Está en la página 1de 19
LA LETRA DE CAMBIO Y EL CHEQUE EN LOS ESTADOS UNIDOS. LOS ELEMENTOS PERSONALES (Con notas comparativas.al Derecho Mexicano) GENERALIDADES: El Derecho Mercantil en los Estados Unidos de América es, desde et punto de vista de su vigencia territorial, un derecho estatal cuando ha sido objeto de expresién legislativa, con excepcién del de Quiebras, el cual es de cardcter federal (1). La letra.de cambio y el cheque son instrumentos negociables que estén regidos, en la actualidad, por derecho legislado, predominante- mente, y en las lagunas de aquél por el derecho jurisprudencial y por los usos y eostumbres establecidos entre los comerciantes. . Antes de 1897, en que se dicté en Nueva York una Ley de Ins- trymentos Negociables, basada sobre el proyecto uniforme de que mas adelante hablaremos, la regulacién de dichos documentos estaba contenida en las miiltiples resoluciones de los tribunales ingleses y norteamericanos que constituyen el Common Law, en alguna incom- pleta y deficiente legislacién, y en los usos y costumbres mercantiles. En 1878 se fund6 Ja Asociacién de Ja Barra Americana, la cual desde su nacimiento expres6 interés por promover Ja legislacién y pro- mulgacién de leyes uniformes en todos los Estados de la Unién. Para 1882 ya el Parlamento de Ja Gran Bretafia habia expedido la Ley sobre Letras de Cambio, que fué preparada por el famoso juez. M. D. Chalmers, a solicitud de las Camaras Asociadas de Comercio y del Instituto de Banqueros, El Juez Chalmers se bas6 en el estudio de- 2,500 casos y de 17 decretas para formular su proyecto. (2) La legisleeién cambiaria os, en México, por el contrario, de jurisdiceion federal, Exté contenida en Ix Ley de Titulos y Operaciones de Crédito a Iz cual en lo adelante nos reforimos usando las siglas L, T. y Op. Cr.—, publicada en ol Disrio Oficial de 27 de agosto. de 1932, en cuya redaccién influyeron el Cédigo de Comercio italiano y el Proyecto de Ley Uniforme, elaborade por la Convencién Taternacional de La Haya, en 1912, prineipalmente. 36 BOLETIN DEL INSTITUTO Este movimiento legislativo inglés tuvo profundas repercusiones en el ambiente juridico de los Estados Unidos y en 1887 la Comisién de Derecho Mercantil de la Barra Americana se declar6é abiertamente en favor de la expedicién de una ley reguladora de ia letra de cambio. Er 1889 fué creada la Comisién de Leyes Uniformes. En 1891 el Estado de Nueva York nombré a tres comisionados para integrar una Comisién para la Promocién de la Uniformidad de Legislacién en los Estados Unidos, y con éstos, y delegados de otros Estados invitados, se fundé la “Conferencia Nacional de Comisionados de Leyes Uni- formes de los Estados”, El Comité de Derecho Mercantil de este or- ganismo encomendé a Mr. John J. Crawford, abogado neoyorquino, que formulara un proyecto de ley uniforme de instrumentos negocia- bles, siguiendo las bases de la reciente Ley inglesa. El proyecto fué sometido a la Conferencia y después de un laborioso examen y de algunas modificaciones, fué recomendado a los Estados para su adop- cién. Nueva York fué el primer Estado que Ia adopté, en 1897, y en 1924 e] Estado de Georgia caus6 la unanimidad, de tal suerte que ac- tualmente, con algunas variantes, el proyecto rige en forma de ley on todos los Estados, dominios y territorios de los Estados Unidos. No obstante que para redactarla se tuvo a Ja vista la Ley inglesa, entre ésta y el proyecto norteamericano existen algunas diferencias, En primer lugar, en tanto que la Ley inglesa se limita a regular Ia letra de cambio, el cheque y el pagaré, la ley americana es aplicable a los instrumentos negociables en general, En segundo lugar, porque al redactarse el proyecto norteamericano se tomé en cuenta el derecho jurisprudencial de los Estados Unidos, que en algunos puntos se sepa- raba del britanico. El proyecto fué recibido con optimismo y entusiasmo, pues en é1 se pusieron esperanzas para alcanzar uniformidad y certeza en las relaciones cambiarias, tan profundamente afectadas por la diversidad de reglas antes aplicables. Sin embargo no ha cristalizado en lo absoluto, por varias razones. En parte, por la tendencia de considerar la ley como una simple codificacién del “common law” anterior, lo que inclina a recurrir a las decisiones judiciales precedentes a la Ley, en vez de subordinar aquéllas a ésta. Por otra parte, la actitud de los tribunales y de los litigantes, al interpretar la ley, en esa forma, han contribuido a producir diversidad. Por ultimo, al adoptarse el proyecto, DE DERECHO COMPARADO a7 los Estados introdujeron algunas modificaciones en su texto y varia- ron el orden de su articulado. Sin embargo, la situacién actualmente prevalente es considera- blemente superior a la que la Ley puso término, y aunque se hayan expresado criticas en su contra y formulado proyectos para reformar- la, nadie piensa en regresar al estado anterior a ella (2). En el curso de este articulo nos referiremos a la Ley siguiendo el articulado sefialado por los Comisionados en el proyecto. Finalmen- te, como el cheque es asimilado a una letra de cambio, sélo nos refe- riremos a aquél cuando tenga una regulacién especifica (3). 1.—DEFINICIONES DE LA LETRA DE CAMBIO Y DEL CHEQUE Segiin la seccién 126 de la LUIN (4), “la letra de cambio es una orden incondicional, escrita y firmada por 1a persona que la gira y dirigida a otra persona a quien se requiere para que pague, a la orden o al portador, una cantidad determinada de dinero, a la vista o en un tiempo fijo o determinable” (5). (2) Véanse: Beutel, The development of state statutes on negotiable paper prior to tho Negotiable Instruments Law, 40 Co. Law Rov., 836; Beutel, Colonial sources of the Negotiable Instruments Law of the United States, 34, Ill, Law Rev., 187; McKeeham, The Negotiable Instruments Law, a Review of the Ames ‘Brewster Controversy, 50 Am, Law Rev., 437, 499, 561; Brannan, Some necessary amendments of the Negotiable Instruments Law, 26, Harv. Law Rov., 493, 548; Eaton, The attitude of the Bench and Bar toward the Nogotiable Instruments Law, 77 cont, Lew Jour, 282, () En el Derocho Mexicano, In letra de cambio y el cheque, no obstante ser ambos titulos valores de contenido ereditieio, tienen una regulneién separada dentro de la L. T. y Op. Cr, Asi, de la letra se ocupa el capitulo IL, articulos 76 al 169, y del cheque ef capftulo IV, artfenlos del 175 al 207. (4) En el curso de este articulo usaremos las iniciales LUIN para significar Ja Uniform Negotiable Instruments Law —Ley Uniforime de Instrumentos Nego- ciables, (5) La L, T. y Op, Or, no define la letra de cambio, pero en su articulo 76 40 sefialan los requisitos que deben Nenar. De acuerdo con ellos, In letra de cambio puede definirse como un titulo valor de contenido creditieio por ol cunt wna persona, Iamada girador, da a otra persona, llamada girado, la orden ineondicional de que pague en determinado tiempo y lugar una suma determinada de dinero a la orden de otra persona, Namada tomador o beneficiario, 38 BOLETIN DEL INSTITUTO El cheque es definido por la seccién 185 como “una letra de cam- bio girada contra un banco pagadera a la vista” (6), expresdndose, ademas, que “excepto lo que en contrario se disponga, las disposicio- neg de esta ley aplicables a Ja letra de cambio a Ja vista se aplican al cheque”. De ahi que sea facil y conveniente hacer un estudio de los dos titulos al mismo tiempo. 2,—CLASIFICACION DE LOS REQUISITOS La letra de cambio y el cheque estan sujetos a ciertos requisitos establecidos en la ley que podemos, para fines de estudio, clasifi- car en requisitos personales, requisitos relatives al documento y reguisitos relativos a la obligacién cambiaria en él contenida. 8.—REQUISITOS PERSONALES En la letra de cambio y en el cheque intervienen, comtinmente, tres personas: el girador, el beneficiario y el girado. Vamos a hacer an estudio de cada uno de ellos en particular. A. El girador. a). Definicién. El girador, de acuerdo con la definicién de la seccién 126 de la LUIN, es la persona que da la orden incondicional de pago contenida en la letra y para que el instrumento sea valido es necesario que en 6] aparezea su firma (7). b). La firma, a’) Nombre.—Comtinmente la firma es la escritura det nombre del girador. No es necesario que sea siempre un nombre real, (6) En nuestro Derecho el cheque uo puede ser asimilado a una lotra de cambio girada en contra de un baneo, pues cn muchos 0 importantes aspectos tiene una regulacién distinta a la de Ia letra. Tampoeo Ta L. T. y Op. Cr. nos da una definicién, la cual, sin embargo, se puede obtener del contenido de los artfeu- los 175 y 176. De esa suerte, podemon decir que el chequo es un titulo valor de contenido crediticio, por el cual una persona llamada librador da a una institucién do crédito la orden incondicional de pagar una suma do dinero a Ia vista, a in orden 0 al portador. (1) A diferencia de In LUIN, la L. T. y Op. Cr. no define al girador, aunque 4 1 se refiere en muchas disposicionos. DE DERECHO COMPARADO 39 aunque tal sea la costumbre. Un nombre comercial y uno de mera fantasia o ficticio satisface el requisito de firma. La ley ha previsto expresamente esta situacién y dispone que “el que firma con un nom- bre comercial o ficticio seré responsable en la misma forma que si hubiera firmado con su propio nombre” (8) (9). No es necesario que sea legible y en Ja practica se dan muchos casos de firmas que son verdaderos jeroglificos (10) (11). b’) Medios de estamparla.—La firma puede ser escrita a mano, con lépiz o con tinta, impresa, grabada, fotografiada, lito- grafiada, maquinografiada, sellada o estampada con cualquier otro instrumento (12). Una marca, cifras o cualquier otro signo pueden ser equivalentes a Ja firma. En un caso (18) donde el signatario usé con su firma las cifras 1. 2. 3., la corte sostuvo que “una persona puede obligarse por cualquier marca o designacién que crea propio adoptar, siempre que sea usada como su nombre y tenga la intencién de obligar- se por ella” (14). (8) LUIN, seceién 18. (9) La L, T. y Op. Cr, exige (articulo 76, VII) que aparezca on la letra Ja firma del girador o de Ia persona que suscriba a su rucgo o en su nombre y 1 articulo 176, VI, dispone, refiriéndose al cheque, que con él aparezea Ia firma del librador. El Dr. Joaquin Rodriguez (‘‘Ourso de Derecho Mercantil’, Kiitoriales Porréa ¢ ITESM, México, 1947, pigina 267, y ‘‘Documentacién Mer- cantil’’, Editorial JUS, México, 1946, pigina 24), considera valida ‘Is designa- cién det tomador, hecha con un nombre de fantasia o un sendénimo, si fuesen ineonfundibles’’, pero no se refiere expresamente al caso de que el girador use un nombre de tal clase o un seudénimo para suseribir Ja letra o el cheque. Nosotros, Por nuestra parte, extendemos, por analogia, tal consideracion y ereemos que en. nuestro Derecho tombién seria valida le euscripeién del titulo y que, en conse- eueneia, puede Negerso a la misma conelusién a que expresamente Nega la LULN. (10) Bigelow, The Law of Bills, Notes and Checks, Boston, 1928, dice que ‘euando el simbolo adoptado no indica claremente la identidad de la parte fir- mante, puede haber difieultad en materia de prueba; pero, presumiendo la prueba del acto y de Ja intencién, la Ley no presenta dificultad en considerar como firma suficiento la forma o el simbolo usados, por bizarros que scan'’, y agroga que ‘lag firmas de los cajeros de los bancos y de otras instituciones de crédito son frecuentisimamente jeroglificos para los no iniciados’?, (Op. cit, seccién 88.) (11) No ereemos que tampoco In L, T. y Op Cr, exija que sea legible, con tal que sea identifiable. V. Rodriguez, Curso... pég. 286, y Documentacién. .., pag. 24, (12) Weston v. Myers (1864) 33, IIT, 424, (13) Brown y, Butcher's and Drover’s Bank, 1844, 6 Hill, (N. ¥.), 449. (14) Rodriguez, Curso..., pag. 286, y Documentacién... pig. 24, afirma que ‘la firma ba de ser de pufio y letra del que dice suscribir por si 0 por otro 40 BOLETIN DEL INSTITUTO c’) Lugar en que aparece—La firma del girador debe apa- recer en el propio documento (15). La costumbre indica que debe aparecer en el Angulo inferior derecho del documento. Sin embargo, el hecho de que aparezca en otro lugar desusado no cambia la natura- leza de la obligacién, pero mientras que en el caso en que aparece suscribiendo el documento la intencién del signatario est4 claramente fijada, en el contrario puede surgir el problema de hecho acerca de si Ta intencién del firmante fué la de obligarse como girador o no y en esa duda aplicarse la secci6n 17 subseccién 6 de 1a LUIN interpretan- dose la firma como endoso (16) (17). ls letra, La firma no sorfa auténtica si se biciera a maquina, o por medio meci- nico, © © ealeara, o la mano del firmante fuera Nevada por otra persona. Debe ser una firma completa, constancia del nombre y apellido del firmante, siendo notoriamente insuficiente In sola estampacin de las iniciales del librador... La suseripeién de la letra mediante eruces, signos o cualquier otto género de sefias, huellas digitales, debe cousiderarse excluida en virtud de lo dispuesto por el articulo 86”, En efecto, tal articulo estableeo que si el girador no sabe o no puede eseriblx, firmara a su ruego otra persona, do lo q desprende que Jo que la L, T. y Op, Cr, oxigo es precisamente eseritura, firma autégrafa, de puto y letra, con Jo que quedan excluidas las mareas, sofias, huellas digitales, etebtora. (15) Dada la literalidad de tos titulos valores, on el Derecho Mexicano 89 exige que la firma aparezca precisamente en ¢l documento que ee suscriba, Los articulos 76 y 176 cestablecen que Ia letra y el cheque deben ‘‘contener"? la firma del girsdor. (16) La LUIN, seccién 17, subseceién 6, dice que ‘‘euando una firma esté de tal manera coloeada en el instrumento que no resulte claro en qué eapacidad Ia hizo la persona que firmé, se presume que os un endosante!?. Britton ico que ‘hay una zona de certeza legal y comercial, que contiene elementos de incorteza te6rica, lo cual uo constituye una falta de claridad dentro de los tér- minos de la seccién, Dontro de esta frea, In Corte decide la cuestién sin rofe- rencia @ Ja seccién 17 (6) y oon diniea referencia a los usos mercantiles y a los eGnones generales de interprotacién”’. En Germania Nat. Bank v, Marimer, 1906, 29 Wise. 544, 109 NW 574, un pagaré fué firmado por cuatro personas, Do nombres apatecian, uno dobajo del otro, en ia esquina anterior derecha del docu- mento, ¥ los otros dos en la izquierda, La corte declaré suscriptores a los cuatro signatarios, (17) La L. T. y Op, Cr. nada dispone en evanto al lugar en que deba aparecer la firma del girador, Sin embargo, los usos y costumbres mereantiles consagran el ngulo inferior derecho del documento, Bl articulo 111 de la L. T. y Op. Gr, interpreta como aval Ia firma a 1a cual no se le pueda atribuir ningin otro significado, y on tal sentide juega el mismo papel de la seccién 17, (8) de la LUIN, La interpretacin de endoso, quo ésta da, se dcbe a que desconoce In institueién del aval. ‘DE DERECHO COMPARADO a qd’) Firma a ruege del girador—En los casos en que el gi- rador por imposibilidad fisica ne pueda firmar y suplica a otro que firme por é1, se acostumbra que tal acto sea autentifieado por testigos. Sin embargo, no hay disposicién legal que asi lo exija y la practica es de pura costumbre (18) (19). e’) Firma en representacién del girador—La firma pue- de ser puesta, no por el girador mismo, sino por un mandatario, ya porgue tratandose de una persona moral ello tenga que ser necesaria- mente asi, o porque traténdose de una persona fisica la necesidad o la conveniencia asi lo indiquen. La seccién 19 cubre esta situacién expresamente y dispone que “la firma puede ser puesta por un mandatario debidamente autorizado. Ninguna forma particular de nombramiento es necesaria para este propésito y la autorizacién del mandatario puede ser establecida como en cualquier otro caso de mandato” (20). (18) V. Bigelow, op. cit., nota 3, a la soceién 89, (19) La L. T. y Op. Cr. dispone que en el easo en que él girador no sepa © no puoda firmar, lo hard a su ruego otra persona, en fe do lo cual firmaré también un corredor piiblico titulado, un notario o eualguier otro funcionario Piblico (artfenlo $6), (20) La facultad de realizar actos eambiarios por modio de reprosentante esti, ampliamente estableeida en el Derecho Mexienno. En efecto, el artfeulo 9 4. T. ¥ Op. Or. dispone que ‘‘ln ropresentaci6n para otorgar o suscribir titulos de crédito se confieren: I—Medisnte poder inscrita debidamente on el Registro de Comoreio, y T—Por simple declaracién eserita dirigida al tereero eon quien habré de contratar el representante. En el caso de le fraceién I, la representacién se entenderé eonferida respecto de cualquier persona, y en el de 1a fraceié II, B6lo respecto de aquélla a quion la declaracién eserita haya sido dirigida. #n ambos enror, la representacién no tendrh m&s limites que los que expresamente Je haya fijado el reprosentante en el instrumento @ declaracin respectivos”’, Es indispensable hacor constat la reptesentecién en In antefirma, para no ‘ponerse en el caso del artfeulo 10, El artfculo 85, ademés, establece que ‘la facultad de firmar en nombre y per cuenta de otro, no comprende la de obligatlo cambiariamente, salvo lo que dispon- gan el poder o la declaraciém a que se refiere el articulo 99”'. Sin embargo, ya que “Jos administradores o agentes de sociedades o nogveiaciones se reputan autori- zados para suscribir letras de cambio a nombro de Gstas, por el hecho de su nom- ‘bramiento. Los Ifmites de eaa autorizacién son los que sefialan los estatutos o Tos poderes respectivos’’; Rodriguez estima que csta disposieién os aplicable a los factores do los eomercientes individuales y quo los representantes legales, tutoros, albacess, vindizos, tienen también plena. eapacided para suscribir letras de eambie, ‘V. Ourso..., pag. 258, a BOLETIN DEL INSTITUTO Sin que podamos en este trabajo entrar mds a fondo en lo relati- vo a las facultades del mandatario para suscribir letras de cambio o cheques, podemos brevemente apuntar que si el mandatario obra en nombre de su mandante y dentro de los términos que estén autoriza- dos, obliga a su mandante; pero si obra en su propio nombre o fuera de los limites de su mandato se obliga a si mismo, La seccién 20 de la LUIN dispone que “cuando el instruments contiene, o una persona aiiade a su firma, palabras que indiquen que firma por un principal o en una capacidad representativa, no es res- ponsable del instrumento si estaba debidamente autorizado; pero la mera adicién de palabras que lo describan como mandatario o investi- do de cardcter representativo, sin descubrir al principal, no lo exime de responsabilidad personal” (21). De esta suerte, las expresiones “presidente”, “secretario”, “ad- ministrador”, “tesorero” y equivalentes, por sf sélas, no eximen de responsabilidad personal al signatario, segim las més respetables autoridades (22). “Por otra parte, en los casos en que el signatario lo hace en sti propio nombre, sin descubrir al principal, se obliga personalmente. (21) El Derecho Mexicano sigue el principio tradicional de que el manda. tario que ejecuta su mandato dentro de sus attibuciones y sin exeederse de sus Poderes, obliga directamente a su mandante y no se obliga personalmente, Por ello es que el artfculo 10, L, T. y Op. Cr, establece que ‘el que give un titulo de erédito en nombre de otro sin poder bastante o sin facultades legales pare hacerlo, se obliga personalmente como si hubiera obrado en nombre propio’’, mismo Fesultado al que conduco Ia seeeién 20 de la LULN. Es también mecesario que la representacién, general o capecial, se ostente es el documento, indicando al principal, atenta la naturaleza literal de los titulos valores, para que el signatario eseapo de le responsabilidad personal. La indicacién de la spresentacién y de la identidad del principal se acostumbra hacer mediante el uso de Ja antefirma. La falta. de representacién o de poder bastante constituye una excepcién con- tra el tenedor det documento, pero ‘quien haya dado lugar, con actos positivos © con omisiones graves, a que 9¢ crea, eouforme a los usos del comereio, que un ter- coro esté facultado para suscribir en su nombre titulos de crédito’? no podr& invocar tal excepeiin contra un tenedor de buena fe (articulo 11, L. T. y Op. Cr.). (22) En nuestro Derecho, tal afirmacién, seria vélida dnieamente en el caso en que realmente no tuviesen tales investiduras, atento lo dispuesto on el artteulo 15 de le L. T. y Op. Cre DE DERECHO COMPARADO 48 aunque después el principal llegare a aparecer (23). La razén es (24) que “las personas que manejan instrumentos negociables se presume que los toman por el crédito que les ofrecen las partes cuyos nombres aparecen en‘ellos; y una persona que no es parte en éllos no puede ser hecha responsable por la simple prueba de que la parte ostensible firmé o endosé como su representant £’) Indispensabilidad de la firma.—La firma del girador es de tal punto necesaria que su falta ocasiona que el documento no sea instrumento negociable (25) (26). Por otra parte, es presupuesto indispensable para que nazca la obli- gacién del girador, ya que la seccién 18 establece que “ninguna per- soha es responsable de un instrumento en el cual no aparezca su firma excepto disposicién en contratario.” B. El beneficiario, a) Concepto.—El beneficiario de la letra de cambio 0 del che- que es la persona a quien o a cuya orden el girador indica que el paga de los mismos ha de ser hecho. ‘b) Designacién—El tomador puede ser nombrado o designa- do, de tal suerte que sea una persona concreta, o ser indicado en forma abstracta y genérica, mediante la insercién de la palabra “al portador”, o de otras férmulas equivalentes. Tal cosa se desprende de la seccién 126 segéin Ia cual la letra de cambio puede ser girada a favor de “una (23) Al mismo resultado se Mega en el Derecho Mexicano, on virtud del principio de la literalided de los titulosvalores, “" (24) ‘Briggs v.,Patridge, 64, N. Y.,.457, 21 Am. Rep., 617, (25) La seccién 1, LUIN, exige como requisito. general de nogociabilidad para toto documento que esté ‘‘firmado’’ y Ia seccién 18 declara que ‘‘ninguna porsona es responsable do un instrumento en el enal no apatezea su firma, excepto disposicién on contrario’?”, (26) En el Dereeho Mexicano tal cosa seria vélida finicamente en of caso en que la letra o e] cheque no hubieran entrado en circulecién saliendo de manos del tenedor, ya que adn en el ceso de que la firma del girador fucse falsa o ta de una persona imaginaria,.na por ello se invalidarian lee obligaciones derivadas del titulo en contra do.otras personas que lo suscriban, por lo que, respect de elias, el titulo si seria plenamente existente y efieaz, El tenedor y los posteriores endo- satarios del titulo son responsables, por aua endosos, afin en el caso de que el gitador sea una persona, imaginaria ola firma del girador haya sido falsificada; aun- que, claro est&, el tenedor no padré ejercitar eficazmente su accién cambigria re- gresiva contra el tomador. Este principio de la autonomia de las obligsciones cambia- ries esté recogido en ol articulo 12 de la L. T. y Op, Cx. . a“ ‘SOLESTIN DEL EAUTHTUTO petaona determinada o la a orden © al portador” y de Im seccién 185 que describe el cheque como una letra de cambio girada a la vista en eontra de un banco (27). e) Nata negociabilidad—Hn el Derecho Cambiario Norte- americano, tanto la letra de cambio como el pagaré estén dotados de una nata negociabilidad y en cuanto retinan los requisitos exigidos por la Ley y expresen ademés les palabras “a la orden” o “al portador” u otras equivalentes pueden ser negociados en las formas tfpicas y peculiares de los instrumentos negociables (28) (29). a’) Cuando es a Ja orden. La seccién 8 de la LUIN dispone que “el instrumento es pagadero a la orden cuando esta girado a la orden de persona determinada, o a favor 0 a la orden de alguien”. b’) Necesidad de que aparezca ja palabra “a la orden”. La palabra “orden” o la expresién “a la orden” debe aparecer en el documento a fin de que éste adquiera su negociabilidad, pues la settién 1 subseccién 4 establece que “para que un instrumento sea negociable debe reunir los siguientes requisitos. ...ser pagadero a Ia orden o a} portador”, y tales palabras han.sido consideradas como “palabras de negociabilidad”, cuya presencia es indispensable para que ef instrumento sea negociable. Posteriormente tendremos oper ‘tanidad de volver sobre este tema (30). ¢’) Prinvipio general: la certeza en el nombramiento o Ja designacién, (27) Bu el Derecho Mexicano ta tetra de cambio no puede ser sl portador, #1 articulo 76, fr. VI de Ia L. 'P. y Op. Cr. exige que el documento contenga ‘el nom- bre do in persona a quien ha de hacotse el pago”’, y el artieulo 88 del mismo ordenumiente dispone que ‘‘Ia letra de camblo expedida al portador no prodncité efectos de Tetra de cambio”’, (28) LUIN, seceién 1, subsoccién 4, {29) Tanto la Tetra de cambio, como ol cheque cuando es a In otdex, son ‘ithios u tn often ‘nmton””, en nuestro Derecho. Dichs cléusula ni riquiers nete- ‘ite, spareeer on el texto del documento; ol entl, para privarlo de au negociubilided, es mecesarto que contenga expreenmenty Ime clfusulus ‘‘no a la orden’? » ‘Ro negociable’’ (L. T. y Op. Cr, art. 25), BI cheque al portador, dada su maturatens, te puede ser privado do su negociabilidad. (30) Be virtud de lo dicho on In nota anterior, se comprende quo en ol De- Teeho Meritaino no hay necésidad de que Ia cléum’s 's Ia orden’? goa wend expromamente. Por lo quo xe refiere a los titales al portader, el aticulo 69 de Ta Lt y Op, Or, entabtoce que “aon ttalos al portador lo qué no estin expedides 1 favor de persons determinade, contengan o no la ctimsilé “‘al portador!’. DE DERECHO COMPARADO 6 El principio general dominante en este mataria es que el benefi- ciario ha de ser nombrado o de cualquiera otra manera indicado en el documento con certeza razonable (31). Las aplicaciones de este prin- eipio general las vamos a examinar a continuacién. 4") Supuesto normal. Por lo general e] beneficiarig es una persona distinta al girador, por una parte, y al girado por la otra. La funcién que originalmente. en la época de su aparicién, realizé la letra de cambio, exigia la exis- teneia de tres partes reales, y no meramente virtuales, como lo auto- riza, Ja legislacién y la préctica contempordneas (32). e') Giro @ la propia orden. Puede acaecer que el girador sea al mismo tiempo el beneficiario de la letra. Este fendmeno resulta en los casos en que el vendedor de mereanefas trata de obtener, mediante la letra, el cobro del precio de las mismas, de] comprador. En virtud del cardcter contractual que re- viaten Ing relaciones cambiarias, en los derechos norteamericano o inglés la letra girada a la propia orden no es perfecta hasta en tanto no esté endosada por el propio girador-beneficiario. Tal cosa esté especifieamente prevista para el pagaré a la propia orden, ya que la seceién 184 de la LUIN dispone que “cuando un pagaré es girado a Ja propia orden del suscriptor, no es completo hasta que no esté endo- sado por él’. “Pero la LUIN calla respecto a la letra de cambio. Sin embargo, el derecho jurisprudencial vigente antes de la adopeién del proyecto uniforme era claro en el sentido de que era necesario el endo- so para perfeccionar el documento (33) y Bigelow, por esa y otras razones (34) cree que la seccién 184 citada es aplicable por analogia y que ademés por razén de esta laguna de la ley se aplica el common- Jaw vigente antes de ella com osupletorio (35). (31) Contenido en la seccién 1, subseceién 5, y seccién 8, subseccién 6, LULN. (82) De neuerdo eon nuestra L. T. y Op, Cr., el supuosto normal es que en toda letra o cheque intorvengan realmente tres partes, (38) Hoffman v, Bank..., 99, Va, 480, 39 8, E. 134; Norfolk Bk. v. Griffin, 107, N. ©. 178; 118. B, 1,049, (24) Bigelow, op. eit, seee, 148, dice: ‘cuando el gitador ze hace boneficia- rio a ai mismo, como lo puede hacer, tanto por la eostumbre como por la ley, no hay manifiestamente contrato o derecho de accién sobre e] instrumento en su forma incomplete, puesto que nadie puede contratar eousigo mismo... Pero ol endoso convierte al- instramento en contrato’’”. (85) Los orts, 82 ¥ 179 do 1s L. T. y Op. Cr, pormiten que la letra o el cheque sean girados a la propia orden del girador, 46 BOLETIN DEL INSTITUTO f) Giro a favor del propio girado. El beneficiario puede ser el mismo girado. Traténdose de la letra de cambio esta situacién resulta anémala y extrafia, pero no respecto al cheque, el cual puede ser girado a la orden del propio banco girado a fin de pagar deudas anteriormente contraidas con el mismo por virtud de otras operaciones (36). g)’ Pluralidad de beneficiarios. La letra puede ser girada a la orden de dos o mas beneficiarios. (87). En este caso hay que hacer notar una distincién. La designacién puede ser de caracter alternativo (paguese a B. 0 a C.) o de cardcter conjunto (paguese a B. y a C.). Bn el caso de designacién alternativa cualquiera de los beneficiarios puede cobrar la letra o endosarla in- dependientemente del otro (38). En el caso de designacién conjunta, se necestia que obren en la misma forma los beneficiarios, tanto para endosarla como para cobrarla (89), salvo que el endosante o el que la cobra esté autorizado por los otros 0 que los beneficiarios sean so- cios (40) (41). h’) Giro a favor de funcionarios. El documento puede ser girado a la orden de personas investidas de un cargo, por el tiempo que lo ejerzan, y en su cardcter de funcio- narios, (42) como por ejemplo, “a la orden del gerente de la compaiiia X” o “a la orden del albacea de la sucesién de T” (43) (44). (86) Seecién 8, subs, 3, LUIN, (87) Seecién 8, subsecciones 4 y 5, LUIN. (88) La subseceién 5 do la seceién 8 introduce una modifieacién al Derecho anteriormente oxistente, Page v. Ford, 65 Ore, 450, 131 Pac. 1,013, (39) Seecién 41, LUIN. (40) Seecién 41, LUIN. (41) En el Derecho Mexicano también se admite la pluralidad de beneficia: ios, Su designacién puede ser conjunta o alternativa; en el primer caso 80 nece- sita 1a firma de todos los beneficiarios, on el segundo la de cualquiora de ellos, pera 1a transmisién del documento. (42) La seccién 6 dice a Ia letra: ‘To the holder of an office for the time being”’. (43) Cuando el titulo esté girado a la orden de una sociedad mercantil con personalidad juridies, como la ‘‘corporation’? o la ‘partnership’, en las jurisdie- eiones quo a ésts so lo reconocen, el problema no revisto dificultad especial, Cuando esté girada a Is orden de una sucesin, la opinién minoritaria e@ en el sentido de quo no teniendo personalidad jurfdiea, el titulo no tiene designado beno- ficiario y en consecuencia es al portador, La opinién mayoritaria soatiene quo el documento a a la orden. Stone, en Kansen v. North Wostern Nat, Bank, 175 ‘Minn, 453, 221 N, W, 873, declara que on verdad 1a sucesién no es una ‘persona’? DE DERECHO COMPARADO aT La secci6n 42 resuelve un problema conexo al disponer que “cuando un instrumento es girado o endosado a una persona como “eajero” o cualquier otro funcionario financiero de un banco 0 cor- poracién, se presume “prima facie’ que es pagadero al banco o corporacién y puede ser negociado tanto por el endoso del banco o la corporacién como por el del funcionario” (45). La presuncién admite prueba en contrario, la cual esta a cargo del funcionario designado, a fin de demostrar que el giro fué hecho para beneficiarlo personal mente y no en su caracter de funcionario para beneficiar a la empresa a la cual pertenece, A la inversa, si el giro es hecho a su favor personal no se admite prueba para demostrar que fué hecho en favor de la empresa 2 la cual sirve y no en su cardcter de beneficiario individual. ¥) Uso de un nombre comercial. En nombre del beneficiario se puede usar un nombre comercial, ya sea que esté registrado o no, y mediante la identificacién se pueden hacer valer los derechos relativos al beneficiario. Esta hipétesis queda comprendida dentro de la seccién 8, subseccién 6 (46). Pero osté siempre represontads por una o més personas y cuando un instrumento 8 pagadero a una sucesién, la inteneién es de que se pague a tal o tales personas, De la misma manora, los tribunales han sostenido que instrumentos pagaderos en la, signionte forma: tesorero de la patroquia X o su sucosor; encargado de la igle- sia X; tesorero general de Ia Real Tesorexia de Portugal, contienen wna desig- nacién razonable de beneficiario. (44) Rodriguer, Curso..., pig. 287 y Documentaciin..., pig. 24, afirma en relacién al Derecho Mexieano, quo ‘‘el nombre del tomador debe indicarse de un modo claro y preciso” y admite que ‘existe una amplia libertad en la designa- eién del mismo ¥ que todo formulismo juridico sobre el particular deber& rechazarse. Puede figurar coma tomador una porsona fisica, una persona juridica (sea sociedad civil 0 mezcantit), o cualquiera entidad que con arreglo a derecho tenga persona lidad jurfdiea”’, y respecto a Ia designacién de funcionarios estima que ‘‘es vé- lida”, (45) En ol caso Bank of New York v. State Bank of Ohio, 2, N. Y., 619, 0 declaré que una letra pagndera a ‘D.C, Converse, Bsq. Cahier, era pagadera al Banco del eval era cajora’’. En First Nat. Bk, of Pomeroy v. McOullough, 1908, 50, Ore,, 508, Ia Corto dijo: ‘Ta eldusula citada (LUIN, see. 42) y las decisiones referidas ostin indudablemonte basadas on que el empleo do In palabra ealifieativa “‘eashier’’ u otra designacién de una oficina financiora, como apSndice al nombre do un beneficiario 0 endosatario de papel comercial, crea una ambigiiodad relative, a In parte real intencionada, para explicar In cual es admisible prucba. extrado- eumental a fin de demostrar quiém es el principal para cayo boneficio tal agente recibié o acept6 la promesn de pagar una suma detorminada de dinero”’. (46) Nos remitimos Ja nota 44, supra, a“ BOLATIN DEL INSTITUTO i’) Nombramiento o designacién errénea. Anteriormente dijimos que ia ley requiere que “cuando el ins- trumento es pagadero a la orden, et beneficiario debe ser nombrado © indieado en el mismo de cualquiera otra manera con certeza razo- nable”, Pero si no lo es asf, el instrumento no pierde su negociabilidad, sino que se convierte en un documento al portador, pues cae dentro de lo previsto en la seccién 9, subseccién 4, la cual dispone que “cuan- dg el nombre del beneficiario no aparece ser el de ninguna persona, es pagadero el portador” (47). Sin embargo, en algunos casos el nombre del beneficiario ha sido simplemente equivocado o deletreado mal. La ley ha previsto esta situacién y ha dispuesto (48) que en el caso en que “el nombre del beneficiario ha sido erréneamente designado o deletreado mal, 41 puede endosar el instrumento como en él ha sido descrito, agregando, si lo cree conveniente, su propia firma” (49). . k’) Muerte del beneficiario. Si el beneficiario muere, el instrumento es pagadero a la orden del albacea de su sucesién. e) La letra o el cheque al portador. a’) Supuesto normal. El instrumento es pagadero al portador cuando expresamente en él aparece la clausula “al portador” (50). b’) Giro a favor del beneficiario y dei portador. (AT) Tal cosa es cierta respecto del cheque, cs nuestro Derecho, ya que ol art. 179 L. T. y Op, Cr, declara que es al portador cuando ‘‘no indique a favor do quien se expide”’, pero no en relacién con la letra de cambio, la cual debe contenor siempre ‘*el nombre de Ia persona a quien ha de hacerse el pago’? (art, 76, tr, VI). (48) Secei6n 43, LUIN. (49) En Taylor v, Strickland, 1861, 37, Ala, 642, un pagaré fué suserito a la ‘orden de Aarén Formey, euyo apellido correeto era Formby. La Corte dijo: ‘‘Esté firmemente estableeido que aunque un pagaré o letra de cambio estén girados como Pagaderos a una persona euyo nombro est& equivocado, el error no afectard su titulo. ¥ si un pagaré se hace pagadero a una persona con un nombre equivoendo, el beneficiario puede demandar sobre 61 eon su nombre correcta, alegando que el titulo le era pagadero a 61 por el nombre en él inserto’”. Un instrumento pagadero a ln orden de Anderson Mere, Co., fué considerade como legalmente endosado con jas palabras W. 0. Anderson Mere. Co, Y en un caso en que el beneficiario fué dosignado como Ja “Northland Motor Co.’’, um endoso como ‘Northland Motor Car Co."? fué considerado valido, (50) LUIN, seccién 9, subseccién 1. DE DERECHO COMPARADO 0 Cuando en 1a letra aparece el nombre de un beneficiario y ads- més Ja cléusula “al portador”, el instrumento es pagadero al portador y no a la orden (51) (52), ¢’) Giro a favor de una persona ficticia o no existente. Segiin la secci6n 9, subseccign 3, de la LUIN, “el instrumento es pagadero al portador cuando es pagadero a la orden de una persona ficticia o no existente y tal hecho era conocido a la persona que asi lo hace pagadero”. Britton (58) expresa que “como ayuda para la comprensién de la regla tenemos una simple ilustracién donde el principio establecido en esta seccién es aplicable y donde no se intenta ni comete ningin fraude. M gira un cheque a cargo del banco D, pagadero a la orden de P, con la intencién al tiempo del giro de comprar mercancias a P, y de entregar a P el cheque en pago de ellas. M descubre que P no tiene las mercancias y se dirige al establecimiento de A y alli hace la compra. Normalmente M destruiria el primer cheque y girarfa otro en favor de A. Pero supongamos que en vez de hacerlo asi, M endosa el nombre de P en el cheque ya preparado y entrega el mis- mo a A en pago. En tal caso no puede haber duda de que A adquirié titulo en el instrumento y que contra pago por el girado a A 9 a otro tenedor, el girado puede legalmente cargar la cuenta del girador, M. El endoso del nombre de P por M no es una falsificacién, Es un acto tal que debe operar a fin de conferir titulo sobre el cheque en A. 2 Por qué? {No es porque el girador tuvo la intencién, en el momento de emitirlo a A, que P debia no tener interés en el cheque y que A debfa tenerlo? Esta ilustracién indica la razén b4sica de la regla, la cual es que el acto del suscriptor o girador al emitir el instrumento ha determinado su propiedad. El uso del término “ficticio” y “no exis- tente” en la expresién de la regla es innecesario, si no de hecho cau- sante de confusién, por la razén de que la nica prueba de “ficticidad” o de “no existencia”, dentro del significado de la regia esta determi- nada, por la intenci6n del girador, Puesto que la intenci6n del girador es la Gnica prueba de ficticidad, una persona puede ser “ficticia” en el (1) LUIN, seceién 9, subseecion 2. (58) Bi el documento os letra do cambio, la exprenién al portador a6 entiende como ‘‘no puesta’? (L. T. y Op, Cra art, 88). Pero si es un cheque, el documento ea al portador (L. T. y Op. Cr, art. 179). (58) William Everett Britton, Handbook ef the Law of Bills and Notes, St, Paul, Minn, West Publ, Co,, 1943. 50 BOLETIN DEL INSTITUTO significado de la regla legal y ser una persona real. Y, por otra parte, una persona puede ser “no ficticia” dentro del significado de la regla y, de hecho, no existente. La terminologia tiende a la confusién.... Hubiera sido suficiente declarar que cuando el suscriptor o girador emite el documento a alguna otra persona que el beneficiario desig- nado, el endoso del nombre de tal designado beneficiario por el sus- criptor o girador o por la parte a quien el documento estaba emitido tendré el mismo efecto, con relacién a la transferencia de titulo, como si hubiera sido emitido a y endosado por el beneficiario”. Después de hacer esta critica, Britton resume en la siguiente forma la interpretacién de la discutida seccién, “Si un instrumento se hace pagadero a la orden de un beneficiario designado —sea una persona real o una no existente— y la persona que hizo el instrumento asi pagable —sea el girador mismo, o su agente, o un falsificador de la firma del girador— tiene la intencién de que el beneficiario designado no tenga interés en el documento y que por el contrario, lo tenga la persona a quien de hecho se lo emite, tal instrumento ser& tratado como si fuere pagadero al portador”. Por su parte, Ia American Bankers Association, reconociendo la fuerza de las criticas enderezadas contra la actual redaceién de la sub- seccién 8, de la seccién 9 de la LUIN, ha propuesto la siguiente para su adopeién: “El instrumento es al portador cuando es pagadero a la orden de una persona ficticia, no existente o no viviente, la cual se tiene la intencién de que no tenga interés en el documento, y tal hecho era conocido a la persona que asi lo haga pagadero, o conocido a su empleado o a cualquier otro agente que proporciona el nombre de tal beneficiario”. La recomendacién ha sido aceptada favorablemente por los Estados de Idaho, Illinois, Louisiana y Montana (54). (54) Para resolver Ia situacién que presentaria el giro a favor de una persona ficticia o no existente, debemos distinguir entre In letra de cambio que nunca puede ser al portador y el cheque que ef lo puede sor, a Ia Tur de diversas disposiciones do Ia L. T. y Op. Cr. Asi, el art. 88 dispone que ‘‘la letra de cambio expedida al portador no produ- sir efectos de letra de cambio”, y que ‘si se emitiere alternativamente al portador 0 a favor de persona determinada, ls expresién ‘al portador’? so tendr& por no puesta’’, El art, 76, fr. VI. ordena que la letra dehe contener ‘‘el nombre de la per- sona a quien ha de hacerse el pago’’. Ahora bien, no es necesario que este nom- bro apatezca en e] momento en que la letra ¢s susctita y de hecho, en la prictica, se encuentran letras que circulan con el nombre del beneficiario en blanco. El pro- Diema de Ia letra on blaneo no podemos tratarlo aqui, pero baste decir que una DE DERECHO COMPARADO a @’) Nombre que no aparezca ser el de ninguna persona. El documento es pagadero al portador cuando el nombre del be- neficiario no parece ser el de ninguna persona. Esta regla esté reco- gida de la costumbre de los comerciantes quienes usan expresiones tales como “caja” “varios”, “documentos por pagar” con la intencién de que sean pagaderos a] portador ,(55). e’) Endoso en blanco. letra on esas condiciones no puede circular indefinidamente, pues no produciria efectos do letra de cambio, a Ja luz de lo dispuesto ex el artfoulo 14 y que para solvaguerdar en efieiencia debe ser Wonado ‘‘antes de la presentacién del titulo para ou acoptacién o para su pago’’, aogiin lo dispono el articulo 15. Bn nuestra opinién el nombre del tomador debe ser el e une persona real, para ‘que se cumple plenamente con el contenido del articulo 76, Si le letra ha sido expe: dida a Is orden de una pertona ficticia o no existonte, y esa letra no ba pasado a poder de un tercero de buena fo, indudablemente el documento no es letra de cambio y no produce ninguno de los efectos que Ja Ley prevé, Poro si existe formalmente sobro Ia letra un endoso de! tomador, aunque, como tiene que scrlo, a firma sea falsa, puesto que es la de wna persone que no existe, 0 en otras pala- bras sea la firma de ume persona ‘‘imaginaria”’, y Ia letra se encuentra en poder do un tenedor en virtud de un ondoso en blanco puesto falsamente por la persona ficticia, inexistente o imaginaria, respecto a ese tenedor de buena fe, Ie letra pro- duce todos sus efectos en contra de Ins partes reales que en ella hayan intervenido. Nata solueién enenentra apoyo en el articulo 12 de 1a 1. T. y Op. Cr, segin el eval el heebo de que en un titulo ‘aparezcan firmas felses o de personas imaginarias, 0 la circunstancia de que por cualquier motivo el titulo no obliguo a alguno de los sig- naterios, 0 a las personas que aparczean como tales, no invalidan Ins obligacionea dorivadas Gel titulo en contra de las domés personas quo lo euseriban’”’. Pero si el documento es un cheque, on virtud de que éste puede ser al portador, esta discutir si el titulo es al portador evando el nombre del beneficiario os el de ung persona ficticia o no existente. ‘Titulos nominativos son los expedidos a favor de una persone euyo nombre se consigns en el texto mismo del documento, (art. 23). Son titulos al portador los que no estén expedidos a favor de persona determinads, contengan o no la cléusula ‘‘al portador’? (art. 69). La Ley afirma su prineipio cuando se dispone en el art, 179 que ‘el cheque que no indique « favor de quién so expide, asf como el omitide a favor de persona determinada y que, ademés contenga la cléusula al portador, 60 reputaré ‘‘al portador’’. Por consecuencia, no puede considerarse al portador un cheque expedido a favor de una persona ficticia o no exiatente. El cheque es nominative y si ha circulado y se encuentra en manos de un endosatario de buena fo, aunque In firma de ondoso del tomador sca la de una persona imaginaria_y por eonseeuencia felsa, el titulo es vélide y obliga a todos los signatarios de 61. (55) Siendo titulos nominativos los expedides a favor de una persona cuyo nombre so consigna en ot texto mismo del documento (Iu. T. y Op. Or, art, 28) y al portador los que no esté expedides a favor de una persona determinads (articn- Jo 69), croomos que en nuestro Derecho se puede Hegar a la misma conclusiGn, a BOLNTIN DEL INSTTZUTO Cuando el tnico 0 el ultimo endoso es en blanco, el instrumento, aunque originalmente “a Is orden” cambia su ley de circulacién y se convierte para lo sueesivo, en titulo “al portador” (56). C. El girado. a) Concepto. El girado es la persona fisica 0 moral a quien el girador dirige la orden incondicional de pago contenida en el documento, b) Quien puede ser girado. Puede ser girado una persona que no sea girador o beneficiario, pero también puede serlo el beneficiario mismo, como en caso del che- que girado a favor del propio banco girado, a fin de pagar una deuda con él contraida por el girador; 0, en fin, pueden ser girado y girador la misma persona. En virtud de la semejanza que una letra de cambio girada al pro- pio cargo tiene con el pagaré (promisory note) la seccién 180 de la LUIN, Ia asimila al pagaré al disponer que el tenedor puede tratarla como una letra o como un pagaré, invistiendo asi al girado de la letra al propio cargo de la responsabilidad directa que tiene el suscriptor de un pagaré (57). ¢) Cémo debe ser nombrado. La seccién 1, subseccién 5 de la LUIN dispone que “cuando el ins- trumento esté dirigido a un girado, éste debe ser nombrado 0 indica- (58) En el Derecho Mexicano ¢1 endoso en blaneo no eambia la ley de circu. Incién del titulo, pero hace posible su negociscién en 1a misma forma quo la de un titulo al portador, es decir, por simple tradieiém. Sin embargo, el girado debe Adentificar al Gitimo tenedor. Véaso en este sentido Redriguex, J., La identificacion Gel teneder do un cheque endosado en blance, on el nimero i de este Boletin. (67) Hn el Dorecho Mexicano hay que distinguir entre 1a letra de cambio ¥ el cheque, a osto respecto. La letra de cambio gitada al propio cargo, osté reglamentada por ol articu- lo 82 de la L. T. y Op. Cr,, ol cual estableco como requisito adicional a loa geno- rales de toda letra (artieulo 76) ol quo ‘‘sea pagadera en lugar divereo de aquél en que se emita’’, conservando on dieha forma o} roquisite do la ‘‘distantis loct”’, antes gencral pars toda letra de cambio y shore subsistento tnieamente para oste tipo de letra. El girador queda obligado como accptante, y como tal, on via directa, por lo que se llega a los mismos efectos prieticos que en el Derocho Norteamoricano. No ¢e conserva ol requisito de la ‘‘distantia loci’? para el cheque a cargo dol mismo girador, y en algunos easos, come en el cheque de viajere y en el cheque de caja, el giro al propio cargo resulta completamente normal {artfeulos 200 y 208 ae la T. T. y Op. Or), DE DERECHO COMPARADO 83 do de otra manera en él, con certeza razonable”. Nos remitimos a lo anteriormente dicho con relacién al beneficiario en lo relativo al nom- bre y a la certeza de su designacién, porque tiene aqui idéntica apli- eacién. El requisito que comentamos es de “negociabilidad” y en consecuencia, su defecto ocasiona que el instrumento deje de ser letra de cambio y, por lo tanto, titulo negociable. d) Pluralidad de girados. La seccién 128 de la LUIN, declara que “una letra puede estar dirigida a dos o més girados conjuntamente, sean o no socios; pero no a dos o mas girados en forma alternativa o en sucesién (58). e) Asimilacién al pagaré. Ademés del caso de Ia letra de cambio girada al propio cargo del girador, la cual puede ser tratada como pagaré por su tenedor, invis- tiendo asi al girador de responsabilidad directa, la seccién 189 de la LUIN, sefiala dos casos m&s en los cuales el tenedor puede proceder en la misma forma, a saber, cuando el girado es una persona ficticia © que no tiene capacidad para contratar. La seccién 17, subseccién 5, en fin, agrega otro al disponer que “cuando el instrumento es tan am- biguo que hay duda acerca de si es una letra o un pagaré, el tenedor puede tratarlo como cualquiera, a su elecci6n”. Sergio Francisco DE LA GARZA Catedratico del Instituto Tecnolégico y de Estudios Superiores de Monterrey. (58) Por consecuencia, es el Derecho Norteamericano no se da la figura del recomendatario elésico, nombrado por el gitador.

También podría gustarte