Está en la página 1de 15

Departamento de Formación

formacion.iad.ctcd@juntadeandalucia.es

DOCUMENTACIÓN

200608001

PSICOMOTRICIDAD EN EL MEDIO ACUÁTICO

CONCEPTO DE PSICOMOTRICIDAD Y ELEMENTOS


QUE LO COMPONEN

***

ANA BELÉN PALOMO JIMÉNEZ


Maestra en Educación Infantil

Mairena del Aljarafe (Sevilla)


22 y 23 de junio de 2006
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

1. ORIGEN Y DETERMINACIÓN DEL CONCEPTO DE PSICOMOTRICIDAD

El término fue creado por Dupré en 1900 para poner en evidencia el paralelismo
entre desarrollo motriz y desarrollo intelectual entre los retrasados mentales. Es un
concepto médico, sin aplicación práctica.
Piaget y Schilder le dan otra dimensión, para ellos es un proceso general de
desarrollo de las facultades mentales a partir de la experiencia motriz, verificable en
todos los niños. Aquí la psicomotricidad se centra en la reeducación, se presta al
servicio de las preocupaciones pedagógicas, y del fracaso escolar en la escuela primaria.
El verdadero nacimiento de la psicomotricidad es en 1966, cuando se crea la
Sociedad Francesa de Educación y Reeducación Psicomotriz con Bernard Aucouturier,
André Lapierre, Le Bouch y Bayer. Todos estos autores parten del supuesto de que la
educación psicomotriz es la base de toda educación.
Está demostrado que el movimiento es el fundamento de toda maduración física
y psíquica del hombre; considerando esto, podemos entender la psicomotricidad como
el desarrollo físico, psíquico e intelectual que se produce en el sujeto a través del
movimiento.
Conclusión: la Psicomotricidad nació en los servicios de neuro-psiquiatría
infantil con el nombre de reeducación psicomotriz. Su imagen primera estaba ligada a la
patología, pero la corriente educativa se ha superpuesto poco a poco a la práctica inicial.

Definición del concepto de psicomotricidad

El concepto se compone de dos partes: psico (se refiere tanto a la inteligencia


como a la vida emocional) y motricidad (movimiento), algunos autores han intentado
plasmar en sus definiciones la unión de ambas partes para así entender mejor el
concepto.
A juicio de G. Lagrange(1976):
- La psicomotricidad prepara al niño para la vida del adulto. Considera que la
educación psicomotora, el movimiento, no es más que un soporte que permite al niño
adquirir unos conceptos abstractos, unas percepciones y unas sensaciones que le
brinden el conocimiento de su cuerpo, y a través de él, el conocimiento del mundo
que le rodea.
- La psicomotricidad educa al niño en su globalidad, ya que actúa conjuntamente
sobre sus diferentes comportamientos: intelectuales, afectivos, sociales, motores y
psicomotores, favoreciendo la evolución de su esquema corporal y de su
organización perceptiva.

Lapierre y B. Acouturier han considerado la psicomotricidad desde un punto de


vista distinto de su aspecto clásico, basado en la ejecución motriz, y afirman que no es
suficiente movilizar la musculatura voluntaria para ejecutar un acto reflexionado y que
no pone en juego más que el sistema cortical (regulador de la armonía interna del
movimiento), sino movilizar también y en especial el sistema hipotalámico (modulador
del tono emocional). Esto puede llevarse a cabo solamente a través de una vivencia en
donde la dimensión afectiva real, profunda y espontánea no queda excluida. (1977).
Estos autores consideran que la psicomotricidad es el acercamiento al
movimiento a través de la dimensión psicológica, es expresión, pulsión de la historia de
la personalidad por medio de la vía del cuerpo. El núcleo psico-afectivo de cada ser, al

1
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

que podríamos llamar yo profundo, se halla íntimamente unido a las experiencias


corporales, a las modelaciones tónicas de las vivencias del cuerpo, a la carga afectiva
inducida por el movimiento y a la situación del cuerpo en relación con el otro y con el
objeto.
Según lo expuesto, la psicomotricidad aparece como el conjunto de
comportamientos técnicos-gestuales, tanto intencionados como involuntarios. La
función motriz, en definitiva, no es nada sin el aspecto psíquico; por la intervención del
psiquismo, el movimiento se convierte en gesto, es decir, en portador de respuesta, de
intencionalidad y de significación.

Bases y ámbitos de actuación

La práctica psicomotriz va dirigida al niño, esencialmente porque en él se


encuentra la plenitud de la expresividad motriz. En él se da la unión entre estructura
motriz, estructura afectiva y posibilidades cognitivas.
La manera de ser del niño en su expresividad motriz podemos analizarla bajo los
tres componentes de su relación en el espacio (Arnaiz, 1988):
1. El aspecto neuromotor, que nos facilita las posibilidades motrices de
coordinación sobre el plano vertical, horizontal y sobre los objetos.
2. El aspecto afectivo, que nos permite captar lo que pertenece a la afectividad del
niño, la emoción que acompaña su placer-displacer en el espacio.
3. La dimensión cognitiva, que nos dice cómo el niño descubre el espacio y lo
integra en su conocimiento, cómo utiliza el material en el espacio, cómo
organiza los objetos, es decir, cómo se implica en el proceso cognitivo en el
espacio.
Desde este punto de vista, la práctica psicomotriz es una intervención del
profesional ante la expresividad del niño.
Toda práctica en psicomotricidad debe respetar la expresividad del niño, desde
la más limitada hasta la más expresiva.
El psicomotricista debe tener dicha actitud o disponibilidad al trabajar con los
niños, debe respetarlos, comprenderlos, ayudar a que integren su expresividad motriz a
la hora de interactuar en el espacio, con los objetos y con las personas. Nunca se debe
intervenir de forma aislada sobre parte de su estructura global (motriz, afectiva y
cognitiva), sino hacerlo de tal manera que las tres estructuras estén reunidas en la
capacidad del niño para investir con su entorno.
Este es el punto de partida de la psicomotricidad y hay que situarlo desde el
nacimiento hasta los 8 años, edad hasta la cual se manifiesta plenamente la globalidad.
En este periodo, la expresividad motriz nos permite descubrir el modo de hacer del niño
y nos ofrece siempre la posibilidad de ayudarle, tanto en el campo educativo (niño
sano), como reeducativo (con algún problema en su desarrollo) y terapéutico (con
problemas graves).

Objetivos de la educación psicomotriz


Mejorar el conocimiento del cuerpo.
Aceptarse a sí mismo.
Mejorar el ajuste de la conducta.
Adquirir autonomía verdadera.
Acceder a la responsabilidad en el marco de la vida social.

2
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

Todos estos objetivos se pueden agrupar en:


Desarrollar las capacidades.
Modificar actitudes personales.
Saber actuar en grupo.

2. LA INTERVENCIÓN

Principios básicos:

La psicomotricidad se sitúa dentro de una concepción del desarrollo y de la


maduración del individuo.
Dicho desarrollo encuentra su causa en la interacción activa del sujeto con su
medio.
El desarrollo de las complejas capacidades mentales se logra a partir del
conocimiento y el control de la propia actividad corporal, es decir, de la
construcción y asimilación del esquema corporal.
La intervención ha de ser adaptada a la evolución y desarrollo del sujeto.

El psicomotricista debe tener en cuenta (para desarrollar la intervención) que:

La causa del desarrollo psicológico del niño es la interacción del sujeto que
crece con el medio que le rodea.
El desarrollo motriz es paralelo al desarrollo psicológico, son inseparables. Es
un proceso único.
El esquema corporal es la referencia permanente del ser humano, base del futuro
pensamiento abstracto.
El sincretismo infantil. Globalización de la acción: es la manera por la que los
niños perciben y organizan la información.
El interés y la motivación potencian el desarrollo de las capacidades de cada
uno. El aprendizaje debe ser significativo.
El movimiento del cuerpo es esencial en el comportamiento y en la expresión
personal.
La vivencia corporal favorece la representación mental.
El lenguaje es el gran organizador de la vida psíquica:
- La vivencia corporal se hace consciente mediante la palabra, instrumento
que nos hace evolucionar.
- El acceso al lenguaje, primera forma de representación, es lo que permite
al niño acceder a la representación mental, al símbolo y al manejo del
pensamiento.

Niveles de intervención:

Nivel educativo, para favorecer el desarrollo normal del niño.


Nivel de reeducación, cuando el desarrollo o el proceso de aprendizaje está
alterado y el niño necesita ayuda para superar dificultades. Dentro y fuera del
colegio (Gabinetes).
Intervención terapéutica, el niño padece trastornos de tal envergadura que no es
posible atenderlo en la estructura escolar corriente.

3
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

Formas de actuación:

Técnicas no directivas: vivencialistas (B. Aucouturier y A. Lapierre).


- Observan las producciones del niño (expresividad motriz). El psicomotricista,
basándose en su fundamentación teórica, actúa sobre el espacio/tiempo, los
objetos y las relaciones interpersonales.
- En la educación infantil ayudan al niño a canalizar las dificultades emocionales y
a experimentar con los iguales y con los adultos, en un ambiente de seguridad.
- Se trabaja hasta los 7/8 años, permite programaciones muy generales, facilitan el
desenvolvimiento espontáneo de los niños y la resolución de conflictos.

Técnicas Directivas: mecanicistas. (Le Bouch, Picq y Vayer, Ajuliaguerra y Da


Fonseca).
- Programan las actuaciones previamente, utilizando distintos recursos.
- Seleccionan los contenidos y materiales para responder a las demandas del niño
y hacerle progresar.
- Permiten trabajar contenidos curriculares de forma organizada y sistemática de
una manera global e integradora del aprendizaje.

El Juego: la actividad psicomotora es a menudo considerada en todos sus momentos


y en todos sus aspectos como juego.
- La actividad lúdica es una conducta universal en el espacio y el tiempo
observable en las especies animales.
- El juego se caracteriza por tener un fin en sí mismo y es sin duda la actividad
predominante en el niño:
- Con el juego se alivian angustias y tensiones: me siento libre.
- Establezco relaciones personales con los otros.
- Conozco mi propio cuerpo y sus posibilidades
- Conozco todo lo que me rodea
- Siempre que juego me divierto

3. CONTENIDOS PSICOMOTORES

Los contenidos psicomotores son:


A. Esquema corporal
B. Conductas motrices de base
Coordinación dinámica general.
Coordinación oculo-manual.
Equilibrio.
Control global y segmentario del cuerpo.
Tonicidad.
C. Conductas perceptivo-motrices
Organización perceptiva.
Estructuración espacial.
Estructuración temporal.
D. Conductas neuromotrices
Lateralidad.

4
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

A. ESQUEMA CORPORAL

El concepto de esquema corporal viene determinado en cada individuo por el


conocimiento o toma de conciencia que tenga de su propio cuerpo.
El esquema corporal tiene un carácter evolutivo, siendo el cuerpo el objeto que
el niño percibe. Desde que nace percibe sensaciones de satisfacción o insatisfacción, de
dolor, visuales y auditivas. Antes de conocer el mundo que le rodea, el niño conoce su
cuerpo.
Las sensaciones que permiten al niño percibir su cuerpo y el mundo que le rodea
son:
- Sensaciones extereoceptivas: llegan a través de los sentidos y nos aportan datos
sobre el exterior o la superficie del cuerpo.
- Sensaciones interoceptivas: se localizan en el interior del cuerpo, en las vísceras, y
nos informan sobre el estado general del organismo.
- Sensaciones propioceptivas: toman datos de las terminaciones ubicadas en los
huesos, articulaciones y músculos. Nos informan sobre:
- Contracción-distensión de los músculos.
- Las actividades del cuerpo: movimientos y posiciones.
- El tono y el equilibrio.

Le Bouch define el esquema corporal como: La intuición global o conocimiento


inmediato de nuestro propio cuerpo, sea en estado de reposo o en movimiento, en
función de la interrelación de sus partes y, sobre todo, de su relación con el espacio y
los objetos que nos rodean.
El esquema corporal, como el esquema espacial y el esquema temporal, también
se construye y sigue las etapas del desarrollo intelectual, muy implicado con el
desarrollo afectivo social y sobre la base del desarrollo motor.
El desarrollo de la personalidad y la inteligencia, y el conocimiento de las
personas y objetos que nos rodean, tienen su punto de partida en la adecuada
estructuración del esquema corporal, y si esta estructuración es inadecuada surgirán
problemas personales, familiares, escolares y sociales.

Elementos del esquema corporal

El tono
- El estado de tensión de los músculos de nuestro cuerpo no es algo estático, sino
dinámico.
- Es vigilancia y disponibilidad para hacer en un momento dado un movimiento, un
gesto o mantener una postura.
- La actividad tónica tiene una estrecha relación con la tensión psíquica.
- Por las sensaciones propioceptivas que provoca, contribuye a la adquisición del
esquema corporal.

El tono como medio de comunicación


El diálogo tónico: es la relación que establece el cuerpo del niño con el entorno
(personas y cosas).
- A través de él regulamos las reacciones emotivas: nos permite
expresarnos, exteriorizarnos y actuar sobre los demás.

5
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

- Es el lenguaje principal de la afectividad, por ello desempeña un papel


decisivo en el desarrollo de la noción de vivencia corporal.

El control tónico postural


- El movimiento es primero emocional (excitabilidad), después voluntario (control) y
por último automático.
- La regulación tónica implica un aprendizaje que sigue un proceso: identificación,
secuenciación, automatización.
- El control tónico-postural depende de:
o El nivel de maduración
o La fuerza muscular
o Las características psicomotores individuales.
o La buena adaptación del esquema corporal al espacio.
o Las buenas relaciones afectivas con los demás.

Fases principales del desarrollo del esquema corporal

- De 0 a 3 años:
El niño depende estrechamente del medio.
En esta etapa el bebé sabe que le duele algo, pero es incapaz de localizar el lugar
en el que le duele.
No diferencia el Yo del mundo que le rodea. Egocentrismo.
La relación con la madre es muy íntima e importante para la formación del
esquema corporal y para el desarrollo de la capacidad de simbolizar.
Al caminar amplía su campo de relación, a ello colaboran sus propias
sensaciones y las que obtiene mediante la vista y el tacto.
El esquema corporal lo percibe fragmentariamente, no en su totalidad.

- De 3 a 7 años:
Comienza la conciencia de su propio cuerpo, diferenciándose a sí mismo de todo
lo demás.
Va aumentando la discriminación de sus percepciones.
Irá captando el Yo como conjunto global.
Su lateralidad se afirmará.

- De 7 a 11 años:
Logra la integración del esquema corporal.
Consigue la representación mental de su propio cuerpo en movimiento.
Se hace más clara y precisa la diferenciación entre el Yo y los objetos.
Hacia el final de este período se alcanza la adquisición de la imagen corporal
total y completa.

B. LAS CONDUCTAS MOTRICES DE BASE

El equilibrio

La función del equilibrio es mantener relativamente estable el centro de


gravedad del cuerpo.

6
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

Se reconocen tres tipos de equilibrio:


Equilibrio estático: movimientos compensatorios para mantener la postura
(equilibro postural).
Equilibrio dinámico: conciencia de la base en la que se realiza la actividad.
Equilibrio después del movimiento: permite recuperar la posición estática
después de una actividad dinámica.

El equilibrio está relacionado con otros órganos:


- Los órganos sensoriales: vista y oído.
- El sistema muscular, el sentido kinestésico y laberíntico.

Existen relaciones estrechas entre las alteraciones del equilibrio estático y


estados de ansiedad y de inseguridad.
Algunos niños presentan dificultades para mantener el equilibrio en altura (falso
vértigo), está asociado a problemas psicológicos.

La coordinación dinámica general

Se denominan ejercicios de coordinación dinámica general aquellos que exigen


recíproco ajuste de todas las partes del cuerpo y, en la mayoría de los casos, implican
locomoción.
Dentro de la coordinación dinámica general encontramos una gran variedad de
ejercicios y acciones, como:
- Ejercicios de cuadrupedia y gateo.
- Ejercicios de marcha, carrera, salto, trepa, transporte...
- Patinar, montar en bici, nadar.

La marcha: se educa junto a ejercicios de equilibración y está asociada a la


sucesión temporal.
La carrera: mejora paralelamente la equilibración general y la confianza en sí
mismo. Son ejercicios de la continuación normal de la marcha.
El trepar: por espalderas, cuerdas, bancos suecos, etc. son buenos ejercicios para
contrarrestar el miedo. Gustan mucho.
El salto: ejercicio por excelencia de la coordinación dinámica general, después
de la marcha. Gran logro que implica control muscular, conocimiento del cuerpo
y dominio del espacio.

El grado de dificultad en las actividades está determinado por:


- El manejo del centro de gravedad, cambiando la altura.
- El manejo del centro de gravedad, cambiando la distancia.
- Cambios en la dirección del movimiento en el cuerpo.

Coordinación óculo-manual

Este tipo de coordinación está dentro de la coordinación motriz fina, que es la


capacidad para realizar movimientos muy específicos: movimientos finos del rostro, y
todos aquellos que requieren la participación de manos y dedos.

7
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

La coordinación ojo-mano o viso-manual es la capacidad de un individuo para


utilizar simultáneamente las manos y la vista con objeto de realizar una tarea o
actividad.
Las actividades para el desarrollo óculo-manual son:
Actividades propias de la autonomía (alimentación y vestido).
Actividades como: coser, dibujar, recortar, picar, encestar, meter-sacar, lanzar y
recibir balones, movimientos finos de la mano...
Programas de pre-escritura.

Control global y segmentario del cuerpo

Se desarrollará a través de todas las conductas motrices de base, de la


respiración y de la relajación.

Tonicidad

El estado tónico traduce un equilibrio entre la periferia y los centros nerviosos


que tocan niveles de la personalidad profunda.
Se ha demostrado que la alteración del estado tónico no afecta a la pérdida de
ejecución, sino a la iniciativa y al proyecto de movimiento. La catatonia por ejemplo, es
un problema tónico que se encuentra en los esquizofrénicos.
La función tónica está relacionada con todas las manifestaciones de orden
afectivo, emotivo, cognitivo y motor.

De estudios realizados se desprende que:


- El niño hipotónico es de movimientos más sueltos, más suaves y más coordinados, y
acusa un menor gasto muscular. En su desarrollo están más avanzados en la prensión
y la exploración de su cuerpo. En el aspecto social, revela un comportamiento
estable que le garantiza, en correspondencia, mayor receptividad. Son normalmente
tranquilos y sosegados y reciben amor sin censuras. Este entorno afectivo interviene
en la formación del carácter del niño.
- El niño hipertónico presenta una multiplicidad de reacciones que se traducen en una
cierta carencia afectiva, en la medida en que, por su exagerada producción motora,
los diablillos provocan en las personas reacciones de ansiedad y de rechazo. Gracias
a su excesiva motricidad, el niño acusa por otro lado mayor poder de iniciativa y de
tentativa, por lo que adquiere funciones motoras fundamentales, como la marcha,
por sus propios medios.

C. CONDUCTAS PERCEPTIVO-MOTRICES

a. La percepción espacial

La organización espacial se halla íntimamente relacionada con el esquema


corporal, es decir, con el conocimiento del Yo.
Se elabora primero la localización egocéntrica o desarrollo del espacio subjetivo
y después la localización objetiva mediante la cual el niño consigue situar los
objetos sin necesidad de hacerlo en relación consigo mismo.

8
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

La orientación espacial: es la habilidad para orientarse en una dirección


determinada en el espacio, y viene mediatizada por dos dimensiones básicas:
a. El eje corporal y las nociones espaciales: arriba-abajo, delante-detrás,
izquierda-derecha, y las direcciones oblicuas.
b. Los patrones de referencia, como:
- El espacio propio, localización topográfica de los elementos del propio
cuerpo.
- El espacio inmediato, compuesto por los objetos directamente accesibles
al tacto del niño y referenciados al propio cuerpo.
- El espacio mediato, integrado por los objetos que inciden en el campo
visual del sujeto, primero son caracterizados por unas nociones
espaciales proyectadas desde el propio sujeto, y, posteriormente, se les
atribuye un esquema espacial y direccional propio.

La construcción del espacio en el niño


Según Piaget, la adquisición del espacio se da en tres etapas:
1. Espacio topológico (0 a 3 años)
En este período el niño logra una noción perceptiva o sensoriomotora del
espacio, que es la base para la construcción representativa del espacio.
- En principio se limita al campo visual y las posibilidades motrices del niño.
- Al andar el espacio se amplía, se desenvuelve en él y capta distancias y
direcciones en relación al propio cuerpo a partir de sensaciones cinéticas,
visuales y táctiles.
- Predominan los tamaños y formas y se orienta en función de sus necesidades.
2. Espacio euclidiano (3 a 7 años)
Se va consolidando el esquema corporal, favoreciendo las relaciones espaciales y
adquiriendo las nociones de:
- Tamaño: grande, pequeño, mediano.
- Dirección: a, hasta, desde, aquí.
- Situación: dentro, fuera, encima, debajo.
- Orientación: derecha, izquierda, arriba, abajo, detrás.
Coincide con la aparición de la función simbólica y el comienzo de la
interiorización de los esquemas de acción en representaciones. Imitar los
movimientos es paso previo para la representación mental de estos.
3. Espacio racional (desde los 7 años)
Después de los siete años, el espacio se concibe como un esquema general del
pensamiento, fundamentándose en la derecha y la izquierda.
- Se inicia el desarrollo de la perspectiva.
- Distingue un rombo de un cuadrado.
- Representa mentalmente un objeto en movimiento.

El espacio y los aprendizajes escolares:


- Una correcta localización espacial tiene una gran importancia para el aprendizaje de
la lectoescritura, ya que hay letras que se diferencian entre sí solamente por la
posición de alguna de sus partes respecto al trazo vertical como elemento fijo (arriba
y a la derecha: p; arriba y a la izquierda: q; abajo y a la izquierda: d; abajo y a la
derecha: b. También sucede con los números (6 y 9).

9
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

- Lo mismo sucede con la orientación espacial: una correcta orientación espacial


como patrón de desplazamientos permite seguir la direccionalidad izquierda-
derecha, arriba-abajo, derecha-izquierda para volver a comenzar a leer o a escribir la
siguiente línea.
- La organización espacial incide en la percepción integrada de fonemas y grafemas
de una sílaba, de las sílabas en la palabra y de éstas en la frase, por lo tanto conlleva
una mala comprensión del texto a nivel de lectura silenciosa y muy mala expresión
lectora (deletreo, sílabas, titubeo, etc.). Está muy unida a la estructuración espacio
temporal.

b. La percepción temporal

El tiempo es el intervalo que separa dos percepciones espaciales sucesivas, o


mejor, la coordinación de movimientos de diferentes velocidades. Asumimos en esta
definición el tiempo como duración (sus elementos son rápido-lento, mucho-poco,
largo-corto) o intervalo temporal entre dos puntos del espacio (dos sonidos), y el tiempo
como medida (tiempo métrico), que es la duración arbitraria conocida que nos sirve de
patrón (hora, día, semana, mes, año...). Debemos distinguir dos tipos de tiempo:
- El tiempo subjetivo: es aquel creado por nosotros mismos y cuya apreciación
varía según cada sujeto y la motivación, interés y tipo de actividad que éste
realice.
- El tiempo objetivo: es el científico-matemático, riguroso e invariable, es siempre
el mismo e igual para todos.
La localización temporal es la función mediante la cual el sujeto sitúa los
acontecimientos temporales en relación a sí mismo y unos en relación con otros. El
punto de partida es el esquema espacial propio, que se asienta en el esquema corporal.
La orientación temporal es la habilidad para poder orientarse en una dirección
determinada en el tiempo. Unida desde el principio al espacio y al propio cuerpo,
evoluciona desde la indiferenciación con el espacio, los movimientos con tiempo propio
y el tiempo local hasta la construcción del tiempo homogéneo, marcado por la salida del
egocentrismo y la aparición de la reversibilidad.

c. Construcción de la noción del tiempo en el niño

La percepción temporal es mucho más compleja que la espacial, en un primer


momento (período preoperatorio) el niño sólo aprecia el tiempo subjetivo relacionado
con su propia actividad, está lleno de afectividad y asociado a sus necesidades
biológicas: quiere comer o dormir cuando le apetece, no cuando es la hora. El niño a
través de su experiencia personal adquiere gradualmente las nociones de ayer, hoy,
mañana, etc., sin tener una noción clara de ordenación y duración.
En el período de las operaciones concretas, el tiempo objetivo comienza a
formar parte del esquema general de pensamiento, surgiendo la coordinación de
operaciones y adquiriendo nociones de duración y ordenación.

d. Tiempo y aprendizajes escolares


- El tiempo está estrechamente vinculado al ritmo, entendido como sucesión
de dos o más percepciones sonoras en un intervalo de tiempo. El ritmo y el
tiempo se refuerzan mutuamente.

10
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

- En la lectoescritura el cálculo de una adecuada organización temporal


posibilita la sucesión y ordenación correcta de las letras. Los números
ordinales forman parte de una organización temporal, como los cardinales de
la espacial.
- A otros niveles, la orientación temporal puede ser fuente de motivación, al
organizar el niño su trabajo y su tiempo libre.
- Al coordinar los hechos y situarlos en el tiempo, se toma conciencia del
mundo real y se sientan las bases del desarrollo de la inteligencia.

D. CONDUCTAS NEUROMOTRICES

La lateralidad

El cerebro del ser humano, a lo largo de su evolución, se estructura


funcionalmente de modo que uno de sus hemisferios parece tomar las riendas en el
proceso de análisis de la aferencia sensoriales y de control de las respuestas motrices.
Los haces nerviosos fundamentales conectan el hemisferio izquierdo con la mitad
derecha de nuestro cuerpo, y viceversa. A este proceso de maduración nerviosa se le
llama lateralización cerebral, y su manifestación externa es el establecimiento de una
dominancia lateral en los segmentos simétricos de nuestro cuerpo.
La lateralización del esquema corporal es la estructuración del yo corporal a
partir del eje de simetría derecha-izquierda.
Desde el punto de vista educativo:
- En el proceso de lateralización cerebral, la regla general es la de ayudar al
niño a lateralizarse, que sea él mismo con su práctica quien afiance su
lateralidad.
- La lateralización del esquema corporal se llevará a cabo a través del
conocimiento y control del cuerpo y de la construcción del espacio.

- Lateralidad normal: los centros de mando cerebrales se sitúan en un hemisferio u


otro.
- Lateralidad patológica: lesión del hemisferio dominante y la consecuente
reestructuración funcional para compensar la pérdida.
- Lateralidad contrariada: es la lateralización a la derecha de un zurdo normal o, más
raramente, la lateralización a la izquierda de un diestro.
- Ambidextridad: aquellos casos de indefinición fuerte, en los que no es posible
discriminar una dominancia clara de uno u otro hemisferio.

4. BENEFICIOS QUE APORTA EL MEDIO ACUÁTICO AL DESARROLLO


PSICOMOTOR

La educación psicomotriz en el medio acuático se puede definir como el proceso


desarrollado en un medio singular, el agua, donde la interacción cooperativa que se
establece entre alumnos y educadores basada en una comunicación verbal, cinestésico-
táctil y afectiva, favorece el desarrollo integral del individuo.
Las experiencias que el niño vive en el medio acuático van a proporcionarle
situaciones donde el estímulo de los sentidos, la adaptación a nuevas situaciones, el

11
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

placer de independencia, y el desarrollo armónico entre lo afectivo, lo cognitivo y lo


motriz, se hacen toda una realidad.
A través del desarrollo de la psicomotricidad en el medio acuático, se van a
obtener los siguientes beneficios en el crecimiento del niño:
1. Pronta socialización, por el trabajo grupal y de convivencia entre educadores
acuáticos y nenes.
2. Mejora del desarrollo de su propia identidad.
3. Ayuda al desarrollo afectivo y emocional.
4. Aumenta y mejora de las capacidades físicas, de forma general y global, como
base de su condición física: flexibilidad, capacidad aeróbica, fuerza e incluso
resistencia.
5. Favorece la capacidad de orientación espacio-temporal y consigue un alto grado
de percepción cinestésico-táctil en cuanto al medio acuático, sentir el agua.
6. Creciente autonomía: libertad en el medio acuático.

5. RELACIÓN DE LOS ELEMENTOS PSICOMOTORES CON LOS


CONTENIDOS DE LA ENSEÑANZA DE LA NATACIÓN

Si atendemos a las etapas de la enseñanza de la natación y sus especialidades


deportivas, en cada una de ellas encontraremos los siguientes objetivos y contenidos:

Etapa I
- El objetivo es la supervivencia en el medio acuático.
- Los contenidos son:
Familiarización
Respiración
Flotación
Propulsión

Etapa II
- El objetivo es conseguir una total autonomía de movimiento en el medio
acuático, con libertad de movimientos.
- Los contenidos son:
Desplazamientos
Giros
Saltos
Lanzamientos y recepciones

Etapa III
- El objetivo es conseguir una aproximación e iniciación a los gestos y
movimientos básicos de las especialidades deportivas de la natación.
- Los contenidos son:
Natación (crol, espalda, braza y mariposa)
Waterpolo
Natación sincronizada
Saltos de trampolín

12
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

Cuadro de relación entre los contenidos de la natación y los elementos psicomotores:

CONTENIDOS NATACIÓN ELEMENTOS PSICOMOTORES

Familiarización

Flotación

Propulsión

Desplazamientos

Saltos

Giros

Lanzamientos y recepciones

6. BIBLIOGRAFÍA

PIAGET, J. (1969). El nacimiento de la inteligencia en el niño. Madrid: Aguilar.


WALLON, P. (1974). La evolución psicológica del niño. Madrid: Grijalbo.
LE BOUCH, J. (1983). El desarrollo psicomotor desde el nacimiento hasta los 6 años.
Madrid: Doñate.
CONDE PÉREZ, E. y OTROS (1997). Educació Infantil en el medio acuático. Madrid:
Gymnos.
ACOUTOURIER, B. y LAPIERRE, A. (1975). Simbología del movimiento. Barcelona:
Científico-Médica.
VAYER, P. (1985): El diálogo corporal. Barcelona: Científico-Médica.
STAMBACK, M. (1979): Tono y Psicomotricidad. El desarrollo psicomotor de la
primera infancia.
CARMONA, M. Y OTROS (2005): Como pez en el agua. Barcelona: Hispano Europea.

13
Departamento de Formación
formacion.iad.ctcd@juntadenandalucía.es

Psicomotricidad en el medio acuático

ANEXO I
DINÁMICA DE GRUPO: ¿QUÉ ES LA PSICOMOTRICIDAD?

SOPA DE LETRAS
PSICOMOTRICIDAD

M C B Y T R U W I Q O N P L G F
R E S P I R A C I O N A T N R D
Y S S B F T H J O M K L C T E H
J P F Q V R I T M O A V G U L L
K A C J U Y N O N S Y D M S A N
N C F L K E B N L G H W T V J R
N I P E I I M O T R I C I D A D
T O N M C N D A M J N A E R C W
O L I C N T Q Z C U V N M Q I A
N V O B V K I P E O C S P U O Q
O M Y J X L B V P E O C O P U O
K B D U Q N J D I Q A P B D Z U
J V B L W O Y H Y D T D O Q X G
T S Y I E A T W K G A J Z R N E
G A G E U E R K T K N D M Z A W
R Q R H J D A D I L A R E T A L
T I O P S I Q U I S M O G Y U L

14

También podría gustarte