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Club de Ajedrez

RICARDO AGUILERA y FRANCISCO JOSE PEREZ

AJEDREZ HIPERMODERNO 1
(Bajo la dirección de A. Alekhine)

FUNDAMENTOS IAGUILERA
Club de Ajedrez

© Editorial Ricardo Aguilera 1984


Padilla 54. Madrid 6. España
Tfno. 4 02 73 25
© Editorial Fundamentos 1984
Caracas 15. Madrid 4. España
Tfno.4 199619

1a y 2a edición Editorial Castilla


3a edición 1972
4a edición 1984

ISBN (Obra completa) 84·-7005-157-1


ISBN (Tomo 1) 84-7005-207-1
ISBN (Obra completa) 84-245-0387-2
ISBN (Tomo 1) 84-245-0388-0
Depósito Legal: M-5412-1984

Impreso en España. Printed in Spain


Impreso por Técnicas Gráficas. Las Matas 5. Madrid 29

Diseño gráfico: Pablo y Cristina


PRESENTACION

C OMO todas las cosas de este mundo, el ajedrez ha evolucionado al


compás del tiempo; y no sólo en lo que se refiere a su práctica, sino
muy principalmente en cuanto atañe al concepto que sucesivamente se
han ido formando los hombres del combate de los trebejos.
La sensación que un ajedrecista de hoy experimenta ante el tablero es
de muy distinta naturaleza, no hay duda, a la que experimentaron, por ejemplo,
Ruy López o Philidor. En una época dominaba un criterio general sobre la
finalidad del combate y los elementos que decidían la lucha, y en otra época
aquellas ideas eran anuladas y sustituidas por nuevos conceptos derivados,
naturalmente, de las enseñanzas y consecuencias obtenidas por la práctica
o bien de los principios revolucionarios introducidos por algún genial inno-
vador.
Hasta tal extremo han constituido unidad armónica y definida los dis-
tintos conceptos que informan la historia del ajedrez que, considerados aislada
o conjuntamente, cada uno de estos conceptos del tablero constituyen ver-
daderas escuelas, a semejanza de lo que ocurre con las bellas artes.
A través de una mirada de conjunto podemos decir que la historia del
ajedrez está definida en dos grandes períodos de evolución: uno que com-
prende la época remota y la época antigua, desde los españoles e italianos
del tiempo de Ruy López y del Greco hasta Morphy, pasando por Phi/idor,
Labourdonnais, Mac Donnel, Andersen, etc.; y otro que empieza en Steinitz,
hasta nuestros días.
y considerando con detenimiento estos dos grandes periodos, para apre-
ciar sus matices y características, descubriremos perfilados con trazos bien
definidos y vigorosos cada una de las distintas escuelas de ajedrez. Estas
tendencias toman cuerpo real a partir de Philidor, en cuya época puede
definirse la escuela dominante como la de «instauración de la teor(Q». Des-
pués surge la llamada «escuela romántica», cuyo enunciado dice mucho por
sí solo. Le sigue la «escuela de desarrollo», con las teorías de Morphy. Ya en
la época moderna aparece con Steinitz la «escuela posicional» y, finalmente,
en nuestro tiempo surge, derivada de las ideas de Reti y Nimzowitch, la lla-
mada «escuela hipermoderna». ,
La finalidad de esté libro ha de ser la exposición de las ideas y conceptos
que dan vida a cada una de estas escuelas. Pero como al mismo tiempo es
nuestro deseo ofrecer al ajedrecista y al aficionado las razones didácticas
en que se inspira la moderna estrategia y las últimas ideas sobre las tácticas
aceptadas en nuestra época, puesto que en definitiva esto es lo que más in-
teresa, nos limitaremos a recoger, de forma somera y esquemática, las es-
cuelas vencidas por el tiempo y sólo para que sirvan de acceso a la buena
comprensión de las muy sutiles y profundas concepciones del hipomodernismo.
Y no se reducirá este propósito a la exposición literaria de tales ideas, sino
que las mismas serán advertidas por el lector a través de las partidas vivas,
producidas en cada época y definidoras 'por si mismas de cada escuela.

6
ro QUE SIGNIFICA EN NUESTRO
TIEMPO LA LUCHA DE AJEDREZ

L A evolución del ajedrez a través del tiempo, a que antes nos hemos re-
ferido, no es otra cosa que la consecuencia de las enseñanzas y co-
nocimientos adquiridos por el hombre sobre el tablero.
Cada dia se exige más al médico, al abogado, al ingeniero, al mecánico,
al oficinista, al obrero, porque cada dfa es más copioso y profundo el cono-
cimiento que poseemos de las distintas materias del trabajo y de la actividad
humana. No en vano transcurren los años y los siglos animando de fecunda
experiencia la actividad de los hombres. Para vivir al compás de nuestro
tiempo, hemos de desarrollar en nuestra labor un esfuerzo superior al que
realizaron nuestros antepasados en igual oficio. Es cierto que la civilización
tiende a llevar al hombre la comodidad y rodear de facilidad sus actividades,·
pero ello no es con otro objeto, en definitiva, que para procurar que esa acti-
vidad sea más provechosa e intensa, para que la sociedad obtenga mejores
frutos de su esfuerzo. Así, la radio, la aviación, el teléfono, la televisión,
ganando batallas al tiempo, hacen más fecundo nuestro trabajo. Pero estos
factores no reducen la tensión a que es sometido el cerebro del hombre de
nuestro tiempo, sino que, contrariamente, le estrecha en un circulo de conte-
nida atención y le obliga al desarrollo de progresivo caudal de energfa.
El ajedrez, que, como ya se admite hoy sin discusión posible, es una acti-
vidad cerebral de notables valores estéticos, un verdadero arte y no un simple
juego o pasatiempo, tenfa que resultar afectado también por esta ley universal
de la progresiva evolución, ni más ni menos que ocurre con las distintas
materias cientificas o artísticas. Poco a poco, a través de los siglos transcu-
rridos desde que tenemos conocimiento de su práctica, ha ido transformándose
el contenido y la forma de la lucha ajedrecistica.
La batalla cerebral que anima una partida de ajedrez está integrada
por una serie de factores de tipo temperamental y sentimental, pero también
de otros de carácter puramente cientifico. Es posible que, en orden a los
7
primeros, la evolución impuesta por la marcha del tiempo no tenga otro
aspecto que el que en general haya sufrido el hombre en su constitución
psiquica que, posiblemente, no habrá sido muy acusada; pero lo que no admite
discusión es que en orden a esos otros factores de tipo cientifico tal evolución
es verdaderamente sensacional.
Efectivamente, el estudio teórico y analftico de la fase inicial de la par-
tida (las aperturas) y también de los finales de juego, apartándose de la
naturaleza artistica que distingue al juego medio, donde la personalidad
y la particular fortaleza del ajedrecista juega el papel principal, constituye
un dispositivo cientifico que es totalmente necesario estudiar y conocer en
sus menores detalles si realmente se pretende vivir en ajedrez a la altura
de nuestra época. Hoy dia no es posible aspirar al éxito en las luchas oficiales
sin más bagaje que la propia capacidad, por muy notable que ésta pueda ser.
Es necesario una compenetración total con los postulados estratégicos y tác-
ticos que rigen el tablero,' es necesario conocer a fondo el <<motivo» y el
«espiritu» de cada apertura,' es necesario saber la conducta exacta en los
finales de juego, cuando hay que valorizar hasta el triunfo la mínima ventaja,
o cuando hay que conducir a la igualdad la mínima inferioridad.
Por ello, el ajedrecista de hoy no sólo ha de forjarse en el empirismo
de la simple práctica y de la experiencia~ sino que deberá simultanear esta
labor con el detenido estudio que exigen las leyes teóricas actuales.

8
EL AJEDREZ HIPERMODERNO

OS grandes maestros de nuestro tiempo nos ofrecen en sus producciones


[
todas, sin menoscabo de los variados matices de sus respectivos estilos,
un denominador común de homogeneidad, un contenido uniforme y armó-
nico en la constitución cerebral de cada partida de ajedrez. Ese denominador
común se define en el hipermodernismo, la escuela de nuestro tiempo, cuyos
principios vamos a examinar a través de numerosas, magistrales partidas,
en esta obra.
Pero antes de ello convienen algunas palabras de aclaración en este punto
no siempre bien concretado de las escuelas del ajedrez.
Mejor que hipermoderna -palabra inexpresiva y de carácter eventual-
debería llamarse «ecléctica» la escuela de nuestro tiempo. En efecto, ella
recoge y armoniza con gran llaneza los criterios estratégicos y tácticos más
admisibles de cada escuela pasada y adoba el conjunto de sus normas con
las más acabadas teorías de precisión.
Pero como quiera que esta escuela, por su amplicisimo carácter, está
integrada por la asociación de ideas básicas de las escuelas anteriores, claro
está que para compenetrarse bien con sus principios, es necesario el previo
conocimiento de todas ellas. He ahí la razón primordial de este libro, donde
esperamos que el inteligente aficionado, al examinar sobre el tablero las
producciones que ofrecemos de diversas épocas y estilos, pueda comprender
por sí mismo el secreto de las razones que dieron lugar a la formación de la
tan complet{sima escuela de nuestro tiempo.
Oportunamente, cuando por orden cronológico lleguemos al hipermoder-
nismo, expondremos, antes de dar comienzo al capítulo de partidas, los
principios básicos de esta escuela.

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1

LA EPOCA REMOTA DEL AJEDREZ.-LA ESCUELA


CREADA POR ESPA~OLES E ITALIANOS

La invención de la imprenta vino a ex- nantes, aunque es cierto que ya se cono-


tender por el mundo las actividades e in- clan otros sistemas de planteos, como la
vestigaciones ajedrecistas de algunos juga- defensa siciliana y la defensa francesa;
dores que alcanzaron gran renombre, pero no alcanzaron verdadera popularidad
y, aunque esta actividad resultó en general más que las indicadas y ninguna otra
difusa y poco orientada, es lo cierto que obtuvo nombre especial con que fuese
constituyó una formidable fuente de co- distinguida.
nocimientos. Aunque la finalidad sustancial perse-
En aquellas épocas, la batalla de ajedrez guida por estos maestros en cada una de
era una esgrima de trampas y ardides, en las aperturas descritas seguía siendo (de
la que no intervenían otros factores que acuerdo con el concepto que en aquellas
el ingenioso engaño capaz de sorprender épocas se tenía del tablero) la trampa
y alcanzar la victoria en breves movi- o celada que dejase desarmado al enemigo
mientos. El valor comparativo de las piezas en breves golpes, la consecuencia que se
en conjugación con las casillas y las posi- obtuvo fue una gran atención por las
ciones era totalmente ignorado, y la ven- primeras jugadas, y, por consiguiente, la
taja se definía únicamente en el ataque riqueza de variantes en los dispositivos
ya organizado y pronto al desenlace. de ataque facilitados por cada uno de I->s
El español Lucena fue el primero de los sistemas en uso.
tratadistas de ajedrez y a él se deben los Greco, el Calabrés, publicó en 1621 un
primeros pasos en el camino de las aper- volumen en el que resumía sus mejores
turas teóricas. descubrimientos en aperturas. En él puede
Continuando su iniciativa, el español observarse (y esto era. característico en la
Ruy López y los italianos Damiano, época) una atención concentrada sólo en
Salvio, Paolo Boi, Putino y Greco, con- la determinación de motivos de ataque,
siguieron reunir y ordenar en clasificación despreciándose el analizar los naturales
buen número de aperturas, bautizándolas y más consecuentes sistemas defensivos
con los nombres con que hoy día se co- contra ellos. Desde luego, no es dificil hoy
nocen. Desde entonces, se habló del día, incluso para los poco versados en la
Giuoco piano, de la Ruy López, del alta teoría de las aperturas, hallar el punto
gambito de Salvio, del fiancheto de Rey, inocente de los <<ataques» organizados por
del fiancheto de Dama, del gambito de aquella remota secuela, pero no se piense
Dama. Estas fueron las aperturas domi- por ello que jugadores como el Greco
11
fuesen incapaces de concebir planes de «Aqu( hace observar que RIT o R2T
homopeidad y lógica. Como curiosidad, no son continuaciones satisfactorias de-
exponemos un trozo de partida colJlCn- bido a la respuesta A x P, y juega:
tado por el Greco y recogida por Lasker.
S RIA
A3T+ 6 C2R
A3C 7 DlR
D5D 8
«Dejando a las negras enteramente sin
esperanzas contra el remate que se ame-
naza jugando D8C.»

Los descubrimientos de italianos y es-


paí'loles en los ataques directos al Rey,
trajeron como consecuencia posterior un
nuevo criterio sobre los finales. Comenzó
a prestársele atención a esta fase del juego
y el principio de la «economfa» fue ya
perfilándose.
Carrera expuso una serie de finales de
belleza en los que este principio adquirió
ya toda una gran fuerza, y posteriormente
El Greco, con las blancas, jugó asf: quedó muy consolidado el estudio de la
evolución final sobre el tablero de pocas
TxC+ l PxT piezas. Es curioso observar estos ejemplos
CSC 2 0-0 de problemas finales.
<<Pierde de vista la posibilidad de prac-
ticar C4R». COMBINACION DE MENDHElM
D5T 3 LAS BLANCAS DAN MATE EN SEIS JUGADAS

<<Amenazando mate.»
3 P3TR
CxP 4
<<Ahora enseña que la tentativa de salvar
la pérdida de la Torre o de la Dama con-
duce a un rápido mate, tal como el si-
guiente:

4 D3A
CxP+ S RlT
C7A+ 6 RIC
D8T++ 7
«y en consecuencia, el Greco concluye
que las negras debieron continuar as!:

4 TxC
AxT+ S T7R+ l
12
Con objeto de que la casilla 2R sea LAS BLANCAS DAN MATE EN SIETE JUGADAS
obstruida por el Alfil, completando así las
obstrucciones que rodean al Rey.

1 AxT
C7A+ 1 RlA
A5D+ 3 RlA
C6R+ 4 R1A
CSC+ 5 RlA
CTf+ + 6

Repárese en que, aun cuando ganan,


los movimientos blancos son obligados.
Es decir, que de no ganar con la combina-
ción, de conceder un leve respiro a las
negras, las blancas perderán, por su
enorme desventaja material.

LAS BLANCAS DAN MATE EN CUATRO JUGADAS


TSD+ 1 RlA
D6R+ 1 AxD
PxA+ 3 RxP
A4A+ 4 R4R
T5D+ 5

Ahora las negras tienen dos jugadas


a elegir: tomar el Peón o mover el Rey.
Si toman el Peón, el Caballo da mate
en 3AD.

5 R3R
T6D + doble 6 R4R
T6R ++ 7
LAS BLANCAS DAN MATE EN SIETE JUGADAS

TSC+ 1 CxT
DxT+ 1

Con idea de actuar con el Alfil, que no


puede moverse por la clavada de Torre.
La Torre debe capturarse antes de que
el Caballo dé jaque, pues de lo contrario
las negras podrian elegir una jugada más,
R x D, lo cual quebraría el objeto del
sacrificio.

1 AxD
C6C+ 3 RlD
A7A+ + 4

13
D8R+ 1 RlT Sin esta jugada, la partida seria tablas.
CSC+ 2 PxC Ahora entrean en liza las Torres.
PxP+ 3 AxT
T6T+ 4 PxT 8 CxC
P6C+ 5 RlC TxP+ 9
D7A+ 6 R1T
D7Tu8A + + ~7 Apartando una obstrucción; ésta es una
LAS BLANCAS DAN MATE EN DOCE JUGADAS
de las fórmulas

9 RxT
TlT+ 10 C5T
TxC+ 11 R3C
A7A ++ 12

COMBINACION DE MENDHEIM,
RECOPILADA POR tASKER

LAS BLANCAS DAN MATE EN CUATRO JUGADAS

DxP+ 1 R1T
D8C+ 2
Unico jaque que obliga a la continuidad
de jaques.

2 RxD
ASD+ 3 R1T
C7A+ 4 R1C
CxT+ 5 R1T
C7A+ 6
El Caballo en 6D está clavado.
T8A + 1 AxT
6 R1C D8C + 2 RxD
C5R+ 7 R1T C6A + 3 R1T
C6C+ 8 TxT++ 4

14
11

EPOCA ANTIGUA.-ESCUELA DE INSTAURACION

FRANCISCO ANDRES - DAMIAN PIDLIDOR

Hasta el año 1745 no volvió la teoria del ficado fundamental que en orden a la
ajedrez a recibir nuevos impulsos. Con las teoria supone para el progreso ajedrecís-
aportaciones efectuadas por españoles tico. El camino abierto por Philidor se
e italianos se mantuvo el ajedrez durante pobló pronto de seguidores, que hallaron
un par de siglos sin realizar progresos en el análisis una de las más bellas mani-
visibles; faltaba la organización de prue- festaciones del ajedrez. Con los análisis
bas y certámenes que despertasen el ali- fue paulatinamente adquiriendo consis-
ciente teórico o bien la presencia de algún tencia los enunciados teóricos, producién-
genial innovador, algún cerebro extraor- dose la necesaria contrastación de prin-
dinario que hiciese vibrar de emoción cipios y reglas que, sometidas a la prueba
a los ajedrecistas descubriendo en el ta- práctica, eran registradas en valores más
blero nuevos horizontes. Y fue Philidor o menos consolidados. Esta fue esencial-
quien en el citado año cubrió este vacio mente la gran aportación de Philidor,
con amplitud sorprendente. quien con sus ideas abrió el camino a la
Como consecuencia de la actividad de teoría analítica, que hasta entonces, sólo
este genial maestro, quedó establecida en de manera rudimentaria, indefinida y es-
el mundo del ajedrez una verdadera escuela porádica, pudo apreciarse como deriva-
teórica, quizá sin que el mismo Philidor ción de las ya lejanas actuaciones de ita-
se percatase de ello. Las ideas derramadas lianos y españoles.
sobre el tablero en sus sensacionales ac- Otra significación innovadora de Phi-
tuaciones, despertaron el interés de sus lidor la registra el hecho de que fue el
admiradores ingleses, quienes le pidieron primer hombre que llegó a ser profesional
las expusiese en un libro para su mejor del ajedrez. Su capacidad estaba tan ele-
difusión. En 1748 se publicó L'Analyse du vada sobre su época, que no existió rival
jeu des Echecs, obteniendo con él Philidor digno de él, y a todos había de darles
éxito inmediato, y siendo extendido y di- ventaja para revestir de algún interés la
vulgado por numerosos paises. lucha. Unido a ello, además, sus maravi-
La introducción a la teoria, motivada llosas dotes de jugador a la ciega, las
por Philidor, quedó hecha realidad en esta actuaciones de Philidor eran acompañadas
obra, no tanto por su contenido como de expectación enorme. Tal eventualidad
por su significación. En efecto, hasta le facultó para recurrir al ajedrez como
aquella época, la facultad de analizar las único medio de vida, cuando las circuns-
partidas y comentarlas, no tuvo el signi- tancias le fueron adversas y no obtenía
15
de su profesión de músico los frutos nece- de sus Peones o cuando menos para rom-
sarios. Vivió !argo tiempo en Iroglaterra, perla, una cadena de Peones bien apoyada
donde siempre obtuvo una acogida llena por las piezas, a las cuales le sirva de pro-
de comprensión y entusiasmo. tección.
Además del formidable servicio que al En estos tres postulados se condensa la
ajedrez prestó con la instauración del teoría de Philidor respecto al juego de
análisis, Philidol' aportó a la teoría algu- Peones. El primero y el capital error que
nos principios de valor básico que han se manifiesta en estas afirmaciones es la
sido de verdadera utilidad, y que, con afirmación misma. No hay nada tan sujeto
modificaciones más o menos extensas, a error corno el axioma inexorable. Pre-
subsisten hoy corno elementides leyes de tender sujetar a leyes precisas y matemá-
ajedrez. Philidor descubrió la fuerza ticas las posibilidades fabulosas del pen-
y finalidad de los Peones, concediendo a la samiento, supone un acto de verdadera
formación encadenada de ellos especial inconsciencia. La escuela de nuestro
valor e importancia. La idea de Philidor tiempo -el hipermodernismo- tiene muy
en este motivo de los Peones era no poco presente este filosófico principio y se
exagerada y falta de exactitud. por cuanto guarda muy bien de establecer «para todos
llegó a conferirles una tarea principalisima los casos» enunciados corno estos dedi-
y única. Esta exageración, sin embargo, cados por Philidor a los Peones. Hoy dla
motivó que· se presentara la teoría del se sabe que la táctica es algo que nece-
significado de los Peones, a los que, hasta sariamente ha de conjugarse con los fac-
entonces, no se habla concedido la nece- tores especiales que en la lucha concurren
saria atención. Decla Philidor que para y estos factores son tan numerosos y va-
montar bien un ataque era preciso el riables que dificilmente concurrirán ni en
avance de la infantería encadenada y apo- igualdad ni tan sólo en semejanza en dos
yada por las piezas de mediano y grueso partidas.
calibre, que impulsaran su carrera. Si Sin embargo, corno principios a tener
bien es cierto que Philidor vencla siempre en cuenta, los enunciados de Philidor
con estos procedimientos, la clave de sus reúnen valores muy destacados y su in-
victorias no puede hallarse en tales prin- corporación al caudal teórico reviste sin-
cipio, sino en la fortaleza insuperable de gular iJl.lportancia, ya que, en virtud de
su poderosa imaginación ajedrecistica:. que ellos y corno consecuencia natural, queda
con cualquier otro procedimiento hubiese dibujada en la estrategia del ajedrez un
vencido de todas maneras. Las leyes de los nuevo horizonte: el valor de las posiciones.
Peones fue descrita por Philidor de la Esencialmente, Philidor fue el precursor
siguiente forma: de la escuela posicionista que tan genial-
a) Cuando todavla quedan muchas mente instaurara Steinitz ciento cincuenta
piezas en el tablero, resultarán débiles los ai'los después.
Peones muy avanzados, es decir, que es- En cuanto a los estudios ofrecidos por
tarán en peligro de caer en manos del Philidor en su Análisis, que movieron, se-
enemigo si no se encuentran poderosa- gún hemos dicho, a todos los ajedrecistas
mente apoyados por la retaguardía. hacia el campo vastlsimo del estudio y del
b) Si se mantiene el centro, es decir, examen reflexivo de las posiciones, es
si tenernos dos Peones, uno en 4D y otro digno de destacar, siquiera sea a titulo
en 4R, no deberán avanzarse, a no ser de curiosidad y ejemplo para no apartar-
por razón de gran peso, antes de que' el nos del objetivo de este libro, el efectuado
contrario haya propuesto cambiar uno a base de posiciones finales. Uno de estos
de sus Peones por otro de les nuestros. estudios se contrae a la posición de este
En tal caso debe ser evitado el cambio diagrama.
avanzando el Peón atacado. Philidor explica de la siguiente forma el
e) El ataque es decisivo, aun COntra procedimiento que han de emplear las
posiciones muy fuertes, que de otro modo blancas para vencer. Las negras amenazan
serian inexpugnables, si se envla sobre el una- serie de jaques empezando con
campo enemigo, para destruir la linea T2R +, procedimiento que seguirán en

16
todo caso. aun cuando se intentase por Ahora no es posible a la Torre ne¡ra
el blanco A6D. ya que el «ahogo» impe- dar jaque ni seria bueno jugar S• •••• RIA.
dirá tomar la Torre. porque las blancas continuar6n: 6. T4C,
RSR; 7. T4CD. TSD; 8. A4T. y despu6s
de esto la victoria es fácil por vía de
8. ...• RIA: 9. A6A. RIC: 10. T4TR,
T8R +: 11. ASR. Es por estas razones
por las que la conducta negra será:
5 T6A

El hecho de forzar a la Torre a situarse


en la sexta lfnea es un gran acierto. pues
más tarde cerrará filas del Alfil de Dama
y Caballo de Rey a la Torre negra. Ahora
seguirá el juego así:

A6D 6 T6R+
A5R 7 T6AR

Una nueva idea interviene en la lucha:


el Rey negro será forzado a situarse en
casilla negra.
TIA + 1 TlD
T7A 1 T7D T7R+ 8
T7CD! 3
Claro está que el Rey negro no puede
Esta jugada que. en apariencia. nada colocarse en la casi1Ia 70. pues perderla
significa. es, en realidad. muy sutil. No es inmediatamente después de T7CD. De
posible para las negras mover el Rey. todas formas. la partida será ganada por
bajo pena de mate. y por ello habrán de las blancas de la siguiente forma:
jugar su Torre. bien a 6D o bien a 8D.
Eo cualquier caso. la casilla de la fila 8 RlA
de AR de la columna que entonces ocupe T7CD 9 RlC
la Torre. es negra y. por tanto. habilitada T7C+ lO R1A
para e.l Alfil. Esta circunstancia es de im- T4C 11 RIR
portan~ capital para el plan ulterior. A4A U

3 ·TlD
T7CR 4 TlAR Para que nuestros lectores tengan idea
de la altura del ajedrez en Philidor. reco-
Si en lugar de esto. la negras juegan geremos varias de sus mejores partidas.
4. ...• RIA. con S. T4C amenazando Pero antes de ello es necesaria una im-
A6D +. las blancas obligarfan a las ne- portante observación. El ajedrez práctico
gras a continuar asf: S. . ..• T8R; 6. en aquella 6poca era imperfecto en grado
T4TR. T8CR: 7. T4TD. RIC: 8. TST +. sumo. naturalmente. Sólo en la gran dife-
R2T: 9. T8T +. R3C: 10. T8C +. y ga- rencia de fuerza está el secreto de las
nan. En la variante principal. la estrategia victorias de Philidor. Aun asf. hay que
del procedimiento vencedor es mucho más destacar la ignorancia que el gran maes-
profunda que en esta variante. Las blancas tro demostraba en capitales principios
continúan: teóricos. Por ejemplo. hablando del gam-
bito de Dama aceptado. después de
Ale 1 5 1. P4D. P4D; 2. P4AD. P x p. Pbilldor
17
2
se explica asf: <<Stama -por otra parte hecho es que cuestiones como la enunciada
muy buen jugador- que se deleita prin- sin estudio ni vacilación por Philidor. son
cipalmente con el gambito de la Dama. excesivamente diflciles de decidir y que si
enseña que a la tercera jugada se debe se sujetan a votación entre los maestros
avanzar el Peón del Rey un paso sola- de nuestros días. la mayor parte lo harian
mente. Sin embargo. es mejor avanzarlo por 3. C3AR. y habría una buena porción
dos. No obstante. estoy de acuerdo en que de votos por 3. t'3R. en tanto que 3. P4R
adelantándolo tan sólo una casilla. puede se considera inferior por la respuesta
engañarse también a un mal jugador.» 3....• P4R.»
Comentando Lasker esta declaración. nos Pero esto no es. en definitiva. más que
dice: «La última sentencia es deliciosa- una prueba de la ignorancia en que aquella
mente candorosa y demuestra mejor que época se hallaba respecto a los valores
cualquier otro razonamiento que el ajedrez de la estrategia del planteo. en la que ac-
estaba en su cuna en aquellos días. El tualmente tanto se ha avanzado.

APERTURA AR

DEFENSA PHILIDOR

BLANCAS: N. N. - NEGRAS: Philidor. texto es excesivamente tímida. ya que


con 7. PSR el blanco podria ocupar el
P4R 1 P4R centro con los Peones.
A4A 1
7 P3A
Esta linea de juego. que tiene por objeto AJD 8 P4D
la formación de un centro de Peones. P5R 9 CIR
previa la jugada P3AD. fue especialmente AJR 10 P3A
recomendada por Philidor y practicada D1D 11
durante cerca de medio siglo. Según
Philidor. la salida del A a 4A es superior La jugada justa. Si aquí el blanco cam-
a cualquier otra por la razón simple de que bia su Peón avanzado por el Peón negro.
ataca el Peón débil del negro 2AR. habría obrado defectuosamente. y en el
otro caso. es decir. dejando que sea del
1 A4A adversario la iniciativa de cambiar. siem-
P3AD 3 C3AR pre tendría el PD para sustituirlo. pu-
P4D 4 PxP diendo eventualmente ser sostenido con el
PxP 5 AJC PAR (Philidor).
C3AD 6 ~
CRlR 7 11 PxP
PxP 12 AxA
Como regla general. dice Philidor. las DxA 13 A3R
piezas no deben interrumpir la libertad C4A 14
de movimientos de los Peones. salvo aque-
llos casos. especialmente en el juego abier- Con el objeto de cambiar el C por el A.
to. en que pueden aquéllas cooperar al ya que éstos son muy útiles para detener
ataque. En esta situación la jugada del los Peones enemigos.
18
14 D2R que cualquiera de los dos llegará a la
CxA 15 DxC octava casilla; por otro lado, el negro
0-0 16 amenaza P4CR, rompiendo la configura-
ción de Peon~, dándole grandes posibili-
Esta jugada es superior a 16 ~, dades de victoria. Todo lo cual nos dice
ya que con aquélla se apoya el avance del que no tenemos mejor linea que la entrega
PAR mediante la Torre colocada a reta- de la calidad, sin vacilar.» (Philidor.)
guardia, y en esta última se expone a un
posible contraataque del negro con su 24 PxT
peón libre de Dama. DxP 25 D x PT
16 ClD Trae casi siempre malas consecuencias
P4A 17 P3CR el alejamiento de la Dama del centro de
P3TR 18 C2C batalla, aunque sea para tomar una pieza,
P4CR 19 P4AD y más un Peón. TDID era mejor.
C2R 20 P5D
DlD 21 C3C P5A 26 DxP
C3C 22 C4D P6A 27
TDIR 23 C6R
«Cuando en un final de partida existe
un Alfil se deben colocar los Peones en ca-
sillas de color opuesto a la del Alfil para
impedir que una pieza del adversario se
coloque entre los Peones. Esta regla es
general cuando se tiene el ataque; pero
cuando se está reducido a una tarea de-
fensiva se debe proceder en forma total-
mente diferente para poder defender con
el Alfil a los Peones.» (philidor.)
27 CIR
P5C 28 DSD
Esta jugada le origina al negro una ver-
dadera catástrofe.
El cambio de Damas no es siempre re-
comendable. Se puede provocar cuando la
Dama contraria amenaza entrar en nuestro
El negro ha conseguido, aparentemen- juego, o resulta excesivamente molesto el
te, mejor partida al emplazar su C en el juego combinado de la Dama con una
puesto avanzado, interrumpiendo el libre o más piezas, o bien cuando nuestra posi-
desenvolvimiento de ta~iezas blancas. ción sea por lo menos igual, aunque con
No hay mejor refutación a su tesis que el una fuerte formación de Peones. En el
sacrificio de calidad, seguido de la inme- caso presente, el blanco debe intentar el
diata materialización de la ventaja exis- cambio; pero no el negro, que deja, con
tente en el ala de Rey. ello, a los Peones avanzados blancos una
cómoda acción, libre de molestias.
T x Cl 24
DxD 29 PxD
«No es difícil comprender esta jugada. P6R 30 C3D
Para obtener una superioridad no se debe C4R 31 C4A
vacilar en recurrir a la entrega material T x C! 32 PxT
siempre que nos asegure una mejor situa- C6D 33 PSA
ción del resto de nuestras piezas y Peones. P7R 34 TRIC
Se han dispuesto los Peones en tal forma A4A+ 35 Abandona.

J9
GAMBITO CUNNINGHAM

BLANCAS: N. N. - NEGRAS: Philidor. El maestro inglés Bird, uno de los más


fervientes defensores de esta defensa, des-
P4R 1 P4R ~u:és de haberla sometido a profundos aná-
P4AR 1 PxP lISIS, ha propuesto la siguiente linea de
C3AR 3 AlR juego a seguir: 4.... P4D; S. A x P,
C3AR;6. P4D,C x A;7.P x C,AST +;
Se debe esta defensa a un sabio escocés, 8. RlA, ASC; pero el blanco queda siem-
Alejandro Cunningban (16S0-1730), que pre con ventaja, como se encargó de de-
residió largo tieqtpo en La Haya. Se ha mostrarlo, precisamente contra él mismo
empleado pocas veces debido a las restrin- el inglés G. H. D. Gossip, afamado pubIi:
gidas posibilidades que da. Su idea es cista. La partida continuó así: 9. P4A,
~; 10. A x P, P3AD; 11. C3A, CD2D;
amenazar el jaque en STR, lo cual no re-
presenta al blanco mayor Peligro, y sin 12. DID, P4AR; 13. P3CD, A3AR; 14.
embargo, a la larga el negro queda en si- TDIR, C3C; lS. CSC!, A x C; 16. A x A,
tuación bastante incómoda. DIA; 17. A7R, con ventaja.

P3C 5
A4A 4
Superior a la del texto es RIA.
Lo más usado. El profesor Berger reco-
mendó 4. R2A, y si 4.... , AST +; S. P3C, 5 PxP
P x P; 6. P x P con buena posición de 0-0 6 PxP+
ataque. RIT 7 AJA
4 AST+ Según Pbílidor, esta era la mejor de-
fensa, aunque posteriormente se ha de-
mostrado que la única que da al negro un
juego satisfactorio es 7.... , P4D.
P5R 8 P4D
PxA 9 CxP
A3C lO AJR
P3D 11
Demasiado pasiva; el blanco debe sacar
el máximo partido de la pieza de más,
y el mejor procedimiento es observar un
juego. abierto, donde la mayor agilidad de
sus piezas pueda hacer efectiva la ventaja
contra la lentitud de movimientos de MIs
Peones. 11. P4D era muy superior.
11 P3TR
20
philidor sigue sus reglas al pie de la 17 TxD
letra: Con esta jugada impide la molesta TDIR 18 RlD
clavada del Caballo negro por el Alfil en C5R+ 19 CxC
SCR y amenaza hacer efectiva su superio- TxC lO RlD
ridad de Peones en el ala de Rey. TRIR 21 P4CD
P3A II TDIR
A4AR 12 P4A P4T 13 P3T!
A x P(7T) 13 CJA CJA 14 P4C!
CD2D 14 RlC lS P3A!

C3A era más fuerte y daba al Caballo Le amenazaba


superior radio de acción. Las blancas in-
sisten en el error de apreciación anotado T(SR)lR 16 P4TR
en el comentario anterior. PxP 27 PxP
TITD lB
14 CSCR!
Pérdida de tiempo. Si el blanco juega 28.
Maravillosamente jugado para cambiar
P4D habría tenido algunas probabilida-
el AD, por si lIegáse a entorpecer la mar-
des de tablas.
cha de los Peones negros del ala de Rey.
En este punto Philidor hace hincapié en la
regla por la cual cuando un jugador dis- lB TIT!
pone de Peones libres en su ala es siempre T(lT)lR 29 AlD
útil deshacerse del Alfil adversario, ya que P4D 30 PSA
éste es muy valioso para detener la marcha AlA 31 PST!
de los Peones enemigos.
Philidor lanza sus peones en ataque de
D2R! lS CxA su estilo tipico.
DxC 16 DlC
TITR 32 T4TR!
Esta, magnifica jugada, por la que se P3C 33 TDIT
cambia la única pieza emigrante por las P4C 34 PSC
diagonales, la Dama (ya que el AR se elD o 35 T4C
encuentra momentáneamente fuera de TIAR 36 P6C!
juego) obliga al blanco a dejar el control TxP+ 37 RlA
de la importante diagonal que controlaba T6C 38 P6T +!
RIC 39 P7C!!
D x D 17 TxT 40 P7T+
RxP 41 P8T=D+
A4T era superior, amenazando doblar RlA 42 TIA +
un Pe6n o C5R. AbaDdona.

PARTIDA DE LOS PEONES CENTRALES

BLANCAS: N. N. - NEGRAS: Philidor. establecer, de primera intención, un cen-


tro de Peones, adelantándolo al desarrollo
P4R 1 P4R de piezas. Philidor la condenó, consideran- .
P3AD 2 do que el segundo jugador obtenía una
ventaja poco menos que decisiva. Aunque
Esta linea de juego la denominó Jaenisch no se comparte la rotunda tesis de Phi-
de este modo, debido a su idea básica: Iidor, no se emplea en absoluto.

21
2 P4D OlA. 14 P4CR
PxP 3 DxP P3CR 15 P5C
P3D 4 P4AR
P4AR 5 Las negras cierran momentáneamente
el juego, aunque siempre tendrán la posi-
Si las blancas hostigan a la Dama con bilidad de abrirlo en la columna TR,
P4AD, se deja el PD retrasado y débil. donde tiene más posibilidades de ac-
cionar.
5 P5R
Según Philidor, debe evitarse el cambio P3C 16 C3A
de los Peones centrales por los laterales, P4A 17 ~

ya que aquéllos deben ser preferidos a és-


tos, en razón a que, ocupando el centro,
pueden impedir a las piezas contrarias
ocupar buenas posiciones.
P4D 6 OlA
A3R 7 C3AR
COlD 8 C4D
A4A 9 P3A
D3C 10 A3R
AxC 11 PxA

Las negras enrocan largo para poder


atacar en el flanco de rey sin riesgo. Esta
idea no deja de ser un arma de dos filos,
ya que la misma libertad de acción, tiene
su oponente. Bien, es verdad, que en la
situación presente, las blancas tienen una
posición bastante cohibida, lo que per-
mite a su adversario, con su mayor liber-
tad de movimientos, conseguir más rapidez
en la realización de sus ataques.
Cuando existen dos fracciones de Peo-
nes separados, y se produce el paso de un PxP 18 AxP
Peón de una línea a otra, debe tenderse C4A 19 P4TR
a engrosar la mayor masa de Peones, de- CxA+ 20 TxC
biéndose inclinar a crear la mayor masa AlA 21
en el centro. (Philidor.)
El A acude a auxiliar el ala de Rey,
CRlR 12 A3D donde el negro va a lanzar su PTR con
O~ 13 P3TR gran efecto.

Philidor prepara con este movimieIlto 21 PST


su característica ofensiva en el ala de Rey. P4C 22
22
El contraataque llega con bastante re- n T3T
traso. La T Y A negros van a converger so- P5C 13 P6R!
bre el R blanco, en un ataque irresistible.
El A adquiere un poderlo extraordina-
rio. Su acción se dirige a los puntos vita-
les de su adversario.

A1R 24 PxP
AxP 15 T x PI!
AxT 26 T x A!

Cuando una línea de resistencia se ha


destruido, un solo soldado puede ser su-
ficiente para acabar con la vida del Mo-
narca enemigo. La Dama, su bufón y un
soldado, son los protagonistas en la muerte
del Rey blanco.

RxT 27 D4T+
(Posición después de 23. P5C) R1C 28 D8T+ +

23
III

LA ESCUELA ROMANTICA

LABOURDONNAIS, MAC DONNELL, ANDERSEN, ETC.

La introducción a los conceptos teóricos, punto culminante que registró la teoria


motivada por Philidor, encauzó la volun- del ajedrez en su formidable marcha vic-
tad y el sentido de los ajedrecistas tan toriosa a través de las épocas.
rectillnea e invariablemente, que parecla Pero en lo que sí hemos de detenemos
como si el ajedrez hubiese colmado ya la es en consideraciones de tipo más abstracto
escala de sus valores y pudiesen ser redu- y que se refieren a la mentalidad colectiva
cidas a una serie de reglas todas las posibi- legada por Philidor y cómo fueron reba-
lidades del tablero. Sin embargo, ¡qué sadas las ideas dominantes por la apari-
lejos estaba tal cosa de la realidad! ción de una nueva forma de considerar
De acuerdo con esa derivación de las la lucha de los trebejos, de una nueva
innovaciones de PhiIidor, la teoria aje- mentalidad ajedrecistica que revolucionó
drecista -que volvía por los fueros de esencialmente no sólo la valorización
españoles e italianos, en muchos de sus aceptada para los distintos elementos de la
aspectos- se enriqueció con una profu- lucha de ajedrez, sino incluso el sentido
sión de análisis y estudios, con una erudi- y el espíritu de esa lucha.
ción formularia, que verdaderamente de- Las conmociones espirituales de la huma-
bió hacer concebir al ajedrez en la época nidad, los puntos históricos que registran
como algo no poco ingrato y molesto. las grandes crisis del pensamiento colec-
Una publicación muy divulgada y famosa tivo de los hombres, quedaron siempre
fue el llamado Handbuch des Schachspiels, definidas en la historia con profundos ras-
iniciada por Bilguer y concluido por Der gos revolucionarios, con memorables agi-
Lasa. Esta obra consistía nada menos que taciones sociales, que se extendían no sólo
en una recopilación enciclopédica publi- al terreno de la política o de la economía,
cada en Berlln (entonces centro del ajedrez sino a todos los campos en que reinaba
mundial) alrededor del año 1830. Se reco- el espíritu del hombre. Así puede verse
gían en esta obra, en cuanto a aperturas en la historia de las bellas artes, cómo la
se refiere, cerca de cinco mil variantes, creación de nuevas y revolucionarias es-
aunque tales estudios se expusiesen de cuelas, no era en definitiva otra cosa que
manera simple y sin razonamiento efi- la consecuencia de alguna de esas conmo-
ciente. Anotamos este suceso bibliográ- ciones colectivas. Cuando la revolución se
fico ajedrecístico tan sólo para destacar el desarrolla en el terreno de los conceptos
2S
y las ideas, es el espíritu del hombre el que partida, de acuerdo con los gustos y la
resulta afectado por sus consecuencias; el mentalidad de la época.
espíritu cambia su fisonomía e incluso su
innata significación, y, naturalmente, todas
aquellas actividades en que interviene, Cuando fue difundido por el mundo del
experimentan al mismo tiempo la consi- ajedrez el Handbach, se había llegado ya
guiente mutación armónica. Concretán- a la constitución de un general pensa-
donos, para precisar mejor el ejemplo, a la miento colectivo sobre los dístintos valores
pintura, no puede menos de sorprender del tablero; se tenía un concepto deter-
hasta qué extremo fue modificado el mínado y preciso de la escala de estos
andamiaje que constituían los moldes clá- valores y no parecía posible que tan sólidos
sicos y las escuelas de estos moldes deri- fundamentos estuviesen sujetos a posible
vadas, con la nueva semílla espiritual que fluctuación. El concepto de la ventaja que-
la Revolución francesa esparció. Las ten- daba definido en conjunción con la su-
dencias impresionístas destruyeron el am- perioridad material o posicional, y cada
biente, un tanto ficticio, del estudio y de la pieza tenía asignada su función especifica
composición para lanzar al pintor violen- de acuerdo con el momento de la lucha
tamente sobre la naturaleza. Y es que lo y su relación con las demás. La teoría de
que había cambiado no era el concepto los Peones derramada por Philidor com-
de la linea y el color, ni siquiera el concep- pletó esta escala de valores.
to de la armonía estética; había cambiado Sin embargo, un nuevo alud de ideas
el espíritu que informaba a la obra plás- iba a revolucionar la teoría, enriquecién-
tica. Ya no era convincente la visión de dola al mismo tiempo con un caudal más
unas figuras o de un paisaje ajustado a las profuso e intenso que el conseguido en su
normas académicas; era preciso que el milenaria historia.
pintor fuese capaz de reflejar en su obra Un suceso ajedrecístico mundial inició
la «realidad palpitante y momentánea», este período que, posteriormente, ha sido
aunque para ello dejase desatendidas algu- bautizado tan acertadamente con el nom-
nas viejas existencias de la linea y el color. bre de «escuela romántica». Labourdon-
Tanto aquella revolución espiritual' ini- nais, maestro francés, disputó a Mac
ciada en Francia, como todas las que la Donnell, escocés, numerosas partidas en
humanidad, antes y después, ha presen- resonantes encuentros que trastornaron
ciado, han dejado su estela bien perfilada los conceptos teóricos establecidos y lle-
en la actividad espiritual del hombre, en- naron de admiración y entusiasmo a los
lazada en preciso sentido consecuente, con ajedrecistas todos. Es posible que ellos
el espíritu de cada revolución. mísmos no fueron conscientes de la gran
¡Qué cosa más natural y lógica que el trascendencia que tuviera para la teoría
ajedrez -una manífestación exclusiva del ajedrez el nuevo estilo que pusieron en
y eminentemente espiritual- acusase juego, y, sin duda, al proceder con este
también en su historia las conmociones nuevo concepto de la lucha no hiciesen
revolucionarias de cada época! También otra cosa que responder a esa razón revo-
en ajedrez eran desbordados los viejos lucionaria de conmociones espirituales que
principios y establecidas las normas de . hemos dejado expuestas. Pero el hecho
nuevas escuelas y nuevos conceptos, pues real fue que estaban dibujando las lineas
que en la batalla mental de las 64 casillas de un nuevo horizonte para el mágico
no existe limitación de horizontes y las tablero. Se caracterizaron aquellas parti-
aptitudes artísticas del pensamíento huma- das por su originalidad extraordinaria.
no pueden discurrir por ellas con la forma De hecho el valor de las piezas en sus ma-
que dé realidad a la fantasía y al espíritu nos resultaba distinto del que la experien-
de cada ajedrecista. Esta ilimitación de cia de mil años había establecido. Los
horizontes faculta al ajedrez --como a las motivos que daban lugar a los brillantes
bellas artes- para que en sus manífesta- sacrificios de piezas estaban al margen
ciones sea posible la ordenación de escue- de la mentalidad de la época. Cuando
las de cada manera peculiar de tratar la parecía estar fuera de toda justificación

26
el sacrificio, una razón luminosa se dibu- como único medio para romper las sólidas
jaba tras él. Era la influencia del romanti- defensas enemigas, y Labourdonnais lan-
cismo la que animaba el tablero, revis- zaba sus piezas contra esa muralla sacri-
tiendo a la lucha de un brillante y etéreo ficando las de la vanguardia para vencer
ropaje. Las normas del ataque y la defensa con las que en segunda linea atacaban de
fueron plasmadas en las rutas de la ima- forma continuada e implacable, infiltrán-
ginación más exaltada; el valor de las dose por la brecha que las primeras abrie-
posiciones quedaba suspendido y deshecho ron al morir. El servicio que las teorias
por la complicación inverosímil de los dis- románticas han prestado al ajedrez es
positivos del ejército en ofensiva o en superior, sin duda; pero para ello ha sido
defensiva. El nuevo valor incorporado al necesario que la misma escuela román-
tablero, el del «asalto», inspirado en el tica desapareciese vencida por otra nueva.
arrojo y el desprecio al peligro, no armo- Esta es la mejor garantía del inmortal valor
nizaba ciertamente con la fisonomía del ajedrez; tampoco la concepción pura-
apacible y reflexiva del tablero de ajedrez, mente romántica fue suficiente para cum-
más apto, al parecer, para la serena medi- plir las exigencias del tablero. De la misma
tación y el frio análisis que para el des- forma que el romanticismo del ajedrez
bordado entusiasmo y el impulso arrolla- v~nció a las arcaicas escuelas de españoles,
dor y violento. La calidad temperamental italianos y a la muy superior de Philidor,
de la batalla ajedrecística quedó bien de era a su vez vencido por la que Steinitz
manifiesto con estas aportaciones, y desde estableciera, apoyada esta nueva tendencia
entonces los factores psíquicos fueron in- en poderosísimos argumentos, y de la
corporados a la estrategia como elementos misma forma también esta última es-
constitutivos de la unidad armónica y es- cuela -de la que en su momento vamos
tética que se refleja en toda partida. La a ocupamos- ha sido vencida por la de
«combinación» fue en este periodo la única nuestro tiempo: el <<hipermodemismo».
y poderosa arma de combate, para cuyo En efecto, pese a su extraordinaria fuerza
uso necesariamente habia que hallarse seductora, los defectos de la escuela román-
dotado de una imaginación variada y fe- tica no eran flojos. El frenesí desatado por
cunda. El fruto de este nuevo concepto las combinaciones brillantes, por los golpes
del tablero fue el embellecimiento y el de inaudito efecto, acabaron por desvir-
aumento enorme del poder seductor del tuar la esencia del ajedrez; el juego salía
ajedrez, que servía así de vehículo, ágil de sus cauces para convertirse en un es-
y exacto, a las más sugestivas ideas y pen- pectáculo efectista. Como dijo Steinitz, no
samientos del hombre. se jugaba para ganar, sino para hacer sa-
Como es natural, al establecerse y con- crificios brillantes. Una atmósfera azarosa
solidarse estas nuevas normas en la con- rodeaba siempre a la lucha, donde se
ducta ajedrecista, el edificio teórico se había perdido el sentido de la estabilidad
tambaleó y amenazó venir abajo con es- y de la exactitud. Todo fue confiado a la
trépito. Ya nada quedaba sujeto a reglas. imaginación; pero la imaginación por sí
ya los axiomas más acreditados temblaban sola es cosa débil. La verdad es que, según
ante la prueba a que eran sometidos por Lasker afirmaba, existe una fórmula fácil
el nuevo espiritu creador. Como quiera que nos pone en aptitud de dar con la
que la condición esencial y exclusiva de la clave de los sorprendentes ardides que, en
nueva escuela radicaba en la libre y es- apariencia, tienen su origen en una fan-
pontánea iniciativa del propio jugador, de tasía que no obedecen a ley ni sistema al-
tal forma que el triunfo guardaria una guno. Para que la imaginación resulte
relación proporcional con el grado de eficaz, ha de ser completada con la lógica,
fantasía y poder «combativo» del aje- y la lógica ~ue halla su expresión más
drecista, sobraban los postulados teóricos exacta en las pruebas bien experimentadas
determinantes de la conducta más ade- y en los argumentos ampliamente consi-
cuada en las diversas fases del combate. derados- acompañaba muy escasamente
Philidor había establecido el valor de los al espiritu que dio vida a aquella ava-
Peones encadenados y ordenó su empleo lancha de ideas románticas.
27
El romanticismo desbordó el punto pru- Andersen. Zukerbot. Winawer. Kolisch.
dente y justo de su expansión. y por ello Blackburne y otros muchos de renombrada
fue derrotado. De esta forma. reducido fama.
a sus exactos limites. hoy día podemos Para que el lector aprecie directamente
obtener de él la mejor herencia y los frutos cuanto queda expuesto. recogemos varias
más estimables. actuaciones de estos maestros. empezando
Aquellas partidas sensacionales de La- por unas partidas del célebre match refe-
bourdonnais y Mac Donnell levantaron el rido. cuyos comentarios de Morphy
telón a la gran escena romántica en que reproducimos acompañados de los nues-
actuaron después los grandes maestros tros propios.

DEL CELEBRE MATCH


LABOURDONNAIS - MAC DONNELL
(Algunos comentarios de Morphy)

Londres 1834

GAMBITO DEL CENTRO nión. creo que han condenado injustifica-


damente el movimiento del texto. el cual.
BLANCAS: Labourdonnais después de jugar ambas partes de la mejor
NEGRAS: Mac Donnell manera. conduce a un juego en que la
ventaja del primer jugador no es. en ma-
P4R 1 P4R nera alguna. tan marcada como parecla
P4D 2 inferirse de las criticas que se le hacen.»
Hemos visto que Labourdonnais no
«La segunda jugada de las blancas cons- continuó con la línea natural del gambito
tituye la apertura conocida con el nombre del centro 2. D x p. conocedor. sin
de Gambito del Centro. Aun cuando no es duda. de sus graves defectos. Posible-
tan "fuerte como la jugada clásica 2. mente. al decidirse con 3. C3AR trataba
C3AR. con objeto de variar. puede adop- de convertir la apertura en un gambito
tarse de vez en cuando.» escocés. Con frecuencia. hoy día se llega
Es curioso reflexionar sobre esta obser- a posiciones de planteos por inversión
vación de Morphy. Nos dice que. con de movimientos. y esto es muy caracterís-
objeto de variar. podemos decidirnos por tico en la escuela hipermodema, prefirién-
una jugada que. según reconoce. no es la dose para ello las aperturas elásticas.
mejor. Esto da idea de la poca importan- susceptibles de tales permutas. Pero la
cia que se concedía a la apertura en su estrategia actual rechaza el espíritu de esta
época. dislocación prematura del centro. por lo
que este tipo de apertura se ve muy de
2 PxP tarde en tarde. Empezando por este
C3AR 3 P4AD gambito del centro. puede también lle-
garse al gambito danés. continuando así:
<<La mayor parte de los autores reco- 3. P3AD. P x P; 4. A4AD. en cuyo
miendan en este punto ASC + como la punto es conocido el sistema de SchIechter
mejor jugada que pueden hacer las negras. que es así: 4....• P x P; S. A x pc.
Sin estar dispuestos a combatir esta opi- P4D!; 6. A x PD. C3AR!; 7. A x P +.
28
R x A;8.D x D,ASCD +; 9. D20 con
igualdad.
No es dificil llegar hoy día a la con-
vicción de que la jugada 3.... , P4AD, que
pretende mantener el Peón a costa de
pérdidas de tiempo y que vemos cómo es
defendida por Morphy, no puede, en modo
alguno, ser recomendable, pues el cre-
ciente desenvolvimiento del ejército blanco
encontrará numerosas oportunidades de
recibir por su Peón precios bien elevados.
Dice Morphy en este comentario, que
la mayor parte de los autores recomiendan
3.... , ASC +, yen este punto la pérdida
de tiempos seria equivalente empezando
por 4. P3AD, con la continuación posible
4.... , P x P; S. P x P, y ahora el Alfil
negro habría de ir a 2R con la natural
restricción de movimientos, pues si, por (Posición después de 8. CJC)
ejemplo, S• ..• , A4T; 6. A4A (amenazando
7. DSD y, eventualmente, CSC, etc.) Estamos. en la escuela romántica y no
puede pedirse que los pensamientos del
A4AD 4 atacante se encaminen a conseguir esa
posición superior a que Morphy se refiere
«Las blancas también podían jugar en su comentario. Las blancas, con este
aquí 4. P4AD. En caso de hacerlo asl, la salto de Caballo, van por el Rey. No lo
respuesta de las negras sería 4.... , P4D, encontrarán... pero lo buscan.
jugada perdida de vista por las principales
autoridades, lo cual es bastante extraño, 8 C3T
pues en cambio hacen cometer al segundo P4AR 9 AlR
jugador el error evidente de tomar el PSR 10 D3C
Peón al paso.» PxP 11 DxP
Morphy demuestra en este comentario C3TD 12 0-0
un buen sentido de posiciones; pero no nos AJD 13 A4A
da variantes, ni explica la verdadera fina- C4A 14 D3C
lidad de 4. P4AD. CJA 15 AxA
CDSR 16 A7A
4 CD3A
P3AD 5 D3AR
«Mac Donnell manifestó gran inclina-
ción a esta salida de la Dama, en el gam-
bito escocés. En la posición que tenemos
aquí, probablemente es lo mejor que
puede hacerse.»

0-0 6 P3D
P x PD 7 PxP
C5C 8

«La objeción a este procedimiento es


que permite a las negras retener su Peón,
en tanto que jugando 7. A5CR, las blan-
cas lo hubieran recuperado inmediata-
mente con una posición un tanto superior.»

29
«Las negras, confiando en que tienen tro pierde valor ante el propósito román-
un Peón más, juega!' así con objeto de tico de encender la lucha.
obligar un cambio de Damas; pero como La continuación 3. P4R está hoy des-
lo demuestra suficientemente el curso del cartada en las poquísimas partidas que
juego, el resultado es que se mejora la se ven de gam!Jitos de Dama aceptados.
posición del adversario y, en definitiva, se Lo usual es seguir con 3. C3AR, ya que
llega a un juego tablas. Si en lugar de lo si 3. C3AD o 3. P3R, las negras igualan
hecho se hubiera tomado en primer lugar las posibilidades con 3. P4R.
el Caballo y después se hubiera jugado
D4AR, la superioridad en fuerza y posi- 3 P4R
ción les hubiera permitido a las negras P5D 4 P4AR
ganar el juego.»
Desde luego, poco puede objetarse He aquí una desordenada lucha de
a este razonadísimo comentario. Peones, realmente inadmisible en nuestro
tiempo. No es difícil ver -aun para los
AxD ojos menos experimentados en la moderna
CxD 17 teoría- que todos los Peones son débiles.
CxA+ 18 CxC
C(3T)4A Pero el objetivo romántico está virtual-
TxA 19 mente logrado: se está limpiando el ca-
P4CR 20 C6R mino para la batalla y el golpe rudo no
AxC 21 PxA tardará en producirse.
17D 22 TRIR
TDlR 23 C3C
C3AD 5 C3AR
P5A 24 C5Á AxP
T4D 6 A4A
25 C6T+ C3A 7 D2R
RlC 26 C7A
27 TDlD ASCR 8
T4AD
P3TR 28 P3TR
«Esto es un descuido; pero indace a él
la dificultad de la posición, pues si las
«Y, en definitiva, el final resultó tablas.» blancas hubieran jugado P x P, las negras
habrían respondido AD x P amenazando
A5CR o CDID, y luego enrocando del
GAMBITO DE DAMA lado de Dama obtendrían una libertad
de movimientos manifiesta, que las blan-
cas no hubieran conseguido en igual
BLANCAS: Labourdonnais grado.» (Lasker.)
NEGRAS: Mac DonnelI El impulso de Labourdonnais es bien
comprensible, dado el espíritu del com-
P4D 1 P4D bate. Un jugador moderno, ante esta com-
P4AD 2 PxP plicación, habría elegido, sin duda, 8. D2R,
P4R 3 manteniendo la tensión del combate.
Pero en aquella época, la decísión de es-
perar no era bien comprendida, y el mismo
Después de las jugadas blancas 1. P4D Lasker enjuicia la posición en la atmósfera
Y 2. P4AD podría pensarse que las blancas creada por ambos luchadores.
han organizado un plan de valores posi-
cionales y que no persiguen la finalidad 8 AxP+
inmediata de lanzarse al mar de la combi- RIA 9
nación.
Pero el gambito de Dama no suponía Claro es que la aceptación del Alfil es
para Labourdonnais y para la escuela contraproducente, y Lasker nos da, para
romántica cosa distinta del gambito de tal caso, esta continuación: 9. R x A,
Rey. Si éste abre líneas en AR, aquél las D4A +; 10. RIR, D x A; 11. C x P,
abrirá en AD. La idea estratégica del cen- D3T.
30
9 AJe ciencia de determinados principios sutiles.
D1R 10 P5A En tanto que la Dama en manos de un
TlD 11 ASC jugador de primera fuerza es equivalente,
P6D 11 PxP en cierto modo misterioso, al efecto o va-
C5D 13 lor de dos Alfiles y un Caballo, suponiendo
que también estas piezas estén en manos
de un jugador de primera clase, en la
posición a que venimos refiriéndonos, la
situación inexpugnable del Caballo en 6R
y el carácter abierto de la posición del
Rey enemigo, dieron por resultado que
Alfil y Caballo y dos Peones compensaron
con exceso la pérdida de la Dama, tam-
bién de cierto modo misterioso.»
Resalta el hecho de que Lasker no se
refiriese para nada, al pesar las probabili-
dades negras compensadoras del sacri-
ficio, a la presencia de la pareja de Alfiles
y a la cadena formada de peones centrales,
circunstancias que hablan de ser tenidas
en cuenta, aunque en todo caso resulte
desde luego «misteriosa» al entrega de
Dame;.
Labourdonnais, que ha sacrificado un AxD 14 C6R+
nuevo Peón, cree tener compensaciones RIR 15 RxA
suficientes en el ataque. Pero esto da lugar D3D 16 TlD
a un sacrificio de Dama que originó ex- TlD 17 C3A
tensos y muy encontrados comentarios. P3CD 18
13 C x C Era mejor P3TD.
Lasker comenta así este discutidísimo 18 A4TD
sacrificio de Dama: P3TD 19 TOlA
«La cuestión que nos interesa en este TICR 10 P4CD
sacrificio no es la de saber si fue necesario AxP 11 AxC
para ganar la partida, sino averiguar si
fue bastante para ese objeto. Tenemos En esta combinación tan sencilla se di-
aquí un ejemplo -históricamente tal vez bujan ya mejor los frutos del sacrificio
el primero- de un desafío al concepto negro.
de los valores. Una Dama es indudable-
mente superior a dos piezas menores y dos P x A 11
peones. No es asl, en este caso, según
opinó Mac Donnell. Con frecuencia se No hay opción. Si 22. A x C, T x A
han hecho anteriormente sacrificios de y ahora no es posible P x A.
Dama; pero nunca sin que quien se aven-
turara a ellos haya analizado con autoridad 21 CSD
la secuela del juego y se haya asegurado A4A 13 CxP+
por la fuerza del cálculo de que obtiene RlA 14 C x T(lD)
en cambio una ventaja que le compense TxP+ 15 R3A
más que suficientemente. En el caso aquí T7A+ 26 R3C
sujeto a consideración, tal seguridad falta T7CD 17 C(7D) x A
por completo. Podemos decir que decidió PxC 18 TxP
el sacrificio la fe que se tuvo en la sufi- OlCD 19 A3C
31
Ya podría haber abandonado el blanco, casi siempre, bien en el gambito Kiese-
cuya inferioridad material es agobiadora. ritzky, con 4.... , P5C; 5. C5R, sin sacri-
Sin embargo, aún sigue algunas jugadas ficar material alguno, o bien en el Allgaier
la partida, no se sabe por qué. más agresivo que no constituye encierro
para el Caballo en su salto a 5CR. Este
R3A 30 T6A último tiene más crédito, no obstante lle-
DlT 31 C5A+ var impllcito la entrega de la pieza.
Dice Lasker en este momento que con P4TR 5
21. C4A + se llegaba al final más rápida-
mente. De todas formas, es muy dificil Considerada inferior; S. P4D o 0-0, son
para las negras hacer otra cosa, sino superiores a ella, ya que en esta línea el
ganar. negro no tiene la respuesta PSC, porque
con 6. 0-0 o P4D, desembocando, respec-
R4C 31 TICR tivamente, en la misma posición, el blanco
TxA 33 PxT obtiene un espléndido ataque por la pieza
R4T 34 R3A sacrificada.
DlR 35 T3C
D5T 36 C6R 5 P.3TR!
P4D 6 P3D
No sabemos si todavía continuó la lu-
cha, y esta resistencia a abandonar es muy
típica en las partidas de épocas antiguas,
cuando la situación de mate no es inmi-
nente.

GAMBITO GRECO-PHILIDOR
BLANCAS: Labourdonnais
NEGRAS: Mac Donnell
P4R 1 P4R
P4AR 2 PxP
C3AR 3
Múltiples y muy variadas posibilidades
de ataque del gambito del CR. Teórica-
mente, en la actualidad, se le considera
casi tan fuerte como el del AR, y se emplea P3A 7
con más frecuencia que aquél.
Importante jugada de consolidación
3 P4CR central. Philidor nos dice que no desesti-
A4A 4 AlC memos el valor del Peón como punto semi-
invulnerable, al ser la pieza inferior del
Situación típica en el gambito Greco- tablero. La cadena de Peones blancos
Philidor. Zukertor y Rosenthal estimaron (b2---e3-d4) restringen notablemente la
que contra 4. . .. A2C el blanco no tenia, capacidad de acción del Alfil afianchettado.
a su alcance, procedimiento concreto para
alcanzar una ventaja decisiva, y, desde 7 C3AD
entonces, se consideró superior, para el PxP 8 PxP
blanco, 4. P4TR, ya que ataca instantá- TxT 9 AxT
neamente el eslabón de peones negros D2R 10 D2R
(f4-g5). Esta movida (4. P4TR) deriva, C3T 11 ASC

32
A2D 11 O---O--G C4~ 26 DxP
O---O--G 13 C3A CxA 27 DxC
A3D 14 TIR AxC 28 PxA
TIR 15 C4TR TIC 29 DxPSD
D2A 16 AxC DxP 30 P3C
D4C+ 31 cm
Cambio que facilita el juego seguro del TID 32
campeón mundial de aquella época.
Si el blanco juega TIT o TIR para con-
PxA 17 P3T tinuar con TTf o TIR, el negro habrfa
AlA 18 C6C contestado con D4R o D2A, amenazando
A4T 19 AlC? en ambos casos el cambio de Damas,
caso de que el blanco intentase el asalto
¡Pierde la calidad! Debió retirar la Torre sobre el Re:(.
de la molesta clavada. El blanco, desde
este momento incrementa notablemente 32 D4R
su ventaja. TIC 33 D6R+
RIC 34 P3A
P5D 20 CICI TIT 35 RlA
AxT 21 DxA P3T 36 P4C
D2C 22 RlT 37 DlR
D5A 38 D7R
DxP 39 Dx PA
T6T 40 D5R
D8C 41
El blanco amenaza la penetración de
sus fuerzas en el dispositivo enemigo.
41 D7R
T8T 42 RlC
T7T1 43 RlA
D7A 44 RlC
Si el blanco toma el Caballo, el negro se
salvarla mediante el jaque perpetuo.
T7C 45 D5R
D2A+ 46 C4A
TICl 47
22 DlT Las blancas no pueden, jugando 47.
P4C, ganar una pieza. Las negras respon-
El negro intenta, por todos los medios derfan con 47. . .. , DSA +; 48. RIC
a su alcance, impedir que la Torre adver- (cualquier otra jugada pierde un peón;
saria haga efectiva su superioridad sobre a 48. RIT, D x P +, y a 48. R2e, igual-
el Caballo. Es nutable el estilo de Labour- mente D x P +), D6D +, salva la pieza.
sonnais, que demuestra la seguridad de
juego, manifestado por todos los cam- 47 D5A+
peones del mundo. RIT 48 P4T
TID 49 R2A
TlD 23 P4AR
AIR 24 A4R Otra idea podria haber sido 49•... , R3T,
PxP 25 D2T para atacar con el Caballo los puntos dé-
33
3
biles del blanco (casillas blancas inmedia- T x P TI C3A
tas a sus Peones). TSc 78 ClT
TIC I 79 R3A
D6A 50 ClC P6T 80 ClA
TICR 51 P4A R3D 81
TIC + 51 R3C TIC gana fácilmente.
D7A 53 D5R
RlT 54 P5T
81
T8C 55 D3A R1A
D6R D6A
R x P 81 P7A
56
T8AD 57 D8T TIA 83 R3C
D7A 58 R1T T x P 84 ClT
P4A 59 D6T1
TlTD as C3A+
R4A 86 C1T
TIT rr C3A
Si el negro juega 59.... , P5C, el blanco T3T 88 ClT
gana por el siguiente procedimiento:
60. P x P, P x P; 61. D2A +, C4A;
62. T x C, P6C +; 63. R3T, DST +;
64. R4C, P x T +; 65. R x PI y da mate
en pocas jugadas. ¡Bonito lazo! No obs-
tante, con la jugada del texto, el negro
consigue fácilmente tablas. El intento de
forzar el juego le hace perder.

TIA 60 D6C+
RIC 61 PxP
D5D 61

Quitándole la ocasión de haber podido


entablar el juego.

61 D3C
D6A 63 DxD
TxD 64 P4D
R5D? 89
R1A 65 P5D
RIDI 66 RIC
T6TD 67 RlA Con 89. T2TI, el blanco gana. Veamos
TxP 68 C3D 89.... , C3A; 90. TlTI, C2T; 91. RSD,
T6T 69 C5R C4C; 92. R5R, C2T; 93. R6D, CIA +;
R1A 70 C3D 94. R7D, C2T; 95. R8D, R3A +; 96.
P4T 71 CIA R8A, R2T; 97. R7A, CID; 98. T4T,
P5T 71 R1C C x P +; 99. R6A gana.
T6AR 73 C1T
P3C 74 89 C4C
T3CD 90 RxP
P4C era superior, ya que obligaba al
RSA 91 ClT
TIC 91 R4T
negro a tomar el Peón.
y se declaró tablas varias jugadas más
74 P6AI tarde. A ningún gran maestro de nuestros
P4C 75 PxP dias se le hubiera escapado la victoria
T6C+ 76 R1A blanca.

34
DEFENSA FRANCESA
BLANCAS: Mac Donell
NEGRAS: Labourdonnais
P4R 1 P3R
P4AR 2
Se considera inferior a cualquier otra
linea de juego, tales como 2. P4D, P4AD
o D2R.
2 P4D
PSR 3
Esta jugada, casi forzada, demuestra la
poca elasticidad de la linea adoptada por
el blanco.
(Posici6n después de)2. RJC)
3 P4AD
P3AD 4 C3AD su casilla de. salida; el Rey ha perdido
C3AR S P3A! bastantes tiempos, lo mismo que el en
(entre los dos han consumido cinco tiem-
El negro, sin pérdida de tiempo, ataca pos, mientras que las mismas piezas del
el puesto avanzado blanco. negro sólo han empleado dos). Por lo
tanto, sin hacer una consideración de ín-
C3T 6 C3T dole planográfica, podemos sacar fácil-
CA 7 D3C mente la conclusión de que las piezas ne-
P4D 8 A2D gras se encuentran más dispuestas para
C3R 9 la lucha.
Superior es 9. A3D. La jugada del texto 12 TDIAD
responde a un plan preconcebido, que va P4TR 13 PxP
a ser refutado magistralmente por el
campeón mundial de aquella época. La TR apunta el reducto real, y va
a tomar parte muy activa en los aconteci-
9 P x PD mientos que se aproximan.
P x PD 10 ASC+
RlA! 11 0---0 PA xP 14 T x C +11
R3C 12
Sacrificio de más puro estilo romántico.
El blanco no se separa un ápice de la El negro entrega la Torre para eliminar
linea prefijada. Su adversario se desen- un poderoso defensor del Rey contrario;
vuelve con toda la normalidad que le obteniendo por la pieza sacrificada un C
permite su posición cerrada, aunque sin muy valioso y un Peón central, consi-
ninguna dificultad. Hasta ahora, en cada guiendo, asimismo, un Peón pasado.
jugada ha movido una pieza, sujetándose Todas las piezas blancas que se encuentran
exactamente a una de las teorias más de- en el tablero, excepción hecha del AR
fendidas en aquel tiempo. Las piezas deben (sin desarrollar), están intercluidas en su
desarrollarse a la ~xima velocidad, para acción o con unas posibilidades muy
lanzarlas al juego de combinación. No reducidas.
obstante, en la presente posición el blanco
ejecuta un desenvolvimiento muy original; PxT 15 C xPD
sus piezas, 2T, 2A y D, se encuentran en A3D 16
35
Posiblemente fuera más eficaz su em- El bbulco intenta, por todos los medios
plazamiento en 3TR. a su alcance, liberarse, y para ello sacrifica
este Pcón, que va a ser elegantemente
16 TIA rehusado, para aprisionar más y más su
P4A 17 A4AI ya encerrada posición.
TIA 18 A4C1I
25 ASDI
Cambiando el A más valioso, y ata- TICD 26 D4T
cando las vfas blancas. n-3C 27 TIA I
AlR 28 T7A
A x Al 19 DxA R1T 29 CxA
R3TI 20 C7R TA x C 30
elC 21 CR4A
RlTI 22 C(7R)6C
nA 23

30 cml
La combinación final. El blanco no tiene
respuesta satisfactoria.
23 C5R1
D3D 31 T8A+
Resulta realmente admirable la manio- RlT 32 CSA+
bra del C, ejecutada por Labourdonnais, R3T 33 CxT
para colocarlo en una fortfsima posición
central. A x T era, quizá, más concluyente,
aunque esto no quitaría nada a la belleza
DlA 24 DIR de la partida. Las blancas, desprovistas
P4CD 25 de recursos defensivos, abandonan.

36
PARTIDA POR CORRESPONDENCIA
1874

APERTURA INGLESA Empieza el fuego romántico. Si ahora


el blanco realiza su proyectado ataque
BLANCAS: Londres - NEGRAS: Viena 6. C7A + se encontrarla con la desagra-
dable sorpresa de 6. . .. , D x C, seguido
P4AD 1 de ASC +, perdiendo un Peón.

Aunque esta forma de abrir juego se


CxA 6 CxC
reseñaba ya en el manuscrito de Pietro
DxP 7 0-01
Carrera (1617), es conocida como apertura
P4R 8 P4D
inglesa a consecuencia del éxito obtenido
en esta partida, precisamente por los juga- ¡Valiente soldado que arremete contra
dores londinenses. el enemigo sin reparar en los poderosos
medios a que ha de hacer frente I Este in-
P4R tento de liberación va a dar lugar a una
1 vistosfsima rueda de artificio en tomo
C3AD 2 ASC
a tan atrevido Peón.
CSO 3
0-0-0 9 AlR
Para empezar podemos anotar una sa- CJA 10 cm
lida poco afortunada del Alfil negro, que esc 11 P3TR
no se comprende bien en una partida de PR x P 12 A4AI
análisis, como es toda competición por C4R 13 PxP
correspondencia. Este salto de Caballo no CJAI 14 CJeDI
es una pérdida de tiempo, naturalmente, A5R 15 CJAD
puesto que obliga al Alfil a jugar de nuevo, D4A 16 CxA
valiéndole, a su vez, para situarse en una DxC 17 D4C+
casilla de gran dominio. P4A 18 DJe
P5A 19 C2D
3 AZR 0401 lO

«Para este vi¡ije no hacían falta alforjas». Bien decidido, pues la captura del Peón
El negro podrá aquí haber tratado de jus- podría haber resultado demasiado peli-
tificar su aventura de Alfil, jugando grosa, dada la situación incómoda del
3. . .. , A4T, seguido eventualmente de Rey blanco.
P3AD. Pero estos problemas de la aper-
tura eran siempre una incógnita en los lO TRlD
tiempos románticos, de los que esta par- CxP 21
tida es buen modelo.
Ahora es muy distinto, pues el CabalIo
P4D 4 PxP amenaza directamente fuertes golpes, for-
A4A 5 P3AD zando a jugadas defensivas.
37
21 RIA
C3RI n RIC
A4A 13 TDIA
TRIR 14 A5R
P4CD lS P3C
D6D lCi PxP
D7R 27 P x PI
Un sacrificio prometedor, pero nada
más ...
TxC l8 TIR
D6D 19 DxD
TxD 30 AxP
T4D! 31 A4D

(Posición despuJs de 42. T7D)


Está claro que la Torre no puede ser
tomada, a causa de 45. P7T Y 46. C3T.
44 T7R
P7T 4S TlR
T7CD 46 TITD
C6C ~ P6T
Quemando el último cartucho.

CxT 48 P7T
T6C+ 4'
(Posición despuJs de 31. T4DI) Si el blanco mueve inmediatamente su
Caballo a 7AD, el negro habría conseguido
Siempre la jugada vistosa. tablas con la coronación de su Peón, se-
guido de jaque perpetuo.
T x A 32 TxA+ Una partida más entre las expuestas en
CxT 33 TxT+ que se demuestra: primero, el valor en-
RlA 34 T5R mero de las aperturas en la época román-
T8D + 35 RlT tica (<<todos los caminos conéiucen al
R3C 36 TxP mismo fin»), pues este planteo, hoy dfa
T8TD 37 P4C considerado de los más «tranquilos», no
TxP 38 P4T fue obstáculo para crear inmediatas situa-
RxP 39 PSC ciones de reciproca agresividad; segundo,
P4TD 40 T7A el carácter incierto de la lucha en su juego
P5T 41 P5T medio, en el que las posibilidades eran
T7D 41 mutuas, y tercero, la presencia de un final
42 TxP tratado sin intentos de nulidad por el
TxP+ 43 R3C bando débil, carácter este muy distintivo
P6T1 44 también de la escuela antigua.

38
ESTADOS UNIDOS

CONTRAGAMBITO ALBIN 7 A4A


A2CR. 8 CR2R
BLANCAS: Smith-NEGRAS: W. Adams ~ 9 DC
AlC 10 C(3C) xP
P4D 1 P4D CxC 11 CxC
P4AD 2 P4R

Este interesantísimo contragambito fue


empleado por vez primera en el torneo
de Milán de 1881, por Cavalotte contra
Galvioli, y fue sometido posteriormente
por el vienés A1bin a minucioso estudio.
adoptándolo con gran éxito en lucha con-
tra los más grandes jugadores de su tiempo.
entre los que figura Lasker. La idea es
similar a la del contragambito Falkbeer
del gambito de Rey rehusado (1. P4R,
P4R; 2. P4AR, P4D), aunque se considera
hoy menos eficaz que éste, debido a que
la estructura general blanca es más sólida.
Sin embargo, el carácter agresivo que le
distingue se presta mucho a la vivacidad
inmediata de las luchas de combinaci6n,
y por ello fue muy preferido de los juga-
dores románticos.

P x PR 3 P5D El Peón negro CD no puede ser captu-


C3AR 4 DAD rado, pues se llegarla a notoria inferioridad
P3TD 5 P4TD después de 12. A x P, TIC; 13. A3C,
P3CR 6 C x PI Con esta jugada, espera el blanco
resolver el problema central. El molesto
Peón de Dama negro ha terminado por ser
Se considera más activa 6. P3R, des- una obsesión para el blanco, que virtual-
truyendo el pivote central negro. Sin em- mente anula la acción del Alfil en 2CD.
bargo, las respuestas 6. . .. , ASC y A4A Hubiera sido más sólido 12. CID.
no carecen de horizontes.
12 A5CR!
6 A3R P3A 13
P3C 7
El negro ha provocado peligrosas debi-
Los inconvenientes de este total des- lidades en el castillo real blanco. Si 13.
plazamiento de la infantería del ala de DID, hubiera también dispuesto el negro
Dama no tardarán en dejarse sentir. de una buena réplica mediante 13.
39
P x P; 14. D x D +, T x D; lS. A x C, de sacrificios. Parece que al desarrollar su
P x P +; 16. RIT(si 16. T x P, T8D +; fantasfa, aumentan progresivamente el
17. AlA, cte.) 0-0, y las negras disponen caudal de ideas brillantes, organizando
de compensación suficiente con dos Peo- una ofensiva sensacional. El Caballo no
nes, fuerte presión y retrasado desarrollo puede tomarse, pues si 14. A x C, la
blanco; a cambio de la pieza sacrificada. respuesta 14. . .. , A x A; lS. T x A,
No obstante, esta linea era para las D8D + ! ganarla la Dama blanca. Por
blancas preferible a la elegida. consiguiente, ha de resignarse con la pér-
dida de material.
13 P x PI
RIT 15 C x PT
Está claro que ni el Alfil ni el Caballo DlAD 16 CxT
pueden ser aceptados. Por otra parte, el D4R+ 17 D1R!
cambio de Damas no sólo no resuelve DxA 18
nada, sino que facilitará al negro una
nueva arma para el asalto. DespuáJ del cambio de Damas, el Ca-
ballo negro sólo podrfa ser tomado a cam-
D1R 14 bio del Alfil, por la inmediata jugada ne-
gra P7R.

18 P4A

Con objeto de desplazar la Dama. El


procedimiento seguido por el negro para
acabar con la resistencia blanca, responde
a la calidad formidable de la partida.

D5T+ 19 P3C
D6T 10 CxP+
RlT 11 P7R
cm 11 C4T!
Inhabilitando definitivamente a la Dama
blanca.
C4R 13 D5T+
A3T 14 PxC
14 C x P +1 AbImdonan 15
Sorprendente y exacta jugada. Las ne- No es posible ya impedir el inmediato
gras interpretan una verdadera sinfonfa desastre.

40
POR CORRESPONDENCIA
1877

GAMBITO GRECO D x PA 1, P3D. seguido eventualmente


de P x C, obteniendo igualmente partida
BLANCAS: Blehr ventajosa.
NEGRAS: Hertzoprung
6 TlCR
P4R 1 P4R
CJAR 2 P4AR
Preferible era 7. PSR. Ahora, la posición,
Este intento de conseguir la iniciativa extraordinariamente desarrollada del ne-
a toda costa por parte del negro tiene gro, se va a imponer en forma que no va
más de trescientos cincuenta años de exis- a dar lugar a dudas.
tencia. Su primer ejemplo se encuentra
en la obra Gioacchino Greco (1600-1634). CxA 7 TSC!
llamado el Calabrés. campeón mundial.
sin discusión. entre 1622-1634. Se dice que
figuraba ya en la obra de Polerio (IS9O).
el que atribula su invención a Leonardo
da Cutré.
CxP 3 C3AD
D5T+ 4
El blanco le sigue el juego a su adver-
sario. Preferible era 4. P4D. o incluso
4. C x C. .

4 P3C
CxP S CR3A
D4T 6
Esta movida no constituye preferencia
para los maestros. ni se considera inferior
ni superior a las otras jugadas posibles. D6T 8 TxP+
En efecto. si 6. D3T. TICR! (el sacrificio RlDl 9
de Firaser. 6....• P x P; 7. C x T. P4D.
da al negro un fuerte ataque. aunque. 9. A2R pierde, de forma rápida, me
fina1mente. la superioridad material acabe diante 9.... , D2R; 10. C3A, eSD; etc.
por imponerse); 7. C x A. D2R; 8.
C x PT. C x PR; 9. D3R, P4D; 10. 9 esc
P3D. PSA; 11. D x PA, CSD; 12. RlD. D5T+ 10 RxC
T x P; 13. A x T. ASC +; 14. P3A. DxP+ 11 R2C
C7A + con gran ataque; pero, si 6. P3CD 12
41
En una partida del Westminester Papers, 19 AxP+!
1875, jugada entre Paine y Orchard, las RIA lO D3TD
blancas continuaron con 12. P3D, P4D; D3A 21 A3C!
13. D3A, e x P +; 14. D x e, Ase +; AxP n TSR
15. A2R!, A x A +; 16. RIR!, A x P +; D3A 13 P4A
17. RlD, A7R +; 18. RIR, eSD; 19. e3T, DxP 14 D6D
D3D; 20. AJR, P4A; 21. R2D, TDIR; D7A+ lS RIC
22. AJA +, RSD; 23. A x P +, T x A + AlC 16 TlAR
24. R3A, D4R, Y el blanco no tiene res- A3T 17 C6R!!
puesta satisfactoria.
1Z P4D
A2C+ 13 PSD
D3A 14 DST
P3C 15 CD4R1
mel 16 D3A
P4AR 17

Destruyendo la fortaleza real.


PxC 28 DxP+
CID 29 TSD
TlD 30 P4C1
AxT 31 T5A+ !
DxT+ 32 PxD
17 A4AI! A4C 33 P6A
P4TD 34 D6D
¡Espléndida 1 El negro lleva, sin cesar, TlT 35 PxC+
tropas frescas al combate, lo que le va Abandona.
a dar la victoria, no obstante la tenaz resis-
tencia de su oponente.
ANDERSEN
A2R! 18
Si 18. P x e, C7A + !; 19. D x e, Andersen puso en práctica el estilo ima-
ASe +, ganando fácilmente, y si 18. ginativo de Labourdonnais en combina-
A3D, e x A; 19. P x e, D3A, con ven- ción con los preceptos teóricos del Hand-
taja igualmente. buch de Bilguer. Fue un maestro en este
terreno, que superó a la corriente román-
18 T xAI tica dominante, porque supo revestir su
PxC 19 estilo de sentido lógico. Sus combinacio-
nes no sólo rebosaban imaginación y fan-
A 19. D x T, se responderla con 19. tasfa, sino que también podfan ser «ex-
... , D3AD, ganando. plicadas» en buena lógica.
42
PRIMERA DEL MATCH
Lipsia, 1876

DEFENSA SICILIANA Rosenthal, en la Strategie, 1883, pá-


gina 361, da como favorable para el
BLANCAS: Andersen. blanco la jugada 8. C x A +, T x C;
NEGRAS: Paulsen. 9. AJO. La jugada del texto, todo lo más,
iguala la lucha.
P4R 1 P4AD 8 P4R
CSA+ 9 RIA!
Jugada constitutiva de la partida sici- ASC 10
liana. Debe su nombre a un manuscrito
siciliano, según el te6rico.inglés J. F. Sarrat Zukertort y Cook sugerían en esta po-
(1813), preconizador de esta linea de juego. sición, A2D.
El nombre del autor del manuscrito se
desconoce. Janisch. Bilguer y Staunton 10 P4D
fueron partidarios de esta linea de juego PxP 11 DxP
en su variante antigua. La moderna o del C3R 11 D4T
dragón fue más practicada por Zukertort,
Bird y Blackbume.
Su idea genérica es impedir la formación
de un centro fuerte por parte de las blancas.

C3AR 1 C3AD
C3A 3 P3R
P4D 4 PxP
CxP S C3A
C(4D)5C 6

Esta jugada, de fuerte apariencia, no da


al blanco toda la ventaja que deja traslucir
a simple vista.

6 ASCI
C6D+ 7

Artificiosa. La mejor era 7. P3ID,


obligando a decidirse al Alfil; si cambia,
Peligrosa. El cambio 12. ..., A x C +
era más sólido.
las casillas negras quedan muy débiles,
y, si no cambia, pierde un tiempo. C4AI 13
7 RlRI Comienza el genial Andersen a sacrificar
A4AR 8 piezas por el ataque.

43
13 AxC+ TRlR 25 DlA
PxA 14 DxP+ TSD 26 P3A
A2D 15 D5D cm '1.7 C4C
P3An 16 DSR+ CxA '1.8 TRxC
T5C '1.9 P3C
El negro sigue facilitando la puesta en P4AR 30 CA
acción de las piezas blancas. Superior a la PxP 31 PxP
del texto era DID. TlAR 3'1. C3D
A3RI 17 C4D AxC 33 DxA
P3A 18 D5T+ TxP 34 C4A
AlA 19 DlD P4C 35 D6A
D3C '1.0 C5A Las negras intentan, por todos los me-
TlD '1.1 D'1.R dios a su alcance. impedir el emplaza-
P3C '1.'1. C3R miento del Alfil blanco en 4D. lo que
A'1.C '1.3 P3CR resultarfa mortal para ellas.
0-0 '1.4 RlC
T7R + I! 36 Rlt
PxC 37 DSC+
Ale 38 TSA
PxP 39 TlD
D x TI! 40 Abandona.
Es de resaltar el tratamiento heterodoxo
que ambos bandos han dado a su respec-
tiva configuración de Peones. con relación
al estilo depurado de hoy en dia. La posi-
ción se sostiene. paradójicamente hablan-
do. en la combinación. El juego se abre.
no obstante haberse planteado una defensa
semiabierta. Y. por las razones indicadas
de estilo. a las pocas movidas. los dos
adversarios se encuentran enzarzados en
una sangrienta y general batalla de com-
binación. desprovistos de las más elemen-
(Poski6n .'pué, • 35..... D6A) tales fortificaciones.

CLIFFTON
1884

GAMBITO ALLGAIER P4TR 4 PSC


ese 5
BLANCAS: Thorold. - NEGRAS: Fedden
Jugada constitutiva del gambito A11-
P4R 1 P4R pier. S. CSR (gambito Kieseritzky). se
P4AR '1. PxP juega menos. no obstante no implicar el
C3AR 3 P4CR sacrificio de un Caballo. como ocurre con

44
el A1lgaier. Ueva' este nombre, por ser
el gran tórico vien6s Johann Allgaier, el AlD
,
10
C5R!
P3AD!
que en 1819 lo introdujo en la préctica,
del que hizo análisis muy profundos. Impidiendo 11. A x C, P x A; 12.
PID conquistando una posición extraor-
5 P3TR dinariamente amenazadora. Si 10. .. .•
CxP 6 RxC A3R, igualmente jugable, podfa haber se-
guido la partida igual que una lborold-
Nills. que continu6 con 11. 0--4. RIR;
12. C3A, C x C; 13. P x C, D x PI; 14.
P3CR, D2R; IS. A6C +. R2D; 16. P4A.
P3A; 17. P x p. P x P; 18. P4A, C3A; 19.
D3C!. DSC; 20. P x PI, D x P +; 21.
A3R, D x PR; 22. P x A +, RIA; 23.
A4A, A4A +; 24. RIT, D2C; 2S. TDIA.
D x A; 26. T x A. DSR +; 27. RIC,
TlR; 28. ASRI P4TD; 29. P7R Y gana.
~ 11 RIR
C3A 12 A4AR
DlR 13 DxP
AxC 14 AxA
CxA 15 PxC
P3CR 16 D4T
D x PR 17 ClD
P4A I 18 TlCR
AlR l' D3C
P4DI 7 D4A lO A2R
DlA 21 P4TR
Esta jugada fue ideada por el ingl6s P4CD1 n TlAR
Thorold. Y. como puede verse. la emplea A4A 13 D6D
en la presente partida con resultado neta- PSA l4 P5T
mente satisfactorio.

7 P4D
Igualmente considerada como la mejor
defensa.

A X PI 8
El blanco sigue la táctica más ardorosa.
ya que si lentificase sus movimientos,
permitirla al bando negro crearse una po-
sición fuerte y capaz de rechazar cualquier
ataque de su oponente, haciendo valer.
seguidamente, la pieza de más.
38

P5R ,
8 C3AR

También se ha podido jugar 9. C3A, El blanco comienza el ataque final, que


9. C2D o 9. A2R, todas ellas correctas. conduce con gran precisi6n.
25 ClA PSC+ 37 PxP
TDlD :26 PxP T6AR+ 38
AxP '1.7 D3C
A6D '1.8 TlD Con 38. P x P + el blanco daba mate
D4A '1.9 TlTR en pocas jugadas. Veamos: 38 ....• R x P
AxA 30 RxA
31 RxP (si 38 ....• R4T; 39. TIT +. R x P; 40.
D7A+ TIC +. R x P; 41. TIA +. Y mate en
TDIR+ 3'1. C5R dos); 39. TIC +. R x P; 40. TIA +
TxC+! 33 R4D Y mate en dos. es más rápido.
D5R+ 34 RSA
P5D+ 35 R4C
P4T+ 36 R3T 38 Abandonan.

TORNEO DE BERLIN
1881

DEFENSA FRANCESA atacarlo por los flancos. principalmente


por el de Dama.
BLANCAS: Blackburne.
NEGRAS: Schwartz. C3AD 3 ClAR
PxP 4
P4R 1 P3R
No es la mejor. ya que resuelve al negro
P4D '1. P4D el problema. que se le presenta frecuente-
Posición típica que se presenta en la mente a esta línea de juego. del desarrollo
apertura francesa. con excepción de al- del AD. Recientemente se ha descubierto
gunos casos aislados. tales como los deri- una nueva forma de resolver este proble-
vados de la segunda jugada blanca: ma. bastante satisfactoria, por cierto. No
Variante Tchigorin (2. D2R) Y 2. P4AD. nos detenemos sobre ella. por estimarlo
Se le ha dado el nombre que actualmente más oportuno cuando tratemos de la época
lleva debido a que fue adoptado. con moderna.
éxito. por los jugadores franceses en el 4 PxP
match por correspondencia jugado en 1834. ClA 5 A3D
entre Londres y París. Esta línea de juego A3D 6 P3A
se encontraba rep.trada ya por Lucena. 0--0 7 0--0
que fue el primer tratadista del que se C2R 8
tiene noticia que se haya ocupado de ella.
Los primeros en revelar su importancia Otra combinación posible es 8. ASCR.
teórica fueron Labourdonnais y Leivés.
y más tarde Jaenisch y Stauton. Su labor 8 ASC
especial no permite. salvo raras veces. en- ClC 9 D'1.A
trar en el juego abierto y combinativo; A3R 10 cnID
no obstante. procuramos escoger las par- D'1.D 11 TRIR
tidas más en consonancia con aquella
época. Su <<leitmotiv» es provocar el Con la idea de llevar el CD vía ID-
avance de Peones blancos, con el fin de lAR a 3CR. La posición es aproximada-
46
mente igual. si bien las piezas negras tienen TIT 17 ClA
una situación más activa. T3T 18 P3CR
TDIT 19 TDlD
TDlR 11 CSR
Jugada indiferente que agrava consi-
derablemente la posición del negro. ya
de por sí. reducido a una forzosa defensa.
19....• T2R o 19....• P4AR eran mejores
que la del texto y daba al negro más posi-
bilidades dentro de su dificil situación.

ASC 10 TlD
P4AD! 11 PxP
AxP 11 P4TR?

Debilita más su posición. A2R seguido


de P4CD era la justa linea a seguir.

T4T! 13 P4CD
A3C 14 C3R
A6A 15 CSA+

DIA 13 AxC

Hasta este momento. el negro ha jugado


con gran corrección y ha obtenido par-
tido superior y una prometedora presión
en el centro y ala de Rey. La jugada del
texto. a cambio de la posibilidad de ganar
un Peón y dislocar la situación de los Peo-
nes del ala de Rey. abre al blanco demasia-
das lineas de ataque. eliminándose. al mis-
mo tiempo. las dos piezas negras mejor
situadas: el AD y el eR. Una continua-
ción bastante más consecuente era 13....•
P4AR. consolidando la posición central y
amenazando ganar material •.

PxA 14 CxC
D x CII 16
En este momento es cuando el negro
pudo elegir entre ganar un Peón o hacer ¡La explosión I Ha caldo una bomba de
unas seguras tablas mediante 14. . ..• gran potencia sobre el agrietado fuerte
A x e; lS. PA x A, e x p. etc. enemigo. y va a saltar hecho mil pedazos.

PT x C 15 AxP 16 AxD
R2C! 16 A3D T x PI 17 AbaDclC1118 •

47
POR CORRESPONDENCIA
1881-1882

APERTURA ESPAlil"OLA
Defensa Morphy, varo abierta
BLANCAS: Francfort.
NEGRAS: Stuttgart
P4R 1 P4R
C3AR 1 C3AD
ASC 3
La Apertura española, considerada, se-
gón opinión unánime de los mejores
maestros y teóricos, como la linea de
juego más fuerte y sólida en la partida de
Rey üuego abierto), figuró primeramente
en el Manuscrito de Gottingue (1490),
posteriormente fue el Traité de Lucena
(1497) el que habla de ella, aunque es Ruy (Posici6n después de 8.... , CD2R)
López (1530-15801), español, fundador
de la teoria ajedrecista, el primero que la Se prefiere en la actualidad 8.... , A3R,
trata extensamente. Su idea básica es la que no sólo se considera más segura, sino
siguiente: sujetar al Peón de Dama negro, que no entorpece el desarrollo en el ala
encerrando el juego adversario; el Peón de Rey. Podrá parecer que después de
de Dama, casi siempre (salvo los casos, haberse hecho un juego bastante correcto
hoy generales, de debilitamiento de los por ambas partes, la posición que se ha
Peones del ala de Dama) queda reducida presentado no está de acuerdo con la idea
su misión al apoyo directo del Peón de motriz prefijada para esta linea de juego;
Rey. No se llame el principiante a error, nada de eso. No hay regla sin excepción.
si cree que el principal objetivo es la cap- No obstante, si echamos una ojeada sobre
tura del Peón de Rey. Nada más equivo- la posición, veremos: que para que el
cado. Esto no pasa de ser una amenaza bando negro se haya apartado de la regla
muy secundaria y no de captura. sino con general, ha hecho falta: primero, que la
el objeto de sujetar las piezas contrarias configuración de Peones en el ala de Dama
a la defensa del Peón. haya quedado debilitada lo mismo que
todas las vias negras. y segundo, que, al
3 P3ID haber dejado a este bando una espléndida
A4T 4 C3A casilla para emplazar un Caballo con las
~ 5 CxP miras de apuntar a las casillas débiles del
P4DI 6 P4CD ala de Dama y 5AR (en el de Rey). Por
A3C 7 P4D otra parte, la formación del ejército blanco
PxP 8 CD1R de Peones tiene una situación óptima, pues
48
si bien el Peón de Rey se encuentra algo 1-1 A3R
avanzado, el peligro de captura es muy C6D+ 15 RlD
remoto, ya que las piezas negras no pueden D3DI 16 D3C
dejar indefenso su Peón de Dama. P5T 17 DxA
DxP 18 P3TR
esc 9 T3T 19 DxP
AlA 20 D5C
Considerado en aquel tiempo como el AlD! 21 DxT
mejor medio de ataque. D7T+ 22 RlD
DxT+ 23 CIA
9 CxC A4C 24 DST
AxC 10 P3AD P6T! 25 AlD!
C7C+ 26 RIR
Débil. La justa continuación es 10. 000' D7A 27 P3A
A2C; 12. TlR, D2D, con juego más o me- D8D+ 28 R2A
nos igual. DxA+ 29 R3C!
DxC 30 AxA
P4TD 11 P5C DxT 31 DxP
P4AD 12 P x Pa. p.- D8R+ 32 R2T
CxP 13 TICD C8D 33 P4AD
D7A 34 D6D
En este momento, el blanco anunció
mate en seis jugadas.

GlUOCO PIANO
BLANCAS: R. Charrouseck
NEGRAS: Lekner
P4R 1 P4R
C3AR 2 ClAD
A4A 3 A4A
0-0 4
No es este el mejor camino a seguir, sin
que por ello sea incorrecto. Su defecto
radica en que contradice las caracteristicas
fundamentales de flexibilidad operativa.
C4R! 14 El blanco puede realizar el enroque, pero
es conveniente su aplazamiento hasta ver
El blanco monta, con esta jugada, un el destino del Rey contrario, ya que, dadas
ataque formidable, consecuencia lógica las condiciones de especial seguridad, que
de su neta superioridad. Todas sus piezas representa en esta linea de juego el esta-
se encuentran prestas para la ofensiva com- cionamiento de los respectivos monarcas
binada. Es de resaltar, por el contrario, en el centro del tablero, resulta siempre
en el campo enemigo, la inacción semi- peligrosa una prematura definición que
absoluta de todas sus piezas, T, AR, D pudiera dar lugar a un peligroso ataque
y AD se encuentran en sus casillas ini- enemigo, abalanzando sobre el enroque
ciales; las dos primeras carecen en abso- una verdadera masa de Peones.
luto de horizonte. El Caballo clavado, el 4 D2R
Rey en el centro del tablero y una confi-
guración de Peones con vlas accesibles La incorrección que comete el negro es
para las piezas blancas. de bastante más volumen que la de su
49
4
oponente. Esta salida de Dama, con la Lo más inquietante y lo mejor. Se des-
finalidad de disponer de relación entre los cubre un variado conjunto de amenazas
enroques, resulta muy precipitada, ante la contra el ala real. Charrouseck, en un
facultad en que se encuentra su adversario abrir y cerrar de ojos, va a montar un
para hacerla retroceder hacia su punto de ataque del más puro estilo romántico.
partida. Charrouseck, extraordinario juga-
dor húngaro, víctima de una cruel enfer- 10 P3D
medad, murió a los veintisiete años de edad P4ARI 11
después de haber alcanzado triunfos reso-
nantes que prometían, en un mañana Abriendo lineas de penetración hacia el
frustrado, alcanzar el título de campeón enemigo.
mundial, para lo cual contaba con múl-
tiples y preminentes cualidades. Su estilo 11 P3TR
es extraordinariamente brillante, habiendo
creado, en aras de su prodigioso cerebro, Es dificil encontrar nada mejor; claro
producciones memorables, que inmortali- está que el blanco tenia todo esto perfec-
zaron su nombre. Este que comentamos tamente calculado, y responde adecuada-
constituye un pequeño botón de muestra. mente con ...
CJA 5 C3A P x P! 12
CSDI 6
La egregia Dama negra se ve impelida Consecuente con el plan previsto. 12.
a retroceder avergonzada. 6.... , C x C; C6C reportaba la ganancia de calidad,
7. P x C, seguida de C x P, ganarla pero el ataque habría visto muy mermada
pequeño material. su actividad potencial.

6 DlD 12 C xP
P3D 7 0-0
No hay elección. Con el movimiento del
Este camino es un suicidio premeditado. texto se pone en acción una nueva pieza
De todas formas, la posición era de nota- para auxiliar el ala amenazada, atacando
ble ventaja para los colores blancos. el Alfil y evitando la pérdida de calidad.
A5CR 8 AlR AxC 13 PxA
CxA+ 9 DxC

C4T 10 DSTI 14
so
Principio de una de las más extraordi- Hermosa jugada dentro de su aparente
narias combinaciones que se han podido sencillez; constituye el prólogo de una
gestar sobre el tablero. Fino engarce y aca- bella combinación final.
bada precisión. que tiene por digno remate
una bellfsima combinación final. ¡Un 18 D xPC
verdadero trabajo de filigrana! TIAR 19 A6T
RIT!! 20
14 CxA
Cada movida constituye una delicada
cincelada en la realización de esta inmor-
Se ha hecho desaparecer un peligroso tal obra del arte ajedrecístico. Un error
rival -pensará seguramente el negro-o grave habría sido 20. T3A. D5D +;
ya que por todos conceptos el Alfil era 21. RIT o T2A y D8T +. seguido de
superior al Caballo. mate.

D x P! 15 20 OSD!
Forzada. 21. ...• A x T; 22. e5A con
Primer acto heroico. Las blancas no mate imparable.
vacilan en permitir la huida del Caballo.
llevando en sus garras la pieza recién in- TIC + 21 DxT+
molada. pues su objetivo está marcado RxD 22 TDlR
a sangre y fuego: destrucción del coloso
enemigo. Se ha efectuado una serie de cambios.
y el segundo jugador parece haber ven-
15 C4R cido la crisis de la partida. Con la jugada
del texto hace sus preparativos para el
contraataque mediante P4D; pero ...
Salvado y dispuesto a defender a su
monarca.

T3AII 16

La Torre se siente contagiada del herofs-


mo demostrado por el Alfil. y no duda en
sacrificar su vida: el blanco planea la
rápida apertura de lineas de penetración
contra el Rey adversario. Se produce un
hermoso fuego de artificio. a1rededor de
una latente amenaza de mate.

16 CxT+
PxC 17

Charrouseck amenaza el desplazamiento


de su Rey y ulterior sustitución por la
Torre superviviente. Su enemigo no puede P5A 23
permitirlo. y se apresta a entregar la Dama
por dos Torres. ... He aquf, de nuevo, en acción el
soldado tan misteriosamente avanzado en
17 D4R la jugada 18. preparada para tomar la
P4ARII 18 responsabilidad de un importantfsimo
51
papel en este último acto del drama que El sacrificio final.
estamos viviendo.
15 PxC
13 P4D
P6AI 26 Abandonan.
C3A 24 ASC

No hay jugada satisfactoria. Este modesto infante comparte los


lauros de la victoria con su soberana.
C5C1I 15 ¡Así jugaba Charrouseck!

52
IV

LA ESCUELA DEL DESARROLLO

MORPHY

La escuela romántica no acabó sus días de las partidas de sus grandes matches
repentinamente, sino de manera casi las ganó Morphy de una manera directa
inadvertida, sobre todo para los propios y sencilla, y es en ese poder sencillo y ló-
practicantes de ella. Un joven norteameri- gico donde radica la verdadera belleza
cano, natural de Nueva Orleáns, usando, de su juego, contemplado desde el punto
sf, del estilo de combinaciones de sabor de vista de los grandes maestros.»
romántico, llegó a alcanzar formidables En efecto, estaba decretando Morphy
triunfos, y en pocos afios se situó firme- en silencio la condena de muerte para el
mente en el trono del ajedrez mundial. sistema puramente combativo, pues perfi-
Fue admirado extraordinariamente por laba los trazos de una nueva valoración
sus «combinaciones»; pero el gran mérito de la lucha: el desarrollo. El fundamental
y la gran aportación que trajo al ajedrez eje teórico de las ideas de Morphy giran
fue precisamente la muerte de las combi- alrededor del previo desarrollo como finoli-
naciones como única razón de ser del dad inicial de la lucha. Es decir, que em-
combate, y, por consiguiente, el final del pezado el combate, el pensamiento del
romanticismo. ajedrecista ha de limitar su plan y sus
Ciertamente, Morphy triunfaba en enér- aspiraciones a la simple obtención de una
gicas y fuertes combinaciones, pero las posición cómoda y dominante en que em-
circunstancias en que éstas se producían plazar sus armas, sin preocuparse para
hablaban ya de algo nuevo y extrafio para nada de proyectos ofensivos que más tarde
la escuela romántica. Algún nuevo ele- vendrán por sf solos una vez situados en
mento entraba en juego; algo que hasta posiciones de superioridad. Desde la cima
entonces no habia sido considerado en su se ve mejor la batalla, y Morphy se subfa
real extensión. Y este algo no fue captado a la cima con sus buenos gemelos para
inmediatamente, sino que se llegó a su mejor dirigir asf la batalla que su ejército
conocimiento por la fuerza del tiempo y de se aprestaba a librar.
la experiencia. Fue Capablanca quien en Morphy cierra tras si el periodo del
este punto puso el dedo en la llaga, y dijo: ajedrez que podremos llamar antiguo. En
«En contra de la creencia general, pro- punto a sus aportaciones a la teorfa, ade-
ducto de la ignorancia, la fuerza principal más de la fundamental idea del deSlUrollo.
de Morphy no estribaba en su poder de definió la calidad de las luchas abiertas,
combinación, sino en su juego de posición precisando la tónica diferencial de P4R
y en su estilo general, pues la mayor parte y P4D; razonÓ los fundamentos que carac-
53
terizan a una como apertura abierta y a C3A 4 P xPR
otra como apertura cerrada, y al mismo CD x P 5 P4D
tiempo destacó el principio estable de la OC 6
expansión central en los planteos.
En realidad, pese a su gran contribu- C x P está demostrado da al blanco
ción teórica y a su quizá inigualable fuerza ventaja decisiva.
ajedrecística, que ha hecho se le considere
por muchos maestros como el ajedrecista 6
más grande de todos los tiempos, la escuela P5R
C5R 7 C3AR
de «desarrollo» de Morphy no marca en ASC 8
la historia del ajedrez sino un periodo AlD
CST 9 0-0
de transición. Fue el puente que sirvió
para unir a dos épocas del ajedrez, abrien-
do los cauces para las aportaciones más Como puede comprobarse, el negro no
científicas de la teoría ajedrecística que vacila en adoptar su típico <(fiodus
aparecieron en escena presentadas por operandí»; desarrolla sus piezas a toda
Steinitz. velocidad, no titubeando ante las amena-
Cuando tratemos del hipermodernismo, zas aparentes del enemigo.
comprenderá el lector la importancia que
para la teoria han tenido cada una de DID 10 DlR
estas escuelas, de las que ha sido arrancado P4CR 11 CxP
el lastre de errores y aprovechado, en per- CxC U DxC
fecta armonía colectiva, cada uno de sus C5R 13 OA
aciertos y bondades. De la escuela de AlR 14 D6T
Morphy no ha habido que arrojar muchos CxC 15
despojos, pero sí hubo de ser completada
en algunos vacíos. No era posible que la Mientras las piezas blancas van y vienen,
concepción de un plan estuviese alejada sin encontrar una situación estable, las
de la lucha en determínados momentos; piezas negras ocupan posiciones agresivas,
que sólo apareciese en la ocasión señalada dominando lineas y activando su radío de
como más propicia. No; el plan debe ser acción.
algo permanente en su esencia (aunque
díverso en su potencía) y existírá en todo
momento, aun antes de que la lucha sea 15 PxC
empellada. AlR 16 TICD
Ahora pasemos al tablero para delei-
tarnos con algunas de las geniales pro-
ducciones del gran ajedrecista norteameri-
cano.

DEFENSA PHILIDOR

BLANCAS: H. E. Bird.
NEGRAS: P. Morphy

P4R 1 P4R
OAR 2 P3D
P4D 3 P4AR

Jugada preferida por Morphy en la


defensa Philidor, aunque en la actualidad
se le considera insuficiente. (Posici6n después de 17. 0-0(0)

S4
Morphy gesta con la presente jugada una Con R2T, las negras tendrían que con-
extraordinaria combinación, utilizando tentarse con las tablas.
todo su ejército desarrollado en pie de
guerra. Se ha comprobado que Bird pudo 25 P6R!
salvar la partida, e incluso ganarla, pero,
como decía W. Neiwictz, el genío impe- Esta magnifica jugada de Morphy decide
tuoso de Morphy no pudo resistir en la totalmente la lucha. Las blancas ya no
presente partida la tentación de arriesgar tienen defensa. Este último movimiento
un sacrificio brillante para obtener un constituye la típica apertura de lineas que
ataque que, sin duda alguna, exíge gran suele encontrarse con frecuencia en las
atención Y habilidad al intentar rechazarlo. partidas del formidable maestro.

17 AxP 26 A4A+
17 T xPA T3D 27

Comienza la avalancha del material A3D perdía limpiamente un Alfil.


desarrollado negro.
27 DSA+
AxT 18 D6T!! RlD 28 D7T+
P3A 19 RlD 29 D8C+
Abandonan.
D5C habría dado a las blancas más posi-
bilidades. No pueden salvar la pieza. Esta creación
del genial norteamericano Pablo Morphy
19 D xPT es una de las representaciones más genui-
P4C 20 D8T+ nas de su escuela caracterfstica.
RlA 21 DST+
RlC 22
GAMBITO EVANS
RIA daba a las blancas grandes posi-
bilidades de tablas. BLANCAS: Morphy
NEGRAS: Lichtenheim
22 AxP
PxA 23 TxP+ P4R 1 P4R
DxT 24 DxD+ C3AR 2 C3AD
RlA 25 A4A 3 A4A
P4CD 4 AxP
P3AD 5 A4A
0--0 6

Esta movida no es inferior a 6. P4D,


debido a que no le concede al bando negro
el tiempo tan importante para su estabili-
zación central como habrla ocurrido, de
haberse efectuado, estando el Alfil negro
en 4T.
6 C3A?
El negro juega maquinalmente y efectúa
el mísmo movimiento que hubiera corres-
pondido a la linea antes citada, viéndose
obligado ahora a ceder su posición cen-
tral.
55
sario, y las amenazas se suceden. En este
momc:nto el blanco amaga la ganancia de
una pIeza con PSD.
14 A4T
De poco ~pone el negro para elegir.
La causa no tiene defensa.

P4D 7
Lichtenheim, merced a su «insignifi-
cante ligereza», va a intentar contener la
furiosa agresividad de las armas de
Morphy.

7 PxP
PxP 8 AJC
PSR! 9
C4RI 15

. Desde este momento. las negras no Comienzo del asalto final. Morphy pone
dIsponen de un solo momento de respiro. remate a la partida con su sello caracterís-
Sólo disponen de un triste panorama de tico.
jugadas forzadas.
15 TxP
9 P4D C6A+ 16 RIA
PxC 10 PxA TSR 17 P3A
PxP 11 A6T 18 C4A
T x A!! 19
El blanco consigue. con esta jugada
retener al Monarca enemigo en el centr~ Espléndida combinación. Las partidas
del tablero. No obstante, las posibilidades de Morphy nos deparan, frecuentemente
ofensivas que le permite, habría sido quizá una serie sucesiva de sorpresas, frutos d~
de más efectividad 11. TIR +: RIA: su extraordinario ingenio.
12. A3T +. RIC; 13. PSD. C4T; 14: 19 PxT
A7R, D2D; 15. P x P, R x P; 16. DID esC!! 20
con juego ganador. '
Hermosa posición. La serie de amena-
11 TICR zas coordinadas permite al blanco una
TIR+ 12 C2R defensa mutua de sus tres piezas en el
ASC 13 AJR aire.
C3A 14
20 R2R
M09'hy sigue desarrollo de piezas. una AxT 21 CxA
vez fijados los puntos débiles del adver- D3A 22 DxP
S6
Este desesperado intento de salvación Considerada como la mejor: desarrolla
va a permitir a Morphy cerrar con un una pieza y amenaza un Peón central.
lindo broche esta bella partida.
A4A 6 P4D
TlD 23 A7D PxP 7 AlD
ese + I 24 TxC P4D 8
D7A+ 15 RlD
C3A 26 Abandonan. Una linea más aventurada representa
el gambito Rice, constituido por 8. ~,
GAMBITO KIESSERITZKY que da mejor juego al negro.

BLANCAS: Morphy 8 C4TI


NEGRAS: Modley C3A! 9 A4AR
C2R 10 D3A
P4R 1 P4R CxP 11 C6C
P4AR 2 PxP C5T! 12
C3AR 3 P4CR
P4TR 4 PSC
CSR 5

Morphy, con su cerebro extraordinario,


no encuentra resistencia en captar la com-
binación más complicada.
Este tipo de gambito del CR tiene su Con la jugada del texto efectúa una
origen en Polerio (1590); posteriormente entrega posicional de su más tlpico estilo.
son los italianos los que se ocupan de él, Le deparará la ventaja de poner en juego
dándole la denominación de gambito el resto de sus fuerzas a la máxima velo-
grande; aunque sea Lionel Kiesseritzky cidad.
(1806-1853), austro-húngaro de origen,
prestigioso teórico y no menos afamado 12 CxC
jugador, el que se ocupa de esta linea de ASC 13 ASC+
juego en 1846, dejando un estudio ana- P3A 14 D3D
litico muy extenso. El blanco dispone de 0--0 15
juego más variado que en la otra rama de
uso más general, el gambito Allgaier, ya La jugada más fina de toda la partida.
que no se ve obligado a sacrificar el Ca- Si Morphy se hubiera tomado el Alfil, no
ballo. sólo habrla perdido de una forma tácita
un tiempo, a causa de que el Alfil tomado
5 C3AR se encuentra accidentalmente fuera de
57
juego. sino que. manteniendo la amenaza, A4A 4 A5T+
obliga a su oponente a perder un nuevo P3C 5 PxP
tiempo. favoreciendo. por ende. el plan 0---0 6 PxP+
blanco. RIT 7
15 CC
T x Al! 16 CxT
DxP 17
Las piezas blancas siguen destruyc¡ndo
obstáculos que entorpezcan el libre trán-
sito por las vías de acceso al campo ene-
migo.
17 C1R
TIR la P4TR
D3A 19 T1T
A5C+ lO
Es realmente admirable el hecho de
cómo el blanco sigue despreciando el Alfil
<<en prise». Su ataque continúa. y no se
entretiene en ganancia de material que
representarla para el ataque una pérdida
de tiempo. considerando que el referido
Alfil no estorba para la realización de sus 7 P4D!
planes.
No obstante estar considerado este gam-
20 P3A bito como inferior. requiere una defensa
PxP 21 PxP bastante precisa. La jugada del texto está
CxP 22 CIC x C admitida en la práctica como la mejor.
AxC+ 23 AbllDdonan.
A x P 8
El resultado obtenido por el ataque
continuado ha sido: primero. destrozar las Si aqui el blanco hubiese jugado 8.
fortificaciones naturales del adversario. P x p. el negro lograba una excelente par-
y segundo. recuperar cumplidamente el tida. mediante 8..... A3A; 9. C5R. A x C;
material perdido. dejando a su rival total- 10. TIR. C2R; 11. T x A. 0-0. etc.
mente desarmado.
Si en lugar de escoger la linea del texto. 8 C3AR
decide la toma del Alfil. dando a las ne- AxP+ 9 RxA
gras un tiempo bastante importante. ha- CxA lO nRT
bría facilitado a éstas la tarea defensiva al
conseguir poner en juego el material dis- Débil movida. El negro conseguía mej~
ponible. juego con 10....• TIA; 11. P5R. D4D +;
12. C3A. C4T; 13. P4A. DJA; 14. P4D.
C6C +. etc.; si 11. P4D. R1C; 12. ASC.
GAMBITO CUNNINGHAM C x P; 13. A x D. T x A +; 14. DxT.
C6C +. etc.• y si P3D. R1C; 12. ASC.
BLANCAS: P. Morphy P3TR. etc.• en todos los casos la ventaja
NEGRAS: H. C. Bird está del lado negro.
P4R 1 P4R P3D 11 A6T
P4AR 2 PxP D5T+ 12 RIC
C3AR 3 A2R TxC 13
58
Magnifico sacrificio de calidad con el lO C5D
objeto de descomponer la posición del C6A+ 21 RIT
enroque negro. La respuesta es forzada. D3R 22 D2C
CxP 23 D2T
13 PxT TxA 24 DxC
CJAD 14 T4R D3T 25 R2T
D3A 15 D2D P3A 26 CJR
A4A 16 CJA T6C 27 TIR
El negro se ve impelido a deyolver ma-
terial ante su retraso en desarrollo. Cada
partida de Morphy es una acabada mues-
tra de su personal escuela. Sobre J. base
de su incomparable genio de combinación,
el fino instinto le determinaba cuál era la
posición más propia a desarrollar su es-
tilo. El desconocimiento, en su tiempo,
de la importancia del desarrollo de piezas
le permitió destacar sobre todos sus con-
temporáneos, todos los cuales cayeron en
forma espectacular ante el coloso norte-
americano. Lowentha1, Paulsen, Andersen,
Bird, Harrwitz, Staunton y de Riviere
fueron arrasados por la furia huracanada
de su juego.
RxP 17 ASC Tixtc 28
TICR 18 P4TR
AxT 19 PxA Las blancas se deciden por el camino
C5D 20 fácil. El cambio total de piezas les da W".&
indudable victoria, ya que al Peón de más
se les une el Peón aislado de las negras,
como fruta madura pronta a caer.
28 TxT
DxT 29 DxC+
D3T 30 DxD+
Mejor era 30.. ""' R3T, aunque tampoco
salvase una causa perdida totalmente.
RxD 31 P4A
R4C 32 R3C
R3A 33 "Rinden.

GAMBITO DEL ALFIL REY


BLANCAS: Andersen
NEGRAS: Morphy
P4R 1 P4R
El juego valiente y profundo de Morphy P4AR 2 PxP
le ha permitido conseguir el restableci- A4A 3 CJAR
miento del equilibrio material, conservando
una gran ventaja de posición: dominio de Defensa que, aún hoy, goza de mucho
casillas y lineas importantes. prestigio. Para un luchador del estilo de
59
Morpby, constituye una jugada que le en- Andersen cambia un Alfil, que ha sido
eaja como anillo al dedo. Desarrollo de movido en tres ocasiones, por un Caballo
una pieza a una óptima casilla del centro que tan sólo lo ha sido en una. La estruc-
mayor (cuadrado constituido por los cua- tura contraria, no obstante el doblamiento
tro vértices: f3, f6, c6, c3), amenazando de Peones, da un paso hacia la fortifica-
a un peón central contrario. ción central. Indiscutiblemente, la ventaja
se encuentra del lado negro, ya que, a pe-
4 P4D sar de sus dificultades para enrocar, de-
Esta última jugada, en su aspecto bi- bido a la defectuosa configuración de sus
lateral, nos hace un elocuente parangón Peones, tienen, sin embargo, más libertad
entre dos estilos. Andersen, por un lado, de acción (sus piezas pueden entrar en
no ejecuta ninguna movida en favor de batalla rápidamente), un Caballo en un
su desarrollo, pero sI agresiva. Morpby, magnífico puesto central, y su Peón de
por el otro, con su simple jugada de Peón más haciendo una momentánea, pero
ataca, defendiendo por ende, y se desarrolla efectiva presión.
dando libertad de acción inmediata a va-
rias piezas; esto le va a permitir, lógica- 9 PxA
mente, disponer para la lucha que se P4D 10 P4AD
aproxima de un mayor número de efecti-
vos, inclinandO, como es natural, de su Morphy no quiere Peones doblados,
lado las mayores posibilidades tácticas. y ataca con el suyo, un buen Peón central.
Si consigue efectuar el cambio habrá
Ale 5 C5R hecho un negocio afortunado: cambiar
C3AR 6 ASCR un PC por un PD.
0--0 7
Contra 7. P3D, la continuación proba- P3A 11 AlR
blehabrfasidoA x C;8.D x A,D5T+;
9. P3C, P x P; 10. R2R, C7A; 11. A x P, Si el negro hubiese realizado el cambio
C x T; 12. D x P +, RID; 13. A x P, de Peón, el blanco habría dispuesto para
D x P +, venciendo. La del texto es su- su CD de una magnífica casilla de salida:
perior, ya que asegura la posición del Rey. 3AD, por este motivo evita el compla-
cerle.
7 C3AD
A4T 8 P4CR P4CD 1l P xPC
AxC+ 9 PxP 13
Parece, a simple vista, que el blanco ha
desbaratado los propósitos de su opo-
nente; cambio de Peones que se ha pro-
ducido: PAD (virtualmente PCD) por
PCD no han reportado los benefiCiOS~
entraban en sus cálculos. Pese a ello, 1
negro puede anotar en su haber v as
ventajas: primera, se ha desplazado un
Peón del centro mayor (p3AD) a una
columna semilateral, colocándose en una
posición inestable, como nos va a de-
mostrar Morphy rápidamente.
13 0--0
D3C 14
Superior era 14. P3TD.
60
14 TlCD
P3m ¡tardel 15
15 P4AD1
CJA 16 CxC
DxC 17 PxPC
PxP 18 AxP
D3D U P4m
P4TR 20 P3TR
PxP 21 PxP
P3C II T3C
Morphy, siguiendo las normas que le
dicta su temperamento y estilo, busca
siempre, si no las mejores posiciones, por
lo menos las más agresivas; su lema po-
demos definirlo como: ¡siempre adelante!
Al verse obligado a devolver uno de los
dos Peones que tiene de más, se desen-
tiende de su inútil defensa y busca hori- (Posición despuJ, de 27. R x A)
zonte a sus piezas. Esta última jugada de
Torre, emplazándola en el vértice de la 27 DlA
escuadra que forman, libre de obstáculos CSR '1.8 nTR
naturales (tales podemos llamar a los PxP 29 T(IA):\T
Peones), la columna b y la 6 horizontal, PxP 30
dándole una acción sumamente elástica
al permitirle acudir a varios sectores ele- Insuficiente. La serie de jaques con 'os
gibles. En estas condiciones, la toma del que van a obsequiar las negras a las blan-
Peón de Alfil Rey por parte del blanco, cas, dejan a éstas en situación propicia al
no constituirla una ventaja para él, ya que abandono. ¡Era el último intento para es-
inmediatamente caerla la Torre enemiga capar a la acción de la fuerza!
sobre las recién abiertas columnas.
30 T7T+
TlT 13 T3C RIC 31 T8T+
TlCR 14 R'1.A 32 T(I)7T+
R3R 33 T6T+
Mejor parece en este momento 24. CJA 34 TxC+
T2TR, P x P; 25. TIT, R2C; 26. R2C.

14 A6TR

El blanco sacrifica la calidad para eli-


minar el molesto AD adversario. La lucha,
virtualmente, está decidida.

P6R 2S AxT
PxP+ 26 RlC
RxA 27

La gran capacidad combinadora de


Andersen se va a estrellar contra el gran
Morphy. Los lazos se van a suceder, hasta
que el blanco se vea desprovisto de las
menores posibilidades de salvación.
61
La posición blanca se ha deshecho ante Es curioso observar cómo las blancas,
el impetu arrollador del adversario. y. no que adoptan en esta partida la estrategia
encontrando jugada satisfactoria. aban- de bloqueo ponen en práctica sus propó-
dona el combate. sitos sin obstruir las diagonales de los
Alfiles. El Rey negro no sabe si enrocarse
largo o corto, o si, finalmente, adoptar la
GAMBITO DEL REY REHUSADO postura central en que se encuentra ac-
tualmente. Es dificil, ante una posición
BLANCAS: Morphy - NEGRAS: Bird tan bloqueada, sugerirle nada satisfac-
torio.
P4R 1 P4R
P4AR 2 A4A 11 TlD
C3AR 3 P3D
P3A 4 ASC
A4A 5 C3AD
Más prudente era 11 •...• P3TR, impi-
P4CD 6 diendo la molesta clavada.

Se ha planteado una linea bastante prac- ASCR 12 CICDI


ticada en el siglo pasado cuya corrección C2D 13 P3A
está discutida. El blanco. siguiendo su plan ClA 14 P4D
típico, gana espacio en el lado de Dama, A3C 15
aunque sea a trueque de flaquear su es-
tructura de Peones. El estilo turbulento
de Morphy penetró en la ciencia ajedre-
cistica, no reclamando, sino exigiendo
espacio donde desenvolver sus portentosas
facultades. Su genio extraordinario bam-
boleó el hasta entonces débil andamiaje
cientffico.

6 A3C
P4m 7 P3TD
P3TR 8 AxC
DxA 9 DlR
P3D 10 C3A
PSA 11

No hay motivo para temer una apertura


de lineas. no obstante ser la mejor chance
para el negro. debido a encontrarse s~
cientemente vigilada toda la columnaÁle
Dama.

15 D3D
C3C 16 ()-.{)

Más defensa le daba al negro. como de


cirnos anteriormente. la apertura de lineas
su situación encerrada no tiene ningútl
porvenir próspero. En consecuencia, debi4
jugar: 16.... , P x P; 17. P x p. D6D

62
C5T 17 PxP 4 PxP
PxP 18 C x C1
TlDI 19 Al efectuar esta movida, el negro no
pierde ningún tiempo efectivo (aunque si
En todas las épocas existen primeras aparente), debido a que ha tomado un
figuras, que, en la sucesiva celebración importante Peón central, y el blanco ten-
de torneos demuestran su clase alcanzado drá que consumir su equivalente en recu-
los lugares de preferencia. Pero entre todos perar el equilibrio material.
estos ases o grandes maestros, suelen des-
collar uno o dos la mayorfa de las veces. 5 AlR
Cuando la estrella fugaz del inmortal
Morphy cruzó el firmamento ajedrecfstico, e x P era mejor por facilitar la jugada
no tuvo un solo enemigo que llegase liberadora P4D.
a medir sus fuerzas ante el tablero sin
tener el convencimiento de que (<DO habia CxP 6 O~
nada que hacer contra el coloso ameri-
canO». Su rival de la presente partida, Si, al contrario, se efectúa 6.... , C x P,
H. E. Bird, fuerte jugador inglés Qleg6 sigue 7. CSA, P4D (si 7.... ,0--(); 8. D4C,
a ser campe6n del Reino Unido), sucum- P3CR; 9. C6T +, etc.); 8. C x P +, R1A;
bió en match con él por el desolador 9. A6T, R1C; 10. A x P, con ventaja en
«score» de + 1. - 10, = 1 sobre el total ambos casos.
de 12 partidas. En vez de su desgraciada
jugada 18•... , C x e, D6D le habrfa C3A 7 C4R
dado más posibilidades de resistir.

19 Abandonan.

No hay soluci6n posible.

DEFENSA DE BILGUER (2 Cs.)


BLANCAS: Morphy
NEGRAS: A. de Riviere

P4R 1 P4R
C3AR 2 C3AD
A4A 3 C3A
P4D 4

El blanco puede con 4. esc entrar en


ataque que gozó de gran prestigio, pero A4A, como jugó Rosenthal en su match
que, en la actualidad, se encuentra aban- contra Neuman, entonces 8. A3R, e x e;
donado casi por completo. Tendrfa unas 9. A x e, A x A; 10. D x A, con mejor
posibilidades de ataque fulminante, para partida.
que Morphy lo hubiera adoptado. Existe,
ya de por si, un motivo fundamental para AlRI 8
rechazarlo: se inicia una temprana ofen-
siva contra la intacta estructuración ne- Morphy ha perdido un tiempo -dÍ! t
gra, a costa de la pérdida de un tiempo el análisis somero de la jugada a su as-
siempre muy importante, mientras las pecto unilateral-o ~in embargo, si nos
piezas no han encontrado Ifneas o casillas fijamos en el Caballo negro de 4R, vere-
convenientes por su ulterior actividad. mos que ha efectuado una movida super-
63
11ua, encontrándose, en su actual puesto, 16 OR
en posición inestable ante la amenaza PSA 17
blanca de avanzar el PAR dos pasos. En
consecuencia, el negro, virtualmente, ha El ataque está en marcha.
perdido dos tiempos al realizar su jugada
número 7. 17 AlA
D3T 18
8 P4D
P4A 9 OA En este momento Morphy pudo realizar
CxC 10 PxC una bonita combinación de dudosa valo-
P5R 11 A4A+ ración. La jugada era 18. P x C, A x D
RIT 12 C2D (si el negro toma el Peón, el blanco retino
la Dama, quedando con pieza de más); 19
Nueva pérdida de tiempo forzado, mo- P x P +, R2C; P X T(C +), seguido de
tivada por el necesario movimiento libe- A x A, con resultado incierto. No obs-
rador 8•... , P4D. tante, por esta vez, escoge un camino más
seguro.
A3D 13 TIR
A2D 14 CIA 18 C4A

D5T! 15 P6R1! 19
Aprovechando el momento justo en que, Magnifico sacrificio de desviación.
para defender las casillas negras, el Caba-
llo obstruye el retomo del Alfil, Morphy
se lanza a debilitar las referidas casillas 19 PA x P-
para preparar el asalto del semidesguar- P6A 20 P4R
necido enroque negro. P7A+ 21 RIT
P x T(D) 22 DxD
15 P3CR
A x PI 23
D6T 16
Nueva sorpresa. El Alfil es invulnerable
Si el Caballo negro no estuviese en su
actual casilla, este bando habría ganado 23 AxD
un tiempo muy importante, expulsando AxD 24 AxP+
a la Dama contraria, mediante AlAR. RxA 25 TxA
64
Es extraordinaria la forma de asaltar la
posición negra en pocas jugadas; demues-
tra la precisión agresiva de Morphy.
TD1R AbandOlllUl.

GAMBITO EVANS
BLANCAS: Morphy-NEGRAS:H.Levis
P4R 1 P4R
C3AR 2 C3AD
A4A 3 A4A
P4CD 4
Morphy. campeón de aperturas abiertas
con sus ataques francos y decididos. tenía
especial preferencia por el gambito Evans. (Posición después de 10• ...• A5e)
Anterior a él Labourdonnais. y posterior.
Tchigorine. fueron los fieles guardianes del compensa ampliamente el Peón sacri-
fuego sagrado. ficado.
Con el sacrificio del segundo Peón. las
4 A3C blancas abren todavía más líneas. colum-
nas y diagonales.
Un movimiento de respeto al contrin-
cante. 11 CxC
PxC 12 DxP
0--0 5 DlR D3C 13 D2R
P4TD 6 AlC 14 C3A
C3A 15 AxC
La idea primitiva en una de sus fases se DxA 16 0--0
pone en práctica en este momento: ofen-
siva lateral.
6 CxP
Creyendo. equivocadamente. el mo-
mento propicio a la captura del Peón de
gambito. Para impedir la pérdida de una
pieza. se imponía una medida preventiva.
de precaución. como 6•...• P4TD o 6. . ..•
P3TD. por ejemplo.
PST 7 A4A
P3A 8 C3AD
P4D 9 PxP
PxP 10 ASC
CSRI 11
La partida ha adquirido. por inversión
de movimientos. una de las posiciones más
favorables al blanco que se presentan en Como puede observarse por el diagra-
el gambito Evans aceptado. con un juego ma, el negro ha conseguido. después de
abierto y un centro potente y movible que inauditos esfuerzos. colocar a su Rey en
6S
5
seguridad; seguridad, desde luego, muy 14 CxT+
relativa, vistos los cañones de largo alcance PxC 25 PxP
que apuntan hacia su nueva morada. El D6T 26 D2D
plan del blanco sigue latente: el ataque DxP 27 Abandonan.
directo contra el enroque, que puede, de
no darle la victoria instantánea, por lo APERTURA RUY LOPEZ
menos que exija a su adversario la entrega
de material suficiente para que no se es- BLANCAS: P. Morphy
cape la victoria. El plan del negro es más NEGRAS: B. Schulten
dificil, aunque más concreto: defenderse
a todo trance ante la próxima ofensiva, P4R 1 P4R
devolviendo, en caso de suma necesidad, CJAR 2 CJAD
el material ganado. ASC 3
TDIR 17 CIR El planteo debido al español Ruy López,
P4A 18 D4A+ considerado como campeón del mundo
RlT 19 P3D entre 1570 y 1575, está reputado en la
P5A 20 actualidad como el más fuerte, dentro de
las luchas abiertas que originan las parti-
Es digna de resaltar la energía y lógica das de los Peones de Rey. Su idea básica
con que las blancas conducen el combate. no ha sufrido, en el curso del tiempo,
20 CJA
variaciones sustanciales, conservando, por
TlA 21 D4R tanto, su estilo propio y su fortaleza po-
DID 22 D2R sicional. Resulta verdaderamente notable
TlCR! 23
cómo Pablo Morphy utiliza este pacifico
planteo, transformado por su inicial tempe-
Se amenaza 24. T x P +, R x T; 25. ramento agresivo, en un combate violento
D5C +, R1T; 26. A x C +, ganando. y ardoroso.
23 C4T 3 A4A
P3A 4 CRlR
0-0 5 0--0
P4D 6 PxP
PxP 7 AJC
P5D 8 CIC

P6AI! 14
Sacrificio decisivo. Una vez más vemos
cómo para el ímpetu de Morphy no habia
enroque que se resistiese.
66
No ha transcurrido la decena de juga-
das, y ya el fenomenal americano se vuelca
materialmente sobre su contrario, a fin
de restringir sus posibilidades y, en conse-
cuencia, dificultar su normal desarrollo.
9 PxP
A4AR! 10
Para situarlo en 6D y paralizar el juego
negro.
10 AlA
C3A 11 P3TD
A4A 12 P4CD
A3CD 13 AlC
¡Por fin, este Alfil, al que se le auguraba
un triste futuro, ha conseguido salir a la
intemperie! Lástima, que no va a disponer (Posición después de 18....• D3A)
de colaboradores eficaces.
AxP 14 AxA de pulverizar la capacidad de resistencia
DxA 15 P3TR? de su contrincante.
«Donde no hay harina, todo es mohina» 19 PxD
-dice el proverbio castellano-. En aje- C4C 20 R2C
drez, cuando una posición es tan defi- C x PAl 21
ciente como la presente, en la cual se Si 21. T6D. el negro tenía una buena
carecen de posibilidades, no sólo estra- respuesta con 21. ...• CIA. seguido de
tégicas, sino tácticas, no hay jugada que 22. . ..• P4TR. ganando pieza si el blanco
satisfaga plenamente. Al negro no le ha tomaba el PAR.
parecido nada más acertado que impedir
el salto del CR blanco a SC, perdiendo 21 A3A
un tiempo lastimoso que, quizá, le habrla PSR 22 P4TO
sido imprescindible para intentar aliviar TlD 23 TIT
un poco la situación agobiada de sus
piezas. Su adversario, desde luego, no se Una fiel muestra de inferioridad de po-
entretiene, continúa su tarea y juega ... sición en el lado negro. es el hecho de que.
llegada la jugada veintitrés de la partida,
TOlO 16 CIA solamente tiene desarrolladas dos piezas.
¡Demasiado tarde! encontrándose las tres restantes en sus
casillas de origen. mientras las blancas
D4A 17 C3C ocupan excelentes posiciones ofensivas.
C5R 18 D3A C(3A)5D 24 CSA
Intento desesperado, para conseguir
disminuir la presión contraria Por no cambiar las dos únicas piezas
desarrolladas. aunque si. una.
D x D 19
AxC 25 PxA
Morphy nos descubre en este momento nc + 26 RIA
una nueva faceta, dentro de su peculiar C6C 27 T2T
estilo; acepta la disminución de material TlO 28 A4C
agresor al conformarse con el cambio de T4D 29 T2A
Damas y aprovechándose de la estropeada T(4D)4C 30 Abandooa.
formación de Peones del enroque, va
a montar un terrible ataque que acabará La pérdida de material es inevitable.

67
GAMBITO DEL CR. ACEP. Si, por el contrario, el negro toma el
PR, habrfa tenido la partida la siguiente
DEFENSA IRREGULAR continuación: 11. CID, D4R; 12. A4A,
DlR (D3A; 13. C4R); 13. IDla, DID;
BLANCAS: P. Morphy - NEGRAS: R ... 14. ASCR, D x A; lS. T x P, ganando
fácilmente y contra 11. . .. , DSC; 12.
P4R 1 P4R IDIR!, D x A; 13. T x P.
P4AR 2 PxP
CJAR 3 P3AD TDlR 11 P3A
CJA 4 ASe P5RI 12
A4A 5 AxC
Ya está en movimiento la avalancha
¡Imprudencia temeraria! El negro, frente blanca. Morphy sabe calcular bien la even-
al genio americano, se entretiene en sacar tualidad de un sacrificio. Su maravilloso
su AR y cambiarlo, poniendo simultá- instinto combinativo le permite captar la
neamente en juego la Dama y el AD posición victoriosa que se puede obtener,
blancos, y originando en su posición un después de una sucesiva entrega de piezas.
grave debilitamiento de las casillas negras. La aceptación del sacrificio pierde en to-
Morphy, sin embargo, piensa de una forma das las variantes.
diferente y no vacila en intentar obtener
el máximo partido del error táctico de su 12 P4AR
adversario. Por esta razón, se prepara C4D 13 P5A
a ocupar la debilitada casilla 3D del negro. P6RI 14
PD xA 6 CRlR La fulminante entrada del contingente
D6D 7 0-0 agresor blanco en el dispositivo fortificado
AD x P 8 adversario, es de resultados decisivos.
Invasión de las casillas negras. Pese 14 PxP
a ello, no constituye este el plan creado CxP 15 AxC
por Morphy que le lleva a la victoria, sino TxA 16 DlA
una parte constitutiva de dicho plan.
8 CJC
ASC 9 DlR
0-0 10 RIT

T x CI 17
Primer golpe de mano en el asalto final
contra el adversario. No hay discusión

68
posible sobre la respuesta; hay que aceptar de una muestra de la belleza y precisión
el presente. con que remata sus juegos después de
haberlos conducido en su mejor estilo
17 PxT agresivo.
D xPC 18 D4A
postrer intento de salvación que no 19 DxD
puede tener éxito, ante la energla y aro- TxT+ ZO RlT
metividad de las fuerzas asaltantes, como A8C+ 21 RIT
cumplidamente nos demuestran con A7A+d 2l RlT
T x PI! 19 AxD+ 13 AbaDdOll8ll.

Bonita entrega de Dama. Con esta No existe defensa posible contra 24.
jugada nos hace objeto Pablo Morphy A4A.

69
v
EPOCA MODERNA.-ESCUELA POSICIONAL

STEINITZ, T ARRASCH, RUBINSTEIN, ETC.

Aunque Morphy actuó como un ver- derado como el campeón del mundo,
dadero maestro <<posicionista», esto no dignidad que ostentó durante veintiocho
fue apreciado sino a la larga, y, por tanto, afios, venciendo a los grandes maestros
la in1luencia de su juego no llegó a la de su época. hasta que en 1894 fue vencido
generación de su época. Por tal razón, por Lasker.
puede considerársele como el maestro que Poco a poco, sin embargo, a medida que
cerró la época antigua del ajedrez. avanzaba en sus estudios del tablero,
La teoría no habia alcanzado aún su Steinitz fue modificando su estilo y su
principalisima función, pese a lo muy criterio de la lucha de los trebejos, hasta el
extendida y respetada que ya lo era en punto que nadie hubiera dicho que las
aquellos tiempos. La actividad del aje- partidas que jugó en su época de mayor
drecista encajaba mejor en la de nn oficio madurez respondiesen al mismo cerebro
personal y eminentemente artístico, donde que concibió aquellas otras que, en los
la capacidad individual lo es todo, y no principios de su carrera, tanta fama le
en la de una labor razonada y cientffica concedieron.
definida por leyes generales aunque abs- Al igual que el grupo de Labourdonnais,
tractas. Mac Donnell y Andersen, fue Steinitz un
El iniciador de la nueva escuela que, innovador revolucionario, que dislocó el
asimilando los principios de Morphy, sistema de ideas establecido. Pero sus
había de instaurar en el mundo del ajedrez innovaciones eran de un signo muy dis-
una sucesión de ideas y leyes totalmente tinto al de aquellos maestros. Steinitz,
distintas a las conocidas, .de una profun- convencido de la verdad de las conclusip-
didad de concepción infinitamente más nes a que habia llegado, pregonó fos
visible que las hasta entonces conseguidas principios posicionales como objetivo
por el mágico tablero fue Steinitz. sustancial del ¡ijedrez. como el eje sobre
Al igual que Morphy, Steinitz comenzó el que habría de girar todo esfuerzo teórico
su carrera ajedrecística en las azarosas y práctico. Es cierto que manifestaciones
fuentes.combinativas de la escuela román- de este tipo se habfan registrado ya en la
tica, y en este estilo obtuvo resonancia historia del ajedrez, pero hasta Steinitz
mundial desde su aparición en escena, que no fueron establecidas con fundamento,
tuvo lugar en Londres, en el afio 1862. lógica y continuidad sistematizada. Si
Venció a Andersen en 1866 en un notable acaso alguna vez aparecieron sobre el
encuentro, y desde entonces fue consi- tablero, fue en el transcurso de reducidas
71
partidas y sólo de manera esporádica y los finales, pero la fase media de la lucha,
y fugaz. El estilo de Steinitz dejó de ser en general, era considerada imposible de
«brillante e incierto para llegar a ser reducir a ley alguna: sólo la capacidad
sólido y poco brillante». imaginativa del ejecutante actuaba en ese
A primera vista. parece poco grata esta momento, sin que en teoría fuese posible
orientación de la lucha ajedrecística, que determinar concretamente cuál debe ser
viene a ser tanto como eliminar las vis- la orientación consecuente con esta dificil
tosas evoluciones de piezas en juego de fase del juego.
artificio. Esta fue la impresión que causaron, Steinitz considera el ajedrez como cien-
efectivamente, en su época, los postulados cia y trata de reducir a postulados concre-
defendidos por Steinitz, a los que se acu- tos, al alcance de todos, la conducta in-
saba como empobrecedores de la inspira- dicada en cada momento, en cada fase
ción y de la belleza ajedrecística. de la lucha. El espíritu de la escuela de
Pero, poco a poco, llegó a comprenderse posición exige, en general, de la partida:
la verdadera natura1eza del nuevo sistema 1.°, un uso exclusivo de las aperturas
que, lejos de restar belleza, revestía al cerradas. La idea de las defensas cerradas
lijedrez de insospechados valores estéticos. se sostiene en este principio general: el
Unos valores de orden distinto a los esta- juego abierto favorece siempre a quien
blecidos, pero que al paso de los años está mejor desarrollado, y las blancas, por
fueron apreciados en su verdadera magni- su jugada de ventaja, disPQnen de este
tud. mejor desarrollo. (El objetivo'de la defensa
La escuela romántica venia a mover al cerrada será, por consiguiente, entorpecer
lijedrecista a arrojar sobre la lucha una el propósito blanco de abrir el juego.)
cantidad tal de ingeniosas energías que 2.°, una ausencia de sacrificios y de juga-
acabasen por <<sorprender» y «desarmar» das azarosas; 3.°, eludir el cambio de
al enemigo. piezas, salvo cuando la ventlija esté bien
La escuela posicional enseñó que el determinada (Steinitz fundó como prin-
enemigo ha de ser vencido sin sorpresas, cipio general el que los cambios son favo-
exponiendo claramente a su vista los rables para el bando que dispone de
propios planes, pero revistiendo a éstos menor espacio); 4.°, uso de los ataques
de tal seguridad y fortaleza, que la victoria lentos y preparados con gran calma. Esto
se impusiese como inevitable consecuencia en cuanto al aspecto estratégico del com-
del justo plan. bate. Por lo que se refiere a los golpes
Tanto la escuela de Morphy como la de tácticos, hay que anotar la orientación
Steinitz habfan renunciado al ataque hacia conseguir sean producidas pequeñas
directo sobre el Rey contrario, como obje- y leves debilidades en las huestes enemigas,
tivo inmediato de la lucha. Pero mientras de tal forma que, aprovechados ,estos
aquél persegula como primera finalidad el leves errores, en su conjunto, puede obte-
desarrollo en conjunción con la economía nerse una ventlija sensible. Estas debili-
de movimientos, éste buscaba la seguridad dades estarán concretadas mejor en las
posicional, la constitución de una estruc- casillas que en las piezas y fueron bauti-
tura coherente y solidIsima que, trabando zadas por Steinitz con el nombre de holes.
ordenadamente los distintos elementos que Otro principio táctico destacado por
integran el dispositivo total del ejército, Steinitz es la conveniencia de prestar
facultase a sus piezas para avanzar lenta mayor atención a los golpes de ataque en
y seguramente, sin prisas ni' agobios, lugares alejados del Rey enemigo, por
en el campo enemigo, no lanzándose al considerar que raramente se ofrecerán
asalto hasta poseer la seguridad absoluta oportunidades de éxito en las ofensivas
del triunfo. inmediatas y directas sobre el Rey, puesto
En orden a los enunciados concretos de que las facultades defensivas de éste me-
la teoría, la obra de Steinitz fue especial- diante el enroque son muy aptas para
mente eficaz y fecunda. Hasta entonces los deshacer el ataque y desarmar al ejército
estudios analfticos habían determinado asaltante.
unas leyes políticas para las aperturas En cuanto a la estructura del dispositivo
72
en .,neral, Steinitz siguió a Philidor en el pensamiento, no pueden ser (si preten-
cierto modo en su teorfa de los Peones, den subsistir) concretas y precisas, como si
preocupéndose grandemente de su orde- se refiriesen a inconclusas ecuaciones mate-
nación encadenada, si bien esta medida no máticas; han de reunir un carácter abstracto
tenia otro objeto que el de establecer una y ecléctico, dando cabida a todas aquellas
posición de solidez y no un «encadenado posibles consocuencias dimanantes de la
de ataque» como-aquél preconizaba. actividad mental quo las produce.
En las siguientes palabras de Steinitz Convencido el gran público de la época
queda bien de manifiesto el sentido pro- -tras no pocos esfuerzos- de los exce-
fundo que, compensado con la escuela lentes y grandes resultados prácticos que
combativa, encierran las ideas que presi- proporcionaba la nueva escuela posicional,
den la tendencia posicionista. «Pero aun no habfa cfrcuIo de lijedrez ni jugador ni
aquellas combinaciones sólidas que exi- aficionado, por mediano que fuese, que
gen grandes sacrificios, muy raras veces no se ilustrase en las nuevas ideas y no
encuentran dificultades tan grandes como tratase de seguir el lento y sólido camino
el sostener el equilibrio de la posición, de la posición como infalible fórmula de
y como la estrategia que se requiere para victoria. Una atmósfera unilateral y fic-
conducirla a final victorioso. Con mucha ticia se creó en tomo a la nueva doctrina,
frecuencia, cada jugador ha de tener en ni más ni menos que ocurriera atlos atrás
consideración las combinaciones brillantes con las ideas del roma,nticismo ajedrecis-
que pueda hacer al adversario, y, en con- tico.
secuencia, adoptar medidas para preve- Pero si aquella obsesión por las com-
nirlas, cosa que, aunque simple, al parecer, binaciones brillantes desnatura1izaron la
requiere en realidad mú penetración verdadera esencia del ajedrez, el exclusi-
y sagacidad que los mismos planes que han vismo de la avalancha posicional no ofre-
de frustrarse. Aquellos jugadores que ció al tablero mejor panorama. Y ahora
ejerciten sus facultades en adquirir solidez con la desventlija de que si bien aquella
de juicio en general, robustecerin al propio morbosa intransigencia era falsa e in-
tiempo su capacidad para las maniobras conveniente para el desarrollo de la teoría,
más complicadas del ataque contra el ésta otra, no menos falsa e impropia,
punto donde se hallo 01 Roy.» tenfa además un aspecto ingrato que ofre-
cer: la rutina y la mediocridad de juego
como espectáculo general en los torneos,
El posicionismo ha constituido para el la falta de valor y de energfa, y la ausen-
ajedrez de nuestro tiempo una fuente cia de iniciativas personales y de significa-
abundantísima do conocimientos y un paso ciones artfsticas e imaginativas.
de giganto en 01 camino de la teorfa y del Frecuentemente, la técnica mata al
análisis. Pero esto no quiere decir que la espúitu. Un pianista, un pintor, en los
escuela creada por Steinitz haya sido capaz comienzos de su carrera, cuando aún no
de resistir la marcha formidable del pro- ha perfilado debidamente sus conoci-
greso del ajedrez y, 00 nuestros dfas, las mientos, nos llosa a convencer si en verdad
doctrinas posicionales estén perfiladas de lIclerta a expresar su espúitu y su emoción.
manera notablemente distinta en relación Puede destacar el defecto t6cnico, pero de
con el pensamiento de Steinitz. En este pun- todas formas su elocuencia satisface. Ya
to, nos vienen a la pluma iguales reflexio- sabemos que, en defintiva, la t6cnica es
nes que dedicamos a las ideas de Philidor: cosa que se <;pnsigue con el estudio y ~l
no hay nada tan sujeto a error como el la conseguid. En cambio, ese espúitu
axioma inexorable. También Steinitz pre- y esa emoción no estén sujetos a las estre-
tendió reducir a normas fijas y cientlficos checes de las reglas y de los principios;
las posibilidades de incalcuJablo extensión no es cosa que se adquiera.
que se encierran en el misterioso tablero La escuela de posiciones de Steinitz
de las sesenta y cuatro casillas. Las Ioyes y Tarrasch, 00 el final del siglo pasado, era
que han de regir una actividad humana un curso de pasividad. Uegó a CODStituir
que, como el ajedrez, discurro tan sólo 00 postulado único o indiscutiblo ootre

73
maestros y aficionados el esperar caute- suraban a finalizar el combate en tablas.
losamente el fallo del enemigo antes de temerosos siempre de errar.
lanzar el propio ejército a la ofensiva. Como las anteriores. fue vencida tam-
Era esto tanto como confiar la victoria al bién la escuela posicional. pero estas
error del adversario y no al propio espíritu derrotas no significan para la historia del
creador. En los torneos pudo verse cómo ajedrez la muerte total de las ideas que
irrumpió una verdadera avalancha de animaron las distintas escuelas; quedan en
«teóricos». perfectamente identificados con pie los principios y los avances logrados
esas pasivas normas. que se entregaban por cada una. Lo que desaparece es el
a pacientes y prolongados forcejeos en los carácter absoluto y unilateral que cada
que sólo era de estimar la constancia y la una exigía en su época.
precaución. pero que nada aportaban a lo Veamos algunas partidas de Steinitz. en
ya alcanzado por las que se suponlan mu- su evolución hasta alcanzar su c1ésica es-
tuamente de igual fuerza. Todos se apre- cuela de posiciones.

TORNEO DE LONDRES
1883

PARTIDA DE LOS TRES CABALLOS PxC 6 AxP

BLANCAS: Steinitz - NEGRAS: Bird


P4R 1 P4R
CJAR 2 CJAD
CJA 3
El empleo de esta apertura es poco fre-
cuente; por otra parte. suele derivar en los
cuatro caballos.
3 A4A
CxP 4 éxc
4. . ..• A x P +. aunque hace perder el
enroque al blanco le permite. por otra
parte. la creación de un fuerte centro. sufi-
ciente compensación.
Una continuación posible era: S. R x A.
e x C; 6. P4D. C3C; 7. A4AD. P3D; A3D 7
8. TIAR. A3R; 9. A2R. CR2R; lO. RIC.
con mejor juego.
Hermosa posición llena de posibilldadea
P4D 5 A3D tácticas y estratégicas. Steinitz escoge el
camino de la solidez, propio de su estilo.
Lo mejor. S• •••• A x P regalarfa a las Eran igualmente buenas: P4A, A4AD
blancas un importante tiempo de desarro- y A2R. En todos los casos el blanco cuenta
llo. sin compensación alguna. con superioridad de posición.
74
7' CZR

Por el contrario. 7....• A x C + habría


cambiado un buen Alfil. concediendo al
blanco muchas líneas a su disposición.
0--0 8 PlAD
D5T 9

Estorbando la realización del tan an-


siado enroque.
9 PlD
Steinitz considera mejor línea para el
negro 9. . ..• D4T; 10. C2R, C3C; 11.
RIT. A2A, etc.
P4A 10 A5D+ (Posición despuls de 17. P4CD)
RIT. 11 PlCR
DlR 11 RlD 18 PxA
AxC 19 aJA!
Muy peligroso. teniendo en cuenta la D5R ZO
desventaja de posición y desarrollo de las
negras. La posición negra presenta un desolador
aspecto. debido a la vulneración de sus
A4A 13 P4AR defensas. El resto no tiene historia.
TID 14 AxC
PxA 15 PxP zo DlD
A3T 16 P4D DxT 21 DxA
DXP 17 P4CD TIR 22
Con 17. TIR del negro habría impedido Siempre ocupando vlas importantes
el bonito ataque que va a iniciar el blanco. para penetrar en el dispositivo adversario.
No obstante, con 18. DSR. D3A!; 19.
D6A. RlO; 20. TIR. D2D!; 21. TOlO 22 D3D
con posición ganadora. ' 'l'8Jt 23 D2D
TDIR 24 DlAD
A x PC!! 18 D6A+ 25 R4A
T(l)6R! 26
Magnifico sacrificio. Steinitz consigue
con la entrega de Alfil horadar la posición ¡La invasión!
contraria, facilitando la entrada en liza
de todas las fuerzas ofensivas por las 26 AxT
líneas abiertas. T x A 27 AbaDdoIIIm.

75
TORNEO DE LONDRES
1862

DEFENSA ESCANDINAVA lo determinan los cánones de su incipiente


escuela.
BLANCAS: Steinitz
NEGRAS: Mcngredien CJAR 5 CJAR
A3D 6 A2R
P4R 1 P4D 0--0 7 0--0
Inferior a las restantes defensas semi-
abiertas. tiene por objeto evitar las com-
A3R
C5R
P4A
,
8
10
P3CD
..uc
CD2D
plicaciones dé una partida abierta; esta
iniciativa del segundo jugador es poco D2R 11 C4D
recomendable porque se ve casi preci-
sado a efectuar una maniobra prematura Pobre. ya que debilita el ala de Rey
~ acarrea la alternativa de o perder el
de la Dama con detrimento del com:cto
despliegue de sus fuerzas. No obstante. tlCJDpo o encerrar el AD.
cuenta con algunos partidarios, los cuales
estiman que esta réplica negra tiene por C x C4D 12 P x CI
objeto incitar al adversario a una brusca nA 13
ofensiva para que derive en una posición
desventajosa. Se encuentra esta apertura Después de obtener una indudable
en la obra de Lucena, 1497; largo tiempo ventaja de posición en todo el tablero. el
abandonada, no volvió a emplearse basta blanco . se prepara a atacar el enroque
fines del pasado siglo. Numerosos juga- contrario.
doRS suecos la utilizaron en torneos de
Estocolmo (1905-1906). SacIe denominár- 13 P4AR
sele tambi6n contraataque del PD, contra- nT 14 P3CR
gambito del centro o partida del Norte.
PxP 2 DxP
CD3A 3 DID
Este movimiento alterna la preferencia
con 3••..• D41D.
P4D 4 P3R
Cerrando la normal salida del AD para
intentar su desarrollo por fiancheto. En
todos los casos el negro sin compensa-
ción que lo justifique. por el logro de al-
guna pequefta superioridad estratégica
o táctica. ha perdido dos tiempos que
sumados al de salida constituye una suma
aJao respetable del elemento inmaterial.
Steinitz va a desarrollar sus trebejos según
76
Ya ha CODSegido el blanco el primer obje- J)(iT + 20 RlA
tivo real del ataque: debilitamiento de los D7T+ 21 R3R
Peones protectores del enroque, haciendo D3T+ II RlA
sUS Ifneas del contorno más propicias al TlA+ 13 R1R
acceso de las piezas blancas. DCiR 14
P4CR Fijando al monarca en derrota.
¡Comienza el minado del frente con-
trario! En pocas jugadas la posición negra
se va a venir ablúo como conmovidas por
la acción destructora de un verdadero
cataclismo.
15 P X P
Precipita la catástrofe. La única Ifnea
que promete alguna resistencia es lS •
... , C x C, seguido de AlA para intentar
sostener la posición; ahora llega una
violenta sacudida que deja a las negras sin
capacidad de resistencia.
T x PI! 1(j CxC
Si 16..... R X T; 17. D x p. C xCI;
18. PA X C.
PA x C 17 RxT
DxP 18
Por inversión de movimientos se entra Steinitz remata el juego con gran energía.
en la variante reseilada anteriormente.
El negro no dispone de recursos para salvar lS DlD
la partida. AxP+ 16 TxA
DxT+ 21 RlD
18 TlCR T8A+ lB DlR
D5T+ 19 R7C DxD++ 29

TORNEO DE LONDRES
1883

RUYLOPEZ Esta defensa. de la que se cuenta con


algún ejemplo en el Torneo de Paris
BLANCAS: Winawer de 1867. es en Ammca donde ha encon-
NEGRAS: Steinitz trado mayor aceptación. Se conocen varios
estudios anaIfticos hechos de ella, aunque
P4R 1 P4R ninguno en el nuevo continente. Tuvo una
C3AR 2 C3AD q,oca en la cual se le consideraba como
ASe 3 P3CR un arma temible de Marco. el que en una
77
magistral partida jugada contra Pillsburg DlR 12 P4TR
la puso en tela de juicio. Posteriormente ha DlA 13 P3CD
perdido el favor de los maestros, y rara TRIR 14 P4AD
vez se le encuentra en los torneos magis-
trales.
Resulta realmente notable cómo Bar-
delalecu, en el opúsculo que publicó por
aquel tiempo, no haga mención de esta
linea de juego, aunque sí se ocupase de
otra bastante menos lógica como 3. . .. ,
A3D, y bastante poco usada. Salvioli, en
su obra, consideró a 3. . .. , P3CR como
muy superior a la defensa Steinitz (3. . .. ,
P3D), por ejemplo. El tiempo se ha encar-
gado de enseñarnos la verdad sobre su
auténtica fuerza.
AxC 4 PDxA
P3D 5 AlC
A3R 6 DlR
Defendiendo posibles vfas de penetra-
ción. Es de notar el armonioso desen- TDIC 15
volvimiento negro.

CJA 7 A3R El blanco se defiende con mucho inge-


0-0 8 nio. Si en este momento, su oponente
enrocase largo, con P4CD, mejoraría
Prematura. La sólida situación del ma- notablemente sus posibilidades.
terial de Steinitz, preparado, no sólo
contra cualquier contingencia, sino a asu- 15 CIC
mir las riendas del combate en un mo- C5D 16 AxC
mento determinado, encuentra en este PxA 17
momento una facilidad inesperada: la
localización del reducto real blanco en su Ya consiguió el blanco impedir el em-
nueva situación. Steinitz no se va a hacer plazamiento del Caballo negro en SD,
rogar y prepara el asalto contra el enroque aunque ha sido a costa del debilitamiento
enemigo por medio de ... de un buen Peón. Pese a ello, la posición
blanca mejoró notablemente: se consiguió
8 P3TR eliminar un buen Alfil adversario y la
CID 9 P4CR detención, aunque sólo fuese accidental,
P3TD 10 del ataque negro.

Nueva pérdida de tiempo. Se imponía 17 CID


un intento, siquiera, de reacción en el P4AD 18 P3AR
centro. P4D 19

10 CJAR Era demasiado tentadora la idea del


P3A 11 CID desdoblamiento del Peón central; sin em-
bargo, era más activa 19. P4CD.
De considerar era aqul la maniobra
C4T-SA-3C, o bien seguir la del texto: 19 PAxP
lC-3A-SD. AxP 20 DlA

78
Steinitz obstaculiza el posible intento Nuevamente, Winawer hace una débil
adversario de irrupción. jugada que, junto con la siguiente, preci-
pitan a sus fuerzas a una rápida «débacle».
A3R 21 P5T!
C4R 22 0-0 25 P4AR!
C x P? 26 PSA
PxP 27 PXP
AlA 28 C4R!

Steinitz conduce el ataque con una ener-


gfa y audacia realmente ejemplares. El
postrer esfuerzo de su adversario por
salvar sus bienes, no va a ser acompañado
por el éxito.
A4T 29 T4A!
RIA! 30 AJA
mAD! 31
Ingenioso recurso, aunque insuficiente,
ante la precisa respuesta del enemigo.

31 TIR!
C6R 32 C x PAR!
P4CR? 23
Muy mala. Este Peón traiciona a su Si el negro se alucina con la jugada
Rey, dejando expedito el camino al ene- lógica, 32. ..., A x A, su adversario
migo. 23. Rl T, P4CD, o cualquier otra obtiene superioridad con 33. T x CI
habria sido mejor. Steinitz, en un abrir
y cerrar de ojos, monta un ataque irresis- AxA 33 DSC +
tible. RlR 34 D6R+
RIA 35 C7D+
23 P x Papo
PxP 24 D3C Las blancas, desprovistas de todo re-
mC? 25 curso defensivo, abandonan.

TORNEO DE VIENA
1873

GAMBITO DE LA DAMA REHUSADO La evolución fundamental hacia el estilo


sólido, que experimentó el gran jugador
BLANCAS: Steinitz austro-húngaro en el transcurso de su
NEGRAS: Andersen historia, partió, como ya dijimos del vic-
jo estilo de agresiones, propio de la es-
P4D 1 P4D cuela romántica, según estamos compro-
P4AD 2 bando.
79
2 P3R C3An, eventualmente, estará más de
acuerdo con el sistema empleado.
En la presente partida se plantea un
gambito extraordinariamente seguro: el PxP 9 PxP
gambito de la Dama; el mismo que medio rolA 10
siglo más tarde iba a iniciar su escalada
hasta llegar a acaparar casi el total de las Localizando las debilidades ciertas.
partidas de los torneos internacionales.
Era lógica, ya que obedecía a la evolución 10 P4A
sustancial del estilo. PxP 11 PxP
D4T! 12
CD3A 3 CRJA
ASC 4 A2R Cada jugada blanca es un paso hacia el
P3R S 0-0 total control de las casillas blancas.
DAR 6 P3CD
12 C5R?
AxC 13 PxA

La jugada del texto, cafda en la actuali-


dad en desuso, tiene por objeto, como salta
a la vista, el desarrollo del AD negro por TRID!! 14
fiancheto. Este plan arrastra consigo la
debilitación de las casillas blancas del ala Magnffica jugada que representa el
de Dama e incluso la transitoria, pero fruto conseguido por el estilo preciso
evidente inactividad del Alfil al producirse y contundente del conductor de las piezas
el cambio de Peones en el centro (tal ocu- blancas. Las negras no tienen respuesta
rre en la presente partida), debilitando, satisfactoria.
igua1mente, por último, el importante
escaque de 4AR. con toda su diagonal. Por 14 AxA
todas estas razones, rara vez aparece en CxA 15 DxC
la práctica de torneos de estos últimos TxC 16 TRlC
tiempos. me 17 AlA
DxP+ 18 RlT
AlD 7 AlC P41'R1 19 D5C
0-0 8 CD2D TxP 20 Aba........

80
TORNEO DE VIENA
1882

GAMBITO DEL REY REHUSADO 5 ASCR

BLANCAS: Steinitz - NEGRAS: Noa Esta salida del Alfil constituye casi
siempre en esta partida una buena linea
P4R 1 P4R de defensa, ya que condena por <<in
P4AR 1 A4A secula seculorum» la puesta del Peón
C3AR 3 P3D en 4D, que habría dado al blanco una
clara supremacía especial. También se
Posición caracterlstica del gambito de considera factible. S• ... , C3AR, no pare-
Rey rehusado en la linea clásica, salida del ciendo ventajosa la salida del Peón A4D.
Alfil negro a 4A. Este bando intenta el como se demostró en una partida jugada
desenvolvimiento de sus piezas sin en- en el torneo de Parls de 1867, entre Wina-
torpecimiento aocional, procurando, por wer y From, que tuvo la siguiente con-
otra parte. estorbar, en lo posible, el enro- tinuación: S• .... C3AR; 6. P4D. P X PD;
que de las blancas. 7. P X p. A3C (si ASC + sigue 8. AID.
y el negro no puede jugar C X P, a causa
A4A 4 de 9. A X A, C X A; 10. A x P +.
R X A; 11. D3C +. etc.); 8. 0-0, 0-0;
En este momento el blanco tiene a su 9. C3AD. ASC; 10. A3R. TRlR; 11.
disposición otras coninuactiones de fuerza D3D. CSCD; 12. D2D. C X PR; 13.
similar. salvo 4. P3A, que en la actualidad C X C. T x C; 14. CSCR. T x Al y el
goza del mayor crédito; por otra linea, la negro logró ventaja.
salida del CD a 3A, se deriva a una aper- También se ha empleado. aunque pocas
tura vienesa con inversión de movimientos. veces. S. .... P4A con iguales posibili-
dades.
4 CD3A
P3TR 6
Se considera desventlijosa la salida del
AD negro para clavar el Caballo. debido Steinitz pide explicaciones al Alfil ne-
a la continuación S. P x p. C3AD (si S. gro. el cual decide tomarse el Caballo.
...• P X P; 6. A X P +); 6. P X p. La posición blanca consigue la formación
D X p. 7. A X P +. R2Rl; 8. A X C. de una estructura bastante sólida en su
T X A; 9. P3D, C4R; 10. A4A o también esqueleto de Peones.
ASC +. El negro tiene a su disposición
también 4. ..., C3AR. 6 AxC
DxA 7 D1R
P3AD 5 PSA 8

Si en este momento el blanco juega Del más puro estilo Steinitz. La posición
S. CD3A o S. P3D. la partida vuelve se cierra en espera de encontrar la posi-
a desembocar en una vienesa. bilidad de una 'ruptura más favorable,
81
6
P4D1 Z6 P4TD
D5T 27 P3T
DZR Z8 P5T
AlA Z' RZC
El debilitamiento de la cortina protec-
tora del enroque largo negro va a permitir
a su oponente la creación de un plan defi-
nitivo.
P4A 30
30 PT x P
PT x P 31 T6T
P x PC 3Z PA x P
nAD 33
La posici6n se ha abierto en forma peli-
grosa para el negro.
(Posición deapuJs de 7....• D2R)
33 PxP
mediante la previa realización de ma- AxP 34 AxP
niobras internas.
Imprudencia temeraria en una posici6n

P3D ,
8
10
0-0-0
C3A
A3C
ya dificil. Se abren nuevas vfas de ataque
con .•.
A5CR
cm 11 TRlAR P5R! 35 P4D
A x PI 36 C5A
El negro procura defender «todo» ante
la ruptura que se acerca.
TIAR U CICD
A3C 13 P3A
0-0-0 14 mm
C4A 15 AlA
C3R 16
Buscando la mejor casilla.
16 TDIR
P4CR 17 C4A
AlA 18 AID
C4A
AlR
l'
20
DZA
C(3A)1D
P5C ZI P4C
cm zz C3C
P4TR Z3 nTR C x CI 37
RlC 24 C(4A)1D
A3C Z5 TDIA ¡Decisiva I Si el negro toma la Torre
con el Alfil. pierde una pieza.
Una vez conseguido el desplazamiento
lateral de la artillerfa pesada, comienza la 37 PCxC
acción en el centro como parte principal mc! 38 AxT
del plan inicial. T x Al 3!)

82
Los golpes que asesta Steinitz sobre la P6R 41 PxP
posición contraria son de una terrible AxP 43 TIR
contundencia. La amenaza de entrada DxPC+ 44 T2R
de la Dama en la posición negra. en »SR 45 T2T
estrecha colaboración con la Torre y A4D 46 aJA
los dos Alfiles. termina rápidamente la TxP+! 47 R4C
lucha. T5A + 48 R5T
P3C + 49 R6T
39 D4T DlR 50 Abandonan.
Si 39....• T6D; 40. D x P +. gana Hermosa partida de Steinitz. Resulta
igualmente. altamente instructiva la forma segura
y precisa en que se aprovecha de los
AxC 40 T6D errores contrarios. sacando el máximo
AlA 41 DlD partido a su posición.

TORNEO DE LONDRES
1883

GAMBITO EVANS
BLANCAS: Tchigorin-NEGRAS: Steinitz
P4R 1 P4R
ClAR 1 ClAD
A4A 3 A4A
P4CD 4 AxP
P3A 5 A4T
P4D 6 PxP
0-0 7 P3D
PxP 8
Muy interesante y sugestivo es el ata-
que Walter. 8. D3C con esta probable
continuación: 8•..•• D3A; 9. PSR, P x P;
10. TIR!. A2D; 11. ASCR!. D4A; 12.
D x p. TIC; 13. T x P +. D x T; 14.
A x P +. R x A (si 14•..•• RIA; IS. (Posici6n ckspués de 7.•..• P3D)
D x T +. C x D; 16. C x C. P x P;
17.A3C.C2R; 18.C4A +); IS.C x D +.
R3RI; 16. D6TI. R x C; 17. C2D. R4AI; Defendiéndose contra la amenaza 9.
18. P4AR, C3A!; 19. D3D +. RlR; 20. D4T. seguido por lO. PSD y sana pieza
mlR, R1A; 21. D4A +. R3C; 22. C3A. limpiamente.
y vence. (Ber¡er.)
CM 9 C4T
8 Ale ASea 10
83
También era jugable. en este momento. D3T 17 TlAD
10. A3D. aunque menos activa. TRlR 18 PSC
CxA 19 PTxC
10 P3AR! C2D 20 AlR
A4A 11 P4AR! 21 P x Pa.p.
CxP 21 cm
Actualmente se considera superior 11. P5R 23 PAxP
A3R!
Steinitz considera superior 23. . ..•
11 CxA PD x p. para poder jugar seguidamente
D4T+ 1l D2D 24....• P4AR.
DxC 13 DlA
C5D 14 P4CR PxP 24 P4D
TlAR 25 C4A

Nuevamente el campeón mundial de


aquella época no está satisfecho con su
último movimiento. Según él. al debió
jugar C3A y lo que permitirla jugar segui-
damente la Dama a 2R.

C4D 26 D3C
CxC 27 AxC
A4T 28 P4A
nA 29 R2D
TDIAR 30 TRIA
T3C 31 D3T
A6A 32 AlR
D7T 33 A..........

(Posición después de 14. C5D) TARRASCH


El negro intenta contraatacar. vista su Tarrasch sigue a Steinitz en su escuela
inferioridad posicional. y se ve obligado posicional. obteniendo la confirmación
a intentar salvar su causa. La presión de las normas predichas por éste en las
blanca es bastante grande. Sus piezas están posiciones cerradas. Tarrasch significa en
bien situadas para la lucha. ajedrez la cientffica aprobación de la es-
cuela de posiciones. y fue el más eficaz
Ale 15 AlR alentador de la generación de posicio-
D4T+ l(i A1D nistas del pasado siglo.

84
TORNEO DE PISTYAN
1922

PARTIDA DE DAMA bilidades de ataque en el ala de Rey. Otra


DEFENSA HOLANDESA de las formaciones originarias de la par-
tida holandesa consiste en el emplaza-
BLANCAS: Dalla-NEGRAS: Tarrasch miento de los Peones negros en 3AD-
4D; 3R-4AR, configuración a la que se
puede llegar por la simple partida de los
P4D 1 P4AR, Peones de Dama. A esta disposición carac-
P4AD 2 P3R terística de los Peones se le ha dado el
nombre de formación <<Stonnewall» (del
La moderna disposición estructural de inglés, muro de piedra), debido a su espe-
esta defensa, linea de empleo poco fre- cial estructura.
cuente, no difiere casi de la antigua, salvo
en el orden de jugadas. Con objeto de CD3A 3
sustraer a los riesgos que reporta el C3AR
gambito Staunton al bando negro, se suele P3TD 4
efectuar previamente P3R y únicamente
después de efectuado este movimiento, se Pérdida de tiempo que deja al negro una
decide a mover su PAR. decidida iniciativa. Más lógica era 4. P3R;
Esta forma de abrir el juego, por parte aunque la linea más moderna, considerada
del negro, cuenta con pocos partidarios; como el tratamiento más cientffico de la
entre ellos tenemos, como gran defensor holandesa es el 4. P3CR, estorbando el
de su correc:clón ante el tablero, al que normal desarrollo del AD negro.
este libro dirige, quien la ha empleado en
frecuentes ocasiones, obteniendo numero-
sos wtos, entre ellos el más memorable 4 P3CD
P3A S
fue el conquistado frente al gran maestro
ruso-alemán Bogoljubow, durante la úl-
tima ronda del torneo de Hastings, del Intentando bloquear la acción lejana
afio 1922 (partida que figura en otro lugar del Alfil, similarmente a lo que ocurre con
de este libro) y que fue considerada por otras lineas de juego, sobre todo en la
el doctor Tartakower, gran maestro y re- partida india. En este caso el negro, con
nombrado publicista, como la mejor un puesto avanzado, el Peón de Alfil Rey,
y más bella partida de los últimos tiempos. puede eliminar todos los obstáculos que se
La idea generatriz de esta defensa puede le pongan en el camino.
resumirse en dos proposiciones prácticas:
primera, control de la casilla 4R del
blanco para impedir la estabilización de S Ale
ASC (; A2R
sus Peones centrales, en la cuarta linea P3R
horizontal, y segunda, preparar en la 7 C4T
formación tfpicamente holandesa, que
sitúa el PD en 3D, el contraataque en el Ganando un tiempo de desarrollo para
centro, mediante P4R, con grandes posi- la Dama.
85
AxA 8 DxA PxP 14 PxP
DlA 9 0-0 TDIAR 15
A3D 10 P4A
Abriendo una puerta de escape al Rey;
Comienza el ataque contra el centro desgraciadamente, va a resultar inservible
blanco, fuerte en apariencia. e inútil ante el juego decidido y enérgico
del adversario.
CRlR 11 D4C
15 C4R
RIR 16 TDIC
Hace perder el enroque al blanco, ante
la amenaza simultánea contra el PR y el El negro prepara un recibimiento nada
Pe, del mismo lado. agradable al Rey contrario en el ala de
Dama, dejándole en situación de no saber
RlA 12 qué partido tomar.
CJA
P4TR 13
... 'lT 17

¡Vaya! Parece que, momentáneamente,


el monarca ha renunciado a la huida.
Desde luego, la superioridad enorme de
posición, que cae del lado negro, encon-
trarla al Rey enemigo donde se hallase
éste.

17 A3T
CID 18 P4D
P3CD 19 TRlD

Empieza a resultar bastante molesta


la colocación de las piezas negras, y urge
desalojarlas de sus actuales posiciones.
Naturalmente, que el logro de este pro-
pósito va a representar al blanco el crearse
debilidades en su posición. Sin embargo,
es dificil escoger mejor camino, vista su
rfgida posición actual.

13 D3A
La preponderancia negra va a alcanzar.
El negro, por el contrario, abandona una por mo mentos, li\t-punto culminante. La
buena colocación, e inmediatamente se ruptura decisiva es inminente, y el fupo
emplaza en otra más excelente aún. tivo Rey adversario no va a encontr"af
86
dónde guarecerse ante la furia desatada AxP 11 CxA
de los elementos negros. P'xC 11 D8T
CJD 13 DxP
CIA 20 PxP C(3D)1C 14 Tx CI!
Comienza el negro a abrir brecha para ¡La corriente lo arrastra todo!
hacer entrar en acción a sus potentes ba-
tedas de largo alcance. El blanco naufraga
ya, y se ve arrastrado por la corriente CxT 15 DxP+
tumultuosa de los acontecimientos. Abaudoaan.

TORNEO DE MAHRICH OSTRAN


1923

REAPERTURA ZUKERTOT rrecta era 4. P3R, ya que la teoria de la


DEL PlANCHETO DE DAMA escuela revolucionaria recomienda el plá-
cido y seguro desarrollo, siempre <<Vigi-
BLANCAS: E. Bogoljubow lando» preventivamente el centro, no
NEGRAS: Dr. Tarrasch «ocupando» para provocar de esta forma
el avance de la infanteria enemiga, que
C3AR 1 CJAR domina las columnas centrales.
P3CD 1
4 P3D
Jugada debida a A. Nimzowitch, que P3D S 0--0
la ha adoptado frecuentemente con éxito CD1D (; P4R
contra fuertes maestros. Fue preciso todo
el conocimiento que requiere la escuela Por inversión de movimientos se ha
hipermoderna revolucionaria, para con- desembocado en una partida de Peones
ducir con relativa corrección una partida de Rey, con la diferencia evidente del
de este estilo. Hace falta toda la ciencia desarrollo ilógico del flanco de Dama de
de su creador para no caer en una prema- las blancas, con la pérdida absoluta de
tura inferioridad posicional. Bogoljubow, toda inciciativa de apertura.
gran posicionista de la escuela bipermo-
dema, no es precisamente un especialista
en la que utiliza como arma de combate P3C 7 A1D
para la presente partida. Su contrincante, AlC 8 DlA
el doctor Tarrasch, va a dl!mostrarle, en
forma bastante diáfana, los peligros que Comienza el amago contra las numero-
se corren al desviarse por quninos poco sas ~illas débiles del blanco.
conocidos.
P3TR TIR
1 P3CR
AlC· 3 AlC Vigilando todo intento de reacción
P4R 4 central.
Primer movimiento en desacuerdo con DlR 10 P4ID
el espiritu de la apertura elegida. Más co- P4ID 11
87
La constelación de Peones del ala de CxC 17 PxC
Dama (4T-3C-2A-3D), presenta un AtAD 18
aspecto bastante lamentable. Vamos a pre-
senciar muy pronto el procedimiento El blanco defiende desesperadamente
exacto y preciso que utiliza Tarrasch para sus numerosos «holes», descolocando más
desmantelar la sofisticada posición ene- y más sus piezas para una defensa eficaz.
miga. Cada movimiento negro es un mazazo que
se da sobre la ya bamboleante arquitec-
11 C3A tura blanca.
P4CR? 12
18 P4CD1
Una mala situación estratégica obliga, PST 19 P4AD
casi siempre, a llevar a cabo jugadas defi- 0-0 20 CSA
cientes, y más exactamente en el presente AxC 21
caso, donde el habitual optimismo del gran
Bogoljubow se encontrarla en un 16gico Obligada ante la grave amenaza A x P.
estado de depresión anfmica, siempre pro-
picio al error. 21 PxA
R2T 22
12 P4TI
Recurso supremo ante .una posición
La toma del Peón seria suicida ante la tan horadada. La compensación táctica
arrolladora entrada del Caballo negro en es muy grande, ya que el Al1iI vale has-
la casilla 4AR; por esta razón el blanco tante más que la Torre. Pero, de todos
se encuentra obligado a jugar... modos, la causa blanca no tiene defensa.
P5C 13 en AxT
C4A 14 CIAI 22
C3R 15 C3R T x~A 23 D2A
eso 16 CSC! D2D 24 TxPT
TlCR 2S
Con la economia de movimientos que
representa un solo golpe, demuestra al ne- El cambio de la muca Torre darla
gro la inconsistencia del plan evolutivo del la hegemonía absoluta al enemigo por Iu
Caballo blanco. vfas de invasión.

(Posición desplds de 18. AIAD) (Posici6n despld, de 31. R x A)


88
25 T7T 31 T x el
TIAD 26 ~!
P5R. '1.7 Sencillo y elegante. Las blancas están
D x PA 28 A3A perdidas irremisiblemente. El resto es cues-
tión de técnica.
Tarrasch aborta en fior todo intento
reaccionario; seguidamente, hará efectivo D x T 32 TxP
su predominio material y espacial. T x T 33 DxT
P4A 34 D4D+
TIR TxP R3C 35 DxPCD
P5A 36 P5A
El blanco empieza a desmoronarse. R4T 37 DxP
DxP 38 DxP
CID 30 AxA D6D 39 D7A+
RxA 31 AbImdoDaD. 40

TORNEO DE BRESLAVIA
1925

DEFENSA CLASICA DEL GAMBITO 4


DE LA DAMA REHUSADO
Tres líneas puede escoger el blanco, ade-
BLANCAS: Dr. Tarrasch más de la jugada del texto: 4. P3R, A4A
NEGRAS: Moritz y C3A. La primera se estima inferior,
porque arrastra consigo una pasividad que
P4D 1 P4D puede favorecer el cómodo desarrollo de
P4AD 2 PlR las negras. Por otra parte, interrumpe la
CD3A 3 CJAR libre circulación del Alfil negro, viéndose,
lógicamente, obligado a adoptar una colo-
Jugada constitutiva de la defensa orto- cación en fiancheto que promete bien
doxa del gambito de la Dama rehusado, poco. La segunda, recomendada por
considerada como la mejor. También Bogoljubow, poco empleada, tiene ante
puede el negro jugar 3. ..., P4AD, pro- si un panorama bastante más halagador
puesta por el doctor Tarrasch y muy em- que el que ofrece la línea anteriormente
pleada. Su refutación está todavía en tela estudiada. Su colocación es más activa,
de juicio. dominando vfas de penetración bastante
La jugada del texto tiene por objeto importantes. La tercera línea factible
defender todos los puntos atacados por el 4. C3A se considera bastante fuerte, ya
blanco en su jugada anterior; desarrolla que no priva al' blanco de las posibilidades
una pieza, en primer movimiento, a su tácticas que le brindan la jugada antes
mejor casilla y es un paso hacia la realiza- mencionada y la del texto. Pese a ello, la
ción del enroque corto, que resulta lo más jugada que estamos tratando se consideró
sólido para él. Por todo lo CJIal goza del menos elástica que aquéllas, ya que hay
favor de los maestros, siendo frecuentisi- dos colocaciones óptimas para el Caballo;
mo su empleo en los grandes torneos in- como tránsito para ocupar casillas más
ternacionales. activas, se encuentra CR2R, en su mo-
89
mento, o bien, para ocupar una buena dificultad, que, análogamente a las posi-
posición semifija, e3AR. Por esta razón, ciones similares que se pueden presentar
se tonsideran más precisas las jugadas en las restantes partidas de Dama, el negro
de Alfil, dejando al Caballo de Rey la tiene siempre, sobre su cabeza, la obliga-
posibilidad de elegir una colocación con- ción de resolver un problema latente: el
veniente, según el curso que lleve la par- desarrollo del AD.
tida. Según podemos ver en el diagrama, cxis-
ten dos vfas principales de liberación po-
4 AlR sible del AD (en realidad hay tres): la
primera consiste en el avance del PR a su
Es igualmente buena 4.... , CDID. cuarta casilla, y la segunda, en el desarro-
llo por fiancheto del referido Alfil. Si en
C3AR 5 la posición presente el negro íntentase
esta última forma de desarrollo, el blanco,
Por los motivos que se aducen a la mediante una corta aunque contundente
cuarta movida blanca consideramos más combinación, consegufa una ventlija tác-
elástica s. P3R. tica y estratégica efectiva del siguiente
modo: 8. P x P, P x P (si 8.... , e x P;
5 0-0 9. e x e!, ganando un Peón con juego
P3R 6 CD2D superior). Si hacemos un examen de la
nueva posición creada, no ·tardaremos en
En la actualidad ha tomado verdadero observar la débil fopnación de los Peones
incremento el empleo con una mejora bas- blancos en el ala de la Dama, que arrastre
tante importante, de una línea sugerida el molesto lastre de dos puntos débil!:!':
por el doctor Lasker (su perfeccionamiento uno accidental (P2AD), y el otro crónico
se debe a O. Bemstein, gran maestro ruso); (P4D); al mismo tiempo el proyectado
esta línea de juego la trataremos más ade- desarrollo por fiancheto se ha visto malo-
lante, cuando nos ocupemos de la escuela grado de plano, ya que en la presente situa-
hipermodema. ción carecería de objeto ante el tapona-
miento de que seria objeto por el propio
TIAD 7 PD, al situarse en la gran diagonal.
El negro, en consecuencia, ante la fuerte
jugada de su adversario, debida al gran
maestro ruso Rubinstein, se ve obligado
a no efectuar su jugada liberadora factible
(p4R o el desarrollo por fiancheto), sin
antes haberla preparado cuidadosamente.

7 P3A

Restringiendo el campo operativo de la


Torre blanca y consolidando el centro.

OlA 8 P3m

En este momento, constituye ya una


pérdida de tiempo la jugada del texto por~
que prepara la toma del PAD blanco,
seguida de P4eD y P4AD eventualmente,
Con lo cual, la séptima movida, negnl
En la singular configuración que pre- P3A, constituye una jugada inútil al dlll"Sl\
senta la variante normal del gambito de la posteriormente con mero impulso al
Dama rehusado, podemos ver, sin ninguna Peón hacia su cuarta casilla.

90
pxP 9 PR xP
A3D 10 TIR
0-0 11 ClA
P3TR U C5R
La variante de Carlsbad, efectuada en
la jUgada 9 por el doctor Tarrasch, la
consideramos inferior a mantener la ten-
sión, debido a que resuelve de golpe al
adversario la dificultad congénita que
arrastra desde el comienzo de la lucha.
Pero, en este caso, el negro ha pecado de
ligero, y al verse libre de los grilletes que
le oprimfan, ha juzgado en forma tan favo-
rable su posición, que no vaciló en lan-
zarse a asumir la iniciativa del combate
sin estar en condiciones para ello. El doc-
tor Tarrasch se va a encargar de demos-
trarlo en forma bastante nftida. P x CI! 23
A4AR! 13 Magnifico sacrificio de Dama, que va
a destrozar las posibilidades de resistencia
El cambio habria favorecido los pro- que pudiera tener el negro.
yectos negros.
23 TxD
13 CxC
PxC 14 A3D ¡No hay elección!
AxA 15 DxA
P4A 16 PxP+ 24 RIA
TxT 25 TIA
Para lograr el total dominio del centro TD2AR 26 TlD
o, en el peor de los casos, abrir la columna
de AD a la Torre, como ocurre en la pre- El juego negro padece de una anquilosis
sente partida. aguda, teniendo que dedicarse a con-
templar pacientemente los preparativos
16 P4CD del asalto final.
P x PD 17 PxP
D5A 18 TRlD A x PI! 27
C5R 19 C3R Nueva sorpresa. Tampoco este presente
D2A! 20 se puede recusar, ya que «el remedio
Espléndida maniobra de Tarrasch, de seria todavía peor que la enfermedad».
una elegancia poco común; en una corta 27 PxA
evolución de Dama y Caballo ha descolo- T6A 28 D6T
cado casi todas las piezas negras: el Ca- CxP+ 29 RlC
ballo tapona la única linea eficaz del PSA(D) 30 TxD
Alfil y la Torre ha abandonado la impo- CxT 31 DxP+
tante columna de Rey. RlT! 32
Su adversario, por no reconocer el error,
debilita el enroque con lo que va a ser Para huir del jaque negro, al abandonar
objeto de un enérgico asalto por parte del la Torre el control de la primera linea
gran maestro alemán. horizontal.
20 P3C 32 AlA
P4A 21 AlC T6C+ 33 RIT
P5A n TDIA TIA 34 AbandOD8D.
91
TORNEO DE SEMMERING
1926

APERTURA DE DAMA juego antes citada se ve casi siempre obli-


gado a cerrar al centro en su caracterfstica
BLANCAS: Dr. Tarrasch formación, 4AD-SD-4R; ser esta di&-
NEGRAS: Davidson forme de más amplitud de elección. Por
todo lo cual, más el hecho evidente de
P4D 1 C3AR restringir los movimientos de la Dama,
C3AR 2 P3CR a causa de la barrera levantada por el
Caballo ante su PAD, estimamos superior
Esta línea de juego reúne unas carac- a la jugada del texto, P4D. Seria intere-
terfsticas muy similares con la India de sante igualmente P4AD.
Dama, ya que en su formación natural
presenta su punto de contacto con ella. P4R 4 Ale
Los Peones de Rey y AR presentan una A5CR 5
colocación casi análoga. Su configuración
estratégica es opuesta a la del bando con- Incitando al negro a expulsarlo, pero
trario y reúne una serie de cualidades muy a costa de la creación de debilidades es-
apreciables, pues mientras los Peones tratégicas muy peligrosas en el lado del
amenazan operar contra el flanco de Rey posible enroque.
adversario, el AR vigila los movimientos
del lado de Dama. 5 P3TR
A4AR! 6
C3A 3
Muy bien jugado. Se estorba la salida
Recomendada por Marshall y algún del Peón de Rey negro a la cuarta casilla,
otro maestro, sin embargo, quien este y. al mismo tiempo a causa de la débil
libro dirige, discrepa de esta opinión, prin-
cipalmente debida a la formación de la movida P3TR, el blanco va a ganar un
tiempo muy importante para llevar a efectCl
constelación de Peones en 3AD-AD su plan de ataque.
y 3R, como medida eficaz para oponerse
a las ambiciones que puede abrigar el AR
adversario. 6 0-0
D2D 7 R2T
3 P3D 0--0--0 8 P4TD
A3D 9 C3T
Esta formación de Peones, típica en la P5R 10
defensa india de Rey, de la partida de
Dama pierde en este momento su razón Lo mismo que en la guerra. la eficaz
de ser por diversas causas: en la partida realización de un ataque depende siempre
de Dama, el P AD blanco suele colocarse de una buena organización de la reta-
en su cuarta casilla, restringiendo la liber- guardia. Las piezas blancas, especialmente
tad de acción del AR, y por este mismo la Darla y el par de Alfiles apunta a obje-
argumento el blanco, que en la linea de tivos impo rtantes deataque, a causa de su
92
El Jle8l"O ha conseguido eliminar el pe-
ligro enemigo que representaba el AR
blanco. perQ ello ha sido a costa de con-
ceder a su contrario un cierto número
de tiempo suficiente para abrir la columna
de TR. ejercienco una presión irresistible
sobre las primeras fortificaciones del Rey;
por todo ello. el negro se ve impelido
a jupr...

15 P4TR
C5C+ 16 RIT
P3A 17 C3T
P4C 18 AxPC
Entrega de material que va a resultar
insuficiente para contener el terrible em-
(P08{clón dapw, de 9..•.• C3T) puje de las piezas blancas.

proximidad al órgano vital de la lucha: PxA 19 CxP


el Rey.
10 CICR
P4TR 11
Para la bucma conducción de la ofensiva
se requiere, ante todo. rapidez en la
acción, al objeto de no dejar al adversario
un momento de respiro. que le permita
situar sus piezas en posiciones ventajosas
para realizar una defensa eficaz.
El conocido proverbio: «divide y ven-
cerás». tiene una aplicación muy atenuada
en la lucha ajedrecista, ya que para aco-
meter el asalto definitivo precisa, previa-
mente. una destrucción total o parcial
(cuando afecta a los caminos reales exclu-
sivamente) de las defensas eficaces de su
adversario. Este plan es el que intenta
llevar a cabo en la presente posición. con-
tando. debidQ a su dominio total del TxP+1I 20
tablero. con las mayores posibilidades
de mto. Bello aa.crificio que deshace. de golpe.
las defensas del Rey negro.
11 C5C
P5T1 1Z
20 RICI
La energfa y precisión de Tarrasch
son realmente ejemplares. , Si el negro se atreve a tomar el sugestivo
1Z CxA+ presente. habrla recibido una desa¡radable
DxC 13 A4A respuesta con 21 D4RI
PxP+ 14 PxP
D3R IS D3TI 21
93
Amenazando 21 T8T +, seguido de 23 TxA
mate. DTr+ 24 RIA
C6R+ 25 R2A
21 PxT CxD+ 26 TxC
DxP 22 C3T P6R+ 27 RIA
D6C1 23 CSD 28
Los nuevos refuerzos deciden total-
La Dama blanca invade las casillas mente la batalla.
blancas de la posición enemiga cOn un
efecto devastador, al no encontrar resis- 28 T7A
tencia alguna a su paso. TIC 29 Abandonan.

TORNEO DE GOTEBORG
1920

DEFENSA ESCANDINAVA blanco habría sido notablemente superior


a la de su oponente.
BLANCAS: Dr. Tarrasch
NEGRAS: Mieses CJAI 5

P4R 1 P4D Magnífica jugada de desarrollo. La


PxP 2 DxP toma del Peón central daría al negro posi-
bilidades de ataque mediante S. ., '.
En la partida Steinitz Mongredien he- ASCO, etc.
mos descrito la finalidad de este planteo
por parte del negro. 5 ASCD
AlD 6 ASC
C3A 3 D4T A2R 7

El retomo de la Dama a su casilla ini- El contraataque negro, iniciado en su


cial habría representado la pérdida de dos jugada quinta, ha permitido el desarrollo
tiempos, quedando el negro con un juego de todas las fuerzas adversarias; aunque
muy cerrado. La movida del texto, por en cualquier caso no se ve mejor linea
otra parte, contradice las reglas generales a seguir por su parte.
del planteo, respecto al desarrollo prema-
turo de la Dama; no obstante, es más
lógica y le da más posibilidades de ini- 7 PxP
ciativa.
Lo mejor, aunque insuficiente. Si 7.... ,
C3AD, sigue con 8. P3TD!, ~ negro se
P4D 4 P4R ve impelido a elegir entre dos jugadas,
ambas desfavorables: 8..... A x CR;
Violento intento de asumir las riendas 9. A x A, C x P; 10. P x A, D x T;
del combate. En otro caso la posición del 11. D x D. C x P +; 12. R2R con ven-
94
taja decisiva, o 8....• A3D; 9 P4CD!. La vcnúija de desarrollo no siempre es
D3C; 10. CSD con ataque muy fuerte. factor decisivo en el desenlace de una
partida; pero sí medio bastante eficaz para
CxP 8 D4R obtener superioridad material a causa
de la mayor fuerza accional momentánea
de las piezas. El sacar partido de este
factor sutil es privilegio reservado. casi
exclusivamente. a los maestros. En la pre-
sente situación. si contamos los tiempos
de las piezas desarrolladas. veremos que
mientras el blanco tiene en juego tres
piezas (la situación central del Rey blanco.
lejos de constituir una desvenúija. es en
realidad. una venúija, dado el hecho de
haberse efectuado el cambio de Damas
y el de ambas parejas de Alfiles), el negro
sólo tiene una; del lado blanco se consi-
deran realizados cinco mdvimientos (cua-
tro de los caballos y uno del Rey). sin
embargo. del lado negro. solamente uno.
En un terreno de índole estratéBica.
vemos que los caballos blancos dominan
catorce casillas, y los negros por el con-
C(3A)5CI 9 trario. sólo controlan siete; las posiciones
de las piezas blancas es de franca inicia-
Esta magnifica jugada desempeña una tiva; mientras las negras están constre-
cuádruple función: Primera. defiende el ñidas a una defensa mucho más precisa
C4D; segunda, ataca el ASCD; tercera. de lo que en apariencia se puede suponer.
amenaza C x P +. seguida de A x AD. El doctor Tarrasch se va a encargar de
y cuarta, y principal, invita al cambio de demostrarlo en un nuevo curso de alta
las únicas piezas desarrolladas del negro. clase. debido a su privilegiado cerebro.
9 A xAR TRlRI 13
DxA 10 AxA+
RxA 11 DxD+
R x DI 12 C3ID Fríamente jugado. El intento de poner
en acción el CR negro, seria contrarres-
tado suficientemente con la respuesta 14.
R3A +. obligando al Rey a interrumpir
por bastante tiempo la comunicación en-
tre sus Torres.

13
C x P + 11 14

He aquí la derivación normal de la ven-


taja de tiempo: obtención de ventaja ma-
terial. Existe otra, menos frecuente, en la
lucha entre grandes maestros. la resolu-
ción de la partida mediante combinación
circunstancial, debido, precisamente. a esa
circunstancial ventaja de desarrollo que se
produce en las luchas abiertas.
95
14 RIC R4D 37 C(3D)IA
C('Tl')6A + I IS PxC RSA 38 lUA
CxP+ 16 RIA TIR 39
CxT 17 RxC
Amenazando T6 u SR.
El blanco ha obtenido ventaja material
decisiva: Torres y dos Peones contra dos 39 C3C
Caballos. acreditada por su aplastante T7R+ 40 cm+
superioridad en desarrollo.

TDlD+ 18 RIR
R3D + d. 19 C2R
R4A 20

20 T2R habrla sido contestada con 20•


...• C4A +. seguida de C3R.

20 P4TR
T3D 21 C1C
T(3D)3R II C3A
P4CD 13 P3A
P4A 14 lUA
P4TD lS

El blanco evita caer en el lazo que le


tendia su astuto rival si juega 2S P5C.
C4T +; 26 R4C. C4D +; 27 R xC? TxC+1I 41
a causa de la desagradable sorpresa 27.
...• TlT mate. Magnífica entrega de calidad que remata
brillantemente la partida.
lS TlCD
P3A 16 TlD 41 RxT
T3D 27 TxT PSC 42
RxT lB R1R
PST 29 RlD Si 42 R6C. CIA +; 43 R7C. C3D +;
P6T 30 C4D 44 RSC. C x P; 45 P7T. C3C; 46 R7C,
TITDI 31 CITI; 47 R x C, R2A y el Rey blanco
queda en situación de ahogo forzado. Esta
Dando una fuerza extraordinaria al posibilidad demuestra que una partida
Peón libre. Si 31 •...• C x P +; 32 R4R, merece en su final tanta atención como
seguido de P7T. en su principio. con el fin de evitar estas
desagradables contingencias.
31 ClT
P3C 32 P3A
T4T 33 42 PxP
PxP 43 ClA
Para expulsar el C4D del negro. de su P6C 44 AbaDclonaa.
buena posición central.
Es difícil encontrar un procedimiento
33 C3C més exacto y fino para explotar una ven-
TST 34 P3C taja de apertura que el empleado por el
P4A 3S C(3C)lA doctor Tarrasch a lo largo de esta bella
T1T 36 C3D partida.

96
TORNEO DE MAHRISCH-OSTRAU
1923

GAMBITO DEL REY REHUSADO pliegue negro al sacar el Caballo a su


mejor casilla.
Contragambito Falkbeer
P x P? 5
BLANCAS: Spielmann Esto no es más que el deseo de eliminar
NEGRAS: Dr. Tarrasch a toda costa el pivote central negro, táctica
errónea que le va a dejar en el lugar
P4R 1 P4R abandonado por el Peón una casilla muy
P4AR :1 P4D débil en un punto importantisimo del
«Ojo por ojo, diente por diente.» A la tablero: en el centro de la columna real.
valiente y decidida apertura empleada por s. D2R, como aconseja Tartakower, es
las blancas, respondieron las negras en más prudente.
forma similar. La presente partida dejó
tras si una densa polvareda de comentarios
al haber refutado sobre el tablero, de ma-
C3AR • 5
6
CxP
A4AD
D2R 7
nera indudable, una apertura milenaria.
Posteriores análisis dieron nuevos bríos
al gambito de Rey, aunque su prestigio
esté muy por bajo del que gozaba antes
de 1923.
El sistema empleado por el negro es
perfectamente lógico y debe darle por lo
menos partida igual al efectuar un movi-
miento tan natural: contraataque central
como medio más eficaz contra la agresión
lateral.
P x PD 3 PSR
P3D 4
Atacando, sin pérdida de tiempo, el
molesto PR negro. Tchigorin, el genial
maestro ruso, recomendaba y ponia en
práctica en este momento 4 C3AD, con
la idea de proteger, contra viento y marea,
el Peón de más. - 7 A4A!

4 C3ARI Esta salida del Alfil estaba considerada


inferior hasta que se jugó la presente par-
Hermoso estilo. 4.... , D x P o P x P, tida. El espíritu innovador del doctor
facilitarla el desarrollo blanco, mientras Tarrasch se manifestó bien claramente en
que del texto solamente favorece el des- la jugada del texto. Son muchas las apor-
97
7
taciones con que ha enriquecido a la AxC 12
teoría, en diferentes lineas de juego.
P4CR? 8
La refutación coúsiderada por el <<Hand-
buch» contra el anterior movimiento ne-
gro. Si hacemos un ligero examen de la
posición, veremos fácilmente que, mien-
tras las negras se encuentran en situación
de enrocar, ocupando con la Torre ins-
tantáneamente la columna de Rey, tienen
en juego tres piezas y en situación muy
agresiva, las blancas sólo desarrollaron
una: el Caballo.
8 0--011
Este soberbio sacrificio de pieza ya
rehabilita de golpe todo el prestigio del
«Falkbeer». La entrega de Alfil se en- 12 CIDlI
cuentra suficientemente justificada en el
hecho claro de existir una gran diferencia Jugada que acredita a un gran maestro.
en desarrollo; las blancas tienen en su Las negras continúan sistemáticamente el
casilla de partida cinco piezas, y las ne- ataque contra el centro adversario.
gras sólo tienen dos, lo que nos dice que
tres figuras negras dominan las líneas del C3A 13 P3AR
tablero contra ninguna.de su oponente. C4R 14 PxC
De otro lado, salta a la vista la expuesta
situación del Rey blanco, que invita a un El ataque enérgico y sostenido ha dado
genial competidor de la envergadura de sus frutos: obtención de ventaja material,
Tarrasch a realizar un fogoso ataque con- no sólo impidiendo todo intento de con-
tra el desamparado Monarca, contando traataque del blanco, sino manteniendo
lógicamente con la diferencia efectiva que la resuelta ofensiva, que va a liquidar la
representa, aunque las negras perdiesen resistencia contraria en pocas jugadas.
una pieza, la situación encerrada de las CxA 15 CxC
Torres blancas, especialmente la de Dama.
Por esta razón, el negro no vaciló, y el
PxP 16 D5T+
resultado no puede ser más resonante.
RIA 17 TIAR!

PxA 9 Preguntando por el Monarca blanco, en


su nuevo domicilio.
La toma de la pieza es casi obligatoria,
ya que el blanco, posicionalmente, se RIC 18 DSD+
encuentra en situación muy inferior e im- AJR 19 DxPR
posibilitado de efectuar, al menos momen- TIR 20 ClD!
táneamente, el enroque corto. D4A 21 RIT
A4R II TDIR
9 TIR A4D 13 DSA
AlC 10 TIR l4 C3A
AxC 15 P xlA
No existe respuesta satisfactoria, y el P3TR 26 TlC'+
blanco, apoyado en la ventaja material, Abandonan.
espera salvar el peligro.
Esta magnifica partida, de gran impor-
10 C1A tancia ~rica, representó para el doctor
C5R 11 CxT Tarraschel premio de brillantez del torneo.
98
MATCH DE BERLIN
1916

APERTURA ESCOCESA sobre la columna semiabierta de Dama,


las blancas se ven obligadas a hacer este
Décima partida arriesgado avance de Peón con su consi-
BLANCAS: S. Mieses guiente debilitamiento. Lo más fuerte,
NEGRAS: Tarrasch 6. A3D, obstruyendo la línea de Dama,
va también, por tanto, en contra de su
P4R 1 P4R <deitmotiv».
CJAR 1 CJAD
P4D 3 PxP 6 DlR!
exp 4 DlR 7 C4D
ClD! 8
Esta serie de jugadas constituye la aper-
Mucho más fuerte que 8~ P4AD, A3T;
tura escocesa. Los italianos Ercole del 9. P4AR, D5C +; 10. RlD, A4A, con
Río (1750) y Solli (1763), ya citaron en su
obra este modo de abrir el juego, debiendo mejor partida negra.
su nombre a una partida de match jugada 8 Ale!
por correspondencia de 1826 a 1828, entre
los clubs de Londres y Edimburgo, en el La atrayente jugada 8.... , C5A se
cual la victoria se inclunó del lado de los empleó en la cuarta partida del match,
escoceses. La finalidad principal es poner y el blanco, mediante 9. D3R, C3C; 10.
lo más rápidamente posible en situación P4AR, P3A, y 11. C3A! en vez de 11. A3D,
de entrar en juego a la Dama y Alfil del habría obtenido, por lo menos, igualdad.
mismo lado, y, por otra parte, obstacu-
lizar el desarrollo normal del adversario CJC 9 0-0-01
por la presión que se ejerce sobre la co-
lumna de Dama semiabierta. Esta última
idea está demostrada su inconsistencia,
por lo cual, en la actualidad se encuentra
casi abandonada.
4 CJAR
Comparte el favor de los maestros
con 4.... , A4A. La del texto se debe al
doctor Schmiett (Moscú, 1865).
e x e! s pe xC
PSR 6
Este movimiento natural, acorde con la
idea motriz de la apertura, demuestra la
inconsistencia del sistema de juego em-
pleado. Para conseguir ejercer presión
99
Esta arriesgada continuación es, quizá.
lo mas fuerte para conseguir refutar la
sexta jugada blanca PSR. La Torre negra
debe. sin pérdida de tiempo, atacar el
Peón avanzado. Efectivamente. que la po-
sición del Rey negro queda bastante ex-
puesta; sin embargo. el doctor Tarrasch
espera conseguir. no sólo detener la reac-
ción blanca. sino llevar a efecto el plan
inicial.

P4AD! 10

La mejor <<chance». El plan a escoger


por parte del blanco no puede ser otro:
ataque a fondo.

10 C3C (Posición después de 16. P x e)


AlD 11 TIR
P4A 1Z P3A ventaja material y de posición, a causa del
P4TDl 13 desarticulado ala de Dama blanco.
Se ataca, sin embargo. El negro va P x PT 17 R2C
a ejecutar una bella demostración del arte TxA 18 P4DI
de contraatacar. nAI 19 D3C
DlA 20 D8C+
13 A3Tl TIAR 21 DxP
D3C+ 22 RIT
Lo mejor. Si se toma el Peón de Rey, 0--0-01 23
el negro pierde una pieza a causa del even-
tual avance del Peón de Torre Dama. Sorprendente jugada, que aparenta va-
riar totalmente la faz de la partida, debido
D4R 14 principalmente al mejor desarrollo blanco;
pese a ello, a la encerrada posición blo-
Con la terrible amenaza IS. PSA. queada (por lo menos, en apariencia) del
A x A; 16. P x e, A3T; 17. P x PT ala de Rey negro. y la expuesta situación
desmantelando la posición negra. del Monarca, la ventaja material va a de-
cidir la partida, unida de la mano con la
14 DlAl posesión de columnas abiertas, como nos
va a explicar en forma muy clara y con-
Espléndida jugada de defensa y ataque, tundente el doctor Tarrasch.
con la cual el doctor Tarrach consigue
vencer todas las dificultades. 23 PxPI
TICK 24 D7R
TD1R 25 D3T
PSAl 15 AxA PxP 26 D xP7T
PxC 16 D2AD 27 P4A!
16 D x C?
Se pone en movimiento la infantería,
Lo más fuerte en este momento es 16. que va a tomar una parte importante en la
...• PT x PI; 17. PST, P4C!; 18. PT, batalla final.
I> x C; 19. P1T. R2C, y el ataque blanco
queda definitivamente rechazado. que- T3C 28 P3C
4ando sobre el tablero, del lado negro, T3C1 29
100
Amenazando T5C-5T, ganando la TxP 31 T4C
Dama enemiga. D3D 33

19 P3A La idea de llevar la Dama a 6R, cuesta


PST 30 AlR demasiado tiempo. Mejor era, según dijo,
T6C 31 al terminar la partida, el propio doctor
Tarrasch, 33. TIA, D2D; 34. TC, T x T;
35. P x T, R2C, seguido de TITD, aun-
que el negro en este caso tiene también
buena partida a causa de que el PCD
blanco no tiene defensa satisfactoria.
33 PSA
D3TR 34 TRICD!
Terminaci6n grandemente emotiva. El
negro no se amilana ante la formidable
amenaza que se cierne sobre su Monarca,
con la jugada blanca, 35. D6R, Y en vez
de adoptar una actitud defensiva se lanza,
sin vacilaciones, a dar el golpe mortal,
mediante una bonita combinaci6n fina-
mente calculada.
DQl T x PC!
RlD
31 TICDII 36. T6T le reportarla al blanco un ful-
minante mate en tres jugadas.
Finísimo sacrificio de Peón para obtener
un contraataque victorioso. Esta jugada 36 TxA+!
constituye una muestra de la alta clase del R x T 37 D5D+
doctor Tarrasch. AbandonaD.

TORNEO DE SEMMERING
1926

DEFENSA INDIA DE DAMA de Calcuta con particular predilección,


aunque con un concepto diverso del que
BLANCAS: Dr. Tarrasch hoy rige. Actua1mente, comparte la priori-
dad de los maestros modernos con la
NEGRAS: R. Reti defensa sim~trica, 1. ... , P4D, e incluso,
podemos aventurar, sin temor a equivo-
P4D I CJAR carnos, que se emplea más frecuento-
mente que ~ dado su carácter e1ástico.
Esta salida asim~trica debe su nombre
al hecho de haberla empleado el Brahmán CJAR
101
De uso menos frecuente que 2. P4AD, 7 PxP
se le considera, no obstante, más sólida, PxP 8 C3A
ya que impide la realización por parte del P3A 9 P3D
negro de el gambito Budapest 2.... , P4R
(contra 2. P4AD), que, aunque su correc- Impidiendo 10. C4A, que habría sido
ción puede decirse que está en tela de de efecto desagradable para las negras.
juicio, no deja de dar más de un disgusto
a los que lo provocan. DlR 10 DlAD
~ 11
1 P3CD
Tarrasch, en esta jugada, nos revela,
Cuenta con muchos partidarios esta una vez más, su temperamento combativo
linea de juego, a causa de las sugestivas y efectúa este peligroso enroque, desde-
posibilidades estratégicas que la adornan: ñando, con sangre fría, el riesgo que puede
desarrollo del AD negro a su mejor dia- correr, al estimar de mucho más dina-
gonal, aprovechando la imposibilidad en mismo su posición, disponiendo, en con-
que se encuentra el blanco, a causa de su secuencia, por la buena disposición de sus
anterior jugada, C3AR. de oponer una piezas de más posibilidades de ataque
barrera eficaz contra las ambiciones del y defensa.
susodicho Alfil; como ocurre en otras
lineas similares de juego, con la formación 11 P3TD
de los Peones en 3AR y 4R; lo que, para
lograrlo, requerirla el empleo de bastante ¡Las negras tocan el clarín de ataque!
tiempo.
RIC 12 P4CD
A4AR 3 C4R 13 CxC
AxC 14 C4T
Interesante idea. Es más frecuente, en
esta posición, 3. P4AD, entrando, por
inversión de jugadas, en la línea anterior-
mente tratada.

3 P3R
CDlD 4 AlC
P3R 5 P4AD
A3D 6 AlR
P3TR 7

Esta jugada, hecha con la intención de


darle un refugio seguro al AD en 2TR,
es mucho más eficaz en este momento que
en el cuarto golpe, cuando Rubinstein la
hizo en su partida contra Alekhine en el
torneo de Dresden, 1926, a la cual las
negras respondieron siempre dentro del
extenso ámbito dI? acción que revelaba su PSDl 15
polifacético estiló, llevando el A negro
a 3D, incitando a su contrario para que El cierre del centro para actuar con más
doblara sus Peones en la columna de D, libertad en los flancos, especialmente en el
que resultaría ventajosa para él, a causa de Rey, donde se encuentran enclavadas la
de efectuarla al centro, abriendo la co- mayoría de las fuerzas blancas, representa
lumna de AD para el emplazamiento de su una estrategia sabia e instructiva, proce-
Torre. dimiento operativo utilizado por el doctor

102
Tarrasch. para vencer la tenaz resistencia El procedimiento más lógico para de-
de su extraordinario adversario. Reti. fender con la Dama toda la horizontal.
15 P4R
AlA 16 P4TR 23 C5A
D3D 24 PSCI
Se aleja del ala de Rey. pero domina un PxP 25 P4TD!
mayor número de casillas en este ftanco. P5T 26 PxPC
Incorrecto hIlbria sido el sacrificio ten-
tador 16. A x P? P x A; 17. P6D.
A x P; 18. T x A. D x T; seguido de
enroque sin haber dado al blaa:o com-
pensaciones estratégicas por la pieza per-
dida.
16 0-0
Este enroque Obligado. para poner en
acción la TR, representa una demostración
palmaria de la superioridad blanca: el Rey
se ha situado. impelido por las circunstan-
cias. en el sector donde converge la acción
eficaz de todas las fuerzas blancas. Salta
a la vista la posibilidad diversa de los
Alfiles de uno y otro bando. frente a la
posición dominante de los blancos. la
situación restringida de los negros.
D3C 27
mA! 17
El negro ha intentado un contraataque,
Buscando. mediante amenag s tácticas, por todos los medios a BU alcance, para im-
objetivos estratégicos de ataque. pedir la inminente ofensiva de su contrin-
17 P3C cante. La sangre fria del doctor Tarrasch
P4CR la D2D no le ha permitido llevar a feliz término
AfIr TRIA su propósito. y el blanco. con la jugada
l' del texto. para todas las amenazas con-
TRIC 20 AlA
AxA 21
Este cambio. en cierto modo ilógico. se
encuentra plenamente justificado. al en-
contrarse debilitada toda la encrucijada
de casillas negras que rodea al Rey. lo cual
facilita la entrada de la Dama adversaria
a los puntos accesibles. lo que obligará
a una constante vigilancia por parte de la
Dama propia y su posición obligadamente
desventajosa. o del Rey. con lo que ve
aumentado su riesgo.
21 RxA
D2D 22
Apuntando a los lugares antes mencio-
nados.
P3A (Posición de:rpués de 28••••• pe x P)
103
trarias, Y a su vez prepara una ruptura Esta partida. como podemos apreciar.
con ataque irresistible en el ala de Rey. se resuelve por la linea rápida de la com-
binación. generalmente de sacrificio. con
27 P4A1 la correspondiente caída. bien de material
La impaciencia que se apodera del juga- o del Rey contrario. al encontrarse sin
dor ante la situación precaria. le impele escape posible; consecuencia, en ambos
a realizar estos intentos desesperados. que. casos. de la suma de ventajas estratégicas
en la mayorfa de los casos. conduce al o tácticas. que desbordan materialmente
desastre; tal es el caso presente. Las las defensas del enemigo. Por esta razón.
blancas van a invadir las futuras lineas Reti. ante la avasalladora entrada del
abiertas para acabar con la resistencia C. T y A blanco en perfecta conjunción.
enemiga. que le acarrea la pérdida inevitable de una
pieza. sin compensación posible. decide
PC x P 28 PC xP inclinar su Rey. Evidentemente. no existe
esC! 29 defensa satisfactoria.

TORNEO DE SAN PETERSBURGO


1914

APERTURA RUY LOPEZ-V. BIRD no sacaría ningún beneficio efectivo de la


jugada negra.
BLANCAS: Tarrasch
NEGRAS: Blackbume 4 PxC
P3D! S
P4R 1 P4R
C3AR 2 C3AD Superior a S. 0-0. jugada por Capa-
ASC 3 C5D blanca precisamente contra Blackbume.
con la siguiente continuación: s. .. .•
Defensa preferida de Bird. que no ha P3CR; 6. PlD. A2C; 7. C2D. C2R; 8.
encontrado. por fortuna. muchos imita- P4AR. P3AD; 9. A4A. P4D; 10. A3C.
dores. Para emplearla hay que tener en 0-0; 11. C3A P4AD!; 12. PSR. y eJI
cuenta previamente la fuerza de nuestro este momento el negro pudo tener partidll
contrincante. Esta linea tiene dos defectos satisfactoria con 12. ...• A3R o DID,
fundamentales. .Uno en relación con el en vez de 12....• P4CD? como ju"
tiempo: se juéga dos v~ una misma Blackbume. que le llevó a posición de&-
pieza. y el otro. referente 'a la configura- ventajosa.
ción posicional: doblamiento del PR en
la columna de D con su titular; además S P3CR
del abandono que representa de la im-
portante casilla 4AR al producirse el Un poco menos favorable es S• •.•• A4A.
cambio de C. 6. DST. A3C!; 6....• D2R; 7. ASC
C3AR; 8. D4T!. P3AD; 9. A4T. coa
C x C! 4 mejor partida para el blanco); 7. DSR +
RIA; 8. A4A. P3D; 9. DST. A3R; 10
Lo mejor. La toma del PR darla lugar AJC!. C3AR; 11. D4T. con mejor conft.
a una conocida celada. y la retirada del A guración de Peones.

104
PlAD! 6 Sin pérdida de tiempo.
La forma más precisa de conducir el 16 P4R
ataque contra el molesto Peón Dama ASe 17 AJA
negro. A6T 18 AlC
AxA+ 19 RxA
6 AlC mm 20 P4A
0--0 7 ClR ClR 21 C3A
PxP 8 AxP P4A! 22
CJA 9 PlAD
A4AD 10 P3D La ruptura. En el momento más pro-
AJR! 11 picio, Tarrasch abre brecha en la posición
enemiga; la mejor disposición de sus
La jugada natural 11. A6T, aunque fuerzas le va a permitir una irrupción
obstaculizarla el enroque, no seria lo decisiva.
mismo con el largo, ya que el negro tenía
una linea bastante segura: AJR, DID 22 DlR
y O~, con posición equilibrada. PSA 23 C5D
CJA! 24
11 AlC
DJA 12 0--0 Todos los puntos débiles del negro se
AJC! 13 RIT abren a la invasión de las piezas blancas.
DlC 14 AJR El resultado final será la destrucción de las
fuerzas de resistencia.

24 D4C
PxP 25 PxP
D7D+ 26 RlT

A x Al 15
Jugada muy fuerte y típica del estilo
elástico del doctor Tarrasch, gran pro-
pulsor del método posicional, y que ha
cooperado en su progrc80. Ahora se crea D x PD 27
un Punto débil invadible en la posición
enemiga. La ciencia renovadora de Ta- En el duelo posicional, cuando se efec-
rrasch se va a dejar sentir rápidamente. túa un perfecto aprovechamiento de las
ventajas tácticas y estratégicas, el resultado
15 PxA natural que se consigue casi siempre es la
D3T 16 ganancia material; más o menos impor-

105
tante, según sea, como es lógico, la dife- La primera medida que toman las
rencia del juego desarrollado entre los dos blancas es colocar a su caballo en una
contendientes. espléndida casilla central, donde al mismo
tiempo que desarrolla 8U máximo poder
27 TDlD ofensivo y entorpecedor para el libre
DxT+! 28 TxD camino del Rey adversario, sirva para
T x T 29 R2C! acudir en auxilio de cualquier flanco, caso
nA! 30 de que se viese repentinamente amena-
zado. El blanco, por otro lado, tiene que
Si 30. TDIAR, C4A! hacer valer su Peón de más. En el flanco
donde goza de supremacía, tiene una
30 D4T favorable disposición de Peones para ha-
TDlAR 31 P4CR cerla valer. Sin embargo, el doctor Ta-
PlTR! 32 CJR rrasch opta por dejar la carrera del futuro
Peón libre para cuando cuente con una
Intentando obstruir la gran fuerza de las disposición más favorable de sus piezas,
Torres en la columna de AR. No obstante ya que las negras puedan hacer una tenaz
estar ejecutando el negro una gran de- -resistencia.
fensa de su causa, la precisa conducción
de las piezas blancas por parte de su 35 P4CD!
adversario va a pesar decisivamente sobre
el desenlace final de la partida.
El negro intenta cambiar los Peones
T7A+ 33 DxT teniendo a la vista una posible eventua-
lidad salvadora: el sacrificio final de
Casi forzoso. Si 33 .... , RIC; 34. CSD Caballo.
gana; por otra parte, a 33 .... , RIT, se
contestarla con 34 T(1)6A, CSA. 35. R2A 36 C5D
T x P con ataque de mate. C3R 37 RJR
RIR 38 P4TD
TxD+ 34 RxT R2D 39 P5T
C5D 35 C2A 40 CJA
El doctor Tarrasch se va a enfrentar
CIR 41 C5D
RJR 42 RJA
con un dificil final de partida. Examínese CJA 43 CJR
el siguiente diagrama. P3CR 44 CIA
CIC 45 cm
C2R 46 PSCD
CIC 47 C3C
CJAI 48

Esta evolución, aparentemente insulsa,


del Caballo decide el final. La creación
de la casilla débil SAD en la formación
de la misma ala ha dejado a su adversario
un magnifico puesto de' apoyo para el
Caballo, ya que el cambio de estos tre-
bejos acelerarla la derrota negra.

48 PSA

La última tentativa.
106
P4D 49 P6A Como hemos podido apreciar por esta
PxP+ 50 R3C partida del insigne maestro de Breslau,
PxP 51 P6C la técnica avanza un paso muy importante
PxP 52 PxP hacia su actual perfeccionamiento. Su
C2D 53 P7C armonioso estilo se revela en todos los
R3D 54 alA momentos de la partida, y su vasto estudio
alA 55 R3R del tablero le dio la oportunidad, por su
RxP 56 RxP gran fuerza, de alcanzar victorias reso-
alA 57 ClD nantes, llegando a conquistar el derecho
R3D 58 C4A+ de disputar el campeonato mundial, por
R3R 59 C3R sus rotundas victorias obtenidas. Tuvo la
C3A+ 60 R3A desgracia de coincidir su cenit con el de
P5R+ 61 R4A su compatriota, el. genial Lasker, uno de
C4D+ 62 RxP los astros más brillantes del firmamento
CxC 63 Abandonan. ajedrecfstico.

TORNEO DE LEIPZIG
1894

GAMBITO DE LA DAMA REHUSADO Abriendo al AD un seguro refugio


en 2TR. Es muy armoniosa la colocación
BLANCAS: Dr. Tarrasch de las piezas blancas, y su Alfil desarrollado
NEGRAS: T. von Scheve ejerce una notable presión sobre el juego
adversario.
P4D 1 P4D
P4AD 2 P3R 7 C5R
C3AD 3 C3AR
C3A 4
No es mala esta salida de Caballo. Pero
se considera superior a ella el dedurollo
del Alfil de Dama. bien a 4A, como en la
presente partida, o bien a se, donde más
habitualmente se lleva.
4 A2R
A4A 5 P3A
El doctor Tarrasch considera este movi-
miento excesivamente pasivo, y recomienda
el avance del referido Peón en un paso más
una vez efectuado el enroque. El blanco,
no obstante, en cualquier caso dispone de
una buena iniciativa.
P3R 6 CD2D Falta estratégica decisiva. Después del
P3TR 7 cambio que sigue, las negras se van a ver
107
obligadas, para sostener su Peón avanzado Preparado el doblamiento de las Torres,
de SR, a debilitar todo el eIÚambre central que obligarán a debilitarse el enroque ene-
de casillas negras, al tener que avanzar, con migo, adquiriendo entonces súbitamente
misión defensora, su PAR a su cuarta una extraordinaria fuena el expectante AD
casilla. Es notable el plan contundente y blanco.
exacto que lleva a cabo el doctor Tarrasch,
sacando el beneficio máximo de la débil ju- 19 nA
gada negra. TD2C lO P4m
D2A 21
CxC 8 PxC
cm 9 ASe La Dama comienza un largo viaje por
la linea quebrada 2AD-2AR-4TR-
P3m 10
6TR, para aumentar la presión que se
ejerce sobre el enroque enemigo.
Tarrasch se hace esta sencilla re1lexión:
«En el momento que desaparezca el AR
negro, el primer jugador no va a tener rival
21 ClR
en el libre tniDsito por las casillas oscuras.» Estorbando momentáneamente su pri-
mer salto; pero ..•
10 AxC+
DxA 11 O-e T5C 22
D2A 1Z P4AR
A6D 13 vuelve a dejar accesible la casilla 4TR.
22•... , P3T seda suicida a causa de 23. T6C,
Si enroca el blanco, su adversario habria R2T; 24. D3C, D2R; 25. T X P + 1gana.
podido fiscalizar mú activamente las lineas
negras, jupndo 13. . .. , D2R, seguido 22 D2R
deP4R. D4T 23
13 TlR Amenazando D6T, seguido de TST con
0-0-0 14 C3A ventlija decisiva.
ASa 15 A2D
23 C3A
Es de resaltar el triste papel a que se ha D6T 24
visto condenado el deqraciado Alfil, desde
que le clavaron los dos Peones negros
de 3AD y 3R en su camino.
P3A 16
Comienza el minado del centro. La aper-
tura de lineas que sigue va a valorizar a'Óll
mú la potencia de las piezas blancas.
16 PxP
PxP 17 P4CD

El método de la resistencia pasiva habrfa


conducido al fracaso, ante el magnffico
emplazamiento de fuerzas qresoras del
blanco.
nc 18 nAR
TlD! 19 (Po8Icithl dupllls de 24•.••• 7'21')

108
Esta movida que culmina la concentra- 26. Q x D, T x D; 27. T x P +, que-
ción de efectivos contra el punto débil dando con dos Peones más y un final rela-
del negro: 2CR, resulta de una eficacia tivamente fácil. La contundencia del estilo
aplastante. Las amenazas contra el enroque de Tarrasch no le deja tregua, y se lanza
negro se multiplican: 25. A x C, D x A; por la pendiente de la victoria rápida.
26. D x D, T x D; 27. T x P +, ganan-
do el Alfil, por un lado, y si 24•... , P3C, el 25 DxA
blanco vence ocSn faCilidad, mediante 25. TxP+ 26 RIA
T x P + !, P x T; 26. T x P +, TIC; TxP+1 17 R1R
27. A x C, etc. TxT+ 18 RxT
17C+ 19 RIR
24 TlT DxC 30
A6D1! 25
Las negras abandonan ante la inevitable
Desviando la Dama negra de la protec- confiscación de sus bienes. Si 30• ... , DIA;
ción del sugestivo PCR. Mucho más enér- 31. D6C+ (fue muy importante la captura
gica que: 25. A x C, D x A; del PTR en la jugada 27), seguida de T8C.

VIENA, 1915

GAMBITO DE LA DAMA REHUSADO Por inversión de jugadas se ha entrado


en la posición original de la interesante
BLANCAS: Schubert defensa Tarra~h del gambito de la Dama.
NEGRAS: Schlechter
PA x P 4 PR x P
P4D 1 P4D C3A 5 C3AR
C3AR 1 P4AD
El negro intenta asumir la iniciativa
desde sus primeras jugadas. Esta táctica
está considerada, hoy en día, como inse-
gura, debido principalmente a la solidez
del planteo blanco. Las variadas respuestas
de que éste dispOne, todas ellas bastante
buenas, son la confirmación taxativa
de ello.

P4A 3
El primer jugador acepta, sin temor, el
combate franco, porque en este terreno
será donde mejor podrá hacer efectiva la
ventaja de salida.
3 P3R
109
Estando el Caballo de Rey negro en
3AR. se considera más enérgica la jugada
de Alekhine 6. ASC!. A3R; 7. A x C.
D x A; 8. P4R. P x PR; 9. ASC +.
A2D; 10. C x P +.
Sin embargo. la movida del texto cons-
tituye un sistema de juego que goza hoy
de gran prestigio. Su «leitmotiv» no es
otro que preparar el ataque contra el PD
aislado. que una vez desaparecido facili-
tarla la postrer ofensiva contra la forma-
ción de Peones del ala de Dama y acelerar
la realización del enroque. Su estilo es
perfectamente sólido y enérgico. por lo
que tiene gran aceptación.

6 CJA
AlC 7 AlR
0--0 8 AlR (Posición después de 13. A3R)
ASC 9 C x A 14 P x C
AlT 15 CxA
No es ésta. desde luego. para el Alfil, A x P + 16 RIT
la mejor casilla de desarrollo en este P x C 17
sistema. Su poca consistencia y flexibili-
dad reside en no tener buena casilla de Al efectuar su jugada catorce. el blanco
retirada. debido al vértice del <<fianchetto», ha entrado por un sendero de jugadas
viéndose obligado a cambiarlo por el forzadas.
Caballo en todos los casos, so pena de
perder tiempo al retirarlo. Más lógica es 17 A4C!
la linea sugerida por R. Reti: 9. P x p. Esta es la clave de la combinación efec-
A x P; 10. C4TD, A2R; 11. C4D. tuada en el trece movimiento.
9 0--0 C x P lB
PxP 10 AxP
Si 18. DlD. C4R; 19. D4D. CSA,
TIA 11 A2R
ganando. La lógica jugada 20. C x P,
C4D 11 P3TR tendria una contundente respuesta en
El negro en su momento oportuno 20..... A x P +!
rechaza las piezas blancas. lB D3D
AlT 19 TxT+
AlR 13 RxT 20 TIDI
Parece ser la mejor casilla. ¡Punto culminante! Para evitar la inJDi..
nente pérdida material. las blancas desco-
13 CSCRII locan de tal modo sus fuerzas. que. unidll
a la mala situación del Rey. han derrum-
Preludio de una combinación verdadera- bado sus bastiones en pocas jugadas.
mente genial. Su gran fuerza reside en el AlC 21 C1R
hecho tácito de que el blanco debe aceptar P4TR n CxC
el plan enemigo si no quiere entrar en des- AxC 23 AxPR
ventaja posicional. El estilo caracterfstico nA 14 D x P
y desconcertante de esta serie de jugadas
es de una extraordinaria dificultad de No hay defensa posible y por ello. 1_
captación. blancas abandonan.

110
TORNEO DE SAN SEBASTIAN
1911

APERTURA Uno de los dos procedimientos más


DE LOS CUATRO CABALLOS lógicos para prevenir la entrada del 'Ca-
bailo blanco en SD.
BLANCAS: Schlechter- NEGRAS: Duras
C4TR! 8
P4R 1 P4R
C3AR 2 C3AD Considerada lo mejor para abrir sin
C3A 3 C3A pérdida de tiempo la columna de AR en
ASC 4 ASC favor del blanco.
Situación clásica que se presenta en la 8 P3A
apertura de los Caballos. En este mo- A4AD 9 CIR
mento. Rubinstein recomienda 4....• CSD!.
anulando por completo toda tentativa
de victoria de parte del blanco. como vere-
mos más adelante. al tratar del gran maes-
tro polaco.
Sería menos fuerte S. CSD. a causa
de S• .... C xC!; 6. P x C. PSR!; 7.
P x C. D x P; 8. A2R. P x C; 9.
A x p. 0-0; 10. 0-0. P4AR!; 11.
P3A. A3D; 12. P4D. etc.• dando mejor
juego al negro.

~ 5 0-0
P3D 6
También es jugable 6. A x C. prefe-
rida por Nimzowitsch. sin que se explique
claramente el motivo por el que se en-
cuentre abandonada totalmente de la
práctica. No cabe otra razón que el deseo Cede mucho terreno al adversario.
de mantener la tensión del combate. evi- Mejor era. indudablemente. 9....• RIT.
tando lógicamente los cambios. ganando un importante tiempo ante la
inminencia de reapertura de la columna
6 P3D de CR.
El negro. sin embargo. suele prefetir P4A 10
actualmente el cambio del Alfil por Ca-
ballo seguido de la jugada del texto. Maravillosa entrega de pieza. digna del
extraordinario genio austriaco. Gran in-
ASC! 7 ClR tuición denota el hecho de lanzarse. en
111
una posición en la cual el negro no tiene teriormente, ya que el plan del blanco
desventaja notoria, a correr el riesgo que consiste en, operando a la máxima velo-
representa. Evidentemente, se debe aceptar cidad, hacer efectiva su supremacía en
la oferta después de hacer desarrollo. Sin embargo, en la presente
posición, habría sido más preciso el cambio
10 AxC de las Damas en la octava casilla, obli-
PxA 11 P4D gando a replegar tres piezas negras a su
A3CD 12 P3AR primera linea.
La aceptación del sacrificio se consideró 18 P x P
por Duras y otros maestros como favora-
ble a las blancas. Su razón de ser estriba Duras deja escapar una magnifica
en el absoluto dominio de la columna AR, ocasión para sacar a la intemperie al
yel Peón tomado; en apariencia, la com- AIfiI y la Torre negra. 18 ... , A3R habría
pensación da la impresión de ser insu- sido muy superior a la jugada del texto.
ficiente.
D8A + 19
P x PR 13 PxA
TxT+ 14 RxT SchIechter, por el contrario, no omite
D3A+ 15 R1C el paso de la fortuna por su puerta, y ad-
T1AR 16 ClAD quiere ventaja decisiva mediante la jugada
D7A+ 17 R1T del texto, ya que, al intentar liberar el
juego, se ve obligado su adversario a re-
legar a un extremo del tablero a una de sus
piezas, perdiendo dos tiempos que, como
se verá, pesará de forma terminante en el
desenlace de la partida.
19 DxD
T x D+ 20 C1C
C3A! 21 A3R

Forzada. Es preferible perder un Peón


doblado lateral a uno aislado, pero cen-
tral, que lleva sobre sus espaldas una mi.
sión bastante importante: evitar la crea·
ción de un nuevo Peón pasado. Pese a todo
ello, el blanco, a causa de su aplastante
superioridad de posición, va a desbaratar
todos los proyectos negros.
TxT 22 CxT
P x P 18 CxP 23 ClAn
CxA 24 CxC
Momento neurálgico. En esta hetero- AxP 25 cm
génea posición, cada maestro cuenta de su P4D 26
parte cierta ventaja, bien tangible o in-
tangible. Del lado blanco vemos: primero, Los Peones pasados, por un lado; la
sypérior desarrollo, como factor sutil buena situación del Alfil, por otro, y la
en su favor, unido a la amenaza latente rápida entrada del Rey en juego, consti·
de mate en 8AR; y segundo, como ven- tuyen los factores esenciales para elegir el
taja real y seminalterable, el Peón de Rey plan que conduzca. en la forma máI
libre, que tiene su importancia en perfecta rápida posible, a la reducción total de Ja
ligazón con el factor favorable citado an- resistencia adversaria.
112
P6R 29 C(4T)3A
PSD 30 CID
PCiD 31 C(1D)3A

Totalmente forzada. 31. .... C(2R)3A,


babrfa permitido la instantánea corona-
ción de un Peón.

PxC 32 CxP
Con dos Peones de margen y el Rey
en juego. el camino que le queda al
blanco por recorrer es aorto y sin obstácu-
los serios.

R3A 33 RIC
R4R 34 R1A
(Posici6n después de 26. P4D) R5R 35 RIR
ASO 36 P3CD
26 R6D 37 RID
A3CD 27 A4R 38 P3TR
A3D 39 P4TR
Para estorbar en lo posible la entrada P4TR 40 P4CD
del Rey enemigo en juego. A xPC 41 C4A+
R5R 42 C xPT
27 C(1D)3An A3D 43 AbaDdolllm.
28 C4m
Un poco tarde. pero la decisión no
28. .. .• P3CR para poner en juego rApi- puede ser más acertada. Estamos asis-
damente al Rey. darla más posibilidades tiendo a un interesante reportaje sobre el
de resistencia. estilo polifac6tico de C. Schlechter.

BARMEN
1905

GAMBITO DE LA DAMA REHUSADO El negro se decide por la formación


«Stonnewall» (muro de piedra), en vez
Sistema «Stonnewall» de la ortodoxa. Este sistema tiene por
objeto la creación de un fuerte punto de
BLANCAS: Sc:hlechter - NEGRAS: John apoyo en SR, Y. sobre la base de una
formación de Peones en 3AD. 4D; 3It,
P4D 1 P4D 4AR, atacar al enroque mediante el
P4AD 2 P3R avance del PCR. PIesenta en su coqjunto
ClAn 3 P4AR poco elútico. divenas desventajas estra-
113
8
tégicas: encierro indefinido del AD y de-
bilitación de todo el entrecruzado de ca-
sillas negras. especialmente del punto 4R.
Sabiendo. en consecuencia, el plan
más acertado a seguir por cada bando.
De la mejor realizac:i6n práctica depende.
por lo tanto. el resultado de la pugna.
CJA 4 P3A
A4A S A3D
Las negras intentan conseguir el cambio
de los Alfiles en casilla negra, para. al
instalar su Dama sobre la línea del mismo
color lCD. TfR. preparar eventualmente
el avance liberador P4R. No es. desde
luego. 6ste el mejor sistema para adoptar
en esta Ifnea de juego.
P3RI 6 (Posición MSPuJS M 9. C5R)
Frenazo en seco a las pretensiones ne- No hay otro camino lógico y conse-
gras. Si cambia el Alfil. el blanco ejercerá cuente a seguir; era demasiado peligrosa
una creciente presión sobre toda la colum- la amenaza de ruptura sobre la columna
na de Rey semiabierta Y. por ende. sobre de AD.
el PR negro retrasado.
6 CJA PRxA 12
A3D 7 D2A Se ha conseguido avanzar un peldaño
P3CRI 8 en la escala de los objetivos estratégicos.
Tarde o temprano será expulsado el
Las negras. que intentan obligar a su Caballo negro de su excelente posición
oponente al ambicionado cambio. encuen- central, mediante el golpe P3A, y entonces
tran en 6ste una tenaz y consecuente opo- se hará más patente la fragilidad del PR
sición. Otro plan representaba también retrasado; sin embargo, su captura será
bastante inter6s que consistfa en aceptar el dificil a causa de la proximidaa de las
cambio de AA. seguido de efectuar una fuerzas defensoras, pero mientras perma-
presión simultánea sobre la columna de nezca en la misma situación presente,
AD y PD por la ro y la Dama. respec- entorpeciendo el libre desarrollo del AD
tivamente. y restantes piezas, la posición blanca será

0--0
DlC
,
8
lO
0--0
CSR
de manifiesta superioridad a causa de su
mayor amplitud de movimientos.
12 D2A
El talón de Aquiles del negro al des- Resulta realmente notable el expresivo
plazar el eR, ASa. es de PD. Las blancas contraste que existe entre el desarrollado
proceden sin pérdida de tiempo a hostilizar y activo material blanco, en situación de
dicho peón. Se amenaza la ganancia de un aumentar su radio de acción con la aguda
Peón por medio de 11. P X p. PR x P; anquilosis que estrangula toda posi~ili~d
(11 •...• PA X P; 12. eSCD + +); 12. de acción común por parte del ejército
A X e o e X C, P x A o e; 13. e negro.
oA x P.
CSR 13
lO RIT
mlA 11 AxA Espléndida posición central.

114
13 17 RIC
A x CI 14 TxP 18 C3T
14. P3A estaba revestida de aparente ¡Al fin! Después de dieciocho jugadas
bondad, que invitaba realmente a ajecu- que han deparado el triste balance posi-
tarla, pero ... , siempre pero, si considera- cional de un ala de Dama en sus casillas
mos por un lado que existen Peones do- iniciales, sale a escena este Caballo, mal
blados en lA columna de AR y que el situado, lo que en unión del PR retrasado
Caballo negro es la única pieza que goza y el Alfil «malo» sin desarrollo, ofrece
de una acción más aceptable, llegaremos para el negro una negra perspectiva.
a comprender claramente la idea perse-
guida con el cambio. P3C 19
14 PA xA La depurada escuela del maestro austro-
P3A 15 PR xP húngaro le sugiere la elección de métodos
TDIRI 16 evolutivos a <<long portée», por caminos
seguros. Un luchador agresivo habria,
Apuntando sin pérdida de tiempo al quizá, escogido 19. PSA con múltiples
Peón retrasado. amenazas; entre ellas 20. D x T +, se-
guida del jaque, descubierta, tomando
16 OlAD Peón R y la sucesiva captura del PD.
Era interesante esta posible Ifnea a seguir.
La posición mala obliga a realizar juga-
das malas. Esta Dama, tan voluble como 19 DlD
las de carne y hueso, no encuentra sitio P5AD 20 C2A
adecuado para sus propósitos. OlC 21 AlD
mAl) 22 D2R
T(IR)IAR 23 TDIR
P4CR 24 AlA
T3T! 25

Magnifica. Obligando a crear otta debi-


lidad en el conjunto de casillas negras.
25 P3CR

D3TI 17
El blanco está desarrollando un ver-
dadero curso sobre cómo se debe conducir
una partida de ajedrez. El perfecto cono-
cimiento de las teorias tácticas en sus di-
versas épocas, han encontrado en la pre-
ciara inteligencia de Schlechter un ejecu-
tor de la más fina estirpe.
115
Extraordinaria y personaUsima jugada
que calibra fielmente, en todo su valor,
la clase inconmensurable del genial
Schlechter, precursor de la escuela hiper-
moderna. En la presente posición el plan
natural a seguir era intentar la metódica
explotación de todo el conjunto de cuadros
débiles existentes en el ala de Rey. La
posible realización victoriosa habrla repre-
sentado, probablemente, un largo sis-
tema de maniobras. Schlechter, sin em-
bargo, estima, acertadamente, que cuando
existe en una posición de clara ventaja
espacial con la lógica reducción forzada
de movimientos a que se verla forzado el
bando en desventaja, el mejor plan a se-
guir es amagar una ruptura en extremos
opuestos del tablero, ya que por el mayor
espacio, podrfa efectuar con más rapidez (Posición después de 37...• , D2A)
el traslado de las piezas agresoras de un
sector a otro. alemana que indica obligación de jugar,
con pérdida inevitable de material.
26 OlA
T(3T)3A 27 T2R C6A! 38
P4TD 28 P3TD
ClD 19 La invasión hípica alcanza su punto
culminante, y la tenaza se cierra por mo-
mentos en una constante amenaza de aho-
Después de estabilizar el ala de Dama, go. La técnica de Schlechter resulta alta-
se deciden, al fin, las blancas por actuar mente instructiva en lo concerniente al
en el lado opuesto. La jugada del texto tratamiento de las posiciones cerradas.
representa el principio de una larga evo-
lución hípica de perfecto acuerdo con el 38 DxD
plan trazado.
No se puede soslayar el cambio de Da-
29 nc mas a causa de la inquietante amenaza
ClR 30 D2R 39. C x PT, ganando.
P5CR 31 A2D
C(3R)4C 32 PA xD 39 T2R
T(3T)3AR 40
Apuntando a las debilidades sensibles.
Obligando al cambio de los Caballos,
32 AIR ya que en cualquier otro caso las mismas
C6T+ 33 RlT blancas, con T8 + y T8C fuerzan la de-
C(SR)4C 34 A2D cisión.
D2R 35 DlD
D5R 36 ClR 40 CxC
T3TR" 37 OlA TxC 41 TxT
PR x T 42
Intentando reducir la fuerza asfixiante
de la terrible presión mediante el cambio Habilitando el magnffico punto de apo-
de Damas. 37•... , D2R habrla tenido una yo SR, para el Caballo, y hostilizando al
bella contestación en 38. DSC, dejando al Alfil adversario, reduciéndole a una in-
negro en posición de «zugward», palabra movilidad total.
116
.al T1R Estrategia ladina. Se amasa la ruptura
ClA+ 43 RIC en el ala de Rey para efectuarla final-
C5R 44 TlD mente en el de Dama.

Sabia decisión ante inminente invasión


de la torre blanca en los dominios adver-
sarios con efectos realmente destructores.

APERTURA RUY LOPEZ

Defensa Morphy

BLANCAS: Meitner
NEGRAS: Schlechter
P4R I P4R
C3AR 2 C3AD
ASC 3 PlTD
RlC 45 A4T 4 C3AR
C3A S A4A
Al reducirse la capacidad de resistencia
que tiene la posición negra por el cambio Lógicamente, al abandonar el adver-
forzado de los trebejos de acción más efi- sario el caracterfstico control de la casi-
caz en el intento de llevar a cabo una lla 4D mediante P3AD, aprovecha el negro
defensa perfecta, hemos desembocado para acentuar su presión e impedir la
en un final en el cual se observa: por un jugada de inciativa P4D.
lado, la superioridad espacial blanca, que,
como sabemos, no es instrumento de deci- 0--0 6
sión en una partida (salvo casos excep-
cionales), sino medio para obtener una Por inversión de movimientos se entra
ventaja tangible; por el otro lado vemos en la variante normal de una lfnea de
una vez más un fiel ejemplo de la neta juego empleada frecuentemente por quien
superioridad que tiene el Caballo sobre el este libro dirige. Su valor es dudoso,} tiene
Alfil en las posiciones cerradas; existe, el inconveniente de cortar la retirada
también, un gigantesco Peón pasado. El del AR blanco en su fuga ante la amenaza
blanco va a combinar todos estos factores, del cambio por el en contrario. No obs-
para obtener una rápida victoria, y el Rey tante, la jugada del texto es demasiado
va a demostrar su estirpe en este remate indiferente en relación a los problemas
a la partida. que se plantean en el centro. Más activas
45 RIA son CP x e o 6. P3D, tambi6n bastante
P4T 46 AIR sólida.

Las negras defienden de la mejor ma- 6 P4CD!


nera la amenaza de ruptura que pesa sobre A3C 7 PlD
su posición. ~D 8 ASCR

R3A 47 AlA El centro se encuentra virtualmente blo-


R4A 48 RIR queado, y el precipitado enroque ante el
TICD 49 RIA agresivo emplazamiento de las fuerzas
PSC 50 enemigas, va a producir un efecto bastante
117
diferente al considerar en toda su impor-
tancia el debilitamiento de la fortaleza
real. lanzando sus huestes en un empuje
lleno de enérgica vehemencia para no dar
un minuto de tregua al monarca blanco.

12 P4TR

(Posición después de 8 ....• A5CR)


desfavorable. De primera intención. el
negro amenaza CSD.
C2R 9

Jugada bastante lógica. ya que tiende


a evitar la realización del proyecto con- Cuando un ataque se conduce correcta-
trario. El doblamiento de los Peones es- mente. el número de amenazas efectivas
taria compensado por el hecho de repre- aumenta en forma progresiva. El blanco
sentar una fortificación del centro. Si des- tiene que hacer frente a la terrible ame-
pués del cambio de piezas el negro juega la naza 13. . ..• CSC; 14. P x C. P x P;
Dama a D2D para instalarla posterior- 15. TIA, D x P +, seguido de mate,
mente en 6T. podía ser refutado su intento y juega evitándola y desarrollando al
con R2C. adquiriendo una posición bas- mismo tiempo una pieza ...
tante segura.
A3R 13
9 DlD
Pero ...
Amenazando la entrada <<a posteriori»
del cambio de piezas en 6T.
El fino sentido intuitivo de Schlechter 13 P5T
le dice que la colocación de la Dama en el CIT 14 T3Tf!
puesto avanzado. seria de fatales conse-
cuencias para su oponente. La amenaza oculta se ha revelado con
sus efectos destructores y terribles conse-
P3A 10 AxC cuencias. La amenaza aparente es pro-
PxA 11 D6T ducto del momento combinativo; es decir,
Cle 12 de la momentánea situación peligrosa que
exige siempre una especial atención. La
Las blancas no han podido evitar la amenaza oculta es la consecuencia directa
maniobra de la reina enemiga. pero creen de la serie de ventajas posicionales obte-
tener una posición bastante compacta nidas. En la presente posición, se observa
y con posibilidades defensivas. Sin em- fácilmente que mientras el centro presenta
bargo. su adversario opina de forma bien una posición equilibrada en el ala de Rey,
l18
donde el blanco se encuentra enrocado. la Obligada ante la mortal entrada de la
situación se inclina decididamente del lado primera Torre en juego.
negro. debido a la colocación expuesta del
monarca mencionado. El Rey es el cora- 15 PxA
zón en el organismo ajedrecístico. Se pue- Abandona. 16
de tener muy buena posición en general.
y, sin embargo, r,ecibir un mate precoz por No se puede impedir que la presencia
efecto del momento combinativo. Por esta de la segunda Torre, mediante R2R.
razón. debemos proteger a nuestro je- seguido de TI C. acabe con toda resisten-
rarea. ya que su eliminación representarla cia. Hemos presenciado un instructivo
la pérdida de ese lapso de vida que repre- ejemplo de ataque sobre una posición real
senta la partida. <<por debilidad». La extraordinaria clase
del genial Schlechter se revela en esta
A x T 15 nftida producción.

MATCH DE 1908

GAMBITO DE LA D. REHUSADO Schlechter. se considera la única que puede


disputar la iniciativa al primer jugador.
Defensa ortodoxa
PxP 8 PxP
BLANCAS: Rubinstein Este cambio ha destruido los proyectos
NEGRAS: Teichmann de Teichmann: dar al AD una buena
casilla en 2CD, a causa de encontrarse su
P4D 1 P4D acción bloqueada por el PD.
P4AD 2 P3R
CD3A 3 CR3A A3D Ale
ASC 4 CDlD
P3R 5 A2R
C3A 6 ~
DlA 7

Interesante jugada. ideada por el maes-


tro polaco. Reúne las condiciones carac-
terlsticas del estilo posicional hipermo-
derno. del que Rubinstein es el verdadero
precursor. La flexibilidad de planes. man-
teniendo la situación expectante. por el
mayor tiempo posible. o en cualquier
momento de 1& partida, son cualidades esen-
ciales de esta escuela.

7 P3CD

No es esta la mejor contestación a la


jUgada blanca. 7..... P4A. sugerida por
119
Jugada preferida por Rubinstein, quien en el ala de Dama, desp~ de haber
ya la adoptó con éxito contra el mismo fijado el centro en lo posible. El que llegue
adversario de la presente partida en el primero vence. Cualquier otra linea habria
torneo de Karlsbad de 1907. Su idea dejado a Rubinstein las manos más libres
básica es lanzar un ataque de todas las aún.
fuerzas blancas sobre el enroque enemigo,
cuando lo estime oportuno. rolC 17 P3ro
10 P4A
P4TR 11 P5A

En la partida anteriormente citada,


Teichmann prefirió el plan que lleva con-
sigo el cambio del Peón de AD por el
PD adversario, para lo que colocó preven-
tivamente la Torre en lAD. Tampoco esta
idea le permitió inclinar la balanza de su
lado.

ASA TlR

No seria mejor 12.... , P3e. ante la


peligrosisima ruptura que se podrfa pro-
ducir en 4TR, que darla al primer jugador
un terrible ataque.

AD x e 13 CxA A x P +!! 18
P4CR1 14
En las luchas de dos filos, donde ambos
Comienza el asalto contra la fortifica- adversarios atacan con vehemencia, es fre-
ción real. Su momento de iniciación no cuente la presencia de bellos sacrificios.
puede ser más oportuno, ya que el centro que dan a la batalla un sabor totalmente
se encuentra bien protegido. y la ofensiva «sui generis». Esta hipótesis se basa en el
negra en el lado de Dama requiere varias hecho taxativo de que el resultado final se
jugadas de prep1·ón. supedita al resultado efectivo de cada
ataque. La defensa no suele tenerse muy
... 4 AlD en cuenta. La actual posición es de una
P5e 15 C5R gran superioridad blanca: la posición real
es más firme, y el ataque más consistente.
El taponamiento, en su parte inicial. de Este lógico sacrificio es, ni más ni menos,
esta importante vfa que se dirige al en- que la consecuencia lógica de su ventaja
roque contrario, no va a salvar el juego. estratégica y táctica que llega al punto
Rubinstein se encarga de demostrar a su culminante, en el cual se desborda su
adversario, en forma bastante explicita, la posibilidad combativa.
superioridad posicional de que goza no
reside sólo en ese único factor estratégico. 18 RxA
P6C+ 19 RIC
P5T 16
La toma del Peón habria sido de rápidas
Dudosa, pero consecuente. Este es el consecuencias mortales, con la posible
momento para lanzarse al contraataque continuación: 19....• P x P; 20. e x e!.
120
p x C; 21. CSC +. RIC; 22. D x p. IEspléndida jugada! Rubinstein no va-
gana. cila en entregar su Caballo. que Teich-
mann no puede aceptar. debido al fuego
CxC 20 PxC mortffero combinado entre la Dama y las
dos Torres. No obstante. acepte o no. las
defensas del Rey negro se derrumbarán
por momentos.

21 PlA
PxP 22 PxC

Cualquier jugada es mala. El resto es


fácil de comprender.

T8T+ 23 RxP
'IiT + l4 RIC
OSA 25 P6A

Si mueve la Dama a ID. o lA, 26.


DST. exige el cese del combate.

Tampoco era posible 20. ...• D x C. TxD Abandonan.


a causa de 21. P x P +. R x P; 22.
esc +! La dificil facilidad de Rubinstein se
muestra en forma clara en la batalla que
P6T1! 21 acabamos de comentar.

TORNEO TRIANGULAR DE LODZ


1908

GAMBITO DE LA DAMA REHUSADO Hasta este momento la partida es idén-


tica a la jugada entre Schubert y Schlechter
Defensa Tarrasch en Viena. 1915.
BLANCAS: Rubinstein-NEGRAS: Salwe
7 PxP
P4D 1 P4D
P4AD 2 P3R En la partida citada anteriormente.
ClAD 3 P4AD Schlechter jugó 7....• A3R. manteniendo
PA x P 4 PR xP la tensión del combate. El movimiento del
ClA 5 CR3A texto. unido en estrecha relación con el
P3CR 6 C3A siguiente. tiene objeto obligar al blanco
A2C 7 a ligar los Peones en las columnas de D
121
y AD, desapareciendo, por consiguiente, Finamente jugado. Releva a la Dama
la primera debilidad. de la defensa del PR y prepara el dobla-
miento de las Torres sobre la columna
CxP 8 D3C de AD, acentuando la presión sobre el
Peón colgante.
16 C2D
AxA 17
Siempre lo mejor. La ausencia del Alfil
bloqueador va a ser sustituida por la Dama
desde el magnifico emplazamiento cen-
tral de 4D.
17 TxA
D4D 18 TRlR
AlA! 19
La técnica empleada en esta partida por
Rubinstein es de la mejor clase. Se conti-
núa en forma matemática· y cientffica la
acción contra el PAD negro, cuyo fin no
se ve muy claro: ¡son muchas piezas
atacando!
CxC 9
19 TRIAD
Varias respuestas tiene el blanco a la P3R 20 me
incitante jugada de Salwe. Rubinstein, CSA 21 CxC
extraordinario genio creador del ajedrez TxC 22 TZA
moderno, demostrando su maravillosa in-
tuición, se decide por el camino más extra-
ordinario: el cambio de Caballos, con la
consiguiente desaparición de la debilidad
avanzada negra, al verse unida a la zaga
el PCD, que se traslada a la columna
de AD; pero es ahora el 3AD el objeto
de sus miras tácticas y estratégicas, consi-
derando, claro está, que, al desaparecer
esta nueva debilidad, volverla a producirse
la pasada.
PxC
0-0 A2R

Las blancas comienzan los primeros es-


bozos de un férreo bloqueo de los citados
P.x>nes de AD y D.
TRlA 23
C4T 11
11 D4C Las blancas, con toda la calma cient(o
A3R 12 0-0 fica que las permite su sólida posición.
TIA 13 ASCR siguen acumulando efectivos sin cesar
P3A 14 A3R contra el Peón débil negro. Obsérvese el
ASA 15 TRIR lector en el detalle de que hay dos Peonea
T2AR! 16 débiles negros: 2. ro y 3. AD, y, aunqUfl

122
Rubinstein dirija momentáneamente su No era posible 25. . .. , D X D. a causa
ofensiva sobre este último. no deja de tener de 26. P X D. AlA; 27. T X PD +. con
en cuenta la existencia del otro. como po- gran superioridad.
dremos comprobar pronto.
P3TD 26 TITD
,23 P3TD No existe otra respuesta más satisfac-
P4CD 24 D3C toria contra la matemática precisión de que
hacen gala las blancas. De los dos Peones
Contra cualquier otra jugada, las blan- débiles. uno tiene. evidentemente. que caer.
cas habrían jugado PSC. aumentando la El resto es cuestión de técnica.
presión.
T x PA! 27 D x T(6A)
TST 15 TIC DxT 28 TIT
OSA 29
También es buena 29. TSA.
29 Dle
R2A 30 P4T
A2R 31 P3C
D6D 32 OlA
TSA 33 D2C
P4TR 34 P4T
TIA 3S OlC
P5C 36 PST
P6C 37 T4T
P7CI 38
Hermosa carrera la de este Peón, que
acaba con la defensa negra. Salwe. ante la
grave amenaza 39. T8A + !. decide aban-
donar; si el-negro retira el Rey o la Dama
39. T7D o 7R. respectivamente. ¡Mara-
(Posici6n después de 26....• T2TD) villosa sinfonia posicional!

TORNEO TRIANGULAR DE LODZ


1908

GAMBITO DE LA DAMA REHUSADO P3R 4 AlD


C3A S P4AR
Defensa eslava
El jugador yanqui plantea su linea de
BLANCAS: Rubinstein juego favorita: la defensa «Slonciwal».
NEGRAS: Marshall
CSR 6
P4D 1 P4D
C3AR 2 P3AD Rubinstein utiliza un procedimiento
P4A 3 P3R contra' la defensa escogida' por el negro
123
diferente de que adoptó Schilechter en su Defendiendo el «hole» de 3D. y pre-
partida contra lohn, jugada en 1905. parando. evetua1mente. un contraataque
en el ala de Rey.
6 AxC
P4R1 15
Cambio prematuro que dificulta el em-
plazamiento del Caballo negro en el es- Fijando al Monarca enemigo en el
caque SR. centro del tablero. Sospechosa habría
sido lS. AlT. C4A (si 15•...• P4A; 16.
PxA 7 cm cse ±); 16. P4R ±.
P4A 8 D2R
A1R 9 PxP 15 P3C
P4TD 10 A3R 16 P4A
ro1D! 17
El estilo sereno y científico de Rubin-
stein se revela claramente durante el trans- Dirigiendo los ataques siempre a la ca-
curso de esta interesante partida en fiel silla m. fuerte avanzada blanca dentro
contraste con el de Marshall. agresivo de la posici6n enemiga.
y heterodoxo.
17 TICR
10 P3CD
0--0 11 Ale Marshall contesta con golpes tácticos.
AxP 12 T1D Considerando dentro del plan blanco el
D2R 13 cambio del PR x PAR, sitúa previsora-
mente la Torre detrás de la futura linea
Peñecto control de las lineas de pe- abierta. No obstante. su acción va a ser
netración. apuntando a los puntos débiles bastante pobre por la falta de colabora-
del negro. dores.
13 C3T TIA 18
P3CD 14
Las blancas. por si acaso. no dejan
Abriendo posibles vías de incursi6n al cabo sin atar. y sitúan su TR en posici6n
Alfil negro. agresivo-defensiva.
14 CA

(Posición después de 21 .... , C2A)


124
18 etC va a demostrarle cumplidamente que su
TxT+ 19 CxT causa no tiene remedio.
PxP 10
D6A+ 30 TIA
¡Al fin! Rubinstein se decide valiente-
mente a liquidar la tensión central para
operar con eficacla en los flancos.

10 PCxP
D5T+ 21 CA
C5C1 22
Comienza la invasión por las fuerzas
blancas de la posición enemiga. La per-
fecta preparación realizada por Rubinstein
dará más eficacia a la acción ofensiva. En
primer lugar, las negras se ven obligadas
a dejar abandonado material útil.

RIA
D xPT
Completamente SCglJI'll.
T x A! 31
TIT
D6C TlT ¿Sabes, querido lector, el efecto que pro-
D3C P3T
C6D1I duce un golpe dado con un objeto contun-
dente sobre la cabeza? Pues, en Iijedrez,
Cesó la reacción negra y vuelven otra cuando una partida ha sido conducida
vez sus adversarios al asalto de sus puntos correctamente, y se produce el tfpico sa-
débiles. La hermosa entrega de Peón que crificio de ruptura, el andamiaje posicional
vemos va a facilitar la entrada en acción adversario se tambalea y cae con estrépito;
del <<material pesado». tal como ocurre en el presente combate.

26 CxC 31 DxT
PxC 27 DxP D8T+ 32 Abaodooan.
OSC 28 T2T
TID 29 A4D El genio impulsivo de Marsha1l no ha
encontrado ocasión de manifestarse ante
El segundo jugador cree salvar su posi- la meticulosa dirección dada a la lucha
ción entregando un Peón, pero el blanco por su contrario.

125
TORNEO DE VIENA
1908

APERTURA DE LOS P. D. El resultado conseguido por Reti con el


cambio ha sido bien pobre; cambio de
Sistema «Stonewall» Caballo por Alfil, en su favor; pero, en su
contra tiene el imponente centro creado
BLANCAS: Rubinstein - NEGRAS: Reti al blanco, unido a una gran presi6n- COI
juego bastante prometedor en este mismlJ
P4D 1 P4D sector y en el ala de Rey.
P3R 2
P x C 6 P3R
Con el objeto de entrar en la fonnaci6n C3A 7 AlR
Stonewall, línea que gozó de bastante ~ 8 ~
predilecci6n por parte del gran maestro A2D 9 P3CD
polaco. C5R 10 AlC
nA 11
2 C3AR
A3D 3 C3A Rubinstein inicia un ataque, típico en
estas posiciones, y que, en la mayoría de
Preparando un cambio que acarreará la los casos, suele llevarse a cabo con éxito.
pérdida de varios tiempos. Más 16gico era, Desde luego, Reti ya debi6 considerar que .
como sugiere Schlechter, la continuaci6n cuando el extraordinario polaco que tenia
nonnal del desarrollo mediante 3.... , P4A; enfrente, se lanzaba a la ofensiva era por-
4. P3A, C3A, etc. que tenfa razones fundadas para ello.
P4AR 4 C5CD 11 A3D
C3AR 5 CxA+

(Posición después de 15.... , DIA)


126
Un golpe en el vacio, ya que si el segundo T3T 12 TlR
jugador efectúa el cambio, perderá el con- AIR 13 AxC
trol de la casilla 3AR para el Caballo, cuya PA x A 14 cm
importancia para la defensa del enroque es A4T 15 DIA
muy grande. D4C! 16 Abandonan.

TORNEO DE LA HAYA
1922

DEFENSA SICILIANA No es de temer el cambio de piezas, que


llevaría implícita la pérdida de varios tiern-
BLANCAS: Euwe - NEGRAS: Rubinstein pos por parte del negro.
P4R 1 P4AD 4 P x PI
CJAR 2 CJAR DxP 5
Variaci6n recomendada por el gran C x P no habría dado mejores chances
maestro checo, Aar6n Nirozowitsch, cuya a las blancas.
característica es muy similar a la que pre-
senta la defensa A1ekhine. En la Actuali- 5 P3R
dad, es bastante menos practicada que P4A 6 CJAD
otras jugadas a disposici6n del blanco; DlD 7
tales como 3.... , C3AD, P3D o P3R, que
se consideran más correctas. Rubinstein,
sin duda, la hace para sacar a su estudioso
adversario de los trillados senderos de la
teoría.
PSR 3
No es malo este avance de Pe6n, pese a
hacer el juego al negro; lo cual pone en
tela de juicio la correcci6n de la linea esco-
gida por el segundo jugador. 3. C3A es más
elástica.
3 C4D
P4D 4
Este movimiento no es del todo correcto,
ya que concede al negro la posibilidad de
cambiar su Pe6n lateral por el central, 7 C(4D)2RI
viéndose debilitado, por consiguiente, el
PR avanzado. Más seguro, parece, 4. C3A, Comienza el ataque contra el puesto
desarrollando al Caballo a su mejor casilla. avanzado blanco (PSR). La posici6n blanca
127
presenta un centro bastante débil. Excesi- objetivos de extraordinario valor para el
vas lineas abiertas a la penetraci6n ad- adversario. que verá facilitadas sus posi-
versaria. bilidades irruptoras. Veamos el procedi-
miento realizador de Rubinstein. que
A2D 8 constituye un verdadero curso de alta
estrategia.
Parando la amenaza negra C x p. se-
guida de D4T + Y D x C. ganando el 17 OC
Peón critico. PST 18 C(3C)4R
CxC 19 CxC
8 C3C P4CD 20
D2R 9 OlA
Otro plan interesante habría consistido
en jugar 9....• D3C. atacando las debili-
tadas lineas negras.

A3A 10 P3C
P4TR 11

Débil jugada. Las blancas empiezan a


sentirse incómodas ante la lenta. pero im-
placable. ofensiva desarrollada por el ene-
migo contra el PRo Es dificil encontrar
nada recomendable en una posici6n tan
debilitada. Si 11. P3CR. A2C. amenazan-
do C(3A) x P.
11 P3D
PxP
~~
12
CDlD 13 20 AxP+!I
D3R 14 J\4A
Bello sacrificio que deshace la capacidlW
El negro invade las lineas y puntos débi- de resistencia de las blancas. Este es el
les de su contrincante. con jugadas de gran clásico momento de irrupci6n. La acciÓll
energía operativa. negra va a discurrir. sin grandes obstáculoe
por las lineas abiertas. encontrando 101
D4R 15 P4A Caballos buenos puntos de apoyo para s~
saltos.
El negro dispone de un variado reperto-
rio de jugadas buenas: lS . ...• A2C era RxA 21 CSC+
también bastante fuerte. R2R 22 D xPC
D2A 16 0-0
Eliminando obstáculos en su avalancha
P3CR 17
contra la posici6n contraria.
Debilitando las casillas blancas. para po-
der expulsar el molesto Caballo enemigo. A4D 23 AlC
La debilidad originada. aunque haya per- T3T 24 D3D
mitido circunstancialmente el desaloja- D3A 25 P4R
miento del trebejo contrario de su domi-
nante posición. a la larga, pese al momen- Entran en acción. con fuerza avasallado
táneo restablecimiento del equilibrio tácti- ra. los Peones centrales negros. Las blanca
co. las vfas. recién debilitadas. constituirán no disponen ya de una defensa organizadt

128
AIC 26 P5A Estrangulando todo intento de libera-
P5A 27 D3T ción, por lo cual las blancas se ven obli-
gadas a liquidar el Caballo; no obstante,
RIR 28 PSR su precio es muy caro.
T4T 29 D4C
D3TR 30 C6R AxC 31 PxA
A4A+ 32 RlT
CIA 33
33 D3AI

He aquí, sobre el tapete, uno de los te-


mas más sugestivos de la esencia básica de
la posibilidad combinativa: la pieza inde-
fensa, como instrumento propicio para la
combinación. No vaya a considerarse equi-
vocadamente que la decisión se produce
por el fortuito hallazgo de una combina-
ción ganadora. No; para que se haya
producido la serie de jugadas ganadoras,
ha sido necesario previamente: 1.0, la situa-
ción expuesta del Rey blanco, y 2.°, el
debilitamiento de las líneas de acceso al
terreno enemigo. Euwe, encontrándose sin
(Posici6n después de 33. e/A) recursos, rinde sus armas.

TORNEO DE POSTYEN
1912

APERTURA INGLESA C3AD 2 C3AR


C3A 3 C3A
BLANCAS: Rubinstein - NEGRAS: Cohn P3R 4
Actualmente se encuentra bastante des-
P4AD 1 P4R acreditado este movimiento, que restringe
notablemente las posibilidades blancas.
No debe ser la jugada del texto la mejor Mejores son, indiscutiblemente, 4. P3CR
forma de combatir la apertura inglesa. o 4. P4D (la más practicada).
El primer jugador se encuentra en dispo-
sición de plantear el sólido sistema sici- 4 AlR
liano, pero con un tiempo más; con lo cual
se complace al blanco en su principal El negro se dedica un plácido desarrollo,
deseo. tras sus líneas de contención, que dejan
129
9
a su adversario demasiadas posibilidades cada, como el enemigo se va a encargar de
en el centro. Más iniciativa revelaba 4.... , demostrar lisa y llanamente.
P4D.
P x P 10
P4D 5 PxP
Desdoblando, como primera providen-
cia, el Peón.
10 CxP
CxC 11 PxC
D4DI 12
Se han trocado los papeles. Es ahora el
negro el que pasa por el amargo trance de
contar con un Peón duplicado. Virtual-
mente las blancas, unido a su mejor posi-
ción estratégica y táctica, cuentan con un
Peón de más. La magnifica jugada del
texto, controlando las casillas negras y
emplazando a la Dama en una situación
extraordinariamente dominante, constitu-
ye una demostración palmaria de su supe-
rioridad.
12 AJR
Más eficaz era mantener la tensión cen- AJT 13 T1R
tral mediante S• .•• , P3D. AJA 14 D4C
C x PI 6
Sutileza elegante. Rubinstein, fiel al
planteo elegido, intenta obstaculizar el
avance del Peón Dama negro a su cuarta
casilla, con el fin de liberar el juego. Sin
embargo, en la presente posición, seria una
línea a seguir bastante errónea, vista la
situación preponderante de las piezas
blancas. La obstinada tentativa del negro
va a ser magistralmente refutada por el
genial maestro polaco.
6
AlR 7
Con el fin de acabar con la acción obs-
taculizadora del en blanco. Pese a ello,
el blanco dispondrá de suficiente compen- Ante la desesperada situación estratégica
sación al contar con su pareja de Alfiles. del negro, con la inminente pérdida de ma-
terial a la vista, es dificil encontrar mejor
0-0 8 AxC línea a seguir, que el ataque «in extremis».
PxA 9 P4D que la serena sangre fria de Rubinstein VI
a desbaratar en su principio.
Al fin el negro consigue llevar a efecto
la jugada clave de una estrategia equivo- OSA! 15
130
Hermosa concepción, digna del más 17 D4T
puro estilo posicionista. La elasticidad de TDlD 18 TDlD
juicio se revela con toda claridad en la do- D5A 19
ble intención que impera en la jugada del
textO: ataque a los punto débiles adver- Se repite el movimiento quince con todos
sarios, y defensa indirecta, debida a la sus beneficiosos efectos.
accidental inmovilidad a que se ve conde-
nado el CabalJ,o negro. 19 C3A
DxD 20 CxD
15 A5C T4D 21 TxT

Tentativa de bifurcación ante la terrible Cualquier camino conduce a la inevita-


amenaza blanca P4A. ble derrota. El negro escoge el cambio de
una de las Torres, con lo cual se hace más
AxA 16 DxA evidente la debilidad de su P4D.
D xPA 17
PA x T 22 T3R
La ventaja material constituye la lógica TIA 23 P3AD
derivación de la superioridad posicional. P5D! 24 AbaDdoDaD.
El conservar esta superioridad el blanco,
junto a la ventaja conseguida, permite No existía defensa acertada para el Peón,
decidir el resultado de la lucha en pocas ante la eventual amenaza latente de mate
jugadas. en la octava lfnea horizontal.

TORNEO DE KARLSBAD
1911

APERTURA RUY LOPEZ y más en consonancia con los preceptos


DEFENSA MORPHY estratégicos y tácticos que rige la escuela
moderna.
BLANCAS: I.eonhardt
NEGRAS: Rubinstein 5 AlR
6 P4CD!
P4R 1 P4R
C3AR 1 C3AD Lo más fuerte, ya que pone en tela de
ASC 3 P3TD juicio la corrección de la quinta movida
A4T 4 C3A blanca.
C3A 5 Si, por el contrario, se juega 6.... , P3D;
7. A x C + 1(7. D4D, P4CD!; 8. P x P,
Jugada predilecta del maestro alemán, P x P, con partida igual), P x A; 8. P4D,
conductor de las blancas en la presente P x P; 9. D x P, con el blanco tiene me-
partida. Tiene el inconveniente de cortar la jor juego.
retirada al Alfil, obligándole a efectuar un
cambio por el Caballo enemigo, nada fa- AJC 7 P3D
vorable. Se considera más elástica s. O---{), P4TD 8
131
Un grave error habrfa sido intentar en- También son factibles lO....• TICD
trar. mediante 8. P4D. en la variante anali- o~.
zada en la nota anterior. a causa de 8....•
C x PI. ganando un Peón. que no se puede TIR 11 C3A
recuperar ante la segura pérdida de pieza. PxP 12
sin evidente compensaci6n.
8 P5C Más prometedora que esta medida recu-
peradora, era 12. C x A. C xC; 1l
Si el negro lleva la Torre a 1. CD. el PST l. con más posibilidades.
blanco obtiene para su Torre las perspecti-
vas de un lisonjero porvenir a causa de la 12 PxP
apertura de la columna de ID con la pa- CxP 13 C x.C5R
sible eventualidad de una entrada de flanco TxC 14 CxC
en el dispositivo negro. AxC 15 ~!
A4AR 16 P3AD
9 T x Al 17

Forzada para evitar la pérdida del PCD.

17 OxT
A6D 18 03A
AxT 19 TxA
A4R 20 TlD

"Superior y más agresiva que 9. C2R.


9 CxP
Cruce de caminos. Varias lineas a elegir
··tiene el negro en este momento. claro expo-
nente de las posibilidades estratégicas que
la posici6n les brinda: 9....• TICD. O~. Serena expectativa. La ganancia de ma-
C4T. y la del texto; de todas ellas seconsi- terial. especialmente en el caso mínimo de
deran las dos últrnfus como las que les un Peón. resulta demasiado arriesgada, ..
ofrecen más posibilidades. siendo más se- no va precedida por una ventaja de posi--
gura de las dos la primera. ya que la última ci6n. por ligera que sea. Por esta razón. ID
requiere un perfecto conocimiento de todo negras. antes de lanzarse a la captura de la
un intrincado laberinto de variantes. que pieza. se apresta a dominar las columnll
exigen un especial cuidado. centrales.

P40 10 AlC 21

112
El maestro alemán no encuentra mejor
recurso salvador que la artficiosa maniobra
iniciada con la jugada del texto. Desde
luego, es dificil aconsejarle un plan más
prometedor.

21 P3C
D5T n T7D!
Las negras, mediante la sucesi6n de va-
rios movimientos enérgicos y efectivos, se
van a hacer dueñas del tablero.

D6C 13 DxP
TIAR 14 D5D!

Como la precisi6n no está en pugna con


la sencillez, Rubinstein no vacila en ofrecer (Posici6n después de 32. T1AD)
cambios que sabe van a redundar en propio
beneficio. Al apoderarse de la séptima linea hori-
zontal, la resistencia blanca toca a su fin.
DxA DxA La perfecta cooperaci6n del Pe6n pasado,
D x PT T xPAD como factor decisivo, infiuye grandemente
en el desenlace.
A considerar era en este momento, 26.
... , D x PA; pero la del texto es más elás- D x PA 33 P6C
tica, ya que mantiene a la Dama en una RlC 34 TxP
posici6n central bastante dominante. D3A 35 DxD
TxD 36 T4C
D6C 27 P4AD
PST 21 D3R El resto es cuesti6n técnica.
OSC 19
TIA 37 P7C
El cambio de Damas habría precipitado TICD 38 RJA
el final de la lucha. RJA 39 R4R
RJR 40 T6C+
19 D3D
Muy importante para asegurar la pe-
Para contestar a 30. P6T, con 30. netraci6n del Rey negro entre la formaci6n
TIT, ganando el Pe6n. de Peones blancos.

~IR 30 T7T RlD 41 R5R


P3C 31 RlC P4A 42 R6A
TIAD 32 RlA 43 nc
Abandooan 44
En dificil situaci6n, la jugada del texto
no resuelve ningún problema. El juicio certero y exacto de Akiba
Rubinstein se ha impuesto limpiamente
32 D7D! desde los primeros momentos.

133
TORNEO DE SAN SEBASTIAN
1912

DEFENSA FRANCESA En la partida antes citada, Spielmann


jugó 11. D3A, que parece más agresiva
BLANCAS: Schlechler que la del texto.
NEGRAS: Rubinstein
11 AxA
P4R 1 PlR
CxA 12 D4D!
P4D 2 P4D Vuelve el equilibrio material.
C03A 3 CRJA
ASC 4 PxP C5R 13 D x PC
D3A 14 DxD
Variación de la francesa muy practicada CxD 15 TlAO
por Rubinstein para salir de las lmeas usua-
les de esta defensa. El repetido empleo de
esta lmea de juego por parte del maestro
le ha hecho un verdadero especialista de
ella.

CxP 5 COlO
CJAR 6 AlR
CxC+ 7 CxC
AJD 8 PlCO

Dándole una eficaz salida al AD desde


su reducto en <dianchetto».
Esta lfnea la jugó con anterioridad en el
Torneo de San Sebastián del año anterior,
teniendo por adversario a Spielmann.
No es muy recomendable por los si-
guientes motivos: deja gran espacio central
bajo el control adversario, y, por otra
parte, debilita el flanco de Dama. Actual- 0-0-0 16
mente se emplea poco.
No es mala colocación, la que da el
blanco a su Rey, mediante el enroque
9
largo; es el sector desde donde pued6
hacer más efectiva su mayorla de Peones
Fuerte posición central para el Caballo. y, como es sabido, es de gran importancit
la presencia del monarca en el final da
9 AlC partida. Las negras, indiscutiblemente, •
ASC+ 10 PlA! encuentran mejor para esta fase del com-
AxP+ 11 bate: primero, colocación más homopn.
134
de sus peones en peñecta ligazón, y se- 14 P4TR
gundo, mejores horizontes para la acción 1'3A 2S
de sus Torres. Toda esta ventaja, muy
justa. para inclinar la balanza decisiva-
mente de un lado; en otro jugador (excep-
ción hecha de varios campeones del mundo)
que no hubiese sido el gran polaco, habría
resul tado de ÍD)l)osible realización práctica.
Rubinstein, sin embargo, nos va a dar un
verdadero curso de cómo se juega esta
clase de finales. ¡No desperdiciemos esta
bella lección!
16 C4D
AxA 17 RxA
En dos movimientos, las negras han
efectuado un cambio, a todas luces venta-
joso: han avanzado el Rey, poniendo en
comunicación a las Torres y han situado
favorablemente a su Caballo, controlando
débiles escaques del terreno contrario.
RIC 18 TRlD Abriendo nuevas vfas de acceso al débil
TRIC 19 P3C lado real enemigo, que facilitará la eficaz
CSR 20 CSC! entrada de las dos Torres y el Rey.
Jugada de gran profundidad. Su idea PxP 26 TxP
principal se basa en obligar al blanco a 1'3R 27 TxT
efectuar el avance del PAD, para con ello PxT lB T3R
interrumpir la vfa libre horizontal de atrac- TIR 29 T3AR
tiva utilidad para las Torres. Rubinstein va na 30 RlR
cincelando su obra en el molde anchuroso R2A 31 . R4R
de su inspiración. Esta es la verdadera P4A 32
característica del genio.
P3AD 21 CJA
CxC+ n
No parece el cambio de Caballos la re-
ceta más indicada para el blanco en la pre-
sente ~ición. Las Torres negras, debido
a la volyntaria ausencia del Caballo adver-
sario, van a tener más libertad accional,
principalmente por las casillas centrales.
n TxC
1'3D 23 T4D
T3T! 14
Buena jugada. Su idea es similar a la que
arrastró a efectuar a las negras su jugada
20: restringir la libre circulación de las
Torres contrarias. En la respuesta, como
es lógico, no hay elección. (Posició,! despuis de 34. RJA)
135
Intentando valorizar la mayoría de PSA 35 P5T
Peones existentes en el flanco de Dama; no
obstante, la posición más activa de las Es curioso el contraste evidente resaltad(J
piezas negras va a representar un impor- en este final, de espacio accional entre la
tante papel en el transcurso de este último dos Torres, pues mientras la blanca esti
acto de la lucha. reducida a un papel netamente defensivo,
su contraria, instalada en diferente atalaya,
31 R5R domina todos los sectores eficaces del
P4C 33 P4CR tablero: en el aspecto ofensivo y en el
RJA 34 defensivo.
34 P5CI
Es de notar la suma corrección con que TICR 36 T3C
ambos contendientes intentan llevar a cabo R4A 37 P6C
sus respectivos planes. El menor desliz en PTxP 38 PT x P
el bando fuerte (el negro) puede acarrearle, RSC 39 PxP
no sólo el empate, sino hasta posiblemente P x P 40 R6A
la derrota, y en el débil (blanco) hacer in- TIC 41 P3T+!
mediata su aún problemática derrota. La
extraordinaria precisión de Rubinstein su- Rinden.
pera todo elogio. ¡Un maravilloso final!

TORNEO DE VARSOVIA
1907

APERTURA go 4. ... ASC, que da más incertidumbre


DE LOS CUATRO CABALLOS al combate.
BLANCAS: Belsitzmann A4AD 5
NEGRAS: Rubinstein
El blanco obtendría fácilmente una posi-
P4R 1 P4R ción de tablas, mediante S. C x C, P x C;
CJAR 1 CJAD 6. PSR!, P x C; 7. P x C, D x P! 8.
CJA 3 CJA PD x P, D4R +, A4A o, finalmente,
ASC 4 CSDI A2R; 9. 0----0, y no se ve procedimiento
lógico para obtener ventaja de posición
Esta jugada descubierta por el gran por ningún lado.
maestro polaco y que goza de su preferen-
cia, forma parte de un interesante sistema 5 A4AI
para derrocar el <<Doble Ruy López». Su
eficacia se encuentra peñectamente demos- Esta es la linea más prometedora. El
trada, aunque deja al blanco la posibilidad sacrificio de Peón da al segundo jugador
de llevar la lucha por terrenos forzados a grandes posibilidades, debido a su mejor
una posición de claras tablas. Este es el desarrollo.
motivo por el cual, el estilo hipermodemo
hace retomar a la antigua linea de jue- C x P 6

136
Si las blancas rehusan el Peón ofrecido ventaja posicional. Esta partida constituye
mediante 6. P3D, su adversario dispondrfa un bello ejemplo.
de un juego lleno de recursos con 6.... ,
P4D; 7. C x P, C x C; 8. A x C, ASC; 10 P4CD!
9. A x P + !, R1A; 10. P3AD, C x C +;
11. P x C, A6T; 12. A3C, DST; 13. D2R, Magnifica jugada de diversión y des-
A7C; 14. Tl~R, D x P, etc. arrollo.
6 D1R! A3C 11
C3D 7
Menos mala era posiblemente 11. TlR,
aunque de todos modos no exista remedio
eficaz Pilla la causa blanca.
11 AlC
CIR 12 D5T!
Al verse obligado el primer jugador a
avanzar el Peón de Caballo, se valoriza en
forma alarmante el AD adversario, que
pasa a tomar un papel principal en la
batalla que se avecina. 13. P3TR, habría
sido contestada con P4CR, P4TR y PST,
consiguiendo las negras un ataque irre-
sistible.
P3C 13 D6T
PlAD 14

Algo mejor es 7. C3AR, aunque en am-


bos casos el negro tiene buena partida me-
diante 7.... , P4D!; 8. A x P, ASCR!;
9. P3D, P3A; 10. A3D, CID, e~mo
ocurrió en Vilna, 1912, partida Bernstein-
Rubinstein.
7 P4D!
CxP 8
Un poco mejor habría sido 8. A x P.
Las negras, no obstante, disponen con 8.
... , C x A; 9. C x C, D x P; 10. C3R,
A3D, de continuación satisfactoria (Nim-
wwitsch-A1ekhine, San Petersburgo, 1914).

8 DxP+
C3R 9 A3D Esta valiente avanzada negra da la ini-
~ 10 ciativa a sus colores. Cualquiera que sea
la movida blanca, no le permite asumir las
La posición ya es muy dificil. Las blan- riendas del combate.
cas disponen de pocos movimientos para 14. P3D, otra jugada posible, no habría
elegir. El extraordinario genio polaco va constituido tampoco el remedio deseado.
a hacer una demostración de la precisión
y suma energía con que saca partido a su 14 P4TR!!
137
La resultante de esta neta superioridad Hermosa entrega de Dama que remata
es el ataque vehemente y decidido. El blo- brillantemente la partida. Las jugadas
queo es absoluto. blancas son evidentemente forzadas.

PxC 15 P5T1 RxD 17 PxP+


RIC 18 TIT,mate.
Si el negro lleva su Caballo a SC, su con-
trincante posiblemente se habría salvado, La acción ofensiva negra ha sido condu-
mediante C x C, D2RT + Y P4AR. La cida en forma impecable, llevando a su
ruptura que anuncia la jugada del texto es contrincante a la rápida derrota sufrida.
de consecuencia vertical y rápida. Una vez más se nos manifiesta el gran
maestro polaco, Akiba Rubinstein, como
D1R? 16 un jugador extraordinario dotado de ex-
quisita sensibilidad, que le permite captar
No previendo la combinaci6n final. En con gran facilidad todos los factores ac-
todos los casos, la victoria negra era cues- tivos y pasivos de la posición, sabiendo,
tión de pocas jugadas. en todo momento, escoger el mejor camino
a seguir. Su estilo constituye la quinta-
16 DxPT+1I esencia de la escuela posicional.

TORNEO DE SAN PETERSBURGO


1909

GAMBITO DE LA DAMA, Lo más sólido.


ACEPTADO EN TERCERA JUGADA
6 C3AR
BLANCAS: Speijer AxP 7 C3A
NEGRAS: Rubinstein 0--0 8
P4D 1 P4D
P4AD 1 P3R
C3AD 3 PxP
Rubinstein gusta de hacer entrar a sus
adversarios por terrenos diflciles e in-
explorados. La jugada del texto se debe
a Steinitz, aunque con la importante me-
jora de Rubinstein, consistente en la inter-
posición de las siguientes jugadas.

C3A 4 P3TD
P4TD 5
Para impedir el apoyo del Peón débil.

5 P4AD
P3R 6 8 OlA? I

138
Esta jugada es bastante aventurada. La presente; pero no se contenta con recha-
principal idea es incitar al avance del PD zar la oferta. sino que busca y halla. con
blanco. con lo cual el negro tendría, a la su sagacidad acostumbrada. el punto vul-
larga. superioridad en el final por la ma- nerable del proyecto blanco.
yoría de Peones en el ala de Dama; sin
embargo. el blanco obtiene numerosos AlA 16
recursos de ataque con la posible conti-
nuación: 9t PSD. P x P; 10. C x p.
C x C; 11. D x C. CSC; 12. DST con
molesta posición para las negras en el
ala de Rey. No obstante. la considera-
ción que impone la lucha contra un maes-
tro del prestigio de Rubinstein. impulsó
a Speijer a jugar prudentemente ...
D2R 9 AlR
AlD 10
No es ésta la mejor casilla para el Alfil.
debido principalmente a que interrumpe la
buena acción del blanco al situar su Torre
en ID. jugada mucho más lógica.
10 ~
TD1A 11 TlD
AlD 12 P x P 16 C x PI!
PxP 13 AlD
¡La gran sorpresa! Se ha descubierto el
Ahora es el negro el que sitúa su Alfil talón de Aquiles de la combinación ene-
en la casilla, criticada anteriormente. para miga. Resulta digno de resaltar el extra-
su adversario. Sin embargo, el caso es ( ordinario temperamento ajedrecístico del
bien diferente; el negro no puede dar maestro polaco. demostrado una vez más
salida por A2C a su referida pieza, debido en la presente partida. Su maravillosa
al hecho de haber tenido que debilitar elasticidad de juicio le ha permitido
peligrosamente el escaque de 3AD. al encontrar la refutación del intento ene-
avanzar su PCD. y sería arriesgado evi- migo en su misma esencia. Si el blanco
dentemente ante el peligroso «tete a tete» toma el Caballo. pierde evidentemen~e
que tendría que sostener la Dama con la calidad y Pebn.
Torre enemiga; por otra parte. debilitaba
extraordinariamente el PTD que se en- exe+ 17 Ax e
contrarla prematuramente localizado por
las piezas blancas. Unica.
C4R 14 TD1A D4R 18
~I? 15 El blanco entra en su combinación
Una celada muy astuta. original. pero el negro ...
15 A1R! 18 C4A
Si el negro toma el Peón Dama pierde ... se salva; mas el blanco insiste ...
rápidamente de la siguiente forma: 16. P4CR 19
C x C +. A x C (16. . ... P x C; 17.
D4C + !); 17. D4P. C7R + (17. . ..• ... muy fuertemente. Parece obtener
D x C; 18. D x P +. RIA; 19. A4C +); ventaja definitiva; sin embargo. Rubinstein
18. R1T!. C x T; 19. D x P +. etc. revela haber previsto la combinación en
Rubinstein. por lo tanto. no acepta el sus más mlnimos detalles. con•..
139
19 A x CI T3R 17 TSD+
DxA 10 TIR 28 TlD
P4A 19
20. A x A no era factible. a causa de
20....• D x T!; 21. T x D. T x T +; Para dar un respiro al Rey, y no expo-
22. R2C (22. AlA. T(lD)8D gana fácil- nerse a morir de prematura asfixia. En
mente con 23. D2R. C5T; 24. A3C (si 24. realidad, es dificil recomendar un plan al
P4A, igualmente mala. T x A +; 25. blanco, que pueda dar algunas probabili-
D x T. C6AP; 26. R juega. T x D +. dades de éxito. La jugada del texto debilita
etcétera). T x A +; 25. D x T. C6A +. el Peón al desplazarlo de su base.
etcétera). A3A. y por otro lado. si 20.
P x C. A x P, seguido de A3A. 19 R2A
10 TxA RlA 30 A5R
DxD 11 TxD
PxC 11 Muy importante, ya que estrecha el es-
pacio blanco.
TlR 31 P4CR
TlD 31 A4D
Siempre impidiendo el cambio que darla
bastantes probabilidades de salvación a las
blancas.
R3C 33 RlR
TlR+ 34 A5R
TlD 35 TlC
PxP 36 TxP+
R4A 37 T5C+
RlR 38 T5T
TlAR 39 A4D
A4D 40 T5R+
RlD 41

11 P xP
Ganando un segundo Peón. Al dismi-
nuir la tensión del combate, por el forzado
cambio realizado, ha derivado el juego en
un final de cierta dificultad práctica,
a causa de los Alfiles de color düerente.
Rubinstein va a vencer las dificultades
técnicas que originan los finales de esta
índole, maniobrando con su mejor estilo.
P5T1 13 P3A
TRlD 14 T(lA)lD
TxT 15 TxT
TIR 16 AlA
Se ha producido el cambio de una
Torre. El bando fuerte debe impedir el
cambio de la otra. si no es a trueque de
obtener una evidente compensación. 41 AJA!
140
El negro sigue rechazando al Monarca RJA 46 A7RI
enemigo del sector donde tiene aquél ven- TlC 47 P6A
taja, para evitar la posible obstrucción T7C 48 A4C
conjugada por R, T Y A. Una vez alejado TlC 49
el Rey blanco, en combinación con sus 49 TSA+
restantes piezas, harán efectiva su ventaja RlD 50 R5R
material. Su f9&lizaci6n por parte de A6C 51 TxP
Rubinstein no pasa de ser una nueva TlT 51 T7C+
ellhibici6n de su maravillosa técnica de RJA 53 P7A
finales. TlR+ 54 RSA
T6R 55 R4A!
P4C 41 A4C+ Abandonan. 56
RJA 43 PSA
ASA 44 R4A ¡Un verdadero capítulo en el final de
R2D 45 P4T Alfiles de distinto color!

141
VI
PSICOLOGISMO

LASKER

De todos los grandes maestros que mar- y aunque algún maestro al>untó irónica-
charon por las sendas descubiertas por mente que «el verdadero secreto psico-
Steinitz, fue Lasker el que más lejos llegó lógico de Lasker consistía en profundizar
y el que, asimilando las ideas posicionales, una jugada más que su rival», es lo cierto
supo revestir sus actuaciones de un sello que tales argumentos se hallan revestidos
personal tan luminoso y distintivo, que de una lógica extremadamente real y raza-
puede decirse constituyó a su vez un nable. En efecto, Lasker afirmaba que su
nuevo sistema. Un sistema que no se puede preocupación principal cuando se apres-
precisar en reglas ni en teorías, porque taba a la lucha, consistia en el previo
escapa al carácter tangible de la ciencia conocimiento de sus rivales; estudiaba sus
y del estudio. Un sistema, por tanto, que partidas y sacaba en consecuencia cuáles
no puede crear escuela, porque cada adicto eran sus gustos, cuál era el estilo y cuáles
que esa escuela tuviese necesitarla ser un eran sus preferencias en aperturas y en
gran maestro de las dotes del mismo determinadas lineas de juego. No le era
Lasker; un gran maestro que se formase dificil de esta forma descubrir la táctica
a sí mismo sin la ayuda que el sistema que desde el punto de vista psicológico
pudiera proporcionarle. resultaba desagradable a su enemigo.
Lasker era no sólo un ajedrecista, sino Es evidente que no por un mero capricho
un profundo pensador, un verdadero filó- nos hallamos inclinados a elegir sobre otras
sofo. Cultivó en sus partidas un aspecto una apertura determinada. Por ejemplo,
importantísimo de la lucha: la considera- si tenemos especial preferencia en una
ción del enemigo como entidad tempera- defensa bien estudiada por nosotros y a la
mental. Es decir, que el tablero no podía que asignamos excelentes cualidades de
ser considerado aisladamente, sino en ín- seguridad y solidez, nos agradará más usar
tima conjunción con el ajedrecista. En de ella que n9 el que contra nosotros la
otras palabras, había que aunar las deduc- empleen, pueSto que si tan sólido nos pare-
ciones analíticas de la posición y del ce que no hallamos procedimiento eficaz
estado material de la lucha con el mo- de atacarla, el papel de atacar lo que tanto
mento psicológico del conductor de las estimamos, creará en nuestro ente psicoló-
piezas enemigas. gir ~ un complejo de inferioridad.
Los argumentos de Lasker en este Lasker se esforzaba en este forcejeo
aspecto temperamental de la lucha son, temperamental hasta el punto de que
sin duda alguna, bien convincentes, subordinaba al mismo en determinadas
143
ocasiones el estado «material» del com- jugadas. Y esta es la razón por la que,
bate. Si para llegar a una <<agresión» de como 4l principio hemos expuesto, no ea
este tipo psicológico habia de exponer su posible que el sistema de Lasker halle
ejército en una aventura analíticamente sucesión ni establezca escuela. Los postu-
desfavorable, no dudaba en hacerlo así en lados que la rigen son de índole tan perso-
la seguridad de que la presión del disgusto nal que sólo a temperamentos como el suyo
y. la contrariedad del adversario no le y a hombres de igual constitución filo-
~drian en situación de considerar el sófica seria dable observar en el tablero
caso con la frialdad y la serenidad precisa, una conducta parecida.
abocándole, en definitiva, al desastre. Como es sabido, Lasker fue campeón
Este fue el secreto de numerosísimos del mundo largos años, hasta ser vencido
sorprendentes triunfos de Lasker, a quien por Capablanca, y de él se conservan
no era raro observar cómo desde una notat>i1ísimas producciones, de las que
situación comprometida pasaba a una vamos a ofrecer al entusiasta lector algu-
posición de decisiva ventaja en sólo unas nas poco conocidas.

TORNEO DE NUEVA YORK


1924

DEFENSA ALEKFUNE 3
BLANCAS: Maroczy-NEGRAS: Lasker Lo mejor.
P4R 1 C3AR 3 CRlD
Jugada introducida por quien dirige este Esta jugada no es la mejor, ya que per-
trabajo con verdadero éxito en la primera
vuelta del Torneo Internacional de Buda- mite al blanco efectuar la interesante línea
pest, 1921. Su esencia es de la más pura es- de sacrificio: 4. P6R!, sugerida por Mieses,
cuela hipermoderna: provocar el avance que la adoptó en Francfort, 1930, contra
central de Peones blancos para atacarlos el belga Edgar Colle; esta entrega de Peón
seguidamente. Maroczy, jugador seguro por restringe considerablemente las posibili-
excelencia, poco partidario del ataque (en dades de desarrollo del negro por bastante
tiempo. Más sólido para el segundo juga- .
el torneo de Hastings de 1930 hizo tablas
en sus nueve partidas), se ve invitado por dor es 3.... , PSD con grandes posibilidades
su adversario a tomar la ofensiva: primera de tablas.
manifestación psicológica del genial Lasker
P4D 4 P3R
C3AD 2 CD2R 5
Prudencia obliga: la posición va a deri-
var en una variante ligeramente desfavora- Esta postura incómoda de Caballo, que
ble para el blanco de la defensa francesa. gozó de bastante prestigio, no puede ser
el mejor camino a seguir, ya que entor-
2 P4D pecerá el libre desarrollo de las piezas
blancas. Más consecuente con el sistema
También se puede abocar en una elegido parece S. P4AR, fortificando, o S.
Apertura Vienesa, mediante 2. ..., P4R, D4C, adoptando un plan agresivo (Ata-
entrando, por lo tanto, en el juego abierto. que Gledhill).
144
5 P4AD A3T 11 AlO
P3AD 6 CJAD ~ 12 TIA
P4AR 7 AlR P4CR 13
C3AR 8 ~
P3CR 9 Vista la precaria posición de las piezas
blancas en el ala de Dama, este bando se
lanza a un ataque desesperado en el otro
flanco; pero el negro dispone ya de una
posición solidisima, que le permitirá re-
chazarlo con facilidad y terminar la lucha
en un rápido contraataque.
13 P3A
PxP 14 AxP
P5C 15
Las blancas, para proseguir la ofensiva
iniciada, se ven obligadas a debilitar más
la posición. Es realmente magistral el
proceso evolutivo del doctor Lasker para
hundir rápidamente la posición enemiga.
15 AlR
R1T 16 C5A
9 Pl\<P C3A 17 ASC

Lasker, con toda la imperturbabilidad Inmovilizando el PCD, 18. P3T, A4T;


que le adorna, inicia el ataque contra el 19. P4C, A3e, rechazarla al Alfil a una
centro blanco. La pasividad caracterlstica mejor casilla; atacando al PD, aislado,
de su adversario le concederá las mayores y crearla un mal endémico al blanco en las
facilidades y, por lo tanto, el resultado final tres primeras casillas de la columna
no va a causar extrañeza a nadie. El plan de AD.
a seguir por el blanco en la defensa fran-
cesa (a ella ha derivado), es el de atacar; OlR 18 T1R
sacar partido de su superioridad espacial. 030 19 CJO
Claro está, que este método sólo tiene apli-
cación, casi siempre, cuando las blancas
han conseguido instalar su Peón blo-
queador: el de SR. Sus chances, pues, están
en el centro y en el ala de Rey, mediante
acciones rápidas. En el momento que el
negro consigue paralizar el ataque, su
mejor y más sólida configuración de Peo-
nes suele imponerse, en la gran mayoría
de los casos, al proceder a la mina del
centro blanco (como ocurrió en la partida
Mac Donnell-Labourdonnais, jugada en
Londres, match disputado en 1834, y que
figura en otro lugar del presente libro).
PxP 10 CJC
El negro va atacando los puntos débiles
de su adversario. P5A?! 10
145
10
La paciencia se acaba ante la t6cnica posición del blanco se arruina por IDO-
desconc:ertante de Lasker. que amenazaba mentos.
20•...• P4RI. apoderándose decididamente
de la iniciativa y vulnerando el desman- C4A 23 T5R
telado centro blanco lleno de ag¡úeros. D3C+ 24
Quizá 20. CSR babrfa sido menos regla
aniesgada. Lasker se sacude de la última tentativa
blanca, en forma harto convincente.
20 CxP
CxP 21 AlD! 24 RIT
C4T 25 CxP
Lasker va a hacer pagar cara la osadía ¡Pompeya se hunde ante la furia desata-
de su adversario. al lanzarse a una es- da por los elementos! El armamento de
pectacular combinación, aunque manifi~ grueso calibre negro comienza a diriair
tamente incorrecta en sus consecuenCJaS sus tiros en la posición real enemiga. El
estratégicas. Las blancas abren a su adver- resto de la partida constituye una pequela
sario una espléndida diagonal para el AD. demostración de la energía potencial del
que comienza en 3. AD. Y concluye en la gran Lasker. al destruir la posición ene-
vida del Rey blanco. miga en varias jugadas.
AxC 22 PxA D3TR 26 TIA!
P6C 27 AlA
Un auténtico enjambre de vías abiertas C3A 28 P3T
se ofrecen a la voracidad del negro. La cm 29
La última tentativa.

29 CxC
AxP 30
Este Alfil. reducido durante todo el como
bate a una inactividad verdaderamente
obstinada, sale de su forzado tedio. par&
efectuar su primera jugada de desarrollo.
Intenta ser inmovilizado. para redimir sa
anterior proceder y salvar la partida. Coa
toda la serenidad que el caso requienr.
Lasker para el golpe...

30 TSTR!
•.. y al mismo tiempo obliga a su rival
a rendir sus armas. cesando el desigual
(Posid6n desPuéll de 25••••• e x P) combate.

146
TORNEO DE NUEVA YORK
1924

DEFENSA FRANCESA realidad, no es sólo un error, como vere-


mos más a,delante, sino un plan precon-
VARIANTE MAC CUTCHCON cebido de poca consistencia.

CxP 8 P4AR
BLANCAS: Lasker - NEGRAS: Reti
P4R 1 P3R
P4D 2 P4D
CJAD 3 CJAR

Comparte la preferencia de los maestros


con 3.... , ASC.
ASC 4 ASC

Esta jugada fue introducida en la prác-


tica de los torneos por el americano
Mac Cutchcon. Aunque se emplea poco,
en la actualidad se considera suficiente para
dar al negro una cómoda igualdad.
ClR 5
Esta jugada ha sido recomendada por CD3A 9
Maroczy. Parece haber sido demostrado
que el negro tiene, a su alcance, recursos Las negras, que intentan tomar la ini-
sobrados para igualar el juego. ciativa a toda costa, aunque sea a trueque
de establecer un calamitoso flanco de
5 PxP Peones en el ala de Rey, se van a encontrar
P3TD 6 AmI con una resistencia a complacer sus deseos,
AxC 7 PxA digna del gran maestro alemán.
Lasker ya había pensado en ello. El
espíritu inquieto y renovador de Reti tenía 9 A2D
que salirse de las lineas conocidas, y, como D2D 10 A3D
hay momentos de las defensas, en las que 0-0--0 11 D2R
hay que proceder con extraordinaria jus- CJC 12 D5T
teza, esta toma de pieza, doblando hacia DlRI 13
dentro, no podemos considerarla lo mejor.
Claro que es difícil sacar partido a una PreparanruLel ataque contra el débil
falta, realmente imperceptible. Pero, en grupo de Peones 2AR, 3R, 4R.
147
13 C3A
C x PI 14 DSA+
C3R 15 CxP
P3CR 16 D4R
AlC 17 C3A
La espléndida combinación iniciada por
Lasker en su jugada catorce ha surtido
sus efectos, en favor del emplazamiento
de su AR, que él solo desarrolla una acción
bastante más promisoria que la pareja
adversaria.
P4A 18 mc
C5C 19
Interesante era el sacrificio 19. CSA,
A x'P +; 20. P x A, D x A; 21. TRIC,
con ataque.
19 C).t....G
No es posible 24. . .. ,' P x P, a causa
CxA 20 PxC de 2S. C x P, con ataque irresistible. El
TxP 11 ámbito activo del negro es bastante es-
trecho.
14 P4R
P6A 15 DlA
C5A 16
El ataque blanco sale solo, pese a los
desesperados intentos de Reti, que nada
en un mar proceloso, esperando el momen-
to de ser pasto de los tiburones.
16 RIT
DSC 17 nA
AxC 18 TxA
J:'8D 19 T(3A)lA
No existe nada satisfactorio, y habia que
parar la eventual amenaza de T x A,
Las blancas han obtenido ya una posi- seguida de mate.
ción estratégicamente ganada, respaldada
por su Peón de más y mejor configuración D7C+ 1 30 DxD
de Peones. PxD+ 31 RIC
C7R+ 31 AbaDdODaD.
11 TRlD
D1D 11 AIR ¡Una magnifica producción del doctor
TlD 13 TRIA Lasker!

148
TORNEO DE SAN PETERSBURGO
1914

DEFENSA TARRASCH (p. l.) DEL grandes figuras, desde hace medio siglo,
GAMBITO DE LA DAMA se han encargado de crearlo, mejorarlo
y defenderlo en la práctica incesante de
BLANCAS: Em. Lasker los torneos. Schlechter, Rubinstein y Reti
NEGRAS: Tarrascb han sido sus más calurosos defensores.
P4D 1 P4D PxP 8 AxP
P4AD 1 P4AD CD1D 9
Tarrasch, el impetuoso maestro ale- Superior en este momento, a la salida
mán, gusta de apoderarse rápidamente de natural, C3AD, porque prepara el bloqueo
la iniciativa, y lleva a cabo el movimiento del PD aislado.
del texto, sugerido por el italiano Pon- 9 P5D
ziani. Es frecuente, en la mayorfa de los
casos, que al producirse cambios en las Para quitar al blanco la importante
posiciones simétricas, se prodUClO una casilla refugio de 4D.
destacada ventaja para el primer jugador,
debida, naturalmente, al tiempo de más. C3C 10 A3C
D3DI 11
CJAR 3
Muy importante. De lo contrario,
No debe ser esta la mejor jugada para A4AR darla más elasticidad al Peón débil.
refutar la segunda movida negra; más 16- 11 A3R
gica parece PA x P, por el motivo antes TlD 12 AxC
indicado.
3 P3R
Tarrasch entra en su defensa favorita
del gambito de Dama rehusado.
PA x P 4
Su compatriota no ha tenido miedo en
la elección de apertura, debido a cono-
cerla peñectamente, como nos lo va a de-
mostrar en forma harto convincente.
4 PR x P
P3CR 5 CJAD
AlC 6 CJA
0-0 7 AlR
Las blancas han escogido el método más
acreditado para combatir el sistema de
juego adoptado por su oponente. Tres DxA 13
149
Lasker tiene de su parte decisivas ven- 18 PxP
tajas: pareja de Alfiles en posición abierta; TDlAl 19 TRlD
Peón aislado contrario, y, psicológica- C4T 20
mente, el trecho tácito de haber anulado
cualquier tentativa enemiga conducente Lasker especula sobre las dos piezas
a apoderarse de la iniciativa. Vamos a sa- negras <<en el aire»: A y CD.
borear, una vez más, la exquisita elegancia
y genial precisión con que va a hacer
efectivas sus pequeñas ventajas tácticas 20 AJC
y estratégicas. CSA 21 D4R
AxC 22 DxA
13 D2R
cm 23 DxP
A2D 14 0--0 CxT 24 TxC
P4TDI 15
Este avance de Peón persigue, como
principal objetivo, valorizar al encapillado
Alfil blanco, destruyendo sus últimos
obstáculos CD y PCD.

15 CSR
La toma del PR blanco por Dama habría
sido, evidentemente, suicida; pero la juga-
da del texto no resuelve nada, ya que
permite al blanco llevar a feliz término su
primitivo plan.

A1R 16 TD1A
PST 17 A4A

La peñecta sincronización evolutiva de


los factores estratégicos ha derivado ea
superioridad material. La única compen-
sación con que cuenta el negro es el PD
libre. Pero son suficientes las ventajas ob-
tenidas por el blanco para que el insigDII
doctor Lasker extraiga de ellas los ele-
mentos necesarios para lograr un merecido
triunfo. Prestemos atención a su refinada
técnica con la que matiza el remate de esta
bella producción.

DSD 2S D3R
D3A 26 P3TR
A2D 27 C4R
TxT+ 28 DxT
P6T1 18
Al verificarse el cambio de la única.
Punto culminante del preludio opera- Torre, puede darse por concluida la lucha,
tivo. Las negras van a derivar a una posi- al perder un eficaz colaborador del PD
ción estratégicamente perdida. pasado.
150
D4R 19 cm PxP CxP
TIAD 30 DlA
AxP 31
La posici6n negra se desmorona por
momentos. Si ahora 31. ...• P x A. sigue
32. DAC +
31 C4A
D4C 32 P4A
D6C 33 DlA
Casi forzada ante la gravfsima amenaza
34. TIR, seguida, eventualmente. de TSR.
ganando instantáneamente.

DxD+ 34 RxD
ASC 35 C6D
TIC 36 R3R
P3C 37 R4D
P3A 38 P4T A6AI 43
... bonita jugada final. que acaba <<ipso
Tarrasch busca su única <<chance» en la
facto» con la resistencia enemiga.
protecci6n del Pe6n libre en su carrera
a Dama; pero. desgraciadamente para él. 43 R3R
Lasker está en todo. y le prepara una AxP 44 R2A
bonita contracombinaci6n final. que va A5R 45 C4A
a destruir sus últimas esperanzas de salva- TtD 46 Abaadonan.
ci6n.
El <<Viejo Lasker» nos ha demostrado
P4T 39 C4A en esta partida su extraordinario dominio
P5T 40 P6D de todas las fases de la lucha; desde la
RIA 41 P5T escuela psicol6gica. de la que es la figura
seiiera, el paladín por excelencia. hasta el
Este avance va a llegar tarde a causa juego de posici6n, en el que, igualmente.
de ... ha brillado a gran altura.

MATCH JUGADO EN 1916

TERCERA PARTIDA ClA 3 ClA


A4A 4
PARTIDA DE LOS CUATRO
CABALLOS El desarrollo del Alfil a la casilla S. CD,
que constituye el doble Ruy López, parece
BLANCAS: Tarrasch-NEGRAS: Lasker mejor que la jugada del texto. a causa de la
respuesta que sigue.
P4R 1 P4R
ClAR 2 ClAD 4 CxP
151
Ha sido muy discutida esta toma de 10. D x p. que deja al blanco una superior-
Peón. El principal motivo se debe al hecho configuraci6n de Peones para el final.
de que el blanco parece lograr una posici6n
mucho más s6lida. de la que en principio 9 O-O!
se le atribuy6. Sin embargo. el negro ob-
tiene un juego muy libre. ¡Grave contrariedad para el doctor
Tarrasch! El negro asume bruscamente la.
CxC 5 direcci6n de la partida. Desde este mo-
mento. el nerviosismo se apodera del con-
Muy interesante resulta en este momento ductor de las piezas blancas.
el gambito Boden-Kieseritzky S. 10-0.
sacrificando un Peón y que da á las blancas A3R7 10
notables posibilidades de ataque. Una
linea bastante factible podría ser S. . ..• Sin prever la respuesta de su rival. 10.
C x C; 6. PD x C. P3A; 7. C4T. ClR. A x C, P x A; 11. 0-0. DST; 12. P3T.
para seguir con P4D. era menos malo.
5 P4D 10 D5T!
A3D 6 PxC
La energla de Lasker va a permitirle
Un plan sugestivo. pero de evidente establecer un violentfsimo ataque en pleno
riesgo. era 6. . .•• P4A?!; 7. CJA, PSR. principio de partida.
etcétera.
AxC 11 PxA
AxP 7 A3D P3C7 12
P4D 8 PxP
Nuevo y decisivo error. 12. DID, pre-
Algo mejor se considera 8•...• C x p. parando el enroque largo era, segura-
que evita el doblamiento de Peones sobre mente, mejor camino a seguir que el
la columna de AD. dictado por la jugada del texto. Las diago-
nales blancas, recién abiertas. van a cons-
C xP 9 tituir coladero por donde penetren las-
poderosas figuras negras.
12 D6T
D2R 13 P4AD
OC 14 ASC
DlA 15
Forzada.
15 D4T
cm 16 TRIR
Mientras las piezas negras adquir.ren.
por momentos, su mejor emplazamiento.
las que conduce Tarrach se entorpecen
entre sI, sin poder desarrollar una acción
realmente eficaz.
TICR 17 rolC
Esta jugada constituye una pérdida de
tiempo sin ninguna compensaci6n. Más Ocupando, sin cesar,lfneas abiertas para
efectiva se considera 9. A x C +. P x A; desarrollar una actividad más enérgica
152
C4A 18 Dirigiendo su mirada ambiciosa hacia
el mate.
CxA TxO
CxT

18 A4R!
Este importante Alfil se expone al
cambio por el Caballo. Las razones que No parece existir mejor camino para
pueden aducirse en defensa de esta jugada proseguir la resistencia, pero ..•
son varias: pero vamos a exponer el mo-
tivo fundamental: el Caballo blanco está 23 TxA+!!
desarrollando un papel mucho más im-
portante que el A, y, estimándolo asf, ••• se produce la gran sorpresa.
juegan las bIancas ...
AbandonaD. 24
P3Tk 19 AxPT
Ola 20 ASC No hay defensa ante el inevitable
030 21 TOlO desahucio.

CAMBRIDGE SPRINGS
1904

TORNEO DB MAESTROS

CONTRAATAQUE PBTROFF Analizada por los maestros rusos, en


especial Petroff, fueron, sin embargo, los
BLANCAS: Bm. Lasker norteamericanos PilIsbury y Marshall
NEGRAS: Teichmann quienes lo han defendido con más tena-
cidad ante el tablero. Su fundamento no
P4R 1 P4R parece lógico, ya que el blanco, como
C3AR 2 C3AR hemos dicho en otra ocasión análoga,
153
dispone siempre de la primera jugada; por pieza más Y le toca jugar. Lasker nos va
lo cual. estimamos que los contraataques a demostrar su implecable proceder al
simétricos no pueden dar al negro ninguna objeto de materializar una mínima ven-
ventaja al llegar siempre con un tiempo taja.
de menos.
C3A 9 AlD
C x P 3 O-O-~)! 10
Steinitz recomendaba 3. P4D. El mo- Bastante más enérgico que 10. 0-0.
vimiento del texto parece enteramente como jugó Capablanca contra Kostitch
correcto. en el match que tuvo lugar en La Habana,
1919. Efectuado el cambio de Damas. el
3 P3D enroque largo es. en general. ligeramente
C3AR 4 CxP superior al corto. debido a encontrarse sus
D1R! S piezas más hacia el centro del tablero.
Esta salida de Dama parece el método 10 C3A
más enérgico para combatir la linea de TRIR 11 0--0
juego escogida por el segundo jugador.
También se ha jugado 5. P4D. -recomen- Por el motivo antes indicado. parece
dada por Capablanca. pero que deja al más preciso el enroque largo.
negro las manos bastante libres para
actuar. P4D 11 CSCR

S D1R Ingenioso intento de equilibrar el juego


P3D 6 C3AR que va a ser rebatido con toda energía por
ASe I 7 el gran Lasker.
Esta enérgica salida de Al1il da al blanco AxA 13 CxA
la posibilidad de ganar un tiempo. ASCI 14
7 DxD+ Demostrando el dominio del tablero,
AxD 8 que. debido a la magistral técnica exhibida
por las blancas. acusa una evolución <<in
crescendo». La Torre va a penetrar en la

8 AlR
Han desaparecido las Damas del ta-
blero; pero el blanco tiene en juego una (Posición desplds de 19..... T1D)

154
séPtima línea horizontal con perniciosos
efectos para el enemigo.
14 Ax A
Totalmente forzada. para evitar la pér-
dida de pieza.
TxC 15 A3T
T xPAD 16 CxPA
TIR 17 TRlR
T(IR)7R 18 TxT
TxT 19 TlD
C5CR lO
El material disminuye y la ventaja
blanca aumenta. Después de una rabiosa
disputa de la columna de ReY. el negro se
ha visto obligado a abandonarla, dejando
al ejército enemigo y. particularmente. a su (Posición después de 26..... C4D)
Torre con una. amplia hegemonfa sobre
ci6n efectiva de las ventajas obtenidas. el
este sector del tablero. La potente actividad
desenlace de la partida se echa encima.
crucial de esta Torre y el PD negro aislado.
son factores de victoria, que se han podido 17 AlA
alcanzar. extrayendo el máximo jugo a su
pequeña ventaja inicial. No hay elecci6n posible.
lO esc CxP 18 AxT
P3TR! 11 CxT 19 CxP
PlT 30 C4D
Rechazando a los elementos enemigos cm! 31
infiltrados.
Mejor que tomar el Peón. lo que habria
11 CJA desplazado este Caballo. aunque s610
P4CD 11 A8A fuese circunstancialmente. al jugar el
T x PC 13 negro C2R.
La neta superioridad estratégica se ha 31 PlA
convertido en ventaja material. Teórica- C6R 31 A8A
mente. la partida ya está ganada. P4TR 33 A6T
13 TIT Para hacer entrar el Rey en juego.
P3C 14 A7C
T7R 15 TIAD C4A 34 CxC
CSCD! 16 PxC 3S RlA
R1D 36 R1R
Bonita jugada. Los elementos negros C4R 37
dispersos van a caer como brevas maduras;
su destino está dictado por la mano 37. CSA +. tomando el Pe6n. no habría
enérgica del doctor Lasker. sido correcta. debil;lo a la eventual res-
puesta A2D.
16 C4D
TlR! 17 37 RlR
P4A 38 AbancIonIUI.
La jugada decisiva. Al cambiar obligada-
mente. la única pieza activa. que pudiera Los Peones pasados son incontenibles.
entorpecer por más tiempo. la materializa- jUna bellisima partida de Lasker!

155
TORNEO DE MARISCH-OSTRAU
1923

DEFENSA SICILIANA El doctor Lasker, visto el juego pasivo


y medroso de su contrincante, se prepanl
BLANCAS: Wolf _ NEGRAS: Em. Lasker a tomar las riendas del combate.

P4R 1 P4AD AlR 9 CSD


C3AD 2
La expulsión lisa y llana de este CabalJ4.
Esta salida de Caballo, cuyo principal representarla al blanco la pérdida de variOl
objetivo es cerrar el centro, tiene poca tiempos.
aceptación actualmente, ya que deja al
negro una sólida posición, e incluso intere- RlT lO
santes planes en ambos flancos.
Para sostener el PT.
2 C3AD
P3CR 3 P3CR lO AlD
AlC 4 AlC DlD 11 TIA
CRlR 5 P3D CID 12 AlAD
CIC 13
La posición negra carece en absoluto
de dificultades, conservando una gran
solidez y mucha elasticidad. Podemos
decir, incluso, que presenta menos <<holes»
o casillas débiles que su adversario, cuyas
casillas blancas se entrecruzan a través del
fianchetto de Rey. Como caso general que
cuenta con bastantes excepciones, según
las diversas situaciones táctico-estratégi-
cas, no es recomendable efectuar el fian-
chetto en el ala por donde se abre el juego,
por los motivos que acabamos de exponer.

P3D 6 C3A
0-0 7 0-0
P3TR 8

Semiobligada medida de prudencia, que


constituye, en concreto, una manifiesta 13 P4D!
pérdida de tiempo.
Desde este momento el negro dirige 11
8 CIR lucha. Las múltiples evoluciones del en..
156
pÚgo le han permitido obtener una prome- El ataque negro es incesante, fndice fiel
tedora situación. de su neta superioridad.
P3AD 14 C3R CxC
C6T+ 20
AxC 21 P5T
El Caballo negro deja una buena posi- AxA n C x Al
ción, pero se sitOa en otra también exce-
lente, que le pet'Dlitirá trasladarse a cual-
quier sector del tablero, habiendo dejado Preparándose a reforzar la presión sobre
débil el PD blanco. el Peón d6bil de 3eR.

PxP 15 D4A

Entre retirar la Dama o cambiar el único Forzada.


orgullo de su posición, el Peón de 4R.
WoltT escoge, bien a su pesar, este último 13 PxP+
camino. DxP l4 P4RI
15 AxP La pérdida del Peón blanco ha dejado al
P3A 16 enemigo varias ventajas estratégicas: debi-
lidad de los Peones contiguos y agujerea-
Ya está el primer jugador dedicado a una miento en todo el conjunto de casillas
dificil táctica defensiva. negras que los rodea. La jugada del texto
va encaminada a fijar las referidas debili-
16 C3D dades.
C2A 17 C4A
C4C 18 RlT TRIR
TR1D
Defendiendo el Peón retrasado.

l6 D3AR
DlA 27 C3R
TID '1.8 alCI

18 D3DI

La posición blanca se encuentra des-


provista de flexibilidad accional, y se ve
forzada a realizar una engorrosa labor
pasiva.

19 P4TR (Posición despuis de 33. R1T)


157
Lasker maniobra con extraordinario in- CIC 32 DSA+
genio.. Aprovechando el desplazamiento RIT 33
de la Torre al ala de Dama, prepara una 33 A x PI!
rápida diversión de sus fuerzas hacia el ala
de Rey, actuando, consecuentemente, sobre Bello remate a esta espléndida partida
los Peones débiles. del extraordinario maestro alemán. La pre.
sencia de una serie de puntos débiles va.
RlT 29 TDID permitir a Lasker conjugar esta bella com-
binación final. Las defensas blancas saltam
Previene cualquier intento de ruptura en mil pedazos.
central.
AxA 34 CxP
P3T 30 TITR D3R 35 C4C+
TIR 31 C4C Abandooan.

El ataque negro comienza a adquirir La estrada de la Torre en la séptima fila


unas proporciones alarmantes. es de mortales consecuencias.

TORNEO DE ZURICH
1934

DEFENSA CARO-KAN Después de esta partida, ha sido consi-


derada enteramente insuficiente la salida
BLANCAS:E.Lasker de Alfil en la presente posición. Más corree..
NEGRAS: H. Müller ta parece 4.... , P3AR o ASC.
P4R 1 P3AD C3C 5 A3C
P4TR 6
Esta original defensa, propugnada por
los maestros berlineses Caro y Kan, cuen-
ta en la actualidad con un bien cimentado
prestigio. Se emplea en una proporción
análoga a la defensa francesa o siciliana.
Su idea generatriz radica en dar, desde el
primer momento, juego al AD negro, que
en el planteo francés queda circunstacial-
mente encerrado.
CD3A 2 P4D
C3A 3
Más práctico es 3. P4D, aunque el mo-
vimiento del texto es considerado entera-
mente correcto.
3 PxP
CxP 4 A4A (Posición después de 7.•.. , A2T)

158
Lasker, que llevaba bastantes aftos apar- PxP 17 PxP
tado del tablero, procede con una gran 'D7C 18 DSA
energía, propia de su época dorada. T4C 19 D3D
P3D 20 CDID
6 P3TR P3AD 21
C5R 7 AlT
D5T! 8
El blanco desentumece sus ateridos
Principio de una linda combinación, que miembros, poniéndolos en actitud propia
reporta a las blancas ganancia material. a la acción. En el momento que todas sus
fuerzas se encuentren en condiciones de
8 P3CR actuar, podrá hacer efectiva su ventaja
D3A 9 material.
Es muy conocida la celada 9. A4A, P3R;
10. D2R, C3A? ; 11. C x PA, etc. 21 C4A
D xPT 22 C4D
9 C3A
D3C! 10
Parecerá que la primera salida de Dama
a ST era totalmente inútil; no es asf. Con
ella se ha conseguido encerrar el Alfil
negro, retrasando, por lo tanto, su entrada
en acción, que, para verificarse, se tiene
que producir, debilitando, previamente,
los Peones del ala de Rey.
10 D4D
DxP 11 DxC+
AlR 12 D3D
Parando la amenaza de mate y planean-
do un improvisado cepo para la Dama
enemiga.

DxT 13 D2A Las negras creen tener en sus manos to-


dos los resortes de la iniciativa. La Dama
Siguiendo su primitiva ilusión, la que y ID se encuentran, aparentemente, en
empezó a abrigar al llevar la Dama, en su una lastimosa posición, y las otras tres
jugada diez, a 4D. Pero, ante el juego piezas, que se desenvuelven en un reducido
preciso de Lasker, va a quedar este pro- espacio, parecen privadas igualmente la
yecto reducido a agua de borrajas. cohesión accional necesaria para empren-
der un plan conjunto; pero ... enfrente no
P4T 14 AlC está el vencedor de tal o cual torneo, sino
TITD 15 el viejo Lasker, el glorioso Lasker, que a
pesar de los años transcurridos en volun-
Los fieles servidores de la Reina acuden tario retiro de las luchas del tablero, y re-
prestos a su defensa. cordando sus mejores tiempos, juega ...
15 0-0
TIC 16 P4C T x Al!

Visto el primer objetivo truncado, Müller Cuando el negro crefa haber vencido la
intenta ahora sacar partido del circunstan- crisis de la partida, se despierta a la luz
cial encierro de las piezas blancas. el cerebro privilegiado, cerebro del gran
159
maestro alemán, Y nos demuestra su prls- 27 P4A
tino error. La combinación, iniciada en la D4A 28 TlA
jugada del texto, está prevista en sus más D4T+ 29 TlT
mínimos detalles. Su fundamental razón TxA+ 30
de ser radica en la indefensión en que se
encuentra el Caballo negro de 4AD. Lo más sencillo y elegante. El final que
se avecina no tiene color.
23 RxT
C5A 24 D4R 30 RxT
DxC 15 D x C DxT+ 31 AbaDdonan.
T4CR 26 D3R
TxP 27 Esta hermosa producción constituye el
principio de la que podríamos llamar su
Tres Peones de ventaja, constituyen en segunda época, que, en su decadencia
la mano del doctor Lasker los triunfos sufi- gloriosa, le permitió todavfa obtener actua-
cientes para lograr la victoria, teniendo en ciones inolvidables del más extraordinario
cuenta la equilibrada posición estratégica. genio que existió en la escuela psicológica.

MATCH DE LONDRES
1892

APERTURA BIRD 6 AxC


PxA 7 DxD+
BLANCAS: H. E. Bird RxD 8
NEGRAS: E. Lasker
P4AR 1

Jugada introducida por el holandés


Ellas Mein (1879) y adoptada por Bird con
éxito en numerosas partidas.
1 P4R
PxP 2 P3D
Lasker opone el activo gambito From,
PxP 3 AxP
cuya finalidad es arrebatar el tiempo al
enemigo y

CJAR 4 P4CR
P4D 5 ~c Después de este cambio de piezas, se
C5R 6 nos presenta el tablero en una situacióQ
bastante curiosa. Ni el blanco ni el negro
obtener, a cambio del material cedido, tienen una sola figura desarrollada. U.
buenas perspectivas de ataque. dos bandos cuentan con un Peón en quinta.

160
casilla, aislado el blanco. Hagamos un tajas que han sido alcanzadas por este
breve estudio del caso. sacrificio de Pe6n son las siguientes: pri-
. a) desventajas blancas: primera, perdi6 mera, un Pe6n en séptima, cuya proba-
la facultad de enrocar, facultad que es ne- bilidad de pérdida es bien remota, y que
cesario tener en consideraci6n, pues aunque ocasionará la pesadilla del blanco; segun-
es cierto que las Damas fueron cambiadas, da, el Rey blanco ha sido aún más alejado
aún queda mucho material en el tablero; del campo de batalla, hasta ser situado en
segunda, dos Péones aislados, aunque el otro extremo del tablero. Estas ventajas
cer.trales. serán valorizadas por Lasker con gran
b) desventajas negras: debilidad en las precisión.
casillas que circundan al Pe6n CR.
e) ventajas blancas: conservaci6n de la TlD 19 esc
pareja de Alfiles. TIT 30 AlA
d) ventajas negras: posibilidad de enro- R1C 31 P3A
que largo, con dominio para la Torre de RIA 31 AlC
una C( .unma abierta; iniciativa en el des- R1D 33
arrollo.
8 ClAD
A4AR 9 AlR
P3R 10 CR2R
ASCD 11 6--0--0 +
RIA 12 A4D
TIC 13 P3TD
AlR 14 AlR
C3A 15 P3T
AlD 16 ClC
AxC 17 PxA
La acumulación de Peones en el ala de
Rey es una clara ventaja negra, más aún
teniendo en cuenta que el Pe6n blanco
de SR está prácticamente perdido.
TlD 18 TDIR
P4R 19 P4CR 33 T x PI
AlC lO TRIA
P3C 11 P4TR Un golpe de gran efecto. El Alfil tendría
TlD 11 P5T más fuerza que la Torre y caería inevitable-
AlA 13 CxP mente sobre el PCR blanco, acabando con
la resistencia en pocas jugadas.
Restablecido el equilibrio material --co-
mo no podía menos que suceder, ya que, ClD 34 T5D+
según antes observamos, el Peón SR R1R 35 T x CL
caería- las ventajas negras en el ala de
Rey se tomarán súbitamente peligrosas en Conquistando a todo trance la casilla 'SR
virtud de un bello plan de Lasker. para el Alfil.

AlR 14 P6TI TxT 36 ASR


AxP 15 P6C1I TSD+ 37 R1A
PT x P 16 TSA+ TlD 38 AxP
R1C 17 TxT A8D+ 39 RIA
RxT 18 P7T A6C 40 A4D
P4A 41 P8T=D
EJ. sentido lógico que anima el plan de TxD 41 AxT
Lasker es realmente admirable. Las ven- AbaDdoaan.
161
11
CAMPEONATO DEL MUNDO
La Habana, 1882

APERTURA ESCOCESA juego, mientras su oponente sólo una, ya


que constituye una falta elemental la salida
BLANCAS: Tchigorin de la Dama en tan temprana fase de la
NEGRAS: Steinitz lucha.
P4R 1 P4R 8 C3A
C3AR 2 C3AD C(5C) x PA 9 A3DI
P4D 3 PxP
CxP 4
Dos cerebros eminentemente psicólogos
(en especial Tchigorin) se van a enfrentar
en la presente partida. Steinitz, enterado de
los conocimientos de su rival, va a hacer
una tentativa para sacarlo del «libro»,
jugando...

DST
esCI

El genio combinador del maestro ruso


comienza a manifestarse: intento de sacri-
ficio de Peones, compensado por varios
tiempos de más en beneficio de su des-
arrollo.
5 DxP+
A3R 6 RID Stenitz se ve i¡npelido a devolver material
para mejorar su desarrollo. La toma de la
Siguiendo su heterodoxo plan, intenta Torre habría sido eminentemente pernicio-
Steinitz enredar el libre desenvolvimiento sa, ya que costarla dos Caballos.
de su adversario. Sin embargo, éste no
vacila en adoptar un desarrollo ultrarrá- P4ARI 10
pido ante el original desenvolvimiento
negro.
He aquf, Tchigorin con sus procesos psi-
C03A 7 D4R cológicos. Se intenta hacer perder más
C5D1 8 tiempo al negro, mediante esta debilitadora
jugada, sorprendente en extremo.
Las pérdidas de tiempo llevadas a cabo
por el segundo jugador, empiezan a surtir 10 D5R
sus efectos; tres piezas tiene el blanco en A3DI 11 D xPC
162
Nuevamente vuelven a estimar las negras Parece que hay ganancia de material.
como el plan más acertado a seguir. la pre- pero no es asi. Cuando un bando ataca con
ferencia del material sobre el tiempo. Su material semipesado a una posición des-
contrincante. por otra parte. comparte organizada es frecuente llevar a cabo sa-
distinta opinión. y sigue su heroico proce- crificios de mdole aparentemente posicio-
der con una tenacidad digna de loa. nal; pero. al efectuarlos se suele conseguir
multitud de objetivos: abrir una brecha
TICR D x PT peligrosfsima en la posición contraria; ale-
No hay elección. y las negras se ven obli- jar decisivamente una pieza que. debido al
gadas a seguir su táctica. escaso desarrollo. se encuentra sobrecar-
gada en su misión, dejando abandonados
D3AI 13 C x C importantfsimos objetivos al alcance del
C xC 14 enemigo. Estas son, entre otras muchas. las
múltiples ventajas tácticas y estratégicas
No es posible 14. TlTR. ya que el precio que se pueden obtener sacrificando una
a
puesto la ganancia de Dama seria exce- pieza en su momento justo. Tchigorin. sin
sivo: Dos Caballos y Torre. embargo. gustaba de sacrificar material con
la finalidad de alterar el sistema nervioso
14 D3T de su adversario; esto ocurría. lógicamente.
0-0-0 15 P4AR en posiciones poco claras.
Las negras buscan remedio a sus dolen- A x PD! 18
cias. devolviendo material. Se demuestra
una vez más la extraordinaria importancia Bella entrega. basada en una ulterior
del desarrollo. apertura de lineas y aumento de riesgo en
A x PA 16 P3CR la ya expuesta situación del monarca negro.
No existe elección posible en la respuesta:
18....• A x A; 19. C x A. R x C; 20.
ASA ganaba.
18 DxC
AxC 19 RlAI

C6AII 17
Sencilla en su origen. pero sumamente
elegante. El intento perseguido por el se-
gundo jugador (Steinitz) para rechazar el.
molesto AIfiI. deja débiles varias casillas.
que son ocupadas <<ipso facto» por las
fuerzas activas de su oponente. La extraordinaria sangre fria del cam-
pdón mundial se revela en esta partida,
17 DlA haciendo gala de su gran dominio en todas
163
las facetas de la partida, demostrada a óptima casilla 3AD. dominando toda la
través de sus numerosos riesgos. originados gran diagonal negra.
por el estilo enérgico de su contrincante.
19....• P x A habrla sido de funestas con- A4A
secuencias. a causa de 20. D x P con ata- A3A D3R
que simultáneo. directo a la Torre y el A5R+
Alfil. e indirecto a la Dama.
El emplazamiento del Alfil ha mejorado
A4R lO notablemente. desempeñando. en este mo-
mento una eficaz acción defensiva.
El blanco no cede su ventlija de desarro-
llo. y por tanto la iniciativa. 26 R2C
TRlD 27 OSA
lO TlAR 'i'3A 28 D4C
TR1A 21 A2D1 T3C 29 ASe
La toma del peón habrla sido desventa- Han aumentado en forma alarmante las
josa para el blanco. a Causa de la acción amenazas que se cemfan sobre la posición
conjugada de Dama y Torre negra. negra.
T3DI T7D+ 30 R3C
A7A+ 31 R3T
Amenazando ganar material. doblando
las Torres sobre la columna de Dama. No salvaba 31. "'. R2C; 32. T x A + l.
D x T; 33. AST +, guardando la Dama;
22 A3A pero...
AxA 23 PxA
AlD 24 TxA 32 Abandonan.
Tchigorin halla siempre a mano la mejor Si toman Torre. pierden igualmente la
receta, e intenta emplazar su Alfil en la Dama,

TORNEO DE BERLIN
1881

GAMBITO DEL REY ACEPTADO el mejor plan a seguir es entrar en el aza-


roso gambito del Rey; si no tropieza, pro-
BLANCAS: Tchigorin curando rehuir sus peligrosas complica-
NEGRAS: Schmidt ciones, Tchigorin se encontrará con las
manos libres para operar dentro de su
P4R 1 P4R acreditada faceta combinativa.
P4AR 2
2 PxP
La primera medida psicológica: cuando C3AR 3 P4CR
el adversario no es de verdadero renombre,
\
A4A 4 AlC

164
Más prudente que entrar en el pmbito 10 0-0
Muzio. peligroso en extremo. mediante 4. A4AR 11 CD3A
...• PSC; S.~. sacrificando el Caballo a P3TR 12 C4T
cambio de un feroz ataque.
Si 12..... P4TR; 13. ASCR-con múlti-
P4D s P3D ples amenazas.
0--0 6 P3TR
P3A ,. 7 C2R Dml 13
El genial estilo combativo de Tchigorin
se manifiesta en cada jugada. Mientras el
negro se lanza desesperadamente a eliminar
las molestas piezas blancas. él sigue, imper-
turbable. su desarrollo. acompafiado de
una continua amenaza táctica.
13 e x A
¡Al finl Desapareció el peligroso Alfil;
pero •••

exe 14
... en su lugar se emplaza un Caballo,
excelentemente situado. Si por un lado la
acción del Alfil era más eficaz, por el otro
el negro ha perdido una pieza desarrollada.

P3CR1 8 14 P4TR
15
Atacando en su pivote. la cadena de
Peones y amenazando la consiguiente aper- Las blancas hacen una pequefta demos-
tura de líneas. caso de cambiar de Peones. tración de las intenciones perversas de que

C4T
e3T
,
8
10
pse
P6A

Despu6s de varias jugadas de desarrollo.


acompafiadas de sus correspondientes es-
caramuzas tácticas. tfpicas en los gambitos
de Rey. se ha producido una consolidación
estratégica en el lado más afectado por la
lucha: el ala de Rey. Las portentosas con-
diciones de Tchigorin le han permitido
rehusar la recuperación del Peón perdido;
pero, al desplazar su Caballo de Rey a su
aparente situación excéntrica, ha consegui-
do crear en la posición enemiga toda una
serie de casillas débiles. como son, princi-
palmente, 3 y 4AR. especialmente esta úl-
tima, a la que dirige sus tiros el referido
Caballo. (Posici6n después de 19...•• P x P)

165
se hallan poseídas. e intentan eliminar el
esforzado defensor de las lineas negras.
para tener un acceso más cómodo hacia
el Monarca enemigo.
15 OC
CSA 16 AxC
PxA 17 CIT
Este Caballo se encarac:ola y huye
AxA 18 RxA
PxP 19 PxP
D4A 20
Los supervivientes de los cambios efec-
tuados presentan una situación muy dife-
rente en sus respectivas colocaciones.
Mientras el blanco dispone de una excelen- (Posición después de 23....• R2C)
te colocación para el Caballo. su homóni-
mo se encuentra relegado a una desairada Comienza el proceso combinativo ga-
postura. La Dama blanca tiene a su vista nador. Las respuestas del negro son. desde
un horizonte bastante más amplio que la este momento. forzadas.
enemiga. y ataca un débil eslabón de Peo-
nes. excesivamente avanzados. El sabio 24 R3C
plan táctico-estratégico. llevado a cabo por 'liT!! 25
Tchigorin. va a dar sus frutos. Sus nume-
rosas ventajas posicionales son augurio de Tchigorln combina con admirable pre-
ello. cisión sus elementos ofensivos.
20 TICK DxP
TDIRI 21
No es posible 25....• R x T; 26. D x T.
Cortando las retiradas al Rey negro. La C3C; 27. TlT +, RIC; 28. TST + 1 l.
toma de los Peones negros habrla dado R x T; 29. D6T +, seguido de mate.
ventaja igualmente; pero la del texto es más
enérgica. T6T+ 26 RxT
DxD+ 27
21 R2T
R2A 22 T4C Las negras. ante su enorme desventaja
TIT+ 23 R2C material y de posición, optan, con muy
P6A + I 24 buen criterio. por abandonar.

166
MATCH TELEGRAFICO
1891

DEFENSA DE LOS DOS CABALLOS Makovetz, en la partida antes citada.


optó por enrocarse. y siguió con 10.
BLANCAS: Steinitz ...• 0-0; 11. P3D. C2C!; 12. TIR. P4C;
NEGRAS: Tchigorin 13. P3AD. A3C; 14. A3R. C4D. con lo
que el negro obtuvo gran ventaja. y ganó.
P4R 1 P4R 10 0-0
C3AR 2 C3AD C3AD 11 C4D
A4AD 3 C3A C4TD 12
esc 4 P4D
PxP 5 C4TD Steinitz, conductor de las piezas blancas.
ASC+ 6 P3A se ve obligado a adoptar un papel defen-
PxP 7 PxP sivo. bastante molesto. Tchigorin aumenta
AlR 8 paulatinamente. mediante jugadas de gran
precisión. su ya clara ventaja.
Lo mejor. Existen varias jugadas posibles
en este momento. aparte la del texto; todas 12 A3D
ellas dan notoria iniciativa al segundo CIC 13
jugador. ¡Triste necesidad!

8 P3TR
C3TR 9

Esta colocación antiposicional del Ca-


ballo fue sugerida por Steinitz, sufriendo
un serio revés en la presente partida. La
partida Makovetz-Charouseck. jugada en
1896. acabó de confirmar su inconsis-
tencia.

9 A4AD!

Manteniendo el «statu quO» y no deján-


dose llevar del deseo de doblar un Peón
hacia fuera. Con la jugada del texto se ma-
nifiesta en forma terminante la total hese-
monfa negra en todo el tablero. acompa- 13 P4AR
ñada de un desarrollo notablemente su-
perior. La superioridad de desarrollo obtenida
por Tchigorin es aplastante. Otro ju~
P3D 10 que no hubiera sido el genial Steimtz,
167
habría visto saltar sus nervios, realizando D1A lO
jugadas desesperadas; el campeón mundial
de aquella época, no. Prepara un vasto Sacrificio de Peón totalmente injuafa
plan de defensa, sistema en el que era real- ficado, basado en un plan falso. M~
mente temible, paradójicamente hablando. malas eran: 20. RIA, P6R; 21. P x •
Su misIiJa exactitud de cálculo va a aumen- C4A, etc., o 20. P3TD, A x e +; 21
tar el mérito de la victoria obtenida por su A x A, C4A; 22. A4CR, Tle, con ventajl
adversario, que, unida con otro triunfo ob- negra en ambos casos.
tenido por telégrafo, igualmente le llevaron lO DxP
a luchar por el cetro mundial, que estuvo RIA 11
a punto de hacerle cambiar de poseedor.
Steinitz hace notar, en este mamen.
PlAn 14 AlD su error de cálculo. Su plan consistfa •
P4D 15 llevar la Torre a ID, seguida de 21. •••
Un poco mejor era 1S. e3AR, PSR; D3A; 22. P3TD, A x e +; 23. A x A
16. C4D, P4A; 17. P x P, P x e; 18. pero no contaba con la desagradable SOJII
P x e, D o TlR, amenazando A4CD presa que representa el llevar la Dama
con fuerte posición de ataque. negra a 3e.
15 P5R 11 P6AR!
El centro negro es, por momentos, cada Preludio de una belIfsima maniobnt
vez más amenazante. PxP II PxP
P4AD 16 ClRI AXP 13

Lo mejor para no estorbar la realiza- Totalmente forzada. 23. e x P, A6T +


ción del ataque. 24. R1R, T x e!; 2S. A x T, TlRl
26. A2R, e3e; 27. TlD (si 27. D2D
e3An 17 A3R T x A + !), D3AR, con ventaja ganadod
P3CD 18 ASC
AlC 19 13 A4AR
Preparando el sacrificio de la Darnt
por tres piezas.
C4R 14

19 P5A
Se amenaza la ruptura de Peones, se-
guida de la avasalladora irrupción de las
piezas negras.

168
No salvaba 24. TID, D5T; 25. C4R, D3D + 31
TDID; 26. T x T, T x T; 27. D2R,
C3C; 28. P3TR, D5A! Totalmente forzado. Si 31. D3C, T53;
y el Alfil tiene cortada la retirada a causa
24 A x CI! de C7AD con devastadoras consecuen-
cias.
Espléndida entrega de Dama, respal-
dada por un dominio total del tablero. 31 A5R
DxC 32 TxA
D2R 25 P3AR 33 T(lR)lAR
D x PT 34
Lo menos malo. Cualquier otra linea
habrfa perdido más rápidamente. Precipita el final de este combate de
epopeya.
25 A x Al
D6R+ 26 RlT 34 P4A!
AxD 27 AxT
D3T 28 C4A Con la triple intención de aislar la Dama
enemiga, aunque sólo sea circunstancial-
Con este salto de Caballo comienza el mente; dejar libre la casilla 3AD al Ca-
cerco de la posición enemiga. La configura- ballo, para permitirle el acceso al centro
ción blanca que carece de conexión defen- y darle a esta misma pieza un formidable
siva, ni menos ofensiva, va a ser desahu- punto de apoyo central en 5D. Desde
ciada mediante varias enérgicas maniobras este momento, la edificación blanca, cuar-
negras. teada por su base, se va a desmoronar
con gran estrépito.
A5R 29 IDIR
A4A 30 D7AD 35 C3A
P3ID 36 TxP+!
30. P4A habrfa sido un grueso error,
debido a 30.... , T x Al, ganando ma- Bello remate final.
terial, ya que si 31. P x T, C6C! mate.
C x T 37 TxC+
30 C5D! RIC 38 A7D
Abandonan. 39
La posición blanca padece de una pará-
lisis total. ¡Un combate memorable!

169
vn
COMBA TIVISMO

PILLSBURY

Cuando caminando por un sendero nos que, en definitiva, las leyes que el hombre
vemos detenidos por la imposibilidad de creó son susceptibles de ser anuladas y sus-
cruzar por nuestros propios medios un tituidas por el hombre, y que no hay
ancho caudal de agua, por ejemplo, nos ninguna de esta humana naturaleza que,
sorprenderá grandemente ver cómo nues- en sensato juicio, puede ser considerada
tro compafiero de vi~, sin decir palabra, inabordable.
salta limpia y gallardamente salvando el PiIIsbury, el formidable jugador norte-
obstáculo y cómo se burla de nuestra americano, en medio de aquel mar de
sorpresa y confusión desde la orilla opuesta «teóricos» a la caza del error ~no, que
El supo vencer la dificultad «aparente», produjo la escuela posicionista de Steinitz,
y para ello no empleó otras armas que su lanzó el grito de su decidida <<voluntad
propio arrojo y la no consideración del de vencer por su propia iniciativa», fuese
prejuicio establecido. A nosotros nos o no fuese del agrado de las posicionistas
pierde ese prejuicio, el exceso de respeto exigencias. He aqu[ las caracteristicas de
a las normas establecidas y nuestra propia aquel batallador práctico del ajedrez,
retlexión. No caemos en la cuenta de algo coincidente en este aspecto y criterio en
que posiblemente pensaba nuestro com- numerosas ocasiones con quien este libro
pañero. Cuando un hombre siente dentro dirige.
de s[ una gran energ[a creadora y es por No despreciaba Pillsburg las normas
s[ mismo capaz de considerar las cosas posicionales en cuanto se contrafan a una
independientemente del concepto que preparación para el asalto; pero, en todo
otros hombres establecieron para ellas, caso, su permanente idea era irrumpir en
poco ha de costarle lanzar a los cuatro las filas enemigas y las irrupciones de
vientos su irrespetuoso criterio contra la Pillsbury se hicieron famosas por su preci-
norma establecida y practicar pública- sión y energ[a, pero sobre todo por su
mente sus propias ideas. El hombre sabe especial dinamismo.

171
TORNEO DE BROOIUYN
1894
GIUOCO PIANO La abertura de la columna de AR en
beneficio de las blancas, representa para
BLANCAS: Pillsbury ellas una ventaja real.
NEGRAS: Showalter
7 C4T
P4R
C3AR
1
2
P4R
C3AD
AJC
PT x C ,
8 CxA
A4A 3 A4A
C3A 4 Además de la pérdida de tiempo que ha
representado la persecución y cambio
Una de las derivaciones plácidas que de Alfil blanco, Pillsbury se ha encontrado
existen para esta linea de juego. Esta bifur- con su ro presta para entrar en juego.
cación que se puede hacer, precedida de
P3D, se emplea poco en la actualidad,
a causa de la simétrica formación estruc- 0-0
,
10
C3T
P3AD
tural, no de acuerdo con los gustos impe- P4D 11 D2R
rantes hoy dfa. Sin embargo, esta apertura DlR 12 0-0
no deja de encerrar, dentro de su aparente D3C 13
inofensividad bastante tóxico.
Las blancas ya empiezan a colocar su
4 P3D material pesado en posición de ataque.
Las negras se tendrán que contentar con
Las negras proyectan eventualmente el el papel de meras espectadoras.
avance del PAR, por lo cual no interponen
su libertad de acción con su CR. 13 P3A
P3T 14
P3D P3m Preparando el doblamiento de las Torres
en la columna de AR. La jugada del texto
Esta es una pérdida de tiempo, como evita CSCR, que habrfa hecho perder un
veremos en seguida. tiempo a las blancas al tener que retirar
su Torre.
AJRI 6
14 AJR
La refutación de la jugada anterior. nA lS mlR
Si las negras abren un refugio a su AR mIAR 16 AlA
y seguidamente se ven obligadas a cam- C4TR 17 R1T
biarlos, el abrigo que le prepararon, evi-
dentemente, carece de efecto y por tanto La posición del negro tiene un horizonte
de razón de ser. bastante limitado. Su defensa, eminente-
mente pasiva, va a permitir a su contrario
6 AxA obtener la victoria por el sencillo método
PxA 7 operativo de un bloqueo impune. El bando
172
P4T 25
La presi6n sigue «in crescendo».

25 P3T
T2C 26 T2A
RIT 27 PSA
T(IA)ICR 28 PxP
PxP 29 TRIA
PSCI 30

El heraldo blando toca su clarinazo de


ataque. Vamos a presi6n a un rápido
desmoronamiento de las fuerzas de Sho-
walter. ante la potente colocaci6n de las
piezas enemigas.
30 PTx P
(Posición después de 17..... RIT) PxP 31 CxP
negro carece de vitalidad para intentar un
contraataque; le falta aire.
~I 18
(<El anillo de hierro» se estrecha más
y más. La respuesta del negro es obligada.

18 P4AD
CSAI 19 AxC
PxA 20 TIAD
Se gesta un contraataque en el flanco
de Dama. En realidad. resulta algo tardfo
a causa de la total anquilosis que padece
el centro y ala de Rey negro.
D4T 21 DlAD
P4C 22 D2R T X Cl! 32
Showalter no sabe cómo detener la in-
minente ruptura que se cierne sobre su ¡Hermoso herolsmo inanimado del aje-
Rey con amenaza de ataque huracanado drezl La Torre se inmola en holocausto de
y rápido. a causa de la inmovilidad for- una causa justa. porque sabe que. en el
zada en que se encuentran sus piezas. Un crisol de su audaz sacrificio. se forja la
auténtico ejemplo de autoobstrucci6n. victoria final. El edificio negro se desploma
con estrépito.
C4R 23 CA
D5T 24 RIC 32 PxT
CxP 33
Mientras el blanco con precisi6n mate-
mática, cumple la sentencia dictada por la Amenazando mate.
posici6n contra el Rey enemigo. éste.
nervioso y desconfiado. no encuentra sitio 33 P3C
para desarrollar una defensa eficaz. DxP+ 34
173
En este momento se pudo obtener una T3C! 36 TSA+
decisión más rápida, jugando 34. C6R! R2C 37 T(IA)7A+
RJA 38 TSA+
34 mc R4R 39 TSTR
D6R+ 35 RIT
DSR+ 40 Abaudooaa
Igualmente perdía 35. . .. , RIA; 36.
D x T + !, T x D; 37. C6R +, etcétera. Las negras reciben mate imparable en
La del texto, sin embargo, es más rápida dos jugadas: 40.... , DIC; 41. C7A +.
al caer el Rey negro en una red de mate. R2T; 42. D x D mate.

TORNEO DE HASTINGS
1895

GAMBITO DE DAMA REHUSADO

BLANCAS: Pillsbury - NEGRAS: Mason


P4D 1 P4D
P4AD :2 P3R
CJAD 3 CJAR
ASC 4 AlR
En este momento es considerada igual-
mente correcta 4.... , CD2D con la posibi-
lidad de efectuar una defensa Pillsbury,
que fue introducida con éxito en la prác-
tica por este mismo jugador durante el
torneo de Cambridge-Springs, del año 1904,
y que en la actualidad conserva aún mu-
cha peligrosidad. Las jugadas constituti-
vas son 4 .... , CD2D; 5. C3A, P3A; 6.
P3R, D4T!, desclavando el Caballo negro (Posición despuis de 7. T1A)
y clavando, a su vez, el adversario.
el campeonato mundial, librado por
Capablanca y Alekhine, en 1927. Lajugada
CJA S 0-0 del texto es una tentativa más de desen-
P3R 6 CD1D volvimiento del AD por fianchetto, idea
TIA 7 bastante atrevida, teniendo en cuenta el
7 PxP debilitamiento que se produce en las casi-
llas blancas; sin contar el tiempo do
Esta jugada constituye una desviación desarrollo que se regala al primer jugador.
de la linea clásica, adoptada por la mayor
parte de los maestros, que es 4 •... , P3AD. AxP 8 P3CD
Este sistema de defensa fue frecuentemente DlR 9 AlC
adoptado durante el famoso match para 0-0 lO C4D
1'74
Al intentar el cambio descongestionador El avance del P AD habría acrecentado
que sigue. las negras dejan más patente la su debilidad.
débil estructuración de su ala de Dama.
10....• eSR no habría sido mejor a causa TRIA 16 TDIA
de 11. A4A. e x e; 12. T x e. con A6T 17
presión creciente sobre la columna de AD.
Jugada clave del plan preconcebido.
AxA 11 DxA
17 AxA
Un espejismo con pérdida de Peón DxA 18 TRIR
habría sido 11 ....• e x e; 12. A x D. C5R 19 P4A
e x D +; 13. A x e. seguida de T x P.
Las negras no tienen defensa satisfac-
CxC 12 PxC toria contra la amenaza que se cierne sobre
ASe! 13 su PAD. Si juegan la normal 19. . ..•
TDIA; 20. e x P!!. T x e; 21. D x T!.
De gran sentido posicional. El blanco ganando material y la partida. En esta
ataca la horadada posición negra. y va hermosa exhibición posicional nos revela
a demostrar con su método muy simple el genial americano su fino instinto al rea-
y sutil su superioridad estratégica. lizar un acabado aprovechamiento. con-
jugando sus ventajas estratégicas. La resul-
13 D3D tante de esta serie de factores objetivos ha
TIA 14 P3AD sido la obtención de ventaja material...
TxP 20 TxT
TxT 21
... y la hegemonía más absoluta sobre
la columna recién abierta. cuyo intento
de anulación va a costar al negro un se-
gundo Peón.
21 C2D
T6A 22 CICI
Unica para evitar la pérdida de pieza.

TxD 23 CxD
C6AI 24

Mediante este salto de Caballo. que


A3DI 15 evita, entre otras cosas. la ocupación por
el negro de la columna de AD. el blanco
Este es el movimiento más fino de toda adquiere una superioridad total sobre su
la partida. PilIsbury amaga una acción adversario. Las negras no tienen respuesta
directa en el flanco de Rey con el fin de satisfactoria.
desplazar las piezas negras del otro flanco
y poder ejecutar en forma más efectiva su 24 P3C
ofensiva primitiva contra las casillas blan- CxP 25 AbaDcIoiIaD.
cas del ala de Dama. para un ulterior
ataque sobre el PAD. Son muchos dos Peones de menos
y otros dos aislados para seguir luchando
15 C3A contra un jugador de la fuerza de PilIsbury.
175
TORNEO DE PARIS
1900

GAMBITO DE LA DAMA A3D 7 Ale


PxP 8
BLANCAS: Pillsbury-NEGRAS: Marco
No se ha definido aún, claramente, cuál
P4D 1 P4D es el método más acertado para combatir
P4AD 2 P3R el planteo negro. Nosotros estimamOl
C3AD 3 CJAR como lo mejor el cambio de la jugada del
ASC 4 AlR texto, pero efectuado un movimiento
P3R 5 ~ antes, a causa de la posibilidad de que
C3A 6 dispone el segundo jugador de impedir la
obstrucción forzada de la gran diagonal
Pillsbury, jugador agresivo por exce- blanca.
lencia, gran combinador, se embarca en
una linea eminentemente plácida y posi- 8 PxP
cional. Su genio combinador, como el de
la gran mayoría de los grandes maestros
que antecedieron a la época moderna,
estaba supeditado a las caracteristicas de la
posición, para lo que contaba, también,
con un fino instinto estratégico.

6 P3CD

Sistema contra el gambito de la Dama,


que gozó de gran prestigio durante la
segunda mitad del siglo pasado, más bien
cerca del final y principio del presente.
La salida del Alfil de Dama por fianchetto,
antes de haberse efectuado el enroque, fue
espectacularmente anulada por el mismo
maestro norteamericano durante la bella
miniatura que jugó contra Lee, en el tor-
neo de Londres, del año anterior al de la
presente partida. Su efimero desarrollo Este movimiento cumple taxativamente
tuvo realización en la siguiente serie de el objetivo perseguido por el blanco. Más
jugadas: S• •.. , C2D; 6. C3A, P3CD?; elástica parece ser 8.... , C x P; 9. A x A.
7. P x PI, P x P; 8. ASC!, A2C; 9. CSA, D x A; 10. C x C, A x C, y si 11. P4R,
O--{); 10. A6A, A x A; 11. C x P, DIR; el negro consigue una buena partida, me-
12. C x A +, D x C; 13. C x PI, DSR; diante 11. ... , DSC +, ya que el cambio
14. C x C +, P x C; lS. A6T!, DP x C; de Damas darla al blanco un centro lige-
16. D3A!!, Y las negras están perdidas. ramente débil.

176
CSR 9 Su enemigo, creyéndose impelido a efec-
tuar una jugada defensiva, juega ...
Punto de partida de un ataque que hizo
famoso PilIsbury. Su idea básica estriba 14 P3C
principalmente, en la ofensiva dirigid~
contra el ala d,; Rey negro en respuesta
a la acción adversaria en el otro flanco
y motivado por la indefensión en que s~
encuentran las casillas negras de 4R y 4AR
cuya adhesión llevaría implfcita el debili:
tamiento C,; todo un conglomerado de
casillas sitl.~Jas en los alrededores del en-
roque negro.
9 CD2D
P4A 10 P4A
No es este el mejor camino a seguir
contra los proyectos blancos. Pillsbury ha
demostrado frecuentemente la mayor im-
portancia que tiene el ataque en el flanco
de Rey sobre el que se efectúa en el otro
flanco (claro está que consideramos efec-
tuados los enroques cortos, como ocurre ... dejando en lastimoso estado de debi-
en la mayoría de los casos). El ataque en lidad todos los escapes de sus alrededores.
el lado de Dama le ofrece al bando ata-
cante un objetivo natural: hacer valer la P5A! 15
mayoría de Peones con las miras puestas
en la eventual coronación del Peón super- Ruptura marca Pillsbury. La superiori-
viviente. Sin embargo, en el lado de Rey, dad negra en el ala de Dama ha sufrido,
aunque el bando en ventaja disponga de al intentar hacerse efectiva, un frenazo en
una supremacía lateral inferior a la de su seco. El motivo está suficientemente justi-
contrario en el sector opuesto, existe un ficado: su Monarca ha lanzado una lla-
factor de capital importancia, que valoriza mada de peligro inminente, antes de deri-
en forma notable los ataques que se pro- var en mayores males, y, después de haber
ducen en este ala del tablero; este factor efectuado su movida P3CR, se siente
no puede ser otro que el Rey. La presente seguro, cree oportuno reanudar su ofen-
partida nos va a demostrar claramente siva en su flanco de Dama, y juega ...
cómo la protección del Monarca propio
constituye uno de los cuidados que más 15 P5C
merecen nuestra atención. Asistamos a la P x PI 16
representación de este ejemplo práctico.
Bonita entrega de Caballo que abre un
0-0 11 P5A verdadero ramillete de amenazas contra el
AlA 1Z P3TD Rey negro.
D3A 13 P4C 16 PT x P
D3T 14
La prudencia es siempre buena conse-
Buen emplazamiento para la Dama, con jera. La toma del Caballo habrla aca-
la triple misión de ocupar la diagonal rreado consecuencias drásticas.
abandonada por el AD negro; proteger
con esta nueva pieza el avance del PAR, D4TI 17 PxC
y la última y primordial, amenazar insi- CxC 18 DxC
diosamente al enroque adversario. T x CI 19 P4T
177
12
Si el negro toma la Torre el mate es Esta Torre llega tarde para salvar la
instantáneo. vida de su Monarca. cuyos minutos están
contados.
TDlAR lO
A x PI! 21
Aparentemente. 20. A x P arruinarla
la posición negra; sin embargo. la jugada
del texto es mucho más rápida. El momento justo. Las blancas engarzan
una bella combinación de mate. y las
lO T3T respuestas de su adversario son forzadas.

21 PxA
TxT+ 22 AxT
TxA+! 23

El punto álgido de la combinación.

23 RxT
D8T+ 24 R2A
D7T+ 25 Abandoaan.

Marco no puede impedir que su Rey


reciba mate imparablemente en tres mo-
vimientos: 25 .•..• RIA; 26. D x D.
cualquier jugada; 27. A6T Y D7C. mate.
¡Un bello final del genial maestro
americano I

TORNEO DE NUREMBERG
1896

DEFENSA FRANCESA el cambio de los Peones centrales que redu-


cirla notablemente la tensión. Prefiere
BLANCAS: Pillsbury-NEGRAS: Lasker
escoger un camino poco seguro a desem-
bocar a una situación anodina. sin planes
definidos a la vista.
P4R 1 P3R
P4D 2 P4D 4 CR2D
CAD 3 C3AR P4AR 5
P5R 4
Muy interesante. aunque poco sólido.
Primera derivación del camino clásico. ~ el ataque Plhedill. que se practica
Pillsbury intenta. evidentemente. impedir raramente en la actualidad.

178
S P4AD pieza. La amenaza blanca de ruptura con
PxP 6 PSA era demasiado grave; para intentar
contrarrestarla, Lasker se ve precisado
Para dejar una buena casilla al CR a debilitar su ala de Rey.
en 4D.
ClR 14 A2R
6 C3AD DlR! IS
P3TD 7 C xPA
Preparando el asalto contra el Rey con-
Un pequeño error del gran Lasker. Su trario. El enemigo se ve obligado a adoptar
adversario extrae de esta jugada deficiente un papel de mero espectador ante las evo-
su mejor provecho. Las negras podfan con- luciones blancas.
seguir buena partida mediante la toma
con Alfil. IS C3C
P4CD 8 ClD No debe ser la mejor; sin embargo,
A3D 9 P4TD aparentemente, el doctor Lasker proyecta
PSC lO C(3A)IC un plan de su más genuino estilo: ataque
en el flanco de Dama para intentar dis-
minuir la presión contraria en el centro
y Banco de Rey. Por esta vez, la maravillosa
técnica de ataque, que caracterizaba al gran
maestro norteamericano, va a conseguir
destruir el intento de su oponente.
C(3A)4D 16
Colocando este Caballo, y no el otro,
para no interrumpir la importante colum-
na accional de lAR.
16 AlD
D2A 17 C(3C)ST
TDIC 18 P4TR

Las consecuencias obligadas del error


negro en la jugada séptima. ha dado a su
adversario una superioridad espacial abso-
luta. El debilitamiento del ala de Dama
blanco no es suficiente compensación para
su situación bloqueada.
C3A 11 C4A
A3R 11 C(IC)ID
0-0 13 P3CR
El vertiginoso desarrollo dado por el
primer jugador a sus piezas, soslayando el
cambio del Alfil por el Caballo negro, le
ha sido permitido a causa de su gran ven-
taja de posición. Las negras se ven cons-
treñidas a eCectuar jugadas pasivas, con Es dificil encontrar un plan más reco-
un fin exclusivamente defensivo; tal es la mendable que el adoptado por las negras.
jugada del texto, que no desarrolla nin¡una Al terminar la partida, tenazmente deCen-

179
dida por ellas. no se puede sacar otra con- 21 PC x P
clusión que la de que protegfan una causa C4A 22 P5TR
vencioa. TIT 23 AlR
T x CI! 24
P6C1I 19
Principio de una espléndida combina-
ción. que va a dejar al segundo jugador
Hermoso sacrificio de diversión que totalmente sin recursos. La edificación
constituye el preludio del ataque victo- negra se viene abajo con estrépito. pese
rioso contra el adversario. El maravilloso a ser defendida por uno de los más extra-
estilo y calculada precisión de Pillsbury. ordinarios genios del tablero.
se revela con todo su esplendor. durante el
transcurso de la presente partida. No es
24 AxT
suficiente la depurada técnica de su adver- C(4D) x PR!! 25
sario. demostrada en esta dificil lucha. para
torcer el implacable destino que dictan Magnifico complemento del sacrificic
sus piezas. Pillsbury fue públicamente previo de desviación.
reconocido como uno de los más extra-
ordinarios genios de la ofensiva que 25 PxC
existió jamás.
25 ....• DIAD no habría salvado la par-
19 C xA tida, debido a la invasión impune de la
posición desguarnecida del Rey, por las
Si 19..... e x P; 20. e x PI. con gran fuerzas de Pillsbury.
ventaja de posición.
C x P 26
PxC lO AxP
PSAI 21

Sacrificio de consecuencias dificiles de


prever. El maestro americano establece
una magistral relación entre ambos flan-
cos del tablero. que le va a dar. en defi-
nitiva, una bien merecida victoria.

Asaltando los últimos parapetos.

Decisión responsable. Las negras entre-


gan la Dama a cambio de una misera
compensación. para impedir pasar por
mayores males que provendrían de la toma
(Posición despuis de 23..... A2R) del PAR por la Dama contraria, con gran-

180
des perspectivas de rápido mate. Su causa, Para disminuir el número de comba-
de todas formas, no tiene defensa eficaz. tientes; única esperanza de hacer tablas.
El resto de la partida constituye una exhi-
bición del proceder contundente y exacto DxP 39 TxP
de Pillsbury para liquidar una resistencia, DSA 40
por obstinada que sea.
La Dama se infiltra en la posición ene-
CxD rt TxC miga, sin obstáculos ante su paso. El
ASA 1 lB TIAD negro adivina en la Reina adversaria una
AxA 29 RxA visión apocaliptica del Caballo de Atila.
Ya quedó fijado el Rey en el centro del 40 T3R
tablero, desprovisto de eficaz antidoto con- D7A 41 R2R
tra la mortal amenaza de invasión de la R4A 42 P3CD
Dama blanca por las vías de color con- P4TR 43
trario. El resto es fácil de comprender.
Espectacular posición de bloqueo. El
D3R 30 T3AD negro no puede parar las múltiples ame-
DSCR+ 31 R2A nazas que se ciernen sobre su cabeza.
TlAD 32 TxT+
DxT 33 TlAD 43 T3AD
DlR 34 P6TR D8C 44 AIR
P x PT 35 TlC+ RxP 45 T3T
R2A 3ti P5T D7A+ 46 RIA
D4CD 37 T3CR D8D 47 P4C
R3A 38 P6T P6R 48
La vida del Monarca negro se extingue
por momentos.

48 TlT
R5R 49 P5CD
D6D+ 50

Más contundente era, quizá, SO. D6A +,


RIC; SI. P7R, ganando fácilmente. Este
detalle insignificante no quita nada a la
belleza que adorna esta magistral pro-
ducción, ni al mérito extraordinario del
conductor de las piezas blancas.
50 AbandoIIan.

No existen posibilidades de organizar


(Posición después de 42...• , P3CD) una defensa efectiva.

181
VIII

EL «HIPERMODERNISMO»

EVOLUCION DE LAS TENDENCIAS y Ninzowitch lanzaron los primeros fun-


ACTUALES damentos del nuevo concepto del tablero,
las cosas han variado mucho; notables
Hoy dfa el ajedrez no está regido por maestros jóvenes (algunos casi nifios) han
las reglas que fijaron los clásicos, ni los contribuido ya con sus valiosas actuacio-
románticos, ni los posicionistas. Tampoco nes a rectificar algunos puntos de vista
se sigue la huella de ninguno de los inno- de esos padres del hipermodernismo y los
vadores que dentro de esas escuelas infor- fundamentos filosóficos de las nuevas
maron al ajedrez de matices y sistemas ideas se han enriquecido sensiblemente.
peculiares. ¿Qué se hace, entonces? ¿Es La condición y definición de las normas
que no hay una escuela en nuestro tiempo? tc6ricas hipermodemas se refieren más
¿Qué es, pues, eso del hipermodemismo? al espfritu de lo conducta a seguir que a la
Efectivamente, hoy existe esta escuela conducta misma. Es decir, que se admite
un tanto extrafla del hipermodernismo: un una diversidad de matices en la forma en
sistema, cuya más exacta y desconcer- que tal conducta haya de manifestarse
tante caracteristica es precisamente el -de acuerdo con las exigencias tempera-
carecer de sistema. Las razones de esta mentales de cada luchador-, siempre que
paradoja se apoyan en consecuencias de sean mantenidas las razones esenciales de
ralz profundamente filosóficas y son, de lógica y consecuencia que se impongan
por si, elocuente exponente del grado como objetivos de dicha conducta. Esto
de peñección en que hoy dfa se halla el es tanto como el reconocimiento de la
combate de los trebejos. insuficiencia que supone toda conclusión
El ajedrez de nuestro tiempo ni es clá- axiomática y, también, el reconocimiento
sico, ni romántico, ni desarrollativo, ni de los insondables abismos del ajedrez.
posicionista; pero resulta tpdas esas mis- Nada es estable y definitivo cuando los
mas cosas a la vez; reúne todas las virtudes principios están sujetos al eterno poder
de las pasadas escuelas, eludiendo los de investigación del hombre; nada es se-
axiomas y las afirmaciones peculiares de guro y permanente cuando ha de ser
cada uno. sometido a la prueba del espfritu y de las
Sin embargo (y aumentando con ello, reacciones temperamentales humanas. To-
si cabe, el complejo paradójico), la moder- da afirmación o negación rotunda consti-
na escuela está constituyendo un cuerpo tuirá un germen de error, o, al menos, de
orgánico de normas y leyes que perfilan dudas. Las afirmaciones o negaciones no
con carácter y energfa sus peculiaridades podfan referirse a las cosas sujetas a los
distintivas. Y decimos «está constitu- gustos y al estudio. Si algo afirmamos
yendo», porque desde que Breyer, Reti o negamos, deberá estar al margen de tal
183
esfera de discusión. Este fondo de excép- desarrQllo de la imaginación entre lot
tica filosofia alimenta, en notable grado, ajedrecistas, estancando la evolución qu.
a la escuela ajedrecfstica de nuestros días, permanentemente han de ofrecer las ideaa
aunque ese sentido filosófico no es único sobre el tablero. Reti decía que el balllJl¡
y absoluto, sino sólo una parte de su teórico llegaba a «formar parte de la CIIrQI
complejo contenido espiritual. Otro factor y de la sangre de los maestros», cohibiendo
constitutivo del cuerpo filosófico del hiper- sus fuentes naturales de iniciativa y redq.
modernismo es el sentido ecléctico, tanto ciendo el campo de su actividad mental.
en lo que se refiere al mundo psicológico,
como al mundo teórico y experimental
de la lucha. Y la caracterfstica más pecu- ASPECTOS TEORlCOS
liar Y notable es la llamada de «elastici- DEL HlPERMODERNlSMO
dad», es decir, aquella que tiende a man-
tener siempre la opción para girar la nave En sus comienzos, la tendencia hiper..
y cambiar la ruta, aquella que sabe reser- moderna recusó las rutinarias apertUllll
var siempre una brecha practicable en cada P4R y P4D, a las que atribuía el inconve-
sendero para poder elegir en el momento niente de dejar traslucir demasiado clara.
decisivo el camino más conveniente. mente la primera intención del ejecutante
En punto a la estrategia, las ideas deben Como esta recusación no significaba, .-
ser completas y bien perfiladas en los pro- embargo, que la posesión del centro dejaa
yectos del luchador. No podría empren- de ser reconocida como objetivo sustan-
derse nunca un camino confiando al azar cial, se estableció como la mejor conducta
o a la marcha de las circunstancias, las la maniobra lateral y «oculta» del dea
evoluciones futuras. Cada movimiento arrollo en fianchetto, combinado COII
debe suponer el engranaje de un plan «amagos» de acciones centrales.
preconcebido y bien meditado, con formas Argüían los innovadores Reti y Nim.
precisas, en la imaginación del pensador. zowitch que es necesario desconfiar siem-
Ahora bien: esta medida del plan forjado pre de las jugadas naturales, como el.
<<a priori» no ha de suponer el exclusivo desarrollo de una pieza, la ocupación poi
uso del mismo. Los movimientos del adver- una Torre de una columna abierta, p~
sario (debidamente previstos, desde luego) siempre pueden existir las posibilidades
facultarán a nuestros poryectos notables de un «plan» más prometedor y directo.
fluctuaciones; cada golpe puede significar Paradójicamente, afirmaba Reti que al
la aparición de nuevas perspectivas estra- ajedrecismo no han de importarle más lu
tégicas. El tablero ha de ser considerado reglas que las excepciones. «Las blanC&l¡;
como unidad completa e independiente en después de abrir juego con P4R, se creaa
cada movimiento; es decir, que -aparte por si mismas una situación comprome-
de insistir o no en el plan trazado- ha de tida.» En este sentido, seftalaba que q _
ser examinada la situación real de las sólo conocia de los planteos las variantes
piezas como si por primera vez apareciesen teóricas para resolver con éxito las difi~
a nuestra vista. Por atender a esta idea cultades que frecuentemente suelen pre-
principal, es por lo que en la táctica se sentarse en las aperturas, a menudo sed
impone una política expect~te, evitando objeto de inesperada y dura ofensiva.
encauzar la lucha en terrenos muy defini- o bien pasará sin advertir alguna posibi-
dos donde la marcha de los aconteci- lidad de éxito. ¿Por qué no se estimaba
mientos esté bien visible. la apertura P4R? La razón que en un
El hipermodemismo surgió después de principio se aducía es que abriendo la
la gran guerra del 1914, y los «motivos posición desde el comienzo de la lucha, se
-colectivos» que dieron lugar a él, pueden facilita al negro la temprana liquidación
encontrarse en el hecho de que la creciente de piezas, por lo cual disminuyen paulati-
influencia científica que caracterizaba los namente las ventajas del planteo y aumen-
dogmas y principios básicos instaurados tarán las posibilidades que la lucha so
por las ideas productores de la escuela estabilice, viéndose el blanco en el caso
posicional, limitó, por decirlo así, el de aceptar como mejor solución la igual-
184
dad lo que para las negras supone verda- del dnarrollo (Morphy) en las aperturas
der~ motivo de satisfacción. es sólo una teoria a considerar como com-
Pero estas consideraciones especificas ponente de las ideas concebidas o pre-
respecto a la definición abierta del juego, concebidas en la lucha. Contraviniendo esa
aparte de significar poco, en general, en el ley desarrollativa, cuenta el moderno
conjunto del espfritu de la moderna es- ajedrez con verdaderas joyas en aperturas,
cuela, han sido más tarde apuntadas, para donde un Caballo, por ejemplo, ha sido
ajustarse mejor así al carácter ecléctico de jugado siete veces al llegar a la jugada
la táctica hipermoderna. trece. Ese Caballo, en sus victoriosas jor-
En efecto, siguiendo el espfritu hiper- nadas, destruía por sí mismo toda una
moderno, es posible aceptar el plantea- escuela. ¿Dónde está la razón de esta
miento de toda clase de luchas, bien de tipo revolucionaria consecuencia? Sencillamen-
abierto o cerrado, combinativo o posicio- te en que cada uno de los movimientos de
nal. Lo que importa no es la linea elegida, tan «inquieta» pieza estaba inspirado en
sino el sentido general de la lucha. Lo proyectos y planes totalmente madurados
sustancial, en todas las fases de la partida, y sólidos; es decir, que desde el primer
no ha de ser tanto la norma teórica, como disparo, el ejército se apresta a buscar al
la preferente atención a desenvolver siem- enemigo haciendo obstrucción, en cierto
pre en el terreno de la actividad. Esta modo, de las condiciones del campo de
razón de la actividad ha sido motivo en batalla y de la disposición de sus propias
numerosas ocasiones de que gran cantidad armas; se desprecia el desarrollo y la
de variantes analíticamente ya establecidas, posición para buscar el plan preciso que
vihlesen abajo con estrépito, y de que lleve a la ventaja.
hayan surgido interesantes modalidades He aquí, a la vista de la historia de las
en planteos que han contribuido, en defi- escuelas del ajedrez, una modalidad que
nitiva, a enriquecer el caudal teórico que, rememora los tiempos románticos, sin serlo.
hoy día. ha alcanzado una extesión real- Una actividád romántica en los moldes
mente abrumadora. eclécticos de la escuela hipermoderna.
Consecuencia de ello ha sido el que Como curiosidad y a titulo de corrobora-
pasen a la categoría de «elementos», de ción del ejemplo que anteriormente hemos
«partes de un todo», aquellos enunciados citado de los movimientos repetidos con
que otras escuelas proclamaron como una sola pieza, expondremos la apertura
«únicos» e insustituibles. Ya el imperativo de una magistral partida de Keres.

TORNEO DE SEMMERING-BADEN
1937

DEFENSA SICILIANA desplazamiento del Peón negro para con-


quistar el centro con la infantería blanca,
BLANCAS: Keres - NEGRAS: Eliskases difiere, en espfritu, del conocido gambito
del ala contra la defensa siciliana, que,
P4R 1 P4AD como es sabido, tiene lugar en el segundo
C3AR 2 P3D movimiento blanco y lleva implicito una
P4CD 3 evolución rápida de las armas en el flanco
de Dama. No obstante la poco apreciable
He aquí una entrega inspirada en ideas compensación que supone este gambito,
muy nuevas, ya que la finalidad de este está animado, sin embargo, de muy sutiles

185
<<planes» llenos de precisión y energ(a. 6 PxP
Keres. el joven fenómeno estoniano. CxP 7 CD2D
<<Sabe lo que hace» con esta entrega C(4R)5C! 8
y <<ha jugado ya su partida» antes de
plantear innovación tan singular. Todos los movimientos han de ser 1IU!I'
profundamente analizados. pues no ea cII
3 PxP Cicil hallar la ocasión de elegantes prow.
P4D 4 eJAR chos. Obsérvese que las negras se haIJa
A3D 5 P4D imposibilitadas de prevenirse mediante •
...• P3TR. pues la continuación serfa ,
Estamos ahora ante un aleccionador y C6R. D3C (si 9. ...• P xC??; 10
muy tfpico ejemplo de lo que hoy dfa A6C + +); 10. C x A.
supone finalidad esencial en los planteos.
El blanco no ha expuesto sobre el tablero. 8 D2A
como justificación a su actitud generosa P4A! 9 P3TR
de la tercera jugada, sino una buena ubi-
cación de sus armas en el centro. Sin em- También ahora habrá tendido el bIanc
bargo. las negras no ven con gusto la una buena celada contra 9•...• P x P a. p¡.
expansión conseguida por su enemigo y que consistfa en 10. OC. PR; 11. C x PA'
renuncian a sacar el provecho obtenido R x C; 12. CSC +, etc.
con su Peón de más. eludiendo el des-
arrollo de sus piezas para obtener una C3T 10 P4CR
estructura de defensa que le permitiese la C(3T)lC 11
valorización de esa material ventaja. Seme-
jante conducta tiene por objeto evitar la ,¡Notable! ¿Es este el Caballo de Dama
pasividad y la estrechez de la defensa des-
pués de. por ejemplo. P3R. A2R y ~.
lo que, no obstante. seria una Ifnea res- 11 AlC
tringida pero sólida. Es decir. que el pen- C2R 12 P4R
samiento dominante es luchar por la eJC 13
<<actividad». aunque sea a costa de un azar
y de un peligro. como en este caso lleva 11 hemos llegado a la conclusión que . .
aparejado la pérdida de un tiempo con el motivado el que examinemos este trozo •
movimiento repetido del Peón de Dama. partida. En trece jugadas. cuando aún 111
apertura no ha sido ultimada. las blanca
CD2D 6 han jugado una sola pieza. el Caballo d.
Dama. ¡siete veces! ¿Qué dirfan ante tal
El sentido elástico de la lucha se dibuja caso los maestros de la escuela del des.
en la idea que anima a esta decisión de arrollo? ¿Y qué los posicionistas? Sin
Keres. Bien pudo elegir la continuación 6. embargo, no hay duda que las blancas go-
PSR. con creciente ataque. Pero tal polftica zan de evidente superioridad. He aquf. bien
ofrecia el inconveniente de ser excesiva- patente. la caracterfstica esencial del hiper-
mente «definidora». marcadamente demos- modernismo: por encima de estrategfalf
trativa de un plan fijo y evidente. El mo- (combinaciones, posiciones), de táctiC8ll!
derno concepto del tablero exige que las (luchas abiertas. luchas cerradas). de enun-
jugadas elegidas tengan la múltiple facultad ciados (desarrollo. evoluciones). está l.
de cumplir un objetivo inmediato y otro «idea». y para servirla ha de animarse a leo
mediato; de no inutilizar los caminos que conducta temperamental y técnica de UD
pudieran elegirse en el caso de que una espfritu de actividad y de precisión al
cin,:unstancia imprevista nos aconsejase el mismo tiempo.
renunc,iar a ese objetivo inmediato. Con la Hemos visto cómo la medula del mo-
jugada del texto. Keres mantiene la posi- derno concepto de la lucha de ajedrez. el
bilidad de usar de variadas vias para la sencillamente el «plan». Pero este <<plan"
evolución y formación de su ataque. no puede ser un ente esporádico. fortuito

186
o caprichoso. Diversas exigencias consti- moderna, puede ser percibida esta unidad
tuyen su cuerpo y no es nada fácil su y esta armonfa, que se eleva sobre los
eIllpleo. Cada «plan» es una partida com- conceptos estratégicos y las evoluciones
leta, (<eIDpezada y acabada» en el cerebro tácticas puestos en juego en la lucha, para
~cl jugador. Ahora bien: el desarrollo de mostrarnos una idea sustancial en la que
un proyecto requiere que estén expeditas esos conceptos y esas ideas han sido los
las vías, el camino, por donde ha de mar- matices del armonioso trablijo estético.
char a su destino. Este camino en lijedrez Son muy sutiles las armas con que hoy
está sujeto a permanente oscilaci6n; es un día luchan los amantes del tablero, porque
sucio movedizo por el que la linea recta de es muy extenso el dominio de la teorfa y
la ruta elegida sólo puede mantenerse a porque está muy avanzado el programa
costa del equilibrio más esforzado y éste didáctico con tan copiosa bibliografía. Por
sólo en casos de verdadera excepci6n. Lo eso el gran acierto de la ecléctica escuela
normal es que el luchador salte de una a de nuestro tiempo está más en lo que deja
otra, por las variadas ramificaciones del por hacer en manos del ejecutante que en
camino, aunque en todas ellas sirvan a su las normas que pone en ellas. Es tanto co-
«idea» generadora con una brújula de mo permitirle el dominio de su propia
orientaci6n especialmente fabricada. Esta personalidad, facultándole la libre expo-
brújula es la «precisi6n». Es decir, que no sici6n de su pensamiento y de su tempera-
ha de importar la modificaci6n estratégica mento, aunque al mismo tiempo le fuerce
o táctica, aunque sean de carácter completo a la formidable dificultad estratégica y
y hagan presentar al combate aspectos dis- táctica que se derivan de aquellas exigen-
tintos, si en cada uno de los «planes» que cias del «plan» y de la «precisi6n».
esos cambios determinan, aparece lumi- He ahí por qué, filos6fica y práctica-
noso el elemento «precisi6n». Precisi6n, mente, el actual eclecticismo ajedrecistico
que es justeza, exactitud, verdad, en la idea no es escuela que pueda ofrecer a las gene-
definida por cada movimiento disgregador raciones presentes y venideras la senda
del proyecto abandonado. estrecha de un método o un sistema que,
Sólo con esta norma fundamental es po- como el posicionista de Steinitz y Tarrasch,
sible esa unidad artfstica que es condici6n acabaron por adocenar a las gentes, o como
necesaria en toda obra ecléctica y, por el romántico de Andersen que, en defini-
tanto, en ajedrez también. tiva, reducia el ilimitado horizonte del arte
A través de una magistral partida hiper- del ajedrez.

CAMPEONATO DE ESTADOS UNIDOS


1944

GAMBITO DE DAMA La apertura se ha iniciado a base de


jugadas de invérsi6n, táctica muy al uso en
BLANCAS: Fine - NEGRAS: Shainswit las ideas hipermodernas. Estamos en una
conocida variante de la defensa eslava, y
C3AR 1 C3AR en este momento el negro podria haber
P4A 2 P3A continuado más eficazmente 6. . .. , P3R,
P4D 3 P4D seguido de ASCD.
C3A 4 PxP
P4TD 5 A4A e x P5A 7 D2A
C5R 6 CDm P3CR 8 P4R
187
Un intento desesperado. que trata de fa- P3A 20 AJe
cilitar una reacción imposible. Si 18. .. •• TSA! 21
C3T. Denker hubiera continuado con 19.
D x A. P x D; 20. T x A. D x P; 21. Un bello y decisivo golpe.
A2C. D4D; 22. A x C. con tres piezas por
la Dama y fuerte ataque. Si 20..... CSC; 21 AxT
21. A x C. P x A; 22. C x PA. D x P; AxA 22 TIAR
23. C6T +. RIT; 24. TR7A. A4A! 23 A3A
AxD 24 AxD
A x PCD 19 D4D AxTD 25 AbandOlllllL

CAMPEONATO DE ZURICH
1943

DEFENSA INDIA DE DAMA naza 12. C x C. P x C; 13. CSR. etc.• y


después de 10....• A x PA y 11. ASC jue
BLANCAS: Gygli - NEGRAS: Ehrat el negro 11. ...• C x C. entonces el blan
con 12. CSR! obtendría buena ventaja.
P4D 1 CJAR
CJAR 2 P3R AlA 11 D2A
P3R 3 P3CD P4A 12 ~
A3D 4 AlC P3CD 13 C4R
CDlO 5 P4D AlC 14 PxP
CxC 15 PxP
Contra la formación Colle. definida en
las jugadas blancas. es más aconsejable. Mejor partida habría obtenido el negr
5• .... P4AD. seguido de C3AD. si en lugar de esto se decide por 15 . ...
A x C. con la siguiente continuación:
~ 6 CD2D
D2R 7 P4A
P3A 8 A3D
TlD 9 C5R
PxP 10 C5R x P5AD
Era mejor capturar con el otro Caballo.
pues si 11. ASC +. entonces. simplemente.
11 ..... RIA Y la sólida posición central
negra compensarla suficientemente la re-
nuncia al enroque. La opción 10..... P x P
no seria un buen acuerdo. He aquf un
breve análisis de las consecuencias que
traerla tal determinación: 11. C x C.
P x C; 12. A x p. A x A (12.....•
l. x P +; 13. C x A. A x A; 14. D4C.
A3C; 15. D4TR. etc.); 13. T x A. ganan-
do un Peón. Tampoco es b~no 10. . ..•
A X PA. pues continuará lar partida posi-
blemente asf: 11. ASC y el blanco ame- (Posición después de 17.... , R1C)

194
blanca ahora es 6. C3A. La aceptación de (única); 18. T x A con buenas lfneaa
los Peones de ala de Rey ofrecidos por las ataque.
negras. conducirla a estas interesantes al-
ternativas: 6. D x Pe. TIC; 7. D x Pr. DxP 17 CxP
P x P; 8. P3m. P x C (Si 8....• D4T. el DxP+ 18
blanco obtendrfa venuya con 9. P x A,
D x T; 10. CDlR); 9. P x A. D2A! con
buen contraataque negro. Si 18. D x D +. el final seria 18•• r
R x D; 19. A x A, C x A; 20. A38
T x P ganando un Peón con buen jUCill
(j AxC+
18 AlD
En cambio ahora, la idea 6. ...• D4T
mantendrfa la tensión del combate sin in-
convenientes.

PxA 7 PxP
D xPC 8

Más segura y sencilla hubiera sido


8. P x P.

D x PT ,
8 TIC
D2A

Entrando en una Ifnea derivada de la


misma idea expuesta en el comentario
a la sexta jugada blanca D x Pe. pero
sin las posibilidades de aquel momento.

ClR lO PxP
P4AR 11 AlD
C4D1 12 D x PT
l'
Debió jugarse sencillamente 12. D3D. Una jugada brillante. pero insufici~
De todas formas. las alternativas 19. D6I
12 P3T o 19. D x P tampoco resolvfan el ple
TICD 13 CD3A blema. pues seguirla 19..•.• C x A; ~
AJR 14 CxC D x C y mlR. o bien 19. . ..• C x }J
AxC 15 A4C 20. D x C. ASC; 21. D4R, mlD. ea¡
Para eliminar el Alfil enemigo y detener
al mismo tiempo la amenaza 16. A6C. l' CxA

PSA 16 Desde luego. el plan de las blancas JI!....


puede ser aceptado. ya que si19..•.• P x •
Era tentador aquf 1~. T x A. P x T; seguirá 20. A x P +. D2C; 21. A x D +
17. A x P + seguido de'O--O. R2A; 22. A6C +. R x A; 23. A x T
con venuya decisiva.
16 0-+-0
D8T+ lO DIC
Claro es que ahora no interesar1a al DxD+ 21 RxD
negro 16....• A x A por 17. P x p. P x P A6T n P4C

1'6
Sin duda alguna, este franco y declarado desplazamiento negro hacia el ataque de.
intento de reducir la avanzada de Peones jaría demasiado desatendido al Rey.
blancos lleva implícito una situación de
inestabilidad para el flanco de Rey. Pero TDIR 17
tal situación deberá ser apreciada con gran
exactitud por las blancas, ya que los
recursos negros no son escasos.

DST+ 10 P3C
D3T 11 0--0

Las negras eluden las posibilidades de-


fensivas que se le ofrecfan después de
D2R, A2D y ()-...{)-(), aceptando la bata-
lla en campo libre.

P4CR 12 elC
D6T 13

Como era de esperar, el ataque directo


sobre el Rey se produce sin pérdida de
tiempo. Esto es característico en la defensa
francesa, como no lo es menos que fre- A primera vista, no parece muy nece.
cuentemente ofrezca este planteo el es- sario este movimiento, pero en realidad
pectáculo de una carrera de ofensivas está muy bien calculado, según se aprecia..
simultáneas de ambos beligerantes: el rá posteriormente. Como prueba de 111$
blanco, sobre el enroque corto negro, curiosas posibilidades del negro, destaca..
y el negro, sobre el enroque blanco largo. remos que si las blancas, en este momento
Ahora las blancas han organizado la ame- hubieran considerado llegada la ocasi6d
naza directa 14. P x P, seguida de CSC. de insistir en el ataque por vía de 17. PST,
se hubiesen encontrado, después de 17.
13 CIR .. " T x C; 18. A x T, P4C!, con la des-
agradable sorpresa de la prisión de su
Psicológicamente, siempre es una ven- Dama, que contemplaría con justa alarma
tlija el obligar al adversario a las maniobras el proyecto negro CID-2A.
específica y absolutamente defensivas. Sin
embargo, este movimiento concede tam-
bién al negro cierto horizonte activo, pues- 17 CID
to que a su vez amenaza P x P. CID 18

AlC 14 PxP Idéntica razón que movió a las negras


PxP 15 D1R a reservar su Caballo de Dama para la
defensa, decide al blanco a aprestar al
Habilitando la casilla ID para el Caba- ataque su Caballo de Dama. Esto es lógico~
llo de Dama, que contribuirá a la defensa. El Caballo de Dama negro debe actuar en
el contraataque que sobre el enroque largo·
P4TR 16 TIC blanco y el Caballo blanco de Damá
debería contrarrestar la acción de aqu61.
Ya han pensado las negras en el in- No existiendo dicha acción no hace falta
evitable contraataque tan típico de la de- tal defensa. El blanco tiene como itinerario
fensa francesa, según hemos indicado. para su Caballo la ruta 3R-C4-6A.
Pero, de todas formas, la disposición de
las ánnas blancas es muy agresiva, y un 18 P4CD
198 ,
,i
pués de 31 •...• P x C. P x P; 32. C x D. C4A. lo más enérgico seria 32. T x PI.
T x D +. RIC; 34. P x C. etc. ganando fácilmente después de 33. . ..•
A x T; 34. D x A +. R2C; 35. D x C.
D6A 32 A2D P x C. D x P +. Pero también la jugada
elegida es tanto como abandonar.
Tampoco ahora es posible la captura
del Caballo. so pena de abandonar des- C7R+ 33 CxC
pués de 33. P x P. Y en cuanto a 32....• DxD 34 Abaudonau.

CAMPEONATO DE MOSCU
1944

APERTURA ESPAR'OLA Más para habilitar la casilla de Alfil


de Rey al Alfil o al Caballo eventualmente.
BLANCAS: Lyublinsky que para situar en juego la Torre.
NEGRAS: Botvinnik
P3C 12 TIC
P4R 1 P4R A3R 13
CJAR 2 CJAD
ASe 3 P3TD Quizá esto haya sido un error. pues el
A4T 4 CJA Alfil en fianchetto en combinación con el
AxC 5 juego de Caballos y P4AR podfa haber
tenido buena significación.
Esta idea diferida del cambio. conocida
por variante Treybal. no ofrece grandes 13 P3C
atractivos para el blanco. aunque ha sido P3A 14
ensayada numerosas veces por A1ekhine,
Flobr y Schlechter. Procurando la casiUa 2A para la Dama
y controlando 4D. Sin embargo. era más
5 PC xA lógico y preferible P4A.

Lo más conocido es 5•...• PD x A; 14 P4TD


6. C3A. ASCR.
Las negras tienen dislocados sus Peones
CJA 6 P3D del flanco de Dama y el ideal para eUas
seria la liquidación.
P4D 7 cm
D2A 15 DlR
Para mantener el centro a toda costa. TRlD 16 C4A
C1R 17 CJR
PxP
0-0
C2R
,8
10
PxP
A3D
0-0
CJD
P3A
P4A
18
l'
20
C5A
A3T
P4AD
C3C 11 TIR DlD 21
200
AlR 43 DxP+ 45 TxT
DxD 44 TxD AxA 46 T6R
A x PC 45 A6C 47 TxPR
A x PA 48 T7R
Lo que sigue no es más que la aventura TlD 49 ASC
desesperada antes de rendir las armas. Abandonan.

HARZBURG
1939

P. D. DEFENSA NIMZOINDIA Esta conducta del negro es lo más con-


secuente con el espíritu <<activo» de la
BLANCAS: Stahlberg defensa Nimzoindia. Si las negras se de-
NEGRAS: Eliskases ciden por cambiar el Alfil, el blanco
tomará con Dama, reservando la posibi-
lidad de apertura de la columna de Alfil
P4D 1 C3AR de Dama para un ulterior emplazamiento
P4AD 2 P3R de la Torre y disponiendo de la casilla
C3AD 3 ASC
2AD para situar la Dama, además de
D3C 4 contar con la ventaja de la pareja .de Al-
files. También podrá el negro decidirse
El camino a seguir en las aperturas, en por 4. . .. , D2R, tratando de mantener
el momento que define la marcha de la la situación; pero en tal caso, la conducta
lucha, ha sido siempre motivo de razo- blanca será 5. P3TD, definiendo a ultranza
namientos y análisis, generalmente, en- los proyectos del Alfil negro. Por otra
contrados y dispares. De esta forma, se ha parte, el negro puede elegir la <<variante
observado una táctica definida en cada Zurich» 4.... , C3A, que lleva a igualdad
época hasta que otros ensayos la refutaban en la siguiente linea 4.... , C3A; 5. C3A,
y era sustituida por otra. Cada una de P3D; 6. P3TD, A x C+; 7. D x A,
estas tácticas se sujetaban a un principio P4TD.
estratégico especial de acuerdo con las
ideas del tablero de la época. PxP 5 C3A
La jugada elegida en esta partida por C3A 6 CSR
Stahlberg no está aceptada por los prin-
cipios actuales.. Fine. ha demostrado que Según Fine, esta jugada, de tan dinámica
la Dama, a la larga, está mal situada en apariencia, no es en el fondo sino una
esta casilla; su emplazamiento natural pérdida de tiempo, recomendando la simple
es 2A. Otras lineas aceptadas son, por continuación 6. . .. , A x P (un ejemplo
ejemplo, 4. P3R, linea recomendada por del propio Fine es su partida contra
Rubinstein, y que con 4. D2A comparte Kashdan en el torneo Nueva York de 1936),
las preferencias de este planteo posicio- que fue así: 7. P3R (si 7. A5C también las
nista. También la idea de Sfunisch 4. negras consiguen buen juego); 7.... , ~;
P3TD es aceptable. La jugada del texto 8. A2R, P3CD; 9. ~, A2C; 10. P3TD,
fue introducida por Spielmann. D2R; 11. TlD, TRlD; 12. A2D, P4D.
4 P4A AlD 7 CxA
202
Acaba de salir realmente el blanco de la nCR 11
apertura y ya tiene que recurrir a los mo- 11 AxC
vimientos de defensa; ha bastado para DxA 11 AxP
ello una sola jugada inconveniente.
Las negras han entrado en la fase RIO
16 C5D1 lutiva por vfas de solidez, obteniendo bI
superioridad mínima suficiente.
Forzando un cambio que valorizará la DxP+ 23
acción coJijugada de los Alfiles sobre el
enroque. Intentando un difícil equilibrio en la
liquidación a cambio de la calidad. Desde
CxC 17 AxC luego, la actitud pasiva no concederla es-
ese 18 A4A peranzas algunas.
DlD 19 TDIAR
23 DxD
Ya están todas las armas negras, ex- TxD+ 24 RxT
cepto la Dama, en acción directa sobre RxA 15 T5D
los objetivos 2AR y 2CR blancos.
La potencia de las Torres negras y la
C4D 20 vulnerabilidad de los Peones blancos del
flanco de Dama anuncian la victoria.
No puede pensarse en una reacción
contraofensiva por vfa de T x P a causa TlD
de DST.
Tratando de evitar mayores males.
20 A5R
16 TxT
Esto es lo que concede más inmediata AxT 17 TSA
ventaja. AbaDdoDan. 28

TORNEO DE MOSCU
1944

DEFENSA INDIA DE REY no puede ser otra que la lucha por el


dominio central. Sin embargo, de acuerdo
BLANCAS: A1artosev con la táctica de las indefiniciones, tan en
NEGRAS: Smyslov armonía con el 'moderno tratamiento del
juego, constituyen ideas notables las que se
P4D 1 CJAR derivan de 3. P3A (que inicia el plan
P4AD 2 P3CR de Nimzowitsch y cuya continuación
ClAD 3 puede ser 3.... , P4D; 4. P x P, C x P;
S. P4R, C3C; 6. C3A, AlC; 7. AlR),
Esto es lo más usado y tambim. lo más Y de 3. P3CR, si bien esta última ofrece
lógico y COIisecuente con el objetivo de la a las negras oportunidades fáciles para la
apertura de PD, cuya verdadera finalidad inmediata igualdad.

204
TORNEO KAUTSKY, PRAGA
1929

GAMBITO EVANS ACEPTADO ridad, bien jugando 9. PSD. 9. C3A o 9.


AlC. La respuesta 6....• 7. 0----0. A3C,
BLANCAS: Hasek - NEGRAS: Tereda entra. por inversión de jugadas. en la de-
fensa de Lasker.
P4R 1 P4R
C3AR 2 C3AD 6 P3D
A4A 3 A4A P4D 7 A3C
P4CD 4
El capitán de la Marina británica
N. D. Evans (1790-1872) introdujo este
gambito en 1824. Posteriormente. el cé-
lebre maestro ruso Tchigorin le hizo objeto
de muy profundo estudio. habiéndosele
considerado poco menos que invencible.
lo mismo en el ataque que en la defensa
del Evans. Después. el extraordinario
pensador Emmanuel Lasker halló la de-
fensa más eficaz contra tan diabólica linea
de juego.
La presente partida. notablemente con-
ducida por dos aficionados checos. nos
sirve de fiel demostración de la precisión
que exige a las negras el tratamiento de
este planteo. Bastó el error de la 12 jugada
para provocar una precoz y brillante vic-
toria blanca.
He aquí la famosa defensa Lasker. El
4 AxP negro es ahora quien obliga a la decisión
P3A 5 A4T a su contrincante, respecto a la posición
0---4 6 de Peones, rehusando la peligrosa captura
del Peón ofrecido.
Más preciso es 6. P4D. obligando a las
negras a adoptar una decisión. Si 6. . .. , P xP 8
P x P, la lInea usada es 7. 0----0, P x P;
8. D3C, D3A; 9. PSR, D3C; 10. C x P, El técnico italiano Luiggi Milani ha
CR2R; 11. A3T!, A x C; 12. D x A. encontrado en este punto un refuerzo no-
0-0; 13. TD1D!, T1R; 14. TR1R. TD1C; table a la causa del gambito Evans. En
15. A3D. con fuerte ataque. Si el negro, lugar de esta jugada resolutiva, propone
en lugar de aceptar el tercer Peón, se 8. P4TD manteniendo la situación expec-
decide pÓr la defensa normal 7. A3C; tante en el centro y atacando en el ala de
8. P x P, P3D. el blanco obtiene superio- Dama al aparentemente estabilizado AR
208
La inconveniencia de estos avances tan hallarse en posesión de varios elementos
prematuros del Peón están ahora bien espirituales y materiales. El primero de
visibles: al retirar la Dama, permite que ellos, de tipo espiritual, y consiste en
el blanco sitúe en buen desarrollo su pareja «tener razón»: hay que atacar con razón.
de Caballos y, además, resulte absoluto Para ello es necesario que el dispositivo
dueño del centro mediante P4D. de las armas se halle perfectamente esta-
blecido. En este caso que nos ocupa, las
6 DlD negras ni han completado su desarrollo,
A4A 7 ni han puesto a su Rey en seguridad, ni
han consolidado el centro, donde las blan-
cas amenazan por su gran dominio; no
Es más lógico el avance del Peón de obstante lo cual, definen en esta jugada,
Dama, seguido del desarrollo del Alfil 13. P4TR, su decisión de lanzarse al ataque.
a 3D.
No «tienen razón».
7 CJA 14 AlD
ASCR
0-0 8 D1A PSD 15
P4D 9 P3R
Tampoco era mala la perspectiva que
Las negras tienen una situación «apre- ofrecía 15. PSR, cuya continuación muy
tada». La jugada «expansiva» ASC tam- posiblemente hubiera sido: 15 • •.. , C4D;
poco resolverla nada en esta situación, 16. A x A, C x A; 17. C4R, C4A;18.
y las blancas, con P3TR, mejoraban aún PSD. Pero, en cualquier caso, esta acción
más sus posibilidades estratégicas.
central deberla servir de oportuno aviso
a las negras sobre las consecuencias que
D1A 10 AlR inevitablemente ha de llevar implicitas su
AlD 11 CDlD desafortunada idea de contraataques en la
AlD 12 CIA 13 jugada.
TRIR 13 P4TR
15 P5T
Una decisión inconsecuente, totalmente CxP 16
al margen del espíritu del actual concepto
de la lucha ajedrecística. Para iniciar un Asimismo pudo jugarse sin inconve-
ataque, el ejército asaltante necesita niente 16. CIA, evitando complicaciones
que, sin embargo, han de ser favorables,
y sin temor a P6T.

16 C x PD
PxC 17 AxA
C(4T)SA 18 A3A

Otro grave error en la concepción estra-


tégica. Era necesario mayor flexibilidad de
criterio y decidirse por 18.... , ~"
tratando de animar la defensa de mejores
energías y posibilidades.

OSA 19 RlD

No es posible 19. . .. , D3C, pues el


blanco continuaria 20. C6D +, R2R;
(Posición después de 14.... , A2D) 21. C(3C)SA +, etc.

210
A pesar de la apariencia inofensiva de
sus movimientos poco activos de la aper-
tura. el blanco ha conseguido una muy
fuerte posición central. especulando hábil-
mente con los puntos débiles negros. que
son, principalmente. el desarrollo retra-
sado del Alfil Y Caballo.
16 AlA
AlA 17 TRlD
Era necesario cambiar los AIfiles. pues
la apertura de la columna de Torre de
Rey supone un probable peligro.
AxA 18 PTxA
C4R 19 C3C
Este Caballo se aleja indebidamente del
lugar de la pelea. que no es. por cierto. el (Posici6n después de 21 ....• A x P)
ala de Dama. En lAR hubiera alcanzado.
sin duda. mejor misión.
esa DST
P3CD 20
Permitiendo un bello final. Aunque in-
Un movimiento bastante sutil. No sólo suficiente. pudo intentarse 22•...• T x P;
consolida la formación de Peones del 23. T x T. D x C. etc.
centro. sino que trata de «distraer» a las
armas enemigas hacia el lado de Dama. T3T 23 DlR
organizando. en cambio. una ofensiva so- esCII 24
bre el Rey negro. Abandonan. pues no existe posibilidad
20 Ala alguna de defensa.
T3DI 21 AxP Si 24....• D x C; 25. TST +. R x T;
26. C x P +. etc.; y si 24....• TlAR; 25.
Sin prever el peligro que se cierne sobre C(5C) x PA. T x C; 26. C x Pe. ga-
la Dama. nando.

TORNEO DE LONDRES
1922

GAMBITO DE DAMA REHUSADO La apertura se inicia rectilfneamente por


las vfas ortodoxas de la defensa contra el
BLANCAS: R. Reti gambito de Dama, y la estructura general
NEGRAS: Znosko-Borowsky que se deriva de este planteo está inspira-
da en el severo sentido posicional de nues-
P4D 1 P4D tro tiempo. adobado con la fina modula-
P4AD 2 P3R ción de retención en proyectos y ejecu-
C3AD 3 C3AR ciones tan caracterfstica de la concepción
ASC 4 Cmn hipermoderna. A este último propósito
212
Con este sencillo golpe, el blanco «ex- Cubierto ampliamente el objetivo POli
plica» a su adversario la debilidad que ha cional y traducido este objetivo en 111
sido consecuencia de su esforzado arrojo campo de grandes posibilidades operativac
para adquirir la iniciativa. las ideas de combinación encuentran bue
nas oportunidades de manifestarse. Aborll
19 CR4D el valor material de las armas puede . .
D5T 20 RlC sacrificado en aras de la eficaz ofensiva.
AxC 21 PxA
22 TxC
A5R+ 13 nA
PxP 14 PxP
DxP+ 15 RlA
DST+ 16 RIC
TIC! 21
Una jugada típica de la escuela modc:rnao.
que sin falsos espejismos sabe atender a las
menores oportunidades, por alejadas qUCII
estén del terreno de la batalla.
27 T(6A)3A

Las blancas hablan previsto la siguiente


respuesta a la <<lógica» maniobra: 27•...•
A4C; 28. T x Al, P x T; 29. A x T.
D x A; 30. T8R +, etc.

Si 21. ... , C x A, seguirá 22. P x P,


nc lB AIR
P x P;23.C x A,D x C;24.D x PC +
nc+ 29 AJC
TxA+ 30 TxT
seguida de T4R, etc. D8T+ 31 RlA
DxD 32 TIA
C x Pl 22 D4T 33 AbandOll8D.

NUEVA YORK.
1927

GAMBITO DE DAMA REHUSADO Ha quedado planteada la defensa Man-


hattan o americana, que asimismo puede
BLANCAS: Capablanca ser originada ~ el blanco juega S. P3R,
NEGRAS: Spielmann en lugar de S. ASC. El espíritu de esta
defensa es paralelo al de CambridM
P4D 1 P4D Springs y armoniza bien con los gustoS
C3AR 2 P3R actuales en la concepción estratégica di!
P4A 3 CID los planteos.
CJA 4 CRJA
ASC 5 ASC P x PI 6
214
impresión. pues la reserva blanca P4TD caso era preferible a la «lógica» jugacb¡
en un momento justo puede ser una irrup- que sigue en el texto. castigada por Capa.
ción en perfecta regla. blanca por un golpe de extraordinaril
energía.
15 C5R
17 D4D
Oaro es que no hay tiempo para jugar P x PI! 18
15....• A2C. pues como más arriba queda
indicado. la amenaza blanca P3A y P4R El fruto de la labor de <<maChaqueo» en
hubiera agotado virtualmente los recursos las debilidades negras del flanco de Dama.
defensivos. La ventaja derivada de las conquistas po-
CxC 16 PxC sicionales adquiridas. se traduce en esto
caso en la posibilidad de este decisivo
Aparentemente y no obstante el exce- sacrificio..Tras la caída de estos Peones
sivo alejamiento de los Peones. la estruc- a cambio del Alfil. se sucede una insoste-
tura del dispositivo negro no ofrece graves nible situación negra.
inconveniencias. más aún considerando
que al cambiar de casilla este Peón de 18 D xA
Dama. se elimina su ulterior debilidad por
el posible apoyo de que puede ser objeto No hay otra disyuntiva; la aceptación
por parte del Peón de Alfil de Rey. Pero es totalmente obligada para mantener la
Capablanca inicia ahora precisamente los esperanza.
golpes que han de valorizar su bien per-
filado proyecto. completándolo enérgica AxP 19 TIC
y brillantemente con la idea de una per-
fectamente calculada entrega. Si 19..... T2T seguirla 20. P6C!. D x D;
21. P x T!!. D x T (21. .... A2C. 22.
P4TD 17 T x D. A x A; 23. T x P); 22. T x D.
C3C; 23. TIC. etc.
Ya no ofrece duda a la consideración del
negro la gravedad del problema defendido P x PI lO T4C
que de este asalto se deriva. La defensa D7A 21
mediante 17..... TIC no será satisfactoria
después de 18. A4A. TlC; pero en todo La Dama. en conducta rectilínea. ru-
brica con la conquista de esta casilla su
victoriosa influencia en el flanco.
21 C3C
P7T 22 A6T
T(IR)ICI 23
Avivando con toda energía la llama que
devora al enemigo por la brecha abierta.
23 TxT+
En el caso de 23 ..... TIA. las blancas
disponían de un final también muy elo-
cuente por vía de 24. D xCI. T x D; 25.
T x T. amenazando 26. TSC. etc.
TxT 24 P4A
AlA 25 P5A
(Posici6n después de 17..... D4D) PxP 26 A............
216
Desde luego la captura con el Peón era La evolución de los proyectos estta.
evidente. pues con ello queda bien man- tégicos. tan consustanciales con las noJ'lllQ
tenido el esencial punto 4R. al mismo modernas. dejan ver fácilmente la oonefi,.
tiempo que se procede a la apertura de la ciosa contribución que la iniciativa infor-
columna de Alfil de Dama donde el atra- ma al ejército blanco. cuyo ataque final
sado Peón enemigo puede ser objeto de no puede tardar en definirse. Un ataque
ulterior ataque. Si 16. D x A las negras que tiene ya la virtud de aparecer oculto
liberarfan bastante su juego con 16. .. .• a la vista del enemigo. motivado precisa-
D3T. Y si 16. T x A ocurrirá otro tanto mente por aquella evolución en los pro-
con 16..... ASC. yectos estratégicos.
16 cm 21 DlA
D4C 22 AlA
T3T 23 P4A

Perdiendo la calma. Pero de todas for-


mas no habrá ya salvación. Vemos un
caso. 23 ..... P3C; 26. D4T. P4T; 25. P4C,
A2R; 26. D3C. PST; 27. D2C. R2C; 28.
PSA.

D4T P3T
P4C CIC

Para contribuir con la Dama a la de-


fensa.

PxP 26 PxP
C4TI 17 TIC 27 RZT
DST 28 TlR
Iniciando la ofensiva simultánea en D6C+ 29
ambos flancos.
Abandonan. pues no hay ya esperanza
17 DlD alguna. Si 29..... RITel mate se producirá
T(IR)IA 18 TDIAD en cuatro jugadas empezando por 30.
T3C 19 AlA T x P +. y si 29..... RIC. se derrumbará
P5R 20 AlR igualmente la posición con la misma
P4D 21 jugada.

218
14 P4A 19 P5T
CID 15 CA AlT 20 P5D
AJe 16 DZD D4A 21 PxPC
P3ro 17 P x PD 22
Habrá que estudiar aquí 22. P6R.
22 A7A
TlAD 23 P6C
A1C 24 C3R
D3R 25 CxP
C3A 26 CxC+
DxC 27 rolA
DlR 28

Si 17. C3A seguirá 17.... , PID; 18.


P x P, P5A; 19. AlD, C4D; 20. DlA,
ASC.

17 P4ro
rolO 18 PSC

Forzando la irrupción. 28 ASCDI


P6R 29
PTxP 19
Un esfuerzo supremo que da motivo
a un final bien concebido y rápido.
Quizá era preferible 19. PA x P con la
posible linea: 19. . .. , P5T; 20. A2T, 29 PxP
P x P; 21. C4A, D3R; 22. C6D, A7A; DxP+ 30 DxD
23. TIA, P6C; 24. A1C, A x A; 25. T x D 31 A4AR!I
T x A. Abaudooan.

220
con el desarrollo de la idea combinativa C7R + 25
de las blancas. cuya bondad no es des-
virtuada en absoluto. Ganando la calidad y proyectando crear
una situación peligrosa en las columnas
15 D2A ID y CD.
P4CD 16
25 TxC
Levantando nuevas amenazas en el PxT 26 DxP
flanco de Dama. PxP 27 P3AR
16 CxC D7C 28 OlR
DxC 17 C3A T7D 29
D3A 18 TIAD?
También era bueno 29. A7A.
El procedimiento más indicado hubiera
sido 18....• A3D con el proyecto C4D 29 AlA
y O---{) eventualmente. Ahora el Caballo
blanco será sostenido en su dominante Claro está que si 29....• P x A. se-
posición avanzada. guma 30. T X C. P x T; 31. T x P +.
etcétera.
P5C 19 0-0
AlC 20 A4A 30 P4R
AxP 31 C6R
El dominio de la gran diagonal consti- A x PI 32 PxA
tuye siempre un codiciado objetivo. y en
este caso se ve incrementado por el con- No hay otro recurso. ante la amenaza
trol de la casilla SR. mortal T x P +. ya que si 32. . ..• D3C.
seguirá igualmente 33. T x P + !
20 CIR
PSA 21 TlR 33

Con la mayor energía y renovado im- Sería un error 33. T3A. que continua-
pulso. tratan ahora las blancas de habilitar ría 33 ....• CSC.
la columna de AR.
33 TIC
21 C3D D3A 34 TlA
P6A 22 C4A D3C+ 35 RIT
m1D 23 TRIR D3TR 36 A3T
ASR 24
Un recurso bien apurado.
Desplazando aún más a la Dama negra
del campo de batalla. T7R! 37 OlA
TlxC 38 TxP
24 mc P7T 39 DxT
P8T=D+ 40 AlA
No es posible 24....• A3D por 25. D x P +! 41 Abandonan.
T x A!. y tampoco puede pensarse en 24.
...• C3D. pues se perdería rápidamente Pues no existe defensa posible alguna.
después de 25. D3C. como fácilmente puede apreciarse.

222
dispersión de fuerzas. abriendo al enemigo CxA 17 CxC
posibilidades brillantes. C5D 18
AlA 13 C xPT Amenazando (si 18..... D4R). 19. D3A,
seguida de A4A y C7A + eventualmente.
La ofensiva blanca aumenta en vigor en
cada movimiento. y poco a poco se va
destacando el gran error de haber des-
amparado confiadamente al monarca
negro.
18 D2T
C4A 19
Abriendo las posibilidades a un sacri-
ficio de pieza sobre el Rey en el centro
del tablero.
19 C(5A)4R
Sin duda. las negras estimaron la posi-
bilidad de que su adversario hubiese con-
cebido. en efecto. una combinación de
PSR 14 sacrificio. Pero consideraron insuficiente-
mente el alcance de tal posibilidad. pues
Contestando a la maniobra con la Ravinsky ha ido muy lejos en su brillante
maniobra. e iniciando una brillantisima proyecto. De haber previsto en su verda-
combinación a base de la falta de seguri- dero alcance la idea enemiga. hubiese
dad del Rey enemigo. jugado el negro sin duda D3C. aunque en
todo caso no existe ya. realmente. defensa
14 P x P eficaz.
Naturalmente. no puede proyectarse T x CI 20
18..... C4D. pues con 19. C x C se des-
harla la posición negra en pocas jugadas. El sacrificio de la calidad no es incon-
veniente como preludio al otro sacrificio
C6A! 15 en cartera. Esto es lo que faltó al negro
por considerar.
y la ofensiva blanca se ha impuesto ya.
No podfan ahora las negras insistir en sus 20 CxT
planes. y habrán de reducir sus ideas a la CxP 21 PxC
defensa de su amenazada posición.
No queda otra opción. sino aceptar el
15 D2A «obsequio».
CxP 16
DxP+ AlR
El Peón blanco ha sido vendido a un
precio bien elevado.
Tampoco ahora hay opción. ya que 22
16 C5A .... R1D. seria castigado 23. ASC + etc.

Ahora es ya tarde para 16..... A2R. TIR 23 D4A


pues las blancas castigarfan el tardfo plan
con 17. T x A. C x T; 18. A6A. ¿Qué otra cosa?
224
Pese a su carácter poco grato, quizá 11. Como se verá en seguida, esto es un
PSR ofreciera mejores perspectivas. error, y en todo caso es la Torre de Dama
la que debió ocupar esta casilla.
11 CxP
19 ASC
La configuración central de peones P3A 20
hubiese sido dislocada si esta captura 20 P5R!
hubiese tenido efecto con el Peón debido AxP 21 TxA
a la respuesta blanca 12. PSA. AIR 22
A2D 12 TlR
esc 13 Las blancas buscan en la confusión lo
que no les ofrece el normal desarrollo de
El blanco pudo decidirse aquí por las los planes enemigos. Ahora se hace visible
jugadas de liquidación 13. A3A, PSR; 14. lo conveniente que hubiera sido en la ju-
A x e, P x A; lS. A x D, P x D; 16. gada 19 decidirse por mID, pues en tal
A4T, Y el Peón negro se ganaba seguida- caso la retirada del Alfil a JAD sostenía
mente. el juego.

13 P3TR 22 D4C
C4R 14 A3R PxT 23 AxT
0--0 15 TIAD TxA 24 DSC
D4T 16 ClD T5D 25 P3CD
D3T 17 C4A D3D 26 TIR
CxC 18 PxC A3A 27 D x PR
TRID 19 DxD 28 TxD
alA 29

Aunque, realmente, la causa de las


blancas no encontrarán la igualdad de-
seada, también se perdía con 29. T6D Y29.
P3CD. La del texto concede mayor resis-
tencia.

29 T x PA
T6D 30 esc
TSD + 31 alT
A x C 32 TxA
TID 33 R3C
R3A 34 R4A
P3CD 35 R3R
TSD 36 P5AI
T4D 37 P4CD
alR 38 P4A
P4C 39 P x PCD!
(Posición despuis de 20. P3A) Abandonan.

226
tamente el ala real enemip. Al hacerlo asf ¡Un verdadero acierto I Esta jugada ca
desprecian el sentido posicicmal que infor- el primer toque de aviso a la inestabilidad
mó sus movimientos del planteo en el del Rey negro.
centro. Ahora las blancas cuentan con la
gran oportUDidad futura de PID abriendo 19 mlCR
a su Alfil de 2CD la gran diagonal. El Rey TICR 20 AlR
negro queda abandonado a su suerte en PSDI 21
el centro del tablero y no existe compensa-
ción en el ataque sobre el Rey blanco. Iniciando ya el ataque directo.
En esta lucha de ideas se define muy bien
el permanente valor del centro y los incon- 21 PR x P
vcnientes de no apreciar su importancia en PxP 2l PxP
todo momento.
No es posible la captura con el Caballo,
mm 14 pues en tal caso seguirla 23. T x el,
P x T; 24. D7A, ganando.
Despreciando el ataque negro, las blan-
cas refuerzan su poder central apoyándolo D7A+ cm
con sus armas pesadas.

14 PxP
PxP 15

La apertura de la columna de Caballo


está natura1mcnte bien prevista por el
blanco, que cuenta con tiempos suficientes
para atender a la debida defensa. mante-
niendo su fuerte ventaja central.

15 TICR
RlT 16 A2D
mAl 17
Un movimiento muy fino de variados
efectos: si 17•... ,0-0-0 seguirá 18. C1A,
gaD8Jldo; si 17. C4T, seguirá 18. D3T; y
si 17...., ne, entonces 18. PID!, PA x P;
19. e x Al T x PI!
17 Explotando en brillante combinación la
DIAl 18 vulncrabilidad del Rey negro.

Demostrando una muy eficaz elasticidad Z4 AxA


de juicio. Ahora no era bueno 18. PSD, TRmll 25
pues el negro disponla de la siguiente Ifnca:
18. ..., P x P; 19. e x A. e x e; 20. Esta Torre. que ya cumplió su misión
P x P, P4R!, etc. Si el negro contesta en defensiva, lle~ al ataque en el momento
este momento 18..... C4T, la conducta justo. decidiendo la victoria. ¿De qué le ha
blanca será la que sigue en el texto. pero servido a las negras el acopio de su pesada
con la jugada intermedia 19. A x e. artillcrfa en su vana amenaza? El blanco
juega con precisión. y obsérvese que no
18 nc hubiera sido suficiente 25. e x e debido
A3TI 19 a 25 ..... D3A. Por otra parte, tampoco de-

228
TORNEO DE MARGATE
1937

DEFENSA NIMZOINDIA que' saben deponer las breves inexactitudes


con golpes de tal fuerza, que no parece
BLANCAS: Keres - NEGRAS: A1exander exista paralelo entre la pequefiez del error
y la JDaIIÜtud del castigo.
P4D 1 C3AR
P4AD
C3AD
C3A
1
3
4
P3R
ASe
P3CD
A4A
ACiD
,•
10
PxP
C3T

P3CR 5 Ale
Ale ti La enersfa de cada golpe parece respon-
der a una progresión geom6tric:a. Las ne-
La partida, cuyo planteo ha derivado en gras han de esforzarse en la defensa cada
una variante de la defensa india de Dama, vez más apurada, procurando aunarla con
parece va a ser orientada en planes pura- un esplritu de lucha activa, pues ante la
mente posicionales. Pero el combativo es- fuerza de este ataque, una conducta pasiva
plritu de Keres lIevani la lucha por sen- significarla, desde luego, la seguridad de
deros de espeCial violencia. la derrota.

ti DIA 10 DxP
7 P4A1
Parece que todo ha quedado a salvo y,
Este movimiento no estA en conjunción por afladidura, se cuenta con dos Peones
con el planteo algo complejo elegido en la de venUúa. Ahora las blancas no pueden
defensa negra. 7 •... , P4A, estarla más jus- realizar su amenaza A x A, pues con
tificada si el Alfil de Rey estuviese en 2R, D x A las negras controlarfan su casilla
aceptando la sólida posición algo restrin- 3D, tan imprudentemente abandonada a la
gida de la defensa tfpica india de Dama, temprana furia del enemigo. Pero las
entre cuyos objetivos, naturalmente, figura blancas cuentan con muy variadas pera-
la conservación de la pareja de Alfiles. pectivas de ataque, y la fantasla de Keres
Ahora, este movimiento, que incomunica al nos las va a ofrecer en una lección demos-
Alfil en SCD con sus casillas 3D y 2R, va trativa de las bellezas combativas de la
a ser explotado por Keres con redoblada nueva escuela.
energ(a.
D4T 11
C5CD •
Nuevamente se encuentra el negro ante
Aún no ha sido completado el planteo, dificiles problemas de defensa. Ahora la
y ya el negro se encuentra en plena opre- amenaza blanca A x A es realmente an-
sión. Ha bastado para ello una leve im- gustiosa, y hay que detener al mismo
precisión de concepto en la estructura de- tiempo la otra amenaza no menos de cruel
fensiva. He aquf una muestra muy elo- C7A +, ganando en ambos casos breve-
cuente de las conquistas teóricas modernas mente.
232
Para evitar el sacrificio calculado por 15 AxT
las negras al jugar 9....• A4AD. era nece- DxA 16 TDIR
sario 11. D2R. en lugar de la vieja conti-
nuación del texto. La idea 16....• C4R sería refutada sim-
pkmente con 17. D4T. Ahora. natural-
11 C x PAR mente. no es posible esta jugada. bajo
pena de mate en 8R.
He aqui el ensayo de Botwinik. La con-
tinuación usual 11. C x C concede a las D3C 17 C4R
blancas. después de 12. A x C. magnificas
perspectivas por el mejor radio de acción
de sus piezas. También ha sido muy ensa- Hasta este momento. los frutos de sacri-
yada la linea 11 ....• P4A. Observemos las ficio de la 11 jugada están bien de mani-
variaciones que se derivan en esta lucha de fiesto: las negras han obtenido una movi-
este interesante y frío sacrificio. lización veloz y las amenazas son real-
mente agobiadoras. No es posible todavía
TxC 12 P3A! para el blanco la liberación de sus retra-
sados movimientos del ala de Dama.
Hay que aceptar este Peón. aunque sea y las negras no han conce9ido respiro.
accediendo a los deseos negros de movi- El cambio de Caballos es imposible por
lizar inmediatamente su artillería gruesa. el mate directo en 8AR previa entrega
De otra forma. la constitución de un cen- de Dama.
tro de Peones negros sería decisiva y. en
unión de la calidad. suficientemente com- AlD 18
pensadora del sacrificio.
No solamente deja de significar esta
PxP 13 DxP jugada la liberación en el desarrollo. sino
que realmente supone un retroceso en este
Desde luego. la captura con la Dama es sentido. ya que viene a ser un obstáculo
indicadisima. ya que incrementa la movili- más para la comunicación de la Torre con
zación negra de manera más amplia. De el Rey. Yes que. en verdad. las blancas no
todas formas habrá que estudiar la posi- disponen de buenas «recetas» para su do-
bilidad 13. A x T +; 14. R x A. lencia.
D x P.
OlA 14 C6D

Las blancas. a cambio de la pieza de


ventaja se ven en una agobiadora falta
de acción y han de estudiar sus tiempos
con el mayor cuidado. Esta jugada es. sin
duda. superior a 14. C3C. que ofrecería
la siguiente linea de juego: 14....• A x T +
15. R x A. C4R y si ahora 16. C4D. en-
tonces 16....• A5C.
14 ASCR
R1T 15
Bien acordado. Obsérvese que la tenta-
tiva de inmediata liberación. mediante
15. C4D? sería faltal. por la sencilla con-
tinuación 15....• C x C. y si 16. T x D
seguirá 16. ...• C x A jaque a la des-
cubierta. etc.
238
Ahora la combinaci6n no es posible, Preparándole para acercarse al Peón
pues el negro, sacrificando calidad, salva tan pronto sea posible.
el peligro inmediato, aunque su causa no
tensa ya salvaci6n. 43 R3T
36 T8R+ P3CD 44 RlC
DxT 37 DxA A3A 45
T7D 38 TxT
AxT 39 Facilitando el camino al Rey. Obsérvese
que en la anterior jugada el blanco observ6
Ahora todo se reduCe a problema de una táctica de espera muy acertada, ya que
pura técnica. a nada hubiera conducido 44. D8R, por
44.... , R2C, y si 45. D7R +,45 .... , R3T,
39 P6D con lo que se hubieran perdido tiempos.
A4C 40 P7D
D1R 41 POSC
D3D+ 42 P3C 45 DlAR
R1C 43 46 Abandouan.

TORNEO DE BLACKPOOL
1944

DEFENSA SICILIANA cambio, la jugada del texto asegura el


mejor desarrollo.
Gambito del ala 3 P4D
PxP 4 .D x P
BLANCAS: Abrahams-NEGRAS: Mieses P4AD 5
P4R 1 P4AD Una decisión muy justa. Si las negras
P4CD 2 toman al paso, está claro que las ganancias
de tiempos blancos ofrecer(an las mejores
La vieja idea del gambito del ala ha dado promesas.
motivo a Keres para un plan que podrIa
titularse <<gambito del ala diferido», y que 5 DlD
consiste en preceder esta jugada de 2. C3AR 6 C3AR
C3AR, con la finalidad de evitar la ulterior P4D 7 P3R
liberación negra P4D. A3D 8 A2D
0-0 9 A3A
2 PxP PSDI 10
AlC 3
Un nuevo sacrificio estratégico. El obje-
La conocida oferta en este gambito tivo es la explotaci6n de la abierta colum-
3. P31D, si es rechazada por el negro na de Rey, para presionar directamente
mediante 4•... , P4D, no seria eficaz. En sobre el monarca enemigo.

240
INDICE DE APERTURAS

Págs.

Albin, Contragambito........................................ 39
Alekhine, Defensa................. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 144
Bird, Apertura............................................... 160
Caro-Kan, Defensa................................. 158, 209 211
Catalán, Sistema . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 242
Centro, Gambito deL.... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28
Cunningham.................. .......................... 20 58
Cuatro caballos, Apertura de los... . . . . . . . . . . . . . . . . . 111, 136 151
Dama, Apertura de... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 92 126
Dama, Gambito de. 30, 79, 89, 107, 109, 113, 119, 121, 123, 138,
149, 174, 187,212 214
Dos caballos, Defensa de los. '.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 63 167
Escandinava, Defensa..................................... 76 94
Escocesa, Apertura..... . . .. ................ .... .......... 99 162
Española, Apertura........... 48,66, 77, 104, 117, 131,200,219 237
Evans, Gambito. ..... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 55, 65, 83 208
Francesa, Defensa............ 35, 46, 134, 147, 178, 195, 197 217
Giuoco Piano...... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 49 172
Greco, Gambito......................................... 32 41
Holandesa, Defensa.......................................... 85
India de dama, Defensa .... , . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . 101, 194 234
India de rey, Defensa........................................ 204
Inglesa, Apertura. ...... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37, 129 227
Nimzoindia, Defensa........................... 192,202,225 232
Peones Centrales, Partida de los........ . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
Philidor, Defensa. ..... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 54
Rey, Gambito de............. . . . . . . . 44, 57, 59, 62, 68, 81, 97 164
Rusa, Defensa............................................... 153
Siciliana, Defensa.............. 43, 127, 156, 185, 190, 221, 223 240
Tres caballos, Apertura de los. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 74
Zukertot, Apertura..... . ... .......... .................... .... 87

248
INDICE DE MAESTROS

Págs.

Abrahams................................................... 240
Adams...................................................... 39
Alartorsen. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 204
Alexander. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 232
Andersen............ ...... ...... .................... 43, 59 79
Averbach . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 242
Balla....... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 85
Belsitmann. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 136
Bird. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 54, 58, 62, 74 160
Blackbume. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 46 104
Blehr............... ................ ........................ 41
Bogoljubow. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 87
Botvinnik. .... ................ ......................... 200 237
Book........................................................ 219
Capablanca. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 214
Cohn....................................................... 129
Cruz........................................................ 227
Charrousseck.............. .... ................ .............. 49
Davidson. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 92
Denker... ................................................... 192
Duras....................................................... 111
Ehrat....................................................... 194
Eliskases. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 185 202
Euwe. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 127 234
Fedden..................................................... 44
Fine. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 187 192
Gygli....................................................... 194
Goldstein....... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 190
Hertzoprung. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41
Hesek....................................................... 208·
Henneberger. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 217
John........................................................ 113
Keres... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 185, 219, 232 234
Korchman................................................... 197
Labourdonnais. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28, 30, 32 35
Lasker.............. 144, 147, 149, 151, 153, 156, 158, 160 178
Lekner..................................................... 49
249
Págs.

Leonardt... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 131
Levis. ...................................................... 65
Lichtenheim. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 55
Lyubleinsky. .......... .................... .... .............. 200
Luckis...................................................... 221
Mac Donnell. ..... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 30, 32 35
Maroczy. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 144
Mason...................................................... 174
Marco...................................................... 176
Marshall.... ............ .............................. ...... 123
Meitner. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 117
Mengredien.. .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 76
Mieses. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 94, 99 240
Mikenas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 242
Modley...................................................... 57
Moritz........................................ ...... ........ 89
Morphy .................. 54, 55, 57, 58, 59, 62, 63, 65, 66 68
Moxdon..................................................... 227
Müller...................................................... 158
Noa........................................................ 81
Panov ...................................................... 223
Paulsen. .. .................................................. 43
Pbilidor. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
Pillsbury. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 172, 174, 176 178
Puiggr6s. '., . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 225
Ravinsky.......... .... ...... ........ .......... ...... .... .... 223
Reti.. .. .. . . . .. . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . .. 101, 126, 147, 211 212
Riviere...................................................... 63
Rubinstein...... 119, 121, 123, 126, 127, 129, 131, 134, 136 138
Salwe....................................................... 121
Scheve...................................................... 107
Schlechter............. ...... ........ .... 109, 111, 113, 117 134
Schmidt... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 164
Schowalter. '. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 172
Schubert. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 109
Schulten. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 66
Schwartz.................. ........ .... ...................... 46
Shainswit .................................... :. . . . . . . . . . . . . . . 187
Silverman......... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 195
Smith ...................................................... 39
250
Págs.

Smyslow ....................................... , .. 197, 204 237


Speijer. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 138
Spielmann. ....... . .. . ... .. . . .... .. .... ... . .... .. .. .. .. .. 97 214
Stahlberg..... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. 202, 221 225
Steinitz....... . . . . . . . . . . . . . . . . .. 74, 76, 77, 79, 81, 83, 162 167
Steiner. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 190
Streusler. '" . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 209
Tarrasch. . . . . . . . . . . .. 85, 87, 89,92,94,97,99, 101, 104, 107,149 151
Teichmann. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 119 153
Tereda.................. .................................... 208
Tchingorin. .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 83, 162, 164 167
Thomas..................................................... 209
Thorold..................................................... 44
Vollenweider ................................... , ....... " . . .. 217
Wallis....... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 195
Winawer.................................................... 77
Wolf................ ........................................ 156
yates....................................................... 211
Znosko-Borowsky ..... , ................................... , . . 212

251
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El arte del ajedrez (De Andersen a Karpov)
320 págs" 177 diagramas
9 A. KOTOV
Juegue como un gran maestro
Traducción de Agusl in Puig. Revisión técnica de A. Gude
336 págs., 255 diagr.¡ma~
10 A. KOTOV
Piense ('omo 11 n gran milPstro
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11 V. SIMAGIl\"
El esl ilo po~ ¡(,¡<lnal
TraduccIón J. León" "'a. Prúlogo M. Beylin
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12 PAUL KERES
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Traduc(·¡lIn dl' Ni('ve~ Garl'Ía
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13 R. RETI
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14 RICARDO AGUILERA
El error en la apertura
208 págs., 300 diagramas, 4 a ~(hción

15 REY ARDID
Finales de piezas menorps
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16 REY ARDID
Finall's <h' torrp
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17 P. ~fORAN
Kasparov
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1H '1. SUETIN
\lanual para jugadores avanzados
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19 D. BRONSTEIN
El ajedrez de torneo
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20 R. HETI
I\'Ul'vas ideas en el ajedrez

21 R. :\(;UILERA y F .•J. PEREZ


(Bajo la dirección de A. ALEKHI!'\E)
Ajpdrt·1. Hipermoderno. Tomo 1
224 pags., 222 diagramas

22 R. A{;UILERA y F.J. PEREZ


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2;)6 págs., 160 diagramas

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