la depreciación acelerada de activos adquiridos a través de contratos de
arrendamiento financiero El arrendamiento es una fuente de financiamiento que se origina por la necesidad que tiene una empresa de adquirir un bien, ya sea para aumentar su capacidad productiva, mejorar el servicio o implementar nuevos proyectos; ante esta necesidad la empresa o la entidad financiera compra el bien y, mediante un contrato de arrendamiento financiero, cede el uso del bien a la empresa que lo necesite, a cambio de pagos periódicos y con la opción de que, al finalizar el contrato, este pueda comprar el bien. Diferenciando de un arrendamiento Financiero, en este tendremos que discernir si a efectos fiscales el contrato tiene la calificación de arrendamiento financiero, y una vez definido, calificar el régimen fiscal aplicable al mismo, cuantificando sus efectos fiscales. Si al contrato de arrendamiento financiero se le aplica el régimen fiscal especial, aparecerán ajustes extracontables positivos y negativos, los negativos coincidirán primordialmente con la duración del contrato de arrendamiento financiero, los positivos en el resto de vida útil del bien objeto del contrato.