No consumamos caldos maggy, ricostillas y otros parecidos porque atentan contra nuestra

salud, ya que son los principales causantes de diferentes problemas del aparato digestivo como
gastritis y canceres principalmente del estómago, así que manos a la obra y creemos nuestros
propios condimentos.

Caldo espeso para sazonar nuestras comidas

 1 kg. de verduras variadas

 300g. de sal gruesa
 1 vaso de vino
 1 ramo de perejil
 2 dientes de ajo grandes
 *Esta cantidad de caldo de verduras deshidratado dura unos 6 meses

**Puede ser cualquier tipo de verduras pero recomiendo que siempre haya alguna verdura de
hoja y algunas de más consistencia, como papa o zanahoria. Las verduras que usé para estos
calditos son: zanahoria, auyama, cebolla, espinacas, maíz, berenjena y zucchini.

 Como hacer calditos caseros para sazonar nuestras comidas

1. Poner las todos los ingredientes en una olla a fuego medio-bajo, sin más líquido que el vaso
de vino. Tapar y dejar cocinar, revolviendo de vez en cuando.
2. Cuando las verduras hayan largado su líquido, destapar y dejar que el líquido se evapore por
completo. Todo el proceso tarda aproximadamente 1 hora y media. Ir revolviendo cada tanto
para que no se pegue.
3. Una vez que el líquido se ha evaporado y la verdura está pastosa, pasar por la licuadora,
hasta que quede literalmente una pasta.
4. Volver a la olla y dejar evaporar el resto del líquido, lo más que se pueda, revolviendo
continuamente para que no se pegue.
5. Dejar enfriar y colocar en frascos. O también se puede en bolsitas de bolis. Llevar al
congelador dura mínimo 6 meses.

Como utilizar los calditos de verduras caseros

1 cucharadita colmada de esta preparación equivale a una pastilla de caldo. La mezcla no llega
a congelarse por la sal que tiene así que es sencillo retirar una cucharada y volver el frasco al
congelador.

Otra para hacer caldo natural para condimentar

 300gr de verduras variadas. (Yo he usado: 1 tronco de brócoli, 3 trozos de calabaza
congelada muy pasada, 5 dientes de ajo, la mitad verde de un puerro, 1 zanahoria, 2 ramas de
apio)
 4 cucharadas de aceite de vegetal
 4 cucharadas colmadas de sal
 especias al gusto. (Yo usé tomillo, orégano y cúrcuma)
 ½ vaso de vino de cocina

La elaboración del caldo concentrado casero de verduras es muy sencilla. En primer lugar,
limpiamos las verduras y las picamos lo más finamente posible.

A continuación, en una olla ponemos las 4 cucharadas de aceite, las verduras troceadas, las 4

cucharadas de sal, las especias y el medio vaso de vino de cocina. Removemos bien y
tapamos la olla. Dejamos cocinar unos 30 o 40 minutos a fuego medio con la olla tapada. De
vez en cuando, removemos para evitar que se pegue.

Cuando la verdura esté muy blandita, destapamos la olla y dejamos cocinar otros 30-40
minutos, para secar el guiso. Es importante remover con frecuencia en esta fase para evitar
que se pegue al fondo de la olla

Una vez que se haya perdido TODO el líquido, pasamos el guiso al vaso de la batidora.
Trituramos hasta conseguir una pasta espesa y densa homogénea.
¡Ya ya tenemos listo nuestro caldo concentrado casero de verduras! Ya solo quedaría pasarlo a
un bote de cristal con tapadera. En él podremos conservarlo en la nevera durante 6 meses.

Alternativamente, podemos poner la pasta en una bandeja, taparla con papel de horno y
meterla en el congelador unas horas. Cuando esté dura, cortarla en cuadritos y conservar estos
en el congelador para ir gastándolos en cubos

 Sofría sus sopas y guisos:

El sofrito previo de las verduras potenciará los sabores, para que luego, al añadir el líquido y
alcanzar el hervor, la mezcla de los aromas sea única.

 Cocine las papas con piel:

La mejor manera de conservar el sabor y que no pierdan su forma y textura al ser cortadas, es
hervirlas con su piel.

 Brócoli siempre verde:

Sea hervido o al vapor, la mejor forma de conservar el verde intenso es agregando media
cucharadita de bicarbonato. Además, no debe cocinarse en exceso. De esa forma, también se
mantendrá crocante.

 Pelar y sofreír pimientos:

Hornee los pimientos con sal y un poco de agua a 170° hasta que estén dorados. Póngalos con
su jugo en una bolsa y ciérrela. Los pimientos sudarán y la piel podrá separarse con facilidad.

 Especias sí, pero mejor tostadas. Utilizar especias además de resultar muy

saludable, permite potenciar el sabor de los alimentos a los que acompaña. Si además, las
tuestas, potenciarás su sabor y el del resto de los alimentos. ¡Haz más intenso su sabor!
 
 Verduras, mejor a la plancha. Que las verduras no pueden faltar en nuestra mesa, es
sabido por todos, pero su sabor resulta mucho más intenso y especial si las cocinamos a
la plancha o la parrilla, pues de esta manera, además de adquirir mayor textura, mejoraremos
su sabor.  Para que te salgan para chuparse los dedos, ¡recuerda cortar todas las verduras del
mismo grosor!
 
 Acompáñalos con un buen sofrito. Para cualquier plato como arroz, verduras o
incluso pescado, el sofrito potenciará y realzará el sabor de platos que por sí solos, resultan
menos intensos en cuanto a  su sabor.
 
 Macera y adoba los alimentos. Adoba con tiempo los alimentos y déjalos reposar
para que se empapen bien y así aumenten los sabores. Del mismo modo, si maceras los
alimentos no solo estarás potenciando su sabor sino que también ayuda a que queden
más tiernos y reduce el tiempo de cocción.

 Usa ajo, puerro y cebolla. Estos vegetales confieren un sabor único y especial a

los alimentos a los que se agrega. Además son potenciadores del sabor y poseen múltiples
beneficios para la salud.
 
 Gratina. Utiliza queso o alguna salsa para gratinar verduras, pastas y arroces. Esto
te permitirá agregar más sabor a tus platos y hacerlos más apetecibles.
 
 Conserva el sabor de los alimentos. Para que los alimentos no resulten de por sí
insípidos, prefiere cocinarlos sin sumergirlos en líquidos, ya que estos pueden hacer que
se diluyan nutrientes como el sodio y otros minerales que dan sabor. Elige formas de cocinar
como al vapor, papillote o microondas.
 
 Utiliza alimentos ácidos y picantes. El limón, lima o vinagre para macerar, adobar o
aliñar son una manera muy útil de potenciar el sabor de los alimentos. Y lo mismo sucede
con el picante. Eso sí, ¡no te pases o perderás el sabor real de los alimentos!
 
 Conseguir que los postres sepan dulces. Si el sabor dulce no es suficientemente
perceptible, puedes utilizar un pequeño truco que consiste en verter dos cucharaditas de
panela en polvo por encima de las frutas y rociarlas con un poquito de zumo de naranja de
manera que se forme un almíbar que diluirá lo sabores y hará que se saboreen más a la
hora de comerlo. Si no, puedes emplear cocciones largas como compotas o asar las frutas,
para liberar sus azúcares naturales.