ESCUELA DE POSGRADO UNIDAD DE POSGRADO DE LA FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN MAESTRÍA EN EDUCACIÓN CON MENCIÓN EN EDUCACIÓN INTERCULTURAL BILINGÜE
Título : Análisis de texto: Fornet-Betancourt, Raúl: La transformación
intercultural de la filosofía. Docente : Dr. Víctor Maximiliano Mazzi Huaycucho Curso : Cosmovisión y filosofía andino-amazónica Maestrista : Teodosio Simon Sulca. Ciclo académico : 2020 - I Fecha de entrega : 22 de agosto 2020.
Ayacucho, agosto de 2020
PUNTO DE PARTIDA. Para abordar este análisis, tenemos que descifrar algunos términos que, en sí, nos ayude entender ¿Qué es lo que realmente nos plantea Raúl Fornet - Betancourt? En principio abordaré el término filosofía, pero no necesariamente conceptuaré sobre su origen, o historia de la filosofía, más allá de lo mencionado, hay algo que me parece interesante respecto al asunto; El Rvdo. Padre Ismael Quiles S. J. en su libro “Qué es filosofía” menciona lo siguiente: …“En estos momentos estás filosofando, estás haciendo filosofía, estás demostrando que la filosofía es algo que te interesa a ti. Porque los grandes problemas filosóficos son, en resumen, los problemas de mi vida” … “La búsqueda de la sabiduría ha sido, en todos los pueblos y en todas las culturas, una urgencia, que ha manifestado el grado de evolución y de progreso de la humanidad.” Con ello se puede deducir que, todo grupo humano, toda cultura posee de ella, y que en la tradición europea occidental decidieron llamarla así, lo que implica que, en otras culturas, tales como los mayas, aztecas, incas, etc. No necesariamente se conocía con esa denominación, pero que sin embargo la poseían. LA ESENCIA DEL TEXTO Ya respecto al análisis del texto, cuando el autor hace referencia de la nueva la filosofía intercultural, tomando desde diversos ángulos por lo que apeo su planteamiento, debido que esta concepción descrita no quiere desheredar la filosofía tradicional europeo occidental. “El espacio intercultural entonces, no es un espacio cerrado sino un espacio de tránsito admite definiciones desde distintas perspectivas y se conforma en el ida y vuelta del dialogo intercultural… En ese sendero de búsqueda de una definición de textura abierta, la metodología hermenéutica puede resultar de mucha ayuda” (Cfr Gadamer, H.G., 199). Lo citado nos hace reflexionar que la filosofía no es monocultural o etnocéntrica. Lo que sí busca es la universalidad, esa identidad cultural dentro de un proceso histórico. Sin embargo, para los formados en la tradición dominante parece sumamente extraño que hablemos de filosofía en culturas que son ágrafas, por ejemplo, que no desarrollaron escritura. En ellas no encontramos fuentes escritas pues no hay una evidencia filosófica visible, ni hay autores en tanto filósofos individuales, entonces ¿cómo podemos hablar allí de filosofía? Frente a ello, la hermenéutica intercultural nos puede dar una respuesta. Digo esto, debido a que la concepción dominante en el mundo académico superior, aun se sostiene que no existe filosofía en sentido estricto fuera de la tradición europeo occidental originada en la cultura grecolatina. A lo que podíamos denominar una concepción monocultural o etnocéntrico. Enfocándonos donde el autor hace referencia sobre el pensamiento filosófico en Latinoamérica, vale aludir lo siguiente expresado por Castro: “Dos fueron, en opinión de Gómez-Martínez, las tesis de Ortega y Gasset que se convirtieron en baluartes fundamentales para la reflexión latinoamericana: en primer lugar el circunstancialismo o teoría de las circunstancias, que postulaba la necesidad de asumir el propio contexto socio-cultural como problema filosófico; y en segundo lugar el generacionalismo o teoría de las generaciones, que pretendía ofrecer un modelo de análisis para explicar la evolución histórica. Estas dos tesis fueron sometidas a un desarrollo creador por sus discípulos José Gaos y Leopoldo Zea, quienes a través de una reinterpretación del pasado filosófico hispanoamericano colocarían las bases sobre las que se construiría el actual pensamiento de la liberación”. (Castro, 1996, p. 22) Lo descrito por Castro Gómez se inclinarían para el anhelo de una filosofía que no cierre fronteras geográficas. Por otra parte, Salazar Bondy manifiesta lo siguiente: “El problema de nuestra filosofía es la inautenticidad. La inautenticidad se enraíza en nuestra condición histórica de países subdesarrollados y dominados. La superación de la filosofía está así íntimamente ligada a la superación del subdesarrollo y la dominación, de tal manera que si puede haber una filosofía auténtica ella ha de ser fruto de este cambio histórico trascendental”. (Salazar, 1968, p. 125) Esto nos da a entender que, para el desarrollo de una filosofía autentica, esta debe estar ligada al avance socioeconómico, cultural, etc. Con lo cual no estoy de acuerdo en un gran porcentaje. Por otra parte, el autor describe y fundamenta a nivel hermenéutico-epistemológico su propuesta para forjar una Filosofía Intercultural. En él podemos entender la condición para el filosofar cuya aspiración es la "transformación intercultural de la filosofía". Para entender citamos a Jesús Antonio Sánchez: “Des filosofar la filosofía quiere significar, primero, liberar a la filosofía de la cárcel en la que la mantiene prisionera la todavía vigente hegemonía de la tradición occidental centroeuropea…” (Sánchez, 2007, p.261) En consecuencia, nos invita a ejercitarnos en el enfoque intercultural. De esta manera se intenta buscar un filosofar que resulte más auténtico, comprometido y provechoso para Latinoamérica, también reside la intención de hacerlo extensivo, posteriormente, al contexto mundial actual, cuya característica es también natural de conciencia de la pluralidad. Por otra parte, respecto a la pluralidad filosófica, la filosofía intercultural latinoamericana estaría contribuyendo al enriquecimiento de la filosofía intercultural y de la humanidad, porque estaría restituyendo al mundo la página del libro del universo que, según José Martí, los europeos le robaron con la conquista de América. Por un lado, respecto al análisis de este texto es menester mencionar a Dussel con relación a la filosofía de la liberación en el que el plantea lo siguiente: “La ética de la liberación piensa y explica el sentido de un nuevo proyecto histórico, la nueva bondad, el ser fututo como utopía positiva, el interés de los oprimidos como horizonte de liberación. El nuevo momento de ser destruye al anterior, pero todavía no rige estados ni tiene leyes a su servicio, ni ha triunfado todavía. El proyecto de liberación, es así fundamento de la nueva moral, pero fundamento distinto y opuesto al antiguo proyecto. La dialéctica entre el proyecto vigente en nombre del cual se reprime al pobre, y el nuevo proyecto de liberación por el que lucha el oprimido, es el origen de toda la ética. La ética de la liberación no carece de fundamento por oponerse al fundamento del sistema moral presente. Lo que acontece es que tiene otro fundamento, utopía futura, ser, fin, bondad opuesta a la del sistema actual. En nombre de dicho fundamento se eleva un pueblo contra los intereses de las clases dominantes del sistema actual y lo declara inmoral” (p. 118). La ética de la liberación, según Dussel, conlleva una antropología y una metafísica de la sensibilidad. Para Dussel, el proyecto de liberación necesita destruir el orden de injusticia y construir uno nuevo a su servicio, además menciona Dussel: “dar de comer al hambriento' histórica y estructuralmente, a través del Estado y las leyes, es decir, cumplir sus interesas cabalmente, es obra del espíritu, es un acto espiritual, es el acto por excelencia de la ética de la liberación” (pp. 120-121). Desde mi opinión implica que, también al hablar de liberación, debe entenderse como una liberación humana integral y no es viable ningún reduccionismo de esa liberación. CONCLUSIÓN Finalmente, lo que tengo muy en claro y a lo que doy fe, respecto a los planteamientos de Betancourt es lo siguiente: “Hasta aquí se ha presentado, de forma sucinta, el proceso histórico del pensamiento latinoamericano, la influencia que ha tenido de la filosofía europea y los debates por determinar su originalidad y universalidad. Más allá del influjo europeo, también se ha logrado una reflexión crítica sobre los problemas reales y propios de este continente latinoamericano, pasando del deseo de una emancipación política, para luego buscar la emancipación mental, cultural y económica. Con la filosofía de la liberación se denuncia la historia del sistema que justifica la injusticia, la marginación y el hambre de los oprimidos, para proyectar un nuevo orden a partir de la liberación integral de las personas y de las estructuras sociales”. (Fornet-Betancourt, 2004, p. 6). Con ello da a entender que, Raúl Fornet Betancourt tomando prestado un concepto teológico, señala que nos encontramos en un kairós, un momento oportuno para la trasformación intercultural de la filosofía especialmente en Latinoamérica marcado por la reorganización de los pueblos indígenas y afroamericanos, en un movimiento de resistencia popular. Todos estos argumentos planteados justifican una convicción profunda de filosofía intercultural que no pretende ser una nueva rama, corriente o vertiente de la filosofía, sino un movimiento que tiende a reposicionarla frente a tradiciones culturales que históricamente han quedado fuera o en los márgenes de lo definido como filosófico, pero que por cierto complejos o planteamientos etnocéntricos. No se ha tomado desde mucho tiempo atrás. Podemos concluir que, efectivamente existe filosofía fuera de los límites culturales de Occidente. que explicita esta forma de concebir la realidad. Esta explicitación puede ser racional y metódica, entonces estaremos dentro de lo que la tradición dominante en Occidente define como filosofía en sentido estricto. Pero también puede no serlo sin caer por ello en la irracionalidad, en la inautenticidad, en la falsedad, sin caer por ello fuera de la filosofía en su sentido propio, el mismo hecho de ser parte de una cultura y que ella conlleve en sí a la no discriminación o el etnocentrismo europeo, teniendo en cuenta que toda cultura siempre es parte de todo este globo terráqueo en la que habitamos, y esta necesariamente aporta o forma parte de la sabiduría humana. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS Salazar Bondy, A. (1968). ¿Existe una filosofía de nuestra América? México, México D. F: Siglo XXI. Serrano Sánchez, J (2007). Filosofía actual en perspectiva latinoamericana. Colombia Bogotá: San Pablo. Dussel, E (1994). Historia de la filosofía latinoamericana y filosofía de la liberación, Editorial Nueva Amperica, Bogotá, recuperado Biblioteca de Consejo Latinoamericano de Ciencias sociales CLACSO http://www.filosofia.org/aut/002/quiles54.htm http://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.4300/pr.4300.pdf http://www.scielo.org.co/pdf/frcn/v57n164/v57n164a02.pdf http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/otros/20120422095648/HISTORIA.pdf https://www.redalyc.org/pdf/4780/478048953001.pdf