Jueves 10 de septiembre de 2020

Estimado/a Camarada
PRESENTE

Junto con saludarte y esperar que tu familia se encuentre bien, quisiera compartir
una reflexión contigo que representas a distintos/as camaradas.

Estamos a 45 días de una gesta histórica. Por primera vez desde la vuelta de la
democracia, tendremos la oportunidad de cambiar la Constitución por una nueva
que signifique construir la casa de todos y todas. Este ejercicio democrático nos
plantea numerosos desafíos. Por un lado, la tarea de mejorar el sistema de gobierno
y construir un mejor país. Por otro lado, recomponer la fractura del tejido social que
nace desde profundas desigualdades que se han generado en Chile.

Votar apruebo el 25 de octubre no solo es un hecho político, sino también es hacer

propia la continuidad histórica de millones de chilenas y chilenos que se
manifestaron pacíficamente en octubre del año pasado. De este modo,
inauguramos un nuevo ciclo, donde el protagonismo está en las personas, en el
territorio, en las regiones y en una nueva generación que ingresa al espacio público.

Recorriendo las regiones, he confirmado las oportunidades y fortalezas que existen,

pero también las múltiples necesidades y desigualdades que se padecen en esta
larga y angosta franja de tierra. No podemos quedarnos inmóviles, no podemos
continuar perplejos en circunstancias que lo político y la población nos reclaman un
nuevo proyecto transformador, y con la mayor unidad posible, para el país. La
unidad no solo tiene que conjugarse al interior de los partidos de oposición,
ésta debe también comprometer a la sociedad civil, a la gente, en un diálogo
horizontal, donde los municipios y los gobiernos regionales sean promotores de un
nuevo Chile.

Alberto
alberto@aundurragav.cl Undurraga
Vivimos una coyuntura histórica en un contexto de pandemia que, frente a un
gobierno incapaz, nos ha pegado con fuerza. La pandemia ha impactado
principalmente a las mujeres y a los adultos mayores, muchos chilenos y
chilenas han perdido a sus seres queridos, el desempleo se agudiza, la
pobreza corre el mismo destino y los miedos se ponen de manifiesto en la
población. No obstante, la esperanza también se vuelve protagonista. Esa es la
esperanza que busca una épica que nos ayude a construir juntos el futuro.

En ese marco, enfrentamos varios desafíos paralelos en los próximos meses, que
probablemente sean todos reflexionados en la próxima Junta Nacional del partido.
Primero, construir entre todos y todas una nueva Constitución, para lo cual el trabajo
que hagamos de aquí al 25 de octubre, por el apruebo y por la convención
constitucional 100% electa y paritaria, es fundamental. Valoro especialmente el
esfuerzo realizado por miles de camaradas en todas las comunas y regiones
del país, y el liderazgo unitario de Carmen Frei y el rol del secretario ejecutivo
del comando, Manuel Gallardo.

En segundo lugar, tenemos el desafío de elegir gobernadores/as, alcaldes/as y

concejales/as. Tengo la certeza que lo mejor para nuestro partido y para el país es
llevar candidaturas únicas de oposición en gobernaciones y en las alcaldías. De
esta forma podremos ganar la elección en abril próximo en cada región.

Asimismo, podremos reelegir a nuestros alcaldes y alcaldesas y potenciar nuevos

liderazgos para lograr el triunfo en nuevas comunas para nuestro partido. De la
misma forma, aumentar nuestra votación en la elección de concejales, lo que
requiere de un trabajo de apoyo a todos los candidatos y candidatas, sin excepción.

No se trata de un ganar por ganar, lo dicho anteriormente se basa en el importante

rol que tendrán en la construcción del nuevo Chile y por lo mismo en la relevancia
central que deben tener para nosotros.

Alberto
alberto@aundurragav.cl Undurraga
Finalmente, en materia presidencial, debemos transformar nuestra desventaja
en una ventaja, y con ello volver a conectar con los sueños de los chilenos y
chilenas. La desventaja es que no tenemos hoy en día un liderazgo único e
indiscutido ni en el partido ni en la oposición, como ha sido en elecciones pasadas.
Pero esta realidad nos da la oportunidad de hacer las cosas de una forma diferente.
Tenemos la oportunidad y, a mi juicio, también el deber de construir
participativamente en todo Chile el plan del próximo gobierno. Propongo que
comprometamos desde ya la participación nuestra en las primaras más
amplias posibles de la oposición en el marco del programa común a construir.
Finalmente, nuestro candidato o candidata, a esa primaria, debería ser elegido con
la máxima participación, en primarias abiertas, como ha sido nuestro accionar en
el pasado, para lo cual posiblemente tengamos que adelantar esta definición, dado
lo estrecho del calendario electoral del año.

Se trata camarada de construir un Mejor País, con los principios de siempre,

con el orgullo del servicio que ha prestado la Democracia Cristiana a Chile,
con la fuerza de nuestros militantes y el mundo independiente, con la mayor unidad
posible en la oposición, transitando en paralelo en el cambio constitucional, el triunfo
en las municipales y gobernadores, convencionales, Cores y en las presidenciales
y parlamentarias.

Cuídate, cuida el plebiscito y este 25 de octubre seamos parte del inicio de un Mejor
País votando APRUEBO y CONVENCIÓN CONSTITUCIONAL.

Un abrazo fraterno,

Alberto Undurraga V.

Alberto
alberto@aundurragav.cl Undurraga