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¿Qué es el ratio de liquidez?

En el devenir de su negocio las empresas contraen deudas que en un mayor o menor


período de tiempo tienen que devolver, como es lógico.
Es fundamental, por tanto, que su nivel de solvencia sea adecuado y no sólo ya para poder
cumplir con las obligaciones contraídas sino también para poder seguir recurriendo a la
financiación ajena en el futuro.

Pues bien, uno de los indicadores que mide este dato, pero referido al corto plazo es el
ratio de liquidez, que podemos definir de la siguiente forma:

El ratio de liquidez pone de manifiesto la capacidad de la empresa para hacer frente al


pago de sus deudas que vencen a corto plazo.

Y como lo que se pretende es analizar si la entidad tienes recursos disponibles en la


medida suficiente para afrontar sus obligaciones más inmediatas se hace poniendo en
relación estas dos partidas del balance de la entidad:

 El activo corriente, que está formado por los bienes y derechos que o son líquidos
(dinero en caja o en bancos) o se pueden hacer líquidos fácilmente (existencias,
cantidades que deben los clientes u otros deudores a corto plazo o inversiones
financieras a corto plazo).
 El pasivo corriente, que está formado por todas las deudas que vencen a corto
plazo, es decir, en un período de tiempo inferior a un año.

Ratio de liquidez: fórmula, interpretación y


valores óptimos
El ratio de liquidez se calcula aplicando la fórmula que veremos a continuación. También
te explicaré cómo se interpreta el resultado obtenido y cuál es su valor óptimo.

Fórmula 
Partiendo de los datos del balance de situación, el ratio de liquidez se calcula aplicando la
siguiente fórmula
 
Ratio de liquidez =   Activo Corriente / Pasivo Corriente
 
Los valores que se tienen en cuenta son:

 El activo corriente, que de todos los bienes y derechos que tiene la empresa sólo
comprende el dinero y aquellos otros que se pueden convertir en dinero con cierta
rapidez (existencias, cantidades que deben los clientes y otros deudores a corto
plazo e inversiones financieras a corto plazo).
 El pasivo corriente, que está formado por las deudas y obligaciones que vencen a
corto plazo, es decir, en un plazo inferior a un año.

Interpretación 
El ratio de liquidez indica cuantos soles tiene la empresa en bienes y derechos del activo
corriente por cada SOL que tiene de deuda a corto plazo.

Por ejemplo, si el ratio de solvencia es de S/. 3,70, quiere decir que la empresa cuenta en
su activo corriente con S/. 3,70 por cada SOL que tiene de deuda que vence en menos de
un año.

Valores óptimos 

Se entiende que el ratio de liquidez tiene un valor óptimo cuando está en torno al 1,00.

Esto quiere decir que:

 Si el resultado es inferior a 1,00 la entidad no cuenta con la solvencia adecuada


para hacer frente a su deuda a corto plazo.
 Si el resultado es superior a 1,00 la entidad sí que posee circulante suficiente para
cumplir con sus obligaciones más inmediatas. Pero cuidado: un resultado muy por
encima de la unidad indicaría un exceso de bienes sin invertir y, por tanto, sin ser
productivos, lo que se llama “exceso de recursos ociosos”.

Hay que tener en cuenta que estos valores son orientativos y que pueden variar
bastante de un sector a otro, o de un tipo de empresa a otro.

En la práctica, para determinar si el resultado es el adecuado habrá que tener en cuenta


la idiosincrasia propia de la entidad que se esté analizando y de su entorno económico.
Cómo mejorar el ratio de liquidez
Acabamos de ver que, a priori, un valor bastante aceptable del ratio de liquidez sería
alrededor de 1.
Es decir: el importe del activo corriente debe ser más o menos igual al del pasivo corriente
para entender que la entidad cuenta con la liquidez adecuada.
Teniendo esto en cuenta, la respuesta a la pregunta cómo mejorar el ratio de
liquidez de una empresa va a depender, fundamentalmente, de dos variables:

 El resultado del que se parte. 


 Y el objetivo que se pretende alcanzar.

Es obvio:

Si el valor del ratio de liquidez del que partimos es inferior al que se quiere conseguir las
medidas a adoptar para mejorarlo serán justamente las contrarias a las que se deberían
aplicar si, por el contrario, lo que necesitamos es “bajar” su importe actual.

Y esto es así tanto si el objetivo es acercarnos a 1 (por ser el valor que, en términos
generales, se considera óptimo para éste índice) como si el valor que estimamos
razonable es otro (1,2 o 1,7 o 2 o el que sea más adecuado a las características de la
empresa y al sector económico al que pertenece).

Distinguimos, por lo tanto, estas dos situaciones y lo haremos tomando 1 como valor a
alcanzar:

1.- El ratio de liquidez es muy superior a 1.

Esto indica que el activo corriente está sobredimensionado al ponerlo en relación con el
importe de las obligaciones a las que la empresa tiene que hacer frente en el corto
plazo.

Alcanzar el índice de liquidez adecuado pasa por reducir el monto de ese capital, con el
fin de no tener tanta cantidad de “fondos ociosos”.

Algunas opciones pueden ser:

Invertir el exceso de recursos disponibles en activos fijos o en inversiones financieras a


largo plazo con las que obtener una rentabilidad interesante.

 Cancelar deuda con vencimiento superior a un año (baja el activo corriente y el


pasivo no corriente, mientras que el importe del pasivo corriente se mantiene).
 Repartir dividendos o devolver aportaciones realizadas por los socios (baja el
activo corriente y el patrimonio neto).
2.- El ratio de liquidez está por debajo de 1.

Aquí la situación es la contraria: la entidad no cuenta con recursos líquidos suficientes


para hacer frente a las deudas y obligaciones que vencen en el corto plazo.

Para acercarnos a la igualdad entre las dos masas patrimoniales habría que: o bien
aumentar el activo corriente, o bien disminuir el pasivo corriente o bien aplicar ambas
medidas.

Se podría, por ejemplo:

 Conseguir un aumento en el plazo de vencimiento de las deudas para que parte


de ellas puedan pagarse en un plazo superior al año (así disminuye el pasivo
corriente y aumenta el no corriente).
 Liquidar algunos activos fijos o inversiones a largo plazo para aumentar los
fondos líquidos (aumenta el activo corriente y disminuye el activo fijo).
 Aumentar el disponible mediante aportaciones de los socios (aumenta el activo
corriente y el patrimonio neto).

Ratio de liquidez: ejemplos


A continuación, se plasma dos ejemplos que te ayudarán a tener más claro cómo se
calcula e interpreta este indicador.

Ejemplo 1 

“CRACK S.A.” es una compañía que se dedica a la fabricación y venta de ropa deportiva. 
Ha recibido un préstamo de uno de los socios por importe de 40.000 soles y tiene que
devolverlo dentro de 7 meses. El director financiero se está planteando la posibilidad de
cancelar la deuda con un préstamo que pediría al banco y que ya sería a devolver a largo
plazo.

Para tomar una decisión necesita saber el ratio de liquidez de la empresa.

Los datos de la entidad son los siguientes:

 
Inmovilizado 30.000 80.000
Capital social
intangible

Inmovilizado Material 145.000 Reservas 140.000

Existencias 40.000 Deudas a largo plazo 50.000

Cuentas por cobrar 30.000 Deudas a corto plazo 75.000

Otros deudores 68.000

Caja 32.000

Total Activo 345.000 Total Patrimonio Neto y Pasivo 345.000

NOTA: El INMOVILIZADO INTANGIBLE Y EL INMOVILIZADO MATERIAL FORMAN PARTE DEL


ACTIVO NO CORRIENTE, entre sus partidas tenemos:

INMOVILIZADO INTANGIBLE
Gastos de investigación y desarrollo: inversión realizada para el estudio original y
planificado con ánimo de descubrir nuevos conocimientos en los ámbitos científico y
técnicos, además de en la aplicación concreta de los logros conseguidos en la
investigación hasta que se comienza la producción y venta.

Concesiones administrativas: gastos realizados para conseguir derechos de investigación


o de explotación proporcionados por las distintas administraciones públicas.

Propiedad industrial: inversión realizada por la propiedad o por el derecho al uso, o a la


concesión de la utilización de las diferentes manifestaciones de la propiedad industrial.
Incluye patentes, marcas, nombres comerciales, dibujos industriales y artículos, signos
distintivos de producción y las diferentes manifestaciones presentes en la legislación
específica de propiedad industrial.
Fondo de comercio: hace referencia al conjunto de bienes inmateriales como la razón
social, clientela y otros elementos de semejante naturaleza que implique valor para la
empresa. Aparecerá en la contabilidad de la compañía cuando la adquisición se haya
hecho a título oneroso.

Aplicaciones informáticas: gasto hecho por la propiedad o por el derecho al uso de


programas informáticos.

Derechos sobre bienes en régimen de arrendamiento financiero: valor del derecho de


utilización y de compra sobre los bienes que usa la compañía en régimen de
arrendamiento financiero o leasing, cuando la empresa haya ejercitado o tenga intención
de ejercitar la opción de compra de un bien adquirido.

INMOVILIZADO MATERIAL
Terrenos y bienes naturales: solares urbanos, fincas rústicas y otros terrenos no urbanos,
así como canteras y minas.

Construcciones: Edificaciones: pisos, naves, locales, que estén destinados a la actividad


productiva.

Instalaciones técnicas: grupos de bienes de distinta naturaleza (inmuebles, maquinaria,


equipos informáticos y otros elementos) que forman una unidad productiva especializada
por lo que, aunque estén formados por elementos separables, están definitivamente
unidos por su uso y puedan someterse al mismo ritmo de amortización. En él se incluirán
sus repuestos y recambios.

Maquinaria: máquinas y bienes de equipo que necesitamos y utilizamos para la


elaboración o extracción de nuestros productos.

Utillaje: herramientas o utensilios que se utilizan junto con la maquinaria.

Otras instalaciones: Elementos diferentes ligados definitivamente por el proceso


productivo y que puedan amortizarse al mismo ritmo.

Mobiliario: muebles y material y equipos de oficina de uso a largo plazo.

Equipos para procesos de información: Ordenadores y programas informáticos y sus


accesorios.

Elementos de transporte: todo tipo de vehículos, tanto terrestres (coches, camiones,


remolques, etc.) como marítimos o aéreos que se puedan utilizar para el transporte de
mercancías, personas, animales o materiales.
Otro Inmovilizado material: elementos del inmovilizado material que no se puedan
encuadrar en los anteriores puntos. Aquí se encuentran los envases o embalajes cuando
deban considerarse inmovilizado, así como los repuestos del inmovilizado cuyo ciclo de
uso sea superior a un año.

Partiendo de estos datos:

Ratio de liquidez = Activo corriente / Pasivo corriente = 170.000 / 75.000 = 2,26

Criterios: El valor ideal del ratio de liquidez está en torno a 1. Con los datos del balance se
ve que “CRACK S, A.” tiene sobredimensionado el activo corriente, por lo que no tiene
necesidad de transformar una deuda a corto plazo en otra a largo plazo.

Es más, debería plantearse algún tipo de inversión para rentabilizar parte de esos recursos
que no están reportando beneficio alguno.

 Ejemplo 2 
En “TRIMASA S.A” la junta de accionistas se celebra el mes que viene y uno de los puntos
del día es la posible distribución de un dividendo extraordinario. El administrador ha
pedido un informe sobre el ratio de liquidez de la entidad para ver la viabilidad de tal
reparto.

Los datos del balance son los siguientes:

Activo no corriente 370.000 Patrimonio neto 200.000

Activo corriente 430.000 Pasivo no corriente 150.000

Pasivo corriente 450.000

Partiendo de estos datos:

Ratio de liquidez = Activo corriente / Pasivo corriente = 430.000 / 450.00 = 0,96


El resultado está algo por algo por debajo de 1. En principio no debe ser un problema
porque se acerca bastante, pero hacer una distribución de dividendos extraordinaria sí
que sería arriesgado porque supondría bajar el activo corriente y, por lo tanto, el ratio de
liquidez sería aún más bajo.

Ratio de liquidez inmediata


El ratio de liquidez inmediata también se conoce con el nombre de Ratio de
disponibilidad y al igual que el ratio de liquidez general también analiza la capacidad de la
empresa para cumplir con sus obligaciones de pago a corto plazo, pero se diferencia de él
en que sólo tiene en cuenta el líquido con el que cuenta la entidad, es decir, el dinero que
tiene en el banco o en la caja.

Con esto lo que se determina es el importe de dinero efectivo que posee la empresa por
cada SOL de deuda a corto plazo.

Como ejemplo, si el ratio de liquidez inmediata es de 0,80 significa que la empresa cuenta
con S/. 0,80 en dinero contante y sonante por cada SOL de deuda que vence en un plazo
inferior a un año.

Se calcula aplicando la siguiente formula:

Ratio de liquidez inmediata (o ratio de disponibilidad) =   Efectivo / Pasivo corriente

Es muy complicado establecer un valor óptimo del ratio de liquidez inmediata porque la
tesorería de la empresa suele fluctuar mucho a lo largo del ejercicio. Aun así, los expertos
señalan un importe de 0,30 como resultado adecuado.

¿Qué mide el ratio de solvencia?


 
El ratio de solvencia mide la capacidad de la empresa para hacer frente al pago de todas
sus deudas y obligaciones.

Eso es exactamente lo que pone de manifiesto este ratio: si el importe de los bienes y
derechos de la entidad es suficiente como para cancelar todas sus deudas y obligaciones
con un nivel de riesgo adecuado.

Y se hace de la forma más evidente, que es poniendo en relación el activo con el pasivo.
Porque como ya sabrás:

 El activo es el conjunto de bienes y derechos: lo que la empresa tiene, y


 El pasivo son las deudas y obligaciones: lo que la empresa debe.

Son estas dos magnitudes las que barajan porque son las dos únicas que interesan: bienes
y deudas.

Por eso, el patrimonio neto (que es la otra masa patrimonial que forma el balance de
situación junto con el activo y el pasivo) no se tiene en cuenta para calcular el ratio de
solvencia.

Diferencia con el ratio de tesorería «prueba


acida»
Tanto el ratio de solvencia como el de tesorería ponen de manifiesto la capacidad de la
empresa para hacer frente a sus deudas, pero mientras que el de solvencia compara el
total de los bienes con el total de las deudas, el de tesorería sólo contempla el nivel de
solvencia más inmediato: relación entre los bienes más líquidos de la empresa con
respecto a las deudas a corto plazo.

Ratio de solvencia: fórmula, interpretación


y valores óptimos
 

Ya que sabemos lo que es el ratio de solvencia vamos a aprender a calcularlo, a


interpretarlo y a determinar si su valor es el óptimo.

Fórmula 
Partiendo de los datos del balance de situación, el ratio de solvencia se calcula aplicando
la siguiente fórmula

Ratio de solvencia =   Activo / Pasivo

Los valores que se tienen en cuenta son:

 El activo total, que engloba tanto a activo no corriente como al activo corriente.
 El pasivo total, que está integrado por el pasivo corriente y el pasivo no corriente.

Interpretación 

El ratio de solvencia indica cuantos SOLES tiene la empresa, entre bienes y derechos, por
cada SOL que tiene de deuda.

Por ejemplo, si el ratio de solvencia es de 2,0 quiere decir que la empresa cuenta en su
activo con S/. 2,00 por cada SOL que tiene de deuda.

Valores óptimos 

El mismo valor de un ratio puede ser muy adecuado para unos casos y nada pertinentes
para otros porque cada empresa tiene sus propias características y funciona dentro de un
sector con sus propias particularidades, incluso la localización geográfica puede ser un
factor determinante en algunos casos.

Aun así, los expertos señalan ciertos resultados como valores óptimos y adecuados para
las empresas en general.

Para el ratio de solvencia se establece un valor óptimo en torno al 1,50 de forma que:

Si el resultado es inferior a 1,50 indica que el nivel de solvencia de la empresa no es


suficiente, y mientras más bajo sea más desconfianza puede generar en los acreedores o
posibles acreedores.

Si el resultado es superior a 1,50 la posición de los acreedores estará muy fortalecida,


pero, sin embargo, puede denotar que existe un exceso de activos improductivos lo cual
no es nada aconsejable.

Cómo mejorar el ratio de solvencia


Frente a un resultado inadecuado nos podemos encontrar ante la necesidad de
determinar cómo mejorar el ratio de solvencia.

Hemos visto que, en términos generales, su valor óptimo está en torno al 1,50, es decir,
que debe haber como S/. 1,50 de activo por cada SOL de pasivo. Y que para calcular este
dato sólo se utilizan esos dos elementos: el importe del activo y el del pasivo.

Pues bien, como podemos querer mejorarlo tanto porque sea alto como porque sea bajo,
las posibilidades para conseguirlo pasan, necesariamente, por:

 Aumentar el monto del activo o disminuir el del pasivo, si el ratio de solvencia es


inferior a 1,50 (o a cualquier otro que, por las características de la empresa o del
sector al que pertenece, sea más apropiado).
 Disminuir el importe del activo o aumentar el del pasivo, si el ratio es superior a
1,50 (o al que se tome como referencia).

Veamos, a continuación, algunas opciones para poder llevar ésto a la práctica:

1.- El ratio está por debajo del deseado y se pretende subirlo. Se puede:

 Realizar una ampliación de capital con nuevas aportaciones de los socios, lo que
hará aumentar el activo.
 Realizar una ampliación de capital con nuevas aportaciones de los socios que se
emplee en saldar parte de las deudas, con lo que disminuirá el pasivo.
 Intentar conseguir un incremento de los beneficios del negocio y que se destine a
subir el importe del activo o a cancelar deudas del pasivo.
 Dar entrada como socios a acreedores de la entidad transformando el importe de
su deuda en aportación al capital social, con lo que el pasivo disminuye.
2.- El ratio está por encima del deseado y se pretende bajar. Se puede:
 Distribuir dividendos a los socios, con lo que disminuye el activo.
 Devolver aportaciones realizadas por los socios, que también provocará la
disminución del activo.
 Adquirir más bienes y servicios a crédito en lugar de pagarlos al contado, con lo
que aumentaría el pasivo (y se podría invertir parte del activo para obtener más
rentabilidad).
 

Ejemplos de ratio de solvencia


Con unos ejemplos siempre se entiende mucho más claramente cualquier concepto, para
lo cual se desarrollará dos de ellos.

Ejemplo 1 

En “PRECIO UNO” tienen intención de ampliar sus instalaciones y para ello necesitan un
préstamo bancario. Antes de llevar a cabo la operación deben analizar si la composición
de su balance de situación es la adecuada para poder obtener más financiación ajena de la
que ya tienen.

Inmovilizado intangible 10.000 Capital social 17.000

Inmovilizado material 20.000 Reservas 3.000

Existencias 5.000 Deudas a largo plazo 30.000

Clientes 16.000 Deudas a corto plazo 22.000

Otros deudores 13.000

Tesorería 8.000

Total Activo 72.000 Total Patrimonio Neto y Pasivo 72.000

Se pide calcular e interpretar su ratio de solvencia a partir de los siguientes datos:

Ratio de solvencia = Activo / Pasivo = 72.000 / 52.000 = 1,38

Dado que el valor óptimo de este ratio está en torno al 1,50 un resultado de 1,38 está por
debajo de lo deseable e indica que existe un exceso de deuda. Para equilibrar la
proporción entre el activo y las deudas habría que aumentar los fondos propios de la
entidad, por ejemplo, con aportaciones de los socios o manteniendo los próximos
beneficios sin distribuir.

 Ejemplo 2 
“Caterpillar S.A.” se dedica a la venta de maquinaria agrícola. Tiene 400.000 soles en un
plazo fijo bancario (utilidades del año pasado) por el que apenas recibe rentabilidad y se
está planteando proponer en la Junta General de accionistas una distribución de
dividendos. Los administradores aplican un estricto control financiero así que antes de
plantear la operación necesitan saber si sería factible sin que se vea perjudicado el nivel
de solvencia recomendable.

Se pide calcular el ratio de solvencia de la entidad y determinar la conveniencia o no de


distribuir dividendos teniendo en cuenta los siguientes datos:

Activo no corriente 200.000 Patrimonio neto 500.000

Activo corriente 600.000 Pasivo no corriente 150.000

Pasivo corriente 150.000

Ratio de solvencia = Activo / Pasivo = 800.000 / 300.00 = 2,6

El ratio de solvencia que presenta la entidad está muy por encima del recomendado (1,50)
por lo tanto no hay ningún problema en distribuir dividendos entre los socios.

El importe máximo a repartir sin poner en riesgo la solvencia sería de unos 350.000 soles.
Si se repartiera esta cantidad los datos serían:

Activo no corriente = 200.000

Activo corriente = 250.000

Por lo que el ratio de solvencia posterior sería:  450.000 / 300.000 = 1,50

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