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ORACIONESPATRISMEI

1. Patrismei para que lo amemos mejor.

Padre nuestro
que en los cielos estás 3. Muéstranosturostro
gracias por haber revelado tu misterio de amor
a los sencillos de corazón. Dios y Padre nuestro,
acogemos en fe tu misterio sagrado,
Queremos sentirnos y con la misma fe te pedimos:
con el corazón caldeado Muéstranos tu rostro.
en el fuego de tu amor, siempre a punto;
queremos adentrarnos en el misterio profundo Haznos descubrir tu verdadera imagen
donde Tú habitas en el resplandor de la Palabra
en lo más íntimo del hombre. que Tú mismo nos has dado.
Ayúdanos a contemplarla y a interpretarla
Aleja de nosotros el ruido y el vértigo, en espíritu y en verdad.
haznos crecer en soledad y en silencio.
Rompe en nosotros los ídolos Muéstranos tu verdadero rostro
que nos cortan el camino en la transparencia del rostro de tu Cristo.
hacia lo trascendente: Él, que es el fulgor de tu gloria
el tener, el poder, el disfrute sin medida. y el espejo en quien podemos verte.

Que baje de la mente al corazón Ayúdanos a descubrirte


El anuncio de Jesús al despedirse: en sus enseñanzas sobre ti,
“El Padre mismo nos ama”. en sus actitudes filiales,
en sus gestos y detalles para contigo,
Danos audacia y espíritu generoso en su oración,
para llegar al encuentro profundo, y en el modo de llevar a cabo
para recuperar la dimensión insondable de lo la misión que le encomendaste.
divino.
Como San Antonio María Claret. Envíanos también tu Espíritu.
que tan fuerte sintió el fuego de tu presencia, que Él inspire en nosotros
junto a tantos claretianos miramos el ideal: la forma de contemplarte
cumplir tu voluntad, trabajar para tu gloria, para conocerte mejor.
que seas más conocido, que seas más amado. Que Él recree en nosotros
tu verdadera imagen,
nos la ilumine con su luz
2. RevélanosalPadre y nos la acerque con su amor.
“Nadie conoce al Padre sino el Hijo
y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar”.

Señor Jesucristo, 4. Padre,nuestrotodo


con sencillez te pedimos:
Padre nuestro,
“Revélanos al Padre”.
Tú, eres nuestro amor.
Revélanos al Padre como quieras.
Tú, nuestra alegría, nuestra esperanza
y nuestra fuerza.
Revélanos al Padre en ti.
Tú, nuestro consuelo y nuestro refugio.
Muéstranoslo
Tú, la razón de nuestro ser,
para que lo conozcamos más
nuestra vida y nuestro fin.
para que lo amemos más,
Tú, nuestra bienaventuranza y de todos los tiempos
y nuestro gozo para siempre. nosotros, hombres ya adultos,
Tú, nuestro Padre nos preguntamos:
nuestro Maestro y nuestro amigo. ¿Podemos cambiar?
Tú, nuestro todo suficientísimo.
Líbranos de no creer en la posibilidad
Padre, Tú nos has convocado de un cambio según tu voluntad.
y aquí nos tienes. Líbranos de justificar nuestro anquilosamiento
Venimos buscando tu voluntad para cumplirla, en actitudes y comportamientos fijos y vacíos.
sedientos de tu amor, de amarte Líbranos también de nuestro voluntarismo
y de amar en ti a todos los hombres, que nos induce a confiar sólo en nosotros
a todas las cosas. y en nuestro esfuerzo.

Y aunque no te amamos Señor, que tu Espíritu de verdad


cuanto debiéramos amarte, nos lleve a discernir las motivaciones cruciales
estamos seguros de que llegará un día que rigen nuestro modo de ser
en que te amemos y nuestras conductas,
como Tú, Padre, nos amas a fin de iniciar desde ellas
y como quieres que te amemos. nuestro proceso de cambio.

Que Él nos ayude a dilucidar


5. NuestrobuenPadreDios las actitudes básicas
que configuran nuestra vida,
Así te contemplamos y así te confesamos: las posibilidades reales
Nuestro Buen Padre Dios. que nos impulsan al bien
Tú eres tan bueno que haces salir el sol y las resistencias egocéntricas
sobre todos tus hijos: que nos cierran al amor.
guapos o feos,
pobres o ricos, Recrea en nosotros la energía necesaria
buenos o malos. para afrontar, desde dentro,
el proceso de iluminación de nuestra vocación.
Tú cuidas de ellos
más y mejor que lo haces Transforma en libertad, propia de tus hijos,
de los pájaros del cielo nuestros simples deseos de cambiar.
y de los lirios del campo. y a nuestro “yo profundo”
-apresado en nuestra pequeñez y finitud-,
Tú revelas a los sencillos dale alas nuevas para salir de sí mismo
toda la ternura que puebla tu corazón. y espacios amplios donde expresar su entrega
Eres tan bueno a ti y a los hermanos.
que agigantas tus brazos cuanto puedes,
y los llenas de tu paz y de tu alegría Gracias por hacernos comprender
para abrazar, ya de lejos, que Tú estás ahí
a los hijos perdidos que regresan. posibilitando y adelantando nuestro cambio.

Eres tan bueno En tus manos nos ponemos


que te pones a escucharnos, dispuestos a consentir
así, sencillamente, al plan que has trazado sobre nosotros.
cuando intentamos balbucear tu nombre, Amén.
o deseamos contarte nuestras pobres historias
en soledad y silencio.

6. Túnosayudasacambiar
Ante Ti,
Señor de todas las edades
fragua

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