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LECCIÓN 1
1.1 1. “La gran comisión” en realidad se debería denominar “el mandato supremo”, porque es la única vez
que Jesús saca a relucir sus credenciales, lo que habitualmente decimos “mostrar chapa”, y les dice:
-Soy la máxima autoridad del cielo y la tierra y en virtud de esta condición mía (“por lo tanto”) les ordeno
esto: Vayan y hagan discípulos en todas las naciones, y bautícenlos en el nombre del Padre, y del Hijo, y
del Espíritu Santo. Enséñenles a cumplir todas las cosas que les he mandado.
2. El mandato tiene cuatro verbos 1. Vayan, 2. Hagan discípulos, 3. Bautícenlos y 4. Enséñenles.
3. Apuntemos a una meta “posible”. No hablamos de evitar el esfuerzo. Al contrario nuestra meta debe
ser lo suficientemente alta como para hacernos dependientes de la intervención sobrenatural de Dios,
a quien se le debe toda la gloria. Tampoco debe ser tan alta que nos desmotivemos y ni siquiera lo
intentemos.
Sugiero una meta sencilla, práctica y visible: que nuestro desafío sea la duplicación de la cantidad de
iglesias existentes en la ciudad pertenecientes a nuestra denominación.
1.2 1. El amor al prójimo está casi en el mismo nivel que el amor a Dios. Según la Palabra, el amor al
prójimo es tan importante que llega a considerarse como prueba de que la persona haya nacido
de nuevo, o no. “Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los
hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte” (1 Juan 3.14).
Ahora bien, no existe una manera más acabada de amar al prójimo que compartir las buenas noticias
de salvación. Cada vez que le predicamos el evangelio a una persona, en realidad no estamos ganando
un mérito al servicio a Dios, sino que estamos poniendo de manifiesto nuestro amor al prójimo.
2. Ahora bien, no existe una manera más acabada de amar al prójimo que compartir las buenas
noticias de salvación. Cada vez que le predicamos el evangelio a una persona, en realidad no estamos
ganando un mérito al servicio a Dios, sino que estamos poniendo de manifiesto nuestro amor al
prójimo.
3. En toda la historia del cristianismo no ha existido una manera más eficaz de predicar el evangelio
que no sea a partir de la iglesia. Es allí donde la persona puede captar la buena nueva, además de
ser instruida en todo lo tocante a esta vida y a la eternidad. La iglesia actúa como contención
emocional y espiritual. Como familia, cada miembro tendrá lo necesario para desarrollarse en la vida
cristiana y a su vez no le faltará oportunidad de servir a Dios y al prójimo.
4. Podemos sentar dos principios fundamentales: al plantar una iglesia estamos obedeciendo el
propósito divino y cumpliendo uno de los más grandes mandamientos de Dios: amar al prójimo como
a uno mismo.
1.3 1. Podríamos comparar el plantar una iglesia con la experiencia de tener un hijo. Nadie dirá que
tener un hijo es fácil, pero tampoco es algo del otro mundo. Básicamente depende de si la persona
tiene que enfrentar ese desafío solo, o si se verá rodeada y contenida por una familia, amigos e
instituciones de salud.
De manera similar, el iniciar una iglesia puede ser una experiencia traumática o feliz. Marcará la
diferencia el estar completamente solo, o saberse apoyado por amigos, mentores y gente dispuesta a
ayudar.
2. Según su criterio.
1.4 1.F; 2.V; 3.F; 4.V; 5.V; 6.V; 7.F.
1.5 1. La ventaja de la iglesia recién nacida es estar lejos de todo detalle secundario. Su mayor empeño es
cumplir con su misión – “la gran comisión” - para no morir. En síntesis: alcanzar a otros o cerrar sus
puertas ante un sueño no logrado.
2. Los beneficios relatados según el texto son: Permití a Dios que forjaran de cero mi fe y mi ministerio.
La experiencia de abrir una iglesia me llevó a un compromiso total
Mi relación con Dios creció a nuevas alturas. Dependía totalmente de la dirección de Él para cada paso
en el peregrinaje. Me demostró que Él es verdaderamente fiel. De la lucha y el desánimo, Él hizo crecer
algo hermoso.
1.6 1. No se trata entonces de determinar de antemano si vamos a plantar una iglesia grande o una
pequeña. Lo realmente importante es plantar muchas iglesias.
2. Según criterio del alumno.
1.7 1. Cada alumno podrá resumir los ítems de acuerdo a su criterio.
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2.1 1. Los tipos de llamados son tres: a) El gran llamado b) el llamado especial. c) El llamado simple.
2. Según criterio del alumno.
3. Según criterio del alumno.
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7.6 1. El trabajo secular nos permite conocer de primera mano la idiosincrasia de la gente. Además nos
hacemos de conocidos como para invitarlos luego a la célula o a la iglesia.
A menudo la gente mundana considera que el pastorado no es un trabajo. El tiempo que el pastor
tenga que trabajar secularmente servirá de buen testimonio porque genera credibilidad en la
comunidad.
2. A medida que crece la congregación, crecen los recursos, pero también crece la demanda de
tiempo. Cuando la congregación haya crecido tanto como para demandar todo el tiempo del pastor,
también habrá recursos para pagarle por la dedicación exclusiva.
Cuando llegue el momento de la transición de dejar el trabajo secular para atender las demandas del
ministerio, será el momento de lanzarse “por fe”, porque aún la congregación no será tan grande como
para pagar un sueldo digno ni tan pequeña como para reservar tiempo para trabajar materialmente.
3. Ahorrar un 5% de las entradas generales para la movilidad del pastor.
4. De ninguna manera se avergonzaba de trabajar secularmente, aun cuando era consciente de que
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8.1 1. Porque al poner un techo en realidad ponemos fin al grupo, determinando que a medida que
desaparezcan, por diversas razones, los miembros actuales, no queden sucesores de ellos. Por otro
lado, ese conformismo frena la mano de Dios para lo que Él quiera obrar en determinado lugar.
2. Según criterio del alumno.
3. Se refiere a líder genial, caracterizado por un espectro de aptitudes y cualidades extraordinarias, por
lo cual ese modelo es imposible de reproducir.
8.2 1. a) Personal b) Relaciones c) Compañerismo d) Relaciones Personales e) camaradería.
2. La diferencia entre los estilos de liderazgo se podría sintetizar así: No es lo mismo un “líder
capacitado” que un “líder capacitador”.
En el primer caso, “liderazgo capacitado” suele significar que hay un líder (generalmente sólo uno) que
es muy brillante, tiene muchos dones y posee un gran plan de expansión. Este líder necesita voluntarios
que le ayuden a concretar su visión. La membrecía sirve de buena gana a su poderoso líder para
realizar los sueños de su vida.
En el segundo caso, los líderes de iglesias que crecen no tratan de aumentar su propia autoridad
para convertirse en poderosos, sino que trabajan para capacitar a otros creyentes en el servicio. No
utilizan a los colaboradores como "auxiliares" para la realización de sus propios sueños y visiones,
sino que ayudan al desarrollo de cada creyente, lo apoyan, motivan, enseñan, acompañándolo hasta
que se convierta en todo lo que Dios quiere que cada uno sea. Alguno podrá ser guiado hacia un
camino diferente, pero los líderes capacitadores lo verán con gozo sabiendo que Dios tiene un plan
único para cada individuo.
8.3 1. La función de los líderes se reduce a ayudar a cada miembro de la iglesia a:
Descubrir los dones que haya recibido Encontrar un servicio que cumplir acorde con dichos dones.
2. Se puede asegurar que si las tareas que realiza en la iglesia están de acuerdo con sus dones, se
notará el gozo de vivir la vida cristiana.
3. Con una persona que asume un ministerio que no se corresponde con sus dones se puede
comparar con una rueda cuadrada: su avance será lento, torpe y fatigoso.
8.4 1. Según criterio del alumno.
2. La característica cualitativa "espiritualidad contagiosa" se define como: Fe transformada en vivencia
luego de un encuentro personal con Jesucristo.
3. Si la vida de oración de los creyentes se basa únicamente en el período diario medido por el reloj, el
efecto de la oración sobre el crecimiento de esa iglesia será muy escaso. Pero si los momentos de
oración se viven como una "experiencia inspiradora", su relación con la calidad y el crecimiento de la
iglesia será fuerte.
8.5 1.V; 2.V; 3.V; 4.F; 5.V; 6.V.
8.6 1.V; 2.V; 3.V; 4.F; 5.F; 6.V; 7.V; 8.V; 9.V; 10.V.
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9.1 1. Nuestra investigación mostró que la cuestión no es si alabamos utilizando una liturgia determinada
o lo hacemos de una manera más espontánea, o si el lenguaje con que nos comunicamos es
“evangélico” o empleamos uno más secular y cotidiano, ni siquiera si están enfocados hacia creyentes
o no creyentes. Estos elementos pueden variarse, pero no son ellos los factores decisivos para el
crecimiento de la iglesia.
2. El término "inspirador" debe ser entendido en el sentido latino de inspiratio. No se refiere a motivar
el cerebro hacia la creación como lo haría una técnica de control mental. Buscamos el soplo que
proviene del Espíritu de Dios, el que “tomará de lo mío y os lo hará saber” (Juan 6.14).
9.2 1. Surge de la anécdota de la iglesia más grande del mundo, en Seúl, Corea, Está relacionado al tema
de iglesias multitudinarias y cuidado pastoral.
2. Según criterio del alumno.
3. El factor decisivo es lo que llaman grupos "integrales", con lo que se quiere decir que en ellos no
solamente se habla de textos bíblicos, sino que los individuos pueden encontrar íntima comunión,
ayuda práctica y una profunda interacción espiritual.
9.3 1. La respuesta es difícil. Es casi imposible reducirse a una sola forma de evangelización con la