1 Por: Juan Manuel DE LA
buena economia empleando bue-
No es mucha la literatura que
existe en lengua castellana de-
dicada a los encofrados de ma-
dera, a pesar de que constitu-
yen parte importante de una
obra, no siendo raro que el en-
cofrado cueste más que el hor-
migón vertido y moldeado en
aquel. Como sea que representa
una parte sustancial del coste
de la construcción, parece con-
veniente poder disponer a inge-
nieros y arquitectos, de datos
sobre este fiema que llene un
poco el vacío de nuestra litera-
tura técnica en esta rama, para
el planteamiento de sus proyec-
tos y además también para los
encargados y carpinteros que
realizan los encofrados, les se-
rán útiles los datos que se dan
en este artículo, y permitirán
realizar su labor con las debidas
garantías de seguridad y econo-
mía.
La economia es t e n i d a en
cuenta cuando se proyecta un
encofrado. En ella influyen mul-
titud de factores, como son los
costes de los materiales gasta-
dos; el coste de la mano de obra
en la construcción de panelles
prefabricados, sobre los que vol-
veremos más adelante; la mano
de obra invertida en la coloca-
ción y desencofrado; los medios
auxiliares emplieados; el núme-
ro de puestas del encofrado se-
gún su mayor o menor deterioro.
Puede obtenerse, por tanto, una
PENA Azna
para autosoportarse, pero no po
nos materiales de coste inicial
elevado, debido al gran número
de usos que con ellos se pueden
conseguir.
Con la idea de alcanzar la ma-
yor economía posible, se deben
afinar los cálculos, con el fin de
conseguir el mayor ahorro posi-
He, empleando, además, las ten-
siones más altas posibles, evi-
tlenfiemente de acuerdo con la
calidad del material empleado,
y sin sobrepasar los límites se-
ñalados para aquellos por nor-
mas nacionales, y en su defecto,
por normas internacionales de
reconocida solvencia y cafiego-
ría.
Cuando se vierte hormigón en
un molde, aquél ejercerá su má-
xima presión sobre los laterales
de éste y sobre el fondo que so-
porta su peso. Al cabo de dos
horas, y a veces menos, la pre-
sión del hormigón alcanza su cé-
nit, a partir de cuyo momento
comenzará a disminuir paulatina-
mente hasta anularse. De esto
se deduce que los encofrados
están sometidos a los máximos
esfuerzos durante cortos perío-
dos de tiempo, y a pesar de ello
ocurren frecuentes accidentes,
bien lamentables y corregibles
por cierto. Pocas horas después
de vertido [el hormiqón en el en-
cofrado, donde previamente se
ha colocado la armadura, empie-
za a fraguar aquél y a adherirse
a ésta, alcanzando en poco tiem-
po resistencia suficiente como
ello deben retirarse t o d o s lo
componentes del encofrado, es
pecialmente los puntales, quie
nes se dejan colocados vario
días, y conforme disminuye l
tensión (normalmente compre
sión) en ellos, va aumentando l
resistencia del hormigón. As
pues, la tensión máxima en e
encofrado es temporal, y de má
corta duración que el tiempo qu
permanezcan los materiales de
encofrado e n obra.
La madera es un material qu
permite absorber grand~essobre
cargas durante tiempos de cort
duración. Por ejemplo, esto e
tan cierto que en USA, la Aso
ciación Nacional de Manufactw
radores de Madera publicó hac
bastant1.e~años u n a important
tabla, en la que especificaba la
tensiones admisibles para mu
diversas especies de madera
tanto para tablones, como vigas
tablas y postes, recomendand
que:
Vo O'
Cuando el esfuerzo dure
varios años, reducción
del . . . . . . . . . . . . . . . . . . 90
Dure dos meses, aumen-
t o del . . . . . . . . . ‘ . . . . . . 15
Dure siete días, aumiento
del ..................... 33
Sea por impacto, aumento
del ..................... 100
En cambio, el Módulo de Ela
ticidad permanece invariable.
para ayudarse e n sus problemas
de encofrados. S i n embargo,
La Federación fiscales y sociales. De
tos análogos s e dicta
en beneficio de otras a
aunque no trate especificamen-
vidades profesionales h
te del tema de encofrados que
nos ocupa, hemos de resaltar te1
libro titulado cálculo de Estruc-
Nacional de ta el número de 22.
La Disposición 358J1
turas de Maderan cuyo autor es de 17 de febrero, public
por el [[Boletín Oficial
el profesor de la Escuela Técni-
ca Superior de Ingenieros de
Montes, don Ramón Argüelhes
tmpresarios Estado., de 9 de marzo
1978, ha sorprendido a
diversas Agrupaciones
Alvarez, Dr. Ing. de Montes,
presariales por suprimir
que nos ha servido de valiosa
ayuda p a r a nuestro propósito.
También nos han ayudado las pu-
de la Madera dicalmente los Carnets
Empresa s o pretesto
conseguir la erradicac
biicaciones de la Asociación de
Investigación Técnica de las In- de un monopolio del a
dustrias de la Madera y Corcho,
más conocida por AlTlM y sus
ingenieros, señores González
y Corcho guo Sindicato Vertical.
Como la exigencia del C
net obedece a neces
Alvarez, Guindeo y Peraza. des profundamente se
Un primer objetivo de este ar-
tículo es llenar un hueco de in-
formaciones técnicas p a r a el
recurre contra das por los diversos Se
res, la reacción ha s
inmediata y enérgica Y
cálculo de Encofrados Modernos Federación N a c i o n a
de Madera, y el segundo, dar a
conocer a los técnicos de la In-
dustria de la Construcción, tan-
el Decreto Empresarios de la Mad
v Corcho ha acordado
tablar un recurso d e re
to Superiores como Medios y de sición, al que se han ad
Obra, la evolución operada en
los encofrados de madera que
hoy no se parecen en nada a los
que suprime rido otras muchas Org
zaciones Em~resariale
Suponemos que la Ad
antiguos y tradicionabes encofra- nistración rectificará s u
dos de madera, que usaban como
elementos constitutivos básicos
el clásico y famoso dablónn, o
el Carnet de cisión, por cuanto la me
identificación d e las
presas va en su propio
el ~ t a b l o n c i l l o ~la; ~tablan,ma- neficio. L o S empresar
chiembrada o no; ariostrasn, et-
cétera, y el no menos famoso
.puntal*, incluso, dudosamente
tmpresa con
L
no pretenden mono~o
la concesión d e esos
nets. S e limitan a pedir
empalmado, que tantos sustos y intervención en la con
disgustos ha proporcionado, aco-
dado contra el tencofrado por me-
dio de las clásicas e u ñ a s ~ que ,
Responsa- sión a través d e un in
me no vinculante. Y na
como los e m ~ r e s a r i o sD
servían para regular su altura y poder auxiliar a la Pd
para el desencofrado, bastante
brutal por cierto.
La necesidad aguza el inge-
bilidad nistración en la labor
identificar a las empre
sin leaalizar.
en la década de los años 50
eran, efectivamente, competiti-
vos, como por los avances de la
tecnología en las construcciones
de madera, y en las colas para
su unión segura e inalterable a
los agentes atmosféricos.

1.2. BREVE HISTORIA

DE LOS ENCOFRADOS
DE MADERA
Se puede decir que hasta ter-
minada la última Guerra Mun-
dial, los encofrados que se usa-
ban -casi exclusivamente-, es-
taban hechos con m a d e r a de
muy diversas clases, calidades
y escuadrías. Todos los estamen-
tos profesionales que tenían al-
go que ver Eon los encofrados
para moldear hormigón, casi to-
talmente insitu; no tenían el me-
nor acicate para evolucionar la
ancestral técnica empleada, des-
de que apareció el hormigón
como material para construc-
ción. Pero las necesidades agu-
zan el ingenio, provocando en el
hombre la búsqueda de sustitu-
tivos; productos nuevos; nuevas
técnicas; más precisión en los
métodos de cálculo; nuevos sis-
temas constructivos; etc.
Asi, por ejemplo, durante la
citada Guerra Mundial, entre los
años 1939 y 1945, en Alemania,
cada vez más acuciada por sus
enemigos, se fueron agotando
sus reservas de materias primas
inexorablemente, d a d o además
su mayor consumo que en época
normal por el esfuerzo de gue-
rra que tenía que hacer, y de
ahí que el profesor Karl Egner
desarrolló una técnica de empal-

Konstruktion und Produktion

d e r Lübbert-Strebenbau-Trager.

4 AlTlM
entonoes en empalmes longitu-
dinales, pero no en empalmes en
ángulo o nudos de una celosía,
donde concurren hasta cuatro ba-
rras en vigas de celosía isostá-
ce entre las caras de la cuña y
las paredes del material en el
que la cuña está hendida. En tal
caso, para sacar la cuña hay que
aplicar un esfuerzo a ella igual y
losía, en las que las roturas en
los ensayos de calidad se pro-
ducen en las barras y no en los
nudos que, lógicamente, es el
punto débil de toda construc-
ción hecha con elementos dife-
rentes, no de una pieza.
Tras largas pruebas y cálcu-
los, el 1 n g le n i e r o Diplomado,
Manfred Steidle - Sailer, eligió
una viga en celosía tipo Warren,
con diagonales dobles, ligera y
resistente a la torsión, con can-
to de 36 cm. y ancho de 10 cm.
Por fin, en el año 1959, se em-
plearon masivamente por prime-
ra vez vigas de madera encola-
da en celosía, tipo Steidle, con
ausencia total de elementos me-
tálicos de unión, en el encofra-
do de un muro con sólo dos li-
neas de anclales, una superior y
otra inferior, lo que constituía
una verdadera novedad en la
construcción de encofrados de
muro. Pero fue realmente en
1961 cuando el inventor del nu-
do hecho por medio de la técni-
ca de las entalladuras, ya pues-
ta en práctica en Alemania y
USA en uniones longitudinales,
durante la 11 Guerra Mundia7,
como hemos dicho antes, pudo
presentar otra novedad consis-
tente en !emplear como superfi-
cie encofrante tableros contra-
chapados unidos con colas fe-
nólicas, inalterables a la hume-
dad, y con la posibilidad de plas-
tificar una o ambas caras, para
aumentar notablemente el nú-
mero de empleo de aquellos,
con un modesto aumento del
precio de adquisición del ta-
blero. ,'
Así, el señor Steidle pudo
construir y presentar, primera-
mente en el mercado alemán, y
luego en el resto de Europa Cen-
admisible Mam= 1500 mkp, y un
cortante admisible Qam= 1900
kp, y una larga duración, desde
luego muy superior a los cinco
años, con lo que su coste por
puesta, uso o empleo, es econó-
micamente competitivo.
De entonces acá no ha cesado
de perfeccionarse la construc-
trucción de la viga Steidle, que
en España es fabricada en exclu-
siva por Vigas Extensibles, S. A.
(S A V I E X), y comercializada,
también en exclusiva, por Tre-
gar, Auxiliar de la Construcción,
Sociedad Anónima, ideándose,
además, accesorios; sistema de
correas metálicas; nuevo tipo
de anclajes con redondo de ace-
ro Dywidag totalmente recupe-
rable; mesas de encofrado; en-
cofrado~extensibles o retracti-
bles para cajas de ascensor;
bandajes para v i g a s extensi-
bles; andamios trepantes; anda-
mios de trabajo; puntales teles-
cópicos tubulares para grandes
cargas y esbelteces, etc., con lo
que construir un moderno siste-
ma completo de encofrado de
madera.
1.3. ENCOFRADOS
frar mediante paneles prefabri- frado metálico, sin reaccio
METALlCOS cados de hasta 30 m2. No por tiempo, o lo que es peor
Los encofrados metálicos tu- eso los encofrados metálicos cionando tardíamente.
vieron su espectacular auge una han desapanecido, ni desapare- El encofrado metálico
vez terminada la 11 Guerra Mun- cerán, evidentemente. Lo que ha que quedar y quedará c
dial, que les ha durado unos ocurrido es que la madera, en crito a empleos para los q
veinte años, pues a las vigas de forma de vigas encoladas y ta- más ventajoso que los ~
madera encolada les costó mu- bleros fenólicos, ha recuperado nos Sistemas de Encofra
cho esfuerzo y tiempo penetrar e l mercado que por sus induda- Maderas, como por ejemp
en el mercado, y, sobre todo, bles ventajas le correspondía, y encofrados de vígas pre
que éste tomara confianza con que por abandono de los dife- das; los encofrados de tú
ese nuevo medio de encofrar, y rentes estamentos profesiona- ciertos casos; los enco
acostumbrarse a obtener de él les que la trabajaba, dejaron el deslizantes (no confundir
todas sus ventajas posibles, co- campo libre a las indudables in- trepantes, que son dist
menzando por la forma de enco- novaciones que aportó el enco- los encofrados de pilare
 modernos encofrados de made- d u r a S, deformaciones o de m u r o re
ras son los indicados, porque abollamientos costosos de enorme varied
sus ventajas respecto de los ien- reparar. La madera resiste - - " - río pequeño, qu
cofrados metálicos son: mucho mejor los golpes. . .. diendose en la
,, .,
(

instalación co i C

., cha mano de o
O No protegen
d e 1 hormigón
frío.
0 Hay que entre
gastos adicion
dos para prote
oxidacíón.
La mejor prueba
rior es que cuando
Guerra Mundial, el
cofrado metálico e
nante el7 Europa C
día en Alemania, Su
[donde hay fábricas
madera encolada en
ma llena) la viga de
ticipa en un 70 o a u
del mercado del en
1.4
EN
D
S
, En epígrafes an
mos definido lo q
como «Modernos en
madera* . Están con
vigas de madera en
MEJORAS DE L A CAL/bAD DE LA VIGA JTE/DLE- TREGAR losía, tipo Warren, o
na, o tipo Víerende

'
ESFUERZO CORANfE HUNENiD FLErniR
ADMIS~BLE AOF4ISIBLE #estánclavados, o m
. . llados, tableros con
fenólicos ptastificad

3
k/ute3
&/u~o$ - - caras o no. Las foto
pañan al texto so
- 7
- . r
mente expresivas
cualquier explicació
940. /600 /4UU /400 900 /.?O0 /.?M /5UD
' ,Realmente lo más
k ~ .KKP @. &P. '4. m@. m& m@.
de este epígrafe es
mercado de tales
M
67 m/ d. ?5 &? #Y?/ ?M 75 &S
modernos*, para q
-, , ;* . . , " . . pg,L5.*. ,
: ; .,9*o- +* I-.. - <. * .
.. lógicamente técnic
. - 4

- ? .1
I
- 3 * - - m,.3y ,e - ...A-. dónde dirigen sus p
 de la moderna conc
encofrado de madera
cho un estudio de m
J. Schmidt-Morsbach
tado se expone en el
Obsérvese que en e
hemos clasificado co
de encofrado a tener
el mixto de madera y
puesto por tableros d
za o tablas unidas, m
das o no, recercado
metálico de muy var
que constituye la res
los fabricantes de
metálicos puros (tod
la irrupción en el m
las vigas de madera
con tableros contrach
nólicos, pues, ademá
frado metálico puro
dicho que deja la su
hormigón muy tersa,
arquitectónica actual
superficie q u e d e s
rugosa, tanto por est
porque en ella aga
cualquier tipo de rie
o pintura.
El señor J. Schmid
no solamente ha es
distribución del merca
actual por clases de,e
sino que además ha
su tendencia futura e
los eiementos de que
MUROS JACEMS nen los *modernos
U S E DE ENCOFRADO O FORJADOS EN
ELEMENTOS. SOTANOS INFRAES de madera. . He aquí
TRUCTUMS nios plasmados en el
Vigas de madera encolada en 1.5. VIGAS DE
celosía 40,s % 21,5 %
Vigas de madero encolado de E
alma l l e n a 7,O % 1,b SS
Encofrado m e t á l i c o mixto 17,9 % 4,3 %
1 Encofrado metdlico puro COM
1 8,2 % 6,O %
Conforme la viga
Encofrado de forjado
Tablones usuales 58,8 % penetrando en el me
Otros t i p o s 7,9 % mán y el exterior c
fueron apareciendo
TOTALES 10,o % cias, como es nat
superior e inferior de igual lon-
gitud, contra la típica forma de
la viga Steidle en que un extre-
mo termina en voladizo, y ade-
nales son maci-
ísticas construc-
tivas de la viga Steidle, que no
las tienen ninguna otra de las
que conocemos, es ventajosa
por:
O Economía de peso y Iógi-
cam~entede precio.
:,@ Posibilidad de desencofrar
9 .
d un muro antes que el enco-
-fiado del forjado construi-
- -. ..
Encofrado de f o r j a d o e n t a b l a d o
Encofrado c o n v e n c i o n a l a n t i g u o
do a la vez que aquél, y Resumien
además ese extremo incli-
nado tiene ventajas cons- cofrade
tructivas ten encofrados in-
clinados de cúpulas o bó-
vedas (véase fig. 1.6).
O Tal voladizo permite au-
mentar la reacción en el
apoyo más cercano al mis-
mo. Así, en la figura 1.7,
aun cuando Qah = 1900 kp.
para la moderna viga Steid-
le ST 73, y por lo tanto la
-.
" .
l
. : , . * e s:de,-forina de-. =
- madas por dos escu
45 %
100 %
~ , ~ , " ~
reacción B no puede
de #ese valor, en c
la reacción en A pue
gar a 2800 kp., sín qu
en A sobrepase los
kp. autorizados.
El Que las diagonales
dobles da lugar a do
tajas apreciables: l a
ra qu~ela viga en s
hoy sistema tan exfe
..las construccione
icas, por ejemplo,
a a las vigas Steid
levidente resistencia
sión. En efecto, apl
a estas vigas la fó
aproximada que da
moshenko en-su Re
cia de Materiales..
página 263, result
% & a=
$ 148
siendo Mt el momen
sor a resistir, mientra
aplicando la fórmula
por iese mismo autor
tomo 11 de su -Resis
de Materiales~,pág.
una viga de sección 1
son las demás que e
remos, se obtiene
Tmas = 0,0018 M
En segundo lugar, l
taia de las diagonaXe
viga Steidle de esta

Obra: caja "-.&k Ahorros, en Badalona.
Bloque deWyiendas.
Constructolres: Miró Trepat;
das, S. A.; Padrós, S. A.
inferior están
a compresión o
según trabaje la
diagonales tambi
ción o compresi
diendo (el esfuer
. te del coseno d
"," . !que forman los
En cambio de la
alma Ilena, se sa
cortante lo tiene
tir prácticamente
te el alma en se
tical. Véase fig.
Pero por un pr
mental de equilib
elementos prism
alma, las tension
tes verticales o
unas tension~e
horizontales i g
Farnb aquellas y perpe
a las mismas, a
ma conclusión s
e supone la vig
h de la figura 1
por dos vigas de
gitud primitiva
por algún medio
neutro. En este
rán esas tension
tes máximas ded
tes, que se opon
lizamiento de la
rior sobre la infe
Como por la fig
se ve que el es
tante en el alm
una viga 1, como
ca Doka, por: e
su unión con las
dones, varía muy
la tensión cortan
en el centro de
sulta que la tens
te en ese delic
de este tipo de
tensiones rasant
 llena se les practican en
ésta unos grandes taladros
cada cierto espacio para
poder introducir por ellos
< riostras, cables u hondillas
v *

de grúa para su manejo me- robus#

canizado, y en esos tala- .variabel
dros existe una concentra- - langtebig
ción de esfuerzos cortan- -, ,.
& "

tes y rasantes peligrosa:

en tercer lugar el alma no
7. ,'A,,, .
- .
--.... r
,>
I__ .
..-..
, * - - . - A . ,' - ' , r
convime que sea de un ta- ~
~
.. - - -z-:.
-3-1-7
blero de una oieza sino
formado por tres tableros, S-.- -,-
con sus fibras orientadas
per~endicularmente p a r a
estabilizarlos y evitar posi-
bles alabeos. Pero encolar
tanta superficie de tablero
es costoso, y en los fren-
tes de la viga siempre exis-
te el peliaro de que por las
uniones Denetre la humfe-
dad y desarme el alma en
sus comDonentes. con 10s
consiauientes efectos de-
sastrosos que ello supone,
emoez~ndo Por el acorta-
miento de la vida útil de la
viqa.
Respecto de las vigas tipo
Vierendeel. fabricadas por
ACROW - WOLFF, es evi-
dente su inferioridad técni-
ca respecto de las vigas de características mecánicas. y cordones de la
celosia, porque se trata de En el orden práctico, tan das. Esta disposi
una viqa incompleta a la importante en las obras, nomiza algo en
que le faltan las diagona- las vigas de celosía y las ahorra espacio o
les, y cuya resistencia se Vierendeel permiten, colo- desde luego no
confía al dudoso empotra- car las correas de atado plearse con vigas
miento e n t r e cordones a transversales, para formar llena.
través de anchos montan- paneles de encofrado, a tra- Otra consecuenci
tes. Estas viaas son dificr- vés de los huecos triangu- muy útii en obra
les de calcular meticulosa- lares que dejan las diaga- las vigas de celos
mente y sroducen mayores nales de las primeras, y de ten sujetar en su
flechas que las de celosía 1o s huecos rectangulares los andamios de
de análogas dimensiones y que forman los montantes indispensables pa
cánicas y funcionales, incluyen- rjo' q;e p r e c j s e ~ o s
mente de la posición tecnológi- para e/ /a tensió
do también, para mejor informa- ca de cada viga. De dicho gráfi- lo predominantie es e
ción del lector, las vigas metá- co 1, pueden smarse C O t ~ ~ c u e n -y cual para el mome
licas de encofrado conocidas en cias útiles a la hora de calificar Sea /a viga de /a figu
el mercado español, y más de Y definir el grado de aprovecha- luz 1 entre apoyos A
uno se llevará una gran sorpre- miento del material invertido ten da uniformemente co
sa al ver la superioridad de las
una viga. Pero antes es necesa- ga p Kp/m.
de madera sobre las met-ílicas.
Para que la comparació~,sea
Se sabe que:
homogénea y ci'entifica, hemos
ideado nelacionar el M,& y el Padm l2
Madm = de donde Padm =
Qadm &e cada viga con su peso
8
por metro lineal, p, deducien-
do así lo q u e denominamos Padm Qadm 2
*Momento especifico admisi- Qadm = A = B = de donde Padm =
2 1
b l e ~y #Cortante especifico ad-
misible~,y ellos nos medirán
por sus valores el grado de per-
fecci&@Ecnica de cada tipo o
modeli$'&-.., viga.

CUADRO N* 1.3.
- . -- .- - - - _ _ -
V I G A S DE MADERA

FABRICANTE
Y MARCA
WDELO DESCRIPCION
PESO
UNITARIO
~~ -NTO
h DE
E 5 CU * D R 1 A S CARACTERISTICAS
MECANICAS C

)iACIOU?CIDAD NAC1OML P cm INERCIA CORWNES DIAGONALES Madm Qadm M

cm
kp/m. I cm4 cm mkp kp
SAVZEX, S.A. STEIDLE- ST 73 Viga en c e l o s i a do
ESPANA TREGPR tipo - 6'8 36 26539 5,9x9,5 2/3x6 1500 1900

ARTUR SCHWURER Vigo en c e l o s í a --

WERK K@G
ALEMVIA
(E$ola) 1 70 \. con diagonaleí ma-
c i z a s t i p o Warren
7,8 36 27500 7x10 6x6 1600 1650

OSTERREICHISCHE Viga de d m a l l e n a
DOKA
DOKA sin rigidizadores (~lma)
AUSTRIA
Y 36
9,O 36 29942 5,4x10 3,l 1700 1700

PCROW-WOLFF AW 36
Viga de cordones
dobles t i p o V i e r e i
- 8,O 36 24500 2/3,5x92
(Fkntantes)
1,3 1350 1700
- ALEMYIA
deel.
35 Viga en c e l o s í a da
BUCHSBAUM
ALEMYIA
I 6/12
2x3/6
b l e a d i a g o n a l e s ;m
c i z a s t i p o Warren:
V I G A S
11,O 35 30000

M E T A L I C A S
6x12 2/3x6 1300 1125

HUMEBECK HUYUEBECK 4Z 27 Viga m e t á l i c o es-

ALEMANIA (~ecanatubc tampada t i p o Vie- 15,5 27 2100 3500
rendeel.
TALLERES ULMA Viga p a r t e estampa 7,5 20 825 1200
Tipo
S.C.I. JJEIP da y p a r t e de $ :e
Ligero
ESPA'IA celosía.
TALLERES ULMA
Tipo
Viga p a r t e estampa . ~.
S.C.1.
ESPANA
JJEIP Normal da y p a r t e de r e -
dondo en celosía.
9,9 29 . . 1200 1500

ACROW-WOLFF COMBI Vigas m e t 6 l i c a s er 30,0

ALEMANIA FORK celosía. 3256 6350

VALORES MALIMOS ENCONTRADOS PARA LAS CARACTERISTICAS ESPECIFICAS: VIGAS STEDILE-TREGAR

 -..-m Viga ACROW AZ 36 p=8, O K
determinados para cada viga,
que es para las vigas de madera
que son las que nos interesan

o bien
M*
--
Qaüm
-a -
P P
luego:
Qarnü = 1,lO M*

O sea, Maürn
-- - 0,9
Qaüm

y sustituyendo en la luz límite

encontrado antes, se obtiene su
valor medio, que es del orden
de

En efecto: supongamos una luz Fdrmula de la recta media y=1,25.x d b i e n E m = 7 , 2 5 . M

de cálculo entre apoyos A y B P P Y
de la figura 1.10, 1' < l. Enton- Simpl~ficando Qadm = 1.25 . Madm
En general Oodm= a. Madm
ces

I o sea, que
P 1'2 P llim2
M' =
8
< 8 M' =
Macim
- Y Q'=-
Q

S i 1' =- 1 4
Q' =
P . 1' < P . l~;,,, 2
de donde se deduce qu
2 2 1 < 3,6,el momento flecto
ciende más rápidamente
M' =
P . l2; Madm =
P l2 Madm
- 32
=
cortante, siendo este el
32 8
1
M' 8 zo predominante en el c
de las vigas para enco
Q' =
P . 1' ; Qadm =
P . l Qadm -
-
4
=
porque rara vez los ancla
I
tán colocados, sobre todo,
4 2 Q' 2 cofradas de muro, a 3,6
I metros.
 y estén situadas a
de la recta media
material está bien a
porque el limite d
cálculo a cortante,
ea* sea la mayor p
que están situadas
están mal diseñada
rial, por tanto, mal
El gráfico 1 no ha
corroborar la afirma
Gordon, en The New
Strong Materials, c
doctor ingeniero de
César Peraza Oram
ticulo titulado =La M
Propiedades.., apar
Boletin número 80,
julio-agosto de 197
a 16, que ..señala
como el material ut
hombre, en el que l
sistencia/peso esp
De lo precedente se deduoe en la práctica de los encofrados za los máximos va
una consecuencia lógica, y es hechos con paneles formados sean las cualidades
que el constructor de vigas de por tales vigas. cables en la mader
madera encolada, en el 90 por Otra consecuencia importante
100 de los casos debe atender
a que el cortante que sufran sus
vigas no rebase su Q a h , y sola-
mente en caso de que las vigas
trabajen horizontalmente p a r a --
OFERTA
soportar forjados, y sobre todo
cuando raras veces trabajan a para entrega sobre seis me
flexión como vigas extensibles,
el esfuerzo predominante será 1.200 m3 de Tablones de HAYA
el momento flector, pues aun en
estos casos la distancia entre 600 m3 de Tablones de ROBLE
apoyos no suele rebasar e l Iimi-
te calculado de 3,6 m., porque Calidad primera c
la reacción en los extremos su-
pera la carga soportable por los Interesados escribir a:
puntales de apoyo.
Así que afirmar que una viga
Gare de S
es más resisfiente que otra por-
que sus cordones tengan mayor ETS. L A FO R E T 19510 Mass
escuadria, no tiene razón de ser