Por lo expuesto, considera esta agencia del Ministerio Público que si bien las etapas de
indagación preliminar e investigación disciplinaria excedieron los términos a los que se referían
los artículos 150 y 156 del Código Disciplinario Único, lo cierto es que estos hechos no
conducen automáticamente a la violación al debido proceso , toda vez que la jurisprudencia
tanto de la Corte Constitucional como del Consejo de Estado han expresado al unísono que ello
no genera invalidez de la actuación disciplinaria
escuchado en versión libre rendida el 31 de marzo de 2009, solicitar y aportar pruebas, invocar
nulidades, presentar descargos e impugnar el fallo sancionatorio, aspectos que fueros resueltos
por la accionada en primera y segunda instancia
En este caso no se configura la prescripción de la acción disciplinaria, toda vez que al examinar
el plenario y la redacción original del artículo 30 de la Ley 734 de 2002, se advierte que el acto
primigenio fue expedido y notificado dentro del término de los cinco años, en razón a que la
decisión adoptada por la Procuraduría Segunda Delegada para la Contratación Estatal se
profirió el 22 de octubre de 2009 y su notificación personal se surtió el 3 de noviembre del
mismo año, mientras que la conducta endilgada se consumó entre el 29 de diciembre de 2004 y
el 29 de junio de 2005 (período de ejecución)
Doctor
CÉSAR PALOMINO CORTES
Consejero ponente
Sección Segunda-Subsección “B”
Consejo de Estado
E. S. D.
I. ANTECEDENTES
1
Folios 7 a 16 del c. prl.
1.1. HECHOS
La parte actora, a través de apoderado judicial, señaló como supuestos fácticos los
siguientes, de los que se hace una síntesis:
Por auto del 14 de marzo de 2007, el a-quo vinculó al actor al proceso disciplinario y,
además, prorrogó el término de la investigación por tres (3) meses.
Al referirse a las causales de nulidad, el accionante hizo alusión a que los actos
administrativos se anulaban, según la teoría, por falta de competencia, desvío de poder
y expedición irregular del acto, pero en el libelo expresó que en el presente caso “la
Procuraduría General de la Nación, actuó por fuera del marco jurídico que el orden
jurídico establece para ejercer su competencia.Ya que dicho marco temporal estuvo
más que vencido en relación a los términos de la indagación preliminar (artículo 150,
Ley 734 de 2002), investigación disciplinaria (artículo 156, Ley 734 de 2002) y la
prescripción (artículo 30, Ley 734 de 2002)” 2, sin que la parte actora precisara la causal
de nulidad en que fundaba sus pretensiones.
Señaló que la indagación preliminar se inició el 26 de octubre de 2005 y que, tal como
lo dispone el artículo 150 de la Ley 734 de 2002, vencía el 19 de abril de 2006, porque
la norma establece el término de 6 meses para adelantarla, mientras que el auto de
apertura de investigación disciplinaria fue expedido el 12 de septiembre de 2006, etapa
procesal prorrogada por 3 meses más, en virtud del auto del 14 de marzo de 2007, de
modo que la etapa preliminar se extendió por más de 10 meses.
2
Texto en comillas tomado del libelo.
Concluyó señalando que la notificación del fallo de primera instancia se surtió dentro de
los cinco años de la ocurrencia de la conducta y que no se configuró el fenómeno
prescriptivo invocado.
Al respecto, observa esta agencia del Ministerio Público que es necesario determinar
las fechas de las etapas procesales, la normatividad aplicable y el análisis
jurisprudencial que sobre la materia se ha realizado, para establecer si el reproche
formulado tiene vocación de prosperar, no sin antes mencionar, como cuestión previa,
que la conducta disciplinaria enrostrada en el pliego de cargos consistió en lo siguiente:
“CARGO ÚNICO.
En cuanto a las etapas cuestionadas que rigieron el proceso disciplinario para la época
de los hechos, se constató:
En relación con la normatividad aplicable al tema, el artículo 150 de la Ley 734 de 2002
indica que el término de la etapa de indagación preliminar es de 6 meses, la cual
culmina con archivo definitivo o la apertura de investigación disciplinaria; en el sub lite
venció el 25 de abril de 2006 y después de 4 meses el a-quo profirió el auto de apertura
de investigación, cuya etapa disponía de 6 meses según la redacción original del
artículo 156 ibídem, por cuanto el artículo 52 de la Ley 1474 de 2011 incrementó el
plazo de la instrucción a 12 meses, variación legislativa que resulta pertinente hacerse
en el sub judice, en tanto que la conducta censurada en la actuación disciplinaria fue
cometida por el actor con antelación a dicha reforma legal (2004-2005), de ahí que la
accionada debía adelantar inicialmente la etapa de investigación disciplinaria entre el 12
de septiembre de 2006 y el 11 de marzo de 2007, aunque la prorrogó por 3 meses más
por medio de auto del 14 de marzo de esa anualidad.
Por lo expuesto, considera esta agencia del Ministerio Público que si bien las etapas de
indagación preliminar e investigación disciplinaria excedieron los términos a los que se
referían los artículos 1503 y 1564 del Código Disciplinario Único, lo cierto es que estos
hechos no conducen automáticamente a la violación al debido proceso , toda vez que la
jurisprudencia tanto de la Corte Constitucional como del Consejo de Estado han
expresado al unísono que ello no genera invalidez de la actuación disciplinaria; veamos:
3
“Artículo 150-En caso de duda sobre la procedencia de la investigación disciplinaria se ordenará una
indagación preliminar (…). En los demás casos la indagación preliminar tendrá una duración de seis (6)
meses (…)”.
4
Artículo 156 (Antes de la modificación introducida por la Ley 1474 de 2011): “El término de la
investigación disciplinaria será de seis meses, contados a partir de la decisión de apertura. En los
procesos que se adelanten por las faltas descritas en el artículo 48, numerales 5, 6, 7, 8, 9, 10 y 11 de
este código, la investigación disciplinaria no se podrá exceder de doce meses. Este término podrá
aumentarse hasta en una tercera parte, cuando en la misma actuación se investiguen varias faltas o a
dos o más inculpados”.
De igual forma, esa alta corporación, a través de la sentencia del 31 de enero de 2018,
proferida por la Subsección B de la Sección Segunda, dentro del radicado 00089 de
2018, con ponencia del doctor Carmelo Persono Cuéter, expresó:
El inciso 1º del artículo 30 de la Ley 734 de 2002, antes de la reforma introducida por el
artículo 132 de la Ley 1474 de 2011, establecía: «La acción disciplinaria prescribe en
cinco años contados para las faltas instantáneas desde el día de su consumación y
para las de carácter permanente o continuado desde la realización del último acto».
(…)
En pronunciamiento del 30 de junio de 2016, la Sección Segunda,
Subsección A de esta Corporación nuevamente se pronunció en cuanto a
la figura de la prescripción de la acción disciplinaria consagrada en el
artículo 30 de la Ley 734 de 2002; en esta oportunidad la Sala reiteró que
Teniendo en cuenta los precedentes judiciales señalados, es evidente que en este caso
no se configura la prescripción de la acción disciplinaria, toda vez que al examinar el
5
Sección Segunda del Consejo de Estado. MP. Luís Rafael Vergara Quintero. Exp.
11001032500020110017000
plenario y la redacción original del artículo 30 de la Ley 734 de 2002, se advierte que el
acto primigenio fue expedido y notificado dentro del término de los cinco años, en razón
a que la decisión adoptada por la Procuraduría Segunda Delegada para la Contratación
Estatal se profirió el 22 de octubre de 2009 y su notificación personal se surtió el 3 de
noviembre del mismo año, mientras que la conducta endilgada se consumó entre el 29
de diciembre de 2004 y el 29 de junio de 2005 (período de ejecución).
III. CONCEPTO