Pocas recetas son más sanas y reconfortantes que una buena ensalada, con su aderezo bien trabajado y con ingredientes que pueden ser fríos, tibios o incluso calientes. En muchas ocasiones son recetas vegetarianas, pero en otras, las carnes como el pollo se utilizan para darle un extra de sabor a la ensalada. También las frutas, las legumbres, los pescados (especialmente en conserva, ahumados o marinados) o los hidratos (como las patatas o la pasta) son ideales para preparar una ensalada que quede en el recuerdo de los comensales.
Pocas recetas son más sanas y reconfortantes que una buena ensalada, con su aderezo bien trabajado y con ingredientes que pueden ser fríos, tibios o incluso calientes. En muchas ocasiones son recetas vegetarianas, pero en otras, las carnes como el pollo se utilizan para darle un extra de sabor a la ensalada. También las frutas, las legumbres, los pescados (especialmente en conserva, ahumados o marinados) o los hidratos (como las patatas o la pasta) son ideales para preparar una ensalada que quede en el recuerdo de los comensales.
Pocas recetas son más sanas y reconfortantes que una buena ensalada, con su aderezo bien trabajado y con ingredientes que pueden ser fríos, tibios o incluso calientes. En muchas ocasiones son recetas vegetarianas, pero en otras, las carnes como el pollo se utilizan para darle un extra de sabor a la ensalada. También las frutas, las legumbres, los pescados (especialmente en conserva, ahumados o marinados) o los hidratos (como las patatas o la pasta) son ideales para preparar una ensalada que quede en el recuerdo de los comensales.