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MEMORANDO

PARA: ALEJANDRO GÓMEZ LOPEZ


Secretario de Salud de Bogotá

DE:
ASUNTO: Análisis de la Encuesta Calidad de Vida año 2016

Respetado Secretario,

En atención a la tarea encomendada por usted relacionada con realizar un análisis a la encuesta
reciente sobre calidad de vida publicada por el DANE, a continuación, le presentaremos un análisis
de los datos de dicha encuesta, que son relevantes para la toma de decisiones por parte de su
despacho en razón de las competencias misionales de la Entidad que usted lidera.

Es importante resaltar que este memorando contiene el análisis del capítulo dedicado a los jefes de
hogar, que comprende una muestra de 13.089 personas encuestadas en la ciudad de Bogotá, el
procesamiento estadístico de la información se realizó a través del software STATA 16.0 y
obtuvimos los siguientes resultados:

Respecto a la caracterización de los jefes de hogar, la muestra nos señala que el 69,62% son
hombres y el 30,38% mujeres. Estas cifras nos indican que el mayor porcentaje de la figura sigue
estando en cabeza de los hombres, como tradicionalmente ha ocurrido. Al comparar con el estado
de salud autoreportado, es preocupante la brecha existente entre hombres y mujeres que consideran
que su estado de salud es malo, mientras que de las mujeres el 19,06% reportan un mal estado de
salud, en los hombres este porcentaje corresponde al 9,55%.

Frente a la edad, tenemos que la media de edad de los jefes de hogares es de 39,64 años. Aunque
aproximadamente el 68% de los individuos se encuentran entre 26 y 53 años de edad, es importante
resaltar que se observan jefes de hogar muy jóvenes (entre 16 y 22) que conforman el 16,98% de la
muestra. Llama la atención que la edad mayor registrada es de 65 años, por tanto, se estarían
presentando un fenómeno a tener en cuenta, hay adultos mayores que son jefes de hogar. Al analizar
la relación con el estado de salud, se encuentra que la medida de tendencia central de quienes
reportan que su estado de salud es bueno es de 39,6 años, mientras que la medida de tendencia
central de quienes reportan que su estado de salud es malo es de 43 años.

Frente al estado civil de las personas encuestadas el 54,99% indican que “no se encuentra ni
casados ni en unión libre”, el 32,33% indican estar “separados o viudos”, el 8,25% está “casados o
en unión libre” y solo el 4,43% manifiesta estar “soltero”. A partir de lo anterior, es importante
resaltar el alto porcentaje de hogares (91,75%) que cuentan con un jefe de hogar que no tiene
pareja, es decir hay una alta probabilidad de hogares monoparentales. Al desagregar por sexo, la
muestra nos refleja que la probabilidad de hogares monoparentales dado que están cabeza femenina
(93,46%), es mayor a los de cabeza masculina (91%). A raiz de lo anterior, es importante enfatizar
que, de los jefes de hogar sin pareja, el 13,1% reporta que se encuentran mal de salud, mientras que,
de los jefes de hogar con pareja, sólo el 4,2% reporta que se encuentran mal de salud. Es decir, es
casi 3 veces más probable autoreportar que se encuentra mal de salud si el individuo no se
encuentra “casado o en unión libre”.
Además, la muestra nos arroja que el 7,55% de los individuos son beneficiarios del programa Más
Familias en Acción. No obstante, al indagar los individuos que reciben ingresos por subsidios, se
encontró que quienes pertenecen a Más Familias en Acción reciben en promedio menos ingresos
por subsidios que quienes no hacen parte del Programa. Además, se puede concluir que quienes
hacen parte de Familias en Acción no están considerando los pagos condicionados como un
subsidio, dado que al menos el 25% de quienes pertenecen al Programa respondieron que tienen
cero ingresos por concepto de subsidios.

En este punto es importante resaltar que quienes no hacen parte de Familias en Acción están
reportando mejor estado de salud, específicamente, el 84% reporta encontrase en buen estado,
mientras que de quienes pertenecen al Programa, sólo el 62,8% reporta dicho estado. Por otro lado,
es importante apuntar que, al desagregar por sexo, el 10,79% de las mujeres pertenecen al
programa, mientras que, en los hombres, este porcentaje corresponde al 6,13%. Sin embargo,
preocupa que, en promedio los hombres reciben más ingresos por subsidios que las mujeres, es más,
mientras que al menos el 50% de las mujeres están recibiendo cero ingresos por subsidios, este
porcentaje en hombres equivale al 10%. Y, al analizar el estado de salud respecto a los ingresos por
subsidios se encontró que, en promedio, quienes reportan tener buen estado de salud tienen mayores
ingresos por subsidios que quienes reportaron tener un mal estado de salud. Es más, de quienes
reportaron encontrarse en un buen estado de salud, sólo 10% o menos no tienen ingresos por
subsidios, mientras que para quienes reportaron un mal estado de salud, este porcentaje corresponde
al 25%.

Paralelo a los ingresos por subsidios, es importante analizar la situación laboral de los encuestados,
donde el 89.53% manifiesta contar con un empleo y el restante indica estar desempleado, y, dado el
sexo, se encuentra que el 88,18% de las mujeres están empleadas, mientras que en los hombres este
porcentaje corresponde al 90,11%. Es preocupante que, al analizar la situación laboral y los
ingresos laborales, se encuentra que quienes reportan estar empleados, al menos el 50% reporta 0
ingresos laborales. Es curioso que, frente a las horas trabajadas, quienes reportaron estar empleados,
en promedio trabajan 11,2 horas a la semana, dato que consideramos que pudo haber un error en el
reporte de información y que los encuestados hayan reportado las horas diarias. Considerando este
posible sesgo, el análisis sobre el estado de salud se hace respecto al estado laboral. De quienes
están empleados, el 82,88% considera que su estado de salud es bueno, un comportamiento
semejante a quienes están desempleados y reportaron una buena salud (80,23%). Esta semejanza
también se presenta para el estado de salud regular y malo. En síntesis, se podría decir que la
diferencia en el estado de salud de quienes se encuentran empleados, contra los desempleados, no es
tan diferente.

De acuerdo con el grado de escolaridad reportado por los encuestados el cual denota que estamos
hablando de una población con muy bajos grados de escolarización ya que de la muestra el 70.72 %
indica no tener ningún tipo de formación, y solo el 3.12% cuenta con formación universitaria. Sin
embargo, se tiene en cuenta que este 70,72% se puede deber a un error de la encuesta, ya que la
categoría “ninguno” puede entenderse como “ninguno de los anteriores” lo cual incluiría a personas
que, por ejemplo, tienen un nivel de escolaridad mayor a universitario. Por lo anterior, para hacer el
análisis respecto al estado de salud, se tienen en cuenta los niveles de escolaridad especificados. Es
de resaltar que existe una gran brecha entre quienes tienen un nivel de primaria y quienes tienen un
nivel de universitario, principalmente en el estado de salud malo y el estado de salud bueno. El
46,94% de quienes tienen nivel universitario reportan estar mal de salud, mientras que respecto a
quienes tienen un nivel de primaria, sólo el 8,3% reporta este estado.

Ahora, frente al núcleo familiar, los jefes de hogar tienen entre 1 y 10 hijos, con una alta dispersión
de los datos, y con una medida de tendencia central de tres hijos por individuo. Es curioso que, el
número de hijos entre quienes reportan un buen estado de salud contra un mal de estado de salud, es
casi el mismo, 3,6 y 3,5, respectivamente.

En conclusión, a partir del análisis anterior sobre la muestra de la Encuesta de Calidad de Vida
2016, es preocupante la diferencia en probabilidad que se encontró en el estado de salud según las
categorías y datos de las variables sexo, estado civil, ingresos por subsidios y el nivel de
escolaridad. Por otro lado, las variables que reportan menos brechas en la probabilidad del estado de
salud según sus categorías o datos son estado laboral, edad y número de hijos. Por lo anterior, y
teniendo en cuenta las competencias de su Despacho, le sugerimos hacer un análisis más profundo
de las primeras categorías, dado que a partir de nuestro análisis no es adecuado determinar si existe
correlación entre las variables.

Anexos memorando

Variable sexo:
Tabla 1. Porcentaje hombres y mujeres.

Tabla 2. Porcentaje de estado malo de salud dado el sexo.

Variable edad:
Tabla 3. Edad del jefe del hogar si su estado de salud es malo

**Se uso la mediana como medida de tendencia central ya que la media y la mediana son diferentes.

Tabla 4. Edad del jefe del hogar si su estado de salud es bueno.


**Se uso la media como medida de tendencia central ya que se asemeja a la mediana.

Variable estado civil:


Tabla 5. Distribución estado civil

Tabla 6. Distribución estado civil dado el sexo

**Para encontrar el porcentaje de quienes viven sin pareja, se sumó las tres categorías que son diferentes a
casado/unión libre, por cada sexo, y se dividió por el total de individuos de cada sexo.

Tabla 7. Estado de salud según el estado civil

**Para encontrar el porcentaje de individuos sin pareja en mal estado de salud, se sumó quienes reportaron
que están mal de salud en las categorías no está casado ni en unión libre, separado o divorciado y soltero y se
dividió sobre el total de quienes pertenecen a estas últimas categorías.
Variable Más Familias en Acción:
Tabla 8. Beneficiarios Más Familias en Acción

Tabla 9. Ingresos por subsidios si son beneficiarios de Más Familias en Acción

Tabla 10. Ingresos por subsidios si no son beneficiarios de Más Familias en Acción

Gráfico 1. Ingresos por subsidios según pertenencia al Programa Más Familias en Acción

Tabla 11. Estado de salud dada la pertenencia al Programa Más Familias en Acción
Tabla 12. Pertenencia al Programa según el sexo

Variables ingresos por subsidios:


Tabla 13. Ingresos por subsidios si son hombres

**Se uso la mediana como medida de tendencia central dado que son diferentes la media y la mediana.

Tabla 14. Ingresos por subsidios si son mujeres

**Se uso la mediana como medida de tendencia central dado que son diferentes la media y la mediana.

Gráfico 2. Ingresos por subsidios según género


Tabla 15. Ingresos por subsidios si el estado de salud es malo

Tabla 16. Ingresos por subsidios si el estado de salud es bueno

Gráfico 3. Ingresos por subsidios según estado de salud


Variable estado laboral:
Tabla 17. Estado laboral dado el sexo

Tabla 18. Ingresos laborales de quienes están empleados

Tabla 19. Estado de salud si se encuentra empleado

Tabla 20. Estado de salud si se encuentra desempleado


Variable nivel de escolaridad:
Tabla 21. Nivel de escolaridad

Tabla 22. Estado de salud malo dado nivel educativo

Variable número de hijos:


Gráfico 4. Número de hijos por individuo.
Gráfico 5. Número de hijos según estado de salud del individuo

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