Está en la página 1de 10

UNIDAD TORREÓN

MARCO LEGAL DE LOS NEGOCIOS

Docente: Mari Sheila Che Dzib

Conceptos de Derecho en las Transacciones


Comerciales

Alumno: Tadeo Efraim Martínez Herrera

Matricula: 33201048

Torreón Coah. 30 de Septiembre de 2020


Antecedentes del comercio y el entorno legal de los negocios

Antes de la aparición del comercio como tal, se puede mencionar como fase
intermedia la celebración de ferias y mercados, las cuales fueron desapareciendo
paulatinamente cuando el comercio logra satisfacer las exigencias por caminos
más rápidos facilitando la reunión de compradores y vendedores, a pesar de la
lentitud de las comunicaciones, las dificultades de transporte y en algunos casos
los conflictos armados. Cuando existían condiciones adversas, los mercados o
ferias se celebraban en territorio neutro, generalmente fronterizo y se pactaba
expresa o tácitamente una especie de “paz comercial” que protegía al extranjero.
Para conseguir que la feria o mercado en cuestión fuese efectivamente un centro
de contratación donde se lograra evitar el engaño y se protegiera al comerciante
extranjero, se aplicaba una severa disciplina en el funcionamiento comercial; para
ello, se unificaba el derecho aplicable y el tribunal que habría de conocer cualquier
irregularidad. La exacta ejecución de los contratos celebrados en las ferias o
mercados se aseguraba mediante una serie de disposiciones coactivas con fuerza
ejecutiva que se les daba a ciertos documentos pagaderos por medio de la
realización de procedimientos sumarísimos, los cuales podían llevar, incluso, a
prisión a los deudores.
La aparición del comercio no coincide, necesariamente, con el surgimiento del
Derecho Mercantil. Éste surge en la Edad Media entre los gremios y corporaciones
debido a los intercambios de mercaderías entre plazas y mercados. Cabe resaltar
que el surgimiento del Derecho Mercantil se debe precisamente a una reacción
ante el Derecho Civil romano que resultaba excesivamente formalista,
esquemática e insuficiente para regular las necesidades económicas de la época.
Cuando resultaron obsoletos los principios tradicionales del Derecho Civil romano,
se atendió a los usos propios de los comerciantes.
El Derecho Mercantil surge como un derecho especial frente al Civil; es un
derecho consuetudinario y uniforme, que regula relaciones y necesidades
similares de los mercaderes. Adicionalmente, se distinguió por la celeridad de las
transacciones que el tráfico de mercaderías imponía, así como la ausencia de las
formalidades requeridas por el Derecho Civil. Se empezó a dar el carácter de
universal a las reglas y principios que se aplicaban a tratos y negocios semejantes
con la posibilidad de ser celebrados a distancia; como consecuencia de la
reiteración de dichos actos se propicia la utilización de esquemas, tratos y
contratos con soluciones parecidas o iguales.
Evolución y concepto de las leyes en los negocios

El surgimiento de este derecho especial (Derecho Mercantil), separado del


Derecho Civil, conservó su carácter de privado, ya que se concretaba a regular
relaciones entre particulares. Como derecho de los comerciantes, el Derecho
Mercantil perduró hasta principios del siglo XIX, época en la que se promulgó el
Código de Comercio Francés.
Desde su origen hasta nuestros días, podemos señalar cuatro etapas por las que
evoluciona el Derecho Mercantil:
1. Edad Antigua (Leyes Rodias). En esta época no existió ningún Derecho
Mercantil como el que es conocido hoy en día; en realidad fue la
recopilación de un conjunto de usos sobre el comercio marítimo. Se sabe
que esta compilación referente al comercio marítimo alcanzó tal difusión
que el emperador romano Antonino la hizo incorporar en el Derecho
Romano.
2. Derecho Romano. En esta época tampoco se puede hablar de un Derecho
Mercantil, propiamente dicho; de acuerdo con la opinión más generalizada
de los tratadistas, “Roma no conoció un Derecho Mercantil como rama
distinta y separada de un tronco único del Derecho Privado (ius civile), entre
otras razones, porque por medio de la actividad del pretor fue posible
adaptar ese derecho a las necesidades de tráfico comercial”. Es importante
mencionar que en el Derecho Romano no se establece una distinción clara
entre Derecho Civil y Derecho Mercantil. El llamado derecho pretoriano
tenía una flexibilidad tal, que permitía dar soluciones a cada caso en
particular.
3. Edad Media. A partir del siglo X, podríamos decir, inició el nacimiento del
Derecho Mercantil, constituido para regular y proteger las actividades de los
comerciantes; éstos se inscribían en la corporación y las reglas del grupo
se aplicaban a cada uno de los asociados. Estas reglas servían para dirimir
conflictos entre ellos y sus clientes. Este derecho tendía a satisfacer las
necesidades iguales de los comerciantes, por lo cual se formó de manera
idéntica en distintas ciudades que ejercían el comercio. En esta época
surgen dos instituciones que perdurarán a lo largo de los diversos estadios
del Derecho Mercantil, la matriculación, que resulta ser antecedente del
régimen de publicidad mercantil y el registro de comercio
4. Codificación del Derecho Mercantil. Se considera que el punto de partida
de la codificación del Derecho Mercantil fue la promulgación del Código
Francés. Posteriormente, las demás naciones europeas promulgaron sus
respectivos códigos, y lo tomaron como punto de partida; asimismo, a partir
de la promulgación del código antes citado, ya no se le considera el
derecho de una clase determinada, sino un derecho regulador de una clase
especial de actos de comercio.
Relación entre el Derecho de las personas y actividad económica

La Economía puede encontrar en el Derecho un asiento y una seguridad que


facilite la realización de la actividad económica mediante un conjunto de reglas de
Derecho. El Derecho, como bien económico, muestra su vocación para organizar
la actividad económica tanto en su aspecto de ser cauce para la circulación de los
bienes y para la creación de riqueza como para establecer las reglas del juego,
para que no se lesionen entre sí los intereses contrapuestos entre los hombres y
los grupos sociales.

 De esta manera, el Derecho reintegra y coordina las dispersas particularidades


económicas, introduciendo disciplina y ordenación. La certeza jurídica es el reflejo
de una certeza conseguida en la misma esfera económica, un verdadero y típico
ejemplo de nacimiento del instituto jurídico del hecho económico.
La Economía en sus relaciones con el Derecho adquiere un perfil jurídico basado
en la certeza que permite que su actividad dirigida a la creación y circulación de
riqueza se desenvuelva dentro de los intereses de seguridad, de justicia y de
libertad.
La valoración jurídica debe enfocarse siempre buscando la realización del bien
común social que conlleva el cumplimiento y la satisfacción de las necesidades
humanas para que el hombre alcance a plenitud sus fines. De aquí que toda
valoración económica debe hallarse en última instancia subordinada al criterio
jurídico que establezca el ordenamiento nacional que, sin duda, habrá de
responder a las exigencias supremas de la vida humana.

Derecho mercantil

El Derecho Mercantil es el Derecho que regula el comercio, sin embargo, el


concepto de comercio es demasiado amplio como para considerar que todas las
actividades económicas que este comprende formen parte del Derecho Mercantil;
por otra parte, resulta que ciertas operaciones y determinadas materias que no
constituyen actividades de comercio están reguladas por dicha disciplina.
El Derecho Mercantil es la rama del Derecho Privado que regula las distintas
relaciones jurídicas que se derivan de los actos de comercio y que se establecen
respectivamente entre comerciantes, así como las normas constitutivas de las
sociedades mercantiles e instituciones de crédito como sujetos colectivos.
Fuentes formales del Derecho Mercantil

Las fuentes del Derecho mercantil son el origen de una norma o disposición de
comercio, una norma es considerada de naturaleza comercial cuando tiene
carácter de obligatoria dentro del marco jurídico, y regula las conductas en las que
se desarrolla el derecho Mercantil. La fuente del derecho comercial por excelencia
es la legislación mercantil, una ley puede considerarse de naturaleza mercantil
cuando el legislador le ha otorgado esa calidad y cuando la materia de la cual se
trate, se encuentre en esa categoría, en virtud de disposiciones de materia de
comercio.
Legislación Mercantil. Son fuentes del derecho mercantil:
• Código de Comercio.
• Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito.
• Ley General de Sociedades Mercantiles.
• Ley de Concursos Mercantiles.
• Ley de quiebras y Suspensión de pagos.
• Ley de Comercio Exterior.
• Ley de Instituciones de Crédito
• Ley de la Propiedad Industrial.

- Fuentes Formales
La Ley: El Derecho Mercantil es Derecho Positivo, se regula con disposiciones de
carácter normativo. Es una rama del Derecho Privado Común, por lo que en el
caso de ausencia de una norma específica y siendo imposible aplicar
analógicamente una disposición del propio Derecho Mercantil para completar una
laguna, regirá el Derecho común, que en este caso es el civil.
Tratados aprobados por el Congreso: Es un acuerdo escrito entre ciertos sujetos
de Derecho internacional y que se encuentra regido por este, que puede constar
de uno o varios instrumentos jurídicos conexos, y siendo indiferente su
denominación.
La Jurisprudencia: Es una interpretación de la ley y es realizada por los órganos
jurisdiccionales. No es fuente del Derecho, tal y como establece el Código Civil,
pero sirve de apoyo interpretativo. Dado el carácter profesional de los jueces y
magistrados, la jurisprudencia es consensualmente considerada como la mayor
fuente interpretativa del Derecho Positivo en caso de laguna, aunque formalmente
no sea una fuente.

Ley mercantil y los usos mercantiles

Son usos mercantiles los preceptos que surgen de la aplicación de la ley mercantil
a casos específicos a los que se refiere de manera particular y no así general.
Estos usos y prácticas comerciales tienen gran influencia en la formación del
derecho mercantil al resolver controversias entre comerciantes por afectaciones
derivadas de actos de derecho terrestre, marítimo o aéreo con base en prácticas
localistas, nacionales o internacionales.
Podemos distinguir entre:

 Usos interpretativos: se trata de prácticas profesionales que dominan la


formación de los actos jurídicos y que se sobreentienden en todos estos
actos para interpretar o completar la voluntad de las partes pero que no
regulan el contenido del contrato; no son fuentes del Derecho, sino que
sirven para aclarar el alcance de las palabras utilizadas por los
contratantes.
 Usos normativos: representan una regla de Derecho objetivo, que se
impone como tal a la voluntad de las partes.

Costumbre mercantil

La costumbre mercantil es un conjunto de usos y prácticas mercantiles realizados


por los comerciantes, ocupan un lugar de especial importancia en el Derecho
Comercial, dado que pueden adquirir la misma autoridad que la ley mercantil
siempre que cumplan ciertos requisitos como: uniformidad, que son hechos que
constituyen costumbre y deben ser ejecutados por el sector económico o grupo
que realiza la práctica.

 Reiteración: práctica o uso que debe ser constante y no transitoria o


esporádica.
 Obligatoriedad: debe considerarse obligatoria por quienes la practican.
 Publicidad: debe ser conocida ampliamente por las personas que la
practican
 Vigencia: se debe practicar en la actualidad.
 Conforme a Derecho: no podrá en ningún caso ser contraria a la ley.
 Materia mercantil: debe referirse a prácticas comerciales.

El hecho comercial que reúna los requisitos anteriores es importante porque


constituye un mecanismo ágil para que una práctica comercial pueda ser
certificada como costumbre mercantil; también contribuye a regularizar las
prácticas realizadas por los comerciantes, evitando conflictos futuros, y puede
llegar a tener la misma fuerza vinculante de una norma.
Jurisprudencia

Se entiende por jurisprudencia las reiteradas interpretaciones que de las normas


jurídicas hacen los tribunales de justicia en sus resoluciones. También puede
decirse que es el conjunto de fallos o sentencias dictadas por los órganos
jurisdiccionales del Estado. Es la interpretación jurisdiccional del derecho positivo
y se encuentra constituido por el conjunto de decisiones judiciales y en ocasiones
administrativas dictadas sobre una misma cuestión o asunto, en el mismo sentido
y en especie análogas. Su misión es completar lo que dicen las costumbres y
aplicar las mismas a la diversa variedad de casos nuevos. Cada sentencia que
emiten los tribunales contribuye a aclarar, precisar y enriquecer el sistema de
normas jurídicas y sirve de ejemplo y apoyo para resoluciones posteriores.

Fuentes históricas

Podemos señalar como fuentes históricas todas aquellas legislaciones que


muestran la situación legal de pueblos y civilizaciones antiguas, así como la
evolución del Derecho y las figuras jurídicas que aún en nuestros días tienen gran
influencia, como, por ejemplo, el Código de Napoleón, el Digesto, etcétera.

Fuentes materiales

Los factores y elementos que determinan el contenido de las normas son las
llamadas fuentes materiales.
Las fuentes materiales o reales comprenden todas las condiciones de vida que
vive una sociedad, como su problemática económica, política y social; su religión,
sus costumbres, sus tradiciones, su moral, su cultura, su idioma, su idiosincrasia,
su grado de desarrollo, su historia, hasta su clima y su ubicación geográfica, entre
muchas otras cosas.

Actos de comercio
Un acto de comercio es una figura jurídica que tiene como finalidad distinguir el
campo de actuación del Derecho mercantil con respecto al Derecho civil.
Este concepto se origina de la necesidad de distinguir casos concretos, debido a
que los negocios jurídicos, contratos y obligaciones poseen estatutos jurídicos
diferentes ya sean de Derecho civil o de Derecho mercantil.

Diversa naturaleza de los actos

Son actos de comercio, aquellos que producen modificaciones patrimoniales en


virtud de adquisiciones o transmisiones de bienes por ventas, permutas o
cesiones, de cosas muebles, materiales o inmateriales (créditos, derechos
intelectuales, marcas, etcétera), que se realicen a título oneroso (no gratuito) con
finalidad de ganancia o lucro, aunque éste no se logre, con destino a su
enajenación, en el mismo estado en que se adquirió o con modificaciones que
modifiquen su valor.

Actos esencialmente civiles

Los actos esencialmente civiles están regulados sólo por el derecho civil porque
no implican actos de intercambio de bienes o servicios, sino actos jurídicos que
tienen como base derechos personalísimos (no pueden renunciarse a ellos,
tampoco transmitirse ni enajenarse ni embargarse). Estos actos se refieren a los
comprendidos por el derecho familiar y el derecho sucesorio.

Actos absolutamente mercantiles

Estos actos son aquéllos que están regulados sólo por el derecho mercantil, nunca
por el derecho civil; dicho en otras palabras, son aquellos actos que sólo están
regulados por el Código de Comercio o alguna de las leyes mercantiles especiales
y no es posible encontrar disposición alguna relativa a estos actos en la legislación
civil.

Actos de mercantilidad condicionada

Estos actos de alguna manera están regulados tanto por la legislación civil como
por el Código de Comercio o alguna de las leyes mercantiles especiales; en otras
palabras, son aquellos actos para los que existe una doble regulación.
Artículo 75 del Código de Comercio

Artículo 75.- La ley reputa actos de comercio:


I.- Todas las adquisiciones, enajenaciones y alquileres verificados con propósito
de especulación
comercial, de mantenimientos, artículos, muebles o mercaderías, sea en estado
natural, sea después de
trabajados o labrados;
II.- Las compras y ventas de bienes inmuebles, cuando se hagan con dicho
propósito de especulación
comercial;
III.- Las compras y ventas de porciones, acciones y obligaciones de las
sociedades mercantiles;
IV.- Los contratos relativos y obligaciones del Estado ú otros títulos de crédito
corrientes en el comercio;
V.- Las empresas de abastecimientos y suministros;
VI.- Las empresas de construcciones, y trabajos públicos y privados;
VII.- Las empresas de fábricas y manufacturas;
VIII.- Las empresas de trasportes de personas o cosas, por tierra o por agua; y las
empresas de turismo;
IX.- Las librerías, y las empresas editoriales y tipográficas;
X. Las empresas de comisiones, de agencias, de oficinas de negocios
comerciales, casas de empeño
y establecimientos de ventas en pública almoneda;
XI.- Las empresas de espectáculos públicos;
XII.- Las operaciones de comisión mercantil;
XIII.- Las operaciones de mediación de negocios mercantiles;
XIV.- Las operaciones de bancos;
XV.- Todos los contratos relativos al comercio marítimo y a la navegación interior y
exterior;
XVI.- Los contratos de seguros de toda especie, siempre que sean hechos por
empresas;
XVII.- Los depósitos por causa de comercio;
XVIII.- Los depósitos en los almacenes generales y todas las operaciones hechas
sobre los certificados de depósito y bonos de prenda librados por los mismos;
XIX.- Los cheques, letras de cambio o remesas de dinero de una plaza a otra,
entre toda clase de personas;
XX.- Los vales u otros títulos a la orden o al portador, y las obligaciones de los
comerciantes, a no ser que se pruebe que se derivan de una causa extraña al
comercio;
XXI.- Las obligaciones entre comerciantes y banqueros, si no son de naturaleza
esencialmente civil;
XXII.- Los contratos y obligaciones de los empleados de los comerciantes en lo
que concierne al comercio del negociante que los tiene a su servicio;
XXIII.- La enajenación que el propietario o el cultivador hagan de los productos de
su finca o de su cultivo;
XXIV. Las operaciones contenidas en la Ley General de Títulos y Operaciones de
Crédito;
XXV.- Cualesquiera otros actos de naturaleza análoga a los expresados en este
código.
En caso de duda, la naturaleza comercial del acto será fijada por arbitrio judicial.

También podría gustarte