A pesar de los grandes descubrimientos e innovaciones tecnológicas, las organizaciones son fundamentalmente conservadoras en sus aspectos internos tardan mucho en adaptarse a los cambios en su entorno, y solo lo hacen cuando es inevitable. Hall señala que las corporaciones son en esencias conservadoras y preservadoras, estas procuran mantener paradigmas organizacionales y culturales. Las organizaciones reclutan y seleccionan a su personal de acuerdo a sus estándares, expectativas y requisitos, cuando son admitidos empieza el proceso de los programas de integración, ya que con esto se transmita la cultura y modelos de comportamiento. Los tres paradigmas organizacionales más antiguos son: Carácter burocrático, estructura de tipo funcional, fuerte división, y fragmentación del trabajo cada uno de estos antiguos paradigmas cumple su misión con eficacia. El carácter burocrático también llamado administración científica sirvió para cimentar la ingeniería industrial y la división del trabajo. El benchmarking fue uno de los principales métodos en este paradigma, en el momento en que se impone el programa de descentralización y de profesionalización la empresa tomo la posición de primera industria automovilística. La burocracia tuvo sus raíces en el segundo periodo de la revolución industrial. La estructura funcional y dividida, también llamada departamentalización por funciones identificadas según su función, como finanzas, ventas, producción, recursos humanos, entre otros. Este paradigma presenta características determinantes que la convirtieron en la favorita de la mayoría de empresas, algunas de ellas son: diferenciación lógica de las operaciones según la especialización funcional, máximo aprovechamiento y eficiencia de cada área de la organización permite distinguir y mantener el poder de las funciones principales. Cabe destacar que este paradigma también tiene sus restricciones: cada área tiende a concentrase en su trabajo y sus metas. Los antiguos paradigmas culturales son: autocracia y desconfianza, inconformismo, y el individualismo. Según Weber los burócratas forman el cuerpo administrativo de la jerarquía y la estructura de la organización, la burocracia es considerada la forma más eficiente de organización creada por el hombre. Los estudios de Merton revelan que cada dimensión de la burocracia puede generar consecuencias previstas por Weber, como la presibilidad del funcionamiento y de la máxima eficiencia de la organización. Ante el dinamismo y las fuertes exigencias de la economía y la competencia globalizadas, es preciso innovar para aumentar la productividad y la calidad, e JAIRO ALEJANDRO VARGAS VACCA TALLER DE GESTION EMPRESARIAL UNIVERSIDAD DE BOYACA incrementar el valor para el cliente. La percepción de los cambios es fundamental para la supervivencia de las empresas.