hábeas corpus declara- como consecuencia desvincularlo del proce-
do fundado fue que se ordenó a “la Segunda so penal:
Fiscalía Provincial Especializada en Crimina-
“[U]na eventual constatación por parte de
lidad Organizada de Lima que excluya al de-
la justicia constitucional de la violación el
mandante de la Investigación N° 001-2008-
derecho a ser juzgado dentro de un plazo
IE, o que concluya respecto de él”19.
razonable no puede ni debe significar el
En otro caso incluso generó repercusión polí- archivo definitivo del proceso penal como
tica, cuando decidió archivar definitivamen- si de un pronunciamiento sobre el fon-
te la causa judicial de Walter Chacón (STC do del asunto, equivalente a una decisión
Exp. N° 03509-2009-PHC/TC). El interesado de absolución emitida por el juez ordina-
interpone demanda de hábeas corpus contra rio, sino que más bien, actuando dentro
varios magistrados del Poder Judicial y una del marco constitucional y democrático
17 Puede verse en GARCÍA RADA, Domingo. Manual de Derecho Procesal Penal. 7ª edición, Sesator, Lima, 1982,
pp. 23 y 24.
18 STC Exp. N° 06079-2008-PHC/TC, del 6 de noviembre del 2009, caso Abanto Verástegui, f. j. 4.
19 Ídem.
152
EDICIÓN ESPECIAL
del proceso penal, lo que corresponde es En unos casos el Tribunal Constitucional or-
la reparación in natura por parte de los denó una vez que detectó el caso de vulnera-
órganos jurisdiccionales que consiste en ción del plazo razonable que resuelva en una
emitir en el plazo más breve posible el plazo breve la situación del imputado esta-
pronunciamiento definitivo sobre el fon- bleciendo su culpabilidad o su absolución y
do del asunto y que se declare la inocen- en otro caso otorgaba un plazo computado en
cia o la responsabilidad del procesado, y días específicos para concluir con el proce-
la consiguiente conclusión del proceso pe- so judicial.
nal. En cualquier caso, como es obvio, tal
circunstancia no exime de las responsabi- 2. Plantear un plazo breve para
lidades a que hubiere lugar para quienes determinación de la causa
incurrieron en ella, y que deben ser diluci- En la STC Exp. N° 03689-2008-PHC/TC, el
dados por los órganos competentes”20. Tribunal Constitucional otorgó a la justicia
penal un plazo breve para poder resolver la
Como observamos, el TC considera que la
causa, señalando que “lo que corresponde es
vulneración del plazo razonable, no puede es-
la reparación in natura por parte de los órga-
tablecer por ejemplo, la exclusión del proce-
nos jurisdiccionales que consiste en emitir en
sado, el sobreseimiento del proceso o el ar-
el plazo más breve posible el pronunciamien-
chivo definitivo del proceso penal como si
to definitivo sobre el fondo del asunto y que
fuera equivalente a una decisión de absolu-
se declare la inocencia o la responsabilidad
ción emitida por el juez ordinario, sino que,
del procesado, y la consiguiente conclusión
actuando dentro del marco constitucional y
del proceso penal”21.
democrático del proceso penal, el órgano ju-
risdiccional debe emitir el pronunciamiento 3. En otra fija un plazo en días con-
definitivo sobre el fondo del asunto en el pla- cretos para su finalización
zo más breve posible, declarando la inocen-
cia o responsabilidad del procesado, y la con- En la STC Exp. N° 00295-2012-PHC/TC, el
siguiente conclusión del proceso penal (STC TC declara fundada la demanda de vulnera-
Exp. N° 00295-2012-PHC/TC-Lima, f. j. 11). ción del plazo razonable y ordena que la Ter-
cera Sala Penal de la Corte Superior de Justi-
IV. ¿CÓMO REPARAR LA VULNERA- cia del Callao emita en el plazo de quince días
CIÓN DEL PLAZO RAZONABLE? naturales la sentencia decidiendo la situación
jurídica de Aristóteles Román Arce Páucar.
1. ¿Cómo reparar el derecho al plazo
razonable?: Entre dos alternativas 4. ¿En qué casos decidir una de otra
Una vez que el Tribunal Constitucional entró alternativa?
en reflexión y no podía inmiscuirse en la jus- Parece más razonable que, cuando se vulne-
ticia a no ser que exista una detención arbi- re el plazo razonable, debe fijarse un plazo
traria, entonces debía establecerse qué ocurría excepcional en días concretos y muy breves
cuando la justicia penal vulneraba el plazo para la determinación de la causa, estable-
razonable. ciendo la responsabilidad o la absolución del
22 El magistrado Vergara Gotelli, en el voto de mayoría en la STC Exp. N° 03360-2011-PA/TC (f. j. 16), analizando el
caso del dirigente minero Víctor Taype, quien no lograba un pronunciamiento judicial definitivo pese a que en seis
oportunidades se había emitido sentencia en primera y segunda instancia, afirmó la afectación del plazo razonable
en los siguientes términos: “[T]enemos que en seis oportunidades se han anulado las decisiones emitidas en el pro-
ceso laboral en primera instancia, encontrándose el proceso aún en estado de que se emita pronunciamiento en se-
gunda instancia. Tal situación no solo la considero inaceptable sino también atentatoria a los derechos fundamenta-
les del actor, quien ha recurrido y confiado su pretensión a la justicia ordinaria, sin tener respuesta firme en 13 años
que han transcurrido, afectándose el derecho a tener un plazo razonable en un proceso y el derecho a la tutela judi-
cial efectiva”.
154
EDICIÓN ESPECIAL
sino en la justicia ordinaria. Sin embargo, no a) Cuando el sujeto está cometiendo el delito
ha ordenado a los jueces laborales, como sí (flagrancia propiamente dicha).
lo hizo con los jueces penales, un plazo bre-
b) Cuando es detenido inmediatamente des-
ve o días específicos para que concluyan con
pués de haber cometido el delito (cuasi
la determinación de la causa judicial sino el
flagrancia).
Tribunal Constitucional absorbió la causa pe-
tendi, dejando sin piso a la justicia ordinaria c) Cuando se le encuentra dentro de las 24
laboral. horas de producido el delito con los obje-
tos o instrumentos del mismo (presunción
VI. ¿DESDE CUÁNDO EMPIEZAN A legal).
CONTABILIZARSE LOS PLAZOS?
d) Por sindicación del testigo o víctima
¿Desde cuándo resulta atendible la invoca- o por videovigilancia (presunción por
ción del plazo razonable? Este es otro tema sindicación).
que tiene varias interpretaciones pero es ne-
cesaria una mayor protección del ciudadano Dado el impacto de la acción policía la invo-
sin que se descuide las facultades del Estado cación del derecho al plazo razonable es aten-
de perseguir el delito. dible desde la etapa policial. César Landa en
su voto singular señala que, “(…) tratándo-
No olvidemos que las instituciones estatales se de un proceso penal, el término inicial de
encargadas de la persecución y sanción del dicho cómputo opera a partir del inicio de la
delito son la Policía, la Fiscalía y el Poder Ju- investigación preliminar del delito que com-
dicial un trípode que confronta con la defen- prende la investigación policial y/o la inves-
sa del ciudadano investigado y para no desba- tigación fiscal (…). Ahora bien, cabe precisar
lancear esa igualdad de armas se requiere que que, el término inicial puede coincidir con la
el plazo razonable irradie sus orígenes a espa- detención policial (…)”24.
cios extrapenales.
En la STC Exp. N° 05350-2009-PHC/TC, se
1. Desde la etapa policial estableció que el plazo razonable empieza a
contabilizarse desde la fecha en que es apre-
Ahora como sabemos la Policía ha sido revi- hendida una persona: “Con relación al dies
talizada en su facultad visto desde la apertura a quo del plazo razonable del proceso penal,
del concepto de flagrancia del Decreto Legis- la Corte IDH en la sentencia del Caso Suá-
lativo N° 1194: rez Rosero vs. Ecuador, precisó que el plazo
El Dr. Pablo Sánchez23, Fiscal de la Nación, comienza a computarse desde la fecha de la
considera que la flagrancia es un estado evi- aprehensión del imputado (detención judicial
dente de la comisión de un delito y habilita a preventiva), por ser el primer acto del proce-
la policía a detener a una persona, pues el fis- so penal” (f. 4.1.2).
cal solo cuenta con 24 horas para ponerlo a
2. Desde la etapa fiscal
disposición del juez. El artículo 259 del Có-
digo Procesal Penal admite cuatro estados de También existe pronunciamientos donde el
flagrancia: TC considera que el plazo razonable se inicia
23 SÁNCHEZ VELARDE, Pablo. “La flagrancia y el proceso inmediato”. En: El Comercio. Lima, 1 de febrero de
2016.
24 STC Exp. N° 05350-2009-PHC/TC, caso Julio Salazar Monroe, f. j. 4 del voto singular del magistrado César Landa.
con la investigación fiscal: “El hecho objetivo ha habido aprehensión del imputado, pero se
a partir del cual debe empezar a computarse halla en marcha un proceso penal, el dies a
el plazo dentro de este proceso es la apertura quo debe contarse a partir del momento en
de investigación fiscal, por constituir el pri- que la autoridad judicial toma conocimien-
mer acto de carácter cuasi jurisdiccional por to del caso”.
medio del cual el hoy recurrente tomó cono-
En el fundamento 4.1.4 de la misma senten-
cimiento de que el Estado había activado al
cia amplía el criterio: “[E]l dies a quo del pla-
aparato persecutor”25. zo razonable del proceso penal empieza en el
momento en que una persona se encuentra
3. Desde el inicio del proceso judicial
formalmente acusada o cuando las sospechas
Sin embargo, en la sentencia del Tribunal de las que es objeto tienen repercusiones im-
Constitucional recaída en el caso Salazar portantes en su situación jurídica, en razón a
Monroe (STC Exp. N° 05350-2009-PHC/ las medidas de coerción procesal adoptadas
TC, f. j. 4.1.3), parece contradecir los an- por las autoridades encargadas de perseguir
teriores criterios al señalar que “cuando no los delitos”.
25 STC Exp. N° 03509-2009-PHC/TC, caso Walter Gaspar Chacón Málaga, del 19 de octubre de 2009.
156
ANÁLISIS Y CRÍTICA
RESUMEN
tribución de la anticoncepción oral de emergencia (AOE), más conocida como la píldora
del día siguiente. Luego de recordar en qué consistió cada decisión, plantea interrogantes
respecto a las consecuencias derivadas del cambio de criterio. Considera que esta situa-
ción ha llevado a incrementar las diferencias entre mujeres en materia de derechos sexua-
les y reproductivos, sobre la base de su poder adquisitivo.
* Abogada por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Especialista en género y diversidades sexuales por las
universidades Complutense de Madrid, Nacional Tres de Febrero, Nacional La Plata y la UNMSM.
158
EDICIÓN ESPECIAL
que ello no siempre impide la implantación. por nacer (con evidentes y correspondien-
Además, declaró infundado el extremo refe- tes límites), pero que de las normas perua-
rido a la supuesta vulneración del derecho a nas no se infiere que esté definido el instan-
la vida del concebido por su presunto efec- te preciso en que acontece la concepción.
to abortivo. Además, que no se trata de solucionar deba-
tes científicos, sino de apoyarse en la cien-
2.3. La decisión de la mayoría del Tribu- cia y decidir asuntos constitucionales. Afir-
nal Constitucional maron que, fuera de las creencias de cada
El Colegiado declaró fundada la deman- persona, es deber del Estado garantizar los
da porque, para el ordenamiento peruano, la derechos sexuales y reproductivos de las
vida humana se protege desde la concepción personas, lo que incluye el acceso a méto-
y el concebido es sujeto de derechos en todo dos anticonceptivos.
lo que le favorece. Si bien reconoció que no
Sobre la AOE incluida en los planes del Mi-
había normas que definan si la concepción
nisterio de Salud estimaron que, como la
ocurre desde la fecundación o desde la ani-
información científica disponible conclu-
dación, tomó como referencia un modelo de
yó que no era abortiva, no correspondía de-
atención integral de salud del año 2003 que
clarar fundada la demanda. Sobre la decisión
definió la atención integral de salud del niño
de la mayoría de prohibir solo la distribución
como aquella que atiende desde la fecunda-
estatal de la AOE, la minoría manifestó que
ción hasta los nueve años. Afirmó que, como
ello podría discriminación, pues su venta y
la ciencia médica y el mundo jurídico están
uso está garantizado y quien goza de recursos
divididos, debía optar por la solución que
económicos no tendrá impedimento para ad-
favorezca al concebido, en tanto parte más
quirirla y emplearla.
débil.
Destacó que los cinco productos autorizados 2.5. La aclaración de la sentencia en
en nuestro país como AOE se refieren al po- mayoría
sible tercer efecto (el abortivo), información Ante el pedido de aclaración presenta-
que, de acuerdo con la legislación peruana so- do por el Ministerio de Salud, el Tribunal
bre la materia, está constituida por datos téc- Constitucional precisó que los procesos de
nicos obrantes en el registro sanitario. Estimó cumplimiento y amparo tienen distinta na-
contradictorio que el Ministerio de Salud nie- turaleza. Por ello, en el primer caso rela-
gue el efecto abortivo de la AOE pero que, a cionado con la distribución de la AOE solo
la vez, apruebe registros sanitarios donde se ordenó al Ministerio de Salud que cumpla
expresa todo lo contrario. con su propia normativa. En cambio, con la
El Colegiado, además, ordenó a los labora- sentencia de este proceso decidió, ante la
torios que la producen y distribuyen que in- incertidumbre sobre el efecto abortivo de
cluyan la advertencia de que dicho producto la AOE, privilegiar el valor supremo de la
podría inhibir la implantación del óvulo fe- vida.
cundado, para su comercialización en farma- Precisó que el Ministerio de Salud no podía
cias privadas. vender la AOE ni distribuir las píldoras ya
adquiridas porque así desconocía lo estable-
2.4. El voto en minoría de los magistrados cido en la sentencia. Finalmente, indicó que
Landa Arroyo y Calle Hayen el asunto de la venta de la AOE en farmacias
Precisaron que el Estado debe proteger la privadas debía ser resuelto por los poderes
vida de la persona ya nacida y de la que está Ejecutivo y Legislativo.
160
EDICIÓN ESPECIAL
II. LAS PREGUNTAS QUE EL TRIBU- jurídica, sino que, además, establece como un
NAL CONSTITUCIONAL NO TENÍA hecho cierto e indiscutible que el inicio de la
QUE RESPONDER vida humana está en la fecundación.
En este apartado, nos dedicaremos a analizar Es cierto que, probablemente, en ninguna ac-
cómo el Tribunal Constitucional se planteó tividad humana exista consenso absoluto so-
preguntas que no correspondía resolver a un bre ningún tema. Incluso políticas públi-
panel de siete abogados. Además, explicare- cas incuestionables hasta hace algunos años,
mos por qué las respuestas a tales interrogan- como la vacunación obligatoria, están siendo
tes eran, realmente, irrelevantes para resolver
objeto de críticas actualmente4. Entonces, no
el asunto puesto a debate.
sería posible afirmar que absolutamente to-
1. ¿Puede un juez (o siete) decidir dos los científicos del mundo están de acuer-
cuándo comienza la vida humana? do sobre el momento exacto en que comienza
la vida humana.
En la segunda decisión sobre la AOE, el Tri-
bunal Constitucional se apoyó en una nor- Sin embargo, ¿eso habilita a que siete jue-
ma reglamentaria para afirmar que el ordena- ces lo decidan? Definitivamente, la respues-
miento peruano habría establecido que la vida ta es negativa. Las controversias del mundo
humana comienza con la fecundación: la Re- científico no pueden ser resueltas por los me-
solución Ministerial N° 729-2009-SA/DM, dios del Derecho, por más buenas intenciones
del 20 de junio de 2003 (sic), que aprobó “La que estos tengan. Ahora, las discrepancias en-
salud integral, compromiso de todos-Modelo tre científicos tampoco pueden servir de jus-
de atención integral de salud”. tificación para que el Estado, con sus instru-
Al respecto, es interesante notar que, aparen- mentos jurídicos, se abstengan de adoptar las
temente, para el Tribunal Constitucional bas- políticas públicas o medidas necesarias para
ta que exista una norma técnica para susten- garantizar los derechos de la ciudadanía (en
tar su premisa principal (que el ordenamiento este caso, el goce y ejercicio de los derechos
peruano tiene establecido que la vida huma- sexuales y reproductivos).
na comienza con la fecundación). Ello cobra ¿Entonces? ¿Qué debe hacer el juez constitu-
especial relevancia si recordamos que tanto cional ante los alegatos de una parte sobre el
los jueces como las disposiciones de natura- carácter abortivo de una pastilla y ante la res-
leza jurídica son incapaces de establecer ello puesta negativa de la entidad pública respon-
a ciencia cierta. sable por la salud de las personas, que se apo-
Además, esta afirmación del Colegiado hace ya en información técnica?
evidente la contradicción entre los argumen- Consideramos en este punto que debe recor-
tos expuestos por la mayoría. En efecto, el darse que las decisiones de los jueces (in-
propio Tribunal se identifica como incom- cluso los constitucionales, incluso los de úl-
petente para decidir asuntos que correspon- tima instancia) tienen límites más o menos
den solo a la ciencia3. Sin embargo, no solo claros. Una barrera imposible de transgredir
sustenta su premisa principal en una norma y que, además, se encuentra bien delimitada
3 “Corresponde a la ciencia describir y explicar el proceso de reproducción humana (...) y, sobre esa base, (...) corres-
pondería al mundo jurídico resolver las controversias” (STC Exp. N° 02005-2009-PA/TC, f. j. 24).
4 Aunque las críticas son promovidas por legos en la materia, hay algunos médicos (la minoría) que son parte del
movimiento antivaxxxer (como es conocido el movimiento antivacunas en el mundo angloparlante).
5 Admito que el sustento de estas normas es el comprobado efecto de los choques entre vehículos y la magnitud de las
consecuencias para la integridad de las personas cuando no se emplean estos instrumentos de protección. Sin embargo,
el exagerado ejemplo sirve para intentar fijar los límites de los poderes de decisión del Tribunal Constitucional.
162
EDICIÓN ESPECIAL
que nuestro ordenamiento solo ha autoriza- efecto, era abortiva. En este punto, era po-
do cinco métodos de anticoncepción oral de sible ir más allá y afirmar que no corres-
emergencia. Sobre la base de ambos datos, pondía al Tribunal Constitucional deci-
afirman estos magistrados que no hay funda- dir sobre un asunto como este. Después de
mentos para que el Tribunal Constitucional se todo, el responsable de la política pública
pronuncie afirmando que existe posibilidad en materia de salud sexual y reproductiva
alguna de que la AOE sea abortiva: es el Ministerio de Salud. Si bien es cierto
“Tomando en cuenta que el presente aná- hay mecanismos de control para sus actua-
lisis se circunscribe a los anticonceptivos ciones (y el Tribunal Constitucional pue-
de ser uno de ellos), también es verdad que
de emergencia de carácter oral, que sí han
la intervención de este colegiado depende-
sido autorizados en los programas de pla-
rá de que los asuntos presentados ante él
nificación familiar existentes en el Perú,
sean posibles de resolver por vías jurídi-
debe precisarse, en primer término, que
cas. Sobre este punto, aparece pertinente lo
si se examina sus diversos componentes,
señalado respecto a que un límite a los ac-
es perfectamente posible acreditar que es-
tos del Tribunal Constitucional “de innega-
tos últimos son, en la práctica, los mismos
ble relevancia [es] el del respeto de la espe-
que conforman los anticonceptivos de uso
cificidad y especialidad del conocimiento
normal, con la única variante que son ad-
en las materias sobre las cuales el juez o
ministrados en dosis mayores y en forma
la jueza constitucional deberá interpretar y
posterior a la relación sexual (...).
pronunciarse”7.
[E]n primer lugar, de acuerdo al estado
actual de la ciencia y atendiendo al pre- III. LAS PREGUNTAS LUEGO DE LA ÚLTI-
sente espacio y tiempo, se ha probado MA SENTENCIA SOBRE LA ANTICON-
CEPCIÓN ORAL DE EMERGENCIA
que el AOE no solo no es abortivo pues
no produce el desprendimiento del em- Luego de la expedición de la segunda senten-
brión anidado sino que además no afec- cia sobre la AOE, surgieron muchas dudas re-
ta al embrión pues los efectos comproba- feridas a la capacidad del Tribunal Constitu-
dos teniendo en cuenta la dosis apropiada cional para declarar el inicio de la vida y los
y la frecuencia de su uso solo tiene efec- efectos abortivos de una pastilla. Estas inte-
tos antiovulatorios y antifecundatorios; rrogantes han sido abordadas en el acápite
y, en segundo lugar, no ha sido probada anterior. Las preguntas que acá nos interesan
la inconstitucionalidad de su distribución son de corte más práctico y están referidas a
con información actualizada”6. lo que ocurrió luego de conocida la decisión
del Colegiado.
En este punto, queda solo coincidir con la
posición de la minoría: no se demostró con En primer lugar, tras la aclaración de la se-
información actualizada que la pastilla, en gunda sentencia, quedaba precisado que sí
6 STC Exp. N° 02005-2009-PA/TC, ff. jj. 32 y 39 del fundamento de voto de los magistrados Landa Arroyo y Calle
Hayen.
7 ESPINOSA-SALDAÑA BARRERA, Eloy. “”El pronunciamiento del Tribunal Constitucional peruano sobre el an-
ticonceptivo oral de emergencia”. En: Gaceta Constitucional. Tomo 23, Gaceta Jurídica, Lima, noviembre de 2009,
p. 36.
era posible acceder a la AOE a través del Sec- y también el derecho al acceso a la salud en
tor Privado, pues la sentencia no restringía la igualdad de oportunidades, porque quedan
venta, sino que solo prohibió al Estado que la excluidas de la prestación aquellas mujeres
distribuya gratuitamente. Esta paradójica si- que no cuentan con recursos económicos para
tuación puso en evidencia que quienes que- acceder a dicho método en las farmacias8.
daban en situación de desventaja serían, evi- Entonces, aunque resulte paradójico, por la
dentemente, las mujeres que no cuenten con decisión del Tribunal Constitucional, la res-
dinero para comprar la mentada pastilla. puesta a la interrogante que encabeza este
Por otra parte, era posible entender la segun- apartado es, increíblemente, afirmativa: el
da decisión del Tribunal Constitucional como Estado se encuentra impedido de distribuir
un mandato sujeto a condición: mientras exis- una píldora porque, probablemente, es abor-
ta duda sobre el posible efecto abortivo de la tiva. Sin embargo, si me sobra algo de dinero,
AOE, el Estado se encuentra impedido de dis- es posible que yo la compre en una farmacia
tribuirla. Entonces, ¿podría insertarla nueva- privada. Esto resulta especialmente preocu-
mente en su programa de planificación fa- pante si recordamos que, según las cifras que
miliar si acredita que el efecto abortivo no maneja el Instituto Nacional de Estadística e
existe? Informática, más del 35 % de las mujeres del
país en edad de trabajar (quince o más años de
Estas son dos preguntas sobre los efectos rea- edad) no cuentan con ingresos propios9. Son
les de la decisión que se abordarán en las lí- ellas, por lo menos, las que acuden a los servi-
neas que siguen. cios de salud sexual y reproductiva provistos
por el Estado (además de aquellas que, por
1. El Estado no puede distribuir la
sus escasos recursos, no pueden costear servi-
AOE, ¿pero yo puedo comprarla en
una farmacia? cios de salud privados).
8 ALVITES ALVITES, Elena. “Los límites de la jurisdicción constitucional a propósito del proceso de amparo sobre
la anticoncepción oral de emergencia”. En: Gaceta Constitucional. Tomo 23, Gaceta Jurídica, Lima, noviembre de
2009, p. 26.
9 También puede evaluarse más información sobre la situación económica de las mujeres en nuestro país en el siguiente
enlace: <https://www.inei.gob.pe/estadisticas/indice-tematico/brechas-de-genero-7913/>.
10 SOLÍS, Zenaida. “Normando la píldora”. En: Caretas. N° 2121, Lima, marzo de 2010, p. 40 y ss.
164
EDICIÓN ESPECIAL
Para el autor, resulta necesario que el Tribunal Constitucional desarrolle sus funciones
teniendo en cuenta el importante papel que desempeña en el sistema, por ello considera
válido que establezca fórmulas para rechazar las causas que son manifiestamente impro-
RESUMEN
cedentes, lo que ayuda a defender de mejor forma el derecho a la tutela jurisdiccional efec-
tiva. Añade que, si bien todo reclamo sobre derechos es valioso y no debería ser ignora-
do, no resulta conveniente ni justo habilitar la competencia de un Tribunal Constitucional
frente a alegatos carentes de sustento. Finalmente, recalca la importancia de que la judi-
catura ordinaria y los (as) abogados (as) tengan una actitud más rigurosa en la formula-
ción de sus evaluaciones y planteamientos.
* Magistrado del Tribunal Constitucional del Perú. Catedrático en las universidades Pontificia Católica del Perú, Na-
cional Mayor de San Marcos, de Lima, de Piura e Inca Garcilaso de la Vega. Profesor principal y exdirector general
de la Academia de la Magistratura. Integrante de las mesas directivas del Instituto Iberoamericano de Derecho Pro-
cesal Constitucional, la Red peruana de docentes de Derecho Constitucional y las Asociaciones peruanas de Derecho
Procesal y Derecho Administrativo.
170
EDICIÓN ESPECIAL
ordinaria no ha podido otorgar eficiente tutela de opinión. Ahora bien, convengamos que
a los derechos, por una equivocada compren- ello no pasa todos los días, sino que debe ser
sión de sus competencias o por una errónea consecuencia de una larga reflexión. De otro
percepción de los temas sometidos a ellas. A lado, también siempre cabe que un(a) juez(a)
ello debe apuntar su mejor posicionamiento ordinario(a) pueda razonablemente apartarse
institucional: no por ver muchos casos cum- de lo sostenido en un precedente, o distinguir
ple en forma más eficaz con su labor. Lo hace los supuestos del caso que en particular viene
cuando conoce mejor, analiza con mayor de- conociendo de aquellos que en su momento
talle y resuelve con mayor rigurosidad los ca- justificaron la dación de un precedente.
sos sometidos a su conocimiento. Lo expues-
Además, y tomando en cuenta la especial na-
to no es muy distinto a lo que ya hacen en
turaleza de las competencias de un Tribunal
muchos países los jueces que ven procesos
Constitucional, debe tenerse presente que
constitucionales de la libertad dentro de la ju-
hay causas que, independientemente de la
dicatura ordinaria, cuando rechazan in limine
relevancia que para cada quien tiene su pro-
requerimientos de tutela de derechos por ha-
pio caso, no corresponde en rigor que sean
berse incurrido manifiestamente en causales
vistas por este colegiado. En algunos casos,
de improcedencia previamente establecidas.
aquello sucede en mérito a que lo puesto en
Corresponde entonces a los tribunales consti- su conocimiento carece de mayor fundamen-
tucionales asegurar un mejor posicionamien- to. En otros, lo que se pone en sus manos no
to en el cumplimiento de su labor efectuando cuenta con lo que doctrinaria y jurispruden-
incluso un rechazo liminar de ciertos reque- cialmente se denomina “especial relevancia
rimientos. Y es que si bien la vocación tui- constitucional”.
tiva de los derechos tiende a ser expansiva
Aquí, debe tenerse claro, no se trata del ejer-
(y es bueno que así lo sea), ello no debe lle-
cicio de una abierta discrecionalidad que,
varnos a pensar que los diferentes tribunales
por ejemplo, es más propia de un modelo an-
constitucionales, en aras de proteger a cabali-
glosajón distinto al nuestro, el cual permite
dad los derechos fundamentales, creen la ex-
la configuración y el uso del certiorari has-
pectativa de que cualquier pretensión donde
ta hoy vigente en los Estados Unidos de Nor-
se alegue la afectación a esos derechos pue-
te América. Estamos, tanto en la referencia a
da ser invocable y deba ser atendida por di-
la “especial relevancia constitucional” como
chos tribunales.
en el descarte de demandas sin fundamento,
Hay pues temas, y esto es unánime en el De- o en los casos vinculados a temas que en su
recho Comparado, mediante los cuales ya ha- momento ya merecieron precedentes o reite-
bitualmente se procede a esta suerte de re- rada jurisprudencia de un Tribunal Constitu-
chazo liminar. A la primera de ellas a las que cional, ante el establecimiento con mayor cla-
queremos aquí referirnos es a la existencia ridad y rigurosidad de su capacidad para, de
de posiciones reiteradas, e incluso al estable- acuerdo con ciertos factores, poder priorizar
cimiento de algún precedente del Tribunal el tratamiento de ciertos procesos que llegan
Constitucional cuyo margen de acción justa- a sus despachos. Así estos tribunales pueden
mente se viene discutiendo sobre la materia centrar su atención en aquello que realmen-
que ahora se quiere analizar. Con ello no se te reclama su tutela urgente y donde no cuen-
quiere decir que una posición establecida por ta con una posición ya fijada y conocida. Ello
un Tribunal Constitucional sea incuestionable explica, por ejemplo, cómo algunos tribuna-
e inamovible. Llegará el momento en el cual, les constitucionales se han sentido muy lla-
luego de una detallada reflexión, un tribunal mados a fijar ciertos criterios sobre lo que
como este pueda convencerse de un cambio ellos entienden como “especial relevancia
constitucional”, causal para un rechazo limi- con la seriedad que el mismo merece. Pase-
nar que reclama aquí una mención especial. mos a ver esta materia de inmediato.
La primera vez donde aparece la expresión II. APUNTES ADICIONALES SOBRE
“especial trascendencia constitucional” en el LO SUCEDIDO EN EL PERÚ SOBRE
debate generado es en Alemania, de la mano EL PARTICULAR, ASÍ COMO ANTE
de la reforma introducida en 1993 a la Ley LO PREVISTO EN EL PRECEDENTE
de su Tribunal Constitucional Federal. Tam- “FRANCISCA LILIA VÁSQUEZ RO-
bién se encuentra en algunas de las recomen- MERO”
daciones planteadas por la comisión Benda en
1. Más apreciaciones sobre el con-
1996 (aunque, a diferencia nuestra, donde se texto dentro del cual se justifica
combina una preocupación por la dimensión la dación de este precedente
objetiva y por la dimensión subjetiva de los
procesos constitucionales de la libertad, en En el caso peruano, los márgenes de compe-
Alemania se incidía más por potenciar la di- tencia del Tribunal Constitucional parten de
mensión objetiva del amparo). lo previsto en el artículo 202 de la Carta de
1993. Si revisamos planteado en el segundo
Este mismo concepto (especial trascendencia inciso de dicha disposición, veremos cómo
constitucional) ha sido usado por el Tribunal allí se configura la manera mediante el cual
Constitucional español. Ese tribunal, siguien- dicho tribunal puede conocer los diversos
do la línea de lo establecido en el artículo 50 procesos constitucionales de la libertad hoy
de su Ley Orgánica (Ley 2/1979), donde se previstos para la tutela de los diferentes dere-
establece que las demandas de Amparo serán chos fundamentales. El Tribunal Constitucio-
admitidas cuando se cumplan una serie de re- nal solamente puede conocer procesos en los
quisitos, y entre ellos, el de su especial tras- cuales lo requerido haya sido denegado por la
cendencia constitucional (la cual se apreciará judicatura ordinaria, y no puede pronunciarse
atendiendo a su importancia para la interpre- sin mayores parámetros o límites que su pro-
tación de la Constitución, para su aplicación pia voluntad sobre qué casos puede conocer,
o para su general eficacia, y para la determi- lo cual descarta la aplicación de un certiorari
nación del contenido y alcance de los dere- como el estadounidense. Ello en mérito a que
chos fundamentales), precisó en su STC Exp. se reconoce la existencia de requisitos de ad-
N° 155/2009 supuestos de rechazo liminar en misibilidad y procedencia de los Recursos de
base a la ausencia de una especial relevancia Agravio Constitucional.
o trascendencia constitucional.
Así, por ejemplo, el Código Procesal Consti-
Estamos pues ante preocupaciones similares tucional, en su artículo 18, establece requisi-
en muchos lugares, las cuales por cierto no tos como el de un plazo razonable para la in-
son nuevas, y a las cuales el Perú no ha sido terposición de los Recursos de Agravio. De
ajeno, tal como lo demostraba diversa juris- otro lado, el mismo Reglamento Normativo
prudencia de nuestro Tribunal Constitucional del Tribunal, aprobado en el año 2004, esta-
en sus anteriores composiciones, e incluso blece en su artículo 11 que, además de ase-
algún precedente como el emitido a propó- gurarse que se cumplan los requisitos ya pre-
sito del caso Sánchez Lagomarcino. Con el vistos en el artículo 18 del Código Procesal
caso Vásquez Romero lo que se ha buscado Constitucional, el Tribunal puede pronun-
mediante un reciente pronunciamiento con ciarse sobre la procedencia de lo que es pues-
carácter de precedente, es reforzar y siste- to en su conocimiento, sin entrar al fondo de
matizar lo que ya se había negado, para así esas controversias, si constata que el recurso
abordar una materia de la mayor relevancia que se le presenta no se refiere al contenido
172
EDICIÓN ESPECIAL
Lo sucedido en el caso Vásquez Romero Es en esa línea de pensamiento que ahora co-
explica la importancia de impulsar y sistema- rresponde hablar de las sentencias interlocu-
tizar mejor esas pautas. Conviene entonces torias, denominación hoy poco utilizada, pero
aquí efectuar siquiera una breve referencia a no por ello abandonada en el caso peruano
otros aspectos incluidos en este fallo: el uso y en el Derecho Comparado para referirse a
de sentencias interlocutorias, los alcances del pronunciamientos en los cuales sin efectuar
rechazo liminar aquí consagrado, la naturale- una opinión sobre el fondo de la controversia
za del recurso de agravio en el Perú y lo que planteada, se emite una postura que en princi-
involucran las diversas causales de rechazo li- pio cierra el debate sobre el tema que se plan-
minar previstas. Pasemos entonces a ver esos tea a nivel del órgano jurisdiccional corres-
temas de inmediato. pondiente. Es formalmente una sentencia,
aunque materialmente un auto. Ahora bien,
2. Sobre el uso de la figura de la sen- el hecho de que nos encontramos ante aque-
tencia interlocutoria para recoger llo que materialmente sea un auto no necesa-
la decisión de rechazo liminar riamente habilita su impugnabilidad (de he-
No cometo infidencia alguna si anoto que en cho hay en todo ordenamiento jurídico, guste
la propuesta original del precedente se habla- o no, autos inimpugnables); y, además (lo que
ba claramente de que mediante auto se plas- en puridad es tan o más relevante que lo an-
maba la decisión de rechazo liminar del re- terior), permite canalizar la acción que aquí
curso de agravio constitucional. Sin embargo, se plantea efectuar: la del rechazo liminar de
quien trabaja en un colegiado sabe que, para ciertos recursos de agravio constitucional.
el mejor funcionamiento del mismo, deben En el Derecho, como en todo, lo que impor-
buscar propiciarse consensos básicos, siem- ta es el respeto a las instituciones y sus esen-
pre y cuando ello no implique sacrificar cues- cias o contenidos. Las denominaciones, sin
tiones de principio. con ello decir que son irrelevantes, tienen
Como bien se conoce, las sentencias pueden una importancia menor si lo que finalmente
a su vez clasificarse entre sentencias defini- se mantiene es ese respeto a esas institucio-
tivas y sentencias interlocutorias. Las sen- nes, esencias y contenidos. Lo realmente re-
tencias definitivas son aquellas que no solo levante es que aquí, independientemente de
formal, sino también materialmente, cum- simpatías o preferencias personales, nos en-
plen los elementos con los cuales vincula- contramos ante el uso de una forma que téc-
mos a toda sentencia: resuelven de mane- nicamente puede recoger la actuación que se
ra final y con un pronunciamiento sobre el ha planteado efectuar. Cosa distinta es si con
fondo de la controversia, concluyéndose lo que en realidad no se coincide es con esa
actuación concreta que se busca realizar, ma-
con ello el conflicto o la incertidumbre con
teria sobre cuyos alcances algo pasaremos a
relevancia jurídica presentadas en seden ju-
anotar a continuación.
risdiccional (o por lo menos, si se trata de
un pronunciamiento de grado o instancia 3. Anotaciones acerca de la actua-
que no es el último, nos facilita estar fren- ción efectuada: Ante el rechazo li-
te a aquello que cierra la discusión ante ese minar del recurso de agravio, que,
grado o instancia, dejándose abierta la posi- por cierto, no implica una doble
bilidad de impugnar esa decisión de acuer- calificación del recurso, ni un in-
do con los medios impugnatorios previstos vento de nuevas causales de im-
en ese ordenamiento jurídico en particular). procedencia
Ello, por cierto, no descarta que existan otro Como es de conocimiento general, todo pro-
tipo de sentencias. ceso, incluso si es uno de tutela urgente, tiene
174
EDICIÓN ESPECIAL
una serie de etapas, las cuales condicionan maniobras dilatorias. Con ello tampoco se es-
qué es lo que puede conocer un juzgador (a), tán, como erróneamente alguien podría pen-
y en cuál momento puede hacerlo. Debe en- sar, aumentando jurisprudencialmente las
tonces tenerse presente que, y en el escena- causales de improcedencia. Aquí, por cierto,
rio de la jurisdicción constitucional de la li- no se está haciendo nada nuevo. Se está ex-
bertad en el Perú, el Tribunal Constitucional plicitando el alcance de una competencia que
de nuestro país conoce procesos de hábeas es intrínseca a todo juzgador (a), máxime si
corpus, amparo, hábeas data y cumplimiento conoce en revisión. Esta tarea, además, ya se
mediante recursos de agravio. Es pues sobre había iniciado de alguna manera con lo pre-
la pertinencia de recurrir a este medio proce- visto en el anterior texto del Reglamento del
sal acerca de lo que primero debe pronunciar- Tribunal Constitucional peruano y lo resuel-
se este calificado intérprete vinculante de la to en el caso Sánchez Lagomarcino, aunque,
Constitución vigente. valgan verdades, sin la suficiente sistematiza-
ción y difusión.
Ello va a involucrar que, luego que la Cor-
te Superior o Sala de apelaciones concedió el Veamos entonces cuáles son las causales ex-
agravio, tarea para la cual básicamente hace plicitadas para el rechazo liminar del recurso
una calificación en función del cumplimiento de agravio. Analicemos luego si lo allí resal-
de requisitos de forma en la presentación del tado no tiene directamente que ver con el re-
recurso, corresponde a quien revisa ese medio curso que viene conociéndose; y si, además,
impugnatorio pronunciarse acerca de la pro- implica la generación de un escenario nue-
cedencia del mismo, así como emitir opinión vo y anteriormente inexistente para su impro-
sobre el fondo de lo controvertido. cedencia. Rápidamente podemos comprobar
Esto último –la opinión sobre el fondo– indu- que la falta de sustentación del recurso pre-
dablemente pierde sentido si quien está juz- sentado, la acreditación de que el análisis de
gando se encuentra con que los argumentos su texto no resiste un control de logicidad, o
en los cuales se sustenta el recurso son mani- la constatación de estar ante un documento
fiestamente improcedentes. Allí, quienes se con redacción confusa (y por ende, carente de
desempeñan como juzgadores (as), máxime utilidad para obtener el fin que en principio
si son directores de un proceso en donde lo motivó su presentación), no son materias nue-
que se invoca es la tutela urgente de derechos, vas. No estamos pues ante supuestos ante los
deben utilizar su capacidad de rechazo limi- cuales cualquier juez o jueza puede conside-
nar de lo solicitado ante su despacho a través rar que si declara la manifiesta improcedencia
de ese medio impugnatorio. Actuar de otra de un recurso pueda con ello asumirse que se
manera, prestándose por ejemplo a dilaciones ha pasado a la creación de nuevas causales de
innecesarias en la resolución de lo controver- improcedencia.
tido, sería más bien una forma de incumplir
Lo mismo puede predicarse si nos encontra-
aquellas labores que le son propias.
mos ante un tema frente al cual en el Tribu-
No hay pues en estos supuestos una doble ca- nal Constitucional ya se cuenta con una po-
lificación del recurso. Estamos más bien ante sición establecida, incluso en algún caso con
el ejercicio de una primera, lógica y necesaria carácter de precedente. Con ello no se está
atribución de alguien que cumple tareas revi- diciendo que no pueda haber una discrepan-
soras: el dejar rápidamente de lado lo mani- cia razonable con lo antes planteado, o exista
fiestamente improcedente dentro de lo que es la posibilidad de una argumentación distinta
puesto en su conocimiento. Así no se pres- con base en otros elementos de juicio. Siem-
ta a generar expectativas sin real sustento, o pre es posible distinguirse, encuadrar me-
a ser el vehículo de poco bien intencionadas jor e incluso apartarse razonablemente de un
176
EDICIÓN ESPECIAL
dentro de un proceso constitucional de la li- Frente a estas causales, se han formulado al-
bertad en el Perú que tiene la calidad de ser un gunas interrogantes, vinculadas más bien a la
recurso extraordinario es el Recurso de Agra- improcedencia de la demanda antes que a la
vio Constitucional, puesto que no procede del recurso. Por último, también existen pre-
contra cualquier resolución (solamente pro- guntas sobre la actuación del Tribunal Cons-
cede cuando existe una denegatoria en segun- titucional sin mayor trámite o traslado de im-
do grado o instancia), y solamente se encuen- putaciones a los involucrados (as) que resulta
tra habilitado a favor del demandante. Justo necesario absolver.
es decir que con esto el Tribunal no está se-
Los alcances de la primera causal explicitada
ñalando nada nuevo, sino está realizando una deben ser esclarecidos, para así eventualmen-
aplicación de lo explícitamente dispuesto en te evitar la confusión de los supuestos que
el artículo 202 de la Constitución de 1993, o abarca con los de otros escenarios también
en el anterior texto del artículo 11 del Regla- recogidos en el fundamento 49 de “Vásquez
mento del mismo Tribunal. Romero”. Cuando aquí se habla de carencia
5. A vueltas con los alcances de las de fundamentación no se está haciendo re-
causales explicitadas en “Vásquez ferencia a si hay incidencia o no en el con-
Romero”, y la materialización de un tenido constitucionalmente contenido del
rechazo liminar sin mayor trámite derecho invocado: eso se encuentra más re-
De acuerdo con lo dispuesto en el fundamen- lacionado con otro supuesto, el cual veremos
to 49 del precedente “Vásquez Romero”, se a continuación. Se refiere más bien a tres es-
explicita que se emitirán autos de rechazo li- cenarios; en particular: el de la falta de justi-
minar del recurso de agravio (sentencia inter- ficación de lo señalado en el texto del recur-
locutoria denegatoria) cuando: so; el de la existencia de un texto que, por su
incoherencia lógica, no resiste un control de
- En dicho recurso carezca de logicidad; y, finalmente, el del desarrollo de
fundamentación la supuesta vulneración un texto impreciso, y que, por lo mismo, im-
que se invoque. pide comprender a cabalidad que se quiere
conseguir con él.
- La cuestión de Derecho contenida en el
recurso no sea de especial trascendencia Como se puede apreciar, estamos ante un su-
constitucional. puesto cuya constitucionalidad aparece como
incuestionable, pues, por ejemplo, no se le
- La cuestión de Derecho invocada contra-
puede calificar como una limitación irrazo-
diga un precedente vinculante del Tribu-
nable al derecho a una tutela judicial efecti-
nal Constitucional.
va. Queda además claro que estamos ante un
- Se haya decidido de manera desestimato- parámetro que, además de no ser nuevo en
ria en casos sustancialmente iguales. la evaluación del juzgador (a) ni implicar la
creación de una nueva causal de improceden-
Allí se aclara además que en estos casos la re-
cia, se encuentra referido al recurso en sí, y no
solución emitida se dictará sin mayor trámi-
a la demanda.
te. Finalmente, en el fundamento 50 del fallo,
se anota que existe una cuestión de especial Poco a lo ya adelantado puede añadirse a lo
trascendencia constitucional cuando la reso- ya dicho sobre el precedente o la jurispru-
lución emitida resulta indispensable para so- dencia reiterada. Nadie aquí está plantean-
lucionar un conflicto de relevancia, o cuando do consagrar un inmovilismo interpretativo.
se presente la urgencia de una revisión sobre Siempre habrá lugar para la distinción e in-
el contenido (constitucionalmente protegido) cluso el apartado razonado de lo ya previs-
de un derecho fundamental. to y planteado, o para el deslinde con aquello
178
EDICIÓN ESPECIAL
En el presente artículo, el autor desarrolla los aspectos principales del rol de juez consti-
RESUMEN
tucional en el Estado constitucional de Derecho así como lo concerniente a la elección de
los magistrados de nuestro Tribunal Constitucional, analizando los diferentes mecanismos
de elección que existen a nivel internacional. Considera que, si bien un tribunal de ese ni-
vel emite decisiones jurídicas, también es importante que sus integrantes tengan en cuenta
las ideologías políticas que conviven en una determinada sociedad.
* Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de San Martín de Porres. Expresidente del Tribunal Constitu-
cional peruano.
180
EDICIÓN ESPECIAL
1 CÁRDENAS, Jaime. “Acerca de la legitimidad democrática del juez constitucional”. En: Biblioteca Jurídica Virtual
del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, 2009.
2 BLUME, Aldo. “La legitimidad democrática del juez constitucional en el marco del Estado Constitucional de Dere-
cho: El debate respecto a la dificultad contramayoritaria”. En: Revista del Centro de Estudios Constitucionales. Tri-
bunal Constitucional, 2010, p. 267.
3 ZAGREBLESKY, Gustavo. “Jueces constitucionales”. En: CARBONELL, Miguel (editor). Teoría del neoconstitu-
cionalismo. Trotta, Madrid, 2007, p. 100. BLUME, Aldo. Ob. cit., p. 368.
4 SÁNCHEZ, Luis. “Poder Ejecutivo y división de poderes”. En: Revista Española de Derecho Constitucional. Vol.
L, N° 3, 1981, pp. 9-42.
modelo inglés, que previene y evita la confi- especialmente al analizar el papel que jue-
guración de una dimensión absoluta del poder gan los órganos que tienen a cargo la elección
que amenace los derechos de los individuos. de los magistrados respecto a la independen-
Recordemos, al respecto, lo dicho por Lord cia del Tribunal Constitucional, toda vez que
Acton: “El poder tiende a corromper y el po- tiene también una naturaleza política: i) por
der absoluto corrompe absolutamente”. los posibles efectos políticos de las decisio-
Por ello, consideramos que Derecho Judi- nes que adopte, y ii) porque se puede someter
cial inglés, que afirma la superior jerarquía a control constitucional las cuestiones políti-
de los principios del common law, es el ori- cas7; sin embargo, esto no puede afectar su la-
gen de nuestras construcciones constituciona- bor fundante del ordenamiento jurídico.
les, y que reaparece como un necesario punto Es por ello que, a continuación, analizaremos
de llegada del constitucionalismo peruano, lo las formas de elección de los magistrados –o
cual tiene importantes consecuencias en la ac- ministros, dependiendo del caso– en países en
tuación de los tribunales. Se trata, en suma, de los que se cuenta con órganos constituciona-
reconocer a los jueces más que atribuciones les, así como en aquellos en los que el órga-
estáticas dentro del esquema usual de la sepa- no supremo del Estado asume las funciones
ración de poderes de la concepción clásica del de control constitucional, con la finalidad de
rule of law, sino afirmar que, en el proceso analizar la influencia de los órganos encarga-
de judicialización de nuestro sistema, corres- dos de su elección en las decisiones del máxi-
ponde a los jueces ser los protagonistas, en la mo intérprete de la Constitución en el Dere-
práctica, de la garantía de la sumisión del po- cho Comparado y evaluar lo que ocurre en el
der al Derecho5. caso peruano.
Actualmente, la efectividad de una Consti-
tución depende de las convenciones y de las II. EL ROL DEL PODER LEGISLATIVO
sucesivas interpretaciones6, procesos de los EN LA ELECCIÓN DE MAGISTRA-
DOS DEL TRIBUNAL CONSTITUCIO-
cuales participa el Tribunal Constitucional
NAL EN EL DERECHO COMPARADO
del Perú con especial dinamismo sobre una
base empírica y funcional, y no siempre cau- 1. El caso colombiano
sal, comprometido con la defensa de la Cons-
En el caso de la Corte Constitucional, orga-
titución, de los derechos fundamentales, el
nismo autónomo, al amparo del artículo 239
ineludible mandato social de superación de
de la Constitución Política, que tiene a su car-
la pobreza a través del desarrollo económico,
go decidir la constitucionalidad de normas
y la construcción de una sociedad justa en la
legales así como de actos judiciales, para la
que toda persona encuentre factible su reali-
elección de los nueve (9) magistrados de la
zación con dignidad y libertad.
Corte Constitucional, por un periodo de ocho
Todo lo anterior cobra sentido en el ejercicio (8) años sin posibilidad de reelección, se lle-
práctico de la labor del juez constitucional, va a cabo un sistema mixto, toda vez que son
5 ÁLVAREZ. Ernesto. “Sentido del constitucionalismo”. En: Revista de Economía y Derecho UPC. Vol. 7, N° 27,
2007, p. 107.
6 ARAGÓN, Manuel. “El control como elemento inseparable del concepto de Constitución”. En: Revista Española de
Derecho Constitucional. Año 7, N° 19, 1987, pp. 18-22.
7 LANDA, César. “Justicia constitucional y political questions”. En: Anuario iberoamericano de justicia constitucio-
nal. N° 4, Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, Madrid, 2000, p. 173 y ss.
182
EDICIÓN ESPECIAL
elegidos por el Senado de la República, de las nombrados directamente por el Senado y los
ternas donde presentan: tres (3) el Presidente otros dos (2), a propuesta de la Cámara de Di-
de la República, tres (3) la Corte Suprema de putados, son también nombrados por el Se-
Justicia y tres (3) el Consejo de Estado. De lo nado. Finalmente, tres (3) son designados di-
anterior se puede colegir el rol fundamental rectamente por la Corte Suprema, en votación
del Senado, toda vez que tiene la última pala- secreta.
bra en la elección, pudiendo evaluar amplia-
mente la capacidad jurídica, académica y so- 4. El caso mexicano
cial de los postulados. En este caso no existe un Tribunal Constitu-
cional, sino que la función del control cons-
2. El caso español
titucional recae en el Pleno de la Suprema
Para la elección de los doce (12) magistrados Corte de Justicia de la Nación. Es así que, de
del Tribunal Constitucional, el artículo 159 de acuerdo con el artículo 94 de la Constitución
la Constitución española establece la partici- Política de los Estados Unidos Mexicanos,
pación de los tres poderes, por lo que la terna los ministros de esta Suprema Corte son once
propuesta se da de la siguiente manera: cuatro (11), elegidos para un periodo de quince (15)
(4) de parte del Congreso de los Diputados, años. Asimismo, según el artículo 96, el Pre-
cuatro (4) de parte del Senado, dos (2) de par- sidente de la República somete una terna para
te del Gobierno y dos (2) de parte del Consejo que sea considerada por el Senado, el cual so-
General del Poder Judicial. Para equilibrar el licita la presentación de las personas propues-
número de jueces propuestos por el Legislati- tas para luego poder designar al ministro que
vo, quien prima facie tendría un poder mayor deba cubrir la vacante, ello con el voto de las
en la toma de decisiones, la Constitución exi- dos terceras partes de los miembros del Sena-
ge que los propuestos por las Cortes deben ser do presentes. En el caso de que no se llegara a
elegidos por los tres quintos (3/5) miembros un acuerdo, el Presidente designa a la perso-
de cada cámara. na que considere adecuada dentro de la terna
propuesta. Si la Cámara de Senadores recha-
3. El caso chileno
zara la totalidad de la terna propuesta, el Pre-
El Tribunal Constitucional chileno, como ór- sidente somete una lista nueva, siguiendo el
gano autónomo e independiente de toda au- procedimiento anteriormente referido. Si nue-
toridad y poder8, tiene la función de control vamente esta terna fuera rechazada, el Presi-
constitucional de normas y resoluciones. En dente de la República designará a la persona
ese sentido, está integrado por diez magistra- que considera, dentro de la terna propuesta10.
dos (denominados ministros), por un periodo
de nueve años, sin embargo son nombrados 5. El caso argentino
cada tres.
Si bien tampoco existe una entidad especia-
El artículo 92 de la Constitución9 establece lizada como corte o tribunal constitucional,
la cuota de designación de los ministros: tres estas funciones son asumidas por la Corte
(3) son por el Presidente de la República, cua- Suprema de Justicia, que es la máxima ins-
tro (4) por el Congreso Nacional, dos (2) son tancia judicial. En ese sentido, el artículo 99,
11 Decreto 222/2003: Procedimiento para el ejercicio de la facultad que el inciso 4 del artículo 99 de la Constitución de
la Nación Argentina le confiere al Presidente de la Nación para el nombramiento de los magistrados de la Corte Su-
prema de Justicia de la Nación. Marco normativo para la preselección de candidatos para la cobertura de vacantes.
En: <http://www.profesorgentile.com.ar/leyes/jueces.html>.
184
EDICIÓN ESPECIAL
otorga una legitimidad democrática indirec- cargo, así como aquellas situaciones que po-
ta al haber sido la sociedad quien eligió a los drían darse en el ejercicio del cargo, el ar-
miembros del Congreso. Lo anterior por la tículo 12 de la LOTC señala los siguientes:
relevancia social del Tribunal, que cuenta con
a) Haber sido objeto de separación o desti-
una legitimidad democrática así como la con-
tución por medida disciplinaria como ma-
fianza de la ciudadanía depositada en ellos a
gistrados del Poder Judicial o del Ministe-
la que deben responder con imparcialidad en
rio Público.
la toma de sus decisiones.
b) Haber sido inhabilitado como abogado
Aunado a ello, la normativa interna, tanto la
por sentencia judicial o por resolución del
Constitución como la Ley Orgánica del Tribu-
Congreso de la República.
nal Constitucional (Ley N° 28301, en adelan-
te, LOTC), establece las condiciones para que c) Haber sido condenados o que se encuen-
una persona pueda llegar al Tribunal Constitu- tran siendo procesados por delito doloso.
cional en calidad de magistrado y hace la sal-
d) Haber sido declarados en estado de insol-
vedad entre requisitos e incompatibilidades.
vencia o de quiebra.
En cuanto a los requisitos, son aquellas con-
e) Haber ejercido cargos políticos o de con-
diciones generales que debe tener la persona
fianza en gobiernos de facto.
que quiera asumir el cargo y se desprenden
del artículo 201 de la Constitución, leído en El Presidente de este órgano debe ser elegido
conjunto con el artículo 147 de la Constitu- por los propios magistrados en votación se-
ción, el artículo 11 de la Ley Orgánica del Tri- creta por un periodo de 2 años, tal como esta-
bunal y el artículo 15 del Reglamento Norma- blece el artículo 6 de la LOTC.
tivo del Tribunal. Son los siguientes:
En 1993, la Asamblea Constituyente otorgó la
a) Ser peruano de nacimiento, ya sea por el facultad de elegir a los magistrados exclusi-
derecho de suelo o de sangre. vamente al Congreso; sin embargo, cabe se-
ñalar, con fines meramente ilustrativos, que el
b) Ser ciudadano en ejercicio, es decir no ha-
anteproyecto de Constitución de la Asamblea
ber sido declarado judicialmente interdicto,
Constituyente de 1979 planteó que el Tribu-
inhabilitado en sus derechos políticos o pri-
nal de Garantías Constitucionales estuviera
vado de la libertad por sentencia judicial.
integrado por doce (12) miembros, elegidos
c) Ser mayor de 45 años, no al momento de de la siguiente forma: dos (2) por la Cámara
postular sino al momento de ser elegido de Senadores, uno (1) por la Cámara de Di-
por el Pleno del Congreso. putados, tres (3) por el Poder Ejecutivo, tres
(3) por la Corte Suprema, uno (1) por el Cole-
d) Haber sido magistrado de la Corte Supre-
gio de Abogados de la República, uno (1) por
ma o Fiscal Supremo, o magistrado supe-
el Consejo Nacional de la Magistratura y uno
rior o Fiscal Superior durante diez años,
(1) por las facultades de Derecho de las uni-
o haber ejercido la abogacía o la cátedra
versidades del país. Este planteamiento, simi-
universitaria en materia jurídica durante
lar a los referidos en el Derecho Comparado,
quince años.
no prosperó.
e) No estar comprendido en alguno de los
En la actualidad, esa votación, luego de la modi-
supuestos enumerados en el artículo 12 de
ficación introducida mediante la Ley N° 28764,
la Ley N° 28301.
publicada el 23 de junio de 2006, es pública y
En cuanto a los impedimentos, entendidos ordinaria, lo que ha permitido que los candi-
como las incompatibilidades para postular al datos puedan ser elegidos en bloque.
12 ZAGREBELSKY, Gustavo. Principio y votos. El Tribunal Constitucional y la política. Trotta, Madrid, 2005, p. 51.
186
EDICIÓN ESPECIAL
13 Sentencia emitida por el Tribunal Constitucional el 9 de abril de 2007 en el Exp. N° 08353-2006-PHC/TC. Citada
en: RUBIO, Marcial. “El lugar del Tribunal Constitucional en la sociedad peruana”. En: Treinta años de jurisdicción
constitucional en el Perú. Centro de Estudios Constitucionales, Lima, 2013, p. 830.
14 LANDA, César. Estudios sobre Derecho Procesal Constitucional. México D.F., Porrúa, 2006, pp. 106-109.
15 GARCÍA-PELAYO, Manuel. “El ‘status’ del Tribunal Constitucional”. En: Revista española de Derecho Constitu-
cional. Año 1, N° 1, Centro de Estudios Constitucionales, Madrid, 1981, pp. 11-34.
16 LANDA, César. “Autonomía procesal del Tribunal Constitucional: la experiencia del Perú”. En: Biblioteca Jurídica
Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, 2009.
Sin duda alguna, la interpretación y aplica- composición la presencia de las diferentes vi-
ción del Derecho Constitucional tiene un con- siones políticas para que su decisión final sea
tenido político, al ser capaz de establecer o el fruto de un consenso jurídico y político,
modificar los principios configuradores de la esto se ve garantizado a través de la elección
unidad política nacional, los límites y direc- de sus magistrados por parte del Congreso de
trices para la acción de los demás órganos del la República, siendo un ejercicio indirecto de
Estado y regula la estructura y las funciones la democracia, al ser ellos quienes represen-
políticas del Estado17. tan a una sociedad con visiones políticas.
Por ello, un cambio en la forma de elección
CONCLUSIONES
de los magistrados (por ejemplo, por parte del
En un Estado constitucional de Derecho, la Consejo Nacional de la Magistratura o a pro-
Constitución debe ser entendida como norma posición del Poder Ejecutivo, como ocurre en
suprema del ordenamiento jurídico que con- los países que analizamos líneas supra) limi-
tiene principios y valores. Sus efectos deben taría su composición a magistrados puramen-
irradiar a todos los ámbitos de dicho ordena- te técnicos, los cuales no tendrían en cuenta
miento. Es así que al juez constitucional, den- las diferentes posturas ideológicas que convi-
tro de la organización estatal, le corresponde- ven en la sociedad.
rá interpretar los alcances de la Constitución
Finalmente, la lectura y análisis de la juris-
a fin de hacerla valer como norma jurídica
prudencia del Tribunal Constitucional nos in-
vinculante frente a todos los poderes públi-
dica que, a pesar de que la elección de sus ma-
cos, incluyendo el propio legislador.
gistrados recae en el Poder Legislativo, esto
El Tribunal Constitucional, al ser el máximo no ha sido óbice para que sus decisiones se
intérprete de la Constitución, requiere en su aparten del mandato constitucional.
188
ANÁLISIS Y CRÍTICA
El autor nos alcanza sus apreciaciones sobre la evolución del Tribunal Constitucional en
la defensa de los derechos fundamentales, con sus lamentables altibajos ampliamente y
RESUMEN
procurando cubrir el mayor número de espacios de la realidad social, económica, laboral
y política, y, por ello, comenta decisiones expedidas en diversos procesos constitucionales.
Además, argumenta cómo, después de cumplido el mandato de cinco años (y tras un lapso
prudente, por desconciertos o desajustes políticos en el Congreso), el magistrado debe ser
coherente y renunciar al cargo.
* Exvicepresidente del Tribunal Constitucional. Profesor Principal en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
1 Vocablo utilizado de manera uniforme en los tratados internacionales y que no tiene significación de género sino de
persona, de ser humano, es decir, trátese de hombre o mujer.
Los derechos fundamentales son derechos derechos constitucionales son aquellos inclui-
humanos escritos y plasmados mediante la dos en la norma constitutiva y organizativa de
legislación del Estado. El derecho funda- un Estado, generalmente denominada consti-
mental jurídicamente tiene una estructu- tución, que se consideran como esenciales en
ra normativa de tal suerte que son los dere- el sistema político.
chos humanos concretados, escritos en un
Para abordar el tema que desarrollaremos en
texto constitucional. La garantía es un me-
esta primera parte, permítasenos, transcribir
dio otorgado por la Constitución para pre-
a continuación, los artículos VII y VI del TP
servar o proteger algún derecho humano; la
del Código Procesal Constitucional (CPCo.,
garantía, surge después de que el Estado, a
en adelante):
través de sus órganos, la consagra en un do-
cumento legal. La garantía es un medio de “Artículo VII.- Precedente
protección del derecho humano y el objeti-
Las sentencias del Tribunal Constitucio-
vo primordial de los derechos humanos está
nal que adquieren la autoridad de cosa
directamente relacionado con el goce de las
juzgada constituyen precedente vincu-
libertades y garantías individuales y con su
lante cuando así lo exprese la sentencia,
bienestar y protección. Son considerados
precisando el extremo de su efecto nor-
como derechos que –aunque pueden tener el
mativo. Cuando el Tribunal Constitucio-
mismo sustento material y contenido prote-
nal resuelva apartándose del precedente,
gido que los derechos humanos–, están re-
debe expresar los fundamentos de hecho
conocidos en los ordenamientos constitucio-
y de derecho que sustentan la sentencia
nales estatales. Se indica, en tal sentido, que
y las razones por las cuales se aparta del
los derechos fundamentales son derechos
precedente”.
humanos constitucionalizados. Los derechos
fundamentales abarcan otros derechos tales, “Artículo VI.- Control Difuso e Inter-
como los económicos, culturales y de seguri- pretación Constitucional
dad social. Los derechos fundamentales son
Cuando exista incompatibilidad entre una
“todos aquellos derechos subjetivos que co-
norma constitucional y otra de inferir je-
rresponden universalmente a todos los seres
rarquía, el juez debe preferir la primera,
humanos en cuanto dotados del status”.
siempre que ello sea relevante para resol-
Los derechos constitucionales son aquellos ver la controversia y no sea posible ob-
garantizados con rango constitucional que tener una interpretación conforme a la
se consideran como esenciales en el sistema Constitución.
político que la Constitución funda y que es-
Los jueces no pueden dejar de aplicar una
tán especialmente vinculados a la dignidad
norma cuya constitucionalidad haya sido
humana. Son aquellos que dentro del orde-
confirmada en un proceso de inconsti-
namiento disfrutan de un estatus especial en
tucionalidad o en un proceso de acción
cuanto a garantías. Los derechos constitucio-
popular.
nales se clasifican en derechos fundamentales
(de primera generación), derechos colectivos Los jueces interpretan y aplican las leyes
y derechos sociales (de segunda generación) o toda norma con rango de ley y los re-
y del medio ambiente (de tercera generación). glamentos según los preceptos y princi-
En la doctrina española se dice, por ejemplo, pios constitucionales, conforme a la in-
que hay derechos constitucionales fundamen- terpretación de los mismos que resulte de
tales y hay derechos constitucionales no fun- las resoluciones dictadas por el Tribunal
damentales. Viene a ser otro enfoque. Los Constitucional”.
190
EDICIÓN ESPECIAL
2 Adscripción, anexión. Gran Diccionario de Sinónimos y Antónimos. Espasa-Calpe, Madrid, 1987, p. 49.
3 CASTILLO CÓRDOVA, Luis. “Jurisprudencia constitucional vinculante y precedente constitucional vinculante”.
En: La Ley. Año 6, N° 64, Gaceta Jurídica, Lima, mayo de 2013, p. 4.
4 REAL ACADEMIA ESPAÑOLA. Diccionario de la Lengua Española. Vigesimosegunda edición. Tomo 1, p. 34.
Adscripto. Adscrito. En los institutos de enseñanza, persona encargada de la atención a los alumnos y profesores en
ciertas tareas administrativas relacionadas con los cursos. De adscribir. Inscribir; contar entre lo que corresponde a
alguien o algo. Agregar a una persona al servicio de un cuerpo o destino.
5 Denominación utilizada con frecuencia por el destacado profesor de la Universidad de Piura, Luis Castillo Córdova.
6 Ratio decidendi: “aquella consideración determinante que el Tribunal Constitucional ofrece para decidir estimativa o
desestimativamente una causa de naturaleza constitucional; vale decir, es la regla o principio que el Colegiado esta-
blece y precisa como indispensable y, por ende, como justificante para resolver la litis”. STC Exp. N° 00024-2003-
AI/TC. En Derecho Procesal Civil, nos explicaban que las sentencias tenían tres partes: hechos, considerandos y
fallo. En Derecho Procesal Constitucional, las sentencias tienen cinco partes: i) la razón declarativa axiológica;
ii) la razón suficiente, ratio decidendi; iii) la razón subsidiaria o accidental, es decir, el obiter dicta; iv) la invocación
preceptiva; y v) la decisión o fallo constitucional, es decir, el decissum.
7 CASTILLO CÓRDOVA, Luis. Los precedentes vinculantes del Tribunal Constitucional. 2ª edición actualizada,
Gaceta Jurídica, Lima, 2015, pp. 44 y 45.
8 Se le despide sin expresar causa alguna que lo justifique, derivada de la conducta del trabajador o de la labor que de-
sempeña.
9 Se le despide con ánimo perverso y auspiciado por el engaño, es decir, de manera contraria a la verdad y a la rectitud
de las relaciones laborales. Se le imputa hechos inexistentes, falsos o imaginarios, atribuyéndole una falta no previs-
ta en la ley. También mediante fabricación de pruebas.
10 Se le despide por su mera afiliación al sindicato o por su participación en actividades sindicales. También por discri-
minación (sexo, raza, religión, opción política, etc.), estado de embarazo, portador de VIH/Sida (Cfr. Ley N° 26626)
o por su condición de persona con discapacidad (Cfr. Ley N° 27050).
192
EDICIÓN ESPECIAL
Una, en virtud del caso Huatuco, STC Exp. criterios objetivos y subjetivos para determi-
N° 05057-2013-PA/TC. Se dispuso que, fren- nar la vía igualmente satisfactoria.
te al despido de los trabajadores del Sector
Con el estudio y argumentación necesaria,
Público sujetos al régimen de la actividad
Luis Castillo Córdova13 llega a la conclusión
privada, cualquiera fuere su causa, solamen-
de que, en virtud al precedente vinculante
te prospera la reposición si los demandantes
dictado, se deberá reconocer “(…) como vía
prueban haber ingresado a trabajar mediante
igualmente satisfactoria que el amparo, cuan-
concurso público de méritos, en plaza vacan-
do copulativamente se cumple en el caso con-
te, presupuestada y de duración indetermina-
creto con que, a) el proceso es célere y eficaz,
da; caso contrario, solo procederá indemni-
tanto o más que el amparo; b) la resolución
zación, precedente vinculante que se aplica,
que se fuera a emitir en el proceso haga de-
incluso, a los casos en trámite en el Poder Ju-
saparecer la agresión iusfundamental tanto o
dicial y ante el mismo Tribunal Constitucio-
más como lo haría el amparo; c) el tránsito del
nal. Este precedente vinculante que solamen-
proceso no produzca riesgo de irreparabilidad
te contaría con cuatro votos conformes, según
de la agresión; y, d) en el caso, no exista ne-
apreciación de algunos profesores11, cambia
cesidad de tutela urgente”.
repentinamente la reiterada y muy uniforme
jurisprudencia del TC desde hacía trece años, 2.2. STC Exp. N° 04635-2004-AA/TC (jor-
rompiéndola y quebrándola abruptamente y nada laboral máxima en el ámbito
ha sido sumamente criticada como juristas minero)
de la talla de César Landa Arroyo –expresi-
Para el caso de los trabajadores mineros, el
dente del TC– y Luis Castillo Córdova. Tam-
TC dijo que la jornada de trabajo no puede
bién por el autor de este artículo12, entre otros
ser mayor de ocho horas diarias y debe con-
profesores.
siderar una jornada semanal también razo-
Dos. En virtud del caso Elgo Ríos, STC Exp. nable, según las circunstancias. Se pregunta
N° 02383-2013-PA/TC se definieron los ¿podrían ser doce horas diarias durante cuatro
11 De acuerdo con el artículo 13 del Reglamento Normativo del TC, concordante con el artículo 5 de su Ley Orgánica,
se precisan cinco votos conformes.
12 No hubiese puesto ningún reparo si, alternativamente, y con el apoyo de los argumentos y voto del distinguido jurista
y magistrado del TC, Ernesto Blume Fortini, se hubiese establecido un prospective overruling, es decir, advertir que,
por ejemplo, a partir del enero de 2017, quienes ingresen a trabajar para el Estado o en cualesquiera de sus depen-
dencias, solamente tendrá derecho a reposición si su ingreso hubiese estado premunido de determinadas caracterís-
ticas. En el caso contrario, y ante su despido arbitrario, solo tendrá derecho a indemnización. Aquí no hay violación
de derecho constitucional alguno, porque se está advirtiendo sobre la situación futura; pero hacerlo de ese modo es
actuar en pro del Estado y la Ley, mas no en favor de la protección de los derechos fundamentales de las personas y
de su dignidad, basándose en la Constitución Política y en su uniforme jurisprudencia. El primero que debe cumplir,
a pie juntillas, lo dispuesto por los artículos VI y VII del TP del CPCo. Es el propio Tribunal Constitucional. Se trata
del Código Procesal Constitucional. ¿Puede el TC apartarse de sus precedentes vinculantes? Claro que sí. Se lo au-
toriza el mismo artículo VII. Pero sin hacer daño a nadie, menos a las personas que ingresan a trabajar por sucesivas
entrevistas y pruebas, sin que exista el rótulo o la etiqueta concurso público, y sin saber ni cómo averiguarlo, si la
plaza estaba presupuestada. Ingresaron así porque sí, no fue su culpa, ni dieron su consentimiento para ello. La per-
sona ya está trabajando, ya sabe qué hacer y ahora, después de tres, cinco o nueve años, el TC (que controla la cons-
titucionalidad de todo en el país, que debe respetar y hacer respetar la dignidad de las personas humanas, defender-
las y protegerlas) dice que han cambiado las cosas, que hay nuevas leyes y que debe cambiar su manera de pensar
y de resolver las cosas. Pareciera que el Tribunal Constitucional hubiese decidido defender al Estado, sus leyes y su
presupuesto, y ya no a la Constitución y a las personas. ¿Eso está bien?
13 CASTILLO CÓRDOVA, Luis. Ob. cit., p. 544.
días consecutivos, los que sumarían cuarenta de la Constitución hace el TC puedan ser in-
y ocho a la semana? Se responde: las jornadas constitucionales17. Esta vez, el mismo TC lo
acumulativas, atípicas o concentradas pueden reconoció.
adoptarse solamente de modo excepcional14.
Son inconstitucionales, sin embargo, las dis- 3. Análisis de las variaciones en la
posiciones que permitan instaurar modalida- jurisprudencia constitucional en
asuntos sobre seguridad social
des acumulativas de trabajo fijando obligato-
riamente como mínimo cuatro días de jornada 3.1. SSTC Exps. N°s 05189-2005-PA/TC
laboral15. (pensión mínima de la Ley N° 23908),
09381-2005-PA/TC (derecho a pensión
2.3. STC Exp. N° 03052-2009-PA/TC (cobro
y bono de reconocimiento), 07281-
de beneficios sociales, indemnización
2006-PA/TC (desafiliación de AFP por
y despido arbitrario)
información inexistente o defectuosa)
En anterior jurisprudencia, el TC había dis- y 00061-2008-PA/TC (arbitraje y de-
puesto la improcedencia del amparo para re- recho a la pensión)
posición cuando el trabajador cobraba sus be-
3.2. SSTC Exps. N°s 05430-2006-PA/TC
neficios sociales (CTS), porque con tal acto
(procedencia del amparo en caso de
se extinguía el vínculo laboral que se man-
pensiones devengadas e intereses) y
tenía con el empleador. El TC, acertadamen-
02513-2007-PA/TC (pensión de invali-
te cambió de criterio. Se estableció que el
dez y pensión vitalicia del SCTR)
cobro de la CTS y otros conceptos remune-
rativos por parte del trabajador, no supone Se refiere a la pensión mínima del Decreto
prestar su consentimiento al despido arbitra- Ley N° 19990: pensión mínima legal equiva-
rio y, por ende, no debe considerarse como lente a tres sueldos mínimos vitales, de modo
causal de improcedencia del amparo. En cam- que el aumento del sueldo mínimo suponía el
bio, el cobro de la indemnización supone la aumento de la pensión mínima legal. Los ad-
aceptación de la forma de protección alterna- ministrados tienen el derecho de que la ONP
tiva brindada por ley, por lo que sí es causal reconozca los meses de aportaciones rea-
de improcedencia del amparo. Se dispuso, sin les al SNP, hayan estado detallados o no en
embargo, que el pago de la CTS debe efec- la solicitud presentada para la determinación
tuarse de modo independiente y diferenciado del bono de reconocimiento. Está permitida
al pago de la indemnización, cuentas separa- la desafiliación del Sistema Privado de Pen-
das o consignaciones en procesos judiciales siones (SPP) y el regreso al Sistema Nacio-
independientes, bajo responsabilidad del em- nal de Pensiones (SNP) cuando la decisión de
pleador. Tiene razón el profesor de la Univer- afiliación se basó en una inexistente o insu-
sidad de Piura Luis Castillo16 cuando afirma ficiente información. El arbitraje en torno al
que la sentencia que se comenta confirma la seguro complementario de trabajo de riesgo
posibilidad de que las interpretaciones que (SCTR) es inconstitucional si es obligatorio;
14 Se deberá tomar en cuenta el test de protección de la jornada máxima de trabajo para los trabajadores mineros. Ver
el expediente.
15 CASTILLO CÓRDOVA, Luis. Ob. cit., p. 99.
16 Ibídem, p. 109.
17 Pueden ser formalmente constitucionales pero materialmente inconstitucionales.
194
EDICIÓN ESPECIAL
accesoria. Está permiti- a tener que presentar la re- y con base en esta norma
do que quien se conside- nuncia. Ella, inobjetablemen- el TC expidió esta senten-
re titular de una pensión te, debiera ser aceptada. cia abriendo las puertas
en cualquiera de los regí- para que los no ratifica-
menes previsionales exis- dos puedan postular nue-
tentes, interponga deman- vamente. Total, se dijo, la
da de amparo y solicite la restitución de los no ratificación no es una sanción. Es una de-
montos dejados de percibir. Está prohibido terminación discrecional del Consejo Nacio-
exigir como condición previa al otorgamien- nal de la Magistratura (CNM), en cambio, la
to de la pensión de invalidez del SCTR la per- destitución por medida disciplinaria sí es una
cepción del subsidio de incapacidad temporal sanción y sin embargo, repetimos, para ellos
otorgado por EsSalud. Cuando en el ampa- no hay prohibición alguna. Aparentemente,
ro se reclame una pensión de invalidez o una hay incongruencia.
pensión vitalicia, se declarará improceden-
Sobre el tema y, sin embargo, el profesor Luis
te la demanda cuando habiéndose solicitado
Castillo Córdova19 opina que “el hecho de
como pericia el dictamen o certificado médi-
no ratificar a un juez o fiscal significará que
co, este no ha sido presentado en el lapso de
tal juez o fiscal no ha demostrado ni la cali-
60 días hábiles.
dad, ni la conducta, ni la idoneidad necesaria
4. Pronunciamientos del TC respec- para ejercer el cargo de magistrado, porque
to a las funciones del Consejo Na- ha incumplido los esenciales compromisos
cional de la Magistratura de lealtad a la Constitución y a sus valores,
así como a las exigencias morales. Al no ha-
4.1. STC Exp. N° 01333-2006-PA/TC (jue-
berlo demostrado a lo largo de un razonable
ces y fiscales no ratificados y la prohi-
lapso (siete años), es posible concluir que el
bición de regreso a la carrera judicial)
no ratificado carece de la calidad, conducta e
El artículo 154.2 de la Constitución establece idoneidad para ejercer el cargo. Con base en
que “[l]os no ratificados no pueden reingresar este significado, está plenamente justificado
al Poder Judicial ni al Ministerio Público”; que un juez no ratificado no deba reingresar
18 Sí existe la discriminación positiva y el ejemplo lo tenemos y vemos casi a diario: las personas de la tercera edad o
mayores a 65 años y las señoras embarazadas o con niños, y las personas con discapacidad, tienen ventanillas, asien-
tos y hasta baños especiales y particulares, en los bancos y establecimientos públicos y privados para su inmediato
uso y/o atención. Eso también es discriminación, pero la doctrina la califica como “positiva”, conveniente, razonable.
19 CASTILLO CÓRDOVA, Luis. Ob. cit., p. 329.
20 Ibídem, p. 334.
196
EDICIÓN ESPECIAL
4.4. STC Exp. N° 04293-2012-PA/TC (de- ha escrito y comentado mucho. Nos releva-
jan sin efecto precedente vinculante mos de hacer comentario acá. De otro lado,
sobre control difuso administrativo) se lesiona el derecho fundamental a la liber-
tad personal cuando la detención policial dura
Se dejó sin efecto porque, en primer lugar, no se
más allá del plazo máximo o cuando estando
cumplían los requisitos para crear un preceden-
dentro de dicho plazo, se ha rebasado el plazo
te vinculante en referencia al control difuso ad-
estrictamente necesario. En estos casos el de-
ministrativo. En segundo, porque los tribuna-
tenido debe ser puesto de inmediato a disposi-
les administrativos no tienen asignada función
ción del juez competente para que determine
jurisdiccional. Tres, porque permitir el control
si procede la detención judicial o la liberación
difuso de constitucionalidad a los tribunales
del procesado.
administrativos afectaba el sistema de control
dual de jurisdicción constitucional estableci- 6. Pronunciamientos del Tribunal
da en la Constitución. El precedente vinculante Constitucional respecto al ampa-
dictado en la STC Exp. N° 03741-2004-AA/ ro contra amparo
TC tuvo vigor durante casi ocho años. Queda
constancia que el hecho de que se haya dejado 6.1. STC Exp. N° 04853-2004-PA/TC (am-
sin efecto el referido precedente vinculante “no paro contra amparo)
significa que quede sin efecto el principio se- Es posible interponer un amparo contra una
gún el cual el derecho manifiestamente incons- resolución estimatoria ilegítima de segun-
titucional ha de ser tenido como derecho invá- do grado emitida por el Poder Judicial donde
lido. Este es un principio general del derecho se haya producido la violación manifiesta del
que estará vigente mientras vigente esté el prin- contenido constitucionalmente protegido de
cipio de normatividad de la Constitución”21. los derechos fundamentales o haya sido dicta-
da al margen de la doctrina jurisprudencial del
5. Jurisprudencia constitucional res-
TC, convirtiéndola en inconstitucional. Tam-
pecto al proceso de hábeas cor-
pus, el derecho a la libertad per- bién contra la resolución desestimatoria de la
sonal y los derechos conexos demanda, emitida en segundo grado en el Po-
der Judicial, cuando se ha violado de modo
5.1. SSTC Exps. N°s 00349-2004-AA/TC y manifiesto el derecho fundamental de un ter-
03482-2005-PHC/TC (sobre la libertad
cero legitimado cuya intervención en el proce-
de tránsito y rejas en las vías públicas)
so fue rechazada o en el que no haya solicita-
5.2. SSTC Exps. N°s 03771-2004-PHC/ do intervenir por desconocer de dicho trámite.
TC y 01257-2005-PHC/TC (derecho
6.2. STC Exp. N° 04650-2007-PA/TC (regla
a la duración razonable de la deten-
procesal del amparo contra amparo)
ción preventiva y ante la situación de
eventual conducta obstruccionista por Cuando se trata del derecho al trabajo, el juez
parte del procesado, respectivamente) no admitirá a trámite un proceso de amparo
contra otro proceso de amparo, mientras no
5.3. STC Exp. N° 06423-2007-PHC/TC
verifique que el empleador ha cumplido con
(plazo estrictamente necesario de la
reponer al trabajador, el juez rechaza, impo-
detención policial)
ne los apremios de los artículos 22 y 59 del
Respecto al derecho al tránsito y a la coloca- CPCo., e incluso y en su caso, costas, si el de-
ción de rejas en las calles y vías públicas, se mandante ha actuado con temeridad procesal.
21 Ibídem, p. 373.
22 Ibídem, p. 521.
23 Ver artículo 3 de la Constitución Política.
198
EDICIÓN ESPECIAL
200
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Por otra parte, el artículo 95 de la Norma Fun- el artículo 10, y aprovechando el poder, el
damental dispone que el mandato legislativo sueldo, los dos sueldos íntegros de julio y di-
sea irrenunciable. Según su texto, entonces, el ciembre, el carro, el chofer, la seguridad, la
único cargo del que no se puede renunciar, es gasolina, el estatus, los congresos naciona-
el de congresista. Esta es una concepción muy les e internacionales, etcétera, etcétera, ya es
antigua pues data de la misma Revolución una cuestión de moralidad, de ética, de prin-
Francesa y subsiste por razones políticas, mas cipios y de valores personales. Solamente re-
no jurídicas. Se trataría, incluso, de una dis- feriré que cuando la doctora Delia Revoredo
posición que en palabras del profesor alemán Marsano formuló renuncia al cargo, siete me-
Otto Bachof24, diríase, “una norma constitu- ses después de vencido su mandato, esta fue
cional (en lo formal, pues corre inserta en la aceptada por el presidente del TC, Javier Alva
Constitución) inconstitucional (materialmen- Orlandini, sin oponer objeción alguna.
te), pues viola un principio constitucional que
En cambio, cuando el autor de este artículo
aparece en el mismo texto constitucional, en
renunció, también ocho meses después de
el artículo 23, in fine, cuando expresa: “Na-
vencido el mandato, tanto Oscar Urviola Hani
die está obligado a prestar trabajo sin su libre
como el Pleno de aquel entonces, rechazaron
consentimiento”.
la renuncia y tuvo que ser el Poder Judicial
Si un magistrado ya cumplió su mandato de que vía un proceso constitucional de amparo
cinco años y el TC ya dio el preaviso con seis le diera una lección al mismísimo TC, dicién-
meses de anticipación al Congreso de la Re- dole que la renuncia era legítima, absoluta-
pública25 anunciándole el vencimiento del mente constitucional y que rechazarla supo-
plazo de uno o más magistrados, y este es re- nía una violación a derechos fundamentales.
nuente a cumplir el mandamiento constitucio- El mismo Óscar Urviola, por mandato judi-
nal para convocar a un concurso o utilizar el cial tuvo que firmar la Resolución Adminis-
mecanismo que fuere más adecuado para se- trativa N° 00205-2015-P/TC aceptando la re-
leccionar y elegir a su(s) relevo(s), aquí ya nuncia del suscrito.
hay una flagrancia de inconstitucionalidad
Quede constancia, finalmente, que la renun-
inaceptable. Este mismo artículo 10 (es decir,
cia puede prosperar inclusive, antes del ven-
el que refiere que, con seis meses de anticipa-
cimiento del mandato. Enfermedad, viaje u
ción, el TC debe dirigirse al Congreso solici-
otros asuntos personales, profesionales o fa-
tándole inicie el procedimiento de elección de
miliares, pueden aparecerse al magistrado,
nuevos magistrados, establece que (si hubiese
que impulsen a tener que presentar la renun-
alguna demora) prevé que los magistrados del
cia. Ella, inobjetablemente, debiera ser acep-
TC continúan en el ejercicio de sus funciones
tada. Claro, lo más deseable es que estas co-
hasta que hayan tomado posesión quienes hu-
sas no ocurran y que los magistrados cumplan
bieren de sucederles. Claro, hay racionalidad
a cabalidad sus cinco años de trabajo previs-
en la norma.
tos en la Carta Magna. Como la elección pro-
Si la demora en la elección, el juramento, viene del Congreso de la República, la renun-
y los demás trámites burocráticos y políti- cia deberá presentarse ante el presidente del
cos, fuese un mes y medio, tres meses o cin- Congreso y por una cuestión de equidad, tam-
co meses, habrá que aguardar. Pero, quedar- bién y en paralelo, ante el presidente del TC.
se en el cargo, interpretando interesadamente Así lo hizo el autor de este artículo.
Contando con información de primera mano, el autor hace un prolijo repaso por las prin-
cipales decisiones en las que el Tribunal Constitucional se ha referido a la noción de “con-
RESUMEN
tenido constitucionalmente protegido”. Así, explica cómo el Tribunal ha pasado de con-
fundir esta noción con la idea equívoca de “contenido esencial” de los derechos, pasando
por entenderla ya propiamente como una causal de improcedencia, hasta la reciente cons-
trucción de una especie de examen (“análisis de relevancia iusfundamental”) que ayuda a
reconocer si una demanda realmente alude a dicho ámbito prima facie protegido.
* Abogado por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Magíster en Derecho Constitucional con estudios de
doctorado por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Asesor jurisdiccional del Tribunal Constitucional.
202
EDICIÓN ESPECIAL
Ahora bien, creo que el número 100 de Gace- Para abordar ello vamos a dividir nuestro tra-
ta Constitucional no solo es una buena opor- bajo en tres partes: una inicial en la que ex-
tunidad para agradecer personalmente, sino plicaremos en contexto en que apareció este
también para relevar el enorme aporte de la término, tanto en el Código Procesal Consti-
revista al entendimiento y al debate de los tucional como en la discusión local; posterior-
más importantes temas vinculados con el De- mente, analizaremos cuál fue el tratamiento
recho Constitucional y la jurisprudencia de recibido por esta noción en la jurisprudencia
nuestro más calificado intérprete de la cons- del Tribunal Constitucional; finalmente, indi-
titucionalidad. Como podrá revisar a quien le caremos en qué consiste el novedoso “análi-
genere interés, muchas de las discusiones, crí- sis de relevancia iusfudamental”, incorporado
ticas, ideas fuerza y materias que en su mo- recientemente por la jurisprudencia del men-
mento fueron impulsadas desde la revista ac- cionado órgano colegiado.
tualmente constituyen consensos de nuestra
comunidad académica y profesional, e inclu- I. APARICIÓN Y DISCUSIÓN EN TOR-
so forman parte de la jurisprudencia constitu- NO DE LA NOCIÓN DE “CONTENI-
DO CONSTITUCIONALMENTE PRO-
cional (por haber ingresado a esta o por ha-
TEGIDO”
berse generado cambios a partir de las críticas
expresadas en la revista). Adicionalmente, lo La expresión “contenido constitucionalmente
anterior ha permitido dar a conocer la existen- protegido” llamó la atención de la academia
cia de nuevos e indiscutibles referentes en las y de los operadores por haber sido incluida
materias abordadas. como causal de improcedencia en el Código
Procesal Constitucional.
Como quedará claro, la mía puede no ser una
opinión imparcial. Por ello, ante la posible En efecto, los artículos 5, inciso 1, y 38 del
duda del lector, solo me animaría a lanzar al Código, que hacen referencia a esta noción,
aire un par de preguntas, que ayudarían a con- señalan lo siguiente:
firmar o desbaratar lo que digo. Por ejemplo, “Artículo 5.- Causales de improcedencia
podríamos preguntarnos si actualmente algu-
na otra revista del rubro ha podido alcanzar No proceden los procesos constituciona-
a Gaceta Constitucional en su rol y protago- les cuando:
nismo; asimismo, cuestionarnos si acaso no 1. Los hechos y el petitorio de la demanda
es posible encontrar siempre un buen y escla- no están referidos en forma directa al con-
recedor artículo publicado en la revista sobre tenido constitucionalmente protegido del
los temas más importantes que se han veni- derecho invocado (…)”.
do discutiendo en el ámbito constitucional y
“Artículo 38.- Derechos no protegidos
procesal constitucional. Las respuestas a es-
tas preguntas seguramente darán cuenta me- No procede el amparo en defensa de un
jor que yo sobre la importancia y la trascen- derecho que carece de sustento constitu-
dencia de la revista. cional directo o que no está referido a los
aspectos constitucionalmente protegidos
En fin, expresado esto, que no quería de-
del mismo” (las cursivas son nuestras).
jar pasar en esta magnífica oportunidad, en-
tremos ya en la materia sobre la que nos he- Estas disposiciones surgieron como conse-
mos comprometido a escribir: ¿cómo ha sido cuencia del reclamo generalizado debido a
la evolución de la noción de “contenido cons- que los procesos constitucionales –y en es-
titucionalmente protegido” de los derechos pecial el amparo– estaban siendo distorsiona-
fundamentales en la jurisprudencia del Tribu- dos por su mal uso, pues a esta vía se lleva-
nal Constitucional? ba asuntos de rango legal e incluso negocial
1 ABAD YUPANQUI, Samuel y otros. Código Procesal Constitucional. Estudio introductorio, Exposición de motivos,
Dictámenes e Índice analítico. Segunda edición actualizada, Palestra, Lima, 2005, p. 70.
2 Cfr. BOREA ODRÍA, Alberto. La evolución de las garantías constitucionales. Grijley, Lima, 1996, pp. 51-52;
RODRÍGUEZ SANTANDER, Roger. “Amparo y residualidad. Las interpretaciones (subjetiva y objetiva) del ar-
tículo 5.2 del Código Procesal Constitucional peruano”. En: Justicia Constitucional. Año I, N° 2, agosto-diciembre
de 2005, pp. 98 y 99.
204
EDICIÓN ESPECIAL
En el referido contexto, y como explicaremos Por nuestra parte, ya en otras ocasiones he-
con mayor detalle luego, el Tribunal Cons- mos insistido suficientemente en que esta
titucional también identificó las nociones asimilación es innecesaria y errónea6. Entre
de “contenido constitucionalmente protegi- otras consideraciones, es innecesaria porque
do” y de “contenido esencial”, considerando las controversias iusfundamentales (trátese
que “todo ámbito constitucionalmente pro- de restricciones de derechos o de colisiones
tegido de un derecho fundamental se recon- entre estos) pueden resolverse sin problema
duce en mayor o menor grado a su conteni- sin necesidad de hacer referencia a supues-
do esencial” (STC Exp. N° 01417-2005-PA/ tas “esencias” de los derechos; y es errónea
TC, f. j. 21, el resaltado es nuestro)4. El máxi- porque existen derechos de los cuales clara-
mo intérprete resolvió así siguiendo algunos mente no puede predicarse una “contenido
postulados del profesor español Manuel Me- esencial” o “núcleo duro”, asimismo, por-
dina Guerrero, quien en un texto bastante di- que cuando la doctrina se refiere a este su-
fundido en nuestro medio5 hizo referencia a puesto “contenido esencial” está aludiendo
la expresión “contenido constitucionalmente a un análisis sobre fondo de una controver-
protegido”, el cual estaría compuesto por un sia, y no a la fase de admisión de la deman-
contenido “esencial” de los derechos, uno “no da constitucional. Valga mencionar que esta
esencial” y otro “adicional”. incorrección de homologar ambas nociones
3 En efecto, durante los años siguientes a la vigencia del Código, algunos autores consideraron que con esta noción el
legislador se aproximó a sus planteamientos sobre el contenido único de los derechos constitucionales (v. gr., el pro-
fesor Luis Castillo); otros, siguiendo sus concepciones sobre el contenido iusfundamental, asimilaron la noción de
“contenido constitucionalmente protegido” con la de “contenido esencial” (p. ej. Carlos Mesía).
4 Incluso ha llegado a referirse al “contenido esencial constitucionalmente protegido” de los derechos; vide SSTC
Exps. N°s 00050-2004-AI/TC y otros (acumulados), f. j. 73, y 02273-2005-PHC/TC, f. j. 9.
5 MEDINA GUERRERO, Manuel. La vinculación negativa del legislador a los derechos fundamentales. McGraw-
Hill, Madrid, 1996.
6 Con mayor detalle en: SOSA SACIO, Juan Manuel. “Tutela del ‘contenido constitucionalmente protegido’ de los de-
rechos fundamentales a través del proceso de amparo” En: La procedencia en el proceso de amparo. Gaceta Jurídi-
ca, Lima, 2012. Incluso opinamos a favor de esta diferenciación apenas entró en vigencia el Código Procesal Cons-
titucional: SOSA SACIO, Juan Manuel. “Notas sobre el contenido constitucionalmente protegido de los derechos
fundamentales” En: Actualidad Jurídica. N° 134, Gaceta Jurídica, Lima, enero de 2005.
7 Es el caso del profesor Samuel Abad, distinción que no se encontraba en sus primeros textos. Cfr. ABAD YUPANQUI,
Samuel. “Los derechos tutelados por el amparo. El debate respecto a su contenido constitucionalmente protegido”.
En: Revista Institucional. N° 8, Academia de la Magistratura, Lima, 2008.
8 Tal es el caso del profesor y juez del Tribunal Constitucional Eloy Espinosa-Saldaña, quien, en varios votos singu-
lares, viene explicando con claridad este asunto; véase, por ejemplo, su voto y fundamento de voto contenido en la
STC Exp. N° 06992-2013-PA/TC.
9 SSTC Exps. N°s 02727-2002-AA/TC, f. j. 5; 02302-2003-AA/TC, f. j. 13; 00004-2004-AI/TC y otros (acumulados),
f. j. 19; 01941-2002-AA/TC, f. j. 5.
10 Cfr. SSTC Exps. N°s 00410-2002-AA/TC, f. j. 8; 00825-2003-AA/TC, f. j. 3; 00010-2002-AI/TC, f. j. 165; 01594-
2003-HC/TC, f. j. 19; 00017-2003-AI/TC, f. j. 102; y 00019-2005-PI/TC, f. j. 27.
11 SSTC Exps. N°s 00858-2003-AA/TC, f. j. 12; 00976-2001-AA/TC, f. j. 7; 02488-2002-HC/TC, f. j. 15; 00010-
2001-AI/TC, f. j. 10 y ss.; 00010-2002-AI/TC, f. j. 122; 02974-2003-AA/TC, f. j. 2; 00866-2000-AA/TC, f. j. 2.
12 SSTC Exps. N°s 00825-2003-AA/TC, f. j. 6; 01934-2003-HC/TC; 01219-2003-HD/TC; 01797-2002-HD/TC;
00015-2001-AI/TC; 01323-2002-HC/TC, f. j. 2; 00018-2001-AI/TC, f. j. 11.
13 STC Exp. N° 02050-2002-AA/TC, f. j. 22.
206
EDICIÓN ESPECIAL
14 Tomamos aquí lo señalado antes en SOSA SACIO, Juan Manuel. “Tutela del ‘contenido constitucionalmente prote-
gido’ de los derechos fundamentales a través del proceso de amparo”. Ob. cit., p. 23 y ss.
15 En el mismo sentido, indicó que: “Existen determinados derechos de origen internacional, legal, consuetudinario,
administrativo, contractual, etc., que carecen de fundamento constitucional directo, y que, consecuentemente, no son
susceptibles de ser protegidos a través del proceso de amparo” (STC Exp. N° 01417-2005-PA/TC, f. j. 9).
16 STC Exp. N° 01417-2005-PA/TC, f. j. 9.
17 Ibídem, f. j. 27.
derecho fundamental) y (2) si pertenecen di- contenido definitivo): que se encuentre con
rectamente al “contenido esencial” del dere- interpretaciones vinculantes19 o reglas de pre-
cho constitucional. cedencia20 establecidas por el Tribunal Cons-
titucional referida al “contenido esencial” o
Con respecto a lo primero, estamos comple-
definitivo de un derecho. En tal caso, en efec-
tamente de acuerdo. El contenido constitu-
to, no es necesario que el juez llegue al final
cional de un derecho implica la adscripción
del proceso para que conozca el contenido de-
interpretativa de significados a una disposi-
finitivo de un derecho, pues el intérprete ca-
ción de derecho fundamental18. Respecto a
lificado de la constitucionalidad ya lo habría
lo segundo, discrepamos abiertamente: re-
determinado anteriormente. En este supuesto
sulta excesivo, tanto para el juez como para
–que, por cierto, no es al que aludía el Tribu-
el demandante, exigir al inicio del proce-
nal Constitucional– y solo si se trata de un
so –es decir, al examinar la procedencia de caso indubitable, sería posible el rechazo in
la demanda– que se verifique que el dere- limine de la demanda.
cho invocado esté directamente relacionado
al “contenido esencial” del derecho, pues la 3. El contenido constitucionalmente
determinación de este contenido (definitivo) protegido como establecimiento
solo se obtendrá al final del proceso (obte- de una relación jurídica iusfunda-
niéndose con ello una decisión sobre el fon- mental
do de lo demandado). Exigir al juez conocer El Colegiado Constitucional, en diversa ju-
el “contenido esencial” en la fase de admi- risprudencia, ha señalado que la procedencia
sión de la demanda no solo sería contrario de la demanda constitucional requiere que se
al derecho de acceso a la justicia constitu- establezca la existencia de: un titular de un
cional, sino incluso pondría en riesgo la co- derecho fundamental, una obligación iusfun-
rrecta actividad interpretativa del juez (pro- damental y un obligado quien lesiona o ame-
moviéndose que adelanto su opinión sobre el naza el derecho. Esa es, pues, básicamente la
fondo de la demanda). estructura de un derecho constitucional; com-
puesta por titular, obligado y mandato21.
No obstante lo señalado, existe una excep-
ción que sí habilitaría al juez constitucional a Una resolución emblemática al respecto es
rechazar la procedencia de una demanda por la RTC Exp. N° 01581-2010-PHD. En ella el
no referirse al “contenido esencial” (rectius, Colegiado ha expresado que:
18 Hemos explicado esto con sencillez en: Guía teórico-práctica para utilizar los criterios interpretativos del Tribunal
Constitucional. Gaceta Jurídica, Lima, 2011, p. 134.
19 Por ejemplo, si el contenido protegido de un derecho ha sido delimitado a través de precedentes constitucionales de
acuerdo con el artículo VII del Código Procesal Constitucional, doctrina jurisprudencial consolidada según el ar-
tículo VI del Título Preliminar del mismo Código, e incluso fundamentos de sentencias de inconstitucionalidad que
formen parte de su ratio decidendi.
20 Las “relaciones de precedencia” aluden a prevalencia, atendiendo a las circunstancias concretas del caso, de un de-
recho fundamental (rectius, principio constitucional) frente a otro (Cfr. ALEXY, Robert. Teoría de los derechos fun-
damentales. Segunda edición, Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, Madrid, 2008, pp. 71-76). Estas ge-
neran reglas de precedencia, siendo que, ante iguales o equivalentes circunstancias, habría quedado determinado qué
derecho tiene legítima protección y cuál no. Por ejemplo, el Tribunal ha enumerado algunas reglas de precedencia en
la STC Exp. N° 02877-2005-PHC/TC, f. j. 30.
21 Cfr. BERNAL PULIDO, Carlos. El principio de proporcionalidad y los derechos fundamentales. Centro de Estudios
Políticos y Constitucionales, Madrid, 2003, p. 75 y ss.
208
EDICIÓN ESPECIAL
Sin embargo, en mérito de los principio pro actione (RTC Exp. N° 00250-2008-PHD/TC, f. j. 5; STC Exp.
N° 02302-2003-AA/TC, f. j. 3) y favor procesum (artículo III del Título Preliminar del Código), si la titularidad del
derecho no hubiera podido ser del todo acreditada al inicio y la duda pudiera ser resuelta en el seno del proceso, o
si la afectación iusfundamental no es clara y pudiera ser determinada a través de una valoración no compleja de
pruebas, debería admitirse a trámite la demanda y las dudas ser absueltas en el transcurso del proceso (cfr. RTC
Exp. N° 02682-2005-PA/TC, f. j. 6 y ss; STC Exp. N° 04762-2007-PA/TC, ff. jj. 9-12).
25 Cfr. RTC Exp. N° 08108-2005-PA/TC, f. j. 3: “Que en todo proceso, para que la relación jurídico- procesal sea vá-
lida, es necesario que se cumpla con los presupuestos procesales y las condiciones de la acción. Así, será necesario
que en la etapa de calificación de la demanda se verifique la existencia de la capacidad procesal, la competencia y
los requisitos de la demanda, componentes de los presupuestos procesales, así como la legitimidad procesal activa y
el interés para obrar, componentes de las condiciones de la acción, a efectos de un íter procedimental válido que lle-
ve a una sentencia de mérito”.
26 Examen utilizado especialmente por la jurisdicción constitucional alemana. Vide BRAGUE CAMAZANO, Joaquín.
Los límites a los derechos fundamentales. Dykinson, Madrid, 2004, pp. 96 y 97.
27 STC Exp. N° 00665-2007-PA/TC, f. j. 5.
210
EDICIÓN ESPECIAL
28 Esta posición, valga explicitarlo, es tributaria de la concepción alexiana de derechos fundamentales, entendidos
“como un todo”, esto es, como un “haz de posiciones y normas vinculadas interpretativamente a una disposición de
derecho fundamental”. Vide ALEXY, Robert. Teoría de los derechos fundamentales. Ob. cit., p. 224 y ss.; BERNAL
PULIDO, Carlos. Ob. cit., p. 76.
29 SOSA SACIO, Juan Manuel. “¿Son iguales las nociones de contenido de los derechos fundamentales y de conteni-
do constitucionalmente protegido? Una respuesta contramayoritaria” En: Jus Doctrina. Año 1, N° 3, Grijley, Lima,
2007, p. 333 y ss.
protegido, verificándose de esa forma que la que un derecho se encuentre regulado en una
discusión en verdad tiene relevancia constitu- ley, reglamento o acto de particulares no im-
cional30. Felizmente, esto ha sido reconocido plica per se que carezca de fundamentalidad
recientemente por el Tribunal Constitucional o relevancia constitucional (...) pues existe un
en el denominado “análisis de la relevancia considerable número de casos en los que la ley,
iusfundamental”. el reglamento o el acto entre particulares tan
solo desarrollan el contenido de un derecho
5. El sustento constitucional del de- fundamental de manera que este contenido,
recho invocado: Las nociones de por tener relevancia constitucional, sí es sus-
“fundamentabilidad” y “relevancia
ceptible de protección en la jurisdicción cons-
constitucional”
titucional”32. Esto significa, como lo explica-
Resoluciones también relevantes a efectos del mos en otro lugar33, que los derechos deben
tema que venimos desarrollando son las re- contar con “sustento constitucional directo”.
caídas en los Exps. N°s 03390-2008-PA/TC y
Por otra parte, el Tribunal ha señalado que
03227-2007-PA/TC. En estas el Tribunal se-
la “relevancia constitucional” o “carácter de
ñaló que existen dos supuestos excluidos del
fundamentalidad” de un contenido iusfunda-
amparo: (1) las pretensiones sin asidero cons-
mental se determina “por la estricta vincula-
titucional (derechos sin “fundamentalidad” o
ción entre un derecho y la dignidad huma-
sin “relevancia constitucional”), y (2) los de-
na”34. Esta exigencia, si bien es atendible, no
rechos fundamentales que no deben ser tute-
es precisa, ya que no todos los derechos cons-
lados a través del amparo, sino mediante los
titucionales tienen necesariamente relación
procesos ordinarios.
con la dignidad humana35, ni ello es un requi-
Respecto a lo primero, el Colegiado ha expli- sito (material o procesal) para obtener tutela
cado que a través del proceso de amparo no mediante el amparo. A estos efectos, hemos
pueden ser dilucidadas “pretensiones relacio- señalado ya que el carácter (directamente)
nadas con otro tipo de derechos (de origen le- constitucional de un derecho corresponde, bá-
gal, administrativo, etc.)”31. El Tribunal hizo sicamente, a su correcta adscripción a dispo-
también la siguiente salvedad: “[e]l hecho de siciones constitucionales36.
30 Como lo recomendamos al formular algunos “pasos para determinar el contenido constitucionalmente protegido de
los derechos fundamentales”, esto en: SOSA SACIO, Juan Manuel. “Ámbitos de los derechos constitucionales que
no pueden ser tutelados por el proceso de amparo. Consideraciones a partir de la jurisprudencia del Tribunal Consti-
tucional”. En: Actualidad Jurídica. N° 175, Gaceta Jurídica, Lima, junio de 2008, pp. 214-216, y “¿Son iguales las
nociones de contenido…?”. Ob. cit., pp. 333 y 334.
31 RRTC Exps. N°s 03227-2007-PA/TC, f. j. 3; y 03390-2008-PA/TC, f. j. 3.
32 RTC Exp. N° 03227-2007-PA/TC, f. j. 3. Cfr. la RTC Exp. N° 09096-2006-PA/TC, f. j. 2: “[E]l proceso de amparo
solo protege derechos constitucionales (...). [N]o se debe extender la protección de los procesos constitucionales a
situaciones que guardan relación indirecta con un derecho fundamental o que se derivan de él, pero que no consti-
tuyen un problema de constitucionalidad, toda vez que tienen su origen y fundamento en una norma de jerarquía le-
gal”.
33 “Tutela del ‘contenido constitucionalmente protegido’…” Ob. cit., p. 21 y ss.
34 RTC Exp. N° 03390-2008-PA/TC, f. j. 3. Cfr. también, sobre esta referencia a la dignidad para determinar el conte-
nido iusfundamental, STC Exp. N° 02273-2005-PHC/TC, f. j. 10.
35 Nos hemos referido a esto en “Derechos constitucionales no enumerados y derecho al libre desarrollo de la persona-
lidad”. En: SÁENZ DÁVALOS, Luis (Coordinador). Derechos constitucionales no escritos reconocidos por el Tri-
bunal Constitucional. Gaceta Jurídica, Lima, 2009, pp. 107, 122 y 123.
36 Vide supra, nota 17.
212
EDICIÓN ESPECIAL
la etapa de admisión la “determinación final las premisas fácticas. Así, a efectos de la cau-
o definitiva de la concreción normativa funda- sal de improcedencia que venimos tratando,
mental”, pues ello más bien correspondería “a tendríamos casos en los que podría existir di-
la etapa decisoria final, luego de examinadas a ficultad para saber cuál disposición iusfunda-
profundidad las razones a favor y en contra de mental aplicar o cómo interpretar este tipo de
la determinación del contenido iusfundamental disposiciones (premisas normativas); o para
en uno u otro sentido”41. conocer la ocurrencia de hechos o para subsu-
mir correctamente estos en supuestos de he-
Si hemos logrado entender, a pesar de la en-
cho correspondientes a normas iusfundamen-
gorrosa redacción de esta resolución, en los
tales (premisas fácticas).
“casos fáciles” –en los que según el Tribu-
nal no habría problema en subsumir los datos En el contexto anotado, ante supuestas difi-
fácticos del caso en la norma de derecho fun- cultades referidas a elementos normativos o
damental– podría aplicarse sin problema la fácticos vinculados a la causal de improce-
regla de improcedencia establecida en el ar- dencia establecida en los artículos 5, inciso 1,
tículo 5, inciso 1, del Código; empero, si se y 38 del Código, consideramos que las posi-
trata de un “caso difícil” –en el que la redac- bilidades para los jueces constitucionales son
ción abierta de la disposición que reconoce básicamente tres: (1) si existen dudas sobre la
un derecho haría difícil establecer si este fue disposición de derecho constitucional a utili-
afectado– el contenido protegido por el dere- zar o a la interpretación del contenido de un
cho solamente podría ser determinado a tra- derecho, que pudiera resolverse en el análisis
vés de un análisis de fondo del caso. de fondo, la demanda debería admitirse gra-
cias al principio pro actione, evitándose con
De inicio, lo señalado por el Tribunal presen-
ello una posible desprotección del demandan-
ta un grave problema: el primer supuesto (un
te; (2) si el caso genera dudas que requieran
“caso fácil”, según el Tribunal) se refiere, por
actividad probatoria (intensa inclusive) res-
decirlo de modo muy simple, a la adscrip-
pecto de elementos fácticos, debería admitir-
ción de hechos en el derecho (en el “ámbito
se el caso si no existe una vía ordinaria a la
normativo” o “supuesto de hecho” iusfunda-
que se pueda acudir y obtener una tutela sa-
mental), mientras que el segundo (“caso difí-
tisfactoria; (3) si el caso genera dudas respec-
cil”, según el Colegiado) se refiere a la posi-
to de hechos por probar y el juez considera
ble afectación del derecho constitucional. Los
que estas no podrían ser resueltas en el ampa-
temas obviamente son distintos. Lo prime-
ro, correspondería declarar la improcedencia
ro podría referirse, por ejemplo, a si los he-
de la demanda, ya que no se habría acredita-
chos del caso acreditan que el demandante es
do la lesión. Descartamos, asimismo, la posi-
titular del derecho que invoca; mientras que
bilidad de que existan casos en los que el juez
lo segundo (si se lesionó o no el derecho) es
pueda declarar la improcedencia de la deman-
realmente un análisis de fondo. La diferencia
da debido a que considera imposible resolver
no se refiere a la “dificultad” del caso, sino al
una duda referida a la interpretación o la apli-
análisis que es exigido.
cación de normas, pues el juez tiene el deber
Si el Tribunal quería referirse a la “dificultad” de conocer el Derecho (iura novit curia) y so-
del caso debió explicar a qué tipo de proble- bre él pende el mandato constitucional de no
ma hacía referencia, por ejemplo, si la dificul- dejar de administrar justicia por vacío o defi-
tad era respecto a las premisas normativas o a ciencia de la Ley.
41 Ibídem, f. j. 9.
214
EDICIÓN ESPECIAL
protegido por los derechos fundamentales, Constitucional en las que se consolida la con-
este no puede modificar los supuestos de he- cepción de la noción de “contenido constitu-
cho cobijados por ellos43. Si bien a veces pue- cionalmente protegido” como causal de im-
de ser difícil calificar como iusfundamental procedencia del amparo, brindándose incluso
lo expuesto en la demanda, ante ello lo que una especie de examen o test que facilita a
correspondería es, o bien excluir esa preten- los operadores del Derecho el reconocer si en
sión de la protección que otorga amparo por una demanda la pretensión o los hechos invo-
no formar parte del contenido protegido por cados realmente están referidos al “conteni-
el derecho; o, si genera una duda razonable en do constitucionalmente protegido” de los de-
el juez, ser admitida a trámite para realizar un rechos que se alegan afectados o amenazados.
análisis de fondo, aplacando la duda. Igual- Al respecto, si bien aún se aprecian algunas
mente si la duda es con respecto al significa- decisiones en las que se hace alusión a la ve-
do o aplicación de las normas iusfundamen- tusta idea de “contenido esencial” (por ejem-
tales (o del Derecho aplicable en general), la plo la STC Exp. N° 0020-2012-PI, f. j. 15 y
demanda debería admitirse para que procurar ss.), el Tribunal en realidad viene consolidan-
aclarar la controversia normativa en el decur- do su perspectiva de entender que los dere-
so del proceso.
chos tienen un contenido inicialmente pro-
En suma, esta decisión –con pretensiones tegido (o “contenido constitucionalmente
analíticas– plantea dos supuestos obvios (los protegido”), que puede ser intervenido legí-
casos claramente vinculados al contenido del timamente, siempre que exista una justifica-
derecho deben admitirse y los que claramente ción con suficiente sustento constitucional.
no lo están deben declararse improcedentes);
Precisamente, en las recientes RTC Exp.
uno interesante (la demanda debe admitir-
N° 02988-2013-AA y ATC Exp. N° 04490-
se a trámite si lo alegado ingresa prima facie
2013-PA se da un importante avance en este
al ámbito garantizado por el derecho, inde-
sentido, pues en ellas se racionaliza, a través
pendientemente del resultado final), y uno
de una especie de test (“análisis de relevancia
último bastante deficiente, que incluso con-
constitucional”), la actividad de verificar si una
tradice la finalidad de esta causal de improce-
demanda alude o no al “contenido constitu-
dencia –a saber, rechazar asuntos que carecen
cionalmente protegido” del derecho que invoca.
de relevancia constitucional– (según el Tribu-
nal, la demanda debería admitirse aunque lo Este examen, que sin duda puede ser perfec-
alegado no ingrese prima facie al contenido cionado, explicita algunas ideas ya expresa-
del derecho, si luego pudiera hacerlo). das tanto por el Tribunal Constitucional (en
algunas resoluciones reseñadas supra)44 y por
III. EL ÚLTIMO Y MÁS ACABADO APORTE: la doctrina. En resumidas cuentas, a través de
EL “ANÁLISIS DE RELEVANCIA este “análisis de relevancia iusfundamental”
IUSFUNDAMENTAL” el Tribunal señala que determinar el conteni-
Finalmente, corresponde hacer referen- do constitucionalmente protegido de un de-
cia a recientes resoluciones del Tribunal recho implica: (1) verificar que existe una
43 Ahora bien, el Tribunal puede reconocer nuevos contenidos protegidos en los derechos constitucionales, e incluso
reconocer nuevos derechos fundamentales; sin embargo, las consideraciones para ello son diversas (básicamente so-
ciales, históricas y hasta jurídico-políticas), y no tienen estrecha relación con los datos específicos del caso ni con la
ponderación de principios.
44 Cfr. SSTC Exps. N°s 00665-2007-PA/TC, f. j. 5.a y b; 06218-2007-PHC/TC, f. j. 10; y 01417-2005-PA/TC,
ff. jj. 25-27; RRTC Exps. N°s 01581-2010-PHD/TC, f. j. 6; y 03227-2007-PA/TC, f. j. 3.
216
EDICIÓN ESPECIAL
45 V. gr. “¿Son iguales las nociones de contenido…? Ob. cit. “Tutela del ‘contenido constitucionalmente protegido’…”.
Ob. cit.
El autor realiza un análisis pormenorizado del denominado caso Epensa. Como se recuer-
RESUMEN
da, existe una demanda de amparo interpuesta por algunos periodistas contra el grupo El
Comercio, en tanto este último, al comprar las acciones de Epensa, estaría “acaparando”
el mercado de prensa escrita en nuestro país y vulnerando el derecho a la pluralidad de
información. El autor propone una solución a la controversia, logrando con ello una
valiosa contribución a la resolución de un caso inédito en nuestra justicia constitucional.
* Este artículo forma parte de la tesis del autor para optar el grado de magíster en Derecho de la Empresa por la
Pontificia Universidad Católica del Perú.
** Abogado por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Coordinador ejecutivo de Gaceta Constitucional.
su empresa de soporte logístico Alfa Beta Sis- Con esta operación el Grupo El Comercio
temas (Alfa-Beta Sistemas S.A.C.) compar- se adueña del Grupo Epensa, asumiendo el
tían el mismo accionariado, el cual se compo- dominio del 77.86 % del mercado de venta
nía de la siguiente manera: de diarios. De esta forma, las publicaciones
El Comercio, Perú 21, Gestión, Trome, De-
Participación por (de propiedad de El Comercio), y aho-
Accionista
en el capital social
ra Correo, Ajá y El Bocón (de propiedad de
Enrique Agois Paulsen 34 % Epensa) vienen siendo comercializados por
Marcia Mindreau Navarrete de Agois 20 % un mismo grupo. Esta situación conlleva una
Olga Banchero de Salazar 20 % altísima concentración en la venta y comer-
cialización de periódicos que sería contraria
Luis Agois Banchero 11 %
al orden constitucional y que afectaría seria-
Rossana Agois Banchero 5% mente el mercado de medios impresos en el
María Agois Banchero 5% Perú.
Carlos Agois Banchero 5%
II. LA PALABRA DE EL COMERCIO
A mediados de 2013, los esposos Enrique El Grupo El Comercio, como parte de su des-
Agois y Marcia Mindreau deciden poner a cargo ante las críticas realizadas luego de
la venta sus respectivas acciones. En el mes confirmarse la operación bajo comento, ha
de julio de ese año, los hermanos Agois Ban- presentado a través de las editoriales del dia-
chero (el resto de accionistas) ejercen el de- rio decano2 dos argumentos en su defensa: El
recho de adquisición preferente y compran primero, que el Grupo La República, princi-
las acciones en venta correspondientes a Alfa pal opositor de la operación, viene generan-
Beta Sistemas (en su condición de Sociedad do una campaña en contra de ellos a partir de
Anónima Cerrada1). un discurso exento de fundamentación y más
bien propio de un “mal perdedor”. El segun-
Posteriormente, el 21 de agosto de 2013 la
do, que en la operación existió una división
Empresa Editora El Comercio compra el
entre la línea editorial de Epensa y la línea en-
54 % de acciones puestas en venta por Agois
cargada de la impresión y comercialización,
y Mindreau correspondiente a Epensa. Ese
siendo esta última la única comprada por El
mismo día, la empresa Servicios Especiales
Comercio, lo cual garantizaría la línea inde-
de Edición (empresa vinculada a El Comer-
pendiente de los diarios adquiridos a Epensa.
cio) compra a su vez el 54 % de Alfa Beta Sis-
temas, es decir, las acciones que fueron pre- Sobre el primero, las editoriales de El
viamente adquiridas por los hermanos Agois Comercio nos han explicado que el primer
Banchero. grupo interesado en comprar Epensa fue
1 Artículo 237 de La Ley General de Sociedades.- “El accionista que se proponga transferir total o parcialmente sus
acciones a otro accionista o a terceros debe comunicarlo a la sociedad mediante carta dirigida al gerente general, quien
lo pondrá en conocimiento de los demás accionistas dentro de los diez días siguientes, para que dentro del plazo de
treinta días puedan ejercer el derecho de adquisición preferente a prorrata de su participación en el capital (…)”.
2 Han sido varias las notas publicadas por el diario El Comercio desde el nacimiento de la operación bajo comenta-
rio. Las dos editoriales dedicadas al tema han sido “Su derecho a elegir” (publicada el 24 de octubre del 2013, cuan-
do justamente empezaron las críticas por parte del grupo La República) y “Aquí le dejamos la respuesta, señor pre-
sidente” (publicada el 5 de enero del 2014, en clara alusión a la intervención del Presidente de la República Ollanta
Humala quien sostiene en sus apariciones públicas, cada vez que le preguntan sobre la materia, que sí existe acapa-
ramiento por parte del Grupo El Comercio.
222
EDICIÓN ESPECIAL
3 QUIROGA, Aníbal. “No se puede leer la Constitución como si fuera el Código Civil”. En: Gaceta Constitucional.
Octubre 2013, Tomo 70, p. 296.
4 Ídem.
5 BULLARD, Alfredo. “Es un recurso de mal perdedor”. Correo (Lima, Perú). Publicado el 15 de septiembre del 2013.
Consulta: 1 de agosto de 2015. <http://diariocorreo.pe/politica/alfredo-bullard-sobre-criticas-a-fusion-de-e-79295/>.
6 SUMAR, Óscar. “La prensa escrita no es el único canal para enterarnos de lo que pasa en el Perú”. En: Gaceta Cons-
titucional. Octubre 2013, Tomo 70, p. 299.
224
EDICIÓN ESPECIAL
7 Ídem.
8 Puede profundizarse al respecto en el artículo de mi autoría titulado “Acaparamiento. Alcances del término desde sus
concepciones penal, competencial y constitucional” publicado en Gaceta Constitucional, Tomo 97.
9 Con fecha 18 de noviembre de 2013 un grupo de periodistas, mayormente identificados por su labor en La Re-
pública, ha presentado una demanda de amparo solicitando la nulidad del contrato entre El Comercio y Epensa. El
Cuarto Juzgado Constitucional de la Corte Superior de Justicia de Lima sigue sin resolver la causa hasta la fecha.
10 La mayoría de referencias conceptuales de este apartado han sido extraídas del Material de Estudio del curso “Temas
de Derecho de la Competencia y Derechos Intelectuales” de la Maestría en Derecho de la Empresa de la Pontificia
Universidad Católica del Perú y elaborado por el profesor del curso Dr. HebertTassano Velaochaga.
11 FLINT, Pinkas. Tratado de defensa de la libre competencia. Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica
del Perú, Lima, 2002, p. 211.
226
EDICIÓN ESPECIAL
12 El artículo 6 del Decreto Legislativo 1034, ya señalado con anterioridad en la presente tesis, señala que “el mercado
relevante está integrado por el mercado de producto y el mercado geográfico (…). El mercado de producto relevan-
te es, por lo general, el bien o servicio materia de la conducta investigada y sus sustitutos. Para el análisis de sustitu-
ción, la autoridad de competencia evaluará, entre otros factores, las preferencias de los clientes o consumidores; las
características, usos y precios de los posibles sustitutos; así como las posibilidades tecnológicas y el tiempo reque-
rido para la sustitución (…). El mercado geográfico relevante es el conjunto de zonas geográficas donde están ubi-
cadas las fuentes alternativas de aprovisionamiento del producto relevante. Para determinar las alternativas de apro-
visionamiento, la autoridad de competencia evaluará, entre otros factores, los costos de transporte y las barreras al
comercio existentes”.
13 Resolución N° 010-2004-INDECOPI/CLC, fundamento 105.
14 FLINT, Pinkas. Ob. cit., p. 212.
228
EDICIÓN ESPECIAL
Fuente: Estudio de la estructura de la prensa escrita en el Perú. Elaborado por Jorge Fernández Baca18.
“El grupo más grande, El Comercio, ha señalar, bajo este índice, la existencia de un
venido concentrando más del 70 % de mercado acaparado.
los ingresos por publicidad desde 2007,
- Índice Herfindahl-Hirschmann (HHI)
tal como se puede apreciar en el cuadro
(...). En segundo lugar se encuentra el dia- “Este índice tiene como características su
rio El Peruano, cuya participación ha ve- disminución conforme se incrementa el
nido disminuyendo de 12,5 % en 2006 número de competidores y se incremen-
a 7,4 % en 2012. En tercer lugar se en- ta cuanto más aumenta la desigualdad en-
cuentra el grupo Epensa con alrededor de tre ellos”20. El HHI se calcula sumando las
6 %, seguido muy de cerca por La Repú- cuotas de mercado de cada una de las em-
blica, cuya participación se recuperó en presas concurrente elevadas al cuadrado.
2012luego de haber caído de 6 % a poco
18 FERNÁNDEZ BACA, Jorge. Documento de discusión DD/14/01. Estudio de la estructura del mercado de la pren-
sa escrita en el Perú. Centro de Investigación de la Universidad del Pacífico. 2013.
19 Ibídem, p. 24.
20 FLINT, Pinkas. Tratado de defensa de la libre competencia. Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica
del Perú, Lima, 2002, p. 222.
21 Horizontal Merger Guidelines.U.S. Department of Justice and the Federal Trade Commission.
22 Todas las cifras relativas al caso Epensa son recogidas del Estudio de la estructura de la prensa escrita en el Perú ela-
borado por Jorge Fernández Baca ya citado con anterioridad.
23 ORGANIZACIÓN DE COOPERACIÓN Y DESARROLLO ECONÓMICOS (OCDE). Glosario de Economía In-
dustrial y Derecho de la Competencia. Madrid: Editorial Mundi-Prensa, 1995, p. 16.
24 Resolución N° 010-2004-INDECOPI/CLC, fundamento 241.
230
EDICIÓN ESPECIAL
comportamiento de las empresas para redu- y que también es posible que sus equipos para
cir o impedir que se produzca la entrada de un la elaboración de periódicos puedan ser reuti-
competidor”25. lizados para otras industrias gráficas que nos
impiden afirmar categóricamente la presencia
Tomando en cuenta lo anterior, podemos es-
de fuertes costos hundidos, por otra parte no
tablecer que sí existen barreras de corte eco-
queda duda de la existencia de una red de dis-
nómico y estratégico en el caso Epensa. Afir-
tribución altamente especializada y estableci-
mamos esto pues por definición la industria
da en todo el país.
de la prensa presenta una economía de esca-
la26 y “altos costos fijos y hundidos, y bajos Si apreciamos los siguientes gráficos pode-
costos marginales, tal como ha sido compro- mos observar que El Comercio mantiene una
bado en los estudios de Picard y Grisold”27. Si participación en las distintas regiones (Cen-
bien es cierto que por un lado, no contamos tro, Norte, Lima, Sur y Oriente) que oscila en-
con los gastos de publicidad de El Comercio, tre el 24.05 % y 60.30 %.
25 FLINT, p. 227.
26 Lam y Rojas sostienen que “las economías de escala son alcanzadas cuando el costo promedio disminuye mientras
el número de unidades producidas aumenta o se mantiene. Los costos fijos y variables de producir un ejemplar de
un periódico son relativamente altos, pero el costo total cae dramáticamente en la medida que más ejemplares son
impresos”. (LAM, Antonio y ROJAS, Carlos. La Economía de la industria de los medios de comunicación: una re-
visión bibliográfica. Universidad Diego Portales, Santiago de Chile, marzo 2009, p. 7).
27 FERNÁNDEZ BACA, Jorge. Ob. cit., p. 7.
232
EDICIÓN ESPECIAL
30 GRÁNDEZ, Pedro. El principio de proporcionalidad en la jurisprudencia del TC peruano. Palestra, Lima, 2010,
p. 9.
Finalmente, en un tercer paso, debe defi- el cumplimiento del fin, es decir, si existen
nirse si la importancia de la satisfacción otras alternativas que pueden ser tomadas en
del principio contrario justifica la res- cuenta y afecten en menor medida el derecho
tricción o la no satisfacción del otro’. La en contraposición (en este caso, la libertad de
suerte de la ponderación depende de que empresa). Se trata, entonces, de una relación
sea factible dar estos tres pasos siguiendo medio-medio.
algún plan racional”31.
“Para que una medida restrictiva de un de-
Solo si se cumplen las tres etapas del test una recho fundamental, no supere el subprin-
medida es constitucionalmente válida, y por cipio de necesidad, debe ser evidente la
ende, factible de realizar. En consecuencia, si existencia de una medida alternativa que,
uno de los análisis no llegase a superarse, el restringiendo en menor medida el derecho
test debe ser culminado. fundamental concernido, permite alcanzar
El análisis de adecuación o idoneidad, como con cuando menos igual idoneidad el fin
su nombre nos lo indica, está encaminado a constitucionalmente válido perseguido”33.
evaluar si la medida en cuestión es idónea o Vemos, entonces, que la medida de anular la
adecuada para cumplir con el objetivo que se compra de acciones de Epensa es la más gra-
plantea. Estamos, entonces, ante una relación vosa de todas, en tanto, de proceder así, es-
medio – fin. Esta finalidad debe responder a taríamos cercenando al completo el ejercicio,
la protección de un bien constitucional. en el caso en concreto, de la libertad de con-
“De acuerdo con [el subprincipio de ido- tratación realizada por las partes contractua-
neidad], toda injerencia en los derechos les. Bastará conocer una medida alternativa
fundamentales debe ser apta o capaz para que cumpla con la idoneidad correspondiente,
fomentar un objetivo constitucionalmente para evitar proseguir con el presente test.
legítimo. En otros términos este subprin- Esa medida, a nuestro entender, es la nuli-
cipio supone la legitimidad constitucional dad parcial de la compra. Si el problema ra-
del objetivo y, la suficiencia de la medida dica en el acaparameinto, y este a su vez se
utilizada”32. suscita porque El Comercio ha tomado el
De esta forma, tenemos que la medida (anular control de Epensa, entonces, limitemos la
la compra de Epensa) cumple con el análisis en compra de acciones del diario decano has-
cuestión. La medida tiene como finalidad pro- ta el máximo que le permita no convertirse
teger la libertad de expresión y el pluralismo en el accionista principal del negocio de la
informativo, que como ya hemos dicho reitera- familia Agois.
damente, son derechos fundamentales pilares
De esta manera, en vez que El Comercio
de la democracia. Asimismo, la medida está
compre el 54 % de las acciones de Epensa,
encaminada a cumplir un mandato de la Cons-
solo se le permita comprar el 19 %, pues
titución: prohibir el acaparamiento en los me-
de adquirir más, igualaría al hasta entonces
dios de comunicación. Pasemos al otro nivel.
mayor accionista minoritario de la empre-
El análisis de necesidad se enfoca en saber si sa (Olga Banchero de Salazar). Con esta so-
la medida adoptada es la menos gravosa para lución El Comercio no tomaría el control de
234
EDICIÓN ESPECIAL
La autora pone en evidencia el grave problema estructural que existe debido a la me-
dicalización de un proceso natural como el parto, a la violencia obstétrica a la que son
RESUMEN
sometidas las madres y, en especial, a la desproporcionada tasa de cesáreas innecesa-
rias que vienen ocurriendo en nuestro contexto. Explica que son muchos los derechos
fundamentales que se ven vulnerados, tanto de la madre como del niño (a la salud, al
trato digno, al libre desarrollo de la personalidad, a la no discriminación, a la informa-
ción) y, sobre esa base, señala que la materia requiere una urgente regulación que per-
mita su salvaguarda.
* Abogada y candidata a magíster en Derecho Constitucional y Derechos Humanos por la Universidad Nacional Ma-
yor de San Marcos.
236
EDICIÓN ESPECIAL
Volviendo a nuestro tema, este artículo par- situarse solo en el 5 % y el 15 % de todos los
te de la premisa de que si la madre y su bebé nacimientos5, continúa incrementándose de
están sanos, en realidad todos esos procedi- manera alarmante en el Perú.
mientos y la violencia obstétrica señalados
Así, se ha incrementado de la cantidad de
responden sobre todo a la comodidad del per-
cesáreas del 21 % al 28 % del año 2009 al
sonal de salud, y principalmente a la de sus
2014. Esta cifra, cuando es desagregada por
agendas (y es que un parto natural puede ocu-
características de la madre, resulta más per-
rrir de madrugada, en feriados, ¡o en días de
turbadora aún. Los mayores porcentajes de
fútbol!). Para ello suelen alegarse falsos mo-
cesáreas a nivel nacional se realizaron entre
tivos para intervenir quirúrgicamente a la ma-
mujeres del quintil superior de riqueza (lle-
dre (feto de nalgas, cesárea previa, placen-
gando a un 56 % de los nacimientos) o con
ta vieja, pelvis estrecha, bebé que no baja,
educación superior (48 %). Mientras que las
mujer demasiado pequeña, mujer demasiado
mujeres sin educación y ubicadas en el quin-
grande, madre muy joven, madre muy vieja,
til inferior, solo registran un 8 % de cesáreas.
mujer que no dilata), pero en realidad suelen
¿Será que solo ellas pueden parir naturalmen-
ser otras las razones, vinculadas más bien al
te? ¿No nos estarán quitando, acaso, nuestro
beneficio de los médicos: estos no están (o no
(super) poder de parir?
se sienten) capacitados para afrontar un parto
diferente (el parto natural los saca de su zona Además, la Endes revela que los nacimien-
de confort), no quieren esperar todas las horas tos por cesárea ocurrieron en mayor propor-
del proceso de dilatación, menos todavía de- ción en Lima Metropolitana y el resto de la
sean pasar las incomodidades que supondrían costa (41 % y 37 %), así como en el área ur-
un parto vertical, sin dejar de mencionar que bana (35 %).
con la cesárea se gana más dinero.
II. RIESGOS DE LA CESÁREA PRO-
El contexto descrito, del cual partimos para GRAMADA
el análisis jurídico que sigue, supone una
A diferencia de las cesáreas necesarias, las ce-
afectación grave a los derechos más básicos
sáreas programadas, con pocas excepciones,
de madres y bebés. Bien visto, estas afecta-
pueden y suelen ser fijadas sin que se presen-
ciones suponen incluso un estado de cosas
te ninguna dificultad o riesgo real para la ma-
inconstitucional de carácter estructural, ya
dre o el bebé por nacer.
que el nivel de cesáreas en el ámbito de la
salud privada limeña llega a un abusivo y es- Ahora bien, una cesárea solo debería
candaloso 70 % de los nacimientos. realizarse cuando los beneficios superen a los
riesgos, es decir, dicha decisión debería ba-
I. LAS CIFRAS: ENDES 2014 sarse en un equilibrio entre riesgos y benefi-
La última Encuesta Demográfica y de Sa- cios. Sin embargo, cuando se programa una
lud Familiar 2014 (Endes) demuestra que el cesárea no suelen tenerse en cuenta las venta-
nacimiento por cesárea, a pesar de que debe jas de esperar las contracciones intrauterinas.
indicación de estos médicos, pues simplemente no está informado sobre lactancia materna, otro lastre de la asime-
tría de la información en este asunto. Por favor, tome el anterior enlace al artículo periodístico y, además, <http://al-
balactanciamaterna.org/> como un punto de partida. También véase: GONZÁLEZ, Carlos. Un regalo para toda la
vida. Guía de la lactancia materna. 3ª edición, Planeta, España, 2011.
5 INSTITUTO NACIONAL DE ESTADÍSTICA E INFORMÁTICA. Encuesta demográfica y de salud familiar. Ins-
tituto Nacional de Estadística e Informática, Lima, 2014.
238
EDICIÓN ESPECIAL
6 Seguimos lo señalado (y puede encontrarse mayor información) en: “¿Por qué no programar una cesárea?”. En: El
parto es nuestro (página web). Disponible en: <https://www.elpartoesnuestro.es/informacion/parto/por-que-no-pro-
gramar-una-cesarea> (consulta: 15/03/2016).
Al respecto, las normas internacionales se- Sobre esta base, surgen muchísimas pregun-
ñalan que toda persona tiene derecho a la sa- tas: ¿Por qué las mujeres deben parir en po-
lud, entendida como el disfrute del más alto sición de cúbito dorsal10 (acostadas) si es la
nivel de bienestar físico, mental y social7. En más incómoda y dolorosa y, además, se les
tal sentido, la salud no solamente debe conce- restringe los movimientos con agujas y sue-
birse como la ausencia de infecciones o en- ros o monitoreo fetal? ¿Por qué lo anterior,
fermedades. El goce del grado máximo de sa- si las posturas verticales son favorecidas por
lud que se pueda lograr es uno de los derechos la gravedad y producen menos dolor? ¿Por
fundamentales de todo ser humano sin distin- qué, si la libertad de movimiento e intimi-
ción alguna8. dad permite que se desencadene el proceso
hormonal que facilita que todo se desarrolle
Como parte del derecho a la salud se encuen- como debe ser? ¿Solo porque es más práctico
tran los derechos reproductivos de las perso- o cómodo para el personal de salud que
nas, los cuales, a su vez, involucran el acce- ayuda a la madre (o, mejor dicho, le ordena,
so a la información, los servicios y el apoyo qué hacer)?
para alcanzar una vida sana, libre y plena en
el ámbito de la salud sexual y reproductiva, Asimismo, ¿por qué las mujeres limeñas de
sin discriminación de edad, género, estado los quintiles más favorecidos de riqueza y las
civil, condición socioeconómica y cultural. más instruidas son sometidas a numerosas ce-
sáreas innecesarias y programadas, engaña-
En las últimas décadas, expertos como el mé- das por quien se supone debe informarle con
dico francés Michel Odent9 han postulado la la verdad que estas intervenciones son más
necesidad de reorientar la atención que se le riesgosas para la madre y el bebé (más aún
ha estado brindado al proceso reproductivo, cuando una intervención quirúrgica no nece-
el cual, con la finalidad de luchar contra la saria siempre guardará más peligros que un
alta tasa de mortalidad materna, terminó ins- nacimiento natural)?
titucionalizando y deshumanizando el parto,
pasando de poder hacerse en casa, como otro- IV. LA NECESIDAD DE PROTECCIÓN
ra, a hacerse básicamente en los hospitales, DE NUESTROS DERECHOS ME-
acabando como un acto medicalizado. Esto, DIANTE NORMATIVA ESPECÍFICA
a su vez, ha estado vinculado con el recono- PARA AFRONTAR LA GRAVE CRI-
cimiento de los derechos de las personas res- SIS ESTRUCTURAL
pecto a la salud, en particular a la salud sexual Ya que la Ley General de Salud protege el de-
y reproductiva, así como a la necesidad de la recho a la información debida y oportuna, así
promover la equidad de género y el empode- como el respeto de la personalidad, dignidad
ramiento de la mujer. e intimidad, y dispone asimismo que ninguna
7 Artículo 10 del Protocolo adicional a la Convención americana sobre derechos humanos en materia de derechos eco-
nómicos, sociales y culturales “Protocolo de San Salvador”.
8 Véase la “Constitución de la Organización Mundial de la Salud” (1948). Disponible en: <http://www.who.int/gover-
nance/eb/who_constitution_sp.pdf>.
9 ODENT, Michael. Childbirth and the future of homo sapiens. Pinter & Martin Limited, Londres, 2013.
10 Al parecer, el privilegio del parto vertical solo está permitido en atención a la cultura de las mujeres andinas y ama-
zónicas, conforme se desarrolla en la Resolución Ministerial N° 598-2005/MINSA; ahora bien, no puede dejar de
mencionarse valiosos esfuerzos como los del Instituto Materno Perinatal y del Hospital Nacional Madre Niño San
Bartolomé y, claro está, algunos médicos que replican esto en las clínicas privadas donde prestan servicios, sin que
ello sea una política usual de esas instituciones de salud.
240
EDICIÓN ESPECIAL
persona pueda ser sometida a tratamiento mé- El proyecto original sancionaba no solo a las
dico o quirúrgico sin su consentimiento pre- intervenciones quirúrgicas innecesarias, sino
vio, entonces, las cesáreas innecesarias debe- toda vulneración relativa al parto “humanizado”
rían estar sancionadas. Sin embargo, no existe (va entre comillas pues nos resulta curiosa tal de-
aún regulación al respecto. nominación, no obstante sabemos a qué se refie-
re, en tanto, la atención se ha deshumanizado).
Las cifras estadísticas a las que nos hemos re-
ferido antes revelan la existencia de un esta- De aprobarse la referida norma, consideramos
do de cosas inconstitucional, entendido como que esta debería indicar qué Dirección del Mi-
el conjunto de hechos, acciones u omisiones nisterio de Salud será la que ejercerá rectoría
que importan una violación masiva de dere- en estos temas, además de definir el asunto de
chos fundamentales. Siendo así, frente una las competencias compartidas en materia de
demanda interpuesta ante la justicia constitu- salud con las gobernaciones regionales.
cional en uno de estos casos correspondería
Asimismo, la necesaria ley debería señalar
que se declare su existencia.
(en un artículo y no en la disposición final,
En efecto, se trata de un problema estructu- por técnica legislativa) que el Ministerio de
ral que vulnera de manera constante los de- Salud debe solicitar (y no solo que pueda ha-
rechos de las madres y de sus bebés. Al res- cerlo) anualmente a las instituciones de sa-
pecto, nuestro Estado no ha respondido a la lud públicas y privadas un informe pertinen-
necesidad de sancionar el abuso de la violen- te, cuando la tasa de nacimiento por cesárea
cia obstétrica, como sí se ha hecho en Chile11, exceda el 20 % del total de los nacimientos
Argentina12, Uruguay13 o, al parecer, pronta- atendidos. Asimismo, debería disponer que la
mente en Venezuela14. autoridad de salud tenga competencias para
fiscalizar toda la información remitida y para
En Perú, un intento de acabar con esta vulne-
sancionar todas aquellas prácticas que carez-
ración permanente de derechos lo tenemos en
can de sustento científico.
el Proyecto de Ley a Favor del “Parto Huma-
nizado” (Proyecto N° 1158/2011-CR, que ya Creemos firmemente que la humanización en
cuenta con dictamen de la Comisión de Salud los cuidados que se proveen al comienzo de
y Población, pero sigue esperando su pase al la vida humana para un nacimiento digno es
Pleno), mediante el cual se procura proteger determinante para las sociedades futuras, por
el derecho a un nacimiento digno y el derecho lo que resulta basilar apostar por su defensa
de las mujeres al parto (realmente) natural y a y la elaboración de normativa específica al
su protagonismo en él. respecto.
11 MINISTERIO DE SALUD DE CHILE. Manual de atención personalizada en el proceso reproductivo. Chile, enero de 2008.
12 Ley N° 25.929, “Ley sobre parto humanizado” y su Reglamento aprobado por Decreto N° 2035/2015.
13 Ley N° 18.426, “Defensa del derecho a la salud sexual y reproductiva”; y, Ley N° 17.386, “Dispónese que toda mu-
jer durante el tiempo que dura el trabajo de parto, incluyendo el momento del nacimiento, tendrá derecho a estar
acompañada de una persona de su confianza o, en su defecto, a su libre elección, de una especialmente entrenada
para darle apoyo emocional”.
14 Actualmente se encuentra en debate el Proyecto de Ley para la promoción y protección del derecho al parto y el na-
cimiento humanizado presentado por la Defensoría del Pueblo.
Con anterioridad al presente amparo, una señora interpuso demanda de hábeas corpus
en contra de Lan por habérsele impedido el embarque a un aeropuerto por tener su DNI
SUMILLA
caduco. Dicha demanda fue estimada en primera y segunda instancia. En esta oportuni-
dad, Lan interpuso un amparo contra dicho hábeas corpus. El TC ha declarado infunda-
da esta demanda, resaltando, una vez más, la prevalencia de la libertad de tránsito sobre
los requisitos de forma que pueden presentarse en este tipo de casos.
EXP. N° 02310-2013-PA/TC-LIMA
LAN PERÚ S.A. Representado(a) por LUIS ENRIQUE FELIPE MIGUEL GÁLVEZ DE
LA PUENTE
SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
En Lima, a los 9 días del mes de diciembre de 2015, la Sala Segunda del Tribunal Constitucio-
nal, integrada por los magistrados Ramos Núñez, BlumeFortini y Ledesma Narváez, pronuncia
la siguiente sentencia.
ASUNTO
Recurso de agravio constitucional interpuesto por la Empresa LAN PERÚ S.A., a través de su
representante, contra la resolución de fecha 17 de julio de 2012, de fojas 341, expedida por la
Segunda Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, que declaró improcedente la de-
manda de autos.
ANTECEDENTES
Con fecha 23 de diciembre de 2009, la recurrente interpone demanda de amparo contra el juez
a cargo del Primer Juzgado Penal de Tarapoto, los jueces integrantes de la Segunda Sala Mixta
Descentralizada de Tarapoto y la señora Zaida Catalina Pérez Escalante, solicitando que se de-
clare la nulidad de: i) la sentencia de fecha 4 de junio de 2009, expedida por el Juzgado empla-
zado mediante la cual se estimó la demanda de hábeas corpus; ii) la sentencia de fecha 26 de
agosto de 2009, expedida por la Sala demandada, que confirmó la estimatoria de la demanda de
hábeas corpus; y iii) que la Segunda Sala Mixta Descentralizada de Tarapoto emita nueva sen-
tencia. Sostiene que doña Zaida Catalina Pérez Escalante interpuso demanda de hábeas corpus
en contra suya (Exp. N° 0247-2009), al habérsele impedido el embarque en el Aeropuerto de Ta-
rapoto por tener su documento nacional de identidad (DNI) caduco. Dicha demanda fue estima-
da en primera y segunda instancia ordenándose a LAN PERÚ S.A. que se abstenga realizar prác-
ticas restrictivas a la libertad de tránsito y de solicitarle el DNI a la demandante, pudiendo optar
por solicitarle otro tipo de documento, decisión que a su juicio vulnera sus derechos al debido
proceso y a la tutela procesal efectiva, toda vez que contraviene las disposiciones del Programa
Nacional de Seguridad de la Aviación Civil, aprobado por R.M. 509-2003-MTC/02, la R.J.
N° 0789-2005-JEF/RENIEC, y la Ley Orgánica del Registro Nacional de Identificación y Esta-
do Civil, los cuales exigían, por razones de seguridad ciudadana e interés público, la presenta-
ción del DNI vigente como único documento de viaje.
El Primer Juzgado Especializado en lo Constitucional de Lima, con resolución de fecha 19 de
enero de 2010, declara improcedente la demanda por considerar que con el amparo interpues-
to se pretende realizar una interpretación de las normas relacionadas con el DNI en el caso del
transporte aéreo.
La Segunda Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima confirma la apelada, sobre la base
de lo expuesto por el Juzgado.
FUNDAMENTOS
Delimitación del petitorio
1. Conforme aparece del petitorio de la demanda, el objeto del presente proceso constitucional
es que se declare la nulidad de las sentencias de fechas 4 de junio de 2009 y 26 de agosto de
2009, que estimaron la demanda de hábeas corpus interpuesta por doña Zaida Catalina Pérez
Escalante. tras considerar que las mismas serian vulneratorias de los derechos al debido pro-
ceso y a la tutela procesal efectiva de la recurrente, pues habrían sido expedidas en contra-
vención de dispositivos (R.M. N° 509-2003-MTC/02, R.J. N° 0789-2005-JEFIRENIEC) y
la Ley Orgánica del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil) que exigían el DNI
vigente como único documento de viaje.
2. Así expuestas las pretensiones, este Colegiado considera necesario determinar, a la luz de
los hechos expuestos en la demanda y de los recaudos que obran en ella, si, en efecto, se han
vulnerado los derechos al debido proceso y a la tutela procesal efectiva de LAN PERÚ S.A.
por haberse estimado una demanda de hábeas corpus que contravendría normas que exigían
el DNI vigente como único documento de viaje para el embarque en aeropuertos; siendo ne-
cesario determinar también si una exigencia como la descrita deviene en irrazonable y/o des-
proporcionada por la eventual afectación a la libertad de tránsito de las personas.
3. Como es de apreciarse, se trata de un caso de “amparo contra hábeas corpus” en el
que se cuestiona de manera directa resoluciones judiciales de primera y segunda instancia
estimatorias de una demanda de hábeas corpus, por considerarse que son presuntamente le-
sivas a los derechos constitucionales de la recurrente, por lo que corresponderá verificar si la
demanda de autos se sustenta en los criterios de procedencia establecidos por este Colegia-
do a través de su jurisprudencia.
246
CONSTITUCIONAL
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
Sobre los presupuestos procesales específicos del “amparo contra amparo” y sus demás
variantes
248
CONSTITUCIONAL
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
de que, en tanto sujeto con capacidad de autodeterminación, tiene la libre opción de dis-
poner cómo por dónde decide desplazarse, sea que dicho desplazamiento suponga facul-
tad de ingreso hacia el territorio de nuestro Estado, sea que suponga circulación o tránsito
dentro del mismo, o sea que suponga, simplemente, salida o egreso del país (Cfr. STC Exp.
N° 0349-2004-AA/TC, fundamento 5).
11. Siendo el derecho de tránsito o de locomoción un atributo con alcances bastante amplios, sin
embargo, por mandato expreso de la propia Constitución Política se encuentra sometido a
una serie de límites o restricciones en su ejercicio. Dichas restricciones, en términos genera-
les, pueden ser de dos clases: explícitas e implícitas. Las restricciones explícitas se encuen-
tran reconocidas de modo expreso y pueden estar referidas tanto a supuestos de tipo ordina-
rio, como los enunciados por el inciso 11) del artículo 2 de la Constitución (mandato judicial,
aplicación de la ley de extranjería o razones de sanidad), como a supuestos de tipo extraor-
dinario (los previstos en los incisos 1 y 2 del artículo 137 de la Constitución, referidos a los
estados de emergencia y de sitio, respectivamente) (Cfr. STC Exp. N° 0349-2004-AA/TC,
fundamento 6).
12. Por su parte, las restricciones implícitas, a diferencia de las explícitas, resultan mucho más
complejas en cuanto a su delimitación, aunque no por ello inexistentes carentes de base
constitucional. Se trata, en tales supuestos, de vincular el derecho reconocido (en este caso,
la libertad de tránsito) con otros derechos o bienes constitucionalmente relevantes, a fin de
poder determinar, dentro de una técnica de ponderación, cuál de todos ellos es el que, bajo
determinadas circunstancias, resulta de satisfacción excluyente. Un caso específico de tales
restricciones opera precisamente en los supuestos de preservación de la seguridad ciudada-
na, en los cuales se admite que, bajo determinados parámetros de razonabilidad y proporcio-
nalidad, sea posible limitar el derecho aquí comentado (Cfr. STC Exp. N° 0349-2004-AA/
TC, fundamento 12).
13. En el caso de autos, doña Zaida Catalina Pérez Escalante interpuso demanda de hábeas
corpus en contra de la empresa recurrente invocando la vulneración de su derecho a la li-
bertad de tránsito, debido a que un trabajador de la Empresa LAN PERÚ (sucursal de Ta-
rapoto) le impidió que se embarcara en la aeronave con destino a la ciudad de Lima adu-
ciendo que su DNI no se encontraba vigente por razones de haber caducado (fojas 10 y
14-15).
14. Atendiendo a la alegación realizada por la demandante de habeas corpus, cl Primer Juz-
gado Penal de Tarapoto (fojas 10-13) estimó la demanda al considerar, entre otros argu-
mentos, que la Empresa LAN PERÚ S.A. (Sucursal de Tarapoto) al haber impedido a
doña Zaida Catalina Pérez Escalante embarcarse en la aeronave para llegar a la ciudad
de Lima, vulneró su derecho a la libertad de tránsito, en la medida en que si bien al mo-
mento de identificarse el plazo de vigencia de su DNI habla vencido, sin embargo para
su identificación se le debió haber solicitado otros documentos que aporten datos sobre
su identidad. Asimismo, la Segunda Sala Mixta Descentralizada de San Martín - Tarapo-
to (fojas 14-19) confirmó la estimatoria de la demanda de hábeas corpus al considerar,
entre otros argumentos, que a la demandante se le impidió abordar la nave, no obstan-
te que su documento de identidad no era inválido, y que la caducidad de este no com-
porta una restricción de la libertad de tránsito, cumpliéndose de este modo con la R.M.
N° 509-2003-MTC/02.
250
CONSTITUCIONAL
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
21. Este Colegiado enfatiza que aun cuando podría ser legítimo en términos constitucionales que
una persona pueda ser impedida de subir a una aeronave o a cualquier otro medio de trans-
porte público por razones de seguridad (lo que, por cierto, sí responde a la priorización de un
bien jurídico de relevancia), tal circunstancia debe responder a motivos mucho más relevan-
tes que a los de una simple alegación de caducidad (por ejemplo, presentar el DNI con noto-
rios rasgos de haber sido adulterado, o no ser posible individualizar los datos por encontrar-
se este último en manifiesto estado de deterioro). Sin embargo, aun en tales hipótesis, como
por cierto, en otras similares, siempre habrá de estarse a la amplitud de criterio o al pleno
uno del elemental sentido común.
FUNDAMENTO 22. Bajo las consideraciones descritas, considera este Colegiado
PRINCIPAL que, en efecto, constituía una inconstitucional restricción a la
Es inconstitucional una restric- libertad de tránsito impedir a doña Zaida Catalina Pérez Esca-
ción a la libertad de tránsito que lante el embarque en el aeropuerto, puesto que tal restricción,
no está sustentada en la protec- como ya se ha dicho, no tenía sustento en un mandato judicial,
ción de bienes jurídicos en la aplicación de la ley de extranjería, en razones de sani-
dad, en declaratorias de estados de emergencia y de sitio, o en
protección de otros bienes jurídicos relevantes; sino que esencialmente tuvo sustento en una
errada interpretación de la R.M. N° 509-2003-MTC/02, pues la demandante precisamente
cumplió con presentar su DNI, tal como válidamente lo exigía la norma en aquel entonces.
Bajo tales circunstancias, queda absolutamente claro que la actual demanda de “amparo con-
tra hábeas corpus” debe ser desestimada, al haberse tramitado el proceso de hábeas corpus
de manera regular, o lo que es lo mismo, en forma respetuosa o compatible con los derechos
Fundamentales.
23. En tal línea, atendiendo a la situación constitucional descrita, que de hecho puede ser
muy recurrente en nuestra realidad, este Colegiado tiene bien recalcar que los actos rea-
lizados por las empresas de transporte público terrestre o aéreo que impidan o restrinjan
el embarque de las personas basados específicamente en razones de caducidad del DNI,
resultan a todas luces inconstitucionales por vulnerar el derecho a la libertad de tránsi-
to; y más aún, por vulnerar el derecho a la identidad, toda vez que en circunstancias vul-
neratorias como las descritas las personas son rebajadas en su dignidad al negárseles el
reconocimiento en su calidad de tales y de sujetos de derecho con nombre e identidad
propia.
24. Por consiguiente, es perfectamente posible afirmar que cuando una persona o autoridad,
motu proprio o basado en alguna norma, resta validez y eficacia al DNI por razones que no
sean otras que la caducidad, impidiendo el embarque a un medio de transporte público, se
vulnera el derecho a no ser privado del DNI en los términos establecidos por el artículo 25,
inciso 10), del Código Procesal Constitucional, pues en la práctica se le priva al documen-
to de los efectos jurídicos deseados. Asimismo, se vulnera también los legítimos derechos y
expectativas de las personas en su calidad de consumidores o usuarios del servicio de trans-
porte público, pues a pesar de haber convenido previamente gozar del mismo, este se les ha
terminado negando por razones no atribuibles a ella, ante la exigencia del DNI vigente cor-
no requisito para el embarque.
Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la Constitu-
ción Política del Perú.
HA RESUELTO
1. Declarar INFUNDADA la demanda de “amparo contra hábeas corpus”, promovida por
LAN PERÚ S.A., que pretendía que se declare la nulidad de las sentencias emitidas en el
Expediente N° 0247-2009, que dispusieron que LAN PERÚ S.A. se abstenga de solicitar a
doña Zaida Catalina Pérez Escalante la presentación de su DNI vigente para permitir su em-
barque en vuelo aéreo; así como se abstenga de realizar prácticas restrictivas desproporcio-
nadas, lesivas al derecho a la libertad de tránsito.
2. Exhortar a LAN PERÚ S.A. que, en lo sucesivo, se abstenga de exigir para el embarque de
pasajeros que el DNI se encuentre vigente.
Publíquese y notifíquese.
SS. RAMOS NÚÑEZ; BLUME FORTINI; LEDESMA NARVÁEZ
COMENTARIO
Los pasajeros están obligados a presentar su documento nacional de identidad (DNI) a la hora
de abordar un avión. Pero no es necesario que este se encuentre vigente sino que únicamente
haya sido emitido por autoridad competente y que sea válido.
Así ha entendido el Tribunal Constitucional la disposición prevista en el Programa Nacional de
Seguridad de la Aviación Civil, aprobado por la Resolución Ministerial N° 509-2003-MTC/02,
que establece, literalmente, que “se permitirá a los pasajeros el acceso a las zonas de seguridad
restringidas que estén destinados para el procedimiento de embarque, siempre que posean y
presenten para su inspección: documento de viaje auténticos y válidos. Dichos documentos de
viaje serán principalmente pasaportes o documentos de identidad (nacionales) emitidos por la
autoridad competente”.
Para el Colegiado, esta norma significa que no es necesario que el DNI sea vigente para que
sirva como documento de viaje para el embarque en aeropuertos, sino que la norma solo se
circunscribe a la presentación del DNI emitido por autoridad competente, sin especificación de
ninguna característica adicional.
Así lo decidió en el caso de una ciudadana que interpuso demanda de hábeas corpus contra LAN
Perú S.A. alegando la vulneración de su derecho a la libertad de tránsito, pues un trabajador de
dicha empresa, en la sucursal de Tarapoto, le impidió abordar una aeronave con destino a Lima
debido a que su DNI había caducado y, por lo tanto, en ese momento no se encontraba vigente.
La referida demanda de hábeas corpus fue declarada fundada en primera y segunda instancia,
pues los jueces consideraron el impedimento de abordar el avión como una restricción injustifi-
cada y, además, una vulneración de su derecho a la libertad de tránsito. Los motivos principales
fueron que el DNI de la demandante no era inválido en tanto no había perdido su capacidad
para acreditar con suficiencia la identidad de su titular y que la caducidad del documento no
significa que pueda restringirse la libertad de tránsito.
Ahora bien, la empresa aeronáutica interpuso una demanda de amparo contra las decisiones
judiciales mencionadas (“amparo contra hábeas corpus”) porque consideraba que ellas vulne-
raban sus derechos al debido proceso y la tutela judicial efectiva. La demanda de amparo fue
252
CONSTITUCIONAL
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
254
CONSTITUCIONAL
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA CONSTITUCIONAL
institucional del Estado democrático debe ser sometido a las vías judiciales sobre la base de
las normas legales que establecen responsabilidades con las garantías de un debido proceso”.
256
CONSTITUCIONAL
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA CONSTITUCIONAL
práctica; como también en su autonomía como órgano jurisdiccional del Estado. Al respec-
to se ha establecido que ‘de conformidad con el principio de autonomía, reconocido en
el artículo 201 de la Constitución, [este Tribunal] tiene la potestad de modular, procesal-
mente, el contenido y los efectos de sus sentencias en todos los procesos constitucionales,
en general, y en el proceso de amparo, en particular’”.
órgano cuestionado podría realizar la labor que le compete con arbitrariedad o con excesos,
constituyendo este Tribunal un tamiz que limite los desbordes para lo que en consecuencia
(…) no existe coto ni lugar alguno excluido de dicho control”.
1. Interpretación constitucional
258
JURISPRUDENCIA
RELEVANTE COMENTADA
Si el juez penal omite actuar un medio probatorio otorgado por el acusado se habrá
afectado el derecho a probar y, por tanto, la condena dictada en su contra carecerá de
validez. Así lo indicó el Tribunal Constitucional al declarar fundada la demanda de há-
SUMILLA
beas corpus interpuesta por una persona condenada por el delito de estafa. La deman-
dante alegaba que los jueces penales no visualizaron un DVD de vital importancia para
el esclarecimiento de los hechos. Tras comprobar la existencia de dicho medio probato-
rio y que este nunca fue actuado en el proceso penal, el Colegiado concluyó que se ha-
bía afectado el derecho a la prueba.
Palabras claves: Derecho a la prueba, derecho a la tutela procesal efectiva, hábeas corpus contra
resoluciones judiciales, actuación probatoria
ANTECEDENTES
Con fecha 9 de noviembre de 2011, Noemí Bessi Landázuri Abanto interpone denuncia de há-
beas corpus contra el juez del Segundo Juzgado Penal Liquidador Transitorio de Sullana, Luis
Alberto Pintado Córdova; los jueces de la Sala Penal Liquidadora de Sullana de la Corte Supe-
rior de Justicia de Piura, Castillo Gutiérrez, Gómez Tavares y Arrieta Ramírez; y, los vocales de
la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema de Justicia de la República, Villa Stein, Rodríguez
Tinco, Pariona Pastrana, Neyra Flores y Santa María Morillo, por considerar que i) la resolución
de fecha 29 de diciembre de 2009 (f. 55), que la condena por los delitos de asociación ilícita para
delinquir y estafa genérica y dispone que devuelva lo ilícitamente apropiado, ii) la resolución de
fecha 5 de abril de 2010 (f. 233), que confirma la sentencia condenatoria, y, iii) la resolución su-
prema de fecha 20 de junio de 2011 (f. 243), que declara infundado el recurso de queja interpues-
to contra la resolución de fecha 20 de abril de 2010, que deniega el recurso de nulidad promovido
contra la resolución superior que confirma la sentencia condenatoria, emitidas, respectivamente,
por los emplazados, violan sus derechos al debido proceso, a la defensa y a la debida motivación
conexas a la libertad individual; por tanto, solicita que se dejen sin efecto.
Sostiene que en el proceso penal seguido en su contra (Exp. N° 559-2004) los órganos jurisdic-
cionales incurrieron en irregularidades en el ámbito probatorio. En tal sentido, refiere que ni el
juez ni la sala demandados visualizó un DVD que ofreció durante la etapa de instrucción; que
no se ha valorado el resultado de un informe pericial contable, el reporte de un banco, una car-
ta de reclamo y tres cartas notariales; que no existe prueba que acredite la existencia de docu-
mentación paralela a una empresa formal; que no existen pruebas documentales que certifiquen
que los productos comprados por la empresa hayan sido usados o enviados al continente africa-
no. De igual forma agrega que se han considerado en forma fragmentada pruebas vitales que
ofreció y que fueron corroboradas en el proceso tales como las conclusiones de la pericia judi-
cial, el testimonio de constitución de la empresa Labomax, que prueban que nunca conformó ni
participó en la formación de la empresa sino que fue una trabajadora cuya responsabilidad pe-
nal tampoco se probó.
Admitida a trámite la demanda, se ordenó sumaria investigación. En tal sentido, una vez reali-
zadas las diligencias indagatorias, el Décimo Primer Juzgado Especializado Penal de la Corte
Superior de Justicia de Lima Norte procedió a expedir la resolución de fecha 14 de junio de 2012
(f. 629), declarando improcedente el hábeas corpus por considerar que no se configuró la supues-
ta violación de derechos fundamentales invocada.
Por su parte, la Segunda Sala Especializada en lo Penal con Reos Libres de la Corte Superior
de Justicia de Lima Norte, confirmando la apelada, declaró improcedente la demanda por simi-
lar argumento.
FUNDAMENTOS
§ Delimitación del petitorio y del asunto controvertido
1. El objeto del habeas corpus que se analiza es que se declare la nulidad de i) la resolución de
fecha 29 de diciembre de 2009 expedida por el Segundo Juzgado Penal Liquidador Transito-
rio de Sullana; que condena a la recurrente por los delitos de asociación ilícita para delinquir
y estafa genérica y dispone que devuelva lo ilícitamente apropiado, ii) la resolución de fe-
cha 5 de abril de 2010 dictada por la Sala Penal Liquidadora de Sullana de la Corte Superior
260
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
DOCTRINA 5. En este esquema, una de las garantías que asiste a las partes
JURISPRUDENCIAL del proceso es la de presentar los medios probatorios necesa-
La tutela procesal efectiva exige rios que posibiliten crear la convicción en el juzgador de que
que se admitan las pruebas per- sus argumentos son los correctos. De esta manera, si no se au-
tinentes para generar convicción toriza la presentación oportuna de pruebas a los justiciables,
en el juez
¿se podrá considerar amparada la tutela procesal efectiva?
Todo hace indicar que ello sería imposible. Solo con los medios probatorios necesarios, el
juzgador podrá sentenciar adecuadamente. Por ello, la ligazón entre prueba y tutela procesal
efectiva es ineluctable.
a producir la prueba necesaria con la finalidad de acreditar los hechos que configuran su
pretensión o defensa. Así, por ejemplo, el artículo 188 del Código Procesal Civil establece
que los medios probatorios tienen por finalidad acreditar los hechos expuestos por las par-
tes, producir certeza en el juez respecto de los puntos controvertidos y fundamentar sus de-
cisiones. Se trata de un derecho complejo que está compuesto por el derecho a ofrecer me-
dios probatorios que se consideren necesarios, a que estos sean admitidos, adecuadamente
actuados, que se asegure la producción o conservación de la prueba a partir de la actuación
anticipada de los medios probatorios y que estos sean valorados de manera adecuada y con
la motivación debida, con el fin de darle el mérito probatorio que tenga en la sentencia. La
valoración de la prueba debe estar debidamente motivada por escrito, con la finalidad de que
el justiciable pueda comprobar si dicho mérito ha sido efectiva y adecuadamente realizado
(Cfr. STC Exp. N° 6712-2005-PHC, fundamento 15).
7. Reconocido, pues, el derecho a la prueba desde el punto de vista constitucional, este Tribu-
nal considera pertinente señalar que no todos los supuestos de su contenido merecen protec-
ción a través de un proceso constitucional de la libertad (hábeas corpus o amparo).
§. Análisis del caso
8. Corno ya se precisó, alega la recurrente que la falta de actuación y valoración de pruebas
ofrecidas ha incidido inconstitucionalmente en su derecho a la prueba y al debido proceso.
En tal sentido, refiere –con especial énfasis– que ni el juez ni la sala demandados visualizó
un DVD que ofreció durante la etapa de instrucción a pesar de que su contenido era de espe-
cial importancia para el esclarecimiento de los hechos y la determinación de la responsabi-
lidad penal.
9. Al respecto cabe señalar que este Tribunal al no advertir de autos la existencia del DVD
mencionado ni lo sucedido con este en su calidad de prueba ofrecida; tomando en conside-
ración que la recurrente incluso hasta en su escrito de recurso de agravio constitucional
(f. 839) ha insistido en la importancia de visualizarse el contenido del DVD; con fecha 29 de
abril de 2015 ofició al Segundo Juzgado Penal Liquidador Transitorio de Sullana de la Corte
Superior de Justicia de Sullana a fin de que remita el decreto de recepción del DVD y el auto
admisorio de pruebas, con el objeto de corroborar su ofrecimiento al proceso penal y evaluar
la presunta inconstitucionalidad. Tal solicitud fue atendida con fecha 13 de mayo de 2015,
mediante Oficio N° 856-2015-JIPeFLS-KAL (f. 26 del Cuadernillo del Tribunal Constitu-
cional), a través del cual el Juzgado de Investigación Preparatoria con Funciones de Liqui-
dador de Sullana informó que no obraba en el expediente penal el decreto de recepción del
referido DVD.
Sin embargo, mediante escrito de fecha 31 de julio de 2015 (f. 76 y ss. del Cuaderno del Tri-
bunal Constitucional), la recurrente pone en conocimiento a este Tribunal de la Resolución
N° ochenta y cuatro de fecha 9 de julio de 2015, expedida por el Juzgado de Investigación
Preparatoria con Funciones de Liquidador de Sullana, en la misma que se refiere que habién-
dose producido la pérdida de los tomos II, III y IV del Expediente N° 559-2004 y ordenado
su búsqueda, se advierte que con fecha 7 de julio de los corrientes el Área de Archivo remi-
tió los tomos extraviados y que por tanto se ha verificado que en el folio 1953 del tomo II
obra un DVD debidamente lacrado que aparece como anexo G.
262
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
COMENTARIO
La prueba constituye un mecanismo para cumplir la finalidad del proceso, esto es, alcanzar
la verdad. Por tanto, el derecho a la prueba constituye una de las principales garantías de los
justiciables y cobra aún mayor importancia en el marco de un proceso penal.
Este derecho fundamental otorga una serie de atributos a las partes del proceso: i) la posibili-
dad de ofrecer material probatorio; ii) que este sea admitido; iii) la conservación o la actuación
anticipada de la prueba; iv) su adecuada actuación y, finalmente, v) su debida valoración.
En el caso materia de comentario se analiza la vulneración del derecho a la prueba por la omi-
sión de actuar material probatorio presentado por la parte acusada. Si bien los jueces penales
analizaron la pertinencia del DVD entregado por la inculpada y lo admitieron como un medio
probatorio, este nunca fue actuado.
De esta forma, la facultad del acusado de presentar medios de prueba referidos a la denuncia en
su contra devino en ineficaz. Como es evidente, carece de sentido que las partes puedan ofrecer
medios de prueba si estos nunca son actuados en el proceso y, posteriormente, el juez los valore
a efectos de emitir la decisión final.
Por lo expuesto, consideramos acertada la decisión del Colegiado en el caso concreto. La falta
de actuación del DVD configuró no solo una vulneración del derecho a la prueba, sino un agra-
vio al derecho de defensa de la procesada. Las partes, y los procesados en particular, requieren
que se garantice su derecho a presentar argumentos de defensa, los cuales vienen fácticamente
representados en el material probatorio.
La afectación del derecho a la prueba en el proceso penal puede generarse con la omisión de
actuar el material probatorio presentado por las partes. En dicha medida, podrá iniciarse un
proceso de hábeas corpus a efectos de que se decrete la nulidad de las decisiones que consientan
dicho agravio.
264
JURISPRUDENCIA
RELEVANTE COMENTADA
El proceso de hábeas corpus no es la vía pertinente para cuestionar las actuaciones fis-
cales en la etapa de investigación preliminar; en este supuesto corresponde interponer
una demanda de amparo. Con base en dicho criterio el Tribunal Constitucional rechazó
el hábeas corpus iniciado a favor de una procesada por el delito de lavado de activos,
quien cuestionaba la resolución fiscal que ordenó ampliar la investigación en su contra.
Ahora bien, el Colegiado descartó en dicho caso que se haya producido afectación al-
guna a la libertad personal y, por otra parte, concluyó que no podía convertirse el pro-
ceso en uno de amparo por haberse presentado la demanda luego de vencido el plazo
para su interposición.
ASUNTO
Recurso de agravio constitucional interpuesto por doña Eliza del Rosario Ucañán Hidalgo con-
tra la resolución de fojas 2670, Tomo V, de fecha 1 de setiembre de 2015, expedida por la Sala
Penal Descentralizada Permanente de Ate de la Corte Superior de Justicia de Lima Este, que de-
claró improcedente la demanda de autos respecto al procurador público del Ministerio Público;
e infundada respecto a los fiscales emplazados.
ANTECEDENTES
Con fecha 10 de febrero de 2015, doña Eliza del Rosario Ucañán Hidalgo interpone demanda
de hábeas corpus a favor de doña Eva Rose Fernenbug, la cual dirige contra don Marco Antonio
Cárdenas Ruiz, fiscal de la Primera Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada en De-
litos de Lavado de Activos y Pérdida de Dominio, y contra Doña Lydia Flores Rezza, fiscal de
la Primera Fiscalía Superior Nacional Especializada en Delitos de Lavado de Activos y Pérdida
de Dominio, así como contra el procurador público encargado de los asuntos judiciales del Mi-
nisterio Público. Se alega la afectación del plazo razonable de la investigación preliminar, de los
principios ne bis in idem, de unidad de la investigación y de igualdad, así como amenaza al de-
recho a la libertad personal.
La recurrente solicita que se declare: i) nula la Resolución Fiscal de fecha 8 de agosto de 2014,
mediante la cual la Primera Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializada en Delitos de
Lavado de Activos y Pérdida de Dominio dispuso conceder el recurso de queja interpuesto por la
procuraduría pública y elevó los actuados al superior en grado (Caso SGF 506015703-2014-02-
0); y, ii) nula la Resolución Fiscal de fecha 7 de octubre de 2014 (Queja 03-2014), por la que la
Primera Fiscalía Superior Nacional Especializada en Delitos de Lavado de Activos y Pérdida de
Dominio declaró fundado en parte el recurso de queja y nulos los extremos comprendidos en el
cuarto, quinto y sexto otrosí digo de la Denuncia Fiscal de fecha 22 de mayo de 2014; en conse-
cuencia, dispuso la ampliación de la investigación preliminar respecto de los señores Alejandro
Toledo Manrique, Avi Dan On y Shai Dan On, y de doña Eliane Chantal Karp Pernenbug de To-
ledo por el delito de lavado de activos y contra Joseph Maimann por el delito de falsedad genéri-
ca; y subsistente la precitada denuncia en lo demás que contiene. Dicho con otras palabras, y con
respecto a doña Eva Rose Fernenbug, se le investiga por el presunto delito de lavado de activos,
en la modalidad de actos de ocultamiento y tenencia.
De otro lado, también se solicita la nulidad de todas las disposiciones o resoluciones emitidas por
el fiscal demandado con posterioridad a la interposición del presente proceso de hábeas corpus;
que se deje a salvo la actividad o diligencias probatorias efectuadas con posterioridad a la denun-
cia penal; y que se ordene al fiscal supraprovincial subsanar las observaciones establecidas en el
Auto de Devolución de Denuncia de fecha 18 de junio de 2014.
La recurrente refiere que, con fecha 1 de febrero de 2013, la Cuadragésima Octava Fiscalía Pe-
nal de Lima inició investigación contra doña Eva Rose Fernenbug y los que resulten responsa-
bles por las adquisiciones inmobiliarias del denominado caso Ecoteva (Caso 77-2013). El 22 de
mayo de 2014, se formalizó denuncia penal contra la favorecida en calidad de autora, y contra
don David Eskenazi Becerra como cómplice primario por el presunto delito de lavado de activos
en la modalidad de actos de ocultamiento y tenencia. En esta denuncia no se incluyó a los seño-
res Alejandro Todelo Manrique, Avi Dan On, Shai Dan On y Joseph Maimann, ni a doña Eliane
Chantal Karp Fernenbug de Toledo, quienes, en un principio, fueron incluidos en el curso de las
266
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
investigaciones en calidad de investigados. La accionante agrega que para ellos se decretó la re-
serva de la investigación, pero no así para la beneficiaria, lo cual originó un trato discriminatorio
hacia ella, pese a que la denuncia formulada en su contra no tiene sustento conforme se aprecia
del Auto de Devolución de Denuncia de fecha 18 de junio de 2014, en el que el Décimo Sexto
Juzgado Penal de Lima formuló observaciones.
El 2 de junio de 2014, la Procuraduría Pública Especializada en Delitos de Lavado de Activos y
Proceso de Pérdida de Dominio solicitó a la Cuadragésima Octava Fiscalía Penal Provincial de
268
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
Sostiene también que la investigación se realiza como un todo y que las diligencias que se han
dispuesto permiten mantener la unidad de la investigación fiscal, pues se realizaría un análisis
conjunto y un pronunciamiento global respecto de todos los investigados en un mismo proceso.
De otro lado, indica que en la misma Resolución Fiscal de fecha 8 de agosto de 2014 se expli-
can las razones por las que se concedió el recurso de queja presentado por la procuraduría, deci-
sión que posteriormente fue confirmada por el superior jerárquico, la fiscal Lydia Flores Rezza;
y que, conforme al artículo 94 de la Ley Orgánica del Ministerio Público, luego de la investiga-
FUNDAMENTOS
Delimitación del Petitorio
1. La demanda tiene por objeto que se declare: i) nula la Resolución Fiscal de fecha 8 de agos-
to de 2014, mediante la cual la Primera Fiscalía Supraprovincial Corporativa Especializa-
da en Delitos de Lavado de Activos y Pérdida de Dominio dispuso conceder el recurso de
queja interpuesto por la Procuraduría Pública y elevó los actuados al superior en grado; y,
ii) nula la Resolución Fiscal de fecha 7 de octubre de 2014, por la que la Primera Fiscalía
Superior Nacional Especializada en Delitos de Lavado de Activos y Pérdida de Dominio de-
claró fundado en parte el recurso de queja y nulos los extremos comprendidos en el cuarto,
quinto y sexto otrosí digo de la Denuncia Fiscal de fecha 22 de mayo de 2014. En consecuen-
cia, dispuso la ampliación de la investigación preliminar respecto de doña Eliane Chantal
Karp Fernenbug de Toledo y de los señores Alejandro Toledo Manrique, Avraham Dan On y
Shai Dan On por el delito de lavado de activos, y contra don Joseph Arieh Maimann Rapa-
port por el delito de falsedad genérica; y subsistente la denuncia en lo demás que contiene en
cuanto a doña Eva Rose Fernenbug por el presunto delito de lavado de activos, en la modali-
dad de actos de ocultamiento y tenencia (Caso Fiscal SGF N° 506015703-2014-02-0 / Queja
N° 003-2014 - Denuncia N° 0022014).
2. Se solicita también la nulidad de todas las disposiciones o resoluciones emitidas par el
fiscal demandado con posterioridad a la interposición del presente proceso de hábeas
corpus; que se deje a salvo la actividad o diligencias probatorias efectuadas con poste-
rioridad a la denuncia penal; y que el fiscal supraprovincial cumpla con subsanar las ob-
servaciones establecidas en el Auto de Devolución de Denuncia de fecha 18 de junio de
2014.
3. Se alega la afectación del derecho al plazo razonable de la investigación preliminar, de los
principios ne bis in idem, de unidad de la investigación, y de la igualdad, y amenaza al dere-
cho a la libertad personal.
Análisis de la controversia
El proceso de hábeas corpus y la libertad personal
4. Constitución establece en su artículo 200, inciso 1, que a través del hábeas corpus se prote-
ge la libertad personal o los derechos conexos a ella. No obstante, no cualquier reclamo por
una presunta afectación del derecho a la libertad personal o de los derechos conexos puede
reputarse efectivamente como tal y merecer tutela, pues para ello es necesario analizar pre-
viamente si tos actos denunciados afectan o no el contenido constitucionalmente protegido
de los derechos tutelados por el hábeas corpus.
5. El artículo 159 de la Constitución establece que corresponde al Ministerio Público ejercitar
la acción penal pública, de oficio o a petición de parte, así como emitir dictámenes antes de
la expedición de las resoluciones judiciales en los casos que la ley contempla. Desde esta
perspectiva, se entiende que el fiscal no decide, sino que más bien pide que el órgano juris-
diccional juzgue o que, en su caso, determine la responsabilidad penal del acusado: esto es,
que realiza su función persiguiendo el delito con denuncias o acusaciones, pero no juzga ni
decide.
270
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
FUNDAMENTO 10. Si bien la recurrente alega que el requerimiento del fiscal para
PRINCIPAL que el juez dicte mandato de comparecencia restringida contra
Mandato de comparecencia es doña Eva Rose Fernenbug origina una amenaza a su libertad
dictaminado por el juez por lo personal, el aludido requerimiento tampoco hace procedente
que su requerimiento por parte este proceso de hábeas corpus, pues el juez, primero, tendría
del fiscal no incide en la liber-
tad personal que analizar si procede o no la imposición de alguna medida
coercitiva, por lo que la presunta amenaza no tendría la condi-
ción de ser cierta ni inminente. Además, en caso de que efectivamente se dictara alguna me-
dida, la demanda tendría que estar dirigida contra el juez que la dictó y la resolución que se
cuestione tendría que ser firme.
272
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
de presentar la demanda dentro del plazo fijado, este resulta improcedente y, por lo mismo,
es innecesario el análisis de las otras reglas para la reconversión.
14. Sin perjuicio de la improcedencia de la demanda, este Tribunal advierte que si bien es cierto
que el recurso de queja presentado por la procuradora también cuestiona la formalización de
la denuncia contra la favorecida y la falta de pronunciamento respecto de la cancelación de
las hipotecas de las casas en Punta Sal y Camacho, también lo es que la Resolución Fiscal,
de fecha 7 de octubre de 2014, declaró fundado en parte el recurso de queja y nulos los ex-
18. En todo caso, la ampliación del plazo de la investigación preliminar respecto de los otros in-
vestigados implicó que los hechos objeto de la investigación fueran analizados en su totalidad
y respecto de todos los presuntos involucrados, lo que, sin duda, contribuye a una mejor de-
fensa de todos los investigados. Es más, posteriormente, la favorecida y los otros investigados
pasaron a tener la misma condición de denunciados, conforme se aprecia de la ampliación de
la formalización de denuncia presentada el 27 de marzo de 2015 al Décimo Sexto Juzgado Pe-
nal de Lima en la que también se comprende a Josef Arieh Maiman Rapaport, Avraham Dan
On, Shai Dan On, Eva Rose Femenbug, David Abraham Eskenazi Becerra, Alejandro Toledo
Manrique y Eliane Chantal Karp Femenbug de Toledo como coautores del delito de lavado
de activos en la modalidad de actos de ocultamiento y tenencia (foja 1543. Tomo IV).
Plazo razonable de la investigación preliminar
19. El Tribunal Constitucional, en la sentencia dictada en el Expediente N° 2748-2010-
PHC/TC, señaló: “El derecho al plazo razonable de la investigación preliminar (policial o
fiscal), en tanto manifestación del derecho al debido proceso, alude a un lapso de tiempo su-
ficiente para el esclarecimiento de los hechos objeto de investigación y la emisión de la de-
cisión respectiva. Si bien es cierto que toda persona es susceptible de ser investigada, no lo
es menos que para que ello ocurra, debe existir la concurrencia de una causa probable y la
búsqueda de la comisión de un ilícito penal en un plazo que sea razonable”.
274
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
22. Esta ampliación de denuncia fue devuelta mediante Auto de fecha 21 de abril de 2015 (foja
1740, Tomo IV), con el fin de que se formule una hipótesis de incriminación precisa y con-
creta contra cada denunciado. Finalmente, con fecha 20 de julio de 2015, se subsanan las
observaciones a los dictámenes fiscales de 22 de mayo de 2014 y 26 de marzo de 2015 (foja
2310, Tomo V). Al respecto, el que se hayan emitido los autos de devolución contra los dic-
támenes fiscales no modifica la situación de denunciada, y ya no de investigada, en que se
encuentra la favorecida.
COMENTARIO
resguardar otros derechos fundamentales en el proceso de hábeas corpus se exige que estos
guarden una relación de conexidad con la libertad personal.
Ahora, como bien señala el Tribunal Constitucional en la sentencia materia de comentario,
las actuaciones fiscales no inciden directamente en la libertad personal de los procesados. El
Ministerio Público únicamente propone la adopción de medidas que restrinjan la libertad del
acusado, mas no puede disponer estas motu proprio.
Por lo antes indicado, no cabría mayor discusión acerca de la procedencia del hábeas corpus
contra actuaciones fiscales. Al no existir afectación a la libertad personal, la demanda debería
ser declarada improcedente en aplicación del artículo 5, inciso 1, del Código Procesal Cons-
titucional. En estos supuestos, como bien señala el Colegiado, corresponde iniciar un proceso
de amparo.
Sin embargo, un sector de la doctrina nacional ha cuestionado la eficacia del proceso de amparo
para resguardar la constitucionalidad de las actuaciones fiscales. Estos autores consideran que,
dada la dinámica de la investigación preliminar, no resulta extraño que la respuesta de parte
de la justicia constitucional, vía el proceso de amparo, sea tardía y los agravios producidos
resulten irreparables.
Por lo antes indicado, se sostiene que no debe existir ámbito fuera del control constitucional,
justificando así la procedencia excepcional del hábeas corpus. No obstante, ante estos argumen-
tos cabría afirmar que la demora en la tutela no debería permitir la desnaturalización de los
procesos constitucionales, yendo incluso en contra de lo establecido en la propia Constitución.
Además, ante la posible irreparabilidad del agravio es posible solicitar medidas cautelares en el
proceso de amparo. De esta forma se garantizará la protección de los derechos de los procesa-
dos sin transgredir las parámetros establecidos por la propia Constitución.
276
TENDENCIAS
DE JURISPRUDENCIA PENAL
ARRESTO DOMICILIARIO
La detención domiciliaria supone una orden que impide al procesado abandonar su residen-
cia. Por lo tanto, esta medida cautelar personal constituye una limitación a la libertad de
locomoción en el marco de un proceso penal, aunque en menor grado que la prisión preven-
tiva. Siendo así, para su dictado se requiere cumplir con los requisitos de peligro en la de-
mora y apariencia del derecho. Además, el arresto domiciliario exige el respeto del princi-
pio de proporcionalidad y del derecho al plazo razonable. Teniendo en cuenta esta relación
entre los derechos fundamentales de los acusados y la detención domiciliaria, presentamos
los principales criterios esbozados por el Tribunal Constitucional acerca de esta institución.
Peligro procesal y apariencia del derecho son los requisitos para dictar
detención domiciliaria
“[L]a imposición del arresto domiciliario deberá estar supeditado a la observancia de dos
presupuestos básicos: fumus boni iuris (apariencia del derecho) y periculum in mora (pe-
ligro procesal). El primero de ellos estará referido –en el ámbito penal– a la suficiencia de
elementos probatorios que vinculen al imputado con el hecho delictivo, mientras que el se-
gundo se refiere al peligro de que el procesado se sustraiga de la acción de la justicia o per-
turbe la actividad probatoria”.
STC Exp. N° 02712-2002-HC/TC, f. j. 2
Publicada en la página web del TC el 18/03/2004
278
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA PENAL
280
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA PENAL
282
JURISPRUDENCIA
RELEVANTE COMENTADA
LABORAL Y PREVISIONAL
atención a que el cónyuge causante no reúne el requisito de aportaciones exigidas en el
Decreto Ley N° 19990, en el periodo reconocido más el periodo por reconocer. El TC pre-
cisó que la fecha en la que se genera el derecho a la pensión vitalicia o de invalidez por
enfermedad profesional es en el momento del dictamen o certificado médico emitido por
una Comisión Médica Evaluadora Calificadora de Incapacidades de EsSalud, o del Mi-
nisterio de Salud o de una EPS, que acredita la existencia de la enfermedad profesional.
EXP. N° 02636-2013-PA/TC-LIMA
ISABEL ZEVALLOS SERPA
SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
En Lima, a los 3 días del mes de noviembre de 2015, la Sala Primera del Tribunal Constitucional,
integrada por los magistrados Sardón de Taboada, Ledesma Narváez (quien interviene en reem-
plazo del magistrado Miranda Canales, por permiso autorizado por el Pleno de fecha 21 de octu-
bre de 2014) y Espinosa-Saldaña Barrera, pronuncia la siguiente sentencia.
ASUNTO
Recurso de agravio constitucional interpuesto por doña Isabel Zevallos Serpa contra la resolu-
ción de fojas 328, de fecha 20 de marzo de 2013, expedida por la Sexta Sala Civil de la Corte Su-
perior de Justicia de Lima, que declaró improcedente la demanda de autos.
ANTECEDENTES
Con fecha 7 de julio de 2009, la recurrente interpone demanda de amparo contra la Ofi-
cina de Normalización Previsional (ONP). Solicita que se deje sin efecto la Resolución
284
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
que inició sus labores el 1 de abril de 1965, que su cese laboral ocurrió el 16 de setiem-
bre de 1998 y que están debidamente acreditados 10 años y 10 meses de aportaciones al
régimen del Decreto Ley N° 19990, de los cuales la última aportación corresponde al año
1995.
7. De la Resolución N° 6363-2008-ONPIDCIDL 19990, de fecha 16 de enero de 2008 (folio
5), se aprecia que la entidad demandada le denegó la pensión de viudez a la recurrente por
considerar que, con el periodo reconocido (10 años y 10 meses) más el periodo por recono-
cer (1 año y 2 meses), su cónyuge causante no reuniría el requisito de aportaciones exigidas
por el artículo 25 del Decreto Ley N° 19990.
8. Asimismo, de la Resolución N° 1905-2009-ONPIDPRIDL 19990, de fecha 28 de mayo de
2009 (folio 63); que declara infundado el recurso de apelación interpuesto contra la resolu-
ción denegatoria antes citada, se advierte que la emplazada ha reconocido que “(...) el cau-
sante efectuó en vida un total de 11 años y 07 mes[es] de aportaciones al Sistema Nacional
de Pensiones, los cuales incluyen a los 10 años y 10 meses de aportaciones reconocidos en
la Resolución impugnada”.
DOCTRINA 9. Este Tribunal ha establecido en el fundamento 40 de la senten-
JURISPRUDENCIAL cia emitida en el Expediente N° 02513-2007-PA/TC, con ca-
La fecha en la que se genera rácter de precedente, la fecha en la que se genera el derecho a
la pensión vitalicia o de invalidez por enfermedad profesional.
LABORAL Y PREVISIONAL
el derecho a la pensión vitali-
cia o de invalidez por enferme- Así precisó que esto ocurre en la fecha del dictamen o certi-
dad profesional es aquella que ficado médico emitido por una Comisión Médica Evaluadora
ocurre en la fecha del dicta-
men o certificado médico emi- Calificadora de Incapacidades de EsSalud, o del Ministerio de
tido por una Comisión Médica Salud o de una EPS, que acredita la existencia de la enfer-
Evaluadora medad profesional. Dicho criterio resulta aplicable mutatis
mutandis a los casos de pensión de invalidez del régimen del
Decreto Ley N° 19990, en razón de establecerse la fecha en la que se produjo la referida
invalidez.
HA RESUELTO
Declarar INFUNDADA la demanda, por no haberse acreditado la vulneración del derecho a la
pensión de la demandante.
Publíquese y notifíquese.
SS. SARDÓN DE TABOADA; LEDESMA NARVÁEZ; ESPINOSA-SALDAÑA BARRERA
COMENTARIO
De conformidad con el artículo 25, inciso b), del Decreto Ley N° 19990, se establece que tiene
derecho a la pensión de invalidez el asegurado que “teniendo más de 3 y menos de 15 años com-
pletos de aportación, al momento de sobrevenirle la invalidez, cualquiera que fuere su causa,
contase por lo menos con 12 meses de aportación en los 36 meses anteriores a aquel en que se
produjo la invalidez, aunque a dicha fecha no se encuentre aportando”.
Asimismo, el TC ha establecido en el fundamento 40 de la sentencia emitida en el Expediente
N° 02513-2007-PA/TC, con carácter de precedente, la fecha en la que se genera el derecho a la
pensión vitalicia o de invalidez por enfermedad profesional. Así precisó que esto ocurre en la
fecha del dictamen o certificado médico emitido por una Comisión Médica Evaluadora Califi-
cadora de Incapacidades de EsSalud, o del Ministerio de Salud o de una EPS, que acredita la
existencia de la enfermedad profesional. Dicho criterio resulta aplicable mutatis mutandis a los
casos de pensión de invalidez del régimen del Decreto Ley N° 19990, en razón de establecerse
la fecha en la que se produjo la referida invalidez.
En el presente caso, se advierte que el causante de la demandante tenía incapacidad permanente
por adolecer de cardiopatía coronaria; sin embargo, del cuadro de aportaciones, se aprecia que
le fueron reconocidos 11 años y 7 meses de aportes, de los cuales ningún periodo se encuentra
comprendido dentro de los 36 meses anteriores a la fecha de ocurrida la contingencia. Por tal
motivo, no habiendo el causante reunido los requisitos previstos en el artículo 25, inciso b), del
Decreto Ley N° 19990 para que pudiere corresponderle acceder a la pensión de invalidez, tam-
poco corresponde que a la recurrente se le otorgue la pensión de viudez que solicita.
La presente sentencia jurisprudencial podrá aplicarse para otros procesos sobre el derecho a
una pensión de viudez en razón de la pensión de invalidez del cónyuge. El TC señala, además
que, no habiendo el causante reunido los requisitos del Decreto Ley N° 19990 para acceder a
la pensión de invalidez, tampoco corresponde que a la recurrente se le otorgue la pensión de
viudez.
286
JURISPRUDENCIA
RELEVANTE COMENTADA
LABORAL Y PREVISIONAL
En el presente caso el Tribunal Constitucional declaró fundada la demanda de amparo
por haberse acreditado la vulneración del derecho a la pensión, dado que el demandante
cumplía con los requisitos establecidos en la norma para solicitar la pensión de jubila-
ción para los trabajadores de construcción civil. Sobre el particular, el Tribunal Consti-
tucional considera que procede otorgarle la pensión de jubilación por cumplir tanto con
la edad mínima como con los aportes mínimos exigidos para acceder a dicha pensión.
288
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
5. El recurrente adjunta copia simple de su documento nacional de identidad (f. 2), donde se
consigna que nació el 28 de enero de 1953; por ende, cumplió 55 años el 28 de enero de
2008, por lo que tiene la edad requerida para acceder a una pensión de jubilación del régi-
men de construcción civil en concordancia con el Decreto Ley N° 19990.
6. Asimismo, de la resolución impugnada y del cuadro resumen de aportaciones (fs. 7 y 9) se
consigna que, a la fecha de su cese ocurrido el 9 de diciembre de 1992, al actor se le recono-
cieron 22 años y 1 mes de aportaciones. Sin embargo, se le denegó la pensión solicitada por
no haber acreditado que trabajó en las labores propias de construcción civil.
FUNDAMENTO 7. Al respecto, debe precisarse que, del certificado de trabajo del
PRINCIPAL Ministerio de Transporte y Comunicaciones (f. 10), se des-
Al reunir la edad y los aportes prende que el demandante laboró desde el 2 de noviembre de
mínimos para la pensión solici- 1970 hasta el 9 de setiembre de 1992, ocupando el cargo de ca-
tada, la demanda debe ser es- pataz en la condición de obrero permanente para la Dirección
timada Departamental de Caminos de Lima, con lo cual se demuestra
que no tuvo la calidad de empleado y que se desempeñó como
capataz en labores de construcción civil por más de 15 años. Por tanto, al reunir la edad y
los aportes mínimos para la pensión solicitada, la demanda debe ser estimada (SSTC Exps.
N°s 05077-2006-PA/TC, 05246-2007-PA/TC).
8. Adicionalmente, se debe ordenar que la ONP efectúe el cálculo de los devengados confor-
LABORAL Y PREVISIONAL
me al artículo 81 del Decreto Ley N° 19990, así como de los intereses legales generados de
acuerdo con la tasa señalada en el artículo 1246 del Código Civil.
9. En la medida en que en este caso se ha acreditado que la emplazada ONP ha vulnerado el
derecho constitucional a la pensión, corresponde, de conformidad con el artículo 56 del Có-
digo Procesal Constitucional, ordenar a dicha entidad que asuma los costos procesales, los
cuales serán liquidados en la etapa de ejecución de la presente sentencia.
Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la Constitu-
ción Política del Perú.
HA RESUELTO
1. Declarar FUNDADA la demanda por haberse acreditado la vulneración del derecho a la
pensión; en consecuencia NULAS las Resoluciones N°s 46881-2009-ONP/DPR.SC/DL
19990 y 39291-2011-ONP/DPR.SC/DL 19990.
2. Ordenar que la ONP otorgue al actor la pensión de jubilación con arreglo a lo dispuesto por
el Decreto Supremo N° 018-82-TR y el Decreto Ley N° 19990, y a los fundamentos de la
presente sentencia, más el pago de las pensiones devengadas, los intereses legales y costos
procesales.
Publíquese y notifíquese.
SS. URVIOLA HANI, MIRANDA CANALES, BLUME FORTINI, RAMOS NÚÑEZ, SARDÓN DE
TABOADA, LEDESMA NARVÁEZ, ESPINOSA-SALDAÑA BARRERA
COMENTARIO
El derecho fundamental a una pensión es un derecho de configuración legal, esto significa que
nace de la Constitución, pero que queda liberada al legislador la regulación de los requisitos
para acceder a dicha pensión. Por lo tanto, la pensión1 constituye el pago de una suma dinera-
ria, con carácter vitalicio, que sustituirá la renta percibida por el asegurado cuando se presente
un estado de necesidad, con lo cual podrá satisfacer sus requerimientos básicos mínimos de
subsistencia, siempre que previamente haya cumplido los requisitos fijados por ley.
Cabe precisar, que el Decreto Supremo N° 018-82-TR establece que tienen derecho a pensión los
trabajadores de construcción civil que cuenten con 55 años de edad y acrediten haber aportado,
cuando menos, 15 años de labores en dicha actividad, o un mínimo de 5 años en los últimos 10
años anteriores a la contingencia. Sin embargo, a partir del 19 de diciembre de 1992, fecha des-
de la cual, por disposición del Decreto Ley N° 25967, ningún asegurado podrá gozar de pensión
de jubilación si no acredita haber efectuado aportaciones por un periodo no menor de 20 años
completos, sin perjuicio de los otros requisitos establecidos en la Ley.
Sobre el particular, el demandante acreditó haber cumplido con los requisitos establecidos para
acceder a una pensión de jubilación para los trabajadores de construcción civil, por ende, el TC
reconoció la vulneración del derecho a la pensión y, en consecuencia, ordenó a la ONP otorgar
al actor la pensión de jubilación con arreglo a lo dispuesto por el Decreto Supremo N° 018-82-
TR y el Decreto Ley N° 19990.
El presente pronunciamiento será aplicable para otros casos donde se vulnere el derecho a la
pensión como un derecho fundamental de configuración legal. Cabe precisar que, mediante el
Decreto Ley N° 25967, ningún asegurado podrá gozar de pensión de jubilación si no acredita
haber efectuado aportaciones por un periodo no menor de 20 años completos, sin perjuicio de
los otros requisitos establecidos en la Ley.
1 ABANTO REVILLA, César. “El contenido esencial y contenido constitucionalmente protegido del derecho fundamental a la pen-
sión”. En: Laborem. N° 06, Revista de la SPDTSS, Lima, 2006.
290
TENDENCIAS
DE JURISPRUDENCIA LABORAL
Los contratos de trabajo para obra determinada son aquellos celebrados entre un emplea-
dor y un trabajador, con objeto previamente establecido y de duración determinada. Cabe
precisar que la duración de este tipo de contratos temporales será la que resulte necesaria
para finalizar la obra determinada. Por otro lado, en este tipo de contratos, se podrán cele-
brar las renovaciones que resulten necesarias para la conclusión o terminación de la obra
objeto de la contratación.
292
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA LABORAL
Principio de causalidad
“Efectivamente, conforme a la uniforme jurisprudencia del Tribunal, como la sentencia re-
caída en el Exp. N° 1874-2002-PA/TC, se reestablecería el principio de causalidad imperan-
te en nuestro ordenamiento jurídico y se consideraría de naturaleza indeterminada un con-
trato sujeto a modalidad, conforme el artículo 77 del Decreto Supremo N° 003-97-TR, si ‘el
trabajador contratado temporalmente demuestra que el contrato se fundamentó en la exis-
tencia de simulación o fraude a las normas laborales’”.
LABORAL Y PREVISIONAL
que se contrata al actor para desempeñar un determinado cargo”.
294
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA LABORAL
LABORAL Y PREVISIONAL
ordena que se emplace al municipio demandado para que ejerza su derecho de defensa.
Asimismo, precisa que este, al incluir como parte del dominio público un predio que la
demandante aduce como suyo, podría afectar su derecho a la propiedad.
EXP. N° 00528-2012-PA/TC-CUSCO
CLAUDIA VALERIA DÍAZ DÍAZ
AUTO DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
Arequipa, 13 de agosto de 2014
VISTO
El recurso de agravio constitucional interpuesto por doña Claudia Valeria Díaz Díaz contra la
resolución expedida por la Sala Constitucional y Social de la Corte Superior de Justicia del
Cusco, de fojas 594, su fecha 18 de noviembre de 2011, que declaró improcedente la demanda
de autos.
ATENDIENDO A
1. Que con fecha 7 de abril de 2010, la recurrente interpone demanda de amparo contra el alcal-
de de la Municipalidad Distrital de San Jerónimo, de la provincia y departamento del Cusco,
solicitando tutela jurisdiccional para su derecho de propiedad. Manifiesta que es propieta-
ria y poseedora del predio ubicado en la prolongación avenida La Cultura N° 300 de distri-
to de San Jerónimo, frente al Penal de Quenqoro, el cual se encuentra inscrito en la Partida
N° 11012428 de los Registros Públicos del Cusco, razón por la cual solicitó la apertura de
una carpeta predial para cumplir con el pago del impuesto predial y que se le emita la docu-
mentación relativa a dicha obligación; sin embargo, refiere que su petición no fue tramitada
conforme a los procedimientos que establece el Texto Único de Procedimientos Adminis-
trativos de la Municipalidad, sino que siguió un procedimiento indebido contrario a la ley,
el cual tiene relación directa con la decisión arbitraria del emplazado de procurar todos los
actos posibles para que no pueda ejercer su derecho de propiedad, pues este viene haciendo
declaraciones afirmando que su propiedad es de dominio público.
Sostiene haber recibido la propiedad del citado predio producto de la herencia que recibie-
ra de su tía Lilia Díaz Quintanilla, anterior propietario que contaba con su carpeta predial y
ante la que nunca se cuestionó su derecho. En tal sentido, solicita: a) el cese de los actos des-
tinados a cuestionar su derecho de propiedad, b) que se le reconozca, mediante documento
oficial expedido por el emplazado, su condición de propietaria del predio antes descrito; y,
e) que se disponga la apertura de la carpeta predial correspondiente para el pago del impues-
to predial de su predio y se emita la documentación respectiva que acredite el cumplimiento
de dicha obligación tributaria.
2. Que el alcalde emplazado deduce las excepciones de oscuridad y ambigüedad en el modo de
proponer la demanda, de prescripción y falta de agotamiento de la vía administrativa, y con-
testa la demanda manifestando que el proceso contencioso-administrativo es una vía igual-
mente satisfactoria para tramitar su pretensión. Asimismo sostiene que el predio del cual la
recurrente pretende que se declare propietaria es de uso y dominio público, y que en la ac-
tualidad el municipio es poseedor de dicho inmueble. Respecto de la obtención de la carpeta
predial refiere que la accionante no cumplió con presentar el último recibo de pago, omisión
que al no haber sido subsanada, generó el abandono de su expediente.
3. Que el Juzgado Constitucional y Contencioso Administrativo del Cusco, con fecha 9 de ju-
nio de 2010, declaró infundadas las excepciones propuestas y con fecha 12 de julio de 2011
declaró infundada la demanda, por estimar que la recurrente recibió una respuesta negativa
por parte de la emplazada respecto de su petición de apertura de una carpeta predial, decisión
que pudo cuestionar a través de los recursos administrativos que la ley le franquea o acudir
al proceso ordinario para tramitar su pretensión.
4. Que la Sala revisora revocó la apelada y declaró improcedente la demanda, en aplicación del
artículo 5.2 del Código Procesal Constitucional.
298
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
se ha dispuesto incluir el predio del cual la recurrente sostiene ser propietaria, como área de
dominio público; hecho que no ha sido advertido por las instancias judiciales anteriores, y
que da cuenta de la existencia de un vicio procesal en la tramitación del presente proceso,
dada la ausencia del emplazamiento a dicha comuna, para ejercer su derecho de defensa con
relación a dicha situación.
6. Que bajo tales circunstancias, en aplicación estricta del artículo 20 del Código Procesal
Constitucional, este Tribunal considera pertinente reponer las cosas al estado anterior al vi-
cio producido, decretar la nulidad de los actuados a partir fojas 351 y disponer correr trasla-
do de la demanda a la Municipalidad Provincial del Cusco, otorgándosele el plazo respectivo
para que efectúe su defensa y, luego de ello, el juez de primer grado emita el pronunciamien-
to respectivo.
Por estas consideraciones, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la Cons-
titución Política del Perú.
RESUELVE
Declarar NULO todo lo actuado desde fojas 351, inclusive; y en consecuencia, se ordena al Juz-
gado Constitucional y Contencioso Administrativo del Cusco proceda a emplazar con la deman-
da a la Municipalidad Provincial del Cusco y resolverla con riguroso respeto de los plazos esta-
blecidos en el Código Procesal Constitucional.
Publíquese y notifíquese.
SS. BLUME FORTINI; RAMOS NÚÑEZ; LEDESMA NARVÁEZ
COMENTARIO
En el presente caso, el Tribunal Constitucional deja en claro que, ante la existencia de vicios
insalvables en el desarrollo de un proceso de amparo, resulta necesario declarar la nulidad de
lo actuado y realizar las actuaciones que correspondan. De acuerdo a los hechos expuestos en la
resolución bajo análisis, el emplazamiento a los implicados no habría incluido a todos, ya que la
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
Municipalidad Provincial del Cusco no tomó conocimiento sobre los hechos denunciados y al no
ser emplazada no habría podido ejercer su derecho a la defensa. Esta omisión resulta relevante
en el sentido de que fue esta la entidad que, mediante la emisión de normas, decidió incluir como
bien de dominio público la propiedad que la demandante declara como suya.
Ahora bien, en cuanto al derecho de propiedad, debemos indicar que, en sendas resoluciones,
el Tribunal ha dejado en claro que su ejercicio en algunos casos puede ser limitado por el
Estado. En este sentido, tendrían que existir, de un lado, razones que justifiquen la decisión
de la Administración y, del otro, la respectiva indemnización al administrado que ha sufrido
la expropiación de su bien. Con relación al carácter no absoluto del derecho de propiedad, el
Máximo Intérprete de la Constitución ha señalado que1 “la Constitución en su artículo 2, incisos
8 y 16, consagra el derecho a la propiedad, que es el poder jurídico que permite a una persona
usar, disfrutar, disponer y reivindicar un bien, percibir sus frutos y productos y darle destino o
condición conveniente a sus intereses, en armonía claro está con el interés común tal como lo
dispone el artículo 70 de la Constitución. Por ello, que como otros derechos fundamentales, el
de la propiedad tiene un doble carácter: subjetivo, ya que es un derecho individual y objetivo,
por ser una institución objetiva portadora de valores y funciones. Sin embargo al igual que los
demás derechos fundamentales, no es absoluto y que tiene límites”.
El Tribunal ha precisado también que2 “el ejercicio del derecho a la propiedad no es absoluto,
e importa limitaciones legales que tienen por finalidad armonizar:
- El derecho de propiedad individual con el ejercicio del mismo por parte de los demás indi-
viduos.
- El derecho de propiedad individual con el ejercicio de las restantes libertades individuales.
- El derecho de propiedad individual con el orden público y el bien común”.
Ahora bien, considerando que en el caso se encuentra en discusión el derecho de propiedad
de la actora, es necesario que los órganos administrativos implicados tengan la posibilidad de
exponer sus argumentos y precisar cuál es la situación legal del bien en discusión.
300
JURISPRUDENCIA
RELEVANTE COMENTADA
Palabras claves: Rechazo liminar, derechos arancelarios, beneficios tributarios, derecho a la igualdad
EXP. N° 02622-2013-PA/TC-LIMA
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
TURISMO CIVA S.A.C.
REPRESENTADO(A) POR JORGE PAREDES LENGUA
AUTO DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
Lima, 7 de diciembre de 2015
VISTO
El recurso de agravio constitucional interpuesto por don Jorge Paredes Lengua, en representa-
ción de la Empresa Turismo Civa S.A.C., contra la sentencia de fojas 302, de fecha 27 de marzo
de 2013, expedida por la Sexta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, que declaró
improcedente la demanda de autos; y,
ATENDIENDO A QUE
1. Con fecha 3 de febrero de 2012, la Empresa Turismo Civa S.A.C. interpone demanda de am-
paro contra el Ministerio de Economía y Finanzas, y la Intendencia de la Aduana Marítima
302
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
COMENTARIO
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
En el presente caso el Tribunal considera que las normas cuestionadas por la empresa deman-
dante son de carácter autoaplicativo y que, en ese sentido, no debía declararse la improcedencia
liminar de la demanda. Para comprender los alcances de la decisión del Máximo Intérprete de
la Constitución consideramos importante recordar las diferencias entre normas heteroaplicati-
vas y autoaplicativas. Sobre el particular el Tribunal ha señalado que1:
“[L]as normas heteroaplicativas, también denominadas de efectos mediatos, pueden ser
definidas como aquellas normas que, luego de su entrada en vigencia, requieren indefecti-
blemente de un acto de ejecución posterior para poder ser efectivas. Es decir, que la eficacia
de este tipo de normas está condicionada a la realización de actos posteriores y concretos de
aplicación. Por ende, la posible afectación del derecho no se presenta con la sola entrada en
vigencia de la norma, sino que necesariamente requiere de un acto concreto de aplicación
para que proceda el amparo a fin de evaluar su constitucionalidad”.
En sentido contrario, las normas autoaplicativas pueden ser definidas como aquellas que llevan
incorporadas en sí mismas un acto de ejecución, de modo tal que la posible afectación del dere-
cho se produce con la sola entrada en vigencia de la norma, pues esta produce efectos jurídicos
inmediatos en la esfera jurídica de los sujetos de derechos. Es decir, que este tipo de normas
con su sola entrada en vigencia crea situaciones jurídicas concretas, no siendo necesarios actos
posteriores y concretos de aplicación para que genere efectos.
En el caso bajo análisis, las normas que cuestiona la empresa (Decreto Legislativo N° 1053)
son aplicables sin la necesidad de la existencia de actos posteriores y concretos. En este sentido,
al existir un riesgo en la afectación de los derechos alegados, es razonable que la demanda sea
admitida y se determine si el derecho a la igualdad, en cuanto a la aplicación de impuestos por
importación, ha sido afectado al no otorgar a la empresa los mismos beneficios que a los impor-
tadores de naves, aeronaves y repuestos de uso aeronáutico. Además, de acuerdo a lo señalado
en la resolución bajo análisis, la no concesión de estos beneficios implica para la empresa el
otorgamiento de una garantía por la suspensión de pagos de los derechos arancelarios y el no
reconocimiento de la depreciación de los vehículos.
La decisión del Tribunal implica que el proceso continúe y que durante su desarrollo se deter-
mine si corresponde aplicar o no los beneficios tributarios a la empresa demandante. De este
modo, se determinará si la aplicación del régimen aduanero dispuesto en el Decreto Legislativo
N° 1053 lesiona el derecho a la igualdad para el pago de aranceles.
El rechazo liminar de la demanda de amparo es una alternativa a la que solo cabe acudir cuan-
do no exista margen de duda respecto de su improcedencia, es decir, cuando de una manera
manifiesta se configure una causal de improcedencia específicamente prevista en el artículo 5
del Código Procesal Constitucional. Si a pesar de que existe el riesgo de afectar un derecho
constitucional, se declara la improcedencia liminar, se incurre en un vicio procesal que una vez
corregido implicará que se admita la demanda.
304
JURISPRUDENCIA
RELEVANTE COMENTADA
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
EXP. N° 01895-2013-PA/TC-CALLAO
V.S. REPUESTOS DE CALIDAD S.A.C. Y OTROS (EXP. N° 708-2005-PA/TC-SI)
AUTO DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
Lima, 16 de noviembre de 2015
VISTO
El recurso de agravio constitucional a favor de la ejecución de una sentencia emitida por el Tri-
bunal Constitucional interpuesto por Florida Import Export E.I.R.L. contra la resolución expedi-
da por la Primera Sala Civil de la Corte Superior de Justicia del Callao, de fojas 6447, de fecha
14 de setiembre de 2011, que en la etapa de ejecución de la Sentencia N° 708-2005-PA/TC de-
claró fundado el pedido del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, destinado a la aplica-
ción del precedente recaído en la Sentencia N° 5961-2009-PA/TC al caso de autos.
ATENDIENDO A QUE
1. Con fecha 24 de setiembre de 2002, la recurrente y otras empresas importadoras de vehícu-
los y autopartes usados interpusieron una demanda de amparo contra la Superintendencia
Nacional de Aduanas y otros, con el objeto de que se declare la inaplicación de la Circular
INTA-CR-46-2002, de fecha 28 de junio de 2002. Ello en mérito a que dicha normativa dis-
puso la suspensión de importación de vehículos automotores usados de peso bruto mayor de
3.000 kilogramos y de motores, partes, piezas y repuestos usados para uso automotor, como
consecuencia de la vigencia de los Decretos de Urgencia N°s 140-2001 y 006-2002, restric-
ción que estimaron lesiva de s derechos a la igualdad ante la ley, a la libertad de contratación
y a la libre iniciativa privada.
2. El Tribunal Constitucional, mediante la sentencia emitida en el Expediente N° 708-2005-
PA/TC, declaró fundada la demanda de amparo, disponiendo la inaplicación de la Circular
N° INTA-CR-46-2002, del 28 de junio de 2002, y del artículo 1 del Decreto de Urgencia
N° 140-2001. Consideró que la suspensión de la importación de vehículos y autopartes usados,
impuesta por el Decreto de Urgencia N° 140-2001 y recogida por la circular cuestionada, re-
sultaba inconstitucional. Esa inconstitucionalidad se daba tanto por la forma, dado que dicha
medida no cumplía con los parámetros de excepcionalidad que se exige para emitir un de-
creto de urgencia; como por el fondo, por no superar el test de proporcionalidad, al resultar
una medida demasiado gravosa para resolver los problemas de seguridad vial en el transpor-
te de pasajeros.
3. En la etapa de ejecución, mediante escritos de fechas 8 de julio y 15 de setiembre de 2010,
el procurador del Ministerio de Transportes y Comunicaciones solicitó la aplicación del
precedente emitido en la STC Exp. N° 5961-2009-PA/TC, publicada el 18 de junio de 2010,
por cuanto se dispuso que el Decreto Legislativo N° 843, los Decretos Supremos N°s 045-
2000-MTC, 053-2000-MTC, 017-2005-MTC y 042-2006-MTC, y los Decretos de Ur-
gencia N°s 079-2000, 086-2000, 050-2008 y 052-2008 resultan conformes a la Constitución
y no pueden ser inaplicados en ningún proceso judicial, razón por la que solicitó la conclu-
sión del proceso.
4. Al respecto, con fecha 17 de agosto y 12 de octubre de 2010, Florida Import Export E.I.R.L.,
absolviendo el pedido del Ministerio emplazado, sostuvo que el Juzgado (en cumplimien-
to de la STC Exp. N° 00708-2005-PA/TC) estableció que a los demandantes no se les pue-
de exigir el cumplimiento de requisitos impuestos en normas dadas con posterioridad al de-
recho restablecido, por lo que solo serán de aplicación a las nuevas importaciones, mas no a
los vehículos automotores usados que, a la fecha de restituirse el derecho constitucional vio-
lado, cumplían los requisitos contenidos en la normativa vigente en aquel entonces. Por ello,
la Superintendencia Nacional de Aduanas aperturó el Código de Trato Preferencial Nacional
TNP 278, que implica la nacionalización de las unidades vehiculares cuya descripción, can-
tidad y marca obran en los contratos y las adeudas suscritos con las empresas Sociedad Im-
port Richard Car Ltda., RC Equipment Corp. y Richard Car Internacional Co., presentados
en autos.
5. En tal sentido, manifiesta que la desactivación del citado Código TNP 278, de oficio, por
parte de la Sunat, argumentando el incumplimiento del precedente recaído en la STC Exp.
N° 596l-2009-PA/TC, constituye un abuso del Derecho, pues se está aplicando de forma
306
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
retroactiva dicho precedente, cuyos alcances no deben afectar los derechos restituidos a
través de la STC Exp. N° 00708-2005-PA/TC, en la medida en que solo corresponden ser
aplicados a los procesos de amparo en trámite y no a aquellos que tienen sentencia judicial
firme.
6. El Quinto Juzgado Especializado Civil del Callao, a través de la Resolución N° 304, de fecha
29 de octubre de 2010, declaró improcedente el pedido de aplicación del precedente recaído
en la STC Exp. N° 0596l-2009-PA/TC, disponiendo las providencias necesarias para dar fiel
cumplimiento de lo ordenado. Asimismo, estimó que en la etapa de ejecución no cabe discutir
la constitucionalidad de los Decretos Supremos N°s 017-2005-MTC y 042-2006-MTC o del
Decreto de Urgencia N° 050-2008, puesto que hacer ello implicaría soslayar la esencia mis-
ma de la cosa juzgada y la seguridad jurídica, particularmente porque el referido precedente
no resulta aplicable en atención a lo dispuesto por el artículo 204 de la Constitución Política
del Perú. Agrega que el cierre de los códigos TNP por parte de la Sunat solo evidencia el
incumplimiento de la STC Exp. N° 00708-2005-PA/TC, razón por la que dispuso su reapertura.
7. El procurador ad hoc adjunto de la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administra-
ción Tributaria (Sunat), con fecha 10 de diciembre de 2010, interpone recurso de apelación
contra la Resolución N° 304. Manifiesta que la STC Exp. N° 00708-2005-PAITC disponía
la inaplicación del Decreto de Urgencia N° 140-2001 y de las circulares complementarias a
ella, por lo que dicha sentencia permite a los demandantes importar vehículos y autopartes
usados, sujetos al cumplimiento de los requisitos legales vigentes. Por esta razón, aduce que
cuando el juez de ejecución infiere y permite la importación de vehículos observando las
normas que se encontraban vigentes al momento de la entrada en vigor de la norma inapli-
cada, no está ejecutando la sentencia, sino más bien amplía el fallo a situaciones no conside-
radas en la sentencia en ejecución. Por ende, es errado que el Juzgado, a través de la resolu-
ción impugnada, disponga la inaplicación de los Decretos Supremos N°s 0l7-2005-MTC y
042-2006-MTC o del Decreto de Urgencia N° 050-2008, más aún cuando su contenido re-
sulta distinto al que regulaba el inaplicado Decreto de Urgencia N° 140-2001.
8. Agrega que, al disponerse la reapertura de los códigos TNP en los términos que venían fun-
cionando por parte del juez ejecutor, se está disponiendo la inaplicación de los Decretos Su-
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
premos N°s 017-2005-MTC y 042-2006-MTC y de los Decretos de Urgencia N°s 050-2008
y 052-2008, en cuanto establecen requisitos para la importación de vehículos usados, nor-
mas cuya constitucionalidad ha sido confirmada por el Tribunal Constitucional.
9. Mediante el Oficio N° 1883-2002-37-0701-JR-CI-05-S-1-SCC, del 21 de noviembre de
2011, la Primera Sala Civil de la Corte Superior del Callao pone en conocimiento del Quin-
to Juzgado Civil del Callao la emisión de la Resolución N° 4, de fecha 14 de setiembre de
2011, que revocó el mandato contenido en la Resolución N° 304, de fecha 29 de octubre de
2010, y, reformando dicho mandato, declaró fundado el pedido de aplicación del precedente
recaído en la STC Exp. N° 05961-2009-PA/TC al caso de autos y concluido el proceso. Ello
en mérito a que la inaplicación del Decreto de Urgencia N° 140-2001 dispuesta por el Tri-
bunal Constitucional no consagró la invariabilidad de la normativa reglamentaria que has-
ta la dación del referido decreto de urgencia regulaba la importación de vehículos y repues-
tos usados, ni que su pronunciamiento suponía que tal importación no podía ser suspendida
o prohibida, sino que para ello se exige una ley ordinaria o que concurran las circunstancias
excepcionales o urgentes que justifiquen dicha medida.
10. Asimismo, la Sala revisora señaló que, por efecto de la STC Exp. N° 00708-2005-PA/TC, no
resultaba aplicable a los demandantes la suspensión de importación de vehículos y autopar-
tes usados dispuesto por el Decreto de Urgencia N° 140-2001, pero que dicha importación
tendría que ceñirse a la regulación existente hasta el momento en que se dispuso la suspen-
sión y hasta que tal regulación variase. Por ello, resulta inconstitucional considerar como in-
variable el régimen de importación existente en aquel entonces.
11. Con fecha 25 de noviembre de 2011, Florida Import Export E.I.R.L. interpone recurso de
agravio constitucional contra la Resolución 4, de fecha 14 de setiembre de 2011. La Prime-
ra Sala Civil de la Corte Superior de Justicia del Callao, mediante Resolución N° 7, de fecha
30 de noviembre de 2011, declaró improcedente el recurso de agravio promovido por Flo-
rida Import Export E.I.R.L. Contra dicha decisión, Florida Import Export E.I.R.L. interpo-
ne recurso de queja ante el Tribunal Constitucional. Mediante la Resolución de fecha 11 de
mayo de 2012, recaída en el Expediente N° 4-2012-Q/TC, se declaró fundado el recurso de
queja interpuesto por Florida Import Export E.I.R.L.
12. Conviene entonces tener presente que, con fecha 18 de junio de 2010, el Tribunal Constitucio-
nal publicó la STC Exp. N° 05961-2009-PA/TC, con carácter de precedente, referido a la mate-
ria de importación de vehículos y autopartes usados, pronunciamiento en el cual se verificó que:
Los requisitos para la importación de vehículos automotores usados [contenidos en De-
creto Legislativo N° 843, o de los Decretos Supremos N°s 045-2000-MTC, 053-2000-
MTC, 017-2005-MTC y 042-2006-MTC o de los Decretos de Urgencia N°s 079-2000,
086-2000, 050-2008 y 052-2008], constituyen un límite legítimo, razonable y propor-
cional al ejercicio de los derechos constitucionales al trabajo y a las libertades de traba-
jo, de empresa, de contratación y de iniciativa privada, porque persiguen como fin cons-
titucional la protección de los derechos a un medio ambiente equilibrado y adecuado y
a la salud de las personas (Cfr. fundamento 10).
13. En razón de ello, se establecieron varias reglas. La primera de ellas tiene vinculación directa con
la resolución del presente caso. Así, en el literal a) del fundamento 21, se dispuso lo siguiente:
a) Que el contenido normativo del Decreto Legislativo N° 843, de los Decretos Supremos
N°s 045-2000-MTC, 053-2000-MTC, 017-2005-MTC y 042-2006-MTC y de los De-
cretos de Urgencia N°s 079-2000, 086-2000, 0502008 y 052-2008 es conforme con la
Constitución, por cuanto no vulnera en forma directa ni indirecta el contenido constitu-
cional de los derechos al trabajo y a las libertades de trabajo, de empresa, de contrata-
ción y de iniciativa privada, por lo que los decretos mencionados no pueden ser inapli-
cados en ninguna clase de proceso por los jueces del Poder Judicial.
En tal sentido, todos los jueces del Poder Judicial que conozcan de cualquier clase de
proceso en el que se cuestione la constitucionalidad del Decreto Legislativo N° 843 o
de los Decretos Supremos N°s 045-2000-MTC, 053-2000-MTC, 017-2005-MTC y 042-
2006-MTC, o de los Decretos de Urgencia N°s 079-2000, 086-2000, 050-2008 y 052-
2008, por imperio del tercer párrafo del artículo VI del Título Preliminar del C.P.Const.
y de la Primera Disposición General de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional, tie-
nen el deber de confirmar la constitucionalidad de su contenido normativo.
14. La citada regla del precedente resulta clara y determina el 5 de noviembre de 2008 como la
fecha límite de eficacia de las resoluciones judiciales que inaplicaron el Decreto Legislativo
N° 843 o los Decretos Supremos N°s 045-2000-MTC, 053-2000-MTC, 017-2005-MTC y
308
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
FUNDAMENTO 19. Este Tribunal Constitucional señaló entonces, por un lado, que
PRINCIPAL la suspensión de la importación de vehículos y autopartes usa-
dos resultaba inconstitucional por cuestiones de forma, dado
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
La medida resultaba inconstitu-
cional por no superar el test de que dicha medida no cumplía con los parámetros de excepcio-
proporcionalidad nalidad, imprevisibilidad y urgencia que se exige para la emi-
sión de un decreto de urgencia.
20. Y de otra parte, este Tribunal consideró que la medida impuesta por el referido decreto resul-
taba inconstitucional por el fondo, por no superar el test de proporcionalidad, debido a que
esta resultaba demasiado gravosa para resolver los problemas de seguridad vial en el trans-
porte de pasajeros que pretendía solucionar.
FUNDAMENTO 24. Esta Sala del Tribunal Constitucional, luego de revisar diver-
PRINCIPAL sas resoluciones que se han emitido durante la etapa de ejecu-
Juez incurrió en contradiccio- ción del presente caso, considera pertinente dejar sentadas las
nes al aplicar, en ejecución de irregularidades que allí encuentra, pues resulta particularmen-
la STC Exp. N° 00708-2005-PA/ te singular que el juez del Quinto Juzgado Civil del Callao,
TC, el Decreto Supremo N° 017-
2005-MTC don Jaime San Martín Borja, en reiteradas ocasiones, haya
ampliado la ejecución de la STC Exp. N° 00708 2005-PA/TC
a la inaplicación del Decreto Supremo N° 017-2005-MTC. Aquello ocurrió a pesar de que, a
través de la Resolución 4, de fecha 1 de octubre de 2007, la Primera Sala Civil del Callao le
ordenara dar respuesta a la petición de inaplicación de dicho dispositivo legal que le solici-
tara Florida Import Export E.I.R.L., con fecha 29 de octubre de 2007 (folio 2360). Expresa-
mente, el referido juez sostuvo lo siguiente a través de la Resolución 119, de fecha 9 de ene-
ro de 2008 (folio 2585):
“[E]n el caso concreto la no aplicación del artículo 1 del Decreto de Urgencia N° 140-
2001 que suspendía la importación de vehículos y la Circular N° INTA-CR-46-2002 re-
ferida a la suspensión de importación de vehículo y por consiguiente el restablecimiento
de la importación de vehículos automotores usados, sin embargo de ninguna mane-
ra se puede restablecer la restitución o restablecimiento de derechos de los vehículos
automotores usados que no cumplan con los requisitos del Decreto Supremo N° 017-
2005-MTC, norma que en ningún momento suspende la importación de vehículos auto-
motores usados. sino mas bien establece requisitos mínimos de calidad para su impor-
tación, situación completamente distinta a la establecida por el Tribunal Constitucional
Décimo Tercero.- Estando a lo expresamente solicitado por el demandante Comm-
part Internacional S.R.L., respecto a que se oficie precisando que el Decreto Supremo
310
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
legales vigentes, aplicables a dichas importaciones.
28. Consecuentemente, esta Sala del Tribunal Constitucional no puede pasar por alto dicha con-
ducta irregular en el trámite del presente proceso. Por esta razón, considera necesario notifi-
car la presente sentencia al Órgano de Control de la Magistratura para que proceda confor-
me a sus atribuciones.
Por estas consideraciones, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la Cons-
titución Política del Perú.
RESUELVE, con el fundamento de voto del magistrado Espinosa-Saldaña Barrera que se
agrega:
1. Declarar INFUNDADO el recurso de agravio constitucional promovido por Florida Import
Export E.I.R.L.
2. Notificar al Órgano de Control de la Magistratura la presente sentencia para que proceda
conforme a sus atribuciones, de acuerdo con lo expuesto en los fundamento 13 supra.
Publíquese y notifiquese.
SS. MIRANDA CANALES; SARDÓN DE TABOADA; ESPINOSA-SALDAÑA BARRERA
312
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
funcional, el Tribunal Constitucional peruano debe entender que en rigor a quien corres-
ponde diseñar o mejorar los diferentes procesos constitucionales existentes es el legislador,
máxime si se toma en cuenta la referencia a una reserva de Ley orgánica establecida en el ar-
tículo 200 de nuestra Constitución.
6. Lo recientemente señalado, por cierto, no debe llevar al inmovilismo de un Tribunal Cons-
titucional, cuya labor es precisamente la de defender y promover la fuerza normativa de la
Constitución y la vigencia efectiva de las derechos, labor que, por cierto, implica resolver
conforme a Derecho, inclusive muy a despecho de los vacíos o insuficiencias que pueda pre-
sentar el ordenamiento jurídico vigente del país donde le toca actuar.
7. Estamos pues ante materias sobre las cuales se hace necesario conversar, y evaluar lo deci-
dido en su momento por anteriores composiciones de este Tribunal, máxime cuando se apre-
cia cuál es la actual formulación de medios como el recurso de la apelación por salto a favor
de la ejecución de una sentencia del Tribunal Constitucional, o el recurso de agravio a favor
de la ejecución de sentencias del Poder Judicial emitidas en segundo grado, o el recurso de
agravio a favor de la ejecución de una sentencia del Tribunal Constitucional.
8. En síntesis: en tanto y en cuanto estas son las actuales pautas establecidas, y su constitucio-
nalidad no ha sido formalmente cuestionada, todavía seguirán existiendo pronunciamientos
en función de mecanismos como la apelación por salto tal como hoy se encuentran conce-
bidas. Sin embargo, resulta indispensable analizar si lo ahora previsto permite una partici-
pación del Tribunal Constitucional peruano que, sin romper los parámetros constitucional o
legalmente necesarios y su real capacidad operativa, asegura el cabal cumplimiento de sus
propias sentencias de manera debidamente coordinada con otras entidades estatales y con-
tando con los apremios necesarios para garantizar su efectiva materialización.
S. ESPINOSA-SALDAÑA BARRERA
COMENTARIO
El cumplimiento de las sentencias emitidas por el Tribunal Constitucional debe realizarse sobre
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
la base de lo dispuesto en su texto. En este sentido, si existen dudas en cuanto a su interpretación
o alcance, las partes pueden solicitar la aclaración correspondiente. De este modo, la ejecución
de lo dispuesto en la sentencia no puede realizarse ya sea ampliando o reduciendo sus alcances.
En el presente caso, la empresa señala que, habiéndose dictado una sentencia favorable en
la que el Tribunal declaró que no debían aplicársele disposiciones que en su momento fueron
declaradas inconstitucionales, no corresponde que se le aplique un precedente emitido con fe-
cha posterior que dispone lo contrario. Sobre el particular, el Tribunal precisó que, si bien la
resolución emitida a favor del demandante le permitía importar vehículos automotores usados,
ello no implicaba que la empresa dejaría de cumplir la normativa en la que se establecen de-
terminados requisitos legales para hacerlo. En este sentido, el Tribunal señaló que la STC Exp.
N° 00708-2005-PA/TC no contiene mandato alguno destinado a habilitar este tipo de importa-
ción sin el cumplimiento de requisitos legales, razón por la cual la resolución emitida por el juz-
gado en la que se dispone la conclusión del proceso no causa ningún tipo de agravio ya que ha
sido emitida de conformidad a la STC Exp. N° 05961 -2009-PA/TC que dispone que el Decreto
Legislativo N° 843, los Decretos Supremos N°s 045-2000-MTC, 053-2000-MTC, 017-2005-MTC
y 042-2006- MTC, y los Decretos de Urgencias N°s 079-2000, 086-2000, 050-2008 y 052-2008
resultan conformes a la Constitución y no pueden ser inaplicados en ningún proceso judicial.
El Tribunal deja en claro que las normas citadas, cuya constitucionalidad se reconoció en el
precedente, fijan el primer criterio sobre la importación de vehículos y autopartes usados y que
no pueden ser desconocidas por autoridad judicial ni administrativa alguna, ni por los adminis-
trados. En este sentido, la empresa que presentó el recurso de agravio constitucional no puede
soslayar lo dispuesto en el precedente e intentar, en virtud de lo dispuesto en una sentencia
anterior que la beneficia, seguir importando este tipo de vehículos alegando la institución de la
cosa juzgada y pretender ignorar lo dispuesto en un precedente.
Si bien en el caso el Tribunal declaró infundado el recurso de agravio constitucional, la grave-
dad está en que en un periodo, se dieron resoluciones en las que para el cumplimiento de la STC
Exp. N° 00708-2005-PA/TC se dispuso la inaplicación del Decreto Supremo N° 017-2005-MTC
posibilitando así la importación de vehículos sin el cumplimiento de los requisitos fijados en el
citado dispositivo legal. Hechos como estos, sin duda, generan desconfianza en la labor realiza-
da por los jueces pues no solo se incumplió un precedente, sino que se afectó el interés público
al permitir la comercialización de determinados vehículos sin cumplir los requisitos necesarios
para su circulación.
314
TENDENCIAS
DE JURISPRUDENCIA ADMINISTRATIVA
El artículo 43 de la Constitución Política del Perú establece que el Estado es único e indivi-
sible y que se organiza según el principio de división de poderes. En el caso particular de los
gobiernos regionales y locales, si bien estos gozan de autonomía política, económica y ad-
ministrativa en los asuntos de su competencia, no pueden incurrir en autarquía y actuar ex-
tralimitándose en el ejercicio de las funciones que el ordenamiento les ha asignado. A con-
tinuación citaremos los alcances más relevantes que el Tribunal Constitucional ha emitido
con relación a las facultades de los citados gobiernos.
1. Ejercicio de competencias
Por tanto, sobre la base de su autonomía política, los gobiernos regionales se constituyen en
los órganos productores de normas regionales de carácter general con rango de ley, las cua-
les en nuestro sistema de fuentes se denominan ordenanzas regionales, conforme al artículo
37 de la Ley N° 27867, Ley Orgánica de Regiones”.
1. Autogobierno
316
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA ADMINISTRATIVA
2. Autonomía económica
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
3. Autonomía institucional
1. Intereses locales
318
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA ADMINISTRATIVA
3. Poder y descentralización
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
este proceso cuenta con diversas etapas a través de las cuales se posibilitará las respecti-
vas transferencias en materia de protección del medio ambiente y otras de vital importan-
cia para las regiones y los gobiernos provinciales y locales, proceso en el cual será necesa-
rio hacer uso de diversos mecanismos y principios rectores para alcanzar la finalidad para
el que fue diseñado este proceso –el desarrollo integral del país– sin que ello implique olvi-
dar que nuestro país políticamente es unitario”.
ordenamiento jurídico que rige a este’, pues lo contrario significaría confundir la autono-
mía con la autarquía”.
320
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA ADMINISTRATIVA
3. Principio de coordinación
ADMINISTRATIVA Y TRIBUTARIA
“[C]uando se revisan las facultades otorgadas en cada caso tanto a las municipalidades pro-
vinciales como a las distritales, aparece una estructura claramente ordenada y que permite
distinguir las competencias otorgadas en cada caso, siendo necesario que entre los gobier-
nos locales provincial y distritales exista la debida coordinación en el desempeño de sus
atribuciones y que, en su actuación, cada uno de los gobiernos locales proceda en el ejerci-
cio regular de sus atribuciones, respetando las competencias otorgadas o reconocidas a los
otros gobiernos locales”.
una demanda de amparo interpuesta contra las resoluciones judiciales que ordenaron
el remate de un inmueble. Al respecto, el demandante argumentaba que su inmueble fue
valorado muy por debajo del valor del mercado y, por tanto, solicitó que se realice una
nueva tasación. Sin embargo, el Colegiado descartó analizar este caso, pues dicha dis-
cusión corresponde a la justicia ordinaria.
Palabras claves: Amparo contra resoluciones judiciales, debido proceso, tasación, remate, justicia
constitucional, justicia ordinaria
EXP. N° 03379-2013-PA/TC-LIMA
BANCO REPÚBLICA EN LIQUIDACIÓN REPRESENTADO(A) POR GUSTAVO
ANTENOR JORGE ROJAS-APODERADO
AUTO DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
Lima, 23 de noviembre de 2015
VISTO
El recurso de agravio constitucional interpuesto por el Banco República en Liquidación, a tra-
vés de su representante, contra la resolución de fojas 216, su fecha 19 de abril de 2013, expedi-
da por la Sexta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima que declaró improcedente la
demanda de autos; y,
ATENDIENDO A QUE
1. Con fecha 26 de julio de 2012 el recurrente interpone demanda de amparo contra el juez a
cargo del Vigésimo Noveno Juzgado Especializado en lo Laboral de Lima, y los jueces inte-
grantes de la Segunda Sala Laboral de la Corte Superior de Justicia de Lima, solicitando se
declaren nulas: i) la resolución de fecha 4 de julio de 2011, expedida por el Juzgado, que de-
claró improcedente el pedido de nulidad formulado contra la programación de fecha de re-
mate del inmueble; ii) la resolución de fecha 2 de agosto de 2011, expedida por el Juzgado,
que declaró improcedente el pedido de nueva tasación; iii) la resolución de fecha 17 de ene-
ro de 2012, expedida por la Sala, que confirmó las improcedencias de los pedidos de nulidad
y de nueva tasación; asimismo, solicita, iv) que de producirse el remate del inmueble, este
refleje su valor real en el mercado, debiendo realizarse una nueva tasación pericial.
2. Sostiene que en el contexto de la tramitación del proceso judicial sobre ejecución de resolu-
ción administrativa seguido por el señor Luis Hilares Baca y otros contra Unión Producto-
res de Leche S.A. (Exp. N° 6004-1994), una vez decretado un embargo, se pretende sacar a
remate el inmueble de su propiedad, sito en Av. Venezuela S/N Lima constituido por el lote
de 8 861,84 m2 que fue adquirido por un monto de USD 1’169,000,00, de su anterior pro-
pietario Mapache Internacional S.A., que lo habla adquirido de los señores Luis Tomasevich
Venturini y Joyita Huerta de Tomasevich, y estos a su vez de la Empresa Unión Productores
de Leche S.A., rematándolo a un precio absolutamente desactualizado y subvaluado respec-
to de su precio actual, motivo por el cual solicitó la nulidad del remate y una nueva tasación
del inmueble, pedidos que fueron desestimados, lo que a su entender vulnera sus derechos al
debido proceso y a la propiedad.
3. El Tercer Juzgado Constitucional de Lima, con resolución de fecha 1 de agosto de 2012 de-
clara improcedente la demanda, al considerar que la pretensión planteada implicaría un nue-
vo análisis de fondo del asunto relacionado con el remate del inmueble materia de ejecución.
A su turno, la Sexta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, con resolución de
fecha 19 de abril de 2013, confirma la apelada, tras considerar que la interpretación del de-
recho ordinario y su aplicación a los casos individuales son asuntos de los órganos jurisdic-
cionales competentes.
324
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
6. En consecuencia, se debe rechazar la demanda en aplicación del artículo 5, inciso 1 del Có-
digo Procesal Constitucional, el cual establece que “no proceden los procesos constituciona-
les cuando (...) los hechos y el petitorio de la demanda no están referidos en forma directa al
contenido constitucionalmente protegido del derecho invocado”.
Por estas consideraciones, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la Cons-
titución Política del Perú.
RESUELVE, con la participación de la magistrada Ledesma Narváez, en reemplazo del magis-
trado Miranda Canales, por permiso autorizado por el Pleno de 21 de octubre de 2014; y con el
fundamento de voto del magistrado Espinosa-Saldaña Barrera que se agrega.
Declarar IMPROCEDENTE la demanda de amparo.
Publíquese y notifíquese.
SS. SARDÓN DE TABOADA, LEDESMA NARVÁEZ, ESPINOSA-SALDAÑA BARRERA
1 Ver, por ejemplo, SSTC Exps. N°s 01439-2013-PA/TC, 00978-2012-PA/TC, 02716-2011-PA/TC y 02598-2010-PA/TC; entre otras.
326
JURISPRUDENCIA RELEVANTE COMENTADA
COMENTARIO
Una vez más el Tribunal Constitucional se enfrenta a los límites de la jurisdicción constitucio-
nal. Casos similares al que motivó la resolución bajo comentario abundan en la jurisprudencia
emitida por el Colegiado, confirmando los constantes conflictos entre la justicia ordinaria y la
justicia constitucional.
El proceso de amparo contra resoluciones judiciales ocupa una gran porción de la carga actual
de los jueces constitucionales. La afectación del debido proceso y, en específico, de la debida
motivación, constituyen las principales causales que sustentan estas demandas.
No obstante, en la mayor parte de casos la controversia planteada por el demandante supone
el análisis de materias que competen únicamente a los jueces ordinarios. Así, en el caso bajo
comentario, nos encontramos conformes con la decisión del TC de declarar improcedente una
demanda de amparo que busca ampliar la discusión acerca de la tasación de un inmueble. Este
criterio resulta conforme al principio de corrección funcional en la medida en que se pretendía
extraer una discusión propia de la justicia civil hacia la justicia constitucional.
Ahora bien, pese a la copiosa jurisprudencia del Tribunal Constitucional que rechaza el análisis
de asuntos cuya competencia corresponde a los jueces ordinarios, este tipo de demandas sigue
aumentando innecesariamente la carga de los jueces constitucionales.
Ello se explica, en gran medida, por los bajos costos que implica iniciar un proceso de amparo,
lo cual incentiva la interposición de demandas carentes de sustento jurídico. Por tanto, conside-
ramos importante que, en respuesta, los jueces apliquen las prerrogativas que se les ha otorgado
por ley y sancionen a los abogados que presentan este tipo de demandas.
CIVIL, COMERCIAL Y PROCESAL
Serán declaradas improcedentes aquellas demandas de amparo que, alegando la afectación del
derecho de propiedad, pretendan llevar a sede constitucional la discusión referida a la valora-
ción de inmuebles para disponer su remate judicial.
TENDENCIAS
DE JURISPRUDENCIA CIVIL
LA PROPIEDAD
328
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA CIVIL
Así, mientras que en este último el objeto de la propiedad son las cosas u objetos materiales
susceptibles de valoración, para el derecho constitucional la propiedad no queda ‘enclaus-
trada’ en el marco del dominio y de los derechos reales, sino que abarca y se extiende a la
pluralidad in totum de los bienes materiales e inmateriales que integran el patrimonio de una
persona y que, por ende, son susceptibles de apreciación económica”.
330
TENDENCIAS DE JURISPRUDENCIA CIVIL
Una suscriptora nos cuenta que una clienta suya fue víctima de un ataque con agua
hirviente en el rostro por parte de su expareja, lo que causó lesiones que han desfigurado
por completo su apariencia. Añade que, por el cierre del padrón electoral ante las próxi-
mas elecciones, es imposible modificar la fotografía que incluye el documento nacional de
identidad (DNI). Esto le ha traído problemas a su clienta, pues no pudo viajar para some-
terse a una cirugía reconstructiva. En este punto, nos comenta que los dependientes de la
aerolínea le informaron que no era posible verificar su identidad debido a que su rostro no
aparece como en su DNI. Nuestra suscriptora añade que le preocupan los problemas que
esta situación puede generar para que su clienta ejerza su derecho al voto, ya que si no
le permiten sufragar se le impondrá una multa injustamente. Ante esta delicada situación,
nos pregunta qué puede hacer.
RESPUESTA
Ante el impedimento de abordar un avión, es posible interponer una demanda de hábeas cor-
pus por la restricción ilegítima del derecho a la libertad de tránsito (que, en este caso, guarda co-
nexión con el derecho a la salud). Para los comicios electorales (futuros, al momento en que se
formuló esta consulta), será posible acreditar la identidad de la persona votante con una Certifi-
cación de Inscripción, emitida por el Reniec a solicitud de la persona interesada.
FUNDAMENTACIÓN
1. El derecho a la identidad
Según la Constitución (artículo 2, inciso 1), todas las personas tenemos derecho a la identidad
y, además, al respeto de nuestra identidad étnica y cultural (artículos 2, inciso 19, y 89). Contie-
ne, además, la prohibición de hacer referencia en los documentos de identidad sobre el estado
civil de los padres o de la naturaleza de la filiación (artículo 6) y la obligación de que los servi-
cios educativos, sean públicos o privados, respeten el derecho a la identidad del educando (ar-
tículo 15).
La Norma Fundamental es escueta respecto al desarrollo de este derecho fundamental, por ello,
resulta más importante tener en cuenta la explicación de la jurisprudencia constitucional sobre
el contenido de este derecho. Así, el Tribunal Constitucional ha precisado que esta constituye
un atributo esencial de la persona que ocupa un lugar primordial y que debe ser entendido como
el derecho a ser reconocido estrictamente por lo que uno es y por el modo como es. Es decir, se
trata del derecho a ser individualizado según determinados rasgos distintivos, esencialmente de
carácter objetivo (nombres, herencia genética, características corporales, etc.) y otros derivados
del desarrollo y comportamiento personal, de carácter subjetivo (ideología, identidad cultural,
valores, reputación, etc.).
Cuando una persona invoca su identidad, en principio lo hace para que se la distinga frente
a otras, pero aun cuando a menudo tal distinción pueda percibirse con suma facilidad a
partir de datos tan elementales como el nombre o las características físicas (por citar dos
ejemplos), existen determinados supuestos en que tal distinción ha de requerir de referentes
mucho más complejos, como puede ser el caso de las costumbres, o las creencias (por citar
otros dos casos). El entendimiento de tal derecho, por consiguiente, no puede concebirse de
una forma inmediatista, sino necesariamente de manera integral.
STC Exp. N° 02273-2005-PHC/TC, f. j. 23
Una limitación válida del derecho a la libertad de tránsito será, por ejemplo, aquel impuesto por
motivos de sanidad pública. Si las autoridades competentes consideran necesario restringir el
336
CONSULTA DEL MES
ingreso a determinadas zonas del territorio nacional para evitar que se propague una enfermedad,
entonces no podría afirmarse que la restricción es ilegítima y, menos aún, que carece de sustento.
[E]n nuestro ordenamiento, el [DNI] tiene una doble función: de un lado, permite que el
derecho a la identidad se haga efectivo, en tanto posibilita la identificación precisa de su
titular; y, de otro, constituye un requisito para el ejercicio de los derechos civiles y políticos
consagrados por la Constitución. Además (…), es requerido para el desarrollo de activi-
dades comerciales, trámites judiciales y otros trámites de carácter personal, [por] lo que
[carecer de él] supone una limitación al ejercicio de otros derechos ciudadanos, uno de los
cuales está referido a la libertad individual.
STC Exp. N° 05829-2009-PA/TC, f. j. 6
3.2. ¿Qué puede hacerse para verificar la identidad de una persona cuando el
DNI resulta insuficiente o inútil para ello?
Cuando no es posible identificar a una persona a través del DNI o con los sistemas de identifi-
cación biométrica que se encuentren disponibles, corresponderá acudir a las oficinas del Reniec
para que emita una certificación de inscripción4, que contiene información sobre los datos para
identificar al titular de una inscripción en el Registro Único de Identificación de Personas Natu-
rales. Ello servirá para situaciones futuras, como los comicios electorales.
En el caso de la imposibilidad de abordar un vuelo, si bien es cierto que los aeropuertos naciona-
les aún no tienen implementada la identificación biométrica5, también es cierto que existen otros
mecanismos para corroborar la identidad de la persona en ese momento. Por ejemplo, a través de
la Consulta en línea de Reniec, que permite acceder a la base de datos. Si la aerolínea no cuen-
ta con ese servicio, resultaba posible que la administración del aeropuerto o una dependencia es-
tatal que tenga oficinas ahí, como la Superintendencia Nacional de Migraciones, sí lo tuvieran.
Además, atendiendo a las circunstancias del caso descrito, los certificados médicos hubieran
sido documentos importantes a tener en cuenta.
En este caso, podría interponerse una demanda de hábeas corpus contra la aerolínea por la res-
tricción ilegítima a la libertad de tránsito y se obtendría una decisión favorable6, pero esta, desde
luego, solo podría limitarse a declarar la vulneración del derecho fundamental y ordenar que este
no se repita. No obstante, una sentencia declarativa en ese sentido sería importante para otros
caminos legales en los que pueda obtenerse alguna reparación por los perjuicios a la salud de la
persona que hubiera causado el impedimento de abordar el vuelo.
338
CUADRO DE RESOLUCIONES
RELEVANTES
CUADRO DE RESOLUCIONES
RELEVANTES
Precisan que negar el servicio de transporte público por tener el Documento Na-
cional de Identidad (DNI) caducado no solo afecta el derecho a la libertad de
tránsito sino, además, el derecho a no ser privado del DNI; esto último, en tan-
to que se le quitaría los efectos jurídicos deseados. Declaran infundada la de-
STC Exp. N° 02310-2013-PA/TC
manda de amparo contra hábeas corpus interpuesta por el representante de la
(19/02/2016)
aerolínea LAN. La demanda de hábeas corpus fue declarada fundada en am-
bas instancias con el mismo fundamento: la prohibición de no dejar abordar a la
demandante (proceso de hábeas corpus) por presentar el DNI vencido limitó su
derecho a la libertad de tránsito.
Precisan que las relaciones sociales de los funcionarios públicos que no tienen
vinculación con el cargo que desempeñan en el Estado no son de interés públi-
co. Es por ello que se declaró fundada la demanda de amparo interpuesta por
dos funcionarios del Ministerio Público que tienen una relación extramatrimo-
nial. A ellos se les había iniciado procedimientos sancionadores, los que tenían STC Exp. N° 03485-2012-PA/TC
como base un vídeo de ambos demandantes en un cuarto de hotel mantenien- (11/03/2016)
do relaciones íntimas. El Colegiado precisó que ello afecta el derecho a la in-
timidad y que debido a que esta relación no se vincula a su desempeño como
fiscales, el video es una prueba prohibida ya que no hay un interés público so-
bre el contenido del video.
Nota: Por razones editoriales el presente cuadro comprende las resoluciones del Tribunal Constitucional publicadas entre el
19 de febrero y el 20 de marzo de 2016.
342
ÍNDICE DE SUMILLAS
344
ÍNDICE DE SUMILLAS
motivada y si ha sido expedida con previa audiencia del interesado es un análisis de fondo
(y no de forma), es incorrecto emplear uno de estos argumentos, o ambos, para declarar im-
procedente una demanda. ....................................................................................................... 137
X Las mujeres con dinero pueden comprar una pastilla, pero el Estado
no puede distribuirla a las más pobres
Gabriela J. Oporto Patroni
La autora critica la contradicción del Tribunal Constitucional en lo relacionado a la distribu-
ción de la anticoncepción oral de emergencia (AOE), más conocida como la píldora del día si-
guiente. Luego de recordar en qué consistió cada decisión, plantea interrogantes respecto a las
consecuencias derivadas del cambio de criterio. Considera que esta situación ha llevado a in-
crementar las diferencias entre mujeres en materia de derechos sexuales y reproductivos, sobre
la base de su poder adquisitivo. ................................................................................................... 157
346
ÍNDICE DE SUMILLAS
de nuestro Tribunal Constitucional, analizando los diferentes mecanismos de elección que exis-
ten a nivel internacional. Considera que, si bien un tribunal de ese nivel emite decisiones jurí-
dicas, también es importante que sus integrantes tengan en cuenta las ideologías políticas que
conviven en una determinada sociedad. ...................................................................................... 180
X TC permite que persona con DNI caduco pueda abordar avión en sal-
vaguarda de la libertad de tránsito
STC Exp. N° 02310-2013-PA/TC
Con anterioridad al presente amparo, una señora interpuso demanda de hábeas corpus en con-
tra de Lan por habérsele impedido el embarque a un aeropuerto por tener su DNI caduco. Di-
cha demanda fue estimada en primera y segunda instancia. En esta oportunidad, Lan interpu-
so un amparo contra dicho hábeas corpus. El TC ha declarado infundada esta demanda, resal-
tando, una vez más, la prevalencia de la libertad de tránsito sobre los requisitos de forma que
pueden presentarse en este tipo de casos. .................................................................................... 245
348
ÍNDICE DE SUMILLAS
350