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éQué son los valores? Introduccién ala axiologia por RISIERE FRONDIZI FONDO DE CULTURA ECONOAIICA México Bacuos Aites Primers edicio, 1958 Derechos sexerados couforme a le ley © Fondo de Caltora Honoris, 1958 Av. de la Universidad, 975 -Meuco 12, D. F Iovpreio y heeho en México Printed snd ade in Mexico I 2QUE SON LOS VALORES? 1, Ex. stunvo pe 10s vatones Los valores constituyen un tema nuevo en Ta fos fia: In dseplina quc les stadia —la axilogia— ensaya sus primeros pasos Tra eatatos continga conterando todas as catacte fermgn pate, del set del cic, Se el clos ua ine risticas del mérmol comin —su peso, su constitucién ho puede haber 1m hietro, una tela o un matmol quemno aquimiea, su dureza, cte—; se fe ha agregado algo, sin tenga color. El color pertencce a la realidad del obje- Sinoe, que Is ha conterido en esa, Lo" que tora u se, La‘eloganes Te aided 0 ta belles se le ha agregado es un valor estetico, Los valores no cambio, no forman parte necesariamente del ser del ob- liar, le condena a una vida “parasitaria", pero tal idio- sincrasia no puede justifieat la confustn’del sostén con {lo sostenido. Para evitar confusiones en el futuro, con: viene distinguir, desde ya, entee los “valores” y los “bienes”. Los bienes equivalen a las cosas valiosas, esto 1s, a las cosas mis el valor que se les ha incorporadc ‘Asi, un trozo de mérmol es wha mera cosa; la mano del ‘scultor le agrega belleza al “‘quitarle todo To que le sobra”, segxin la ie6nica imagen de un escultor, y el mir molcosa se transformari en una estatua, en un “bien” 2 29k son 10s vatonzs? (ito, pus Pusden exstr cosas que no tengan tales (alors “"Cualidades terciatias” Yam6 alguien a los valores, a fin de distinguinos de las ottas dos clases de cualide dics. La denominacién no es adecuada porque los valo: ‘es no constituyen una tercera especie de ctalidades, de seuerdo a un exterio de division comin, sino una clase fucva, segin un critetio también nuevo de division Mis spropiado seria afirmar que Tos valores son “ux {itsee ise” ong’ ele py como ‘mos, no agtegan realidad o ser a los objetos, sino tan Slo valers Ciialgniera que sca Ta denominacién, To cierto es que los talores no son cosas ni elementos de Icosas sino propiédades, cualidades sui generis, que po- fae certo? objctos lamatios Bienes Como las cualidades no: pueden existc por si mis- amas, los valores pertenceen & los abjetos que Hssedl Tlama “no. independientes", es decir, que’ no tienen sustantvidad, Esta propiedad, aparentemente sencilla, es una nota fundamental de fos valores. Muchos des Carlos de cirtas teorias axiologieas objetivistas se deben al ohido de que o valor es una cualidad, un 2djctivo, Tales tcorias tesbslaron del adjetivo al sustantivo, y al sustantivar al valor cayeron en especulaciones sin Sen tido yen la imposibilidad de descubsr su catdeter pect liar, La filesofia actual se ha curado de la tendencia tradicional de sustantivar todos los elementos constitu tivos de la teaidad. Toy se-destacan, en cambio, los erbos, los adjetivos y aun Jos adverbios, Detris de muchos sistantivos tradicionales hay un adjctivo im: plcito. No hay que dejarse engafat con cl lenguaje. La Tengia asimila las forinas de pensar que prevalecen y Ia mueva teoria no pide qutedar prisionera de la len- gua exige hibits Ingusticos que se adapten mejor a fas nuevas formas de pensar Por ser cualidades, los valores son entes parasitarios ne no. pueden vivir sin spoyarse en objetos re2 i Sy te Rig exstencia, a1 menos en tanto adjetivos \ PoLARIDAD ¥ JaRAnguia b de los “bienes”. Micatias que ls culidadcs primatas 20 pueden climinarse de los objeto, bastan uns golpes 4e martillo para teminar con lv wbilidad de vm instr mento o ls belie de wna esata, Antes de inconpo fine a repectivo portador depostari, los valores fon. mcras “posibilidades", esto es, no tienen cxisten ve No hay que confundic a Tos valores con los Tamados abjetor,ideales —cxcncias,relacioncs, concepts, ents matemsticor; la diferencia est.en que ésts som ide Tes mientras que los valores som ireales. Mejor se ia diferencias se compara Ia alles, que etn valor, on Is iden de belleray que es un objeto ideal. Capt nos {a belles, psimordilmente, por via emocional, mientras que 1a Wea de belles se'apschende por vis intelectual Una obra sobre ctética no nos produce ninguna emocin, pics ests consign, por conceptoe {iptoposciones con sigifcacion y sentido intletoal Ag Scede To msnio con tn pow, donde lt metifora {que ust el poeta tiene una intencibn expresiva y de ontagio emocioal, ¥ no repicsentatiea ode. conock Imiento. De ahi tambien que lor cadores de bales “poets, pintores, componitores— san con frecuencia andiostebios sin Gel propio arte gue eave, ‘Acestimbrae 2 dstng Ion valores de los objets ideals afirmando. ge con sitimos "son", mientse gue Ios valores no "son" sino que “alen”” Esta dis Ahem de Lotz, como veremos en los capitals siguien tee, muy Gt par destacar una diferencia entre ob. jetos que habitualmente se confunden, pero cs tbrie- mente objebe 3. Ponaribap ¥ ERARQUIA Otra caracteristica fundamental de los valores es Ta polardad. Mientras que las cos son To que son, los flores sc presentan desdoblades valor pitiva y €l correspondiente valor negative, Asi, a la belleza 4 {QU SON Los varones? se le opon¢ la Fealdad; 2 Yo bueno, lo malo; a To justo, lo injusto, etc... No se crea que el disvalor, o valor nega tivo, implica 1a mera inexistencia del valor positivo: el valor negativo existe por si mismo —“positivamente”’ yy no por ausencia del valor positive. La “fealdad” tiene tanta presencia efectiva como la “belleza"; nos topa ‘mos con ella a cada rato. Lo mismo puede decirse de los demis valores negativos como la injusticia, Yo des- auradable, In deslealtad, ctoétera Se ha’ dicho muchas veces que la polaridad implica 1a ruptura de Ia indiferencia. Frente a los abjetos del mundo fisico podemos ser indiferentes. En el momen- to en que se ha incorporado a ellos un valor, en cam- bio, tal indiferencia no es posible; nuestra reaccién —y dl valor correspondiente— serin positivos o negativos, de aproximacion o rechazo. No hay obra de arte que sea neutra, ni espectador que pueda mantenerse indie. rent al escuchar una sinfona, let un poema 0 ver un ‘Los valores estin, ademas, ordenados jerirquicamen- te, esto es, hay valores inferiores y superiores. No debe ‘confundirse la ordenacién jerirquica de los valores con a clsficacion de os mismos. ‘Una casfacion uo ‘implica, necesariamente, un orden jetirquico, Se puede clasificar a los hombres en gordos y flacos, altos y bajos, solteros y casados, ete, sin que ninguno de los grupos tenga mayor jerarquia que el otro, Los valores, ef cam: bio, se dan en su orden jeriequico 0 tabla de valores La preferencia revcla ese orden jerarquico; al enfrentarse a dos valotes, el hombre “prefiere” cominmente et su- Perior, aungie a veces “eli” el inferior por razones Circunstanciales, Resulta, desde luego, més sencillo indicar que existe un orden jérérquico que sefialar concretamente cual es este orden, No han faltado, por cierto, axidlogos que han propuesto “una” tabla de valores con la pretension de que Se trataba de “la” tabla, La critica ulterior ha rmostrado los errores de tales tablas y especialmente de oLanipan ¥ yenangvia 15 des criterias que se habian utiizado pata determina. Un ejemplo Zonereto de tal afiamacion lo constitve la fab ssiologien de Mas Scheer, expuests en el capit SIV, que ha sido tomads como. paradigma en diecio ana tratadon en lengoa estllna, y que et lejos Ge ofrecer sepuriad y consstencia Tr exsencia de un orden jetdeguico es una incite fmorak El sentido creador ¥ ascendente de la vida se asa, fandamentstmente, chia afirmacin del vloe postive frente al negative y del valor superior fente al EI hombre individualmente, tanto como las com nidades ¥ grupos culturles conertos, se snanejan con guna tabla. Hs cierto que tales tablas no son fas Sigo fluctuantes, y no siempre coherentes, pro es ind Gable que nucstie compottamiento frente af prjimo, sus Sates fas exenciones estas, et, som jorgaos pref fidos de acuerdo a una tabla de lores Someter'a un fxamen Fetiva quedaré todavia por decidir qué aspecto de. la Subjetividad es el que da'vigenea al valor. qTendtin as cosas un valor porgue sos agradan? ZO seid, unis bien, Porque lis descamen, 0 porge tenemos interés en ellass EY bor qué tenemoriaterés en clrtas cosas en otras hore gPor que nos agrada o prefeinos esto 0 aquello? ‘Sea eel pli capi 0 fab algo detesninadot™ , fr de un mode Y caemos, asi, en el objtivisme. Aqut tampoco las cosas estin muy” cats.” jE el valor completamente sieno a la constitucion biologics y psicogica del hom ier 20 toda la objetividad eonsiste en gue ol hombre, al enfrentar om valor, no. pucde dejar-de reconcccrlo? 26 paonteatas DB 1A axtozociA {No seti la objetividad de um orden completamente distinto? Una dbjtividad soca, por eemplo, en la que ia objetvided dl valor_descansa ene carictr inte: Subjetino de la reaction? Y volvemos al aubjetivsmo, swt go te, dunn poston a conte siay de ta aa pier, nos hace pensar que quizis la tilted se dene de-que problema fa sido mal planteado. jTendid que sere valor necesatamente ob- Fetivoo subjetive? (Sistema de la teoria de los va lores), y um afio después el segundo tomo," en cuyo apéndice encontramos un eco de esta polémica, mag: nifico ejemplo de discrepancia creadora, Toda polémica fecunda supone que la dliscrepancia deseanse em un acuerdo sobse puntos fimdamentales Cuando el desacuerdo cs total, cl didlogo se tora impo: sible y la disputa resulta estes. Meinong y Ehrenfels no s6lo tenian en comin una misma orientacion subjeti vista sino también un maestro; Brentano, Sin contar la amistosa relacion personal y académica que los unia. Reducida a tétminos escuctos, la polémica se puede sintetizar asi. Sostenia Meinong ‘en sus Investigaciones pricoldgico éticas que es necesario partir de la valoracién ‘como hecho psiqiico. Cuando examinamos tal hecho psiquico encontrimos que pertencce al campo de la ‘ida emotiva, que sc trata de un sentimiento. De acuer do con Ia teoria de Brentano sobre la facultad de juz gar, como postulacién de la existencia 0 no existencia de un objeto, sostiene Meinong que tal sentimiento es de existencia, De modo que en toda valoracién esti im plicito un juicio que afizma o niega la existencia de tun objeto; asada en tal juicio, se produce en nos: ctros un estado de placer @ de dolor. El valor es, en verdad, un estado subjetivo, de orden sentimental, pero se mantiene una referencia’ al objeto a través dal juicia existencial. scribe Meinong que “un objeto tiene valor en tanto posee la capacidad de suministrar una base efeetiva a un sentimiento de valor Ehrenfels advierte muy pronto que la tesis de Mee hong tiene un gran defecto. Si una cosa es valiost ® Vol, Ls Allgemeine Werttheore, Leipzig. 1897. 8 Vol. I: Grundatge einer Ethik, Leipag, 1998. + Povchologischeetinsche Untersuchungen aur Werttheo rie, Graz, Leuschner U. Lnbensky, 1894, p. 25. 0 as poctRINs suByEKIVISTAS cevando es eapaz de prodacie en nosotros un sentimiento de. agrado, sera vaonas tan sl Tas cosas existent, En verdad, valoramos tambicn lo que no existe: I js ticia perfect, el bien moral jamis realizado, Por esta tarde, no erce Ehrenfcls quc'el fundamento de 1s va lores peda encontrarse en el sentimiento de placer 0 agrado, sino que hay que buscalo en cl apetito, en cl deseo. "Son valjosas Is Coss que deseamos 0 apetecernos ¥ porque las deseamos y apeteceros. El traslado del fundamento de ls valores del agrado al deseo. no implica, por supteste, una. modifiesién Susana de Ia tess subjetissts, peo permite a Met hong hacer slgxnas objeciones que oblighrin a su colega 41 renjstar la doettina. En efecto, sostiene Meinong {qe cl valor de un objeto no puede depender de que Se lo dese o apeterca, pucsto que se desta lo que m0 se posec, y valoramos, en cambio, lis cosas cxistetes, que 2 poscemos, comb cl euicr‘guc tenemos , pene ” los valores, Perry dja de lado las teotis objetivitas y bhusea el otigen y findamento del valorem cl sujeto que valora Después de examinar y deseattar (cap. ID) las to rias que niggin la rclacion entre el valor y a interés, firma que un objet adquiere valor cuando se le pests interés, No se efea que Peny sostiene. que cl abjeto debe tener determiada cuidad para ser vaioso, 0 que tiers y_determinados interses son Tos unicos apa ces de Gonfesr valor a un objeto; pars 4, cualquier inte’s confere valor 2 cualquier objeto, Lo die ex prestmente: "Lo que cs objeto de inteis adquiere co [peo valor. Un abjeto, de cualquier clave que se, Aguiere valor cuando se le presta un interés, de oval aquier lage que sea"3# WVeintioclo afios mis tarde, al publicar una nueva investigacon sobre los valores, ttulada Realms of Value, teltera Perry su concepein del valor como 1 propi. dad que aguiere una cosa al ser objeto de interés. Se expe on trmins que reeves yg fo pueden dar lugar a equvooos: “una cost —eualguie Fa que sei tiene valor, 06 valios, en st sentido or tha publiido las siguientes obras: ‘The Approach to, Philo Sophy (1905); The Moral Economy (1908); Present Philso Phical Tendencies (1912); The Preset Conflict of Ideals {1918); Philosophy ofthe Recene Past (1926); The Thought nd Character of Wliam James (1933); In the Spit of Wittors Jones (1938); Shall not Perish fons the Earth (1940); Pantano and Democracy (1944); Characterastiealy ‘Amerzon (1949) 18 Deca el capitulo Hl al examen de 1a tes que soe tiene que el valor depende de un “qualified objet of inerst Yel capitlo TV aa que afrma que el valor Gepende oc fin “qualified intrest 22 That which isan object of interest feo ipso invested with value. Any objec, watever it be, aeques value whene Yer any interest, whatever i be, i taken nH.” General Theory Of Vatuey 2 ol. (Cambridge, Mas, Harvard Univesity Pres, 1980), pp. 115116. 48 LAS DOCTRINAS sUnyurBvIsTAS ginal y genético, cuando cs objeto de un interés, eusl- Guess que sea. O, lo que e objeto de interés es ipso facto valioso”.® Se puede cstablecer, por lo tanto, Ja siguiente ecuacién: “x es valiosa = Se ha tomado interés en x2" Si cualquier clase de interés confiere valor a cual quier clase de objeto, sea real 0 imaginario, el con cepto de interés adguiere singular importancia en axio- logia, De ahi que Pery le havi dedicado sm euidadoso studio que el lector podra leer con provecho en Ia abra itada?? El “interés” tiene que ver —segiin Perry con toda la vida afectivomotora y no debe sestringirse a su sig nificacién comin, En muchas eircunstancias podri sus tiluitse este términa por “deseo”, “voluntad”, “propést to”, No tiene, desde Inego, el significado habitual de “curiosidad”” 0 de “‘objeto capaz de provocar cutiosi dad” (interesante), sino que desea expresar una actitud compleja de todo ser vivo de estar a fwor 0 en contra de ciertas cosas, Comprende, por To tanto, el deseo Ja aversion, Ja bisqueda y dl techazo, el agrado y el desagtado; por otra parte, el interés no se refiere’ tan sélo al estado sino también al acto, disposicion o actitud cn favor o en contea de algo.®® La velacion del “interés” a toda la vida afectivo-matora revela las preferencias de Perry por la psicologia ‘cientifica” v eb rechazo del dua Tismo cartesiamo de alma ¥ cuerpo? Perry parece dejar completamente de Jado las cua- Tidades del objeto mismo, capaces de provocar en nos fatios cl interés que transforma al abjeto en valioso, 20 Realms of Value. A Critique of Human Civilization (Cambridge, Mass, Harvard University Pres, 1954), po 3 2 General Theory of Value, p. 16. 22 Veanse especialmente los. capitoles sobre el aspecto Diolégico del interés (cap. VI), Ja deinicion psicoliyiea de interes (cap. VII) y los modos de interes (caps. VIIEX), 2 General Theory, p. 27, espec. n. by § 49. 34 Ibid, pp. 142-145. a, pane ” I silencio del desirto caroce de valor hasta el mo- snento que alsin viajeo errant lo encuentra. desolado Y ateraor, lo mismo suede con Ta extarata hasta que tna sensiblidad hemana la encuentra sublime.” == Por qué ol visjero encuentra deolido y atetrador al desieto'y sublime la eatarata? :No sexd porque el dlesierto posce cualidades distintss 4 a cataata ¥-que de un modo también disunto? Desde Iucgo, el de sieto no. pods ser aterrdor sino hubiers homboes tapaces deatertuse, pero de lal verdad no puede de al atetramos. Las palomas. podsian provocar tetror a tun neutatieo sin que ese hecho nos permita alinnae en mils otis subjetvistis, una eaptilizacon inde. Bida'en favor de la propia doctrina de los ereres del objetivism axilégib. ‘De la juste armacion de que Sligo no puede scr aterrador st no hay un sujeto que To tales, tan solo puede deduce, Ieitimamente, que el Seto valorante no poe ser deseattado al examina la naturleea dal var. parte, tend: que eafzentar, adouis, lis difeutades {ue suagen al querer identifica lo "bueno con la tee on pscolgin. ‘Si tomames al pie de Ia letea la definiion de Perey, que firma que tina cosa eusTqticra tiene valor cuando’ objeto de un interés cualguic, Ta werdad es que los tenemos y que en ef plano ctico habrd qe adie al texts un eilfiatvo de orden mo ral: habs intereses malos'y_buatos. Ea tal eito ls defivieiin pscolgica sve muy poco, pucs el catitet valioso lo da el adjetivo que se le ages, Si esti ausente el activo que confer valor al ob jeto, pareceria que se earecera de toda forma de deter 2 Ibid, p. 125. 50 as poctainAs sunsenivisras minacién de To “mejor”, ya que éste supone lo “bue- no". Petry no comparte ella tesise intenta determi Jn cicala 0 medida de los valores con eiterios que tie sien que ver con st interpetacon de los valores mismos Perry enuncis tes esters: intensidad, referencia amplitad# Un objeto —el vino, por. cemplo—e mejor que otro objeto —l agua, por ejemplo —si el finterés "en l'vino! mds intense que el interés en al agus, si el vino cs prefeido al agua y si d interés en el vino es mas amplio que el inferés que se tem i en cl agua Sostene Perry que estos tres eritris han sido re conocidos tanto por la filosofia como por el sentido comin. La excuda hedonista ha destacalo el principio dela intensidad, cl huimanismo cl de la prefrencia Yd tigorsmo moral el de la amplitad. Los tres pric pios son independents, en cl sentido de que no pueden ter redder nos aor, 2 ign, deen er éomtemplados por toda teoria que pretenda dae eritercs vilides sobre Ql valor comparative de los objets. 5. EL EMPIRISMO L6cICO ¥ LAS NUEVAS FORMAS DEL, soByErnvIsNo Con el empirismo légico se inicia una posicién real: mente nuieva en Ja filosofia contemporinea. Que sea fueva no quiere decir que sea verdadera. Es sintoma de falta de madurez cultural tomat por verdadera —o ‘mis préxima a la verdad— la altima obra publicada, El progreso en filosofia es muy distinto al de las ciencias no tiene, desde Iuego, un Sentido lineal ascendente, Seftalamos la novedad de este movimiento filos6fico con el propésito de poner al lector en guardia frente 29° Tales cciterios corresponden a las magnitudes intens vas, distensivas y extensvas, sefialadas por W. F. Johnson en sr Logic, parte Il, cap. VII, como lo reconoce el propio Penry Perry, General Theory, p. 248. x EMiniswo Lécica 31 posbles confosioncs. Es cierto que la tesis del empi- Fismo Iégico puede. considerase. como una expresion del subjetivimmo —y por tal tazdn Ta mcluimos en este capitulo— pero tal subjtivismo no coincide eon el an terior y se Seibaa€l por una via que las formas ante Hlores no habian contemplad, ‘Acostimbrase a tomar como punto de partida dd empitsmo lgico la obra de Ludwig Wittgenstein Trac tatus Logicophilosophicus, publicada por primera ver en 1921 en fos Annalen der Natusphilosophie de Os Wald. Como sucede con todas Tos movimientes filosé Ficos,pieden encontrareeprecursores 0 antecedentes en al pensatiento anterior. En general, todos los flésofos que han tendo una attad anti metfisia podsian fign far en la lata de procursore En la antigitdad, los $0 fistasy Tos epictineos han sido expresamente mencionados por representantes del empirazno logic; en a edad Inedia los nominakitas yen. époea modema Otto Neurathy da tres bstas torrespondientes a. Inglater, Francia y Alemania.® Como el empizismo légico tiene vasias diteciones y se hi interesado en dstintos problemas, los antece: dentes varian en cada caso, No hay que coufundit, por dott parte, Los antecedentes con Tes movimientos con temporincos similares. E) pragmatimo,insteuentlis ro, operacionalimo y la etcuela analista ingles tenen muchos puntos de contacto con el empiima Togico pero no eonsttuyen, por cierto, wm antecedente Cuilesguiera que sean Tos antecedents, es comecto tomar la cbra de Wittgenstein ecmo punto convenci nal de pattida, pues ess primera expresién escitsy Ta 28 Bacon, Hobbes, Locke, Hume, Bentham, J. S. Mill ¥ Spencer, ex Inglatera; Descartes, Bayle, ‘D Alembert, Saint Simon, Comte y Poincaré, en Francia: Laibniz, Boleano y Mech, en’ Alemania. Otto Neurath, Le Développement du Gerele de Vienne et Tavenir de Tempivisme Togique (Pais Hermann & Cie, 1935) ane difandié cn el mundo entero algonas de sus tei principals TE] niceo ini del empirsmo logo, sin embargo, lo eonstitye 1 Mamado Citculo de Viena (Waener Kreis) que se forma aededor de-un seminatio dit sido por Morite Schick en 1925, En 1925 eh nscleo taba clasmenteconsituido yal flo siguiente el me ramiento adqacre naevo impudso alse llamado Rodolt Eamap ata Universidad de Viena. Muy pronto la obra de Camap Der fogiche Aufbau der Welt (Ber 1925), yen particular su too sobre Ia constitu de len concepts empiicos,y el Tactatus de Witlge stein constitnven Tos temas centrles de dlscusion del Cire Ta labor de este gmpo iniciat adguiere significa Gibn Intemacional al publica, on 1939, so programa de ideas bao cl ilo de Witsenshuftiche Weltacfas sung: Der Wiener Kres, Ta unificacion de le ceneia heitsusveschaf) insite vo de ls primers rnéviles del grapo, El proceiento pat lsat la uh fieacin de las ccncis, tanto fsieas como. socks 0 cultorates, incluyendo ala propia fosofia, debe set Al meted bgico del anise, tl etal habla Seo ine Giado por Peano, Frege, Whitehead y Russel. Dicho 2 Recuérdee que un ato despus de su apr en ls Annaler, se publics en forma de Hono ol texto ginal alemn acompaiado desu traducin al igles London, Routledge & Kegan Pa 192) "a acid gu I dpeson Reel Y oltas figas prsigose dela Hosta ingesa. asegurron fran diesen af Tracure . 26 Sobre Ia iiclacibn y desarallo del empitiano Lic, vase H. Feigh "Logi! Pnpincim’ cn Twentieth Century Phifosophy, ed. por D. D. Runes (New York, Philosophical Library, 1947); Joegen Joergensn, The Development of Lo shel Emprciom (The University of Chicago Pres 1981); Otto Neurath, Le Développement au Corse de Vienne, ef Tevenir de Tempirime logique (Pars, ‘Hermann “& Cit, 1935). 1 maPIRSNO LécIC0 3 método permit eliminat los problemas metatcos y todos I afmaciones que caceeran de significa, ¥ serra para aclaar los conceptos las proposiciones Ge as cil empiies al mostrar sn contendo obser ‘able en forma inmesiata (das Gegebene) EI andlisis Iigico permite, por lo tanto, determinar €l significado. de ls proposiiones empires, reduce dolas a. propesiciones simples sobre lo dado empit Samente ea forma nme,” Adomas dei. Pro posiciones empiricas exten las. proposciones Mamas Inctafisicas. que earecen completamente de sentido. Ta Tes proposiciones no airman mada no psdem, por Consguiente, ser declradas verdadero atss. Son, tan silo, expresion de un estado. emociona, pert. fnecen mi bien al arte y earecen de todo contenido tebico 0 cognosctiva sta doctrna inial del Cirulo de Viena se man- tendei en lines generales en el desenolvimiento ul terior del empinsmo ligico se extenderi de la meta fsa a la teoria de log valores El anilist légico del lenglaje condsjo fcsbmente al problema de lr siguificacion, 7 wba nueva disiplina ftostica surg igorosa de manos de Tos cipititas lisicos: la semantic, El problema axioligco pudo muy pronto reducise al examen del sisnificado de términos Eomo “bueno”, “bello, justo” y ottos de importancla semejante en el mindo de les vires: Ten verdad, dos hombres que no pestenceen al em irsmo Togico se habian anteipado 4 realizar ‘un an Fis semerante y habian Hlegado a. conchsiones smi Tare 9 las de aquel movimiento. C.K: Ogden © 1. 8 Richards en ln obra egerta on comin y titolada El sig nificado del significado planteaon, en 1923, ta nece Sidad del ands de la signfienion de ls p Cle, Wisenchafiche Welayfasung. pp. 16:7 © The Meaning of Meoning. A Sty of th Tnflonce of Language upon Thoght and of the Soence of Symbaion (landen, Routcdge Kegan Pal, 1923) 54 as noctaisss supyermisnas 1a tlacién de lenguaje con el pensamiento, Estos hom- bres, que no sn fotos sino estogioses de Ta lengua, dentncaron, através del aniisissemsntco, a exists de numerots psendo problemas flossicos, Muchos de estos problemas stugcron de la ambiguedad de. pal bras fndamentales en la flosofia listen, como stan is, existence, Hay dos téminos que rpresentan tadiconalmente tos conceptos bisioo dela ica» de a esta: el bien y'la belles,” Se tata, por otra pace, de dos valores Fandamenties, De modo que el andl que hacen Og: den ¥ Richards de estos teminos nos revel una acti srilogin "Veamnes a intqpretacién del palabra bueno (good) Eserben: "Se dice que este concepto constituye lob jeto de cstudio de laeticn Sugerimos que este pecliac tso ico de la palabra "bueno! tiene un eatiter pura tmente emotivo. Caando se Inia asta palabra ho repreenta nada y no tene ningung uci sino ia Pox semplo, tino aos en I orci Esto & bueno’ now referimos tan slo.s eto, ye apegad de “x bueno” no modifica en nada mucstta teferencia, En cambio, cuando afimamos ‘sto ts oi0s eh ae gado ‘es rojo smboliza una extension de musta re fereneis, eto ea ott cost to Pero “es bueno’ no tiene singina funeién simbolica semejante, sine tan sélo. como in signa cmotiva que exptes. nuestra delta hac este Una actited semejante, como veremos mis adelan te, adoptarin varios representantes del emptimo 1 gico. Eales hours cen, senelamente, que no dee tos nada cuando usimos estan palabras que han sido son fondamentates en nist voeabultto disso. y 2 The Meaning of Meaning (3* ed, London, Routledge & Kegan Paul, 1930), p. 125. Ver tad, cast. de In décima cd. angles, TT significado dol significado (Buenos Ais, Paidos, 1954), p. 3. x ums 166100 55 filositico. No. decinos nada del objeto, acto o pet sona al Gaal adjudicamos la propiedad de ser "bien", Sino que express tn solamente nuestro propio estado sta doctrina va mds alli de ls Habitales con cepconesstbjetivistas. No conerimos nosotros valor tn objeto con nest agra, dese 0 infers —eomd sesicren los sobjtvata que hemos examinado— sino ge cometemos a eror de creer que estos, habla Gee ae'tn objeto crando, cn verdad, estamos “xpte Sango un endo inimice ‘No se tata, por ceto, de una acitud de estos pensaones fretena fa cen, Interpretacion semejante Facen dela palabra “bcllera® (beauty) 3* Tn otta obras Richards sotine una teu, axo- wien distntay de franca onientaionsubjelivta, "Algo tstlosg ~asebe-~ asa una apetencs in que fal sitsfocion smpligue a fustacin dena ape- tenci igual o mis importante” ©" Le resulta muy come Pils, desde Tueso, esablecer un criterio adecwado fara determinar ‘cl grado de smportanca de wn ape Fencia" Por ota pute, In doctina esti spoyada en ta Psicologia que Ho cumple con ls exigengas que mam se ha impuesto como fundamento de toda st tea Charles L. Stevenson, quizés con et desco de el minarlsaifcltadgs que se derivan dela determinacn Gal concepto. de "importante", interpreta a. doctina de Richards en un setigo cuantitativo, seber " Satioso” tiene el mismo significado que x sata mae apetencias que hs que fasta". Ta coneecibn 0 pa 34 Chr. The Meaning of Meaning, pp. 1465147 Principles of Literary Criticiom’ (New York, Harcourt, Brace & Co,, 1924) ‘6 Richards, op. ct, p48 ®t Ctr. ibid, p51 58 Clr, obra Ethics and Language (New Haven, Yale University Pres, 1944) p. 9. 56 LAS DOCTRINAS SUBJETIVISTAS rece aceptable pues la importancia de una apetencia, y con ella sur caricter valioso, no siempre depende de’ la cantidad sino de la calidad © tipo de apetencia En cualquier caso, como las apetencias varfan con los sujetos, Ta naturaleza valiosa de los abjetos variara de un individuo a otto. 6. Reporr Cannar Debio 9 os trabajos reazados, primero en Faropa ¥ luego en Norteaméren, = Ia infueneia pesooal gt Eida en Wes univeridades de’ Viery Prog © Chicago, Rudolf Carnap (n. 1891) chow la cates print del anpinsmo Wgico, Mucho puede csperis an le este hombre que cst tbsjando en la setatidad con tsibucién de Caronp al deartlto del emprinno Iigico tecerdar sus trabajos principals, antes Ge ital probe Como se recordar, Caenap fe Mirada a ta Uni sessed de: Viens on 1926, Cuando el ermpissno Ie sco diba sos primeres pases giado por Setiek™ Dos sos dopaes publi st mportante ob titada Der legiache Aufbau der Welt [La construcién Vice del mundo), en ta que desacella sy teria del constitucton tmpiies de tot congeptos que dio gam ‘mpuso Gireslo de" Viena. St abst pencpal pubicada en Koopa, els que apireca en 1954 con el tito de Logie Syntat der Sprache, que dos sios dspuds ® Fhe profesor en Viena (1926-1951), cn la Universidad Alemana de Praga (19311935) y en la Universidad de Chi ago {1935-1954}, En la actualidad es profesor en Ja Uni verndad de California, RUDOLF CARNAP 7 se publicé en inglés, con algunos agregadas, bajo el ti tulo de The Logical Syntax of Language” La expansién del hitlerismo en Europa obligé a Car nap, Reichenbach y otras miembros destacados del enn pirsmo légico, a abandonar el continente curopea y establecerse en Norteamérica, donde muy pronto conti: rnuaron sus investigaciones.* ‘Ademas de su labor docente cn diversas universida des norteamericanas, Camap contribuyé al desarrollo del ‘empirisma I6gico con vatios atticulos y cuatro obras fandamentales: Foundations of Logic and Mathematies (1939); Introduction to Semantics (1942); Formaliza- tion of Logic (1943); Meaning and Necessity (1947 in sus obras Logische Syntax der Sprache y en Phi- 49 Una exposicin mis sencilla de Ia teotla expuesta en esta obra se encuentra en su trabajo titulado Die Aufgabe der Wisenschafslogit, publicado cn I934 ¥ que constituve el tercer vokumen de I coleccin “Binheitissenschaft’; yen sis tres conferencias de la Universidad de Londres en oct bre de 1934, que se publicaron un ato despaés con el nombre de Philosophy’ and. Logical Syntax AU The Journal of Unified Science continu bajo la di recciin de Carsap y Reichenbach la labor iniiada en 1930 por la revista Evkenntnis. En 1938 se iniciaron dos series de publicsiones. Una titulada Library of Unified Seienoe Series F otra, que se continia aim publicindo, con et titulo de International Eneyelopedia of Unified Science. F1 Congreso e Harvard, scaliado en 1939 los trabajos de los repre Sentantes del empitismo logico demuesiran la. continuidad de la Tabor. Una década después do la legada de Carnap 8 Norteamézica el empirisme logico habia pencttado a tal punto en el pensamiento norteameticano he constituia la dieciin mis pujante de la Hlosofia en el norte. Hace nos pcos ator sa influencia comen2) a declines, pero cl im pacto del empirismo ligico esti definitiwamente incorporado AT pensamiento. norteamericana. Tn Hispnnoamérics, sin flvencia ha comenzado a hacerse sentir en Tos sinos anos Lo mismo que en Europa, el movimiento se inicio entre hombres dedicados a la matemética y la fisia, 58 148 DOpHRINAS sURJENIVISEAS Iosophy and Logical Syntax examina Carnap €l proble sma de la ctica y enmeta si less sobre la atiologin Para Cataap, Ios juicios de valor son formas disfra zadas de normas o imperatives, Entre el juicio de va for “matae es malo” ¢ el inperatico “no mates” no has ninguna diferencia de contenido, sino tan solo de forms Jacién. Ahora bien, Ia norma no afiema nada sino que ordena 0 expresa un deseo; ‘igual cosa Te sucede, por Jo tanto, al juiio de valor corsespondiente. En ambos casos se trata de la expresién de un deseo. La forma grama. tial dl juicio devalor eso ave ha engasado mitch quienes, al crcer que se trataba de una afirmacion, bus aban argumentos para probar sa verdad o fasedad, Pero dd juico de valor no afitma nada ¥, por consiguiente, no puede ser ni verdadero ni fal. En el lenguaje trad ional del empirismo légic, tal juicio no es verificable y carece, por lo tanto, de significado? Mal podria 18 En carta divgida 2 Ray Lepley, adlara Cammap que se refiere al significado cognoscitivo ¥ que niega tal significado las afirmaciones sobre valores absolutos. No adepta seme: jante actitud cuando se trata de las probables consecuencias ‘que padieran tener determinados actos” Esenber “Llamar bie zhao mala a una determinada clase de conducta puede sign ficar 10 mismo gue si se dijera que es un modo adeeuado 0 in adeewado para logra sm determinade fi, Por ejemplo, ‘uatar « malo’ puode quoter decir lo misino que ‘matar no es un ‘mado adecsado para promover la vida artnoniosa de la coms: hidad’. Si se basa en sina interpretacn de esta naturaler, f devi, si se habla en términos de funcién instrumental © de intereses homnanos, o algo semejante, um jucio de valor tiene, por cierto, contenido factual, cognoseitiva”. Y agroga "Como Ia palabra ‘significado’ se usa a menndo en an sen: tido ampli, deseo destacar que Ia case de significado que nicgo 2 fos juicios sobse valores absolutos es tin silo el ig nificedo cognoscitivo. ‘Tale jicios tienen, por ciesto, signifi cin expresiva, especialmente emotiva y de incitacon; este hecho es de gran importancia por sis consscuencias socal” Chr, R. Lepley, Verifahilty of Value (New York, Columbia University Pres, 1944), pp. 137-138, nota 14 ALVRED AYER 9 constituisse una ciencia filoséfica, como la asiologia, con juicios que no son ni verdaderos ni falsos, esto cs, que no afirman nada, sino que expresan un deseo. Carap no niesa, segin sus palabras, la posibilidad y la importancia de una investigacién cientifiea sobre los juicios de valor y los actos de valoracién. Por sex actos de individuos conesctos, tales hechos pueden ser abjeto de investigacién empirica. Los historiadores, psi- célogos y socidlogos pueden analizar y dar explicacio- nies eansales de dichos actos; cualquier estudio de esta naturaleza tiene carécter empirico y, por lo tanto, es legitimo, 7. Avene Aven Una concepeién cereana a la del empirismo légico «sla que sostiene el fildsofo inglés Alfred J. Ayer, de la Univetsidad de Londres. Coincide con el empitismo Y6gico al afirmar que los Yiamados juicios de valor, y cen particular los juicios éticos 0 estéticns, no. $00 ni verdadetos ni falsos porque no afiman nada, sino que ‘xpresan. los sentimientos de quien enuncia el juito. No debe confundirse Ia concepeién de Ayer con las docttinas subjetivistas tradivionales. La diferencia pue de mostrarse laramente echando mano a st distineion fentre expresar un sentimiento y afirmar que se tiene tn detenminado sentimienton "8 La confusion entre “afirmas” y “expresar” un deter- rminado estado de snimo se debe & que, frceuentemente, Ia afirmacion de gue se tiene ese estado. es in modo de expresién del mismo. Asi, por ejemplo, puedo ex presat que estoy abunido y afimar que To estoy, mi afc Iain puede tomarse como uo de os motor de ex resign de mt aburtimiento. Pero puedo expresit mi Shumimiento de oteo modo, sin legit a afimuaso El subjetivismo tradicional sostiene que el hombre que enuncia un juicio de valor afirma la existencia de Un determinado estado de dnimo; por ejemplo, st apro- 6 1s pocraas superwisras Sac al saloon cuestin. En tl ese, su ji ser verdadero 0 false, pes 5 ciesto.o no que dl tiene a GStido de Simo’ que firma, ‘ Pans Ayer, en cimbio, quem entcia wn jc ico, o de valor. sti meramente exprewindo “no afar do~ tn determinado setimiento. Y ta expresion de fami verdadera na careajada oun grito de teton Por ejemplo, quien ice" qu bello este cua!” no esta finmando nada sobre el cua —como pre tenden os objtvista—, ni sobre st estado di lomo quieren los sibjetstas—ssencamente es jresngo in estido de inimo. Podssiguaimente Gado wn grit de aleria o haber pronunciado una inter jsccu. ‘Rechara Aven. por ola parte, 1a. doctina tubjetsta que sstcne que amar una cosa 0 acto “Iytena” es fo mismo que deci que merece la aproba cid gene, pce no e contractor afimar quel ba doctina ‘estrctamente subjetvsta Pen oposiion 2a anterior de az socilégicx™ que sostiene ue a persona que afirma que un acto es correct, 0 na cos Brena, cre decir que merece su apron, En chew to, die Ayer; cl hombre que confess que aprocba to Incorrect, 0 20 malo, no se contadice = De acerdo con las doctrnas subjetistas y objet sistas tradicional, tos juicis de valor son verdadero 0 fano. Para Ayer no hay tal cova €lsotiene que no podemos dipitae sobre eustiones anoles, pucs st tn juieo de valor no implica na proposcn no pucde 0 Alfted J. Ayer, Language, Truth and Logie (London Gollacz, 1950), p. 1+, Su doctrina axialigica est expuesta en Ta primera parte del cap. VI. Ver tambien Introd, pp. 20: 22, La obra se publicd en enero de 1936 yen noviembre del mismo ano estaba en su tercera ediciin, En 1950 se hhabian impreso once ediciones; tal fue el éxito de esta obra tan valiente como dscatible, ALFRED AYER a haber proposiciones axiolégicas que se contiadigan, Y va mas alld: afirma que nunca disputamos sobre cuestiones de valor sino sobre cuestiones de hecho. Si estamos fen desacuerdo con otra persona sobre el valor moral de tuna aceién determinada es evidente que usamos argu mentos para convencerle que nosotras estamos en lo cierto. Pero no intentamos —afirma Ayer— demos. trarle que tiene una actitud 0 un sentimiento ético equivocado, sina que él esti en un error acerca de hechos que’ se sefieren al caso en discusién. Sostendre- mos, por ejemplo, que é no ha sabido interpretar los motivos que ha tenido la persona que ha cometido el acto, 0 que ha calculado mal los efectos de Ia accién, ‘9 que no ha tomado en consideracién las circunstancias cexpeciales en que se encontraba Ia persona que come- ti6 el hecho, Como la persona con quien generalmente disputamos ha tenido una educaciin moral semejante a la nuestra y vive dentro de nuestro mismo orden social, nuestros esfuerzos por convencerle com razones de he: cho, sobre una cucstin aparentemente axiolégiea, estin jnstificados. Pero si nuestro interlocutor no coincide con nosotros en la apreciacién axiolégica —después de estar en completo acuerdo sobre los hechos— por que tiene uma tabla de valores distinta 2 la muestra, tenemos que abandonat el intenta de convencerle pot medio de tazones. Sostendremos que su tabla de vae lores es ereénea, © que la nuestra es superior, peto no hhabri ningin modo de probar que cfectivamente es asi, putes tal afirmacién es un juicio de valor que no po demos respaldar con ninguna tabla. Por consiguiente, puede haber una discusién sobre problemas morales y axioldgicos en general s6lo si se halla implicita una tabla de valores. Toda discusiém axio- légica —y especialmente de orden moral— consiste en mostrar al projimo que el hecho en discusién pertenece al tipo de actos que él condena o aprucba, Para cow 44 Ibid, p. 110. a LAS DOCIRINAS SUBJETIVISTAS vencerle tendremos que examinar el hecho y ver si realmente tiene Tas caracteristicas de los actos que apro- amas o repudiamos, ‘Todo esto sucede, segiin Ayer, porque los Hamados conceptos y normas éticas —y, en’ general, los valores— son pseudd-conceptos v, por lo tanto, no se los puede analizar. De ahi que la presencia de una de estas palabras no agregue nada al contenido fictico de la proposicién. Por ejemplo, si digo: "Ud. actué deshones: tamente al robar ese libro” estoy realmente afirmando Jo mismo que si digo; “Ud, robé ese libro”. AL agregar que lk accidn ha sido deshonesta, no afiado absoluta- mente nada al contenido empisico de la. proposicién; Jo iinico que hago es expresar mi desaprobacién, del punto de vista moral. Es lo mismo que si hubiera dicho: “Ud, rob6 ese libro”, en un toma de vor que expresara mi condena moral ‘de tal acto. Ahora bien, si pasamos del hecho concreto a la afir- macion de caricter general —"robar libros es deshones- to”— nos encontrames con un juicio que no tiene nin. igi significado real y, por consiguiente, no puede ser fi verdadero ni falso, Es coma si dijézamos: ";con que robando libros!” en un tono de voz que revela mues 4 Thi, p. 107. Como yerenos al examinar exiamente ta tess de’ Ayer, este fl6sofo comete dos erones pics. de tos empitsmes 4 meds. Por an lado no deja entrar To que contadice so docrina, porque le itera nde la acqutectira Topics de su tena que a tealidad, por el oto, dee entat Sulrepticamente elementos qe, de acuerdo asi doctina, fo son empinies. El ejemplo antevor nos muesta eae 2 indo, defect, Podemos supinir el adverbio.“deshonest mente", que calfiea a "wobat, porque este sitimo,tnino lisa impliato wm jogo de tor. note puede “robs” hones tamenter El tering “robar” no es puramentedescptiv, sno qe eat caugado de significa asiligica Sia ssteuinos tor “tomar w otro termino neato, veremos quel signi {ao de la proposign que querencsenmciar wo es completo sino se atega el adver suanap ava 6 tus desaprobaciin. Nada hay en elo que sea verdadero 6 falso J th» persona que tovier sentimientos dstintos acerca del robo de libros pode! estar en. desacwerdo ella ni nosois estamos afnando ‘ingsn contenido canpfrica neral valores, curecen de ral sinificacién al no poderse fleterminar si verdad o false, poes no afrman nda, fo nico que legitimamente podemos investgtr sobre tales terminos es qué reaciones provocan 0 qué tipo de enim expren Amb Ee pteneen 2 sicologia y no 11 ica, En verdad, ft ticn, como Ge esistencia para Ayer. Los supccstor problemas €t fos, cuando tlencn sentido, pertenceen realmente & la Priglogia y a tn socilogia No has, pus, otra de determina la valider de un sistema é2ko. sy” por consiguionte, earece’ de. sentido Dreguntarse si & verdadero 0 falso. Podemos tan sélo Indagar cual 1a tabla de valores, 0 cl principio ico, de una determinada persona a grupo de person. Y coiles son fas casas que han influ para que et persona tenga ia tabla de valores que realmente tiene To que 3¢ ha afiemado sobre la etica se aplicaigval mente la estdtca” en verdad puede generalizarse s todo el reino de les lores. tc niga expresimente ia existenca de un mundo de los valores dstnto al snantdo de los hechos." 0, mejor dicho, sostiene que toraleza ehotiva, Esta & la famosa teorla emotiva de Indica y Ta aiclogx, que fiene en Chatles L. Steven Pero examninemos ahora la doctrina de Bertrand Ros 1 Bid, pp. 103 y 113. 7 id pe 14. oF LAS DoCTRINAS suByETIVISTAS sell, tan similar a la de Ayer en muchos aspectos, y dejemos para el capitulo V el examen critico de éta y las dems doctrinas subjetivistas. 8. Bearaano Russe Bertrand Russell (n, 1872) es una de las persona- lidades mas brillantes del mundo filoséfico contempo- rineo, Nada le es ajeno y en todos los campos ha con- tribuido con teorias ingeniosas y, muchas veces, fecun- das, Su mayor conteibucién debe buscarse en las dis ciplinas estrictamente técnicas y, en particular, en la logica matemitica** Ha adoptado siempre una acti 48 Como se sabe, en 1903 publics The Principles of Ma ‘thematicsy en 1910) primer volumen de los Principia Mathie rmatica, escrito en colaborecién con Whitehead. Los otros dos vohimencs se publicaton en 1912 y 1913, Las siguien: tes pcden considearse como sus obras principales: An Essay ton the Foundations of Geometry (1897); A Critical Expos: tow of the Philosophy of Leibniz (1900); The Principles of Mathematics (1903); Philosophiea! Essays (1910); The Pro blems of Philosophy (1912); Our Knowledge of the External World asa Pield for Scientific Method in Philosophy (1914); Scientific Method in Philosophy (1914); Principles of Social Reconstruction (1916); Political Heals (1917); Mysticion and Logie and Other Essays (1918); Roads to Freedom: Socialism, Anarchism and Syndicat (1918); Introduetion to. Mathe ‘matic Philosophy (1919); ‘The Analysis of Mind (1921); Free Thought and Official Propagonda (1922); The AB C of ‘Atoms (123); Logical Aton (1924); The ABC of Re fativity (1925); On Education Especially in Euily Childhood (1926); The Analysis of Matter (1927); An Outline of Philo: sophy (1927); Seeptieal Essays (1928); ‘The Conguest of Happiness (1930); The Scintiic Outlook (1931); Faeation and. the Social Order (1932); Freedom and Organization 1814-1914 (1934); Which Way to Peace? (1936); Determi nism and Physics (1936); An Inquiry into Meaning and Truth (1940); A History of Western Philosophy (1946); Physies tind. Paperience (1946); Human Knowledge (1948). Una bibliografia completa de los escritos de Rusell hasta 1944 nenTaanp nUssett 6 ud “‘cientifiea” frente a la flosofia y tal actitud Te ha aproximado al empirismo igico. Se distinguié, en on DYineipio, por sus preocupacioncs sobre ef fundamento dela matematien ¥ por sis contaibuciones a la logics simbdlca, poto bien’pronto se TanzS, con entusiasmo juvenil, 2 examinar Is mavor parte de los problemas filosofios y sociales de la epocd. Su pacifismo le ewe ala clecel durante ln primera Guerra Mundial y 0s éseritos sobre cl divorcio, los problemas sexual, lis relaciones intemacionales y ols espinosos temas poll ticos sociales de este sgl, Te valiron muchos stasa bores y disputes que siempre enfrent® con fina iconia Hs tino de fos fldsofos mus fecundes y su estilo claro ¥ Agil fait su gran populacidad.Publieo mais de ein uenta voliimencs y varios centenates, de articules en 1935 se habian traducido al aleman 17 volimenes, No hay idioma culto que no conozea la traduccion de una obra de Russel, en espafiol exsten traducciones de sus abras principales. Fs cl tnico fusofo que ha mercet do el honordct premio Nobel hoy, a Ios 83 aos, su fecundidad no hi decrecio, Junto a Ta volumninosa obra polémica tiene Russell contribueioncsfilosfies de primera categoria, Por eso 6 apreciado igualmente por cl gran publica ¥_ por el petals. Sit teoria de ls valor eth expueate prin sipalmente en na obra de ton polémica » populae “Religion y cieneia— ‘pero. que recoge ty etitud pucde encontrarse en la obra editads por P. A. Schiipp, The Philosophy of Bertrand Russell (Evanston, Northwestern Un. ses 1948). Con pstroriad eta fecha Rosell publics ‘numerosos articulos ¥ vaviay obras '® Religion and Science (New York, Henry Holt, 1935, y Home University of Modem Knowledge. Londres, Butter ‘worth Nelson, 1935). Se ocupé también de los valores en loftos eseritos,sunqucé en forma tangencial Ein 1944 achira fn parte si) pensamicnto en la rcspuesta a J. Buchler en el volimen editado par P.A. Schilpp, The Philosophy of Ber trand Russell, pp. 719-725, 6 bas sacri swaps . osbtca que siempre le ha distinguido. Su pensamiento ‘nero ycmbineatson ets amido, en st obra, Sins atid’ polémica que en él es sicmpre una mez tha de fina y poncante ioniay agin actitad combativa Espinta auipfi, siempre dspuesto a rectficase, ¢ in dividualts por temperamento.y conviecion, ba com Bango abietamente ol totalitarian todas Ls ne Vbertad da hombre, Como gran defensor de Ta tole zaciones religiols yen prticula a clercalismo Esta caracteriaci. general puede ayudamos m0 blog comprender al hembe que esti detis de la dboctsina que nos interes, sino también a captar el sen- tido Jntino de su teorls que es cl resultado de una mecca, frecuepte en Russell, de un objetivo y sexeno xamen “cientifico”y una pasion polémica incontrlada. Sostiene Russell ‘que las cuestiones seferentes a los vars etn ta dl min do enc, po porque ettencrcan a la filsofin, so porque “estén enter Frente fuera del dominio dal conccimiento”.®” Cuando decimos que algo tine valor, no aftmamos un hecho independiente de nucsteos personales seatnientos, sino Que “estamos dando expreion a nueseas ropias emo- Para demostrar su tesis parte dd andlisis de Ia idea de bien, Lo que afinma sobre este valor puede apliarse gros demas ‘aloces.-Sostene. que “ex abvio que t idea de To bueno y de lo malo tiene alga Conexion fone deseo”! Esta concxién ‘de lo buend con Io 50 B. Russell, Religiim y efencia (Breviario n” 55). p. 142, Con anterioridad habia sefalado Russell la conexion {el bien con el deseo, Eserbié cn An Outline of Philosophy ‘que “Tarsainos alge "bueno" cuando lo deseamos” (p. 242 Jen What I Believe que son “nestres deseos los que con Fieren valor” (po 17 Bt Loe. et 52 Loe. et DERTRAND RUSSELL or deseado constituye ol supucsto de toda su dactrina, que Russell no analiza criticamente en ning, momento, Para dl, la ética es el intento de conferic significacin Universal a cicrtos deseos personales, E} hombre no adviete la conesiGn de To bueno con Jo deseado, segin Russell, porque no entiende el sen- tido de sus palabras. Asi, Cuando afiema “esto es bueno eat si mismo”, cree que esti haciendo wna afigmacién semejante a si dijera “esto cs cuadmdo” 0 “esto cs dulce”. "Mientras que en estas itimas. proposiciones se enuneia una propiedad objetiva de algo, en la primera afinmacién sOlo se expresa'un deseo. ‘Podeia mty bien ststituitse por esta otra: “quiero que todos descen sto", o mis bien, “oils que todos 10 descent” Hin tl caso ‘no puede discutise la verdad 0 falsedad de Io afirmado pues se ha expresido meramente un deseo, Si se quiete dar a Jo entinciado algim contenido habri que interpreta como una afirmacién de un deseo Personal Lo que Hlega a confundit a lz gente y sive de base al supucsto caricter objetivo del valor —segin Russell— 6 que el deseo, en tanto acacces, es personal, pero To que desea es universil. Para achat la euestidn com. Pra una supuesta proposicién, de contenido ico, con otra que efectivamente la sex” Si digo, “todos Tos chi- nos son budistas” puede demostrtseme la falsedad de Ia afirmaciém indiedndoseme un chino que sea erstiano, por ejemplo. En cambio si digo “yo creo que todos los Ehinas son badistas, Ta vefutacin no pod tener igual catdeter sino que deberi.probarseme que no creo lo ‘que digo, ‘Si alguicn afiema ‘la belles cy el bien”, cdo intespretarto como si dijera “jojalé todos amaran lo bello!” (que comresponde a "todos los chins son bi distas”) 0 como si afmara “yo deseo que todos amen lo bello” (que comesponde'a “vo erco que’ todos Tos chinos son budistas”). La primera oraciém no afir rma nada, sino que expresa un deseo. La segunda hace ‘wna afirmacién que se refiere al estado de nimo de 68 {LAS DOCTRINAS SUAJETIVISTAS la persona; pertenece, por lo tanto, a Ia psicalogia. La primera oracién, que pertenece a la ética, al expresar tun deseo, no tiene ningiin contenido cognoscitivo y no ni verdadera ni falsa. La doctrina de Russell coincide, en este aspecto, ccon la de Ayer.® Para ambos no ‘hay proposiciones Gticas, ¢5 decir, oraciones con contenido cognoscitiva ¥, por lo tanto, la ética y Ia axiologia estin fuera del Gominio del conocimiento “cientifico”. Pero mientras ‘Ayer rechaza expresamente al subjetivismo, Russell es eribe que su teoria ¢ “una forma de la doctrina Tia ‘nada de la ‘subjetividad’ de los valores”.** Si dos hom- Dues difieren sobre Jos valores —afirma Russell— no hay desacuerdo sobre ninguna clase de verdad sine tan sélo una diferencia de gust. Hasta aqui, Russell ha sido mis bien dogmatico cen Ia exposicidn de sir doctrina; dice lo que piensa sin respaldar su tesis en hechos v nos deja, colgada de los Tablos, una gran cantidad de objeciones y presuntas. En ete punto nos ofrece Ta primera razén en favor de su teorla, Escribe: “La base principal para adoptar esta opinién [la doctsina subjetivsta de los. valores} es la completa imposibilidad de encontrar argumentos para 8 En verdad, Rosell se anticips 2 Ayer; Religion y cien cia, ew la que tecuge Meas antetirss, se publioh en. 1935, fmicntras que la obva de yer aparceis cn enero de 1936. Pero Russell no comparte, com sobrada razin, las preocupaciones {de algunn sofosespatioles « hispanoamerieanos sobre la priordad de una teoria, Em este mismo capitulo, sobre “Cie: Bay ética”, observa. al pasar qne “cl filésofo puede, bajar al nivel del jugador de bola cuando reclama prioridad pais Si eseubrimicnto, Pero ésta es. una caida; en st) cardter ‘de ftsofo quiere s6lo eovar de Ta contemplacion de la ver dda, lo evalde ninguna manera, interfere com otros que quie ton hacer 10 mismo”, Ibid. pp. 143144 St Ibid, pe 146, Svcvsinn afirna que: Rosell ¥ Axe ticnen una pniciin cast ideation frente «este problema, Ci Ethies und Language, p. 265, probgr gue ito © aguello tiene un valor atic’ Dejenos pata sa moments oportuns el ea tio de te y atos axpecan de ly ts de Rosca wets Gu fonseevnces tsi I dct, tl Ca i expo el props Rese Sh toda dpa sobre los valores implica ana dle tencn de guste y mo hay ningun sstend abies ‘strane ah cf oy ed pe sSertbe Russel, puede ser" wrtuoso pags atte. No fey argumento vaedero que pueda uss ans yo pk convencer a quien opina en forma distinta de que se halla-en on citor. “IH infiero, como lus de Sigs Para los pecadores, sc hace irracional.”" 5 ne Te hecho de que eta doctrine dimine toda forma de pect no np: pre Rely gue top cone Iniento del sentido de'la obligactin moral, Part que 1 obligacon mmra infu en cites condcta sae see rain facet many Toque vo 5 dade, yoil el alco que tl ues tara eae we dvr Sa hc de via he ad aor pt ede nootos eevee ue ee ele oe ea descos impersonal” Por ght os dese pent nile seat sperons + agua que siesta dae mmo? Fen tanto deseo, tcten sna epi ond tm elemento soiogto que lr dictaces Cortes Clete" exc, Rus Se We abligagy ae ae ie entiar por ls ventana To que la dct fig ae tntrra por fa puta Tl quige eon rade ace sstimntan pore eenplo"y Is educace tos dees ® thd, p46 oe pa BS tid, Be 70 LAS DOCTRINAS SUBJETIVISTAS seo de ser ‘bueno’ generalmente se resuelve cn cl deseo de ser aprobado 0, alteniativamente, de actuar de manera de attaer ciertas consecuencias gencrales que Geseamos.” * La segunda altemativa sélo posterga la eucstion: ze6mo sibemos que las consecuencias que Aescamos Scxin buenas? Queda como tinico criterio el sociolégico: deseamos que Ta sociedad apruebe nuestra conducta. ;Qné eriterio usari Ia sociedad para aprobar © ‘desaprobar nuestra conducta? Si no hay un ctiterio ético, deberd valorar por las costumbres, es decir, por los deseo que predominan ea esa sociedad. Y si se trata de una sociedad corrompida, gnuestros deseus serin buenos cenando merezean la aprobacién de la inmoralidad? La respuesta de Russell seré que no hay argumento vale- dero para determinar que una sociedad cs “corrompi- da” 0 “inmoral”; lo xinico que podemos decir es que tiene costumbres distintas a las nuestras, Si es asf, las cconsecuencias inmorales de la doctrina saltan a Ta vista. Y si ésa no es su respuesta, tendré que admitir algin ele- ‘mento axiolégico, por encima de la mera aprobacion socal, al jog momamente a una sociedad. Repeth mos que Russell tiene un criterio para distinguir mo- almente un individuo de otro, pero como no puede traducir dicho eriterio al lenguaje de su doctrina fil: séfiea, lo usa y, al mismo ticmpo, sostiene que no existe, El pasaje citado sobre los “grandes deseos im- personales” Io prueba, y lo confirma su afirmacion de Gue es por medio de “el cultivo de deseos grandes y gencrosos mealiante la inteligencia, la felicidad y la I Deracién del temor” como los hombres pueden impulsar ‘ja felicidad general de Ia humanidad’"®? ,Por qué he ‘mos de preferit los deseos impersonales, grandes y gene- 10s0s a los egoistas, pequefios y mezquinos? ;Hay 0 no hay un criterio axiologico qué otorga jerarquia ética a algunos deseos nuestros? ewrmany RUSE n Lo afirmado por Russell pucde quizis admitvse en €l plano axioligieo mis bajo —del agrado y- desagea do~ y aun en € orden politico y jutdieo, pero no en al plano ético. FI agrido depende de la costombre y élementos canvenciowiles; 1o misino sucede, en buena redid, con el orden politic y juiico: no hay formas de gobiema buenss ch si, st bondad depends de cle. mentos cicunstancales, historicos, cultoates. Tl or den moral ¢ distinto: i se identifica ol deber ser com al seo bueno cou to deseado— se renee defn vamente a todo esterio de motalidad. Las consecuen cias inmorales de tal doctrina son obvias, . BIBLIOGRAFIA Aven, Alted, Language, Truth and Logic (London, Gollac, 1930). Ver inode y cap. VI Carsar, Radel, PRibsephy and Logie! Syntax (London, Rontledge & Kegan Paul, 1935). Ver aap. 8 4 Dewey, folin Theory of Valuation (International Pneyclope dia of Unified Scene, toh. Hen” 4 he Unsersty of Chics to Pres 1939) Ennasrts, Chistian von, Sytem der Wertthore, 2 vols Leiprig. 1897-1898 Hiatt, Le The Boms of Value. 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Ver cap. 1X Stinacx, Motte Fagen der Ethik (iene, 1980), Srevesson, Chiles Ly Ethics and Language (Now Haven, Yale Univesity Pres, 1945), Vv SCHELER Y EL APRIORISMO MATERIAL DE LOS VALORES Las doctrines objetivstas suagen como una reaccién en contra del celatssmo inplicto en lz interpretscion Subjetvsta y de lz neveidad de Iacer pie cn un oF den moral citable, Pareeria que al hombre necesitara ajustir st conducia a prinipios que Te tascenden, Que ef mésito de Ta moral constiera en sobreponcrse os llamados det propia sabjctinidad. Meinong suf interionnente la transformacion que tendsia que ato. In emda identifcacion del valor con cl asrado Tos errors del subjetivsimo. inl faclitron el sorgimiento de doctrinas objeivistas extremas que suprr Ta posicion opucsta. Como cl subjetivismo parti de’la experiencia, tales doctrings vovieron la espalda 2 todo elemento empiri ¥ peefiieron adoptar un método a prions, que tiene In able ventaja de apegurarnos ts Pesta objtividad auc buscamos y de ofrecemos la sea Fad de que la expesiencia no nos desmentt Slo Hay gue ar I eoereni Tis I presenta estétien del sistema; el uso de un lengua apropiado Io. stati la adhesion emocional del lector “Muchos no ereyeron necesati opones argmentos al subjtivismo que dion por refutado definitvamen te y pretriron menospreciarlo adjudicando.cegtera J oslo ens no compat un eas, No Jara ver con tal de no parceerckgo. Como creemos inadecuado exponer aqui la teoria general del objctivismo —entresacada arbitrariamente de 5 diversas formas particulare-— y al mismo tiempo B 1 Max SCHELER resultaria fatigosa la exposicion de todas la teorias obje tivas aparecidas en este siglo, parece aconsejable limitar este capitulo a la exposition de una doctrina que se destaca entre todas las demés por la solidez. de sus fundamentos y el prestigio que ha adquirido tanto en Alemania como en el mundo de habla hispénica. Nos referimos, desde Tego, a ls doctrina de Max Scheler 1. Persoxatipa og Max Scuenen Quizés no haya en toda ls fiosotia de este siglo un Hombre comparable 4 Schclr por ol vigor del pen Simiento yl eto cautivante de sa pros, En opo Silén al flo cgor 1ogico de su maestro Huss a spirit excestamente sstemtico de Hartmann, Sehe- fer tis logrado transmit la prosa dl aliento emotive due ispira su dovttina. No puso Scheler 80 perona- Tad al senico de sis ideas sino que étas sigeron once que Tes trazaba una’ pasion incontenble. Tat pasién se oven al esoger Tos temas de sis meditacio he. Algado dela matemitica + las ciencias de 1 Aatunlezn por sszones temperamental, se sintié sien pte ataido por lx problems del hombre, alos que com Sages toda fr vida. La mucte le impitio que dedicaa 2 la antropologin flosotica su. obra. principal ‘Generaimente se destacan los limbs que influ. ron en d para explicar en parte su formactbn, Ea el Caso de Scheler —y de otros pensadore en qulenes pre sioina a ogica'@el corarbye= sncede 19, contra. ilegan a cictos autores, no parten de clos. Scheler, por ejerplo, apagd en San Agustin, Pascal, Nictasche v los “otofos ‘de la vida” la sed. que ningin otto pena doc pein stsacer. Fs scidentl en cl 4 i oc, gue se torrente de pasion canalizas por Is vis de Ths eects "deseubiertie" por na fewomenologta. La fenomenologia es poral ais bien tna alee” fren te al logicsmo, tuiscendentalsta ‘Kantian vel peo sx Pansoxscs040 B hombre que puode alimentarse con eiencas; Scheer vive y siente fa vida en su plenitud existencal. ‘Toda 50 isgieta vida lo. demuestia y se pone claramente dle manifesto en su acosida a la flosofla de Bergson a ta que valora por ser un “inovimiento de profonda Confanza en todo lo que se da inmedtatamente, come Eniutticn y-a la tendeneia de anor hacia ol an do" agrega que el fundamento de tal posiion "no cua voluntad de dominar el mando, sino un impul- $0 de goro de si cxstenci®? "De ahi que haya’ to nido que rete el sentido de a fenomenclogiay par En este injerto de lo emocional en eh mundo de ls esenciss rica la ranzay debilidad de Scheler. Grate deza porque ampli cl sentido del movimiento fenome nolégico; debillad porque aplicé un pensamiento que © extrano al orden emociondl intent bajar la légiea fntelecusl de a cabera al corazam TL pasiin es enenign de lo sstemétic; de ahi que Schele no hiya Togrado ni intentado-~ for an ssto ima, En verdad, srvda y pensamsento tempestosos so freron grandes cambios pusdeneolocarse dentro de los exquemas tradicional cel pensamient fiosic, Se acostumbra a distinguir en la vida de Scheler tes épo- fas. Fue en sa javentid alumno y dscipulo de Rodolfo Encken bajo cays suflaencia esti su tess de la Unt versidud de Jen, titulada Contribuciones« la deter nacién dela relaciones entre los principiastogices y Cor? yun trabajo que revea su tltrige exestacton El indjodo tascendentaly ef mélodo pscoldgico® Poco des pits entrée contacto con la fenomenologa de Hussed 2 Cf, Vor Unistwrs der Werte, pp. 164165. © Reinaye sur Feststellung der Becichuigen svischen der hen und ethischen Prinsipien (1599) ® Die traswndentule und die prychologische Methude (1900). 76 Max scmELER y-a través de éste, con Franz Brentano. Bajo la in Mucnca de fomenologia ope. "madre, del xopio pensamiento; este petiodo se iniia con el primer foltmen de la Etta, public justamente en ¢l pr ‘mer tomo del Anuaro de Filosofia Investigacion Feno- ‘menologicas + que apareeio en 1913 bajo la direcciin de ‘Hussrl y termina en 1922, Pertenccen a eta época gran cantidad de ensayos, que 61 recoge en dos volimenes, ‘Acerea de ta subversion de los valores? y De lo eterno fen el hombre —y su obra prineipal que, en castellano, Teva al titulo de Etica." Esta obra contiene el pens: ‘miento central de la axiologia scheleriana puesto que su ética se resuelve en una teoria de los valores En los wltimos aos de su vida —de 1923 a 1928— sufre Scheler una profunda transformacién. Abandona Ia concepeién teista y crstiana —que habia servido de fandamento a su axiologio— para lanzarse en Ta ruta de una concepién toligia revelucionari gue no To ra cajar por completo pero que esta sugerida con tra Zo: vgorosos en las plginas Ginales de st iltina obra, EI puesto del hombre en el cosmos, cuando esexibe: “Negamios el supuesto testa de ‘un Dios espirtual y personal, omnipotente en so. espirtualidad’. Para hosotros la relacién del hombre con el principio del lniverso consiste en que este principio se aprehende inmediatamente y se Tealiea en el hombre mismo, el cual, como ser vivo y ser espritusl, es s6lo un cen tro parcial del impulso y del espiritu del ‘ser exstente 4 Jahrbuch fir Philosophie und phinomenclogiche For seh om Umsturz der Werte (1919). * Vom Enigen im Menschen (1921). 1 Der Formalimus in der Ethik und die materiale Wert thik (EI formaiomo en la ea y la éica materi de Tos Sulores). La primera parte spares, como iadicames, en cl Dimer ome del Anucrio en 1913; la segunda, en el segundo fomo ex julio de 1916 ® Die Stellung des Menschen im Kosmos (1928) SU PERSONALIDAD 1 por si’. Es la vieja idea de Spinoza, de Hegel y de ‘otros muchos; ef ‘Ser primordial adquiere conciencia de si mismo en ef hombre|,..]. El advenimiento del hombre y el advenimiento de Dios se implican, pues, mutuamente, desde un principio, segiin muestra con: ccepcién. Ni’ el hombre puede cumplir su destino sin ‘conacerse como miembro de aquellos dos atributos del Ser Supremo y como habitante de ese Ser, ni el Ens a se, sin la cooperacién del hombre. El espiritu y_el impulso, los dos atributos del ser, no estdn en Si perfectos —prescindiendo de su paulatina compene- traciéa mutua, como fin iltimo—, sino que se des arrollan a través de sus manifestaciones en la historia del espiritu humano y en la evolucion de la vida universal”, “Se me diri —y se me ha dicho, en efecto— que no le ¢s posible al hombre soportar un Dios imper- fecto, un Dios que se esti haciendo, Respondo que | metafisica no es una institucién de seguros. para hombres débiles y necesitados de apoyo.” En El puesto del hombre en el cosmos adclanta tuna importante teoria del hombre que ha tenido enor- ‘me influencia en la antropologia filosdfica de este si- glo y que la muerte que lo sorprende en 1928 ® —cuan- do estaba a punto de iniciar los cursos en la Universidad de Francfort del Meno—¥ le impide desarrollar. Esta transformacién profunda de su pensamiento se anun- cia ya en la obra Las formas det saber y la sociedad.» ® Habla nacido en Munich en 1874 49 Scheler fue profesor, sucesivamente, en las Universida ddes de Jena, Munich y Colonia; en esta’iltima desde 1919 hasta poco antes de su muerte. La Universidad de Froncfort del Meno lo habia amado pero murié antes de haber iniiado Tos cursos. 31 Die Wissensformen und die Gesellschaft (1926). Lar emis obras principales de Schcler son las siguientes Ueber Ressentiment und moralisches Werturteil (1912), trad, cast: El resentimiento en la moral (1927); Wesen und La fries pe Scuster La ética de Scheler nace del deseo de continuar 1a @tca Hantiana, aunque superando st frmalismo ta cionalista. No cabe la menor dda que Sciler con- sidera la tien de Kant como lo mis" elevado que ha Producido el genio. filséfico moderna, Uscote,

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