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TEORIA PSICOANALITICA

ENSAYO CONCEPTUAL SOBRE DONALD WINNICOTT.

Presentado:
Nicol Daniela Rada Avellaneda
NRC: 670311

Docente:
Jeison Camacho
NRC:1884

Séptimo Semestre
Corporación Universitaria Minuto De Dios
2020
Bogota DC

DONALD WINNICOT
Nacido el siete de Abril de 1896 en una familia metodista y en un medio provinciano, Donald
era el menor de tres hermanos y único varón. Su padre, figura de enérgico carácter que llegó
a ser dos veces alcalde de Plymouth y nombrado también caballero, ejerció gran influencia en
Donald. Abello nos relata cómo, por mediación epistolar de uno de sus mejores amigos,
Donald finalmente se atreve a contrariar las expectativas de John Frederick Winnicott de que
su hijo varón continuará con sus prósperos negocios, y a comunicarle entonces su decisión de
estudiar medicina.
TEORÍA
Winnicott analizó en profundidad la relación entre la madre y el bebé, y partiendo de la idea
de que todo niño tiene la potencialidad de evolucionar hacia la madurez, la independencia y
la integración, entendió que es esa relación primaria la que facilita o detiene ese desarrollo.
Una de sus frases más memorables de Winnicott resulta tremendamente tranquilizadora
frente a todas las conclusiones que antes de él y en tiempos posteriores el psicoanálisis ha
expresado sobre el papel materno en la salud o en el padecer mental del ser humano. Así,
lejos de las sobreexigencias, Winnicott explicó algo muy simple: el bebé necesita una madre
suficientemente buena. No perfecta. No siempre atinada. Sino simple y llanamente
suficientemente buena. Esta bondad se determina en tres funciones a cumplir por la madre o
por quien cumpla su rol:
● Sostenimiento: que viene a significar la capacidad de la madre para hacerse cargo de
su bebé en el sentido emocional, para cubrir sus necesidades y estar disponible.

● Manipulación: referida a los cuidados corporales que la madre dedica a su bebé y que
crearán en él una conciencia positiva de su condición física.
● Presentación objetal: es decir, la capacidad de la madre para ir mostrándole al niño los
objetos de la realidad.
Donald Winnicott fue un famoso psiquiatra, psicoanalista y pediatra inglés que desarrolló un
interesante enfoque acerca de la personalidad. Por su formación como pediatra centró sus
reflexiones en los niños. Particularmente, en la relación entre la madre y el bebé lactante y las
consecuencias que de esto se desprenden.
Trabajó junto con la famosa psicoanalista Melanie Klein, incluso en el tratamiento de uno de
sus propios hijos. También fue presidente de la Sociedad Psicoanalítica Británica y un
pensador muy célebre del Siglo XX.
Una de sus aportaciones más interesantes es la del falso self (sí mismo) o falso yo. También
sus conceptos de “madre suficientemente buena” y “madre banalmente dedicada”. De igual
modo, su concepto de “objeto transicional” ha sido adoptado por muchas escuelas de
psicología.

La relación entre la madre y el bebé, según Winnicott

En consonancia con otros psicoanalistas, Winnicott plantea que durante el primer año de vida
la madre y el hijo constituyen una unidad. No se puede hablar del bebé como una entidad
separada de su madre. Los dos conforman una unidad psíquica indivisible.

En el tratamiento psicoanalítico Winnicott abogó por crear una atmósfera que en oposición a
ese ambiente primario problemático que el bebé padeció y que truncó su desarrollo, está
caracterizado por el sostenimiento. Sin embargo, se percató, dada su constante actitud
observadora, de que esto favorecía una relación de dependencia emocional entre paciente y
analista. Y agregó, claramente, que el buen analista (como la buena madre) debe ayudar a su
paciente a liberarse de esa dependencia para curarse.Quizás uno de los rasgos más
encomiables de este psicoanalista es su coherencia. Sus conclusiones teóricas, surgidas desde
una amplísima experiencia práctica, retornaban siempre a su ejercicio clínico.

Aportes y limitaciones.
Su teoría tuvo la influencia de Melanie Klein pero también nos dió un aporte importante para
comprender sobre cómo la relación entre las primeras etapas del niño como el sostenimiento
da una relación emocional e influye en el estilo de vida del niño y sus relaciones
emocionales.
Sin embargo su teoría no puede verificarse sólo puede ser inferida, lo que equivaldría a que
no son refutables.
Conclusión
Como ya se indicó el modelo que Winnicott desarrolla sobre la adolescencia es sumamente
original y se diferencia de otras propuestas psicoanalíticas En este trabajo se ha intentado
desarrollar algunas de sus varias contribuciones..
Uno de los puntos que cabría destacar es que, hasta cierto punto, el modelo de adolescencia
de Winnicott pasa a depender considerablemente de la actitud del adulto, lo que relativiza
nuevamente el supuesto endogenismo de Winnicott. Se podría sugerir que si la adolescencia
necesita adultos que sean adultos y no actúen como adolescentes, es porque sólo como
adultos percibirán una fantasía en la agresividad del crecimiento. Si no actúan en carácter de
adultos, si estuvieran adolescentizados, percibirán de la agresividad no la fantasía, sino el
acto, y reaccionan como si éste fuera equivalente a lo real.
Quedarían en posición de igual a igual con el adolescente, secularizados con él. Si el adulto
confronta al adolescente como adolescente, ya no hay confrontación, porque siente que el
adolescente realmente puede asesinarlo, porque lo que el otro le muestra le es "reconocible",
en cuanto adolescentizado. Termina el juego - el "cómo sí" - y lo lúdico y comienza la
amenaza, lo ominoso, el drama hórdico... Pero en el mejor de los casos - y aquí podríamos
ofrecer otra caracterización de confrontación -, la confrontación opera como un diferenciador
entre Adultos y Adolescentes.

REFERENCIAS
Freud, S. (2012) Más allá del principio del placer. Obras Completas T. XVII. Buenos Aires:
Amorrortu (Trabajo original publicado en 1920), pp. 3-62. Fotocopias

Freud, S. (2012) Pulsiones y destinos de pulsión. Obras Completas T. XIV. Buenos Aires:
Amorrortu (Trabajo original publicado en 1915), pp. 107-134. Fotocopias

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