Boletin de Monitoreo:
“Empleo y Discapacidad en
Honduras”
Monitoreo y Seguimiento a las Recomendaciones del Comité de la CRPD
Introducción
El presente boletín denominado “Empleo y Discapacidad en Honduras”
representa el primer documento de investigación del Observatorio
de Derechos Humanos de las Personas con discapacidad, plataforma
construida en el marco del Proyecto Fortaleciendo la Incidencia y el
Ejercicio de los Derechos de las Personas con discapacidad en las
Políticas Públicas en Honduras”, ejecutado por la Coordinadora de
Instituciones y Asociaciones de Rehabilitación de Honduras (CIARH)
junto a sus organizaciones socias Fundación de Waal y el Grupo
Hondureño de Apoyo a Personas Sordas (GHAPERS) y gracias al
financiamiento de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo
Internacional (USAID) a través de la Fundación Panamericana para
Metodología
El boletín se ha construido a partir de la investigación y recopilación
de fuentes primarias institucionales, utilizando las variables de
empleo, inclusión laboral, programas de empleo, población en
edad para trabajar y población económicamente activa, todas ellas
transversalizadas por la discapacidad con el objetivo de aproximar
un contexto actual de la situación de empleo en dicha población; se
tomó como base la recopilación, entrada de datos y registros oficiales
del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), la Secretaría del Trabajo y
Seguridad Social (STSS) a través de la Dirección General de Empleo
y su Unidad de Fomento a la Inclusión Laboral, la Secretaría de
Derechos Humanos (SEDH) y la Secretaría de Desarrollo e Inclusión
Social (SEDIS).
De igual forma, se obtuvieron datos e información del estudio sobre la
Situación del Empleo en Honduras-Lineamientos para la Formulación
de una Estrategia Nacional de Generación de Empleo, realizada
por el Departamento de Economía de la Facultad de Ciencias
www.observatoriodediscapacidadhn.com
el Desarrollo, por sus siglas en inglés PADF. La investigación se aloja
en el componente número 3 del Observatorio, el cual tiene como
objetivo el monitoreo del cumplimiento a las Recomendaciones
que el Comité de la CRPD hizo al Estado de Honduras en abril de
2017; de igual forma, sirva el presente documento para contribuir
a llenar el vacío de información que sobre discapacidad existe en
el país, de instrumento de análisis para la elaboración de estrategias
para el abordaje a la problemática de empleabilidad en las Personas
con discapacidad y como herramienta de incidencia política para el
trabajo que realiza la sociedad civil al momento de exigir un mayor y
efectivo cumplimiento de los Derechos Humanos de esta población.
Económicas, Administrativas y Contables de la Universidad Nacional
Autónoma de Honduras (UNAH), así como del Informe sobre el
Programa con Chamba Vivís Mejor para el Sector Discapacidad y
sus Familias realizado por la Mesa de Inclusión Laboral del Sector
Discapacidad; se aplicaron cuestionarios escritos a empresas privadas
identificadas por emplear o poseer programas de inclusión laboral y
se realizaron entrevistas a beneficiarios de los programas de empleo
implementados por el Estado.
Los datos e información recabada orientaron el objetivo del análisis,
el cual apunta a estructurar y clarificar un panorama real y actual
sobre la situación de empleo y capacidad laboral de las Personas
con discapacidad en el país, ¿qué tanto está cumpliendo el Estado de
Honduras en cifras y porcentajes?, y ¿cuál es la valoración e importancia
con que asume su responsabilidad legal (nacional e internacional) de
atender la problemática de empleo para dicho sector poblacional?.
 Base normativa con respecto al empleo para
Personas con discapacidad
El Estado de Honduras se ha comprometido a garantizar el derecho
al trabajo y al empleo de todas las personas, incluidas las Personas con
discapacidad, esta obligación se encuentra contenida en el artículo 27
de la Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos de esta
población, así mismo en el mes de abril de 2017 el Comité (CRPD)
expresó su preocupación sobre la situación de desempleo de las
Personas con discapacidad y dio Recomendaciones al respecto.
En cuanto a normativa nacional La Ley de Equidad y Desarrollo
Integral para las Personas con Discapacidad (Decreto 160-2005)
contiene 7 Artículos sobre el derecho al trabajo y en el año 2013
Un panorama breve y actual del empleo en Honduras
El artículo 23 de la Declaración Universal de Derechos Humanos
estipula que toda persona tiene derecho al trabajo sin discriminación
alguna, ello implica la inclusión de todo individuo sin condición o
distinción alguna; el mismo artículo refiere que es deber del Estado
proteger a todas las personas contra el desempleo.
Considerando lo anterior y por las condiciones de país en las que se
encuentra Honduras, se puede evidenciar que tal Derecho Humano
posee un bajo nivel de cumplimiento; existe una multiplicidad de
factores que provocan su débil ejercicio, destacando entre ellos la
pobreza estructural y la poca o débil implementación de Políticas
Públicas orientadas a la generación de empleo y protección para que
las personas que ya posean un trabajo, lo desarrollen en condiciones
dignas.
Según un estudio de investigación sobre la Situación del Empleo en
Honduras1, la pobreza es un problema histórico-estructural en el país,
considerada como el principal factor que fortalece la condición para
que los individuos o ciudadanos se vean restringidos en el acceso
a sus necesidades básicas elementales; esta condición se consolida
mucho más en los grupos poblacionales excluidos en términos
socioeconómicos, los cuales ven limitado en la mayoría de los
casos las posibilidades de acceder u obtener un empleo formal en
condiciones dignas.
En tal sentido el recurso humano con el que cuenta Honduras para
abordar el mercado laboral en el país, según la Encuesta Permanente
de Hogares para usos Múltiples (EPHPM) elaborada anualmente por el
Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en su informe del 2018 describe
que del total de la población 7,179,177 personas se encuentran dentro
de Edad para Trabajar (PET2); de ellas 3,757,227 son mujeres (52.5%)
y 3,421,950 son hombres (47.5%), lo que ya indica la necesidad del
Estado de asumir con responsabilidad el implementar y fortalecer
Políticas Públicas que generen empleo con enfoque y equidad de género.
1 Presentado en diciembre 2018 por el Departamento de Economía de la Facultad de
Ciencias Económicas, Administrativas y Contables de la Universidad Nacional Autónoma
de Honduras (UNAH).
2 Personas en Edad para Trabajar (PET): de acuerdo al Sistema de Indicadores Sociales
del INE, comprenden todas aquellas de 10 años y más que pueden participar potencial-
mente en el mercado laboral.
se aprobó la Política Pública para el Ejercicio de los Derechos y la
Inclusión Social de la Población de Honduras con Discapacidad, la
cual en su eje 5, desarrolla las acciones necesarias para la generación
de oportunidades de empleo; a su vez, la Primera Política Pública y
el Plan Nacional de Acción en Derechos Humanos, señala como
obligación del Estado “Garantizar las oportunidades laborales a las
Personas con discapacidad en las instituciones públicas, asegurando
las modificaciones estructurales y funcionales para la inserción laboral
de esta población”.
La EPHPM también refiere cual es la Población Económicamente
Activa (PEA3), detallando que 4,090,651 personas que se encuentran
ocupadas actualmente, de las cuales 1,651,439 (40.37%) están
ocupadas por cuenta propia (autoempleo); 1,538,312 ( 37.60%)
trabajan en el sector privado; 530,626 (12.77%) son trabajadores no
remunerados4; 236,187 (5.77%) trabajan en el sector público, o sea
en las distintas dependencias gubernamentales; y finalmente 143,087
(3.49%) poseen un empleo doméstico remunerado.
PEA
Empleo Doméstico
No remunerados 3.60%
12.77%
Sector Público Autoempleo
5.77% 40.37%
Sector Privado
37.60%
Rubros de la Población económicamente activa en Honduras
La mayoría de los trabajos se orientan a la agricultura, silvicultura,
caza y pesca; de acuerdo a la Secretaría del Trabajo5, el 70% de las
empresas en el país operan en la informalidad, es decir que no están
debidamente registradas, cumplen parcialmente o en algunos casos
ni cumplen con las leyes laborales, aspectos salariales, beneficios y
derechos para los y las trabajadoras.
Otro dato a tomar en cuenta es que del total de la Población
Económicamente Activa, 2,609,240 son hombres y 1,627,138 son
mujeres; significa que hay más hombres que mujeres insertados
laboralmente, disparidad que contrasta con el dato global de la
3 Población Económicamente Activa (PEA): comprenden aquellas personas que ya están
trabajando, están ocupadas o que están buscando activamente un empleo.
4 De acuerdo a ONU Mujeres, es aquel trabajo referido al doméstico y de cuidado no
remunerado.
5 Informalidad en las empresas y negocios en Honduras. Disponible en https://www.
laprensa.hn/economia/1145192-410/registradas-empresas-informalidad-negocios-hondu-
ras-
Población en edad para trabajar que demuestra que hay más
mujeres aptas para ello; deja en evidencia nuevamente la falta de
democratización en la asignación de plazas laborales con equidad de
género y visibiliza la dificultad y desventaja estructural que afronta
la mujer cuando decide emprender la obtención de un puesto de
trabajo.
Ante este contexto laboral, y al relacionar a la PET con la PEA, se
identifica que solo el 57% de la población (que está en edad para
trabajar) desarrolla algún tipo de actividad que le permite poseer
un ingreso, ingreso que no necesariamente le garantice cubrir sin
limitaciones sus necesidades básicas; ello implica que de las personas
que se encuentran en edad para trabajar, solamente 3 de cada 10
La fuerza laboral de Personas con
Discapacidad en el país
La población con discapacidad está considerada como uno de los
grupos vulnerables en el país, esto implica que quien posee dicha
condición se enfrenta a mayores dificultades y desventajas en relación
con la población que no posee ninguna discapacidad, lo que los limita a
acceder en forma libre y en igualdad de condiciones a sus necesidades
básicas y bienes primarios. En el 2017 el Comité de la CRPD6
emitió una serie de preocupaciones y recomendaciones al Estado de
Honduras, disponiendo que el acceso al trabajo debe ser garantizado
como un aspecto fundamental para mejorar las condiciones de vida en
dicha población.
Una de las principales causas por las cuales el Estado no aborda
correctamente la problemática que enfrentan las Personas con
discapacidad es la evidente falta de datos y/o registros estadísticos sobre
dicha población; el único registro oficial sobre discapacidad lo realizó el
INE en el 2002, en la EPHPM, en la cual según dicho informe la población
con discapacidad alcanzaba una cifra de 177,056 personas para ese año.
17 años después los datos continúan desactualizados, poco claros y
confusos; el INE en el 2013 realizó un esfuerzo por actualizar el dato
sobre la cantidad de Personas con discapacidad nuevamente a través de
su EPHPM; como resultado registró a 261,577 personas con algún tipo
de discapacidad, sin embargo ese dato no concuerda con un estudio
que realizó la Secretaría del Trabajo 4 años antes (2009) sobre empleo
y Personas con discapacidad en edad para trabajar y económicamente
activas, y que se estará detallando a continuación.
Para fines de la presente investigación y cómo práctica permanente del
sector de Personas con discapacidad, tomaremos como referencia el
Informe de la Organización Mundial de la Salud-OMS (2011) el cual
indica que, de la población total, un aproximado del 10%, o sea, unas
900 mil personas poseen algún tipo de discapacidad.
La Secretaría del Trabajo en el 2009, llevó a cabo un Estudio7 con el objetivo
de identificar el recurso humano con discapacidad apto para el campo
laboral; en su informe final registró que la población total de Personas con
discapacidad en edad para trabajar (PET) era de 314,174 personas; de las
cuales 173,785 (55.32%) correspondían a mujeres y 140,389 (44.68%)
eran hombres, lo que mantiene la concordancia con los datos generales de
país con respecto a la superioridad de las mujeres dentro de la población
aptas para trabajar.
6 Comité de la Convención Internacional sobre los Derechos Humanos de las Personas
con Discapacidad.
7 Estudio sobre Empleo y Trabajo de las Personas con Discapacidad, realizada por la
Dirección General de Empleo / Unidad de Inclusión Laboral
hondureños poseen un trabajo formal remunerado, que le permita
gozar de los derechos y beneficios otorgados por la ley y por
consiguiente le facilite cubrir sus necesidades básicas sin muchas
limitaciones.
Este es el panorama al que se enfrenta la población hondureña en
general con respecto al goce pleno del derecho al trabajo, derecho
que al obtenerlo le pueda garantizar la satisfacción de sus necesidades
básicas y el acceso a los bienes primarios; así como también, el mismo
escenario refleja la debilidad que posee el Estado en abordar de
forma correcta y eficaz la problemática de desempleo, que alimenta
y profundiza la situación de pobreza estructural que históricamente
arrastra el país.
De acuerdo al mismo informe, las Personas con discapacidad en edad
para trabajar se concentran mayoritariamente en el área rural con
un 52.6% (165,322) y en el área urbana con un 47.4% (148,852); en
cuanto a los rangos de edad, la población adulta y adulta mayor con
discapacidad de 30 a 60 o más años representaron la mayoría con el
77.6% y los jóvenes con discapacidad de 10 a 29 años el restante 22.4%;
al valorar tales datos ya en ese entonces implicaba dificultad para esta
población de obtener un empleo, ello por la práctica patronal existente
en el país que toma o asocia el rango de edad con la intensión o interés
de contratar, esto significa que en el país, cuando se posee mayor edad
es mayor la dificultad de obtener un empleo para una persona en
general.
Siguiendo con el informe, el mismo identificó la población
económicamente activa (PEA) con discapacidad, que registró un total
de 118,301 personas, de las cuales 70,308 (59.4%) eran hombres y
47,993 (40.6%) mujeres; dicha población se concentra más en el área
rural con un 54.8% (64,850) y el restante 45.2% (53,452) ubicados en
las zonas urbanas; nuevamente estos datos refuerzan la situación de
desventaja en que se encuentran las mujeres en el país sin importar su
condición con respecto a la obtención equitativa de plazas o puestos
laborales.
Por otra parte, la concentración de la PEA en el área rural se debe
a que las actividades que en mayor parte ejecutan las Personas con
discapacidad son la agricultura, silvicultura, caza, pesca y comercio
informal (por cuenta propia), y que coincide con la situación de país en
materia de empleo.
En el caso de la población con discapacidad, la imposibilidad de obtener
un empleo formal se fortalece por el prejuicio que tiene una parte
de la sociedad, en donde se les juzga como individuos que por su desarrollan actividades por cuenta propia; y también registra que para
condición no son capaces de realizar una determinada labor y cumplir ese año el ingreso per cápita promedio de las Personas con discapacidad
con responsabilidades; a esto hay que sumarle los bajos niveles de fue de USD $ 119, que de acuerdo al cambio de moneda representaba
escolaridad, preparación o estudio promedio de la población con un poco más de 2,300 lempiras, al año.
discapacidad, en quienes encontramos que la mayoría (un 55.8%) Al relacionar los datos de la Secretaría del Trabajo del 2009 con los
solo poseen educación primaria, el 27.1% no posee ningún tipo de datos de la EPHPM del INE del 2018, aproximaríamos que, dentro
nivel educativo, un 12.9% poseen nivel secundario y solo un 4.2% han de la población en edad para trabajar a nivel del general en el país,
cursado a nivel superior o han logrado obtener un título universitario. las Personas con discapacidad ocupan el 4.37%, y en la población
El informe ya menciona que la mayor actividad laboral es el autoempleo económicamente activa en Honduras representan el 7.16%, lo que las
con un 47.57% del total de la PEA, lo que significa que 56,276 personas coloca como una minoría importante dentro de la dinámica laboral y
productiva.
Nivel Educativo Lastimosamente no se pudo identificar bases de datos ni registros a
Nivel Primario
60 55.80%
nivel del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP) y las
50 distintas Cámaras de Comercio del país que permitan tener a mano la
40
información sobre la cantidad de personas que trabajan a nivel privado;
Ningún Tipo de Nivel se conocen casos de empresas que han contratado Personas con
Educativo 27.10%
30
discapacidad o que poseen algunos programas destinados a la inclusión
20 Nivel Secundario laboral, no obstante, hasta el momento no se posee un registro que
12.90%
Nivel Superior
brinde certeza sobre la cantidad, tipo de discapacidad, rangos de edad,
10
4.20%
tipos de trabajo que desarrollan, entre otras variables que permitan
0 evaluar el nivel real de inclusión laboral de dicha población.
Nivel Primario Ningún Tipo de Nivel Nivel Secundario Nivel Superior
Educativo

El nivel educativo de las Personas con discapacidad es una causa significativa para no acceder a una oportunidad laboral.

Respuesta Estatal y Privada a la demanda de

empleo para las Personas con Discapacidad
El Estado
De acuerdo a la Ley de Equidad, las entidades de la administración
pública y las empresas de carácter privado están obligadas a contratar
a un mínimo de Personas con discapacidad de acuerdo a la cantidad
de empleados que posean8.

Según dicho artículo, vigente, de estricto cumplimiento, y tomando en

cuenta que la cantidad de personas que trabajan en la administración
pública es de 236,187 al cierre del 2018, en el gobierno deberían de
estar contratadas 9,447 Personas con discapacidad (4 personas por
cada 100 empleados de acuerdo a tabla); sin embargo el único registro
que se posee las empleadas en las distintas Secretarías del Estado data
del año 20119, año en el cual habían 345 Personas con discapacidad Al porcentualizar tales valores observamos que la administración
laborando en toda la estructura estatal. pública solo ha cumplido el 3.65% de su responsabilidad para con
Cumplimiento del artículo 35 (Decreto 160-2005) por
el artículo 35 de la Ley de Equidad, ya que de 9,447 que deberían
parte de las Instituciones Gubernamentales. de estar contratadas solo hay 345; en términos más amplios significa
Empleadas
345 (3.65%)
que por cada 684 empleados de gobierno, solamente uno (1)
posee discapacidad, y si lo comparamos con cifras de la PEA con
discapacidad en general, solo alcanza el 3% de contratación, dicho
en otro sentido, de cada 343 Personas con discapacidad solo una
(1) trabaja en el gobierno; si bien la estructura gubernamental no
es la mayor empleadora del país ni tiene la capacidad para serlo,
lo cierto es que si tiene la responsabilidad (en teoría) de cumplir
No Empleadas
y hacer que se respete tal disposición normativa; por otra parte, si
9,102 (96.35%)
cumpliese lo estipulado, estaría brindando un ejemplo de respeto a
Según tabla de contratación en las Instituciones Gubernamentales deben laborar 9, 447 personas con discapacidad. la ley, cumplimiento a las Recomendaciones del Comité de la CRPD
8 Artículo 35, Ley de Equidad y Desarrollo Integral para las Personas con Discapacidad, y transitando del discurso a una verdadera práctica que evidencie el
Decreto 160-2005. correcto accionar del Estado.
9 Comisionado Nacional de Derechos Humanos (CONADEH), Estudio Preliminar sobre
Empleo y Trabajo de las Personas con Discapacidad. Presentado a solicitud de la Oficina
del Alto Comisionado de los Derechos Humanos
En respuesta a la demanda de empleo por parte del Sector
Discapacidad, desde el año 2015, el Estado ha venido ejecutando
una serie de programas de inserción laboral para esta población,
coordinando con algunas organizaciones de sociedad civil aglutinadas
en una plataforma denominada “Mesa de Inclusión Laboral del
Sector Discapacidad” y así implementar el programa “Con Chamba
Vivis Mejor para el Sector Discapacidad y sus Familias”, del cual se
desprenden los sub-programas “Chamba Comunitaria y Chamba
Joven”.
En un informe realizado por la Mesa de Inclusión Laboral10, muestra que
ambos sub-programas han consistido en la contratación temporal de
Personas con discapacidad (jóvenes y adultos) e incluyendo también
a familiares en las distintas plazas; contrataciones que varían desde un
tiempo mínimo de 3 meses a un máximo de 10, y como resultado
de los 4 años en los que se ha implementado, se ha contratado
temporalmente a 498 personas.
La modalidad de empleo es por hora y se realiza por medio de
la Secretaría de Desarrollo e Inclusión Social (SEDIS), quienes se
encargan de pagar los salarios; las contrataciones se han centralizado
en la ciudad de Tegucigalpa (468) e incluyéndose ya a la ciudad de
San Pedro Sula en el 2018 donde se beneficiaron a 30 personas.
Los perfiles de los contratados son diversos, el informe de la Mesa
de Inclusión Laboral no indica cual es la profesión que mayormente
obtiene un empleo pero menciona que entre los beneficiarios hay
bachilleres en humanidades, en computación, administración de
empresas y peritos mercantiles, por lo que se deduce una exigencia
mínima para ser beneficiario la de poseer un nivel educativo medio.
El informe también menciona que han sido contratados abogados,
psicólogos, pedagogos, licenciados en lenguas extranjeras,
periodistas, licenciados en economía y administración de empresas,
y que las Personas con discapacidad sensorial (ciegas y sordas) son
practicamente las únicas que poseen una carrera universitaria dentro
de las profesiones mencionadas; no obstante lo anterior, el informe
refleja que personas que posean algún tipo de oficio como ser estilistas,
masajistas, carpinteros, panaderos, corte-confección, barberos, así
como aquellas con alguna habilidad artística como cantantes, danza
y pintores, también se han visto beneficiados de estos programas de
empleo.
En cuanto a los lugares en donde se han colocado a las personas
para desarrollar el trabajo se encuentran: Centros de Salud, Hospital
San Felipe, el Instituto Hondureño de Seguridad Social, la Secretaría
de Educación, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos,
la Secretaría de Gobernación, organizaciones de sociedad civil del
Sector Discapacidad, Centros Educativos Públicos, el canal 8-televisora
estatal, la Secretaría de Desarrollo en Inclusión Social (SEDIS) y la
Alcaldía Municipal, pero no especifica si de Tegucigalpa, San Pedro Sula
o ambas.
Los puestos o plazas que han ocupado los y las beneficiarias se orientan
a las áreas de bodega, farmacia, albañilería, trabajo de campo (sin
especificar que tipo), conserjes, recepción, recepción de denuncias en
el CONADEH, áreas de secretaría, computación, archivo, inscripción
de pacientes, área de citas, información, área de psicología, instructores
de lectura Braille, de lengua de señas y asistentes administrativos.
Con el programa de chamba comunitaria se realizaron algunas
10 Mesa de Inclusión Laboral del Sector Discapacidad. Informe de Resultados Programa
con Chamba Vivis Mejor para el Sector Discapacidad
actividades que consistieron en impartir charlas de sensibilización y
presentación de talentos artísticos en el centro comercial Mall Premier,
en la Secretaría de Educación, de Salud, Finanzas, Trabajo, algunos
centros Educativos Públicos, en el Parque Central, CONADEH, SEDIS,
UNAH, UTH, Universidad, Metropolitana y se realizaron cursos
de lengua de señas a la Red Humanitaria de Derechos Humanos,
Dirección de Discapacidad, INFRACNOVI, CONADEH y algunos
padres de familia de Personas con discapacidad. El informe menciona
que en el 2018 se formaron a 25 participantes beneficiarios del
programa chamba comunitaria a través de un Diplomado en Derechos
Humanos, impartido por la Secretaria de Derechos Humanos.
El rol de las organizaciones de discapacidad, y particularmente de la
Mesa de Inclusión Laboral, ha sido el de identificar y proveer a la SEDIS
de los perfiles y listados de las personas a ser beneficiarias; CIARH
tuvo la experiencia de contar con dos personas beneficiarias de dicho
programa durante los años 2016-2017, ambas mujeres y familiares en
primer grado de Personas con discapacidad, el período de tiempo
máximo que realizaron sus labores a medio tiempo (4 horas diarias)
fue de 5 meses, realizando funciones de apoyo y asistencia en las áreas
administrativa y técnica de la organización.
Del testimonio de las beneficiarias se pudo obtener que si bien el
programa representaba una fuente de ingreso temporal de recursos,
al finalizar su tiempo no se garantizaba la recontratación, ya que por
norma, solo se podía ser beneficiario del programa una sola vez, también
expresaron que la forma de pago era un trámite desordenado y altamente
burocrático, puesto que para acceder a su salario eran convocadas a un
lugar en específico en donde se aglutinaban todos los beneficiarios y en
ocasiones debían de permanecer por largo tiempo haciendo fila para
firmar una serie de documentos y posteriormente recibir el pago, mismo
que siempre tuvo atrasos ya que nunca se realizó al 30 de cada mes
sino que hubo personas a las cuales se les dio su pago con 2 y 3 meses
de retraso.
CIARH ha tenido acceso a diversas opiniones del Sector Discapacidad
sobre estos programas, y la percepción generalizada es que los
mismos solo vienen a fortalecer una estrategia asistencialista por
parte del Estado para evadir la responsabilidad de cumplir y hacer
que se cumpla la normativa sobre inclusión laboral de Personas con
discapacidad; si bien los programas permiten que las Personas con
discapacidad estén ocupadas y obtengan una remuneración durante
un tiempo, luego que terminan sus labores, en su mayoría vuelven a
la misma situación original de desempleo; se opina que los programas
son centralizados, no se conoce el proceso de selección de los
beneficiarios y algunas personas critican que el mismo se politiza al
beneficiarse solo a personas afines al partido en el gobierno.
La Secretaría de Derechos Humanos en su Informe sobre la Situación
de Derechos Humanos en Honduras del período 2016-2017 menciona
que en el 2017 se destinaron 439,399 lempiras para la administración
de políticas de empleo e inclusión laboral de Personas con discapacidad;
de igual manera en el 2016, la Secretaría del Trabajo realizó 180 análisis
de puestos y 2,594 visitas de promoción a nivel de la empresa privada
como parte de una estrategia de promoción de los derechos de las
Personas con discapacidad, lastimosamente el informe no registra el
resultado de dichos análisis y visitas; de igual forma se describe que
se autorizaron 65 créditos solidarios para que las personas pudiesen
emprender su propio negocio y en coordinación con el plan 20/20
se otorgaron 70 becas a nivel universitario para que las Personas con
discapacidad pudiesen estudiar.
CIARH trató de obtener mayor información sobre dichos registros, sin
embargo, no fue posible, ya que la información no está a la disponibilidad
Empresa Privada
La inclusión laboral de Personas con discapacidad a nivel de las entidades
privadas se ha ido posicionando poco a poco en los ultimos años a
nivel de algunas empresas, lastimosamente aún no existe un registro
a nivel de las plataformas (COHEP, ANDI y Cámaras de Comercio)
que indique cuantas personas de dicha población hayan sido insertadas
laboralmente y cuantas se encuentran actualmente trabajando.
Al realizar la investigación se pudo identificar que solo algunas
empresas, sobre todo aquellas que poseen mayor capacidad
estructural y operativa, han emprendido procesos o programas
orientados a insertar laboralmente a esta población; dentro de ellas
destacan empresas como Walmart que poseen un programa regional
destinado a incorparar a empleados (o asociados como les denomina
la empresa) con discapacidad; para el año 2017, su programa regional
de México y Centroamerica tenía empleadas a 226 personas en los
países centroamericanos11 de los cuales aproximadamente 28 de ellos
se situan en Honduras, empleados con discapacidad física y auditiva.
BAC Honduras, entidad bancaria de carácter privado es otra de las
empresas que desarrolla un programa con alcance a nivel de la regional,
se viene ejecutando desde hace 3 años y actualmente poseen a 28
personas empleadas a nivel nacional, incorporando a Personas con
discapacidad física, visual y auditiva entre sus colaboradores.
La Asociación Hondureña de Empresas Maquiladoras en el año 2015
llevó a cabo el primer encuentro con Personas con discapacidad
en el cual dio a conocer que entre 100 a 120 Personas con
discapacidad física y auditiva estaban contratadas en sus distintas
empresas asociadas12. A nivel de instituciones académicas de nivel
superior, en el 2018 UNITEC emprendió un proyecto denominado
pasantías de puertas abiertas, dentro del cual uno de sus objetivos es
ir incorporando progresivamante a Personas con discapacidad dentro
de su estructura, actualmente poseen a Personas con discapacidad
visual y física entre su planilla de empleados.
Como se puede observar, se hace dificil determinar la situación
laboral o identificar a las Personas con discapacidad contratadas
por la empresa privada; si bien existen otras empresas de mediana
y pequeña capacidad que las contratan, se dificulta el visibilizar sus
acciones de inserción laboral así como la situación de los empleados
que poseen con dicha condición.
Probabemente uno de los factores para que esto continue sea
que muchas empresas confunden el enfoque de Responsabilidad
11https://www.walmartcentroamerica.com/sala-de-prensa/2017/12/08/walmart-reafirma-
compromiso-de-contratar-mas-personas-con-discapacidad
12 http://ahm-honduras.com/ahm-2017/?tag=trabajadores-de-la-maquila
pública y en las distintas oficinas responsables de brindarlas no la
poseen a la mano, debiéndose realizar un trámite que en la mayoría
de ocasiones es lento, burocrático y da la impresión que no se desea
brindar la información completa.
Social Empresarial (RSE) con un tema de derecho al trabajo para
dicha población; no obstante, la empresa privada ha ido cambiando
su abordaje hacia la discapacidad, en los ultimos dos años se han
promovido espacios de discusión, acercamientos, foros y ferias
informativas entre empresas, empresarios y Personas con discapacidad.
FUNDAHRSE que es la organización encargada de certificar y premiar
la responsabilidad social en las empresas se ha interesado sobre la
temática y entre sus líneas de trabajo para el 2019 está el ejecutar un
proyecto denominado “Mejorar el respeto a los Derechos Humanos
para las Personas con Discapacidad en el Sector Empresarial”, dentro
del cual pretende construir una base de datos de Personas con
discapacidad contratadas por sus afiliadas así como el promocionar,
sensibilizar y capacitar a las mismas sobre la inclusión e importancia
de contratar a Personas con discapacidad; de esa manera se pretende
incrementar el nivel de cumplimiento a las normativas, crear mayor
sensisbilización y fortalecimiento de las capacidades de las empresas
mismas y consecuentemente mejorar las condiciones de vida de esta
población.
La empresa privada expresa que aun el tema esta dando sus primeros
pasos, puesto que si bien existe toda una normativa e incluso se
brindan incentivos fiscales a quienes aporten, donen o contraten
a Personas con discapacidad, la realidad es que el gobierno no ha
establecido un mecanismo claro y que este en funcionamiento para
obtener tales beneficios; y otra de las causas por medio de las cuales
se ven limitados a contratar (que la mayoría de empresas coloca
como la principal), es el poco recurso humano con discapacidad que
se encuentra capacitado, instruido o con formación-nivel educativo
que les permita optar a los concursos que se ofertan, obtener su
plaza y desarrollar un rendimiento y resultados acorde a lo exigido
por la empresa privada, sumado a la necesidad de hacer accesibles
todos los espacios así como medios de comunicación, los ajustes
razonables y las medidas de apoyo que requieran las personas para
que puedan ejecutar sus labores en libertar e igualdad de condiciones
con las demas.
 Conclusiones
1. Las dificultades que enfrentan las Personas con discapacidad en el
país para acceder a un empleo digno son mayores que las del resto
de la población, esto amplía la brecha de exclusión y la relación
existente entre discapacidad y pobreza.
2. La ausencia de datos reales sobre la población con discapacidad
continúa siendo una causa importante para que el Estado de
Honduras no aborde de manera correcta y efectiva la problemática
de esta población. Se evidencia un desinterés al momento de
obtener datos y registros sobre la discapacidad ya que los mismos
no coinciden y se contradicen en los años 2009 y 2013.
3. La desactualización de datos sobre las Personas con discapacidad
en edad para trabajar y económicamente activa ya llegó a 10 años,
el estudio se centró mayoritariamente en identificar la fuerza
laboral de dicha población, mencionando ligeramente la situación
de empleo a nivel público y privado, pero sin señalar a profundidad
los obstáculos y barreras que han imposibilitado una inclusión
laboral efectiva.
4. La fuerza laboral de las Personas con discapacidad alcanza
el 4.37% del total de la población en edad para trabajar en el
país, representada en 314,174 personas; y llega a un 7.16% de la
totalidad de la población economicamente activa en el país, lo que
significa que 118,301 Personas con discapacidad estan ocupadas o
realizan alguna actividad laboral.
5. Las mujeres con discapacidad constituyen la mayor fuerza laboral
dentro de esta población con un 55.32% en edad para trabajar,
sin embargo la falta de democratización de espacios de trabajo y
el poco o nulo enfoque de genero en este sector es evidente, ya
que las mismas mujeres solo representan el 40.6% en la población
economicamente activa, significando que son mas los hombres
con discapacidad que obtienen un empleo o se dedican a alguna
actividad laboral u ocupación.
6. La principal actividad que desarrollan las Personas con discapacidad
es el autoempleo o lo que se conoce como comercio informal,
llevado a cabo por el 47.57% de la totalidad de personas
econonomicamente activas en esta población.
7. La principal limitante para que una Persona con discapacidad
obtenga un empleo es su falta de formación o bajo nivel educativo,
ya que solo el 4.2% de la población con discapacidad que posee la
edad para trabajar ha cursado o ha obtenido un título universitario;
la mayoría (55.8%) solo cursó o llegó al nivel primario, un 12.9%
web: www.ciarh-ong.org, correo electrónico: ciarhhonduras@yahoo.com, Teléfono: 2231-1971 o 2239-0440
al nivel secundario y un 27.1% no tiene ningun tipo de nivel
educativo; esto convierte a esta población en competidores
débiles al momento de concursar por una plaza laboral.
8. A 13 años de vigencia de la Ley de Equidad, 10 años de la adopción
de la Convención Internacional y 5 años de la puesta en ejecución
de la Política Pública de Discapacidad, el Estado no ha realizado lo
suficiente ni destinado los recursos necesarios para la generación
de oportunidades de empleo en la población con discapacidad.
9. El Estado solo ha cumplido el 3.65% de lo estipulado en el artículo
35 de la Ley de Equidad que dispone la contratación de Personas
con discapacidad de acuerdo a la cantidad de empleados que
posean las instituciones; de 9,447 personas que deberían estar
contratadas, el sector público solo incorpora a 345 dentro de sus
distintas dependencias o instituciones, lo que significa que por cada
684 empleados de gobierno solo hay 1 Persona con discapacidad
laborando.
10. Como alternativa para enfrentar la problemática de empleo,
el Estado ha respondido con la ejecución del programa “Con
Chamba Vivis Mejor para el Sector Discapacidad y sus Familias”
que consiste en la contratación temporal bajo la modalidad de
empleo por hora y del cual se ha beneficiado a 498 personas
desde el 2015 al 2018; este programa, si bien representa el
acceso a oportunidades laborales, el impacto que genera no es
significativo para mejorar las condiciones de vida de las Personas
con discapacidad, por su temporalidad y condiciones de acceso.
11. También se carece de datos y registros sobre Personas con
discapacidad laborando a nivel de empresas o instituciones privadas,
no obtante se pueden identificar algunas entidades pertenecientes
a este sector (sobre todo las de mayor capacidad estructural y
operativo) que desarrollan e implementan programas progresivos
de inclusión laboral a personas con discapacidad e incluso algunas
de ellas con enfoques regionales.
12. Los altos niveles de desempleo en las Personas con discapacidad
es una de las preocupaciones que el Comité de la Convención
(CRPD) expresó a Honduras; a pesar de ello, y por las cifras,
datos y resultados que muestra la presente investigación, se
evidencia el poco interés del Estado en abordar esta problemática,
dar respuesta a la Recomendación 58 del referido Comité y
consecuentemente mejorar las condiciones y calidad de vida de
las Personas con discapacidad.
“Este documento ha sido elaborado gracias al financiamiento de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a
través de la Fundación Panamericana para el Desarrollo por sus siglas en ingles (PADF)”.

El contenido de este documento es responsabilidad exclusiva del ejecutor del Proyecto “Fortaleciendo la Incidencia y el Ejercicio de los Derechos
de las Personas con Discapacidad en las Políticas Públicas en Honduras”, y no necesariamente reflejan la posición del Gobierno de los Estados
Unidos, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y la Fundación Panamericana para el Desarrollo (PADF).

Proyecto: “Fortaleciendo la Incidencia y el Ejercicio de los Derechos Humanos de las

Personas con Discapacidad en las Políticas Públicas de Honduras”
PADF-006-17-H