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“La modernidad, el nacimiento del sujeto durante el renacimiento”

Adolfredo molina Agudelo.


Humanidades.
La edad moderna es el periodo comprendido desde el siglo XV al XVIII y que se
encuentra entre la Edad Media y la Edad Contemporánea, se Puede afirmar ciertamente
que este período fue considerado de intensos cambios. Donde se presentaron importante
acontecimientos como lo fueron las primeras grandes exploraciones, el renacimiento, el
absolutismo, la ilustración, la revolución francesa, etc.
La modernidad es caracterizada en términos de la creciente apropiación de las hasta
entonces dadas por sentadas competencias culturales, por formas de conocimiento
experto asociadas al capital y a los aparatos administrativos del Estado –lo que Habermas
(1987) describe como una creciente racionalización del mundo-vida–. Filosóficamente, la
modernidad implica la emergencia de la noción de "Hombre" como fundamento de todo
conocimiento del mundo, separado de lo natural y lo divino (Foucault 1973, Heidegger
1977).
El renacimiento se considera el periodo de transición entre la edad media y la edad
moderna, se puede destacar dentro de este movimiento un gran cambio en la ciencia,
tanto en el campo natural como en el campo humano.
Este periodo se considera una ruptura con las estructuras y corrientes anteriores. El
enfoque cultural deja de ser teocéntrico y pasa a ser antropocéntrico. Tomando como
punto de partida al humanismo, el hombre pasa a ser el centro de su vida, ubicándose a
sí mismo en primer plano.
Nacimiento del sujeto.
El Renacimiento trajo consigo una infinita gama de cambios, los cuales conformarían en
su totalidad el nuevo enfoque del pensamiento humano. Y al cambiar todo el
pensamiento, se da una nueva formación del individuo y la concepción de su realidad,
Todos estos cambios económicos, políticos, sociales y culturales, conllevaron a tener una
visión distinta del pensamiento medieval, la cual había reinado por muchos siglos en toda
Europa. Ahora con el Renacimiento el problema central se ubica en la forma en que el
hombre ve su entorno, pues de esta manera es como debe preocuparse de sí mismo y
resolver sus propios conflictos. Pues tendrá que aplicar la transformación de la naturaleza
en beneficio propio.
El concepto de individuo se mecía en forma dudosa y oscura. Pues durante la Edad
Media el hombre era ya considerado como un sujeto frente a Dios, el cual le
proporcionaba un “alma” única y particular en cada ser humano. Pero también se le
otorgaba una serie de obligaciones que de cumplirlas tendrían su recompensa espiritual.
Así pues, por un lado se disfrazaba un “libre albedrío”, confundiendo plenamente al sujeto
en cuanto a su forma de elegir lo que era apropiado, mientras que la Iglesia persuadía de
mil maneras distintas a que se escogiera el camino del bien, pues de optar
contrariamente se castigaría de manera cruel y dura a quien no siguiese sus normas.
De esta forma dentro del pensamiento del hombre de inicios del Renacimiento, existía aun
la visión de los dos mundos que giraban en torno al hombre: el bien y el mal, dotados de
sus propias características que asustaban o hacían soñar, Pero ya pronto se concebiría
de forma clara y distinta la libertad humana. Pues en primera instancia se marcaría un
claro rompimiento entre la religión y la vida. No es que, de ninguna manera, el humano
dejase de creer en Dios o se olvidara de los conceptos metafísicos que regían su
existencia, simplemente se adquiere una idea particular del propio sujeto por querer ser
dueño de sí mismo.
El sistema filosófico daría sus frutos en nuevas tendencias que competirían con el
pensamiento antiguo. Ya que éste se había limitado en San Agustín y Tomás de Aquino, y
no se permitía ver claramente al ser, más que en su lado metafísico. Asimismo surgieron
nuevos pensadores, creando otros conflictos existenciales, encaminados por una nueva
luz del conocimiento.
“El Renacimiento hace del hombre sujeto de acción elaborando otro estatuto para la
criatura, otra concepción de las relaciones que tiene con su creador” (Charlet François,
Historia de las Ideologías, Akal, 1989).
De hecho poco a poco el hombre se dará cuenta que es un ser libre, dotado por Dios para
la re-creación del mundo. Tendrá que fundar su propio entorno, escribir su propia historia,
pues es el autor de su destino. Es decir, se forma una idea antropocentrista de la realidad
del mundo. Incluso se da un intento de recuperación de los textos clásicos de los griegos,
regresando a varios puntos que tomarían de partida para el nuevo pensar humano.
El sujeto desde el punto de vista de la modernidad es el ser humano consciente que se
hace cargo de sus actos por decisión propia o voluntad y que toma conocimiento de la
realidad como objeto. Partiendo de esto La concepción del “sujeto” fue progresando y
transformándose a través de la historia. El filósofo Rene Descartes en el siglo XVII, padre
de la filosofía moderna y por ende de la concepción del sujeto moderno influencia que
llega hasta nuestros días, concebía al sujeto como un ser basado en su racionalidad,
responsable de tomar decisiones basándose en sus expectativas y cálculos racionales.
De allí que la importancia del sujeto cartesiano reside en que la razón es la forma por
excelencia por el cual se comprende la relación que existe entre el sujeto y objeto de
conocimiento. El “cogito” es el sujeto de la ciencia racional que entiende que la razón es
un nexo para alcanzar la verdad acerca del mundo exterior.
Bibliografía.
Modernidad:

 Fuente: http://www.decrecimiento.info/2007/04/qu-es-la-modernidad.html
 Fuente: https://definicion.de/edad-moderna/
Renacimiento:

 Fuente: https://enciclopediadehistoria.com/renacimiento/
El nacimiento del sujeto:

 Fuente:http://igeteo.mx/2012/08/la-concepcion-del-individuo-durante-el-
renacimiento/
 Fuente: https://concepto.de/sujeto/#ixzz62XW5OwHA
 Fuente: https://concepto.de/sujeto/#ixzz62XVNIX1a

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