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Trauma psicológico: Teoría, investigación, práctica y política

Asociación Americana de Psicología 20202020 , Vol. 12, No. S1, S51-S54

ISSN: 1942-9681 http://dx.doi.org/10.1037/tra0000685

Ajuste psicológico durante el brote global de COVID-19: Una

perspectiva de resistencia
Shuquan Chen y George A. Bonanno
Universidad de Columbia

En medio del brote mundial de COVID-19, es probable que la resistencia sea uno de los muchos
resultados posibles. Los estudios relativos a la resiliencia tras acontecimientos potencialmente
traumáticos, incluido el brote de una enfermedad, han demostrado que la gran mayoría de las personas
son resistentes y que los resultados dependen de una combinación de factores de resiliencia, como la
gravedad de la exposición, las diferencias individuales, el contexto familiar y las características de la
comunidad. Para comprender mejor la disfunción psicológica y la capacidad de recuperación durante el
brote mundial de COVID-19, se alienta a los investigadores a que investiguen las pautas de salud mental
a largo plazo en lugar de las tasas de prevalencia transversales, adopten diseños y análisis prospectivos,
integren los múltiples factores de riesgo y capacidad de recuperación para mejorar la predicción de los
resultados y consideren la importancia de la flexibilidad a medida que se desarrolla la situación.

Palabras clave: COVID-19, resistencia, eventos potencialmente traumáticos, flexibilidad

El brote mundial de la nueva enfermedad coronavirus 2019

(COVID-19) es un desastre sin precedentes en la historia de la
humanidad. Desacreditada como pandemia por la Organización
Mundial de la Salud (2020), la enfermedad se ha extendido a
todos los países, infectando hasta ahora a millones y matando a
decenas de miles (Universidad John Hopkins, 2020). La pandemia
ha afectado a la salud mental y ha exacerbado la psicopatología
previa a la salida (por ejemplo, Adhanom Ghebreyesus, 2020; Wan,
2020). La pandemia COVID-19 es única en el sentido de que
ejerce un impacto generalizado y grave en la vida cotidiana sin una
fecha de finalización determinada, presenta una compleja
combinación de factores de estrés y bloquea el acceso a los
factores de protección (Gruber et al., 2020). Durante este período
estresante y potencialmente traumático, muchas personas se ven
obligadas a adaptarse a una nueva realidad dominada por el miedo
a la propagación y el contagio viral. Lo que es más grave, algunas
se esfuerzan por recuperarse de COVID-19 o hacer frente al
miedo a la enfermedad y la muerte. En primera línea, los
trabajadores esenciales, como los profesionales médicos y los
equipos de primeros auxilios, se enfrentan a un mayor riesgo de
contraer el virus al permanecer en servicio. Durante la pandemia,
los cierres y las cuarentenas son ciertamente esenciales para
suprimir el virus, pero también conducen a la lucha de los padres
entre el trabajo y el cuidado de los hijos y, en algunos casos
peores, atrapan a las poblaciones vulnerables con parejas y tutores
abusivos.
La tarea psicológica clave para la mayoría de las personas
durante la pandemia es mantener la angustia al mínimo. Sin
embargo, frente a la
Nota del editor. Este comentario fue revisado rápidamente debido a la
naturaleza temporal del contenido. Fue revisado por la sección especial de
Editores Invitados y el Editor de la Revista. -KKT
crecimiento latente) pueden
incertidumbre provocada por la pandemia, las preguntas abundan.
¿Qué tan común será la resistencia? ¿Qué pueden hacer los
individuos frente a la pandemia COVID-19 para mantener la
resiliencia? Los estudios específicos sobre COVID-19 que podrían
responder a estas preguntas recién están comenzando. Sin
embargo, investigaciones anteriores relacionadas con brotes de
enfermedades y desastres naturales han proporcionado importantes
conocimientos que pueden servir de guía para ayudarnos a superar
la pandemia. En este comentario, abordamos estas importantes
preguntas y sugerimos algunas direcciones de investigación
importantes.
¿Qué es la Resistencia?
Como uno de los muchos posibles resultados de los desafíos de
la vida, la capacidad de recuperación se refiere a una trayectoria
estable de la salud mental a pesar de la exposición a un factor
estresante grave (Bonanno, 2004). Frente a COVID-19, es
necesario hacer frente a los factores estresantes en curso y lograr
mantener al mínimo la angustia psicológica lógica. Varios
estudios nacionales transversales han documentado síntomas de
depresión y ansiedad entre los chinos durante la pandemia de
COVID-19 (Qiu et al., 2020; Wang y otros, 2020). Estos estudios
determinaron que los participantes de mediana edad que
adoptaron medidas de precaución y obtuvieron información
precisa sobre la salud relacionada con COVID mostraron una
disminución de la angustia psicológica. Aunque eran informativos
y oportunos, estos estudios, en el mejor de los casos,
proporcionaron una instantánea del impacto inmediato de COVID-
19, pero no tuvieron en cuenta el importante proceso de desarrollo
de ajuste psicológico después de una estresante y potencialmente
eventos traumáticos (PTEs; para una revisión, ver Bonanno,
Brewin, Ka- niasty, & Greca, 2010). Estudios longitudinales y
prospectivos que identifican patrones de resultados utilizando
datos relativamente sofisticados
Los enfoques analíticos (por ejemplo, la modelización de la mezcla de
 Este artículo fue publicado en línea el primer 15 de junio de 2020. La
correspondencia relativa a este artícul o debe dirigirse a
Shuquan Chen o a George A. Bonanno, del Departamento de
Psicología de asesoramiento, Teachers College, Universidad de
Columbia,
525 West 120 Street, HM328, Nueva York, NY 10027. Correo
electrónico: sc4173@tc.columbia.edu o gab38@tc.columbia.edu
S51
proporcionan evaluaciones más precisas de la adaptación
psicológica a largo plazo. Las variaciones prototípicas
comunicadas en un estudio longitudinal en el que se examinó el
funcionamiento físico y psicológico de los supervivientes de la
epidemia del síndrome respiratorio agudo severo (SRAS) de 2003
en Hong Kong son muy coherentes con lo que se suele observar
después de un factor estresante importante o TEP (figura 1).
S52 CHEN Y BONANNO

Figura 1. Los elementos temporales de la resistencia psicológica. De "Pérdida, Trauma y Resistencia Humana":
Have We Underestited the Human Capacity to Thrive After Extremely Aversive Events?" por G. A. Bonanno,
2004, American Psychologist, 59, p. 21. Derechos de autor 2004 de la Asociación Americana de Psicología.
Adaptado con permiso. Vea el artículo en línea para la versión en color de esta figura.

Tras la hospitalización, surgieron cuatro grandes trayectorias entre salud mental anteriores a COVID-19 y
estos supervivientes, respectivamente la resistencia, la
recuperación, el retraso y la disfunción crónica (Bonanno et al.,
2008).

¿Qué tan común es la resistencia?

Las investigaciones han demostrado que la mayoría de las
personas son resistentes incluso cuando se enfrentan a
acontecimientos de la vida muy desagradables. Los estudios sobre
las posturas de estrés extremo, como los brotes de enfermedades,
han informado de una mayor prevalencia de la psicopatología y
una menor tasa de resistencia en comparación con los estudios que
sólo examinan los acontecimientos moderadamente desagradables.
En todos los tipos de estudios y enfoques de modelización, la
proporción de personas resistentes fue en promedio de alrededor
de dos tercios (Bonanno, 2004; Bonanno, Galea, Bucciarelli y
Vlahov, 2006). Aunque el SRAS es más letal que COVID-19,
todavía había alrededor de la mitad de los supervivientes que se
recuperaron de la angustia y siguieron siendo resistentes
(Bonanno et al., 2008). Además, es posible que el porcentaje de
resiliencia en este estudio esté subestimado debido a la falta de
datos prospectivos. En un examen sistemático reciente, Galatzer-
Levy, Huang y Bonanno (2018) observaron que el muestreo
posterior a la catástrofe tiende a sesgar las estimaciones del
impacto de los ETP hacia una mayor psicopatología. Para
controlar el efecto confuso de la angustia preexistente, los
estudios que adoptan diseños prospectivos (es decir, se mide la
angustia psicológica previa al evento) son fundamentales para
una evaluación más precisa de los impactos en la salud de
COVID-19. Los investigadores que han recopilado datos de
tienen consentimiento para volver a contactar a los
participantes pueden potencialmente colaborar en
estudios de múltiples sitios para evaluar más
rigurosamente el impacto psicológico lógico de esta
pandemia.
¿Cómo ser resistente frente a COVID-19?
La capacidad de recuperación se basa en varios
factores de riesgo y de protección relacionados con las
diferencias individuales, el contexto familiar y las
características de la comunidad (véase la figura 1).
Aunque la gravedad de la exposición puede influir en
los resultados, se ha demostrado que hay varios
factores que promueven la capacidad de recuperación,
entre ellos la personalidad y factores externos como los
RESILIENCIA COVID-19
recursos sociales e interpersonales. El conocimiento de esos
factores puede ser especialmente útil ante las amenazas actuales
e inciertas durante la pandemia de COVID-19. Entre esos
factores figuran el optimismo (Galatzer-Levy & Bonanno, 2014;
Sumer, Karanci, Berument, & Gunes, 2005), el apoyo y la
vinculación (Bonanno, et al., 2006 Bonanno, Galea, Bucciarelli,
& Vlahov, 2007; Bonanno & Mancini, 2008; Lai, Tiwari, Beau-
lieu, Self-Brown, & Kelley, 2015; Mandavia & Bonanno, 2019),
mantenerse informado sin excederse en la con sumisión a los
medios de comunicación (Ahern et al., 2002; Bernstein y otros,
2007; Fair- brother, Stuber, Galea, Fleischman, & Pfefferbaum,
2003), em-plumando estrategias de distracción como encontrar
formas de divertirse y reírse (Keltner & Bonanno, 1997), y
reducir el aislamiento social con la comunicación en línea
(Bonanno). , 2020Para los infectados por COVID-19, puede ser
especialmente importante
S53

movilizar el apoyo social, aumentar los comportamientos de resultados (Bonanno et al., 2015). Esto se debe en gran medida a que la
búsqueda de ayuda y mantener el cuidado físico continuo para eficacia de cualquier estrategia determinada tiende a variar notablemente en
mantener la resistencia (Bonanno et al., 2008). función de las situaciones y los individuos (para los análisis, véase Aldao,
A nivel de la familia, los estudios han identificado algunos 2013; Bonanno y Burton, 2013). En otras palabras, los efectos de las
factores de resistencia, como la adaptabilidad, la cohesión estrategias de reglamentación son pequeños cuando se agregan sin tener en
familiar, la buena comunicación y la gestión financiera adecuada cuenta la variación de los con- texto. Por lo tanto, de cara a COVID-19, es
(Black & Lobo, 2008; Caligiuri, Hyland, Joshi, & Bross, 1998; posible que cada individuo tenga que determinar las estrategias más eficaces
Walsh,)Si bien estos estudios contribuyen a nuestra comprensión para sí mismo. Lo que la investigación ha puesto de relieve es la necesidad
de las trayectorias individuales, pocos estudios han examinado de flexibilidad (Bo- nanno, Papa, Lalande, Westphal, & Coifman, 2004;
específicamente los resultados de la capacidad de recuperación a Cheng, Lau, & Chan, 2014). En términos sencillos, la flexibilidad significa
nivel familiar (Bonanno, Romero, & Klein, 2015). Dado que prestar atención a las cambiantes demandas de la situación, decidir las
muchos individuos están en cuarentena con miembros de la estrategias que probablemente satisfagan esas demandas y luego vigilar la
familia, es importante considerar las vías para la resiliencia a nivel eficacia de las estrategias elegidas, reevaluar las situaciones cambiantes y
familiar. modificar las estrategias según sea necesario (Bonanno & Burton, 2013).
A nivel de la comunidad, es más probable que se produzcan La flexibilidad, más que un conjunto fijo de estrategias, es una
resultados resistentes en las comunidades con una mayor cohesión consideración crucial para mantener la capacidad de recuperación. Por ello,
social (Heid, Christ-man, Pruchno, Cartwright, & Wilson- se alienta la investigación para evaluar el efecto de la flexibilidad a medida
Genderson, 2016), menores tasas de delincuencia (Mandavia) y & que se desarrolla la situación de COVID-19, a fin de identificar las formas
Bonanno, 2019 menos exposición a los desastres (Gruebner). et de facilitar mejor la salud mental pública.
al., 2016Otros factores importantes son el posible impacto
negativo de las disparidades en materia de salud, como el acceso a
la atención de la salud y la situación socioeconómica, en el miedo
y la ansiedad. Las investigaciones encaminadas a comprender
mejor los orígenes de las disparidades en materia de salud en el
contexto de COVID-19, los efectos de la desigualdad percibida en
materia de salud en la psicopatología y las políticas conexas que
procuran reducir la brecha de la desigualdad son fundamentales
para mantener la capacidad de recuperación de las comunidades.
Dado que cada factor de resiliencia por sí solo sólo tiene un
efecto pequeño, los análisis que incorporan múltiples factores de
riesgo y resiliencia que abarcan los ámbitos de la exposición,
individual, familiar y comunitario (para un examen, véase Chen,
Bagrodia, Pfeffer, Meli y Bonanno, 2020), son esenciales, ya que
tienen el potencial de revelar la interacción de múltiples factores
de resiliencia. Además, un enfoque más centrado en la persona,
como el establecimiento de perfiles de los factores de resistencia y
la vinculación de esos perfiles con los resultados puede ayudar a
identificar a las personas de alto riesgo y permitir intervenciones
tempranas.

La importancia de la flexibilidad
Aunque hay varios factores de predicción que se asocian
sistemáticamente con la capacidad de recuperación, cualquier
factor de predicción por sí solo sólo ejerce efectos relativamente
pequeños y explica una pequeña porción de las variaciones de los
 Comentarios
finales
Los estudios sobre el impacto de COVID-19 en la
salud mental están empezando a salir a la luz en miles de
poblaciones y en todo el mundo. A pesar de la gravedad
de la pandemia, es probable que la mayoría de los
individuos sean resistentes. Como sugieren décadas de
investigación, la resistencia psicológica se basa en una
serie de factores en todos los ámbitos, incluyendo la
exposición, el individuo, así como la familia y la
comunidad. Para comprender mejor el impacto de
COVID-19, así como los factores de mitigación, los
estudios deben integrar los factores de resistencia en
diferentes niveles dentro del marco de diseños
longitudinales y prospectivos, a fin de determinar
predictores sólidos de los resultados e identificar a las
personas y comunidades más vulnerables y necesitadas
de intervención. Además, según los modelos teóricos de
flexibilidad, es probable que la función de cualesquiera
factores de resistencia cambie a medida que se desarrolle
la situación de COVID-19, lo que pone de relieve la
importancia de prestar atención al contexto en el que se
utiliza una estrategia de reglamentación y de modificar el
uso de la estrategia en respuesta a las cambiantes
demandas de la situación.