Madre América es el segundo ensayo de la recopilación de pensamientos ---

escritos por libertador y revolucionario José Martí. Este ensayo fue un discurso dado

por el político cubano el 19 de diciembre de 1889 en la Sociedad Hispanoamericana

de Nueva York. En este ensayo vemos reforzados muchos temas planteados en su

primer ensayo con respecto a las raíces latinoamericanas y la necesidad de este

pueblo de unirse ante las diferentes amenazas imperialistas y conquistadoras. Martí

en este ensayo hace un intento por levantar el orgullo de los latinoamericanos

haciendo mención a en lo que esta tierra ha logrado convertirse a pesar de las

opresoras condiciones en las que se fundó. Por lo tanto, Martí hace un énfasis en la

determinación que cada latinoamericano debe de tener para lograr que a su tierra

se le respete por las adversidades ante las que se ha enfrentado y levantado. Aquí

es posible observar las intenciones utópicas del autor puesto que su visión es que

cada habitante viva orgulloso de este pueblo y con disposición a servirla y honrarla.

Sin embargo, este es el mensaje final de su ensayo puesto que inicia mencionando

los muchos golpes que ha sufrido latinoamérica a lo largo de su historia. Martí

procede colocar a Lincoln y a Juárez como figuras contrarias de diferentes

Américas. Martí declara que a pesar de contar con total libertad, América del Norte

no llega a alcanzar los niveles de grandeza de américa latina puesto que este

territorio es nuestro y ha sido sometido por más desgracias. Se observa un intento

de inspirar a través de su mensaje que la grandeza se consigue a través de la

capacidad de superar todo tipo de dificultades. Esto para mí sería el segmento más

importante de su ensayo ya que todo lo que Martí procede a desarrollar recae en

este pensamiento, que América Latina es valerosa y grandiosa por su inigualable

capacidad de vencer. A continuación, el autor procede a mencionar algunos de los

momentos en su historia en los que américa latina ha vencido ante la dificultad. El

autor se traslada hasta sus orígenes manchados de sangre. El autor ilustra

paralelamente este violento comienzo y el norte norteamericano al comparar que el

“del arado nació la américa del norte y la española, del perro de presa” A partir de
esta comparación, Martí también hace un señalamiento al desarrollo de ambos

territorios y cómo mucho de eso se debe a sus orígenes. Por lo tanto, Martí lamenta

lo barbárico y violento de la conquista española que en un plano más profundo

también estancó a la larga el desarrollo del territorio. También compara que

mientras en los estados unidos los padres fundadores o “cuáqueros” levantaban

escuelas, en lo que sería Hispanoamérica, se daba un establecimiento totalmente

sangriento. Aún en esta crítica hacia España y su manera de tomar latinoamérica,

Martí señala los diferentes sometimientos de diversos pueblos indígenas ante esta

fuerza colonizadora. Dentro de esta mención se encuentra el asesinato de

Moctezuma en su propio templo por parte de Cortés y hace también otras

menciones sobre el territorio guatemalteco, colombiano y peruano. Esto es parte del

recuento del autor sobre el agresivo asentamiento español en las tierras

latinoamericanas como parte de las adversidades que este territorio se ha tenido

que enfrentar, haciéndolo así grande. Martí concluye esta idea mencionando que

América no necesita nadie que la guíe y la junte, que ella misma es capaz de

levantarse, pelear y vencer como un mismo pueblo. Aquí una vez más es posible

observar los esfuerzos por parte del autor de lograr una américa unida,

independiente y fuerte en cada una de sus numerosas luchas. Justamente, Martí

menciona que ante toda esta desdicha y adversidad, nació un pueblo firme y más

unificado. En esta parte de su ensayo es donde Martí cementaria su mensaje

principal de un nuevo nacimiento ya mencionado, donde relata que “sobre las

hidras, fundamos”. Después de esta frase, Martí mencionaría muchos de los nuevos

cimientos establecidos por el pueblo en lo que antes era propiedad de los

colonizadores. Dentro de estos, menciona que se establecieron escuelas en las

plazas donde se solían quemar herejes. Una vez más, Martí hace mención a la

capacidad del pueblo latinoamericano de vencer y renacer y establecer su

grandeza.