‘Innovación es sinónimo de producir, asimilar y explotar con éxito
una novedad, en las esferas económica y social, de forma que
aporte soluciones inéditas a los problemas y permita así responder a las necesidades de las personas y de la sociedad’ según el Libro blanco sobre el futuro de Europa de la Comisión Europea. En un entorno cambiante y altamente competitivo, la innovación organizacional se volvió una necesidad para las empresas que quieran mantenerse en el mercado y crecer en su actividad. Y no sólo es necesario innovar para ‘el afuera’, sino también para el capital más preciado, los empleados de la organización.
Es importante promover el sentimiento de pertenencia y la
proactividad, desde invirtiendo en polos personalizados, adaptadas a sus necesidades laborales, hasta proponiendo mejoras innovadoras que impacten en el día a día de su vida laboral. Para las empresas, ya no basta con hacer algo y hacerlo bien. En el mundo globalizado de hoy, envuelto en nuevas tecnologías y con una creciente conciencia ambiental y social, es necesario buscar siempre ser mejor, en todos los aspectos posibles.
Y de esto se trata la innovación organizacional, de introducir
cambios que representen soluciones y mejoras en la actividad de la empresa. Esto puede ser en distintos niveles, desde la introducción de nuevas tecnologías hasta la incorporación de políticas de cuidado medioambiental en los procesos operativos o productivos.
Como dijimos, es prácticamente imposible mantenerse al margen de
esta tendencia. Si queréis ser una empresa competitiva hoy, es una necesidad innovar cualquiera sea el tamaño y actividad de la organización para tener éxito. Pero ¿cómo hacerlo?
ómo aplicar la innovación organizacional
Dependiendo del sector, serán muchas las posibilidades que habrá para introducir innovaciones que aporten ese valor añadido. Las nuevas tecnologías son grandes aliadas de la innovación organizacional, muchas veces introducirlas en procesos de producción permite, por ejemplo, optimizar el uso de recursos en una empresa, mejorar la comunicación y hasta reducir el impacto medioambiental de la organización. Ejemplo de esto es la creciente incorporación de políticas de código abierto en las empresas o el uso de inteligencia artificial en webs a través de chatbots entre tantas otras opciones donde la tecnología está al servicio de la innovación. Pero este no es el único camino, ¡Hay muchos! Como dijimos, la introducción de políticas laborales innovadoras que impliquen a los empleados y sus modos de trabajar puede generar un gran impacto positivo en la empresa. La flexibilidad de horarios y el trabajo por objetivos o la incorporación de metodologías ágiles de trabajo son ejemplos de innovaciones realizadas por empresas en los últimos años que significaron cambios de mentalidad y crecimiento para las organizaciones.
Otras innovaciones organizacionales que están al alcance de la
mano de cualquier empresa pueden ser la sustitución de materiales contaminantes por otros de menor impacto ambiental, la incorporación de maquinarias que optimicen procesos y el ejercicio de reciclar residuos y papeles. Todas acciones fáciles de implementar en una empresa que quiera comenzar a moverse en la línea de la innovación organizacional.