Está en la página 1de 6

Principios filosó ficos de la

educació n
La educació n bá sica en México

Benemérita Escuela Normal Veracruzana


“Enrique C. Rébsamen”

Alumna: Eira Jhoara Vicente Pérez

Curso: Panorama actual de la educació n bá sica en México

Profesora: Yolanda Ortiz Bustamante

Abstrac

El presente ensayo toma como reseña las lecturas que fundamentan la


obligatoriedad, gratuidad y laicidad de la educación. En un punto de vista
pedagógico. Además de permitirme comparar la teoría con lo que pude
observar en mi primer acercamiento a una institución escolar, la primaria
“Profesor Gregorio Torres Quintero”.

Palabras claves:

Educación, Principios filosóficos, contexto, artículo 3°, Ley General de


Educación.
Principios filosóficos de la educación. La educación básica en México

El sistema educativo mexicano ha sufrido diversos cambios durante toda su


historia, desde impartir una educación discriminativa para unos cuantos
acaudalados regidos por la iglesia, hasta la actual educación que cumple con tres
fundamentos básicos regidos por el artículo 3° Constitucional y son la
obligatoriedad, gratuidad y laicidad.

Hablar de educación es muy importante, porque es la base de la sociedad, es a


través de ella que un pueblo puede llegar a progresar o no. En la medida que las
personas tengan acceso a ésta, un país se verá beneficiado por individuos
capacitados para cumplir su labor de libre pensamiento y una moral sólida.

La educación se entiende como un proceso de socialización de los individuos,


por medio del cual, adquieren conocimientos, valores, costumbres y hábitos.
Podríamos decir que tiene como propósitos fundamentales; transmitir el
conocimiento y formar ciudadanos. Es un proceso complejo, porque se presenta la
gran diversidad cultural que existe, lo cual la hace más complicada, pero no
imposible.

En México, la educación ha sido un tema muy polémico a lo largo de toda la


historia, pues en un principio surge con la idea de avanzar y progresar, pero con el
paso del tiempo estos ideales se han ido denigrando.

La obligatoriedad de la escuela

“La escolarización obligatoria es sólo uno de los posibles medios para recorrer
el camino hacia la igualdad” (Gimeno, J. 2000, La educación Obligatoria: Su
sentido educativo y social, p. 62). Pero no hay que dejarle toda la carga a la
educación, porque en ocasiones es esta misma la que propicia la inequidad.
Cuando desarrolla planes y programas de estudios a los que no todos pueden
acceder.

Es por eso, que deben pensarse bien las estrategias a abordar dentro del
plantel educativo tomando en cuenta los planes y programas, pero no haciendo a
un lado el contexto social en el cual están inmersos los alumnos. Ya que debemos
tener claros los objetivos que se deben cumplir.

“La misión de la escuela es permitir a todos los niños que aprendan a leer,
escribir y contar, dotarse de los programas escolares necesarios para su
desarrollo personal, su integración social y éxito profesional” (Meirieu, P. La
escuela hoy, 2004, p. 21).
Que la escuela sea obligatoria es un medio para generar individuos pensantes
capaces de adaptarse en un mundo cambiante y constantemente regido por la
tecnología, y los medios de comunicación; además de brindar la posibilidad de
crear modelos de conducta adecuados.

Escuela gratuita

El artículo 3° de la Ley General de Educación dice, que el Estado deberá


prestar los servicios de la educación básica, por lo tanto se debería de dar la
igualdad de oportunidades a todas las personas de este servicio.

La escuela es un “servicio público” porque es el Estado quien lo brinda, pero es


también una institución, porque es el espacio donde se propicia el aprendizaje,
aquel espacio donde se llevan a cabo las relaciones humanas que contrastan las
ideas y opiniones favoreciendo así el debate y el diálogo. Si todo esto no
ocurriese, la escuela no existiría, aunque se contara con la infraestructura, bancas,
mesas y demás mobiliario.

Valdría la pena preguntarnos; ¿Es cierto que la educación pública en México es


gratuita? La Ley General de Educación y el Artículo 3° Constitucional proponen
que debe ser así, sin embargo, la realidad es otra, pues en las escuelas se solicita
la aportación de cuotas de inscripción, apoyos económicos para; el mantenimiento
de las instalaciones, material didáctico, uniformes y el mismo mobiliario que
ocupan los alumnos, todo esto sustentado por las familias.

En muchos casos esta situación origina un problema, pues quienes no pueden


pagar esto, se quedan sin acceso a la educación. El no respetar esta disposición
contenida en uno de los artículos de nuestra actual Carta Magna, propicia la
desigualdad de oportunidades que tanto han querido erradicar. Generando rezago
educativo en la sociedad y propiciando que las personas no lleguen a concluir sus
estudios.

La idea de que todos somos educables, propone que todo individuo tiene
derecho a recibir educación, que nadie debe ser excluido de la escuela, aunque su
manera de aprender sea distinta a la de los otros. El buen profesor sabrá
aprovechar las diferencias para lograr un rico aprendizaje.

Laicidad en el sistema educativo

Los educadores debemos de adaptar nuestro modelo de enseñanza no


considerando doctrina alguna sino teniendo en cuenta la pluriculturalidad y
creencias religiosas de nuestros educandos, es a lo que hace referencia
Emilio Tenti Fanfani “El monoteísmo de los valores va dejando su lugar al
politeísmo de las creencias y la diversidad cultural tiene amplio reconocimiento en
nuestras sociedades” (Mirar la escuela desde afuera, p. 17).

Uno de los propósitos de la escuela, es enseñar al alumno que fuera del núcleo
familiar existen otros tipos de sociedades con las que debe interactuar, con otras
costumbres, creencias religiosas, y que no todas las familias reaccionan del
mismo modo que la propia. Para poder integrarse de una manera armónica existe
“la ley común que permite a las comunidades vivir en el mismo tiempo y espacio
sin dañarse” (Meirieu, La escuela hoy, 2004, p. 50).

La escuela establece sus propias reglas para poder crear valores unitarios en
toda la comunidad de los educandos, no tomando en cuenta los intereses de sólo
unos cuantos. Sino que parte de lo general a lo particular, es decir, que los
programas y propósitos son abordados para favorecer a las comunidades de
alumnos y familias.

Durante mi jornada de observación

Dentro de lo que pude observar en mi primer acercamiento docente, en la


Escuela Primaria Profesor Gregorio Torres Quintero, -la cual es una institución
perteneciente al tipo educativo básico de la modalidad primaria- ubicada en la
Col. Carolino Anaya de la ciudad de Xalapa, me percaté de algunas deficiencias
educativas que sufre ésta; al albergar a una gran cantidad de alumnos, los salones
tienen un sobrecupo y el docente podría tener dificultad para llamar la atención de
los niños, porque al ser tantos dentro de un mismo salón de clases, es posible que
éstos se distraigan con mucha facilidad.

También pude percatarme de cómo el contexto social, afecta directamente lo


que pasa dentro de la institución, por ejemplo; en la escuela se presentan algunas
problemáticas de violencia, que tienen que ver con los problemas del entorno
escolar como son la drogadicción y alcoholismo que viven algunas familias, lo cual
repercute en el comportamiento de los alumnos y en su desempeño.

Otra situación problemática que se ha presentado -según comentarios del


personal de la escuela-, es el fenómeno del “Bullying” (acoso físico o verbal, en
contra de una persona) entre los alumnos más pequeños de esta institución. Lo
que ha llevado a tomar medidas correctivas.

Puedo concluir que aunque la educación se basa en principios filosóficos, estos


no son respetados del todo, aún queda mucho por hacer, para que realmente
cualquier individuo tenga la oportunidad de ir a una escuela y mejorar su
desarrollo intelectual.
También hay que ser realistas y situarse en lo que está sucediendo en la
sociedad, porque aunque deseemos una mayor calidad educativa, el contexto
social influye mucho para que esta se dé o no.

En mi opinión se debería fortalecer el vínculo entre la escuela y la familia, con el


propósito de tener mejores logros en la formación de los educandos. Al involucrar
a los padres haciéndoles resaltar que la formación de los alumnos es una tarea
compartida.

¡Es hora de exigir que se cumplan los principios filosóficos de la educación!

¡Es momento de una educación de calidad!


Bibliografía

Meirieu, P (2006) Carta a un joven profesor. Barcelona: Graó. (Cap. 7)

Meirieu, P. (2004) La escuela hoy. Octaedro. Primera parte.

Gimeno, J. (2000) La educación Obligatoria: Su sentido educativo y social. Madrid:


Morata. (Cap. 4, 5 y 6).

Tenti, E. Nuevos temas en la agenda de la política educativa. Introducción: Mirar la


Escuela desde afuera.

También podría gustarte