Inflamación de los ganglios linfáticos en la que los agentes patógenos que
intervienen pueden ser cualquier bacteria, virus, hongos, protozoos o rickettsia, que penetra en los conductos linfáticos a través de una herida. Algunas infecciones como tularemia, peste, herpes genital, sífilis, linfogranuloma venereo, TBC, producen linfadenitis local. La mononucleosis, la infección por citomegalovirus, toxoplasmosis, brucelosis o histoplasmosis, producen linfadenitis generalizada. La anatomía patológica de las adenopatías implica la presencia de edema e infiltración leucocitaria.
LINFADENITIS Y MEDICINA BIOLÓGICA
En Medicina Tradicional China se entienden las inflamaciones de los
ganglios linfáticos no como el resultado de un ataque azaroso de un agente u otro, sino como la expresión de una hipersensibilidad a toxinas de origen bacteriano u otro que de por sí no tienen porque agredir, si no se las reconoce, inmunitariamente, de forma excesiva. Es decir, Calor Tóxico. A este terreno se asocia otro de Estancamiento de Sangre y Energía (Qi), que termina de constituir todo el cuadro.
TRATAMIENTO BIOLÓGICO:
B-3, B-3QH (Estancamiento de Qi y Sangre) y B-1 (Calor Tóxico).