Está en la página 1de 6

Med Clin (Barc).

2018;150(8):317–322

www.elsevier.es/medicinaclinica

Revisión

Aproximación diagnóstica y terapéutica de las crisis hipertensivas


Guillermo Arbe a , Irene Pastor b y Jonathan Franco a,∗
a
Servicio de Medicina Interna, Unidad de riesgo cardiovascular, Hospital universitario Quirón Dexeus, Barcelona, España
b
Servicio de Enfermería, Unidad de riesgo cardiovascular, Hospital universitario Quirón Dexeus, Barcelona, España

información del artículo r e s u m e n

Historia del artículo: La hipertensión arterial es un problema de elevada prevalencia en la población mundial. Las crisis
Recibido el 21 de agosto de 2017 hipertensivas son las formas agudas de presentación y representan un motivo frecuente de consulta
Aceptado el 14 de septiembre de 2017 en urgencias y atención primaria.
On-line el 24 de noviembre de 2017
Las crisis hipertensivas se dividen en emergencias hipertensivas y urgencias hipertensivas, según exista
o no daño agudo en órgano diana, respectivamente. Cada situación tiene un pronóstico y tratamiento
Palabras clave: diferente, siendo las emergencias hipertensivas potencialmente graves, requiriendo por lo general reduc-
Hipertensión arterial
ciones rápidas de la presión arterial. Por el contrario, las urgencias hipertensivas podrían ser tratadas
Crisis hipertensiva
Emergencia hipertensiva
ambulatoriamente, reduciendo la presión arterial en horas o días.
Urgencia hipertensiva En un número elevado de pacientes que consultan por una crisis hipertensiva no existen antecedentes
de diagnóstico de hipertensión arterial, por lo que es importante incrementar los controles periódicos de
la presión arterial en la comunidad.
© 2017 Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados.

Diagnostic and therapeutic approach to the hypertensive crisis

a b s t r a c t

Keywords: High blood pressure is a problem with elevated prevalence in the world population. The acute forms
High blood pressure of presentation are “hypertensive crises,” which represent a frequent cause for emergency room and
Hypertensive crises primary care consultations.
Hypertensive emergency
Hypertensive crises are divided into hypertensive emergencies and hypertensive urgencies, depending
Hypertensive urgency
on whether or not there is acute damage to the target organ, respectively. Each situation has a different
prognosis and treatment. More specifically, hypertensive emergencies are potentially serious and usually
require rapid reductions in blood pressure, whereas hypertensive urgencies can be treated as outpatients
by reducing blood pressure in hours or days.
A significant number of patients who consult medical professionals regarding a hypertensive crisis
do not have a prior diagnosis of hypertension; therefore, it is important to periodically monitor blood
pressure levels in the community.
© 2017 Elsevier España, S.L.U. All rights reserved.

Introducción consulta más frecuentes, tanto en atención primaria como en los


servicios de urgencias hospitalarias1,2 .
La hipertensión arterial (HTA) es un problema de salud con alta En España, la HTA es una enfermedad de elevada prevalencia.
prevalencia en todo el mundo. Es considerado uno de los principa- Estudios como el ENRICA y el DI@BETES estiman una prevalencia
les factores de riesgo cardiovascular, siendo uno de los motivos de entre el 33 y el 43%, respectivamente. En estas cohortes, aproxi-
madamente la mitad de los sujetos no eran conocedores de su
enfermedad3,4 . Estas cifras son muy relevantes, dado que la HTA
es un trastorno que a día de hoy es responsable, según la Organiza-
∗ Autor para correspondencia. ción Mundial de la Salud, de 7,1 millones de muertes al año, a pesar
Correo electrónico: Jonathan.franco@quironsalud.es (J. Franco). de ser una enfermedad prevenible y tratable5 .

https://doi.org/10.1016/j.medcli.2017.09.027
0025-7753/© 2017 Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados.

Descargado para Anonymous User (n/a) en New Granada Military University de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 07, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
318 G. Arbe et al. / Med Clin (Barc). 2018;150(8):317–322

Con respecto a las crisis hipertensivas (CH), se dividen en emer- Tabla 2


Emergencias hipertensivas, según lesión aguda de órgano diana
gencias hipertensivas (EH) y urgencias hipertensivas (UH), según
esté presente o ausente una lesión aguda de órgano diana, res- Órgano Tipo de lesión aguda
pectivamente. Las alteraciones estructurales y/o fisiológicas en los Cerebro Accidente isquémico transitorio, accidente
órganos diana pueden ser en corazón, cerebro, riñón, retina y arte- cerebrovascular isquémico accidente cerebrovascular
rias. Se han descrito cohortes con una prevalencia de EH desde el 2 al hemorrágico, encefalopatía hipertensiva
27%6,7 . En un estudio multicéntrico italiano se incluyeron 333.407 Corazón Edema agudo de pulmón, insuficiencia cardiaca aguda,
síndrome coronario agudo
pacientes admitidos en el servicio de urgencias, en los cuales un
Vasos sanguíneos Disección aórtica aguda, anemia hemolítica
total de 1.546 fueron diagnosticados de CH y 391 presentaron EH microangiopática
(25%), destacando que hasta un 23% de estos pacientes carecía de Riñón Insuficiencia renal aguda
historia previa de HTA o la desconocía8 . Retina Hemorragias y exudados algodonosos, edema de papila
El objetivo de esta revisión es actualizar los aspectos clínicos y Útero Preeclampsia, eclampsia, síndrome de HELLP

terapéuticos de las CH. En la práctica clínica habitual los servicios HELLP: hemólisis, elevación de enzimas hepáticas, trombocitopenia.
de urgencias hospitalarias tienen cada vez más demanda asisten-
cial, y es conveniente que los profesionales sanitarios identifiquen,
realicen una correcta anamnesis, exploración física y tratamiento del desencadenante, y sus cifras de PA por lo general son meno-
en un escenario tan frecuente como las CH. Esto mejoraría la res que las observadas en las verdaderas CH. El tratamiento de las
atención global de este trastorno y probablemente optimizaría la pseudo CH es a base de reposo en decúbito supino y el tratamiento
dinámica, evitando estancias largas e innecesarias en los servicios de la causa desencadenante, siendo recomendable un seguimiento
de urgencias. ambulatorio para confirmar o descartar HTA13 .
Debemos tener en cuenta, dentro de las CH, un subgrupo espe-
Definiciones cial como es el de las EH del embarazo, que se definen como la
elevación aguda de la PAS ≥ 160 mmHg y/o PAD ≥ 110 mmHg por
La HTA se define como la elevación crónica de las cifras de pre- un periodo mayor a 15 min y además con capacidad de producir
sión arterial sistólica (PAS) ≥ 140 mmHg y presión arterial diastólica daño agudo a órganos diana: preeclampsia, síndrome de HELLP
(PAD) ≥ 90 mmHg, y se clasifica en diferentes grados según las cifras (hemólisis, elevación de enzimas hepáticas, trombocitopenia) y
que presente durante el diagnóstico (tabla 1). eclampsia14,15 .
Las CH, por su parte, se definen como el aumento agudo de la
PAS ≥ 180 mmHg y de la PAD ≥ 120 mmHg, capaz de producir daño
agudo a órganos diana, cifras propuestas tanto por el comité para Diagnóstico
prevención, detección, evaluación y tratamiento de HTA (JNC VII)9
como por las guías de las sociedades europeas de hipertensión y La evaluación inicial del paciente que acude por una CH en
cardiología en 2013, vigentes hasta el día de hoy6 . muchos hospitales es iniciada por los profesionales de enferme-
Las CH se han dividido históricamente en 2 grupos: EH y UH, ría, ya sea en el triaje de un servicio de urgencias, en una planta de
y cada uno de ellos tiene un tratamiento y pronóstico diferen- hospitalización o en una consulta de atención primaria, por lo cual
tes. Así, la presión arterial (PA) en las UH puede ser controlada se debe trabajar de manera multidisciplinar en el aprendizaje de
en horas o días con fármacos administrados por vía oral y síntomas y signos de alarma para la identificación precoz y evitar
ambulatoriamente10 . Por el contrario, las EH (tabla 2) requieren los daños directos a órganos diana con el equipo médico.
un control estricto en minutos a horas, por lo general con fármacos Es básico llevar a cabo una historia clínica dirigida a la posible
administrados por vía intravenosa. causa, incluso en pacientes que acuden con cifras menores a la defi-
Dentro de la clasificación de las CH tenemos además las llamadas nición de CH, teniendo en cuenta que el daño agudo a órganos diana
falsas CH o pseudo CH, que se definen como elevaciones transito- depende de la rapidez de instauración de la crisis y del porcentaje
rias de la PA debido a estímulos externos (dolor, retención urinaria, de elevación de PA con respecto a su basal, con lo cual podría pre-
ansiedad, estrés, entre otros), sin evidencia de daño agudo a órganos sentarse EH con cifras tensionales menores a las propuestas por las
diana. También son clasificados en este grupo los pacientes con HTA guías. Se debe interrogar al paciente sobre episodios de HTA en el
clínica aislada o «HTA de bata blanca», y los defectos en la técnica pasado, medicación concomitante o desencadenante, como antiin-
de medición de la PA. Estudios de prevalencia observan un elevado flamatorios no esteroideos, drogas recreativas, historia de apneas
porcentaje de las pseudo CH, llegando a ser del 24 al 43% en trabajos de sueño y presencia de algún otro factor de riesgo cardiovascular;
hospitalarios, y hasta en 91% en trabajos extrahospitalarios11,12 . En así mismo, síntomas o signos que nos hagan sospechar una HTA
su presentación clínica suelen prevalecer los síntomas y síntomas secundaria16 (tabla 3).
Los síntomas de las CH varían ampliamente, desde pacientes
asintomáticos o con síntomas inespecíficos, como cefalea, mareos,
Tabla 1
Clasificación de la hipertensión arterial, según las Sociedades Europeas de Hiperten- vómitos y palpitaciones, hasta afectación aguda de órganos diana17 .
sión y Cardiología La exploración física debe ser detallada, priorizando la auscul-
tación cardiaca, troncos supraaórticos y abdominales en búsqueda
Categoría Sistólica Diastólica
(mmHg) (mmHg)
de soplos que sugieran daño arterial y/o aneurismas. Así mismo,
se deben evaluar pulsos periféricos, déficit neurológico o encefa-
Nivel de presión arterial
lopatía hipertensiva (náuseas, vómitos, alteración del estado de
Óptima < 120 y < 80
Normal 120-129 y/o 80-84 conciencia). Se ha de hacer hincapié en el fondo de ojo, quizás algo
Normal alta 130-139 y/o 85-89 olvidado, a pesar de ser una de las exploraciones más útiles en este
Hipertensión arterial
escenario, ya que nos ayuda a descartar retinopatía hipertensiva18 ;
Grado 1 140-159 y/o 90-99 además, es importante valorar el resto de signos vitales, como satu-
Grado 2 160-179 y/o 100-109 ración de oxígeno y frecuencia cardiaca. En estudios recientes se
Grado 3 ≥ 180 y/o ≥ 110 ha visto que las EH se presentan habitualmente con frecuencias
Sistólica aislada ≥ 140 y < 90
cardiacas más elevadas que las UH, siendo la taquicardia un signo
mmHg: milímetros de mercurio. clínico asociado a insuficiencia ventricular izquierda aguda en el

Descargado para Anonymous User (n/a) en New Granada Military University de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 07, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
G. Arbe et al. / Med Clin (Barc). 2018;150(8):317–322 319

Tabla 3 cardiovasculares entre el grupo tratado con medicación oral en


Causas de hipertensión arterial secundaria que pueden desencadenar crisis
urgencias, frente a los que fueron dados de alta a domicilio sin
hipertensivas
tratamiento agudo21,22 .
Causas Síntomas y antecedentes clave En la bibliografía actual no se profundiza en el tratamiento de las
Drogas y fármacos Hipertensión de rebote por suspensión de UH y no existe un consenso ni un protocolo estricto a seguir. En el
hipotensores, anticonceptivos orales, nebulizadores «escenario ideal», los pacientes que acudan con UH, antes de admi-
nasales vasoconstrictores, cocaína, anfetaminas, nistrarles fármacos, deberán mantenerse en reposo, de preferencia
esteroides anabolizantes, glucocorticoides y
en decúbito supino, por un periodo de 30-45 min. Lamentable-
mineralocorticoides
Renal Historia de enfermedad renal, infección del tracto mente, los departamentos de urgencias en nuestra práctica clínica
urinario, hematuria, abuso de analgésicos (enfermedad habitual están colapsados y en este ambiente es difícil de aplicar; sin
del parénquima renal) embargo, diferentes estudios muestran reducciones de las cifras de
Endocrinas Feocromocitoma, síndrome de Cushing,
PAS ≥ 20 mmHg y PAD ≥ 10 mmHg hasta en un 32% de los pacientes
hiperaldosteronismo primario, síndrome carcinoide,
tumor secretor de renina, hipertiroidismo con esta medida23,24 .
Neurológicos Hipertensión endocraneal, accidente cerebrovascular La decisión de utilizar medicamentos varía notablemente según
hemorrágico o isquémico, traumatismo las circunstancias; si se trata de un primer episodio de HTA, podre-
craneoencefálico, apnea del sueño, porfiria aguda, mos utilizar cualquier fármaco siguiendo las recomendaciones de
disautonomiı́a familiar, intoxicación por plomo,
las actuales guías, si por el contrario es un paciente con HTA ya cono-
síndrome de Guillain-Barré
Otros Estrés agudo (incluido cirugiı́a), hiperventilación cida, incentivamos la adherencia al tratamiento y optimizamos la
psicógena, quemaduras, abstinencia de alcohol, dosis o añadimos un nuevo fármaco.
preoperatorio En la elección del tratamiento se recomiendan antihiperten-
sivos de acción corta, preferentemente la vía oral frente a la
sublingual, por tener una acción más lenta9 . Además, se debe
contexto de EH, más concretamente una frecuencia cardiaca mayor individualizar y dependerá de las características de cada paciente
de 100 latidos/min19 . (enfermedades concomitantes, edad, tratamiento habitual, entre
Las pruebas complementarias serán orientadas a buscar daño otras). Entre las posibilidades farmacológicas se incluyen los diu-
agudo en órganos diana y deberán individualizarse según el réticos de asa, los betabloqueantes y los antagonistas del calcio
paciente: electrocardiograma, radiografía de tórax, pro-péptido (tabla 4).
natriurético cerebral, para descartar signos de insuficiencia car- Como norma general, la PA en las UH se debe reducir entre en 20-
diaca y/o edema agudo de pulmón, análisis de orina (hematuria 25% en las primeras horas o días, considerándose PAS ≤ 160 mmHg
y proteinuria), enzimas cardiacas en caso de sospecha de síndrome y/o PAD ≤ 100 mmHg cifras seguras para continuar el manejo
coronario agudo, tomografía axial computarizada (TC) de cráneo si ambulatorio. Es importante el control del paciente en las siguien-
hay déficit neurológico, angio-TC torácica y/o ecocardiograma dop- tes 48-76 h para un seguimiento evolutivo y conseguir cifras de PA
pler si hay sospecha de disección aórtica. En las EH los órganos más óptimas.
afectados suelen ser cerebro (accidente cerebrovascular), edema No se ha demostrado la superioridad de un fármaco con res-
agudo de pulmón y encefalopatía hipertensiva20 . pecto a otro. En algunos pacientes, sobre todo en las pseudo CH, se
pueden utilizar ansiolíticos como benzodiacepinas, y también en
Tratamiento situaciones especiales, como crisis hiperadrenérgicas, las cuales se
benefician de la combinación de antihipertensivos con benzodia-
Urgencias hipertensivas cepinas.
El presente y el futuro de la salud del sistema cardiovascular
Hay que destacar que muchos de los pacientes que acuden a están enfocados en la prevención primaria y secundaria. Con esta
los servicios de urgencias con cifras de PA elevadas se encuentran premisa, los profesionales tanto de medicina como de enfermería
asintomáticos y no requieren medidas agresivas, ya que el des- deben, desde atención primaria, incentivar al paciente para adoptar
censo brusco de la PA podría generar isquemia en órganos como un estilo de vida saludable junto a medidas de autocuidado; con
corazón y cerebro, acostumbrados a cifras tensionales elevadas, esto mejora la detección rápida de cualquier síntoma orientativo de
fenómeno conocido como autorregulación5,9 . Estudios retrospecti- UH o EH, y mejor aún, se previene el mal control de este trastorno
vos de pacientes con diagnóstico de UH no encontraron diferencias donde los buenos hábitos de vida juegan un papel fundamental en
en la mortalidad a 6 meses, reconsultas a urgencias o epidodios el tratamiento.

Tabla 4
Principales fármacos administrados vía oral y sus propiedades, utilizados en el tratamiento de las urgencias hipertensivas

Fármaco Dosis Tiempo de Duración Efectos adversos


máxima acción

Antagonistas de los canales de calcio


Amlodipino 5-10 mg 6-12 h 35-50 h Cefalea, edemas,
Lacidipino 2-4 mg 0,5-3 h 13-19 h intolerancia digestiva,
palpitaciones
Betabloqueantes
Labetalol 100-200 mg 0,5-4 h 8-14 h Cefalea, náuseas,
Bisoprolol 2,5-5 mg 2-4 h 9-12 h hipotensión,
Carvedilol 12,5-200 mg 1-2 h 16-20 h bradicardia, diarrea

Inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina


Captopril 25-50 mg 0,5-1 h 3-6 h Hipotensión,
Enalapril 10-20 mg 2-4 h 12-16 h angiedema,
hiperkalemia, tos
Diuréticos de asa
Furosemida 20-40 mg 0,5-1 h 2-4 h Poliuria, hiperuricemia
Torasemida 5-10 mg 0,5-1 h 6h

Descargado para Anonymous User (n/a) en New Granada Military University de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 07, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
320 G. Arbe et al. / Med Clin (Barc). 2018;150(8):317–322

Tabla 5
Principales fármacos administrados por vía intravenosa y sus propiedades, utilizados en el tratamiento de las emergencias hipertensivas

Fármaco Dosis Inicio de acción Duración Efectos adversos

Antagonistas de los receptores de calcio


Nicardipino 5-8 mg/h 5-15 min 1,5-4 h Taquicardia, cefalea,
Clevedipina 1-2 mg/h 2-4 min 5-10 min mareo, flushing,
náuseas
Betabloqueantes
Esmolol Bolo 250-500 ␮g/kg, 1-2 min 10-30 min Náuseas, parestesias,
seguido de 150 ␮g/kg/min broncoespasmo,
Labetalol Bolo 20 mg cada 15 min 5-10 min 3-6 h mareos, bloqueo
(max 80 mg), o 2 mg/min cardiaco
en infusión
Metoprolol Bolos 5 mg, seguido de 20 min 5-8 h
5-15 mg cada 3-6 h
Inhibidor de la enzima convertidora de angiotensina
Enalaprilato 1,25 a 5 mg cada 6 h 15-60 min 4-6 h Cefalea, mareos

Vasodilatadores arteriales y venosos


Nitroglicerina 5 a 100 ␮g/min 2-5 min 5-15 min Cefalea, taquicardia
Nitropusiato sódico 0,25 a 10 ␮g/kg/min 1-2 min 5-10 min Incremento PIC, toxicidad por tiocianato y
cianuro en insuficiencia renal
Hidralazina Bolus 5-20 mg cada 20 min 10-20 min 4-6 h Cefalea, taquicardia, hipotensión

Otros mecanismos de acción


Fenoldopan 005 a 1.6 ␮g/kg/min 5-10 min 30-60 min Taquicardia, cefalea,
Fentolamina 5 a 15 mg cada 5-15 min 1-2 min 10-30 min flushing
Urapidilo Bolus de10-25 mg, seguido 3-5 min 4-6 h Cefalea, taquicardia
de 5-40 mg/h en infusión

PIC: presión intracraneal.

Emergencias hipertensivas Tabla 6


Principales emergencias hipertensivas y su enfoque terapéutico

En las EH, la reducción de la PA debe hacerse de manera más Tipo de emergencia Objetivo de presión Fármacos
precoz, y por lo general los fármacos por vía intravenosa suelen hipertensiva arterial (mmHg)
ser la primera línea. La elección del fármaco dependerá de cada Disección aórtica •PA ≤ 120/80 Labetalol, nitroprusiato
caso, pero por lo general se prefieren fármacos de acción rápida, aguda •FC ≤ 60 latidos/min sódico, nicardipino,
de vida media corta y de fácil manejo (tabla 5). Debemos moni- clevedipino
ACV isquémico •Fibrinólisis: ≤ 180/110 Labetalol, esmolol,
torizar continuamente las constantes y la evolución clínica en el
•No fibrinólisis: reducir nicardipino, urapidil
paciente. La recomendación, por norma general, es una reducción si PA ≥ 220/120
de la PA del 20-25% desde los primeros minutos hasta las primeras ACV hemorrágico •PA ≤ 180/105 Labetalol, esmolol,
2 h, con el fin de intentar evitar episodios de isquemia tisular con nicardipino
Encefalopatía •Reducir PA 10-15% en Labetalol, esmolol,
reducciones más bruscas. La elección de los fármacos debe ser indi-
hipertensiva 2 h hasta 25% en 24 h nicardipino
vidualizada, teniendo en cuenta qué tipo de daño agudo a órganos Insuficiencia •Reducir PA 10-15%, Nitroglicerina,
diana presenta (tabla 6). cardiaca aguda continuar según nitroprusiato,
y/o edema agudo respuesta clínica furosemida
de pulmón
Disección aórtica Síndrome •Reducir 20% en 2 h, Nitroglicerina,
coronario agudo continuar según nitroprusiato sódico,
La disección aórtica es un trastorno grave que requiere de respuesta betabloqueantes,
nicardipino
inmediato el control de la PA y de la frecuencia cardiaca. Las caracte-
Insuficiencia renal •Reducir PA 10-20% en Nitroprusiato sódico,
rísticas clínicas más habituales dependen de la afectación torácica aguda 24 h nicardipino,
o abdominal de la aorta, y debe sospecharse ante dolor torácico fenoldopam
irradiado a espalda, transfixiante o dolor lumbar inespecífico con Eclampsia •Reducir PA 20% en Labetalol, hidralazina
elevadas cifras de PA. El objetivo terapéutico es conseguir cifras 2-6 h
Exceso •Reducir PA 20% en Fentolamina,
de PAS < 120 mmHg y/o PAD < 80 mmHg, en los primeros 10 min
catecolaminas, 2-3 h nicardipino,
y frecuencia cardiaca debajo de 60 latidos/min. Como fármacos de cocaína, •En feocromocitoma nitroprusiato sódico,
primera línea se recomiendan un vasodilatador arterial más un fár- anfetaminas reducir hasta labetalol (no utilizar
maco betabloqueante, tal como nitroprusiato sódico más labetalol resolución síntomas betabloqueantes en
monoterapia)
o esmolol25 . Como alternativa se podría usar clevedipino y/o nicar-
dipino, que también han demostrado gran eficacia en el control de ACV: accidente cerebrovascular; FC: frecuencia cardiaca; PA: presión arterial.
la PA en la disección aórtica26 .

Accidente cerebrovascular isquémico


recomiendan tratamiento si la PAS ≥ 220 y/o la PAD ≥ 120 mmHg,
En este trastorno frecuente es necesario tener en cuenta el y se busca reducir como máximo un 15% la PA en las primeras
tiempo de instauración y si el paciente es candidato a tratamiento 24 h. En pacientes candidatos a fibrinólisis (código ictus que
fibrinolítico. En la fase aguda (< 4,5-6 h) no se debe administrar cumplen unos criterios definidos clínico-radiológicos) el tra-
medicación antihipertensiva, ya que podría empeorar la perfusión tamiento está indicado para mantener la PA ≤ 180/110 mmHg
cerebral y la perfusión del tejido que rodea a la lesión isquémica y así evitar complicaciones hemorrágicas del tratamiento
(zona de penumbra). Las guías de la American Heart Association fibrinolítico27 .

Descargado para Anonymous User (n/a) en New Granada Military University de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 07, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
G. Arbe et al. / Med Clin (Barc). 2018;150(8):317–322 321

El fármaco recomendado es el labetalol. En casos de difícil Síndrome coronario agudo


control de la PA y con riesgo de edema cerebral se podría usar
nitropusiato sódico, sobre todo si la PAD es > 140 mmHg. El síndrome coronario agudo requiere control estricto e inme-
diato de la PA y la frecuencia cardiaca, ya que de esta manera mejora
la perfusión coronaria. La finalidad es reducir el trabajo del cora-
Accidente cerebrovascular hemorrágico zón y, en consecuencia, su consumo de oxígeno. También debemos
tener en cuenta que la elevación de la PA puede ser multifactorial,
El manejo de la HTA en este trastorno representa todo un reto, ya incluyendo factores como la ansiedad y el dolor. Los fármacos más
que por un lado se puede reducir la perfusión cerebral y empeorar utilizados son nitroglicerina en combinación con betabloqueantes;
la clínica inicial, pero por otra parte reduce complicaciones gra- también se podrían utilizar nicardipino o clevedipino. Se reco-
ves, como futuras hemorragias. Por lo tanto, debe individualizarse mienda reducir la PA en un 20% durante las primeras 2 h, para
cada caso y actuar valorando el riesgo y el beneficio. Hay diferen- alcanzar posteriormente cifras por debajo de 160/100 mmHg en
tes estudios en los que se comparaba reducir la PA a cifras de PAS las próximas 4-6 h. Las medidas terapéuticas asociadas —como los
≤ 140 mmHg frente a cifras de PAS ≤ 180 mmHg durante la primera opiáceos, por sus efectos ansiolítico y analgésico— tienen un papel
hora, y como conclusión no se encontraron diferencias en cuanto crucial. Intervenciones más específicas dependerán del tipo de sín-
a pronóstico general y mortalidad, pero sí una mejoría en el pro- drome coronario agudo; no son el objetivo de esta revisión, y deben
nóstico funcional a corto y a largo plazo con las reducciones más consultarse en las respectivas guías europeas37,38 .
marcadas (PAS ≤ 140 mmHg)28,29 . Como fármacos se utilizan beta-
bloqueantes como primera línea o vasodilatadores arteriales como Insuficiencia renal aguda
alternativa, como labetalol o nitroprusiato sódico, respectivamente.
Es crucial vigilar los signos de hipoperfusioı́n cerebral, secundarios La HTA severa ocasionalmente puede producir daño renal
al descenso de la PA. Es preferible evitar fármacos como nitroglice- (nefroesclerosis hipertensiva o nefroesclerosis maligna), o esta
rina, excepto si la PA no se controla con otros fármacos o en aquellos puede ser consecuencia de un proceso de base como glomerulone-
que presentan otros procesos concomitantes, como síndrome coro- fritis aguda, vasculitis o estenosis de arterias renales. Este proceso
nario agudo o disección aórtica, ya que estos producen aumento se caracteriza por la presencia de hematuria en el 75% de los casos,
del volumen sanguíneo, edema cerebral y, por tanto, aumento de además de alteración del filtrado glomerular y elevación de cifras
la presión intracraneal30,31 . de creatinina. En ocasiones es difícil diferenciar si el daño renal se
debe a una HTA crónica o a un proceso agudo. Los fármacos más
utilizados son labetalol o nicardipino. Se debe de intentar reducir
Encefalopatía hipertensiva la PA entre un 10 y un 20% en las primeras 24 h.

Es un trastorno caracterizado por instauración rápida de sín-


Hipertensión arterial en el embarazo
tomas neurológicos inespecíficos, como alteración del estado de
conciencia, cefalea, mareos, confusión, náuseas y vómitos, pero sin
La preeclampsia y la eclampsia son situaciones graves del emba-
una clara focalidad neurológica, todo secundario a una elevación
razo con elevación de la PAS ≥ 160 y/o la PAD ≥ 110 mmHg,
brusca y mantenida de la PA. Puede haber afectación de la retina.
y por lo general van asociadas a proteinuria, presentándose
Estos síntomas mejoran al reducir la PA. La reducción debe ser de
desde la semana 32 del embarazo (algunas mujeres la desarro-
entre el 10 y el 15% dentro de las primeras 2 h de tratamiento, sin
llan desde la semana 20). El tratamiento está orientado a reducir
pasar del 25% durante las primeras 24 h32 . Los fármacos más usados
la PA y mantener una adecuada presión de perfusión placentaria.
son labetalol, nitroprusiato sódico y nicardipino; para algunos auto-
El tratamiento definitivo sería el parto o la cesárea. Los fármacos
res el nicardipino es el fármaco de primera línea por su potencia y
intravenosos que se utilizan en son el labetalol y la hidralazina14,15 .
su fácil titulación33 .

Conclusiones
Insuficiencia cardiaca aguda y/o edema agudo de pulmón
La elevación aguda de la presión arterial es un motivo frecuente
Este trastorno es una «epidemia moderna», con altos índices de consulta en los servicios de urgencias. Es importante realizar una
de morbimortalidad, a pesar de los avances terapéuticos. El trata- evaluación integral del paciente y reconocer precozmente los esce-
miento de primera elección en la fase aguda son los vasodilatadores narios que requieren atención inmediata, es decir, las emergencias
venosos y arteriales, como la nitroglicerina y/o el nitroprusiato hipertensivas. En algunos casos de urgencias hipertensivas el trata-
sódico. Cabe señalar que pocas medidas terapéuticas han demos- miento podría realizarse de manera ambulatoria. En todo paciente
trado un impacto pronóstico en la insuficiencia cardiaca aguda; sin que acuda con cifras elevadas de presión arterial se deberán opti-
embargo, un estudio español demostró aumento de la superviven- mizar el seguimiento y el control por su médico habitual para evitar
cia a corto plazo con el uso de vasodilatadores en el edema agudo de futuras complicaciones cardiovasculares.
pulmón de origen hipertensivo34 . Otros fármacos para asociar son
los diuréticos de asa con la finalidad de reducir rápidamente la PA, Conflicto de intereses
el consumo de oxígeno del miocardio y la precarga. Dentro de este
escenario está el edema agudo de pulmón, el cual puede desenca- Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
denarse por una disfunción ventricular izquierda secundaria a EH.
Una reducción del 10 al 15% de la PA media mejora los síntomas del
Bibliografía
paciente35 . Se deben evitar durante la fase aguda los betabloquean-
tes o los antagonistas del calcio, ya que serían contraproducentes 1. James PA, Oparil S, Carter BL, Cushman WC, Dennison-Himmelfarb C, Handler J,
al reducir la contractilidad cardiaca y, por consiguiente, empeorar et al. 2014 evidence-based guideline for the management of high blood pressure
el cuadro. Sin embargo, una vez se estabiliza, el inicio de betablo- in adults. Report from the panel members appointed to the Eighth Joint National
Committee (JNC 8). JAMA. 2013;1097:1–14.
queantes antes del alta hospitalaria ha demostrado mejoras en la 2. Ipek E, Oktay AA, Krim SR. Hypertensive crisis: An update on clinical approach
supervivencia de pacientes con insuficiencia cardiaca36 . and management. Curr Opin Cardiol. 2017;32:397–406.

Descargado para Anonymous User (n/a) en New Granada Military University de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 07, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.
322 G. Arbe et al. / Med Clin (Barc). 2018;150(8):317–322

3. Banegas JR, Graciani A, de la Cruz-Troca JJ, León-Muñoz LM, Guallar-Castillón 22. Levy PD, Mahn JJ, Miller J, Shelby A, Brody A, Davidson R, et al. Blood pressure
P, Coca A, et al. Achievement of cardiometabolic goals in aware hyperten- treatment and outcomes in hypertensive patients without acute target organ
sive patients in Spain: A nationwide population-based study. Hypertension. damage: A retrospective cohort. Am J Emerg Med. 2015;33:1219–24.
2012;60:898–905. 23. Grassi D, O’Flaherty M, Pellizzari M, Bendersky M, Rodriguez P, Turri D, et al.
4. Menéndez E, Delgado E, Fernández-Vega F, Prieto M, Bordiú E, Calle A, et al. Hypertensive urgencies in the emergency department: Evaluating blood pres-
Prevalencia, diagnóstico, tratamiento y control de la hipertensión arterial en sure response to rest and to antihypertensive drugs with different profiles. J Clin
España. Resultados del estudio Di@betes. Rev Esp Cardiol. 2016;69:572–8. Hypertens. 2008;10:662–7.
5. Varounis C, Katsi V, Nihoyannopoulos P, Lekakis J, Tousoulis D. Cardiovascular 24. Park SK, Lee DY, Kim WJ, Lee SY, Park HS, Kim HW, et al. Comparing the clinical
hypertensive crisis: Recent evidence and review of the literature. Front Cardio- efficacy of resting and antihypertensive medication in patients of hypertensive
vasc Med. 2017;3:51. urgency: A randomized, control trial. J Hypertens. 2017;35:1474–80.
6. Mancia G, Fagard R, Narkiewicz K, Redon J, Zanchetti A, Böhm M, et al. 2013 25. Khan IA, Nair CK. Clinical diagnostic and management perspectives of aortic
ESH/ESC guidelines for the management of arterial hypertension: The Task Force dissection. Chest. 2002;122:311–28.
for the Management of Arterial Hypertension of the European Society of Hyper- 26. Elliott WJ. Clinical features in the management of selected hypertensive emer-
tension (ESH) and of the European Society of Cardiology (ESC). Eur Heart J. gencies. Prog Cardiovasc Dis. 2006;48:316–25.
2013;34:2159–219. 27. Kernan WN, Ovbiagele B, Black HR, Bravata DM, Chimowitz MI, Ezekowitz MD,
7. Rodriguez M, Mateos P, Fernandez C, Martell N, Luque M. Crisis hipertensiva: et al. Guidelines for the prevention of stroke in patients with stroke and transient
prevalencia y aspectos clínicos. Rev Clin Esp. 2002;202:255–8. ischemic attack: A guideline for healthcare professionals from the American
8. Pinna G, Pascale C, Fornengo P, Arras S, Piras C, Panzarasa P, et al. Hospital admis- Heart Association/American Stroke Association. Stroke. 2014;45:2160–236.
sions for hypertensive crisis in the emergency departments: A large multicenter 28. Anderson CS, Heeley E, Huang Y, Wang J, Stapf C, Delcourt C, et al. Rapid blood-
Italian study. PLoS ONE. 2014;9:e93542. pressure lowering in patients with acute intracerebral hemorrhage. N Engl J
9. Chobanian AV, Bakris GL, Black HR, Cushman WC, Green LA, Izzo JL, et al. Seventh Med. 2013;368:2355–65.
report of the joint national committee on prevention, detection, evaluation, and 29. Wang X, Arima H, al-Shahi Salman R, Woodward M, Heeley E, Stapf C, et al.
treatment of high blood pressure. Hypertension. 2003;42:1206–52. Rapid blood pressure lowering according to recovery at different time intervals
10. Shaughnessy AF. Hypertensive urgency not really an urgent problem. Am Fam after acute intracerebral hemorrhage: Pooled analysis of the INTERACT studies.
Physician. 2016;94:750–3. Cerebrovasc Dis. 2015;39:242–8.
11. Cabré JJ, Sabaté D, Altamiras M, Chancho C, Poblet C, Tapia E. Crisis hipertensi- 30. Miller J, Kinni H, Amer A, Levy PD. Therapies to reduce blood pressure acutely.
vas atendidas en atención primaria en una unidad de atención continuada y de Curr Hypertens Rep. 2016;18:43.
urgencias. Hipertensión. 2005;22:218. 31. Majidi S, Suarez JI, Qureshi AI. Management of acute hypertensive response
12. Albadalejo Blanco C, Sobrino Marínez J, Vázquez González S. Crisis hipertensivas: in intracerebral hemorrhage patients after ATACH-2 trial. Neurocrit Care.
seudocrisis, urgencias y emergencias. Riesgo Vasc. 2014;31:132–42. 2016;21:1–10.
13. Martin E, Fonseca FJ, Garcia-Criado EL, Ortiz A, Entrenas P. Protocolización de las 32. Vaughan CJ, Delanty N. Hipertensive emergencies. Lancet. 2000;356:411–7.
urgencias y emergencias hipertensivas. II. Actuación terapéutica. Comunicación 33. Tuncel M, Ram VC. Hipertensive emergencies. Etiology and management. Am J
64T. 8.a Reunión Nacional. Valencia: Sociedad Española de Hipertensión- Cardiovasc Drugs. 2003;3:21–31.
Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA); 34. Herrero-Puente P, Jacob J, Martín-Sánchez FJ, Vázquez-Álvarez J, Martínez-
2003. Camblor P, Miró Ò, et al. Influence of intravenous nitrate treatment on early
14. El Farra J, Bean C, Martin JN. Management of hypertensive crisis for the obste- mortality among patients with acute heart failure. NITRO-EAHFE Study. Rev Esp
trician/gynecologist. Obstet Gynecol Clin North Am. 2016;43:623–37. Cardiol. 2015;68:959–67.
15. Committee on Obstetric Practice. Committee opinion no. 623: Emergent the- 35. Ponikowski P, Voors AA, Anker SD, Bueno H, Cleland JG, Coats AJ, et al., Aut-
rapy for acute-onset, severe hypertension during pregnancy and the postpartum hors/Task Force Members. 2016 ESC Guidelines for the diagnosis and treatment
period. Obstet Gynecol. 2015;125:521–5. of acute and chronic heart failure: The Task Force for the diagnosis and treat-
16. Suneja M, Sanders ML. Hipertensive emergency. Med Clin North Am. ment of acute and chronic heart failure of the European Society of Cardiology
2017;101:465–78. (ESC). Developed with the special contribution of the Heart Failure Association
17. Patel KK, Young L, Howell EH, Hu B, Rutecki G, Thomas G, et al. Characteristics (HFA) of the ESC. Eur Heart J. 2016;37:2129–200.
and outcomes of patients presenting with hypertensive urgency in the office 36. Franco J, Formiga F, Chivite D, Manzano M, Carrera L, Arevalo-Lorido JC, et al. New
setting. JAMA. 2016;176:981–8. onset heart failure — Clinical characteristics and short-term mortality. A RICA
18. Johnson W, Nguyen M, Patel R. Hypertension crisis in the emergency depart- (Spanish registry of acute heart failure) study. Eur J Intern Med. 2015;26:357–62.
ment. Cardiol Clin. 2012;30:533–43. 37. Roffi M, Patrono C, Collet JP, Mueller C, Valgimigli M, Andreotti F, et al. ESC
19. Al Bannay R, Böhm M, Husain A. Heart rate differentiates urgency and emergency Guidelines for the management of acute coronary syndromes in patients presen-
in hypertensive crisis. Clin Res Cardiol. 2013;102:593–8. ting without persistent ST-segment elevation: Task Force for the Management
20. Zampaglione B, Pascale C, Marchisio M, Cavallo-Perin P. Hypertensive urgen- of Acute Coronary Syndromes in Patients Presenting without Persistent ST-
cies and emergencies. Prevalence and clinical presentation. Hypertension. Segment Elevation of the European Society of Cardiology (ESC) 2016. Eur Heart
1996;27:144–7. J. 2015;37:267–315.
21. Almas A, Ghouse A, Iftikhar AR, Khursheed M. Hypertensive crisis, burden, mana- 38. Steg PG, James SK, Atar D, Badano LP, Blömstrom-Lundqvist C, Borger MA, et al.
gement, and outcome at a tertiary care center in Karachi. Int J Chronic Dis. ESC Guidelines for the management of acute myocardial infarction in patients
2014;2014:413071. presenting with ST-segment elevation. Eur Heart J. 2012;33:2569–619.

Descargado para Anonymous User (n/a) en New Granada Military University de ClinicalKey.es por Elsevier en agosto 07, 2020.
Para uso personal exclusivamente. No se permiten otros usos sin autorización. Copyright ©2020. Elsevier Inc. Todos los derechos reservados.

También podría gustarte