Este órgano considera fundado el agravio en estudio, y a su
vez como suficiente para declarar la nulidad de la resolución controvertida; ello en base a lo s siguientes razonamientos:
Del análisis a la resolución determinante del crédito
fiscal, particularmente a fojas 27 y 28 de autos, se desprende que la autoridad consigno:
“2. Como resultado del reconocimiento aduanero antes mencionado
con fecha 08 de junio de 2004, personal de esta aduana procedió al levantamiento del acta de inicio de Procedimiento Administrativo en Materia Aduanera numero ARA1660040205, en la que se hicieron constar los siguientes hechos y omisiones” (…) DURANTE LA PRACTICA DE DICHA REVISION SE RECIBIO EL OFICIO NUMERO 326-SAT-X-2-37992 FIRMADO POR EL LIC MARIO CORDOVA LOPEZ, ADMINISTRADOR CENTRAL DE FISCALIZACION ADUANERA,… MEDIANTE EL CUAL SE ORDENA EL EMBARGO PRECAUTORIO DURANTE EL RECONOCIMIENTO ADUANERO, SEGUNDO RECONOCIMIENTO O VERIFICACION DE MERCANCIAS EN TRANSPORTE, DE LA MERCANCIA AMPARADA A TRAVES DE LOS PEDIMENTOS,…
3.- por lo anterior, esta Autoridad procedió al embargo
precautorio de la mercancía consistente en 3150.000 piezas de hojas de triplay 5.2 m.m. 4x8 de okume, modelo 40258, de la fracción arancelaria numero 4412.13.01 declaradas en el único numero de secuencia del pedimento de importación 04 16 3178 4003852, con fundamento en lo dispuesto en el articulo 151, fracción IV, de la Ley Aduanera vigente en 2004, tal y como quedo debidamente circunstanciado en el acta a que nos referimos en el punto que antecede…”
De lo anterior se desprende que la autoridad sustento su
actuación en el artículo 151, fracción IV de la Ley Aduanera vigente en 2004, misma que consigna: (se transcribe)
Esto es, si bien cierto que en primera instancia, al
realizar el tramite del despacho aduanero de las mercancías, por virtud del mecanismo de selección automatizada, a la actora le correspondió reconocimiento aduanero, y que si de este derivan irregularidades, se puede iniciar el procedimiento administrativo en materia aduanera sin necesidad de mandato escrito, por realizarse las facultades de comprobación en un recinto fiscal, no debe perderse de vista que en el caso, el embargo precautorio de las mercancías y por ende, el inicio del referido procedimiento aduanero deriva de la actualización de la fracción VI del articulo 151 antes transcrito. Así las cosas, dicho precepto legal es categórico en señalar que en esos casos; es decir, cuando el nombre o domicilio del proveedor manifestado en el pedimento de importación o factura sea falso o inexistente, es indispensable una orden emitida por el administrador general o el administrador central de investigación aduanera de la administración general de aduanas de servicio de administración tributaria.
Dicho mandamiento que se traduce en el mandamiento escrito
de autoridad competente a que alude el artículo 16 constitucional, indefectiblemente debe dirigirse al gobernado a quien se va a afectar con el acto de autoridad.
En la especie, la propia autoridad al contestar la demanda
reconoce expresamente que no existió tal mandato dirigido a ENCHAPADOS NACIONALES SA DE CV, no existió la orden de embargo a que alude el segundo párrafo del articulo 151 de la Ley Aduanera, en relación con la fracción VI de ese numeral, y por ende, que no se inicio legalmente el procedimiento administrativo en materia aduanera del cual derivo la resolución controvertida.
Bajo este orden de ideas, como se indico, no se dieron las
situaciones de hecho que permitían la implementación del procedimiento administrativo, cuya consecuencia inmediata es la resolución determinante del crédito fiscal materia de la presente litis, es evidente que en el caso, se actualiza la hipótesis prevista en el articulo 238, fracción IV del Código Fiscal de la Federación, al haberse dictado en contravención a las disposiciones legales aplicadas, particularmente al segundo párrafo del articulo 151 de la Ley Aduanera, por lo que procede declarar nulidad de conformidad con lo dispuesto por el numeral 239 , fracción II del ordenamiento fiscal federal, sin perjuicio de que la demandada, si lo estima conveniente y es legalmente posible, ejerza sus atribuciones, sin que este órgano colegiado se encuentre en aptitud de ordenar o impedir su ejercicio, dado que ello recae en el ámbito de las facultades discrecionales de la autoridad hacendaria.
No es óbice para concluir lo anterior el hecho de que la
autoridad demandada señale que la autoridad aduanera no fundamento el inicio del procedimiento en materia aduanera en el oficio 326-SAT-X-2-37992 de 02 de junio de 2004, sino en la conducta llevada a cabo por la accionante, a saber, haber señalado un domicilio de proveedor que resulta falso, por lo que no trasciende para afectar la legalidad de la resolución impugnada en el que manifieste que no se le notifico el referido oficio, puesto que ello no le irroga perjuicio alguno en su esfera jurídica, pues para considerar que la autoridad demandada tenia la obligación de notificar el oficio de merito, era menester que este tuviera injerencia en el fondo del asunto que nos ocupa, esto es, que el mismo sea el único elemento que la autoridad aduanera tomo en cuenta para proceder el inicio del procedimiento administrativo en materia aduanera, situación que no aconteció en la especie.
Lo anterior en razón de que, contrario a lo que señala
la representación fiscal, no obstante que el reconocimiento aduanero derivo de la activación del mecanismo de selección aleatoria en el que le correspondió revisión al gobernado, según se desprende del análisis, tanto al acta de inicio transcrita en la liquidatoria, como de esta misma, el único motivo para la realización del embargo precautorio de las mercancías y de la determinación del crédito fiscal fue la manifestación en el pedimento de importación del domicilio del proveedor, que la autoridad considero falsa, por lo que estamos en presencia del supuesto previsto en la fracción VI del articulo 151 de la Ley Aduanera y por ende, es indispensable la emisión y notificación al gobernado del mandamiento de autoridad.
Corrobora la anterior conclusión el señalamiento de l
autoridad encargada de la defensa jurídica en el sentido de que “ el inicio del procedimiento administrativo en materia aduanera se sustenta de manera legal en la conducta llevada a cabo por el accionante, misma se encuentra prevista en el articulo 151 fracción VI de la Ley Aduanera, con lo que se corrobora que el acto de molestia llevado a cabo por la autoridad ahora demandada se emitió en estricto apego a derecho, sin que el hecho de que en el mismo se haga alusión al oficio 326-SAT-X-237922 de 01 de junio de 2004, sea suficiente para considerar que esta no se emitió en estricto apego a derecho, pues la cita del oficio requerido no vicia la legalidad dela resolución impugnada, pues no trasciende a la esfera por el articulo 151 fracción VI del Código Fiscal de la Federación, tal y como quedo precisado tanto en el acta de Inicio de procedimiento administrativo en materia aduanera de 09 de junio de 2004, como en la resolución determinante de la situación fiscal de la actora, contenida en el oficio 326-SAT-A30-AL-12898 de 28 de julio de 2004, sin que la misma hubiere aportado medio de convicción idóneo para acreditar que el proveedor multireferido efectivamente se encuentra ubicado en el domicilio que declaro en el pedimento de importación que nos ocupa, por lo que ante su omisión en este sentido es dable concluir que la presunción de validez de tales actos de autoridad subsiste, por así disponerlo el articulo 68 del Código Fiscal de la Federación.”
Lo anterior en razón de que la representación fiscal
confiesa que el procedimiento administrativo en materia aduanera se inicio por darse en la especie el supuesto de la fracción VI del articulo 151 de la Ley Aduanera, por lo que contrario a lo que indica, la demandada si tenia la obligación legal de notificar la orden de embargo de marras, siendo falso que el a oficio 326-SAT-X-2-37922 no afecte la esfera jurídica del gobernado, pues aun cuando quiera dársele la calidad de oficio interno entre las Unidades Administrativas ahí señaladas, y por el cual el superior jerárquico de la Aduana de Manzanillo, en este caso el administrador general de aduanas, emitió una orden interna para dar a conocer a sus inferiores los resultados de la indagación efectuada respecto de la incongruencia apuntada con antelación, señalando además los lineamiento para actuar ante ello, dicho oficio si es de interés para la actora, pues derivado de este la aduana de manzanillo afecto su esfera jurídica , al trabar el embargo precautorio de las mercancías, sin que se cumpliese con la condicionante prevista en el segundo párrafo del precepto legal invocado; es decir, sin el mandamiento de autoridad competente.
A mayor abundamiento, si bien es cierto existe la orden
de embargo suscrita por el Administrador General de Aduanas, visible a folios 138 a 141 de autos, no menos cierto es que esta no se dirigió a la actora, por lo que no es jurídicamente posible determinar consecuencias legales a su cargo, sin que exista documento alguno en el cual se haya ordenado el embargo de marras, que permitiese la instauración del procedimiento administrativo en materia aduanera que derivo en la determinación del crédito fiscal a su cargo.
A mayor abundamiento, se subraya que el espíritu funcional
del segundo párrafo del articulo 151 de la Ley Aduanera, por lo que respecta a las facultades de comprobación que han de llevarse a cabo para justificar legalmente el inicio de procedimiento administrativo en materia aduanera, conlleva el hecho de que precisamente las mismas se realicen en el entorno jurídico del sujeto afectado, mediante orden girada por autoridades superiores, puesto que solamente de esa manera es que debe entenderse que sus garantías se encuentran salvaguardadas y que por consiguiente puede darse pauta para dar inicio al procedimiento administrativo en materia aduanera, lo cual no se cumple si dicha orden no se dirige al actor, sino como lo denomina la autoridad, se gira un documento interno entre las autoridades administrativas, por lo que el hecho de que así haya acontecido a la especie, no justifica el inicio de dicho procedimiento, en estricta aplicación al articulo 151, fracción IV y segundo párrafo de la Ley Aduanera.
En este tenor, se reitera que el procedimiento
efectuado del cual es producto la resolución determinante del crédito sujeto a combate, tiene su origen en el procedimiento administrativo en materia aduanera que no deriva de un mandamiento de autoridad competente dirigido a la persona afectada, resultando evidente que no se surtieron las condiciones necesarias para que la autoridad procediera a dar inicio al procedimiento antes referido de acuerdo al estatuido en el articulo 151, fracción VI, segundo párrafo de la Ley Aduanera.
Por todo lo anterior, al haberse demostrado que la
autoridad no cumplió con la exigencia prevista para instaurar el procedimiento administrativo en materia aduanera del cual deriva el acto impugnado, cabe precisarse que el caso en estudio, respecto a la resolución determinante del crédito fiscal se ubica en la fracción IV, del articulo 238 del Código Fiscal de la Federación, toda vez que en la especie la autoridad actuó en contravención a las disposiciones aplicables.
En las relatadas circunstancias, se declara la nulidad
de la resolución controvertida, atendiendo los motivos y fundamentos antes, expresados, de conformidad con lo dispuesto por los artículos 238, fracción IV, Y 239, fracción II, del Código Fiscal de la Federación.
Por ultimo, se subraya que al resultar fundado el
concepto de impugnación que fue sujeto a estudio y en virtud de la conclusión alcanzada a través de su análisis y resolución, esta Sala Fiscal se abstiene de entrar al examen del resto de los argumentos expuestos en la demanda inicial, sin que ello pueda considerarse violatorio de lo establecido articulo 237 del Código Fiscal de la Federación, ya que cualquiera que fuere el pronunciamiento que a los mismos recayera por parte de este órgano colegiado, en nada cambiaria el sentido de la presente sentencia en beneficio de las pretensiones de la parte actora.
Lo anterior se apoya en la siguiente tesis de
jurisprudencia, la cual fue publicada en el Semanario Oficial de la Federación y su Gaceta, correspondiente al mes de marzo de 1999, y resulta de observancia obligatoria para este órgano colegiado con apego a lo establecido en el artículo 193 de la Ley de Amparo. (Se transcribe) Por lo expuesto y con fundamento en lo dispuesto por los artículos 236,237,238, fracción IV, y 239, fracción II del Código Fiscal de la Federación, es de resolverse y se resuelve:
I. Ha resultado procedente el juicio intentado por el C. PEDRO
MANCILLA JIMENEZ, en su carácter de representante legal de la sociedad denominada ENCHAPADOS NACIONALES SA DE CV, en forma de la resolución administrativa materia del presente juicio fiscal; II. Resultaron fundados los conceptos de anulación hechos valer por la parte actora, por lo que la misma acredito los extremos de su acción, en consecuencia; III. Se declara la nulidad de la resolución impugnada, misma cuyas características quedaron debidamente precisadas en el Resultando primero de este fallo. IV. Mediante atento oficio que se gire al Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Tercer Circuito, hágase de su conocimiento la presente sentencia definitiva, dictada en cumplimiento a la ejecutoria dictada dentro del toca de revisión fiscal 382/2007 V. NOTIFIQUESE.- así lo resolvieron los CC Magistrados que integran esta Segunda Sala de Occidente del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa, Licenciados MIGUEL ALFONSO DELGADO CRUZ en su carácter de presidente de esta Segunda Sala, JULIO MANUEL ANTONIO TINAJERO GUERRERO Y SALVADOR RIVAS GUDIÑO como instructor en el presente juicio, ante la C. Secretaria de Acuerdos que da fe.