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C. John Baker
Una sembradora para labranza cero es una hasta que llega el tiempo favorable. Por otro
máquina diseñada para servir a las funciones lado, el objetivo de las fechas de siembra para
de sus abresurcos. los cultivos anuales a menudo está dictado por
la oportunidad climática de la cosecha, que es
Aunque la mayoría de las funciones desea- muy limitada y difícilmente permite esperar du-
bles de las sembradoras y de las sembradoras rante mucho tiempo las condiciones favorables.
de precisión para labranza cero pueden estar Las sembradoras y las sembradoras de preci-
indudablemente relacionadas con las funcio- sión deben funcionar a su máximo potencial
nes deseadas de sus abresurcos, también hay con menor dependencia del clima y por ello
otros componentes y funciones importantes. deben ser más elaboradas que las sembradoras
A continuación serán examinados en sentido para regeneración de pasturas.
amplio sin intención de aprobar o desaprobar Este capítulo considera las máquinas para
los criterios de los modelos en las sembrado- grandes predios y tracción mecánica y el ca-
ras y sembradoras de precisión comerciales. pítulo siguiente analiza las máquinas para agri-
Los diseñadores y fabricantes que conside- cultura en pequeña escala y para animales de
ran seriamente las funciones deseadas de las tiro. En ambos casos el modelo de las sem-
sembradoras y las sembradoras de precisión bradoras y las sembradoras de precisión cu-
y las variaciones requeridas para obtener esos bre los siguientes temas:
resultados con la mayor frecuencia posible • Ancho de las operaciones.
presentan una gama de opciones. Los consu- • Nivelación de la superficie.
midores deben constatar qué máquina les pue- • Requisitos de potencia.
de resultar más útil después de haber sopesado • Aplicación de la fuerza de penetración.
factores de riesgo, comportamiento y costos. • Consideraciones para el transporte.
Por ejemplo, las sembradoras para regene- • Utilización de la potencia disponible.
ración de pasturas pueden no ser tan desarro- •· Almacenamiento y dosificación de los pro-
lladas como aquellas para establecer cultivos ductos.
anuales porque el manejo de los residuos rara-
mente es un requisito importante en la siembra
de especies forrajeras y además porque puede Ancho de las operaciones
haber mayor flexibilidad en la elección de la
fecha apropiada de siembra. Esto a su vez per- Los factores más importantes que debe-
mite una demora en el momento de siembra rían tener influencia sobre el modelo de las
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224 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
sembradoras y las sembradoras de precisión para sus propósitos, si bien podrían comple-
para labranza cero son el tiempo total necesa- tar todo el trabajo en la mitad del tiempo que
rio para establecer un cultivo determinado y requieren las máquinas de 4,5 m en labranza
la fuerza disponible para tirar de la máquina. mínima. Sin embargo, es sorprendente que este
Lamentablemente, muchos agricultores se problema aparentemente simple se repita en
convierten de la labranza común a la labranza numerosas oportunidades.
cero con la esperanza de que con este último Para aquellos agricultores resistentes al cam-
sistema obtendrán el mismo rendimiento del bio, tal argumento podría ser una excusa para
trabajo que con las máquinas usadas anterior- eludir el problema. Para otros que practican
mente para labrar la tierra. Tales expectativas la labranza cero con las sembradoras que re-
no tienen en consideración el hecho de que quieren poca potencia, refleja la ignorancia
las máquinas para labranza cero van a cubrir de los beneficios que ofrecen las máquinas
el campo solo una vez y pueden, por lo tanto, para labranza cero más desarrolladas; lo cual
permitir un trabajo a una velocidad menor de invariablemente está acompañado por una ma-
trabajo. Dado que muchas sembradoras y sem- yor demanda de potencia.
bradoras de precisión para labranza cero son Si bien el incremento de demanda de po-
capaces de trabajar a una velocidad de avan- tencia y fuerza de penetración de los abresur-
ce similar a la de las máquinas de labranza, cos se convierte en una mayor solicitud de la
esto significa que pueden ser más angostas. potencia del tractor y del peso de la máquina,
Una comparación concisa y práctica fue he- esos insumos son relativamente poco costo-
cha por un agricultor inglés quien concluyó que sos y fácilmente obtenibles. El aumento de la
mientras pudiera sembrar con su máquina para confiabilidad biológica y de los rendimientos
labranza cero a la misma velocidad que podía de los cultivos por medio del modelo de los
anteriormente arar, estaría ganando al utilizar abresurcos son el insumo más costoso y com-
la labranza cero. A pesar de tal pragmatismo, plejo. Algunos operadores eligen minimizar
es común oír que otros agricultores exigen que los requisitos de potencia o peso en lugar de
las máquinas para labranza cero sean del mis- maximizar la confiabilidad biológica. En rea-
mo ancho que las máquinas convencionales. lidad, es así como los operadores individua-
Algunos fabricantes de maquinaria acceden a les enfocan todo el concepto de labranza cero:
estos pedidos pero se ven forzados a seleccio- si están orientados a obtener mejores rendi-
nar abresurcos con baja demanda de potencia. mientos o si están orientados a obtener bene-
Casi invariablemente, cuanto más baja es la ficios económicos.
demanda de potencia de los abresurcos para Aquellos que consideran la labranza cero
labranza cero, de menor calidad será el trabajo como un elemento para eliminar la labranza
que hacen en el suelo sin labrar y mayor será el pero que todavía piensan que la labranza es el
riesgo de un fracaso biológico. elemento fundamental, probablemente opten
Por ejemplo, un agricultor que use la labran- por lo menos costoso, y maximicen el ancho
za mínima cubrirá el campo pasando por lo del trabajo y minimicen los requisitos de po-
menos dos veces o probablemente tres veces tencia y peso como altas prioridades. Aque-
para establecer un cultivo. Si cada una de las llos que consideran que la labranza cero es el
máquinas usadas para la labranza mínima, in- objetivo final y consideran la labranza solo
cluida la sembradora, fuera de 4,5 m de an- como una etapa del proceso de aprendizaje
cho, el ancho efectivo de trabajo sería de 1,5 m (si bien practicada durante siglos) podrían
(4,5:3). Aún así, muchos agricultores se lamen- cambiar su opinión y buscarán maximizar el
tan de que una sembradora de 3 m de ancho comportamiento biológico, casi sin considerar
para labranza cero sería demasiado angosta el costo, el peso y el ancho, y dispuestos a
Modelos de sembradoras – máquinas para trabajos en gran escala 225
agregar fácilmente los cambios necesarios en régimen de labranza cero. Por esta razón, las
sus prácticas de manejo. A menudo está lleno sembradoras y las sembradoras de precisión
de gente con estas dos perspectivas y no es deben ser capaces de seguir fielmente cambios
probable que cambien en este sentido. importantes en la superficie del suelo sin ir en
El modelo y el deseo de un cierto ancho de detrimento de la profundidad de siembra o
operación incluyen varias funciones más allá de otras funciones. Este es un requisito difícil de
de la relación que pueden tener con el abre- satisfacer (ver Capítulo 8) y para una sembra-
surcos: disponibilidad de potencia, topogra- dora o una sembradora de precisión impone li-
fía del predio, cantidad de insumos que se lle- mitaciones sobre el ancho total de la máquina
van al campo y su transporte, por enumerar y otras consideraciones en su diseño.
solo algunos. Cada función que se agrega se Seis metros (20,5 pies) parece ser el límite
integra en el modelo general y en el ancho de máximo que una máquina puede abarcar en un
la máquina. Los ejemplos de las máquinas que solo bastidor para permitir que los abresurcos
se observan en las Láminas 88, 89, 90 y 91 se levanten y caigan lo suficiente para seguir
presentan un rango de ancho de 4 a 18 m, to- las depresiones y elevaciones del terreno. Aun
das montadas con el abresurcos en T inverti- en esos casos, salvo cuando los abresurcos son
da pero en diferentes configuraciones. empujados con una fuerza de penetración ca-
paz de ejercer una fuerza consistente a medida
que se mueven verticalmente cerca de 0,4 m
Nivelación de la superficie (16 pulgadas), puede ocurrir alguna siembra a
profundidad irregular con una sembradora de
La oportunidad de nivelar la tierra antes de 6 m de ancho. Cuando son necesarios anchos
la siembra se pierde cuando se trabaja en el mayores se utilizan unidades múltiples o alas
Lámina 88 Sembradora de 4,5 m de ancho para labranza cero sobre marco rígido y con rueda
trasera.
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Lámina 89 Barra portaherramientas de 12 m, remolcada, con las alas dobladas para el trans-
porte.
que se doblan a partir de un grupo central. Pero lamente en un terreno razonablemente nivela-
aun así, el trabajo con una máquina de 6 m de do. Una medida más aceptable sería 4,5 m.
ancho con un abresurcos con buena capacidad No existe ninguna diferencia si los abresur-
de seguimiento de la superficie es posible so- cos están separados 150 mm o un metro. Cada
Modelos de sembradoras – máquinas para trabajos en gran escala 227
de tiro permaneció razonablemente estable, sin ponente de penetración debe ser suficiente
considerar el contenido de humedad del suelo. para proporcionar las fuerzas de penetración
Baker (1976a), en tres experimentos sepa- combinadas de todos sus abresurcos cuando
rados, midió las fuerzas de penetración reque- operan en las peores condiciones –por lo ge-
ridas para una penetración de 38 mm por va- neral, las más secas– en las que es posible
rios abresurcos en un suelo seco, fino, arenoso obtener emergencia de las plántulas. Este
limoso, cubierto con residuos de pasturas tra- concepto es particularmente importante y a
tadas con herbicidas y contenidos de hume- menudo confunde a los potenciales interesa-
dad que variaban entre el 14,1 y el 18,2 por dos en adquirir sembradoras cuando se enfren-
ciento (g/g). Los resultados se encuentran en tan con las propuestas y contrapropuestas de
el Cuadro 28. los fabricantes. Por ejemplo, los abresurcos
Los datos del Cuadro 28 muestran que la verticales de doble o triple disco se compor-
diferencia en la fuerza de penetración entre tan mediocremente en lo que hace a la emer-
los abresurcos verticales de triple disco y los gencia de las plántulas en los suelos secos (ver
abresurcos simples de ala es ligeramente me- Capítulo 6). Con pocas excepciones, las sem-
nor que en el Cuadro 27, probablemente en bradoras o las sembradoras de precisión con
razón de un suelo más liviano. El abresurco esos abresurcos no proporcionan suficiente
de azada fue similar al abresurco de ala lo que fuerza de penetración (peso) para llegar a la
sugiere que el efecto de arrastre de las alas profundidad de siembra en el suelo seco. Las
tuvo una importancia menor, ya que los abre- sembradoras parecen ser relativamente livia-
surcos de azada no tienen alas. nas lo que da la impresión errónea de que pue-
El abresurcos angulado de disco plano re- den penetrar en la tierra más fácilmente que
quirió la menor fuerza de penetración de to- otras sembradoras, cuando la realidad es la
dos los abresurcos probados y el abresurcos situación opuesta.
angulado de disco cóncavo requirió más fuer- Por otro lado, los abresurcos de ala tole-
za de penetración que todos los otros abre- ran suelos muy secos, en términos biológi-
surcos excepto el de triple disco vertical, cos, y sus sembradoras o sembradoras de
probablemente a causa de la resistencia a la precisión a menudo son suficientemente pe-
penetración de la parte convexa del disco sadas como para forzar a los abresurcos en
angulado. suelos que podrían ser de otra manera bioló-
Para que una sembradora o una sembrado- gicamente inadecuados. Por esta razón, el peso
ra de precisión pueda operar, su peso o com- total de una sembradora o de una sembradora
de precisión no refleja necesariamente los re- Durante la operación, el arrastre contra el suelo
quisitos de sus abresurcos en un suelo deter- del abresurcos tiende a que el brazo de tiro
minado. Este puede, de hecho, reflejar me- tire hacia atrás y hacia arriba, pero el despla-
jor que ningún otro elemento la tolerancia zamiento real en cualquier dirección es relati-
biológica (o intolerancia) de sus abresurcos vamente pequeño. Esto significa que el punto
a los suelos secos. de acción de la fuerza de penetración aplica-
Sin embargo, es necesaria otra fuerza ade- da en el suelo permanece relativamente cons-
más del peso muerto de los abresurcos para tante en relación con el bastidor de la sembra-
forzar su penetración en el suelo. La Figura dora y, por lo tanto, hay poco cambio en la
35 muestra cuatro arreglos geométricos dife- fuerza de penetración a medida que los abre-
rentes para unir los abresurcos a los bastido- surcos atraviesan las ondulaciones de la su-
res de las sembradoras. perficie del terreno.
El primero y más simple consiste en fijar Este modelo limita su capacidad para seguir
los abresurcos en forma rígida al bastidor de fielmente las variaciones de la superficie del
la sembradora, sin posibilidad de articulación terreno. Además, muchos modelos similares
entre los mismos. Esto da a la sembradora una permiten que los abresurcos se muevan hacia
baja capacidad para seguir los cambios de la los lados con el resultado de producir alguna
superficie pero la fuerza de penetración pro- variación en el espaciamiento entre surcos; sin
vista a cada abresurco permanece razonable- embargo, esto permite trabajar en superficies
mente constante y claramente predecible. con piedras grandes y tener menos bloqueos
El segundo caso utiliza un cable de acero que los abresurcos rígidos o las barras de tiro
para: i) introducir un brazo de tiro separado que se mueven solo en el plano vertical.
entre el bastidor de la sembradora y el abre- El tercer arreglo se usa comúnmente en las
surco, y ii) proporcionar un movimiento limi- sembradoras convencionales para camas de
tado entre este y el bastidor de la sembradora. semillas en tierras aradas y ha sido simple-
Para cumplir la segunda función, la parte su- mente transferida a muchas sembradoras para
perior se extiende y a menudo está enrollada labranza cero, con ajustes para reforzar su
varias veces para aumentar su flexibilidad. fortaleza y la magnitud de las fuerzas de
Centro de rotación
aproximado Centro de rotación
Barra
portaherra-
mientas
Dirección
de la articulación
Figura 35 Opciones geométricas para el enganche de las barras de tiro en una sembradora para
labranza cero. *El abresurco también se mueve hacia delante al igual que toda la máquina, por lo
que esto es ignorado y no afecta la función del abresurco de ninguna manera.
232 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
penetración. Consiste de una sola barra de tiro las fuerzas del suelo; este es el punto de equi-
montada en un pivote que es empujada hacia librio de todas las fuerzas de resistencia del
abajo o algunas veces se tira de ella desde aba- suelo en el abresurcos y está ubicado algo
jo. El abresurcos no puede actuar hacia atrás, debajo de la superficie del suelo. El compo-
solamente hacia arriba y hacia abajo en un arco nente vertical de tiro (V) actúa hacia arriba y,
limitado alrededor del punto del pivote entre junto con la fuerza vertical que se genera por
la barra de tiro y el bastidor de la sembradora. la resistencia del suelo a la penetración, tiene
Dado que la fuerza aplicada por el tractor para que ser contrarrestada por la fuerza neta de
crear este movimiento de avance –fuerza de penetración vertical (D); esta es aplicada se-
arrastre– actúa a través del punto del pivote y paradamente por resortes u otros medios so-
se opone a la resistencia del abresurco en el bre la sembradora –no en el tractor– para que
punto de contacto del suelo, estas fuerzas pue- el abresurcos permanezca sobre la tierra.
den ser resueltas por triangulación de sus com- Todas esas fuerzas encuentran un punto de
ponentes horizontales y verticales. equilibrio, pero el problema surge cuando la
La Figura 36 muestra el diagrama de las posición del abresurcos cambia en relación con
fuerzas resultantes. El tiro o fuerza de tiro el bastidor de la sembradora. Por ejemplo, a
aplicada por el tractor se opone por la resis- medida que el abresurcos pasa por una peque-
tencia al movimiento hacia adelante (P) a tra- ña depresión del terreno y se mueve hacia aba-
vés del suelo. Esto se aprecia en el diagrama jo –en relación al punto del pivote del bastidor
como el componente horizontal de tiro (H). de la sembradora– el componente horizontal de
El componente de tiro (V) es derivado de la tiro (H) puede no cambiar, pero el componente
línea resultante de tiro (R) que pasa a través vertical de tiro (V) aumentará porque la línea
del punto de unión del abresurco a la sembra- de tiro resultante que actúa a través del punto
dora y el centro de resistencia (X) de todas del pivote (R) será más aguda.
Figura 36 Distribución de las fuerzas que actúan sobre un abresurco para labranza cero a medida
que es arrastrado a través del suelo.
Modelos de sembradoras – máquinas para trabajos en gran escala 233
Esto significa que habrá entonces una ma- en un pivote simple usada en el tercer arreglo
yor fuerza hacia arriba oponiéndose a la fuer- es reemplazada por dos barras de tiro parale-
za neta vertical de penetración (D) sobre el las de igual longitud ordenadas en forma de
abresurcos, que en el mejor de los casos per- paralelogramo como se ilustra a la derecha
manece constante, lo que da como resultado de la Figura 35. Los objetivos de esta confi-
una siembra más superficial. Esto sería un pro- guración son cuatro:
blema importante si la fuerza de penetración 1. Mantener una relación predecible entre los
permaneciera constante, pero como el meca- distintos componentes del armado de un
nismo de aplicación de la fuerza de penetra- abresurco. Por ejemplo, algunos abresur-
ción sobre la sembradora es por lo general un cos de las sembradoras de precisión tie-
resorte, la fuerza de penetración realmente dis- nen hasta seis componentes diferentes que
minuye algo a medida que el abresurcos se siguen uno a otro en una relación fija. Si
mueve hacia abajo porque el resorte se estira. el conjunto fuera montado en una barra de
El efecto neto es una significativa reducción tiro de un solo pivote (Figuras 35 y 36) y
de la fuerza neta de penetración vertical (D) se moviera en forma de arco a medida que
aplicada al abresurcos, y da como resultado suben y bajan, la relación vertical entre los
una siembra más superficial en esa porción componentes traseros y delanteros se al-
de terreno. teraría apreciablemente como si se movie-
El efecto contrario ocurre cuando un abre- ran verticalmente.
surco pasa sobre una elevación del terreno. 2. Mantener un ángulo dado de aproximación
Típicamente, los abresurcos con este arreglo de los componentes críticos con el suelo,
geométrico común siembran muy superficial- sin considerar la posición vertical del mon-
mente en las depresiones y muy profundamen- taje del abresurco. Por ejemplo, los abre-
te sobre las elevaciones. surcos de ala tienen las alas que se tuercen
Sin embargo, hay aún otros problemas. Si ligeramente hacia abajo y hacia delante a
la resistencia del suelo al movimiento de avan- un ángulo de 5 a 7° con la horizontal, de
ce (P) se incrementa porque la sembradora modo que pueden operar a poca profundi-
encuentra una zona de suelo más duro, la mag- dad con las alas aun bajo tierra. Si el abre-
nitud de la línea de tiro resultante (R) también surco estuviera montado en una barra de
se incrementa, aun cuando su pendiente pue- tiro de un solo pivote, el ángulo preestable-
da ser la misma. Esto a su vez incrementará el cido del ala debería ser incrementado en
componente vertical de tiro (V), el cual salvo cerca de 10° para asegurar que un ángulo
que sea compensado por un incremento en la positivo del ala permanezca por debajo del
fuerza vertical neta (D), dará lugar también a arco del movimiento. Pero en la posición
una siembra más superficial. intermedia un ángulo de 10° podría limitar
En realidad, tanto la superficie del suelo la menor profundidad de la sembradora
como la resistencia del movimiento de avan- porque las alas saldrían a la superficie del
ce de los abresurcos individuales cambian suelo.
continuamente bajo las condiciones de labran- 3. Reducir la magnitud de las fuerzas opues-
za cero. Como consecuencia, también cambia tas a la fuerza de penetración. Si bien la
el componente vertical de tiro, lo que causa ordenación en forma de paralelogramo
variaciones en la penetración. puede tener poco o ningún efecto favora-
El cuarto arreglo es común (Figura 35) en ble sobre el componente vertical de tiro
las sembradoras de precisión y en modelos opuesto a la fuerza de penetración, hay otra
más desarrollados de sembradoras para labran- fuerza que también se opone a la fuerza
za cero. En este caso, la barra de tiro montada de penetración en las barras de tiro de un
234 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Configuraciones de las ruedas su amplio espacio entre surcos, tienen las rue-
y el remolque das colocadas entre los surcos a alguna dis-
tancia de la parte trasera de la máquina. Esto
Una característica importante de la labran- reduce las fuerzas laterales durante los giros
za cero comparada con la labranza común es y permite que dos o más máquinas trabajen
la capacidad de los suelos para soportar el trá- conjuntamente.
fico de las ruedas sin daño de compactación y Los diseños con ruedas traseras son adecua-
su resistencia al daño causado por las ruedas dos para máquinas de hasta seis metros de an-
de máquinas y camiones. Si bien ocurre una cho. Estas ruedas ofrecen una excelente ma-
cierta compactación, las poblaciones de la fau- niobrabilidad y estabilidad en las laderas y son
na del suelo y las bacterias lo devuelven a ni- por lo general más económicas que otras op-
veles sostenibles en respuesta a una menor ciones. Muchas máquinas usan una sola rue-
disrupción de la labranza y a un incremento da en cada extremo de la máquina, por lo que
de la materia orgánica, que son los procesos necesitan ruedas adicionales para ser transpor-
restauradores naturales de los suelos vivos y tadas. Algunos diseños tienen pares de ruedas
mejoran rápidamente la mayoría de sus pro- con brazos móviles que duplican el área de
blemas. contacto, reducen los golpes y ofrecen la po-
Las sembradoras para labranza cero y, en sibilidad de adaptarlas al remolque trasero.
menor grado, las sembradoras de precisión son Las sembradoras y las sembradoras de pre-
más pesadas que las mismas máquinas para la- cisión con ruedas traseras no son adecuadas
branza, pero raramente es necesario aumentar para unir varias unidades en forma paralela.
el área de contacto de las ruedas, gomas o pati- Cuando se contempla un trabajo en estas con-
nes en forma proporcional a su peso, en razón diciones es necesario organizar su colocación
del incremento de la resistencia a la carga de en una configuración desalineada y marcos se-
los suelos en que operan. De cualquier mane- parados para remolque, como se ilustra en la
ra, no es necesario someter incluso los suelos Figura 37. Por otro lado, la labranza cero aho-
no labrados a presiones de las ruedas de las rra tanto tiempo, que anteriormente se dedi-
sembradoras que son significativamente mayo- caba a la labranza antes de la siembra, que la
res que las ruedas de los tractores que las arras- necesidad de múltiples sembradoras y sem-
tran. Las ruedas de los tractores por lo general bradoras de precisión se reduce considerable-
ejercen presiones en la zona de contacto entre mente.
50 y 85 kPa (7-12 psi) y en el ancho de las
huellas de las ruedas a 30-50 kPa (4-7 psi).
Como ocurre con las sembradoras y las sem- Ruedas anteriores y posteriores
bradoras de precisión convencionales hay va-
rias opciones de configuraciones de las rue- Estas configuraciones presentan una o más
das. Algunas de estas, con sus atributos y ruedas de dirección en cada parte del frente o
limitaciones, se esbozan a continuación. la parte trasera de la máquina y por lo menos
dos ruedas fijas en el extremo opuesto. La
configuración reduce la distancia lateral entre
Ruedas traseras las posiciones de las ruedas lo que permite el
diseño de máquinas más anchas que las máqui-
Estas ruedas están colocadas en ambos ex- nas de ruedas traseras. Dado que no hay es-
tremos posteriores del bastidor de las sembra- tructuras para las ruedas en los extremos de las
doras y de las sembradoras de precisión. Al- máquinas, es posible reunir varias unidades,
gunas sembradoras de precisión, en razón de como se ilustra en la Figura 38. Tal sistema
Modelos de sembradoras – máquinas para trabajos en gran escala 237
Lámina 92 Unidades sembradoras dobles ordenadas en tándem para obtener una sembradora
con espacio entre surcos reducido a la mitad.
Modelos de sembradoras – máquinas para trabajos en gran escala 239
entre las sembradoras de precisión para labran- 3. Utilizando la entrega neumática del pro-
za cero y para labranza convencional. ducto a los abresurcos desde una tolva cen-
Con las sembradoras, el espaciamiento ma- tral (Lámina 55).
yor que el normal de los abresurcos por lo
Existen argumentos en favor y en contra de
general se obtiene aumentando la distancia
cada una de las opciones. Por ejemplo, la du-
longitudinal entre los abresurcos alternados,
plicación del número de las tolvas aumenta el
dado que el espacio entre los surcos de los
costo de las sembradoras pero incrementa la
abresurcos no puede ser alterado sin afectar
cantidad de producto que puede ser llevado y,
la agronomía del cultivo. Este incremento en
por lo tanto, reduce el número de veces que la
el espaciamiento longitudinal da lugar a tu-
máquina está fuera del trabajo activo para lle-
bos largos para la entrega de las semillas y
nar la tolva y, temporalmente, agrega peso a
ángulos llanos de caída entre las tolvas y los
la máquina lo que puede agregar fuerza de
abresurcos, si es que son provistos con una
penetración. Los sembradores neumáticos son
sola tolva. Tales ángulos llanos interrumpen
poco costosos pero los modelos grandes lle-
el flujo gravitacional normal, especialmente
van el peso del producto en un eje separado
en las laderas. El problema es superado en una
donde ni este ni el peso de las mismas tolvas
de las siguientes formas:
contribuyen al peso general de la máquina para
1. Levantando las tolvas de los productos a una agregar fuerza de penetración.
altura mayor para incrementar los ángulos Las tolvas altas son económicas pero difí-
de caída en los tubos (Lámina 94). ciles de llenar y contribuyen a la inestabilidad
2. Duplicando el número de tolvas de modo de la sembradora en las laderas. En las lade-
que cada una esté colocada sobre los abre- ras pronunciadas un modelo de sembradora
surcos a una altura y ángulo de entrega con tanques para fertilizante líquido ofrece la
normales. posibilidad de deslizar el tanque hacia el lado
Lámina 94 Una sembradora para labranza cero con tolvas elevadas para los productos.
Modelos de sembradoras – máquinas para trabajos en gran escala 243
Lámina 95 Una sembradora para labranza cero con un tanque deslizable para fertilizante líquido.
separada hecha por un especialista antes operativos por hora son más altos que
de la siembra. los últimos pero los costos anuales tota-
les son menores.
Si bien la aplicación de herbicidas que cu-
8. El total de la energía consumida por hec-
bren todo el campo en el momento de la siem-
tárea sembrada y los costos operativos
bra no parece ser práctica, la aplicación en
anuales de todos los equipos son mucho
bandas se ha usado exitosamente (ver Capí-
más bajos en la labranza cero que en la
tulo 12).
labranza convencional.
9. Las sembradoras para labranza cero son
Resumen de modelos de generalmente más angostas que las sem-
sembradoras y sembradoras bradoras para labranza convencional en
de precisión para labranza virtud de los mayores requerimientos de
cero – máquinas para trabajos potencia. Las sembradoras de precisión
en gran escala para labranza cero pueden tener el mis-
mo ancho de las sembradoras de preci-
1. Los modelos de sembradoras para labran- sión para labranza convencional en ra-
za cero deben ser más elaborados que zón del menor número de abresurcos.
aquellos para labranza convencional. 10. Aunque no es necesario avanzar tan rápi-
2. Las sembradoras para labranza cero son damente durante la siembra y la siembra
invariablemente más pesadas que las de precisión en la labranza cero como en
sembradoras para labranza convencional la labranza convencional en razón de la
y están sometidas a mayor estrés duran- eficiencia del tiempo del sistema en su
te la operación. conjunto, algunas sembradoras y sembra-
3. El desgaste y el mantenimiento general doras de precisión para labranza cero son
son más importantes y costosos en las en realidad más veloces que las mismas
sembradoras y en las sembradoras de máquinas para labranza convencional.
precisión para labranza cero que en las 11. El análisis del tiempo necesario para cu-
sembradoras y en las sembradoras de brir un campo con una sembradora rela-
precisión para labranza convencional. tivamente angosta para labranza cero
4. La potencia del motor del tractor reque- comparada con la sembradora más an-
rida para operar las sembradoras y las cha para labranza convencional indica
sembradoras de precisión para labranza que esta última requiere más tiempo para
cero varía entre 3 a 9 kW (4 a 12 HP) cumplir operaciones homólogas.
por abresurco. 12. Los sistemas de fuerzas de penetración
5. Los requerimientos de potencia para las de las sembradoras y las sembradoras de
sembradoras y las sembradoras de pre- precisión deben ser más desarrollados,
cisión para labranza cero son más sensi- ejercer mayor fuerza y tener una mayor
bles a la velocidad de operación que amplitud de recorrido que las máquinas
aquellos para las sembradoras y las sem- para labranza convencional.
bradoras de precisión para labranza con- 13. La geometría de los abresurcos para la-
vencional. branza cero de las uniones de la barra de
6. En general, para la siembra en labranza arrastre deben compensar el incremento
cero se necesitan tractores más grandes. de las fuerzas de arrastre.
7. En la labranza cero los tractores operan 14. Las barras de arrastre en paralelogramo
menos horas por año que los tractores con sistemas hidráulicos presurizados con
en la labranza convencional, sus costos gas o aceite para la fuerza de penetración
Modelos de sembradoras – máquinas para trabajos en gran escala 245
La labranza cero en pequeña escala no solo es queños agricultores. Además, los abresur-
práctica sino que también puede ser cos no simétricos, tales como los de discos
el mejoramiento más importante angulados, raramente son considerados
de la producción agrícola y de la protección como una opción para las máquinas de un
de los recursos que ocurre en los últimos solo surco porque las fuerzas laterales son
cien años en los países en desarrollo. demasiado difíciles de contrarrestar y al
mismo tiempo mantener la máquina en lí-
nea.
Características Pero la labranza cero en pequeña escala se
beneficia con la atención directa del opera-
La labranza cero en pequeña escala por lo dor en cada metro trabajado, mientras que
general se caracteriza por las pequeñas dimen- las malezas y los residuos a menudo son ma-
siones de las fincas y la limitada disponibili- nipulados manualmente o recolectados para
dad de energía, acompañada a menudo por ser usados como combustibles o como cama
escasos recursos. La operación con implemen- para los animales.
tos para tractores de gran tamaño no es prác- Otro beneficio es que la mayoría de los
tica ni posible para la mayoría de los agricul- abresurcos en pequeña escala colocan al mis-
tores en fincas pequeñas. Por estas razones, mo tiempo las semillas y el fertilizante en
en casi todos los casos los pequeños agricul- ranuras separadas. Desde este punto de vista
tores usan equipos manuales o sembradoras y pueden ser consideradas máquinas más de-
sembradoras de precisión de uno o dos sur- sarrolladas que las similares más grandes,
cos. También existen algunas sembradoras de algunas de las cuales no fertilizan en condi-
tres surcos, pero se encuentran con poca fre- ciones de labranza cero en razón de la com-
cuencia. plejidad de obtener esa función con múlti-
El número limitado de surcos tiene in- ples surcos poco espaciados.
fluencia sobre varias funciones, entre ellas Por esta razón, mientras que los equipos en
el modelo de los abresurcos. Algunas de pequeña escala podrían estar desaventajados
estas influencias son positivas, otras no. Por en algunos aspectos en razón de la imprescin-
ejemplo, muchos de los modelos más avan- dible simplicidad de las sembradoras, de las
zados de abresurcos analizados anteriormen- sembradoras de precisión y de la potencia dis-
te requieren hasta 12 HP por abresurco que ponible, pueden, por esas razones, beneficiarse
a menudo están fuera del alcance de los pe- en otros aspectos.
247
248 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Disponibilidad de equipos
Sembradoras mecánicas
manuales (Matraca)
aunque recordamos, sin embargo, que la la- Sembradoras en línea (de tracción
branza cero en pequeña escala reduce la ne- animal o montadas en el tractor)
cesidad de mano de obra.
Al plantar las semillas en huecos hay un dis- Los principios de la operación de las peque-
turbio mínimo del suelo de modo que la ger- ñas sembradoras para tracción animal o mon-
minación de las semillas de las malezas se re- tadas en el tractor para la labranza cero son los
duce considerablemente; esto da lugar a una mismos que para las máquinas más grandes.
menor necesidad de escardar entre las plan- Algunas de esas características se analizan lí-
tas. Las dimensiones reducidas de los apara- neas abajo y se hacen comparaciones entre las
tos los hacen adecuados para operar en zonas máquinas grandes y las pequeñas en lo que se
de laderas, pedregosas o con troncos y para la refiere a las condiciones de operación.
siembra intercalada (por ej., siembra de mu-
cuna entre surcos de maíz) y para sembrar en Fuerza de penetración
zonas de barbechos.
En el caso de las máquinas pequeñas existe
Su uso es apropiado para suelos livianos ya la oportunidad de colocar pesas como método
que la penetración en algunos suelos pesados para obtener fuerza de penetración; también se
sin labranza es dificultosa. Cuando se trabaja usan resortes pero los sistemas hidráulicos son
en condiciones húmedas es posible que, en al- raros. De cualquier manera las pesas cumplen
gunos suelos arcillosos, el suelo se adhiera a las mismas funciones del sistema hidráulico a
las láminas y la cobertura de las semillas pue- un costo mucho menor. En su forma más sim-
da ser afectada por los huecos en forma de V ple y económica, las pesas pueden ser coloca-
y por el disturbio mínimo (Ribeiro, 2004). Esta das por el operador desde una plataforma en la
limitación ocurre frecuentemente con las ra- máquina. La Lámina 97 muestra una máquina
nuras continuas en forma de V y no está limi- para un solo surco montada directamente en
tada a los huecos comunes. Sin embargo, en un pequeño tractor. Presenta la ventaja de que
la fase de transición de la labranza conven- las pesas se montan o se quitan fácilmente y el
cional a la labranza cero, puede ser difícil usar operador sólo debe subir a la plataforma.
una sembradora Matraca; en ese caso es posi- Dado que las pesas aplican una consistente
ble usar un rasgador para aflojar fajas angos- fuerza de penetración sin considerar la posi-
tas del terreno en las cuales la sembradora ción vertical del abresurcos, actúan en forma
Matraca pueda colocar las semillas. similar a los sistemas hidráulicos de aceite
Muchas sembradoras Matraca u otros apa- sobre gas aplicados a émbolos individuales en
ratos similares para labranza cero son adapta- cada abresurcos, que son una característica de
ciones de aparatos diseñados para trabajar en algunos de los modelos más avanzados
suelos labrados. La modificación principal ha de grandes sembradoras para labranza cero.
sido incluir puntas más largas y más angostas Por ello, algunas sembradoras y sembrado-
para facilitar la penetración. Tal mejoramien- ras de precisión para labranza cero en peque-
to requiere menor fuerza de penetración por ña escala pueden proporcionar un sistema de
parte del operador y ayuda a cortar los resi- fuerza de penetración más adelantado que al-
duos y penetrar en el suelo, lo que da lugar a gunas máquinas grandes menos desarrolladas.
ranuras menos abiertas. Esto ha resultado en La modulación electrónica de la fuerza de pe-
un aumento de la emergencia del 28 y del 23,6 netración en respuesta a la dureza del suelo
por ciento en maíz y caupí, respectivamente, no puede ser obtenida en las máquinas peque-
en comparación con los resultados obtenidos ñas y, viceversa, la aplicación directa de pesas
con puntas cortas que operaban sobre residuos tampoco es una opción práctica para las má-
pesados (Almeida, 1993). quinas más grandes. Los operadores deberían
250 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Lámina 97 Sembradora para un solo surco montada en un tractor que obtiene su penetración en
base a pesas.
agregar o quitar numerosas pesas cada vez que comparada con la operación en la base de la
la fuerza de penetración varía. Esto podría ser ranura antes de la cobertura, se analizó en el
aceptable en una máquina de un solo surco Capítulo 6. En general, el trabajo más impor-
pero no en el caso de una máquina para múlti- tante de las ruedas compactadoras, que ope-
ples surcos. ran tal como se muestra en la Lámina 98, es
La Lámina 98 muestra los principales com- sobre todo el de cobertura, además de mejo-
ponentes de una sembradora típica para la- rar el contacto suelo-semilla.
branza cero en pequeña escala. El disco (1)
corta la paja (la efectividad del corte de la paja Discos
en esta forma en muchos casos es insuficien- Todos los principios de manejo de los dis-
te; ver Capítulo 10). Los aparatos para dosi- cos y los residuos discutidos en el Capítulo
ficar están colocados en la base de las tolvas 10 se aplican igualmente a las máquinas en
para las semillas (2) y el fertilizante (3). Los pequeña escala, excepto en el caso de las má-
abresurcos (4 y 5) abren las ranuras para co- quinas de un surco en las que hay un mayor
locar el fertilizante y las semillas, respecti- espacio alrededor del abresurco para que los
vamente. Por lo general, el abresurco del fer- residuos caigan sin bloquear la máquina.
tilizante (4) opera más profundamente y fuera La mayoría de las sembradoras para labran-
de la línea del abresurco de las semillas (5), za cero en pequeña escala tienen discos, la efec-
tal como ocurre en las máquinas más gran- tividad de los cuales depende del diámetro y
des. La rueda compactadora (6) controla la diseño del disco (planos, con muescas, ondu-
profundidad de siembra y aprieta el suelo so- lados o cóncavos), las condiciones del suelo,
bre la ranura. La efectividad de las ruedas las condiciones de los residuos y los ajustes de
compactadoras sobre el suelo de la ranura, la sembradora. Un mal corte de los residuos da
Modelos de sembradoras – máquinas para pequeña escala 251
Lámina 98 Principales componentes de una sembradora típica para labranza cero en pequeña
escala, para tracción animal o montada en un tractor.
lugar al atascamiento de la paja sobre los com- de aquellas que cumplen las máquinas en gran
ponentes de la siembra, lo que a su vez causa escala, tal como se mostró en los Capítulos 4,
problemas para la colocación y cobertura de la 5, 6 y 7. En las sembradoras en pequeña esca-
semilla y el fertilizante e incluso para la dosifi- la con abresurcos con dientes debería haber
cación de ambos elementos. un ajuste independiente del abresurco del fer-
La distribución uniforme de la paja da lugar tilizante de modo que pueda ser colocado más
a que se enrede en los discos y envuelva los profundamente que las semillas (Van Raij
residuos en los abresurcos, si bien Casão y et al., 1985). Si bien la colocación del fertili-
Yamaoka (1990) indican que la severidad del zante debajo de la semilla en la labranza cero
bloqueo puede ser reducida –raramente elimi- no siempre da lugar a los mejores rendimien-
nada– con el incremento de la distancia entre tos (ver Capítulo 9), en las sembradoras y en
el disco y los dientes fijos que los siguen; los las sembradoras de precisión en pequeña esca-
autores recomiendan una distancia de 25 mm. la es una opción más válida que la colocación
Por otro lado, algunas de las combinacio- del fertilizante a lo largo del surco de la semi-
nes más exitosas de dientes y discos tienen lla, porque la última opción requiere que el
los discos muy cercanos a los dientes. Un abresurco del fertilizante opere en tierra nueva
ejemplo se aprecia en la Lámina 99 (diente y necesita más potencia que cuando ambos
central) en el cual se forma un canal en el bor- abresurcos –semillas y fertilizante– operan a
de delantero del diente especialmente para que distintas profundidades en una ranura común.
el disco entre en el mismo. La Lámina 25 De cualquier manera, el fertilizante colocado
muestra la versión de disco de un abresurco dentro de la zona de la semilla es sin duda su-
de ala en el cual dos dientes frotan contra la perior a la siembra a voleo que causa un acce-
cara lisa de un disco. so lento del cultivo al mismo y un incremento
del crecimiento de las malezas.
Como ocurre con las máquinas grandes tam-
Abresurcos
bién existen ventajas para las ranuras con dis-
Las funciones de las abresurcos en la labran- turbio mínimo (ver Capítulos 5, 10 y 13). Mien-
za cero en pequeña escala no son diferentes tras que la elección del tipo de abresurco
252 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
emergencia uniforme de las plantas a lo largo tes entre las máquinas para siembra en peque-
del surco puede ser más importante que el es- ña escala y las máquinas para ser arrastradas
paciamiento para reducir la competencia en- por el tractor. Ambos sistemas se usan amplia-
tre las plantas pequeñas y las plantas grandes. mente en todo el país en diversas zonas cli-
Pero, si bien en la labranza común se acepta máticas y socioeconómicas, incluso en áreas
la norma del «espaciamiento perfecto», quie- relativamente cercanas entre sí.
nes son favorables a la labranza cero también Los aparatos usados en Brasil para dosifi-
deben satisfacer este requisito para no gene- car las semillas en las sembradoras de preci-
rar un factor negativo contra la labranza cero. sión para tracción animal en labranza cero
Los aparatos para la dosificación de las se- presentan todos los mismos platos con el sis-
millas son responsables de la regulación de la tema por gravedad que se usan en las sembra-
densidad de siembra (número de semillas/m2) doras de precisión montadas en tractores, o
y el espaciamiento entre las semillas (regula- sea, platos de hierro fundido o de plástico. La
ridad del espaciamiento entre las semillas den- Lámina 100 muestra un aparato para dosifi-
tro del surco); de esta manera se asegura su car las semillas y varios platos diferentes. Al-
precisión. gunos fabricantes proveen platos para semi-
Los pequeños agricultores siembran la ma- llas adecuados para semillas pequeñas (por ej.,
yoría de los cultivos en surcos anchos; por lo canola, vicia, rábano forrajero) así como tam-
tanto, la colocación individual de las semillas bién para maíz y otras semillas grandes.
es importante. Por esta razón, en su diseño se El uso de tales aparatos ha sido favorecido
enfatizan los mecanismos de siembra y reque- por su costo relativamente bajo, dado que en
rimientos de potencia como criterios priorita- muchos países en los que no existe la pequeña
rios. Esto contrasta con las grandes sembra- agricultura estos aparatos funcionan al vacío,
doras de precisión para labranza cero en las con presión de aire o del tipo de «dedos», lo
que el microambiente de las ranuras, el mane- que implica que la semillas son levantadas, so-
jo de los residuos y la colocación del fertili- pladas o atrapadas contra platos verticales en
zante en bandas asumen por lo menos una lugar de caer por gravedad en los huecos o
importancia igual al espaciamiento de las se- muescas de los platos horizontales. Los meca-
millas y a los requerimientos de potencia. nismos de siembra con platos verticales son más
Las experiencias de labranza cero en Brasil rápidos y menos sensibles a la forma de las se-
ofrecen comparaciones y contrastes interesan- millas que los platos sembradores horizontales,
Lámina 100 Plato para el aparato dosificador de semillas (izquierda) usado en sembradoras de
precisión y varios tipos de platos para semillas (derecha).
254 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
pero también son más costosos. Por supuesto, contar con varias medidas de platos y alguna
los platos para los sistemas al vacío o con aire experiencia cuando se cambia el tamaño de
también requieren un ventilador para hacer- las semillas. Sin embargo, con un número li-
los funcionar, el cual podría ser difícil de ins- mitado de surcos y con pequeñas cantidades
talar y utilizar en una máquina para tracción de semilla, este no es un trabajo difícil, com-
animal sin motor. parado con las máquinas para surcos múlti-
Los platos distribuidores horizontales son ples, pero subraya la importancia de poder
un sistema muy antiguo, refinado y bien pro- cambiar los platos sin vaciar toda la tolva de
bado anterior a los sistemas de platos vertica- semillas. La Lámina 101 muestra un sistema
les, actualmente de uso común en las sembra- cerrado de tolva que permite cambiar el plato
doras de precisión. No es sorpendente, por lo sin que caigan las semillas.
tanto, que Ribeiro (2004) evaluara en Brasil
la uniformidad de distribución de las semillas Aparatos para dosificar el fertilizante
de maíz a lo largo del surco con cuatro mode- Los distintos tipos de aparatos para dosifi-
los de platos sembradores y que no encontra- car el fertilizante que se encuentran en las
ra diferencias significativas entre los mode- máquinas para labranza cero en pequeña es-
los en la proporción de espacios normales, cala incluyen un fondo rotativo, un tipo de
salteados y múltiples. Los resultados se resu- tornillo sin fin, celdas con muescas y ruedas
men en la Figura 40. en estrella (Lámina 102). La velocidad de des-
Para ser más efectivos los platos horizonta- carga de los tipos de fondo rotativo y de rue-
les requieren que la semilla haya sido clasifi- das en estrella es controlada por medio de una
cada por tamaño uniforme y que los huecos salida ajustable mientras que los tipos de tor-
de los platos se correspondan con el tamaño nillos sin fin y de celdas con muescas se con-
seleccionado de las semillas. Esto requiere trolan cambiando su velocidad de rotación en
Iadel
Sembradoras
Triton
Mafrense
Wemer
Lámina 102 Dos ejemplos de aparatos dosificadores del fertilizante usados en las sembradoras
de precisión para labranza cero. A la izquierda: celda con muescas, a la derecha, rueda en estrella.
256 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
la reacción del suelo se aplican igualmente a ponentes de la abertura de los discos de corte.
ambos tipos de máquinas. Las principales características que hacen que
En el caso de siete máquinas estudiadas por tales máquinas sean adecuadas para pequeños
Ribeiro et al. (1998), cuatro de ellas tenían tractores o para tracción animal es su número
abresurcos de dientes y tres tenían abresur- limitado de surcos: dos y tres surcos para sem-
cos de doble disco. Ralisch et al. (1998) eva- bradoras de precisión de maíz y soja y seis a
luaron las necesidades de tiro y energía de siete surcos para sembradoras de trigo y arroz.
una pequeña sembradora de precisión con Algunos de los factores que contribuyen al
abresurcos de dientes para semillas y fertili- esfuerzo físico del operador para controlar la
zante, en un suelo sin labrar de relativamen- máquina son el peso de la sembradora de pre-
te baja densidad, 1,07 g/cm3, que operaba a cisión, la altura de las manijas, su maniobra-
100 mm de profundidad. Los autores regis- bilidad, estabilidad y habilidad para operar en
traron una fuerza de tiro de 834 N, que es tierras de ladera. La altura de las manijas es
menos de la mitad del valor registrado por sumamente importante durante las maniobras
Baker (1976a) para un abresurco simple de y en muchos casos son ajustables. Los mode-
ala (ver Capítulo 13). los para múltiples surcos generalmente requie-
Las fuerzas de tiro varían considerablemente ren menos esfuerzo manual por parte del ope-
con la resistencia del suelo, que es influencia- rador que los modelos de un solo surco porque,
da por el contenido de humedad, el tipo de en el primer caso, la máquina tiene un asiento
suelo, el contenido de materia orgánica y el o una plataforma.
tiempo transcurrido bajo labranza cero. Por Los modelos con dos ruedas de apoyo tra-
lo tanto, es difícil comparar los tipos de abre- seras presentan buena estabilidad cuando se
surcos (o, igualmente, las sembradoras) bajo trabaja en tierras llanas pero pueden tener li-
diferentes condiciones. Sin embargo, a 2,4 km/h mitaciones en tierras de ladera. Los modelos
la máquina probada por Ralisch et al. (1998) con una sola rueda son más adaptados a terre-
requería una fuerza de tiro de 1,4 kW o aproxi- nos pedregosos o con tocones ya que es más
madamente 3,4 kW (5 HP) de fuerza del mo- fácil bordear los obstáculos. Para aquellos
tor del tractor (con una eficiencia de tracción modelos que han evolucionado a partir de los
de 0,65). Esto se compara con las sembradoras arados «Fuçador», la mejor estabilidad ocu-
más grandes que para operar a 16 km/h por lo rre cuando se usan sistemas de barra fija en
general requieren de 4 a 9 kW (5-12 HP) de lugar de cadenas. El arado «Fuçador» tiene
fuerza del motor por cada abresurco. Estas ve- una barra de tiro de madera que está unida al
locidades tan altas no se pueden obtener con yugo de los animales de tiro y en la cual está
las máquinas pequeñas, incluso cuando hay montada una pata y un cuerpo similar a una
suficiente energía disponible, en razón de la pala (Schimitz et al., 1991). Para la labranza
dificultad para controlarlas, especialmente cero, el arado de reja es sustituido por los abre-
cuando el operador camina detrás de la má- surcos adecuados. Este aparato es usado en
quina. Por lo tanto, los menores requerimien- las áreas pedregosas y de ladera del sur de
tos de fuerza de las máquinas pequeñas pro- Brasil.
bablemente reflejan la menor velocidad de
Ajustes y mantenimiento
operación más que otras variables.
De acuerdo con Siqueira y Casão (2004), Todos los modelos tienen la posibilidad de
las diferencias en requerimientos de fuerza son ajustar la cantidad de semillas y fertilizantes
debidas en primer lugar al diseño de los abre- pero algunos modelos no permiten ajustar su
surcos, al peso de la sembradora, al área de profundidad de colocación o el manejo de los
contacto de corte de los residuos y a los com- residuos. Por otro lado, los abresurcos más
Modelos de sembradoras – máquinas para pequeña escala 257
evolucionados no requieren ajustes para ma- ajustes y es probable que produzcan mejores
nejar una amplia variedad de tipos de residuos, resultados que los modelos en la parte inter-
pero en general raramente son usados en las media de la Lámina que han sido el resultado
pequeñas sembradoras o sembradoras de pre- de la evolución del arado «Fuçador». Son más
cisión. En general, los abresurcos de dientes livianos, más económicos y más adaptables a
tienen la menor capacidad de manejo de resi- las condiciones de suelos pedregosos y en la-
duos (ver Capítulo 10) y los abresurcos de deras. El modelo en la parte inferior de la Lá-
discos son los mejores. Sin embargo, algunos mina tiene abresurcos de disco y plataforma
abresurcos de disco (por ej., de doble disco) para el trabajo del operador.
tienen la tendencia a entretejer la paja que se
puede doblar dentro de la ranura donde esta
interfiere con la germinación de las semillas, Sembradoras de precisión adaptadas
tanto en los suelos húmedos como en los sue- para cultivadores a motor
los secos. Estas desventajas ocurren igualmen-
te en las pequeñas sembradoras como en los Los cultivadores a motor que se usan co-
equipos más grandes. rrientemente para la labranza convencional
Por esta razón, varias sembradoras peque- algunas veces son usados para la labranza en
ñas de precisión con abresurcos de dientes pre- fajas eliminando algunas de las hojas de cor-
sentan la posibilidad de hacer ajustes que afec- te, en bandas angostas (20 a 200 mm de an-
tan su capacidad de cortar los residuos. Los cho), dejando la tierra entre los surcos (hasta
dos ajustes principales son el punto de engan- 500 mm de ancho) sin trabajar. En el Capítulo
che y la rueda frontal sobre la tierra. Los ajus- 4 se tratan los problemas de las versiones más
tes que se hacen al disco también controlan la grandes de esas máquinas que han sido adap-
profundidad de la ranura para el fertilizante. tadas para seguir la superficie del suelo y la
Para una misma profundidad del fertilizante, Lámina 15 muestra un ejemplo de la máquina
es posible tener diferentes profundidades de trabajando en fajas angostas.
siembra de las semillas por medio de ajustes
en la rueda posterior.
En los modelos más simples las densidades Sembradoras de precisión tiradas
de siembra son ajustadas cambiando los dife- por tractor
rentes platos de siembra mientras que los
modelos de surcos múltiples a menudo vie- Los pequeños agricultores también usan
nen provistos de juegos de engranajes para sembradoras de precisión a tracción animal o
cambiar la velocidad del plato. Otros mode- con pequeños tractores que requireren hasta
los que no siembran surcos espaciados pro- 50 HP. Las máquinas tienen los mismos abre-
veen un ajuste de la velocidad de la sembra- surcos para corte de la paja (discos lisos) y
dora por medio de engranajes. formación de las ranuras (dientes o doble dis-
co) como las máquinas para un solo surco y la
mayoría pueden aplicar fertilizante en el mo-
Sembradoras de precisión mento de la siembra.
para tracción animal Algunos modelos tienen tolvas para semi-
llas y/o fertilizante al igual que las máquinas
La Lámina 103 muestra varias sembradoras más grandes (por ej., Láminas 104 y 105)
para labranza cero producidas en Brasil. Los mientras que otros modelos tienen sembrado-
modelos en la parte superior de la Lámina son ras de precisión para surcos múltiples (Lámi-
más desarrollados, tienen más posibilidades de na 106).
258 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Lámina 103 Varias sembradoras de precisión para labranza cero en pequeña escala producidas
en Brasil.
Lámina 104 Pequeña sembradora para labranza cero tirada por tractor.
Lámina 105 Dos pequeñas sembradoras de precisión con tolvas para la fertilización y la siembra
de precisión.
donde los rendimientos no se podrán mante- to ha sido la labranza cero con retención de
ner debido a la degradación del suelo. residuos (Govaerts et al., 2004). Esto indica
En experimentos a largo plazo llevados a la necesidad de una «retención racional de los
cabo en México se ha demostrado que en sis- residuos» en los trópicos húmedos y en los
temas intensivos maíz-trigo la labranza cero subtrópicos con fuertes lluvias monzónicas
sin retención de residuos da lugar a una de- y, en algunos casos, con tres cultivos anuales
clinación más rápida de los rendimientos que (K. Sayre, 2004, comunicación personal).
cuando se utiliza un sistema de labranza En la actualidad se están llevando a cabo
que entierra los residuos. El mejor tratamien- investigaciones en algunas partes del sur de
260 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Lámina 106 Pequeña sembradora de precisión adaptada de tracción animal a montaje sobre
tractor.
Asia sobre arroz con siembra directa o con la- cidas disponibles, variedades de arroz que pue-
branza cero (sitio web de RWC). Existen esca- den soportar la inundación y variedades de buen
sas, o ninguna, investigaciones anteriores so- comportamiento en condiciones alternantes de
bre cómo plantar arroz bajo labranza cero en inundación y falta de agua.
condiciones monzónicas. Los mayores proble- El Cuadro 29 resume los problemas espe-
mas que enfrentan los investigadores y los agri- ciales que enfrenta la producción de arroz bajo
cultores son: i) las decisiones sobre la fecha de labranza cero.
siembra están influenciadas por el comienzo Los resultados de las investigaciones sobre
errático de las lluvias pre-monzónicas y las llu- retención de residuos están adelantando pero
vias monzónicas regulares y no existe o no pue- las tecnologías occidentales actuales tales
de existir un programa de riego que asegure como los abresurcos de doble disco, son pro-
mantener la maquinaria fuera de los campos bablemente muy costosas, pesadas y requie-
cuando están muy húmedos; ii) los enormes ren excesiva potencia. Están progresando los
problemas de manejo de las malezas que aca- sistemas nativos o desarrollados localmente
rrea la pérdida de las condiciones del fangueo tales como los abresurcos de doble disco con
en los suelos arenosos que permiten una rápida T invertida y el inyector de la sembradora de
infiltración y, por lo tanto, reduce la capacidad precisión con la rueda estrella. Sin embargo,
de controlar las malezas a causa del agua es- las investigaciones sugieren que sistemas más
tancada, y iii) la falta de drenaje, especialmen- económicos de labranza en fajas podrían pro-
te en las tierras bajas, que puede sumergir y porcionar la respuesta al manejo de los resi-
matar las plántulas recién emergidas. Los ex- duos a bajo costo, especialmente para los
perimentos en curso incluyen la labranza cero agricultores con mayores recursos. En el caso
del arroz transplantado, nuevos tipos de herbi- de los agricultores de menores recursos, los
Modelos de sembradoras – máquinas para pequeña escala 261
1. La mayoría del arroz es cultivado 1. Las siembras deben ser hechas tan pronto
en condiciones de secano. como sea posible, cuando el suelo llega a la
Los principales problemas son las humedad adecuada. Cuando el suelo está
lluvias monzónicas erráticas y, demasiado húmedo ocurrirá una seria
por lo tanto, el problema de entrar compactación.
a los campos para las operaciones 2. La maquinaria pequeña, más liviana (tractores
de siembra. de dos y cuatro ruedas) puede ayudar
a solucionar el problema.
3. Si la siembra directa es imposible, los agricultores
pueden transplantar a mano o a máquina en los
campos bajo labranza cero.
4. Trasladar a la época seca temprana el arroz
bajo riego.
residuos tienen un alto valor como combusti- res de cuatro ruedas. Como resultado de la
ble o forraje y probablemente continúen falta de recursos muchas fincas son peque-
siéndolo durante las próximas décadas. ñas o están dispersas. Las lluvias monzónicas
intensas son un desafío para los investigado-
¿Tractores de dos o de cuatro ruedas? res, para quienes apoyan la agricultura de
Un problema importante es identificar for- conservación y para los diseñadores de ma-
mas de aplicación de las tecnologías de la quinaria. Es probable que la mayoría de
agricultura de conservación a las zonas más los pequeños agricultores y de aquellos sin
pobres del sur de Asia. Si bien hay mayor recursos no sean propietarios de su equipo
disponibilidad de sembradoras para labran- sino que lo alquilen, cualquiera que sea el
za cero, existe una cierta escasez de tracto- sistema prevalente.
262 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
En los últimos años se han hecho esfuerzos SEMBRADORAS PARA LABRANZA CERO. El interés
para introducir tractores de dos ruedas en las que existe sobre la investigación y desarrollo
prácticas de la agricultura de conservación. de la agricultura de conservación en el sur de
Si bien su adopción es aún limitada, los inge- Asia ha llamado la atención del CIMMYT
nieros y los investigadores piensan que se es- (Centro Internacional de Mejoramiento de
tán encontrando aperos que pueden ser útiles Maíz y Trigo, México) el cual introdujo des-
en este complejo sistema socioecológico. de Nueva Zelandia a Pakistán, a principios de
la década de 1980, sembradoras con abresur-
Tractores de cuatro ruedas cos simples de T invertida para la siembra del
trigo (Baker, 1976a, b, Lámina 107). Después
India es el mayor productor del mundo de
de un cierto tiempo varios programas nacio-
tractores de cuatro ruedas pero, aún hoy día,
nales e internacionales en India y Pakistán
solamente el 50 por ciento de la labranza es
redujeron el tamaño y el costo de las máqui-
mecanizada; tal vez cerca del 90 por ciento
nas iniciales y las adaptaron a las condiciones
en las áreas de arroz-trigo, menos del 20 por
locales. Específicamente, las populares sem-
ciento en Nepal y más del 70 por ciento en
bradoras para trigo de invierno o «rabi» he-
Bangladesh. La sorprendente diferencia entre
chas localmente fueron reforzadas y se les
Bangladesh y el resto del sur de Asia se anali-
agregaron abresurcos en T invertida hechos
za más adelante. Más aún, las leyes del go-
localmente (Hobbs y Gupta, 2004).
bierno de la India no permiten que los fabri-
Las plataformas para las barras portaherra-
cantes de tractores fabriquen implementos
mientas y las herramientas para la labranza
como las sembradoras a fin de promover la
cero son cada vez más simples y livianas (Lá-
fabricación artesanal local.
mina 108). Casi todos los talleres de herrería
son capaces de producirlas. El principal de-
BARRAS PORTAHERRAMIENTAS Y HERRAMIENTAS.
fecto en los tractores de fabricación local es
Muchas de las barras portaherramientas en In- el control del sistema de tiro y el segundo es el
dia y Pakistán están basadas en las sembrado- levante hidráulico. Por lo tanto, muchos agri-
ras para los cultivos de la época temprana del cultores que adquieren máquinas para labran-
«rabi» (trigo de invierno, lentejas) que fueron za cero encuentran que el enganche hidráuli-
desarrolladas en las décadas de 1970 y 1980. co de tres puntos frecuentemente necesita
Los fabricantes de maquinaria para agricultu- reparaciones; también muchas sembradoras
ra de conservación, en su mayor parte, han para labranza cero encuentran problemas con
fortalecido simplemente los bastidores, las las ruedas de control de profundidad. En
barras y los cinceles (Hobbs y Gupta, 2004). Pakistán, a menudo se usan ruedas neumáti-
Las barras portaherramientas son planas (no cas, pero los modelos más económicos en In-
son de sección romboidal) y generalmente dia y Pakistán usan ruedas de metal.
están hechas de dos piezas de 50 mm de acero
en ángulo soldadas para formar una barra de SEMBRADORAS PARA LABRANZA EN FAJAS. Las sem-
sección cuadrada. Dos o tres barras se colo- bradoras para siembra en fajas están menos
can a distancias fijas y hay varios sistemas para difundidas que las sembradoras para labranza
adosar los cinceles a las barras. Los agricul- cero para tractores de cuatro ruedas o que las
tores están aprendiendo que un cincel de lar- sembradoras comunes (Lámina 109). Estas
go ajustable proporciona una mayor adapta- sembradoras fueron desarrolladas por investi-
bilidad, pero tiene la tendencia a moverse gadores e ingenieros hindúes en la Punjab Agri-
hacia un lado u otro si no está debidamente cultural University, Ludhiana, India, a fines de
asegurado o si es de baja calidad. la década de 1980. Las máquinas típicas com-
Modelos de sembradoras – máquinas para pequeña escala 263
Lámina 107 Abresurcos en T invertida montados en cinceles rígidos fijados a una barra portahe-
rramientas de sección cuadrada. (Los detalles de los abresurcos típicos en T invertida se aprecian
en la Figura 8 y en las Láminas 21 y 22).
prenden un rotavador simple de 2,2 m movido blema de la siembra sobre residuos densos, la
por la toma de fuerza del tractor con cuatro o rueda estrella o los sembradores de precisión a
seis láminas por faja, producidas en modelos golpes rotativos –desarrollados originariamente
de nueve a once surcos. Tales máquinas cues- en Zimbabwe– han sido agregados a los basti-
tan un 50 por ciento más que las sembradoras dores existentes para labranza cero (Lámina
para labranza cero. El consumo de combusti- 110). Se han hecho modificaciones para mejo-
ble es mayor que en las máquinas para labran- rar la sincronización de la entrega de las semi-
za cero pero mucho menor que en las má- llas y para prevenir que las semillas caigan fuera
quinas para labranza convencional. Los del hoyo (sitio web del RWC). Tal vez el ma-
agricultores indican que la labranza en fajas es yor problema que enfrenta este sistema en el
preferible en campos con residuos excesiva- sur de Asia es su costo relativamente alto.
mente altos para los cinceles de las máquinas
en T invertida para labranza cero. Los rendi- SEMBRADORAS PARA MELGAS ( SIEMBRA EN
mientos son comparables a aquellos de la la- CABALLONES Y SURCOS ). Los sistemas para
branza cero (Hobbs y Gupta, 2003). Los resul- siembra de trigo en melgas fueron desarrolla-
tados de investigaciones hechas en Pakistán dos primeramente en México, con agriculto-
sobre discos rotativos, lisos o serrados, indica- res del valle Yaqui, para compensar un decre-
ron que el desgaste de los discos fue alto. ciente aporte de agua. El agua de riego se ahorra
al aplicarla por medio de surcos entre las
SEMBRADORAS DE PRECISIÓN (A GOLPE) CON RUE- melgas, lo cual favorece su conservación y el
DA ESTRELLA. En un intento de solucionar el pro- drenaje. El trigo sembrado en melgas también
264 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Lámina 108 Sembradora típica para labranza cero sobre un tractor hindú.
CHINA
NEPAL
Uttar Pradesh
Meghalaya
Bihar BANGLADESH
Figura 41 «Área de la pobreza» en el sur de Asia donde 500 millones de familias dependientes de
la agricultura viven con menos de una hectárea de tierra.
Lámina 113 Máquina de dos ruedas para labranza reducida en trabajo de ancho total.
Lámina 114 Máquina de dos ruedas para labranza reducida en trabajo de labranza en fajas.
Modelos de sembradoras – máquinas para pequeña escala 271
doras diseñadas en China ha sido mejorada después de trigo en melgas permanentes. Las
para hacer melgas y sembrar en melgas per- hojas enderezadas de tipo «C» pueden cortar
manentes con muy pocas modificaciones. los residuos dejándolos en la superficie de la
Cuando es necesario reconstruir las melgas, melga con un disturbio o arrastrado mínimo
puede usarse el sistema de la barra portahe- del suelo, similar al que se encuentra con abre-
rramientas con palas o solamente unas pocas surcos invertidos en forma de T.
hojas rotatorias en el surco para devolver el Ha habido un extenso debate acerca de la
suelo a la melga sin disturbio. altura más deseable de las melgas de este tipo.
La mayoría de las sembradoras de precisión
LABRANZA EN FAJAS EN MELGAS PERMANENTES. pueden hacer melgas de solo 10 a 12 cm de
Si las melgas no requieren ser reconstruidas, alto. Los primeros intentos hechos para crear
la misma máquina hace la labranza en fajas melgas más altas indican ahora que consumen
sobre las melgas existentes. En Bangladesh y un exceso de energía y que son agronómica-
México, el CIMMYT ha introducido modifi- mente indeseables, ya que se secan más rápi-
caciones en las máquinas convencionales para damente. Generalmente se acepta que las
siembra en fajas como sigue: melgas deben ser tan altas como sea necesa-
rio para permitir que el agua de riego o de
1. Dos ruedas para el control de profundidad
drenaje se mueva de un extremo del campo al
están colocadas sobre los surcos en lugar
otro. Dado que muchas parcelas son peque-
del rodillo.
ñas (menos de 0,2 ha), las melgas bajas son
2. Los abresurcos se extienden en profundi-
satisfactorias.
dad a 7 cm.
Los sistemas de labranza en fajas basados
3. Las hojas estándar de tipo «C» están en-
en tractores de dos ruedas también incluyen
derezadas para cortar los residuos y redu-
máquinas comparativamente livianas que per-
cir la cantidad de movimiento del suelo.
miten la siembra en suelos más húmedos, en
4. Se agregan hojas adicionales para reducir
comparación con el trabajo de los tractores
la vibración (marcadas con un círculo en la
de cuatro ruedas y las correspondientes sem-
Lámina 115).
bradoras de precisión para melgas. Esto es
La Lámina 115 muestra una máquina para particularmente importante en los sistemas de
labranza en fajas/sembradora modificada, usa- agricultura de conservación en el sur de Asia
da en este caso para la siembra de frijol mungo con casos de melgas bajas y llanas.
Lámina 115 Sembradora para labranza en fajas que opera sobre residuos densos en una melga
permanente y siembra frijol mungo.
272 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
273
274 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
que continúe el proceso natural de formación logía en este aspecto, será más efectiva y per-
del suelo. Estos procesos toman tiempo, años mitirá una mayor velocidad de operación si el
y tal vez décadas. Incluso, hasta el momento campo tiene una superficie uniforme. Cuando
en que se obtiene un cierto grado de repara- se labra un campo antes de convertirlo a la-
ción, los rendimientos pueden ser reducidos, branza cero, es necesario un esfuerzo adicio-
especialmente si el agricultor no aplica los nal para uniformizar la superficie, que es una
insumos mejor conocidos del sistema. Pero en buena inversión para la posterior agricultura
otros casos, cuando los agricultores han usa- de labranza cero.
do altos niveles de insumos,que incluyen la Se debe señalar que, sin embargo, con el co-
fertilización en bandas, hay numerosos ejem- rrer del tiempo, los restos dejados por las lom-
plos de que los rendimientos de los cultivos brices de tierra son capaces de llenar galerías a
no sufren, incluso en el primer año. Y sobre profundidades de 75 a 150 mm. Por supuesto,
todo, después se han incrementado en forma un incremento en el número de lombrices de
sostenida, a menudo a niveles nunca registra- tierra es más bien un resultado a medio térmi-
dos en ese campo. no de la labranza cero y no a corto plazo.
Los mejores resultados para la conversión La siembra con sembradoras o sembrado-
a la labranza cero ocurren cuando el agricul- ras de precisión también puede ser favorecida
tor tiene desde el principio la opción de selec- si los predios tienen formas regulares. La na-
cionar campos con alto potencial de retorno. turaleza más firme de los suelos sin labrar li-
En una finca integrada con pasturas y cultivos mita la capacidad de muchas máquinas para
puede ser más adecuado comenzar una rota- labranza cero para moverse en las esquinas.
ción de cultivos en labranza cero en un cam- La planificación primaria previa a la subdivi-
po que ha tenido pasturas o alfalfa durante sión de las tierras puede contribuir a resolver
algún tiempo y que tiene un suelo en mejores este problema.
condiciones que los campos que han sido la-
brados durante varios años.
En las fincas que en el pasado han sido com- Competencia de las malezas
pletamente labradas, deberían seleccionarse
los campos que han sido menos afectados por Ha habido considerables debates sobre la
los aspectos destructivos de la labranza. No competencia de las malezas en relación con
es realista esperar una evaluación objetiva del los abresurcos. Es importante recordar que la
potencial de un sistema como la labranza cero, mayoría de las operaciones de la labranza con-
excepto cuando se le ha ofrecido la oportuni- vencional están dirigidas a controlar la com-
dad de mostrar su verdadero potencial. petencia de las malezas con los cultivos. Por
Un drenaje efectivo del suelo tendrá cierta lo tanto, la importancia de las operaciones de
importancia sobre la condición del suelo. aspersión en la labranza cero debe ser debi-
Mientras que la labranza cero, con el correr damente considerada. El buen manejo inclu-
del tiempo, mejora la capacidad natural ye la identificación de las distintas especies,
de drenaje, también puede ser necesario algún seguida por una selección adecuada de los
drenaje artificial. Los suelos bien drenados herbicidas más adecuados o de otras estrate-
producirán los mejores resultados. gias de control, tales como la cobertura. Una
La importancia de que los abresurcos para planificación adecuada es importante para
labranza cero sean capaces de seguir de for- asegurarse de que los efectos residuales de los
ma segura las ondulaciones del terreno ya ha herbicidas sean compatibles con los futuros
sido señalada en el Capítulo 8. Sin embargo, cultivos, así como con la fauna del suelo como
cualesquiera que sean los méritos de la tecno- las lombrices de tierra; por ejemplo, algunos
Manejo de un sistema de siembra para labranza cero 275
herbicidas y pesticidas son tóxicos para las rar un control adecuado y rentable. Más im-
lombrices. portante aún, es necesario reconocer que al-
Una vez seleccionados los herbicidas, es ne- gunas pestes y enfermedades se comportan en
cesario asegurar que el compuesto químico es- forma diferente bajo las condiciones de labran-
pecífico es aplicado a la dosis correcta de in- za cero que en la labranza común. A menudo
grediente activo con la dilución adecuada (por puede resultar engañoso asumir que las medi-
lo general en agua) y otro compuesto como das apropiadas de control en los suelos labra-
surfactante. También son necesarias para la dos pueden ser aplicadas sin modificaciones
aspersión condiciones adecuadas del tiempo, en la labranza cero. Estos principios se apli-
durante la aplicación y por un cierto período can tanto al manejo antes y después de la siem-
posterior. El estado de vigor y crecimiento de bra y de la siembra de precisión.
la planta y el tamaño de las hojas pueden te- Las medidas de control químico también
ner influencia sobre la actividad del herbici- pueden ser complementadas con otras técni-
da. Con algunos herbicidas es necesario con- cas de manejo tales como la rotación de culti-
tar con un cierto período entre aspersión y vos que constituye una herramienta esencial
siembra. En muchos casos es más importante para el desarrollo de la sostenibilidad. Las
asegurar que la aplicación del herbicida es rotaciones no solo son efectivas para contro-
optimizada con respecto a una cierta formu- lar pestes y enfermedades sino que también
lación y el estado de crecimiento de la male- pueden fortalecer el control de malezas al
za, salvo cuando hay actividad residual del permitir el uso de una mayor gama de herbi-
herbicida en el suelo o peligro del efecto cidas y/o fortalecer la actividad de tratamien-
del «puente verde» (Capítulo 3). tos particulares de herbicidas, que modifican
Un principio que ha ocurrido repetidamen- la fertilidad del suelo y ayudando a mejorar
te ha sido el cambio del grado de dificultad los niveles de materia orgánica del suelo. Es
de controlar algunas especies de malezas des- necesario tomar precauciones porque la erra-
pués de varios años de labranza cero. Cada dicación química de una especie indeseable
especie de maleza tiene un modelo óptimo de puede ir en detrimento de otra especie, por
labranza, competencia con el cultivo y hume- ejemplo, las lombrices de tierra.
dad para su establecimiento. Casi todos los
estudios de labranza cero sobre las malezas a
largo plazo han señalado este claro cambio de Manejo de la fertilidad
especies y de intensidad. Pero los mismos y del suelo
otros estudios a largo plazo muestran una sig-
nificativa reducción total de la incidencia de El desarrollo de tecnologías de siembra y
las malezas en los sistemas continuados de la- de siembra de precisión para labranza cero
branza cero que han usado estrategias adecua- con la colocación del fertilizante en bandas
das de control y rotación de cultivos. ofrece nuevas oportunidades para el manejo
de los fertilizantes bajo las condiciones de
labranza cero. Sin embargo, se aplican todos
Control de pestes los principios antiguos existentes.
y enfermedades El elemento fundamental para un uso cos-
to-efectivo del fertilizante es una evaluación
La mayoría de los principios de manejo que cuidadosa de los niveles de fertilizante y de
se aplican a las malezas también se aplican al requerimientos de los cultivos. Los análisis
control de las pestes y enfermedades. Una de suelos y de tejidos de las plantas son he-
identificación cabal es necesaria para asegu- rramientas útiles para este proceso, tanto como
276 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
la interpretación correcta de los resultados. Además, las altas densidades de siembra in-
Estos resultados deben proporcionar las ba- volucran en este caso un innecesario costo adi-
ses para la selección de las opciones de ferti- cional de semillas.
lizantes más rentable, algunas de las cuales Si se usa el equipo adecuado hay pocas o
podrían ser influenciadas por limitaciones de ninguna razón para que el establecimiento de
las máquinas, mientras que otras podrían no las plántulas en la labranza cero sea menor
serlo. que en la labranza convencional. De hecho,
Sin duda es necesaria más investigación es- con los equipos modernos y un sistema apro-
pecífica bajo las condiciones de labranza cero piado, la labranza cero tiene el potencial para
que determinen el régimen más adecuado de porcentajes de establecimiento más altos que
fertilización para cualquier combinación la labranza convencional.
de cultivos, tipo de suelos y clima. Las res- En cualquier caso, el problema importante
puestas de los fertilizantes en la labranza cero no es considerar cuánta semilla se siembra,
pueden ser diferentes de aquellas obtenidas sino que la medida final es el establecimiento
bajo la labranza común en el mismo tipo de de las plántulas. Por lo tanto, las densidades de
suelos. Por ello, los resultados de las expe- siembra deberían estar basadas en una eva-
riencias de investigación y extensión en con- luación del grado de riesgo según una situa-
diciones de labranza común pueden no ser ne- ción dada que lleve a la predicción de una
cesariamente correctas cuando se aplican a los emergencia efectiva de plántulas (Ritchie
sistemas de labranza cero. Sin embargo, por et al.,1994, 2000). El primer factor a incor-
lo general los requerimientos de las plantas porar es el potencial de germinación de las
no cambian. La siembra en labranza cero con semillas, el cual está especificado en los da-
fertilizantes en bandas ofrece una oportuni- tos de la certificación de las semillas. La den-
dad para una mayor eficiencia de la aplica- sidad de siembra puede ser calculada usando
ción pero las cantidades totales de nutrientes la siguiente fórmula:
requeridas, con la excepción del nitrógeno, no
se alteran mayormente. TSW × TPP
SR =
EFE
variedades de la misma especie pueden variar limitada experiencia ya ha demostrado que las
sensiblemente en peso y tamaño de acuerdo técnicas de los dos sistemas son diferentes y
al vigor del cultivo, las condiciones del tiem- que deben aprenderse nuevos procedimiento
po e incluso de la ubicación geográfica en el de manejo.
momento de la cosecha, es importante cali- El tipo de trabajo de la agricultura de con-
brar el mecanismo de dosificación cuando se servación que se basa en «un solo pase» deja
cambian las variedades. Durante las operacio- poco margen para posibles errores. Por otro
nes de siembra o de siembra de precisión se lado, la gama de implementos y funciones in-
debería controlar la constancia de la calibra- volucradas es mucho menor. Por lo tanto, un
ción por medio del control de la semilla y el conocimiento detallado de las máquinas prin-
fertilizante usados para cubrir una determina- cipales –asperjadoras y sembradoras– puede
da área. Algunos sembradores cambian la do- ser alcanzado más fácilmente.
sificación con el cambio de la temperatura Dado que es muy probable que en la la-
ambiente; el aumento de la temperatura de la branza cero las condiciones físicas del suelo
mañana a la tarde puede causar un sensible varíen más de campo a campo o incluso den-
cambio en la densidad de siembra. tro del mismo campo, el operador tiene una
En Australia occidental, la experiencia de mayor necesidad de entender los principios
los agricultores con la versión de abresurcos involucrados en esas condiciones y ser ca-
de ala en la versión de discos para labranza paz de ajustar la maquinaria de acuerdo a las
cero mostró que las densidades de siembra mismas. Por supuesto, las sembradoras y las
para una población equivalente de colza po- sembradoras de precisión para labranza cero
día ser reducida con buen resultado de 9 kg/ha varían ampliamente en su capacidad para re-
bajo labranza convencional a 4-5 kg/ha bajo conocer las variaciones del suelo gracias al
labranza cero si se usa una máquina de diseño ajuste automático que pueden hacer, pero de
avanzado (J: Stone, 1993, comunicación per- cualquier manera requieren que el operador
sonal). El ahorro de semilla necesaria para todo tenga una óptima capacitación.
el predio fue equivalente al costo adicional de Es probable que en el futuro se pueda con-
la máquina. Antes de reducir la densidad de tar con un incremento en el uso de equipos
siembra, la experiencia de este agricultor que electrónicos de supervisión y control de las
sembraba una densidad alta con la sembradora funciones de las sembradoras y las sembrado-
para labranza cero fue que el cultivo permane- ras de precisión para mejorar su comporta-
ció largo tiempo en estado vegetativo y produ- miento y reducir la dependencia del operador.
jo un bajo rendimiento de grano. También es probable que la operación de es-
tas máquinas se convierta en una tarea espe-
cializada con un mayor énfasis en la capacita-
Capacidad de los operadores ción de los operadores.
disponibles en el momento oportuno. La con- pos más avanzados. Los costos, sin embar-
servación de registros correctos es una parte go, toman en consideración la mayor veloci-
integral de cualquier programa efectivo de dad de operación y los menores costos de man-
manejo. tenimiento de las máquinas más avanzadas.
El Cuadro 30 resume el momento de actuar Por ejemplo, Saxton y Baker (1990) encon-
en la toma de decisiones clave para el manejo traron que una máquina avanzada para la-
del campo si se desea completar un programa branza cero con abresurco de alas incremen-
exitoso de labranza cero. Este no contiene una tó los rendimientos de trigo en un promedio
receta sino que remarca solamente los temas del 13 por ciento. Los cálculos si se usa un
importantes. Dado que muchos de los hechos mayor impuesto del 24 por ciento y/o tasas
ocurren antes de la siembra, la planificación de interés más bajas del 11 por ciento darán
previa es uno de los puntos más relevantes. lugar a que las máquinas más grandes sean
más económicas cuando se hace un uso me-
nor de 600 hectáreas anuales.
Comparación de costos
Cuadro 30 Ejemplo de las etapas del manejo de un programa de labranza cero en Nueva
Zelandia.
Cualquier momento Asegurar que el drenaje La labranza cero no puede rectificar suelos
antes de la siembra es correcto pobremente drenados
Cualquier momento Determinar cuánto riesgo Los riesgos estarán influenciados por la
antes de la siembra está dispuesto a correr elección del herbicida (la efectividad es función
el agricultor de las condiciones: condiciones pobres nece-
sitan mejores formulaciones); los cebos para
babosas (infestaciones serias y condiciones
húmedas necesitan mejores formulaciones);
los pesticidas (asegurar que el agricultor ha
elegido el tratamiento correcto); la sembradora
(condiciones difíciles y semillas pequeñas
necesitan mejor tecnología); las semillas
(las condiciones adversas ponen más presión
sobre la calidad de las semillas)
Cualquier momento Control de plagas que Algunas plagas pueden necesitar un tratamien-
antes de la siembra no son específicas de to antes o en el momento de la siembra
la labranza cero Considerar semillas tratadas con insecticidas
En algún momento Subsolar para aliviar la Usar un subsolador que no rompa mucho la
antes de la siembra compactación, si esta superficie a fin de evitar la labranza para
existiera. Es mejor cuan- uniformizar el terreno. En estos casos son
do el suelo está seco preferibles subsoladores poco profundos
Cuando el ganado Eliminar las huellas de La mayoría de los abresurcos uniformizan las
pesado se saca pezuñas de más de huellas de pezuñas a medida que siembran
del campo 75 mm de profundidad (algunos mejor que otros). Con huellas más
profundas usar un subsolador «Ground Hog»,
un subsolador poco profundo o una nivelado-
ra para eliminar solo la parte superior cuando
el suelo está algo friable en la superficie
Seis meses antes Aplicar cal si el pH La cal requiere más tiempo para actuar si no
de la siembra del suelo es bajo hay cultivos que la incorporen. No aplicar cal
cerca del momento de la aspersión. La cal en
las hojas de las plantas puede afectar el
glifosato, es de lenta disolución y se lixivia
en el suelo
Tres meses antes Tomar muestras de Se necesita tiempo para obtener los resultados,
de la siembra fertilidad del suelo analizar las opciones de fertilizantes y tomar
medidas. En labranza cero a largo plazo
puede más adecuado tomar muestras a 75 mm
de profundidad y no a 150 mm
Tres semanas antes Asperjar con glifosato + Si los agricultores no desean usar las altas
de la siembra chlorpyrifos si hay dosis de chlorpyrifos, el control del gorgojo
Holocantella paucispi- argentino del tallo Listronotus bonariensis
nosa, áfidos o gorgojo puede ser obtenido esperando tres semanas
argentino del tallo entre aspersión y siembra. Sin embargo,
Listronotus bonariensis una dosis baja de chlorpyrifos puede ser
necesaria para controlar Holocantella
paucispinosa o áfidos
Por lo menos dos Sacar el ganado del El glifosato, para ser más efectivo, debería ser
semanas antes campo si está en asperjado sobre cultivos limpios y con hojas
de la siembra pasturas que aún no nuevas. Esto produce una espesa cobertura
han sido asperjadas que ayuda a controlar las malezas y retener la
Manejo de un sistema de siembra para labranza cero 281
Cuadro 30 Ejemplo de las etapas del manejo de un programa de labranza cero en Nueva
Zelandia. (Continuación).
Cuadro 30 Ejemplo de las etapas del manejo de un programa de labranza cero en Nueva
Zelandia. (Continuación).
Cuadro 30 Ejemplo de las etapas del manejo de un programa de labranza cero en Nueva
Zelandia. (Continuación).
En las primeras tres Controlar el daño del Estas plagas deberían haber sido controladas
semanas después curculiónido Holocan- mezclando glifosato y chlorpyrifos en el
de la siembra thella paucispinosa, de tanque. Si esto no se hizo, es necesario
los áfidos o del gorgojo vigilar cuidadosamente porque estas son las
argentino del tallo principales plagas de la labranza cero y
Listronotus bonariensis pueden arruinar todo un cultivo o pastura.
En las primeras tres Controlar otras plagas Las plagas más normales de los cultivos y las
semanas después no controladas por pasturas podrían también causar problemas
de la siembra chlorpyrifos en la labranza cero. Poner la misma atención
que en un cultivo bajo labranza
Cuatro a seis semanas Controlar la resistencia Cuando las nuevas plantas de gramíneas no
después de la siem- al arrancado manual de se arrancan fácilmente con la mano podrían
bra de la pastura las nuevas plantas de estar prontas para un pastoreo liviano. Usar
gramíneas animales livianos en gran número y en
períodos cortos en lugar de pocos animales
por períodos largos
Después de seis Tratar normalmente los Esto no significa descuidarlos sino que todos
semanas cultivos o pasturas los problemas que surgen no serán peores que
bajo labranza convencional. De hecho, las
nuevas pasturas bajo labranza cero a causa
de la firmeza del suelo pueden a menudo ser
tratadas en la misma forma que las pasturas
bien establecidas. Mejora la utilización de las
crucíferas forrajeras porque una mayor
proporción de las raíces a cosechar están
sobre la tierra
En el momento Desparramar uniforme- No quemar los residuos de los cultivos excep-
de la cosecha mente los residuos de to cuando el abresurcos que vaya a ser
los cultivos utilizado en la próxima siembra no los pueda
manejar. La producción de fardos es acepta-
ble pero retarda el incremento de la materia
orgánica del suelo. Con algunos abresurcos
será necesario cortar los residuos. Unos
pueden manejar los residuos en cualquier
forma, pero otros no pueden manejar ningún
tipo de residuos. Los operadores deben saber
qué abresurco será usado en el próximo culti-
vo bajo labranza cero antes de tomar decisio-
nes sobre el manejo de residuos del cultivo
actual
Después de uno Examinar el suelo y la Probablemente, ambos hayan mejorado.
a cinco años cuenta bancaria La estructura, sanidad, porosidad, materia
de labranza cero orgánica y actividad de las lombrices de tierra
del suelo habrán mejorado sensiblemente.
Siempre que el sistema se haya manejado
correctamente y usado los niveles adecuados
de insumos para el nivel de riesgo aceptado,
el margen bruto debería incrementarse
progresivamente
284 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
50 69 107 182
100 45 62 95
20 32 39 53
40 26 29 30
600 24 26 23
800 23 23 20
1 000 23 21 18
la sembradora de precisión, puede ser cos- 9. Una buena planificación de todos los as-
toso e ineficaz. pectos del programa de labranza cero
7. La labranza cero requiere que los nuevos es una parte importante del manejo del
operadores aprendan una nueva capaci- riesgo.
dad de manejo pero también ofrece la 10. Las sembradoras avanzadas para labran-
oportunidad para una mayor especializa- za cero comienzan a tener rendimiento
ción de los operadores. económico cuando se usan cerca de 600
8. Un programa de labranza cero que no esté hectáreas anuales.
bien manejado puede fracasar a causa de 11. La labranza cero representa una econo-
problemas posteriores a la siembra y su mía respecto a la labranza convencional.
seguimiento. Es necesario no desperdiciarla.
16
La agricultura con tráfico controlado – una práctica
complementaria para la labranza cero
W. C. Tim Chamen
285
286 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Figura 42 Sistema de labranza con tráfico controlado que muestra la siembra, la aspersión y la
cosecha. En esta escala, todas las huellas pueden ser sembradas, excepto las usadas para las
aplicaciones de productos químicos.
causada por las ruedas de los vehículos y las entre tipos de suelos, lo que hace que sean
pezuñas de los animales, sin considerar cuán- más fáciles de manejar y adecuados para un
to tiempo han estado bajo el régimen de la- mayor número de cultivos bajo un régimen de
branza cero. labranza cero.
También mejora el comportamiento de las
máquinas al evitar los daños mecánicos indu-
cidos por la compactación. Los diferentes gra- Efectos de la agricultura de tráfico
dos de compactación de los suelos se diferen- controlado sobre las condiciones
cian en su fortaleza y respuesta a los insumos del suelo
mecánicos. Por ejemplo, es difícil obtener
óptimos resultados de los abresurcos de las Los sistemas agrícolas de labranza cero pue-
sembradoras. Los abresurcos pueden trabajar den causar diferentes niveles de disturbios en
bien en una condición o posición en una sem- el suelo. En un principio, la labranza cero se
bradora o, al contrario, pueden tener un com- concentró para evitar las operaciones de la-
portamiento pobre en otras condiciones y po- branza en términos generales, pero en los úl-
siciones. Una condición más homogénea del timos tiempos se ha puesto énfasis en la im-
suelo en todo el campo proporciona una ma- portancia de minimizar el disturbio creado por
yor precisión de las máquinas. Al evitarse la las herramientas de labranza cero, en especial
compactación del suelo disminuye la hetero- los abresurcos. El escaso disturbio causado por
geneidad o variabilidad de sus propiedades, la labranza cero ocurre desde el momento en
tanto dentro de un solo tipo de suelo como que los abresurcos de las sembradoras y de
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 287
las sembradoras de precisión tienen como cero, mejores serán los resultados; el control
objetivo la disrupción mínima del suelo, sufi- del tráfico dentro del predio contribuye a esto.
ciente solo para sembrar las semillas y colo- Cuando se han hecho comparaciones de tráfi-
car el fertilizante pero que dejan el suelo como co sin ordenación y con control de tráfico, los
si no hubiera sido trabajado en absoluto. Otras datos de las investigaciones raramente inclu-
formas de labranza cero cuentan con cinceles yen detalles sobre los modelos de abresurcos;
más agresivos, abresurcos de dientes o tipo por ello las condiciones óptimas para los ensa-
azada que dejan la superficie y a menudo las yos pueden no haber estado presentes, lo cual
capas más profundas sin disturbar, similar a puede o no haber afectado los resultados.
los efectos de la labranza mínima o la labran-
za reducida. Resistencia del suelo
Definir un nivel escaso de disturbios en la
La resistencia de los suelos está gobernada
labranza cero no es una tarea simple. Una re-
por varios factores, algunos de los cuales están
gla general es que al menos el 70 por ciento
interrelacionados y todos tienen impacto sobre
de los residuos superficiales originales debe-
la labranza cero. Los suelos compactados son
rían permanecer sin disturbar sobre la tierra
más duros y tienen más resistencia a la pene-
después del paso de la sembradora. Para los
tración que los suelos no compactados, espe-
abresurcos que operan a una distancia entre
surcos de 750 mm, un 30 por ciento de distur- cialmente cuando disminuye el contenido de
bio permite que queden 112 mm para ser agua (Blackwell et al., 1985; Campbell et al.,
disturbados a cada lado del surco mientras que 1986; Gerik et al., 1987; Chamen et al., 1990,
con un espaciamiento de 150 mm, es acepta- 1992; Dickson y Campbell, 1990; Carter et al.,
ble que a cada lado del surco queden 22,5 mm. 1991; Unger, 1996; Radford et al., 2000;
En términos generales, cuanto mayor es la Yavuzcan, 2000; Abu-Hamdeh, 2003; Radford
compactación que sufre el suelo tanto mayor y Yule, 2003).
será la necesidad de reparación. La labranza En un experimento de 10 años de duración,
cero propone un remedio a esa situación al uno de los tratamientos consistió en someter
reducir la intensidad del tráfico, lo que evita un vertisol con el 25-32 por ciento de hume-
el disturbio del suelo y permite que el suelo dad a una carga de una rueda de cinco tonela-
se reestructure. La eliminación del tráfico per- das en el primer año y a una carga de tres to-
mitirá que esto ocurra en mayor medida y más neladas anuales durante cinco años, después
rápidamente. El elemento más importante para del tratamiento inicial (Radford y Yule, 2003);
la creación y mantenimiento de una mejor es- se usó labranza para el control de malezas en
tructura del suelo es la minimización de los los primeros cinco años de una rotación de
disturbios y, como se ha visto anteriormente, cultivos arables. Al final del período inicial
cuanto más agresivo es el abresurcos, mayor de cinco años, se aplicaron a las mismas par-
será el disturbio. celas la labranza cero y el control del tráfico
A diferencia de los suelos en que se circula durante otros cinco años. La mayor resisten-
desordenadamente, cuando los abresurcos cia persistió en el perfil de 0-100 mm durante
deben crear una cama de semillas y sembrar, tres años, mientras que en el tratamiento con
los suelos sin tráfico tienden a retener sus ca- cargas repetidas de cinco toneladas en los cin-
mas de semillas de una estación a otra de modo co primeros años (comparadas con tres tone-
que solo se requiere colocar las semillas y el ladas después del primer año), persistieron los
fertilizante. Desde todos los puntos de vista, efectos de la resistencia a 100 mm durante casi
cuanto menor es el disturbio creado durante cinco años después de la iniciación de la la-
la siembra dentro de un régimen de labranza branza cero.
288 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Estos datos sugieren que los suelos con trá- diciones de labranza cero, después de una fer-
fico sin ordenar pueden tener niveles de va- tilización nitrogenada y fuertes lluvias (Ball
riabilidad de la resistencia como resultado del et al., 1999). La denitrificación y la produc-
pasaje indiscriminado del tráfico. Si bien esas ción de metano han sido identificadas como
diferencias pueden tender a disminuir con unas de las principales limitaciones al mejo-
el tiempo en un régimen de labranza cero, el ramiento del comportamiento ambiental de la
mejoramiento natural en la parte superior y labranza cero comparada con la labranza li-
en los centímetros más importantes del suelo mitada (King et al., 2004). King et al. lo atri-
tenderá a diferenciarse de acuerdo con el tipo buyeron a un incremento de la densidad de la
de suelo, el diseño de los abresurcos y el nue- parte superior del suelo y a una pobre airea-
vo tráfico. Además, habrá un incremento ge- ción.
neral de la resistencia del suelo originada en La resistencia del suelo directamente enci-
los reiterados pasajes de las ruedas. En algu- ma de las plántulas emergentes también pue-
nos suelos esto no puede ser completamente de ser un problema. Addae et al. (1991) sugi-
contrarrestado por mejoramientos estructura- rieron la siguiente relación:
les debidos a la falta de disturbio o por una
mayor concentración de materia orgánica en Y = 90,4 – 3,58X
las capas superficiales.
donde:
EFECTOS DE LA RESISTENCIA DEL SUELO SOBRE
LOS NUTRIENTES Y EL CRECIMIENTO DE LAS PLÁN- Y = emergencia de las plántulas
TULAS. La mayor resistencia del suelo reduce (en porcentaje)
la capacidad del cultivo para extraer nutrien- X = resistencia del suelo, kPa
tes; como resultado, el sistema del suelo per-
derá algunos de ellos. En cualquier suelo par- La fuerza máxima que un coleoptile de tri-
ticular, la variación de la resistencia es go puede ejercer es de cerca de 30 g y sola-
dominada por cambios en el contenido de agua mente cuando la resistencia es menor de 25 g
pero la resistencia con un contenido específi- es posible esperar una emergencia del 100 por
co de agua es determinada por su estado de ciento (Bouaziz et al., 1990). La compacta-
compactación. La denitrificación causada por ción del suelo por encima de un plántula emer-
la compactación es una fuente de pérdida de gente reduce, por lo tanto, la emergencia, es-
nitrógeno y un enraizamiento restringido pue- pecialmente cuando el suelo está húmedo. La
de causar una pobre absorción del fósforo variación en el momento de la emergencia a
(Wolkowski, 1990, 1991). La absorción del menudo está asociada con las variaciones de
potasio es afectada, en primer lugar, por la la resistencia del suelo (Brown, 1997).
aireación: su absorción es afectada por deba-
jo de un nivel de concentración de oxígeno EFECTOS DE LA ESTRUCTURA DEL SUELO SOBRE
cercano al 10 por ciento. SU RESISTENCIA. Un mayor resistencia del sue-
La denitrificación puede conducir a una lo puede ser atribuida a cambios en su estruc-
pérdida de fertilizante en el sistema de labran- tura. Es un hecho que se observa fácilmente
za cero y en condiciones húmedas (Torbert y que los suelos arcillosos que no se contraen
Reeves, 1995). Cuando el suelo está seco la presentan plasticidad cuando están húmedos
absorción de nitrógeno puede ser afectada por y forman terrones cuando se secan; raramente
la compactación, al limitarse el crecimiento muestran la friabilidad y las características de
de las raíces. Este efecto ha sido la causa de la flujo de los materiales granulados no com-
pérdida de nitrógeno, especialmente en con- pactados. Como consecuencia, los suelos con
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 289
tráfico sin ordenar, no solo presentan grandes EFECTOS DE LA RESISTENCIA DEL SUELO SOBRE
variaciones en su resistencia a la penetración LA FUERZA DE TIRO Y EL DESGASTE DE LOS IM-
sino que también reaccionan en forma dife- PLEMENTOS. Si bien la labranza cero tiende a
rente cuando son disturbados. En algunas áreas minimizar el disturbio del suelo, la fuerza ne-
pueden presentar un flujo suave mientras que cesaria para desplazar el suelo durante la siem-
en otras se pueden embarrar o fracturar en bra es directamente proporcional a su resis-
agregados, por lo general grandes, pero de tencia. Chamen et al. (1990) informaron de
tamaño variable. Esta situación no es favora- una reducción del 25 por ciento del requeri-
ble cuando se diseña un abresurco para traba- miento de energía para un suelo sin tráfico en
jar en forma continuada en un determinado labranza cero comparado con un suelo con
tipo de suelo. Esto es aún más difícil cuando tráfico, a pesar de tener una profundidad de
el tipo de suelo cambia a través del campo. operación ligeramente superior (56 mm en el
Para superar el problema de la profundidad suelo sin tráfico comparado con 50 mm en el
variable de penetración, se han diseñado re- suelo con tráfico). Estos resultados son simi-
cientemente sistemas electromecánicos de lares a las reducciones de energía obtenidas
control para abresurcos para labranza cero en labranza con rastra de dientes en suelos con
para enfrentar los cambios de resistencia del tráfico y sin tráfico (Lamers et al., 1986).
suelo y para que sea una solución duradera Un consecuencia adicional de una menor
para superar el problema (Capítulo 13). resistencia del suelo es la reducción propor-
Uno de los resultados de la labranza para cional del desgaste de los componentes de los
solucionar la compactación, en el intento de equipos que están en contacto con el suelo.
crear una estructura de una cama de semillas Un menor desgaste ahorra repuestos, trabajo
uniforme pero artificial, es la interrupción de y tiempo perdido en las reparaciones.
los procesos naturales de formación de la es- Mientras que en los suelos labrados y en
tructura del suelo. Esto ocurre a pesar del he- algunos suelos sin labrar a menudo se encuen-
cho de que los procesos puramente mecáni- tra que los abresurcos que trabajan detrás de
cos empleados causarán inmediatamente que las ruedas deben ser reemplazados más fre-
el suelo sea más susceptible a los efectos ne- cuentemente que en otros modelos, en otras
gativos del tráfico desordenado y a otras in- situaciones puede ocurrir lo contrario. En
fluencias de la compactación. Por lo tanto, Nueva Zelandia, cuando se trabaja con abre-
si la labranza temporal hace que la opera- surcos para labranza cero en pasturas de larga
ción de las sembradoras sea relativamente duración y con una alta capacidad de carga
simple, compromete el suelo en una espiral animal, los disturbios de la superficie que sur-
negativa de compactación y degradación es- gen del patinaje de las ruedas de los tractores,
tructural que nunca ha constituido una solu- a menudo aflojan el terreno y no compactan
ción a largo plazo. el suelo ni desgastan los abresurcos en los lu-
Cockcroft y Olsson (2000) sugirieron que gares de las marcas de las ruedas.
la labranza cero y la ausencia de tráfico no
Estructura del suelo
podían evitar el problema del endurecimien-
to de algunos tipos de suelos. Si bien los El hecho de evitar la compactación del sue-
bioporos contribuyen a la infiltración del lo inducida por los vehículos puede tener un
agua y el aumento de la materia orgánica impacto importante en los aspectos de la es-
mejora la situación, el drenaje y el crecimien- tructura relacionados con el movimiento del
to de las raíces pueden aún ser amenazados. agua y los gases dentro y fuera del suelo. Nu-
Aún debe encontrarse una solución sosteni- merosas investigaciones se han concentrado
ble para estos tipos de suelos. en estos problemas. McQueen y Shepherd
290 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
(2002) concluyeron que algunos suelos que cionan con las pérdidas gaseosas hacia la at-
se incorporaron a la producción de cultivos mósfera. Una reducción de los poros llenos
después de haber estado bajo pasturas perma- con aire debida a la compactación conduce a
nentes podían ser deformados a causa del trá- la denitrificación en los suelos arcillosos. Del
fico. La compactación, incluso en los suelos mismo modo, la labranza cero y el tráfico con-
bajo labranza cero, redujo la infiltración del trolado parecen preservar las tasas de oxida-
agua (Ankeny et al., 1990; Meek et al., 1990; ción del CH4 (Ball et al., 1999).
Li et al., 2001), la porosidad del suelo, la con- También hay evidencia de una mayor dis-
ductividad del suelo saturado (Wagger y ponibilidad de agua para los cultivos en algu-
Denton, 1989), el llenado de los poros con nas áreas de suelos arcillosos, sin tráfico, a
aire y la permeabilidad (Blackwell et al., 1985; pesar de que se haya realizado una labranza
Campbell et al., 1986). poco profunda (100 mm). Los cambios en el
Por otro lado, los abresurcos para labranza potencial mátrico a 150 mm de profundidad
cero y disturbio mínimo que se usan en suelos en un período de 48 horas mostró grandes fluc-
sedimentarios de Nueva Zelandia han dejado tuaciones en un suelo con tráfico comparado
la mayoría de los índices de calidad del suelo con pequeños cambios en un suelo sin tráfico.
(que incluye la estructura del suelo) en un es- Esto último refuerza la importancia de pro-
tado similar a la pastura permanente original. mover la estructura natural del suelo por me-
Incluso después de 20 años de dos cultivos dio de la labranza cero y del tráfico controla-
anuales con labranza cero y tráfico intenso y do (Chamen y Longstaff, 1995).
sin ordenar, no hubo un efecto obvio sobre Campbell et al. (1986), trabajando en un
tales suelos, comparados con sus equivalen- suelo arenoso arcilloso, encontraron que en
tes bajo pastura (Anónimo, 2000; Ross et al., ausencia de tráfico el suelo podría ser reclasi-
2000, 2002a, b; Ross, 2001, 2002). ficado de inadecuado a completamente ade-
La capacidad del aire y la disponibilidad de cuado para labranza cero.
agua son afectadas en primer lugar por la den-
sidad del suelo, el carbono orgánico y el con- Las implicaciones del tráfico controlado
tenido de arcilla siendo este último es relati- para las operaciones de labranza cero
vamente más importante en el subsuelo. La
variabilidad en la capacidad de aire y en la RESIDUOS Y MANEJO DE RESIDUOS. Los residuos
disponibilidad de agua son altamente depen- son un elemento fundamental en los sistemas
dientes de la densidad y de la textura del sue- de labranza cero porque no son incorporados
lo. En un suelo arcilloso limoso, el agua dis- en el suelo antes de la siembra del cultivo si-
ponible se redujo a la mitad con un incremento guiente; sin duda, muchos de los beneficios
de la densidad de 1,4 g/cm3 a 1,75 g/cm3 (Hall de la labranza cero proceden de este hecho.
et al., 1997). Es preferible dejar los residuos in situ sobre
La reducción de la infiltración debida a la la superficie del suelo para que se descom-
compactación del tráfico puede aumentar la pongan lentamente a fin de que los mismos y
escorrentía y la erosión. Wang et al. (2003) los productos de su descomposición sean in-
encontraron una duplicación de la escorrentía corporados gradualmente por la fauna, espe-
en parcelas con tráfico comparadas con par- cialmente por las lombrices de tierra. Esto
celas sin tráfico bajo labranza cero y aproxi- también es ventajoso en lo que respecta al ni-
madamente un incremento triplicado de pér- trógeno que a menudo es bloqueado tempo-
dida de suelo. ralmente por la descomposición rápida de la
Los mejoramientos ambientales asociados materia orgánica. El manejo de los residuos
con los suelos no compactados también se rela- antes y durante la siembra es, por lo tanto,
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 291
Considerando que hay un incremento de los sobre una superficie friable del suelo es pro-
niveles de CO2 en la atmósfera y que es pro- bable que germinen al estar en íntimo contac-
bable que este escenario continúe, también es to con el suelo o al enterrarse por sus propios
probable que los residuos de los cultivos y las medios (por ej., Avena fatua) o por fuerzas
malezas y los rendimientos de los cultivos externas tales como la lluvia, las heladas, el
aumenten (Prior et al., 2003). Por lo tanto, el viento o la actividad de la fauna del suelo. Des-
mejor manejo de los residuos será cada vez pués de la aplicación de herbicidas, el objeti-
de mayor importancia, no solo para manejar vo es evitar cualquier germinación posterior
la gran cantidad de los mismos sino también de las semillas y para ello es fundamental la
para evitar un bloqueo temporal de los nutrien- minimización del disturbio del suelo por los
tes y una excesiva acidez a largo plazo en las abresurcos para labranza cero.
capas superficiales del suelo. Este tema aún Este enfoque ha sido efectivo en Nueva
debe ser estudiado más adecuadamente. Zelandia. Algunas malezas de difícil control
como el rábano han forzado a numerosos
CONTROL DE MALEZAS. Los sistemas tradicio- agricultores a suspender el cultivo de otras
nales de cultivo utilizan una combinación de crucíferas en razón de la dificultad de con-
métodos de labranza, culturales y con agro- trolar sus plantas espontáneas cuyas semillas
químicos para llevar a cabo el control de ma- pueden sobrevivir latentes más de 40 años
lezas. Las malezas siempre son un problema en un suelo sin disturbar. Incluso los mejo-
serio para la sostenibilidad de la agricultura y res abresurcos para labranza cero a menudo
evolucionan continuamente para escapar a disturban el suelo suficiente dentro de los
cualquier método de control. El ejemplo más surcos como para crear condiciones favora-
reciente de esta resistencia ocurre en el caso bles para las malezas donde estas no existían
del Lolium rigidum resistente al glifosato antes de la siembra. Sin embargo, el uso de
(Wakelin et al., 2004). Por lo tanto, es posi- la versión de discos de los abresurcos de ala
ble sostener que reducir las opciones de con- para labranza cero o los abresurcos de doble
trol de malezas es una operación arriesgada. disco minimizan el disturbio de la superficie
Sin embargo, también hay aspectos positivos, y evitan el problema.
algunos de los cuales son ayudados por el trá- Después de la siembra puede ser posible
fico controlado, el más importante de los cua- utilizar la precisión de la zona de tráfico con-
les es minimizar el disturbio del suelo. trolado para controlar las malezas que germi-
Hay varios enfoques que mejoran el con- nan en la zona de los entresurcos en función
trol de malezas sin labranza. Uno de los po- de su propia actividad (como se ha señalado
cos objetivos defendibles de la labranza es líneas arriba) o facilitadas por la labranza su-
estimular la germinación de las semillas de las perficial con implementos livianos entre los
malezas de modo que las plántulas emergen- surcos. La aplicación de llamas, vapor, corte
tes puedan ser combatidas en una operación y herbicidas no selectivos puede realizarse
subsiguiente de control. En ausencia de dicho cuando hay suficiente espacio entre los sur-
estímulo, la práctica más difundida de control cos. Los métodos de guía visual actualmente
de malezas es aplicar herbicidas en toda la disponibles permiten hacer esta operación en
superficie, ya sea con herbicidas selectivos o forma rápida y confiable.
no selectivos. El control del tráfico hace que Es probable que la eficiencia de las barras
esta operación sea más eficiente porque es aspersoras sea mejorada con la aplicación de
probable que germine una mayor proporción los sistemas de tráfico controlado. La mayo-
de las semillas de malezas durante el período ría de estos sistemas usan mayores anchos de
entre los cultivos. Las semillas que quedan trocha y se puede anticipar que en el futuro el
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 293
apoyo para las barras aspersoras podrá ser aún uso de abresurcos que no entretejen los resi-
mayor, incluso más alejado del centro de la duos o que deliberadamente separan la semi-
barra. La mayor estabilidad reduce el balan- lla del contacto con los residuos entretejidos.
ceo y permite que la barra sea colocada más La versión de disco de un abresurco de ala
cerca del cultivo o la tierra sin temer el con- coloca las semillas en cualquier lado del en-
tacto con la misma. Los sistemas de guía au- tretejido que pueda crear el disco central y
tomática generalmente asociados a los siste- elimina este problema. Cuanto más friable es
mas de tráfico controlado también reducen las la naturaleza del suelo bajo el sistema de trá-
desviaciones de la barra, una característica fico controlado, más duradero será el efecto
asociada a la corrección manual de la direc- neutral de entretejido con este abresurcos.
ción. La reducción del balanceo y de las des- Las rastras de dientes cercanos colocados a
viaciones mejoran la seguridad de la aplica- cierta distancia trabajan bien en condiciones
ción y disminuyen el riesgo de deriva del secas pero son inaceptables en suelos húme-
herbicida. dos ya que dejan grandes brechas con resi-
duos ya que los dientes pueden evitarlos (Ca-
DISEÑO Y COMPORTAMIENTO DE LOS ABRESUR- pítulo 10). Las sembradoras a golpes son
COS. Las principales implicaciones del tráfico aceptables siempre que pueda ser evitado el
controlado para el diseño de abresurcos para entretejido, pero su potencial ha sido limita-
labranza cero comprenden la reducción gene- do por la alta resistencia de los suelos con trá-
ral de la resistencia del suelo en ausencia de fico. Los mayores problemas se encuentran en
la compactación inducida por el paso de ve- las arcillas húmedas cuando el suelo fino y
hículos. Esto reduce las fuerzas de penetra- los residuos se adhieren a todo el abresurcos.
ción y de arrastre requeridas entre áreas tran- La experiencia en estas condiciones en tráfi-
sitadas y no transitadas. Chamen et al. (1990) co controlado es aún limitada y es necesario
encontraron que un abresurco de triple disco el desarrollo de abresurcos adecuados y su
comprimido por un rodillo acolchado en un posterior uso.
suelo sin tráfico en labranza cero penetró en En general, la estructura más friable de las
forma excesivamente profunda. Una solución camas de semillas asociada con el tráfico con-
fue usar el abresurcos tradicional de un solo trolado debería asegurar que los aparatos para
disco diseñado para los suelos cultivados. Esto comprimir los abresurcos trabajan más
significa que la siembra en labranza cero en eficientemente. Tal como ha sido sugerido por
suelos sin tráfico puede ser hecha con equi- Baker y Mai (1982b) y Addae et al. (1991), la
pos significativamente más livianos y menos compresión debería ocurrir alrededor o deba-
robustos. jo de la semilla, no encima de esta. Con el
Los suelos sin tráfico tienden a presentar tráfico controlado es probable que se presen-
una cama de semillas más friable sin conside- te al abresurcos un suelo más homogéneo y
ración del régimen de humedad del suelo. Esto habrá, por lo tanto, menos necesidad de ajus-
puede tener aspectos positivos o negativos. tar la profundidad entre los distintos abresur-
Los aspectos positivos son obvios e impor- cos y menos variación en la cobertura de la
tantes pero el entretejido de los residuos cau- semilla. También habrá menos desgaste, me-
sado por los discos puede ser un problema nos arrastre general y menor demanda de po-
mayor con el tráfico controlado porque hay tencia y tracción.
menos resistencia del suelo al corte vertical La Lámina 117 muestra cómo dos abresur-
de los residuos. Otras opciones incluyen el cos de disco en la misma máquina pueden ofre-
manejo de los residuos para evitar su presen- cer resultados muy diferentes, dependiendo de
cia en la línea de siembra (Lámina 116) y el si están ubicados detrás de las ruedas o entre
294 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Lámina 117 Comportamiento de dos abresurcos adyacentes que trabajan en la misma sembra-
dora en un suelo arcilloso húmedo. A la izquierda, el abresurco estaba detrás de las ruedas del
tractor y las semillas son claramente visibles sobre la superficie. A la derecha, el abresurco operaba
correctamente en un suelo menos compactado.
favorece el crecimiento de las raíces que ex- ficie, donde comen las semillas y sobre la su-
ploran y extraen nutrientes de una mayor pro- perficie, donde comen las hojas jóvenes. Los
porción del perfil del suelo. abresurcos que producen terrones pequeños
Los agricultores australianos han encontra- favorecen el acceso de las babosas a las semi-
do que el cultivo en surcos es una extensión llas, mientras que las líneas de siembra pegajo-
natural del tráfico controlado. Esto es posible sas o abiertas les permiten moverse sin obstá-
porque la posición de cada surco del cultivo culos de una semilla a otra. El sistema de tráfico
puede ser planificada con antelación y obte- controlado tiene el potencial para corregir es-
nida en la práctica con guías de precisión. tos problemas porque evita la formación de te-
En la labranza cero, la densidad de semillas rrones y las líneas de siembra pegajosas.
es a menudo ligeramente mayor, si bien las
densidades de siembra de varios cultivos se RENDIMIENTO DE LOS CULTIVOS. La mayor parte
han reducido realmente con los abresurcos de la investigación que compara los suelos con
más avanzados para labranza cero (Baker tráfico con los suelos sin tráfico ha sido hecha
et al., 2001). El sistema de tráfico controlado en sistemas que usan la labranza; sin embar-
hace que la siembra sea más confiable y favo- go, trabajos hechos en Escocia con labranza
rece la disminución de la densidad de siem- cero encontraron que, aun con cargas muy mo-
bra porque la superficie está más nivelada y destas, los rendimientos en labranza cero se
hay menos compactación en el ancho de la reducían. Esto ocurrió en los primeros años
sembradora. Sin compactación, muchos sue- de la labranza cero, pero no se encontraron
los forman una capa fina estable de tierra des- diferencias en la cuarta estación a pesar de
menuzada que acepta fácilmente las semillas que no hubo una reducción real en las zonas
con un disturbio mínimo. Esto hace que la re- de suelo con tráfico (Campbell et al., 1986).
gulación de la sembradora sea más fácil, re- En los Estados Unidos de América y en Ar-
duce las irregularidades en su comportamien- gentina, los rendimientos de la soja en los sis-
to y evita la necesidad de un mayor «seguro» temas de labranza cero se redujeron entre un
de la densidad de siembra de las semillas. 10 y un 39 por ciento con cargas livianas pero
Un agricultor que aplica labranza cero en el reiteradas de las ruedas. Aun cuando la labran-
Reino Unido (Hollbrook, 1995) encontró que za cero se había hecho durante siete años, fue
la cebada de primavera sembrada a 3-4 mm posible reducir los rendimientos como resul-
de profundidad era más sana que el cultivo tado de nuevas cargas (Flowers y Lal, 1986;
sembrado a 40-50 mm. La siembra más su- Botta et al., 2004).
perficial dio lugar a que el primer nudo emer-
gió del coleoptile cuando este estaba 20-30 mm RANGO DE CULTIVOS. Si bien hasta ahora se han
por encima de la tierra y no en su superficie. citado primeramente casos de cultivos de gra-
Esto evitó la incidencia de enfermedades nos pequeños, la introducción del tráfico con-
(Cercospora sp.) y la posterior debilidad de trolado debería hacer posible el cultivo de un
la paja que después daba lugar al vuelco del amplio rango de cultivos bajo la labranza cero.
cultivo. Por ejemplo, el establecimiento de cultivos de
Las babosas (Deroceras reticulatum) han algodón bajo labranza cero ha sido exitosa aun
sido un problema frecuente en los sistemas de en presencia de suelos compactados por las
cultivo que retienen los residuos en la superfi- ruedas. Los rendimientos de fibra bajo labran-
cie y especialmente en las camas de semillas za cero se redujeron solamente un año cada
con terrones y ranuras de siembra abiertas y tres, mientras que los cultivos transplantados
pegajosas (Moens, 1989). Las babosas atacan como los tomates, si bien con labranza en fa-
los cultivos en dos formas: debajo de la super- jas, fueron comparables en dos sitios en el año
296 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
2002. La labranza en fajas del cultivo de me- la cosecha de cultivos de raíces causa un con-
lones dio rendimientos apenas más bajos que siderable disturbio del suelo. Si bien esto in-
con los métodos tradicionales pero en ambos terrumpe, por lo menos parcialmente, el ciclo
casos, con melones y tomates, las condicio- de la labranza cero, sería ventajoso para el
nes del suelo con terrones en el momento de resto de la rotación y para el establecimiento
la siembra/transplante fueron parcialmente del cultivo de raíces. El tráfico controlado tam-
responsables de los menores rendimientos. Un bién podría minimizar las reparaciones nece-
productor australiano de tomates, calabacines, sarias después de la cosecha y asegurar un
melones, cebollas y brócoli predijo que el trá- rápido y efectivo retorno a la labranza cero.
fico controlado le permitiría establecer esos Los cultivos que probablemente se puedan
cultivos bajo labranza cero. Las papas tam- cultivar actualmente bajo un régimen de tráfi-
bién han sido cultivadas exitosamente con co controlado demostrados por pruebas agro-
coberturas espesas y labranza cero (Lamarca, nómicas y basados en labranza cero incluyen:
1998; Mitchell et al., 2004a, b; Ziebarth, 2003,
• trigo • cebada
comunicación personal).
• cebada • centeno
Las posibles limitaciones de la agricultura
• avena • mijo
dentro de un sistema de labranza cero con trá-
• sorgo • maíz
fico controlado tienen varios orígenes:
• rábano aceitero • arvejas secas
• estructura del suelo/interacciones de los • soja • lino oleaginoso
cultivos; • frijoles • algodón
• inexperiencia y percepción; • arroz de secano
• maquinaria.
Esta lista es necesariamente limitada y son
Dado que los suelos completamente sin trá- necesarios otros desarrollos tecnológicos y
fico han sido prácticamente desconocidos en experimentos de campo antes de que puedan
los sistemas de producción en los últimos tiem- ser considerados otros cultivos. Sin embar-
pos es difícil predecir cómo algunos cultivos go, dadas las características de esos cultivos
podrían reaccionar a esas condiciones de la- y las condiciones climáticas típicas bajo las
branza cero. Del mismo modo, hay pocos da- cuales han sido exitosos, sería bastante ra-
tos que puedan ser usados para determinar si cional extrapolarlo a otros cultivos y climas
cultivos como zanahorias, remolacha azuca- en lugares en los cuales el tráfico controlado
rera y papas podrían comportarse adecuada- bajo labranza cero no sido extensivamente
mente en suelos sin tráfico y bajo labranza difundido.
cero.
La única forma en que esto podría ser de-
terminado es por medio de comparaciones de Implementación del tráfico
diversos parámetros del suelo tales como la controlado
densidad, la resistencia a la penetración y
la porosidad. Por ejemplo, ¿la densidad de un
Principios básicos
suelo sin tráfico en labranza cero excede a la
de un suelo similar cultivado con un cultivo
Hay varios principios básicos involucrados
específico? Además, ¿dentro de qué ambien-
en los sistemas con tráfico controlado:
te de un suelo un cultivo de raíces tendrá un
comportamiento igual al de otros cultivos? 1. Planificación anticipada.
Muchas de estas preguntas no tienen respues- 2. Uniformización del ancho de las trochas
ta. Es necesario tener presente, además, que de los vehículos.
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 297
serán el conjunto que se extiende fuera del doble huella. Esto elimina en gran parte el
ancho primario de la huella. Su posición, sin problema de la cosechadora y mantiene el
embargo, es conocida y no causan necesa- ancho de las trochas en forma más o menos
riamente daños todos los años porque los estándar. La Figura 44 muestra que el sistema
suelos en esa época a menudo están secos y, trabaja con la cosechadora que pasa por enci-
por lo tanto, son capaces de resistir más peso. ma de las huellas primarias. El ancho prima-
Si hubiera compactación y marcas superfi- rio de los implementos se determina por la sim-
ciales de las huellas, estas pueden ser repa- ple adición del ancho de las trochas comunes
radas con un subsolador con los dientes co- de los tractores, remolques y del equipo de
locados de modo tal que aflojen solo el ancho aplicación de pesticidas. En el ejemplo ante-
adicional impuesto por la cosechadora. Un rior, el ancho primario de los implementos
sistema de 6 m como el descrito crea huellas sería: 1,8 + 2,8 = 4,6 m. El ancho de la barra
que cubren alrededor del 16 por ciento del de corte de la cosechadora puede ser cualquier
área, dependiendo del ancho de los neumáti- múltiplo de esta cifra; en este caso la medida
cos usados. Siempre que las huellas estén bien más práctica sería 4,6 ó 9,2 m. Sin embargo,
conservadas es posible que, en el futuro, se el ancho de la sembradora puede ser de múlti-
pueda reducir su ancho. plos impares del ancho primario de los imple-
En una finca grande una alternativa podría mentos y esto probablemente lo limita a un
ser usar un sistema de tráfico controlado de múltiplo simple. Las aplicaciones de pesticidas
Otros equipos
pueden hacerse con equipos con cualquier esta máquina. Lamentablemente, la cosecha-
múltiplo del equipo primario si se usan las hue- dora es la máquina con la trocha más ancha, y
llas primarias, por ejemplo, 4,6 m, 9,2 m, etc. con los modelos actuales esto significa un
Si el equipo de aplicación de pesticidas está ancho primario de trocha de cerca de 3 m para
montado sobre un eje ancho y corre sobre las todos los vehículos e implementos. Esto es
huellas de la cosechadora (para mejorar la es- común en Australia (Lámina 118) donde pue-
tabilidad del aspersor), el ancho del equipo de haber menos necesidad de conducir en ca-
de aplicación de pesticidas puede ser solo de rreteras y donde las áreas rurales tienen rela-
múltiplos pares del ancho de los implementos tivamente baja densidad de población. En
primarios. Europa y otras regiones con alta densidad de
Actualmente ninguno de los anchos de los población y frecuentemente con carreteras
implementos citados anteriormente es parte de angostas, es probable que surjan mayores di-
equipos estándar, por lo que es necesario al- ficultades. Sin embargo, dado que la labran-
gún ajuste para obtener el ancho primario de za cero reduce el número de operaciones de
huella, incluso en el sistema de doble huella. campo y que los vehículos para aspersiones
Por ejemplo, si la huella primaria fuera redu- podrán tener anchos de trocha fácilmente
cida a 1,7 m esto se debería corresponder con variables, la magnitud del problema debería
el ancho de las cosechadoras actualmente dis- disminuir considerablemente. Probablemente,
ponibles (9 m) y con los equipos de aplica- solo la cosechadora y la sembradora tengan
ción de pesticidas (18 m, 27 m, 36 m). O bien, una trocha de 3 m cuando circulan en las ca-
la regulación de las huellas podría ser a 2 m y rreteras. La ventaja de este sistema es que hay
3 m con un implemento primario de 5 m. La pocas limitaciones relacionadas con el ancho
barra de corte de la cosechadora debería ser primario de los implementos. Con máquinas
ligeramente más ancha que el ancho calcula- muy anchas pueden ser necesarios algunos
do para asegurar la recolección de todas las ajustes para extender el sinfín de descarga a
plantas del cultivo en todos los casos. fin de asegurar que la unidad de transporte
Otro método para uniformizar la maquina- pueda circular en la senda adyacente.
ria es alinearla en el mismo ancho de las hue- Para las fincas pequeñas, otra alternativa si-
llas de la cosechadora, porque como se ha milar a la doble huella se refiere a la distancia
mencionado anteriormente es difícil alterar de las cosechadoras entre las ruedas similares
Lámina 118 Ejemplo de un sistema australiano de módulo primario de 9 m y de una trocha prima-
ria de 3 m de ancho (Webb et al., 2000).
300 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
de los pases adyacentes del tractor como se Diseño del campo y manejo
muestra en la Figura 45. Esto se basa en: del sistema
Ancho del implemento primario =
La orientación y el diseño de las huellas para
ancho de la trocha de la cosechadora
el tráfico controlado son parte del proceso de
Ancho de la trocha primaria =
planificación y cada área o conjunto de par-
ancho de la trocha de la cosechadora/2
celas debe ser considerado independientemen-
Ancho de corte de la cosechadora =
te. Los mapas detallados del campo son parte
ancho de la trocha de la cosechadora × 1,5
fundamental de esta planificación ya sea por
Ancho del equipo de aplicación de pesticidas =
sus mediciones, registros históricos o fotogra-
cualquier múltiplo del ancho
fías aéreas. Los datos topográficos también
del implemento primario
son de valor, especialmente en el caso de fin-
Este sistema introduce potencialmente un cas con laderas pronunciadas. Los cambios en
gran número de trochas pero algunas de estas el tipo de suelo dentro de una propiedad son
podrían ser usadas una sola vez al año, para la probablemente de menor importancia que con
siembra, y la mayoría pueden ser sembradas los sistemas de tráfico incontrolado pero aun
como se describe más adelante. así son útiles para conocer esos parámetros,
Hasta ahora se han analizado en primer lu- especialmente respecto al drenaje. Respecto
gar los sistemas usados para la producción de a este último elemento en especial, es funda-
cereales, pero los principios de labranza cero mental que cualquier sistema de drenaje esté
pueden ser igualmente aplicados a la mayoría operando correctamente o, que si presenta
de los otros cultivos. Si bien hay escasa in- problemas, estos sean corregidos antes de ins-
vestigación sobre la labranza cero para el cul- talar el sistema de tráfico controlado. Esto tam-
tivo de hortalizas, existe un serio potencial bién es importante para mejorar la estructura del
dentro de los sistemas de tráfico controlado, suelo. Si se encontrara un problema de piso de
tal como se presenta más adelante. arado, el perfil debería ser abierto de acuerdo
9 m aplicación química
3 m sembradora
para labranza cero
4,5 m cosechadora
Figura 45 Sistema de tráfico controlado para la maquinaria en una finca pequeña. La trocha
primaria de 1,5 m de ancho está espaciada a intervalos de 1,5 m y de esta manera cualquier par de
ruedas puede ser usado por todo el equipo, excepto la cosechadora.
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 301
a las indicaciones sugeridas por Spoor et al. predominantemente hacia arriba y abajo de las
(2003). laderas y el objetivo con el sistema de tráfico
Los principales aspectos a considerar en el controlado es hacerlos paralelos a las laderas.
diseño de un sistema de tráfico controlado son: El peligro con los cruces reiterados de cami-
nos y los drenes topo es que se pueden rom-
• Orientación de los caminos permanentes
per prematuramente. Correr en forma parale-
en relación a:
la a los drenes topo significa cruzar los drenes,
largo del camino
si bien es improbable que estos sean dañados,
pendiente y movimiento del agua
en parte debido a su profundidad pero ade-
forma del campo y surcos cortos
más porque a menudo están rellenos con gra-
objetos extraños (árboles, estanques,
va. Si los caminos corren paralelos a los drenes
etc.)
topo existe el peligro de que algunos coinci-
sistema de drenaje del campo
dan con los mismos y los puedan dañar, pero,
• Manejo de los caminos y acceso al campo
en general, el efecto sobre el sistema de dre-
naje dentro de un campo es insignificante. Al
correr en forma paralela también se asegura
Orientación de los caminos
que los drenes topo pueden ser eventualmen-
permanentes
te reconstruidos sin disrupción de los cami-
En muchas situaciones la mayor longitud del nos. Más información sobre los sistemas de
área considerada es elegida como orientación drenaje se encuentra en Spoor (1994).
porque esto mejora la eficiencia del trabajo Un enfoque similar se adopta con las torres
de campo al reducir el número de giros al fi- o postes dentro del campo; en este caso pue-
nal de la parcela. La longitud de la carrera que den ser usados para orientación y como una
esto crea también debe ser considerada res- línea para establecer el primer camino. En el
pecto a cualquier pendiente significativa del caso desafortunado de que una finca tenga
terreno. Si bien es probable que la infiltración el sistema de drenaje y la línea de torres en
de agua en el suelo mejore significativamente diferente orientación se prefiere seguir la
en comparación con los predios manejados en orientación de las torres. La experiencia con
forma tradicional, el agua tiende a correr a lo otros sistemas de drenaje o infraestructura de
largo de los caminos y a erosionarlos, espe- campo es limitado porque el tráfico controla-
cialmente si hay largas distancias en forma do aún debe ser adoptado en áreas en que esas
ininterrumpida y están orientados hacia arri- situaciones ocurren repetidamente.
ba y abajo de las pendientes. En Australia,
donde el tráfico controlado está ampliamente
difundido y donde los eventos de lluvias pue- Manejo de los caminos
den ser violentos, las operaciones de orienta-
ción son más flexibles con el sistema de tráfi- El potencial que pueden tener los caminos
co controlado. En este sistema funcionan los para favorecer la erosión puede ser contra-
diseños hacia arriba y abajo o perpendicula- rrestado de varias formas. Como principio
res a las laderas, mientras que con el tráfico básico, los caminos deben tener un manejo
sin controlar predominan los diseños perpen- activo desde su establecimiento; no se pue-
diculares o en contorno. de permitir que se hundan o formen surcos
La orientación del tráfico controlado tam- en forma diferente. Deberían ser rellenados
bién debe considerar la presencia del sistema adecuadamente con tierra de la zona vecina,
de drenaje y especialmente de aquellos que especialmente los caminos nuevos y si el sue-
involucran drenes topo. Estos últimos corren lo es algo suelto. Dentro de un régimen de
302 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Lámina 119 Herramienta rotatoria para mantenimiento usada para manejar el flujo de suelos
plásticos causado por las ruedas. Normalmente, no debería ser usada más de un vez por año (J.
Grant, 2001, comunicación personal).
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 303
Figura 46 Ejemplo de como un cultivo de cereales podría ser sembrado en un camino. El espacio
nominal de 250 mm es modificado a 400/175 mm para favorecer el acceso de las raíces de las
plantas en el camino a la cama de semillas adyacente.
un manejo activo, pero en los lugares bajos tamaño, fortaleza y duración son factores
del campo o en áreas con un drenaje natural limitantes. Las cargas laterales también pue-
pobre pueden crear esta situación. La orienta- den ser un problema si el marcador se blo-
ción debería ayudar a evitar los lugares bajos quea con el suelo y los costos de manteni-
pero esto no siempre es posible; una alternati- miento también pueden ser altos. Es aun un
va es modificar los bordes de los caminos, problema mayor bajo la labranza cero porque
como se mencionó anteriormente. el marcador debe hacer una línea visible en
La erosión del camino puede también ser un suelo sin labrar, a menudo cubierto por re-
reducida por una faja tampón, a mitad de la siduos. Los marcadores por lo general tienen
ladera. Esta podría también proporcionar un una precisión relativamente baja e introducen
área para insectos beneficiosos y, si está ubi- errores que se acumulan de un pasaje al si-
cada correctamente, solucionar problemas con guiente. Una alternativa, que lamentablemen-
surcos cortos. te conserva errores acumulativos, es colocar
una video cámara de circuito cerrado en la
extremidad del implemento con las imágenes
Sistemas de guía transmitidas a una pantalla en la cabina del
operador. Esto requiere que el operador ob-
En cualquier sistema de tráfico controlado serve continuamente la pantalla para mante-
es fundamental contar con una forma de ase- ner la maquinaria en la posición correcta como
gurar que los caminos no solo estén orientados se haría sobre la línea marcada.
correctamente, sino que también su posición Una alternativa cada vez más disponible y
sea correcta desde el inicio. Tradicionalmente, atractiva son los sistemas electrónicos basa-
la posición correcta se ha obtenido con pro- dos en el sistema diferencial de posición glo-
gramas montados en las máquinas que pro- bal (SDPG) que usa señales de satélites. Existe
porcionan una línea de marcación paralela se- un amplio rango de equipos, que dependen del
parada por la distancia requerida. El operador grado de precisión ofrecido. Con los sistemas
usa esta línea en el pase siguiente para colo- de tráfico controlado es deseable una precisión
car la máquina en la posición adecuada. Esto de ± 3 cm con un error máximo de ± 5 cm, si
funciona bien con máquinas de ancho limita- están planeadas operaciones de cultivos en
do pero cuando esta llega a 10 m o más, el surcos anchos. Tales sistemas también pueden
304 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
ser acoplados directamente a la dirección del tanto, establecer principios y los costos/ganan-
vehículo para proporcionar la capacidad de cias en lugar de entrar en análisis detallados
conducción automática, tanto en línea recta de costos que proporcionan solo una hipóte-
como en huellas curvas paralelas. La conduc- sis de solución. Este enfoque también se con-
ción automática permite que los conductores centra en la transición de la siembra en labran-
se concentren en la operación del implemen- za cero con tráfico sin controlar a un sistema
to y se liberen del estrés de conducir sobre similar pero con tráfico controlado.
una marca; además, evita correcciones exce- La economía se centra en:
sivas de la conducción que pueden afectar la
• costos y cronología de la planificación y
operación de la maquinaria. Otra ventaja, es-
transición;
pecialmente con equipos anchos, es que cual-
• costos fijos y variables del sistema emplea-
quier trocha puede ser usada en cualquier se-
do;
cuencia ya que no depende de una marca hecha
• cambios en los resultados;
en el paso previo. Por ejemplo, los operado-
• costos del manejo.
res pueden saltar un pase cada dos. Esto hace
que los giros sean más simples con la ventaja
adicional de que el trabajo del campo puede Costos y cronología
ser completado en el punto de inicio de la de la planificación y transición
siembra, que es por lo general el punto de ac- a tráfico controlado
ceso al campo.
También es importante notar que los imple- La planificación es la clave para minimizar
mentos fuera de la línea lateral que se encuen- los costos. Aun así, el costo de la planifica-
tran en varios sistemas de guía por satélites ción es difícil de cuantificar. El costo típico
no puede ser usado con el tráfico controlado. de una consultoría para la conversión a tráfi-
Esta característica compensa por un imple- co controlado en Australia es de alrededor de
mento que no se arrastra centralmente detrás $EE UU 75/hora. Sin embargo, hay numero-
del tractor al cambiar el tractor en los pases sos agricultores que estudian el problema por
adyacentes. Si esto fuera usado con el sistema sí mismos y el costo de esos estudios es car-
de tráfico controlado sacaría el equipo fuera de gado a los gastos generales normales. De cual-
las huellas. Cualquier desalineamiento en el quier manera, se debe considerar cuidadosa-
sistema de tráfico controlado debe, por lo tan- mente el empleo de expertos para determinar
to, estar físicamente relacionado con el trac- los diseños de campo más eficientes. El cam-
tor o con el implemento y esto puede crear un bio de un diseño después de su instalación no
desafío importante en las laderas. El equipo es una alternativa simple, consume mucho
remolcado puede requerir alguna rueda de tiempo y recursos y también resulta en pérdi-
conducción para solucionar este problema. da de productividad.
El proceso de planificación involucra con-
siderar los equipos existentes en la finca y
Economía analizar cuántos y cuáles de estos pueden ser
utilizados en el nuevo régimen. Un panorama
Hay varias formas por las cuales es posible claro del nuevo régimen de cultivos y de ma-
evaluar un sistema de tráfico controlado y to- quinaria en un sistema de tráfico controlado
das darán respuestas diferentes. Cada finca, debe ser claramente identificado en esta etapa,
circunstancia y gama de maquinaria será úni- antes de que puedan ser estimados los costos
ca y los cambios económicos serán muy espe- de la transición. Estos costos se consideran en
cíficos. El objetivo en este capítulo es, por lo tres categorías: i) el cambio de implementos o
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 305
máquinas; ii) el cambio de los ajustes de las bajo necesario para alterar la posición de
ruedas, y iii) la conducción: los aros en el centro o al intercambio de las
ruedas de un lado a otro.
1. El cambio de la maquinaria podría incluir
3. Los costos para los sistemas de conduc-
la compra de nuevos equipos y al mismo
ción pueden limitarse al tiempo necesario
tiempo descartar los equipos existentes. Si
para adaptar los brazos marcadores del
el cambio a labranza cero se hace al mis-
equipo de campo existente a un sistema
mo tiempo que la introducción del siste-
de satélite de autoconducción con un error
ma de tráfico controlado, habrá más equi-
medio de ± 3 cm y a un costo aproximado
pos que requieran atención, pero existe la
de $EE UU 50 000. El mercado y, por lo
oportunidad de integrar todo el equipo, en
tanto, el costo de la estructura para estos
lugar de solo una parte. Con el tráfico con-
sistemas basados en los satélites está cam-
trolado, la siembra con labranza cero ten-
biando rápidamente y el costo total del sis-
drá menos penetración y requerirá menos
tema puede no ser atribuible al sistema de
fuerza de arrastre y como resultado habrá
tráfico controlado. Muchos agricultores
una menor demanda de potencia del trac-
están adquiriendo ahora estos sistemas
tor, por lo que es posible que, a largo pla-
para la agricultura convencional como un
zo, haya economías. También puede ser
medio de asegurar las operaciones, así
necesaria la centralización de la platafor-
como de establecer líneas de paso para la
ma de corte de la cosechadora ya que mu-
aplicación de pesticidas.
chas están descentralizadas para ayudar a
la descarga. Otro aspecto importante que Esto último no solamente proporciona ma-
se debe considerar es la concordancia del yor flexibilidad, sino que excluye la necesidad
ancho de los implementos con el ancho de de establecer marcas dentro del cultivo. Tradi-
las trochas de las ruedas. cionalmente estas han sido instaladas por equi-
2. El costo de cambio del ancho de las tro- pos especiales en la sembradora que deja lí-
chas puede variar entre $EE UU 750 y neas sin sembrar a intervalos predeterminados.
4 000 (Webb et al., 2000) y refleja la con- Para introducir el sistema de tráfico contro-
siderable diversidad existente en diseños de lado, un sistema existente debería ser mejora-
las máquinas, configuraciones de los ejes y do de, tal vez, ± 25 cm manuales a ± 3 cm con
las ruedas. Este costo también varía consi- autoconducción. El costo adicional sería de
derablemente dependiendo del tipo o siste- alrededor de $EE UU 17 000.
ma adoptado, por ejemplo, huella simple o El momento de los cambios dependerá de
doble, como se ha descrito anteriormente. la inversión que ha sido calculada; cuanto
Es probable que para los sistemas de una mayor sea la inversión, menor deberá ser el
sola huella el costo sea ligeramente mayor, tiempo de realización. Esto se debe a que los
ya que todo el equipo deberá ser ajustado mayores beneficios se podrán obtener sola-
al mayor ancho de las ruedas de la cose- mente cuando el sistema de tráfico controla-
chadora. Actualmente, tales conversiones do esté disponible. Estos beneficios se anali-
son posibles en algunos tractores con un zan en la sección sobre resultados.
costo total de los ejes anteriores y posterio-
res de alrededor de $EE UU 10 000. La
mayoría de los otros equipos pueden ser Costos fijos y variables
modificados localmente o en el taller de la
finca. Para los sistemas de doble huella, los Como costos fijos generalmente se conside-
costos pueden limitarse, por ejemplo, al tra- ran la mano de obra corriente, la maquinaria,
306 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
la renta y los gastos generales, mientras que es posible sembrar a menores densidades con
los agroquímicos, las semillas, el combusti- menos riesgo, si bien este punto también de-
ble, el desgaste de los equipos, los contratis- bería ser mejorado por medio de la metodolo-
tas y la mano de obra ocasional son conside- gía de siembra antes que confiar en el sistema
rados gastos variables (Nix, 2001). En el caso de tráfico controlado. No es difícil predecir
del sistema de tráfico controlado es posible economías en el desgaste de los equipos, pero
esperar que el mayor impacto sea una reduc- pueden aumentar si el suelo está bajo el siste-
ción de los costos fijos y especialmente de ma de labranza cero.
aquellos relacionados con la mano de obra y Es probable que se reduzcan los costos de
la maquinaria. En el caso del tráfico controla- los productos agroquímicos, principalmente en
do el beneficio marginal de la mano de obra razón de una mayor precisión y la posibilidad
será en primer lugar menor que, pero adicio- de asperjar selectivamente en las bandas entre
nal, el beneficio de la mano de obra ocasional los surcos y en el surco con el cultivo. Si bien
del cambio a labranza cero. dicho sistema no es exclusivo del sistema de
Si bien sería fácil atribuir al sistema de tráfi- tráfico controlado, las huellas mantenidas ofre-
co controlado los mejoramientos en la eficien- cen un gran potencial. Si se considera que el
cia de campo debido a una mejor guía, esto costo de los pesticidas protectores para el cul-
puede ser obtenido igualmente dentro de las tivo del trigo en una zona templada se acerca al
prácticas convencionales usando los sistemas 50 por ciento del costo total de semillas, fertili-
de las líneas de guía en las sembradoras o en la zantes y pulverizaciones (Nix, 2001), la eco-
guía por satélite y, por lo tanto, no es conside- nomía que se haga en estos insumos tiene una
rado como un beneficio aportado por el siste- incidencia importante sobre los costos. Del
ma de tráfico controlado. El principal impacto mismo modo, una reducción en los insumos de
del sistema de tráfico controlado sobre la mano agroquímicos, o por lo menos de agroquími-
de obra en el sistema de labranza cero será una cos menos perjudiciales para el ambiente, es
reducción de la demanda durante la siembra, un beneficio adicional. También es posible pre-
la cual, si las condiciones lo permiten, será algo sumir que los fertilizantes aplicados en el sis-
más rápida debido a una menor fuerza de arras- tema de tráfico controlado serán utilizados en
tre por la sembradora. Salvo cuando se emplea una forma más eficiente y, si bien esto puede
un contratista en esta tarea, es probable que el no ser una economía para la finca, resultará en
agricultor obtenga a corto plazo solo un bene- mejores rendimientos (debatidos más adelan-
ficio de oportunidad. A largo plazo puede ser te) y en menores riesgos de contaminación de
posible incrementar la tierra trabajada con una las corrientes de agua fuera de la finca.
determinada fuerza de trabajo o perder algu-
nos costos de mano de obra si se emplean va-
rias máquinas para la siembra. Cambios en los resultados
Los cambios en los costos variables se ba-
san en ahorros en semillas, combustible y agro- Al revisar la investigación llevada a cabo
químicos, todos los cuales deberían ser me- en los últimos 30 ó 40 años sobre la compac-
nores. La demanda típica de potencia para tación del suelo en 17 cultivos diferentes se
sembrar a una velocidad específica se reduce encontró que los rendimientos en el sistema
en cerca del 25 por ciento, incluida la menor de tráfico controlado, tanto en suelos labra-
resistencia a los rodillos que puede ser atri- dos como en labranza cero, se habían incre-
buida al trabajo en las huellas permanentes en mentado entre un 9 y un 16 por ciento, com-
lugar de proceder sobre la cama de semillas. parados con el tráfico sin controlar. Los datos
Debido a las mejores condiciones del suelo más conservadores sobre sistemas de labranza
La agricultura con tráfico controlado – una práctica complementaria para la labranza cero 307
cero sugieren un nivel más modesto de mejo- puede ser suficiente para esta tarea (Lámina
ramiento, de alrededor del 10 por ciento. El 119), pero dentro de un régimen de labranza
tipo de suelo, las prácticas culturales, las ro- cero esto representa un paso adicional hecho,
taciones de cultivos y el porcentaje del área por lo general, después de la cosecha. La ex-
considerada bajo huellas permanentes obvia- periencia sugiere que esto puede ser necesa-
mente moderan esos porcentajes sobre los rio en los primeros años de la conversión y
cuales tiene influencia el espaciamiento de los cuando la operación se debe hacer en condi-
surcos del cultivo. Para determinar en la prác- ciones húmedas. En algunos casos, esto pue-
tica qué es lo que realmente sucede, cada caso de ser necesario solamente en las huellas de
debe ser considerado en forma individual; la los equipos de aplicación de pesticidas.
descripción que se hace a continuación po-
dría ser un enfoque a ser adoptado.
Si tomamos los 8 m del sistema considera- Resumen de los costos y ganancias
do anteriormente y consideramos una hilera
de cultivo sembrado en surcos estrechos, como El Cuadro 32 proporciona una revisión ge-
el trigo (250 mm en este caso), podemos su- neral de los aspectos considerados en el texto
poner que se aplica lo siguiente: anterior e intenta cuantificar un cierto núme-
ro de variables. Como se señaló anteriormen-
ancho del implemento primario = 8 m te, y ha sido confirmado por Uri (2000), las
ancho de la trocha primaria = 3 m variables son tan numerosas que cualquier
pesticidas aplicados con asperjador ejemplo calculado sobre los sistemas de con-
de 24 m de ancho servación o de labranza cero proporcionará
se siembran dos de cada tres trochas solamente una solución específica única en una
primarias situación particular. Es preferible, por lo tan-
to, contar con las herramientas y los procedi-
Asumiendo que el rendimiento del cultivo mientos para calcular en lugar de dar una res-
mejora solamente en un 10 por ciento en el puesta única.
área sin tráfico y que la cosechadora tiene La magnitud de esos costos puede ser ana-
ruedas de cerca de 750 mm de ancho, el nú- lizada al examinar algunos de los beneficios.
mero de surcos afectados por las ruedas será Un precio internacional del trigo de $EE UU
de 3 × 2 × 4 = 24 surcos de un total de 96. En 100 y un rendimiento promedio de 4/ha in-
esos surcos no habrá mejoramiento de los ren- crementados en un 7,5 por ciento en 500 hec-
dimientos y, por lo tanto, el mejoramiento neto táreas producen un ingreso adicional de
será del 7,5 por ciento. Esta es realmente una $EE UU 15 000/año. A los precios del año
estimación conservadora porque los sistemas 2001, una reducción del 20 por ciento del ta-
convencionales por lo general tienen líneas de maño del tractor de 134 kW daría un ahorro
guía donde faltan por lo menos dos surcos cada de cerca de $EE UU 17 000. El beneficio neto
24 m de ancho. de estos dos elementos en 500 hectáreas sería
de $EE UU 32 000 al final del primer año.
Varios autores presentan análisis detallados
Costos del manejo en el campo en distintas regiones, a los cuales remitimos a
los lectores para mayor información. Gaffney
Es probable que los principales costos de y Wilson (2003) sugieren, por ejemplo, un
manejo de las operaciones en el campo estén beneficio neto de $EE UU 15-25/ha para el
asociados con las huellas permanentes. Como cambio al sistema de tráfico controlado den-
se indicó anteriormente un pequeño equipo tro de un régimen de labranza cero en un
308 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación
Cuadro 32 Factores y variables con impacto en la economía del cambio de un tráfico sin ordenar
a un tráfico controlado en un sistema de labranza cero, su magnitud probable y el nivel después de
la transición.
Notas: a Costo adicional al sistema de ± 25 cm, por ej., costo total sería 6 400 + 2 400 = $EE UU 8 800
b Costo adicional al sistema de ± 3 cm, por ej., costo total sería 8 800 + 15 400 = $EE UU 24 200
c Esta opción tiene una tasa anual de corrección de la señal de $EE UU 1 330
d Potencia del tractor o reducción de mano de obra, no ambos. Ver «Costos fijos y variables» en el texto.
y mantener las huellas permanentes de las 4. En otras situaciones muchas de las venta-
ruedas en el mismo lugar y de año en año. jas provendrán del cambio a labranza cero
Los principales sistemas para lograr esto el cual reduce pero raramente elimina las
son: ganancias adicionales a ser obtenidas con
a. marcadores físicos que proporcionan un el sistema de tráfico controlado. En la ma-
medio para posicionar el pase siguiente yoría de los casos la combinación del trá-
el cual, si está integrado con la siem- fico controlado con la labranza cero llega
bra, puede ser usado para introducir a un mayor potencial que la labranza cero.
surcos guía para un uso posterior; 5. El sistema de tráfico controlado permite
b. video cámaras de televisión de circui- que los agricultores anticipen mayores ni-
to cerrado con una pantalla en la cabi- veles de precisión en todas las operacio-
na del operador; nes para poder:
c. sistema diferencial global de posición a. aumentar la flexibilidad y la eficiencia
usando satélites (SDGP); del control de malezas;
d. conducción automática controlada por b. asperjar el surco del cultivo y los en-
el sistema de guía. tresurcos en forma independiente;
c. usar pesticidas no selectivos en los
3. El sistema de tráfico controlado debería
entresurcos;
liberar todo el potencial de la siembra en
d. tal vez colocar y manejar los residuos
labranza cero al evitar el daño de la com-
para permitir su manipulación con
pactación del suelo en la zona del cultivo.
mejores resultados.
Es probable que esto de como resultado:
6. El costo de convertir al sistema de tráfico
a. mejores rendimientos de los cultivos
controlado no debe ser grande siempre que
desde el inicio;
sea cuidadosamente diseñado y parte del
b. mejor eficiencia en el uso de los nu-
proceso de planificación para el futuro. Si
trientes obtenida gracias a una mayor es planificado correctamente, es probable
proliferación de las raíces; que los beneficios superen en mucho los
c. mejor porosidad del suelo que propor- costos.
ciona mejor infiltración del agua, dre- 7. Hay numerosas formas de llegar al siste-
naje e intercambio gaseoso; ma de tráfico controlado que varían en su
d. menor peligro de denitrificación, es- costo. El diseño del campo es un aspecto
pecialmente en la presencia de residuos particularmente importante porque es ne-
orgánicos; cesario considerar el drenaje del campo,
e. menor fuerza de arrastre y menor des- la pendiente, la eficiencia de la operación
gaste de los abresurcos; y los obstáculos permanentes.
f. menos mano de obra y menos consu- 8. Las huellas permanentes de las ruedas en
mo de combustible en las operaciones un sistema de tráfico controlado deben ser
de siembra; manejadas para asegurar un comporta-
g. menor demanda de potencia para la miento óptimo. Es probable que el mane-
siembra, lo que permite el uso de un jo incluya:
tractor más pequeño para obtener el a. rellenos regulares, preferiblemente
mismo resultado; como parte de las operaciones norma-
h. abresurcos más confiables y precisos les de campo;
en una mayor gama de condiciones de b. formación del drenaje de las huellas ha-
suelos; cia las pendientes en las áreas bajas;
i. potencial de un mayor rango de culti- c. siembra de los cultivos en circunstan-
vos a ser sembrados bajo labranza cero. cias particulares y en forma especial.
310 Siembra con labranza cero en la agricultura de conservación