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ADVERTENCIA

El contenido de este libro contiene escenas de BDSM entre


chico y chico, que puede herir sensibilidades. Sino te gusta el BDSM
y el ménage no continues leyendo.

1
ROCK Y CUERO

H.C.BROWN

2
SINOPSIS

¿Quieres dar un paseo salvaje y disfrutar de las variadas delicias del Club
Depravity? Sólo permitido para las estrellas de rock gay y las personas
exitosas de la industria del entretenimiento, el Club Depravity ofrece un
ambiente seguro sin fans, donde los Doms y los deliciosos Subs disfrutan
de sus fantasías más salvajes… y tú tienes un asiento en primera fila

Advertencia al lector: Abróchate el cinturón de seguridad para un paseo


por el lado salvaje.

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CAPITULO UNO
Aiden Lovett aplastó la lata de coca cola con la mano y luego la tiró
contra la pared, haciendo que los restos salpicaran la pintura blanca. La
bebida se estrelló contra el suelo y rodó en espiral a través de los azulejos,
dejando un sendero de color marrón. Gilipollas. Giró para darse la
vuelta y corrió hacia la puerta. ¡Jodidos Doms de mierda! ¿Qué pasa con
ustedes?

Whoa, espera un minuto. ¿Qué quieres decir con “ustedes”?


Alec se puso delante de su amigo bloqueándole la salida. ¿Has estado
discutiendo con Jon?

La ira hizo que la bilis se desplazara hasta la parte de atrás de la


garganta de Aiden. ¿Cómo podía su Maestro dejarle tirado después de dos
malditos años? Miró hacia abajo a la gran mano apoyada en su brazo y
obligó a sus destrozados nervios a calmarse. Su amigo curvó sus largos
dedos alrededor de la carne desnuda. El tacto ofrecía comodidad pero
provenía de una fuente inalcanzable. Había trabajado junto a Alec, durante
los últimos tres años, totalmente impresionado con el hermoso Dom. Las
ásperas yemas de los dedos del hombre, a causa de años de tocar la
guitarra, acariciaron su piel. La cercanía del gran tipo delicioso le
tranquilizó. Por instinto, había bajado la mirada, de forma sumisa. No
discutimos… bueno, no realmente. El idiota esperó a que saliera del
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escenario para mandarme un mensaje de texto, diciendo que se había
mudado y que había dejado las llaves de la casa a nuestro manager.
¿Pero qué pasó? Alec se acercó. Tenía la impresión de que
estabas enamorado de él.

No, él no amaba Jon. En realidad la relación se basaba en un respeto


mutuo y en la necesidad. Jon había proclamado que deseaba otro sub, uno
que pudiera entrenar desde el principio, y este conocimiento había enfriado
los sentimientos reales que Aiden tenía por su Maestro. ¿Cómo podría
Aiden explicarle su situación y los problemas que había tenido con Jon a
otro maldito Dom? Aiden se encogió de hombros y se apoyó en Alec,
buscando un poco de consuelo. Soy muy sexual, y bueno, Jon cumplió
cuarenta y cinco el pasado mes de Junio. Mira no voy a entrar en detalles,
pero sugerí que podíamos preguntarle a otro Dom que nos acompañara.

¿Otro Dom? ¡Cristo! Entonces, ¿entiendo que no se tomó la idea


demasiado bien? Alec lo llevó hasta una silla. Siéntate y te traeré una
copa. Se dirigió a la barra situada a lo largo de la pared de vestidor.
Podrías haberle ofrecido complementar tu vida amorosa primero. Quiero
decir, si mi chico hubiera dicho que quería otro Dom cuando estábamos en
nuestra mazmorra, yo también estaría muy enfadado.

Aiden se dejó caer sobre la silla frente al tocador y miró al espejo.


Abrió el paquete de toallitas y empezó a quitarse el maquillaje de la
actuación. La banda Cold Heat, había tocado con el local lleno. El ruido
sordo de la música de su último álbum vagó por la parte de arriba del 5
estadio y la estridente conversación se filtraba a través de las paredes del
vestuario de al lado. Podía escuchar a su manager, Bill, y la voz de Seth, el
batería, enfatizadas por el flamante cantante y por Reef, el líder.
Aiden inhaló fuerte. El rico olor del mejor whiskey escocés llegó
hasta él unos momentos antes de que Alec deslizara un vaso, lleno de
ambrosía, bajo su nariz. Dejó caer la toallita en el cubo de basura junto a la
silla; y luego cogió el vaso con ambas manos. Inhaló el fuerte olor a malta
y suspiró. En realidad no dijo demasiado. Lo que teníamos juntos estaba
bien. Al principio jodíamos como conejos. Aiden sonrió. Las escenas
eran… bueno ya sabes, predecibles. Jon era de la vieja escuela. Había
ciertas cosas que le encendían, y las escenas eran monótonas, lo cual estaba
bien para el primer año. Entonces le pedí variarlas un poco. Levantó el
vaso y le dio un sorbo. La bebida se deslizó como seda líquida por sus
papilas gustativas, entonces bajó por su garganta con una ráfaga caliente.
Suspiró agradecido. Bueno, Jon se puso a la defensiva, dijo que yo era
un sub y que estaba fuera de lugar que dijera esas cosas. Me acusó de
querer cambiar los roles del juego. Él mostró una cara que esperaba
expresase su desprecio ante la idea. Quiero decir, ¿de verdad… como si
yo pudiera estar arriba?.

Teníais una buena relación fuera de la mazmorra. No entiendo que


el hecho de discutir vuestras dificultades en las relaciones sexuales, tenga
que ser un problema. Alec se rascó la incipiente barba con los dedos.
La sugerencia de tener a otro hombre en una escena, sin embargo, estoy
suponiendo que le habrá enfadado un poco. Los Doms somos criaturas
posesivas; en el momento que colocamos un collar en un sub, nos gusta que 6
nuestros chicos sean sólo nuestros.
Levantó la barbilla y se encontró con la mirada, chocolate líquido,
del guitarrista sentado a su lado. Su amigo, Alec, le había colocado un
collar a Raoul hace unos seis meses, y tenía el aspecto relajado de un
hombre satisfecho. Él sacudió la cabeza. No siempre. Conozco por lo
menos tres pares de Doms que comparte un sub. Tomó la bebida y jadeó
ante el calor que le golpeó el vientre. Necesito alejarme de mi club. No
estoy seguro de ser capaz de poder ver a Jon con otro sub. En el club al que
vas, Depravity, ¿crees que podré encontrar un Dom o dos que sean
adecuados?

Tal vez. Conozco un par de tipos que practican el Switch


play1.¿De verdad quieres dos Doms? Hombre, eso realmente sería una
relación especial. Alec le lanzó una brillante y amplia sonrisa. ¿Cómo
de alto es tu libido?

¿Si me gustaría vivir con dos hombres? Sin dudarlo. ¿Si tengo el
nivel para manejar a dos Doms? Puedes apostar tu jodido culo que lo tengo.
Aiden levantó su vaso para que se lo recargase. Si pudiera tener sexo
seis veces al día, estaría feliz, y con flagelaciones opcionales.

Y estarías terriblemente dolorido. Tendrás que encontrar a dos


hombres que coincidan con tu libido. Alec le volvió a llenar la copa.
No me sorprende que tu Dom tuviera problemas en satisfacerte, dudo que
un hombre pudiera lograr tantos orgasmos día a día. Colocó la botella de 7

Scotch de nuevo en la mesa y le volvió a colocar el tapón en la parte


superior.

1 Cambio de roles, que son versátiles pueden ser Doms y Subs


—¿Cuántos Maestros a tres bandas crees que hay? Eso significa
compartir el control, dos Doms castigando a un chico, lo que podría ser
peligroso.

Aiden sonrió. No, eso sería jodidamente erótico. Estoy listo y


dispuesto a intentarlo. Se aclaró la garganta. Me gustaría probar
algunos para ver si encajo. Lo que necesito saber es, ¿cómo puedo hacer
para dar a conocer mis intenciones?

Bueno, ven al Club Depravity esta noche, trae tus últimos análisis
de sangre, y te conseguiré una inscripción. Puedes colocar un anuncio en la
pizarra y ver si alguien contesta. Le preguntaré a Rhys, el dueño del club, si
hay alguien que pueda estar interesado y te presentaré. Alec sonrió. Y
tengo a dos chicos en mente a los que puedo preguntar.

Genial, tenemos tres días antes del próximo concierto. Cogeré una
habitación cerca y colgaré allí que estoy disponible. Aiden tomó un
sorbo de su bebida. Ya me encuentro mejor.

Oh, señor, no lo intentes por tu cuenta. Asegúrate de que yo o


Cash estemos allí. No hagas nada estúpido. Alec se había quitado la ropa
del concierto y estaba gloriosamente desnudo en medio de la habitación.
Vístete de cuero, algo ajustado y sexy. A los tipos que conozco les gustan
los músculos. Llámame cuando llegues allí, vivo a una cuadra de distancia,
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y Cash nunca está lejos del club. Haz que Bill te reserve una habitación en
El Dorado, está justo al lado.
Él se forzó a mantener su mirada en la cara del hombre. Había estado
encaprichado con Alec durante años, pero este delicioso cacho de culo
prefería a los twinks. Aiden sonrió. Aw, Alec, eres tan dulce, pero soy un
chico grande, puedo cuidar de mí mismo.

La expresión de Alec se transformó en una máscara de preocupación.


No, no puedes. Nunca hace daño tener a alguien fuera de la mazmorra en
este tipo de situaciones. Dos Doms luchando por el control, y tú atado y
amordazado es una potencial receta para el desastre. Toma mi consejo y
protégete, aunque sólo sea la primera vez.

Él sonrió. ¿Quieres mirar, Papi?

Jodidamente sí. Alec se agarró las bolas. Pero no creo que mi


cachorro lo apruebe. Se giró y acercó a la ducha. En la escuela
siempre me dijeron que dos para uno no funcionaba, podría haber sido
interesante demostrar que la teoría estaba equivocada.

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CAPITULO DOS
La tarde siguiente Aiden pasó a echar un vistazo al club Depravity y
quedó impresionado con su tamaño. Dos niveles con bares y restaurantes.
Arriba estaba el zona VIP para los Doms que tenían vistas al área principal.
Dos barras abajo, una a cada lado de la pista de baile. Las mazmorras
estaban abajo y las habitaciones en la zona de arriba, las cuales se podían
reservar en el vestíbulo. Ambas zonas disponían de servicios de catering
para los Doms más exigentes, tiendas de ropas y de anillos para pezones.
Un cartel en la recepción del vestíbulo anunciaba condones y lubricantes
gratis. Él había entregado el sobre con sus documentos, pagado la cuota y
explicado sus necesidades a Rhys. El gran hombre había sonreído a
sabiendas y le ordenó a un Dom llamado Bruce que se pusiera en contacto
con algunas personas en su nombre.

Siguió a Alec hasta el piso principal mientras inhalaba la mezcla de


olores. El ambiente estaba cargado de un olor a almizcle masculino, a cuero
y a aftershave, todos ellos mezclado con olor a velas, lo que resultaba
embriagador. Su mirada pasó de un conjunto de subs de la casa, que
estaban cacareando como una bandada de gansos, a un grupo cercano de
gente. Algunos de ellos llevaban collar, por lo que debía ser el área segura
para los chicos. La gran mano de Alec agarró su brazo y detuvo su
intención de ir hacia el grupo. Se giró y lo miró. Estaré bien con estos
chicos. Mi mirada se dirigió hacia el sub de Alec. El tipo estaba 10
tremendamente celoso y fruncía el morro de tal forma que parecía una
ciruela. Los ojos verdes de Raoul emitieron su advertencia. Sin pensarlo, le
sonrió y luego se encontró con la mirada líquida de Alec.
Esta es una zona segura. ¿Verdad?

¿Te has dado cuenta que eres una estrella del rock? Por lo que sé,
este es el club más seguro que conozco, pero antes de dejarte confraternizar
con los miembros, prefiero que te quedes conmigo en la sección VIP.

Un resoplido de Raoul hizo que Alec se girara, deliberadamente,


lento. El movimiento puso de punta todos los pelos de la nuca de Aiden. El
gran Dom miró a su cachorro.

¿Quieres pasarte toda la noche gateando detrás de mí muchacho?

No, señor. Raoul bajó la mirada.

Bien. Pues deja de mirar a Aiden como si quisieras matarlo. Es un


amigo, no un potencial sustituto. Alec se giró hacia él y sonrió. Siento
todo esto, son problemas de confianza. Sígueme arriba y no me discutas
dijo subiendo los escalones.

Aiden sonrió a Raoul. Conozco a Alec desde hace años; estamos


en la misma banda…

Raoul le rodeó. Sé quién eres. ¿Crees que he estado viviendo en


una cueva o algo así? Bajó la voz, hasta que no fue más que un susurro
mientras le advertía con la mirada. No pienses que puedes abrirte camino
en nuestras vidas. Inténtalo y te cortaré la puta garganta. Él subió las 11

escaleras corriendo detrás de su Dom.


Jodido idiota. Subió las escaleras y miró descaradamente a los Doms
sentados en la larga barra de madera pulida. Su garganta se secó al ver a
tantos hombres jóvenes deliciosos. A los veintitrés años ya tenía suficiente
experiencia y quería, no, jodidamente anhelaba uno o dos sementales para
pasar toda la noche. Observó su reflejo en el espejo que recorría toda la
barra. Él se veía bien, incluso caminando detrás del hermoso y rubio twink.
Había engrasado su piel lo suficiente para mostrar sus músculos y sus
pantalones ajustados de cuero negro y piel de serpiente le sentaban como
un guante. Bebió las miradas de aprecio vagando por su pecho, enfundado
en una camiseta negra de talla demasiado pequeña. Las horas perdidas en el
gimnasio entre los conciertos habían valido la pena.

Siéntate. La voz de Alec captó su atención.

Él se deslizó en una cabina cerrada del bar. ¡Demonios! Desde este


sitio no podía admirar al Dom de ojos azules que estaba en el bar. Echó un
vistazo a Raoul. El hombre tenía el pelo similar al suyo, corto por detrás y
largo en la parte superior, pero el pelo de Raoul tenía mechas blancas,
dándole un efecto platino. El twink era muy hermoso, tenía labios sensuales
y llevaba eyeliner alrededor de sus enormes ojos verdes. La mirada del
hombre nunca se aparté de Alec. Aiden suspiró. No quería problemas.
Joder, el sub llevaba un collar, no entendía porque pensaba que Alec tenía
interés en él. Miró fijamente el posavasos. La pequeña mierda podría saltar
a través de la mesa y apuñalarle si se atrevía a mirar a Alec de nuevo. 12
Jesús, si esto era el ejemplo de amor verdadero, bueno, prefería el sexo, sin
ataduras, decadente y sucio.
Las bebidas llegaron traídas por un camarero que no llevaba nada
más que una corbata y un tanga de tira fina. Él alcanzó su billetera y Alec
le miró. El posavasos se deslizó debajo de una copa de burbon cubriendo su
punto de mira. Observó el hielo que se balanceaba en el cristal. Creo que
me voy a ir a casa, esto es tan interesante como observar pintura seca.

Un teléfono sonó y miró hacia arriba. Alec sonrió con suavidad y


sacó su móvil del bolsillo. Intentando actuar despreocupado, cogió su
bebida y apartó la vista de su amigo.

Sí, es jodidamente hermoso, rubio, musculoso y con experiencia.


Alec se rio entre dientes. No, yo no he tenido ese placer. Prefiero los
twinks, ¿recuerdas? Bien nos vemos en cinco minutos. Cerró el teléfono
y se aclaró la garganta. Has tenido una oferta. Conozco a estos tipos
desde hace tiempo. Ellos son pareja desde hace unos seis meses. Logan es
un tipo grande y trabaja como entrenador en Fitness Plus.Él siempre está
arriba. Connor es el tranquilo, puede dar y tomar. Se encontrarán contigo
aquí y te explicarán el resto. Viven juntos al otro lado de la ciudad. Hasta
donde yo sé, en el club juegan con subs de la casa, así que supongo que
tienen un tipo de relación abierta.

Aiden pasó el dedo por el borde de la copa. ¿Están limpios?

Diablos sí, nadie entra en Depravity sin haberse hecho las pruebas
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y firmar un acuerdo. Nada de sexo fuera del club. Tienes derecho de ver
sus pruebas antes de que entres en algo con ellos. Alec frunció el ceño.
—¿Quieres que me quede por aquí y me asegure de que estás bien?
No olvides firmar un contrato, aunque se trate de una única escena.

Él se quitó el pelo de la cara. Yo no soy como Raoul, tan suave e


inocente. Soy un idiota que necesita la disciplina de dos Doms. Puedo
cuidar bien de mí mismo. Levantó la copa y le dio un sorbo. No
pienso saltar directamente a una escena con estos chicos. Puedo estar
desesperado pero no soy una puta.

¿Cómo me llamaste? Los labios de Raoul se curvaron y


emitieron un gruñido.

La bebida le bañó antes de que tuviera tiempo de esquivarla. Un


cubito de hielo golpeó en su ojo y burbon se deslizó por su mejilla. Sus
manos se cerraron en puños. ¿Qué mierda? Se puso de pie preparado para
partirle la nariz al chico bonito. Con los ojos ardiendo y el alcohol
goteando por su barbilla, miró a Alec. Su amigo había agarrado a Raoul por
el pelo y estaba machacando los labios del sub en una exhibición de
dominación. Oh, jodidamente genial. Cogió algunas servilletas de papel de
una pila sobre la mesa y se secó la cara.

¿Problemas en el paraíso? Una voz con sabor igual al fino


whiskey escocés envió un escalofrío de anticipación por la columna
vertebral de Aiden.
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Se giró y se quedó mudo, prácticamente estaba babeando sobre los
Doms que estaban de pie frente a él.
Un tipo musculoso, grande, vestido con chaps de cuero negro sobre
vaqueros negros2, un chaleco, el cinturón tachonadolas y pulseras hacían su
boca agua. El otro santa mierda era Connor Diamond, cantante de Hard
Trash. Aiden sonrió. Había admirado a ese monumento de lejos durante
bastante tiempo. Con esfuerzo, desterró la necesidad de arrodillarse a los
pies de los Doms y suplicarles que le llevasen a su mazmorra, entonces se
aclaró la garganta. Ningún problema. Son celos injustificados. Hola
Maestros, soy Aiden. Él bajó la mirada.

Mírame muchacho. La voz del gran Dom se deslizó sobre él.
No puedo leer tu cara si estás mirando a mis botas. Ven a nuestra cabina
para que podamos hablar.

Levantó la barbilla y se encontró con los profundos ojos azules del


hombre.Sí señor. El olor de los dos hombres se apoderó de él. Se
habían duchado recientemente. Ambos tenían el pelo húmedo y ese fresco
aroma a limpio con olor a almizcle y jabón de sándalo.

Bien, soy el Maestro Logan, y como estás en la industria de la


música supongo que reconoces al Maestro Connor. Se giró hacia Alec
que se había levantado para tomar aire. Gracias por la introducción;
nosotros seguiremos desde aquí. Bajó la mirada y les señaló con el
mentón una cabina al otro lado de la habitación. Mueve ese dulce culo
allí. Voy a por unas bebidas. Sonrió a Connor. No empecéis sin mí. 15

2
CAPITULO TRES
Aiden se dirigió hacia la cabina con los latidos de su corazón
igualando el ritmo del tambor de la música de la pista de baile de abajo. La
energía nerviosa burbujeó dentro de él y suprimió una enorme sonrisa. Oh,
Dios, no esperaba encontrar a dos chicos calientes tan pronto. Esperó en
la entrada de la cabina y se quedó mirándose las botas. La impresión que
diera podría cerrar o romper el trato. Tenía que demostrar su disposición a
someterse.

Toma asiento. Connor le sonrió y empujó un mechón negro,


largo hasta el hombro, detrás de la oreja. No te preocupes; no estamos aquí
para una escena. Acabamos de terminar un desastre con un sub de la casa.
Se encogió de hombros. En este momento sólo estamos intentando
conocerte para ver si nos ajustamos. Por cierto, debo confesar que soy un
gran fan. Hombre, sabes hacer que una guitarra cante.

Su rostro se puso incómodamente caliente. ¡Oh señor, qué


vergüenza! se había sonrojado como una niña en su primera cita. Joder, a él
le saldría acné después. Tragó saliva y las palabras salieron de su boca.
Tengo todos tus álbumes, así que eso nos deja en empate.

Logan se alzó sobre la mesa con su sombra bloqueando la luz. Sus


chaps de cuero crujieron cuando se sentó al lado de Aiden. Colgó un brazo 16
musculoso en la parte de atrás de la cabina y le miró evaluándolo
abiertamente.
Aiden dejó caer la mirada, siendo incapaz de mirar directamente al
rostro curtido y cincelado del otro hombre. Parecía tallado en piedra como
las estatuas de Alejandro Magno. Atractivo, con el pelo oscuro muy corto,
y dos pendientes de diamantes adornando sus orejas.

Mírame dijo Logan golpeando la mesa con la palma de la


mano. Durante la siguiente media hora quiero que te olvides de que
somos Doms. Necesito hacerte algunas preguntas y estoy seguro que tú
tienes otras para nosotros. Así que vayamos al grano.

Aiden estiró su espina dorsal y se encontró con la intensa mirada de


Logan.Por supuesto. ¿Qué quieres saber?

Alec te recomendó. Dejó un mensaje explicándonos tu insólito


deseo sexual, y preguntándonos si estábamos interesados… lo estamos.
Logan agarró la parte de atrás del cuello de Aiden y le acarició. Eres
musculoso y hermoso, definitivamente nuestro tipo. Ambos tenemos el
deseo de tener un chico rubio y dispuesto en nuestra cama, así como en
nuestra mazmorra. Dime, ¿Cómo es que no tienes collar?

Escalofríos recorrieron la espina dorsal de Aiden ante el toque de


Logan. Connor se había movido más cerca, y deslizó una de sus cálidas
manos por su muslo. Quería regodearse en la sensación y tuvo que arrastrar
su mente a la realidad para poder responder a la pregunta de Logan.
17
Acabo de salir de una relación. Y antes de que preguntes no hago esto
por estar rebotado o para utilizaros con el fin de volver con mi ex. Él
lanzó una mirada a Connor.
—Así que voy a acortar la carrera. Soy un sub experimentado.
Empecé como un sub de la casa en Whisp, así que he jugado con una gran
variedad de chicos. Seguí con una aventura de seis meses con un Dom de
Alemania durante una gira europea con la banda. Este tipo estaba metido en
el juego extremo y me encantaba, pero esa delicia terminó cuando volví a
los Estados Unidos. Entonces conocí a Jon, él fue mi último Maestro.

Cuando dices experimentado, ¿te refieres a que has jugado con dos
Doms antes o de forma individual? Logan levantó una ceja

Tengo experiencia con Doms de forma individual, pero no me es


suficiente. Mi último Maestro prefería algo de esclavitud y azotes ligeros.
El Maestro alemán me llevó a otro estado de la existencia. Necesito mucho
sexo; más de lo que un solo hombre puede darme.

Las bebidas llegaron y Logan tamborileó con sus dedos de forma


impaciente sobre la mesa. Aiden quería gruñir al camarero, pero la
expresión de Logan daba a conocer muy bien su molestia por la
interrupción. Logan miró a Connor y levantó una de sus oscuras cejas.

Sin duda podemos darte lo que necesitas. Su boca se contrajo en


una pequeña sonrisa. —Ya hace un tiempo que tengo una relación con
Connor; nosotros somos un poco diferentes a la mayoría de los Doms.
Mantenemos este aspecto de nuestras vidas oculto aquí en Depravity. En
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casa, somos una pareja. No hacemos escenas juntos, principalmente porque
no estamos en el juego de intercambios de roles, pero en casa estoy arriba.
Nunca que tenido inclinación por estar abajo.
Como Dom, yo siempre estoy arriba, pero fuera de Depravity, me
gusta el sexo de cualquier forma que venga. Connor le quiñó el ojo.

—¿Qué hay de ti?Él acarició la protuberancia en los pantalones de


Aiden.

Aiden se encontró con su mirada y se humedeció los labios. O,


hombre, su polla iba a estallar en cualquier momento.

Ah, soy un sub, yo siempre… estoy abajo. Se aclaró la


garganta. Entonces, ¿cuál es vuestro arreglo aquí en el club? ¿Compartís
los subs?

Normalmente hacemos escenas por separado con subs de la casa,


sin apego, sólo disfrute mutuo. Logan tomó un sorbo de la bebida, giró
los hielos y volvió a dejar la copa sobre la mesa. Esta noche decidimos
hacer un equipo doble en una escena con un sub de la casa. Para ser
honestos, fue un maldito desastre.

Así que, cuando Alec nos llamó, pensamos que deberíamos tener
un encuentro. Connor sonrió y sus deslumbrantes dientes blancos
brillaron en la penumbra. Estamos buscando un chico por el que ambos
nos sintamos atraídos, alguien que, si todo va bien, esté dispuesto a
mudarse con nosotros. Ambos tenemos mucha experiencia en cada aspecto
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del BDSM, así que sea cual sea tus gustos, podemos hacerte volar. Quitó
la mano del muslo de Aiden y le acarició suavemente la mejilla. —A los
dos nos gustas mucho.
Aiden se regodeó en su cabeza con la idea de dormir entre estos dos
grandes tipos. Su polla palpitó su aprobación. Mi cabeza me da vueltas.
Sois más de lo que me esperaba. Mi último Maestro era veinte años mayor
que yo. Sois justo lo que estaba buscando. Sois perfectos Dejó caer sus
pestañas. Aún estoy esperando a que el otro zapato caiga. Levantó su
bebida y tomó un sorbo. El rico sabor del burbon se deslizó sobre su
lengua. Logan se había tomado la molestia de averiguar cuál era la bebida
que le gustaba. Punto para él.

No hay problema. Hemos sido miembros de Depravity durante


mucho tiempo. Conoces las reglas de aquí. Rhys mantiene la cuerda corta.
Connor se rio entre dientes. Siéntete libre de preguntar sobre todos
nuestros sucios secretos.

Aiden pasó la mirada de un rostro serio al otro. ¿Se sentirán


cómodos compartiéndome? ¿No voy a tener problemas si lo hago con uno
de los dos durante la noche?

No, los dos nos sentimos muy cómodos con otro tipo en nuestras
vidas, si no, no estaríamos aquí. Ninguno de los dos es del tipo celoso.
Estoy enamorado de Logan, pero hemos tenido escenas con muchos chicos
diferentes, y los dos hemos tenido una buena porción de sexo extraño, pero
sólo aquí en el club. Hemos discutido cada detalle. Si nos unimos, serías
bienvenido en nuestra casa. Connor tomó su bebida. 20
—¿Puedes imaginarte un triángulo amoroso entre nosotros tres?
Queremos disciplinar a nuestro propio sub y follarlo hasta dejarle sin
cerebro, pero nuestro objetivo principal es hacerlo los dos al mismo tiempo.
Su mirada color avellana emitía un desafío.¿Estás dentro?

¿Qué si me gustaría una doble penetración? ¿He muerto he ido al


cielo? Aiden sonrió. Oh, sí, estoy dentro. Él le dio un sorbo a su
bebida. Pero me gustaría una escena de prueba antes de comprometerme
con nada.

Connor se puso de pie de un salto. Baila conmigo.

Baila con nosotros. Logan se puso de pie y le extendió su


mano. Veremos lo mucho que te gusta tener dos juegos de manos de
Doms sobre ti.

Aiden cogió la mano de Logan, y el hombre lo puso en pie. Él


sonrió. Hasta ahora me gusta bastante.

21
CAPITULO CUATRO
Aiden jadeó apretado entre dos cuerpos deliciosos; el calor de los
Doms le quemaba a través de su camisa. Con ambos brazos cerrados
alrededor del cuello de Connor y presionado fuerte desde la espalda por los
duros muslos de Logan, se movieron como si fueran uno en una lenta danza
sensual. Desde atrás, las grandes manos de Logan se deslizaban desde su
pecho a su ingle en una exploración de pura y completa lujuria. Mientras se
balanceaba al son de la música, Logan frotaba su gruesa erección contra su
culo, como en una descarada invitación. Miró a Connor a los ojos y captó
su divertida sonrisa de reconocimiento. Él le devolvió la sonrisa y pasó la
punta de la lengua por su labio inferior. Oh, yo sé cómo jugar este juego.

Oh, sí, él sabía perfectamente lo que este par tenían en mente.


Empujó los dedos a través del sedoso cabello de Connor y ahueco su
redondo cráneo. Esperó, con la boca ligeramente abierta, a que Connor
bajase la cabeza. El deseo de besar a este hombre se había convertido en
una obsesión. Él gimió y presionó su dolor contra el muslo de Connor.

Creo que necesitamos una habitación. El aliento húmedo del


otro hombre rozó su mejilla. Eres tan jodidamente caliente.

Oh, sí, su culo está en llamas. ¿Qué quieres de nosotros Aiden?


¿Una escena corta para conocernos y algo de acción caliente o… sólo
acción caliente? Logan presionó besos, con la boca abierta, a lo largo del 22
cuello de Aiden. Te quiero tan mal.
Aiden se echó hacia atrás contra el gran Dom y movió su
trasero.Calabozo… por favor Maestros.

¿Necesitas un contrato? ¿O confías en nosotros para una diversión


inofensiva? Estoy seguro de que Alec respondería por nosotros.

Alec ya lo ha hecho. Realmente confiaré en vosotros para realizar


la escena. Él se rió. Puedo gritar realmente fuerte si tengo que hacerlo.

Connor sonrió como si fuera un gorila puesto de metanfetaminas.


Dulce, voy a ver que tenemos libres. Se soltó de Aiden y presionó un
beso en la mejilla de Logan. Lleva a nuestro chico abajo y mantenlo
feliz, yo iré después de ti.

Él giró en los brazos de Logan y se desplomó contra el duro pecho


del hombre. El Dom le sostuvo con sus fuertes brazos y besos fueron
presionados a los largo de su mandíbula y cuello.

Hueles muy bien, quiero lamerte entero muchacho. Logan


deslizó un brazo alrededor de su cintura, y se trasladó, a través de los
bailarines, por el perímetro de la pista de baile. ¿He de suponer que esta
es tu primera visita a las mazmorras de Depravity?

Su corazón latía con fuerza. Su excitación resonaba en cada una de


sus terminaciones nerviosas. El contacto del hombre enviaba ráfagas de
23
deseo envolvente alrededor de sus bolas. La idea de tener a dos hombres
debilitaba sus rodillas. Él inspiró varias respiraciones, entonces, asumió la
actitud de un sub muy dispuesto y bajó la mirada.
Sí, Señor, esta es mi primera vez.

Te encantará este sitio. Han basado el diseño en cámaras de tortura


medievales. Aunque tienen un buen colchón en el suelo para
enfriarse.Logan le empujó a través de una puerta tachonada de roble.

Dentro del oscuro pasillo iluminado por velas gruesas, echó un


vistazo dentro de las pesadas puertas colocadas a lo largo de las paredes.
Cada gruesa puerta tenía una pizarra que colgaba de un clavo. Miró a través
de las manchas de luz naranja para leer los nombres garabateados sobre la
superficie negra que indicaba que Dom estaba residiendo allí. Inhaló el olor
erótico de los hombres, del sexo, de la cera de las velas y del cuero. El
ambiente de dominación llenaba cada grieta de la pared del bloque de
granito.

Arrodíllate. Logan tocó su hombro. Lame mi cuero.

Aiden cayó de rodillas y asumió la posición con las manos colocadas


detrás de él. Se inclinó y se amamantó con cada hebilla alrededor del
tobillo de las botas de Logan. El sabor fuerte del metal rodaba por su
lengua despertando sus oscuros deseos. Subió por la pierna, dejando un
sendero húmedo, hasta la rodilla. Logan le agarró el pelo con sus fuertes
dedos y tiró. Un fuerte aguijonazo de dolor desgarró el cuero cabelludo de
Aiden, él gimió y continuó hacia arriba. Se deslizó hacia arriba por el
24
muslo y se encontró con el dril de algodón que cubría el paquete de su
Maestro. Gruñó su frustración. La cresta dura de la impresionante longitud
de Logan presionaba contra su boca.
Inhaló el embriagador almizcle masculino del Dom y escaló la
cremallera con sus dientes al ver el premio dentro de los ajustados
vaqueros.

Pronto. Logan se alejó

Miró fijamente al suelo de piedra oscura, y la cabeza de su polla se


raspó contra el cierre de sus pantalones. Él jadeó desesperado por la
emoción del placer, el dolor y el sexo desenfrenado. Unos pasos anunciaron
la llegada de Connor y lanzó un suspiro aliviado. Quería levantar la cabeza
para contemplar la belleza del hombre y beber el aroma combinado de sus
Doms.

Sígueme muchacho. Connor pasó los dedos por la parte de atrás


del cuello de Aiden. Gatea. Oh, sí, permite que vea como mueves el culo
dentro de esos pantalones de cuero.

Él siguió a las botas de Connor hasta el interior de una habitación


oscura. Parpadeó, buscando en las sombras, algún punto de luz. Un
encendedor se prendió y una llama iluminó el rostro de Logan. Momentos
más tarde el resplandor de las velas inundó la habitación. Su atención se
desplazó hasta Connor. El hombre llevaba en una mano una bobina de
cuerda. Dios, vestido con todo ese cuero el hombre estaba hermoso. Un
temblor de anticipación flameó sobre sus muslos y apretó su culo.
25
Connor ladeó la cabeza y parte del cabello oscuro cayó sobre un lado
de su hermoso rostro. Él palmeó un pequeño banco con bucles de metal a lo
largo de cada extremo. Primero, te quiero desnudo. Luego ven aquí y
túmbate de espaldas.

Obedeció y se quitó la ropa y las botas. La emoción desgarraba su


piel. Se deslizó sobre el banco y se acostó según las instrucciones. Bajó la
espalda y la cubierta de plástico fría se apretó contra su piel. El olor acre a
candelabro quemado quedó atrapado en la parte posterior de su garganta.
Extendido, con la cabeza apoyada en la parte superior y las piernas
colgando en un extremo, esperó instrucciones.

Connor se movió deliberadamente lento mientras enrollaba la cuerda


alrededor de sus muslos y tobillos posicionando las rodillas contra su
pecho. El corte de la cuerda y la emoción por el desamparo le hicieron
jadear. Entonces Logan le agarró los hombros con sus grandes manos y le
empujó hasta el borde permitiendo que su cabeza se deslizara hacia abajo.
Los Doms se movieron con rapidez para sujetar sus muñecas con las
cuerdas y luego agarraron estrechamente ambos brazos sobre su pecho. Él
gimió. Estando a merced de los dos Doms, su polla se puso en pie por la
atención y palpitó con necesidad.

Que hermoso estas atado. Me encanta como la cuerda corta


profundamente esa fina y suave carne. Logan se trasladó hacia la
26
cabecera de Aiden. Tengo un regalo para ti.
Él vio como la mano del Dom iba hacia su cremallera y la deslizó
lentamente hasta revelar la dura polla dentro de sus pantalones. Se lamió
los labios mientras su corazón se aceleraba en su pecho. Oh, por favor
déjame probarte.

Oh, mira lo ansioso que está por probarme.Logan enrolló su


puño sobre su verga y limpió el pre-semen de sus dedos sobre los labios de
Aiden. Usa tu lengua muchacho.

El sabor del hombre estalló sobre su lengua, lo lamió, pero Logan


mantuvo el premio fuera de su alcance. Su frustración aumentó, y estiró sus
muslos para aumentar el corte de las cuerdas. Atado al banco, indefenso
como una mosca en una tela de araña, esperó, jadeando por ver el siguiente
movimientos de los Doms.

27
CAPITULO CINCO
Apenas registró el chasquido del bastón antes de que le doliera el
dorso de los muslos, fueron seis cortes duros desde el glúteo a la rodilla. Él
jadeó y luego tarareó de alegría ante el fresco raspado de la lengua de
Connor sobre sus bolas. El hombre deslizó su cálidas manos sobre las
picadura con una suave caricia y uso su boca para provocar el área sensible
entre el saco y su culo. Aiden se retorció contra las cuerdas apretadas. El
profundo corte del hilo áspero sobre su carne añadió placer sobre el
exquisito tormento de la instruida boca de Connor.

El parpadeo de una vela llamó su atención, entonces una profunda


quemadura ardió sobre sus pezones con cada goteo de la ambrosía fundida.
La cara de Logan se cernía sobre él con una expresión de profunda
concentración. Con la precisión de un experto, el Dom, goteó la cera
recubriendo cada pezón, y luego dio vueltas con un cubito de hielo al terso
montículo. Quemar y congelar, quemar y congelar. Aiden pasó del dolor al
placer mientras su agujero temblaba por la necesidad de una dura y rápida
follada. Él semen empezó a subir por su eje pero el agarre de Connor en la
base de su polla detuvo la culminación. No te vas a correr todavía, quiero
estar dentro de ti, y sentir tu pequeño y apretado culo abrazando mi verga.
Connor sacudió el bastón sobre sus nalgas tan cerca de sus bolas, que él
tembló y reprimió un grito.

Que chico tan bueno. La boca de Logan, húmeda y caliente, se 28

deslizó por sus nalgas. El hombre calmó el dolor con suaves besos y luego
su lengua inquisitiva se deslizó alrededor del agujero de Aiden.
Una ráfaga de pura felicidad se deslizó por sus muslos. Oh, Dios,
esto es demasiado jodidamente bueno.

Connor se puso al alcance de su vista y él vio su silueta oscura


sombreada por las velas.

Te ves tan cojonudamente hermoso encerado y marcado.


Pruébame. Connor se abrió la cremallera de los pantalones y permitió
que su largo eje saliera libre. Agarró la cabeza de Aiden con una de sus
grandes manos y empujó la cabeza de su polla en la boca dispuesta.

Aiden succionó, bebiendo el delicioso sabor del Dom. Con Connor


profundamente en su garganta, y la lengua de Logan enterrada en su culo,
gimió en apreciación. Connor le acarició las mejillas con sus largos dedos y
movió sus caderas con un vaivén suave pero dominante. Aiden cerró los
ojos, revolcándose en la sensación de tener a dos hombres acariciándole tan
íntimamente. Su mente divagó hacia la mención de tenerlos a los dos
dentro al mismo tiempo. Una cachetada a su culo le devolvió a la realidad.

Estás apretado, demasiado apretado para tomarme primero.


Logan sonrió. Te saborearé.

La deliciosa polla se deslizó de su boca y las grandes manos de


Connor le desplazaron hacia abajo por el banco. Con la cabeza apoyada,
observó a Logan desatar una pierna con movimientos rápidos y eficientes. 29
La sangre se precipitó sobre sus músculos tensos y reprimió un grito.
Entonces el hombre pasó un brazo musculoso bajo su rodilla, inclinó la
cabeza y engulló su cúspide goteante. Aiden reprimió un suspiro.
Estando tan cerca de derramarse, apretó los músculos de su culo en
un intento de retener el semen fluyendo a través de su eje. Los labios de
Logan dibujaron una sonrisa, se retiró y resopló en la punta palpitante. Él
gimió y levantó sus caderas para empujar más profundo en el calor
húmedo. Delirante, levantó la cabeza con la necesidad de permitir que su
orgasmo llegara a su punto límite y luego explotara con éxtasis.

Eres un chico sexy y tan necesitado. Logan besó la cabeza de su


polla. No puedo esperar para montarte.

La alta figura de Connor apareció ante su vista. Él se había


preparado, y sin hablar, se colocó entre las piernas de Aiden. El frío
lubrigante golpeó contra su trasero y luego las firmes manos de Connor
agarraron sus caderas. Aiden forzó a relajarse a su culo antes de que
Connor se metiera hasta las pelotas. El dolor le quemó por un instante antes
de que el grueso calor del hombre le llenara.

Al momento, una cálida humedad envolvió su polla y el profundo


gemido de Logan en apreciación rompió el silencio. La sensación increíble
de un hombre enterrado hasta las bolas dentro de él y una boca cubriendo
su polla, lanzó llamas de placer erótico que recorrieron sus terminaciones
nerviosas más sensibles. Connor se movió empujando profundamente y
clavando su gruesa polla en el punto de placer de Aiden con tal intensidad,
que tenía que forzar a salir a las palabras entre sus dientes apretados. Por
30
favor Maestro, no puedo aguantar más. Esto es demasiado bueno.

Sí, lo harás. Connor aumentó su ritmo.


El sonido de carne contra carne llenó la habitación. Connor estaba de
pie, como un ángel vengador, mientras en su boca se formaba una mueca.
Aiden se estremeció incapaz de controlar el calor empujando hacia arriba
en su eje. ¿Cómo era posible que la experta boca de Logan le chupara así?
Por favor, por favor, me va a explotar el corazón.

La mirada ambarina de Connor se deslizó sobre él y su boca se elevó


hacia un lado. Córrete para mí chico. Él empujó profundamente y giró
sus caderas.

Logan le chupó profundamente con su boca caliente. Luces


parpadearon en la visión periférica de Aiden. Se convulsionó y el orgasmo
rasgó a través de él como un fuego. Cada sensación se había duplicado y
extendido hasta convertirse en un amasijo de placer sexual. Oyó a Logan
reír, la boca del hombre dejó su polla y el aire frío chocó contra su húmeda
longitud.

¿Cuánto tiempo necesitas para recuperarte? Connor se deslizó


fuera de su trasero. Me gustaría ver cómo te corres de nuevo. Me encanta
esos pequeños ruidos que haces.

El forzó a su boca para que emitiera una respuesta coherente y


parpadeó. No mucho Señor.

Estás apretado, y si decidimos que nos gustas, podríamos tener que 31


explorar formas de estirar ese culo tuyo. Ambos queremos encajar dentro
de ese delicioso agujero. Logan se inclinó para lamer un sedero
alrededor de su ombligo y luego más abajo para reanimar a su eje
flácido. No será inmediatamente, pero lo haremos. ¿No te gustaría que lo
hiciéramos?

Oh, Jesús ¿si me gustaría? Lo quiero ya. Aiden se aclaró la garganta.


Sí, Señor, mucho.

Bien. Logan desató las cuerdas. Vamos a jugar durante un par


de días hasta que estés listo para nosotros.

Él dejó caer las piernas por el borde del banco. Flácido, se relajó y
dejó que su espalda se hundiera en la cubierta de plástico empapada de
sudor. Inhaló la mezcla del olor a sexo con el aroma almizclado a hombre y
suspiró de placer. ¿Qué más le harían? Si esto fuera una light scene3, ¿hasta
dónde llegarían si se movieran dentro del juego extremo? Su polla se
estremeció ante el pensamiento. Logan envió la gran mano alrededor de su
brazo y lo levantó del banco. Las rodillas le tambaleaban como si fueran
gelatina después de las ceñidas ataduras.

Arrodíllate en el colchón. Quiero que me pongas duro de nuevo.


Connor le siguió hacia abajo y se arrodilló frente a él. Chúpame bien
muchacho.

Él cogió la polla semi-dura de Connor con la boca. El hombre se


había limpiado pero el ligero sabor del latex permanecía. Aiden chupó y
usó su lengua para tantear la hendidura. Connor retorció sus dedos fríos en
su pelo. El tirón en su raíz le despertó. Arrastró los dientes sobre el eje
32
sedoso que crecía dentro de su boca, y el sabor almizclado de Connor se
deslizó sobre su lengua. Oh, sí, podría mamar a este delicioso hombre toda
la puta noche.
3
Escenas en las que se hacen juegos para comprobar cuáles son los límites del sumiso.
La picadura de una cachetada en el culo le sorprendió. La mano
grande de Logan extendió dolor a través de golpes agudos sobre ambas
nalgas y luego se concentró en el punto erógeno entre el culo y el muslo.
Calor lleno el culo de Aiden con cada duro golpe, el castigo era tan
maravillosamente delicioso que gimió alrededor de la gruesa polla que se
deslizaba por su garganta. Estoy en el paraíso.

¿Puedes tomarme duro y rápido chico? Logan recubrió con


lubricante el agujero de Aiden. Yo nunca soy suave y soy grueso.
¿Puedes tomarlo o gritarás de dolor? Él empujó su pulgar dentro del
agujero de Aiden y lo jodió con movimientos castigadoramente lentos.

Con la boca llena, tan deliciosamente, de la polla de Connor, gruñó y


esperó las delicias por venir. Logan clavó los dedos en la carne de sus
caderas. El hombre grande descansó la cabeza de la polla en su culo y tomó
una respiración antes de empujar profundamente. ¡Mierda! Lo de grande
era un eufemismo. La enorme vara se estrelló contra él, extendiéndolo
hasta los límites. Tan lleno, tan malditamente caliente. Sus piernas
temblaban ante la fuerza de los empujes. Cada estocada era más profunda
que la anterior, empujando a Aiden hacia adelante. El grueso eje de Connor
le golpeó la parte de atrás de la garganta y le amordazó. Aiden obligó a
relajarse a sus músculos y el martilleo pasó del dolor al éxtasis en cuestión
de segundos.
33
Se revolcó en las sensaciones que tamborileaban dentro él, y se dejó
llevar por el momento. Perdido en un mundo de felicidad, se corrió
derramando cuerdas de esperma sobre el colchón.
Oh, sí, cómemela. Connor empujó profundamente y su semen
golpeó la parte posterior de la garganta de Aiden.

Tragó el líquido salado que se derramaba por las comisuras de su


boca. Él tragó y chupó festejando en cada gota. Detrás de él, Logan, emitió
un grito salvaje y se introdujo hasta las bolas entrando en un frenesí
tembloroso, hasta que cayó a un lado llevándose a Connor y Aiden con él.
Yació en los brazos de sus hombres, muerto y feliz inhalando su
combinado aroma. Nada en esta tierra se había sentido tan bien. Dos
hombres, dos Doms. Este era un sueño hecho realidad.

Mucho tiempo después de que las velas se hubieran consumido hasta


la base, levantó la cabeza. Esto fue asombroso.

Tú eres algo especial dijo Logan apretándole el culo.


Necesitamos hacer planes.

Oh, joder, sí, quiero esto de nuevo. Hombre eres tan caliente.
Connor mordió el lóbulo de la oreja de Aiden. Quiero llevarte a casa
ahora.

Él sonrió en la oscuridad. Tengo este fin de semana libre, podemos


jugar un poco más. Pero tengo una gira interestatal desde el próximo jueves
hasta el sábado. Entonces estaré en el estudio de grabación, pero estaré
libre la mayor parte de las noches, si queréis explorar esto un poco más. 34
Estaré dando un concierto en la ciudad este sábado, así que
tendremos que reunirnos de nuevo la siguiente semana. Podría permitir que
Logan te llevara a casa este fin de semana, pero entonces estaría celoso.
Connor se rio entre dientes. No quiero dejarte ir tan pronto, pero no
tenemos otra opción. Él le dio un beso en un lado de la boca a Aiden.
Tenemos una conexión como ninguna otra que haya sentido antes. Así que.
¿Tenemos una cita? ¿Nos reuniremos aquí en diez largos días?

Aiden sonrió y se acurrucó contra él. Infiernos sí. Esta ha sido la


mejor escena que he tenido. Chicos sois increíbles.

La profunda risa de Logan resonó por la habitación. Jesús, no


estoy seguro de poder sobrevivir diez días sin poder hacer esto otra vez.
Soy adicto. Él ahuecó la cabeza de Aiden y le besó largo y dulcemente.

Aiden se derritió contra el gran hombre, devolviéndole el beso con


pasión. El Dom levantó la cabeza y Connor ocupó su lugar con un largo y
exigente beso. Aiden gimió. Él los quería de nuevo ya. Mordisqueó el labio
inferior de Connor y la emoción de volver a tenerlos a los dos
profundamente dentro hizo engrosar su polla. No estoy seguro de poder
esperar tampoco. Presionó su vara contra el muslo de Connor.

Él no mentía, es insaciable. Connor ahuecó la cara de Aiden.


Sé un buen chico y guarda eso para mí. Trabajaremos en un contrato y en el
35
momento que entres al club después de tu concierto, comenzaremos tu
entrenamiento aquí y en nuestro apartamento. Sonrió. Resérvate para
nosotros y haremos que vueles.
Aiden sonrió. Por supuesto. No creo que un solo Dom pueda
satisfacerme ahora.

Aiden se sentó en la cabina de Alec mientras bebía una copa.


Sospechaba que Alec tenía problemas con su escena con los dos Doms. Él
le dirigió una mirada de “jódete” y entonces envió a su chico a hacer algún
recado. Su amigo se sentó con los hombros caídos.

¿Qué te molesta? ¿Te ha dejado el chico guapo?

No, él está enamorado de mí. Tanto que quiere mudarse y vivir


conmigo.

Su amigo arrugó la frente y Aiden le sonrió para romper la tensión.


¿Y?

Eso significa que estará con nosotros de gira y en el backstage


durante los conciertos. Alec le envió una mirada preocupada. Sé que te
odia y que somos amigos desde hace mucho tiempo. No quiero que cause
problemas con la banda. Sonrió. Es una pequeña mierda celosa.

36
Él tomó un sorbo de la bebida de Alec. Le miró por el borde de la
copa y suspiró. No necesitas mi permiso. Mira, el tipo es un dolor en el
culo, pero te preocupas por él, así que me ocuparé de cualquier problema
que surja. Sonrió. Él podría pensar que ya no soy una amenaza ahora
que tengo dos Doms.

Sí, ese es otro de los problemas. Te fuiste con esos chicos sin un
maldito contrato.Alec entrecerró los ojos. No haces lo que te dicen.

Sonrió. Oh, sí, hice todo lo que me ordenaron hacer.

Alec alzó los ojos hacia el techo como si estuviera buscando


intervención divina. Cogió su copa de la mano de Aiden y le dio un trago.

No parezcas tan preocupado, lo tenía controlado. Rio entre


dientes. Esos Doms son perfectos.

Tienes moretones en ambos brazos, y joder, quien sabe dónde


más. Pensé que esto era una ligera escena de mierda para llegar a
conoceros. Alec empujó su vaso alrededor de la mesa. Tenemos
conciertos y sesiones de fotos. ¿Quieres que los fans crean que te has
metido en peleas o algo peor?

Se encogió de hombros. Pues llevaré una camisa de manga larga o


iré jodidamente maquillado. ¿A quién le importa? Acabo de tener la escena
de mi vida. En el momento que todos volvamos a estar libres, esos
deliciosos Doms van a entrenarme en el arte del dolor, el placer intenso y la
doble penetración, entre otras cosas.

Así que estás planeando un paseo por el lado salvaje del juego
37
extremo. Supongo que si es así, esos dos son tu mejor opción. ¿Estás
seguro que deseas algo tan sucio?
Aiden levantó la barbilla. No puedo esperar para verlos de nuevo.
Quiero que me hagan daño, que me deseen y que estén profundamente
dentro de mí. Cogió la bebida de Alec y vació su contenido. Él anhelaba
a sus Doms con una intensidad espantosa. Tendría que soportar diez largos
días hasta que tuviera la oportunidad de arrodillarse a sus pies otra vez. Él
reunió su mirada con la de Alec. Y sí, cuanto más sucio mejor.

38
CAPITULO SEIS
El ritmo de la fuerte música de rock hacía temblar las tablas del suelo
por debajo de Aiden. Él sonrió a la multitud y se movió por el escenario. El
líder de Cold Heat, el alto, oscuro y sexy Reef Anderson deslizó la mano
por su espalda y le agarró el trasero. La canción, una melodía lenta de un
amor triste e injusto tenía a la multitud agitando los móviles como si fueran
velas. La energía dentro del auditorio era eléctrica y él vivía por momentos
como estos. Reff pasó la mano por el cuello del bajista y Aiden se apoyó
contra el cantante. A través del escenario, Alec Tobin, líder de los
guitarristas, se columpió en un solo largo y conmovedor. Cuando los dedos
mágicos de Alec hicieron cantar la guitarra los fans se callaron. Hombre,
ese chico sabía cómo tocar.

Su mente se dirigió hacia sus Doms. Los hombres que esperaba le


pusiera el collar después de firmar el detallado contrato que habían
acordado. Había esperado diez días para volver a reunirse con ellos, y
después del concierto, Alec, Reff, y el sub de Alec, Raoul tenían un
helicóptero esperando en la azotea para llevarles a casa. Bueno, al Club
Depravity. La suite del Hotel Dorado se había convertido en su hogar. Su
hermano había estado más que complacido de mudarse a su apartamento
alquilado para cuidarlo. Aiden quería a sus hombre; el musculoso instructor
de fitness Logan, y su amante la estrella del rock viviente, Connor
Diamond, como en “múdate a mi casa y sé mi obediente sub”. Él había
39
apostado sus esperanzas y futuro en una gloriosa escena.
La voz de Reef entonó la nota más alta y el escenario se oscureció.
Aiden giró a su derecha y la mano del encargado del equipo le agarró del
brazo y le llevó fuera del escenario. Tres bises tendrían que satisfacer a la
audiencia. El aclamo ensordecedor de los fans, el pataleo de pies, y los
silbidos le siguieron escaleras abajo. Entregó su bajo al jefe del equipo y
siguió a Alec por el estrecho pasillo hasta su vestuario. Fuera, Raoul estaba
apoyado con todo su cuerpo contra el marco de la puerta. Aiden levantó
una ceja; este hombre insoportable se había convertido en un miembro
permanente. Los cuatro miembros de la banda tenían que compartir
vestuario en este concierto y los ánimos se calentaban lo suficiente sin
necesidad de que la reina del drama estuviera quejándose de todo y de
nada.

Reef apoyó su fuerte mano en el hombro de Aiden. Así que, ¿me


presentarás a Connor Diamond?

Se metió en el vestidor y se giró para sonreír a su amigo. Por


supuesto. Él es tan jodidamente maravilloso. No puedo creer que haya
hecho una escena conmigo.

Bueno, no estoy interesado en hacer una escena con el tipo.


Reef hizo una mueca. Estoy más interesado en colaborar en una
canción. Si nos reunimos con él podemos crear algunas canciones. He oído
que es un brillante compositor. 40

Es un buen tipo también, más tranquilo de lo que me imaginaba.


Aiden se movió hacia la silla delante de un espejo largo.
—Me gustan él y Loga, probablemente más de lo que debería en esta
etapa de nuestra relación. Se pasó la mano por el pelo. Mierda no
puedo dejar de pensar en ellos.

Los labios llenos de Reef dibujaron una brillante sonrisa. Bueno,


por la forma en que sigue sonando tu móvil, supongo que tú también les
gustas. Todas esas cosas sobre bastones blandos de los que los chicos
hablan hacen que me ponga realmente duro y estoy sin nadie justo ahora.
Se sentó en la silla, junto a Aiden, y buscó un paquete de toallitas. No
sé qué me pasa, no puedo mantener a un chico, tal vez es que soy un poco
demasiado kinky.

Un resoplido por detrás de ellos hizo que Aiden mirara por encima
de su hombro. Raoul tenía su cara de ciruela encendida y sus labios
enfurruñados. Él miró fijamente al hombre. ¿Qué?

Bueno todo el mundo sabe que Reef es kinky, por lo que no es


algo nuevo para mí. Sus escenas dan, a los subs de la casa, pesadillas.

Esto no es asunto tuyo. Vete asentarte allí y no te metas en las


conversaciones de la gente. Alec se giró en su asiento. Este es el
problema de traer un sub a los conciertos, no hay nada adecuado para
disciplinarlo. ¿Es qué la azotaina que le di la noche pasada no fue
suficiente? Él le dio una mirada rápida a Aiden. Por lo menos tú
41
intentas comportarte en el trabajo.

Me estás comparando con él de nuevo. Raoul se dejó caer en el


sofá.
Oh, te voy a azotar más tarde. Alec se puso de pie y se dirigió
hacia Raoul. Agarró al hombre por el pelo, se inclinó y le besó. Levantó
la cabeza. Deja de ser tan inseguro. Se supone que tienes que confiar en
mí, ¿recuerdas?

Lo siento. Raoul tocó la mejilla de Alec. Maestro.

Buen chico. Alec se enderezó. Supongo que es hora de que te


mudes conmigo, tal vez así te sentirías mejor. ¿Te gustaría eso? Él
alborotó el pelo de Raoul. Prácticamente vivimos ya juntos de todas
formas.

Sí, me gustaría mucho. Raoul sonrió. ¿Esta noche?

Bueno, tengo planes para esta noche, pero puedes mover tus cosas
por la mañana.Alec regresó a su asiento. Ahora cierra la puta boca
para que podamos estar listos y salir de este sitio.

Te vas a arrepentir. Él observó con diversión como se desarrollaba la


escena. Conocía a Alec desde hace mucho tiempo y no tenía ni idea de
cómo iba a lidiar con Raoul. Dicen que el amor es ciego. Tiró las toallitas
usadas a la basura y se dirigió al cuarto de baño.

¿Quieres compartir conmigo? Reff le dirigió una sonrisa torcida

No, me estoy reservando para más tarde. Seth está callado. ¿Tal 42

vez esté esperando una invitación? La mano de Aiden cayó sobre el
pomo de la puerta. ¿Tú qué dices Seth?
No, estoy buscando un Dom que quiera ir despacio y pueda
enseñar a un virgen vainilla. Aún no estoy listo para saltar al vacío. Seth
tiró su pelo largo y negro sobre su hombro. Eso está bien para vosotros
chicos; pero yo aún no he tenido agallas para dar ese paso. Aún estoy en la
primera base.

Reef lanzo un gruñido bajo y sexy. Oh, hombre, yo podría


solucionar ese problema.

Sería como besar a mi hermano. Gracias pero no. Seth puso cara
de asco. Pero me gusta la idea de ir a Depravity. Suena como un buen
lugar en el que estar. Volaré con vosotros esta noche si aún hay sitio. Mi
apartamento esta ni a diez minutos de esa parte de la ciudad.

Aiden rio entre dientes y abrió la puerta. Sí, tenemos sitio. Cuantos
más mejor.

43
CAPITULO SIETE
A la llegada a su hotel, Aiden se vistió con pantalones de cuero y
camiseta negra. Para darle más efecto, añadió una pequeña ralla de kohl
alrededor de sus parpados, para darle el look de ojos seductores, que
normalmente guardaba para los escenarios. El corazón le latía con fuerza
ante la idea de volver a ver a sus dos Doms. Miró fijamente su móvil. Le
habían llamado todos los días desde su escena juntos y el sexo telefónico
había sido tan caliente como el infierno, pero las llamadas habían parado
antes del concierto de la noche anterior. Una ola de rechazo le golpeó. Tal
vez cambiaron de opinión y ya no querían involucrarse con él después de
todo. Echando a un lado el pánico, metió el móvil y la cartera en el bolsillo
del pantalón dirigiéndose a la puerta. El guarda de seguridad contratado
para protegerle de los fan excesivamente entusiastas le estaba esperando en
el pasillo. Aiden le sonrió. Necesito ir a Depravity. Ya no te necesito,
puedes volver y dormir un poco. No planeo regresar esta noche, pero te
llamare si me haces falta.

Sí, señor. Los siete pies4 de pared de músculos entrenado para


matar se apartó a un lado para permitirle pasar. El guarda llevaba una
Glock5 por debajo de su chaqueta como espectáculo, porque no había
ninguna necesidad de llevar armas. Con sólo una mirada de, “voy a
matarte,” con esos ojos aterradores, apartaría a cualquiera de su camino. La
mirada oscura paso por Aiden durante un segundo, antes de alejarse y 44
escanear el pasillo. Gracias señor.

4 2,13m
5 Tipo de pistola
Aiden masculló entre dientes, soy un sub, pero para él soy “señor”.
¿Qué locura es esta? Se metió en el ascensor de servicio y bajó a la planta
principal. Había visto una gran variedad de estos sucios ascensores durante
su tiempo con Cold Heat. Salir del hotel por la puerta de la cocina
funcionaba bien. Por alguna razón, no importa donde se quedara por la gira
o por placer, los fans siempre twiteaban la dirección a todo el mundo en 3,2
segundos después de su llegada. Siguió al guardaespaldas a través de la
cocina y esperó por la comprobación. Observó a Luke, el tipo grande,
caminar hasta el final del callejón y desaparecer en la oscuridad.

La entrada trasera de Depravity se encontraba al otro lado de la calle.


Desde el exterior, el club privado de BDSM parecía un almacén de ladrillos
rojos. La entrada principal era igual que la trasera, y se accedía a través de
una escalera de hierro forjado que llevaba al sótano. Una brisa fresca
cepilló el pelo de Aiden. Miró hacia arriba y parpadeó ante las estrellas
apenas visibles a través de las farolas. El enorme guardaespaldas le hizo
una señal para que siguiera hacia delante y luego se fundió con la
oscuridad. Justo en los talones del hombre, Aiden corrió por la carretera y
se deslizó por las sombras junto a los edificios. Las farolas brillaban por su
ausencia. Luke se paró en lo alto de la escalera y se dirigió por el camino
protegiéndole con su ancha espalda. Tecleó un código en el panel de la
pared, permitiéndole entrar a través de una pesada puerta de acero. Dentro,
un guarda de seguridad comprobó la identidad de Aiden en un ordenador
45
antes de indicarle el ascensor que le llevaría al vestíbulo principal. Él
disfrutaba de la seguridad y libertad que este club le daba.
En Depravity, dejaba la personalidad de estrella del rock atrás, y se
convertía en un sub. Nadie se atrevía a molestarle o pedirle un autógrafo en
estos pasillos.

Aiden respiró profundamente y permitió que el aroma a hombre,


cuero y cera se infiltrara en su libido. Las puertas se abrieron y el ruido de
la música junto una multitud de voces bombardearon sus oídos. Piso la
alfombra roja, se dirigió hacia el mostrador y sonrió a Rhys. El gran
hombre cogió la mano que le ofrecía y le besó los nudillos. Aiden sonrió.
Llevo toda la semana deseando visitar tu club.

Este es tu club ahora. El hermoso rostro de Rhys se dividió


formando una sonrisa. ¿Estás solo y disponible? Él se humedeció los
labiosMi último chico se fue, así que ahora estoy en busca de algo de
acción. No me importa un encuentro de tres vías, sé que ese es tu estilo.

Sí, y la oferta es tentadora, pero espero no estar disponible o solo.


Alec y Reef han traído a nuestro batería, Seth, para unirse pero supongo
que estarán un tiempo. Aiden se frotó la barbilla. ¿Sabes si Logan y
Connor están aquí?

Sí, llevan aquí desde hace un rato. ¿Y ya conoces a Cash Daniels


verdad? Rhys sonrió. Pero Cash está ocupado en este momento,
parece que Amos volvió a olvidarse de comprar lubricante. Ese chico sólo
46
sabe meterse en problemas, Cash lo trajo aquí para disciplinarle de nuevo.
Él inclinó la barbilla hacia el área de los subs.
—Mantente seguro y permanece con los subs que llevan collar. Las
noche de los sábados son un poco turbulentas, y los Doms están a la caza
de un nuevo culo. Le guiñó el ojo. Pero si tienes algún problema,
vuelve aquí y yo te protegeré.

Apuesto que lo harás. Aiden asintió y se metió en el papel de sub.


Gracias Maestro Rhys.

Se deslizó a través de las puertas de cristal y se abrió paso entre la


multitud de subs de la casa que estaban a los pies de la escalera que
conducía a la sección VIP de los Doms. Los hombres se agrupaban
alrededor de la barra y se extendían hacia el área de mesas y sillas que
estaban en el perímetro de la pista de baile. Aiden se empujó a través de un
grupo de hombres y se unió a los selectos subs, en lo que se conoce como
el área segura. Un lugar donde los Doms podían dejar a sus subs sin el
riesgo de que otro Dom le abordara o donde vírgenes vainilla podían
observar antes de comprometerse a participar en alguna escena o cualquier
otra cosa. Aiden sonrió, el código de respeto en Depravity y en muchos
clubs de BDSM era en ambos sentidos. Los Doms exigen respeto, pero
toman el cuidado de sus subs como prioridad principal. Un hábito perdido
en el mundo vainilla.

Se dejó caer en una silla junto a un jovencito. El tipo había


destrozado un posavasos con sus largos y finos dedos y había arrugado el
47
papel en una bola. Aiden alcanzó la jarra de agua fría y la vertió en un vaso
mirando al hombre que estaba a su lado. ¿Estás bien?
El jovencito giro su aguamarina mirada hacia la de Aiden y le
observó con aprecio. No estoy realmente seguro. Quiero decir, esta es mi
primera vez. Mi amigo me persuadió para que me uniera y luego se fue y
me dejó aquí. Él suspiró. ¿Cómo distingues a los Doms de todos los
demás? Tú vistes de cuero como el resto. ¿Qué eres?

Soy Aiden, y soy un sub. La mayoría de los Doms tienen una


distintiva forma de actitud, lo notarás por la forma en que se dirigen a ti o
te preguntan. Nadie te arrastra y te viola aquí. Ellos pueden ser un poco
molestos. La mayoría de los Doms insisten en los contratos y discuten los
términos antes de hacer una escena. Le dio un sorbo a su copa. Los
Doms que están en la barra suelen estar buscando un chico, pero si eres
inexperto no vayas allí, por lo general quieren subs pervertidos y sucios.
Los de arriba son los de la sección VIP, bueno, pueden estar mirando
mucho, pero no están abiertos a ofertas.

Gracias, eso ayuda a despejar mucha de mi confusión. Soy Joel.


Le ofreció la mano. Encantado de conocerte.

Aiden estrechó la mano del hombre y luego escudriñó la habitación,


centrándose en la sección VIP. Sus Doms eran difíciles de perder. Él movió
su atención hacia la pista de baile. Se centró en Connor y vio a Logan a
pocos metros de distancia. Cada uno de sus músculos se puso rígido.
Apretó los dientes y el nudo de su estómago se tensó. Sus Doms se movían 48
contra sus parejas como si estuvieran haciendo el amor en una descarada
exhibición erótica.
Logan tenía los dientes incrustados en el cuello de algún tipo y
Connor Él respiró profundamente para evitar maldecir tenía su gran
mano dentro de los pantalones de su compañero, agarrando su culo.
Malditos tramposos comemierdas. La necesidad de vomitar hizo que su
visión se volviera borrosa. ¿Qué coño? ¿Habían mentido por teléfono y sus
promesas eran sólo patrañas? Una mano apretó la parte posterior de su
cuello y empujó su cabeza entre las rodillas. Hey, quítame las manos de
encima.

No vomites sobre la mesa, el suelo se puede limpiar mejor. Reef


sostuvo la cabeza de Aiden. ¿Has comido hoy?

Él inhaló profundamente varias veces. El alivio al oír la voz de su


amigo le calmó. Nah, tú sabes que soy incapaz de comer antes de un
concierto.

Levanta la cabeza muy lentamente. Reff frotó la parte de atrás del


cuello de Aiden. Ven conmigo, vamos a conseguir algo de comer.

Claro, gracias. Aiden evitó la pista de baile e hizo un gesto con


la mano hacia Joel. Te importa si Joel se viene. Es su primera vez y creo
que disfrutará de tener compañía.

Aiden observó la reacción de su amigo ante el cachorro. El rostro del


Dom pasó de desinteresado a “hola hermoso pedazo de culo” en un 49
instante. La sonrisa sexy, que los fans conocían tan bien, iluminó la cara
del hombre y los ojos del color del cielo de medianoche parpadearon.
Bueno, hola Joel. ¿Estás asustado o jugarás esta noche?

Su manzana de Adam se movió de arriba abajo y sus increíbles ojos


contenían una expresión de miedo. Nunca he estado en un lugar como
este en toda mi vida. Pero he fantaseado con estar alguna vez dentro de un
club de cuero.

¿Sí? ¿Así que a ti te gustan los Doms, eh?

Me enamoré del bondage viendo porno. Joel bajó la mirada.


No tengo experiencia. Nunca he estado con un hombre. Mi amigo dice que
soy un virgen vainilla así que no te sirvo de mucho.

Uh-huh. Reef extendió su mano. Entonces será mejor que te


ponga bajo mi ala antes de que algún maldito y malvado Dom se quede con
tu virgen culo. Él sonrió. Tendremos una cita para cenar y traeremos a
Aiden como acompañante ¿Qué me dices?

Gracias. Joel cogió la mano ofrecida.

Gracias Maestro. Reef tiró del twink para ponerlo de pie y pasó
un brazo por su delgada cintura. Él sonrió a Aiden. Vamos, ¿te gustan
los tríos, verdad?

Aiden se tragó un nudo de su garganta y se obligó a esbozar una


sonrisa. Bien, creo que eso es cierto. Desviando su mirada de los 50

cuerpos girando en la pista de baile, siguió a Reef hacia la multitud que se


arremolinaba y por el pasillo que conducía al restaurante.
CAPITULO OCHO
La vista de Connor se desvió hacia el culo de Aiden. Se humedeció
los labios y contempló la delicia en forma de melocotón. Las nalgas del
muchacho se movían debajo de los ajustados pantalones de cuero con cada
zancada que daba a través de la multitud de personas. Por la espalda firme
y su expresión pálida, su chico estaba terriblemente enfadado. Bueno, ellos
lo querían un poco fuera de balance. La escena que había planeado con
Logan se desarrolló después de una conversación que habían tenido con
Cash Daniels. Aiden tenía una fantasía y se la había revelado a su amigo
una noche mientras estaban de copas. Connor había acorralado a Cash
después de una sesión de fotos y le había pedido consejo de cómo darle a
Aiden lo que su chico necesitaba. Luego había esperado a que Logan
llegara a casa del trabajo. Habían apagado sus móviles y le habían hecho
creer a Aiden que su interés había disminuido. Bailando con un par de subs
de la casa habían dado la impresión necesaria para completar la escena que
tenían en mente. Le dio las gracias al hombre en sus brazos y salió de la
pista de baile con Logan en sus talones. Él sonrió a su amante. ¿Viste su
cara? Joder pensé que iba a vomitar. Ellos dirigieron sus pasos hacia la
sección VIP.

Sí, yo quería correr hacia allí y besarle para consolarle, lo tengo


mal. Logan se frotó la barbilla. Hombre se ve mejor de lo que 51
recordaba. Estoy tan duro ahora mismo que mis pelotas están subiendo
hasta mi culo.
Connor se dirigió hacia el bar, se deslizó sobre una silla y se giró
hacia Logan. Tenemos que pillarle fuera y solo. Cash mencionó que
tenía un guardaespaldas, aunque Rhys no le permitiría que entrara en el
club. Tal vez lo tiene esperando fuera. Si es así, esto va a ser un problema.

No lo será, me puse en contacto con Alec y me dijo que Aiden


mandó al guardaespaldas de regreso al hotel. Esperaba tener una larga
escena esta noche, así que no tenía motivos para pedirle al tipo que se
quedara por aquí. Logan chasqueó los nudillos. Han ido todos al
restaurante. Me siento un poco hambriento, así que vayamos hasta allí.
Ignoraremos a Aiden, coquetearás con Reef y yo centraré toda mi atención
en el nuevo cachorro que llevaba consigo.

¿Reff? De ninguna manera, ese maldito Dom

Míralo de esta manera. El tipo no nos conoce. Le he visto por aquí


pero nunca he tenido la necesidad de presentarme. Probablemente sabe que
somos pareja, por lo que sabrá que no estás disponible, pero bueno, ambos
sois músicos puede que atraigas su atención. Tenemos que conseguir que
Aiden esté tan enfadado que se vaya. Logan sonrió. Cash está
dispuesto a esconderse en las sombras en el momento en que le avisemos
que Aiden se va. Nuestro chico será encapuchado, esposado, y metido en la
parte de atrás de nuestro coche antes de que sepa que le ha golpeado.
52
Connor se rio entre dientes. Vamos a por ello.
Dentro del restaurante Connor se dirigió a la mesa de Aiden. Sonrió
a Reef y le ofreció su mano. Siento interrumpir vuestra comida, pero
tenía que conocerte.

Connor Diamond. Te has tomado tu tiempo. Reef se puso en pie


y estrechó la mano ofrecida. He querido hablar contigo, para escribir
algunas canciones juntos, desde hace algunos años.

Eso suena como un buen plan. Connor se giró hacia Logan.


Mi pareja, Logan

¿Podemos unirnos? Logan estrechó la mano de Reef. Tienes


un cachorro muy bonito. ¿Es tuyo?

No exactamente, es un cachorro perdido que recogimos. Reff se


humedeció los labios. Es su primera vez en Depravity, bueno su primera
vez en todo. Pensé que podría beneficiarse de mi experiencia. Él alzó
ambas cejas hasta arriba. Se llama Joel.

Ah, ya veo. Logan se sentó junto a Joel y colocó una mano


sobre el muslo del muchacho. Eres una cosa dulce. 53

Connor ignoró el furioso resplandor de indignación en la mirada de


Aiden y llamó con la mano al camarero para que se acercara a la mesa.
Después de pedir, charló con Reef y notó con un poco de pesar la
desolación en la expresión de Aiden. Cuando la comida terminó, Aiden
pidió permiso para dejar la mesa. Reff le lanzó una mirada interrogante a
Connor y le dio su consentimiento a Aiden. Connor observó el color de las
mejillas de su chico. El caminar rígido hacia la puerta y la lenta sacudida de
su cabeza rubia denotaban disgusto tanto por él como por Logan. Connor
sacó su móvil y llamó a Cash. Con el plan en marcha, dejó caer un par de
billetes sobre la mesa y salió por la puerta con Logan siguiéndole de cerca.

Aiden se marchó del restaurante; tenía las tripas hechas nudos.


Zorras gilipollas toca huevos. ¿Cómo podían esos hombres decirles esas
cosas y luego tratarlo como si fuera invisible? Se movió a través del pasillo
y tropezó con Amos. Su mirada se centró en las marcas de latigazos en los
brazos del sub de Cash y entornó su mirada. Conocía a Cash desde hace
mucho tiempo, y él era un Dom que no dejaría a un sub sin un
enfriamiento, por lo menos esperaría el tiempo suficiente para que se
desvanecieran las marcas que había provocado. ¡Mierda! Cash adoraba a
este hombre. ¿Estás bien?

Sí, estoy bien. Mira, sé que va contra las reglas, pero me 54


encantaría conocer a Reef. Cash es tan malditamente celoso que no me
permite ir a las sesiones de fotos. Y mucho menos que me presente a él en
este lugar. Soy un gran fan.
Aiden captó el temblor en la voz del hombre. ¿Estaría emocionado o
todavía tendría el subidón de una intensa escena? ¿Dónde diablos estaba
Cash? Su mirada se clavó en el vacío pasillo. Por lo poco que sabía de
Cash, él nunca permitiría que su chico vagabundeara por Depravity solo,
sin importar que llevara collar. El Dom se había casado con su virgen
vainilla y decir que era posesivo era quedarse corto. Mierda, el hombre se
había cabreado con el último Dom por tocar a Amos. Aiden inspiró
profundamente y luego soltó en un arrebato. Mira, ahora mismo no es un
buen momento. Yo pensé que tenía algo con Connor y Logan, por lo visto
estaba equivocado. Ellos están cenando con Reef, así que si no te importa
prefiero dejar las presentaciones para otro momento.

Oh, ya veo. Amos miró hacia otro lado. Lo siento no debería


habértelo pedido.

Mierda, no quería ofenderte hombre. Aiden le apretó el brazo.


Amos era joven, pequeño, y estaba tan fuera de su mundo en Depravity. Se
había casado con Cash y había domesticado al loco hijo de puta, pero había
seguido siendo dulce y tranquilo. El termino nerd hermoso cruzó por su
mente. Maldita sea había herido los sentimientos del hombre y ese hecho lo
llevaba escrito por toda la cara. Él le sonrió. Lo prometo, la próxima vez
que Reef venga aquí, tomaremos unas copas, mejor aún, os invitaré a ti y a
Cash a mi hotel.
55
Sonrió. Dame más o menos un día, llamaré a Cash y arreglaré las
cosas.
Gracias. Amos sonrió.

Se dirigió hacia el vestíbulo. Si fuera tú volvería con Cash, no le


gustará que vayas por tu cuenta.

Me voy. Amos partió en dirección contraria.

Aiden sonrió y entró en el ascensor. Necesitaba una copa… no,


necesitaba toda una maldita botella para limpiar las imágenes de Connor y
Logan de su mente. La cabina metálica se detuvo con un leve golpe y las
puertas se abrieron. El guarda de seguridad pulsó un botón en la pared y
Aiden se movió a través de las dos puertas saliendo hacia la noche. La brisa
fresca rozó su piel. Se estremeció y miró hacia las sombras. ¿Se había
movido algo? Un escalofrío le recorrió e hizo una pausa en su siguiente
paso. Actuar sin pensar había sido un movimiento estúpido en esta parte de
la ciudad. Debería llamar a Luke. Desterró el repentino aumento de pánico,
apretó los puños y se dirigió hacia los escalones.

Una sombra saltó hacia delante y una capucha se deslizó sobre la


cabeza de Aiden hundiéndolo en una sofocante oscuridad. Giró en círculos
y luchó contra las grandes manos que le forzaban a llevar los brazos a la
espalda. Fue empujado sobre sus rodillas y su mejilla golpeó la escalera de
metal haciendo que el dolor irradiara a través de sus dientes. El crepitar de
músculos rotos se disparó a través de los hombros, seguido de un familiar
clic de las esposas. Una rodilla fue presionada en su espalda, el sabor 56

metálico de la sangre llenó su boca y tragó saliva.¿Qué es lo que


quieres?
Obediencia. La capucha amortiguaba la voz profunda y ronca.

Él dejó caer la cabeza. Ser una estrella del rock tenía sus beneficios,
pero los locos también venían con la fama. Había tenido uno o dos
acosadores a los largo de los años, incluyendo algunas ofertas escandalosas
de Doms. A menos que ellos le quisieran para una snaff movie6, que lo
dudaba, complacerles era la mejor opción por ahora. Luke podía rastrear su
teléfono, sólo tenía que presionar un maldito botón. Bajó la cabeza de
forma sumisa y esperó las instrucciones.

Buen chico, vamos a dar un paseo, sube las escaleras.

Él se puso de rodillas, y cada frío escalón le raspaba en el pecho. El


sonido de pasos corriendo llegaron hasta él desde la parte superior. La
respiración pesada se acercó más. Las fuertes manos de sus captores se
cerraron alrededor de sus brazos y sus dedos se cavaron profundamente en
la carne desnuda. Se tambaleó hacia adelante, ciego y desamparado. Le
arrastraron por la calle entre dos cuerpos duros, su corazón latía con fuerza.
Mantén la calma. No luches. A continuación le llegó el sonido del pitido de
un mando a distancia. Le empujaron hacia adelante y sus piernas se
estrellaron contra el metal, jadeó, y calló boca abajo en un asiento. Levantó
sus magulladas rodillas instantes antes de que la puerta del coche golpeara
la suela de sus botas. Joder, voy a morir.

El coche aceleró con un chirrido de neumáticos. La música heavy 57

metal salió de la radio del coche era su jodida música, así que un fan
loco le tenía. Se retorció intentando alcanzar el teléfono de su bolsillo.

6 Se tratan de películas ilegales en las que secuestran a una persona y graban mientras la torturan y matan
Sudor le cayó por la frente. Sus pantalones estaban demasiado
apretados; solo el sacarlo, cuando no tenía esposas, ya era complicado.
Cayó de nuevo sobre el asiento, jadeando por aire. La capucha apretada
contra su cara era sofocante. Suspiró profundamente y se forzó a desterrar
el pánico. Podía hacer frente a esta situación. Él había hablado de cómo
salir de esta situación o de cómo poder salir a delante. Demonios,
disfrutaba del dolor, pero el sexo con extraños no era algo que iba a
permitir. Él podría estar jugando a la ruleta rusa.

En la oscuridad, intentó hacerse una idea de la situación en la que


estaba. El coche o tal vez la caravana era de alta potencia, y el roce de sus
dedos le decía que tenía asientos de cuero. O sus secuestradores habían
robado el vehículo o tenían dinero. Calculaba que habían viajado durante
media hora antes de que el coche girara a la derecha y se detuviera
momentáneamente. La música cesó y el familiar sonido del chirrido de una
puerta de garaje abriéndose llamó su atención. El coche continuó hacia
delante durante una corta distancia y luego se paró.

¿Un aparcamiento subterráneo? Los asientos de cuero crujieron y


salieron dos hombre, no, eran tres. Estos chicos tenían un cómplice; había
sentido a los tres fuera de Depravity. Alguien le agarró por los pies y le
arrastró fuera del asiento, pero antes de que golpeara el suelo, un fuerte
brazo musculoso rodeó su cintura. Él se relajó en el duro pecho. Mierda, el
tipo tenía que ser más de seis pies y cinco pulgadas7, y tan ancho como un 58
refrigerador.

7 1,95m
Unas llaves sonaron y la puerta crujió. El intenso olor de cera de
velas se filtraba a través de la capucha, y las luces bailaban en su visión
periférica. Él entrecerró los ojos intentando ver algo a través de la tela. El
pánico le rodeó y su estómago se contrajo. Estos tipos tenían su propia
cámara de tortura. Intentó tragar. Su seca garganta no le proporcionaba
saliva para humedecer sus tersos labios. La puerta se cerró tras ellos y el
sonido de un cerrojo le llegó.

Alguien le inmovilizó desde atrás. Otro le quitó las botas y deslizó


sus pantalones de cuero por sus caderas sacándolos por los pies. Una cálida
mano le agarró y entonces deslizó un dedo por debajo de sus bolas para
bordear su agujero. Desde atrás una lengua húmeda escarbó en su oído.
Tragó saliva y esperó que su voz no saliera como gemido. Así que
queréis follarme, ¿verdad? Bueno, está bien, pero usad condones; no sabéis
dónde he estado.

El hombre que estaba por delante de él agarró el cuello de su


camiseta negra de diseño y la rasgó por el frente como si fuera papel y
luego desgarró el resto. Desnudo, se tambaleó, con una embriagadora
mezcla de pánico y excitación. El silencio de los hombres le asustó y
despejó. El hombre tras él le agarró un brazo y le llevó a través de la
habitación. El suelo de baldosas se sentía frío bajo sus pies. Posicionado
con los pies y manos extendidas, los hombres pasaron algún tiempo
atándolo con el equipo. Aiden temblaba de anticipación. Los hombres 59
utilizaron largas correas de cuero para atar sur muñecas a una estructura de
metal que estaba sobre él.
Una fina correa de cuero ató su tobillo a la estructura y luego la
abrocharon de forma circular sobre su polla y bolas antes de bajar y atarla
al otro tobillo. Con cada atadura seguía el rastro de los dedos del Dom,
dando a Aiden el posicionamiento exacto de cada nudo. Si doblaba las
rodillas, la correa de cuero se apretaba alrededor de su saco. Un arnés
encerró su pecho y el mundo cambió. El suelo desapareció bajo sus pies y
la presión del arnés aumentó. Los Doms lo habían suspendido en el aire.
Jadeó intentando meter aire en sus restringidos pulmones.

Un cálido para de manos, perfumadas con el olor del antiséptico que


habían usado, se deslizó por debajo de la capucha. Una venda de seda se
deslizó sobre sus ojos y la capucha cayó lejos de su cabeza. Él respiró
hondo y absorbió la familiar esencia a jabón de sándalo. La misma
fragancia que el caro gel de ducha que suministraban en Depravity. Suspiró
aliviado; si estos Doms eran miembros, al menos estarían limpios. El pasó
la lengua seca sobre sus labios. Gracias Maestros.

El aroma a burbon llenó sus fosas nasales y el borde de un vaso tocó


sus labios. Él bebió de la copa ofrecida. El alcohol chisporroteó sobre el
corte dentro de su boca. Empujó el dolor a la parte de atrás de su mente y
terminó el vaso. Fríos dedos trazaron el moratón de su mejilla seguido por
la lamida de una lengua inquisitiva. El beso que siguió le sorprendió.
Tierno pero exigente. La lengua del desconocido exploró su boca. Por
detrás de él, unos dedos lubricados encontraron su agujero, y tantearon. Un 60
grueso dígito se deslizó dentro y encontró su lugar de placer. El experto
toque provocó llamas que se desplazaron hasta su eje.
Aiden se sacudió y la correa de cuero se apretó, deliciosamente,
alrededor de sus bolas. Él permitió que la lengua del extraño violara su
boca, le devolvió el beso, reuniéndose con sus caricias golpe a golpe. El
hombre que le besaba gruñó profundamente en su garganta y el recuerdo de
Connor inundó su mente. Oh, sí, Connor besaba así. En lo más profundo de
su alma le destruía y capturaba. ¿Connor? Inhaló intentando captar el
aroma picante a almizcle y macho que tenía impreso en su memoria.

Le dolían las pelotas al pensar en sus dos Doms secuestrándole. Pero,


¿cómo sabrían lo de su fantasía? Nunca se lo había dicho a ni una sola
alma, ¿verdad? Los dedos se deslizaron fuera de su agujero, y el Dom que
le besaba retrocedió un paso. Gimió por el disgusto de no ser follado. La
necesidad de tener el calor de una gruesa polla enterrada muy
profundamente dentro de él, burbujeaba a través de sus labios. Por
favor, Maestros, os necesito dentro de mí.

La punta fría de un plug golpeó su culo. El extremó final giró


alrededor de su atormentado y necesitado agujero y luego fue presionado.
El dolor agudo chisporroteó y Aiden gritó con las nalgas apretadas. El
cuero cortó profundamente sus pelotas a causa del repentino movimiento y
se forzó a relajar los tensos músculos. Diez días sin sexo habían estrechado
su esfínter y el plug era más grande que cualquier polla que hubiera tenido
antes. Pelo suave rozó su vientre y su polla palpitante se deslizó en una
boca caliente. Oh, señor, ¿quién era este Dom que despertaba el lado 61
oscuro de su mente y le amamantaba con deleite erótico? Por favor que sea
Connor.
Aiden se relajó en la boca caliente y húmeda del hombre, y suspiró
con placer. La presión dentro de su culo desapareció. Por detrás de él, el
Dom deslizó sus gruesos dedos dentro del agujero de Aiden, masajeándole
con el pulgar para estirar su apretado esfínter. Oh, señor, ¿cómo podría
estirarse lo suficientemente ancho para tomar toda la circunferencia del
plug? Los cálidos dedos se deslizaron hacia afuero y el plug frío exigió su
entrada. Aiden se quedó boquiabierto con los hombros ardiendo. Se centró
en el hombre que le prestaba tanta atención a su polla y se relajó. Con el
siguiente movimiento, dolor le sacudió desde el culo al escroto. El plug
enorme quemó a través del anillo de músculos apretados y fue
introduciéndose a pasos lentos. Se tensó, un espasmo se extendió por todo
su vientre y apretó sus músculos. La intrusión fría le estiró hasta el límite
máximo, y su culo palpitaba con dolorosa alegría.

El recuerdo de una conversación con Logan se deslizó en su mente.


Recordó al Dom mencionar el estirarle para la doble penetración. Estos
tienen que ser Logan y Connor o a estas alturas ya me habrían violado. Su
pene palpitaba ante la idea y la boca que chupaba su polla se retiró hacia
atrás. Empujó las caderas hacia delante y la correa de cuero se apretó
alrededor de sus pelotas. Jadeó, encontrándose casi al borde de su
culminación. Oyó pasos y la puerta se abrió. Por favor no me dejéis así.
Jódeme, fustígame, haz lo que quieras pero no me dejes excitado.

La puerta se cerró y el silencio le rodeó. 62


CAPITULO NUEVE
Oh, Dios. Logan se paseó. ¿Cash tenía que golpearle tanto?
Pasó una mano a través de su cabello. ¡Mierda! Esto saldrá en todos
los medios de comunicación. Su manager se va a poner como un basilisco.
¿Qué demonios pasó?

Connor apretó el móvil contra su oreja. Le estoy llamando ahora.

Creo que necesito hablar con él… en persona. Logan estrelló un


puño contra la pared. Yo cuido de mis chicos, esto no debería
jodidamente haber pasado.Se frotó los nudillos magullados.

Oh, eso ha sido lo más inteligente que podías hacer, ahora todos
creerán que le has pegado. Connor hizo una mueca y levantó la mano
para detener la respuesta de Logan. Cash, jodidas gracias, ¿qué es lo que
pasó con Aiden? Él tiene un moratón que le cubre toda la mejilla… sí,
negro y azul, parece que te ensañaste con él. Miró a Logan y sacudió la
cabeza. Claro, sí, lo entiendo, gracias hombre. Silenció el teléfono y lo
metió en su bolsillo. Dice Cash que cuando le puso la capucha Aiden se
revolvió y cayó sobre las escaleras. Se golpeó en la mejilla con la
barandilla de metal. No le hizo nada, fue sólo un accidente.

Quería que fuera algo especial para él, no ésta puta mierda.
Logan se frotó las dos manos sobre la cara. ¡Mierda! No sé qué hacer 63
para arreglar esto. Dejó caer la cabeza.
Connor fue hacia él y tomó su cara. Hey, hagamos que sea la
mejor fantasía de una escena que haya tenido en toda su vida. Luego le
llevaremos a la cama y le follaremos duro. Cepilló un beso sobre los
labios llenos de Logan.

Los largos dedos de Logan se hundieron en el pelo de Connor y lo


mantuvo inmóvil. Saqueó la boca de su amante con un devastador beso.
Connor se fundió con él y le devolvió el beso, disfrutando de la conexión
tan única de dos Doms. Él envolvió los brazos alrededor del cuello de
Logan y frotó su dolorosa protuberancia contra los pantalones de su
amante. Logan rompió el beso, y lo miró fijamente, con sus pupilas
dilatadas por el deseo.

Te amo y me siento extraño al tener una conexión con Aiden.


Logan descansó su frente sobre la de Connor y suspiró. Es como si te
engañase y, sin embargo, el tenerte aquí compartiéndole, es emocionante.
No quiero arriesgarme a perderte si todo esto se va al infierno.

A Connor se le erizaron los pelos de la nuca. No había pensado en


las consecuencias que tendría el que su hombre cayera por Aiden y que tal
vez le dejara. Se apoderó de la nuca de Logan y se encontró con su
preocupada mirada. Yo también te amo. Te he amado desde siempre.
Eso no va a cambiar. Ya hemos discutido esto en profundidad. Respiró
hondo, sólo la verdad sería suficiente. —Sí, me siento atraído por Aiden, y 64
podría enamorarme de él, eso no lo niego. Él es un sub delicioso y creo que
le necesitamos para mantener unido este trío de locos. Hemos jugado con
subs de la casa, pero en realidad queremos hacer escenas, juntos. ¿No te
has sentido perdido en una escena sin mí? ¿Cómo si la emoción se
escapara? Él acarició el cuello de Logan con sus pulgares. ¡Joder! Mi
mente explotó al estar ahí abajo, contigo y con Aiden. Todo en lo que podía
pensar es en follarle mientras tú me follabas, y con Aiden allí, mi miedo a
cambiar de roll desapareció. Por una vez en mi vida se sentía correcto.

Entonces haremos la escena y le daremos a Aiden la mejor noche


de su vida.Logan frunció el ceño. Tomaremos las decisiones más
importantes durante el desayuno. Puede que Aiden no quiera quedarse.

Aiden estiró los muslos y la correa de cuero apretó alrededor de su


eje. Si apretaba el culo al mismo tiempo, el plug se movía golpeando su
punto de placer. Algunos movimientos más y el derramaría su carga. Los
músculos estaban tensos por el excesivo esfuerzo y él se retorcía ante el
placer inalcanzable. La desesperación le invadió y el sudor que le caía por
la barbilla le hizo cosquillas. La puerta crujió y unos pasos suaves se
acercaron. Inhaló y sonrió. Ah-huh, el reconocía el olor almizclado de dos
hombres muy excitados. Ya no tenía dudas. El olor exótico y picante de
Connor se mezclaba con el almizclado y terroso de Logan y llenaron sus
fosas nasales. Así que sus Doms habían estado follando. Le dolían las
pelotas al imaginar cómo Logan jodía a Connor. Dios, como le gustaría ver
65
a los dos hombres grandes juntos.
Uno de los dos se puso detrás de él presionando fuerte contra su
espalda para ajustar sus ataduras. El dolor se extendió a través de los
músculos sobrecargados y la correa alrededor de su saco le apretó hasta el
punto de la castración. Luego, la presión se alejó. El plug giró en su agujero
y se deslizó fuera. Él gimió ante la pérdida, deseando tener algo en su culo
necesitado.

Has sido un chico estúpido al dejar Depravity sin escolta.

Aiden suspiró aliviado ante el sonido de la profunda voz de Logan y


dejó caer la cabeza para mostrarle respeto a sus Maestros. Merezco ser
azotado Maestro. Habéis sido amables conmigo y yo he abusado de vuestra
confianza permitiendo que me secuestren cuando os había prometido
reservarme para vosotros.

Sí, jodido idiota. La voz de Connor resonó en la pequeña


habitación. Cualquier loco podía haberte apuñalado en la calle. Tuviste
suerte que fue un amigo el que recogió tu lastimoso culo.

Me has cabreado. Logan se inclinó y su aliento acarició la


mejilla de Aiden. Voy a sacarte la desobediencia a base de flogger y
luego te follaré duro. 66

Oh, por favor, hazlo ahora, no puedo aguantar ni un minuto más, mi


cabeza va a explotar.Aiden se apoyó en él, buscando el tacto de su
Dom.Gracias Maestro.
Creo que necesita que torturemos sus pezones y pelotas. La voz
de Connor se acercó a su oído. Y podemos quitarle la venda. Quiero ver
la expresión de dolor y placer mostrándose en su cara. Tú eres muy devoto
a tus Maestros. ¿No es cierto muchacho?

La venda de seda se deslizó y Aiden parpadeó para poder centrarse


en el hermoso rostro de Connor. Sí, soy muy devoto. Castígueme como
crea conveniente, Señor.

Oh, lo haré hasta que me pidas que te joda. Luego dormirás entre
nosotros con las restricciones así podremos disfrutarte toda la noche.
Connor se giró y caminó hacia un banco. Aiden arqueó la espalda
cuando Logan pasó sus uñas, siguiendo luego con el flogger. Él temblaba
por estar tan cerca del clímax, y con cada movimiento, la correa apretaba
alrededor de su polla. Logan movió el brazo y sintió el aguijonazo de las
cuerdas de cuero mientras cortaban su espalda. Aiden se regodeó en el
dulce e impresionante placer. Cada golpe era más fuerte que el anterior.
Logan gruñía con cada oscilación mientras provocaba arañazos desde la
espalda al muslo con devastadora precisión.

Aiden bajó la cabeza absorbiendo la sensación erótica que sólo un


flogger podía proporcionar a un hombre. Primero el chasquido, luego la
picadura seguida por el frotado relajante del Dom.Tenía que estar en el
paraíso. Entonces las largas manos de Connor se deslizaron por su pecho y 67
frotaron sus pezones, de uno en uno, antes de moverse deliberadamente
lento y acariciar su ombligo. Él jadeó y apretó sus nalgas para detener el
torrente de calor que inundó su eje.
Connor frotó su áspero pulgar sobre la cabeza de la polla de Aiden y
con su gran mano palmeó sus bolas. Otro duro golpe le quemó el culo y
Aiden respiró profundamente. Oh, Dios, no puedo aguantar mucho más.

Aiden se mordió el labio inferior y se imaginó comiendo una


hamburguesa en las alcantarillas, cualquier cosa para evitar derramarse por
todo Connor. El crujido de una abrazadera8 se oyó entre los latigazos del
cuero sobre su piel sensibilizada. El dolor le atravesó el escroto aliviando la
desesperada necesidad de un orgasmo. Se agachó y el dolor se duplicó por
diez. Otro crujido y el dolor abrasador de más dientes de metal se hundió
en su saco. Entonces la húmeda boca de Connor se cerró alrededor de su
pezón para atormentarle. Aiden miró al rostro del hombre. La cara de
concentración de Connor calmó su corazón acelerado. Este hombre tenía
experiencia en juegos extremos. En este momento, Aiden estaba en el
borde, casi a punto para volar hacia el sub-abismo, donde el dolor y el
placer chocaban y se hacían casi indistinguibles. Su Dom agitó los dientes
de dos pinzas para pezones frente a sus ojos y sonrió. El metal se cerró de
golpe sobre ambos montículos duros de forma simultánea y Aiden cayó en
el abismo.

68

8
CAPITULO DIEZ
Connor reconoció el cambio en la expresión de Aiden. Su chico
estaba volando. Él levantó la mano para detener el flogger de Logan y
sonrió. Logan sonrió como un babuino con metanfetamina y se inclinó para
lamer los largos senderos rojos de la piel de Aiden. Connor bajó la
estructura para acercar al sub. Logan se enderezó, dejó caer los pantalones
y luego se preparó. Connor cogió un tubo de lubricante del banco y se lo
arrojó a su compañero. Oyó un murmullo de agradecimientos salir de
Aiden por la aplicación del gel fresco. Soltó los agarres de la polla y
pelotas de Aiden con cuidado de no estimular el duro eje inflamado.

Se trasladó hasta la cabeza de Aiden y hundió los dedos en el pelo de


su chico, tirando lo suficiente como para conseguir su atención. Utilizó la
otra mano para liberar su polla, y luego agarró su dolorosa vara y untó el
pre-semen en los llenos labios de Aiden. El sub los abrió succionándola
ansiosamente hacia dentro. El cuerpo del hombre se sacudió hacia adelante
y Connor se encontró con la intensa mirada de Logan sobre la espalda de
Aiden. Joder, su amante estaba metido hasta las bolas. El sonido de carne
contra carne llenó la habitación. Connor balanceó las caderas y Aiden
respondió tragándolo hasta el fondo.

No voy a durar mucho tiempo. Los dedos de Logan se clavaban


en la carne de Aiden, dejando las marcas de media luna de sus uñas en la
piel ruborizada. —Podemos ir más despacio cuando hagamos la doble 69

penetración más adelante. Él gimió.


—Oh, mierda, su culo me está apretando, está muy cerca. Pasó el
brazo alrededor de las caderas de Aiden y quitó la abrazadera de sus
bolas. Córrete para nosotros muchacho.

Connor cabalgó la boca de Aiden y se deleitó con la expresión


eufórica de su amante. Te quiero, hombre.

Su polla se calentó y se le doblaron las rodillas ante la sacudida de


pura lujuria que quemó sus bolas. Demasiado pronto el clímax tomó el
control y llenó, con calor líquido, la boca de Aiden. Él retiró las pinzas para
pezones y escuchó el pequeño grito de Aiden. La ráfaga de sangre
volviendo a sus diminutos pezones fue una visión notable. Su chico
absorbió el dolor y derramó su propia culminación sobre el suelo gris
oscuro de piedra. Agotado, se agarró a la estructura y observó la satisfecha
expresión de Logan.Lo llevaremos al piso de arriba para refrescarnos.
Creo que necesito descansar.

Claro, pero lo quiero de nuevo muy pronto. Quiero que los dos
estemos dentro de este pequeño agujero. Quiero sentir tu polla frotándose
contra la mía dentro de él. Logan dio un paso atrás y se limpió. ¿Estás
de acuerdo?

Sí. Connor apoyó a Aiden y soltó sus muñecas. Quiero que


esté de acuerdo él también. Repartió besos por el cuello de Aiden.
70
¿Estás de acuerdo? dijo sacando al sub fuera del arnés.

Joder sí. Aiden tembló. Necesito que los dos estéis cerca
ahora mismo.
Lo llevaré al piso de arriba. Logan le desató las piernas a Aiden
y se puso en pie. Dámelo a mí.

Siendo levantado como si fuera un niño pequeño, Aiden se acurrucó


contra el pecho de Logan. Las escaleras llevaban hasta la sala de estar y
yendo por un pasillo llegaron al dormitorio. Una vez estuvieron en el baño,
sus maestros le lavaron, le permitieron hacer pis y lavarse los dientes.
Aturdido, pero refrescado, siguió las instrucciones y se arrodilló en la
cama. Con una cantidad abundante extendido sobre su sensible agujero, se
balanceó esperando al placer por llegar. La mano grande de Logan bajó
sobre sus glúteos calientes, y entonces, unos minutos después, la punta
redondeada de un gran plug presionó sobre su magullado esfínter. Él
tembló. La enorme fría vara se deslizo profundamente dentro y la polla de
Aiden dio una sacudida de placer.

Sólo un poco más. Oh, sí, estira ese culo chico. Logan sacó el
grueso plug y luego lo empujó de nuevo. Deberías verte el culo así de
estirado, hombre, es hermoso.

Sobre tu espalda y los brazos arriba. Connor dio la orden.


Nosotros enfriamos un poco diferente. Tenemos la intención de abrazarte y
follarte toda la noche y tal vez toda la mañana también.

Aiden obedeció, y cuando Connor aseguró los brazos y piernas a los


71
postes de la cama, forzó su boca a no curvarse en una sonrisa de felicidad.
Sus Doms le habían dado todo lo que necesitaba. El secuestro era su última
fantasía.
La increíble escena había sacudido su mundo y ahora el enfriamiento
duraría toda la noche. Oh, sí, esto era el paraíso. Esperó en la habitación
oscura, con los brazos extendidos sobre la cama. Sus Doms se acurrucaron
junto a él acariciando y besando su cuerpo. Se relajó disfrutando del olor
almizclado a hombre y sexo y dormitó.

Se despertó en la oscuridad por una boca en su polla. Logan yacía


entre sus piernas con sus cálidos labios alrededor de su eje. Connor
chupaba sus pezones y se acercó para besarle lenta y exigentemente con los
brazos abiertos. Aiden le devolvió el beso empujando las caderas en la boca
de Logan. Una vez estuvo al borde del clímax, la boca de Logan se deslizó
de él. Le dio un casto beso a la cabeza de su polla y una tenue luz iluminó
su sonrisa.

Es la hora. Logan le desató los brazos para colocarle sentado.


Deja que me siente detrás de ti, quiero que te deslices sobre mi pene. Luego
Connor te llenará desde el frente.

Aiden se estremeció ante el reguero de sangre de sus músculos. Él se


movió lentamente por el peso del plug dentro de las nalgas en su culo. Se
lanzó fuerte contra el pecho de Logan, se relajó y dejó caer la cabeza sobre
el hombro del hombre. Logan le agarró la parte de atrás de las rodillas con
sus grandes manos, y le levantó extendiendo su culo. Connor le envió una
sexy sonrisa y extrajo el plug, luego se inclinó para chupar las dolorosas
72
bolas de Aiden. Por debajo de él, Logan giro sus caderas y Connor guio la
vara gruesa de su amante hacia el culo de Aiden.
El calor del eje de Logan le llenó de éxtasis y soltó un largo gemido.

Oh, sí, eso es tan jodidamente bueno.

Entonces te va a encantar esto. Connor se arrastró sobre él con


una mano envuelta alrededor de su impresionante longitud. Relájate para
mí, chico.

La presión de la cabeza de la polla de Connor, aumentó el dolor en el


culo de Aiden. Jadeó y forzó a relajarse a su agujero. Él se centró en la
expresión de concentración de Connor. Este se echó hacia delante y la
punta de su polla se deslizó dentro. Aiden jadeó. Estaba estirado más allá
del tamaño del plug. Las dos pollas luchando por posicionarse dentro de él,
hicieron que su visión se volviera borrosa.

Vamos, relájate, sólo tengo la punta dentro. Connor apretó los


dientes. Retrocede un poco Logan. Él se empujó más profundo.

El calor ardía, calentaba y zumbaba sobre su polla. Oh, Dios, le


habían dividido en dos. La calidez le tranquilizó. Él gimió y se estremeció.
Entonces Connor empezó a moverse, lentamente en un principio. Su visión
enfocaba y desenfocaba el cuarto. El exquisito deleite era tan intenso que
tuvo que luchar por respirar. Me estoy muriendo de placer. Él desvió la
vista y se encontró con la mirada de Connor. Fóllame.
73
Connor se inclinó para besarle, su cálida boca sabía salada a causa
del sudor. Entonces se inclinó más y besó a Logan, largo y lentamente, y su
corazón se contrajo.
Sus Doms se amaban y sus sentimientos hacia ellos iban más allá de
la amistad. Se le enganchó el aliento en la primera zambullida profunda de
Connor, entonces su amante le inclinó la cabeza hacia atrás y le condujo al
infierno9.

Oh, sí, estoy jodiendo a los dos. Connor rioalocadamente y


aumentó el ritmo. Puedo sentir tu polla frotándose contra la mía Logan, y
joder, Aiden, estás condenadamente caliente. Te estoy llenando. Dios, ojalá
pudiéramos hacer esto a pelo.

Aiden se agarró fuerte a la parte de atrás de la cama mientras su culo


apretaba con fuerza las pollas de los hombres. La presión en su culo envió
espirales de placer que se deslizaron por ambas piernas. Había perdido todo
el control y se precipitaba hacia un orgasmo alucinante. Ambos hombres le
siguieron en un amasijo de cuerpos sudorosos. La habitación se desvaneció
en la oscuridad. He muerto y he ido al cielo.

Fue despertado por sus demandantes amantes a primera hora de la


mañana, y ambos hombres tomaron su culo haciéndole, gentilmente, el
amor. Más tarde se despertó y vio a Logan follar a Connor en un frenesí de
pasión. Él sonrió en la oscuridad. Nada nunca había sido tan perfecto. Se
acurrucó contra ellos. Por favor, que me pongan el collar. Después de
ellos, nadie será suficiente.

La mañana llegó con un café y dos caras serias mirándole. Ambos 74


hombres se sentaron en la cama completamente vestidos y le observaron
fijamente. Cogió la taza e inhaló el rico preparado. ¿Te gustó?

9 Aquí la expresión infierno se utiliza para explicar que le calentó hasta el máximo nivel no como forma despectiva.
¿No fuimos demasiado rudos? Logan frotó el muslo de
Aiden. La cara magullada no era parte del plan.

Tocó la mejilla magullada e hizo una mueca. Él debía parecer un


completo desastre. Aiden se encontró con la preocupada mirad de Logan.
Me hicisteis volar. Nunca había llegado tan jodidamente alto. ¡Jesús!

¿Te gustaría hacer más escenas con nosotros? Connor acarició


la cara de Aiden. Nos gustas mucho.

Escenas, sexo, oh, hombre, estoy dentro de cualquier cosa que


tengáis preparada para mí.Él sorbió su café. El brebaje estaba preparado
de la forma que le gustaba, negro y dulce. Pero antes de ir más lejos me
gustaría saber el impacto que tengo sobre vosotros. Tenéis una relación
especial y yo no quiero estropear eso.

La gran mano de Logan apretó su muslo y rio entre dientes.

¿Estropear? ¿Sabes lo que es intentar encajar dos cables machos


en un mismo extremo10? Parece imposible, ¿verdad? Nos enamoramos
mientras estábamos fuera. No tenía ni idea de que Connor era un Dom.
Besaba como una chica. Logan miró a Connor y sonrió. Sí, ha sido
difícil mantener separada nuestra vida en casa del tiempo que pasamos en
Depravity. Necesitábamos un enlace que uniera nuestras vidas juntas.
75
Él hermoso rostro de Connor se iluminó con una sonrisa.

10
Utilizan una metáfora relacionada con la electricidad para preguntar si sabe lo difícil que es que dos Doms encajen
completamente.
Anoche hicimos nuestra primera escena juntos y fue fantástico
porque tú estabas allí. En la cama el sexo fue increíble. Estuve empalmado
toda la noche. Él cogió la taza de la mano de Aiden y se inclinó para
rozar su labio inferior con la punta de su rosada lengua. Queremos que te
quedes aquí. En nuestra cama y en nuestra mazmorra.

Aiden parpadeó. Su corazón latía acelerado. Él les tocó la cara a


ambos. Me encantaría, pero sabéis que tengo un trabajo, ¿verdad? Los
fans, por no decir Cold Heat, podrían estar un poco molestos si yo
desaparezco de la faz de la tierra.

Logan se encontró con la mirada de Aiden. Todos tenemos


compromisos, vidas, pero nosotros te queremos en la nuestra. Múdate aquí
como un igual, comparte la cama con nosotros, y sé nuestro amante. Se
humedeció los labios. Y cuando quieras una escena, serás nuestro sub y
usarás nuestro collar en Depravity.

¿Qué tal suena eso? Connor sonrió. Por supuesto, ya sabes


que te vamos a joder duro, haya escena o no.

La polla de Aiden se llenó ante el pensamiento. Retiró la sábana para


mostrar la prueba de que estaba de acuerdo y sonrió. Suena maravilloso.
¿Podemos empezar ahora?

76
CAPITULO ONCE
Rodeado por una pared de guardaespaldas Reef Anderson se trasladó
a la puerta del escenario dentro del estadio. El último hit de su banda se
oyó por todo el auditorio. Los fans de la banda esperaban en la acera tras su
rápida salida del escenario. Reff se colocó las bolas para acomodarlas en un
ceñidos y negros jeans. Él estaba pensando en sexo. La necesidad de tocar
carne húmeda y de oler el aroma de un hombre excitado y el del cuero se
había convertido en una obsesión. Le dolía el pene al pensar en enterarse en
el culo apretado y enrojecido de un sub. Necesitaba estar en Depravity y
tener unos cuantos subs de la casa para elegir, pero le había prometido a
Aiden asistir a una fiesta, y su amigo ya había alquilado la parte de arriba
de un hotel. Con un poco de suerte, podría escaparse después de un par de
horas y encontrar algún culo. Se giró, esperando por Aiden, el bajista, para
que le pusiera al día. Él sonrió a su amigo. ¿Vas a dejarte caer más tarde
por Depravity? o tus Doms estarán ansiosos después de no tener nada de
acción durante dos semanas.

La boca de Aiden dibujó una sonrisa. Estoy caliente así que espero
que podamos hacer ambas cosas. No estarás solo. He invitado a Rhys y hay
un montón de dormitorios disponibles.

Él se rio entre dientes. Sus noches de sexo caliente con Rhys lejos
del Club Depravity eran una distracción, una muy agradable. Cuidaba de 77

Rhys y su tórrida aventura sexual sorprendió a muchas personas. Dos tipos


duros calentándose.
Diablos nunca tenía que preocuparse por herir a Rhys porque
siempre lo quería duro y rápido. El problema de su relación era que
siempre debía ser fuera del club. En el interior de Depravity el personaje
del Dom tomaba el relevo. No cambiarían de roll y a los dos les gustaba
dominar twinks. Él alzó ambas cejas. Estoy hambriento por un culo y
Rhys me vendrá muy bien. Aprecio que hayas pensado en mí y le invitaras.
Echó un vistazo a la multitud.

Para eso están los amigos. El rubio sub tiró del chaleco de cuero
de Reff para llamar su atención

Hey, mira al chico de la camiseta amarilla que está en la barricada


junto al policía ¿No es el cachorro con el que cenamos en Depravity? ¿Cuál
era su nombre?

Su atención se deslizó hacia el joven delgado con los hermosos ojos


color aguamarina. Hubo una conexión entre ellos aquella noche, pero el
descubrimiento de que el chico era un virgen vainilla había amortiguado su
entusiasmo. Aunque la idea de ser el primer amante del hombre tenía su
atractivo, le había dejado intacto y buscado algo de acción caliente y sucio
con un sub de la casa. Él sonrió a Aiden. Su nombre es Joel Moon.

Así que, ¿lo hiciste con él después de que me fuera la otra noche?

No, es un chico dulce, pero creo que puede estar cegado por mi 78
fama. Reff suspiró. —Me lanzaba miradas soñadoras durante la cena; ya
sabes a lo que me refiero. El cachorro tiene un enamoramiento con mi
imagen, y eso significa que eventualmente despertará y olerá el café. Para
ser honesto, no quiero lastimarle.Respiró hondo. Pero le deseaba y
tienes que darme puntos por no llevármelo a casa durante el fin de semana.
Hombre, la idea de entrenar un cachorro ha sido mi fantasía desde hace
años.

Estás loco. Frunció el ceño. Le gustas, y creo que entiende lo


que implica estar en Depravity. Rysh da a todos los chicos nuevos el tercer
grado antes de permitirles unirse. Él sin duda lo hizo conmigo. Se
encogió de hombros. Te gusta y vas a entregárselo a otro Dom cuando
tus escenas tienen una reputación legendaria. Dale una oportunidad al
muchacho.

Soy un idiota. El chico es delicioso y si realmente voy muy


lento...hmmm, merecerá la pena el esfuerzo. Su polla mostró su apreciación
ante la idea de una noche de felicidad que bien podría conducir a algo más.
Reff se rio y palmeó la espalda de AidenEso estaría bien, pero mírale, es
un fan, y sabes muy bien que no soy el tipo que interpreto en el escenario.
Pero si piensas que es lo correcto, lo llevaré a la fiesta. Se giró hacia
Jimmy, su guardaespaldas. El tipo de la camisa amarilla es un amigo.
Llévalo a la limusina, ¿quieres?

Sí, señor. El guardaespaldas asintió. Lo mantendré seguro.

¿Connor y Logan vendrán a la fiesta? Reff rodó los hombros y


empujó al hombre grande que estaba delante de él. Los excesivamente
apasionados guardaespaldas, de asqueroso olor corporal, se habían 79

duplicado al final de la tarde. Él desvió la mirada hacia Aidan. Espero


que sí, porque si tengo que pasar otro minuto viendo como Alec y Raoul se
encaraman el uno al otro voy a estallar.
Connor está dando un concierto esta tarde, pero se pasarán más
tarde. Aiden se apartó el pelo de la cara. Me gustaría que por lo menos
uno de ellos estuviera aquí, estoy deseoso por recibir disciplina, por no
mencionar de una noche follando duro. Él dio un paso atrás. No me
mires como si fuera tu próxima comida. Tienes a un cachorro a tu alcance,
que busca dueño, y Rysh está disponible si lo de Joel no te funciona.
Levantó la barbilla hacia la multitud que esperaba fuera del edificio.

Reef se humedeció los labios. Tengo que admitir que el tener un


chico cerca todo el tiempo tiene sus beneficios. Raoul también me vuelva
loco, pero Alec tiene una expresión satisfecha las veinticuatro horas, los
siete días de la semana. En todos los años, desde que lo conozco, nunca le
había visto tan pillado por un sub.

Tendremos mala suerte si se casa con él. El hombre me odia con


pasión y no tengo ni idea de por qué. No es como si estuviera intentando
cazar a Alec. Tengo mis propios Doms, pero esa perra se ha convencido de
que, en el segundo en que esté a solas con su hombre, voy a bajarme los
pantalones. Aiden se frotó la barbilla. Temo lo que pasará en la
próxima gira si viene… a menos que pueda traerme a mis chicos, pero
supongo que eso está fuera de cuestión. Logan siempre va de gira con
Connor.

Él puso el brazo sobre el hombro de Aiden. La próxima gira es 80


Rock in the Park y hay muchas posibilidades de que Hard Trash esté entre
los participantes. Deberías sugerirle a Connor esa gira, estoy seguro de que
hará lo que pueda por estar. Le apretó el hombro a su amigo.
—Supongo que ellos dos también te echan de menos.Rio entre
dientes. Pero la próxima vez que me pidan fotos porno de ti para su
disfrute, voy a negarme. Cash es el hombre adecuado para el trabajo. Él
tiene un hombre a tiempo completo. Yo soy un peligro cuando estoy
alrededor de un sub desnudo, duro, y durante tanto tiempo. Reef olfateó
el cuello de Aiden. —Y hueles tan bien que podría comerte.

Dos limusinas blancas se acercaron a la acera. Un guarda de


seguridad se trasladó a la barrera, cogió a Joel por el brazo y lo llevó lejos.
Reef sonrió. En la carrera hacia el coche, nadie notaría que Joel estaba
siendo metido en el coche. Oyó un rugido y se giró para ver a Alec con un
brazo alrededor de su chico mientras saludaba a la multitud. Junto a él Seth,
el batería, estaba de pie con las manos enterradas en sus bolsillos y con una
expresión pétrea en su cara. Reef suspiró. Seth necesitaba un hombre, y
aunque era un tipo agradable, tenía problemas de confianza. Mierda, el
hombre odiaba las multitudes, y en el momento en que la banda se lanzó al
estrellato, se volvió insociable. Tendré que encontrarle un Maestro uno de
estos días. Alguien que le dé lo que necesita.

Él sonrió. Cold Heat se componía de subs, Doms e increíbles


músicos. Nunca habían ocultado el hecho de que eran homosexuales, pero
se reservaban sus vidas privadas. A pesar de que Seth no hubiera dado el
paso. Él tenía material de sub, pero insistía en que no había encontrado al
hombre adecuado que le dominase. 81

De acuerdo, el coche está en posición. ¿Estáis listos para


salir?Uno de los guardas reunió su mirada con la de Reef.
Sí, vamos allá. Las puertas se abrieron y él salió hacia al aire
fresco de la noche.

82
CAPITULO DOCE
Joel parpadeó ante el enorme guarda de seguridad que estaba de pie
frente a él. La ruidosa multitud que estaba alrededor había hecho que se
perdiera la pregunta. Levantó la cabeza y se puso de puntillas para poder
escuchar mejor. Lo siento, no te he oído.

Reff te quiere en el coche. Ven conmigo te llevaré hasta el otro


lado y entrarás en la limusina. El hombre cerró su gran mano alrededor
del brazo de Joel. Siéntate lejos de la puerta.

Emoción revoloteó en el estómago de Joel. Se había ido de Depravity


después de cenar con Reef y Aiden, aturdido. Maldita sea, Connor
Diamond se les había unido, y cuando terminaron de comer, se había
quedado bloqueado. Reef estuvo maravilloso, habían bailado y luego el
hermoso cantante le había besado en la mejilla antes de meterle en un taxi.
El Dom le había aconsejado que se acostara con alguien antes de intentar
convertirse en un sub. Le había pedido a Reef que hiciera los honores, y el
anhelo en la mirada del hombre se había apagado como una vela. Joel no se
creyó las escusas de Reef. El hombre realmente creía que era un completo
capullo y que un virgen vainilla no debería confiar en él. ¿Qué es lo que
quiere de mí ahora?

Él caminó junto al guarda de seguridad y esperó hasta que las puertas 83


del auditorio se abrieron. La multitud enfocó su atención directamente
hacia las puertas del escenario y Joel se deslizó, inadvertidamente, dentro
de la limusina.
Se echó hacia atrás y se alejó de la puerta. El asiento de cuero oscuro
chirrió bajo su culo. El miró a través de las lunas tintadas. La masa de fans
se separaron y Alec se dejó caer en la limusina seguido de Reef. La puerta
se cerró de golpe y el coche aceleró. Joel tragó saliva. El distintivo olor del
penetrante aftershave de Reef le puso duro.

Hombre, tienes los ojos más hermosos que he visto. Reef se


sentó en frente y le dedicó una sonrisa torcida. ¿Cómo estás Joel? ¿Me
has echado de menos?

Su estómago dio un giro de trescientos sesenta grados y se perdió en


los estanques de color media noche de Reef que reflejaban pura lujuria. Se
humedeció los labios y obligó a su cerebro a elaborar palabras coherentes.
Su ídolo, y el hombre con el que había soñado cada maldita noche, estaba
sentado frente a él, Joel había estado deseando verlo. Dejó que la sonrisa se
mostrara en sus labios y asumió una postura cómoda. Sí, creo que tal vez
te extrañé un poco.

Hola Joel. Aiden le sonrió. Voy a estar un poco ocupado esta


noche. ¿Estarás bien con el Maestro Reef sin que yo esté de carabina?

Lo estaré.

Oye, vamos a una fiesta. Reef se echó hacia adelante y apretó el


muslo de Joel. Puedes llamarme Reef esta noche y tal vez más tarde seré 84
tu Maestro. Él le sonrió. Ven y siéntate aquí conmigo.
Joel miró de uno al otro, cogió la mano que Reef le ofreció y se
cambió de asiento para sentarse a su lado. Gracias.

Permíteme que te pregunte algo. ¿Usas lentillas? Aiden le


apartó un rubio mechón de pelo de su cara. Tienes unos ojos
asombrosos.

Reff serpenteó su musculoso brazo alrededor de la cintura de Joel. Él


olor del hombre le golpeó como un afrodisíaco cuando su mejilla se
presionó contra el ancho pecho. Luchó para responder. No, no llevo
lentillas. Los de mi hermano son del mismo color; somos gemelos
idénticos.

¿Gemelos? ¿Hay dos como tú? A Reef se le quedó la boca


abierta. —¿Dos dulces vírgenes vainilla?

Él sonrió ante la expresión de asombro de Reef. Siento


desilusionarte. Yo soy el virgen; Jackson es un bub de la casa en otro
clubJoel se encontró con la sofocante mirada de Reef. —Y no, no
salimos con hombres juntos; de hecho, la idea de ver a mi hermano con un
hombre me revuelve el estómago.

Tienes a un experimentado sub por hermano, entonces, ¿por qué


eres tan ingenuo cuando se trata del BDSM? Aiden frunció el ceño.
85
—¿Sabes que al entrar en el coche con Reef estas pidiendo
problemas?
Puedo ser virgen, pero no soy en absoluto ingenuo. No he
encontrado al tipo adecuado, eso es todo. Me gusta el BDSM y yo quería
involucrarme hace tiempo, pero Jackson se negó a llevarme al club. No
quiere que me relacione con Doms.

Entonces, ¿cómo acabaste en Depravity? En nuestro club sólo se


entra por invitación. Aiden se inclinó hacia adelante en su asiento. La
mayoría de los miembros pertenecen al negocio del espectáculo de una u
otra forma, y nos gusta que sea de esa manera.

Jackson habló con uno de sus amigos para que me metiera en


Depravity, cree que vuestro club tiene mejor clientela y no nos
mezclaremos allí. Tiene su propia reputación que mantener y no me quiere
en el mismo club. Joel miró a Reef. Y estoy aquí porque creo que
Reef es un jugador extremo, no porque él sea una estrella del rock. No
estoy buscando al buen tipo del escenario; estoy más interesado en conocer
al tipo detrás de la máscara. Suspiró. ¿Quieres dejarme ahora?

¡No! Joder no. Reef acercó a Joel y le dio un beso en la


comisura de la boca. —Yo creo que estás loco por querer conectar
conmigo. No consigo mantener a mis chicos durante mucho tiempo. Sé que
tengo una mala reputación en la mazmorra, pero supongo que eso ya lo
sabes, ¿verdad?Se rio y le acarició a Joel el cuello. Ven a la fiesta
como mi cita y veremos cómo encajamos. Entonces, tal vez después, te 86
lleve a Depravity.
Joel se inclinó en su abrazo. Quería que Reef le besara. El roce de
prueba, de los labios del hombre, había elevado su libido. Reff pasó una
mano caliente por el muslo de Joely el calor de su palma trazó un camino
caliente hacia sus bolas. Un estremecimiento por la evidente tensión sexual
y la ardiente necesidad se concentró en su garganta. Levantó la cabeza y
supuso que le saldría voz de pito. Me gustaría eso, gracias.

Él se fundió en el abrazo de Reef. El hombre bajó la cabeza y cubrió


la boca de Joel con sus labios, suaves, húmedos y tiernos. Joel abrió ante el
lento sondeo de la lengua de Reef y gimió al probar su sabor. Reef agarró
la cabeza de Joel con su gran palma y luego movió su boca para un beso
que le rizó los dedos de los pies. Joel gimió y le devolvió el beso reuniendo
su lengua con cada golpe de la lengua del cantante. Reef rompió el beso
con un gruñido salvaje y la mirada medianoche se centró en la cara de Joel.

Es seguro que no besas como un virgen. Reff lamió un sendero


por el labio inferior de Joel

Joel sonrió. Dije que era virgen, no inexperto, he besado a unos


cuantos tipos.

Ah uh, interesante. Reff se rio entre dientes. Así que, tu boca
también es virgen.

La cara de Joel se puso roja y se reunió con la mirada de 87


Reef.No… sólo mi culo.
Bueno, eso es un alivio. ¿Y piensas que disfrutarás en mi
calabozo? Reef pasó un dedo a lo largo de la erección de Joel. Puedo
ir despacio y enseñarte a disfrutar del dolor.

Joel dejó caer sus pestañas de la misma forma que otros subs cuando
estaban frente a un Dom en Depravity. Estoy seguro de que también me
divertiré aprendiendo a como complacer a mi Maestro.

Eso está genial.

La limusina se metió en el parking subterráneo de un edificio y el


coche se adentró en la oscuridad. No tenía ni idea de dónde le había llevado
Reef. Junto a él, el Dom suspiró y se echó hacia atrás.

Quédate cerca. Deberíamos estar bien en el aparcamiento, pero los


fans a veces se saltan la seguridad. Reef le cogió la mano. Aide ha
reservado todo un piso para la fiesta de esta noche, así que estaremos
tranquilos. Si quisiéramos ir a Depravity más tarde no habría ningún
problema.

El conductor abrió la puerta y siguió a Reef y Aiden desde el coche


hasta el ascensor. Detrás de ellos, un segundo coche se detuvo y Alec, Seth
y un chico con un fino collar negro, salieron. Joel se inclinó hacia Reef y el
brazo del hombre cayó alrededor de su cintura.
88
Chicos, quiero que conozcáis a Joel, mi cita vainilla. Reef
señaló al joven. —Este es Raoul, el sub de Alec, y supongo que reconoces
a Seth y Alec.
¿Jackson, ahora te haces llamar Joel?Alec alzó una ceja¿Es
por alguna razón o sólo estás jugando? Vainilla es la última etiqueta que
colocaría en tu culo.

Joel combatió la ira en la mirada de Alec con una sonrisa. Jackson


es mi hermano gemelo. Encantado de conocerte Alec. Él le tendió la
mano.

¿Gemelo? Nunca mencionó a un gemelo. Alec estrechó la mano


ofrecida. Joder eres idéntico.

Tal vez en apariencia, pero esta mitad de la pareja es un inocente


de grado A.

Reef tiró de Joel contra su costado y sonrió a Alec. Alto ahí, ya le


has puesto el collar a un sub, este cachorro es mío

Dentro de la ruidosa suite del hotel, la fiesta estaba en pleno apogeo.


Joel siguió a Reef a un opulento cuarto. Su corazón tronó. El hombre no
habría planeado follarlo de inmediato, ¿verdad? No, aún no, Reef se había
sentado en el escritorio y estaba escribiendo algún tipo de documento. Joel
se puso a su lado, y miró para abajo, hacia la instintiva escritura curva. Él
tragó saliva con dificultad. Jackson le había hablado sobre los contratos
entre los subs y los Doms, los cuales contenían una serie de acuerdos sobre
lo que esperaban el uno del otro, y una palabra segura. El encabezado en 89
negrita le decía que estaba en lo cierto.
Esto es un contrato para una escena conmigo. Reef sonrió.
Léelo hasta el final. Dice que entiendo que eres virgen y que te trataré con
amor y respeto. Te introduciré en las nalgadas y te mostraré mi flogger si
estás listo. Me gusta tener a mis chicos nuevos esposados, la pequeña
restricción aumentará la emoción. También dice que si me lo pides, tomaré
tu culo con cuidado, tal y como un virgen se merece. Él empujó el
documento hacia Joel. Querrás saber el por qué estoy haciendo esto
ahora. Porque, cariño, me gusta dejar mis intenciones muy claras. No estoy
jugando contigo. Al final de la noche tendrás las opciones de completar el
contrato o irte. El acuerdo es para una escena. Rásgalo y ya no existirá. Yo
respetaré la decisión que tomes, pero si las cosas se ponen calientes y duras
entre nosotros, quiero que sepas en lo que te estás metiendo. Suspiró.

—Mira, sé que esto no suena muy romántico, pero debido a mi


posición, tengo un montón de chicos que quieren sacarme dinero, por lo
que esto actúa también como una póliza de seguros.

Dejó que las palabras del hombre se asentaran. Comprendió el


motivo de Reef para el contrato, pero la fría duda se instaló en su
estómago. Quería romance, simple y llanamente, no una sola noche. Se dio
cuenta de que la expresión de Reef se suavizó. Oh, señor, él quería a este
hombre. Reef se puso de pie y le atrajo hacia su duro pecho.

Oye, no estoy buscando un juego de una noche. Podría tener a 90


cualquier persona de esta sala si lo que quisiera fuera sólo sexo. Créeme;
no soy el tipo de persona que consigue méritos corrompiendo a vírgenes.
Soy un jugador extremo así que me gusta que mis muchachos sean
experimentados, pero tú eres especial. Reef se rio. ¡Mierda! Eso suena
a guion de alguna película sensiblera. Tocó la mejilla de Joel. Seré
gentil contigo y te introduciré en el mundo del dolor/placer. Hace mucho
tiempo que deseo un sub propio al que entrenar. Así que lee el contrato, y si
estás de acuerdo, volveremos a la fiesta.

¿Y si no lo estoy?

Volveremos a la fiesta e intentaré meterme en tus pantalones otro


día. Los labios de Reef se extendieron en una sonrisa.

Joel levantó el sujeta papeles y luchó con todas sus fuerzas para
impedir que le temblaran las manos. Había soñado con este momento desde
hacía mucho tiempo, pero ahora el miedo le tenía agarrado con un apretón
de muerte. Inspiró profundamente para controlar sus nervios. El hombre
había dicho que podía marcharse si quería. Leyó los simples términos y
asintió. Sí, gracias, estoy de acuerdo con los términos. Cogió la pluma
que Reef le ofrecía y firmó con su nombre.

Reef posó una cálida mano sobre la espalda de Joel y luego le dio un
beso húmedo en el cuello. Gracias.

Un escalofrío por la anticipación recorrió la columna vertebral de


Joel. Le dolían las pelotas por el tacto del hombre. Él levantó el documento
y se lo entregó a Reef. El olor del Dom le rodeó, y sus rodillas temblaron
ante la necesidad de que Reef le besara de nuevo.
91
Aquí tienes la copia. Reef arrancó la hoja y se la pasó a Joel.
Ahora, vámonos a la fiesta.
CAPITULO TRECE
Pocos miembros o visitantes esperanzados entraban por delante de
los guardas a través de las puertas tintadas de cristal del santuario que era
Depravity. Si lo hacían, la mayoría de las veces tenían que lidiar con él.
Rysh disfrutaba siendo el último control antes de que nadie pusiera un pie
en su interior. Demonios, era el dueño del maldito club y nadie entraba sin
una referencia o análisis de sangre. Su club no era una guardería y sus
miembros eran más que especiales. El zumbido del portero indicaba una
nueva llegada, y cuando se puso en pie, el crujido del cuero de la silla de su
oficina era un sonido familiar. Se trasladó hasta el mostrador de madera de
su oficina a tiempo para ver las puertas de cristal abrirse. Miró fijamente al
hombre que se inclinaba hacia él y cuando el “llévame a tu mazmorra y
lámeme entero” se apoyó en el escritorio y sonrió sugestivamente, tuvo que
tragar para dejar de babear. La última vez que había visto al inocente
visitante Joel, el joven muchacho parecía un conejo mirando hacia el cañón
de una escopeta. El sub ante él rezumaba confianza. Hombre, Reef debe
haber educado al chico muy rápido. Él le devolvió al chico una sonrisa
sexy. Hola Joel, me alegro de que hayas vuelto. Reef no está aquí. Pero
puedo llamarle más tarde y pedirle que te invite a la fiesta después del
concierto, ¿te gustaría?

Oh, Reef. Sí, él es tan deliciosamente malo. Joel sonrió.


92
—Aunque estoy tentado en ir más lejos, está fuera de mi liga. Aún
no estoy listo para el juego extremo. Se humedeció los labios.
—Estoy buscando un Maestro dispuesto a tomarse su tiempo.
¿Conoces a alguien dispuesto que esté interesado en experimentar
conmigo?

La polla de Rysh se llenó tan rápidamente que se le congeló el


cerebro. Deslizó un contrato a través del mostrador. Sí, yo estoy libre
mañana alrededor de las ocho. Pon lo que noquieres que haga y te daré un
dulce paseo.

Eso suena divertido… hmmm, déjame ver. Escribiré lo que quiero


que hagas, eso será más fácil, ¿no crees? Las nalgadas son siempre
divertidas y tienes las manos tan grandes. Tal vez algo de esclavitud ligera,
juegos con los pezones y culo, y puede que algo de bondage. Joel levantó
su mirada aguamarina y la fijó en la cara de Rysh. ¿Me vas a follar dulce
y lentamente? Él se rio entre dientes. Me gustan también los roles,
fingiré ser vainilla...y virgen. ¿Puedes hacer eso… hmmm? Empujó el
contrato a través del mostrador.

Oh, sí, los vírgenes vainilla son mi especialidad y puedo ir tan


lento como necesites. Rysh maldijo la promesa de reunirse con Reff en la
fiesta y puso su nombre en el contrato, luego arrancó una hoja y le entregó
la copia al sub. —¿Estás seguro de que no quieres hacer esto ahora? estoy
libre.
93
No, tengo una cita. Espero con interés nuestra escena. El sub se
giró, y se escabulló por la puerta con su delicioso trasero moviéndose por
debajo de los ajustados pantalones de cuero. Rysh se agarró al mostrador.

—¡Oh, joder!

¿Qué le había sucedido al dulce e inocente Joel? Bueno, no le


importaba. El nuevo traje sexy le quedaba genial. Forzó a su mente a
concentrarse. ¿Debería decirle a Reef que el chico nuevo había firmado un
contrato con él? ¡Maldita sea! El hombre no le había puesto collar al sub,
así que él no había roto ninguna regla, pero también disfrutaba del
privilegio de estar con Reef fuera de la escena. Rysh se frotó la parte de
atrás del cuello, indeciso. ¡Mierda! Había planeado reunirse con Reff en la
fiesta más tarde para tomar un par de copas. Su cantante de rock, y a veces
amante, se había tomado un tiempo para relajarse del concierto, y en lugar
de arriesgarse a tener una escena con un sub de la casa, prefería su
compañía. Rápido, duro y frecuente.

Él se mordía el labio inferior. Si se lo decía mantenía la paz. La


puerta de atrás se abrió y saludó a Dave. El manager del club Depravity le
sonrió.

Pareces ansioso por irte.

Rysh se encogió de hombros. Es bueno tener la oportunidad de


94
escaparse unas horas. Vivir sobre Depravity puede ser difícil a veces.
Largas horas sin mucho tiempo libre.
Tu problema es que eres un perfeccionista. El lugar funciona sin ti.
Has entrenado bien al personal. Bob y yo podemos manejar cualquier
situación las veinticuatro horas del día, siete días a la semana. Sal a
disfrutar y deja de preocuparte. Dave mantuvo la puerta abierta.
Vamos, lárgate.

¿Me llamarás si hay problemas?

Sabes que lo haré. Vete. Dave le hizo un gesto con la mano.

Él subió las escaleras de su apartamento y usó la llave para entrar.


Imágenes de una escena con Joel recorrieron su mente. Oh, sí, podría
planear una escena para hacer que el joven mendigara. Se palmeó la polla y
la apretó. Mierda, ahora todo lo que tengo que hacer es decírselo a Reef.

Joel se sentó en el sofá de felpa y examinó a la gente que se agolpaba


dentro de la suite del hotel. Reconocía a muchos de ellos de las páginas de
las revistas. Oh, sí, los ricos y famosos habían acudido a la fiesta de Aiden.
Se había terminado su cuarta copa y una sensación cálida y agradable se
había colado a través de sus articulaciones. Había un bar, totalmente 95
abastecido, con seis camareros que trabajaban rápido y eficazmente para
dispensar las bebidas.
Sobre el ruido de la conversación, se oía la música de un equipo
completo manejado por un Dj. Una mesa, al lado de la puerta, sostenía un
recipiente con tarjetas de plástico. Joel había disfrutado de la atención de
Reef, pero el cantante, que tenía el subidón debido a la adrenalina del
concierto, encontró difícil permanecer sentado durante mucho tiempo en un
mismo sitio. Reef no había disfrutado de su habitual copa de burbon, y
había dado algunos sorbos al vaso de soda antes de dirigirse hacia al bar y
rellenar la copa de Joel.

Él siguió el trayecto de Reef a través de la multitud. El hombre se


detuvo a hablar con todos en su camino hacia el bar. Joel evitó el contacto
visual con los otros invitados. Algunos rondaban alrededor del sofá e
intentaban entablar conversación con él, pero los ignoró. Quería a Reef y
no tenía intención de poner en peligro sus posibilidades con el hombre de
sus sueños. De vez en cuando Reef miraba a su manera y sonreía. El gesto
envió una cálida corriente hacia las pelotas de Joel.

A través de la multitud, reconoció la figura de Rysh, el dueño de


Depravity, saludando a Reef con un abrazo. El pánico le golpeó. El gran
abrazo del Dom se había convertido en un “jódeme ahora” con una sesión
de tanteo y besuqueo. Se quedó boquiabierto ante los dos hombres y su
corazón se rompió en un montón de pedazos. Entonces Reef levantó su
cabeza y su mirada medianoche se fijó en él. La sonrisa torcida del hombre
no hizo nada para calmar su dolor. Joel se puso de pie de un salto y se 96
dirigió hacia la salida. La habitación se estaba desenfocando. Él tenía que
escapar.
No tan rápido. Reef agarró el brazo de Joel con la gran mano.
Hombre, sí que eres inocente. Ven aquí. Llevó a Joel contra su pecho y
le acarició el cuello. Tenemos que hablar. Cogió la llave del bol y le
echó un vistazo al número, entonces salió directo con Joel a través de la
puerta y se encaminó por el pasillo.

Dentro de la habitación del hotel, Joel empujó con fuerza el pecho


musculoso y levantó la barbilla. No creas que soy tan inocente como
para no saber lo que pasa, y no estoy aquí para que puedas convertirme en
un tonto.

Estas celoso y eso me gusta, no creo que nadie haya estado celoso
de que yo tocara a otro tipo. Reef se encontró con su mirada. No te
estoy faltando el respeto, solo estoy siendo yo, Reef. Tengo amigos,
amantes y beso y acaricio a todos ellos. No estoy casado y no le he puesto
ningún collar a un sub. Soy libre de hacer lo que quiera así que no estoy
acostumbrado a que los tipos se pongan posesivos. Acabamos de
conocernos así que tendrás que darme tiempo para que me acostumbre.

¿Acostumbrarse? A él no le importaba que besara y manoseara a


Rysh delante de él. Joel se mordió el labio inferior. ¿Supongo que estaba
buscando ser más que amigos, ya sabes, encontrar la confianza existente
entre un sub y un Dom de la que mi hermano siempre habla? ¿Cómo puedo
confiar en ti para una escena si ni siquiera lo puedo hacer en una fiesta? 97
Siento haberte hecho perder el tiempo. Quiero irme ahora.
Reef cogió su mejilla con la gran mano. Te he molestado. Creo
que te entiendo. Tú quieres tener una relación monógama conmigo. Su
pulgar dibujó círculos lentamente sobre la mejilla de Joel. A mí también
me gustaría eso y puedes confiar en mí. Vivo en un mundo donde besar y
abrazar es parte de mi vida. Si no le hubiera regresado el abrazo a Rysh
habría roto mi relación con él. Rysh también es especial para mí. Él es un
DILTF. Hemos tenido relaciones fuera del club Depravity desde hace
mucho tiempo. Se encogió de hombros. Pase lo que pase entre
nosotros, Rysh siempre será mi amigo.

¿Qué coño es un DILTF?

Un Dom al que me gusta follar. Aunque dentro de la mazmorra


prefiero a los twinks. Me gusta ver a un hombre tierno y joven bajo mi
látigo y lo mismo le pasa a Rysh, pero follar a un gran y musculoso hombre
también tiene atractivo para mí. Reef le dio a Joel un beso a un lado de la
boca. He discutido el compartir un sub con Rysh. Después de ver a
Aiden con sus dos Doms, me di cuenta de cuánto me gustaría estar en esa
situación. Un sub necesita a su Maestro y conmigo estando en la carretera
durante tanto tiempo, Rysh podría estar allí, y bueno, cuando estuviera en
casa, tres en una mazmorra o en una cama duplica la diversión.

¿Él había perdido su jodida mente? Joel se tambaleó ante lo que


implicaban las palabras de Reef. Así que, Reef le llevó a la fiesta para 98
compartirle con Rysh. El dolor le alcanzó. Él empujó las palabras a través
del nudo en su garganta. Tú acabas de pedirme que me deje usar en una
idea retorcida de diversión. Quiero salir ahora.
Un golpe en la puerta evitó que Reef respondiera. El cantante se
encogió de hombros y abrió la puerta. Rysh se encontraba en el pasillo con
una preocupada expresión en su hermoso rostro. Joel tragó saliva. Oh, sí,
Rysh era un sueño húmedo con patas. El hombre de unos treinta años,
medía seis con cinco11 y tenía la talla y el musculo de un antiguo guerrero.
Joel se había sentido atraído hacia él el día que se unió a Depravity y no
pudo evitar darse cuenta de que el Dom lo evaluaba en ese momento.
Ahora los oscuros ojos de Rysh eran compasivos.

No sabía que estarías aquí Joel. Su mirada se posó sobre él.
Lo siento, es solo que Reef y yo tenemos esto… ahh… este arreglo. Su
manzana de Adán se movió de arriba abajo. Si hubiera sabido que venías
a la fiesta con él me habría quedado en casa.

Joel se encontró con la mirada del hombre. ¿En serio? Y aquí Reef
me está diciendo que ambos planearon compartirme.

Yo no tengo nada que ver en eso. Rysh entró en la habitación y


cerró la puerta tras él. Yo nunca hablé de ti con Reef. Hemos hablado de
compartir a un chico y ponerle nuestro collar… pero su nombre nunca se
mencionó. Su mirada se dirigió a Reef. ¿Qué le has dicho al chico?

Hombre, esto se me está yendo de las manos. Reef se giró hacia


Joel para enfrentarle. Yo quería conocerte mejor lejos del maldito club y
99
por eso te invité a la fiesta. ¿Por qué no damos marcha atrás y volvemos a
empezar?

11 1,95m
No fui yo el que mencionó la idea del menage. Joel cruzó los
brazos sobre el pecho. No voy a ser arrastrado dentro de nada.

Nadie te va a obligar a hacer algo con lo que no te sientas cómodo


Joel. Rysh sonrió. Pero sé que te gusta la idea de los juegos de rol, y
confía en mí, dos Doms podrían hacer un infierno de escena para ti.

Joel parpadeó. ¿Cómo había descubierto Rysh su deseo secreto? Sí,


la idea de juegos de rol entraban dentro de su mundo de fantasías, pero solo
Jackson sabía eso, y su hermano no entraría ni muerto en el Club
Depravity. ¿Cómo pudo saberlo Rysh?

Si también me ves atractivo, ¿por qué no te tomas tiempo esta


noche para conocernos antes de salir corriendo por la puerta y arrepentirte
el resto de tu vida?Rhys se acercó más y el olor a limón del aftershave
afectó a Joel. Reef es un Dom de juegos extremos, y yo también si es
necesario, pero también me gustan las cosas dulces y lentas, así que con los
dos estarías muy seguro.

Colocado entre los dos lujuriosos hombres, Joel luchó contra las
intrigantes imágenes que destellaban en su mente para poder elaborar una
respuesta coherente. Seguro, es algo bueno, y tendría que estar ciego
para no encontrarte atractivo, Rhys, pero no estoy aquí para follar a un
Dom o a dos. Él miró a los dos hombres. Para eso tenía un montón de
100
ofertas en Depravity. Yo no vine aquí para una escena tampoco. En este
momento no estoy en absoluto seguro de por qué estoy aquí.
Oh, yo sí. De camino hacia aquí me besaste de una forma que sólo
podía significar una cosa: sexo caliente. Reef levantó una ceja. ¿No
me negarás que estabas pensando en que yo fuera tu primer y verdadero
amante?

Joel se puso rojo. Bien, el hombre había leído todas sus señales. Miró
a los dos Doms y su ira se fue dispersando, dejando una estela de cruda
necesidad. Diablos sí, quería sexo, ansiaba sexo, necesitaba sexo. La idea
de tener a los dos deliciosos hombres desnudos y deslizándose por todo su
cuerpo hizo que su polla se llenara hasta el punto de quiebre. Él se aclaró la
garganta. Claro que lo he pensado.

Bueno, entonces, si me quieres a mí o a los dos sólo para el sexo,


eso estaría bien. El sexo no significa que tengas que entregarme tu culo.
Reef envolvió un brazo alrededor de la cintura de Joel. ¿Por qué no
nos das la oportunidad de mostrarte lo que es que dos chicos te presten
atención? Entonces si decides que esto no es para ti. Reef levantó las
manos. Rompe el contrato y vete. Porque ten por seguro que no quiero a
nadie que no esté caliente o dispuesto a mi amor o a estar debajo de mi
flogger.

El corazón de Joel se aceleró y miró del uno al otro. Oh, Dios, eran
hermosos. ¿ Y si sólo hago clic con uno de ustedes? ¿Será eso un
problema? Él suspiró. Nunca querría meterme en medio de vuestra 101
amistad. Quiero que dejemos esto claro antes de que sigamos.
Eres muy dulce. Reef se acercó más. Pero si cualquiera de
nosotros decide ponerte un collar o tenerte como amante, seremos fieles.
Rysh ha entregado un collar antes y nunca se ha desviado, y yo tampoco lo
haré tienes mi palabra.

¿Había caído por el agujero del conejo?12 Su mirada se deslizó por


las dos hermosas caras. ¿Podrías manejar a estos dos hombres? ¿Besarlos y
tocarlos? Una descarga de consciencia se enroscó alrededor de su eje. Oh,
Sí. Bien ¿por dónde empezamos?

102

12 Hace referencia al libro de Alícia en el país de las maravillas.


CAPITULO CATORCE
Reef se percató de los nervios anticipativos que se filtraban a través
de Joel. Sí, había querido quedárselo para sí mismo, pero la idea de perder
a Rysh permanentemente le hizo darse cuenta que se preocupaba más por el
hombre de lo que creía que era posible. Él se frotó la barbilla, Jesús, si
Rysh y Joel conectaban profundamente él se vería fuera en el frío. Reff se
maldijo por su estupidez. Joel le había deseado en Depravity y cuando
estaban en el coche, ¿por qué cambiaría eso ahora? Se encontró con la
mirada de Rysh sobre su cabeza y sonrió. Volvamos a la fiesta, aquí hay
demasiada tensión. Él cogió la mano de Joel y la apretó.

¿Qué tal un baile para romper el hielo?.

Eso suena divertido. Joel sonrió. Nunca había bailado antes


con dos chicos.

Rysh rio profunda y melodiosamente. Entonces no has vivido.


Abrió la puerta y los tres caminaron a través.

La música había cambiado de estilo y los hombres se habían traslado


a un extremo de la suite para bailar. Los movimientos de las masas de
cuerpos rebotaban con el ritmo. Reef arrastró a Joel al medio de la pequeña
pista de baile y le acercó. Rysh anidó su gran cuerpo contra la espalda de
103
Joel y ellos se movieron con la música. Reef se percató de las aguadas
respiraciones de Joel ante la descarada exploración de las grandes manos de
Rysh.
El sub serpenteó sus pequeñas manos alrededor del cuello de Reef y
enredó los dedos en su pelo. Necesitando tocar carne desnuda, Reef quitó
las manos de la cintura del chico y las deslizó bajo la camiseta amarilla del
hombre. La piel suave y húmeda rozó su palma y eso despertó el instinto
primitivo de follar. Enterró la cabeza en el cuello del sub e inhaló el aroma
almizclado y masculino. Quería morderlo, pero en su lugar succiona besos
en su cuello. Bajo su lengua, la piel del hombre se estremeció. Joel
ronroneó y movió las caderas. Esa acción friccionó la polla dura del
hombre contra el muslo de Reef. Oh, sí, su chico disfrutaba de su toque.
Levantó la barbilla para mirar a Joel a los ojos y luego se inclinó para
sofocar sus labios hambrientos.

Joel abrió su cálida boca y Reef la saqueó, tomando y saboreando. Él


no le dejo dudas a Joel de cual eran sus intenciones, y apartó la boca de sus
suculentos labios. Te quiero a ti. Giro a Joel y lo metió en los brazos
de Rysh

Yo también te quiero. Rysh le abrazó y tomó su boca.

Reef se movió, al ritmo de la música, contra el pequeño culo de Joel.


Su pelo oscuro se había caído sobre la cara y le bloqueaba la vista del beso,
pero el gemido apreciativo de Joel le llegó alto y claro. Joel, puede que
fuera virgen, pero no inocente, sus señales y respuestas tenían mucha
confianza. En un sólo baile y ya estaban todos jadeando. Reef respiró
104
profundamente. Sí, él había estado excitado antes, pero esto era algo
diferente, como montar en un autobús y conducir un Ferrari.
Quería tirarlo y ensuciarlo, y quería jugar justo aquí y ahora. Se
acercó y mordió el lóbulo de la oreja de Joel. ¿Quieres volver a la
habitación?

Sí. Joel se inclinó en su abrazo. Me encantaría eso.

Él dirigió el camino a través de la fiesta y regresaron a su habitación.


Miró alrededor buscando los suministros extras que Aiden había dejado
para sus amigos en la habitación. En la mesita de noche había un bol con
preservativos y lubricantes. Él sonrió. Aiden había suministrado una
selección de esposas y dildos de Depravity. Se giró y miró a Joel que tenía
el rostro colorado. Necesitaba saber lo que el muchacho quería de ellos.
Nada agresivo, eso era seguro. Tal vez una escena suave con algo de
dominación y ver si él quería llegar hasta el final.

¿Qué quieres de nosotros Joel? Le agarró por el frente de sus


pantalones y le arrastro contra él. Podemos desnudarte, lamerte entero, y
darte una mamada, ¿o quieres que nos encarguemos de presentarte algunos
de los placeres de la dominación?

He esperado por algo así desde hace mucho tiempo. Joel se
encontró con su mirada. Ambos cuidarán de mí, ¿no?

Él inclinó la cabeza hacia el escritorio. No quiero estropear el


momento, pero si quieres protección, tendrás que reformar nuestro contrato 105
para incluir a Rysh.
Puedo hacer eso. Joel pasó su boca por la mandíbula de Reef.
Estoy tan cachondo que nada podría estropear este momento.

Ah… Reef. La cara de Rysh había adoptado su máscara de


Dom. ¿Puedo hablar contigo fuera?

Maldición, el cachorro estaba preparado y listo para volar. Reef alzó


ambas cejas. ¿Ahora?

Sí. Rysh salió por la puerta.

Ahora vuelto. ¿Por qué no te desnudas y te metes en la cama para


mí? Reef siguió a su amigo a través de la puerta.

En el pasillo miró hacia Rysh, el hombre tenía una expresión tímida.

¿Qué?

Yo iba a contártelo pero no he tenido tiempo. Rysh sacó un


pedazo de papel doblado de su bolsillo trasero y se lo entregó a Reef. —Él
firmó un contrato conmigo hace menos de una hora.

Reff miró el documento y sacudió la cabeza. ¿Hace una hora?


Imposible. Estaba conmigo. Le recogí fuera del auditorio. Es imposible que
hubiera estado en Depravity en ese entonces.

Rysh se frotó la cara con las manos enérgicamente. 106


Te digo que era él. Pero estaba vestido de cuero y tenía un
pendiente de oro, de una calavera con dos huesos cruzados debajo, en cada
oreja. Malditas sea. Él estaba jodidamente caliente. No puede resistirme.
Me dijo que pensaba que eras demasiado para él.

Jackson. Reef se encontró con la mirada de Rysh. —Joel tiene


un hermano gemelo con el nombre de Jackson. Es un sub de la casa en un
club, así que tendría suficiente experiencia para manejarte. Apuesto a que
le estaba dando un empujón a su hermano en la dirección correcta. ¿Te
pidió una escena para esta noche?

No, insistió en que fuera mañana. Rysh se frotó la barbilla.

—Puede que tengas razón; sabría que su hermano es un poco tímido.


Apuesto a que tenía planeado contárselo esta noche. Una amplia sonrisa
dividió su rostro. ¡Joder! Los dos son idénticos… ¿Te puedes
imaginar…?

No, no puedo. Son hermanos y el incesto no está en mi


vocabulario. Reef rodó los hombros. El cachorro está en plena
ebullición ahí dentro y su mente estará imaginando un millón de
escenarios. Muéstrale el contrato y veamos lo que dice. Entonces
tendremos que empezar desde cero. No voy a precipitarme, quiero que me
suplique que le folle antes de hacer ningún movimiento.
107
Él quiere que seas el primero. Rysh sonrió. —Eso es bonito, y
seré feliz de miraros. Yo sé cómo mantener a un cachorro feliz, y lento es
mi segundo nombre. Te suplicará y me conformaré con esperar para poder
enterrarme profundamente en ese culito apretado, es un chico que al final
también puede que entregue su corazón. Ya estoy enamorado de Joel. Se
rio entre dientes. Bueno, más bien lujurioso, pero el amor no andará muy
lejos. ¡Él es caliente!

Sí, es especial. Creo que fue su vulnerabilidad lo que me atrajo en


primer lugar. No quiero hacerle daño, pero no estoy planeando caer por un
tipo que no esté involucrado en las escenas, esa es una receta para el
desastre.

Él se preocupa por ti y se siente atraído por mí. Rysh sonrió.

—¿Qué podría salir mal?

Reef señaló hacia la puerta. Todo. Especialmente cuando le


muestres el contrato.

Joel miró fijamente la ornamentada puerta blanca y afinó el oído para


intentar escuchar la conversación por encima de la música. Estaba desnudo
y sentado en el centro de la enorme cama de hierro; la palabra vulnerable
no se acercaba para describir las emociones que aparecían en su cerebro.
Sentía un hormigueo en sus labios por los ardientes besos de los Doms. Él
los tocó en un intento por capturar su placer. Quería a Reef y la idea de
108
tener también a Rysh le entusiasmaba. Palmeó su dolorida polla y sus
apretadas bolas se elevaron. ¿Sus Doms le enseñarían los fundamentos del
dolor/placer o se turnarían para amarle? Tragó saliva con dificultad.
Historias de terror se agolparon por primera vez en su mente.
Sé mordió el labio inferior. Es momento de ser un hombre y empezar
a disfrutar de la vida. Había encontrado al hombre de sus sueños y Rysh era
una ventaja añadida. Su atención se centró en la mesita de noche, bien
provista de condones, lubricantes y una variedad de juguetes BDSM. Tocó
la pesada barra de hierro de la cabecera de su cama. Un escalofrío por el
conocimiento se deslizó a través de él y se le estremeció la piel. Con dos
Doms no habría escapatoria, ni tiempo de cambiar de opinión. La palabra
segura que había acordado con Reef se deslizó a través de su lengua.
Comprobó la palabra y luego la soltó. Rojo.

Joel sonrió. Él tenía algo del control. Reef le había puesto su palabra
en el contrato y que todo se detendría ante la mención de la misma. El
pomo de la puerta se sacudió y el corazón de Joel tronó. Cubrió su erección
y bajó su mirada fijándola sobre las sábanas blancas como la nieve. La
mezcla del aroma almizclado de Reef con el de su aftershave atravesó la
habitación. Joel se agarró sus temblorosas manos para evitar que sus Doms
las viesen. Una sombra se cernió sobre él y el olor a limón lleno sus fosas
nasales. Rysh.

¿Recuerdas haber firmado esto conmigo hace un par de horas en


Depravity? Rysh empujó un pedazo de papel bajo la nariz de Joel.

Joel cogió el documento y comprobó el contenido. Su estómago se


encogió por la aprensión. Él centro su atención en la firma. Joder, Jackson. 109
¿En qué coño se había metido ahora?
Él levantó la mirada hacia Rysh. Ciertamente recordaría haber
firmado un contrato contigo, Rysh, pero este contrato lo firmaste con mi
hermano gemelo, Jackson. Él firma como J Moon, si observas mi firma en
el contrato que hice con Reef , verás que yo utilizo mi nombre completo.
Aunque encuentro esto difícil de creer, Jackson juró que no pondría un pie
en el Club Depravity.

Nah, no es Jackson. Mira aquí. Rysh señaló el nombre impreso


en la parte superior de la página. Aquí pone Joel, no Jackson. ¿Y ahora
qué pasa chico?

Joel sacudió la cabeza negándolo. Imaginó a su hermano y recordó


sus peculiares pendientes. Él se dio un golpecito en su oreja derecha. Ese
era Jackson. Lleva esos enormes pendientes de oro en sus orejas. Yo sólo
llevo este en mi oreja derecha. Cuando nos perforamos las orejas, cada uno
se agujereó la opuesta y llevábamos pendientes a juego. Yo conservé el mío
pero Jackson prefirió cambiarlo por algo más llamativo. Mi hermano es
extravagante y confiado. Lleva mucho cuero y oro. Suspiró.
Probablemente lo hiciera para gastar una broma. Joel se reunió con la
mirada de Rysh. Por favor, no dejes que esto eche a perder nuestra
noche. Yo quiero estar aquí con los dos. Joel tocó el brazo de Rysh.

—Por favor, Maestro Rysh.


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¿Quieres que añada mi nombre al contrato de Reef? No pienso
hacer nada contigo sin uno. Rysh suavizó la mirada. Y también quiero
estar aquí.
Reef bajó su gran cuerpo hacia una silla y se aclaró la garganta.
Tal vez sea mejor que volvamos a la fiesta. Ustedes dos habéis arruinado
el estado de ánimo.

Oh, no, no te vas a alejar de mí ahora. Joel desechó lo último de su


indecisión y apartó la sábana para revelar su dolorosa erección y sus
apretadas pelotas sin pelo. La expresión en la cara de Reef no tenía precio.
Joel pasó su dedo por encima de la pegajosa perla de pre-semen que estaba
sobre su rendija y se mojó los labios. ¿Puedo devolverte el estado de
ánimo Maestro Reef?

Claro. Los labios de Reef se curvaron en una sonrisa torcida. Se


quitó la camisa. Dame un segundo para que me desnude. Se giró hacia
Rysh. Mi contrato está sobre la mesa, agrega tu nombre. Te necesito para
que me ayudes a entrenar a este cachorro en el arte de mendigar.

El Dom se movió con rapidez, y momentos después se presentó ante


él desnudo. Joel recorría con su mirada, la perfección musculosa, besada
por el sol de Reef. Inhaló aire para controlar sus nervios. La visión de la
larga y gruesa vara de su Maestro le asustó y emocionó. ¿Cómo sería el
tener enterrado a Reef profundamente en su interior?

¿Tienes hambre de mi verga? Reef le levantó la barbilla a Joel


con un dedo y se reunió con su mirada. Porque vas a tener que esperar.
111
Recogió un par de esposas de la mesita de noche y las balanceó delante
de la nariz de Joel. Los brazos por encima de tu cabeza. Él se inclinó y
colocó las esposas en su lugar.
Mientras la carne caliente de Reef rozaba el pecho de Joel dejando
un rastro de fuego sexual, inhaló. La dulzura almizclada del Dom le
rodeaba. Miro hacia arriba mostrándole a su Maestro una expresión de
aprecio y su cara se sonrojó. ¿Te complazco Maestro Reef?

Reef se movió hacia la visión periférica de Joel. La mirada vidriosa


del hombre y su gruesa erección, difuminaban cualquier tipo de duda que
Joel pudiera tener sobre la atracción de Reef. Rysh humedeció los labios y
se sentó en un lado de la cama.

Tú nos satisfaces mucho cachorro. Rysh palmeó el cuerpo de


Joel con una mano caliente. Pero también vamos a enseñarte un poco de
lo que necesitamos. Tienes tu palabras segura, y no dudes en usarla si lo
consideras necesario. Deslizó su mano de arriba abajo. No puedo
esperar para probarte muchacho.

Tienes una piel tan hermosa. Necesito ver mis marcas dibujadas en
ti. Reef paso una mano por el pecho de Joel. Ahora tenemos el control
sobre ti. No te podrás correr a no ser que yo te lo permita. Las esposas
permiten que te gires, así que ponte de rodillas y muéstrame el culo.

Con la ayuda de Rysh, Joel se giró y se puso de rodillas. La


almohada se tragó su cara sofocándole. Él levanto la cabeza con pánico y
luchó para respirar.
112
Hey. Rysh retiró la almohada de debajo de la cabeza de Joel.
Está bien, toma un poco de aire y respira profundamente. Metió dos
almohadas bajo el vientre de Joel.
—Apóyate y descasa sobre las almohadas. Deslizó las esposas un
poco más abajo por el poste de metal. Ahora puedes utilizar los codos
para sostenerte.

Gracias Maestro Rysh.

Inclínate un poco más. Reef puso una cálida mano sobre la


espalda de Joel. Levanta tu hermoso culo, más alto.

Joel se inclinó sobre las almohadas, separó las rodillas y levantó el


culo. Él oyó el gruñido de Reef y cerró los ojos. Quería complacer a sus
Maestros, pero el miedo enviaba ondas de pánico a sus músculos. Luchó
por controlar el estremecimiento que cortaba su cuerpo.

Lo harás bien. Rysh estaba tumbado en la cama. Abre los


ojos y mírame.

Él obedeció. Observó al gran hombre a su lado y su polla se


estremeció en aprecio. ¿Qué pretendían hacerle? ¿Cuánto podría aguantar
antes de usar la palabra segura? ¿Se alejarían de él si lo hacía? Debería
haberles hecho más preguntas.

Reef agarró ambas nalgas, con las cálidas manos, y las apretó. El
áspero masaje alimentó las brasas ardientes del control de Joel. Oh, Señor,
el sólo toque de este hombre haría que se corriera por las sábanas. El
113
primer golpe le sorprendió. El dolor agudo resonó a través de sus bolas y
vibró hasta su palpitante eje. Él se tragó un suspiro.
Al golpe de Reef le siguió un masaje profundo, sus largos dedos se
clavaban en los músculos de sus doloridas nalgas. Entonces seis golpes más
fuertes le siguieron, deslizando el delicioso tormento de su culo hacia la
parte superior de sus muslos. Joel gimió, el intenso dolor/placer llenó su
polla hasta reventar. Junto a él, Rysh se rio profundamente desde su pecho
y le pellizcó los pezones.

¿Te gusta eso chico? Rysh le pellizcó de nuevo y se inclinó para


chupar el lóbulo de la oreja de Joel. Seis más, y pienso que podemos
jugar con su culo. Este chico está a punto de estallar.

Una capa fría de lubricante tocó el culo de Joel e hizo que se tensara.
¿Cuánto dolería?

Reef usó el pulgar para masajear el estrecho esfínter de Joel. El culo


del chico se había enrojecido hasta alcanzar un tono rosado y las huellas de
sus manos se destacaban en ambos muslos. Él le sonrió a Rysh. Su amante
había retrocedido y le cedió el liderazgo para entrenar a su muchacho.
Apretó el pulgar contra el rígido agujero. Estaba tan apretado, el chico
necesitaba relajarse antes de que le follara. Sacó el pulgar y volvió a
golpearle haciendo que se oyera el sonido de su mano chocando contra la
carne húmeda. Quería darle a su cachorro un castigo más extremo para
empujarle hasta el borde del dolor/placer y que entrara en esa zona donde
los subs volaban, pero su chico era virgen.
114
Él calmó el dolor y se inclinó para lamer las marcas de su impoluta
carne. Los músculos del muchacho temblaban bajo su lengua. Oh, sí, su
cachorro estaba a punto de derramarse. Levantó la cabeza y se encontró con
la sonrisa de Rysh.Dale la vuelta.

Joel se dejó caer sobre la espalda. Dolor picaba en los músculos de


sus hombros. Él hizo una mueca. Rysh inclinó su oscura cabeza, y mordió
y lamió sus pezones. Era tan intenso, la boca del hombre enviaba ondas de
escalofrío erótico directamente a sus bolas. Por encima de la cabeza de
Rysh, él observó a un Reef en pelotas. Su estómago se contrajo y calmó su
erección cuando estaba a punto de estallar. Reef colocó su enorme cuerpo
entre las rodillas de Joel. Rysh le hizo un guiño cómplice y rodó hacia un
lado. Joel se centró en la determinada mirada de Reef. El gran Dom sonrió
dulcemente y se arrastró sobre el pecho de Joel para tomar su boca con un
posesivo beso.

Joel gimió y se abrió para la inquisitiva lengua de Reef. Bebió el


sabor del hombre y le devolvió el beso. Él quería tocar la carne y
deshacerse de sus restricciones.

Pequeño cachorro ansioso. Reef lamió un sendero por la barbilla


de Joel. ¿Quieres que te folle dulzura?

Sí Maestro. Joel alzó la cabeza y posó un beso sobre la boca de


115
Reef. Por favor Señor.

Pronto. Reef se apartó y se arrodilló entre las piernas de Joel.


Mi turno dijo Rysh capturando la boca de Joel.

Rysh palmeó el saco de Joel con su gran mano y devoró su boca. El


pelo del hombre le hizo cosquillas en el pecho y su áspera barba raspó su
mejilla. Joel chupó la lengua caliente de Rysh y levantó sus caderas contra
la mano caliente alrededor de sus bolas. Él apartó su boca. Por favor, no
puedo aguantar mucho más, por favor.

Los cálidos labios de Rysh bajaron por la barbilla de Joel, cruzaron


su pecho y rodearon su vientre. Joel se agachó y su pene palpitó por el
orgasmo negado. No podía aguantar más. Reef cerró sus grandes manos
alrededor de los tobillos de Joel, le colocó las piernas sobre sus anchos
hombros, y Rysh envolvió su polla con su cálida y húmeda boca. Él se
reunió con la mirada de Reef. Me voy a correr.

No, no lo harás. Reef apretó la punta de la cabeza de su polla


contra el culo de Joel y empujó. Relájate. Dijo rodando sus caderas.
Mírame. Ordenó agarrando los muslos de Joel.

Un dolor agudo y desgarrador se apoderó del culo de Joel. Él tiró de


sus restricciones. La boca caliente alrededor de su vara le chupo en un lento
tormento ayudando a relajarse. La presión y el dolor crecían. Miró a Reef y
vio compasión en sus ojos color medianoche, no ira ni triunfo. Enseguida
su culo se relajó y Reef se coló dentro lentamente estirándole hasta el
116
límite. Era tan caliente y dura, acabaría dividiéndole en dos. Joel se mordió
el labio inferior con fuerza y agitó la cabeza de un lado a otro. ¡Oh, Dios
mío!
Buen chico, estoy casi dentro. Reef sonrió. Estás tan
apretado. Intenta relajarte un poco más y disfruta de la mamada de Rysh.
Esto es todo por ahora. Él se echó hacia atrás y luego se empujó hasta las
bolas. Oh, sí, estás tan caliente.

El dolor retrocedió y se convirtió en placer. El calor en su culo ardía.


Cada devastador empuje encendía olas de increíbles sensaciones. La boca
caliente y húmeda de Rysh le provocó hasta el punto de la locura. La
presión se incrementó y se enrolló alrededor de sus bolas enviando llamas
de lujuria contra su polla. Él volvió a mirar a Reef Por favor, Maestro
Reef, no puedo aguantar más.

Entonces llena la boca de Rysh con tu semen muchacho. Reef


incrementó el ritmo.

La habitación estaba llena de olor a sexo, a hombres calientes y el


ruido de carne contra carne. Joel se regodeó en las sensaciones gemelas por
la intensa dicho erótica que irradiaban su polla y culo. La habitación se
movió y desenfocó, y cada terminación nerviosa gritaba su liberación. Él
disparó, llenó la boca de Rysh con calor líquido y se estremeció. Nada se
asemejaba a tener dos amantes. Quería más. Reef le palmeó la cadera con
su húmeda mano y desapareció. Él le vio salir. Joel parpadeó. ¿Había
alterado a su nuevo Maestro?
117
Reef se metió en el baño para contener su orgasmo. Claro que quería
correrse dentro de Joel, nada habría sido más perfecto, pero Rysh le dio
este regalo sin pensar en su propio placer. Se quitó el condón y se lavó en
el lavabo.
Él complacería a su amante y la próxima vez, Joel, podría manejarlos
a los dos. Su menté vagó hacia Joel, y esperó que Rysh estuviera
manejando bien el enfriamiento. No es que estuviera planeando enfriarse
todavía. Él regresó a la habitación y sus hombres le miraban con interés.
Cogió un condón y el lubricante de la mesita de noche y se subió a la cama.
Le sonrió a Rysh.

Nunca he follado dos culos en la misma noche, así que esto es


nuevo para mí. Se rio entre dientes. Vamos a revolcarnos y
ensuciarnos tipo grande. Se arrastró por encima de los dos hombres.
Besó a Joel y chupó su labio inferior. Eres tan jodidamente hermoso. ¿Te
ha gustado?

Sí, Maestro. Joel bajó sus largas pestañas sobre sus brillantes
ojos. Pensé que había hecho algo mal cuando te fuiste de repente.

Reef presionó un beso en ambos lados de la boca. No, sólo quería


guardar algo para Rysh. Tú estás demasiado dolorido para que él pueda
tomarte también, y tenemos que mantenerlo feliz. Sonrió. Estás
poniéndote duro otra vez por mi beso. Ponte en la posición del sesenta y
nueve para poder tener el placer de follarle. Reef giró la cabeza para
capturar los labios de Rysh. El duro beso que su amante le devolvió le dio
la respuesta que deseaba. El sabor del semen de Joel permanecía en la boca
de Rysh. Levantó la cabeza y se rio entre dientes. Hmmm, sabes tan 118

jodidamente bien. Ahora deja que nuestro chico te mame.


Rysh sonrió como un babuino. No voy a durar por mucho tiempo.
Se arrastró sobre Joel. Chúpame muchacho. Él gimió de forma
salvaje. ¡Oh, joder!

Reef se sentó al borde de la cama y observó a sus dos hombres en la


posición de sesenta y nueve. Rysh le había expuesto su fino culo y casi
babeaba al verlo. La erótica escena ante él llenó su polla hasta casi hacerle
estallar. Esta vez el juego sería duro y rápido. Él adoptó su posición detrás
de Rysh y untó lubricante sobre el fruncido agujero del hombre. Deslizó un
dedo dentro, encontró la uva caliente y la apretó. Oyó como Rysh gimió
complacido. El culo del hombre le apretó, estaba demasiado cerca como
para atormentarse de esta manera. Su amante necesitaba su polla enterrada
dentro de él. Sacó el dedo, cogió a Rysh por las caderas y se adentró en el
paraíso. El acogedor agujero de Rysh le abrazó con fuerza. Él lo saqueó,
follando a su amante duro. Su polla se calentó con el deseo abrumador de
llenar a su amigo. Entonces llegó la señal que necesitaba. El culo de Rysh
se estrechó alrededor de él, ordeñándole. Se metió hasta las bolas y cayó
con la sensación extrema.

Joel estaba acurrucado entre los brazos de ambos hombres. El


corazón le latía con fuerza. Nadie le había preparado para tanto placer. Él
quería más. Necesitaba volver a montar en esa ola de éxtasis. ¿Le querrían
ahora que su virginidad era el premio que buscaban? A su lado, Reef estiró
sus enromes músculos y abrió sus ojos azul oscuros. 119

¿Estás bien? Reef acarició la mejilla de Joel. Yo no fui muy


duro, ¿verdad?
Joel apretó la mejilla sobre la palma de Reef. Estoy en la gloria,
ambos sois maravillosos.

Rysh alzó la cabeza y miró de un hombre al otro. ¿Usarías nuestro


collar?

Eso me gustaría mucho.

Reef hizo una mueca. ¿Y qué hacemos con tu hermano? Voy a
tener bastantes problemas para conseguir que Rysh se mude de Depravity.
¿Tú hermano se enfadará contigo?

¿Quieres que me mude contigo Reef? Rysh se frotó la barbilla.

Sí, tengo una jodida mansión. Mete a uno de los gerentes en tu


apartamento. Os quiero a ti y a Joel en mi cama. Estoy harto de dormir
solo. Vamos chicos, estoy listo para comprometerme en una relación.

Joel parpadeó hacia los dos hombres. ¿Una sola una noche y ya
quieres que me mude contigo? ¿Estás seguro Reef?

Confiaste en mí y me diste un hermoso regalo. Estabas muy


caliente con la boca de Rysh sobre tu polla y conmigo enterrado hasta las
bolas en tu apretado culo. Quiero más y lo quiero más a menudo. Os
necesito a ambos en mi vida así que. ¿Qué coño? Nosotros queremos esto,
entonces, ¿por qué no tenerlo todas las noches? Vamos chicos, múdense 120
conmigo. Veamos donde nos lleva esto. Siempre me he preocupado por
Rysh, y tú, mi dulce cachorro, eres algo especial. Reef se encogió de
hombros.
—Tú también me quieres, ¿verdad?

Bueno, puedo estar en Depravity en cinco minutos desde tu casa.


Sí, estoy dentro. Rysh sonrió.

Joel miró del uno al otro. No tengo trabajo, Jackson me mantiene.
Tendré que conseguir un trabajo para mantenerme antes de salir de su
apartamento.

Ambos hombres se rieron. Los labios de Rysh se curvaron en una


sonrisa brillante. Estamos forrados; no necesitas trabajar, y si te aburres
siempre puedes echar una mano con el correo de mis fans. Vente ahora.
Quiero a alguien a quien amar, bueno, dos alguien. Encajamos juntos. Ya
has dicho que usarás nuestro collar, ese es solo un pequeño paso más.

Joel se humedeció los labios. Un pequeño paso. Él sonrió. Sí


Maestro.

Bueno, genial, más tarde puedes ir a casa y hacer las maletas.


Reef le alborotó el pelo. Entonces nosotros iremos de compras. ¡Te
quiero en el backstage de mis conciertos luciendo caliente!

121
CAPITULO QUINCE
Después de seis meses, su estrella del rock y Dom aún fascinaba a
Joel Moon. No era capaz de quitarle la vista de encima a su amante
mientras se movía por el escenario como seda líquida, cada músculo
ondulaba bajo su suave piel, dándoles a los fans cada onza de su atractivo
sexual. Su voz se elevaba sobre los gritos de la audiencia, alto y claro. Su
Dom había escrito la canción para Joel, y cada palabra se deslizaba sobre él
con fulgor. Se apoyó contra Rysh y sonrió. El delicioso hombre que estaba
detrás de él, trazó la costura de sus pantalones vaqueros con las manos y
agarró sus nalgas posesivamente, la calidez de la respiración de Rysh,
cepilló su mejilla.

Te quiero mucho. Rysh lo empujó contra su pecho. Ojalá


pudiera escribir una tierna canción de amor para demostrártelo.

Joel se inclinó hacia él y levantó la voz sobre la música. Ha sido


maravilloso que alguien escribiera para mí una canción como “trust”, pero
tú me demuestras que me amas con cada toque. Os quiero a los dos por
igual, no a uno más que al otro.

Estoy tan jodidamente celoso de vosotros. Kall se puso a su


lado. Es hermoso ver lo que tienen juntos.
122
Joel jadeó ante el agarre que Rysh tenía sobre su cintura. El tacto de
su maestro le recordó que el hombre que tenía a su lado era un Dom y que
pertenecía a Rysh y Reef.
Le besó como respuesta y regresó su mirada hacia el escenario.
Había insistido en que Rysh arrastrara al talentoso y prolífico compositor al
concierto con un sólo pensamientos en mente, el batería de Cold Heat, Seth
Mackay. Según lo que Reef le había dicho del hombre, Kall tenía un anhelo
por cachorros hermosos y Seth entraba en sus preferencias.

Él se había convertido en amigo íntimo de Seth, y como el hombre


ansiaba ser dominado, sus maestros le consideraron como un amigo
adecuado. El tímido batería necesitaba un empujón en la dirección correcta
para encontrar un Dom que le enseñara las delicias de la mazmorra. Seth
tenía problemas de confianza y se había cobijado en supequeño grupo de
amigos durante mucho tiempo. Él necesitaba un hombre y había usado
todos sus poderes de persuasión para convencer a sus maestros que
permitieran que Kall entrara en su santuario. El agarre de Rysh alrededor
de su cintura se deslizó hasta ahuecar de forma dominante su ingle. Se
movió contra la caricia del Dom en una descarada demanda y dirigió su
atención al último bis de la canción de Cold Heat. El ritmo primitivo de la
música fluía a través de las tablas del suelo y sacudió sus dientes.

No veo un collar, por lo que supongo que están los tres en una
relación menage. Kall alzó una ceja.

Sí, firmado, sellado y entregado el collar. El pelo negro y suave


de Rysh rozó la mejilla de Joel. Joel es nuestro chico así que tú tienes 123
que respetar eso. Yo no estuve de acuerdo en que te nos unieras entre
bastidores. Tengo mucha memoriaKall. Detrás de él, los músculos de
Rysh se tensaron.
—Pero como soy el dueño de Depravity supongo que es mi deber
pedirle a Reef que organice la presentación de Seth, y me asegure de que el
sub sabe todo sobre ti. Ahora, vete a la mierda hombre, y mantente alejado
de nuestro cachorro o sufrirás las consecuencias.

El concierto terminó con una lluvia de aplausos y estampidas de pies.


El escenario se oscureció y Joel bajó los escalones que llevaban a los
vestuarios. Rysh le retenía en un agarre apretado y doloroso con la
intención de mantenerle lejos del escenario. Hey, ¿intentas partirme la
espalda? ¿Qué pasa contigo?

Se giró, miró a Rysh y parpadeó sorprendido porque la expresión


normalmente tierna se había convertido en un “no jodas conmigo”. El tipo
de mirada que si un hombre viera le haría correr hacia las colinas. Él entró
en el vestidor de Reef y se giró para mirar a su Dom. Sacudido por la ira
que irradiaba Rysh, Joel rememoró los últimos minutos. ¿Qué diablos había
hecho para molestarle?

Reef irrumpió por la puerta, haciendo que la habitación se llenara de


su energía excitada. El entusiasmo colgaba de él como un manto. Joel
inhaló. La mezcla del olor del caliente almizcle masculino y el aroma de
Reef, llenó el cuarto. Respiró profundamente deleitándose con el sabor de
su Dom. Reef notó la tensión existente en la habitación. Cerró de golpe la
puerta y entornó la mirada
124
¿Qué está pasando?
Joel se encogió de hombros, y bajó la mirada al suelo, de forma
sumisa. Rysh obviamente tenía un problema y no iba a involucrarse. Joder,
ya era bastante malo el que Reef acabara de bajarse del escenario ya que le
llevaría horas deshacerse del subidón. Si ambos decidían volverse locos
con él por algo de lo que no tenía ni puta idea entonces estaría jodido.

Rysh rodó su inmenso hombro y levantó la barbilla. Kall. Ha sido


un error llevarlo al backstage. Señaló con el pulgar hacia Joel. No me
gusta como intenta simpatizar con nuestro chico. Conoce las malditas
reglas. No se puede confiar en él. Lo sé porque he tenido experiencias de
primera mano con ese gilipollas.

Lo conozco desde hace años Rysh. He escrito canciones con él, no
nos quitará a nuestro chico. Cogió una toalla y se limpió el sudor de la
frente. Sabe que le mataríamos.

Joel se sacudió con ira. Levantó la cabeza y miró a sus Doms.


Esperad un–jodido–minuto.

Ambas cabezas giraron bruscamente y dos pares de ojos se posaron


sobre él. Joel se agarró al borde de la mesa que estaba detrás y respiró
profundamente. ¿Cómo diablos iba a domar a los dos enojados toros? Se
mordió el labio inferior. Ya tenía su atención, y de hecho, esta no era el
tipo de atención que quería. Tal vez correría menos riesgos corriendo
125
delante del próximo autobús. Él se aclaró la garganta.
Voy a dejar a un lado el hecho de la retorcida idea de que piensas
que Kall puede robarme delante de vuestras narices. Pero, ¿no crees que yo
tendría algo que decir en todo ese asunto? Giró la cabeza para mostrarles
su mejor mirada altiva. ¿Qué te hace pensar que huiría con él? ¿No os he
dicho lo mucho que os amo y lo bien que me hacéis sentir? La confianza va
en ambos sentido. Él tragó saliva. —¿No han significado nada para ti los
últimos seis meses?

Se percató de que la expresión de Reef se ablandaba. ¡Ah! Por lo


menos había disipado su ira. El inspiró de forma exagerada. ¿No sabes lo
mucho que me ha dolido que pensaras que te dejaría para irme con él? Me
has exigido total confianza y rendición y tú… ninguno de vosotros confía
en mí. Se giró y cubrió la cara con las manos asegurándose de dejar caer
los hombros

Oh, Cristo. Reef agarró la parte de atrás del cuello de Joel y lo


masajeó. Yo…nosotros confiamos en ti. Ven aquí.Él lo arrastró hasta
sus brazos. —Rysh encontró a su último sub engañándole con Kall.

Joel se puso rígido. Quería fundirse en el abrazo de Reef, pero tenía


que exponer su punto. Aquí, de pie y ahora, debía utilizar su mejor
movimiento.

¿Y qué tiene que ver eso conmigo? ¿Es que esperas que yo pague
126
por la deslealtad de otro hombre? Dirigió su mirada hacia Rysh.
—Estoy usando tu collar, duermo en tu cama, y estoy con uno de
vosotros las veinticuatro horas siete días a la semana. Estoy enamorado de
ambos, tenemos sexo como locos y las escenas en la mazmorra están fuera
de este mundo. ¿O tal vez es que soy yo el que no te satisface? ¿Es eso?
¿Quieres que me vaya Rysh? ¿Ya has dejado de interesarte por mí?

Con un gemido, Rysh lo arrancó de los brazos de Reef y lo encajó


contra la pared como un hombre poseído, su Dom le rasgó la ropa y le bajó
los vaqueros. Él jadeó y se puso duro, amaba el juego áspero y Rysh era
malditamente bueno en eso. Fingió un sollozo de terror para ocultar la
sonrisa que se dibujaba en su boca. Oh, sí, Rysh disfrutaba asustándole, y si
eso era lo que excitaba a su hombre, el temblaría como un conejo
acorralado por un lobo. El hombre le tiró del pelo y le arrastró a un caliente
y largo beso. Con sus lenguas enredadas pudo probar el familiar sabor de
Rysh mezclado con el del embriagador burbon. ¡Oh, Dios! La fuerza de su
hombre palpitaba a través de él. Rysh estaba duro y listo para la acción,
pero un poco de estímulo no le haría daño. En un segundo tenía la cabeza
en alto y estaba mordisqueando el camino por la garganta de Rysh. Empujó
sus manos por debajo de la camiseta de Rysh buscando la sedosa y tierna
carne de su amante. Rhys gruñó y le apartó las manos. Giró y se quedó con
la mejilla apoyada contra la fría pared, temblando de anticipación. Rysh se
inclinó y apretó sus afilados dientes sobre el lóbulo de la oreja.

Vuélvete muchacho, te quiero ahora. Rysh le pateó las piernas 127


para separarlas. —Entrégame ese culo para mi placer. ¿A quién perteneces
cachorro?
A los Maestros Rysh y Reef, Señor.

Se inclinó, apretó las manos contra los paneles de las puertas y abrió
las piernas. Una gota de lubricante fresco manchó su agujero. Rysh le
agarró las caderas con sus manos calientes y le mordió con fuerza el
hombro. El gran hombre entró dentro de él con una fuerte y deliciosa
embestida, y le montó duro dándole placer. Él jadeó. El Dom le llenaba
hasta el límite. Detrás de él, escuchó una suave risita. El sonido de carne
contra carne llenó la habitación y sus rodillas temblaron por el éxtasis. Se
revolcó en el deleite que le daba la completa dominación de su amante.

¿Te gusta esto? Dime. Habla sucio para mí chico. Los afilados
dientes de Rysh se hundieron profundamente en su carne

Sí, Maestro, sabes que sí. Jódeme más duro…ahh. Haz que me
corra.

Rysh se deshizo de la venda con la que la ira le cegó y empujó sus


caderas, montando la ola de placer intenso. Este muchacho les pertenecía
en corazón y alma y debió pensar a través de su ira, en lugar de permitir
que los feos celos asomaran su cabeza estropeando las cosas. Él se metió en
profundidad y entonces Joel hizo ese suave sonido señalándole que su
amante estaba a punto de llegar al clímax. Golpeó el punto feliz y ellos se
corrieron juntos estrellándose en una tormenta de placer. No queriendo que
la experiencia terminar, salió de su amante. Sin aliento, giró a Joel y acercó 128

su boca para un largo y lento beso. Levantó la cabeza.


Nunca discutas con tu Maestro. Se quitó el condón y sonrió a
Reef. —¿Tienes algo que decir sobre la insolencia de nuestro chico?

Reef sonrió complacido. Oh, sí, ahora está desnudo y resbaladizo.


Métete en la ducha, tu otro Maestro necesita devoción. Él empujó a Joel
hacia la ducha. Deja que corra el agua muchacho, mientras decido un
castigo adecuado. Cerró la puerta y sonrió a Rysh

Entonces. ¿Qué pasó en realidad?

Rysh se subió los pantalones y se encontró con la inquisitiva mirada


de Reef. No estoy seguro. Kall intentó entablar una conversación con él
y vi rojo.

Confío en Joel igual que confío en ti. Reef le pasó el brazo por
los hombres y presionó un beso en su cuello. Somos estables. No nos
empujes lejos porque estés celoso. Él suspiró. Joel está en lo cierto,
Kall es perfecto para Seth, y seamos realistas, ver a Seth feliz hará que mi
vida mejore. Mordisqueó a Rysh a lo largo de su barbilla. Se me
ofrecen culos todos los días, pero tú confías en mí, ¿verdad?

Rysh suspiró y se pasó la mano por el pelo. Esto es nuevo para mí,
seis meses juntos aún es muy poco. Lo siento, la jodí y lo hice yo solito.
Entrecerró la mirada. Joel aún necesita un castigo en Depravity.
129
Todavía es un cachorro.

Claro, le daremos una probada del juego extremo. ¿La ducha es


suficientemente grande para los tres no?
Se apoyó en los brazos de Reef disfrutando del sólido músculo
contra él. El hombre inclinó la cabeza y él se fundió en la intensidad de
Reef. Le besó con fuerza, mordiéndole el labio inferior y cavando los dedos
en su húmedo pelo alborotado. Juntos, el sexo era peligroso, violento, pero
con Joel, se había convertido en puro placer. Arrancó su boca y miró la
expresión de Reef.

Sí, una ducha estará bien.

La puerta del cuarto de baño crujió y Joel les dirigió una mirada
inquisitiva. ¿Vais a llevarme a Depravity esta noche por lo de ahora?
Su cara palideció. ¿Para una escena de juego extremo? ¿Creéis que
estoy preparado?

Rysh miró a Joel, y una pequeña parte de él disfrutó por la forma en


que su cachorro dio un paso atrás. Su dulce sub se había dado cuenta de
que estaba profundamente enterrado en la mierda. ¿He dicho que
pudieras escuchar nuestra conversación muchacho?

N-no. Joel miró a Reef y se mordió el labio inferior. Lo siento


Maestros, creí que esto era una discusión familiar.

Hmm, has cometido tres infracciones. Reef levanto los dedos.


Una al hablar con otro Dom sin permiso, dos, al cuestionar nuestros
motivos. Si creemos que estás listo para el juego extremo, entonces es que 130
estás jodidamente listo. Y tres, al involucrarte en las discusiones de
Doms.Él giró sus hombros. —Sí, vamos a Depravity porque tus Doms
necesitan desahogarse y tú necesitas ser disciplinado, ¿no es así cachorro?
Sí, señor. Joel dejó caer las pestañas

Rysh quería abrazarle y hacer que todo mejorase, pero su cachorro


necesitaba una escena no un abrazo.

Mírame Joel. Él se enderezó y se reunió con la dubitativa


mirada de Joel. Aquí es donde el amor y la confianza entran en una
relación. Tú tienes la palabra segura y esperamos que la uses si las cosas se
nos van de las manos.

Te quiero muy mal cachorro, necesito verte extendido, atado y


esperando por mi flogger. Reef se aclaró la garganta. ¿Estamos bien?

Sí Maestro. Joel se humedeció el labio inferior. Nosotros


estamos muy bien.

131
CAPITULO DIECISEIS
Joel luchó con las correas apretadas de cuero que le ataban los
muslos y el pecho. Una sensación de temor hizo que se le levantaran los
pelos de la nuca y su palabra seguro flotó en sus labios esperando a brotar
tras el siguiente golpe del látigo de Rysh. Mierda, su Dom estaba enfadado.
Al principio, la emoción habitual de la experiencia de Reef atando el cuero
y dándole azotes le había dado dos increíbles orgasmos, pero Rysh había
caminado alrededor de él, apretando las ataduras y blasfemando. No había
visto nunca a su amanta tan furioso y miro a Reef en busca de ayuda.
Demonios si iba usar la palabra segura, él tenía la impresión que Rysh
presionaba para que lo hiciera. No había traicionado al idiota ni le había
faltado al respeto, pero obviamente había dañado la imagen de macho de
Rysh y tenía que pagar por ello.

No había sucedido nada. Ni el pedir ayuda ni el pedir que Rysh fuera


más suave. Reef se había cruzado de brazos y se había inclinado de forma
casual contra la pared con su apuesto rostro en una máscara de piedra. En la
ducha, él dedujo que ya habían discutido su castigo. Reef había demostrado
afecto, le había molestado, y luego había tomado el culo de Rysh delante de
él diciéndole que no merecía su polla. ¡Mierda! ¿El tener una conversación
con Kall había arruinado una magnífica relación? ¿Cómo era eso posible?

Le dolía todo y necesitaba polla. Reef había usado un plug anal o dos 132
con habilidad pero nada comparado con la plenitud caliente que ansiaba.
¿Se negarían a follarle ahora dejándole necesitado? Rysh podía usar el
follar como un castigo.
Él tenía el tamaño y la ira para hacerle daño si quisiera. Había
hablado con los subs que habían disfrutado del sexo brutal con su maestro.
El látigo golpeó el suelo y Rysh se movió por la habitación, sus Doms se
habían despojado de los chaps de cuero y ambos tenían erecciones. Joder,
ellos debían estar doloridos ahora. Se estremeció ante el fino bastón que
Rysh doblaba entre las manos ahora. No podía mover mucho más y untaba
la saliva alrededor de su boca reseca. Semen y sudor empapaban el banco
que estaba debajo de él. La temperatura de la mazmorra había aumentado
considerablemente en las últimas tres horas. Reef se movió hacia él y le
soltó las manos.

Extiende tu culo. Reef alcanzó por debajo y agarró sus bolas.


Voy a poner estas fuera del camino de Rysh. No quiero que te dañes
permanentemente.

Él obedeció, sus dedos resbalaron por el sudor de su humedecida


piel. Tal vez Rysh le jodiera ahora. Se relajó disfrutando de la forma en que
Reef acariciaba sus pelotas y esperaba que llegara al éxtasis.

Estíralas más. Rysh le obligó a separas las nalgas. Mantenlas


abiertas hasta que yo diga lo contrario.

Joel se tragó una réplica. Sus Maestros le habían dado órdenes de no


hablar. Ellos tampoco habían dicho nada, uno emitía instrucciones corta y
el otro le miraba. Oh, sí, ellos observaban sus reacciones ante todo. Él 133
clavó los dedos y retiró sus mejillas. El zumbido de dolor cegador de la
caña cortó profundamente su agujero. Jadeó. Cristo. Dos más le siguieron y
dejó caer sus mano jadeando.
Rysh deslizó el bastón entre las mejillas jugando con su culo como si
fuera un violín. Un profundo estallido de placer en su interior hizo que su
polla se llenara. Exhaló un suspiro y se acercó para reabrir su culo.

¿Dije que te permitía soltarte? No, jodidamente no. Rysh volvió


a golpear el tierno lugar. —Más ancho.

Reef se estremeció, el culo de su cachorro era purpura, las nalgas


marcadas por el látigo se entrecruzaban con los moretones. Había estado
observando la respiración de Joel en busca de cualquier tipo de angustia.
Joder, después de tal castigo el muchacho tenía una erección. El arte de
Rysh en el juego extremo, era justo eso, el extremo del sadismo. Necesitaba
traerle de vuelta a la realidad. Si empujaba a Joel demasiado lejos lo
perderían. Había notado la súplica en los ojos de su chico, pero como Dom,
quería oír esa palabra segura antes de arrastrar a Rysh lejos del muchacho y
poner el alto a la escena. No le gustaba que Rysh estuviera haciendo una
escena de rabia y había intentado calmarlo, pero el hombre quería sexo
duro y la jodida en el vestidor del backstage no había suavizado su negro
humor.

Folla su boca. Rysh le lanzó una sonrisa a Reef. Voy a joderle


duro

Él se movió hacia el frente del banco y acarició la cara de Joel. El


muchacho se humedeció los labios. Reef se giró,cogió una botella de agua 134

del banco y se la colocó en la boca. Bebe.


Joel bebió, ahogándose con las prisas y derramando agua por su
barbilla. El chico se quedó boquiabierto mientras que Rysh le follaba por
detrás. Reff miró fijamente al otro Dom, pero la mente de Rysh había
salido del edificio. Tenía esa mirada ausente que una escena extrema a
veces provocaba en un Dom. El banco se balanceó por la fuerza extrema de
la jodida, y el rostro de Joel palideció. Entrando en pánico, Reef ahuecó la
barbilla de Joel y le miró a los ojos. Mírame Joel

Joel quería gritar. ¡Demonios! Había querido que sus Doms le


follaran tan mal. Le dolían las pelotas. Pero esto. ¡Por el amor de Dios! El
dolor que arrancaba su culo le llevaba tan al borde del placer que no podía
respirar. El cuarto se enfocaba y desenfocaba. Inclinado sobre el banco,
sujetándose con sus rodillas, y las manos hacia atrás estirando su culo, se
sentía aturdido. Rysh se metía hasta las bolas, caliente, tan malditamente
caliente. Él quería gritar con cada retirada cuando de nuevo el dolor
caliente se introducía dentro de su culo torturado. Quería más y al mismo
tiempo quería que Rysh parase. Joder, había perdido la cabeza. En algún
lugar perdido entre la niebla, oyó a Reef decir su nombre. Se obligó a
concentrarse y reconoció la expresión preocupada de Reef.

Joel, mírame. Los dedos de Reef acariciaban sus mejillas.

Rysh golpeó sus caderas y entró con fuerza. El sonido de carne


golpeando carne llenó la habitación. El dolor/placer calentaba las bolas de
135
Joel. No podía respirar. Dios mío, su pene palpitaba muy cerca del clímax.
Él se estremeció, el calor se precipitó por su eje y cayó sobre el bode. El
dolor le rodeaba.
Rysh clavó sus afiladas uñas sobre las caderas desgarrando la carne.
El Dom no había terminado con él y le montó como un hombre poseído.
Levantó la mirada hacia el rostro de Reef. Maldición, él se desmayaría en
cualquier momento. Intentó formar palabras y sacó la adecuada por sus
hinchados labios. Rojo.

¡Joder! Reef sacó un cuchillo del banco y le cortó las


ataduras. Rysh, déjalo.

En un segundo dijo Rysh. —Casi estoy ahí.

Reef jadeó horrorizado, los ojos de Joel se había puesto en blanco. Él


oyó el sonido de satisfacción de Rysh cuando llegó a su orgasmo y miró a
su amante. Le has empujado demasiado lejos. ¡Maldita sea Rysh!

Despierta, él se corrió. Lo estaba disfrutando tanto como yo. Mira,


el chico tiene su palabra segura y la dijo después de que se derramara por
todo el banco no antes. Sí, le he montado duro. Él siempre tiene que pedir
más, esta noche lo empujé para ver cuáles eran sus límites. Su culo me
apretó fuerte, su clímax fue impresionante, confía en mí. Rysh se
abrochó sus pantalones. —Voy a tomar una ducha, estaré de vuelta para el
enfriamiento en el momento en que despierte. Levantó una oscura ceja.

—Si él no te quiere, lo haré yo. No voy a permitir que salgas de aquí


insatisfecho. 136
Reef le miró incrédulo. ¿Había juzgado mal la escena? ¿Había
disfrutado Joel de la escena después de todo? Él se trasladó al lavabo, lleno
un recipiente con agua tibia, luego cogió un trapo limpio y volvió junto a
Joel. Su chico estaba tumbado boca abajo sobre el banco. Le lavó la cara y
luego la parte posterior, dejándole la piel mojada para ayudar a calmar su
carne ardiente. Aliviado de notar que la respiración de Joel era normal, lo
levanto y llevó su flaco cuerpo al colchón en el suelo. Lo tumbó sobre su
espalda y fue a recoger el recipiente. Arrodillándose junto a su cachorro, le
lavó el semen del vientre y el pecho. Pasó el paño con cuidado alrededor
del paquete de Joel y se inclinó para besar la punta semidura de la polla de
su chico. Te amo Joel.

Sé que lo haces.

Él levantó la cabeza y se encontró con la sensual mirada de Joel.


La escena ha terminado. Asustaste la mierda fuera de mí. ¿Estás bien?

Sí Maestro, estoy bien, pero te necesito. Joel abrió los brazos.

—Por favor.

Reef se arrastró por el colchón y se metió en los brazos de Joel. Te


desmayaste por un momento. Te hemos empujado demasiado lejos.
Deberías descansar. Sonrió. Tu culo está morado, lo último que
necesitas es que te folle. Se inclinó para rozar los labios sobre la boca de 137
Joel.
El chico se aferró a él devolviéndole el beso con pasión. Utilizó su
lengua para follar la boca húmeda y caliente del sub. Maldita sea, su polla
dolía por follar este apretado culo. Joel levantó las rodillas y el muchacho
sacudió las caderas a modo de invitación. Él rompió el beso y miró la
inocente expresión de Joel. Estás muy dolorido, no quiero hacerte daño.

Un poco de dolor me hará más fuerte. Rysh me asustó esta noche,
pero me llevó a otro plano de la existencia. Monta este avión conmigo. Te
quiero, por favor, fóllame Maestro.

Él mordisqueó un sendero a lo largo de la barbilla de Joel. Dios, lo


quería. Suspiró y buscó un condón en un tazón al lado del colchón. Joel
abrió las rodillas y sonrió. El brillante agujero del chico se estiraba como
invitación. Aceptando, se arrastró entre las piernas de Joel. ¿Estás
seguro?

Ah-uh.

Cuidadosamente, el introdujo la punta de su polla mientras su


atención se centraba en la expresión de Joel. Él tembló por la necesidad de
montar al chico más duro y balanceó sus caderas con cuidado. El agujero
de Joel se cerró alrededor de él en un aterciopelado abrazo. ¿Todo bien?

Te sientes tan bien dentro de mí, tan caliente, estoy tan lleno.
Móntame duro Maestro. 138

Joder, le sorprendía como el culo de este chico lo mantenía tan


deliciosamente apretado. Le gustaba tomarlo de esta manera, sobre su
espalda.
Quería ver el clímax del cachorro, escuchar ese pequeño ruido
especial que hacía. Aumentó el ritmo y sonrió. El culo de Joel se
estremeció alrededor de su eje, su hermoso sub estaba a punto de alcanzar
el orgasmo. Quería correrse con él así que empujó profundamente. Joel
hizo ese sonido especial y tembló, empujándole hasta el borde. Jadeó y
cabalgó la ola de euforia erótica dentro de su amante. Cayó sobre Joel
agotado, sintió el lento palmeo de unas manos detrás de él y abrió un ojo.

Entonces nuestro muchacho quería más. Y no soy un idiota,


¿verdad? Rysh se estiró a su lado y acarició el cuello de Joel. ¿Aún me
quieres cachorro?

Oh, sí. Joel lamió un senderó a través de la boca de Rysh.


Pero dame tiempo a que me recupere antes de que vuelvas a volverte loco.

Sabes que lo haré. Te amo y quiero hacerte sentir bien.


¿Aprendiste algo o necesitas que Reef te enseñe otra lección? Rysh tomó
el culo de Reef y lo apretó.

Sé que me gusta el juego extremo, pero no voy a hablar con otro
Dom de nuevo. Prefiero que lo disfrutes también en lugar de estar enfadado
conmigo. La próxima vez, ¿podemos follar un poco más entre la disciplina?

¿Tú qué dices Reef? Rysh sonrió


139
Reef salió de Joel y se rio entre dientes. Hombre nuestro cachorro
es insaciable. Él agarro las bolas de Joel. Te vamos a joder todo lo que
quieras cuando quieras. Suspiró.
—Tú eres mi amor, el epítome de un sueño húmedo caminando, y
confía en mí, moriremos tratando de satisfacerte.

Amor, sexo caliente, confianza y fidelidad. Joel se estiró


lánguidamente. —Qué más podría querer un chico malo?

140
CAPITULO DIECISIETE
Kall no se podía creer la suerte que había tenido, el propietario del
Club Depravity le había organizado un encuentro con el sexy batería de
Cold Heat, y por nada menos, que el líder y cantante de la banda, Reef. Él
había fantaseado con el delicioso aspirante a sub desde la primera vez que
puso los ojos en Seth, y el descubrir que el chico era un vainilla le hacía la
boca agua.

Él siguió a Reef dentro del Club de BDSM Depravity y cruzó hasta


la planta principal, donde estaba la zona VIP de Doms. De alguna manera,
en el último concierto de Cold Heat, había alterado a Rysh. Joder, el
hombre nunca le había perdonado por hacer una escena con su sub, su sub
que no llevaba collar. ¡Demonios! Había pasado los últimos seis meses
fuera de la ciudad, ¿cómo se supone que debía saber que el chico estaba
con Rysh? No era como si hubiera forzado al sub para que hiciera la
escena, pero el hombre seguro que no lo había olvidado. Echó un vistazo a
la cabina y vio la cara pétrea de Rysh.

Así que, el hombre se había tomado la noche libre para proteger a su


cachorro de Kall. No tenía que ser un genio para notar la forma irritada en
la que el hombre se llevó a su chico del backstage después del concierto y
entonces hizo ese comentario cortante sobre que Joel le pertenecía. Oh, sí,
las acciones de Rysh demostraban que el hombre estaba perdidamente 141
enamorado de su chico. ¿Por qué guardarlo en secreto, a no ser que quisiera
mantener la participación de Reef fuera de los medios de comunicación?
Al igual que nadie en Depravity sabía del menage que tenía el
propietario con el cantante de rock Reef y su cachorro vainilla. Cristo,
como el cachorro había sobrevivido seis meses con esos animales le dejaba
asombrado. Él cuadró los hombros y fijó su atención en el asunto que tenía
entre manos. Su mirada recorrió la habitación y se posó en Seth, el
delicioso, sexy y guapo batería de Cold Heat.

Por supuesto Reef le había explicado que el cachorro no tenía


experiencia y necesitaba que le dieran un empujón. Este chico en particular
había estado en su radar desde hacía un tiempo, pero una invitación de Reef
Anderson para entrar en su santuario había arreglado todo. Su amigo
insistía en que el cachorro lo encontraba atractivo, lo cual había sido un
bono. Ahora él tenía que tomarse algo de tiempo y facilitarle el camino a su
potencial sub para introducirle en la escena. Su atención se desvió hacia
Rysh; su sub con collar estaba arrodillado desnudo a sus pies. El Dom
había decidido castigar a su chico por hablar con él. La humillación pública
había sido uno de los castigos del día elegidos por Rysh.

Seth se sentó en el asiento de enfrente vistiendo una camiseta corta


blanca y uno pantalones negros de cuero. Él levantó la barbilla y Kall se
reunió con la triste mirada del hombre. Se le estremeció el corazón. Oh
hombre, nunca había tenido el placer de mirar dentro de los expresivos ojos
marrones del cachorro, y ahora estaba tan cerca, Jesús, que casi podía
olerle. Se deslizó en la cabina y el olor almizclado del hombre mezclado 142
con el de limón envió a su libido por las nubes.¡Joder! Seth bajó la mirada,
sumisamente.
Seth, este es el Maestro Kall, ha acordado pasar algún tiempo esta
noche contigo, para ver si os ajustáis. Reef se deslizó en la cabina.
Sólo hablarás, te moverás y mearás cuando él te dé permiso. ¿Entendido?

Sí, Maestro Reef. Seth curvó los labios por las esquinas.

Kall le pasó la mano por la espalda a Seth. Los músculos del


cachorro se tensaron bajo su palma. Él extendió la otra mano por el vientre
del chico, disfrutando el tacto de la piel lisa y suave. No había sido
marcado con un flogger y tal vez era virgen. Cristo, el chico era un sueño
hecho realidad. El pensamiento puso su polla en acción. Se apoyó contra él
acorralando a Seth en un lado de la cabina. Esperó a ver como reaccionaba.
El corazón del cachorro bombeaba bajo su mano.Bueno, al menos está
respondiendo a mí.Él lamió un sendero por el cuello de Seth disfrutando
del sabor del aftershave a través de su lengua, y levantó la mano para
ahuecarle la barbilla. Quería un beso consentido como muestra de lo que el
cachorro tenía para ofrecer. Kall se movió lentamente marcando un sendero
por sus tiernos labios. El chico abrió los ojos y pudo ver el miedo y algo
más. ¿Deseo tal vez?

Le mordió el labio al chico y un suspiro se escapó de la boca de Seth.


Así que quería más que ser dominado, necesitaba el juego duro. Agarró un
puñado del pelo marrón claro con mechas de Seth, y le dio un tirón, luego
lo besó con fuerza bruta yle metió la lengua profundamente. Él demandó y 143
recibió respuesta. Seth se abrió para él y se encontró con cada golpe de su
lengua. El sabor a menta se derramó por sus papilas gustativas, el niño era
fresco y dulce.
Lo sondeó con su lengua y Seth se arqueó contra Kall agarrándose a
sus muslos hasta casi contusionarlos. Ya sin aliento, el separó sus bocas y
miró al cachorro. La expresión en la cara de Seth no dejaba duda alguna, él
lo deseaba.

144
CAPITULO DIECIOCHO
Nosotros nos vamos. Reef se puso en pie. Las bebidas corren
de mi cuenta.

Kall apenas percibió cuando el trío los dejó; su atención se centraba


en la hinchada boca de Seth a causa de sus mordidas y besos. Se aclaró la
garganta. Así que, ¿te gusta rudo chico? Ahora puedes contestar.

Supongo dijo Seth bajando la mirada.

Mírame. Kall le levantó la barbilla al cachorro con el dedo


trazando con la mirada la sonrojaba cara de Seth. Necesitamos algunas
reglas básicas, así que por ahora puedes hablarme libremente, ¿de acuerdo?

Seth parpadeó como un ciervo sumiso y asintió con sus mejillas


encendidas. Kall soltó un largo suspiro. Oh, mierda, no se podía creer que
acababa de besar al jodido batería de Cold Heat. Él apretó los muslos del
muchacho y el chico tembló bajo su toque. Necesito saber algunas cosas
sobre ti antes de que empecemos con esto. Lo primero, ¿eres virgen?

Bueno, nunca he tenido sexo anal si eso es lo que estás


preguntando. He besado mucho, he dado y disfrutado mamadas, pero no,
nunca he tenido sexo anal con nadie. Hace apenas unas semanas que soy
miembro de Depravity para ver como encajo. Me gusta este sitio, me siento 145
bien aquí. Seth se encogió de hombros. Pero sí, el juego áspero me
excita. Por eso hablé con Reef. Él pensó que me gustaría ser un sub.
Kall deslizó el brazo a su alrededor y lo acercó, esta vez Seth se
derritió contra él. Necesitaba tratar el asunto de forma firme pero suave
para conseguir iniciarle en las escenas. Hasta ahora, la reacción del
cachorro hacia él, parecía alentadora. Mordisqueó la barbilla del muchacho
y se encontró de nuevo con su boca. El deslizamiento de los largos dedos
de Seth a través de su pelo lo llevó a la locura. Él devastó su boca
desenfrenadamente, se deslizó entre los labios y se atiborró de la dulzura
húmeda a su disposición. Alcanzó la cremallera de Seth y liberó la erección
palpitante del cachorro.Palmeó el largo y caliente eje apretándolo, y luego
raspó su hendidura llorosa con la uña. En sus brazos, Seth tembló y luego
jadeó contra su boca. Una corrida caliente se derramó sobre sus dedos. Él
sonrió y empujó la lengua profundamente dentro de la melosa boca del
muchacho. Oh, sí, este cachorro lo haría genial.

Rompió el beso. ¿Dije que podías correrte?

No Maestro. Lo siento. Seth cogió un montón de servilletas de


papel y se las pasó a Kall.

Cogió las servilletas y se limpió las manos, la necesidad de lamerse


los dedos debería esperar a un momento más íntimo. Bájate los
pantalones hasta las rodillas y agáchate. Quiero que otros Doms vean tu
culo virgen. Mantén tus rodillas bien abiertas para que pueda verte en el
espejo. Él miró la pared reflectante que había bajo los asientos y que estaba 146
iluminada por diminutos focos. Sonrió, era otra de las mejoras hechas por
Rysh en la sección VIP de los Doms.
Ver a un sub mientras te hacía una mamada tenía que ser la mejor de
las vistas a lo que se le añadía también la perfecta vista del chico. Sonrió
admirando el reflejo de Seth. Oh, sí, justo así, mmm suave como el día
en que naciste. Me encanta que mis chicos sin pelos. ¿Te has blanqueado el
culo o es tu color natural? No, no me lo digas. Joder no puedo esperar para
pasar mi lengua por ese agujero apretado. Acarició el pelo en punta de
Seth. Mi cuero necesita limpiarse, y como dices que eres competente
dando mamadas, veamos si puedes satisfacer mi propio estándar
personal.Él se reclinó en la silla y se abrió los pantalones. Me gusta
que me laman los muslos a través del cuero, trabájalo bien y lento. Yo no
me corro tan fácilmente muchacho, y tendrás que trabajar duro para darme
placer. Rio entre dientes. Quítate completamente los pantalones. Ya te
diré cuando puedes volver a vestirte.

Seth inhaló la mezcla del rico aroma del cuero con el de almizcle
masculino de Kall y se quitó las botas. Los azulejos del suelo se apretaban
fríamente contra su culo. Se quitó los pantalones de cuero y los tiró sobre el
banco. Le latía el corazón a un ritmo inusual y sus sentidos se habían
intensificado. Joder, el aroma de Kall, su sabor y sus brutales besos le
habían hecho olvidar sus inhibiciones. Se arrastró hacia el Dom. Cristo este
hombre podía conseguir que olvidara hasta su nombre.

Él había tenido preocupaciones; esas pequeñas que podían hacer que


147
un hombre dudase de sus propias necesidades. Se había quedado alrededor
durante las reuniones con el director musical para poder observar a Kall.
Oh, sí, había estado encaprichado por él desde hacía tiempo.
Había sucedido durante el encuentro que tuvieron, Connor
Diamond, cantante de Hard Trash y Reef, entonces fue cuando dio a
conocer su interés por el BDSM. Connor le había preguntado directamente
por qué no se había unido a Depravity. Entonces Aiden, el bajista de Cold
Heat y sub de Connor le habían sometido al tercer grado, y para que se
quedasen tranquilos se había unido al Club de BDSM. En el momento que
entró en el lugar, el Dom de ojos dulces le había conducido a la locura.

Se arrastró más cerca de Kall. La desnudez no le preocupada,


diablos, viajando con Cold Heat, había visto y experimentado cada etapa de
la desnudez pública en un momento u otro. El desnudar su culo dentro de
Depravity lo consideraba caliente. Quería que los Doms admiraran su
paquete sin pelo y sus nueve pulgadas, de hecho, estaba orgulloso de su
físico. No estaba construido como la mayoría de los baterías. Sí, tenía un
poco de músculo, pero era una estructura similar a la de una chica con
pecho plano. Se dio cuenta de la expresión en la cara de Kall. Los ojos del
Dom se habían fijado en el reflejo de su trasero. Él separó las rodillas y lo
empujó más arriba para darle a su Dom la mejor vista posible. Kall gruñó
por lo bajo y deslizó sus fuertes dedos por el pelo de Seth. Un disparo de
dolor penetró en su cuero cabelludo, alertando a su sistema nervioso del
placer que estaba por llegar.

La única cosa que había perfeccionado en sus escapadas sexuales fue


a dar mamadas. Si Kall esperaba que la experiencia de un virgen era lo que 148
iba a satisfacerle, él estaba a punto de llevarse una sorpresa. Sacó la lengua
y la pasó por toda la longitud de los muslos cubiertos de cuero de Kall,
pasó por su ingle y se deslizó hacia abajo hasta el otro muslo.
El sabor del cuero se derramó sobre su lengua. Bajo el material, los
músculos de Kall se tensaron. Él abrió la parte delantera del pantalón del
hombre y se humedeció los labios al ver la gruesa polla del Dom. La larga
y ancha longitud se estremeció y una perla húmeda brilló en su punta.
Sacudió la lengua, ansioso por probar el sabor del hombre. Un sabor
almizclado y terroso con un toque a setas explotó en su boca. Jugó con la
punta de la polla, lamiendo y pellizcando la cabeza, y deleitándose con el
sabor picante del hombre.

La tomó lentamente, hasta llevarla a lo más profundo de su garganta


y la chupó. Retrocedió deliberadamente lento arrastrando los dientes por la
longitud sedosa hasta justo debajo de la capucha. Hizo una pausa, chupó
más y luego usó la lengua para hurgar en la ranura pegajosa. Se retiró del
duro eje y volvió a mordisquear la cabeza. Dentro de su boca, la vara de
Kall palpitaba y se sacudía, mientras mantenía los dedos agarrados en su
pelo. Oh, sí, su Dom estaba cerca. Lo tragó profundamente y lo mamó. Kall
sacudió las caderas y el líquido se derramó en su boca. Él gimió su
aprobación y tragó, moviendo la lengua a lo largo de la polla de su maestro
para extender el clímax. Entonces presionó un beso en la punta y levantó la
cabeza.

Kall le dirigió una mirada burlona. ¡Joder! ¿Cómo aprendiste a


hacer eso? Frotó pequeños círculos con sus pulgares sobre las mejillas de
Seth. Hiciste que mi cabeza girara 149

Él sonrió. ¿Te he complacido Maestro Kall?


—Oh, sí, pero, ¿yo te complazco a ti?

Él se inclinó de nuevo para besar la cabeza de la polla de Kall. Sí,


lo haces. Quiero probar algo más si tú estás dispuesto.

Yo voy a querer tu culo antes de que pasemos a las escenas en la


mazmorra. Kall lo arrastró hasta su regazo. Me gusta dominar, soy
duro, y el sexo está incluido en el paquete.

Él deslizó un brazo alrededor de la cintura de Kall. Yo también


quiero sexo, sólo necesitaba encontrar al chico adecuado.

De acuerdo, pues aquí van las reglas básicas. No tomo lo que no se
me ofrece, pero a veces uso el sexo como castigo. La primera vez voy a
intentar ser suave, pero soy una bestia, y tú eres tan jodidamente caliente.
Me gusta duro y rápido y usar juguetes. Me gusta azotar a mis chicos,
inmovilizarlos y joderlos fuerte. Tú tendrás una palabra segura. Aquí en
Depravity se usa normalmente la palabra “rojo”. ¿Te he asustado ya?.
Ahuecó el culo de Seth y lo apretó.

Se abrazó a Kall disfrutando del toque del cuero sobre su piel. No,
no estoy asustado, pero tengo una petición. Levantó la mirada. No me
gusta compartir.

Kall soltó un resoplido burlón. Bueno cachorro ni a mí. ¿Qué te


150
parece si nos largamos y vamos a mi casa? Quiero explorarte un poco
másPresionó besos sobre el cuello de Seth.
—Tengo unas esposas, tal vez quieras que te amarre a mi gran cama
cómoda y te lama entero. Soy muy partidario de las pelotas sin peloBesó
a Seth en la esquina de la boca. —Entonces si quieres te joderé, y si no,
montaré esa dulce boca. De una forma u otra haré que te corras durante
toda la noche.

Kall rodeó el culo de Seth con sus dedos calientes y el calor subió
por su eje. Seth gimió y se reunió con el hombre para un intenso beso. El
digito se introdujo en su interior y tembló de deseo. Oh, Dios sí. Él retiró su
boca y suspiró. Eso suena como el cielo. Debo decirle a Joel que me voy
o se preocupará.

Nah, Joel no bajará hasta mañana. Rysh está como loco y ha


planeado una larga escena. Está enfadado porque su chico me habló sin
permiso. Es una cosa de Dom.

Seth tragó saliva, Jesús, tenía que hablar con Doms todo el tiempo.

Yo tengo que hablar con Doms. ¿Eso va a ser un problema?

Puedes hablar con los chicos de la banda en la que trabajas, pero


no fuera, como por ejemplo aquí. No te permitiré hablar con otros Doms.
Es irrespetuoso y Joel debió haberlo sabido mejor. Él recordará la escena
que va a hacer esta noche con Rysh y Reef, si se trata de algo parecido a lo
que hizo con Brian después de que el sub estuviera conmigo. Suspiró. 151
—Rysh actúa como un demonio en las escenas extremas. Él hace que
yo parezca un manso corderito. Para ser honestos, ha estado reprimiéndose
con Joel, facilitándole la entrada a su mundo. Pero esta noche no. Por lo
que he oído, esta noche es la graduación de Joel. Él frotó la espalda de
Seth. No hablemos más sobre ellos, vístete. Estoy hambriento por
probarte.

152
CAPITULO DIECINUEVE
Seth llamó al servicio de limusinas para que se reuniera con ellos en
la puerta de Depravity. Ninguno de sus amigos conducía hasta el club, los
fans a menudo les veían llegar y esperaban por sus coches. Él siguió a Kall
afuera y una vez dentro del coche, escaparon rápido a través de la
oscuridad. Se mordió el labio inferior. Su atracción por Kall no le había
sorprendido ya que había estado encaprichado con él, pero el filin entre los
dos era increíble. Ir al apartamento de otro hombre no era algo que hubiera
querido hacer en una primera cita, pero bueno, Kall estaba en el negocio. A
ninguno de los dos les interesaba un escándalo en los medios de
comunicación. Reef había trabajado con Kall y eran amigos. ¿Qué podría
pasar? Él se reprendió mentalmente. Después de todo era un hombre
adulto, no un niño. Quería tener relaciones sexuales y Kall tenía todo lo que
buscaba en un Dom. Dom. Cristo, había encontrado un Dom dispuesto a
tomar a un virgen vainilla. ¿Qué tan bueno era eso?

Él suspiró. Kall le acarició el muslo con su mano grande, y con la


otra le acariciaba la parte de atrás del cuello. Se fundió en los brazos del
hombre e inhaló. El aroma del Dom le intoxicaba, era como si hubiera
estado toda la vida esperando por este hombre. Kall inclinó la cabeza y
cepilló sus cálidos y húmedos labios sobre su boca. Se abrió para él y
chupo la lengua que le sondeaba regodeándose en el sabor de su Dom.
153
Quería arrancarle la ropa y lamerle entero.
Necesitaba demostrarle al hombre que no era inexperto y que quería
el tipo de sexo que sólo un Dom podría proporcionar. Gimió contra la boca
de Kall y el Dom se rio entre dientes.

Te tomaré aquí, en la parte de atrás del coche, si no tienes cuidado.


Kall agarró las bolas de Seth. Yo quiero que recuerdes tu primera vez
conmigo, quiero que lo disfrutes y vuelvas a por más. Tomó su boca con
un demandante beso.

La limusina se deslizó en un parking subterráneo y paró delante de


un conjunto de ascensores con puertas color plata. Kall rompió el beso y
sonrió maliciosamente. Ahora ya no tienes escapatoria, te tengo en mi
guarida. Él salió fuera del coche y utilizó una tarjeta para entrar al
ascensor. Vivo en el ático.

Seth se recolocó el paquete y lo siguió. Entonces se giró hacia el


conductor. Llamaré cuando esté listo para irme. Toma nota de donde
estoy, yo no tengo ni idea. Le dijo y siguió a Kall dentro del ascensor.

Sí, señor. Él tocó su gorra y volvió a subir al coche.

El ascensor tiene video vigilancia con voz e imágenes. Kall se


inclinó contra la pared más lejana y cruzó los brazos sobre el pecho.
Estoy seguro que los chicos de la sala de control están corriéndose en sus
pantalones por verte aquí. 154

Seth se encogió de hombros. Reef es el guapo, yo sólo soy el


batería.
Y compositor. Reff me dijo que habías escrito algunas canciones
con él.

Claro, también toco la guitarra y el piano. Escribo canciones para


ocupar mi tiempo durante los conciertos. No es como si pudiera salir a la
bolera o algo así.

El ascensor se detuvo y las puertas color plata se abrieron en un


vestíbulo. Dos guardias saludaron a Kall y se apartaron para que pudiera
marcar un código en un teclado. Seth frunció el ceño. ¿Por qué Kall
necesitaba tanta seguridad? Él era un compositor no el Presidente. Seth le
siguió dentro de un opulento apartamento y se quedó mirando la vista de la
ciudad. Reconoció el área; este edificio estaba cerca del río, y no muy lejos
de donde Reef vivía con Rysh y Joel. Bonito lugar, pero, ¿por qué
necesitas todo esa seguridad?

Por ti. Hice una llamada antes de irnos para asegurarme de que
ninguno de tus fans nos siguiera. Kall se quitó la camiseta sin mangas y
luego las botas. —Ahora muchacho cierra la boca y desnúdate. Él se
desabrochó los pantalones y los bajó por sus musculosos muslos. —Quiero
ver piel, ¡ahora!

Un escalofrío de anticipación se deslizó por su espina dorsal. Dejó


caer su mirada de forma sumisa y se quitó las botas. Quería que su forma
155
de desnudarse fuera lo más tentadora posible por lo que retiró su camiseta
lentamente. Le dio la espalda y deslizó sus pantalones de cuero
inclinándose para darle a Kall un vistazo de primera clase de su culo
desnudo.
Había trabajado su físico, su culo era apretado y musculoso, y no
tenía ni una onza de grasa corporal extra. Dudaba que alguna vez la tuviera
con la cantidad de ejercicio que suponía el subirse a los escenarios tres o
cuatro veces por semana.

Con una mirada felina, Kall se acercó hasta él con la suave alfombra
de felpa amortiguando sus pasos, pero no el sonido de su pesada
respiración. Se quitó sus apretados pantalones de cuero por los pies,
levantando uno cada vez y dándole a su Maestro un asiento de primera fila
de sus atributos sin pelo. Él se enderezó poco a poco, estirando su cuerpo
en la sala de estar sin paredes interiores13. Situada frente una pared con
espejos, una gran y lujosa silla de cuero captó su atención. Sobre el costoso
cuero, Kall había extendido una toalla de baño azul. La toalla parecía fuera
de lugar en el prístino apartamento del hombre. Toda extensión se parecía a
una casa de muestra.

Una ola de respiración húmeda y sofocada sopló en su nuca. Su piel


se estremeció y el ritmó cardíaco le subió. Kall apretó su musculoso pecho
contra su espalda y envolvió sus fuertes brazos alrededor de él para
apretarle los pezones. Con las manos clavadas a sus costados, la picadura
infringida a sus pezones hizo que su polla se llenara tan rápidamente que su
cabeza giró. Gimió y Kall rio entre dientes enterrando su dura longitud en
la hendidura de sus nalgas. Él tembló expectante. El eje del hombre se
deslizaba entre sus nalgas para atormentar a su necesitado agujero. 156

13
concepto abierto
Eres tan jodidamente caliente. Kall pasó las manos por el pecho
de Seth y le acarició el vientre. Así que estás listo para ser jodido, pero
primero necesitas algún tipo de preparación al estilo Kall. Lo giró en sus
brazos. Me gusta besarte; tienes una suave y deliciosa boca. Inclinó la
cabeza y le mordisqueó los labios. —Pero primero cachorro, necesito
marcar tu carne. Sólo una muestra de mi castigo y luego vamos a probar el
jugar con tu culo, y si eres un muy buen cachorro, voy a joderte.

Seth se humedeció los labios, y la atención de Kall se centró en su


boca. Él tragó saliva con dificultad. Los besos de su Maestro le volvían
loco. Finalmente había encontrado un tipo que le gustaba lo suficiente
como para darle también su culo. De hecho deseaba mucho más de Kall.
Levantó los ojos y se encontró con la ardiente mirada del Dom. El hombre
le miraba por debajo de sus párpados medio cerrados y en sus ojos se veía
claramente sus intenciones. Seth sonrió. Me gustaría eso Maestro.

Kall, con la mirada entrecerrada, cerró la gran mano alrededor de la


polla de Seth. ¿Te di permiso para hablar? Las únicas palabras que
deseo que salgan de tus labios son tu palabra segura “rojo” o fóllame
Maestro. ¿Está claro cachorro?

Él asintió. La manó alrededor de su eje se apretó y Kall le condujo


hacia la gran silla de cuero adornada con la toalla azul. Su pene se hinchó
en la mano de su Maestro y derramó pre-semen. Miró fijamente el 157
apéndice. ¿La gota pegajosa que se derramaba sobre su pulgar ofendería a
su Maestro? La áspera yema del hombre rodeó la punta y él jadeó mientras
Kall se inclinaba para lamer la húmeda cabeza de la polla y limpiarla.
Tienes un sabor tan dulce. Kall retiró la mano. Súbete a la
silla con la cara hacia el respaldo, luego extiende las rodillas y apóyalas en
los reposabrazos. He puesto la silla al lado de la pared para que puedas
mirarme y así yo ver tu expresión cuando te folle, y te voy follar cachorro.
He inclinado el espejo para que puedas ver mi polla deslizarse dentro de
ese culito apretado. Así podré ver tu reacción, y cuando te corras, también
podré verlo.

Seth respiró hondo y se subió a la silla apoyando su mejilla en el


respaldo. Al estar desnudo y expuesto para que su Maestro le viera, una ola
de vulnerabilidad le golpeó. Kall no le había atado o restringido de alguna
forma, pero joder, con las rodillas tan extendidas y su culo abierto, se
había quedado a merced de Kall. Miró fijamente sobre el respaldo, el
reflejo en el espejo. Kall se había alejado y ahora regresaba con una tira de
condones y un bote de lubricante. Ahora ya no había vuelta atrás.

Kall admiró el cuerpo delgado que se había expuesto tan


deliciosamente delante de él. La columna vertebral del sub estaba enfrente
y podía seguirla hasta la hendidura de sus nalgas. Quería extenderlo más y
ver su apretado agujero. Echando mano de su paciencia, en lugar de eso,
pasó la mano por la espalda de Seth hasta su musculoso cuello. La piel se
deslizaba suavemente bajo su palma. Pasó ambas manos desde la espalda
hasta su pecho pellizcando los pezones de su cachorro, luego, se movió
hacia abajo para acariciarle las bolas. Hombre, este cachorro sabía bien y 158
no podía esperar para saquear su virgen culo. Él se paró frente al espejo y
levantó una mano.
Los músculos de Seth se estremecieron antes de dar la primera de las
seis cachetadas. La carne rosada y las marcas de sus dedos se destacaban
como llamas. Él se inclinó y lamió la piel ruborizada, se enderezó y
entonces entregó otros seis duros golpes moviéndose hacia abajo, por lo
que los cuatro últimos aterrizaron en el punto dulce entre el muslo y las
nalgas. Se puso detrás de Seth, el chico había gemido pero mantenía los
ojos abiertos y fijos en él. Abrió las nalgas del cachorro de par en par, se
inclinó, y uso su lengua para violar el arrugado agujero. Lamió y empujó la
punta contra el apretado anillo mientras su mirada nunca abandonaba el
rostro enrojecido de Seth. Su chico se echó hacia atrás deseando más y él
sonrió. Oh, sí, a su cachorro sin duda le gustaba sus atenciones.

Se acomodó y luego buscó el lubricante. Colocó su muñeca sobre el


culo de Seth, y usando su pulgar, masajeó el músculo apretado. Hizo un
círculo y luego una cachetada, entonces otro círculo y otra cachetada
llegaron. La transpiración refulgió por la espalda de Seth. Su chico
necesitaba que estuviera dentro de él. Empujó el pulgar dentro del estrecho
pasadizo. ¿Qué deseas cachorro?

Seth se empujó hacia atrás contra el pulgar de su Maestro. Mierda, se


correría pronto si Kall continuaba jugando con su culo. Dios mío, no tenía
ni idea lo delicioso que se sentía el tener a alguien lamiendo su agujero. Se
reunió con la mirada de Kall en el espejo y tembló. Quiero que me folles
159
Buen chico. Kall derramó cantidades exorbitantes de lubricante
en su polla.Mira, pero recuerda que tienes que relajarte.
Hubo una presión contra su agujero y se obligó a relajar los
músculos. Su corazón latía contra su pecho y quería cerrar los ojos. Su
carne caliente, tan sensible después de las nalgadas, se estremeció bajo los
fuertes dedos de su Maestro y respiró profundamente. Hubo una explosión
de dolor tan intensa que se le aguaron los ojos por lo que sufría su culo. Él
vaciló y removió las rodillas

No te jodidamente muevas. Soy grande, lo sé, pero puedes


tomarme. Mira que hermoso está tu culo envuelto alrededor de mi polla.
Empujó sus caderas. Sí, empújate hacia atrás. Buen chico, sólo unas
pocas pulgadas más.

Él parpadeó las lágrimas y fijo la atención en su Maestro. Dios mío,


tenía un asiento en primera fila, de su jodida en glorioso tecnicolor. El
agujero de su trasero púrpura abrazó el masivo eje de Kall mientras la vara
brillante se deslizaba pulgada tras pulgada dentro de él. Estaba tan estirado
que seguramente se dividiría en dos. Jadeó en un esfuerzo para no entrar en
pánico y gritar por toda la habitación. El calor de la polla de Kall le
sorprendió. La vara se metió más fácil y profundamente rozando sus
terminaciones nerviosas. Pronto la carne caliente del estómago de Kall le
golpeó el culo y miró a su Maestro a la cara para ver su triunfante sonrisa.

Ya estoy metido hasta las bolas, ahora llega lo divertido. Voy a
balancear mis caderas hasta que te acostumbres a que esté enterrado dentro 160
de ti. Kall empujó más profundo, se retiró hacia atrás, y empujó dentro
otra vez.
Oh, Dios mío. Una ola de sensaciones tintinearon a través de su culo
e incendiaron sus bolas y un hormigueo se instaló en la punta de su polla.
El placer aumentaba con cada ligero movimientos y se agarró a la parte de
atrás de la silla. La ligera picadura, mezclada con el intenso placer en su
culo, le hicieron jadear.

Oh, sí, al cachorro le gusta como toco su uva del placer ¿Estás
listo para ir al paraíso? Kall giró las caderas. Esta vez voy a ser suave,
pero más tarde me pedirás que te lo haga rápido y duro. Ahora dime otra
vez, dulce cachorro, ¿qué quieres que te haga tu Maestro?

Él tembló y la presión en su culo aumentó. Su Maestro se había


empujado profundamente. Las sensaciones eran tan asombrosas que quería
gritar. Fóllame, por favor, Maestro.

Kall clavó sus fuertes dedos en la cadera de Seth y lo montó. El


sonido de carne contra carné llenó el cuarto. Llamas de profunda lujuria le
llenaron, empujó hacia atrás para encontrarse con cada empuje de su
Maestro, disfrutando del dolor mezclado con la dicha que provocaba cada
embestida. Le temblaban las piernas y el calor acumulado en las bolas se
desplazaba por su eje. La habitación entraba y salía de enfoque, y manchas
blancas brillaron ante sus ojos.

Mírame cachorro. La voz de Kall cortó la bruma como si fuera


161
un látigo.Quiero que me mires cuando te corras.
Gritó incapaz de controlar las emociones que clamaban a través de
él. Enfocó su mirada en Kall y cayó en el olvido. Le temblaban las piernas.
Detrás de él, Kall gimió y otra explosión de calor llenó su culo. Su Maestro
se dejó caer y descansó su húmeda mejilla sobre la espina dorsal. Él miró al
espejo y captó la brillante sonrisa de Kall.

¿Estás bien? dijo Kall mientras besaba a Seth en la espalda.

Él parpadeó y trató de evaluar la masa de gelatina que ahora era su


cuerpo. No estoy seguro.

Muchos vírgenes no se corren la primera vez. Normalmente el


dolor empaña el sexo durante algún tiempo. Kall se escabulló fuera de él
y le limpió. Déjame que te ayude a ducharte.

Usó uno de los fuertes brazos de Kall para apoyarse cuando se


tambaleó en la ducha. Kall lo mantuvo cerca de su fuerte pecho y lo
enjabonó como si fuera un bebé mientras él se inclinaba contra su cuerpo.
Una mezcla de emociones jugaban sobre él. Joder, sólo hacía un par de
horas que le había conocido y ya le había dado su culo. Su cara se puso
caliente. Kall debía pensar que estaba desesperado. El Dom, como si
hubiera leído sus pensamientos, le levanto la barbilla.

¿No tendrás remordimientos? Kall rozó un beso sobre sus


labios. Sabes que he estado deseándote desde hace siglos. 162
Seth parpadeó y respiró profundamente. Yo también, pero he
estado dudando. Ya sabes cómo es esto, los chico quieren un jodido trofeo.
Reef insistió en que tú eras diferente. Dijo que estabas buscando ponerle el
collar a un sub y una relación.

Creo que he encontrado a mi sub. Encajamos muy bien. No es


como si realmente fuéramos unos extraños, llevo estando alrededor desde
hace algún tiempo. Pero lo más importante. ¿Te hago sentir bien? ¿Te
atraigo y confías lo suficiente como para dar el siguiente paso y hacer una
escena conmigo?

Seth ahuecó la cabeza de Kall y lamió las gotitas de agua de los


labios de su Dom. Te he deseado desde hace algún tiempo, pero no
quería empezar nada contigo porque yo me muevo mucho con las giras.
Quiero un amante a tiempo completo. ¿Qué si me haces sentir bien?
Diablos sí. De hecho te quiero de nuevo ahora mismo. Estoy listo para
aprender, Maestro.

Soy compositor. Puedo trabajar desde cualquier lugar y he estado


de gira con algunas bandas. Yo sé que Reef está inspirado después de sus
conciertos y a menudo trabajamos juntos. Iré de gira contigo y te joderé
desesperadamente cada noche. Cuando estemos en casa, te llevaré a la
mazmorra y te haré suplicar. Así que, ¿qué me dices? Kall sonrió. De
todos modos, ahora que he tomado tu virginidad tengo que protegerte de 163
otros Doms que estén buscando algo de acción dulce con un
cachorroAcarició a Seth en el cuello.
—Di que sí. Sería un honor el que llevaras mi collar y permíteme que
te enseñe a disfrutar de todas mis malvadas costumbres.

Seth inclinó la cabeza hacia atrás y se echó a reír. Joder, acababa de


conocer al chico de sus sueños. Él había encontrado un Dom para explorar
las mazmorras de Depravity y un amante para sus giras. ¿Qué tan dulce era
eso? Frotó su erección contra el muslo de Kall y se estremeció por la
anticipación de cuál sería la próxima lección de su delicioso Dom, entonces
se encontró con la mirada de Kall. Sí.

164
CAPITULO VEINTE
Seis meses después

Eso ha sido todo. Jordy miró a través del cristal con una amplia
sonrisa

Seth levantó la vista de su guitarra y miró al chico guapo de pelo


verde, del cuarto de controles. Gracias a Dios, me alegro de haber podido
descargar las pista para Reef. ¿Crees que alguien notará que el que tocaba
era yo? Quiero decir, Reef es difícil de imitar.

Nah, lo hiciste genial. ¿Cómo se rompió el dedo?dijo Jordy


apoyándose en la puerta abierta.

Seth se encontró con la mirada del otro hombre y sonrió. Supongo


que el flogger se deslizó. Sé que Joel se está volviendo loco por esto, a él le
gusta… ah, que sus Doms le presten toda su atención.

–Ah, bueno todavía tiene a Rysh.

La oscuridad inundaba las ventanas y rodeaba todo el estudio, sólo el


brillo del aparcamiento era visible a través de las tinieblas del invierno. ¿A
dónde se había ido el día?

Dando un sorbo al café tibio, observó la lista de nuevas canciones 165


que había escrito meticulosamente. Suspiró cansado; había trabajado con
Reef desde siempre.
Nadie de la banda podía hacer este tedioso trabajo, excepto él.
¿Quién más podría descifrar la escritura de Reef?¿Por qué había elegido
esta carrera? En realidad, él amaba cada jodido minuto de esto. Enfocando
sus cansados ojos en las hojas, se quitó la guitarra, recogió las canciones y
las puso en orden. Necesitaba quedarse un poco más y usar la
fotocopiadora de la oficina. De ninguna manera iba a escribir más copias a
mano. Después de todo no tenía ningún motivo para volver a casa, una casa
fría y vacía. Kall, su súper delicioso Dom, se había ido a otro estado para
firmar con otra banda. Reprimiendo un bostezo, sacudió la mano hacia la
puerta.

Vete a casa. Aún tengo un montón de trabajo por hacer. No te


preocupes, yo cierro. Esta noche es tu cita caliente con Chad, ¿no?

Sí, estoy loco por él. Me pone caliente y duro. ¿Eso es algo bueno
verdad? Vamos a ese nuevo club en la calle Boland. Me llevará a cenar
primero. Jordy se sonrojó y metió ambas manos en los bolsillos
delanteros de sus vaqueros. Sabes, creo que podría ser mi único.

La depresión levantó su fea cabeza. Él anhelaba sentirse “caliente y


duro” en este momento. Señor, su cuerpo dolía por una escena larga y una
dura jodida. Más que nada anhelaba un cálido abrazo, el roce de piel y la
alegría de despertar con su amante. ¿Cuántas noches había perdido sin el
cuerpo cálido y duro de Kall enrollado alrededor de él? Cristo, echaba de 166
menos la dominación, el toque de su amante, estallar en un climax increíble
envuelto en sus experimentados brazos.
El confort de su aroma hacía tiempo que había abandonado su cama.
Gimió ante el deseo de sostener a su Dom y nunca dejarle ir.

¿Estás bien Seth? Jordy posó su reconfortante mano sobre el


brazo.

Empujando la imagen de su delicioso Dom duro y desnudo, con el


flogger en la mano, al fondo de su mente, Seth asintió. Por supuesto que
sí. Me siento un poco deprimido, eso es todo. De verdad extraño a Kall.
Pensé que a estas horas ya me habría llamado o por lo menos me habría
dejado un mensaje. Sacó el móvil del bolsillo y lo revisó por centésima
vez, el “no hay nuevos mensajes” parpadeó en él al igual que la señal de
“no pasar” de un cruce. Él había encontrado otro Sub, estaba seguro.
Joder. ¿Por qué se sentía tan malditamente perdido y abandonado?

Creo que apesta, dejándote solo el día de tu cumpleaños. ¿Cuándo


se supone que vuelva? Jordy apoyó la cadera en el marco de la puerta.

Él miró la imagen en su teléfono. Kall le sonreía con sus suaves ojos


verde musgo y su cabello despeinado y oscuro lanzado en varias
direcciones. Pasando un dedo por la mejilla de su Dom, suspiró. Demonios
le echo de menos. Se veía tan sexy con el cuello de su cazadora de cuero
levantado, y la nieve cubriéndole su pelo y hombros. Sufría por él.
Arrastrando su mirada de la fotografía, sonrío. Debería estar en casa
167
pronto, la última vez que llamó dijo que le quedaba una banda por visitar y
algunos contratos que organizar. Suspiró.
—Las negociaciones toman tiempo, tú lo sabes, los abogados están
involucrados, y a veces duran días o semanas. Ser un manager de bandas de
rock no es un trabajo de nueve a cinco, pero no tenía ni idea de cuantos días
estaría ausente. Sonrió. Me siento solo, eso es todo. No pienso ir a
nuestro club sin él, así que, me mantengo ocupado.

Bueno, eso es lo que obtienes por involucrarte con un manager.


Yo me conformaría con un chico malo de barrio. Jordy soltó una sonrisa.

Oh, tengo un chico malo. Otra imagen de Kall brilló en su mente,


estaba pecaminosamente desnudo a excepción de sus chaps de cuero. Sus
largos dedos atándole a la cama, y la expresión dominante, que él vestía
para sus fantasías eróticas. Me hace feliz.

Ah, eh, bueno, entonces me voy. Os veré a ti y a los chicos el


lunes.

Seth observó a Jordy dirigirse hacia la puerta. Se giró para dar un


adiós amistoso con la mano, y desapareció en la oscuridad, por el pasillo.
Miró alrededor del estudio. Cold Heat había comprado esta lugar hace
cuatro años. Estaba idealmente situado, escondido de los fans en un calle
sin salida, en una zona industrial degradada. El viejo edificio insonorizado
parecía perfecto durante el día, pero durante la noche le daba escalofríos la
mayor parte del tiempo. El zumbido de las cámaras de seguridad era el
168
único sonido aparte de su propia respiración. Recogió el montón de
canciones y entró en la oficina.
Puso la pila al lado de la fotocopiadora y suspiró, si sólo la banda
pudiera confiar en alguien más para hacer este trabajo, pero después de que
dos canciones desaparecieran la última vez, había decidido hacer el maldito
trabajo él mismo. Seth se inclinó sobre el papeleo revisando nuevamente
cada nota.

A medida que las horas pasaban, la absoluta tranquilidad del estudio


le rodeaba, trayendo consigo una aguda sensación de soledad. No le
gustaba estar solo en este edificio después de oscurecer. La estructura de
madera, construida hacía más de cien años, crujía como los huesos de una
anciana. Los sonidos se intensificaban en el silencio. Sombras fantasmales
envolvían la cabina de sonido. ¿Jordy comprobó que todos se hubieran
ido?

Él miró por la ventana hacia la fila de cabinas vacías. Cualquier


sombra podría ocultar a un intruso. El viento bufaba contra el edificio,
estrellando las ramas desnudas del viejo roble contra el canal metálico
emitiendo un largo chirrido. Un escalofrío le bajó por la espalda y su
corazón tronó en sus oídos. El teléfono de la oficina sonó. Seth saltó del
susto, tirando su taza de café al suelo. Oh, por el amor de Dios, estoy
actuando como una chica.

Se acercó al teléfono y apretó el auricular sobre su oreja.


Springfield Crematorium. ¿Cómo puedo ayudarle en sus horas de
169
necesidad?

Soy yo, chico.


El corazón de Seth se estremeció ante el sonido de la voz melosa de
Kall. ¿Kall?

El único… ¿Cuánto tiempo vas a estar ahí?

Su corazón retozó de excitación. ¿Estás en casa?

Sí, llegué hace una hora. Es tarde. Creí que estarías en casa para
darme la bienvenida. Se rio entre dientes. Y que tal vez no estarías
usando nada más que hilo dental.

Él frunció el ceño y retorció el cable de teléfono con los dedos. Lo


siento Maestro, si hubiera sabido que ibas a llegar a casa hoy, me habría
ido temprano. He estado trabajando hasta tarde toda la semana para
ponerme al día con la nueva remesa de música.

Trabajas demasiado muchacho. Mira, quiero que esta noche sea


especial. ¿Qué tal si pedimos una pizza y saco un par de botellas de vino
tinto?

Eso suena maravilloso. Terminaré en unos treinta minutos.

No puedes pedirle a Jordy que lo termine que lo termine por ti…
te echo de menos… te quiero de rodillas suplicando que te folle.

Seth se revolvió en su silla. Una llamarada de crepitante deseo se


170
extendió por sus bolas. Su voz tembló. Él ya se fue. No me queda
mucho. Estaré en casa en media hora. Yo también te echo mucho de
menos. Dios tu voz hace que me caliente. Seth deslizó otra hoja de
canciones en la fotocopiadora, presionó el botón y se recostó en la silla.

Escuchó su melosa y suave risa. El hombre conocía su pasión por los


juegos de rol. ¿Qué era lo que había planeado esta noche?

Tengo algo único planeado para tu cumpleaños. Respiró contra


el auricular.Casi puedo sentir tu suave culo bajo mi palma. Su voz se
endureció. Espero que estés desnudo debajo de tus vaqueros cuando
llegues aquí, no voy a perder el tiempo desvistiéndote. ¿Entendido
muchacho?

Seth tragó saliva, amaba al hombre dominante que estaba al otro lado
de la línea. Lo he entendido Señor. No puedo esperar para verte. Ya
estoy duro.

Mmmm… bueno, entonces, será mejor que te apresures en llegar a


casa.

La línea se cortó. Recogiendo un montón de llaves de la mesa, metió


la carpeta con las hojas de las canciones en el archivador de metal y lo
cerró con llave. Entonces, echó una mirada a su reflejo en la pulida puerta
metálica que le rodeaba. Demonios, había tinta de impresora por su mejilla.
Él olisqueó bajo el brazo y gimió. No puedo irme a casa así, además
apesto.Echó una mirada al reloj, calculó el tiempo que tenía para darse una
ducha rápida y entonces corrió a través del estudio en dirección al baño.
171
Gracias a Dios, su manager tenía esta habitación bien equipada con toallas
y artículos de aseo. Sí, tenía tiempo de tomar una ducha rápida como el
diablo antes de ir a casa.
CAPITULO VEINTIUNO
Seth sonrió ante su reflejo. Mucho mejor. Contento por la emoción
de conducir, para ir a casa con Kall, sin ropa interior. Metió la prenda en el
bolsillo de sus vaqueros, retrocedió, miró al espejo, pasó la mano por su
pelo rubio y se dirigió hacia la puerta. Apagó las luces y el estudio se
sumió en la oscuridad.

Afuera, una ráfaga de aire helado atravesó su chaqueta abierta y le


rozó la cara. Seth empujó las llaves en la vieja cerradura y oyó como el
roblé crujía tras de él mientras las giraba en la cerradura. Imágenes de
vampiros y fantasmas atravesaron su mente. Él se congeló y el pelo de la
nuca se le erizó ante la sensación de que alguien le observaba. Apartándose
de la puerta miró hacia la oscuridad. Sólo una farola con su resplandor,
iluminaba el camino entre el estudio y el aparcamiento, haciendo un fuerte
contraste con el tono azulado de la luna llena. Miró con nerviosismo hacia
el camino cubierto de hojas. Los árboles permanecían desnudos en el frío
invernal, eran los centinelas de las sombras que cubrían toda la calle. La luz
de la luna se asomaba entre las nubes movidas por el viento, haciendo que
los troncos torcidos pareciesen una procesión de gárgolas.

La noche se cerró a su alrededor, misteriosamente silenciosa, excepto


por el canto de un búho en la distancia y el roce suave del viento a través de
las ramas estériles. Seth respiró hondo y bajó los escalones. Metiendo las 172
manos en los bolsillos de la chaqueta, levantó la barbilla y marchó hacia el
aparcamiento. Caminando a través de las sombras de rayas de cebra que
cruzaban la acera, su mirada iba de una aterciopelada sombra a otra.
A cada paso esperaba que algún espíritu maligno saltara sobre él y le
arrastrara hacia otra dimensión. Mirando de izquierda a derecha, se detuvo
ante el sonido de pasos que retumbaban a lo largo de la calle. Miró por
encima del hombro para ver que la acera estaba desierta. Su corazón latió
descontroladamente en sus oídos y cada uno de los golpes resonaba sobre
el eco de la noche. Ningún alma caminaba en la noche, entonces, ¿qué hizo
ese sonido?

Las sombras de los árboles se movían, como brujas montadas en sus


escobas, con cada ráfaga de viento. Avanzó, con pasos vacilantes, mirando
a cada árbol ennegrecido y luchando por escuchar cualquier pequeño
sonido.

Al final de la carretera, la única luz en la entrada de los


aparcamientos apareció a la vista. Más allá del parche de luz, la niebla
envolvía el área. La mirada de Seth se clavó en su coche, que estaba
cuidadosamente estacionado en el lugar asignado, a cierta distancia del área
estudiantil del Campus de Deep Falls. Bajo la luz de la luna, una serie de
coches estacionados al otro lado del solar, brillaban bajo una fina cubierta
de escarcha. Envolviéndose en su chaqueta, hizo una mueca ante el frío
helado, y con determinación, caminó a través del viento y se abrió camino
hacia su coche. Una sombra se movió rápidamente a través del sendero. Él
se quedó paralizado. Mirando hacia arriba vio el contorno de un murciélago
deslizarse sobre su cabeza. Se echó a reír, enviando bocanadas de vapor al 173
aire helado. Cálmate Seth, no más películas de vampiros para ti.
El viento azotó a Seth en las piernas. Los copos de nieve rozaron sus
mejillas, se derritieron y se deslizaron hasta su cuello. Más adelante, su
coche se encontraba profundamente sumido en las sombras, invisible, a
excepción del resplandor del espejo lateral. Caminando rápidamente miró
hacia su derecha. A lo lejos, las luces distantes de la universidad, se
filtraban por las ventanas en halos naranjas. Un conjunto de gente dispersa
se movía alrededor del edificio, como formas oscuras en el crepúsculo.
¿Por qué el ayuntamiento no había puesto farolas en este aparcamiento?

Una nube tapó la luna y la oscuridad le rodeó. Seth retomó el ritmo a


todo galope. Vete al coche, vete al coche, ¡llega ya! Alrededor, los árboles
despojados de sus hojas se alzaban oscuros y curvados hacia el cielo en
una devoción silenciosa. En el momento que llegó a su coche, la luna
rompió a través de las densas masas de nubes llenas de nieve que fluían
desde el norte. Él buscó en el bolsillo las llaves del coche. Kall odiaba que
fuera a trabajar sin un guardaespaldas. Las palabras de su Dom resonaron
fuertemente en su mente.

Asegúrate de tener las llaves en la mano antes de llegar al coche.


Nunca se sabe si algún fan loco está al acecho en las sombras.

Un ruido le asustó y miró a su alrededor con el miedo enterrado en


las entrañas, una figura saltó hacia él en la oscuridad. Agachándose, ahogó
un grito. Su garganta estaba obstruida por el terror. Una mano fría se clavó
174
en su boca y un cuerpo duro lo levantó y lo estrelló contra el coche.
Dejando caer las llaves, instintivamente levantó las manos a modo de
defensa.
Quítate la chaqueta tranquila y lentamente, y pon las manos en el
capó donde pueda verlas. El hombre agitó un cuchillo frente a su rostro,
con el filo de plata brillando a la luz de la luna. No intentes correr o te
cortaré la garganta. Su voz profunda y ronca tenía acento irlandés.

Seth se tragó las palabras que quería decirle al tipo que le


amenazaba, para conseguir que se calmara. Cristo, no tenía ninguna
oportunidad ante un chico de este tamaño. Tengo efectivo en la cartera

Cállate. No quiero tu jodido dinero.

Si el tipo quería su chaqueta, podía quedarse con la maldita cosa.


Con rodillas temblorosas, él buscó los botones, la deslizó por los hombros,
y la dejó caer al suelo. El aire helado cortaba sobre su camisa. Seth se
estremeció y apretó las manos en el capó extremadamente frío, escaneó las
sombras en busca de una vía de escape. Más allá del perímetro del
estacionamiento, un par de estudiantes caminaban hacia sus coches.
¿Podrían verle en la oscuridad? Si pidiera ayuda, ¿vendrían? Oh, Dios, él
podía imaginarse los titulares. Tenía que escapar. Llevando el codo hacia
atrás con fuerza, golpeó al hombre en las costillas.

Ouch… por lo que veo, te gusta que sea áspero muchacho. El
gran hombre lo empujó con fuerza contra el coche.

El pánico bloqueó una protesta en su garganta. Tengo que escapar. 175


Se apartó del capó y se giró, machacando el pie del hombre con el talón de
su bota.
¡Ni siquiera pienses en eso! Su atacante se adelantó, bloqueando
su camino. Sé bueno y no te haré daño. Su aliento perfumado de
menta hizo nubes blancas cerca de la mejilla de Seth.

El desconocido, presionó su duro y masivo cuerpo contra él y


empujó una rodilla entre sus piernas, separando sus muslos. Calor invadió
la espalda de Seth. Reprimió un grito. El hombre pasó sus dedos helados
por la piel de Seth y le abrió de un tirón la camisa. Los botones se
desprendieron y volaron en varias direcciones, haciendo ping, sobre el
coche. El terror le inmovilizaba, no tenía ninguna jodida posibilidad contra
un hombre de este tamaño. Cuando el extraño le acarició el vientre con sus
fríos dedos, antes de abrir su bragueta, jadeó ante el aire frío que golpeó su
polla desnuda y sus bolas se elevaron en protesta. ¡Déjame ir! Arañó
sus manos tirando de su ropa.

El hombre le hizo girarse para que mirara hacia el campus.

¡Joder! ¿Qué estás haciendo ahora?

Empuja hacia atrás las caderas y dale a la cámara del


estacionamiento una buen vista de la polla de una estrella del rock. ¿No es
tan grande cuando está fría muchacho? ¿Crees que esos chicos puedan
verte? Te gustaría eso, ¿verdad? Te he observado. Sé que eres un
exhibicionista. Sus frías manos ahuecaron las bolas de Seth.
176
—Te corres mostrando tu cuerpo desnudo a extraños. Parece que este
es tu día de suerte muchacho. A mí me encanta mirar. Tal vez te joda aquí
para que todos puedan verte cuando grites por más. Un gruñido profundo
salió de su pecho y presionó su erección en la hendidura del culo de Seth.

Oh mierda, soy carne muerta.No, por favor, no hagas esto, no


aquí. Puede que no quieras arriesgarte a follarme, no sabes con quien he
estado. El hombre acarició su eje con sus helados dedos.

Oh, ya lo sé, pero eres tú el que está en peligro, no yo, chico. Él
soltó un áspero gemido en su oreja. Sé lo que quieres, lo que necesitas.
El vahó se posó sobre su rostro. Esto es lo que anhelas.

En realidad había imaginado esta fantasía, pero con su Dom, no con


este animal.

Si yo puedo hacértelo duro en este frío clima, sé que me querrás


tanto como yo te quiero a ti.

Después de tanto tiempo sin Kall, su cuerpo anhelaba sexo, sexo


salvaje y loco ¿Cuántas veces había deseado una fantasía como esta? Seth
jadeó y maldijo a su cuerpo por reaccionar por este animal. Su polla
traidora se agitaba bajo el toque del hombre. Este no es Kall, ¡y no es una
fantasía! Mantén la calma y sal de este lío.
177
Cuando el hombre presionó el frío acero de la hoja cerca de su
garganta, Seth tembló de miedo, sus dientes castañeaban violentamente
contra su voluntad.
Él oyó como el hombre abrió la cremallera de su chaqueta. El cálido
almizclado perfume a cuero le rodeaba. El calor de su captor se hundió a
través de su delgada camisa, mientras moldeaba su musculoso cuerpo
contra él, estaba tan cerca que podía sentir el latido de su corazón. Los
dedos fríos del hombre se calentaron alrededor de su eje, el cual se llenaba
rápidamente. Él jadeó. Por favor…

Nada de ropa interior, y tu cuerpo huele a dulce con ese ligero


aroma a recién duchado. Te has estado preparando para ser follado.
¿Verdad cachorro? Te gusta que te toque así, ¿no?Pateó las piernas de
Seth para separarlas y sus dedos se movieron para acariciarle el culo. Las
manos atrás, sobre el coche.

¿Cachorro? ¿No es algo raro que un violador me llame así? Oh,


Dios, este hombre es un Dom, y apuesto mi próximo contrato que este es
mi Dom. Luchando contra el deseo erótico de ceder y entregarse a él, giró
la cabeza intentando echarle un vistazo a la cara del hombre. Si este fuera
Kall, esperaría que él jugara hasta el final. Yo…por favor…por favor.

Un fuego salvaje recorrió sus piernas ante el toque del extraño. El


hombre encontró su agujero y deslizó un dedo dentro. A Seth le temblaron
las rodillas y se agarró al capó del coche. El hombre retiró el dedo y
acarició la entrada de su agujero con círculos devastadoramente lentos,
luego lo empujó profundamente y bombeó lentamente, de la misma forma 178
en que Kall le atormentaba. Sin pensarlo, apoyó su dolorido culo sobre la
mano del hombre y el aire alrededor de ellos se llenó de nubes de vaho con
cada respiración emitida.
¿Quieres esto verdad? Eres como una perra en celo. El hombre
tiró el cuchillo sobre el capó del coche y se presionó contra él. ¿Debo
llamar a los estudiantes? Apuesto a que los muchachos de la fraternidad te
darán un paseo salvaje. Se rio, su voz se escuchaba baja y ronca cerca de
la oreja de Seth.

Oh… yo

En el momento en que el extraño sacó sus tentadores dedos de su


culo, gimió por la pérdida. El desconocido hizo un ruido profundo con su
garganta, luego le cogió las manos y las puso en su espalda. Sujetándole las
manos, el hombre se inclinó para recoger las llaves del coche y luego hizo
una búsqueda meticulosa a través de los bolsillos de la chaqueta de Seth. Al
mirar sobre su hombro, vio como abría la puerta y metía la chaqueta de
Seth dentro, y luego, metió las llaves en su bolsillo. Giró la cabeza para
obtener una mejor vista. El hombre llevaba una máscara de esquí y sus ojos
parecían negros en la oscuridad. Él tenía uno seis pies cinco pulgadas de
altura, anchos hombros, y la forma en que se movía era tan malditamente
familiar.

179
CAPITULO VEINTIDOS
No me mires y mantén la boca cerrada. Súbete los pantalones y
agárratelos, pero deja tu polla caliente expuesta para que todos puedan
verla. Buen chico. Ahora camina tranquila y lentamente de regreso al
estudio. Empujó a Seth desde atrás.

¿Cómo sabe a cerca del estudio? Es el mejor secreto guardado


desde Roswell. El aire helado le cortaba la piel, y le dolían las pelotas. La
fría mano del hombre descansaba sobre la piel desnuda de su espalda. Con
cada paso, él miraba alrededor de la vacía calle, por si acaso alguien
aparecía.

Alto. Gírate y extiende las manos. Empujó a Seth contra un


árbol que estaba en la penumbra.

Seth obedeció mientras la corteza congelada arañaba su espalda. El


desconocido le agarró las muñecas con una de sus grandes manos y las alzó
alto en el aire. El miedo estranguló el grito de su garganta.

Muévete y te corto las pelotas, ¿lo has entendido muchacho?


Las voz del hombre se sentía caliente contra su mejilla.

Seth se agarró al árbol que estaba detrás de él. Sí señor.


180
El hombre observó su vara encogida y su respiración irregular. Con
el cuchillo presionado contra su vientre, el desconocido cayó de rodillas
levantó el borde del pasamontañas.
Tenía unos gruesos y delicioso labios, y barba oscura espolvoreaba
su barbilla. Seth tragó saliva. Se parecía a su Dom, tenía sus labios, su
barbilla, pero no su voz. ¿Este podría ser realmente Kall haciendo realidad
su fantasía más salvaje?

Pídeme que te chupe cachorro.

Seth tembló. Dios mío, ¿qué pasaba ahora? Sería él el que estuviera
de rodillas si este fuera Kall. Respiró hondo dudando si debería obedecer.
Joder, si este era su Dom su amante le había engañado bien. El cuchillo
apretó contra su carne. Por favor, chúpame señor.

El desconocido bajó la cabeza y gimió.

Era tan condenadamente bueno. Él se estremeció por la emoción de


la excitación ilícita. Su captor sacudió la lengua como si fuera una
serpiente, dando vueltas alrededor de la punta de su polla. Entonces su
caliente boca le rodeó, chupando y tirando de su erección. El desconocido
gruñó en aprecio y sacudió la cabeza.

Entró en pánico e intentó alejarse. No debería estar disfrutando de


esto… ¡joder! Por favor… no puedo, yo no puedo hacer esto.

Puedes y lo estas disfrutando. Puedo saborear lo mucho que me


quieres. El tipo ignoró las súplicas de Seth y succiono más fuerte.
181
La necesidad envolvía las pelotas de Seth. La lengua caliente del
hombre marcó un sendero hasta su ombligo y se sumergió dentro. Seth
gimió. Mierda, ¿acababa de hacer ese sonido? Seth, te estás sumergiendo
dentro de la fantasía.

Pronto… me pedirás que te folle. El extraño se puso en pie


lamiéndose los labios e instó a Seth hacia el estudio.

A Seth se le cayeron las manos a los lados, se le debilitaron las


piernas, y estupefacto, caminó hacia el estudio. Buen Señor, él es tan
fuerte. No tenía ninguna posibilidad de escapar. Vacilando ante el tacto del
hombre, obligó a su cerebro a encontrar una solución. Él no me ha hecho
daño. ¿Sólo quiere sexo?...Puedo darle sexo. Ellos caminaron rápidamente
ocultos en las sombras. Seth tropezó en las escaleras del estudio y el
hombre juró en voz baja y lo arrastró hasta ponerlo de pie. Sosteniéndolo
firmemente por el brazo, buscó las llaves, haciendo malabares con una
mano para abrir la puerta del estudio.

Él entró, agradecido por salir del frío. Se giró para ver como el
desconocido cerraba la puerta detrás de ellos, y luego encendía algunas
luces. Oyó el rugido del sistema de calefacción cuando volvió a la vida. El
aire caliente salió por los conductos calentando su cuerpo helado. Conoce
el sitio. ¿Kall eres tú?

Avanzó en silencio, siguiendo las órdenes del hombre. Indagó en su 182


cerebro para buscar una forma de llegar a la verdad. Pensó en
preguntárselo, pero entonces arruinaría la escena.
No saberlo con certeza hacía que el juego de roll fuera más intenso.
Él se detuvo frente a la pequeña habitación que albergaba el sistema de
seguridad, y el tipo abrió la puerta y le empujó dentro.

No te muevas. No puedes escapar de mí. Tampoco es que quieras,


¿verdad cachorro? Pasó los dedos a través de los labios de Seth. Sólo
quédate ahí y sé bueno. Él cambió el disco de la grabadora de CCT14 por
otro que llevaba en el bolsillo de su chaqueta.

El desconocido apagó todas las cámaras excepto dos, y luego reguló


las lentes para que enfocara un área iluminada del estudio en la oficina. Él
sabe cómo trabajar con el sistema de seguridad y cómo usar una cámara.
Seth despediría rápidamente a todas las personas que habían trabajado con
él durante el último año. Estoy seguro que recordaría a alguien construido
como él. Reconoció su forma de andar y ese par de hombros. Si este eres
tú, Kall, ¿qué debería hacer? ¿Seguir el juego y hacer mi parte? Pero, ¿y
si no era Kall? Supongo que lo más seguro será obedecer. Si no llego a
casa, Kall se preocupará y me llamará o vendrá a buscarme… y luego
tendré que intentar explicarle al loco culo de mi Dom qué diablos estoy
haciendo aquí con este tipo.

El desconocido le agarró por el brazo con sus largos dedos y el


cuchillo presionado a su lado. Sin decir una palabra, Seth se dirigió sin
hacer ruido a una mesa iluminada, detrás de las cabinas de sonido. En ese 183
segundo, decidió cooperar con este hombre.

Circuito cerrado de televisión: es una tecnología de videovigilancia diseñada para supervisar una diversidad de
14

ambientes y actividades.
Limpia ese escritorio.

Seth apiló los archivos en una silla y se giró hacia él. El hombre
entrelazó sus largos dedos en su cabello y lo empujó contra su dura
longitud mientras sus profundos ojos buscaban su rostro. El perfume del
hombre le rodeaba, era el de un caro aftershave, distintivo, dulce y
almizclado, mezclado con el de hombre caliente pero desconocido.Luego le
giró, le bajó los pantalones y le empujó contra su musculoso cuerpo. Su
duro eje, el cual estaba encerrado en la mezclilla, se presionaba contra las
nalgas de Seth. Joder, el hombre estaba caliente y listo para la acción.
Mordiéndose el labio inferior, recuperó el aliento. Se balanceaba contra él
mientras la áspera cremallera de los vaqueros del hombre se rozaba sobre
su culo desnudo. Una gran mano ahuecó sus bolas y luego la pasó por su
endurecido eje. Aliento caliente rozó su espalda mientras el hombre se
inclinaba y le mordisqueaba la oreja y el bello de su barbilla le rozaba el
cuello. Sin pensar o razonar giró la cabeza dentro de su abrazo. Un largo
gruñido retumbó en el pecho del hombre y él respondió pellizcándole el
cuello. La habitación giro. Sin decir ni una palabra, el hombre lo empujó
boca abajo sobre el escritorio y le pateó las piernas.

¿Has sido malo? Yo creo que lo has sido. Solo los chicos malos se
ponen difíciles cuando les toco… creo que necesitas disciplina. Quieres que
te azote, ¿verdad?Su gran mano bajó contra las nalgas de Seth dándole
cuatro golpes fuertes. 184

Seth ahogó un gemido. Oh, sí, señor…he sido muy malo


La fascinante mano del extraño cayó repetidamente como un hiriente
abrazo. Él se detuvo para lamer un sendero y calmar la picadura. Luego un
chorro de lubricante frío cayó sobre su agujero seguido por el sondeo de un
dígito bien engrasado. El calor se arremolinó en su vientre. Amaba que un
hombre lo dominara de esta forma. Se echó hacia atrás, balanceándose al
borde del placer.

¿Y bien? El desconocido metió los dedos en el agujero de


Seth. ¿Quieres que te joda chico?

Con la mente confusa y al borde del clímax, Seth soltó un gemido.


Yo… yo… no sin un condón, no lo haré sin eso.

Oh, tengo una caja entera y tenemos toda la noche.

En el momento que el hombre retiró los dedos, Seth se mordió el


interior de su mejilla para detener la queja que se cernía sobre sus labios.
¿Qué pasaba con él, es que había perdido su maldita cabeza? El hombre se
movió a su lado y dejó caer una tira de condones, entonces sacó una venda
de su bolsillo y dos cuerdas de cuero. Bien, así que el hombre quería una
follada o dos y planeaba usar condones, pues él podía lidiar con ello. Tal
vez sólo le jodiera y se iría. Tal vez quería un video follando con una
estrella de rock para colgarlo en youtube… qué coño sabía él. Pasaría por
todo esto y luego sacaría al hijo de puta del estudio, entonces Kall se
185
ocuparía del mamón.
Eres tan jodidamente hermoso. El hombre cubrió los ojos de
Seth con la venda, luego le giró y le empujó sobre su espalda, dejándole las
piernas colgando sobre el extremo y sus botas sobre el suelo. Bajo él, el
resto de los botones de su camisa se le clavaban en su carne. La parte
posterior del cuchillo fue deslizada sobre su piel. P…por favor señor,
haré lo que quieras. Puedes follarme duro pero no me mates… p…por
favor.

Las únicas palabras que quiero oír de tu boca son “fóllame”. ¿Me
has entendido?

Seth asintió y se estremeció.

Ahora levanta las piernas, apoya los talones en la mesa y separa


las piernas. Quiero que la cámara grave cada parte caliente y dura de ti.

Sólo después de que Seth obedeció él se alejó.

La mesa de roble rozó su canal con un chirrido familiar, y el


reconfortante olor a almizcle masculino, que había en el estudio, le rodeó.
Ya no podía oír la pesada respiración de su captor como antes. El zumbido
de la máquina expendedora sonó en la esquina y luego unos suaves pasos
se dirigieron hacia el baño. Sólo su pesada respiración rompía el silencia
durante el largo tiempo en que esperó a que regresara. Le dolía la espalda y
tenía las piernas entumecidas. ¿Cuánto tiempo más duraría esto? ¿Se iba a 186
limitar a mirarme?
Seth giró la cabeza de un lado a otro, con los oídos abiertos en busca
de cualquier ruido. Él oyó una silla crujir se había sentado cerca¿Por
qué? Ellos no tenían dinero a mano. Una compañía venía una vez por
semana para rellenar la máquina y retirar el dinero.

Oyó más pisadas y el aroma a café recién hecho inundó la


habitación. Dios mío, él se ha tomado un descanso para beber café. El
chirrido de una silla raspando el suelo sonó cerca. Sin murmurar una
palabra, el hombre posó una de sus grandes manos sobre el muslo. Su
cálido dedo se deslizó hacia arriba marcando un camino hacia sus bolas. Él
oyó una ingesta de aliento.

Te ves lo suficientemente bueno para comerte, tan desnudo y


abierto. Dios, no tienes ni idea lo mucho que me gustan las pelotas sin pelo,
y hueles tan jodidamente bien. Le quitó a Seth, sus botas y calcetines.
Mmmm, ¿alguna vez te han chupado los dedos de los pies?

Seth sacudió la cabeza. Oh, Cristo, este hombre es un bicho raro.


No señor.

La silla crujió y él se estremeció imaginando a su atormentador


inclinado hacia atrás en la silla, tomando café y limitándose a mirarle. Él
dio una patada y golpeó la carne caliente. El hombre juró y la silla se
estrelló contra el suelo.
187
¡Estúpido! Te voy a castigar por eso… pero no ahora… más tarde,
cuando yo esté listo. Pisadas resonaron a través de la habitación vacía.
¡Esa voz! Su acento se resbaló cuando se enfadó. Lo sabía, es Kall.

A solas, él se quedó quieto, escuchando la salpicadura del agua en el


lavabo, proveniente del baño. Podía oír los silbidos mientras le maldecía
¡Silbaba! Seth levantó las piernas y las dobló contra su pecho para aliviar
los calambres. En un esfuerzo por ponerse cómodo tiró de sus ataduras.

Al momento siguiente, Kall apoyó su mano caliente sobre su vientre.


Él se apartó con el corazón latiendo fuerte. Cristo no había oído su
silencioso regreso.

Oye, quédate quieto. Eso es, piernas arriba y bien abierto.

El cálido aliento de Kall rozó su oreja. Él le siguió el juego y se


apartó. La húmeda boca de Kall se cerró sobre su oreja, y luego bajó por su
cuello. Jadeando, Seth gritó, montando una vez más la ola de excitación
que le hizo gemir y arquear la espalda. Su Dom respondió chupando,
pasando los dientes alrededor de su pezón y tirando de él hasta que Seth
gimió de placer. El calor se acumulaba en sus bolas. Cuando la boca del
hombre abandonó su pezón y rodeó la mesa para repetir su tormento con el
otro, su cuerpo se estremeció. Kall trazó un camino con su húmeda lengua
a través de la boca de Seth como en una caricia suave. Seth se mordió el
labio inferior e intentó desesperadamente evitar responder a la exigente
boca de su Dom. La lengua de Kall penetró entre sus dientes y se derritió
en el beso con sabor a café. Sus lenguas bailaban y le devolvió el beso, 188
perdido en el momento de pasión.

Eres muy malo. Kall se rio entre dientes.


Su Dom le lamió las costillas y luego su vientre dibujando grandes
espirales. Los temblores lujuriosos atormentaban su cuerpo. El hombre le
agarró el tobillo derecho y uso el pulgar para acariciarle el pie. Seth luchó
hasta que Kall dibujó un sendero húmedo desde la rodilla hasta el muslo
llegando a sus pelotas, luego lamió el vientre dibujando otra tentadora
espiral.

Él dejó caer la pierna de Seth y oyó como la silla se arrastraba de


nuevo. Atrapado en su oscuridad personal, asumió que Kall había
acomodado la silla entre sus piernas.¿Y ahora qué? Después Kall, pellizcó
un sendero a través de los dos muslos y luego rodó sus bolas con tentadora
lentitud. Seth inhaló profundamente y contuvo el aire. Cuando Kall sopló
suavemente sobre la cabeza húmeda de su polla, él corcoveó su cadera.
Demonios, no puedo tomar mucho más de esto. ¿Qué es lo que quiere de
mí?

Levanta las piernas, ábrete para mí.

Seth tragó saliva con su pene palpitando de necesidad. Lentamente


levantó las piernas y oyó como Kall se reía, entonces la lengua caliente de
su amante dibujó círculos alrededor de su culo.

Oh… Dios

Llamas de deseo se instalaron en su vientre. La abrasadora boca de


189
Kall devoró su agujero rozando con su barba áspera, de forma delirante,
contra su carne.
Su Dom se burlaba pasando la mano arriba y abajo por su polla
llevándole al borde del clímax, entonces retrocedió soplando en su dolorida
cabeza. Los pasos sonaron de nuevo, y Kall lo dejó colgando al borde de la
culminación. Envolvió los dedos en los puños, dejó caer las piernas y
apretó las caderas con frustración.

Por favor…

Él estaba temblando consumido por la lujuria. No podía soportar ese


placer no mutuo otro segundo más. Su cuerpo palpitaba, el fuego bailaba
sobre su trasero y rasgaba su vientre. Tumbado en la completa oscuridad el
agudizó el oído. Podía oír el viento y el crujido del viejo edificio. ¿Dónde
estaba su Dom? Le dolían los brazos y las piernas se le habían entumecido.
Su polla se tensó con la sangre latiendo en la punta. Este tenía que ser Kall,
si no su Dom a estas horas ya le habría llamado para comprobar que
pasaba. ¿Y si estaba equivocado y no era Kall? Entonces que Dios le
ayude, Kall vendría y le encontraría atado, duro, y cerca de derramarse con
un extraño que manejaba un cuchillo. Él nunca se creería que yo no quería
esto. Este tiene que ser Kall, tiene que serlo.

Kall regresó, le agarró los hombros con sus cálidas manos, y le


maniobró para que su cabeza colgara por el borde. Seth se estremeció. La
carne tibia se apretó contra él y los pequeños pelos del vientre del hombre
cepillaron su frente. Señor, él está desnudo. El extraño olía a
190
sándalo,¿sándalo? Había usado el talco de Jordy.
Abre y chúpame bien. El chuchillo estará en tu garganta si intentas
morderme. Mantén las piernas levantadas y abiertas… así, justo así.

El hombre le ahuecó la cabeza y un grueso pulgar abrió un lado de su


boca. Seth abrió obedientemente y respiró por la nariz. En verdad amaba la
dominación. El grueso y aterciopelado eje del hombre se deslizó en su
boca; sabía a jabón y sándalo. Cuando él balanceó las caderas, Seth cerró la
boca instintivamente alrededor de su longitud y chupó. Un sabor rico y
muy familiar invadió sus pupilas gustativas. Estaba seguro de que su Dom
le había preparado la escena de su fantasía, su miedo retrocedió. Incluso si
por casualidad hubiera cometido un error, este hombre, sea o no Kall, no le
había hecho mucho daño. De hecho le había manejado con una suave pero
intoxicánte dominación. El intentaría disfrutar de su última fantasía e
imaginaría que era la polla de Kall la que tenía en la boca. Señor, como
disfrutaba el llevar a su Dom al clímax usando su boca y lengua. Este
hombre le folló la boca con habilidad, teniendo cuidado en no ahogarle con
cada fuerte embestida. Los largos sonidos de deleite del hombre no
ahogaron el ruido de metal, golpeando contra la mesa, que percibía en su
oído. Gracias a Dios había soltado el chuchillo. Seth se relajó. El hombre le
agarró la cabeza frotando los pulgares de forma circulas sobre sus mejillas.
Él lo tomaba lentamente como si saboreara cada embestida y zambullida.

Sí, chúpame justo así. Kall gimió profundamente en su pecho.


Eres tan bueno en esto muchacho. El sabor del aroma almizclado de su 191

Dom aumentó, llenando su boca con cada zambullida del eje, a través de su
lengua.
Ahora no había duda, este hombre era su Dom. Quiso sonreír pero se
contuvo. Contra su lengua, Kall se estremeció hasta llegar al clímax. Seth
succionó su aterciopelado eje con avidez y tragó su semen salado.

192
CAPITULO VEINTITRES
Él seguiría el juego y alargaría la escena. Joder, quería más. Cuando
Kall le limpió la boca con gentileza y luego le deslizó hacia dentro de la
mesa, Seth maldijo. Mira, he hecho todo lo que me has pedido. Déjame
ir o voy a empezar a gritar. Que te jodan, ya he tenido suficiente de esta
mierda.

Te dije que las únicas palabras que quería oírte decir son
“fóllame”. No quieres que me enfurezca ahora, ¿verdad
muchacho?Desató a Seth, le levantó entre sus brazos y le sentó en una
silla. Siéntate y sé un buen y obediente cachorro, déjame que te mire un
poco más. Colocó la silla en la oficina.

Reconociendo el olor de la fotocopiadora, se sentó inmóvil


permitiendo que Kall atara una correa de cuero alrededor de su cintura,
amarrándolo a la silla. Cuando se alejó, inhaló el olor único de Kall y
sonrió.

¿Qué hizo su Dom cuando le dejó solo? ¿Comprobar la calle para


asegurarse de que la empresa de seguridad no había empezado con sus
rondas? Oyó abrirse la puerta, y el aroma de café recién hecho inundó el
aire. Un trapo cálido le tocó la cara. La tela se deslizó por su cuello, por su
pecho y terminó en su entrepierna. Él gimió. No había duda de que Kall le
193
limpiaba con eficacia y luego le secó con cuidado.

Eso está mejor. Ahora puedes tomar un poco de café. Kall


desató la correa de cuero y sentó a Seth en su regazo.
Gracias Maestro.

Dije que las palabras que debías pronunciar eran “fóllame”

Seth permaneció en silencio y tomó un sorbo de la taza de café que


tenía bajo sus labios. Cuando Kall deslizó una mano sobre su muslo, Seth
se abrió ante la orden silenciosa. Su respiración se convirtió en un gemido
cuando ante el agarre de su Dom contra su polla. El pelo suave de Kall rozó
su carne cuando se inclinó para atormentar sus tiernos pezones. Él ahogó
un gemido de placer. Levantando las caderas, presionó su eje contra la
mano de Kall en una demanda silenciosa. Inhalando su olor masculino,
contaminado con el de madera de sándalo, rodó sus caderas. Kall respondió
a su súplica silenciosa palmeándole con una gran mano y apretando.

Seth se retorció contra él. Su Dom se detuvo, sosteniéndole cerca de


su cuerpo húmedo. Inmovilizado, gimió contra el pecho de Kall y se agarró
a sus brazos. Kall le levantó sin esfuerzo en su musculoso abrazo y le
colocó sobre el escritorio, delante de la ventana. La carne caliente, húmeda
y desnuda de Kall contra su piel le hizo gemir de deseo. Acostado sobre la
mesa, extendió la mano y rozo el cristal helado. Señor, cualquier que pasara
por allí les vería desnudos en la ventana.

No muevas ni un músculo. Kall quitó los brazos que abrazaban


a Seth y se giró.
194
Oyó un sonido tintineante y gritó mientras Kall le pasaba un cubito
de hielo por su dolorido pezón.
Sé que te gusta esto muchacho. Kall rodeó el anillo del pezón de
Seth antes de posar el hielo sobre el brote dolorido. Deberías ver lo bien
que luces totalmente extendido y con el culo brillando de lubricante
mientras esperas a ser follado.

Kall se inclinó y chupo el pezón con el calor profundo y sensual de


su boca. Estremeciéndose con deseo, Seth jadeó. Kall frotó el hielo
meticulosamente sobre sus labios, y luego sobre su otro pezón, dando
vueltas y burlándose, antes de chupar con su boca el doloroso brote, otra
vez.

Me encanta la forma en que se irrita tu piel. Kall cepilló sus


fríos labios sobre la mejilla de Seth.

La pasión consumía su mente. Estaba tan hambriento por la polla de


su Dom que el deseo ardía en sus bolas. Él quería gritar “fóllame” pero en
su lugar, mordió su labio inferior.

Tan cerca… pídemelo Seth. Kall extendió las rodillas de Seth y


pasó el hielo por su agujero. Ábrete de piernas para mí, buen chico,
ahora recibirás tu recompensa.

Gritó en el momento en que la lengua de Kall se sumergió dentro de


él, el calor era algo increíble después del hielo. Sin pensarlo metió sus
manos en el cabello grueso y limpio de Kall, era tan suave y sedoso. Su 195
cuerpo se sacudió por el clímax negado. El hombre lo había detenido. Se
mordió el labio inferior y los músculos de sus muslos se encogieron.
Con cada tentadora lamida, Kall le llevaba más al borde y luego se
detenía. Ya no puedo soportarlo más.

Seth tembló. Por favor… folla… me.

¿Ves como no era tan difícil muchacho?

Kall le ahuecó la cara con su gran mano y le levantó la barbilla,


luego cerró su boca contra la de Seth y la devoró. Seth metió la lengua en la
boca de su Dom. Su Dom respondió arrastrando sus gruesos labios por su
boca de forma desenfrenada.

Le encantaba el sabor entrecruzado de ambos sin estar contaminado


con el café y el contacto de los labios de su Dom contra los suyos propios.
Le devolvió el beso hundiéndole las uñas sobre la carne desnuda de sus
hombros.

Por favor Maestro, te necesito dentro de mí.

Primero un poco más de lubricante. Sí, eso es lo mejor y tu pediste


que usara condón. Dame un segundo.

Momentos después, Kall le levantó las caderas con sus ásperas


manos y se sumergió dentro, provocándole un dolor familiar. Kall apoyó
sus fuertes caderas contra él, y fue consumido por la lujuria insaciable, por
el fuego líquido ardiendo a través de él y eso le condujo a la locura. 196

Por favor Kall, no puedo soportarlo, voy a morir de placer.


Supuse que sabías que era yo. Kall se rio entre dientes y le quitó
la venda de los ojos. No intentaste patearme las bolas otra vez. Él
balanceó las caderas atormentadoramente lento.

Miró a los ojos color verde musgo y vio como sus pupilas se
dilataban por la pasión. Serpenteando sus manos alrededor del cuello de
Kall, le besó largo y lento.

Maldición te ves caliente. Kall se salióhasta la punta y luego se


empujó con un largo y delicioso golpe.

Cada delicioso empuje le acercaba al clímax. El grueso eje de Kall se


clavaba sobre el lugar de placer de Seth. Dios, el hombre sabía cómo
extender las sensaciones eróticas hasta conducirle a la locura. Su cuerpo
húmedo se cepilló burlonamente contra su dolorida vara. Él enrolló las
piernas alrededor de su cintura conduciéndole más profundamente dentro.
Levantando las caderas las giró para encontrarse con cada tentador empuje.
Sus cuerpos se abofetearon y la vieja mesa crujía con cada zambullida.
Gimió y levantó la cabeza para encontrarse con la boca de Kall. La lengua
de su Dom penetraba profundamente dentro de su boca con cada zabullida
satisfactoria. Un fuego incontrolable se movió en espirales dentro de su
vientre y acometió contra su polla. Luces de colores estallaron en su cabeza
y se corrió gritando el nombre de Kall. Su culo se contrajo alrededor de la
longitud de Kall, y su Dom se estremeció y terminó dentro de él. 197

Seth sonrió y pasó las manos por el despeinado pelo de Kall, su Dom
se derrumbó sobre él y apoyó su cabeza mojada sobre su hombro.
Seth acarició el pelo de su amante. Te he echado mucho de menos.

Yo también te he echado de menos cachorro. Kall alzó la cabeza


y sonrió.

Seth observó su rostro cincelado. Los círculos oscuros bajo sus ojos
le decían que había pasado tantas noches en vela como él. La respiración de
su Dom empezó a ralentizarse, pero permaneció presionado cerca de él. Sus
largas y ambarinas pestañas le rozaban las mejillas con placer.

Sabías que era yo, ¿verdad? Kall levantó la barbilla.

Seth lo mantuvo cerca. No, al principio no, pero deslizaste el


acento por un segundo, entonces supe que eras tú y tu sabor me lo
confirmó.

Creí que te había engañado con el nuevo aftershave… y el


acento… demonios practiqué eso durante una semana. Kall posó un beso
en el cuello de Seth

Me engañaste. ¡Joder! En el estacionamiento me asústate hasta la


muerte.

Tal vez la próxima vez podamos jugar al chico de alquiler, y te


recogeré en un bar… te llevaré a Depravity y te haré mi perra. O tal vez te
lo haga en el callejón sobre el capó del coche. Él se rio entre dientes. 198
Esa escena la tenía en mi lista, creo.
En verdad, había anhelado la excitación del secuestro y el sexo
forzado por un desconocido alto y oscuro. Sonrió y se humedeció los
labios. Ya me has dado mi escena más salvaje.

La mía también… tienes una imaginación tan vívida cachorro.


Kall alzó la ceja. Y lo he grabado todo como recuerdo.

Diablos lo había grabado todo. Él apartó el flequillo húmedo de la


frente de Kall Bueno, que no se te olvide sacar el disco de la máquina
antes de salir. No quiero encontrar mi culo esparcido por todo internet.
Aunque dudo que necesite un disco, no voy a olvidarlo pronto… eres
increíble.

Pensé que podrías apreciar mi regalo especial. Kall le dirigió


una sonrisa lobuna. Feliz cumpleaños cachorro

FIN

199
SOBRE EL AUTOR
H C Brown es un autor con múltiple publicaciones, superventas, ha
sido premiada por sus novelas históricas, paranormales, de ciencia ficción,
fantasía, BDSM, viajes en el tiempo, acción, aventura y romance
contemporáneo.

En 2011 se sintió eufórica por recibir tres nominaciones a los


premios CAPA: Autor favorito, mejor novela romántica de LGBT y mejor
romance de ciencia ficción.

Fue nominada a la mejor historia M/M en el 2013, en la categoría de


libro del año por Goodreads.

HC escribe sobre heroicos y fuertes alfas masculinos, sobre la


acomplejada heroína de la puerta de al lado y todas sus historias tienen
finales felices.

200
CREDITOS

Sakura

Amazona

Clau

Pervy

Morgana Celtic

201

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