“La Modificacion de la conducta podriamos definirla como la disciplina o el campo de

especialización derivados de la Psicologia, que aplica los principios y conocimientos científicos

obtenidos por ésta y otras disciplinas afines (especialmente los de la Psicología de Aprendizaje)
para evaluar, diagnosticar, explicar y modificar o prevenir el comportamiento humano en los
distintos y variados contextos en los que pueda darse.” (Carboles, 1992).

Estas técnicas que en la actualidad pueden sobrepasar el número de 200 se agrupan dentro de uno
u otro de los 5 modelos básicos de intervención en que actualmente consideramos constituida la
Modificación de la Conducta: un modelo basado en el condicionamiento clásico, un modelo
fundamentado en el condicionamiento operante, un modelo derivado del aprendizaje social y un
modelo cognitivo-conductual.

(...)

Las técnicas cognitivo-conductuales destacan el papel de los procesos cognitivos en el desarrollo,

mantenimiento y modificación de la conducta. Podemos clasificar dichas técnicas en tres tipos: las
técnicas de entrenamiento en habilidades de enfrentamiento, las de ​resolución de problemas​ y las
de reestructuración cognitiva.

La técnica de resolución de problemas esta dirigida a facilitar la búsqueda de soluciones a

situaciones a las que las personas no saben cómo enfrentarse. Está técnica persigue el capacitar a
las personas para ver los problemas desde una perspectiva distinta, lo que les permite abordarlos
de una manera eficaz. El objetivo general es ayudar o enseñar a solucionar problemas y a tomar
decisiones; no se trata tanto de dar soluciones a un determinado problema, sino proporcionar un
modo de proceder general que el sujeto puede aplicar cuando se enfrenta con cualquier tipo de
problema que ha de resolver o con una decisión que ha de tomar.
El entrenamiento en solución de problemas está especialmente indicado en aquellas situaciones en
las que:
1. Las respuestas de solución que dan las personas se muestran ineficaces.
2. Las personas no saben exactamente cómo solventar la situación, dan vueltas y más vueltas
sobre el problema, pero no hallan la solución adecuada.
3. Las personas dan a esa situación una respuesta que puede ser eficaz a corto plazo, pero
que a largo plazo tiene consecuencias funestas.