Te propongo que utilices la escritura en tu vida diaria como un
recurso para conocerte mejor, gestionar tus emociones, tomar
mejores decisiones y solucionar problemas o dificultades.
Puedes utilizar la escritura emocional y libre desde diferentes
perspectivas. A continuación comparto contigo algunas de ellas. Espero que te sean de utilidad:
1. Como herramienta de sanación de situaciones y
experiencias dolorosas. Coge una situación que te duela. Esa experiencia que sabes que todavía te causa odio, sufrimiento, vergüenza, cólera… y escribe sobre ella. Permite que salga aquello que llevas dentro, vívete en cada palabra. Re-escríbete, nárrate, organízate, aclárate, libérate, cuestiónate, perdónate, compréndete,… Permite que la historia que te has estado contando hasta ahora se transforme.
2. Como diario personal. La escritura de diario es una excelente
manera de auto-exploración y de autoconocimiento. Puedes estructurarte y desaprenderte cada día. 3. Como ejercicio de liberación y autoconciencia. Puedes utilizar la escritura en forma de diálogo, de carta, de preguntas y respuestas. Por ejemplo:
a. Puedes crear un diálogo con tu miedo, hablar con él,
permitir que se exprese a través de ti, que te cuente su manera de ver las cosas, que te responda… puede ser un ejercicio realmente iluminador. También lo puedes hacer con otros estados emocionales y sentimientos. Algunas opciones: dolor, ira, vergüenza, tristeza, alegría, felicidad, ansiedad, adicción,…
b. Escribir una carta de despedida a un ser querido para
cerrar una etapa. También puedes escribir una carta a tu yo del pasado en la infancia o adolescencia.
c. La escritura de listas es otra propuesta interesante. Por
ejemplo, para conocer tus fortalezas o debilidades, tus pasiones, listas de pros y contras, para tomar decisiones…
d. Puedes escribir tu propio cuento, narrar tu propia historia
épica. 4. Como herramienta de solución de problemas. No es necesario preguntar al tarot sobre tu futuro. Puedes encontrar la respuesta que buscas en ti. Todo está en tu mente. Permite que la mente te traiga y te guie hacia una nueva solución, una manera más creativa y fácil de resolver tus conflictos y preocupaciones.
a. Coge folio o pantalla en blanco, piensa en el problema o
preocupación y escribe sin parar, de manera automática, durante 15 o 20 minutos. Deja que esa parte de tu mente más profunda e inconsciente te revele respuestas y soluciones.
b. Te propongo que utilices el diálogo escrito también como
herramienta de solución de problemas. Busca una persona a la que admires, que sea para ti un ejemplo a seguir, que te inspire total confianza... ¿La tienes? Ahora pregúntala directamente cómo ella solucionaría tu preocupación. Puede ser muy revelador el diálogo. Haz las preguntas que quieras, deja que la escritura fluya.
Puede que seas escéptico/a, no te pido que me creas. Si no que
lo pongas en práctica y lo pruebes porque funciona. 5. Como una experiencia de relajación. La escritura puede estar conectada con el placer. Podemos encontrar ese momento de inspiración, de espacio personal para deleitarnos escribiendo. Enciende una vela, pon algo de incienso y tu música de relajación o meditación favorita. Explora y disfruta de tu universo interior.
Hasta aquí los ejercicios, espero que te hayan gustado y que los puedas poner en práctica ahora mismo. Te deseo una buena y sanadora escritura.