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TALLER ERE

ANÁLISIS ‘’EL MAGIS IGNACIANO. IMPULSO A QUE LA HUMANIDAD VIVA


-APUNTES A VUELAPLUMA-‘’

Por:

José Ignacio Ramírez

COLEGIO SAN IGNACIO DE LOYOLA


Medellín
2019
1. Bibliografía texto base:
Cabarrús C.R (2003, septiembre) ‘’El Magis ignaciano. Impulso a que la
humanidad viva
-apuntes a vuelapluma-‘’ Revista Diakonia.

2. Semblanza intelectual sobre el autor:

Carlos Rafael Cabarrús s.j. (Guatemala, 1946) Es antropólogo y actual Vicerrector


de Integración Universitaria de la Universidad Rafael Landívar, en Guatemala. Es
autor de numerosos títulos sobre espiritualidad y antropología.
Fue durante mucho tiempo maestro de novicios jesuitas, donde obtuvo la
experiencia psico-espiritual que lo llevó a la preocupación por la metodología del
discernimiento cristiano. Como maestro de novicios formándose para ingresar a la
Compañía de Jesús, Cabarrús constataba las falencias y límites de los aspirantes
que dificultaban su desarrollo personal y vocacional. Apelando a recursos y
herramientas de diversas disciplinas diseñó talleres que pronto recibieron el
nombre de “talleres de crecimiento personal” (TCP). Estos rápidamente se fueron
abriendo, recibiendo a novicios de otras congregaciones, a religiosos formados y a
laicos.
Cabarrús plasmó el enfoque y la metodología de estos talleres en su libro ‘’Crecer
bebiendo del propio pozo. Taller de crecimiento personal’’ (DDB, 10ª edición,
Madrid, 2008), el cual fue producto de más de doce años de trabajo y
experimentación.
Como dice el autor, se basa en su experiencia de “haberlo hecho mal como
formador”. Esto lo impulsó a la búsqueda de materiales, de técnicas y, sobre todo,
de actitudes que le ayudaran a caminar hacia la madurez.

3. Descripción de la macro estructura del texto:

El texto comienza dando una breve introducción al concepto de la magis desde un


punto de vista lejano y general. Así mismo, introduce la relación directa de la
aplicación de esta doctrina en el desarrollo social de un ignaciano o jesuita.
‘’ Es decir, que lo más típico de un jesuita, de la persona ignaciana, debe ser este
magis, que debe convertirla en alguien que “nunca está satisfecha con lo
establecido, lo conocido, lo probado, lo ya existente”

Posteriormente, se sigue generalizando acerca del concepto del magis, pero más
específicamente acerca de lo que no es. Pues el autor asegura que el hombre por
naturaleza está habitado muchas veces por el deseo que puede reducirse
únicamente en la “necesidad”, pervirtiéndose y dañándose; y es ahí cuando el
“más” de la magis se degrada. También el autor hace referencia a varios
fenómenos sociales, políticos y económicos que se llevan a cabo en la sociedad
creyéndose que aportan a la magis ignaciana, como por ejemplo las
capacitaciones laborales y demás ‘’excelencias’’ que a la final terminan
promoviendo las cargas laborales y una extrema competitividad entre los mismos
miembros. Ese impulso es precisamente a lo que la magis no concierne.
En un segundo lugar, el autor introduce y analiza el proceso personal de Ignacio
en el descubrimiento del magis, que luego plasmó en los Ejercicios Espirituales
(EE.) en los que se puede ver cómo Ignacio logró convertir en método la gracia
que él recibió: es decir, cómo vivir el seguimiento de Jesús desde una manera
concreta y precisa. Algunos de los ejercicios que se pueden destacar es la
consciencia del pecador, la contemplación del reino, la contemplación de la
encarnación, la resurrección, entre otros.
Seguido a esto, el autor define el significado o concepto real del magis, pues para
comprenderla fue necesario conocer los ejercicios espirituales previamente. El
verdadero sentido del magis no está simplemente en esforzarse para hacer más,
sino para estar más dispuestos a recibir, mayores gracias y dones espirituales
mediante Jesús. El magis, en pocas palabras es criterio de discernimiento, pero
sobre todo un clima espiritual constante.

Finalmente, el autor concluye haciendo una breve y bonita reflexión acerca de lo


que el magis sugiere para el desarrollo psicosocial y personal del hombre, pues
según él este impulso humano de infinitud y de búsqueda debe estar sujeto
siempre a un discernimiento como concentrarse en lo que nos mueve y nos
potencia, pues es el ser que se traduce en un actuar por las grandes causas de la
humanidad y no en la personal o egoísta.
En esta última parte del texto, el autor aplica todas las reflexiones extraídas
anteriormente y las interioriza en su vida personal. Relata cómo se ha degradado y
cómo ha vuelto a cultivar el magis en su interior; pues para él y para muchos de
nosotros el ámbito cristiano representa un empuje para ser mejor y dar de
nosotros lo que más se pueda.

4. Ideas principales y secundarias.

 Primer capítulo:

Idea principal: La tendencia al más que sugiere el magis tiene que ver con nuestra
apertura al infinito y con el impulso trascendencia; es algo que es inherente de la
vida humana y que está en su propia naturaleza (a nivel biológico, psíquico,
intelectual y técnico, pero sobre todo a nivel simbólico y amoroso); sin embargo,
eso en sí mismo no comprenden al magis ignaciano en su totalidad. Estos
impulsos tienen que ser analizados detenidamente.

Idea secundaria: La gracia de Dios invita al individuo a llevar a cabo


grandes cosas (aprovechando esos impulsos humanos), sin embargo, a veces
sucede que lo que se exalta es el amor propio o egoísmo. De ahí que haya que
saber diferenciar y decidir la dirección que se le puede dar al impulso netamente
humano.
 Segundo capítulo:

Idea principal: Mediante los Ejercicios Espirituales (EE) San Ignacio logró convertir
en método la gracia o el cómo vivir el seguimiento de Jesús. Esta gracia es el
producto de entrelazar o relacionar nuestros hondos deseos con el deseo de Dios,
siempre mayor. Cuando esos deseos se armonizan y se formulan, se da el magis.

Idea secundaria: la sutileza de los Ejercicios radica en que se establezca


un profundo dialogo entre los deseos de la humanidad y los de Dios, para generar
una realidad nueva; esto debido a que el Evangelio propone una metodología para
encontrar la espiritualidad (entre Dios y las criaturas), capaz de generar una
síntesis cada vez mayor y más nueva. Cabe señalar que, otra genialidad ignaciana
es que su espiritualidad no se vive al margen de las cosas del mundo, sino en
saber qué cosas o elementos del mundo se deben tomar para realizar mejor la
misión.

 Cuarto capítulo:

Idea principal: La experiencia del magis es saber recibir el deseo de que Dios nos
coloque en las obras de mayor gloria suya o de mayor trascendencia. Y es
también estar preparados para de soportar y aguantar las consecuencias de
incomprensión, persecución y aun la muerte por ello. En pocas palabras, según
San Ignacio, la gloria divina se manifiesta en la renuncia a la gloria humana.

Idea secundaria: La finalidad del magis no está simplemente en esforzarse


para hacer más, sino para estar más dispuestos a recibir día tras día, mayores
gracias y dones espirituales, que tienen la dirección de la palabra de Dios.

 Quinto capítulo:

Idea principal: La aplicación del magis en el contexto del Evangelio es el que


podemos llegar a realizar obras mayores que las que hizo el mismo Jesús.
El cristiano actúa por la fe en Él y por la esperanza que nos ha regalado, en la
colaboración a la búsqueda del Reino y esto significa también estar dispuestos a
aceptar sus secuelas históricas y la reivindicación en la resurrección.

Idea secundaria: Se debe evitar en el análisis de lo del magis, cualquier


fervor indiscreto o género de competitividad, puesto que se puede confundir con lo
que realmente es el magis evangélico e ignaciano.
 Séptimo capítulo:

Idea principal: ‘’el magis nace de un impulso natural que tiene su origen en la
capacidad humana de trascenderse a uno mismo: esa sed inagotable de saber, de
preguntarnos, de cuestionarnos, de buscar, de no quedarnos con lo conocido, de
enamorarnos, de maravillarnos ante la vida; del abrirnos al misterio’’.

Idea secundaria: La búsqueda del magis requiere de un trabajo constante


de crecimiento, y es alcanzado cuando el deseo de cada uno de nosotros es
captado por la gracia del Señor y encaja perfectamente con los deseos para con la
humanidad.

5. Opinión personal:
El ser humano desarrolla sus actitudes o modos de comportamiento frente a la familia,
la sociedad, la política, la economía, etc, a lo largo de los años mediante las
influencias del medio en el que cada uno se desenvuelve desde su nacimiento. Sin
embargo, el individuo se ve sometido a soportar grandes cambios espirituales (en
cualquier etapa de la vida), por tanto, sus comportamientos y hábitos anteriores se
rediseñan formando y estructurando una vida y hombre nuevo con un “espíritu”
diferente, por una experiencia que le hace ver todo de una manera totalmente distinta.
Muchos de estos cambios están dados al encuentro con Dios, pues es aquí cuando un
hombre es llenado por la espiritualidad, y la espiritualidad abarca la totalidad.
Algunas personas hasta ahora no han experimentado a Dios con tal intensidad que les
haya cambiado radicalmente la vida y es debido a que simplemente no les ha llegado
la hora. Sin embargo, el momento de encontrarnos y estar en contacto con Dios se
puede anticipar debido a nuestro interés por alcanzar un objetivo vital más humano y
más social. El individuo en la sociedad juega un papel fundamental y globalizador al
ser el actor principal de un sistema de costumbres, creencias, esquemas, doctrinas,
políticas. El ser humano debe encontrar y alcanzar de una manera pronta la
espiritualidad que el magis ignaciano sugiere pues sólo así logrará crear un ambiente
en equilibrio con Dios, para conseguirlo debe sentirse constantemente impulsada a
descubrir, redefinir y alcanzar el magis; debe asumir las fronteras y los límites no
como obstáculos, sino como nuevos desafíos que enfrentar, nuevas oportunidades por
las que alegrarse.
Mediante la pedagogía ignaciana que imparte nuestro colegio, estamos
constantemente invitados al encuentro con Dios y el magis, lo cual resulta muy
pertinente debido a que se nos han facilitado las condiciones y los conocimientos
necesarios para desarrollarnos como personas con espíritu social. Los Ejercicios
Espirituales a los que se alude en el texto son una herramienta o estrategia muy bien
desarrollada para saber cumplir con la misión, y personalmente considero de suma
importancia su aplicación y divulgación no sólo en el ámbito escolar si no también
afuera en la sociedad, pues se necesitan personas que promuevan una sociedad en
equilibrio consigo misma y con Dios.
6. Citas textuales.

 ‘’La jornada ignaciana depura más sobre el magis. Allí es donde puedo
encontrar todas las conexiones de las palabras más claves que Ignacio
maneja. Me hace que evolucione sobre lo que se debe desear y cómo
enfrentar esos deseos: Desear, en definitiva, los deseos de Dios. Eso es lo
único que hay que pedir.’’ (Cabarrús C.R, 2003, cap. 7)
 ‘’ La gran metodología de Ignacio son los Ejercicios, pero el discernimiento es
el corazón de los Ejercicios. En pocas palabras discernir es entrar en una
danza de deseos: los míos con los tuyos para lograr una síntesis que es algo
inusitado, todavía no dado, en vistas a la construcción del Reino. De ordinario
no se comprende así el discernimiento… Pero por esta razón los Ejercicios
son cuna y son camino para encontrarme con el magis.’’ (Cabarrús C.R, 2003
cap. 7)
 ‘’ Estos hondos deseos tengo que saberlos dejar emerger, acariciarlos,
ponerlos en acción. Ignacio es un pedagogo genial de los deseos. Me invita a
dejarlos sueltos, me enseña cómo se pueden fomentar, aunque haya miedo:
primero a por lo menos desear, hasta pasar a desear paladinamente, para
entender finalmente que lo que hay que desear son tus deseos, Señor; que lo
que tengo que pedir es que yo sea puesto bajo tu bandera, Jesús (…)’’
(Cabarrús C.R, 2003. cap.7)

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