Explora Libros electrónicos
Categorías
Explora Audiolibros
Categorías
Explora Revistas
Categorías
Explora Documentos
Categorías
1
Daniel Núñez (2017) La Deshumanización. Por disponible en: red.pucp.edu.pe/ridei/files/2017/10/La-
Deshumanización-Daniel-Nunez.pdf
Otra forma de deshumanización es la que ocurre en el campo laboral, cuando las condiciones
para trabajar son precarias y se ofrecen salarios bajos, con horarios extensos y bajo la amenaza
permanente del desempleo.
También ocurre deshumanización cuando ocurre que las personas le otorgan mayor valor a las
cosas que a las personas, como ocurre de manera creciente por la dependencia de la
tecnología: se da mayor importancia a los objetos materiales, sin importar las condiciones que
padece el resto de la humanidad ni las consecuencias de sus acciones sobre el mundo.
En América Latina, varias naciones tuvieron la influencia de las ideologías políticas como le
liberalismo y el comunismo. Desde principios del siglo XX, se produjeron persecuciones a los
obreros y activistas comunistas, a quienes llamaban rojos. Quienes los perseguían buscaban
proteger sus intereses y mantener la sociedad de acuerdo a sus valores morales: las
tradiciones católicas, la preservación de las clases sociales y los privilegios, prevenir las
rebeliones de los pobres, entre otras muchas creencias con las cuales se discriminaron y
permitieron terribles crímenes. Durante décadas, los ciudadanos blancos del sur de Estados
Unidos lincharon a ciudadanos afroamericanos porque se mantuvieron los ideales de la
supremacía blanca que justificó la esclavitud en toda América.
Cuando las naciones europeas generaron las revoluciones industriales, alcanzaron una gran
prosperidad económica, mediante la explotación de los recursos naturales de las colonias y la
mecanización de las fábricas. Esta forma de producción, además de ofrecer la prosperidad
económica mencionada, implicó también la cosificación de los obreros de las fábricas y de los
productores de las materias primas, quienes se consideraron parte de culturas inferiores a las
que se debían someter como algo natural. Este fenómeno se ha denominado históricamente
como colonialismo.
Emigrar es una experiencia muy difícil tanto para el que abandona el país como para quien
deja su región y se instala en otra: Las personas migrantes tienen que aprender el idioma y las
costumbres del país que los acoge y enfrentan el rechazo de las personas que nacieron en
estos lugares, lo cual puede convertirse en distintas formas de violencia. Los migrantes sufren
de la deshumanización al ser considerados seres de segunda categoría o amenazas para
quienes nacieron los países que reciben a los extranjeros; son muchas las imágenes e historias
en las que los migrantes son tratados como animales y confinados a campos en los cuales
deben esperar a ser recibidos o rechazados por los gobiernos que, pueden verlos como un
problema económico, político o cultural. Miles de personas que proceden del África y del
oriente próximo, han muerto en el mar mediterráneo intentando alcanzar las costas de Italia,
España o Francia; lo mismo sucede en la frontera entre México y Estados Unidos.
La técnica y la deshumanización
Nuestra época se distingue por el uso de artefactos técnicos, los cuales tienen por objetivo
facilitar la vida de las personas, multiplicando sus fuerzas, haciéndolos más rápidos, o
automatizando procesos que de otro modo no serían posibles de realizarse. Las máquinas nos
abren un mundo de posibilidades para dominar la naturaleza y convertirla en productos que
nos hacen la vida más sencilla: podemos ir ahora más lejos en menos tiempo y con menos
dificultades; las fábricas producen gran cantidad de cosas muy rápido para que las personas
puedan consumirlas; los procesos químicos han logrado convertir el petróleo en una gran
cantidad de productos como plásticos y combustibles. El desarrollo de las máquinas se ha
producido bajo la idea de hacer artefactos cada vez más eficientes y fáciles de usar por los
consumidores, quienes los adquieren y usan de acuerdo a las necesidades que buscan
satisfacer.
Como vivimos en una economía de mercado, esto es, en una economía donde la producción se
hace para acumular riqueza, se han creado productos atractivos para las personas, quienes a
través de la publicidad conocen y son convencidos de comprar tales productos sin tener en
cuenta sus necesidades reales y atendiendo solamente a las necesidades que el mercado ha
creado sobre tales productos. A esta tendencia se la llama consumismo y ha provocado que las
sociedades actuales hayan volcado grandes esfuerzos en la creación de productos para el
entretenimiento y en productos para ser usados y desechados cuando aparezca el siguiente
modelo.
La fabricación de las cosas requiere una gran inversión en investigación científica y desarrollo
tecnológico, en el procesamiento de las materias primas, en la publicidad y comercialización de
los productos. En este modelo económico de producción, ha sido habitual que los salarios de
las personas que hacen los productos sean mal pagados. Ya desde la primera revolución
industrial, a las personas empleadas en las fábricas o en las minas les hacían trabajar hasta 20
horas diarias y el pago a veces apenas alcanzaba para la comida. Hoy en día, en los países
como China, los trabajadores laboran en fábricas donde reciben un salario escaso y sus
condiciones de trabajo han hecho que muchos se suiciden.
Un filósofo alemán llamado Immanuel Kant, al reflexionar sobre el valor de las personas,
consideró que la libertad y la autonomía constituyen el núcleo de la dignidad humana: el
reconocimiento del valor propio implica reconocer el valor de los demás, pues no es posible
ser libre si no se considera la libertad de los demás: el hombre sólo puede ser hombre
mientras sea libre, pero no puede serlo sin la libertad de los demás, es lo que Kant denomina la
sociable insociabilidad. También es famoso el principio que propone este pensador sobre el
modo en que se deben valorar la dignidad del ser humano, en el imperativo categórico: "Obra
del tal modo que uses la humanidad, tanto en tu persona como en la persona de cualquier
otro, siempre al mismo tiempo como un fin y nunca solamente como medio" (Kant, I.1996,
44s.)2
2
Kant, I. 1996. Fundamentación de la metafísica de las costumbres, México: Porrúa
La economía de mercado ha hecho que las cosas adquieran un valor desproporcionado, sin
tener en cuenta las consecuencias que estas posean para el ambiente y para las relaciones
entre los seres humanos: las redes sociales y los dispositivos electrónicos han posibilitado el
acceso a la información, pero también han hecho que las personas se aíslen y pierdan el
contacto físico, privilegiando el contacto virtual, el cual no siempre permite una verdadera
relación con el otro. Un filósofo llamado Diógenes, de la antigua Grecia, había observado la
importancia que las personas le estaban otorgando a las cosas y por ello se paseaba en el
mercado riéndose al ver todas las cosas dispuestas allí, que no necesitaba. La vida actual nos
reclama tener y usar cosas, pero ¿realmente las necesitamos? ¿estaremos siendo esclavos de
las cosas o somos capaces de disponer de ellas para nuestro beneficio?
Descosifiquémonos:
Juicio a la deshumanización:
Organice con todo el grupo un juicio contra la deshumanización: divida la clase en tres grupos,
uno que va a defender a la deshumanización, que será un estudiante y sus abogados; otro
grupo será el de los jueces y jurados y habrá otro grupo que es el acusador.
El juicio se hará en tres etapas: la primera será la de acusaciones y descargos, donde el grupo
acusador demostrará que la deshumanización es una amenaza y debe cambiar, mientras que
el grupo defensor demostrará que no es responsable de las acusaciones. El tercer grupo se
encargará de decidir cuál es la responsabilidad de la deshumanización en los problemas de la
sociedad actual y que debe hacer la sociedad para cambiar esta situación.
Discuta con sus compañeros ¿Que prácticas cotidianas nos deshumanizan? ¿Cómo podemos
cambiarlas? Realizar un mural identificando la deshumanización, mediante dibujos y frases que
muestren la influencia de la deshumanización en el entorno cotidiano.